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GARCIA VALENZUELA
DECIMOQUINTO GRAN MAESTRO
DE LA GRAN LOGIA DE CHILE
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~ecesidad de la ~ey
¿Qué importa que un pueblo conozca sus derechos y haga osten--
tación del empeño de conservarlos, si a cada paso se confunde la liber·
tad con la licencia? Tal es nuestra situación, m·ientras no haya una ley
que detalle las obligaciones de los ciudadanos; la forma, duración, poder
y deberes del Gobierno; su responsabilidad y la de los magistrados; en
fin, que reglamente de un modo sólido la administración pública, y aquel
gran orden que fija los verdaderos principios de la vida civil. Un pue.
blo sin CdnStitución es una asociación de hombres en quienes no se
divisa otro enlace que el de aquellas relaciones mantenidas por la cos-
tumbre y expuestas continuamente a romperse con el choque de las pa-
siones. La América no ha tenido otro Código Constitucional que el que .
formaron, propiamente, para neófitos, plumas que aún humean en la
sangre de la Conquista. Pero cuando la evolución general le hizo ente15~
der que ya había pasado su infancia, es indisimulable la indolencia de
aquellos pueblos que, abandonados a las agitaciones de un entusiasmo
sin sistema, se olvidan de su propio decoro y se entregan al solo arbitrio
de las ocurrencias para perderse en el torbellino de los sucesos: como
el que saliendo de la minoridad maneja sin consejo un patrimonio que
-ve desaparecido cuando más lo necesitaba.
N o es preciso que nos miremos en absoluta independencia para
meditar una Constitución. La conservación del cuerpo político es la obra
exclusiva de los que le componen; y mientras no se niegue a Chile ·el
carácter de un verdadero pueblo, él no sólo tiene derecho sino que se
halla en la necesidad de estq,blecer pactos regulativos de esta sociedad
de hombres tan libres como los demás de la tierra para establecerlos. Su
seguridad y su fortuna no son una propiedad enajenable y disponible por
la voluntad ajena. Pero si esperamos nuestra felicidad de disposiciones
tan variables como los acontecimientos de la revolución, sentiremos dia-
riamente que ellas más bien han sido las condiciones de la esclavitud
que la regla de la libertad: en faltando una ley de que fprzosamente se
.derive la bondad del Gobierno, serán miserables los ciudadanos que una
-vez se equivocaron en la elección; y su suerte estará siempre dependiernte
de la triste alternativa del vicio y de la virtud. Y o me atrevo a decir
que un rpueblo sin Constitución es un grupo de infelices dejados al ca-
pricho y a la intolerancia del poder físico: estado deplorable en que
tampoco puede pronunciarse un juicio sobre los empeños del más fuerte;
porque ¿no es indudable que el ciudadano que repulsa una agresión se
cree legítimamente revestido de la autoridad de la ley que no puede
. invocar en su socorro, porque no existe? Y entonces ¿quién decidirá en-
. tre el dere~ho del opresor y del oprimido? Sólo el éxito sentenciará esta
causa; y su justicia se buscará inútilmente en ·la diferencia de los con-
ceptos que, cambiando las revoluciones en peligrosas turbulenci<is, traen
la ruina irreparable de la Patria.
Todo conspira imperiosamente por que se acelere el precioso mo-
mento en que Chile oiga la voz suspirada de una Constitución. ¡Dichoso
el Gobierno bienhechor que realice esta dulce esperanza! La edad pre-
.sente transmitirá su memoria a la posteridad con aquel lenguaje de
gratitud que hace inmortales a los héroes, adorable el nombre de Legis-
ladores y envidiable la suerte de los pueblos.

F·ray Camilo Henriquez

(Publicado en "El Mcllrl.Ítor Araucano", tomo TI, núm. 69, de 12 de agosto da 1814,.) .
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Revista Masónica de Chile

ORIENTE DE SANTIAGO DE CHlLE
AÑO XLII MAYO- JUNIO DE 1965 N.os 3-4

EDITORIAL

011e cada cual cu 111p/a co11 su DEBER

La Francmasonería Chilena acaba de :realizar un acto de reafirma-
Clan doctrinal e inalterable consecuencia en sus procedimientos, constitu-
yendo prueba evidente de la solidez die una conducta intachable y del
acertado ejercicio de doctrinas inspiradas en los más puros y altos ideales.
Esta bella ecuación de pensami!ento y accióm, con prescindencia de
egoísmos particularistas y dogmatismos li:mitadores, ha dado ahora, en el
presente, como lo diera antaño, el fruto magnífico, que es eterna caracterís-
tica de la in:;titución francmasónica esparcida por el mundo entero, consti-
tuyendo la más bella esperanza del hombre, porque se basa, no en la
acción masiva de organismos obedientes a particulares apetencias y per-
sonales ambiciones; ni en la persistencia empecinada de tácticas y trayec-
torias encaminadas a finalidadBs que sólo favorecen a una clase, a una
minoría, a un partido, a un credo o a una nacionalidad.
Las saetas de la Francmasonería buscan clavarse en la elevada diana
donde pone sus ang.ustiados ojos la Humanidad entera.
Somos, con la más rica y variada policromía, elementos que buscan
componer el más hermoso cuadro de una mejor vida; y en la diversidad de
nuestras voces y sonidos, armoniosamente concertados, queremos llegar a la
gran sinfonía universal.
Unidad de propósitos servida por las más distintas formas; todas las
razas al servicio de urna sola especie: la especie humana.
Permanecemos invariablemente consagrados a lo que une y no a lo
que separa o diferencia siquiera a los homlbres.
La finalidad que per.seguimos, el objetivo buscado, la meta jamás
bastantemente alcanzada y al margen de lo mezquino e individual, para
entrar de lleno en la entraña del problema, no es otra q.ue el bienestar
general, merced al esfuerzo tesonero de todos y de cada uno de nosotros y
con· el propio sacrificio, si ello fuese necesario.
Por eso, y para eso, la Augusta Orden, una y diversa, que procura
la unidad y que combate todo dbgmatismo, tiene', sin embargo, algo que
es también un dogma, pero que sólo estriba en urn fundamento capital: en
su espiritualidad y es firmí.>s:ima garantía y sostén de la libertad de pensa-
miento, base de la formación ética y estética dBl Hombre.
Gracias a ello la Orden habrá cumpldo su óptima función, Y los
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C!Ué én ella estarmó;s o:si formados podemos éhórgullecerhos de dar cimet a

la sublime aspiración de la lnstit!ución, una y la misma en los más distin-
tos lugares del mundo.

Esto es lo que acaban de hacer los Masones chilenos con algo que
es:tá virtualmente inmerso en e§e ecuménico y espiritual principio de lo
trCIII1scendente y universal sobre lo transitorio, mezquino y Iocalista.

Se ha prescindido del particularismo, no só~o en lo pe~2onal sino tam-

bién en las tendencias, para que los Hermanos elegidos como gobierno
rector de la Gran Logia de Chile representen el sentir universalista, de hon-
do cont,enido humano, y que, de capitán a paje, desde la figura magnífica y
extraordinaria del Serenísimo Gran Maestro, Ilustre y Poderoso Hermano
Aristóteles Berlend!is Sturla, sobre quien en estos ins tant,e s convergen todas
las miradas del pueblo chileno, hasta el más joven de los hermanos que
forman la Oficialidad y organismos superiores de la Orden, lleven, además
del respaldo de la Institución entera, la colaboración personal de cuantos
en ella militan.

No somos -porque tal cosa estaría en pugna con nuestras prácticas

y doctrinas y la propia dignidad - hombres: esclavizados mentalmente; per-
tenecemos a distintas y aún encontradas ideologías políticas, sociales o
religiosa:>, pero, sin mengua de ellas, ni menoscabo de nuestros deberes,
en lo francmasónico, mantenemos un inalterable respeto a los eternos Postu-
lados que ni alteran la diferencia de nuestro pensar profano ni influyen en
s-impatías personales o colectivas de nirnguna clase.

A esta norma obedece, como se le vie ne diciendo a los Hermanos desde

el momento de su Iniciación, la perennidad y firmeza de la Francmasonería,
sobre la que no influyen causas o motivos pasajeros o se cundarios.

Nuestra labor, eternamente inconclusa, así lo exige, porqrue es tam-

bién eternamente consUib:s.tancial con la humana condición.

La Francmasonería Chilena, en todo momento, aún en estos por que

atravesamos, que pudieran ser cruciales ante un enemigo prepotente y endio-
sado, tiene el daber ineludible de cerrar s.u s filas y levantar el corazón al
nivel de sus cimero.> pensamientos, para que el Gobierno simbólico, tan
limpiamente elegido y proclamado en las recientes Asambleas de Pente-
costés, cuente con la mejor y más eficaz arma de combate.

Luchemos resueltamente al lado del Gran Muestro, Grandes Digna-

tarios y orgarnismos que. lo acompañan y :seguiremos cosechando triunfos,
recuperando posiciones que nos fu eron arrebatadas y poniendo al servicio
de la Francmasonería Chilena, que es la causa de la Patria y la Huma-
nidad, cuanto hay de bueno en nuestro cerebro y en nuestro corazón.

Para esto sólo se precisa que hagamos realidad lo que en Trafalgar

pidió, con espartCIIl1a concisión y elocuencia, nuestro glorioso Hermano Nel-.
son y que parafraseamos en el título de ets.te editorit.rl: "que cada cual
cumpla con su deber".

2-
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ta Vóz da lct Ma~tria.~

Nuestra Belleza
En el mundo profano, los conceptos de la belLeza son múltiples, dispa-
res y divemos. Van desde la armo rúa ¡a:e .las formas y la perfección estética,
aiecta a las más extrañas interpretaciones, hasta la idea de que só_o se trata
de una mera percepción sensonal que estimula y excita nuestra sensibilidad.
Por lo tanto, en el tumulto profano existen tantos conceptos: de la belieza co-
mo escuelas, agrupaciones e individuos hay.
Felizmente, la Belleza masónica es única, incontrovertibJe, incompa-
rab~e y .superior a toda concepción especulativa exterior. Nuestra .l::lclleza
es la expresión sublime, permanente y radiante, cci.'e una exaltación espiritual
propia y exclusiva del Francmasón.
Nadie que no haya si:do "iniciado" en nuestras prácticas y doctrinas
podrá jamás apreciar, o intuir, la majestad, la trascendencia, la elevación y
la proyección de nuestra Belleza. Por toda er;to, la Belleza masónica es eter-
na y será siempre la Luz que iluminará nuestros actos, que inspirará nues-
t;os Trabaj'0s y que acrecentará, potenciámdblo:s, nuestros fervientes propó-
sitos de una activa, diaria y laboriwa tarea destina!da a obtener una armo-
niosa convivencia humana basada en la solidari!dbrl', en la fraternidad más
pura, en la justicia social y en la dignidad del Hombre.
Sólo si se tienen presentes estos conceptos, captaremos, en profundi-
dad, la magnitud de nuestra Belleza. Ella no sólo da esplendor esotérico a
nuestras cerem0111ias rituales, sino que aureola de prodigio to!db acto y toda
acción inspirada en los Principios y en los Fostulad01s: de, la Aug.usta Orden.
Nuestra Belleza comienza en la tolerancia¡ continúa acentuándose con
el ejercicio de la bondad¡ sel cimienta en la virtud y culmina gloriosamente
en el amor fraternal.
ESta verdadera estética de nuestro comportamiento determina la efec-
tiva unión, respeto y aprecio, entre los pueblos¡ la perfecta igualdad entre
los l3eres humanos y la suprema libertad de los espíritus.
Nuestra Belleza es, por lo tanto, el término feliz de una fecunda jor-
nada de superaciÓI!1. Es la meta final en el sendero de la re-alización espi-
ritual. Es, consecuencialmente, el tercer cirio encendido en el Ara.
Masónicamente, la Belleza 1110 es únicamente la percepción sensorial
que halaga y regocija nuestra sensibilidad artística. Para que la Belleza
alcance la plenitud iniciática debe estar estructurada y saturada de bondad,,
de verdad y de virtud. Una belleza cCII1ente de estas altas cualidades no es
otra cosa que un fragmento, inerte y frío, de una concepción masónicamente
Ln trascen.den te.

-3
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Nuestra Belleza, representada simb6licamente por la teroorct Luz de

la Logia, es el ténnino creador de un verdtiidiero proceso cósmico que sólo
pueden aprecior y disfrutor los verdaderos iniciados.
Estos son los motivos por los cuales la Belleza preside y sublimiza
nuestra trayectoria masónica . .t:lla nos ilumina y nos incita para que nuestros
Trabajos .c ohckanos sean grávidos y feraces, productivos, esenciales para la
gran tarea que se ha impue.3to la Francmasonería Universal: llevor la Hu-
manidad a la perfección y hacia un nivel superior en que todos los hombres
sean, real y po:3itivamente, ig.uales y hermanos.
Mientras la Belleza p f1e¡3:ida y realce nuestra acción mas6nica estore-
mos ciertos de que nuestrps pasos van por el camino recto y que estamos
luchando, con acierto y CO!rl e ficacia, en la eliminación de los obstáculos que
impiden una limpia, pura y mutua comprensión entre 1os hombres.
Así, · pues, la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza masónicas tiene¡n un
profundo sentido iniciático. Ellas son indispensables para nuestra total reali-
zaciÓin. ma:3ónica. Ningún Hermano puede sentirse satisDecho y contento de
la labor cumplida si su existencia no está aj.ustada e inspirada por estos tres
conceptos que son básicos en nuestra Institución y sin lm cuales es total-
mente imposible alcanzor la superación espirituaL por la cual todos lucha-
mos can empeño y con decisión.
En resumen, nuestro trinomio fundamental puede sintetizarse en las si-
guientes conclusiones, que todo Francmasón debe tener siempre presente: la
Sabiduría, fruto de la reflexión, de la experiencia y de la comprensión, nos
señala una conducta de vida ejemplar y cohesiona im.tensamente nuestra men-
te y nuestro espíritu con el objeto de potenciarnos de una Fuerza superior
que no:s impulsa a trabajar vigorosamente en la construcción de una nueva
Humanidad. Asimismo, hace carne e1t1 nosotros los elevados sentimientos de
bondad y de nobleza que, al ser iluminados por nuestra Belleza, determinan
finalmente al Francmasón justo y perfecto.
Para alcanzar este supremo ideal debemos, pues, mantener imperece-
derame.nte ence1t1didas estas tres luces primordial,e s en nuestro templo in-
terior, mientras dure nuestro Medio Día para que cuando llegue la Media
Noche, la luz física que iluminó nuestro tránsito material, Sie transfonne en
la Luz eterna de nuestro Espíritu.

AKBAR
Emperador de la India a partir de 1555 y uno de los soberanos
asiáticos más grandes y más ilustrados. Nació en 1542 y murió en 1605.
Aunque había sido educado dentro del Islam, gobernó un pueblo con-
quisbr.do por la fuerza, dio a sus súbditos hindúes la libertad de culto
___;,si bien rehusó permitir las formas más extremadas de ascetismo Y
la cremación de viudas en las piras funerarias del marido- e invitó a
los misioneros portugueses de Goa a darle a conocer el cristianismo.
Parece ser que pretendía fundar una nueva religión que reuniría los
mejores rasgos de los cultos rivales.

