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Factores que propiciaron la corrupción en México.

Un análisis del
soborno a nivel estatal.
Por Renato Busquets Sordo

1
Introducción............................................................................................................................ 3
Modelo Econométrico ............................................................................................................ 3
Hipótesis ................................................................................................................................. 3
Contenido del trabajo ............................................................................................................. 4
1. Definición de Corrupción ................................................................................................... 5
1.1. El Soborno ....................................................................................................................... 5
1.2. El Soborno en contratos públicos .................................................................................... 5
1.3. Nepotismo........................................................................................................................ 6
1.4. Malversación de fondos y desfalco ................................................................................. 6
1.5. Extorsión.......................................................................................................................... 6
2. Antecedentes históricos y el contexto actual...................................................................... 8
2.1. Antecedentes Políticos..................................................................................................... 8
2.1.1 La corrupción y el sexenio............................................................................................. 9
2.2. La corrupción en México, hoy en día ........................................................................ 13
3. Costo de la corrupción.................................................................................................. 20
3.1 Un ejemplo: Una empresa contaminante.................................................................... 20
3.2 ¿Hay beneficios de la corrupción?.............................................................................. 21
3.3 Corrupción con robo y sin robo.................................................................................. 23
3.4 Costos a nivel Macroeconómico................................................................................. 25
3.5 Nivel óptimo de corrupción........................................................................................ 27
4. Causas de la corrupción................................................................................................ 29
4.1. El modelo de Agente y Principal............................................................................... 29
4.2 Oferta de actos corruptos............................................................................................ 30
5. Descripción de los Datos .................................................................................................. 33
5.1. Índices de Corrupción................................................................................................ 33
5.1.1. El Índice de Percepción de Corrupción (IPC) ........................................................ 34
5.3. El Índice de Corrupción y Buen Gobierno (ICBG)................................................... 38
5.4. Índice de Dispersión .................................................................................................. 41
5.5. Datos sobre desempeño jurídico................................................................................ 44
6. Análisis Econométrico...................................................................................................... 46
6.1. El ICBG general ............................................................................................................ 46
Conclusiones......................................................................................................................... 58
La relevancia del PIB per cápita....................................................................................... 58
¿Por qué contribuye la dispersión étnica a la corrupción? ............................................... 58
¿Qué nos mide la variable jurídica? ................................................................................. 59
¿Por qué Guerrero es “más corrupto”? ............................................................................. 60
Sobre el ICBG .................................................................................................................. 60
Bibliografía........................................................................................................................... 61

2
Introducción
El objetivo de este trabajo de investigación es analizar cuáles son los principales factores
económicos que causan la corrupción en México. El análisis económico de la corrupción se
basa en que un agente comete un acto corrupto cuando, a su juicio, los beneficios de
corromperse superen a los posibles riesgos y costos. La corrupción surge porque existe una
divergencia entre los intereses particulares del que comete el acto y el interés del organismo
o superior al que representa; además, se presenta en un contexto de información asimétrica
que permite al agente actuar en contra de contratos o leyes establecidas.
Cabe resaltar que para la prueba econométrica nos vamos a referir a un tipo de corrupción:
el soborno. La medición de la corrupción se hace mediante un índice a nivel estatal
elaborado por Transparencia Mexicana.
La corrupción es diversa y por lo mismo hay varias factores que contribuyen a que surja
ésta. Las causas institucionales de la corrupción no son siempre las mismas, pues con el
paso del tiempo y con un nuevo liderazgo, algunas de las medidas anticorrupción pueden
distorsionarse y convertirse en un punto de origen para otras formas de corrupción
(Klitgaard, MacLean-Abaroa, Parris 2000). Por lo mismo, los resultados que se obtengan de
este estudio pueden explicar una faceta de la corrupción, sin embargo no son suficientes
para explicar las demás manifestaciones de la corrupción.
Para México no es extraño hablar sobre la corrupción. Desde hace tiempo este tema ha sido
común, aunque tal vez antes no se comentaba tanto en los medios. La principal
característica que se atribuía al gobierno era la corrupción. En el imaginario social
mexicano nos vemos cómo una sociedad corrupta, mientras que una sociedad cómo la
noruega se vea cómo completamente limpia y transparente. Estas percepciones (la de
México y la de Noruega) pueden ser exageradas, por eso hay que usar datos concretos para
poder saber en realidad el nivel de corrupción.
El estudio de la corrupción ha cobrado más importancia en el ámbito internacional en los
últimos años. Esto se ve reflejado en la creación de Transparencia Internacional y,
consecuentemente, de los índices de corrupción. Hay varias teorías sobre el origen de la
corrupción, sin embargo en este trabajo no se va a desarrollar un modelo muy sofisticado
para explicar la corrupción, en cambio se van a utilizar los datos disponibles para México
para estimar con métodos econométricos los efectos de distintas variables sobre la
corrupción.

Modelo Econométrico
El modelo de estimación va a ser de mínimos cuadrados ordinarios. Lo cual implica el
supuesto de que los factores explicativos son exógenos.
Existen treinta y nueve distintos índices de corrupción, treinta y ocho por cada rubro y uno
general, que es un índice agregado. El índice general es un buen indicador del porcentaje de
veces que se tiene que sobornar, en promedio, en un servicio susceptible de corrupción. En
este trabajo vamos a plantear dos hipótesis con respecto al índice general.

Hipótesis
La primera es que existe una relación negativa entre corrupción y el ingreso individual, en
otras palabras, que a mayores niveles de ingreso hay menores niveles de corrupción.

3
La segunda hipótesis es que la corrupción es mayor en economías o sociedades más
complejas, es decir que cuando hay mayor número de transacciones económicas la
corrupción se vuelve un problema más serio.

Contenido del trabajo


Este trabajo de investigación consta de seis capítulos, en el primer capítulo se dará una
definición de corrupción y además se identificaran los principales tipos de corrupción,
haciendo especial hincapié en el soborno, que va a ser el tipo de corrupción que se analizará
más adelante.
En el segundo capítulo se verán brevemente algunos de los antecedentes históricos que han
moldeado las organizaciones políticas del país. Es necesario entender al PRI y al estado
corporativo para poder comprender el contexto actual de la corrupción en México. Se le
prestará especial atención a los hechos que tienen que ver con el monopolio del poder, la
discrecionalidad y la rendición de cuentas1.
El tercer capítulo examinará cuáles son los costos de la corrupción. En México muchos de
sus males han sido atribuidos a la corrupción, cuando en realidad no todo es culpa de ella.
Aquí se explicará cuales son los costos que genera y se discutirá la relación entre el monto
del soborno y su costo. Además se mostrarán los resultados de diversos estudios empíricos
que encuentran una relación entre la corrupción y otras variables macroeconómicas.
El cuarto capítulo tratará sobre cuáles son algunas de las causas de la corrupción. También
se verá el modelo de agente y principal que nos ayuda a entender la relación entre el
gobierno y los burócratas en el contexto de la corrupción.
En el quinto capítulo se describirá los datos y se hará especial énfasis las ventajas entre este
índice de corrupción (el ICBG) y otros (cómo el IPC). Además se explicará la construcción
del índice de dispersión y de la variable jurídica.
En el sexto capítulo se presenta el análisis econométrico. Aquí se probarán empíricamente
las hipótesis y además se explicarán más a fondo estás relaciones.
Finalmente se presentan las conclusiones. Ahí se harán algunas recomendaciones para
trabajos posteriores y algunas observaciones sobre el nivel de corrupción en México. En las
conclusiones se ve que hay básicamente tres variables que nos ayudan a explicar la
corrupción: el PIB, el PIB per cápita y un índice de dispersión. Además vemos, que hasta
cierto punto, la variable jurídica explica parte de la corrupción; y que Guerrero es un estado
sumamente corrupto.

1
Los tres factores que vienen de la fórmula metafórica de Klitgaard (1988). La fórmula es C = M + D – A.
Dónde C es el nivel de corrupción, M el monopolio de poder, D la discrecionalidad y A la rendición de
cuentas (accountability en inglés). Es claro que la corrupción está en función de muchas cosas, sin embargo
esta fórmula pretende decir que la corrupción tiene una relación positiva con respecto al poder monopólico y
al grado de discrecionalidad, y negativa con respecto a la rendición de cuentas.

4
1. Definición de Corrupción
La corrupción es un problema multifacético y complejo con distintas causas y efectos. La
corrupción va desde el caso aislado que involucra a un solo burócrata, hasta convertirse en
un fenómeno general que origina una serie de distorsiones en la economía. La definición
que utilizaremos será la del Banco Mundial: La corrupción es el abuso de poder público en
beneficio propio2. Esta definición nos indica que quién comete un acto corrupto está en una
posición de poder y que está recibiendo algún tipo de beneficio (ya sea monetario o no) que
no sea procedente o que simplemente es ilegal. Lo que necesitamos añadir a esta definición
es que la corrupción no sólo ocurre en el sector público sino también en el privado. Ahora
bien, vamos a señalar algunos de los tipos más importantes de corrupción.

1.1. El Soborno3
Este tipo de corrupción implica el uso inapropiado del servicio público (y también del
privado) para obtener beneficios materiales. Este es parecido a la extorsión sin embargo, en
el soborno hay un acuerdo mutuo, entre sobornado y sobornador, mientras que en la
extorsión hay una imposición por parte del que recibe el pago. En realidad hay muchos
casos en que la línea entre los dos tipos de corrupción es muy tenue4.
Dentro del soborno hay dos clasificaciones. El primero, es el pago que se hace por recibir
un servicio con diligencia (speed payment) y el segundo es cuando se hace un pago que
busca cambiar una decisión, violando leyes, reglas y reglamentos (distortive payment).

1.2. El Soborno en contratos públicos5


Esta distinción es hecha porque este tipo de soborno tiene una dinámica distinta al soborno
simple. Este tipo de soborno, llamado a veces en inglés kickback, ocurre cuando una
agencia del gobierno quiere contratar un bien o un servicio y las empresas ofrecen sobornos
a los responsables de la selección para asegurar el contrato. Por su naturaleza ocurre con
menor frecuencia que los otros sobornos e involucra normalmente un monto de dinero
mucho mayor. No es lo mismo pagar una mordida por pasarse un alto, que por obtener un
contrato de millones de dólares.

2
Ver Klitgaard, 1988.
3
Este tipo de corrupción está contemplado en México dentro del Código Penal Federal como Cohecho en el
artículo 222, fracciones I y II. La fracción I dice que [cometen el delito de cohecho] El servidor público que
por sí, o por interpósita persona solicite o reciba indebidamente para sí o para otro, dinero o cualquiera otra
dádiva, o acepte una promesa, para hacer o dejar de hacer algo justo o injusto relacionado con sus
funciones. La fracción II dice que [cometen el delito de cohecho] El que de manera espontánea dé u ofrezca
dinero o cualquier otra dádiva a alguna de las personas que se mencionan en la fracción anterior, para que
cualquier servidor público haga u omita un acto justo o injusto relacionado con sus funciones. Cabe notar
que el sobornado puede incurrir en otros delitos contemplados en el Código Penal Federal
4
Dentro del estudio de Transparencia Mexicana se registra el acto corrupto cuando se paga una mordida por
obtener el servicio, no se hace la distinción entre extorsión o soborno.
5
Este tipo de soborno, además de estar contemplado en el Código Penal Federal como Cohecho, está
contemplado como Ejercicio abusivo de funciones en el artículo 220, del mismo código, en la fracción I. Está
fracción dice que [comete el delito de ejercicio abusivo de funciones] el servidor público que en el
desempeño, de su empleo, cargo o comisión, indebidamente otorgue por sí o por interpósita persona,
contratos, concesiones, permisos, licencias, autorizaciones, franquicias, exenciones, efectúe compras o ventas
o realice cualquier acto jurídico que produzca beneficios económicos al propio servidor público, a su
cónyuge, descendientes o ascendientes, parientes por consanguinidad o afinidad hasta el cuarto grado, a
cualquier tercero con el que tenga vínculos afectivos, económicos o de dependencia administrativa directa,
socios o sociedades de las que el servidor público o las personas antes referidas formen parte.

5
1.3. Nepotismo6
Este tipo de corrupción no involucra directamente un pago monetario. Una persona
aprovecha su posición dentro de un organismo para emplear a un amigo, familiar o
conocido que no tiene los méritos para el puesto o que simplemente no pasó por un proceso
de selección regular; también podría estar relacionado con favores ilegales otorgados a
parientes y amigos. Este tipo de corrupción tal vez sea el más difícil de identificar porque
no existe una transacción monetaria. También es cierto que en muchos países el nepotismo
no es visto como un acto de corrupción, sino como algo necesario, un mecanismo de ayuda
que está contemplado en la sociedad.
En México podemos identificar un caso de nepotismo singular, el de los aviadores,
trabajadores que están en la nómina pero no se presentan a trabajar. Este caso es más grave,
pues en los otros casos de nepotismo el trabajador sí labora, mientras que en este último
caso hay únicamente una transferencia monetaria por parte del gobierno al aviador.

1.4. Malversación de fondos y desfalco7


Este difiere de los demás tipos de corrupción en que el actor corrupto, mediante
mecanismos fraudulentos, extrae recursos de un organismo público o privado. Aquí entra el
fraude y el robo al presupuesto. No existe el personaje del sobornador. También supone un
sistema más elaborado y más complejo, que por lo mismo va a ser difícil de detectar.

1.5. Extorsión8
Cómo ya se mencionó antes, este es muy parecido al soborno, solo que aquí el pago es
demandado por el burócrata. Morris (1991) encuentra que este tipo de corrupción junto con
el fraude es el más frecuente en México. La extorsión implica que el cliente es obligado a
6
El nepotismo es el delito del ejercicio indebido de servicio público contemplado en el artículo 214, fracción
I del Código Penal Federal. El artículo 214, fracción I dice que [comete el delito de ejercicio indebido de
servicio público, el servidor público que] ejerza las funciones de un empleo, cargo o comisión, sin haber
tomado posesión legítima, o sin satisfacer todos los requisitos legales. Para el caso de los trabajadores
fantasmas (aviadores) está el delito de abuso de autoridad contemplado en el artículo 215, fracción X en el
Código Penal Federal. El artículo 215, fracción X dice que [cometen el delito de abuso de autoridad los
servidores públicos que incurran en alguna de las conductas siguientes] cuando en el ejercicio de sus
funciones o con motivo de ellas, otorgue empleo, cargo o comisión públicos, o contratos de prestación de
servicios profesionales o mercantiles o de cualquier otra naturaleza, que sean remunerados, a sabiendas de
que no se prestará el servicio para el que se les nombró, o no se cumplirá el contrato otorgado.
7
Éstos son contemplados como los delitos de abuso de autoridad en el artículo 215, fracción VIII, y peculado
en el artículo 223, fracción I, ambas dentro del Código Penal Federal. El artículo 215, fracción VIII dice que
[cometen el delito de abuso de autoridad los servidores públicos que incurran en alguna de las conductas
siguientes] cuando haga que se le entreguen fondos, valores u otra cosa que no se le haya confiado a él y se
los apropie o disponga de ellos indebidamente. El artículo 223, fracción I dice que [comete el delito de
peculado] todo servidor público que para usos propios o ajenos distraiga de su objeto dinero, valores, fincas
o cualquier otra cosa perteneciente al Estado, al organismo descentralizado o a un particular, si por razón
de su cargo los hubiere recibido en administración, en depósito o por otra causa.
8
La extorsión está contemplada en el artículo 390 y en el 218 como concusión, ambos artículos dentro del
Código Penal Federal. El artículo 390 señala que comete el delito de extorsión al que sin derecho obligue a
otro a dar, hacer, dejar de hacer o tolerar algo, obteniendo un lucro para sí o para otro o causando a
alguien un perjuicio patrimonial. El artículo 218 dice que comete el delito de concusión el servidor público
que con el carácter de tal y a título de impuesto o contribución, recargo, renta, rédito, salario o emolumento,
exija, por sí o por medio de otro, dinero, valores, servicios o cualquiera otra cosa que sepa no ser debida, o
en mayor cantidad que la señalada por la Ley.

6
pagar un soborno. Esto indica que el extorsionador tiene una ventaja, poder de negociación.
Este poder puede ser la discrecionalidad que tiene el burócrata para otorgar el servicio.

7
2. Antecedentes históricos y el contexto actual

2.1. Antecedentes Políticos


Nye (1967) señala que la débil legitimidad de las instituciones gubernamentales contribuye
a la corrupción. Por lo tanto, el análisis de las instituciones del estado es necesario para
entender muchos de los incentivos que existen para entrar a la corrupción.
Uno de los grandes problemas de México fue que al volverse una nación independiente
nació sin tener unas bases institucionales sólidas. Casi todo el siglo XIX se caracterizó por
ser un periodo de inestabilidad política. No es hasta el llamado Porfiriato (cuando gobernó
Porfirio Díaz), que México vive un periodo de paz y prosperidad económica.
Porfirio Díaz logró apaciguar a la competencia política y mantuvo contentos a sus
colaboradores. La corrupción entre su gente era algo tolerado por Díaz. Ésta tenía como
objetivo asegurar la lealtad de sus funcionarios; era un costo necesario para mantener la
estabilidad política que necesitaba el país.
Díaz comenzó con el presidencialismo9. El problema que había era la falta de un
mecanismo eficiente que pudiera asegurar una sucesión presidencial pacífica y ordenada.
Fue entonces, con el fin del Porfiriato, que volvieron muchos de los problemas que se
habían vivido durante gran parte del siglo XIX. El gobierno de Madero, que sucedió a Díaz,
se vio constantemente amenazado por grupos disidentes, pero gracias al General,
Victoriano Huerta logró soportar los asedios. Al final es la traición de Huerta lo que pone
fin al gobierno de Madero y esto desata una sangrienta lucha por el poder. Finalmente, es el
General Plutarco Elías Calles quién plantea una solución sobre qué modelo de gobierno se
debía adoptar que se adecuara a la realidad mexicana.
Al terminar la presidencia de Calles, Alvaro Obregón es reelecto a la presidencia, sin
embargo es asesinado poco después de la elección. Calles desarrolló un modelo corporativo
de gobierno para conciliar las fuerzas políticas y así acabar con los sucesivos magnicidios
que empezaron con el asesinato de Madero. El modelo corporativo consiste en absorber
todo el potencial de la sociedad mediante la integración diferenciada de las partes del
“cuerpo social”, es decir la corporatización de los distintos grupos de la sociedad (obreros,
campesinos, militares), al mismo tiempo que se realizan elecciones controladas por el
partido. En otras palabras, toda la sociedad quedaba inmersa en las esferas del gobierno.
Calles ostenta, desde la muerte de Obregón y hasta la presidencia de Lázaro Cárdenas, el
mayor poder político, es el Jefe Máximo, la máxima figura dentro de su esquema de
gobierno corporativo, aún con mayor poder que el propio presidente. Calles se había
percatado de que para tener el poder político no era necesario ser presidente, bastaba con
tener el control de éste.
Durante su presidencia, Cárdenas expulsa a Calles, y consecuentemente se vuelve la
máxima figura dentro de la política y dentro del esquema corporativo. Cárdenas resuelve el
problema de sucesión presidencial mediante el dedazo: un mecanismo mediante el cuál, el
presidente saliente nombraba al candidato que le iba a suceder. Además, el antecesor no se
inmiscuiría en la política una vez que deja el poder. La maquinaria partidista le aseguraba al
nuevo candidato la victoria. Esto significa que las instituciones electorales estaban
corrompidas, y por lo tanto en la historia del Partido Revolucionario Institucional existen
varios casos de corrupción política, entre los que destacan el triunfo de Pascual Ortiz Rubio

9
El presidencialismo consistía en que el presidente era la máxima figura en la política y en el gobierno, con
facultades que van más allá de lo establecido en la Constitución. Ver Zaid, 1987.

