Mediterraneo y a lo largo de todas las grandes vias uviales 0 terres-

tres, y los esclavos en todas las ciudades comerciales. Estos serian,

por tanto, sus principales misioneros de origen oriental, pues esta-
ban en todas partes y se mezclaban en todos los asuntos, por estar
tanto en los servicios publicos como en el servicio doméstico, en las
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traccion, el
al regular lagvrley "o§;s€m‘v1erre
soluto de todas las cosas.

BzI‘H1'3“ciT1TF1','“y7fya> antes,_que ,
A,
el Zervan Akarana del Avesta, que.
ei1‘eTs'éor ab-
que truena en los cielos,
sc habia convertiglg, como ‘habiamos visto, en el equivalente del
lo/s__ pS_§i‘l_'§1,l>>t§$,_l'1._3=.lIJJ/-i1l1__i_IJ..lZIlO£l11-l

explotaciones agricolas y en las empresas financieras 0 mineras, y Cltl6f'e'iTel'Uccidente la adorapcignwdel $91, principio dc toda vida y
sobre todo, por ocupar la administracion imperial, en la que copa- 5 demtoda luz. La ast_@agm Moma..iH§piIaron
ban los despachos. El dios exotico conquisto muy pronto los favo- I . las teorias enseadas en los mitreos, al igual que la de losternplos
res de los altos funcionarios y del propio soberano. A fines del si- st-:mTtiEo'sQ y de este 'niod'o‘pu"ede"explicarse la intiina coiiexion exis-
glo II Comodo se hizo iniciar en estos misterios, y esta conversion tente entre estos dos cultos. l\[g__fue__>este_s,istema semi-religioso y se-
tuvo una enorme resonancia. Cien aos mas tarde el porier de Mi- mi-cientifido lo que fue especificamentemirani§_”ym5fi§ifialT'”“"' W
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tra era tal que parecio eclipsar por un momento a sus rivalésie l ali"6co'fii‘é"""'o'f"§"”' ‘ """'""’"7'por"lo quelos misterios persas con-
Qriente y Occideyntelyollegar adominar ’[OClQ.€l.II1LL_I1QQ_£Q_Il2tnO. En quistaron a las masas. Sus ceremonias secretas, celebradas en las
elao 307 Dioclieciano, Galerio y Licinio, que se reunieron en una cuevas de las montaas o al menos en las tinieblas de sus criptas
solemne entrevista en Carnutum, sobre el Danubio, consagraron un subteraneas, eran apropiadas, sin duda alguna, para inspirar un te-
santuario a Mitra <<protector de su imperio» (fautori imperii mor sacral. Participando en las comidas liturgicas se hallaba un ali-
sui) (32). vio y un estimulo morales, y sometiéndose a una especie de baus-
tismo se creia obtener la expiacion de los pecados y la tranquilidad

52 i
de la conciencia. Pero estos“_f_e§tine§_§agrale§_Ay_estas abluciones pu-
* * * rificadoras también se dan, con las mismas esp'éranias.espirituales l

en otros cultos orientales, y desde luego el ritual sugestivQy_esple1n-

Cuales fueron los motivos de esta atraccion generalizada ’ que ldlQl-d§~Lcl@m--Q9-P9l.9-.¢l§_l11}!°hQ §31é$_imr2§§§i9,n.a.n1§,.quQ__@1 51¢ 310$
ma os El drama mitico re ré§eii¢a'&o‘¢n las cuevas del dios P ersa
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' d' barb o tanto a los oscuros p le- ' , ’ -p , - -, .
y cuya catastrofe final consistia en la inmolacion de un toro ’ consi-
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nevaba hacla los altares de este los ar

d d la tierra? En otra ocasion hemos tra- derado como el creador y el renovador de este mundo terrestre, era
beyos como a los gran es e
tado de Contestar a esta pregunta wponlendo 10 que podémos S3‘ ciertamente mucho mas trivial y mucho menos patético que el do-
ber acerca dc los mlstenos d6 Mum‘ NO tendre’ pues’ escru-pulg an lor Y la alegria de Isis buscando el cadaver mutilado de su esposo
que Cualquiera puede lea’ Si 16
repair aqui 10uno pica la cunosl a ’ y devolviéndolo a la vida 0 que los llantos y el jubilo de Cibeles
en dos libros, voluminoso y otro pequeno (33). Pero en este es- uorando résucitando amam Am
' ' ' El - . . . ' . ., . . .
o introducir en la religion un principio de
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tudlo exalmlmremos el problema desd-e Otto punto de “Sta CH1 Pero Persia consi
to hi? 61 ultlmg de.tO§~Os l0.S.-Cul£OS 0-F1 er-H3168 en l1e*g"aLg~"l%S*lé9‘}na_ capital importancia" dualisnjp Y esto f_u_Q lo ue distinguio al mi-
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como su moral, otorgandole un rigor y una firmeza ignoradas

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el paganismo ron_iano.“Cons1deraba al universo l'J3.]0 un
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1211: Iiggr-on sus doctrinas acerca de la naturaleza de los dioses ce-
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1 aspecto hasta entonces desconocldo X16 agggg al mismo tiempo ‘ll?
nuevo fin a la existencia.
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%?“§l§S§3§aq§fg$§§F§§$§§§ Zrle1Z°£ll§§5§ 1.2? Zeeiiifli $5 @1 dualism Si POI F“° Se mend? 61 dualism? I

maba al nlgngteising énffég ££>?i"£1€Tis ireligioiies paganaS; 1Ai_lii1ra”Mf1'z‘_;la cl ggpmtu yhla matena’ ‘fa lfélrazgn y (le los Sennd9S’ y§l‘ll?l%f%?.T__ l
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estawniuy por encima ae todo‘s los restantes espiritus celestiaIes.”Pero“ Feel O muc 9-_-zl'3~l§°-§~.~e_I@l~§l---1-~53-S-9-~lg-gqgga y. consmuyi? lma € as
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las doctrinas del mitraismo no fueron las/de Zoroastro. Lo que re-

cibi\6“de'li Tr“a‘ni'fue”foni‘sobre todo sus mi’s§e_rio§~> sus?/ritos, perow
ll¢gar_.a$1il¢'
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“ll,e_alfclH‘?€(lQl-Il,eO~l31§~1%Or.1§l}l?_-y del pgnsamlgntl) de Fll0n' Pero P
9]‘E>n°i‘-?l§%‘l!‘-Z--211%-1-‘ii--<19-‘-L1-'»‘-*1~‘1§~-lQ§.*I1%%Q§Ii¢§? ‘?l..§1l§§.‘?ll§a.._fa_ffi.ca
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reniéiise clar/amente de la\<1'e‘Io’sifs*a<:Ae'rEl'ot'es sirios. Situa a la,,cab_e- Este Slstema’ que pr°'
Se_[1§.»5l-l1~§»¢§..PI§?..C,l$Q §§,n»_.1I...c_u.ll_0 .?._§.13l?9.S_'.

za de laW]ferarqpia,.divina iy’ coloca como causa prirnleraia una abs- polclonzlba una Soluclon aP*"°"“'=me,"“= slmple al pmblema de la
existencia del mal, escollo de teologias, SCdU]O tanto a las mentes
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cultas como a las masas, que hallaban en él una explicacion de sus
(32) CIL HI’ 4413. vet. Mon. myS,_ Mithm I, p_ 281 sufrimientos. Precisamente en el momento en el que se difundieron
(33) veria bibiiografia, ' ' los misterios mitraicos Plutarco expone complacientemente esta

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