51/deodafo Qarcía Valen zuela
El Hermano Adeodato García Valenzuela fue
el décimoquinto Gran Mae·s tro de la Gran Logia
de Chile. Era un masón que había prestado di-
latados y valiosos servicios a la Orden y que
gozaba de gran prestigio en el mundo profano
por su calidad de médico y de profesor univer.
sitario.
Había recibido la luz masónica el 13 de mayo
de 1902, en la Respetable Logia "Justicia y Li-
bertad" No 5, de Santiago. Poco tiempo después,
por razones de estricto carácter personal, ·soli-
citó su retiro, el que le fue .a cordado en septiem-
bre del mismo año.
Cerca de diez años permaneció alejado de la
Institución; el 21 de julio de 1910 se reincor-
poró a las columnas de su Logia Madre. Pronto
se distinguió por su laboriosidad y p or su es-
píritu fraternal.
En 1912, para honrar la memoria del Ilustre
Hermano Juan José La torre, fallecido en tal fecha
y que había sido iniciado en la Respetare Lo-
gia "Unión Fraternal" No 1 -caída en sueño-,
la Gran Logia de Chile acordó su reapertur.a en
Santiago. Para llevarla a efecto se designó u.na
Comisión de .Hermanos, entre los cuales figura-
ba el Hermano Adeodato García Va lenzuela.
Los trabajos se vieron coronados por el éxito
y el Hermano García Valenzuela se quedó for-
mando parte, en forma definitiva, de las colum-
nas de la Logia a cuya re:=tpertura había con-
tribuido.
Durante los años 1914 y 1915 ocupó el
cargo de Venerable M aestro. En la Asamblea
General de la Gran Logia de Chile, celebrada
el 31 de mayo de 1914, fue elegido miembro del
Consejo del Gran Maestro y poco después Gran
Secretario. Por esa misma época, 1915, la Logia
"Francisco Bilbao", N 9 23, de !quique, lo eligió
como su Diputado .a nte la Gran Logia.
También en dichos meses había salido a la
arena periodística a c:=tmpear por los fu eros de
la verdad y contener los ataques viole.ntos de la
prensa clerical.
En 1920 dictó varias conferencias en la Res-
petable Logia "Unión Fraternal" N : 1, las que,
posteriormente, fueron recopiladas en un folleto
bajo el título de "Símbolos, Mitos y L eyendas".
Dichas confere;ncias giraban sobre un tema cen.
tral: "Símbolos y Números Simbólicos" .
En esos trabajos se encuentra conde.nsada su
idea masónica: el simbolismo. Y a ese princi-
pio se mantuvo fiel toda su vida.
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En Asamblea General de la Gran Logia de
Chile, de 9 de mayo de 1924, fue elegido Gran
Maestro c~e l.:=t Orden. Fue el único Gran Maestro
que permitió a los periodistas y fotógrafos de
órganos de publicidad el a cceso al recinto ma-
sónico.
Muchas y muy f undadas esperanz:=ts se pusie-
ron en la obra futura del nuevo Gran Maestro.
S'U talento, ·su erudición, su no discutido amor
por la Institución, cuyos destinos estaba llama-
do a regir, hacían pe.nsarlo así.
No obstante, infaustos sucesos que conmovie-
ron a la opin:ón pública y que hicieron vacilar
los cimientos mismos de las instituciones cons-
tituciomJes y que determinaron la caída del
Presici.ente de la República, Hermano Arturo
Alessandri, hicieron llegar su rumor hasta las
puerta-:; de los Templos masónicos.
En marzo de 1924 se h abían efectuado elec-
cione·s parlamentarias. La ludha fue encarniza-
da y violenta, y triunfó la combinación política
denominada "Alianza Liberal", compuesta por
los partidos de avanzada social: el radical, el
demócrata y una fracción del liberal.
La oligarquía ·ve.ncida se refugió en una or.
ganización secreta semi-terrorista, la "Tea", cu-
yos fines, principios y organización eran secre-
tos ; .y su principal rol se redujo a preparar y
conseguir la intervención del Ejército en la po.
lítica y en contra del movimiento democrático.
Para ello se utilizó hábilme,nte su situación eco-
nómica angu-stiosa, derivada de los bajos suel-
dos, recortados por la depreciación monetaria.
El Presidente Alessandri defendía el .aumento
de sueldos y salarios, pero eran precisamente
los miembros de la oligarquía quienes se opo-·
nían y lo obstaculizaban, a la vez que explot:=t-
ban la situación, de la que era.n los únicos cul-
pables, para desacreditar al Goqierno.
"Una actitud desgraciada y extemporánea del
P arlamento, que en vez de despachar el aumen-
t o solicitado y otros proyectos para arbitrar
fondos al Erario, se dedicó a discutir un pro-
yecto de dieta parlamentaria, precipitó el des.
contento de las Fuerzas Armadas en una ac-
ción insurreccion:=tl.
".En el fondo de la actitud de los militares
se movían intereses cuantiosos, provenientes de
la acción encarnizada de la oligarquía para re-
cuperar el poder" (Julio César Jobet: "Ensayo
Crítico del Desarrollo Económico-social de
Chile").
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"Los oficiales, que en la noche del 2 de sep-
tiembre concurrieron al Senado, e·s tuvieron muy
lejos de imaginarse la trascendencia política que
iba a tener ese paso. Ellos no representaban
ninguna tendencia política. Querían, simplemen-
te, prote·star con Slol presencia, del acto que se
iba a consumar. Sin embargo, no sería extraño
que, disimuladamente, los políticos contrarios al
Gobierno hubieran lanzado una insinuación en
aquel sentido. El terreno estaba preparado, bas-
taba arrojar la semilla al surco para que germi.
nase rápidamente: Es preciso recordar también
que alg1t1nos políticos de la "Ui!'lión Nacional"
(combinación hostil al Presidente Ale·s sandri)
se habían anticipado a la tarea de preparar un
movimiento contra el Gobierno", (General Car-
los Sáez M. "Recuerdos de un Soldado. El Ej.ér.
cito y la Política") .
La reacción aplaudió y estimuló y, en cierto
modo, encauzó el golpe militar que traía como
COI-:J.secuencia inmediata la salida del Presiden-
te Alessandri y la desorganización de los par-
tidos liberales que lo acompañaban. Y, por en.
cima de todo, el alejamiento del Gobierno de
los ministros masones que habían colaborado
con él.
Cabe recordar que se habían desempeñado
como ministros desde diciembre de 1921 a julio
de 1924, los siguientes Hermanos: Pedro Agui-
rre Cerda, Daniel Martí.nez, Héctor Arancibia
Lazo, Víctor Celis Maturana, Octavio Ma'ra,
Pedro Fajardo, Carlos Alberto Ruiz, .Vicente
Adrián, Domingo Durán, Alfredo Ewing, Gui-
Uermo Labarca, Ramón Briones Luco y Gas-
par Mora Sotomayor.
Felizmente, hasta los Templos masónicos só-
lo llegaba el eco de los acontecimientos que se
desarrollaban en el mundo profano. Los Herma-
·nos se congregaban en sus Logias y llevaban a
efecto sus acostumbrados trabajos; y allí, en su
mutua compañía, recobraban la tranquilidad de
ánimo que a veces perdían en los ajetreos de
la vida exterior.
Pero acontecimientos de la índole del movL
miento militar del año 1924, se sabe cu¡ándo em-
piezan, pero se ignora cuá ndo terminarán. En
esa emergencia, la Masonería hizo lo único que
podía hacer y que le era dable hacer: mante-
ner la cohesión y la fratermidad en sus colum.
nas. Para ello se organizó lo que más tarde se
denominaría la semana masónic.~~ y que consis-
tia en la realización de tenidas de conjunto de
todos los Talleres del Valle, que se llevaron a
efecto durante U•-:l.a semana en forma ininte.
rntmpic1a.
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Lo más preparado y elocuente de los Hermá-
nos de las diversas Logias abordaron y desa-
rrollaron temas del más alto interés masónico,
cultural. educativo y filosófico; y el Gran Tem.
plo se v:o, noche a noche, repleto de .Herma-
nos, .algunos venidos ex-profeso de provincias,
que acudían a templar su espíritu al calor de
la fraternidad.
La Gra.-:1. Maestría del Hermano Adeodato
García Valenzuela fue una de las más breve·s
que se conocen en la historia de la Masonería
chilena: 9 de mayo a 8 de noviembre de 1924,
ya que en dicha fecha presentó ante el Conse.
jo la renuncia de su cargo.
Tal renuncia, por lo i."!lesperada, tomó de sor.
presa al pueblo masónico. Ello era natural, pues,
por lo común, cuando se acercaba la fecha en
que un Gran Maestro termina su período, ya se
esbozan las nuevas perspectivas : r eelecc:ón, :;;i
procede, o designación de candidato al cargo.
'Pero esta vez, el hecho se produjo ta.n de im-
proviso, que los miembros de la Gran Logia
-vale decir, los electores-, quedaron de-scon-
certados. No obstante, urgía colocar al frente de
la Orden a un masón que tuviera visión clara
de las cosas, en vista ·del cariz que tomaban
los acontecimientos en el mundo profano.
A,"!lte tal emergencia, un nombre brotó espon.
táneamente de todos los labios: el de Luis Na-
varrete y López.
El ex Gran Maestro se encontraba con ·s u sa-
lud bastante quebrantada y, por lo tanto, fí 3i-
camente imposibilitado para afrontar la tarea
excepcionalmente cl.elícada que la situación de-
jaba entrever. Pero su ánimo e.-:rtero y su amor
por la Institución le inspiraron una acertada
solución: aceptó el cargo y ya d esignado Gran
Maestro, con fecha 3 de diciembre de 1924 dic.
tó un Decreto basado en el .artículo 63 de la
Constitución Masónica, por medio del cual nom-
bró Gra."1. Maestro adjunto al Hermano Héctor
Boccardo ; y una vez que lo hubo investido de
la autoridad n ecesaria para desempeñar sus
funciones , volvió a su retiro c:.e enfermo. No
renunció de inmed'ato, pues ello habría equiva-
lido a agravar el problema en vez de solucio-
narlo. Se limitó a delegar t emporalmente su
mandato.
Pese a los buenos propósitos que abrigara el
Hermano García Valenzuela, la brevedad de su
mandato y, especialme.-:rte, las difíciles circuns.
tancias que se presentaron al pais a partir de
septiembre de 1924, no le permit:eron realizar
una obra de proporciones.
BENJAMIN OVIEDO
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~a Gran ~ogia de Chile

celebra las
Tenidas de Pentecostés
Las solemnes Asambleas de Víspera de Pentecostés y de Pentecostés se
llevaron a efect~ los días 5 y 6 de junio de 1965, respectiv:amente.- Bri-
llante exposición dcl Gran Maestro) al cumplir seis añ~ .en este impor-
tante cargo.- Reelección del nustroe y Poderoso Hermano Aristóteles
Berlandis para: un tercer pell'íodo como Gran Maestro.- La nueva
Gran Oficialidad.

De acuerdo con lo dispuesto por la Co.nstitución Masónica, la Gran Logia

de Chile celebró, el sábado 5 y el domingo 6 de junio, las tradicionales Tenidas
de Vísperas y de Pentecostés. Debido a que estas Asambleas, que tanta tras-
cendencia tienen para el desenvolvimiento de la Francmasonería Chilena, coin-
cidían, en el presente año, •con la elección del Gran Maestro, Grandes Oficia-
les. miembros del Consejo, del Tribunal y del Consejo de Beneficencia de la
Gran Logia, se pudo comprobar una asistencia extraordinaria de Ilustres Her-
manos de todos los Valles de la República.
La Asamblea de Vísperas de Pentecostés alcanzó relieves excepcionales,
tanto por las razones indicadas como porque se esperaba, con -expectación, la
lectura del Mensa je Anual del Gran Maestro que, como todos los años, da a la
Augusta Orden una pauta de acción de acuerdo con los altos Principies de la
Institución y en concordancia co.n la situación del mundo profano.
En esta oportunidad, el Mensaje del Gran Maestro satisfizo todas las
expectativas; fue severo y preciso en sus planteamientos; señaló y examinó di-
versas actitudes inadecuadas en la hora presente; fue claro y sin eufemismos
en la autocritica; fustigó la falta de energía para acentuar la actuación pro-
fana de algunos Hermanos; hizo hincapié en la necesidad de intensificar los
trabajos masónicos y señaló, con energía, los deberes y las obligaciones de to-
dos los miembros de la Fraternidad en estos instantes que sc,n cruciales para
el país.
El Mensaje del Gran Maestro impresionó vivamente a los asistentes de-
bido a que no sólo se refirió a los temas mencio,n ados, sino porque, al cumplir
su Mandato. hizo un recuento y un balance de la labor realizada en los dos
períodos en que empuñó el Mallete Rector de la Francmasonería Chilena.
En consideración a su importancia, este Mensaje se·r á publicado íntegra-
mente en un folleto que se repartirá 1. todos los Talleres .de la Nación. Nuestra
Revista, por este motivo, se limitará a dar un breve resumen del mismo.

MENSAJE DEL GRAN MAJ!lSTRO

"Finaliza en la Asamblea de I:.oy -empezó diciendo el Gran Maestro--

una etapa en la que, como en toda obra humana emprendida con propósitos
generosos. se amalgaman ac.c iones positivas y desaciertos que es me.nester ...-es-
tos últimos- cono::erlos y analizarlos a fin de rectificar o corregir, pues el
hombre, en la esfera de la actividad que cumple, ha de ser modesto y estar

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ajeno a toda soberbia y dogmatismo. Y, como es natural y lógico suponerlo,

esta actitud adquiere mayor signifícación y valor entre Masones".
Después de señelar y destacar con franqueza las realizaciones alcanza-
das como aquellas que se ha.n podido concretar por diversas circunstancias, hi-
zo un exhaustivo análisis de las causas que han impedido a la Orden desarro-
llar una labor más positiva y más creadora de acuerdo con los Postulados de
la Institución y con la realidad que vive el país.
"Pero yo n.o sería justo y ponderado en mis juicios -agregó- si no de-
jara .constancia de mi reconocimiento hada un grupo de Herma.nos disemina-
do a lo largo y ancho de nuestro territorio que, con la fe del sembrador bí-
blico y sólo como él, mantiene encendido el fuego de su entusiasmo y se con-
sagra a la generosa y noble tarea de cumplir con la misión señera que abrazó
al ingresar a la Masonería. Mi reconocimiento y gratitud para las Logias, Trián-
gulos y Masones de provincias para quienes su tarea va mucho más allá de la
simple asistencía a Tenidas y que se consagran por entero a una misión que
es de sacrificio, de abnegación y renunciamiento ·p ersonal".
Al referirse al Consejo de la Orden, el Gra.n Maestro desta..-:ó que este
cuerpo directivo ha estado "compuesto por destacados y dignísimos Masones
que a través de sus actuaciones en la vida profana y, muy particularmente,
en el ejercicio de sus respectivas actividades profesionales, han sabido darle
brillo y jerarquía a nuestra Augusta Orden. Sus nombres -manifestó~. el
prestigio y prestancia, a la vez que la solvencia moral que exhiben, ha.n sido
prendas de honestidad y re.c titud que el mundo profano ha sabido apreciar,
con lo cual han hecho un gran bien a la Masonería Chilena".
"Bien sabido es -abundó- que el Consejo comparte, junto co.n el Gran
Maestro, la dirección o gobierno superior de la Orden y no puedo menos que
expresar públicamente, en esta magna Asamblea, mi personal reconocimiento
y hondo afecto hacia todos y cada uno de lo.s Consejeros, con quienes tuve
el privilegio de trabajar en la más íntima eomunión espiritual. La abnega-
ción y sacrificio, el desinterés, ponderación y recto juicio de cada uno de ellos,
fueron estímulos valiosos que me incitaron al trabajo en bien de la Institu-
ción. La cordialidad, la fraternal amistad, la opinión serena y franca; la
leal y efectiva colaboración que me dispensaron, han dejado en mi espíritu una
honda y agradable huella".
"Desde 1959 hasta la fecha -precisó- el Consejo de le Orden ·celebró
112 sesiones, con un promedio .de asistencia superior al 85:%, dedicando sus reu-
niones al estudio y resolución de múltiples y variados problemas derivados de
la marcha de nuestra Institución. De los asuntos tratados, como simple infor-
mación, puedo señalar los siguientes: construc·ción del nuevo edificio masóni-
co; estado actual de la educación pública y medios para orientarla y condu-
cirla de acuerdo con los Principios masónicos; estudios de los nuevos estatutos
del Club de la República; autorización para el funcionamiento tdel Grupo Pa.
ramasónico de Conta.dores; creación del Triángulo "Cantera"; creación de la
Respetable Logia "RIO LOA"; Plan de Docencia Masónica; situación de dam-
nificados por el terremoto del sur del país; crea-::.ión del Triángulo "Tucapel".
de Cañete; planteamiento de la Convención Nacional de Acción Masónica;
informe sobre la Conferencia de Puerto Rico de la Francmasonería Simbólica;
informe confidencial sobre la Masonería Cubana; Masonería y juventud; po-
sición de la Orden frente a la Iglesi-a Católica y Concilio Ecuménico; creación
de la Respetable Logia "HUMBOLDT", de Osorno; creación de la Respetable
Logia "PAINE", de Puerto Natales; creación de la Respetable Logia "CONCEP-
CION", de Concepción; creación de la Respetable Logia "CONSTITUCION", de
Constitución, etc."
A continuación, el Gran Maestro se refirió extensamente acerca de la

8-
 lalp

fecunda . labor reaHzada por la Gran §ecretada Generai. "El Gran ~ecretario
~advirtió- ha llevado, desde mayo de 1959, el peso de las tareas adminis-
trativas de la Orden, orientando y controlando la actividad desarrollada por
las Logias y Triángulos de la Obediencia. Esta labor, ardua y difícil por el vo-
lumen y diversidad de asuntos que le incumben, se realiza a través de los De-
partamentos, Secciones y Oficinas bajo su dependenci-a o con las que se re-
laciona directamente, como es el caso del Tribunal de Honor, de la Gran Te-
sorería, del Consejo de Beneficencia, de la Sociedad Inmobili:aria, etc. Debe
atender, además, las permanentes y numerosas consultas que formulan los Ve-
nerables Maestros, Miembros de la Oficialidad y Hermanos de Santiago y pres-
tar especial atención a las entrevistas y cc,nsultas de los Hermanos de pro-
vincias".
"En el transcurso de los últimos años -'agregó más adelante-, la Franc.-
masonería chilena ha experimentado un crecimiento, tanto en el número de
miembros que la integran, cuanto en las actividades que se cumplen, todo lo
cual ha dado origen a una mayor complejidad de las funciones administrati·
vas. Ya no es posible pretender gobernar a esta Institución con el criterio de
hace 20 o más años, ni es posible continuar con el criterio de 1940 ó 1950 en
lo que se refiere a la organización .de las Oficinas y Servicios dependientes de
la Gran Logia. Es menester, entonces, dar una nueva organización y admi-
nistración a los organismos directivos para que estén en condiciones de ser-
vir con eficiencia al volumen actual y al de los próximos veinte años, a la
vez que permita adaptarse a los constantes cambios que se operan en la so-
ciedad y que, como es lógico suponer, repercuten e influyen en el quehacer
masónico".
"Estamos firmemente convencidos que los servicios administrativos de la
Gran Logia no rendirán los frutos que de ellos se espera, si no se modifica el
criterio para aplicar la administración. Las documentaciones, servicio de co-
rrespondencia,. los archivos, las estadísticas, et::., sufren grave retraso y no
mar.chan con la celeridad y eficiencia que se desea, justamente por una ina-
decuada organiz-ación y administración. No es posible mantener· en los dife.
rentes departamentos y servicios a un equipo de funcionarios o colaboradores
mal rentados que consagran teóricamente dos horas diarias a la Gran Logia.
al final de una jornada de ocho horas de actividad profesional cumplidas en
el mundo profano. La capacidad y rendimiento humanos tienen su límite y no
olvidemos que la Francmasonería, al exaltar el trabajo, nos recuerda, con la
regla de 24 pulgadas, la distribución de la activ:Ld:::d diaria que debe cumplir
el hombre. Así, pues, esperamos que el nuevo Gobierno Simbólico que asuma
en el día de mañana, enfrente en forma definitiva el reacondicionamiento de
los servicios y funciones administtrativas de la Gran Logia".
"Creemos, sin embargo, que no es posible continuar con una política 1de
remiendos o parches, con iniciativas desperdigadas, inconexas y hasta mu-
chas veces opuestas. Es necesa,rio ir, de una vez por todas, a la planificación
integral de la organización, estructura y funciones para que sirvan con efi-
ciencia los fines objetivos y metas . que se trace el Gobierno de la Orden".