8
sobre José Vasconcelos en 1929, el triunfo de Manuel Ávila Camacho sobre Andrew
Alamazán en 1940, y el muy cuestionado triunfo de Carlos Salinas de Gortari sobre Manuel
Clouthier y Cuahutémoc Cárdenas en 1988.
Es con Lázaro Cárdenas que se vuelve al presidencialismo. Lo cual configura uno de los
problemas del sistema corporativo, pues el poder del presidente era prácticamente
ilimitado.
Se seguía haciendo la simulación de tener una democracia, aunque el PRI arrasara en las
elecciones. Tendrían que pasar muchos años para que el PRI reconociera sus derrotas. Es
hasta 1989 que un partido de oposición gana una gubernatura, hasta 1997 que el PRI pierde
la mayoría en el congreso y finalmente hasta el 2000 que pierde la elección presidencial.
Aparentemente se podría ver al estado mexicano como un estado fuerte, sin embargo Meyer
(1998) señala que el estado corporativo del PRI era en apariencia fuerte, pero en realidad
era débil. Su débil legitimidad es la que le obligó a usar la fuerza para mantenerse en el
poder. Para frenar el avance de la democracia y apaciguar a los opositores del régimen, se
les cooptó y a algunos otros se les permitió beneficiarse mediante algunas prácticas
cuestionables que involucraban un cierto grado de corrupción. La corrupción era benéfica
desde el punto de vista de la cohesión del equipo de gobierno, como lo había sido con Díaz.
El presidente contaba con el poder absoluto, tanto en cuestiones políticas cómo
económicas. No hay contrapeso en el sistema, cualquier decisión que se hacía tenía que ser
acatada.
Sí existía discusión sobre los problemas nacionales, sin embargo, la decisión final era del
presidente. El problema no consiste en que la decisión sea tomada únicamente por el
presidente (con la ayuda de sus consejeros), sino en que nadie podía rectificarla más que el
propio presidente. No había un mecanismo que pudiera corregir los errores existentes en las
políticas públicas. Esto llevó a que problemas tales como el endeudamiento excesivo y el
déficit del gobierno no fueran corregidos y por lo tanto la economía mexicana se deteriora
de manera progresiva.

2.1.1 La corrupción y el sexenio


La corrupción en México, durante los años del PRI, según el modelo de Morris (1991), se
explica dentro del estado corporativo, por una dinámica cíclica que se desarrolla tomando
cómo periodo el sexenio del presidente.
El ciclo comienza con el primer año, en el que el nuevo gobierno se dedica a cubrir los
puestos burocráticos y diseñar los nuevos programas y políticas. Hasta los años intermedios
el presidente y sus altos funcionarios realizan y promueven vastos programas y reformas
gubernamentales. En los dos últimos años de gobierno ya no se inician nuevos programas,
pero se destina mayores recursos a los ya establecidos; los funcionarios públicos empiezan
a preocuparse por su futuro, por lo tanto se dedican a mejorar sus perspectivas políticas y
económicas, dada la posibilidad de no tener empleo para el siguiente sexenio. Los
incentivos del último año han cambiado: la ausencia de seguridad en el empleo y de un
sólido fondo para el retiro, aunado a una mayor tolerancia a la corrupción, llevan a los
burócratas a capitalizarse mediante actos de corrupción, cómo puede ser el soborno o la
malversación de fondos públicos. El incremento en el gasto gubernamental y la débil
campaña anticorrupción10 crean un ambiente propicio para la corrupción. Al comenzar el
nuevo sexenio se condena públicamente la corrupción y por tener una planta nueva de

10
La campaña anticorrupción es la que dicta el comportamiento de la rendición de cuentas.

9
personal, los burócratas están en un proceso de aprendizaje. Además, todavía no existe la
presión del final del sexenio por enriquecerse mediante prácticas corruptas. Hay un mayor
control de la corrupción pues en el discurso político se está condenando a la del sexenio
anterior.
Morris dice que existen dos patrones dentro del sexenio, uno el de la corrupción y otro el de
la campaña anticorrupción. Los dos van en sentidos contrarios, son un espejo del otro. A
principio del sexenio la campaña anticorrupción está en su punto más álgido, mientras que
la corrupción está llegando a un punto bajo, conforme avanza el sexenio la corrupción va en
aumento culminando en el último año, mientras que la campaña anticorrupción va en
descenso.

Gráfica 2.1
Reportes periodísticos de la corrupción 1970-74

30

25

20

15

10

0
1970 1971 1972 1973* 1974

Fuente: Morris, 1991.


* 1973 es un promedio de 1972 y 1974.

Gráfica 2.2
Reportes periodísticos de la corrupción 1976-84

250

200

150

100

50

0
1976 1977 1978 1979* 1980 1981 1982 1983 1984

Fuente: Morris, 1991.


* 1979 está basado en una revisión de ocho meses. La cifra es un total ajustado.

En las gráficas 2.1 y 2.2 se muestran los reportes de corrupción en artículos periodísticos.
Para los años 1970, 1971, 1972 y 1974 Morris revisó una muestra aleatoria de cincuenta y
dos periódicos por año. Para los años de 1976 a 1984 Morris localizó los artículos mediante
Información Sistemática, un índice de prácticamente todos los periódicos de la Ciudad de

10
México. Por consiguiente, las cifras del primer periodo no son comparables con las de los
demás años, que reflejan una investigación más exhaustiva. En el cuadro 2.1 se desglosa lo
mostrado en las gráficas anteriores.
Podemos ver que los reportes periodísticos se comportan más cómo la campaña
anticorrupción: en el primer año del sexenio llega a un punto máximo y subsecuentemente
va disminuyendo hasta que llega el nuevo sexenio. Esto nos indica que el número de
artículos periodísticos no es un índice confiable del nivel de corrupción, pues sigue la
tendencia de la campaña anticorrupción, que es contraria a la que sigue la corrupción.
Morris señala que los reportes captan ambas tendencias, el alza del primer año de gobierno
se explica en parte por la vigorizada campaña anticorrupción, y en parte por la denuncia de
los actos cometidos durante el último año del sexenio anterior; posteriormente el descenso
es el efecto del debilitamiento de la campaña anticorrupción.

Cuadro 2.1
Artículos Periodísticos relacionados con la corrupción por años
Categoría Año
y año del sexenio
1970 1971 1972 1974 1970 1971 1972 1973 1974
(6) (1) (2) (4) 5 24 21 18 15
Casos 1 17 10 10
Denuncias generales 1 5 7 4
Reformas 3 2 4 1
Total 5 24 21 15
Categoría 1976 1977 1978 1979* 1980 1981 1982 1983 1984
(6) (1) (2) (3) (4) (5) (6) (1) (2)
Casos 63 80 56 22 48 36 47 139 77
Denuncias generales 11 34 13 5 9 6 12 38 12
Reformas 13 29 12 8 12 6 11 32 8
Total 87 143 81 35 (47) 69 48 70 209 97
* La cifra entre paréntesis es un total ajustado, calculado añadiendo un tercio al total de los ocho meses.
Fuente: Morris, 1991

En los siguientes cuadros se verá una clasificación de los casos de corrupción reportados en
los artículos periodísticos. En el cuadro 2.2 según tipo, en el cuadro 2.3 según localización
burocrática y en el 2.4 según quien las denuncia.

Cuadro 2.2
Corrupción por categoría, según informes de la prensa de la Ciudad de México
Categoría Número (n=567) Porcentaje

Extorsión y Fraude 314 59.6


Soborno Privado y Colusión 82 15.6
Fraude con tierras 57 10.8
Contrabando, mercado negro y falsificación 29 5.5
Relativo al empleo 18 3.4
Otros tipos 27 5.1
Fuente: Morris, 1991.

11
El renglón “Extorsión y fraude” denota actos corruptos iniciados y llevados a cabo por
funcionarios gubernamentales en contra de miembros de la sociedad o del gobierno mismo.
“Soborno privado y colusión” se refiere a organizaciones sociales o ciudadanas que
penetran al gobierno mediante sobornos o defraudando a empresas públicas o privadas.
“Relativo al empleo” se refiere a la práctica de trabajadores fantasma llamados
comúnmente aviadores.

Cuadro 2.3
Localización burocrática de la incidencia de la corrupción
Área Número Porcentaje
(n=567)

Agricultura 83 14.6
Estatal y local 81 14.3
Policía 51 9
Banca 48 8.5
Comercio, industria, compañías
paraestatales 44 7.8
Comunicaciones, transportes, aduanas 39 6.9
Empresa Privada 38 6.7
Sindicatos 38 6.7
PEMEX 34 6
Seguridad Social 16 2.8
Judicial 10 1.8
Congreso 9 1.6
Militar 4 0.7
Otros 40 7.1
Fuente: Morris, 1991.

Los datos en el cuadro anterior están clasificados según la localización burocrática o


funcional, indicando el organismo defraudado o aquel al que pertenecen los funcionarios
involucrados.

Cuadro 2.4
Organizaciones que denuncian la corrupción
Area Caso específico (n=310) Denuncia general (n=131)
Número Porcentaje Número Porcentaje
Presidente 0 0.0 1 0.8
Procuraduría, contraloría, policía 128 41.3 13 9.9
Burocracia misma 49 15.8 14 10.7
Otro organismo federal 16 5.2 9 6.9
Estatal y local 8 2.6 5 3.8
PRI/Congreso 10 3.2 6 4.6
Partidos de oposición 7 2.3 19 14.5
Organizaciones empresariales y profesionales 7 2.3 7 5.3
Sindicatos 22 7.1 10 7.6
Organizaciones Campesinas 24 7.7 6 4.6
Otras organizaciones 27 8.7 19 14.5
Prensa y otros 12 3.9 22 16.8
Fuente: Morris, 1991.

12
Hay menos casos en este cuadro que en los anteriores porque muchos artículos analizaban
casos específicos sin mencionar la fuente de denuncia. Es posible que esos casos fueran
expuestos por la misma prensa, aunque no fueron codificados como tales a menos que
hubiera indicaciones explícitas que apoyasen esa conclusión.
“Burocracia misma” se refiere a denuncias originadas en el organismo o área del gobierno
en que ocurrió el caso (cómo cuando la policía denuncia la corrupción policial). “Otro
organismo federal” excluye a los que se enumeran específicamente en el cuadro e incluye
burocracia misma.
Los datos que utiliza Morris provienen de una investigación hemerográfica. Esto tiene
algunas ventajas y desventajas. Del Castillo (2002) señala que una posible ventaja, de una
investigación de este tipo, es que los datos recabados son potencialmente más exactos que
los datos de una encuesta. Sin embargo, hay problemas pues los datos muchas veces no son
confiables y no están midiendo lo que en realidad queremos medir. Para el caso de México
en los años del estudio (1970-84), la prensa fue muy sumisa ante el gobierno, por lo que los
reportajes sobre la corrupción podían estar influidos por los intereses del gobierno, dañando
la credibilidad de estos datos.
A pesar de su investigación hemerográfica, Morris no tiene evidencia contundente de que la
corrupción se comporte cómo él dice. No hay por lo tanto una prueba empírica que sustente
la idea de que la corrupción sea cíclica, aunque la teoría parezca bastante sensata. En
realidad, la estabilidad laboral de los burócratas durante el sexenio puede no estar tan
asegurada como lo plantea Morris; al menos, en los puestos altos ha habido muchos
cambios durante las presidencias de Salinas y Zedillo. Por lo tanto, los incentivos a la
corrupción pueden siempre estar presentes, al no estar asegurado el puesto durante el
sexenio. El análisis de Morris es bueno para los años de gobiernos priístas, especialmente
los anteriores a Salinas. No obstante, para la actualidad el análisis se puede volver más
complicado, pues aunque el PRI ya no esté en los Pinos, sigue estando presente en grupos
de poder dentro del país. Tal vez en unos años se tendrá nuevas interpretaciones para hacer
un análisis exhaustivo del comportamiento de la corrupción durante los años posteriores
cuando el PRI perdió la presidencia, sin embargo hoy sería aventurado.
Un supuesto básico del modelo de Morris es la inexistencia de un servicio civil de carrera.
Esto puede ser cierto para la mayoría de las dependencias del gobierno, sin embargo, para
algunas cómo Banco de México, esto no es cierto. El servicio civil de carrera es una medida
importante para combatir la corrupción, sin embargo la corrupción no va a ser erradicada
completamente aplicando sólo esta medida.

2.2. La corrupción en México, hoy en día


En 1999 se funda el capítulo mexicano de Transparencia Internacional, Transparencia
Mexicana. Entre los objetivos de ésta organización está el profundizar el estudio sobre la
corrupción en México, poniendo énfasis en el combate a la corrupción en sus distintas
manifestaciones. En el 2001, Transparencia Mexicana realizó un estudio sobre la
corrupción en México; éste ayuda a tener un mejor entendimiento y poder profundizar en la
investigación empírica. De este estudio se elaboró un índice de corrupción estatal.
Con base en la información de la encuesta de corrupción y buen gobierno, proporcionada
por el CIDE, se calcularon los siguientes datos que tratan sobre distintos aspectos de la
corrupción.

13
Cuadro 2.5
En su opinión, ¿acabar con la corrupción en nuestro país es muy
posible, posible, poco posible o nada posible?
Muy Posible 5.2%
Posible 32.3%
Poco Posible 35.9%
Nada Posible 24.0%
No respondió 2.5%

Cuadro 2.6
¿Y acabar con la corrupción en su localidad es muy posible, posible,
poco posible o nada posible?
Muy Posible 6.0%
Posible 37.0%
Poco Posible 32.2%
Nada Posible 20.9%
No respondió 3.8%

Cuadro 2.7
En comparación a hace un año, ¿actualmente la corrupción en
nuestro país es mayor, igual o menor?
Mayor 34.7%
Igual 43.0%
Menor 20.2%
No respondió 2.1%

Cuadro 2.8
Y en su estado (entidad federativa), ¿la corrupción es mayor, igual o
menor?
Mayor 27.3%
Igual 47.2%
Menor 23.0%
No respondió 2.4%

Cuadro 2.9
Dentro de un año, ¿cree usted que la corrupción en nuestro país
será mayor, igual o menor?
Mayor 28.0%
Igual 36.2%
Menor 31.6%
No respondió 4.3%

Cuadro 2.10
Y en su estado (entidad federativa), ¿la corrupción será mayor, igual
o menor?
Mayor 23.3%
Igual 40.3%
Menor 32.2%
No respondió 4.2%

14
De los cuadros anteriores se puede observar que en general, la corrupción es vista como un
problema más grave a nivel nacional, que a nivel estatal o local.

Cuadro 2.11
¿Por qué respeta y obedece las leyes y normas?
Por temor a la autoridad y para evitar castigos 10.6%
Porque cumplir la ley nos beneficia a todos ya que 36.3%
ordena a la sociedad
Para no ser mal visto o por sentimientos de culpa 2.4%
Porque es un deber respetar los derechos de los 21.3%
demás
Porque permite vivir en paz 15.0%
Porque reflejan principios morales comunes a 11.3%
todos y hay que vivir de acuerdo con ellos
No sabe / No contestó 3.0%

Cuadro 2.12
¿Qué tanto considera usted que las siguientes acciones pueden ayudar a combatir la
corrupción?
Mucho Poco Nada No
respondió
a) Mejorar la instrucción en la escuela. 83.0% 13.1% 2.5% 1.4%
b) Mejorar la educación en la casa. 89.4% 8.1% 1.3% 1.2%
c) Modificar las leyes existentes. 66.4% 23.3% 6.8% 3.5%
d) Castigar a los corruptos. 87.4% 7.8% 3.2% 1.6%
e) Premiar a los funcionarios honestos. 63.5% 18.8% 15.8% 2.0%
f) Negarse siempre a dar "mordida." 79.3% 8.7% 10.1% 1.8%
g) Quejarse de un abuso siempre que sea 86.2% 9.0% 3.3% 1.6%
necesario.
h) Realizar campañas masivas de 79.8% 14.0% 3.7% 2.4%
educación.
i) Simplificación de trámites. 77.0% 14.5% 4.9% 3.6%
j) Que los gobernantes den buen ejemplo. 88.6% 7.3% 2.5% 1.6%
k) Agruparnos para exigir honestidad. 81.3% 12.2% 4.5% 2.0%

Del cuadro anterior se puede observar que mejorar la educación en casa es la acción que
más contribuye a combatir la corrupción, según la opinión de los mexicanos. Mientras que
premiar a los funcionarios honestos es la acción que menos ayuda al combate a la
corrupción.

Cuadro 2.13
En su opinión, la mayoría de la gente que recibe dinero de la
corrupción ¿lo hace por necesidad o por ambición?
Por necesidad 21.3%
Por ambición 76.1%
No respondió 2.6%

El cuadro 2.13 presenta un resultado muy interesante. Se ve que los mexicanos piensan que
la corrupción se debe principalmente a la ambición. Esto puede ser un indicio de que la
mayor parte de la corrupción es vista como grandes negocios en que algunos se hacen muy
ricos.

15
Cuadro 2.14
Acabar con la corrupción, ¿es responsabilidad de personas como
usted, de la gente o del gobierno?
Personas como usted 4.9%
La gente 13.5%
El gobierno 35.7%
Todos 44.3%
No respondió 1.6%

El cuadro anterior muestra que la responsabilidad de la corrupción parece ser que le es


ajena a los mexicanos. Aunque “todos” sea la respuesta más popular, es una respuesta vaga
que no indica directamente la participación de uno. Ciertamente, las respuestas de “la
gente” y “el gobierno” excluyan la participación de uno en el combate a la corrupción,
ambas respuestas superan el porcentaje de “personas como usted”, además el porcentaje de
estas dos respuestas sumadas supera la respuesta de “todos”.

Cuadro 2.15
Hablando de gobierno, ¿en qué nivel considera usted que hay
más corrupción?
En los niveles bajos 8.5%
En los niveles medios 9.0%
En los niveles altos 42.0%
Todos 37.8%
No respondió 2.7%

El cuadro 2.15se ve que lo que piensan los mexicanos es que tiende a haber más corrupción
en los niveles altos. Esto es un indicio de que la percepción de corrupción de la gente tiene
una gran influencia de los medios, dado que estos cubren principalmente a los grandes
escándalos de corrupción, donde están involucrados funcionarios o políticos de niveles
altos.

Cuadro 2.16
¿Conoce usted el proceso que debe seguir para denunciar un
caso de corrupción?
Sí 21.2%
No 75.9%
No respondió 2.9%

El cuadro 2.16 es muy ilustrativo para ver cuáles deben ser las primeras medidas para
combatir la corrupción. La gran mayoría de la gente no conoce el procedimiento que debe
seguir para denunciar un caso de corrupción, por lo tanto hay que difundir a nivel nacional
cómo se debe seguir este proceso. También es un indicio del poco interés que tiene la gente
para combatir la corrupción, pues si realmente estuviera interesada el porcentaje de
personas que conoce el proceso de denuncia sería mayor.

16
A continuación se presentan algunos cuadro con un índice de corrupción que miden el
porcentaje de pago de mordidas11. Este índice está clasificado según algunas características
de los encuestados. Este índice fue calculado a partir de los datos de la encuesta de
corrupción y buen gobierno. Entre mayor sea el índice, hay mayor corrupción.

Cuadro 2.17
Edad Índice de Corrupción

18 a 29 años 11.55
30 a 49 años 11.21
50 y más años 8.92
Nacional 10.51
Fuente: Roy Campos

Cuadro 2.18
Escolaridad Índice de Corrupción

Ninguna 8.21
Primaria 8.85
Secundaria 12.56
Preparatoria 12.24
Universidad y más 12.81
Nacional 10.51
Fuente: Roy Campos

Cuadro 2.19
Como perciben la corrupción con respecto Índice de Corrupción
al año anterior
Mayor 10.41
Igual 10.48
Menor 11.16
Nacional 10.51
Fuente: Roy Campos

Cuadro 2.20
La expectativa que tiene de la corrupción Índice de Corrupción
en el país.
Mayor 11.02
Igual 11.01
Menor 9.78
Nacional 10.51
Fuente: Roy Campos

Los cuadros anteriores presentan resultados muy interesantes. Primero, los grupos de menor
edad muestran mayor corrupción. La gente que estudió primaria es menos corrupta que la
de mayores niveles de educación, es más, la gente sin educación primaria es la que tiene el
menor índice de corrupción. La gente que percibe una mayor corrupción con respecto al
año anterior, es la menos corrupta, y la que percibió un menor nivel de corrupción con
respecto al año anterior es la más corrupta. Sin embargo, la relación entre las expectativas
de corrupción y la corrupción parecen ir en el mismo sentido.

