GABI: CHOQUE DE DOS MUNDOS

Web (2006) nos brinda una descripción detallada sobre Gran Intercambio Biótico
Americano (GABI), en donde se presentó una gran inmigración de especies de
mamíferos terrestres desde América del norte a través de centro América y hacia
América del sur y viceversa. El autor relata que este proceso tuvo sus orígenes
con el surgimiento del istmo de Panamá que se consolidó en ese entonces como
el canal que unía dos continentes que hasta en ese entonces se mantenían
separados. La unión de la región neotropical y la neártica supuso un intercambio
de especies que tuvo un gran efecto en la migración y supervivencia de las
especies.

El conteniente americano como lo conocemos hoy en día es producto de una gran

serie de eventos que cambiaron el paisaje y las especies que lo habitan. Al final
del pleistoceno, el continente se enfrentaba al último periodo glacial marcado
también por la presencia del hombre y la extinción de la megafauna, todas estas
condiciones modelaron un escenario en donde muchas especies desaparecieron y
dieron paso a otras nuevas, que son esencia gran parte de la fauna moderna del
continente americano.

Este evento ratifica la teoría darwinista sobre la evolución de las especies y la

supremacía del más fuerte, es aquí donde vemos que el más fuerte no es la
especie que tiene más tamaño y es más fuerte, si no que es aquella con mayor
capacidad de adaptación a los cambios de su ambiente. Los inmigrantes norte
americanos contaban con las adaptaciones necesarias para el clima tropical y
lograron expandirse por su territorio hacia el sur. Por otro lado, para los
emigrantes suramericanos este proceso fue más difícil, ya que se enfrentaron a
grandes condiciones climatológicas y topográficas más severas que generaron
una barrera que impidió que estos pudieran atravesar de América central.

La evolución deja una huella en las especies con antelación, la fauna del norte ya
se había enfrentado a un intercambio faunístico con Eurasia y a diferentes
condiciones climáticas y topográficas. Toda esa experiencia logró que esas
especies se desarrollaran de una forma competitiva y resistentes para los
escenarios que se enfrentaron en Sudamérica, mientras que las especies de
América del sur se mantenían aisladas y no tuvieron la oportunidad de interactuar
con otras especies inmigrantes.

En la naturaleza todo fluye, las condiciones del ambiente demostraban que era
poco probable la coexistencia entre la megafauna y el hombre. Cuando los
recursos escasean se impone la ley del más apto y lo que antes era considerado
como una ventaja ante otras especies(tamaño) ahora los hace ver como una presa
fácil para nuevas especies como el hombre, que al igual que ellos sólo buscaba
sobrevivir a esta difícil era de cambios.