OFICINA DE RELACIONES PUBLICAS

Por lo que respecta a. las actividades de esta Oficina, el Gran Maestro

manifestó en su Mensaje:
"Esta Oficina dependiente de la Gran Maestría, crea,d:a por . Decreto
Nc;> 106, de 10 de agosto de 1960, con el laudable propósito de correlacipnar . las.
actividades y el . conocimiento de los Hermanos entre sí, en lo que a sus ocu-
paciones profanas se refiere, ha desarrollado, en los seis .ú ltimos años, una

- 9.
 lalp

importante labor (IUe favorecé especialmente a los tniembros de la Orden en

provincias, que acuden a ella en demanda de información y orientación para
múltiples objetivos, tales como atención médi:!a por Hermanos especialistas
para ellos y sus familiares, auntos de carácter legal o judicial, tramitaciones
de expedientes en los distintos Ministerios y servicios públicos de la capital, etc."
"Para el cumplimiento de este cometido cuenta esta oficina con una
estadística clasificada de las ocupaciones y actividades profanas de los Her-
manos, la que se mantiene al día, de año en año. Cabe hacer notar lo difícil
que resulta confeccionar este trabajo estadístico anual por el atraso con que
algunas Logias envían los Cuadros y por la insuficiente información que ellos
proporcionan en lo que a datos profanos de los Hermanos se refiere. Es indu-
dable que, al contar con un mayor acopio de información sobre esta materia,
podrán extenderse los servicios de esta Oficina hacia muchas actividades sobre
las cuales no ha sido posible conseguir datos por el momento".
"Durante el lapso de cinco años que se ha indicado, esta oficina ha mo-
vilizado 542 expedientes bajo registro, obteniéndose éxito en el servicio de-
mandado por los Hermanos en más del 90 por ciento de los casos, ruparte de
las innumerables orientaciones proporcionadas tanto a los Hermanos de pro-
vincias como de- la capital, que acuden constantemente en consulta personal".

BfflLIOTECA

A rontinua<:ión reproducimos parte .de las referencias del Gran Maestro

a otros organismos de la Gran Logia de Chile.
"La Biblioteca de la Gran Logia de Chile, consecuente con su misión
eSipecífica, pero sujetándose a las circunstancias que le imponen la instala-
ción de la nueva Sede de la Institución, procura mantenerse al día, al menos
en lo posible, adquiriendo los libros de mayor interés, de más palpitante ac-
tualidad e intensificando lo que a revistas y otras publicaciones periódicas se
refiere". , . · •.. , ~ !4 i\
"Al propio tiempo se prepara el nuevo loca.! en que desarrollará sus in-
teresantes actividades culturales, hasta que llegue el día en que nuestra Bi-
bliote-ca constituya uno de los más legítimos orgullos de la Orden".

REVISTA MA.SONICA DE CHILE

"Esta p·u blicación periódica de la Gran Logia de Chile y su órgano ofi-

cial ha seguido intensificando su labor de adoctrinamiento y de información,
procurando, con indudable eficacia, mejorar las condiciones estéticas de la
Revista y ateniéndose acuciosamente a la ética de la Institución.
· "Es indudable que la colaboración de la "Revista Masónica .de Chile"
mejora de día en día, respondiendo así a su finalidad y al prestigio de las
p~umas, consagradas unas e inéditas otras, que redactan este órgano del pen-
samiento Francmasónico chileno.
"Como consecuencia del notable mejoramiento en calida-d de los traba-
jos que publica, como asimismo en lo que se refiere a su presentación, esta
Revista ha reconquistado el favor de los Hermanos, que la solicitan con ver-
dadero interés.
DOCENCIA MASONICA

El Consejo de la Orden inició, a fines de 1959, un serio y exhaustivo es-

tudio rela.cionado con la formación más ade,c uada que debían recibir Apren-
dices, Compañeros y Maestros, a fin de superar ló que denominábamos en el
trabajo "Eih Defensa ele la. Orden", 11:1. crisis de la Maestría. Posteriormente, a
 lalp

comienzos de 1960, en base :\ 1as ideas exp·uestas, ei Segundo Gran Vigilante

presentó al seno del Consejo un proyecto de plan destinado a modificar la
docencia masónica, trabajo que con ligeras modificaciones fue aprobado por
unanimidad por los Venerables Hermanos Consejeros y, posteriormente, apro-
bado por la Asamblea de la Gran Logia de Chile".
"El Plan de Docencia Masónica constituye, indudablemente·, un docu-
mento de inapreciable valor, bien vertebrado y concebido y elaborado con una
visión integral del problema, uno de los más agudos que aquejan a nuestra
Augusta Orden. ,T iene, además, el mérito de aprovechar los actuales recursos
espirituales y materiales de que dispone la Francmasonería, reordenando y
correlacionando actividades que funcionaban dispersas e independientes para
utilizarlas en función de una integral y adecuada formación masónica de nues-
tros elementos humanos. No voy a referirme en detalle a este Plan de Docen-
cia, impreso y dis.tribuído por la Gran Secretaría en forma profusa a todas
las Logias y Triángulos de la Obediencia".
"Hemos logrado afianzar como algo tradicional en el proceso de docencia
masónica las ,c eremonias finales que se ha dado en llamar "Fiesta del .A!pren-
diz", "Fiesta del Compañero" y "Fiesta del Maestro". Ellas constituyen algo así
como un sencillo, afectuoso y fraternal proceso de .e valuación realizado en
familia, el que ha dado óptimos resultados. Anualmente llegan a la Gran Se-
cretaría ejemplares impresos de los programas, discursos y trabajos presenta-
dos en tales Fiestas y a través de estos documentos puede advertirse el amor,
cariño y consagración que pusieron las Logias, especialmente de provincias, y
sus Cámaras de Instrucción en hacer de ellas dig.no corolario de tan nobles
y generosos afanes.
"Debo destacar como otra acción valiosa y constructiva de la docencia
masónica, lo que hemos denominado "Cámaras de Verano" -nacidas tímida-
mente a niodo de ensayo- hace algún tiempo, y que · en la actualidad han
logrado asentarse sobre sólida base. Esta iniciativa, entregada al comienzo a
un grupo de Venerables Hermanos de diferentes Talleres de Santiago, la he-
mos puesto, en este último tiempo, bajo el amparo de un determinado Taller.
En ambos casos, los resultados obtenidos han sido excelentes y cumplo con
el fraternal y grato deber de expresar a sus dirigentes mi personal reconoci-
miento por esta valiosa y desinteresada colaboración prestada en favor de las
promociones estudiosas de nuestras Columnas.

RITOS Y SIMBOLISMOS

"Este Departamento ha cumplido una meritoria labor, secundando los

planes de docencia, por una parte Y, por otra, prestando valiosa ayuda a la
Gran Secretaría en consultas formuladas por las Logias de la Obediencia en
relación con rituales, simbolismos, decoración de Templos, etc.
"Debo destacar, además, la personal actividad desplegada por el Jefe de
este Departamento quien, a petición del Gran Secretario, ha viajado a dife-
rentes Valles para dar charlas sobre tópicos masónicos de su especialidad. Es-
ta participación activa del Querido Hermano Luis Sandoval Smart, tiene gran
significación para los Talleres de provincias, especialmente que, consagrados
por entero a su misión específica reclaman y reciben con avidez la visita de
Hermanos que van a orientarlos y a llevarles nuevas luces para mejorar la
calidad. de sus trabajos.
"Pero la labor personal cumplida por el Jefe del Departamento ha ido
incluso a la difusión de aspectos o temas masónicos a través de numerosos,
interesantes y bien documentados artículos que la "Revista Masón~ca de Chi-
le'' da a conocer en cada uno de sus números.

-11
 lalp

"Con satisfacción puedo informar a esta Asamblea que la Francmaso-

nería Chilena mantiene fraternales relaciones con la totalidad de las Grandes
Potencias Masónicas del mundo, para lo cual, en el lapso comprendido entre
195·9 y 1965, hemos actualizado nuestros Garantes de Amistad, muchos .de cuyos
cargos se encontraban acéfalos por fallecimiento o retiro de la Orden de Jos
Hermanos que los servían. Igualmente hemos logrado que las Grandes Logi~
extranjeras designaran, en reciprocidad, sus Representantes ante nuestra Obe-
diencia. Una lista detallada que consigna los nombres de 79 Garantes de Paz
y Amistad ante .nuestra Gran Logia se adjunta al presente Mensaje y que es
demostración inequívoca de nuestra preo::.upación e interés en estos asuntos".
''Como consecuencia de la celebración en Santia,go de la Cuarta Confe-
rencia .de la Confederación Masónica Intr-Americana, en 1958, la Presidencia de
la Confedera.ció.n quedó en manos del Gran Maestro de la Gran Logia de Chile.
Con posterioridad, el 25 de febrero de 1961, nuestra Gran Logia concurrió con
una reducida Delegación a la Quinta Conferencia que se desarrolló en San Juii:n
de Puerto Rico y la participación de los masones chilenos fue calificada de
sobresaliente, respondiendo así al prestigio de nuestra Orden ante el concierto
de las Grandes Potencias Amigas".
"El año pasado asistimos a la Sexta Conferencia que se llevó a efecto
en Lima, Perú, y como e.n ocasiones anteriores, nuestra actuación fue edifi-
cante por muchos conceptos y las manifestaciones de afecto y adhesión a nues-
tra Gran Logia y dignatarios nos comprometió vivamente. Especial mencicim
debo hacer de las extraordinarias muestras de cariño y comprensión que reci-
bimos de todos los Hermanos peruanos Y, muy particularmente, de su Gran
Maestre, Ilustre y Poderoso Hermano Franklin Ala.rco Zumaeta, de quien me
honro con su amistad".
''Con motivo de celebrarse en Santiago In. Quinta Conferencia de Sobe-
ranos Grandes Comendadores en 1964, nuestra Gran Logia tuvo oportunidad
de rendir fraternal homenaje a tan ilustres visits.ntes en una Gran Tenida
que dio origen a laudables y honrosos juicios que deben enorgullecernos".
"De cada uno de estos eventos hemos rendido detallado informe en c~da
oportunidad ante la Asamblea de la Gran Logia, a través de los Mensajes · del
Gran Maestro y de la exposición hecha por el Jefe del Departamento, Ilustre
Hermano Mauricio Flisfisch''.
"Hemos sido honrados durante el lapso 1959-1965 oon ilustres Visitas ex-
tranjeras, aprovechando cada oportunidad 'Para presentar en forma sobria y
digna la labor cumplida por nuestra Augusta Orde.n. Especial referencia debo
hacer de la visita del Gran Maestro y Gran ·Hecretario de la Gran Logia de
Escocia, Lord Bruce y Venerable Hermano Alexander Buchan, respectivamen-
te, quienes tuvieron frases de admiración que honran y prestigian a la Franc-
masonería Chilena. Al término cie la permanencia en Chile de tan ilustres vi-
sitas, quisieron rendir homenaje a la Or1den Chilena, en las personas del Gran
Maestro y del Gran Secretario, confiriéndoles los títulos honorífioos de Senior
Gr'and Warden y de Gran Ar,chitec de la Gran Logia de Escocia, respecti-
vamente".

DEPARTAMENTO DE ACCION ' MASONICA

"A cargo del Ilustre Hermano Víctor Hoyos Candina hasta el año 1964,
realizó una labor que es menester decirlo de una vez, no ha sido suficiente-
mente justipreciada 'POr muchos miembros 1de l:a Obediencia. Al contrario, se
ha pretendido responsabiJiz·a r a su Jefe de lo que en forma ligera se ha dado

12--
 lalp

en llamar inoperancia de la Ol'de.n. Han olvidado -los que así opinan- que
si bien es cierto las grandes líneas de acción las señala el Gobierno Simbólico,
no es menos cierto, también, que el trabajo señalado deben realizarlo las Lo-
gias a través de los Hermanos distribuidos en la más variada gama de las
adividades profesionales en el mundo profano".
"Durante décadas la Masonería Chilena dirigió y controló las activida-
des es::autivas en el país y :no hubo Logia de Santiago y de provincias que no
mostrara con orgullo una bien equipada brigada de Boy-Scouts. Con el trans-
curso del tiempo se fue dejando de lado esta importante acción masónica des-
tinada a sostener y acrecentar el espíritu laicO" de nuestro pueblo a través de
las promociones de niños y jóvenes y el abandono y negligencia llegó -al ex-
tremo de dejar perder el control que antes teníamos para contemplar impasi-
bles cómo la Iglesia Católica, que antes combatió con dureza ~rsistente a este
tipo de actividad juvenil, se apoderó de ella, dejando en vergonoosa minoría
a los nuestros. He querido citar este solo ejemplo !p'ara decir en seguida que
de idéntica manera sucedió con las Ligas de Estudiantes, co.n las Agrupacio-
nes o Clanes Juveniles, con los Centros de Padres 1de los Colegios y Escuelas, etc.
Han olvidado, los que a modo de descargo de la p:ropia responsabilidad; acu-
san ·d e inoperancia al Gobierno de la Orden, una parte muy importante del
Ritual de Iniciación:
"Nuestl'a Orden elige hombres, los educa, los orgruniza y d:iscipUna; esto
oo, eorrige en ellos, cuanto eS posible, los defecrtos de herencia; les enséña :a
elegir los elementos útiles del amibiente en que se d-esénvuelven, y les indica
el liUmbo de las evoluciones que han de llevadOIS a su destino.
Purifica al homb.-e, se purifica a sí milsmía, por el prorpio esfuerzo, sin
intervetn:Ciotnes extrahUJIDa,nac>: purifica P•m" medio del estudio de la ciencia, p:or
el ejercicio de la justi:c.i a y por la actividad del tl'abayo.
No es una secta, ni es UlU pa¡rtido. l!nvestiga, ernseña, educ'a1 sin móviles
religiosol3 ni polítfuiOs. Comienza su obra en 1•06 hermanos y, por oo:nsecueJncia,
le!nta pero eficaz y profunda, la te;rmina en la sooiedaJd profana.. Prescinde de
las pasiones e intereses de círc.ulo1para insptimrse sólo em. los altos idieales".
"Si la Masonería ha perdido influencia y ya no controla actividades que
han pasado a manos de nuestros enemigos, sepamos de una vez y seamos hon-
rados en 1dec:irlo, todo ello se d€be a que, desde veinte o más años a esta parte,
los Masones que milita.n en nuestras filas, salvo naturales excepciones que hon-
ran y prestigian, carec·en de fervor, de entusiasmo, de espíritu de trab'ajo e
iniciativa; carecen del abnegado sacrificio y de la mística que antes tuvieron
Aprendices Masones que no sintieron vergüenza de salir a las calles de la ca-
pital sin otra arma que no fuera un tarro de engrudo, una brocha y una escala
de tijera para empapelar los muros de la ciudad en campañas memorables
y enaltecedoras para la Orden Masónica.
"Se quejan algunos de inoperanci•a de la Masonería y ni .siquiera se han
detenido a pensar que los atributüs a que me refería hace un instante, de los
que carece.n las promociones de Fr-ancmasones de las tres últimas décadas, los
tienen con •creces los democristianos. Cada uno de usted€s ha .c omprobado en
su pueblo, en su barrio, en su calle, la actividad, la mística que exhiben los
militantes del actual partido de gobierno. Por eso triunfaron, Queridos Herma-
nos -Y se lo merecen- pues no esperaron que las directivas hicieran el tra-
bajo si.no que ellos exigieron un puesto de combate.
'"Cada uno de nosotros tiene hijos a quien educa o ha educado y sabe
cuál es la situa,ción pavorosa en que se encuentra la educación impartida por
el Estado. Yo pregunto, Venerables Hermanos, ¿cuántos de los profesores laicos
que se desempeñan en la enseñanza fiscal mantienen una actitud de simpa~
tía y amistad hacia sus propios ~lumnos y cuántos -en cumplimiento de su

- 13
 lalp

á.postolado docente- ayudan, guían y orientan a aquel grupo de sus alumnos

que necesita una dedicación espe·cial? Mientras tanto, en otra sala de clases
de un mismo colegio hay un profesor demo.cristiano o conservador y bien saben
ustedes cómo trabaja, cómo conquista adeptos a su causa sin emplear otro me-
dio que su amistad y comprensión, estímulo y apoyo para sus alumnos. Y este
ejemplo que he señalado se repite en cada una de las actividades del mundo
profano.
"¡Cómo quisiera ver, como antaño, a Aprendices, Compañeros y Maes-
'!Mr<os, con alegría en el alma y con una canción a flor de labios, empuñar las
herramientas de trabajo y vaciarse hacia el mundo profano para sembrar paz,
fmternidad, justi.cia y bienestar en el pueblo; para poner en evidencia una
''operancia" que hoy no tie.nen!"
"Con el propósito de· agrupar en una sola casa diversas actividades pro-
fanas que funcionaban separadamente, el Departamento de Acción Masónica
arrendó una amplia y cómoda casa en esta ciudad. Es aquí, en este local có-
modo, espacioso y bien ubicado, donde funcionan en la actualidad el Instituto
Americano de la Cultura, la Revista "Occidente", los Clanes Juveniles, una
Agrupación Teatral y una Agrupación Coral".
"Administrada por el Ilustre y Venerable Hermano René Court Portales,
a menudo sus salas y dependencias se hacen estrechas para contener al público
que asiste a los actos que en ella se realizan".
"El Instituto Americano de la Cultura está destinado a integrar y actua-
lizar la cultura general de profesionales, estudiantes, empleados y obreros
amantes del saber y del progreso. Para el cumplimiento de estos propósitos,
este Instituto organiza anualmente cursos regulares sobre Filosofía, Sociología,
-Biología, Psicología, Inglés, Historia del Arte, etc.; a la vez que sostiene diver-
sas actividades que tienden a los mismos fines, pudiendo señalar, entre otras,
conferencias, foros, etc.''