11
Este índice es el Índice de Corrupción y Buen Gobierno general, el que reúne a los treinta y ocho servicios
identificados por Transparencia Mexicana.

17
El diario Reforma realizó una investigación en agosto del año 2002 sobre los jóvenes en
México. Se entrevistaron a 648 jóvenes entre la edad de 18 y 25 años sobre sus principales
preocupaciones, gustos y disgustos. Los resultados se publicaron en el suplemento de
“Universitarios” de Reforma en noviembre del 2002.

Cuadro 2.21
¿Cuál consideras que es el principal problema del país actualmente?
Total Universitarios No Universitarios
La corrupción 17% 18% 16%
La inseguridad 14% 12% 15%
La economía 13% 13% 14%
La pobreza 13% 12% 14%
El desempleo 8% 9% 8%
La política 6% 7% 5%
Los malos 5% 6% 4%
gobernantes
La educación 3% 5% 2%
La drogadicción 3% 2% 4%
Otros Problemas 13% 14% 11%
No contestó 5% 2% 7%
Fuente: Reforma

Cuadro 2.22
Si tú pudieras hacer un cambio en el país, ¿cuál cambio harías?
Total Universitarios No Universitarios
Combatiría la 11% 11% 12%
corrupción
Mejoraría el 11% 14% 8%
sistema educativo
Combatiría el 7% 6% 7%
desempleo
Combatiría la 7% 5% 8%
pobreza
Combatiría la 6% 6% 6%
inseguridad
Mejoraría la 5% 5% 4%
situación
económica
Otros cambios 36% 38% 35%
No contestó 17% 15% 20%
Fuente: Reforma

Lo que destaca de este estudio es que los jóvenes sitúan al problema de la corrupción arriba
de la inseguridad, la pobreza, el desempleo, la educación y otros. Además, el combate a la
corrupción es junto con la mejora en el sistema educativo la acción más necesaria en el
país, en opinión de los jóvenes; el énfasis en el problema educativo es una mayor prioridad
para los universitarios, pero para los no universitarios el combate a la corrupción es lo
primordial. El énfasis que han puesto los jóvenes en la corrupción puede tener dos
explicaciones. Primero, puede ser explicado por el planteamiento de Klitgaard (1988),
donde la amplia difusión de la corrupción causa que la gente sobreestime sus costos y
empiece a achacarle los principales problemas nacionales. Segundo, como Morris (1991)
señala en su teoría del ciclo sexenal, la campaña anticorrupción está en un punto álgido al

18
comienzo del sexenio, además si añadimos el hecho de que por primera vez en setenta años
hay un presidente de un partido diferente al Partido Revolucionario Institucional (PRI), la
campaña anticorrupción tiene un mayor impulso por este nuevo gobierno.

19
3. Costo de la corrupción
Según los datos obtenidos en la encuesta de corrupción y buen gobierno, realizada en el
2001, Transparencia Mexicana calcula que en México se pagan 214 millones de mordidas
en un año, la mordida promedio es de 109.50 pesos, esto arroja un gasto total de 23,433
millones de pesos por concepto de mordidas12. Además, se calculó que la industria del
narcotráfico hace un pago anual de 208 millones de dólares13 por concepto de corrupción
(Loret de Mola, 2000).
¿Representan estas cifras los costos de la corrupción? La respuesta no es clara. Más allá de
las posibles deficiencias asociadas con estos cálculos, el problema consiste en que lo que se
está midiendo, el monto pagado por concepto de soborno, no necesariamente representa el
costo social del acto de corrupción. Pongamos un ejemplo: en la construcción de un edificio
se están utilizando materiales de baja calidad que no cumplen con los estándares legales,
sin embargo se soborna al inspector para que reporte que se usaron los materiales
adecuados; el resultado es que el edificio va a ser más inseguro, éste costo no lo enfrenta el
inspector ni los constructores, pues ellos no van a usarlo, el costo lo van a enfrentar las
personas que utilicen el edificio, el costo lo enfrenta un tercero.
En Economía, cuando un actor económico afecta directamente el bienestar de otro, sin ser
reflejado en cambios en los precios de mercado, se dice que este efecto es una externalidad.
En el caso anterior, los que renten o compren el edificio no van a pagar menos porque tenga
una menor calidad, ellos adquieren el edificio con la idea que cumple con los
requerimientos mínimos de calidad. La transacción corrupta —el soborno—causa una
externalidad negativa pues afecta directamente a los que van a usar el edificio, sin haber
sido alterado el precio del edificio, debido a la menor calidad. El costo que van a enfrentar
los que utilicen el edificio va a estar determinado por la calidad de los materiales utilizados,
y no por cuánto fue el soborno pagado. El monto del soborno va a estar determinado por
otros factores, cómo el proceso del soborno y la información que tienen el inspector y los
constructores.

3.1 Un ejemplo: Una empresa contaminante


Este caso es utilizado para señalar que puede existir una relación negativa entre el costo
social de la corrupción y el monto pagado por el soborno. En otras palabras, que un mayor
soborno puede significar un menor costo social y viceversa.
Supongamos que el gobierna identifica una empresa que está contaminando, por lo tanto
produce una externalidad negativa. El gobierno quiere que la empresa produzca lo
socialmente óptimo: cuando el costo marginal social (el costo marginal privado más el daño
marginal) sea igual al beneficio marginal. El gobierno contrata a un burócrata para que
supervise a la empresa y notifique si ésta ha producido más de lo socialmente óptimo.
Supongamos además que las emisiones del contaminante no pueden ser medidos
directamente, sólo mediante la cantidad producida. La cantidad producida sólo puede ser
determinada por la propia empresa y por el burócrata. Si se reporta que la empresa ha

12
Estos cálculos sólo contemplan la corrupción en treinta y ocho servicios públicos ofrecidos por los tres
niveles de gobierno y por particulares.
13
Se parte de que la DEA declara que tan sólo el cartel de Juárez invierte un millón de dólares por semana en
corromper funcionarios públicos. Tomando en cuenta que el gobierno norteamericano reconoce cuatro
cárteles que dominan el mercado anglosajón (Caro Quintero, Arrellano Félix, Amado Carrillo, Amézcua
Contreras), se puede decir que los narcotraficantes gastan 4 millones de dólares semanales, por lo tanto 208
millones de dólares anuales.

20
producido más de lo socialmente óptimo, el gobierno le impone una multa sustancial que
llevaría a la empresa a la bancarrota. Pero si el burócrata reporta que la empresa ha
producido más de lo socialmente óptimo, y no es cierto, se sanciona al burócrata y no a la
empresa.
El burócrata tiene incentivos a permitir a la empresa producir unas unidades más de lo que
le es permitido a cambio de un soborno. La empresa va a aceptar pagar un soborno si se le
permite producir más de lo socialmente óptimo. Sin embargo el soborno es un costo
adicional para la empresa; a medida que el soborno es mayor, la cantidad producida por la
empresa va a ser menor. Supongamos que el burócrata le permite producir a la empresa lo
que maximice sus ganancias a cambio de un soborno. Sin embargo si el soborno es
excesivo la empresa va a reportar el soborno y por consiguiente sancionan al burócrata,
dado que la empresa estaría peor que si produjera lo que le es permitido. Por lo tanto, hay
un tope a lo que puede pedir cómo soborno, el burócrata.
El burócrata va a pedir por lo tanto el máximo soborno. Con este soborno, la empresa va a
maximizar su bienestar produciendo exactamente lo socialmente óptimo. Por lo tanto
aunque el soborno es máximo el costo social es cero, pues la empresa produce en lo
socialmente óptimo. El burócrata cumplió con su encomienda. Lo que nos lleva a la
conclusión que la solución hubiera sido la misma si el gobierno le hubiera cobrado un
impuesto por el mismo monto que fue el soborno. La única diferencia es en la distribución
de los ingresos, en el primer caso el burócrata se queda con el ingreso y en el otro el
gobierno.
Sin embargo si el burócrata exige un soborno menor al máximo, pues hay un límite a la
cantidad de dinero que puede “lavar”, la empresa va a producir más de lo socialmente
óptimo. Por eso, en este ejemplo cuando hay un menor soborno, hay un mayor costo social.
Esta situación se ilustra en el siguiente cuadro. Cuando el soborno es máximo, el costo
marginal social es igual al beneficio marginal; cuando el soborno es menor, el costo
marginal social excede al beneficio marginal; y cuando el soborno es igual a cero, pero se
le permite a la empresa producir lo que quiera, la diferencia entre el costo marginal social y
el beneficio marginal es aún mayor (este último caso también ocurre cuando a la empresa
se le deja actuar libremente).

Cuadro 3.1
Costo Marginal
Social menos
Producción Beneficio Costo Marginal Costo Marginal Beneficio
Soborno Total Marginal Privado Daño Marginal Social Marginal
Máximo soborno 7.5 15 15 7.5 7.5 15 0
Soborno menor 5 16.6666667 13.3333333 8.33333333 8.33333333 16.6666667 3.33333333
Soborno igual a cero 0 20 10 10 10 20 10

3.2 ¿Hay beneficios de la corrupción?


La corrupción puede ser ocasionalmente benéfica, cuando se hace un pago para acelerar un
trámite (speed payment) puede existir ganancias en bienestar. Después de realizar el pago
de un soborno por un servicio más rápido, puede existir una asignación más eficiente. El
aumento en eficiencia se debe a que distintos individuos tienen una distinta valoración del
tiempo, por lo tanto van a existir distintas valoraciones por el tiempo esperado para realizar
el trámite. Las posibles ganancias en eficiencia sólo ocurren cuando es un acto aislado de

21
corrupción, no cuando la corrupción funciona cómo un sistema. Rose-Ackerman (1978)
encuentra que los incentivos de los burócratas dentro de un sistema de sobornos son
contrarios a los que maximizarían el bienestar de los clientes sujetos a las restricciones de
la dependencia, en otras palabras, la eficiencia no es obtenida cuando los burócratas crean
un sistema de sobornos. Los beneficios se restringen a los casos en que la corrupción es
aislada.
Otro caso en el que la corrupción puede ser benéfica, es cuando existe una restricción legal
que inhibe cierta actividad económica, que es muy valiosa para la sociedad y se paga un
soborno para poder realizar esta actividad. La corrupción, sin embargo, es sólo la segunda
mejor opción, esta solución no constituye el óptimo, la mejor opción sería tener un sistema
legal que tuviera una regulación eficiente. Nye (1967) sostiene que los posibles beneficios
de la corrupción ocurren cuando ésta induce a cambios hacia la modernización, y ésta es la
única solución a un obstáculo al desarrollo.
Klitgaard (1988) señala que los gobiernos frecuentemente —aunque ciertamente no
siempre— intervienen en la economía en circunstancias en que los mercados no pueden
distribuir bienes y servicios de manera eficiente, dada la existencia de fallas de mercado. En
esos casos la corrupción puede simplemente reintroducir la falla, dañando al mercado. Por
ello, las políticas del gobierno pueden tener un menor impacto que el deseado, incluso el
impacto puede resultar contrario al que se tenía planeado. Ades y Di Tella (1997)
encuentran que la política industrial —que tiene cómo objetivo fomentar la inversión—
tiene un menor impacto debido a la corrupción. La intervención del gobierno, debe
entonces tomar en cuenta la corrupción, pues puede cambiar bastante el análisis costo
beneficio de la intervención.
Los costos de la corrupción se pueden clasificar en tres tipos. Primero, como desperdicio de
recursos, por ejemplo, cuando hay corrupción en licitaciones se paga más que si no hubiera
corrupción. El gasto del gobierno se vuelve ineficiente. Esto disminuye el poder del
gobierno, puesto que el número de políticas que puede implementar se reduce. El aumento
en costos podía haberse usado en cosas más útiles: educación, salud o pagar el déficit
presupuestal.
Segundo, la corrupción puede ocasionar la creación de “males públicos” (externalidades
negativas). Buscaglia (1999) comenta que la corrupción en el sistema judicial disminuye la
disuasión, lo que lleva a una menor sanción esperada para los criminales y por lo tanto un
mayor índice delictivo e inseguridad. Al disminuir la eficacia de supervisión de la
administración pública hay una menor observancia de la ley que origina una mayor
impunidad y delincuencia, esto trae como consecuencia una menor calidad de vida de los
habitantes. De igual manera la corrupción puede originar una menor calidad de bienes y
servicios, como edificios mal construidos.
Tercero, la corrupción es perjudicial cuando los representantes del gobierno desvían las
políticas para beneficiarse ellos mismos, en vez de seguir un comportamiento honesto
siguen un comportamiento de búsqueda de rentas. Este punto cobra mayor importancia
cuando la corrupción tiende a volverse sistemática, pues al difundirse la corrupción, los
ciudadanos y burócratas gastan su potencial productivo en la búsqueda de rentas corruptas.
Esto es perjudicial porque el potencial productivo de un país no es alcanzado. Políticas que
pueden inducir mayores tasas de crecimiento son desechadas o alteradas, para que un grupo
de individuos puedan gozar de beneficios extraordinarios derivados de actividades
corruptas. Además, se obstruye el desarrollo económico al hacer más complicado el
proceso burocrático. La economía se hace más rígida y consecuentemente se entorpece la

22
incorporación de nuevas tecnologías y procesos de producción que traerían un mayor
desarrollo económico, no hay avance tecnológico en nuevos procesos o en capital.
Al aumentar la evidencia en países en vías de desarrollo, parece claro que los efectos
dañinos de la corrupción sobrepasan los ocasionales beneficios. Así que hoy en día resulta
descabellado afirmar que para el desarrollo de un país es deseable la corrupción. La
corrupción es dañina, pues como sostiene Rose-Ackerman (1978), una vez que la
corrupción se ha instalado dentro de algunas instituciones públicas, resulta difícil limitarla a
las áreas donde puede ser deseable desde un punto de vista económico. Esto enfatiza que si
la corrupción se vuelve sistemática se extiende a ámbitos adicionales y trae consigo
mayores costos.
La mayor parte de los costos están asociados a la corrupción sistemática. Cuando la
corrupción es aislada, el burócrata tiene que llegar a un acuerdo —en el caso del soborno—
o tiene que diseñar un esquema para malversar fondos por si solo. En el caso en que la
corrupción es sistemática, el burócrata ya no está solo, puede tener mayor poder de
negociación en un soborno, y puede recibir ayuda de otros individuos cuando comete otro
acto corrupto. En general dentro de la corrupción sistemática, el burócrata enfrentaría una
menor probabilidad de ser sancionado y menores costos. Por ejemplo, en el caso de que
únicamente un burócrata pide un soborno por acelerar un trámite, su poder de negociación
depende de la rapidez con que se atiende a los clientes y la valoración que éstos tienen del
tiempo de espera; si todos lo burócratas están de acuerdo en imponer un sistema de
sobornos, van a atender más lentamente a los clientes para que esto se vean forzados a
pagar un soborno si quieren ser atendidos con mayor rapidez. Es obvio que los costos son
mayores en el segundo caso, pues se crea una escasez artificial. La corrupción sistemática
le otorga más poder al burócrata, se generan mayores rentas corruptas y frecuentemente
mayores costos sociales.

3.3 Corrupción con robo y sin robo


El modelo de Schleifer y Vishny (1993) parte de que el gobierno ofrece un servicio y que
es un monopolio. Además, hay dos tipos de corrupción: sin robo o con robo. Primero
analizaremos el caso de la corrupción sin robo. Pongamos el ejemplo de un servicio que
ofrece el gobierno: obtener un pasaporte. El gobierno vende los pasaportes a un
determinado precio, este precio representa el costo marginal (el costo por unidad) para el
burócrata. El burócrata va a elevar el precio a un nivel superior al precio oficial, siendo la
diferencia el soborno que se lleva. El aumento en el precio va a estar reflejado en que, si no
se paga el soborno, se tiene que hacer el proceso del trámite más lentamente, lo que le
representa un costo al que tramita el pasaporte. Si el cliente no quiere esperar, tiene que
pagar el soborno. El resultado es el de un típico monopolio, al maximizar beneficios el
burócrata crea una pérdida en bienestar social. El costo puede ser mayor pues el costo no es
únicamente el triángulo —que representa el costo en bienestar social típico de un
monopolio—, si hay clientes que esperan por el servicio en vez de pagar el soborno, parte
del cuadro que representa las ganancias del monopolista no van a ser obtenidas por el
burócrata, parte representan el tiempo gastado en esperar por el servicio. Es un costo para el
cliente, sin embargo el burócrata no obtiene un ingreso por este costo, es una pérdida en
bienestar adicional.
El segundo caso es el de la corrupción con robo. El burócrata simplemente no reporta el
servicio, por lo tanto su costo marginal es cero. Aquí va a vender los pasaportes a un precio
menor que el oficial. El costo es otra vez el de monopolio más el costo total del servicio

23
(precio oficial de los pasaportes no reportados por el número que se vendieron sin ser
reportados). Muy probablemente el burócrata no va a poder reportar cero ventas, por lo
tanto va a tener que discriminar entre los demandantes del servicio. Supongamos que tiene
que cubrir un monto mínimo o si no es despedido o simplemente se cierra la oficina que
realiza el trámite. Ahí va a tener que discriminar por separación de mercados. Por lo tanto,
tiene incentivos de vender los pasaportes que no reporta a personas que tienen una alta
valuación de éstos. Estas personas serían aquellas que no podrían legalmente obtener un
pasaporte; en este caso existe un costo mayor, pues el burócrata le vende un pasaporte a
alguien que no califica legalmente.
Si introducimos al análisis la probabilidad de ser sancionado, el resultado no cambia. Para
el burócrata, esta probabilidad le representa un costo, pero si la probabilidad es
independiente del monto y cantidad de sobornos no hay cambio en la decisión que toma. Si
a mayor número de sobornos hay una mayor probabilidad de ser sancionado va a reducir el
número y aumentar el monto del soborno, si con un soborno mayor hay más probabilidad
de sanción o la sanción se hace más grande, va a aceptar sobornos pequeños, pero una
mayor cantidad.
Hay otro costo asociado con la corrupción con robo, pues ésta tiene un efecto sobre la
competencia. Cuando una empresa obtiene un servicio o un bien (un permiso, por ejemplo)
a un precio menor que sus competidores, obtiene una ventaja en costos. En este caso, tiene
una desventaja la empresa que se abstuvo de sobornar; hay incentivos a pagar el soborno,
para tener la misma ventaja en costo. El cliente (sobornador) no tiene incentivos para
reportar el acto corrupto, los intereses del burócrata (sobornado) y del cliente (sobornador)
van de la mano; mientras que en el caso sin robo, los intereses del sobornador y del
sobornado van en sentidos contrarios, sí hay incentivos a reportar el soborno. La corrupción
con robo es más difícil de detectar por la renuencia de los sobornadores a reportar el
soborno.
Cuando las empresas que pagan por el permiso se enfrentan a un mercado competitivo,
tienen incentivos a comprar el permiso ilegal que es más barato, para así reducir sus costos.
Esto propicia que la corrupción crezca y consecuentemente disminuya el número de
servicios pagados legalmente. La oficina o dependencia encargada de tramitar el servicio o
permiso ve mermados sus ingresos, dado que muchos de los servicios otorgados no fueron
reportados. Sin embargo se tienen que cubrir ciertos costos fijos (los salarios de la
dependencia, la renta del local, los insumos necesarios, etc.), por lo tanto hay que elevar el
precio oficial del bien o servicio para compensar por los menores ingresos, o simplemente
aumenta el déficit presupuestal de la dependencia.
Este modelo se puede aplicar al caso de la recaudación fiscal. El gobierno necesita recursos
y los genera mediante la recolección de impuestos. Los impuestos afectan las decisiones
económicas y generan pérdidas en bienestar como resultado de las distorsiones que causan
en los mercados14. Por ello la recaudación fiscal genera costos —además del costo por el
hecho de crear una dependencia pública que se dedique a recolectar el pago de impuestos.
Si tomamos el modelo anterior sin robo, los costos son básicamente los mismos, el
contribuyente paga más por el servicio. Aquí el servicio que adquiere el contribuyente es el
cumplimiento de sus obligaciones fiscales. Si tomamos el caso con robo, en el que el
burócrata no ingresa el pago al erario público, sin embargo certifica el pago de impuestos,