C;ENTROS FEMENINOS

"Organizados a través de toda la República, han prendido vigorosamente

bajo el amparo de las Logias, cumpliendo una labor encomiable que orienta y
controla la Directiva Nacional de Centros Femeninos que funciona en Santiago.
"La Gran Logia de Chile le presta decidirlo apoyo que se traduce en la
adquisición del bien raíz que ocupan en calle Carmen 302 de esta ciudad, ade-
más de la atención y solución de diferentes peticiones que se formulan, tanto
por' la directiva nacional como por los Centros Femeninos de la capital o de
provincias.
"Hemos cretdo conveniente que los Centros se den ellos mismos su pro-
pia organización. formulen sus planes de acción y los realicen, sLn otra inter-
vención que una prudente asesoría de nuestra parte, ejercida a través de los
Relacionadores. El Departamento de Acción Masónica mantiene a su vez un
Representante .cuya misión se cumple preferentemente ante la Directiva Na-
cional de Centros Femeninos y ante los Reiacionadores que las Logias mantie-
nen ante sus respectivos Centros.

CONSEJO DE BENEFICENCIA

"El Oonsejo de Beneficencia ha cumplido una ardua y benéfica acción

de la que, en verda1d, como Francmasones podemos enorgullecernos, a pesar de
los limitados recursos económicos con que cuenta, provenientes del 8% de los

14 . . . . .
 lalp

ingresos del Fondo de Solidaridad, de las cuotas anuales de los Hermanos de

la Obediencia, de los Troncos de· Pobres y de otras fuentes de entradas".
Después de señalar las cifras correspondientes a los diversos rubros, el
Gran Maestro señaló que en vista de los espléndidos resultados obtenidos, aho-
ra se 'PUeden emprender obras de mayor importancia, .c omo ser: mausoleo
ma~ónico; policlín1ca funeraria, etc_. ya que se cuenta en la actualidad con
fondQs para ello.
Más adelante, el Gran Maestro se refirió extensamente a la labor efec-
tuada por el Fondo ·de Solidaridad. Al respecto, señaló que la situación de este
fondo es muy sóUda y que se ha logrado la formación de un fondo de reservas
que cubre con exceso las eventualidades que pudieran presentarse.

GRAN TESORERIA

Al referirse a la Gran Tesorería, el Gr a,,n Maestro destacó que gracias a

las econmnias realizadas por esta Ofidna a través del lapso 1959-1965. ha sido
posible aportar considerable·s sumas como a;porte de la Gran Logia a la So-
medad Inmobiliaria "La República" S. A. Merced a estos aPQrtes, expresó, la
Gran Logia es poseedora, en la actualidad, de E<? 1.077.400.- en acciones, suma
pertor a la mitad del total de las acciones series A. y B.
"No puedo menos que expresar mi personal reconocimiento -advirtió el
Gran Maestro- y el de la Orden para el Ilustre y Poderoso Hermano Horacio
González Contesse, pues a su inteligente labor se debe el estado actual dé nués-
t'ras finanzas y que haya sido posible el aporte de dineros en cantidad apre-
ciable para ayudar al financiamiento de la construcción de nuestra nueva Casa.
Masónica, a la vez que contamos ahora con apreciables sumas como reservas
disponibles''.

TRIBUNAL DE LA GRAN LOGIA

"El Tribunal de la Gran Logia ha funcionado normalmente, cumpliendo

con la ne:esaria misión de hacer justicia y establecer la ps.z y la armonía fra-
ternal cuando ellas se ven amagadas".

SOCIEDAD INMOBILIARIA "LA REPUBLICA" S. A.

Después de hacer una amplia reseña de todo lo actuado con relación a

la Sociedad Inmobiliaria "La República" S. A. desde su iniciación hasta la
fecha, el Gran Maestro manifestó:
"Entrego, pues, al t.érmino de mi mandato:
19.- Estatutos del Club de la República nuevos, ágiles y acordes con los
tiempos que vivimos;
29.- Una So:iedad Inmobiliaria absolutamente controlada por la Maso.
nería, con campo ilimitado para el porvenir y cuyas acciones tienen las si·
guientes ventajas:
a) Valores que no fluctúan porque no se transan en bolsa;
b) Valores reajustables porque se cotizan de acuerdo con los balances;
c) Valores con comprador seguro y en cualquier momento y,
d) Valores que aseguran una rentabilidad mínima de un 7%.
39.- Un hogar social terminado en su obra gruesa de más o menos 8.500
metros cuadrados y por terminarse en sus ornamenta,.ciones y,
49.- Un crédito en el Exim Export Bank of New Y.ork por US$ 50.000
obtenido para traer desde ese país los ascensores y maquinarias .cte calefacción
y aire acondicionado".

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 lalp

VENERABLES Y MUY QUERIDOS HERMANOS:

"Al poner término al presente Mensaje, en el que he querido presenta1

una visión esquemática de la labor cumplida por e·l Jefe de la Orden y los
Organismos Directivos de la Gran Logia de Chile, séame permitido formular,
desde lo más. hondo de mi ser, el vehemente anhelo de que esta Augusta Ins-
tdtución Iniciátic'a -a la que quiero con tanto ardor y a la que he ·consagrado
una vida entera por cerca de cincuenta años-, siga en una marcha siempre
ascendente de progreso, de paz y de unidad.
"Tengamos fe en ella y alentemos en cada instante de nuestra afanosa
existencia la esperanza de una alborada cada vez más diáfana y pura que
ilumine los rectos y anchos: caminos de una convivencia humana siempre me.
jw, más justa y más perfecta. Como francmasones, tengamos fe en nuestro
destino de hombres libres, solidarios y fraternales, si1ntiendo en el alma el
goce infinito de sabernos partícipes y responsables de la construcción del tem-
plo ideal que la masonería del orbe entero construye en beneficio de un mun-
do mejor y más feliz.
''En nuestras manos de constructores empuñemos l9;S herramientas de
trabajo y con fe y runsias sin lími•tes, consagrémonos a la noble y generosa
empresa de combatir el oscurantismo, la regresión y la barbarie, representadas
por el dogmatismo religioso y político, por la injusticia social, por la incultura
y la miseria ern que vive sumido el pueblo.
"Dignifiquemos la calidad de Iniciados, poniendo en cada uno de nues-
tros actos el sello de la lealtad, de la honradez, de la honestidad, de la caba-
llerosidad y hombría de bien, y se'pamos ser hermanos de nuestros hermanos
para que el ejemplo de .nuestras virtudes encuentre eco y resonancia én la con-
ciencia y corazón de otros hombres -a los que quizás nunca conozcamos-.
pero que alentarán ideales y valores que nos pertenecen, pues por ellos se ri.
ge nuestra Augusta Orden y por ellos se norma y regula nuestra existencia.
"Asumamos en plenitud la responsabilidad de ser Masones de verdad y
que nuestro ejemplo de hombres dignos sea la simiente generosa que, detpo·
sitada en el su~co siempre abierto de una humanidad que tiene la apetencia
de un destino· más venturoso, prenda, florezca y dé los frutos de amor, com-
prensión y fraternidad, meta ideal con que sueñan los masones del orbe entero.
"Meditemos en la responsabilidad que sobre nosotros pesa, y exhibamos
nuestra calidad de Masones como ejemplo de hidalguía, generoso desprendi-
miento, abnegado sacrificio, recto y ponderado juicio, elevada eficienda y ca-
pacidad en el desempeño de nuestra actividad profesional. ,Sepamos ser mo-
destos, sencillos, amables y buenos, caminantes incansables tras la búsqueda
de un destino más venturoso para la patria y para el mundo y no desmayemos
jamás en la ardua y permanente tarea de desbastar nuestra piedra bruta.
"Reconozcámonos imperfectos, pero perfectibles en la medida que nues-
tra voluntad y afán de superación nos conduzcan por caminos -en los que
iremos dejando jir-ones de nuestra existencia-, pero que ·al final nos mostra-
rá-n la Luz de Oriente, que es entendimiento y razón necesarios para com-
prender y sentir la JusticJi.a, la Fuerza y la Belleza que fundidas y amalgamadas
al calor de nuestro empuje se traducirán en Arm~nía y Bondad, valores sin
los cuales la existencia del hombre carece de contenido y significación.
"En esta tarde memorable, al devolver a esta Magna Asamblea de la
Gran Logia de Chile el Mallete Rector que pusiera en mis manos en otra
Asamblea como la de hoy, quiero expresar mi muy hondo reconocimiento por
tan inmerecida distinción y prueba de confia.nza de que fui objeto en aquella
oportunidad y deseo decirle f1 ella -con la emoción que llega hasta mis ojos-

16
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4\l.e en ei desempefio de mi cargo d.e Jefe de ia Órden siempre p'use Ío mejor

y más valioso que se anida en mi corazón: la rectitud, el empuje y el cariño
que me incitaron a trabajar sin desmayos, alentando siempre la espera,nza de
servir con abnegada devoción a esta Orden Chilena ·a la que tanto debo de mi
construcción anímica. Podréis formular el jui::io que mi gestión os merezca,
ps<r:o estoy seguro de que no podrá haber una sola voz para señ·: J.Iarme como
neglige.nte en el .cumplimiento .de mis obligaciones de Jefe de la Masonería
Chilena.
"Al terminar, Ilustres y Venerables Hermanos, volunt~ riamente he que-
r~do dejar para el término de este M\:msaje, un recuerdo emotivo y muy hondo
para quien debiera estar en estos instantes s.Jlemnes s:;ntado a ::ni diestra:
"De pie y al orden Venerables Hermnnos.
"Orestes Friidden Lorenzen. Serenísimo Ex Gran :1\L.aestro de la Gran Logia
de Chile, puso en mis manos el Mallete Rector. Entonces, en aquella oportu-
nidad, manifesté en alta voz, para que t:cd~ la Asamblea oyera, que no podía
recibir de mejores y más dignas manos el Símbolo d e la AutorLdad Magistral
y agregué, e.n seguida, que me esforzaría en imitar su acción de Gran Maes.
tro y de imitar la bondad y sencillez de su generoso sorazón.
''Hoy ya no le tengo a mi lado y extraño su auscn.c ia y me hace falta
su ce~·.cania física. El sufrió sinsabores e incomprensiones ; sembró el bien y
cosechó, a veces, amarguras infinitas que- como verdadero Masón siempre supo
olvidar y perdonar... Hoy le rindo a.nte vosotros mi más puro y s entido ho-
menaj e de amistad y limpio afecto que jamás se vio empañado y desde lo más
recóndito de mi alma elevo hacia él mi plegaria y mi súplica muy sen::illa, por-
que nace del corazón.
"¡Gran Maestro Ores tes Fr0dden, ilumina nuestra razón y fortalece nues-
tro espíritu para que todos, junto a Vos, c c ntinu~mos la tarea que dejasteis
esbozada!
'"Tomad asiento, Ve.nerables Hermanos.
''Qu;iero terminar rindiendo, también, mi h omenaje de gratitud y sin-
02n1 amistad para todos los Ilustres y Queridos Hermanos que a través de
dist.intcs ,cargos en la Gran Oficialidad, en el Consejo de la Orden, en el Con-
sej.o de Bene.fice.ncia y en el Tribunal .de la Gran Logia, me ofrecieron la más
leal y desinteresada colaboración. El conocimiento persom;.l que de ellos tuve
a través de la diaria convivencia en tareas ·comunes, me permitió reconocer en
todos y cada uno de ellos la más ·e'Xtraordinaria calidad humana, la insobor-
nable ho.nestidad, la generosa riqueza espiritual que saben brindar sin rega.
teos y de este conocimiento y contacto personal con ellos me gu[l,rdé algo pa-
ra mí muy valioso: su amistad que retribuyo con la mía, franca, abierta y
sin doblez. Mil gracias a todos ellos.
"Y a la Orden, a la que tanto quiero, y a tod os los Hermanos de la Ob;J-
diencia mi súplica postrera:
"Unámonos para seguir bregando por el engrandecimiento, por la dig·
nidad y la prestancia de la Francmasonerb Chilena; entrelacemos nuestras
manos y en fraternal cadena, con los ojos del alma mirando h::¡,.c ia u.~1 infini :.o
pTeñado de Ideales, hagamos formal promesa de ser cado, día mejores, r:1ás
limpios y dignos Masones.

"¡Qué así sea, muy Queridos Hermanos!"

Profundamente impresionada •p or las conmovid~~s palabras del Gran

Maestro, la Asamblea, puesta de pie, tributó una larga y emocionante ova::ió.n
al Ilustre y Po.deroso Herm::mo Aristóteles Berlendis Sturla.

- 17
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INFORME l>EL GRAN' TESORERO

Aeallados los prolongados apilausos, le fue ofrecida la palabra al Gran

Tesorero, Ilustre Hermano Horacio González Contesse, quien dio a conocer, en
detalle, el "Movimiento efe Caja y Balance General'' del año masónico anteriór.
Ambos documentos fueron aprobados por aclamación.
Efectuada la votación de los Ilustres Hermanos que no lo habían he-
cho lJor correspondencia., . la Asamblea de la Gran Logia de Vísperas de Pen-
tecostés suspendió sus trabajos alrededor de las 21 horas.

TENIDA DE PENTECOSTES

El domingo 6 de junio de 1965, a las 10,30 horas, se reanudaron los tra-

bajos de la Gran Logia de Chile en su Tenida de Pentecostés, bajo la presi-
den~ia del Ilustre y Poderoso Hermano Igna.cio Larca Garnham.
Una vez leída y aprobada el Acta, se procedió a proclamar la elección del
Serenísimo Gran Maestro, Grandes Oficiales, Miembros del Consejo, del Tri.
bunal y del Consejo de Beneficencia.
De acuerdo con los resultados de los e:s!:!rutinios, resultar()¡n elegidos los
siguientes Vene·r ables Hermanos:

RESULTADOS GENERA~S DE LA ELECCION

Serenísimo Gran Maestro: Ilustre y Poderoso Hermano Aristóteles Ber-

le.ndis Sturla, por un tercer período.
Primer Gran Vigilante: Ilustre Hermano René Enríquez FrO.dden.
Segundo Gran Vigilante: Ilustre Hermano Osear Pereira Henríquez.
Gran Orador: Ilustre Hermano Jaime Galté Carré.
Gran Secretario: Ilustre Hermano Ernesto Silva Román.
Gran Tesorero: Ilustre Hermano Hora:::.io González Contesse.
Gran Experto : Ilustre Hermano Guillermo Jaques Barra.
Gran Maestro de Ceremonias: Ilustre Hermano Mauricio Flisfisch Elberg.
Gran Hospitalario: Ilustre Hermano Miguel Hermosilla León.
Gran Guarda Templo: Ilustre Hermano Hugo Arias Briones.

CONSEJO DE LA GRAN LOGIA

Ilustre Hermano Ignacio Lorca Garnham.

Ilustre Hermano Sótero del Río Gundián.
Ilustre Hermano Eduardo Phillips ;Mlülle·r.
Ilustre Hermano Héctor Arancibia Lazo.
]lustre Hermano Moisés Mussa Battal.
Ilustre Hermano Julio del Río Berthoud.
Ilustre Hermano Luis Gómez Catalán.
Ilustre Hermano Eduardo Chiorrini Alveti.
Ilustre Hermano Abel Muñoz Pizarro.

CONSEJO DE BENEFICENCIA
Ilustre Hermano Gregorio Rodríguez Tascón.
Ilustre Hermano William Martín Phillips.
Ilustre Hermano Orlando Millán Figueroa.
Ilustre Hermano Enrique Zúñiga Morales.
Ilustre Hermano José Quezada Meléndez.

18-
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'riUBUNAL DE IÍONOlt

Ilustre Hermano Enrique Testa Arueste.

Ilustre Hermano Ignacio Barraza Quiroga.
Ilustre Hermano Ramón Molina Guzmán.
Ilustre Hermano Arturo Lobato Barrera.
Ilustre Hermano Miguel Bravo Elgueta.
Ilustre Hermano Guillermo Guerra. Estévez.
Ilustre Hermano Eduardo González Ginouvés.
Ilustre Hermano Raúl Gamonal Lagos.
Ilustre Hermano Jorge Vallejos Carvajal.

INSTALACION DEL GRAN MAESTRO

Una vez proclamado el acto eleccioJ:?.ario, el Ilustre y Poderoso Herma-

no Ignacio Lorca G. designó una Comisión especial para que se trasladara al
vestíbulo exterio:r e invitara al Ilustre y Poderoso Hermano Aristóteles Ber-
lendis Sturla a incorporarse a lotS trabajos de la Gran Logia, paru proceder
a su instala,.ción como Gran Maestro por un tercer período constitucional.
Instalado como Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, el QuerilClo y
Venerable Hermano Berlendis Sturla recibió el homenaje de una cálida y
sonora salva de aplausos.
~·:·¡~'
INSTALACION DE LOS GRANDES OFICIALES

A continua-ción el Gran Maestro pro::!·edió a instaJ:ar y a tomar el jura-

mento de estilo a los Grandes Oficiales y Altos Dignatarios elegidos.

PALABRAS D,EL GRAN MAESTRO

Terminada la ceremonia mencionada, el Ilustre y Poderoso Hermano

Artstót·eles Berlendis Sturla pronunció las siguientes palabras:

VENERABLES Y MUY QUERIDOS HERMANOS:

Es con emocionada gratitud que escribo estas rápidas líneas al tomar co-
nocimiento de que, por tercera vez consecutiva, me entregáis el Mallete Re~tor
dx:l la Gran Logia de Chile, que recibiera, por primera vez, en una inolvidable,
Ceremonia el 5 de octubre de 1957. Y así, en estos momentos, mi emoción es
muy intensa y honda, es porque comprendo bien la intención y sentido que tie-
ne el resultado de la elección de Gran Maestro que no es simplemente el otor-
garme un altísimo honor que, por lo demás, no cuadra con mi naturaleza mo-
desta, probada durante toda mi vida profana y masó.nica, en la que he re~o­
rrido desde el principio hasta la cabeza -el escalafón de mi profesión- sin
que haya alterado en ningún momento la normalkiad y el tono de mi vida y
carácter. Me entregáis, repito, algo más que honores; me hacéis nuevamente
depositario de vuestra confianza y asumo el peso de una inmensa responsa-
bilidad, como es. la de dirigir y defender la Institución masónica amenazada
esta vez en su misma existencia.
No es, por desgracia, esta afirmación un re~urso retórico, pues nuestra
Augusta Orden se enfrenta hoy a una realidad totalmente adversa a todas
nuestras concepciones filosóficas de vida. De ahí la urgencia que nos invade
para ofrecer, en corto tiempo más, una Radio Emisora, cuya misión ha de ser
la de servir de vehículo de la Verdad, una voz de orientación, una voz de de-

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tensa de las libertades y de la justicia social. Sc:rá, pues, b voz de la Mas·O-

nería que lanzada hacia todos los ámbitos, proyectará en el mundo profano
su mensaje de fraternidad, de tolerancia y de amor a la Humanidad.
Cumplida ya la etapa eleccionaria que la Francmasonería ha vivido du-
rante estos últimos meses, como organización de hondo y probado contenido
democrático, nos corresponde ahora enfrentar, con esperanzadas ansias y hon-
dos anhelos, un porvenir que deseamos generoso y fecundo en realizaciones;
en el que el destino de la Francmasonería ha de afianzarse sobre la base de
una tarea emprendida en común, insuflada con el aliento fervoroso y la po-
tencia de una voluntad decidida que, con afán, busca mejores derroteros.
Pero tG>J como lo afirmé en el Mensaje de ayer, es necesario que la Orden
agilice su actividad, se trace nuevas metas, finalidades y objetivos a fin de
enearar con certidumbre y sin vacilaciones las tare:::,s a cumplir. Estoy, por
otra parte, plenamente consciente -Y así lo hice saber ayer- que si deseamos
reconquistar el lugar de preeminencia que lentamente hemos ido perdiendo,
e.s menester emprender una larga y a.gobi:ante misión en la que seguramente
no encontraremos otra compensación que no sea el goce del deber cabalmente
cumplido.
Necesitamos imprimir a nuestra Institución un acelerado ritmo de acti-
v1:iad y de t.rabaj o y para ello es necesario adoptar medidas que tiendan a
tales propósitos. Consecuente con esto, pm Decreto N<? 234 de 21 de abril del
año en curso, dicté un Decreto que designa una Comisión encargada de reali-
zar estudios exhaustivos y proponer soluciones o medidas tendientes a agilizar
la Orden, a reestructurar sus organismos, a revivir sus fines y planes de acción.
Como comprenderéis, la tarea es amplia y de enormes proyecciones y
estoy seguro que de estos estudios saldrá todo un plan de trabajo a •cumplir
en los años venideros.
Pero sería vana pretensión de nuestra parte suponer que para que la
Orden se remoce sólo basta formular planes y programas. Lo fundamental es
el f.actor humano que deberá laborar en estos planes de acción. Por ello, Que-
ridos Hermanos, reclamo de vosotros una especial atenció.n, una preferente
preocupación destinada a lograr de Aprendices, Compañeros y Maestros una
actitud verda.deramente masónica, en donde la fraternidad, la tolerancia y el
re·cto juicio sean prendas de sana convivencia y garantía de un quehacer
fecundo.
Reclamo de vosotros y por vuestro intermEdio de toda la Obediencia, el
más estricto cumplimiento del secreto y reserva masónicos y el acatamiento
a las autor1dades que nosotros mismos nos hemos dado. No olvidemos que
nuestra Institución es esencialmente jerárquica y que, 'POr tanto, nuestra ac-
titud, nuestra norma de conducta debe estar en ·concordancia con esa jerarquía.
Al reiteraros, Ilustres y Venerables Hermanos, mi hondo reconocimiento
por las reiteradas muestras de afecto que me dispensáis, os ruego secundarme
en esta ardua y difícil tarea, que asumo con responsabilidad y amor, y os
insto a luchar sin descanso en pro de una fraternidad leal y efectiva. Unamos
nuestras voluntades y juntos emprendamos una nueva m['l.rcha que nos lleve
a la feliz realizació.n de un mejor destino para la Francmasonería Chilena.
A t.odos vosotros, Grandes Oficiales, Miembros del Consejo de la Orden,
del Tribunal de Honor y del Consejo de Beneficencia recién elegidos, os lla-
mo al trabajo y al sacrificio sin medida y os pido que en los cargos para los
cuales habéis sido elegidos pongáis, junto a vuestra inteligencia, el corazón
para que la obra que realicemos en esta jor.nada que hoy se inicia, tenga la
·claridad de la inteligencia y el calor de Humanidad para que así, de este
modo, la obra sea digna del Grande Arquitecto del Universo.
Una salva de aplausos saludó las últimas palabms del Gran Maestro.

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MEDALLA DE HONOR

En el Bien General, el Ilustre Hermano Manuel Tello ha::e presente que

el Consejo de Beneficencia, por un:::.nimidad, acordó concederle una Medalla
de Honor al Ilustre Hermano Jesé Oller por su cooperación, abnegada y 'per-
manente, a las labores y a::tividades de este organismo.
El Gran Maestro le ruega al Ilustre Hermano Tello que sea él quien con-
decore al Ilustre Hermano Oller. Así se hace.

UNIVERSIDAD POPULAR ''PEDRO AGUIRRE CERDA"

El Ilustre Hermano Luis A. Tapia Rodríguez se refiere a las actividades

de la Universidad Popular "Pedro Aguirre Cerda". Recuerda que esta Univer-
sidad Popular fue creada por u.n grup:J de Hermanos hace ya más de 25 años.
Recalca que este prestigioso plantel educc.donal nació inspirado en el anhelo
de ayudar a la juventud de ambos sexos y que, en su fructífera existencia, ha
cumplido con creces este laudable objetivo.
¡s.eñala que desde su fundación esta Universidad ha est:ado dirigida por
miembros de la Augusta Orden, todos los cuales han cooperado con fervor
y con entusiasmo para que pueda realizar la importante labor para la cual
fue concebida.
El 'Presente año, esta Universidad laica inició sus actividades con 376
educandos. Se trata, dice, de una obra paramasónba de much::-_. importancia,
que merece la ayuda y la asistencia de todos los Hermanos.
Lee, a continuación, una nota del Ministro de Educa·ción en la que re-
conoce la gran labor que desarrolla esta Universidad. Sin embar,go, advierte, le
ha sido rebajada a la mitad la subvención fiscal que recibía. Por lo tanto,
este año sólo percibirá EQ 2.500, suma que no le permitirá afrontar sus gastos
esen::iales.
Destaca que esta Univen'>idad laica cuenta con una propiedad extensa
y muy bien ubicada, que podría ser aprovechada tanto para la extensión de·
la propia 'Universidad como para obras paramasónicas.
Es penoso, por lo tanto, agrega, que una obra tan importante y que
podría tener grandes proyecciones esté amenazada .de cerrar sus puertas por
falta de recursos. · - - · , · v.•
Se ha pedido en múltiples oportunidades y ocasiones que los Hermanos
se hagan socios de esta Universidad, pero los llamados de auxilio no han si-
do oídos.
Termina soli-.::itando se ayude a esta Universidad a sobrevivir, ya que es
una obra masónica.
El Gran Maestro promete preocuparse especialmente de esta Universidad
e invita a todos los Hermanos a cooperar en su sostenimiento.

CONCLUSIONES DEL GRAN ORADOR

Reproducimos, a continuación, en su texto íntegro, el discurso que, al

término de las Asambleas de Vísperas y de Pentecostés, pronunciara el Ilustre
y Poderoso Hermano Jaime Galté, Gran Orador de la Gran Logia de Chile:
''Un masónico imperativo de fraternal labor en bien de la Francmasone.
ría simbólica chilena nos ha reunido en dos jornadas para dar cumplimiento
a disposidones de nuestra Carta Fundamental, que exige la renovación perió-
dica de las autoridades que deben regir los destinos de la Orden como expre-
sión de vivencia democrática y de encauzamiento del cariño, respeto y .devo.

-21
 lalp

ción que profesamos a los ideales que hemos jurado poner en práctica en el
seno de la sociedad profana para su evolución espiritual y felicidad.
"Es así como en la Tenida de ayer, la Asamblea de la Gran Logia de
Chile, en democrática elección, ha renovado por un nuevo período el mandato
al ilustre y Poderoso Querido He·r mano Aristóteles Berlendis Sturla para que,
desde el alto sitial de Serenísimo Gran Maestro, represente y ,guíe, una vez
más, con la energía, bondad y sabiduría que le caracterizan, el Gobierno sim-
bólico de la Francmasonería Chilena. No tan sólo esta elección ha señalado la
e:x¡presión mayoritaria de esta Asamblea al entregar, por un nuevo período, el
Mallete Rector al Querido Hermano Berlendis, sino que ha demostrado con ello
sus agradecimientos por la intensa labor que ha realizado, muchas veces con
sacrificio de su salud, de su reposo y de sus intereses personales en bien de
nuestra Institución y de sus elevadas finalidades.
"En el Mensaje que el Querido Hermano Berlendis .nos ha leído ayer,
aparte de constituir una nueva lección de sabiduría masónica, nos ha deta-
llado la labor realizada durante los períodos en que tuvo a su cargo la direc-
ción del -Gobierno simbólico y que, con honestidad masónica, esta Asamblea
le aplaudió y agradeció al proceder a su reelección.
"También en la Tenida de ayer se eligieron los Queridos Hermanos que
deben integrar la Oficialidad de la Gran Logia de Chile, su Consejo, su Tri-
bunal de Honor y su Consejo de Beneficencia. En estos momentos quiero asu-
mir la representación de todos ellos y, en su nombre y también en el mío
propio, expresar a esta Asamblea nuestros agradecimientos por tan señalada
distinción; nuestros propósitos firmes y decididos de dedicar todos nuestros
esfuerzos al bien de la Orden y de la Humanidad; nuestra más amplía cola-
boración al Serenísimo Gran Maestro y nuestra más depurada fraterntdad
para todos .nuestros Hermanos.
"Estoy cierto que todos los Altos Dignatarios recientemente elegidos com-
prenden que estamos en un momento en que las responsabilidades -Y no ha-
blo sino de aquellas que comprometen la conciencia- son más grandes que
nunca. En co,nsecuencia, estas responsabilidades comprendidas y aceptadas,
constituirán el honor y el deber de los Altos Dignat8_rios de la Gran Logia de
Chile y, como honestos Mlasones, nos esmeraremos en cumplir nuestros jura-
mentos al poner toda nuestra voluntad al servi(!io del arte laborioso de dirigir.
"Nuestros electores y Venerables Maestros, por su parte, deben compren-
der que el Gran Constructor del Universo ha puesto toda su fuerza, su belleza
y sabiduría en la Unidad, por lo que es indispensable imitar tan significativo
ejemplo si queremos hacer un trabajo útil y efectivo en bien de nuestra Orden
y .de la Humanidad.
"No existe un mosaico humano más vivo y de más fiel trasunto del
mundo que la Francmasanería., donde todo es equilibrio, tradi·c ión y estabilidad
como 'Permanencia; pero, donde todo es también dinr.mismo, proyección Y
futuro. Observancia del pasado, sí, incluso veneración y acatamiento; mas la
magnitud fundament,aJ es la de hoy, donde nace el mañana y donde está ge-
nuinamente nuestro espíritu y nuestro hacer infatigable. El espíritu, por lo
demás no posee verdaderamente sino aquello que realiza y concreta en hechos
y en ~ategóricas actitudes. Estamos en posesión de todos los factores integra-
dores del futuro, en una tarea magna y ante una gran responsabilidad. Se-
pamos proceder como hombres y como Institución. Para ir adelante y estruc-
turar el futuro al cual aspiramos debemos mantener por encima de todo la
unidad inquebrantable de todos los Hermanos, sin divisiones ni resentimien-
tx>s. Todos somos iguales y buscamos lo mismo: la verdad y el éxito de nues-
tros principios emancipadores y espirituales. La misma bandera está en manos

22-
 lalp

del Gran Maestro y del Aprendiz, y su conducción y defensa debe ser sagrada
y constante, sin desmayos ni debílidades.
"Ningún p;rovecho obtenemos al reprqcharnos mútuamente nuestras de-
bilidades o errores pasados, transformando así a nuestra Augusta Institución
en un muro de lamentaciones. Sacrifiquemos, en cambio, cuantas veces sea
n'ecesario, nuestros personales puntos de vista en pro del bien colectivo y avan-
cemos, imperturbables, hacia la consecución de nuestros fines, aunque nos
digan que la honestidad es una especie de imbecibiUdad o que las intrigas cons-
tituyen una presunción de habilidad.
''Recordemos, Venerables Hermanos, que la Fraternidad es una e indivi-
sible y que la Paz es fecunda a condición de ser completa. En consecuencia.
cuando por desgracia tengamos algún motivo de resentimiento con alguno de
nuestros Hermanos, agotemos todos nuestros esfuerzos para eliminar esas dife-
:rle,ncia.s, poirque nuestros Templos no pueden ni deben cobijar más que a hom-
bres que se estimen y respeten mutuamente como verdaderos Hermano¡>. En
otra forma se da entrada a la hipocresía que todo lo falsea y en las Logias se
forma un ambiente que no se diferencia mayormente del de las asambleas y
reuniones profanas que estamos muchas veces obUgados a frecuentar. La Franc.
masonería es una bajo la égida de la Gran Logia .de Chile y todo lo que pueda
dañar el prestigio de una Logia o de un Hermano daña la cabeza visible de
la Orden.
"El conocimiento de las cosas es más fácil que el conocimiento de los
hombres; pero, a su vez, el eonocimiento de los hombres se realiza no sólo a
través del mero pensar y razonar, sino por la emoción y la comprensión afec-
11iva, la solidaridad y las vivencias comunes. Y esto es lo más importante y
grande, porque es lo estricta y peculiarmente humano. Las dificultades se
allanan a medida que crecen los sentimientos y existe coparticipación en la
vida. La Francmasonería conduce a esta coparticipación integral, nueva forma
de conocer y exaltar lo conocido; lo que es más difícil se torna más fácil, más
fluido y natural, porque es humano.
"Es innegable que estamos hoy en la época universalista y ninguna insti-
tución más universalista que la Francmasonería. Identifiquemos siempre más
l:a Institución con la época y la época con la Institución haciendo realidad,
cada vez· en forma más intensa, un intercambio, una comprensión y un .diá-
logo vivo entre ambas. Estamos en el tiempo de la velocidad y de los nuevos
ritmos. Seamos ágiles, cautos y prudentes. Acomodemos nuestra marcha al
ritmo ágil de los tiempos nuevos, sin lentitud, que sería anti-historia; pero sin
vehemencias ni apresuramientos inconsecuentes, que nos colocaría en caminos
de fantasía y de alejamient-o de la Historia.
"La realidad y la urgencia que esa rea!Ldad impone nos fija un hacer
rápido; pero en secuencias perfectamente unidas y lógicas. Estamos en la era
de la racionalización, de los planes y de las estructuras básicas. Busquemos y
realicemos, a través de nuestros valores y de sus obreros, que son todos los
Masones, la absoluta coherencia, coordinación y actividad. Organicemos por la
base, en todos los Cuadros y en todos los Grados. Seleccionemos al máximo. A
cada uno asignemos una labor y cada uno sepa que debe autodesignarse una
tarea y que, cuando la cumpla, su deber es proseguir en nueves tareas. Se ha
dicho que cuando un problema se resuelve se ve inmediatamente otro problema
que es necesario resolver. Son las múltiples labores del hombre. Es la vida
misma. Ahora, para un Masón, es el deber de la continuidad y de la existencia
que se ha trazado libremente al abrazar los Principios de una vida superior.
Glaro que la era de las estructuras básicas, de los planes y de la radi:malización
exige, en forma imperiosa, claridad, dinamismo y fe en la obra que se realiza
y esta responsable y trascendente actitud y organización, es siempre de los

-23
 lalp

que .dirigen, de los que orientan. ¡Que las nuevas autoridades y orientadores
de la Fraternidad, que hoy asumen todJ.s las responsabilidades, sepan cumplir
con el mo.ndato de los nuevos tiempos.
"En n'Ombre del Serenísimo Gran Maestro y Altos Dignatarios de la Gran
Logia de Chile, saludamos fraternalmente a los Ilustres Representantes de la
Masonerb Cap·itular; a los Ilustres Personeros de Potencias Masónicas Extran-
jeras y a los Quertdo.s Hermanos de provincias que han demostrado, con su
asistencia, una vez más, su fervor, celo y c onstancia, y les rogamos que llev;cn
la expresión de n u estra fr o_ternidad a sus respe ctivos Cuerpos Subordinad·os, a
sus Altos Organismos representados y a sus Hermanos de Logia".