14
Ver Rosen 1999 para una explicación más exhaustiva de los costos que genera la recaudación de impuestos.

24
tenemos un costo adicional, ya que aumenta la evasión y el costo marginal de recaudar se
incrementa con la presencia de corrupción.
Un caso específico sobre este problema lo podemos ver en el caso de La Paz, Bolivia15. En
1985, Bolivia estaba viviendo una de sus peores crisis económicas, en agosto la inflación
había alcanzado una tasa anual de 40,000 por ciento. El salario promedio de los
trabajadores del gobierno local era bajo, el equivalente a treinta dólares mensuales; esto
orilló a muchos a buscar otras fuentes de ingresos, una de ellas era la corrupción. Nuevas
leyes le habían otorgado independencia financiera a la ciudad, lo que le impedía ser
subsidiada por la tesorería nacional. Muchos de los problemas de recaudación fiscal eran
causados por la corrupción: los burócratas encargados de la recolección de impuestos se
habían coludido con los contribuyentes. Particularmente en el caso de impuestos sobre la
propiedad, donde los funcionarios públicos negociaban con los propietarios un valor menor
de la propiedad —que era sustancialmente menor al valor verdadero—a cambio de un
soborno, lo que finalmente disminuía los ingresos de la ciudad. El poder del alcalde estaba
reducido por la falta de recursos, el gobierno prácticamente era inexistente, los servidores
públicos se dedicaban a obtener sobornos. La corrupción estaba tan generalizada que era
prácticamente imposible aumentar la recaudación.
El caso de La Paz es un caso extremo, el gobierno estaba reducido en sus capacidades ante
la corrupción imperante, sin embargo, este caso sirve para ver qué tan dañina puede ser la
corrupción. Cabe mencionar que la corrupción había crecido tanto por la crisis que vivía
Bolivia. Durante los momentos más álgidos de corrupción, el poder de los burócratas estaba
a la venta al mejor postor. Finalmente, después de una férrea campaña anticorrupción, la
corrupción disminuyó y el alcalde recuperó su capacidad de gobernar.

3.4 Costos a nivel Macroeconómico


En Mauro (1995) se prueba con métodos econométricos que la inversión disminuye al
haber mayores niveles de corrupción, al haber menores tasas de inversión también había
menores tasas de crecimiento del producto. Este fue el primer trabajo que utilizo métodos
econométricos para probar que la corrupción tenía costos sobre la economía. Al haber
mayor corrupción hay mayor incertidumbre sobre la recuperación de la inversión, este
mayor riesgo va a representar un costo para los inversionistas. Esto trae como
consecuencia, una disminución en la tasa de inversión privada.
La menor tasa de crecimiento del PIB puede ser explicada por el efecto de la corrupción
sobre la inversión y otras variables que afectan el crecimiento. La corrupción inhibe el
crecimiento económico porque distorsiona las tasas de rentabilidad privada —de la
inversión, por ejemplo— y por lo tanto divergen de las tasas de rentabilidad social. North y
Thomas (1988) señalan que una tasa de crecimiento sostenida en el largo plazo, sólo puede
ser alcanzada mediante la convergencia de las tasas de retorno social y privado.
Existen diversos estudios con herramientas econométricas que muestran algunas de las
consecuencias de la corrupción sobre algunas variables macroeconómicas, los principales
son:

• Disminuye la inversión y el crecimiento (Mauro 1995).


• Reduce el gasto en educación y salud. (Mauro 1997).

15
El caso lo enfrentó Ronald MacLean-Abaroa cuando fue alcalde de La Paz en 1985. Viene descrito en
Klitgaard, Robert, MacLean-Abaroa, Ronald y Parris, H. Lindsey 2000.

25
• Incrementa el gasto en inversión pública (Tanzi, 2000).
• Distorsiona el efecto de la política industrial sobre la inversión (Ades y Di Tella, 1997).
• Reduce el gasto en operación y mantenimiento en infraestructura (Tanzi, 2000).
• Reduce la productividad de la inversión pública en infraestructura pública (Ibid).
• Reduce la recaudación fiscal (Ibid).
• Reduce la inversión extranjera directa (Wei, 2000).

Mauro (1995) argumenta que la corrupción tiene dos efectos sobre el crecimiento. El
primero es un efecto indirecto que se canaliza a través de la menor inversión. El segundo es
mediante la mala asignación de la inversión. Mauro prueba el primer efecto, sin embargo
no obtiene resultados significativos que pueda probar su segunda hipótesis. Del Castillo
(2002) señala que el índice que utilizó Mauro era un índice de percepción de corrupción. La
inversión responde a nivel percibido de corrupción, sin embargo las tasas de crecimiento
son afectados no tanto por la percepción, sino por el nivel real de corrupción. Del Castillo
utiliza un índice de pago de sobornos, para probar que en efecto la inversión responde a la
corrupción percibida, y que el crecimiento responde a la corrupción per se, medida con el
índice de pagos de sobornos. Los resultados de Del Castillo son significativos y son
consistentes con sus hipótesis.
Al necesitar discreción, los agentes corruptos alteran la composición del gasto público, se
buscará encaminar los recursos a aquellas áreas en las que sea más fácil conseguir sobornos
y esconder sus ingresos ilegales, en lugar de a las áreas más productivas. Hay una
promoción de políticas ineficientes, para mantener las rentas ilegales de algunos. Esto
explica los resultados de Mauro (1997), donde el gasto en educación y salud se reduce
debido a que estas áreas no se prestan a prácticas corruptas, y así poder gastar en otras áreas
que permiten obtener ingresos por actividades corruptas.
El aumento en inversión pública como consecuencia de la mayor corrupción (Tanzi, 2000),
se explica por dos razones. La primera es que la corrupción hace que el gobierno tenga que
pagar más por cada contrato, pues se tiene que incluir dentro del precio que paga el
gobierno el soborno que recibe el burócrata. La segunda razón va en el mismo sentido que
el párrafo anterior, para obtener mayores ingresos derivados de la corrupción el gasto
público es alterado, favoreciendo a las áreas donde se pueden extraer mayores rentas
corruptas. En otras palabras, el gasto del gobierno se orienta más hacia gasto en
infraestructura, no porque haya una gran demanda por ella, sino porque se pueden extraer
sobornos muy altos en los contratos públicos requeridos para crear nueva infraestructura.
Un tercer punto que podría causar el aumento en gasto en inversión pública, es que los
contratos se le otorgaran a las empresas que piden un precio muy alto por el contrato,
porque también dan el mayor soborno. Sin embargo, también pueden ser las empresas más
eficientes las lo que ofrezcan, entonces no es claro si esto propicia un aumento en el gasto
en inversión pública. En todo caso, la corrupción eleva el costo de la inversión porque la
empresa incluye el soborno en el precio del contrato.
La política industrial tiene dos efectos sobre la inversión (Ades y Di Tella, 1997): la
aumenta directamente mediante algunos estímulos, pero a su vez crea corrupción que
inhibe la inversión. Por lo tanto, la corrupción disminuye el efecto de la política industrial.
Ades y Di Tella encuentran que la corrupción afecta la inversión en investigación
(Research and Development). La política industrial transfiere rentas a sectores favorecidos;
para obtener estas rentas muchos empresarios están dispuestos a pagar sobornos. Los
beneficios originales de la política industrial se pierden cuando se considera la interacción

26
de la corrupción. En un país donde hay más corrupción en general, o el ambiente sea más
propicia para ésta, la política industrial tendrá un menor impacto sobre la inversión.
Tanzi (2000), encuentra que la corrupción aumenta el gasto en salarios en detrimento del
gasto en operación y mantenimiento de la infraestructura existente. La corrupción hace que
se descuide el gasto en operación y mantenimiento de la infraestructura porque no se
pueden extraer sobornos por ese tipo de actividad. Tanzi también encuentra que la calidad
en infraestructura es menor, una explicación de esto puede ser debido a la reducción en el
gasto relacionado con el mantenimiento de ésta. Además, la corrupción puede hacer que los
constructores de la infraestructura descuiden la calidad sin ser castigados.
La corrupción reduce la recaudación fiscal y por ende incrementa las tasas de evasión
fiscal. Esto se debe a que los burócratas encargadas de la recolección de impuestos se alían
con los contribuyentes para que los segundos paguen un menor cantidad de impuestos a
cambio de pagar un soborno a los burócratas. Cuando los sistemas de rendición de cuentas
son deficientes y la corrupción está muy difundida, los incentivos de los burócratas
promueven que éstos actúen en contra de los intereses del fisco.
La explicación de porque la corrupción disminuye la inversión extranjera directa (Wei,
2000) es la misma que antes. Hay mayor incertidumbre, lo que inhibe la inversión.
Por todo lo anterior, la corrupción inhibe el crecimiento. Primero, mediante una reducción
en la tasa de inversión; la inversión privada cae más que la pública pues la inversión total
cae pero lo inversión pública aumenta. La reducción en inversión extranjera directa es
también perjudicial para el crecimiento, pues si el ahorro nacional es bajo, este puede ser
compensado con la inversión extranjera. El incremento en inversión pública parece no ser
tan propicio para el crecimiento, pues aunque ésta aumente, su simultáneo deterioro en
calidad puede disminuir bastante su productividad. Los salarios son un gran componente
del gasto gubernamental y un consumo más alto del gobierno esta relacionado
inequívocamente con menores tasas de crecimiento. Barro (1997) encuentra una relación
negativa que es significativa entre gasto de gobierno cómo porcentaje del PIB16 y
crecimiento económico, es decir, un aumento en gasto reduce el crecimiento.
La corrupción reduce el poder del gobierno mediante el decremento en recaudación fiscal
que es necesaria para financiar el gasto productivo. Además, si hay un aumento en gasto del
gobierno y menor recaudación, se tiende a un déficit, lo que trae problemas fiscales que se
pueden traducir en inestabilidad macroeconómica.
Una medida válida de los costos de corrupción es estimar el efecto de la corrupción, medida
con un índice, sobre otras variables tales como inversión, gasto gubernamental, recaudación
fiscal, etc. y dado el nivel de estas medir su impacto sobre el crecimiento. Otro método es
simplemente medir el costo directo que existe entre la corrupción y el crecimiento, (el costo
es por lo tanto el crecimiento perdido por tener ese determinado nivel de corrupción).

3.5 Nivel óptimo de corrupción


La corrupción es costosa pero también combatirla lo es. El costo relacionado con combatir
la corrupción va a afectar el nivel óptimo de corrupción. Si el costo marginal de combatir la
corrupción siempre es menor al costo marginal de la corrupción, el nivel óptimo de
corrupción sería cero, sin embargo esto no es así pues llega un punto donde el costo

16
Nada más toma en cuenta los gastos que no considera productivos. No incluye , por lo tanto, el gasto en
educación y en defensa.

27
marginal de combatirla es igual a su costo marginal de la corrupción. Este punto determina
el nivel óptimo.
Si suponemos una función que relaciona el costo marginal social de una unidad de
corrupción puede tener un costo social bajo. Pero al empeorar la corrupción —cuando la
cantidad total de corrupción crece— cada unidad adicional puede tener un costo social
mayor. Por ejemplo, los costos podrían crecer en términos de quebrantar las normas de
conducta, crear mayores deficiencias, empeorar la distribución del ingreso y del poder, y así
sucesivamente. El resultado podría capturarse con una línea positiva de la figura siguiente.

Costo marginal de la
corrupción

Costo de eliminar la
corrupción

Cantidad de Corrupción

Ahora suponemos la existencia de una función que nos indique el costo marginal social de
reducir la corrupción. Si hubiera sólo algunos casos de conducta corrupta, sería muy
costosos detectarlos. Por otro lado, si la corrupción se hubiera difundido, la detección sería
más fácil y sería relativamente económico tomar medidas para reducir la corrupción por
unidad. Esta curva también se muestra en la figura. La intersección de estas dos curvas
indica la combinación menos costosa de las actividades corruptas y lo esfuerzos para
reducir la corrupción, este punto identifica la cantidad óptima de corrupción. La forma que
adquieran las curvas no es importante, desde el punto de vista cualitativo. El punto es que
los esfuerzos anticorrupción al ser costosos no serán infinitos y por lo tanto la cantidad
óptima de corrupción no es cero.

28
4. Causas de la corrupción

4.1. El modelo de Agente y Principal


Un modelo conceptual útil para analizar la corrupción—sobretodo el soborno— es el
modelo de agente y principal. El agente es una persona que ha aceptado la obligación de
actuar a nombre de su principal en ciertas actividades (posiblemente mediante un contrato
laboral); por lo que tiene que seguir los intereses del principal como si fueron los suyos. El
principal es una persona u organización. Este enfoque define a la corrupción en términos de
la divergencia entre los intereses del principal17 y los del agente: la corrupción ocurre
cuando el agente traiciona al principal (y los intereses de éste) por buscar su propia
conveniencia. Este enfoque enfatiza que la corrupción es cuestión de grados, el principal
quiere inducir el nivel óptimo de corrupción, que probablemente no es igual a cero.
Si suponemos que el principal entiende que el agente está tentado a volverse corrupto, la
tarea del primero es inducir que el agente cumpla sus obligaciones hasta el nivel óptimo—
inducir el nivel óptimo de esfuerzo de servicio público y el nivel óptimo de
comportamiento corrupto. En el caso del soborno, el principal también está interesado en
inducir la conducta apropiada por el cliente (el sobornador en potencia).
El agente va a cometer un acto corrupto si los beneficios esperados de hacerlo superan los
costos esperados. Klitgaard (1988) identifica tres factores fundamentales que contribuyen a
la decisión del agente a volverse corrupto. El primero es el monopolio de poder; si el agente
está encargado de ofrecer un servicio al público y es el único que lo provee, sus posibles
ganancias si pide un soborno son mayores. El segundo factor es la discrecionalidad; si el
agente puede decidir a quién puede otorgarle al servicio y a quién no, puede extorsionar a
los clientes. Por último está la rendición de cuentas, que básicamente consiste en que tanto
tiene que responder el agente por sus actos; si constantemente están supervisando el
desempeño del agente, éste tiene menos incentivos a volverse corrupto. Los primeros dos
factores tienen una relación positiva con la corrupción (si alguno de los dos aumenta,
también aumenta la corrupción), mientras que la rendición de cuentas va en sentido
contrario a la corrupción (mayor rendición de cuentas implica un menor nivel de
corrupción). El monopolio del burócrata va a estar determinado, principalmente, por
cuestiones estructurales.La discrecionalidad de los burócratas está constreñida por la
habilidad del principal de crear reglas claras y de supervisar a los agentes. La rendición de
cuentas va a depender de varias cosas, entre ellas la transparencia y la calidad de las
instituciones democráticas.

17
Si el principal está al frente de una dependencia gubernamental sus intereses, en teoría, son los intereses del
público.

29
Una representación de la relación principal-agente-cliente

Principal

Información
Reglas e
Incentivos Información

El Agente provee servicios al Cliente


(lícitamente, ilícitamente)
Cliente
Agente
El Cliente paga los servicios al
Agente (lícitamente, ilícitamente)

El principal contrata al agente que provee un servicio a él mismo (el principal) o a un


cliente. El agente tiene discrecionalidad sobre el servicio. El agente puede usar su poder
discrecional de manera ilícita para obtener una ganancia personal; esto posiblemente cause
daños al principal. La información sobre lo que hacen el cliente y el agente es asimétrica, y
además es costoso para el principal compensar esta asimetría.
Banfield (1975) menciona que la corrupción en el gobierno y en las empresas privadas
puede diferir, principalmente por diferencias estructurales. Como se mencionó
anteriormente, la corrupción es dañina, sin embargo, también se sabe que es costosa
combatirla; típicamente una empresa privada haría el mejor esfuerzo por balancear los
costos de combatirla con las posibles ganancias de que se reduzca la corrupción, mientras
que un institución gubernamental posiblemente no haga una evaluación pertinente de los
costos y beneficios, y consecuentemente no actúe eficientemente.