AGAPE FRATERNAL

Suspendidos los trabajos de la Gran Logia, se sirvió un Agape Fraternal

en los comedores del nuevo edificio de lo.. Oroden.
El primer brindis constitucional par el Serenísimo Gran Maestro, estuvo
a cargo del Soberano Gran Comendador, Ilustre y Poderoso Hermano Pedro
Castelbl'anco Agüero.
El segundo brindis, por la prosperi.dad de Chile, fue pronunciado por el
Ilustre Hermano Cc.rlos Mom·eal BeUo.
Por su parte, el tercer brindis constitucional, por los Masones esparcidos
sobre la faz de la Ti~rra, estuvo :1 cargo dfl Ilustre Hermano José Quezada.

ADYTUM
, Adytum, aprohibido entrar". En la Antigüedad, santuario o parte
mas reservada de un templo o cualquier otro edificio religioso. Sólo los
sacerdotes podían penetrar en él y de su interior surgía la voz del dios
o del oráculo. El Sancta Sanctorum del templo de Jerusalén era un
adytum.

AGAPE
En los primeros días del cristianismo, existía entre los creyentes
la costumbre de reunirse para hacer una comida en común -probable-
mente el primer día de la semana- y alentarse mutuamente. El pan
ázimo consagrado era distribuído ceremoniosamente entre los asistentes.
El pan ázimo lo distribuía el que presidía el ágape.

24

7-Iomenaje a la J"v\emoria
del 6x-@ran JV\.aestro
Ca.nmovidos discursos se p;ronunciaron en e1 Senado de la República.- Los
senadoces Jonás Gómez, Tomás Pablo, Enrique Curti y Jaime Barros rindieron so-
lemne hQmell1¡3je al Serenísimo ex-Gran Maestro, llustre y Poderoso Hennano
Orestes Frodde1n Lorenz,en
El H. Senado de la República, en su sesión
del martes 13 de abril de 1965, rindió un solem-
ne homenaje al Serenísimo ex-Gran Maestro de
la Gran Logia de Chile, Ilustre y Poderoso Her-
mano Orestes Frodden Lorenzen.
Nos es muy grato reproducir, a continuación,
el texto íntegro de los discursos pro.nunciados
en dicha oportunidad :
El señor Gómez (don J,onás) . - Yace ya en
el seno de la madre tierra un hombre bien na..
cido. Duerme ya sin fin. Su presencia física ·s e
ha desvanecido para siempre. Nos quedan de él
su recuerdo, que será imperecedero, las enseñan-
zas de su saber y el ejemplo de su vida.
Hace unos días, el cortejo avanzó por la ca_
rretera de la muerte. En la carroza funeraria,
los r estos mortales de Orestes F r odden Lore,y¡ -
zen. En el cortejo, temblor de almas, rechinar
de dientes, párpados humedecidos. Los rayos del
sol caían oblicuos, reverenciales, en la mañana
otoñal. Una intensa emoción lo envolvía todo.
Al abandonar el valle de los mortales quien
fue una vez el líder de los masones chilenos
-esto es, Serenísimo Gran Maestro de la Ma-
soneria chilena- invisibles a las miradas profa...
nas, las espadas de la Orden, apuntando simbó-
licamente hacia tierra, abrían calle al hermano
caído. Y en las veredas había hombres del pue-
blo que inclinaro.n sus cabezas.
Al camposanto llegó el viejo marino como una
nao con las velas rotas y los obenques segados.
Allí le despedimos. Los obreros de paz entrela-
zaron sus manos y los corazones se estreme-
cieron. En el aire conmovido resonaron muy
hondas las voces de los "vigilantes". El herma-
no Frodden no respondió : en esos instantes su
espíritu emprendía una nueva singladura por re-
giones desconocidas al hombre, en tanto sus des-
pojos mortales volvían al seno de la tierra a
cumplir los fines maravillosos e inmutables del
Grande Arquitecto del Uníverso. Los obreros de
paz soldaron la cadena de solidaridad en el lu-
gar del eslabón desprendido. El sol y una brisa
pusieron la nota final.
No he venído yo esta tarde a decir al Senaido
su rica y honrosa biografía. He venido a cantar
a su temple, a destacar su hombría de bien y
a honrar su memoria. Le co.nocí en los talleres
de la francma-soneria. Allí le vi empuñar el ma-
llete conductor con ternura y firmeza, con des-
treza y señorío. Desde las bancas de los apren..
dices, en las que siempre me agradaría situar-
me, recogí de su voz; y m;is que de su voz, de
su ejemplo, sabias e inolvidables lecciones. Mi-
lalp
~RODD~N
rando a su vida, como quien mira hacia las pro-
fundidades del espíritu, del templo, del mar, del
infinito, comprendí, como lo han comprendido
los masones esparcidos sobre la faz de la tierra,
que la modestia es la actitud que mejor acomo-
da al hombre y, recogiendo su prédica, que la
v~da del hombre es corta, por lo menos en el lap-
so de una vida, para alcanzar el dominío sobre
ninguna materia especulativa. Y corta, también,
para alcanzar el pleno y total dominío sobre las
pasiones que asaltan al hombre. De allí la hu-
mildad que debe distinguir al masón. Legiones
de chilenos recogieron en el ejemplo y la ense-
ñanza de Orestes Frodden Lore.nzen una dimen-
sión humana y superior del hombre y de la vi-
da, de la misión del hombre a su paso por la
existencia física. Y aprendieron también esa
actitud tolerante, respetuosa y comprensiva, que
ha ·sido hasta hoy el cimiento fundamental de
la democracia chilena.
Orestes Frodden Lorenze.n desbastó con tena-
cidad y paciencia ejemplares, a lo largo de su
existencia, la piedra de su propia personalidad,
hasta dejarnos .a la hora de la muerte, una talla
de tan armo.niosos perfiles que habrá de servir
de ejemplo a las generaciones venideras.
¡Qué gran dirigente espiritual fue Orestes
Frodden! ¡Qué gran compañero en la bancada!
¡Qué suave con el que erraba! ¡Qué recio en la
defensa de los principios fundamentales! ¡Qué
humilde y sencillo frente a los :insondables mis-
terios de la vida! ¡Qué señor dirigiendo los hon-
dos debates! ¡Qué sereno frente a la ingratitudll
Sus ideas, mucha:s veces, no fueron compar-
tidas por vastos sectores; pero jamás se trizó
el hondo respeto que todos sentían por su per-
sonalidad delicada y a la vez recia. Inspiraba
una confianza ilimitada y el respeto se imponía
e.n su derredor. Diríase que la armonía y el
respeto eran consustanciales con su espíritu, _lo
cual tuvo una importancia decisiva, vital, para
el movimiento espiritual en Chile en momentos
de honda meditación universal.
Las libertades públicas deben, en medida muy
importante, su existencia y preservación a la
francmasonería, no 'sólo en Chile, sino en todos
los lugares del planeta en que hay libertad. Pues
bien. en momento.s muy delicados para la liber-
tad de nuestra patrla , Orestes FrOdden tuvo una
actuación importantísima, casi diría decisiva. A
su tino y discreción debe la ciudadanía no ha-
berse visto envuelta en hechos y circunstancias
que pudiero.n adquirir gráves consecuencias. Su
acción fue silenciosa, como ha sido la acción de
la francmasonería en toda época y lugar, y tal
-25

Vez pór eso ha sido más eficaz y profunda. Bás-
tenos recordar la actuación de la Orden Masó-
nica ante la dictación de la llamada ley de de-
fensa de la democracia, a la que se opuso con
todas las fuerzas de su espíritu por cons-derarla
una ofensa para la democracia y la libertad!, y
la que tuvo en instantes en que se consideraba
inminente el cierre del Congreso. En ambas
oportunidades brillaron en el seno de los ta le-
res el tino, la sabiduría y la decisión d ~ Ores-
tes Frodden Lorenzen. A la hora de su muerte,
era justo dejar testimonio de su acción.
En el ara de este templo de la ley y las liber-
tades públicas que es el Parlamento chileno, en
la honrosa representación de los Senadores ra-
dicales, deposito la expresión de nuestro dolor
por la pérdida irreparable que han sufrido la
nación chilena y la francmasOOJ.ería universal.
El señor PABLO.- Más allá de las distancias
ideológicas los hombres que, unidos, forman una
Nación, tienen motivos de comprensión mutua.
Esta tarde se rinde homenaje en el Senado de
lá. República al ex Serenísimo Gran Maestre d e
la Francmasonería chilena dOOJ. Orestes Frodden
Lorenzen, y yo me pongo también de pie para
adherir a él. Tengo presente, al hacerlo, que en
días difíciles para la República defendió el ré-
gimen democrático de Gobierno que se veía
amagado por quien pretendía cerrar el Con-
gres o Nacional. Todos aquellos que .adherimos
a dicho régimen y respetamos las ideas de to-
dos quienes en él viven, cualquiera que sea nues-
tra posición frente a las actitudes a>umidas por
los que la invocan, tenemos, sin duda, que agra-
decer, en el recuerdo que recoge la historia, la
decisión de quienes lucharon por que Chile viva
en un régimen de libertad.
A su familia y a sus parientes próximos, mu-
chos de cuyos nombres se encuentran ligado-;
a la vida pública de la Nación, vaya nuestra
sentida manifestación de pesar.
El señor OURTI.- Deseo adherir al home-
naje que esta tarde rinde el Senado a la memo-
ría del señor Orestes Frodden Lorenzen.
Su formación espiritual, templada en las dis-
ciplinas de la Armada, le hizo ser hombre de
excepcional eficiencia en los servicios públicos y
privados en que le correspondió actuar.
Profesor de Mecánica Aplicada y Construc-
ción de M;táquinas en la Escuela Naval, pasó,
en seguida, a desempeñar múltiples funciones en
las cuales dejó de manifiesto su capacidad, es-
píritu ecuánime y preparación técnica. Por ello
se le encomendó la reorganización de la red nor-
te de ferrocarriles. FUe jefe de Transportes Ma-
rítimos del Estado; participó en numerosas co-
misione-s para estudiar, en Europa, los proble-
mas relacionados con la organización de la
Maestranza de San Bernardo y recibió numero-
sos encargos para efectuar compras de máqui-
nas e instrumental para perfeccionar las insti-
tuciones del Estado.
Lució, a través de su vida, un esp:ritu cons-
tructivo expresado no sólo en sus labores de
carácter profesional como ingeniero, sino tam-
bién en aquélla1 de índole cultural o espiritual.
Los Senadores conservadores nos asociamos
26-
lalp
al homenaje rendido al señor Orest es Frodden
y hacemos extensivas nuestras condolencias a
su sobrino, nuestro estimado colega Honorable
señor Henríquez.
El señor BARROS.- Señor Presidente, esti-
mo un deber, un imperativo de conciencia, de
lealtad y espíritu solidario, expresar la .adhe-
sión de .nuestro Comité Mixto al homenaje que
el Honorable señor Gómez ha rendido en la per-
sona de don Orestes Frodden, recientemente fa-
llecido.
Varón recio, justo, alto, su biografía ha sido
de1tacada por los colegas que me han prece-
dido en el uso de la palabra.
Muéveme a adherir a esta recordación el he-
cho de que mi querido colega don Exequiel Gon-
zález Madariag¡a, miembro de la Orden Masóni.
ca y Senador de nuestro Comité, de haber es-
tado en Chile, habría expresado, con la vibra-
ción de su lenguaje, el amor por su institución
y el respeto por el ilustre desaparecido; todo
lo que su hombría de bien es capaz de sentir en
circunstancias como ésta.
Personalmente, quiero recalcar que en el his-
torial de la Patria y en la formación intelectual
de sus preclaros hombres, la Orden Masónica
se enseñoreó no sólo en Chile, sino en América
toda, para vencer con la fuerza de su racio-
nalismo a las piras obscurantistas de los i.nqui-
sidores, de los traficarttes de indulgencias, de
quienes quemaron libros y cuerpos para impo-
ner su fanatismo ciego e ignorante.
Las hueste-s de los "hijos de la luz", que de-
fendieron el laicismo en la vida diaria y lo in-
culcarOOJ. en los principios del Estado docente,
ora por obra y ejemplo de un filósofo de la edu-
cación como Valentín Letelier o de un polemis-
ta multifacético como Eduardo de la Barra
("Erasmo Jesuit'')., es necesarío que hoy s e
unan .a otros patriotas y nuevamente rememo-
ren los años verdes en que las mente-s comba-
tían contra el poder cOOJ.fesional.
El peligro no está conjurado. Es falso que la
lucha religiosa haya sido superada en Chile. El
chileno no necesita cortinas de humo que ocul-
ten sus desventuras ni caridades que tapen sus
miserias. Sólo quiere justicia; y ésta no se la
puede entregar un cabildo cebado en la indul-
gencia que otorga un dólar amasado con la mi-
seria de los pueblos.
Creo en la tolerancia siempre que ella no cons-
tituya un "visto bueno" para que el enemigo
aplaste con el empuje avasallador del poder y
del dinero a las masas ignara"3, para quienes la
palabra libertad es una expres:ón más de ser-
vidumbre humana.
La tolerancia debe tener su límite frente a
la terca intolerancia.
Sea, entonces, el homenaje póstumo .a un
hombre de selección como fue don Orestes Frod-
den, la expresión de un anhelo para que una
institución que predica la fraternidrud universal
contribcya, en e·sta hora de prueba para nuestro
pa~. a mitigar el proceso de lucha de clases,
antítesis de toda esperanza para lograr hacer
a los hombres más fraternos y tolerantes.
Ha dicho.

LAS SIETE " En fin, con mucha r azón¡ se lZama a la F ·¿losofía la cien-
cia teó1·i oa de 7-a, V enlad. En ef ecto, el fin de l.a
CIENCIAS es Za v er dad; el de la pr áctica es la mtano de obra/'.
Ll BERAL:Es
.,
Hay en los viejos manuscritos de la Ma-
sonería operativa inglesa un enigma o,
poli' lo menos, una paradoja que, hasta
ahora,. parece no haber llamado mayor-
mente \. la ratención y es el alto honor que
en ellos se tributa a las llamadas Ciencias
Liberales.
Adviértase que se las llamaba liberales
o especulativas en oposición, precisamen-
te, a aquellas que profesaban los opera-
tivos y que se denominaban serviles o
prácticas.
El distingo entre unas y otras, como
lo demuestra el epígrafe, se encuentra ya
en Aristóteles. No es difícil advertir el
rango aristocrático de las primeras y el
carácter popular y subalterno de las se-
gundas. Por lo demás, ¿quiénes, que no
fueran los nobles y aristócratas, los due-
ños del divino ocio, habrían podido culti-
var una ciencia o arte cuyo ejercicio no
reportaba utilidad alguna? Es sabido que
el griego continental o europeo, contra-
riamente al griego jónico, miró siempre
con desprecio la actividad del trabajo ma-
nual o práctico. Este era propio de sier-
vos y esclavos o de griegos de baja con··
dición.
Las siete Ciencias Liberales -el hep-
tateuchon (hepta, siete y teuche, volúme-
nes) constituían, en cambio, el saber aris-
tocrático por excelencia. No había en
ellas interés práctico alguno. En sus dis-
ciplinas la maestría se alcanzaba sólo por
el espíritu. Era ejercicio de hombres li-
bres y para hombres libres. Así, ,aurolea-
das de este prestigio, pasaron a Roma, si-
guieron cultivándose durante el helenis-
mo y perduraron hasta casi llegada la
época Moderna. Algo de ese linaje intelec-
tual tratamos de conservar cuando toda-
vía hablamos de profesiones liberales ...
En la Edad Media, su enseñanza las di-
vidió en dos grupos: .el trivium, formado
lalp
esp ecu~ación
Aristóteles ( 384-322) .
Metafísica. Libro II, Cap. I.
por la Gramática, la Retórica y la Dialéc-
tica y el quadrivium, compuesto por la
Aritmética, la Geometría, la Música y la
Astronomía. Ordinariamente, se atribuye
esta clasificación a Marco Terencio Va-
rron (116-27); pero, lo cierto es que ya
Platón, en el Libro VII de La República,
siguiendo a los pitagóricos, sin mencio-
narlos, distingue las dos disciplinas. Es
probable que un pasaje de Las nubes, en
que Aristófanes alude por boca de Sócra-
tes a los números tres y cuatro se refie-
ra a esta misma división. Ha de recordar-
se que Las nubes es, en gran parte, una
sátira antipitagórica. Clemente de Alejan-
dría ( 145-215) , ya en los comienzos del
cristianismo, las llama las siete discipli-
.nas seculares y las menciona en el si-
guiente orden: Gramática, Retórica, Dia-
léctica, Aritmética, Geometría, Astrono-
mía y Música. Isidoro de Sevilla (560-
635) , por su parte, se ocupa de ellas en
los tres primeros libros de su famosa Eti-
mologías. El primero y el segundo los de-
dica al trivium y el tercero al quadrivium.
Su introducción en Inglaterra se atri-
buye ta un monje griego, de Tarso, del si-
glo VII, llamado Teodoro.
LAS CIENCIAS LffiERALES EN LA
MASONERIA OPERATIVA
N o se ha dado hasta ahora, a lo que
sabemos, una razón que explique el desta-
cado lugar que ocupan en las antiguas
Constituciones de la Masonería operativa
las siete Ciencias Liberales o Especulati-
vas. A simple vista no puede dejar de con-
siderarse, por lo menos, como algo, si se
quiere, contradictorio. Porque son, exac-
tamente, las mismas siete Ciencias que
componen el trivium y el quadrivium y
que proceden, como hemos visto, del lu-
-27