4.2 Oferta de actos corruptos


En el clásico análisis de Becker (1968), éste decía que dos de los principales factores que
determinaban la oferta de actos criminales—en este caso actos corruptos— son primero, la
probabilidad de ser sancionado y segundo, el monto de la sanción. La corrupción depende
negativamente de la probabilidad de ser sancionado y negativamente de la sanción. Claro
está, que hay otros factores que determinan si alguien entra a la corrupción. Por ejemplo, si
aumenta la disponibilidad de obtener ingresos legales, debido a la mayor calidad de la
educación, se reducirían los incentivos a entrar en actividades ilegales y por lo tanto se
reduciría el número de ofensas criminales. Es decir, el costo de oportunidad es también un

30
factor importante, al ser este costo menor son mayores los incentivos para entrar a la
corrupción.
Parece ser que de lo anterior se podría decir que la solución más simple y económica sería
simplemente aumentar la sanción. Sin embargo esto no es siempre cierto, pues pueden
ocurrir dos cosas. La primera es que el sobornado (en el caso del soborno) pida un mayor
soborno, para compensar por el aumento en costos, debido a la mayor sanción. Este monto
extra podría ser usado para corromper a las autoridades responsables de supervisar la
corrupción y así disminuir la probabilidad de ser sancionado. Lo segundo que puede pasar
es que la sanción, al ser tan alta, puede inducir a que la autoridad que aplique un menor
número de sanciones. Esto llevaría consecuentemente a una menor probabilidad de ser
sancionado al actor corrupto. Lo que entonces sería más eficaz para disuadir la corrupción
sería aumentar la probabilidad de sancionar a los actores corruptos. Sin embargo, aumentar
la probabilidad de que se sancioné a los actores corruptos es costoso; hay que considerar los
daños que causa la corrupción y los costos de reducirla para determinar la cantidad óptima
de crímenes, y así implementar las políticas eficientes.
Existen más factores que determinan el nivel de actos corruptos. Como ya se mencionó
anteriormente, el costo de oportunidad es un factor importante, pero también otro factor
importante sería los costos relacionados con la actividad corrupta. Por ejemplo, si un
burócrata puede falsificar un trámite a un menor costo que los demás, tiene una ventaja que
le crea incentivos a entrar (o permanecer) en la corrupción.
Van Rijckeghem y Weder (2001) encuentran evidencia de que bajos salarios en la
burocracia relativos a salarios en el sector privado, son un potencial para corrupción de bajo
nivel. Cuando no son pagados lo suficiente en el servio público, los burócratas se ven
orillados a entrar a la corrupción; los incentivos son mayores cuando la probabilidad de ser
atrapado es baja. La relación entre salarios y corrupción está relacionado con el costo de
oportunidad de los burócratas, pues si los salarios son altos y son sorprendidos en
actividades corruptas van a perder más que si sus salarios eran bajos.
Los ingresos de los actos corruptos también es un factor importante. Los ingresos dependen
en parte de los factores que menciona Klitgaard(1988): el monopolio del funcionario sobre
el servicio que ofrece, la discrecionalidad que tiene, y la rendición de cuentas (que ésta muy
ligado con la probabilidad de ser sancionado). Hay otros elementos que determinan los
ingresos de la corrupción. Ades y Di Tella (1999) dicen que si existe mayor posibilidad de
obtener rentas monopólicas o cuasi monopólicas, habrá una mayor disposición a pagar
sobornos, para obtener parte de esas rentas, y por lo tanto habrá mayor corrupción. Con este
razonamiento se explica por qué un país rico en recursos naturales, principalmente petróleo
y algunos minerales va a ser más propenso a la corrupción. Pues estas dotaciones con las
que cuenta la nación no son resultado de un proceso productivo, sino de un accidente
natural; muchos se disputarán las rentas procedentes de la comercialización de estos
recursos. Tendrán que pagar sobornos y a veces malversar fondos públicos, para obtener los
frutos de esos recursos.
Ades y Di Tella (1999) identifican tres factores que intervienen en la demanda por actos
corruptos. Primero, está las importaciones que tiene el país cómo porcentaje del PIB, el
argumento es que al ser esta razón mayor hay una mayor apertura al comercio internacional
y por consiguiente hay una mayor competencia y una menor posibilidad de obtener rentas
extra normales, por lo tanto habrá una menor disposición a pagar sobornos. Segundo, están
las exportaciones de minerales y combustibles. Mayor exportación de estos recursos
significa una mayor riqueza que muchos están dispuestos a disputarse. Luego está la

31
distancia entre los principales países exportadores, otra vez es una medida que mide la
protección de los productores domésticos.
Los factores anteriores están ligados con la demanda por actos corruptos, en especial con
los sobornos. Rose-Ackerman (1999) señala que las empresas ilegales buscan operar bajo
un marco de cierta seguridad, por lo que sobornan a jueces, policías y políticos, para que
estos pasen por alto sus actividades criminales. La disposición de los criminales por pagar
sobornos va a estar determinada por, primero, que tanta evidencia hay del comportamiento
criminal, y segundo, por los ingresos que generan estas actividades; en casos como el
narcotráfico los incentivos a pagar sobornos son enormes.
En el estudio de Cabelkova y Hanousek (2002) encuentran que la percepción de corrupción
está significativamente asociada con un mayor disposición a pagar sobornos. Entre más
corrupta perciba un individuo que sea una institución, tendrá una mayor disposición a pagar
un soborno. También encuentran que los empresarios tienen una mayor disposición a pagar
un soborno, debido en gran medida a que ellos pueden capitalizar los frutos de pagar un
soborno.
En varios estudios, entre los que destacan los de Treisman (2000) y Ades y Di Tella (1999),
se encuentra que la corrupción tiene una correlación negativo con el ingreso nacional. Es
decir, entre más rica sea una nación hay menores niveles de corrupción. Esto es congruente
con la idea de que los países pobre sean los que tienen mayores problemas de corrupción.
Esta relación puede explicarse, en parte, por el costo de oportunidad; si en un país se puede
obtener un ingreso decente en una actividad lícita es probable que menos gente este
dispuesta a entrar a la corrupción, mientras que si los ingresos son bajos habrá mayores
incentivos a entrar a actividades ilegales como el crimen y la corrupción.

32
5. Descripción de los Datos

5.1. Índices de Corrupción


Antes de explicar como fue construido el Índice de Corrupción y Buen Gobierno (ICBG)—
el índice de corrupción que analizamos en el capítulo 6—, se va a hacer una exposición de
los principales índices de corrupción, para así poder ver como se compara el Índice de
Corrupción y Buen Gobierno con los demás índices.
Los índices de corrupción se pueden dividir en dos tipos, los que utilizan información
objetiva y los que utilizan información subjetiva. Los primeros se basan en información
objetiva y verificable. Existe un problema con este tipo de índices, la poca validez que
tienen para medir la corrupción. Por ejemplo, en el segundo capítulo se presentó parte de
los resultados de la investigación de Morris (1991), donde se hace un análisis de los
reportes periodísticos sobre corrupción. Según la propia teoría de Morris, se podía observar
que los reportes periodísticos seguían el comportamiento de —lo que él denominaba— la
campaña anticorrupción, y no propiamente el de la corrupción. De igual manera, el número
de denuncias de corrupción o el número de búsquedas en Internet sobre corrupción no van a
ser medidas válidas de corrupción. El problema de los índices objetivos es que nunca van a
poder medir la corrupción per se, siempre algún aspecto relacionado con ésta, el cuál no
siempre va a tener el mismo comportamiento que la corrupción. Por ejemplo, el número de
denuncias de corrupción posiblemente va a aumentar si lo hace el nivel de corrupción, pero
también va a aumentar si hay una mejora en el sistema judicial.
El problema se origina en la imposibilidad de medir la corrupción directamente; con los
índices objetivos se intenta medir la corrupción usando otras variables objetivas. Pero,
como se mencionó anteriormente cambios en estas variables objetivas pueden ser
explicados en parte por cambios en el nivel de corrupción, y en parte por cambios en otras
variables relevantes. Por lo tanto, es posible que ocurra un cambio en el índice objetivo de
corrupción, no obstante, el nivel de corrupción permanece inalterado.
Como los índices de corrupción objetivos carecen de validez, el estudio empírico sobre la
corrupción se ha concentrado en índices subjetivos de corrupción. Éstos se basan en
estudios o encuestas en donde los individuos son interrogados acerca del nivel de
corrupción. Los encuestados son típicamente un panel de expertos regionales, una muestra
aleatoria de habitantes locales o empresarios. Sin embargo, para profundizar el análisis de
este tipo de índices es necesario ver que características queramos que cumplan. Según Del
Castillo (2002) un buen índice de corrupción debe ser:

• Confiable. Si el indicador está basado en la opinión personal de una o pocas


personas, es probable que sea menos creíble y por lo mismo menos útil. Lo
mismo pasa si las personas responsables de construir el índice tienen intereses
en alterar los resultados.
• Válido. Debe medir lo que nos interesa. Por ejemplo, si estamos interesados en
estudiar la corrupción en general, medir el número de sentencias por motivo de
corrupción reflejaría más la eficacia de las instituciones judiciales que el nivel
de corrupción actual.
• Exacto. Si el índice es propenso a tener errores grandes en su medición va a ser
menos útil. La inexactitud debe ser cuantificada mediante la desviación
estándar. Para mejorar la exactitud al hacer encuestas se debe aumentar el
número de la muestra.

33
• Preciso. Una cantidad es precisa cuando existe un consenso sobre lo que ésta
mide, y es imprecisa o ambigua cuando hay diferentes opiniones en cuanto a lo
que ésta midiendo. La precisión es alcanzada en las encuestas mediante
preguntas que no dependen de estándares individuales.

Los índices objetivos de corrupción cumplen normalmente con sólo tres aspectos:
confiabilidad, exactitud y precisión; el único requisito que no cumplen es la validez, lo que
los descalifica como buenos índices. Las medidas subjetivas se subdividen de acuerdo a si
captan la percepción o la experiencia de los encuestados. Las características que van a tener
los índices van a depender de si son de percepción o de experiencias.
Mucha de la investigación reciente sobre corrupción se ha enfocado en medidas basadas en
percepción de corrupción. Estas se basan en encuestas, donde preguntan sobre la
percepción de los individuos de la corrupción nacional. Son típicamente válidas y
confiables, pero pueden ser inexactas e imprecisas. Un importante rama de medidas basadas
en percepción son elaboradas por compañías que calculan y asesoran el riesgo, como el
Economist Intelligence Unit (EIU). Proveen información en aspectos relacionados con el
ambiente empresarial, incluyendo governancia y corrupción. Aunque la información que
proveen es primeramente para uso comercial, la investigación empírica reciente sobre
governancia, incluyendo la corrupción, ha utilizado extensivamente estos índices.
Ventajas clave de este tipo de índice son la confiabilidad y el poder comparar entre países.
No obstante, hay varios problemas asociados con la exactitud de los índices basados en
percepción. Primero, es probable que las percepciones sobre la corrupción general dentro
de un país estén rezagadas, en otras palabras que no reflejen su nivel actual, lo que hace que
el índice tenga poca sensibilidad a los cambios en las políticas. Otro problema es que los
índices de percepción pueden ser endógenos. Por ejemplo, la publicación y difusión de un
índice en los medios puede influir en la percepción de la gente sobre la corrupción en su
país. En el estudio de Cabelkova y Hanousek (2002) sobre la disposición a pagar sobornos
en Ucrania, encuentran distintos factores que afectan la disposición a pagar sobornos. Un
resultado importante de su estudio, es que entra más contacto tenga con una institución, un
individuo va a percibirla como más corrupta. Los medios también afectan la percepción de
corrupción; en el estudio de Ucrania se vio que la gente que obtenía su información de
corrupción sobre la prensa escrita y la televisión percibe como menos corruptas las
instituciones que los demás, mientras que los obtienen su información del radio perciben
como más corruptas las instituciones. Los medios no sólo afectan la percepción general de
la corrupción, sino propician que se le otorgue un mayor peso a los escándalos muy
publicitados en comparación a casos de sobornos de la vida cotidiana: existe un sesgo por
irse a los casos que aparecen en los titulares. En el segundo capítulo se mostró que, según la
encuesta de corrupción y buen gobierno, los mexicanos consideran que hay más corrupción
en los niveles altos de gobierno, precisamente los que tienen mayor exposición por parte de
los medios. También está el caso del índice de Pagos de Sobornos, en el que Transparencia
Internacional preguntó a los líderes empresariales cuáles eran sus principales fuentes en
cuanto a corrupción, competencia desleal y tratados anticorrupción. “La Prensa” fue la
respuesta preferida con un 79%, “Experiencia personal” fue a penas la tercera con un 59%.

5.1.1. El Índice de Percepción de Corrupción (IPC)


Tal vez el índice de percepción más difundido es el de Transparencia Internacional, el
Índice de Percepción de Corrupción (IPC). El IPC es un índice compuesto, un índice

34
construido a partir de varias encuestas. Éste es el indicador cuantitativo más amplio, en
cuanto a países, y asequible sobre corrupción. El índice es elaborado por un equipo de
investigadores de la universidad de Gotinga. El IPC determina el grado en que,
supuestamente, los servidores públicos y los políticos aceptan sobornos, reciben pagos
ilícitos, desfalcan fondos públicos y cometen delitos similares. El IPC va de cero a diez,
cero siendo el más corrupto y diez el más honesto (menos corrupto).
La información que compone este índicepuede tener una antigüedad hasta de tres años. Esto
asegura cierta estabilidad en el índice, pues un dato aberrante en un solo año no va a afectar
plenamente el IPC. Asimismo, usar información con antigüedad de hasta tres años
proporciona más datos de donde construir el índice.

5.1.1.1. Validez del IPC


El IPC del 2001 incluye noventa y un países. Se basa en catorce distintas encuestas y
estudios conducidos por siete organizaciones independientes, no por Transparencia
Internacional.18 Ninguno de estos estudios tratan únicamente con corrupción, incluyen una
serie de asuntos relevantes para el desarrollo y la confianza de los empresarios.
Transparencia Internacional, sin embargo, usa sólo los datos sobre corrupción. La mayoría
de estos índices se basan sobre preguntas generales y vagas del nivel o frecuencia de la
corrupción percibida por expertos o administradores de empresas. Cerca de la mitad están
basadas en opiniones expertas con mecanismos para asegurar consistencia a través de los
países. La otra mitad está principalmente basada en cuestionarios enviados a gerentes de
nivel medio y alto de empresas locales o internacionales.
La definición de corrupción no es la misma entre los diferentes estudios. Aquí entra el
primer problema de validez, pues la definición no es homogénea. Otro problema de validez
es el ver la corrupción como un problema general, pues se impone un modelo común en
casos y sociedades divergentes. Hasta cierto punto el modelo que se impone es el soborno.
Varios de los componentes del IPC preguntan específicamente sobre cual es el alcance de
los sobornos. Tal vez, el soborno es la principal forma de corrupción en los negocios
internacionales, y tal vez, es lo que la mayoría piensan cuando se les habla sobre
corrupción. Sin embargo, el soborno sólo es un tipo de corrupción.
Surgen problemas al usar el enfoque de tomar percepciones cómo una medida operable. Es
importante recordar que las percepciones no son lo mismo que la corrupción. Pueden
reflejar la apertura sobre el tema, en vez de su verdadero alcance. Las dos pueden variar
considerablemente. Las percepciones pueden reflejar impresiones generales o expectativas
éticas en vez del conocimiento de la corrupción cómo tal. Lo que aparenta ser corrupción
puede en realidad ser propiciada por escándalos entre facciones contrarias (Rose-Ackerman
1999). Algunos juicios personales pueden reflejar choques culturales o limitaciones en el
lenguaje.
La validez y confiabilidad del IPC son probablemente buenas, puesto que Transparencia
Internacional escoge cuidadosamente a componentes validos y confiables. La confiabilidad
de los índices puede empeorar a través del tiempo. Cuando el índice se vuelve más
difundido, existe el peligro de que la respuesta de los encuestados se vea afectado por el

18
Las siete organizaciones son: World Economic Forum, World Business Environment Survey of the World
Bank, Institute of Management Development, Princewaterhouse Coopers, Political and Economic Risk
Consultancy, Economic Intelligence Unit, y Freedom House.

35
último índice en vez de depender más en su experiencia. La construcción del índice se
puede volver una referencia en si misma, o las medidas pueden volverse endógenas al
índice mismo.

5.1.1.2. Exactitud del IPC


La exactitud es el punto fuerte del IPC. La combinación de distintas fuentes de información
reduce la posibilidad de malinterpretar las respuestas de países. Los estudios abarcan
distintos países, cada país incluido en el IPC no es necesariamente cubierto por las siete
fuentes. Para ser incluido en el índice, un país debe ser cubierto por tres fuentes de tres
instituciones distintas. Los datos del estudio deben reflejar condiciones actuales y no tener
más de tres años de antigüedad. Con esto, los datos reflejan las opiniones de miles de
individuos que se enfrentan a la corrupción en distintas maneras en un rango de países, y
son recabados de maneras diferentes.
El IPC, además es consistente a través del tiempo. Sin embargo, el IPC parece no ser tan
sensible a cambios en el tiempo. Los niveles de corrupción son susceptibles al cambio,
aunque sea gradual, y a cambiar de distintas maneras de un país al siguiente. El IPC debería
reflejar estos cambios. Nueve de los diecisiete componentes del IPC de 1999 son en
realidad tres estudios hechos de la misma (o casi igual) manera en tres distintos años (1997,
1998, y 1999). Este método aún cuando protege al índice de ser sesgado por escándalos,
puede magnificar los errores y sesgos de los estudios en particular. Por lo mismo, este
método mengua la sensibilidad del IPC a cambios reales. La comparación es otro problema.
El número de encuestas no es el mismo para todos los países, en unos puede ser elaborado
con tres y otros con catorce, esto inevitablemente lleva a problemas de sesgo en el índice.

5.1.1.3. Precisión del IPC


La precisión del IPC e índices similares es difícil de evaluar. El IPC supone que la
corrupción es unidimensional. No obstante, la corrupción no es unidimensional, es
multifacética; incluye el desfalco, el soborno y la extorsión. El IPC no hace una distinción
entre estos tipos de comportamiento. Además, hay varias maneras en que se organiza la
corrupción, cómo se gastan los ingresos corruptos, etc. Estas variaciones son susceptibles
de producir diferentes resultados económicos. Lo que el índice muestra, es cómo la
corrupción sistemática es percibida por los informantes.
Dado que el IPC se basa en percepciones, no revela el verdadero alcance de la corrupción
en un país. No es obvio que escala debe usar cualquier medida de corrupción. Mientras que
las distintas medidas que conforman el IPC contribuyen a su exactitud, estos dan resultados
expresados de distintas maneras. Algunos producen resultados de que tan corrupta es la
sociedad cómo un todo, mientras que otros tratan con funciones o ramas particulares del
gobierno.
Otro problema es las escalas que usan los estudios. Algunos se basan en escalas absolutas,
mientras que otras son comparaciones ordinales (juicios sobre si el país X es más corrupto
que otros, o hay “muchos”, “pocos”, o “no hay” casos de corrupción entre unos burócratas
en particular). Tamaños de muestras, rangos, y distribuciones varían considerablemente, y
por lo tanto las distribuciones de las muestras y sus errores estándar son susceptibles de ser
distintos. Interpretar que los datos son comparables, inevitablemente produce resultados
moldeados por los supuestos del estadista al igual que los percepciones o eventos actuales.
Un resultado específico de estas dificultades es que el IPC, aunque lo tratemos cómo una

36
razón o un intervalo, las diferencias entre valores no son consistentes –por ejemplo, la
diferencia entre 5.0 y 6.0 en comparación a 8.4 y 9.4.
Relacionado con esto está si aplican las medidas para diferentes países. Idealmente
tendríamos el mismo número grande de medidas de corrupción para cada país, pero no es
así. Los arquitectos del IPC piden cómo mínimo tres estudios de corrupción antes de que un
país pueda ser incluido –un enfoque que minimiza el error que resulté de depender de uno o
dos índices, pero la información faltante no es distribuida aleatoriamente. Países con
governancia e instituciones pobres tienden a tener las menos escalas. Por lo tanto, los que
tienen mayor corrupción también tienen menos datos, mientras otros un poco mejores,
donde existen al menos algunos estudios, pueden ser erróneamente vistos cómo las
sociedades más corruptas.
La precisión es cuestionable, pues a la hora de cuantificar hay distintos métodos y no un
criterio uniforme, los componentes del IPC frecuentemente no miden la misma cosa. No es
claro que significa exactamente una puntuación de 5, por ejemplo. Los componentes
mismos son imprecisos con frecuencia. Además, el tipo de datos usados para crear el IPC
varía bastante de un año a otro.
Las diferencias en la construcción de los componentes representa otro tipo de problemas.
Por ejemplo, si tomamos que “frecuente” es la segunda respuesta más alta de seis posibles
en una encuesta, y la segunda más alta cuatro de otra. Si suponemos que el significado de
“frecuente” es el mismo en las dos encuestas, es erróneo asignar un valor de 5/6 en un caso
y 3/4 en otro.

5.2. Problemas en la investigación empírica


En el trabajo de Mauro (1995) se encuentra que hay un efecto significativo de la corrupción
en la inversión, sin embargo, no se puede comprobar que la corrupción afecte directamente
al crecimiento económico. Por lo que concluye que el único efecto de la corrupción sobre el
crecimiento viene por su repercusión en la inversión. Sin embargo, Del Castillo (2002)
encuentra que la inversión se relaciona mejor con índices de percepción de corrupción y el
crecimiento económicos con índices de experiencia sobre corrupción. Esto demuestra la
investigación sobre las consecuencias de la corrupción tiene limitantes cuando se usan
índices de percepción.
Algo que cabe notar del estudio de Mauro, es que el índice de corrupción que utiliza, de
Business International, tiene un efecto sobre la inversión, no sólo porque tiene un sustento
teórico, sino porque esos mismo datos que utilizó fueron usados por empresarios y agencias
especializadas, que pudieron afectar las decisiones de inversión tomando en cuenta los
índices de Business International.
Cuando Mauro empezó a hacer su estudio, se topó con un problema, los nueve indicadores
de Business International son positivos y significativamente correlacionados. A la hora de
hacer el análisis econométrico existen problemas de multicolinealidad si se escogen todos
los índices, entonces, ¿cuál factor es crucial? Mauro resuelve este problema creando índices
compuestos. Crea un índice compuesto de eficiencia burocrática promediando los índices
de sistema judicial, tramitología (red tape), y corrupción. Considera que éste índice mide
mejor la corrupción que el mismo índice de corrupción. Hay otro índice compuesto, el de
eficiencia institucional, que incluye los nueve índices, este también es usado en sus
regresiones. Este último índice toma en cuenta factores de estabilidad política.
Cuando se investigan las costos de los corrupción, es necesario tener un buen índice de
corrupción. Si se sabe exactamente que está midiendo, no surgen confusiones y

37
malentendidos en la interpretación de los resultados econométricos. Sin embargo, si el
índice no sólo mide la corrupción, sino también la estabilidad política, la calidad del
sistema judicial y de la burocracia en general, no se está midiendo exclusivamente el efecto
de la corrupción. Es posible, entonces, que un estudio que utilice un índice con mayor
validez y precisión arroje resultados distintos.