:minoso genio helénico, las que encontra-
mos en el documento masónico más anti-
guo que se conoce, el llamado Poema Re-
gio o manuscrito de Halliwell.
Este manuscrito, como se sabe, fue
descubierto a mediados del siglo pasado
en el Museo Británico, por el anticuario
James Orchard Halliwell. Se trata de un
poema compuesto de 794 versos, escritos
en lengua vernácula y en caracteres góti-
cos. El título, sin embargo, reza, sugesti-
vamente, en latín: Hic incipiunt Consti-
tutionis Artis Gemetriae Secundum Eu-
clydem. Supónese que su autor fue un
monje católico inglés y que lo compuso
sirviéndose de un texto mucho más an-
tiguo.
El pasaje más importante en que se
describe y se pondera el valor de las sie-
te Ciencias Liberales está contenido en
29 verso~. La versión que de ellos se ofre-
ce a continuación corresponde, con lige-
ras modificaciones, a la traducción, tal
vez única en nuestro idioma, que hiciera
el erudito y eminente fracmasón cubano
Aurelio Almeida ( 1843-1885). Hela aquí:
{{Mucho tiempo después el buen Euclides
Se dedicó a enseñar la Geometría)
Y lo mismo hicieron otros
Con varias diversas artes.
Descansando en la Gracia .de Cristo)
El emprendió la enseñanza de las siete
[Ciencias;
GRAMATICA) es la primera)·
DIALECTICA) la segunda) llena de bendita
[fuerza;
RETORICA) la tercera) ¿quién podría ne-
[garlo?
MUSICA) la cuarta) por acuerdo de todos;
ASTRONOMIA) la quinta) según lo que yo sé;
ARITMETICA) la sexta) ¿quién lo puede
[dudar?
GEOMETRIA) la séptima y última
Porque es bella y útil.
La Gramática es un buen medio
Para los que deseen instruírse por los
[libros,
Pero el arte la sobrepasa
Como el .fruto a la rama
Del árbol que lo produce.
La Retórica es el arte del bien decir.
La Música el de los dulces sonidos.
La Astronomíit determina los números.
La Aritmética enseña
28-
lalp
Las proporciones que entre ellos existen.
LJa Geometría es la séptima Ciencia)
Que permite distinguir el ERROR de la
[VERDAD.
Hay) pues) siete Ciencias)
Aquel que las aprenda bien)
Asegura el cielo y la felicidad').
N o son pocas las particularidades que
ofrece el l:'oema Regio, pero no es ésta
la oportunidad para hacer un examen de
ellas. Baste, por ahora, con señalar que
el Templo de Salomón y la figura de Hi-
ram Abiff le son totalmente desconocidos.
El papel principal lo lleva Euclídes' ( :->Uo-
283) , el geómetra griego alejandrino del
siglo III a. de C. y al que, en un notable
y sabroso anacronismo, se le presennta
como asistido por la Gracia de Cristo ...
Es de hacer notar, también, que la Ma-
sonería no se llama todavía Masonería, si-
no Geometría, y que la Comunidad se lla-
ma, a sí misma, "Fraternidad de La Geo-
metría" (Craft o Geometrie). Y, por últi-
mo, que no es la Dialéctica la llamada a
discernir sobre la Verdad y el Error, sino
la Geometría.
No menos importante es el papel que
desempeñan las siete Ciencias Liberales
en el Manuscrito Cooke que, como se sa-
be, sigue al Poema Regio en el orden cro-
nológico. Se supone que sea de la primera
o segunda década del siglo XV; pero, lo
mismo que en el caso del Poema Regio,
existen muchas razones para creer que se
trata de una copia de un texto todavía
más antiguo. Según Guillermo Bageman,
investigador masónico alemán, ambos
manuscritos proceden del sudoeste de In-
glaterra. En uno y otro los rasgos de la
escritura corresponden al gótico, aun
cuando es fácil advertir que este carácter
está más diferenciado en el Coo!ke que
en el Poema Regio. No sería osado decir
que el grafismo de este último acusa un
notable e inconfundible aire hebraico o
islámico, en todo caso más oriental que
inglés... ·
En cuanto al plan o composición, el
Manuscrito Cooke ha servido, en cierta
forma, de modelo, con ligeras v:ariantes,
a casi la mayor parte de las Constitucio-
nes posteriores. En todas ellas es fácil
distinguir las siguientes partes:
 lalp

1'1 Una invocación religiosa dirigida en el Parlamento, haciendo uso de la Ley

al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. de Sucesión de 1701 (Act of Settlement),
(Esta invocación falta en el Poema Re- acordaron llamar al trono a Jorge de Ha-
gio). no ver, príncipe alemán, bisnieto de Jacobo
2 9 Descripción y elogio de las siete I, luterano, y dispuesto a reinar sin gober-
Ciencias Liberales, en una de las cuales, nar... Eran los primeros pasos de la mo-
la Geometría, tuvo su origen 1a Maso- narquía parlamentaria. La . monarquía ah.,.
nería. soluta había muerto en la Revolución de
3 9 Pitágoras (o Hermes, en otros tex- 1689 con la fuga y el destronamiento de
tos) descubre, después del Diluvio, las dos Jacobo II, el rey jesuíta.
columnas en que estaban grabadas las La ascensión de Jorge I tuvo el efecto
siete Ciencias Liberales. de disipar, por lo menos en parte, el cli-
49 Historia de la Masoneda o Leyen- ma de subversión que alentaban los par-
da del Oficio, desde la construcción de la tidarios de la restauración de la dinastía
Torre de Babel hasta su llegada a Ingla- escocesa y católica de los Estuardos. El
terra, en tiempos del Rey Athelstan. rey destronado había muerto en el exilio
59 Asamblea de Masones, convocada en 1701. Los esfuerzos restauracionistas
por Edwin, hijo del Rey Athelstan. se libraban, ahora, a favor de su hijo Ja-
69 Reglas para la toma del juramen- coho, llamado el Pretendiente, y a quien
to a los nuevos masones. los ingleses incluso le negaban el ser hi-
7" Deberes ( charges) de los Masones. jo de J acabo II.
Una conjuración jacobita descubierta
LAS CIENCIAS LffiERALES Y LA en 1716. justamente un año antes de la
CONSTITUCION DE ANDERSON fundación de la Gran Logia de Londres,
fue reprimida en forma enérgica y sin mi-
Se sabe, positivamente, que fueron sericordia. Eran los estertores de toda
Constituciones derivadas, en su mayor una época que se iba. Al otro lado del
parte, del Manuscrito Cooke, las que sir- Canal, en Francia, acababa de extinguir-
vieron de base a Anderson y demás "cons- se la vida de su mejor símbolo : Luis
tituyentes" de 1723 para "recopilar en un XIV, el Rey Sol. Pero, si bien en el Con-
nuevo y mejor Método la Historia, De- tinente el sol se ponía, en las islas, en
beres y Reglas de la Antigua Fraterni- cambio, se annneiabl'! un nnevo ama-
dad". Esta recopilación fue la que muy necer: el siglo de las luces... Recuérdese
poco tiempo después se aprobaría como a Newton (1642-1727), a Locke (1632-
la primera Constitución de la Francmaso- 1704), y, todavía, pese a la distancia,
nería Especulativa o Moderna. a Francis Bacon (1561-1626). Pero, so-
Conviene. sin embargo, no tomar muy bre todo, a los filósofos deístas John To-
al pie de la letva la declaración que se land (1670-1722), Matthew Tindall (1636-
transcribe entre comillas y que corres- 1737), y Anthony Collins (1676-1717), el
ponde al texto de la parte resolutiva o primero en usar la expresión libre pensa-
aprobatoria de la Constitución. Es fácil, dor (free-thinker).
en efecto, comprobar que Anderson y De este modo, con un buen bagaje de
compañía no se limitaron simplemente a ideas nuevas en lo político, en lo filosó-
recopiLar y a ordenar en nueva forma los fico, en lo científico e, incluso, en lo re-
viejos manuscritos. Y es natural que así ligioso, Inglaterra estuvo pronta a suce-
fuera. · der a Francia en el liderazgo de Europa
N ó debe perderse de vista que la vieja y prepararse, en seguida, para asumir el
y ruinosa Fraternidad pudo cobrar nueva de todo el mundo. Los tiempos se abrían,
vida sólo después que el liberalismo y el pues, a los espíritus liberales, progresis-
nrotestantismo lograron consolidar, en tas e ilustrados.
forma definitiva, el triunfo alcanzado en El renacimiento de la antigua Fraterni-
la Revolución de 1689. Ello ocurrió en dad no fue, como pudiera creerse, sólo
1714, cuando, a la muerte de la reina obra del aire renovador que pareda alen-
Ana, los liberales ( whigs) , con mayoría tar por todas partes. Más bien fue la cul-

-29

minación de un proceso que, en más de
un aspecto, se identificaba con la Refor-
ma y que, en consecuencia, tenía su peor
adversario en la Iglesia Romana y en to-
do lo que ella significaba: absolutismo
político, opresión religiosa, cortesanismo
jesuíta, etc. No tenía, así, nada de ex-
traño que fueran dos hombres formados
en el espíritu de la Iglesia Evangélica,
James Anderson, nuestro padre constitu-
cional, y Juan Teófilo Desagulier, los
mentores más activos y visibles en el mo-
vimiento renovador de las logias masó-
nicas londinenses. Anderson era presbi-
teriano y Desagulier, hugonote. Sus pa-
dres habían tenido que huir de Francia a
raíz de la revocación del Edicto Nantes.
Eran amigos, ambos habían predicado en
l,a misma capilla de Swallow Street.
En la realización de su trabajo~, era na-
tural que Anderson se apartara, en más
de un punto, de los viejos manuscritos y
adaptara el texto de la nueva Constitu-
ción a sus creencias religiosas o a las
ideas predominantes de su época. Fruto
de este criterio fue, sin duda, la supresión
de la invocación de la Santísima Trinidad
y que le fue11a tan duramente enrostrada
por algunos hermanos, entre ellos por el
hermano Conder. La tarea, como es fácil
ver, no estaba exenta de tropiezos y difi-
cultades. A ellas se refiere, precisamente,
Desagulier, su hermano en la fe, en la
misma dedicatoria que, como Diputado
del Gran Maestre, Duque de Wharton, y,
por orden de éste, escribió al Duque de
Montagu, que le había precedido en el
cargo y que sirva de prólogo al texto hoy
universalmente conocido. En ella le ex-
presa:
"No necesito decir a Vuestra Gracia el
trabajo que se tomó nuestro erudito au-
tor para compilar y codificar este Libro
de los antiguos Archivos y con cuanta es-
crupulosidad ha comparado y expuesto
todo lo concerniente a la Historia y Cro-
nología, a fin de que esta nueva Consti-
tución sea una justa y exacta descripción
de la Masonería desde el principio del
Mundo hasta la Gran Maestría de Vues-
tra Gracia, conservando lo verdaderamen-
te auténtico de las antiguas".
Es cosa sabida la importancia que, en
efecto, Anderson le dio a la primera par-
30-
lalp
te de la Constitución, tradicionalmente
destinada a narrar la historia de la Fra-
ternidad, a fin de presentarla expurgada
de las "muchas interpolaciones, mutila-
ciones y deplorables corrupciones, no só-
lo en la letra sino en los hechos, con gra-
ves errores en la Historia y Cronología,
etc.", que contenían las viejas Constitu-
ciones.
Po¡r cierto que el erudito autor vio to-
dos esos errores y defectos a través de
su versación bíblica y, sobre todo, a tra-
vés de sus propias convicciones religio-
sas. De ahí es que, si bien es verdad que
corrigió algunos anacronismos, como el
que presentaba a Euclides recibiendo de
Abraham la enseñanza de las siete Cien-
cias Liberales, incurrió, en cambio, en
o1tros bastante más pintorescos y, sí mu-
chísimo menos justificados, como el de
mostrarnos a Adán en posesión de las
mismas Ciencias Liberales y, particular-
mente, de la Geometría...
Sin embargo, es fácil comprender las
dificultades que, como hombre de fe, de-
bieron presentársele a Anderson para rea-
lizar su trabajo y, sobre todo, para darle
al texto constitucional la debida y nece-
saria unidad y coherencia.
En las Constituciones antiguas, la le-
yenda del Oficio comenzaba., invariable-
mente, después de la invocación, con la
descripción de las siete Ciencias Libera-
les o Especulativas y el elogio de la más
importante de ellas -la Geometría- en
la que había tenido su origen la Maso-
nería. Luego el relato se entremezclaba
con el pasaje del Génesis, relativo a la
descendencia de Lamech o a la de Noé y
la leyenda del Diluvio. Es de capital im-
portancia hacer notar que ninguna co-
mienza con Adán, característica que per-
mite conjeturar, no sin fundamento, la
posible influencia de una versión cristia-
no oriental.
El problema, por tanto, era éste: cómo
conciliar el pasaje de las siete Ciencias
liberales, de filiación netamente helénica,
con el relato bíblico de puro sabor semí-
tico.
Anderson no vio conciliación posible y,
prevaleciendo en él su credo cristiano, re-
trotrajo la leyenda del Oficio al Adán bí-
blico y suprimió la tradicional relacjón de

las siete Ciencias Liberales, limitándose a
mencionar sólo 1a la Geometría, a la que,
como ya hemos dicho, supuso en el cora-
zón del primer hombre salido de la mano
de Jeho;vá.
La supresión del pasaje de las siete
Ciencias acarreó la de otro no menos im-
portante: el de la hermosa leyenda de las
dos columnas. En el Manuscrito Cooke,
se habla de dos columnas en las que esta-
ban grabadas las siete Ciencias Libera-
les. Trátase de una leyenda órfica. Teme-
rosos los hombres de que Zeus volviera
a castigarlos po1r el agua o por el fuego
y de que se perdiera, así, el con~imiento
de las Ciencias, idearon construir dos co-
lumnas: una, que la preservara del fuego
y otra que la preservara d.e las aguas.
Así, la primera la hicieron de mármol :y
la segunda de corcho.
El único testimonio, no masónico, que
se conserva de esta leyenda, aunque un
tanto desfigurado, es el que ha dejado el
historiador judío Flavio Josefo (37-103 ?)
en su obra Antigüedades judías. Se ve
claro que el propósito del autor fue ador-
nar con dicha leyenda su relato del Géne-
sis bíblico. Naturalmente no pudo hacerlo
sin tomarse ciertas libertades con el texto
mosaico. Desde luego, para darle funda-
mento a la innovación, comenzó por atri-
buirle a Adán la predicción del aniquila-
miento del mundo por el fuego y por las
aguas. El resto, con ser lo fundamental, no
ofrecía mayores dificultades : la construc-
ción de las dos columnas la presentó como
obra de los hijos de Seth, el tercer hijo
de Adán, "inventores de esa especie parti-
cular de sabiduría relativa al movimiento
y orden de los cuerpos celestes". El único
elemento común entre la leyenda órfica y
la mosaica es el Diluvio. En la órfica, Noé
se llama Deucalion.
La pr~esencia d-e la leyenda de las dos
columnas en las antiguas constituciones
oper.ativas la han atribuído algunos au-
tores a la influencia de una obra de un
monje de Chester. Ranulf Higden, muer-
to alrededor de 1360, y quien la habría
tomado de Flavio Josefo. Es la posición
de los que niegan que en la Francmaso-
nería se continúe, por filiación directa,
una tradición genuinamente órfica. Pero
estos autores parecen no habere.e dado
lalp
cuenta de que se trata de dos versiones
distintas. La de Flavio Josefo, como ya
se ha dicho, atribuye la construcción de
las dos columnas a los hijos de Seth. En
cambio, según la del manuscrito Cooke
y Constituciones posteriores, ésta fue
obra de los hijos de Lamech, a saber: Ja-
ba!, Jubal, Tubalcain y Naamía. Es im-
portante hacer la distinción porque ella
revela una doble fuente.
La aprobación de l·a primera Constitu-
ción d.e Anderson pone término a la eta-
pa de la Masonería llamada operativa y
señala el punto de partida de la historia
institucional de la Francmasonería Mo-
derna o Especulativa. Es frecuente que la
caracterización de una y otra se haga de
acuerdo con la distinción aristotélica a
que nos hemos referido al comienzo de
este artículo. Sin embargo, no nos llame-
mos a engaño.
El alto sitial en que los masones ope-
rativos medievales tenían a las siete Cien-
cias Especulativas y, en especial, a la
Geometría, los muestra más bien como
celosos depositarios de una tradición
que se perdía en el tiempo, pero que, sin
embargo, la evocaban presidida por la es-
cuadra y el compás.
La propia Arquitectura -arte operati-
vo- y culminación del oficiO! que profe-
saban, no fue para ellos tan glorificada
como la Geometría.
En cambio, en la más extraordinaria
de las paradojas, Anderson, el Padre de
la primera Constitución de la Francmaso-
nería Especulativa, no sólo proscribió de
su texto el pasaje de las siete Ciencias
Especulativas, sino que hizo1 de la Arqui-
tectura -arte no especulativo-, asocián-
dola a la Biblia, la fuente generadora de
todo un sistema de" símbolos. Y así,
para citar sólo un ejemplo, baste con
señalar que no son pocos los que ven
en las dos columnas de nuestros Tem-
plos una réplica de las del Templo de Salo-
món, sin advertir que éstas formaban
parte del atrio exterior y las nuestras, en
cambio, están dentro y sin función arqui-
te~tónica alguna, como proclamando su
autonomía simbólica.
Eduardo Phillivs Müller
Dire-ctor del Seminaiio de Estudios
Masónicos
-31
 lalp

f.2os CfJ;á/ogos Jl1asÓJ1Ícos

de f.2essing, o

"~RNST und FALK"

Gotf,hold E. Lessing. Traducción y notas .explicativas de Andrés Allan G.

OONVERSACION SEGUNDA

Ernst.- Bien. ¿Qué dices? ¿Todavía no has cazado la mariposa?