5.2.1. Índices basados en experiencias


Esta clase de indicadores se basa en experiencias subjetivas acerca de la corrupción. Su
validez y precisión depende de las preguntas que se hagan, y su confiabilidad y exactitud de
la implementación del estudio. En general, estos indicadores tienen un gran potencial para
hacer comparaciones.
Se evitan algunos de los problemas relacionados con los índices de percepción. La
experiencia no está rezagada con en el nivel actual de corrupción cómo ocurre con las
percepciones, y no se deja sesgar por el efecto de la corrupción en los titulares. Pero al
igual que los índices de percepción, los índices de experiencia son a veces dañados por
preguntas imprecisas. Repuestas a preguntas cómo: “En una escala del 1 al 10, ¿qué tan
seguido a tenido que pagar un soborno a un burócrata?” dependen de juicios individuales de
que significa seguido y la frecuencia del soborno. No obstante, preguntar sobre
experiencias debería incrementar la exactitud en comparación con los índices de
percepción.
Pueden existir diferencias culturales o lingüísticas entre países que llevan a los encuestados
a sistemáticamente sobre o subestimar el nivel de corrupción en su respectivo país en
comparación a los otros.
Una de las preguntas del 1999 Business Environment and Enterprise Performance Survey
(BEEPS) fue, “En promedio, ¿que porcentaje de las ventas de su empresa típicamente paga
por año por concepto de pagos ilícitos a los burócratas?” Sólo empresas que tuvieron una
respuesta positiva a un pregunta anterior sobre si habían pagado sobornos, les fue
preguntado esto. Los encuestados tuvieron que escoger de las siguientes respuestas: “0%”,
“menos del 1%”, “1-1.99%”, “2-9.99%”, “10-12%”, “13-25%”, “más del 25%”. A los
encuestados les fue preguntado que proporción de los sobornos totales era gastada en una
lista de servicios gubernamentales. Lo anterior es un claro ejemplo de una pobre elección
de opciones a responder. La exactitud de los resultados es dañada por la irregularidad de los
intervalos. La última categoría en particular es extremadamente desinformativa.
Proyectos cómo el BEEPS son increíblemente caros, incluyen más variedad de prácticas
corruptas, pero siguen tomando el punto de vista de los empresarios. Una serie de esfuerzo
se ha hecho para mejorar la calidad de las medidas de corrupción. Sin embargo, el
verdadero reto para la siguiente etapa de investigación sobre corrupción no es sólo mejorar
la medición, sino construir un mejor entendimiento del fenómeno, y demostrar porque el
entendimiento es esencial.

5.3. El Índice de Corrupción y Buen Gobierno (ICBG)


El índice de corrupción utilizado en el análisis econométrico de esta tesis es el Índice de
Corrupción y Buen Gobierno (ICBG), un índice que mide la corrupción a nivel estatal en
México. Este índice fue elaborado por Transparencia Mexicana, el capítulo mexicano de
Transparencia Internacional. La información fue recabada mediante una encuesta que fue
levantada entre junio y julio del 2001, esta encuesta —la encuesta de corrupción y buen
gobierno— registra la corrupción en servicio públicos ofrecidos por tres niveles de

38
gobierno y por particulares. En la encuesta se pregunta sobre los servicios más relevantes
(en el pago de mordidas). Después de realizar pruebas de campo y grupos de enfoque se
seleccionaron treinta y ocho servicios que fueron, finalmente, incluidos dentro del estudio.
La muestra fue estrictamente probabilística de 13,790 entrevistas a nivel nacional. El
tamaño de la muestra fue suficiente para desagregar resultados a nivel de entidad federativa
(entre 388 y 506 cuestionarios). El ICBG se calculó a partir de los datos proporcionados por
los jefes de hogar que utilizaron el servicio. Los actos de corrupción fueron registrados
cuando el entrevistado declaró haber pagado mordida a cambio de un servicio público. Para
medir las experiencias con distintos servicios se preguntó con base en la temporalidad con
la que se realizan cada uno de ellos. El ICBG utiliza una escala que va de un 0 a 100. A
menor valor menor corrupción.

Fórmula para calcular el ICBG por servicio:

Número de veces en los que un servicio se obtuvo con mordida


ICBGs = x 100
Número total de veces en los que se utilizó el servicio

Fórmula para calcular el ICBG general (38 servicios)

Número de veces en las que se dio mordida en los 38 servicios


ICBGg = x 100
Número total de veces que se utilizaron los 38 servicios

Los 38 servicios que identificó Transparencia Mexicana son:

• Trámite de predial.
• Trámite para obtener una incapacidad o justificante de salud.
• Trámite relacionado con el servicio telefónico.
• Trámite para la conexión o reconexión de gas a domicilio.
• Trámite para la conexión de teléfono.
• Trámite fiscal en la Secretaría de Hacienda: RFC, devolución, declaración trimestral o
anual.
• Visitar a un paciente en un hospital fuera de los horarios permitidos.
• Recibir correspondencia.
• Trámite para obtener una ficha de inscripción a una escuela oficial.
• Trámite para obtener la cartilla militar / Exentar el servicio militar.
• Arreglar que se atendiera urgentemente a un paciente o que éste ingresara antes de lo
programado en una clínica.
• Trámite para obtener constancias de estudios o exámenes en escuelas públicas.
• Trámite para obtener un crédito o préstamo en efectivo para su casa, negocio o automóvil
en instituciones privadas.
• Trámite para recibir apoyo o incorporarse a programas del gobierno como PROGRESA,
PROCAMPO, leche, etc.
• Trámite para obtener o acelerar el pasaporte en el Secretaría de Relaciones Exteriores.
• Trámite para la introducción o regularización de servicios: agua, drenaje, alumbrado,
pavimento, mantenimiento de parques y jardines, etc.

39
• Trámite para obtener un crédito o préstamo en efectivo para casa, negocio o automóvil en
instituciones públicas como el INFONAVIT.
• Obtener el servicio de vigilancia de la delegación o municipio.
• Trámite para obtener o acelerar actas de nacimiento, defunción, matrimonio o divorcio en
el registro civil.
• Trámite para obtener una licencia o permiso de uso de suelo.
• Trámite para la conexión o reconexión de luz a domicilio.
• Trámite para la conexión / reconexión de agua y/o drenaje a domicilio.
• Regularizar cualquier Trámite de su vehículo (cambio de dueño etc.).
• Obtener agua en pipa de la delegación o municipio.
• Trámite para obtener el servicio de poda de árboles.
• Trámite para obtener la licencia para conducir.
• Trámite para aprobar la verificación vehicular.
• Trámite para llevar o presentar un caso en un juzgado.
• Trámite para obtener una licencia o permiso de demolición, construcción o alineamiento y
número oficial.
• Trámite para trabajar o vender en vía pública.
• Trámite para obtener el servicio de limpieza de alcantarilla (desazolve).
• Pedir al camión de la delegación o municipio que se lleve la basura.
• Trámite para evitar la detención en el Ministerio Público / realizar una denuncia, acusación
o levantar un acta / lograr que se le dé seguimiento a un caso.
• Trámite para pasar sus cosas en alguna aduana, retén, garita o puerto fronterizo.
• Trámite para recuperar su automóvil robado.
• Evitar ser infraccionado o detenido por un agente de tránsito.
• Estacionar un automóvil en la vía pública en lugares controlados por personas
que se apropian de ellos.
• Evitar que un agente de tránsito se llevara un automóvil al corralón / sacar
un automóvil del corralón.

5.3.1. Validez del ICBG


Primero hay que ver que hay treinta y nueve índices, treinta y ocho por servicio y uno
agregado. Cada uno está claramente explicado por las fórmulas presentadas anteriormente.
Nos miden el porcentaje de veces en que hay que pagar un soborno en un determinado
servicio, o en cualquiera de los treinta y ocho. Hay que tener en cuenta que mide, este
índice no capta todos los tipos de corrupción, capta únicamente el soborno y la extorsión19.
Ni siquiera entran todos los ámbitos del soborno, pues estos treinta y ocho servicios son de
la vida cotidiana, los que normalmente utiliza un ciudadano común; sobornos en contratos
públicos o los sobornos que pagan los criminales —entre ellos los narcotraficantes— a
jueces, policías y al ejercito no son contemplados en este estudio.
Las encuestas fueron diseñadas igual para todos los estados, y el estudio fue hecho nada
más en la república mexicana; prácticamente no hay problemas para comparar los índices
entre estados. El diseño de la muestra, la logística de campo y los instrumentos de medición

19
En realidad no se hace distinción entre el soborno y la extorsión, sólo se toma en cuenta el acto corrupto
cuando se paga una mordida.

40
fueron los mismos para todas las entidades federativas y para los treinta y ocho servicios.
Además, este estudio no fue hecho con fines comerciales (para medir la corrupción como
un factor de riesgo empresarial), sino para aumentar la información disponible sobre
corrupción y así ayudar a la investigación empírica sobre ésta. Una ventaja de este índice es
que nada más toma en cuenta la experiencia si efectivamente se utilizó el servicio.
El ICBG es también confiable pues fue diseñado por Transparencia Mexicana20. Puede ser
tan confiable cómo otras encuestas que utiliza Transparencia Internacional. A cada
encuestado se le comenta que la encuesta es sobre corrupción y se le pregunta también
sobre las percepciones que tiene de corrupción.

5.3.2. Exactitud del ICBG


Se hicieron entre 388 y 506 encuestas por entidad federativa. Fueron suficientes para
construir los índices por servicio y el agregado en una primera etapa. Sin embargo, como ya
se mencionó, faltaron observaciones, en total 218 (en promedio 5.7 por servicio). Inclusive
en los rubros en que la corrupción fue muy alta, faltaron algunas observaciones. Se puede
mejorar el siguiente estudio sobre corrupción, ampliando la muestra por estado,
particularmente en aquellos estados que reportan bajos niveles de corrupción. Por lo tanto,
para obtener una mayor exactutud en estudios subsecuentes es necesario aumentar el la
muestra por estado.

5.3.3. Precisión del ICBG


Aunque se recaben datos sobre percepción de corrupción, el índice se basa únicamente en
la información sobre las experiencias de corrupción. Se pregunta si se usó el servicio, si el
encuestado contesta que no, se pasa al siguiente servicio, si contesta qué sí, se pregunta si
pagó mordida y se anotan algunos datos adicionales: a quién le pagó, cuántas veces y
cuánto pagó. La ventaja de este índice es que sólo toma en cuenta a los que utilizan el
servicio, ¿cómo puede saber alguien cuantas veces hay que pagar mordida por el servicio
de poda de árboles, si nunca ha utilizado el servicio?
Otra ventaja es que el índice no mide cuantas veces se pagó mordida , sino el porcentaje de
veces hay que pagar mordida por servicio. Esto facilita el estudio pues las razones tienen
mayor validez en el manejo estadístico. Además, los treinta y ocho servicios fueron
identificados mediante grupos de enfoque y trabajo de campo. Estos son los principales
servicios en que se da el pago de mordidas. Son servicios que se encuentran a lo largo de
toda la república y están claramente especificados, por lo que no hay duda a que se está
refiriendo la encuesta.

5.4. Índice de Dispersión


Cuando este trabajo estaba en su etapa inicial, se notó que el estado de Guerrero tenía un
índice superior a lo que pueden explicar sus otras variables. Guerrero es uno de los estados
más pobres de México en términos de PIB per cápita, sin embargo también se distingue por
ser uno de los estados con mayor población indígena, es uno de los estados con mayor
dispersión étnica.
Mauro (1995) utiliza un índice de fraccionamiento etnolingüístico cómo una variable
instrumental de la corrupción (una variable instrumental es una variable que está muy

20
Las empresas seleccionadas para realizar el trabajo de campo fueron: Grupo de Asesores Unidos
(GAUSSC), Pearson, Pulso Mercadológico, y Estadística Aplicada como supervisora externa de las tres.

41
correlacionada con la variable explicativa, pero no tanto con la dependiente; esta se usa
para evitar problemas de endogeneidad en la regresión). Este índice de fraccionamiento,
que usó Mauro, está altamente correlacionado con la corrupción y otras variables
institucionales. Él supone que es exógeno a variables económicas y a la eficiencia
institucional. El uso de este índice da como resultado una mayor magnitud del efecto de la
corrupción en sus regresiones.
Por eso tomamos la dispersión, medida por el índice de fraccionamiento etnolingüístico,
cómo uno de los factores que propician la corrupción. Mauro explica la relevancia de este
índice: el conflicto étnico lleva a inestabilidad política qué está relacionado con la
corrupción. Además la presencia de muchos grupos etnolingüísticos es asociada con mayor
corrupción, pues los burócratas discriminan a los individuos de otros grupos con tal de
favorecer al suyo.
Para este trabajo se construyó un índice de dispersión estatal para ver su efecto en el índice
de corrupción estatal. Para medir la dispersión étnica en los estados se uso el índice de
fraccionamiento etnolingüístico. La fórmula es tomada de Mauro (1995)21.
n 2
 si 
FEL = 1− ∑
 
i =1 S

n es el número de grupos etnolingüísticos


si es el número de personas que pertenecen al grupo i
S es el total de personas dentro de la entidad federativa

Esta fórmula nos dice la probabilidad de que dos personas, tomadas aleatoriamente de la
población total, pertenezcan a dos grupos etnolingüísticos diferentes. Va de cero a 1. Cero
significa que la población está concentrada en un solo grupo, por lo tanto la dispersión es
mínima. 1 significa que la población está totalmente dispersa (la máxima dispersión), para
que el índice llegará a 1 habría un número infinito de grupos etnolingüísticos y existiría una
sola persona por grupo.
Este índice fue construido con los datos sobre los indígenas en México. En el censo del
2000 el INEGI identifica ochenta y cinco grupos indígenas y existen otras tres
clasificaciones: otra lengua indígena de México, otra lengua indígena de América y No
Especificado. En otras palabras hay ochenta y ocho distintas clasificaciones para los
indígenas y si incluimos la población “no indígena” (la población total del estado menos la
población indígena del estado) hay ochenta y nueve grupos.
El INEGI clasifica a los indígenas según la lengua que hablan. Valdés (1995) considera que
éste es precisamente el indicador más certero para identificar a los grupos étnicos de origen
prehispánico. La lengua indígena ha sido la única variable que ha permanecido a través de
los años. La cantidad de lenguas que se han captado, a través de los censos, ha variado, sin
embargo ello no implica que las lenguas desaparezcan, sino que ha habido fallas censales
que explican su ausencia. Por lo tanto, la actualización de la información censal, a nivel
municipal, es la única fuente que nos permite estimar la población indígena de México e
identificar sus características socioeconómicas.

21
Originalmente es de Taylor y Hudson, World handbook of Political and Social Indicators, 1972.

42
Cuadro 5.1 Listado de los grupos indígenas
Aguacateco Kikapú Popoluca de la Sierra
Amuzgo Kiliwa Popoluca de Oluta
Cakchiquel Kumiai Purépecha
Cochimi Lacandón Quiché
Cora Mame Seri
Cucapá Matlatzinca Solteco
Cuicateco Maya Tacuate
Chatino Mayo Tarahumara
Chichimeca Jonaz Mazahua Tepehua
Chinanteco Mazateco Tepehuán
Chinanteco de Lalana Mixe Tlapaneco
Chinanteco de Ojitlán Mixteco Tojolabal
Chinanteco de Petlapa Mixteco de la Costa Totonaca
Chinanteco de Usila Mixteco de la Mixteca Alta Triqui
Chinanteco de Valle Nacional Mixteco de la Mixteca Baja Tzeltal
Chocho Mixteco de la Zona Mazateca Tzotzil
Chol Mixteco de Puebla Yaqui
Chontal Motocintleco Zapoteco
Chontal de Oaxaca Náhuatl Zapoteco de Cuixtla
Chontal de Tabasco Ocuilteco Zapoteco de Ixtlán
Chuj Ópata Zapoteco del Istmo
Guarijio Otomí Zapoteco del Rincón
Huasteco Paipai Zapoteco Sureño
Huave Pame Zapoteco Vallista
Huichol Papabuco Zapoteco Vijano
Ixcateco Pápago Zoque
Ixil Pima Otras lenguas indígenas de México
Jacalteco Popoloca Otras lenguas indígenas de América
Kanjobal Popoluca No especificado
Kekchi
Fuente: INEGI, censo del 2000.

Para la elaboración del índice se clasificaron los ochenta y nueve grupos ya mencionados
anteriormente. Dentro de las tres últimas clasificaciones de lenguas indígenas—otras
lenguas indígenas de México, otras lenguas indígenas de América y No Especificado— es
claro que estas clasificaciones incluyen cada una, una o más lenguas indígenas. Los
indígenas que pertenecen a alguna de estas tres clasificaciones representan apenas un 1.5%
del total de los indígenas. Como estas tres clasificaciones representan cada una más de un
grupo, y además en conjunto son un pequeño porcentaje de la población indígena nacional,
se podría argumentar que su inclusión en la construcción del índice de dispersión no es
necesaria. No obstante, hay veces, en que representan un gran porcentaje de la población
indígena estatal, por ejemplo en Guanajuato el 47.4% de los indígenas pertenecen a la
categoría “No Especificado”, por lo tanto no incluirlo sería un error. El único supuesto que
se hace, es que dentro de un estado cada una de estas tres clasificaciones contiene a un solo
grupo indígena.
Se elaboró un índice con los ochenta y nueve grupos. Sin embargo para el estado de
Yucatán el grupo de los Maya representa el 99.6% de la población indígena del estado y
33% de la población total. Existen otros grupos cómo el Mixteco y Zapoteco que son

43
importantes (por el número de indígenas), pero tienen varias subdivisiones, por lo tanto no
acumulan un porcentaje tan amplio. Para contrarrestar la excesiva importancia del grupo
Maya en Yucatán, se elaboró un segundo índice de dispersión que únicamente toma en
cuenta a los indígenas que no hablan español y el último grupo es la población total del
estado menos el número de indígenas que no sabe hablar español. El coeficiente de
correlación entre este índices y el anterior es de .85.
También se construyeron dos índices adicionales, con el único propósito de ver si es
relevante distinguir entre los distintos grupos indígenas o simplemente se puede hacer el
análisis tomando a los indígenas cómo un sólo grupo. El tercer índice divide a la población
en dos: indígenas y no indígenas; este índice es similar al primero, la única diferencia es
que este divide en dos grupos y el primero en ochenta y nueve. El cuarto índice hace la
división entre los que no hablan español (indígenas) y los que sí hablan español (indígenas
y no indígenas), éste es análogo al segundo índice.
El tercer índice y el primero tienen un coeficiente de correlación de .9962 y el coeficiente
de correlación entre el segundo índice y el cuarto es de .9999. Cómo se puede ver por estos
dos coeficientes es más importante el peso relativo del grupo indígena con respecto al
grupo no indígena que la dispersión entre los distintos grupos indígenas.
Para la construcción de estos índices de dispersión se puso el énfasis en los grupos
indígenas. No se incluyo algún otro grupo étnico, sólo se identificó un bloque no indígena.
Por esto mismo, el argumento de que la dispersión propicia la corrupción sería explicado
por una debilidad relativa en la posición social de los indígenas. Esto dentro de nuestro
análisis podría verse reflejado en un abuso mayor por parte de las autoridades al demandar
más sobornos. El sobornado o extorsionador podría aprovechar de la ignorancia o menor
poder social o legal del indígena para pedir un soborno. Este abuso no sólo podría ser
explicado por la débil posición en la estructura social, sino también por no hablar español o
hablarlo sólo de manera parcial, pues esto le da al individuo una posición desventajosa en
cualquier trámite burocrático.

5.5. Datos sobre desempeño jurídico


Cómo se vio en el capítulo anterior, uno de los factores importantes que determinan si el
agente comete un acto corrupto es la probabilidad de ser sancionado. Una medida que
podría aproximar ésta probabilidad es un índice de desempeño jurídico. Los índices de
desempeño jurídico fueron tomados de un estudio del ITAM y el despacho Gaxiola Moraila
y asociados22. Este estudio tenía cómo objetivo medir la eficacia, tanto de los sistemas
locales de justicia y las instituciones que los auxilian, cómo de los servicios que prestan los
poderes ejecutivos de las entidades federativas, relacionados con la administración de
justicia. Los índice fueron construidos con información solicitada a los presidentes de los
tribunales de justicia, y visitas de apreciación a los tribunales locales y a los registros
públicos de la propiedad por parte del ITAM. Todos los índices tienen la misma escala, van
de cero a 5, cinco es la máximo en calidad y cero es lo mínimo.
El índice relevante en nuestro estudio fue el de la “Condición General de los Juzgados”,
que en esta tesis es llamado “variable jurídica”. Esta variable mide las condiciones
materiales de los juzgados. Toma en cuenta cosas características observables, como el
espacio físico, la iluminación, el sistema de consultas, el número de empleados asignados a
los juzgados, etc. Para que un juzgado trabaje con eficiencia y rapidez, es necesario que

22
El estudio fue publicado en la revista Este País número 137, de agosto de 2002.

44
disponga de recursos informativos, soporte técnico de profesionales especializados en
informática, instalaciones y mobiliario adecuado.
La información para este índice fue recabada mediante entrevistas a un grupo de cinco
abogados por entidad. Cada abogado fue escogido por su trayectoria y experiencia, son
considerados expertos. Además, se realizaron visitas por parte del los investigadores del
ITAM a las 32 entidades federativas, donde visitaron un juzgado escogido aleatoriamente y
evaluaron sus características.
Los autores mencionan que, a pesar de que el estudio fue hecho para evaluar al sistema
judicial en asuntos mercantiles, muchos de los índices que calcularon engloban todas los
asuntos que enfrentan los juzgados.

El resto de los datos fueron extraídos de aregional, una base de datos que contiene
bastantes indicadores estatales. En su mayoría los indicadores provienen del INEGI y son
del año 2000.

45
6. Análisis Econométrico

6.1. El ICBG general


Con la finalidad de comprobar la hipótesis de que la corrupción—medida con el ICBG—
puede ser explicada por variables económicas, se utilizarán técnicas econométricas. Las
regresiones que se presentan son de corte transversal. La variable dependiente en la primera
regresión es el ICBG general23 —el índice agregado que incluye los 38 rubros de
corrupción identificados por Transparencia Mexicana. La variable independiente que
obtuvo una mayor R cuadrada, por si sola, fue el PIB estatal. Cabe mencionar que existen
otras variables muy correlacionadas con el PIB, como densidad24 (el coeficiente de
correlación entre PIB y densidad es casi de 0.9) que pueden explicar bastante bien al índice,
sin embargo el PIB es la mejor variable explicativa. En el cuadro 6.1 se presenta la
regresión que incluye el PIB, que está expresado en miles de pesos.

Cuadro 6.1
Variable dependiente: ICBG
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C 5.564951 0.535533 10.39143 0.0000
PIB 1.51E-08 2.08E-09 7.222265 0.0000
R cuadrada 0.634864 Estadístico F 52.16111
R cuadrada Ajustada 0.622693 Prob(Estadístico F) 0.000000

Como se puede ver, los coeficientes de la constante y del PIB son significativos. El modelo
indica que por cada cien mil millones de pesos de PIB adicionales el ICBG aumenta 1.51
puntos. Aquí puede surgir una confusión, anteriormente se mencionó que el ingreso estaba
negativamente correlacionado con la corrupción, y aquí el coeficiente es positivo, además
el estadístico t muestra que podemos aceptar la hipótesis de que el coeficiente es positivo.
Hay que entender que el PIB estatal no está midiendo el ingreso individual, sino está
midiendo el tamaño de la economía de la entidad federativa.
Un posible argumento, que justifique este coeficiente positivo, es que en las economías más
grandes hay una mayor rentabilidad de la corrupción, lo que es un incentivo a que haya más
corrupción. Esta mayor rentabilidad sería explicada por mayores sobornos. Para ver si los
mayores sobornos son los causantes de este fenómeno, se calculó el soborno promedio25 y
se corrió una regresión con el PIB como variable explicativa. Los resultados se muestran en
el cuadro 6.2.

23
Se utiliza el ICBG calculado por Roy Campos.
24
Población por kilómetro cuadrado.
25
Se elaboró con los datos de la encuesta de Transparencia Mexicana proporcionada por el CIDE. Se calculó
sin tomar en cuenta los factores de ponderación. Sólo se tomaron en cuenta los casos en que se había
declarado una cantidad exacta y positiva en el pago de una mordida.

46
Cuadro 6.2
Variable dependiente: Soborno Promedio
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C 949.7724 96.21801 9.871046 0.0000
PIB -1.31E-07 3.75E-07 -0.349872 0.7289
R cuadrada 0.004064 Estadístico F 0.1224105
R cuadrada Ajustada -0.029134 Prob(Estadístico F) 0.7288791

Del cuadro anterior vemos que el soborno no responde prácticamente nada al PIB, por lo
tanto el argumento anterior no se puede probar. Además, el signo es contrario al deseado,
de todos modos, se hubiera necesitado una R cuadrada grande para que se pudiera justificar
la teoría anterior.
Hay que comprender que el ICBG mide el porcentaje de veces que hay que pagar un
soborno. La definición del índice es:

Número de veces en las que se dio mordida en los 38 servicios


ICBG = x 100
Número total de veces que se utilizaron los 38 servicios

Por lo tanto es el porcentaje de veces en que hay que pagar una mordida. Esta primera
regresión nos dice que al tener un mayor PIB el porcentaje de actos corruptos (cuando se
paga soborno) es mayor. Tenemos el siguiente modelo:

ICBGi = βc + β PIBPIBi + εi
VC i
ICBGi =
VTi
Suponemos ε y PIB independientes
∂ICBGi
= βPIB
∂PIBi
∂ICBGi 1 ∂VCi VC i ∂VTi
= −
∂PIBi VTi ∂PIBi VTi2 ∂PIBi
1 ∂VCi VCi ∂VTi PIBi ∂VCi PIBi ∂VTi
β PIB > 0 ⇔ > ⇔ >
VTi ∂PIBi VTi ∂PIBi VCi ∂PIBi VTi ∂PIBi
2

Donde VT es el número total de veces en que se utilizaron los treinta y ocho servicios y VC
es el número de veces que se dio mordida en los treinta y ocho servicios. Por lo tanto, si el
coeficiente del PIB en la primera regresión es positivo, la elasticidad PIB de las veces en
que se tuvo que pagar mordida es mayor a la elasticidad PIB de las veces en que se
utilizaron los servicios. Para poder comprobar esto es necesario hacer una regresión, pero
queremos obtener elasticidades, se tiene que hacer una regresión con logaritmos.
Para estas regresiones se estimaron VC y VT. Se utilizaron los datos de las encuestas de
Transparencia Mexicana, proporcionados por el CIDE. Primero se identificaron los casos

47
en que se pagó mordida y las veces que se utilizaron los treinta y ocho servicios26.
Posteriormente, se sumaron los factores de ponderación cuando se pagó mordida para el
primer caso y cuando se utilizó el servicio para el segundo caso. Se necesita un tercer
factor: la suma de los factores de ponderación de los encuestas totales por entidad
federativa; a esta suma se le multiplica por 38, dado que en cada encuesta se preguntó
sobre los treinta y ocho servicios. Se dividen las primeras dos sumas por la tercera, y se
obtienen dos razones. Éstas son estimaciones del porcentaje de hogares que paga mordida y
de hogares que utilizan los treinta y ocho servicios, respectivamente. Pero, lo que se
necesita no es el porcentaje, sino el número total. Para hacer esta estimación se multiplican
los porcentajes por el número total de hogares, dado que cada encuesta es por hogar. Para
obtener el número de hogares, simplemente se divide la población de la entidad federativa
por el número promedio de personas por hogar; en este caso se usó el promedio nacional,
que según datos del INEGI es de 4.627 personas por hogar.
Los posible errores de estimación no son tan importantes, pues, lo que se utiliza es el
logaritmo, “pequeños errores” dejan al logaritmo del número muy cercano al logaritmo del
“valor verdadero”. En el cuadro 6.3 y 6.4 se ven los resultados de las regresiones de los
logaritmos de VC y VT.

Cuadro 6.3
Variable dependiente: Ln(VT)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C -2.523596 1.753829 -1.438906 0.1605
Ln(PIB) 0.735445 0.095114 7.732258 0.0000
R cuadrada 0.665879 Estadístico F 59.78781
R cuadrada Ajustada 0.654742 Prob(Estadístico F) 0.000000

Cuadro 6.4
Variable dependiente: Ln(VC)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C -10.14697 2.459522 -4.125587 0.0003
Ln(PIB) 1.014635 0.133385 7.606815 0.0000
R cuadrada 0.658562 Estadístico F 57.86363
R cuadrada Ajustada 0.647181 Prob(Estadístico F) 0.000000

Se puede observar que el coeficiente de logaritmo del PIB (la elasticidad con respecto al
PIB) es positivo para ambas regresiones. Asimismo, el coeficiente para las veces en que se
paga mordida es efectivamente mayor que el coeficiente para las veces en que se utiliza el
servicio. Además, la R cuadrada para ambas regresiones es muy similar a la de la regresión
inicial (la del ICBG con el PIB como variable explicativa). La siguiente regresión va a ser
muy ilustrativa para observar la relación entre VC y VT.

26
Todos los cálculos se hacen por entidad.
27
INEGI. Dato de 1995.

48
Cuadro 6.5
Variable dependiente: Ln(VC)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C -5.984780 0.874056 -6.847132 0.0000
Ln(VT) 1.317877 0.079100 16.66093 0.0000
R cuadrada 0.902466 Estadístico F 277.5865
R cuadrada Ajustada 0.899215 Prob(Estadístico F) 0.000000

Vemos que la relación puede ser descrita por la siguiente fórmula:

VCi = k(VTi )α ui

De la regresión del cuadro 6.5 se ve que el coeficiente estimado de la alfa —la elasticidad
de VC con respecto a VT—es mayor a uno. Por lo tanto, el aumento porcentual de las veces
en que se utilizan los treinta y ocho servicios es menor al aumento porcentual de las veces
en que se paga mordida. En otras palabras, al aumentar el número de oportunidades en que
se puede cometer una acto corrupto, aumenta más que proporcionalmente el número de
actos corruptos.

Cuadro 6.6
Variable dependiente: Ln(VC)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C -7.131717 1.354106 -5.266734 0.0000
Ln(VT) 1.194825 0.136337 8.763775 0.0000
Ln(PIB) 0.135908 0.122875 1.106063 0.2778
R cuadrada 0.906414 Estadístico F 140.4384
R cuadrada Ajustada 0.899960 Prob(Estadístico F) 0.000000

Si en la regresión incluimos el logaritmo del PIB, la R cuadrada ajustada es mayor y el


coeficiente para el logaritmo de VT es mayor a uno, sin embargo el estadístico t indica que
el coeficiente del logaritmo del PIB no es significativamente distinto de cero. Entonces, la
relación con el PIB no es tan relevante si ya incluimos en la regresión al logaritmo de VT.
Podemos concluir que el número de veces que se utilizan los treinta y ocho servicios
depende del tamaño de la economía, y que el número de veces que se pagan sobornos está
estrechamente vinculado con el número de veces que se utilizan los servicios.
Ante los resultados de las regresiones anteriores pueden surgir dos explicaciones. Primero,
en una economía de mayor tamaño, la demanda por los treinta y ocho servicios —
identificados por Transparencia Mexicana— es mayor, sin embargo, la oferta de estos
servicios no es suficiente para cubrir la demanda. Por lo tanto se genera un exceso de
demanda. El camino natural para que desapareciera un exceso de demanda es mediante un
incremento en los precios. Sin embargo, aquí habría una restricción que impidiera el ajusta
vía precios, entonces para compensar esta escasez relativa se exige el pago de sobornos.

49
Hay dos problemas con el planteamiento del párrafo anterior. Primero, gran parte de los
treinta y ocho servicios son ofrecidos por empresas privadas. Al menos que los precios
estén controlados, no hay razón para que no se llegue a un precio de equilibrio que elimine
este exceso de demanda. Segundo, esta escasez, o exceso de demanda, tendría que ser una
función creciente de las veces que se utilizaron los treinta y ocho servicios. Sin embargo,
no hay razón para que esto sea cierto. Si la demanda es mayor, hay un mayor mercado; el
mercado va a atraer a un mayor número de oferentes—que posiblemente vienen de los
mercados de menor tamaño—, esto llevaría a una mayor eficiencia en la asignación de
recursos y consecuentemente los posibles excesos de demanda van a ser menores. En otras
palabras, las fuerzas del mercado reducirían los excesos de demanda, no los aumentarían.
La segunda explicación consiste en que hay rendimientos crecientes a escala en la
corrupción. Esto lo podemos ver de la fórmula que se planteó anteriormente. Si tomamos
VC (las veces que se pagó mordida) como el producto y VT (las veces que se utilizaron los
servicios) como el único, o principal insumo, vemos que hay una relación creciente. Al
aumentar el PIB se incrementan las oportunidades para cometer actos de corrupción, y los
costos medios, relacionados con estos actos se reducen.
Esta reducción en los costos medios es un resultado de que haya redes de corrupción. Al
haber más transacciones es lógico que haya una mayor número (absoluto) de actos de
corrupción. Cuando hay más burócratas que están involucrados en la corrupción es más
fácil que se unan para formar redes que les permitan reducir sus costos. Por ejemplo,
pueden juntar entre todos un monto considerable de dinero para sobornar a un inspector o
un burócrata de mayor nivel, para así continuar con sus actividades corruptas impunemente.
También, pueden tener mayor poder de negociación para impedir nuevos sistemas con
mejor rendición de cuentas. Por eso, la corrupción sistemática es más dañina, puesto que su
objetivo es perpetuarse. La corrupción se extiende cuando está mejor organizada y es más
difícil de combatir.
Ahora regresemos a nuestro planteamiento inicial de buscar las variables que explican el
ICBG general. Vemos que el PIB es relevante, ahora incluimos la segunda variable que fue
más significativa que las demás: el PIB per cápita. Esta variable ya mide el ingreso
individual. A primera vista, se puede pensar que es una equivocación incluir estas dos
variables, pues posiblemente sigan un comportamiento muy similar. Ciertamente el Distrito
Federal es la entidad más rica en términos de PIB y PIB per cápita; sin embargo, Baja
California Sur es el tercer estado con menor PIB y es el sexto estado con mayor PIB per
cápita; otro ejemplo es el del Estado de México, el segundo estado con mayor PIB, pero
hay diecisiete estados más ricos que éste, en términos de PIB per cápita. La correlación
entre PIB y PIB per cápita es de .62, pero, si no se incluye al Distrito Federal es de, apenas,
.23. En el siguiente cuadro se muestra una regresión con estas dos variables. Tanto el PIB
como el PIB per cápita están medidos en miles de pesos.

50
Cuadro 6.7
Variable dependiente: ICBG
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 32
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C 8.1060826 0.855660 9.473488 0.0000
PIB 1.99E-08 2.26E-09 8.839241 0.0000
PIB per cápita -0.066549 0.018957 -3.510604 0.0015
R cuadrada 0.743760 Estadístico F 42.08757
R cuadrada Ajustada 0.726088 Prob(Estadístico F) 0.000000

Cómo se había planteado con anterioridad, el ingreso individual tiene una relación negativa
con la corrupción. El PIB sigue manteniendo la relación positiva que habíamos visto en la
otra regresión, aunque ahora el coeficiente es mayor. La R cuadrada es de 74% y el modelo
es significativo (por los estadísticos F y t). Este es el modelo que vamos a utilizar para
explicar el ICBG general, y como podemos observar, con estas dos variables económicas se
puede explicar gran parte de la varianza del índice.

Cuadro 6.8
Media Desviación Correlación
estándar PIB PIB per cápita ICBG
PIB 155451988 207770191 1 0.616195 0.796783
PIB per cápita 49.5809468 24.7197021 0.616195 1 0.231073
ICBG 7.90558681 3.92627263 0.796783 0.231073 1
PIB y PIB per cápita están expresados en miles de pesos.

En las regresiones de corte transversal frecuentemente se encuentran problemas de


heteroscedasticidad, lo que significa que los residuales no tienen la misma varianza. La
heteroscedasticidad altera los errores estándares de los coeficientes, lo que dificulta ver la
significancia de éstos. Se aplicó la prueba de White a la regresión del cuadro 6.7, para
identificar problemas de heteroscedasticidad. Los resultados se pueden ver en el siguiente
cuadro.

Cuadro 6.9
Prueba de Heteroscedasticidad de White

Estadístico F 0.489000 Probabilidad 0.743727

Observaciones*R cuadrada 2.161625 Probabilidad 0.706061

La prueba de White tiene estadísticos que no son significativos. Por lo tanto, se rechaza la
hipótesis de que haya problemas de heteroscedasticidad, por consiguiente los residuales son
homoscedásticos, independientes de las variables explicativas y, además, la especificación
lineal del modelo es correcta.

51
Cabe notar, que el estado de Guerrero es el estado que obtiene el mayor residual, en
términos absolutos, por lo tanto es posible que haya otros factores que propicien que este
estado en particular tenga un nivel de corrupción mayor.

6.2. ICBG por rubro


Para complementar los resultados obtenidos de las regresiones con el ICBG general como
variable dependiente, se hizo un análisis de los 38 índices por servicio. Cabe mencionar que
muchos de los índices por rubro tienen un comportamiento distinto al del índice agregado,
por lo que la R cuadrada en las siguientes regresiones va a ser menor.

Cuadro 6.10
ICBG (Rubro) Correlación con
ICBG general
Trámite de predial. 0.32256722
Trámite para obtener una incapacidad o justificante de 0.74100318
salud.
Trámite relacionado con el servicio telefónico. 0.23785644
Trámite para la conexión o reconexión de gas a 0.4116383
domicilio.
Trámite para la conexión de teléfono. 0.41863909
Trámite fiscal en la Secretaría de Hacienda: RFC, 0.05968792
devolución, declaración trimestral o anual.
Visitar a un paciente en un hospital fuera de los 0.19845902
horarios permitidos.
Recibir correspondencia. 0.18508095
Trámite para obtener una ficha de inscripción a una 0.22990058
escuela oficial.
Trámite para obtener la cartilla militar / Exentar el 0.71582282
servicio militar.
Arreglar que se atendiera urgentemente a un paciente 0.33475707
o que éste ingresara antes de lo programado en una
clínica.
Trámite para obtener constancias de estudios o 0.31556916
exámenes en escuelas públicas.
Trámite para obtener un crédito o préstamo en efectivo -0.0499391
para su casa, negocio o automóvil en instituciones
privadas.
Trámite para recibir apoyo o incorporarse a programas 0.2783561
del gobierno como PROGRESA, PROCAMPO, leche,
etc.
Trámite para obtener o acelerar el pasaporte en el 0.38916163
Secretaría de Relaciones Exteriores.
Trámite para la introducción o regularización de 0.72099222
servicios: agua, drenaje, alumbrado, pavimento,
mantenimiento de parques y jardines, etc.
Trámite para obtener un crédito o préstamo en efectivo 0.54206839
para casa, negocio o automóvil en instituciones públicas
como el INFONAVIT.
Obtener el servicio de vigilancia de la delegación o 0.73561054
municipio.
Trámite para obtener o acelerar actas de nacimiento, 0.54161293
defunción, matrimonio o divorcio en el registro civil.
Trámite para obtener una licencia o permiso de uso de 0.66384981
suelo.

52
Trámite para la conexión o reconexión de luz a 0.75259388
domicilio.
Trámite para la conexión / reconexión de agua y/o 0.83773236
drenaje a domicilio.
Regularizar cualquier Trámite de su vehículo (cambio 0.71345486
de dueño etc.).
Obtener agua en pipa de la delegación o municipio. 0.21322525
Trámite para obtener el servicio de poda de árboles. 0.31207577
Trámite para obtener la licencia para conducir. 0.82946678
Trámite para aprobar la verificación vehicular. 0.72842691
Trámite para llevar o presentar un caso en un juzgado. 0.61774995
Trámite para obtener una licencia o permiso de 0.76126921
demolición, construcción o alineamiento y número
oficial.
Trámite para trabajar o vender en vía pública. 0.5111897
Trámite para obtener el servicio de limpieza de 0.83790407
alcantarilla (desazolve).
Pedir al camión de la delegación o municipio que se 0.73190566
lleve la basura.
Trámite para evitar la detención en el Ministerio Público 0.67095393
/ realizar una denuncia, acusación o levantar un acta /
lograr que se le dé seguimiento a un caso.
Trámite para pasar sus cosas en alguna aduana, retén, -0.1235952
garita o puerto fronterizo.
Trámite para recuperar su automóvil robado. 0.53681377
Evitar ser infraccionado o detenido por un agente de 0.62855291
tránsito.
Estacionar un automóvil en la vía pública en lugares 0.70968151
controlados por personas que se apropian de ellos.
Evitar que un agente de tránsito se llevara un automóvil 0.61462052
al corralón / sacar un automóvil del corralón.

Del cuadro 6.10 se puede observar que hay rubros que tienen correlación negativa con el
índice y ninguno tiene una correlación mayor a .85.
Para este análisis se juntó a todos los índices y se formó una variable de 998 observaciones,
en teoría deberían ser 1216 observaciones (32 observaciones por estado y 38 servicios). Sin
embargo, hubo ocasiones en que no se registró el pago de mordida para un rubro en
específico, por lo tanto no se pudo calcular ese índice (en 218 ocasiones no se pudo calcular
el índice). Además, como nada más queremos analizar que factores explican la varianza del
índice, se le resto a los 38 índices su media, para que esta fuera igual a cero y,
consecuentemente, la media de la variable que contiene los 38 rubros es también igual a
cero. Ajustar la media es necesario, pues en ocasiones, el promedio para cada rubro varía
bastante, en algunos casos el promedio es de alrededor de 3 y en otros alcanza niveles cerca
de 50.
En el cuadro 6.11 se muestra la prueba White para identificar problemas de
heteroscedasticidad28. En este caso no podemos rechazar la hipótesis de que haya
heteroscedasticidad, consecuentemente las siguientes regresiones van a presentar errores
estándar corregidos con el método de White por heteroscedasticidad.

28
La prueba de White fue aplicada a un regresión que tenía como variables explicativas al PIB y el PIB per
cápita.

53
Cuadro 6.11
Prueba de Heteroscedasticidad de White

Estadístico F 10.84926 Probabilidad 0.000000

Observaciones*R cuadrada 41.78924 Probabilidad 0.000000

Cuadro 6.12
Variable dependiente: ICBG (38 rubros)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 998
Errores estándar corregidos con el método de White por heteroscedasticidad
Variable Coeficiente Error Estándar Estadístico t Prob.
C -1.661429 0.747648 -2.222207 0.0265
PIB 2.00E-08 2.09E-09 9.552703 0.0000
PIB per cápita -0.059631 0.013926 -4.281886 0.0000
Guerrero 9.492324 1.954752 4.856024 0.0000
Índice de Dispersión 1 8.676469 1.90849 4.546249 0.0000
R cuadrada 0.200201 Estadístico F 62.14061
R cuadrada Ajustada 0.196980 Prob(Estadístico F) 0.000000

En el cuadro 6.12 está una regresión que tiene como variable dependiente a los 38 rubros
del ICBG conjuntamente. En esta regresión se incluyen las dos variables que se habían
usado anteriormente: el PIB, el PIB per cápita (ambas medidas en miles de pesos).
Asimismo, se incluye una dummy para Guerrero, pues se había visto que Guerrero
presentaba un residual muy grande en la regresión del ICBG general. También se incluye
un índice de dispersión.
El índice de dispersión 1 es el índice de fraccionamiento etnolingüístico que mide la
probabilidad de que dos personas pertenezcan a un grupo etnolingüístico diferente. Se
identificaron ochenta y nueve grupos en este índice, ochenta y ocho grupos indígenas y un
gran grupo “no indígena”. Se puede ver que la dispersión tiene un efecto positivo sobre el
índice y que es significativo. Guerrero es un estado con alta dispersión, aun así, la dummy
es relevante.

54
Cuadro 6.13
Variable dependiente: ICBG (38 rubros)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 998
Variable 1 2 3 4 5 6
PIB 1.39 1.99 1.55 1.28 2.05 1.81
(7.16) (9.49) (7.85) (6.54) (9.78) (8.40)
PIB per cápita -8.25 -7.10 -6.91
(-5.82) (-5.07) (-4.59)
Índice de dispersión 1 11.73 10.01
(6.07) (5.18)
Variable Jurídica -1.12 -0.83
(-4.95) (-3.45)

R cuadrada 0.1136 0.1453 0.1439 0.1359 0.1667 0.1566


R cuadrada Ajustada 0.1127 0.1435 0.1422 0.1342 0.1642 0.1541
Estadístico F 127.64 84.55 83.63 78.25 66.27 61.53
Todas las regresiones incluyen una constante.
Todos los coeficientes son significativos al 1%.
Entre paréntesis está el estadístico t corregido por heteroscedasticidad.
El PIB está en medido en cientos de miles de millones de pesos.
El PIB per cápita está medido en cientos de miles de pesos.

En el cuadro 6.13 hay seis regresiones, ninguna incluye una dummy para Guerrero. Sin
embargo se incluye otra variable explicativa en dos regresiones, la variable jurídica; ésta es
utilizada como una proxy (una variable que aproxima) de la probabilidad de ser sancionado.
En ambas regresiones tiene un coeficiente negativo y además ambos son significativos. La
primera regresión es la más significativa (ver el estadístico F), sin embargo la regresión 5
es la que tiene la mayor R cuadrada. Esta última regresión, es la que tiene el mayor
coeficiente para el PIB en este cuadro.

55
Cuadro 6.14
Variable dependiente: ICBG (38 rubros)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 998
Variable 7 8 9 10 11 12
PIB 1.44 1.89 1.83 2.00 1.50 1.90
(7.23)* (8.74)* (8.47)* (9.55)* (7.56)* (8.77)*
PIB per cápita -6.05 -6.08 -5.96 -5.36
(-4.06)* (-4.05)* (-4.28)* (-3.60)*
Índice de dispersión 1 10.39 9.25 8.68 9.21 8.27
(5.54)* (4.90)* (4.55)* (4.92)* (4.40)*
Variable Jurídica -0.93 -0.70 -0.55 -0.64 -0.45
(-4.17)* (-2.95)* (-2.32)** (-2.91)* (-1.92)
Dummies Estado
Guerrero 9.47 9.49 9.44 8.94
(4.82)* (4.86)* (4.79)* (4.54)*

R cuadrada 0.1590 0.1746 0.1891 0.2002 0.1913 0.2034


R cuadrada Ajustada 0.1565 0.1713 0.1858 0.1970 0.1880 0.1994
Estadístico F 62.66 52.53 57.90 62.14 58.72 50.66
Todas las regresiones incluyen una constante.
* Es significativo al 1%, ** es significativo al 5%.
Entre paréntesis está el estadístico t corregido por heteroscedasticidad.
El PIB está en medido en cientos de miles de millones de pesos.
El PIB per cápita está medido en cientos de miles de pesos.

En el cuadro 6.14 se puede observar que la Variable Jurídica no es significativa al 1% en la


regresión 9 y en la regresión12 ni siquiera es significativa al 5%. Cuando se incluyen, tanto
el índice de dispersión como el PIB per cápita, la variable jurídica pierde significancia.
También, si se incluye la dummy para Guerrero se hace menos relevante la inclusión de la
variable jurídica.

56
Cuadro 6.15
Variable dependiente: ICBG (38 rubros)
Método: Mínimos Cuadrados
Observaciones: 998
Variable 13 14
PIB 2.01 1.91
(9.59)* (8.80)*
PIB per cápita -6.10 -5.47
(-4.39)* (-3.68)*
Índice de dispersión 1

Índice de dispersión 2 9.31 8.90


(4.61)* (4.48)*
Variable Jurídica -0.46
(-1.96)
Dummies Estado
Guerrero 9.45 8.89
(4.83)* (4.50)*

R cuadrada 0.2000 0.2034


R cuadrada Ajustada 0.1968 0.1994
Estadístico F 62.06 50.64
Todas las regresiones incluyen una constante.
* Es significativo al 1%, ** es significativo al 5%.
Entre paréntesis está el estadístico t corregido por heteroscedasticidad.
El PIB está en medido en cientos de miles de millones de pesos.
El PIB per cápita está medido en cientos de miles de pesos.

En el cuadro 6.15 se puede observar que el segundo índice de dispersión es significativo,


pero es ligeramente mejor el primero. Podemos concluir que es mejor usar el primer índice
de dispersión.

57
Conclusiones
Lo primero que se debe tomar en cuenta de este trabajo es que su objetivo fue explicar la
corrupción a nivel estatal, no entre distintos países. Posiblemente un estudio que contemplé
a varios países no va a tener los mismo resultados, pues es más difícil conseguir índices que
tengan el mismo nivel de precisión entre países, además algunas de las variables
explicativas utilizadas en este estudio tratan sobre cuestiones muy especiales de México,
por ejemplo el índice de dispersión se centra sobre la relación que hay con los indígenas, en
muchos otros países no existe un grupo étnico tan claramente discriminado. Este trabajo
además se concentra en el soborno, no en todos los casos de la corrupción. Además, ni
siquiera se contemplan todos los casos de soborno, sólo los treinta y ocho que identifica
Transparencia Mexicana como los servicios relevantes en el estudio de la mordida.
Sin embargo, los resultados son interesantes y ayudan a tener una mayor comprensión del
fenómeno de la corrupción. Como se puede apreciar de los resultados, la corrupción puede
ser explicada por variables económicas: el PIB y el PIB per cápita. Gracias a que el índice
mide experiencias y no percepciones se pudo obtener una relación tan estrecha con estas
variables.
El PIB es relevante pues este determina la demanda por servicios, a mayor PIB, mayor
demanda. Sin embargo, de acuerdo con los resultados que se presentaron, mayor demanda
por los servicio, va a acompañado de mayores niveles relativos de corrupción. Cuando hay
un mayor número de transacciones económicas, hay incentivos para que la corrupción
crezca, por lo tanto se crean mecanismos para que ésta se vuelva sistemática.

La relevancia del PIB per cápita


En los estudios de Ades y Di Tella (1999) y Treisman (2000) se utiliza al PIB per cápita
como una variable explicativa del índice de corrupción. En ambos estudios, se encuentra
que el coeficiente es negativo y significativo, lo que concuerda con los resultados de esta
tesis. Sin embargo en estudios como los mencionados anteriormente, normalmente se
utiliza el logaritmo del PIB per cápita. Esto se debe a problemas relacionados con estos
índices de corrupción: pues no miden la corrupción, sino la percepción de la corrupción;
además los estudios y encuestas tienen preguntas imprecisas que pueden ser cuantificadas
de diferentes maneras. El ICBG tiene una relación lineal más clara con el PIB per cápita.
Treisman argumenta que el PIB per cápita es relevante dado que un mayor PIB per cápita
refleja una mayor calidad de educación, esto último inhibe la corrupción. En este estudio no
se utilizaron variables que medían el nivel de escolaridad, sin embargo hay otras posibles
explicaciones de por qué el PIB per cápita es un factor que explica la corrupción. En
primera instancia el PIB per cápita puede reflejar el nivel de salarios de la respectiva
entidad; los salarios son importantes pues uno de los costos que enfrenta el actor corrupto
es la pérdida de trabajo, consecuentemente de su salario. Por lo tanto, si el salario que
pierde por ser descubierto en un acto de corrupción es mayor, el burócrata va a tener menos
incentivos para entrar a la corrupción. El PIB per cápita, puede ser una medida del costo
oportunidad. Si los ingresos que se pueden obtener son bajos hay incentivos a conseguir
ingresos extras mediante sobornos, claro si se está en un trabajo que se pueda pedir un
soborno.

¿Por qué contribuye la dispersión étnica a la corrupción?


Dentro del análisis del ICBG por rubros se encontró que el índice de dispersión fue
significativo. Siempre el índice de dispersión 1 fue más significativo que el 2. El primero es

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el que contabiliza a los indígenas de acuerdo a la lengua que hablan. Hay ochenta y ocho
grupos indígenas y además se tomo a la población “no indígena” (población total del estado
menos la población indígena) como un grupo más. El índice mide la probabilidad de que
dos personas que sean seleccionadas al azar de la población del estado, pertenezcan a un
grupo étnico distinto.
El índice de dispersión 2 es muy similar al 1, la única diferencia es que sólo se contabilizan
a los indígenas que no hablan español y en el último grupo, “la población no indígena” se
convierte en la “población que habla español” que si incluye indígenas. Por lo tanto, este
segundo índice mide la probabilidad que dos personas que sean seleccionadas al azar de la
población del estado, al menos una no hable español.
Ambos índice están muy correlacionados, tienen un coeficiente de correlación de .85. Estos
índices se construyeron para ver si la corrupción aumenta al haber mayor dispersión étnica
per se o por la incapacidad de hablar español de algunos indígenas. Aparentemente, es más
relevante la dispersión que los problemas del lenguaje, aunque, ambos problemas van de la
mano.
Se construyó un tercer índice de dispersión, que no fue incluido en las regresiones; esto se
debió en gran parte a que el coeficiente de correlación entre este último índice y el primer
índice dispersión es de .996. El tercer índice es elaborado básicamente igual que el primero,
la diferencia es que el primero identifica ochenta y ocho grupos indígenas y un grupo “no
indígena” y este tercer índice sólo identifica dos grupos: uno indígena y uno “no indígena”;
el grupo indígena agrupa los indígenas de los ochenta y ocho grupos. Por lo tanto, este
índice mide al probabilidad que dos personas que sean seleccionadas al azar de la población
del estado, una sea indígena y la otra no sea indígena. La alta correlación entre estos dos
índices nos señala que la dispersión entre grupos indígenas no es tan importante como la
polarización entre los indígenas y los no indígenas.
Un argumento, que explica la relevancia del índice de dispersión, es que en un estado con
mucha dispersión va a tener a burócratas que van a querer favorecer su respectivo grupo a
costa de los otros. Además, por la débil posición social de muchos indígenas los burócratas
“no indígenas” pueden aprovechar esta situación y demandar un soborno para realizar un
trámite. Los indígenas —por no conocer las leyes, por no hablar español o hablarlo
deficientemente, o simplemente porque son un grupo social desfavorecido— no pueden
protegerse de los abusos del burócrata, consecuentemente se ven forzados a pagar un
soborno. Esta situación sería más frecuente en estados identificados con alta dispersión.
La discriminación de los indígenas es un problema que se traduce en una mayor corrupción.
Para compensar esta situación, hay varias medidas que se pueden tomar. Primero, es
necesario reducir las barreras del lenguaje, ya sea mediante la enseñanza del español a un
mayor número de indígenas, o simplemente teniendo a un traductor honesto que le explique
claramente las leyes al indígena. Otra medida, sería crear centros de atención en que los
indígenas puedan denunciar cualquier abuso por parte de las autoridades.

¿Qué nos mide la variable jurídica?


En el análisis de la corrupción para los 38 rubros en conjunto, se vio que para algunas
regresiones la variable jurídica era relevante. Esta variable fue tomado del estudio del
ITAM, y el nombre que recibe en ese estudio es “condiciones generales de los juzgados”.
Lo importante es que esta variable mide la calidad material de los juzgados. Este índice
toma en cuenta varios factores como el sistema de consultas, el número de empleados

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asignados, la calidad del mobiliario, el espacio físico, el número de computadoras, la
iluminación, etc.
Este índice se utiliza para medir la probabilidad de ser sancionado. Se supone que si está
probabilidad es mayor hay menor corrupción. Miguel Sarre, uno de los catedráticos que
participo en este estudio jurídico, comenta que el índice jurídico no necesariamente explica
directamente la probabilidad de ser sancionado, un posible delincuente toma en cuenta otras
cosas, como la calidad de la procuraduría y los cuerpos policiacos. Claro está, que la
probabilidad de ser sancionado está compuesto de tres probabilidades: la de ser aprendido,
la de ser declarado culpable, y la de que se ejecute la sentencia.
Sin embargo, puede ser que estas tres probabilidades tengan un comportamiento similar,
por lo tanto nada más es necesario fijarse en una, o simplemente que la variable jurídica
está captando una gran parte de las tres. La explicación, también puede venir en el sentido
de que al haber una mayor calidad material en los juzgados hay una mayor facilidad para
que la gente denuncie los abusos y extorsiones de los funcionarios, por lo tanto afecte,
efectivamente, la probabilidad de ser sancionado.

¿Por qué Guerrero es “más corrupto”?


El caso de Guerrero sobresale bastante, es el tercer estado más corrupto, según el ICBG
general, y frecuentemente es de los estados más corruptos en los rubros de corrupción que
aparece. No hay ninguna explicación obvia de por qué se da esto. Estados con condiciones
similares, como Oaxaca o Chiapas, son en general menos corruptos que Guerrero. Aún
tomando en cuenta la dispersión étnica Guerrero sigue sobresaliendo como un estado
corrupto. Para poder llegar a una explicación convincente del alto porcentaje de pago de
mordidas en Guerrero sería conveniente un estudio de campo que analizara más
cuidadosamente el soborno en los treinta y ocho servicios (o al menos en los treinta y dos
servicios que está presente). Asimismo, sería bueno también estudiar a Oaxaca y Chiapas
para poder ver cuáles son las diferencias que hay entre estos dos estados y Guerrero, que
explican el mayor nivel de corrupción de este último estado.

Sobre el ICBG
El ICBG mostró ser un buen índice de corrupción, que en términos generales supera las
deficiencias de los índices de percepción. Los datos de la encuesta de corrupción y buen
gobierno son muy ricos; se pueden construir varios índices a partir de estos datos. Por
ejemplo, se pueden construir índices con los otros datos de la encuesta (los que no captan
las experiencias. También, se puede hacer un estudio sobre la disposición a pagar un
soborno e incluir variables como la percepción de la corrupción.
En este trabajo no se utilizaron variables educativas para medir la corrupción, sin embargo
en estudios subsecuentes se pueden incluir, aunque se tiene que considerar que los niveles
educativos pueden estar muy correlacionados con el PIB per cápita, lo que haría una de los
dos variables irrelevante. Con la publicación de nuevos índices para distintos años se puede
hacer un análisis de como ha cambiado la corrupción en el tiempo.
Hasta cierto punto, gran parte de la investigación sobre corrupción está limitada por la falta
de datos disponibles sobre este tema. Aunque existan datos, muchas veces tienen
deficiencias que no permiten hacer un buen estudio empírico. Por eso, para poder hacer más
estudios sobre este fenómeno—y que tengan un mayor alcance— se debe hacer un enorme
esfuerzo por construir índices de corrupción confiables, válidos, precisos y exactos.

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