Falk.- Me tentó de arbusto en arbusto, hasta el riachuelo. De repente voló a
la ribera opuesta.
Er~t.- Sí. SL ¡En verdad que hay tentadores parecidos a la mariposa! (I)
Falk.- ¿Has pensado en aquéllo? ·
Ernst.- ¿Qué cosa? ¿Acer·c a de tu enigma? Tampoco podré "cazarlo", ¡hermosa
mariposa! Debido a esto ya no me dará mayor preocupación. Un::.
vez he discutido .c ontigo acerca de la Francmasonería, pero nunca más;
pues veo que eres igual que todos ellos.
Falk. - ¿Igual que tJodos ellos? Todos .no dicen eso de mí. (2)
Ernst.- ¿No? ¿Hay también herejes, acaso, entre los Francmasones? Y tú,
se me ocurre, eres uno. Sin embargo, todos los herejes siempre tienen
algo en común con los ortodoxos. A eso me refería.
Falk.- ¿A qué te referías?
Ernst.- A los Francmasones, tanto ortodoxos como herejes: todos hacen jue-
go de palabras, se dejan interrogar y ,c ontestan sin dar respuesta a
las preguntas.
Falk. - ¿Así lo crees? Muy bien. Hablemos de otra cosa, entonces. Ya me has
arrancado de la cómoda posición de asombrado silencio. (3)
Ernst.- Nada más fácil que restituirte a esa posición. ¡Siéntate junto a mí y
observa!
Falk. - ¿Qué pasa?
Ernst.- La vida y actividad de estos hormigueros. ¡Qué actividad, y sin embargo
qué orden! Todos acarrean, arrastran y empujan, y rradie se estorba.
¡Mira! ¡Hasta se ayudan!
Falk.- Las hormigas. viven .e n comunidad, .como las abejas.
Ernst.- Y en una comunidad ·aún más maravillosa que la de las abejas, puesto
que a nadie tienen que las aune y gobierne.
Falk. - En consecuencia, es posible la existencia del orden sin necesidad de
· autoridad. (4) ·
Ernst.- Si cada individuo sabe gobernarse, ¿por qué no?
Falk. ~ ¿Crees que llegará a ocurrir entre los seres humanos?
Ernst.- Pues, lo dudo.
Falk. - Lástima.
Ernsti.- En realidad.
Falk.- Levántate y vamos; las hormigas se te subirán encima. Se me ha
ocurrido •algo que debo preguntarte. No tengo la menor idea en cuanto
a tús pensamientos al respecto.
Ernst.- ¿En cuanto a qué?

32
 lalp

Falk. - La sociedad de los hombr-es en general. ¿Cómo la consideras?

Emst.- Como algo exce~entle.
F.alk.- Indudablemente. ¿Pero la -c onsideras como un medio, o como un fin?
Ernst.- No te entiendo.
Falk.- ¿Crees que los hombres fueron hechos para los Estados, o que los
Estados existen para los hombres?
Ernst.- Los hay que mantienen el primer punto de vista, pero el segundo me
parece m ás correcbo.
Falk.- También lo creo yo. (5) Los Estados unen a los hombres, de tal ma-
nera que, de tal unión, c'ada pe¡rsona pueda gozar de su parte tle la
felicidad en forma más efectiv.a y con mayor seguridad. La suma de
la felicidad individual de .c ada uno de los miembros, es la felicid'ad
del Estado. Fuera de ello no hay felicidad alguna. Toda otra "feli-
cidad" del Est'ado, del cual se derive sufrimiento para unos pocos, /Y
por muy mínimo que sea este sufrimiento, no es otra cosa que el ro-
paje de la tiranía.
Ernst.- Yo no lo diría en voz tan alta.
Falk. - ¿Por qué no?
Ernst.- Es fácil 3(busar de un'a verdad que cada uno juzga de acuerdo a su
particular punto de vista.
Falk. - ¿Te das cuenta, mi amigo, de que ya eres medio Francmasón?
Er.nst.- ¿Yo?
Falk. - Sí, tú. Puesto que ya reconoces verdades que es preferible guardar
en el secreto.
Ernst.- Pero siempre uno puede hablar de ellas.
Falk. - El hombre sa.bio no puede hablar de aquello que es mejor o:c ultar.
Ernst.- ¡Como quieras! No volvamos al tema de los Francmasones. ¡No quiero
saber nada más de ellos!
Falk. - Perdóname. Por lo menos reconoces mi buena disposición para de-cirtle
más acer0a de ellos.
Ernst.- Bromeas. Bueno, la vida cívica del hombre. . . todas las constituciones
políticas no son sino medios de alcanzar la felicidad humana. ¿Qué
más?.
Flalk. - ¿Nada más que medios? Medios ideados por el hombr:e; aunque no
niego que la Naturaleza ha ordenado todo, de tal modo que el hombre
luego se da cuenta.
Ernst.- Esto, sin duda, ha llevado a algunos a inferj.r que hr. sociedad es el fin
mismo de la Naturaleza. Desde luego que todo -nuesttras pastones y
nuestras necesidades- todo condu::e a esto; debe ser, por tanto, el
fin que pers.igue la Naturaleza. (6) Así han concluído algunos. Como
si por móviles prácticos, la Naturaleza no produjera también los me-
dios. Como si la Naturaleza tuviera por fin la felieidad de un concepto
abstracto -como el Estado, la Patria- más que la felicidad de cada
ser en particular.
Falk. - ;Muy bien! Avanzas hacia mí por buen camino. Ahora, dime: si las
constituciones políticas son medios, medios ideados por el hombre.
¿deben sólo ellas ser excluídas del destino de los medios humanos?
Ernst.- ¿A qué llamas "el destlino de los medios humanos"?
Falk. - Aquello que está inextricablemente unido a los medios de que dispone
el hombre, y que los diferencia de los medios infalibles de Dios.
Ernst.- ¿Qué s.ignific·a todo esto?
Falk. - Que los medios de que dispone el hombre no son infalibles; que con
frecuencia no sólo no corresponden a su móvil o propósito, sino que
hasta tienen resultados opuestos a los deseados.

-33
 lalp

Ernst.- Veamos un ejemplo, si se te ocurre alguno.

Falk. ~ Da. navegación y los barcos son medios para alcanzar tierras lejanas.
Sin embargo, se convierten en medios por los cuales mucha gente
nunca arriba a ellas.
Ernst.- Te refieres a los que naufragan y se ahogan. Ahora creo te comprendo.
Pero sabemos la razón por la cual muchos individuos no alcanzan
felicidad alguna por medio de la constitución política. Las constitu-
ciones políticas son de diversas clases; algunas son mejores que otras;
varias son muy defe:::tluosas, en evidente conflicto con sus propósitos;
y la mejor acaso esté aún por idearse.
Falk. - Desecha esto. Supón que ya existe la mejor constitución política que
pueda idearse; supón que todos los pueblos del mundo la hayan adop-
tado. ¿No crees tú que aún así, a pesar de esta constitución ideal, no
se presentarian casos perjudiciales a la felicidad humana, y de los
cuales el hombre, en su est'ado .natural, nada supiese?
Ernst.- Creo que si tales casos se presenta.ren, la mejor .constitución política
no obstante, entonces resultaría, en ese evento, que no sería la mejor
constitución.
Falk. - ¿Y sería posible una aún mejor? 'M!uy bien, enúnnces a.cepto esta
mejor como "la mejor", y aplico la misma pregunta.
Ernst.- Me parece que desde el principio, desde la primera suposición, sólo
has estado diciendo, por medio de sutilezas, ·q ue todos los medios
ideados por el hombre, es decir las :::onstituciones políticas, no pueden
sino ser defectuosas.
Falk. - No solamente eso. (7)
Ernst.- Y te seria difícil nombrar una de estas cosas perjudiciales ...
Falk. - ¿Que también surgirían de la constitución ideal? ~e podría nombrar
no sólo una, sino diez.
Ernst.- ¡Una a la veá!,
Falk. - Supongamos, entonces, que se ha creado la constitución política ideal;
supongamos que todos los pueblos del mundo viven bajo ella; de
acuerdo a esto, ¿fmmarí:an todos los pueblos del mundo, solamente
un Estado?
Ernst.- Difícilmente. Un Estado tan inmenso no se podría administrar. Ten-
dría que ser dividido en v:arios ~tactos pequeños, todos regidos por
las mismas leyes.
Falk. - Es decir, que las gentes serían, todavía, alemanes y franceses, hol:an-
deses y españoles, rusos o suecos, o como se les llamare.
Ernst.- Por cierto.
Falk. - Entonces ya tenemos un defecto, puesto que ¿no es .cierto que cada
uno de estos Estado& pequeños tendría sus propios intereses, y cada
uno de sus habitantes el interés de su propio Estado?
Ernst.- Así tendría que ser.
Falk. - Estos intereses diferentes con frecuencia estarían en conflicto, como
sucede actualmente; y dos miembros de dos estados diferentes se
encontrarían con tanta "imparcialidad" de sen~:imientos como un ale-
mán se encuentra con un francés, o un francés .con un inglés, en la
adualidad.
Ernst.- Muy probable.
Falk. - Es decir, que si un alemán se encuentra hoy con un francés, o un
francés con un inglés, o vice versa, ya no se tra.ta de que un hombre
se encuentre con otro hombre, quienes en virtud de su naturaleza idén-
tica se sientan atraídos entre si; se trata del encuentro de un hom.
bre particular con otro hombre particular, conscientes ambos de sus

34-
 lalp

tendencias diferentes, lo que los ha:!e fríos, res.e rvados, sospechosos,

aún antes de que traten lo más mínimo entre ellos, como hombres
in divid uale.s.
Ernst.- Esta es, desgraciadamente·, la verdad.
Falk. - Entonces, también es verdad que los medios que unen a la gente con
el objeto de hacer su felicidad, al mismo tiempo las divide.
Ernst.- Si así se considera. el asunto.
Falk. - Avanza un 'Paso más. Muchos de los EStados pequeños tendrían :climas
diferentes (B); por consiguiente, necesidades y gustos diversos; por
consiguiente, muy diferentes costumbres y maneras; por consiguiente,
muy diferentes reglas éticas; por consiguiente, religiones muy diversas.
¿No estás de acuerdo?
Ernst.- Es un paso tremendo.
Falk. - La gente aún se·r ia, o judío, o cristiano, o mahometano, y así.
Ernst.- No lo puedo negar.
Falk. - Si lo fueran, llámeseles ccmo se les llamare, también se tratarían
unos a los otros de idéntica manera a la que se han trat.ado nuestros
cristianos y judíos. y mahometanos en todo tiempo: no sólo como hom-
bres ante hombres, sino ¡eomo hombres particulares, distintos, ante
hombres particulares y distintos, quienes contienden a:!el"ca de cierta
superioridad espiritual, por cuyo intermedio establecen ciertos dere-
chos supuestos, lo que de ninguna manera ocurriría con el hombre
natural .
. Ernst.- Esto es todo muy triste, y desgraciadamente muy probable.
Falk. - ¿Sólo probable?
Ernst.- En todo caso, me imagino, ya qu~ has ~upuesto que todos los Estados
tuvieran una constit:u~ión unifnrme, que también tendrían una sola
religión. Sí, en efecto; no conr:ibo quo. fuere· posible una sola consti-
tución política, uniforme, sin una religión uniforme.
Falk. - Ni yo t:rmpoco. Sólo hice el supuesto, a fin de cortarte todo camino
de retirada. U.no es tan, imposible como lo otro. Un solo Estado, varios
Estados. Varios Estados, varias constituciones políticas. Varias consti-
tuciones polítkas, varias religiones.
Ernst.- Sí, sí. Así parece.
Falk. - Así es. Ahora, .considera el segundo error originado por la sociedad,
también contrario a su 'Propósito. No puede unir a los hombres sin
dividirlos; no puede dividirlos sin establecer abismos entre ellos, sin
alz:>r muros divisorios ent\re éllos.
Ernst.- ¡Y cuán terribles esos abismos! Tan a menudo, ¡.cuá.n inesealables
esos muros!
Falk. - Déjame agregar un tercer punto. (9) No basta que la sociedad divida
a los hombres en pueblos y religiones diferentes. Esta división en
unos 'pocos grandes sectores, cada uno de los cuales se ·~onvierte en
un todo, por si y ante sí, siempre sería mejor ·q ue [a ausencia de un
todo cualquiera. No, la sociedad continlúa su división dentro de cada
uno de estos sectores, casi hasta el infinito.
Ernst.- ¿Cómo así?
Falk. - ¿O es que eres de opinión que a un Estado se le puede concebir sin
diferencias de clases? Puede el EStado se·r bueno o malo; puede aproxi-
marse, más o menos, a la perfección; pero es imposible que todos sus
miembros tengan entre sí la misma relación. Aunque todos tomen
parte en el aparato legislativo, sin embargo no todos pueden tene:r
parte igual, por lo menos no en forma directa. En consecuencia, habrá
miembros de rango superjor y de rango inferior. Aún más, aunque se

-35
 lalp

dividieran, al empezar, todos los bienes del Estado, en partes iguales,

entre sus miembros, esta división igual no duraría por dos gen€ra-
ciones. Uno sabría utilizar su propiedad mejor que otro. El que no la
utilizó con buen provecho tendrá que dividida entre sus sw:esores, al
igual que lo hará el que prosperó. En consecuencia, habrá ciudadanos
más ricos y ciudadasos más pobres.
Ernst.- Evidentemente.
Falk. - Reflexiona, ahora, cuánto mal puede haber en un mundo que no
tiene su origen en esta variedad de clases.
Ernst.~ ¡Si pudiera ·contradecirte! ¿Pero, qué razón tengo yo para contra-
decirte? En verdad, los hombres sólo pueden ser unidos a través de
la división; se les mantiene unidos sólo por constante división. ¡En
verdad es así; no puede ser de otra manera.
Falk. - Eso es, justamente, lo que digo.
Falk. - Bueno, ¿y qué persigues? ¿De que yo me sienta desilusionado de la
vida cívica, de la sociedad? ¿De hacerme desear que los hombres .n un-
ca hubiesen tenido la idea de unirse en Esttados?
Falk. - ¿Tan pO¡Co me comprendes? Si la sociedad tuviera por única ventaja
de que sólo en ella fuera posible el cultivo del intelecto humano,
aún la apoyaría, a pesar de sus e·rr.ores mayores.
Ernst.- El proverbio dice: Quién desee gozar del fuego, debe soportar el humo.
Falk. - Por cierto. Si bien es .c ierto que el humo es inevitable en el fuego,
¿quiere ésto decir que no podamos invent-ar la chimenea? Y el hom-
bre que inventó la chimenea, ¿es por esto enemigo del fuego? Ves, a
esto iba.
Ernst.- ¿A qué? No te entiendo.
Falk. - La analogía es, sin embargo, muy apropiada. Si los hombreS: se unen
en Estados sólo a través de estas divisiones, ¿son buenas estJas divi-
sio.nes, entonces?
Ernst.- Apenas.
Falk. - Son, acaso, ¿sagradas estas divisiones?
Ernst:- ¿Qué quieres decir "sagradas"?
Falk. - Que fueran intocables.
Ernst.- ¿Con qué objeto?
Falk. - Con el objeto de evitar que produjeren mayor mal que lo necesario,
con el objeto de anular sus malos efectos en .c uanto fuera posible.
Er.nst.- En verdad. Así depe ser.
Falk. - Pero al mismo tiempo, tampoco se podría imponer, por ley. Pues las
·leyes de un Estado nunca se extienden más allá de sus fronteras, y
aquénas se aplicarían, precisamente, sólo fuera de los límites de todos
los Estados, y de cada Estado. Por consiguiente, sólo podría ser un
trabajo gratuito, sin esperar recompensas, y seria un mero deseo de
que los mejores hombres, y los más sabios, de c:ada Estado, volunta-
riamente emprendieran este trabajo ad honores. (lO)
Ernst.- Un mero deseo; pero tantio de desear.
Falk. - ¡Ya lo .creo! Desear, entrañablemente, que en cada Estado hubiesen
hombres libres de prejuicios de nacionalidad, y muy conscientes en
cual punt.o el patriotismo deja qe ser una virtud. (11)
Ernst.- Así habrí:a que desearlQ.
·Falk. - De desear que en cada Estado haya hombres · que no sucumban ante
los prejuicios de la religión bajo la •c ual se criaron; que no crean que
tlodo lo que éllos ¡COnsideren bueno y verdader:o sea, indispensable-
mente, lo único bueno y verdadero.
Ernst.- Así es de desear.

36-
 lalp

Falk. - Desear, que en cada Esta.do haya hombres que la eminencia social no
deslumbre, ni la in.signüicancia despeche; en cuya sociedad el hom-
bre eminente se acomode con fa!Cilidad y la persona insignificante se
desempeñe co.n desenvoltura.
Ernst.- Así es de desear.
Falk. - ¿Y si este deseo se realizara?
Ernst.- ¿Re·alizara? Habrá, por cierto, tales hombces por aquí y por allá, de
vez en cuando.
Falk. - No sólo por aquí y por allá; no sólo de vez en !CUando.
Ernst.- En ciertlo tiempo, en ,c iertos países, podría haber varios.
Falk. - ¿Y qué si los hay, ahora, en todas partes, y los habrá siempre?
Ernst.- Dios lo quiera.
Falk. - ¿Y qué si estos hombres vivieran, no en una separación ineficaz ( 12 ),
o .como en una Iglesia invisible?
Ernst.-.:.... Un sueño maravilloso.
Falk. - ¡Al grano! ¿Y qué si estos hombres fueran los Francmasones?
Ernst.- ¿Qué dices?
Falk. - Y si fueran los Francmasones que se han propuesto, como parte de
su labor, hacer mínimas esas divisiones que mantienen a 1os hom-
bres como a extraños? (13)
Ernst.- ¿Los Francmasones?
Falk. - Digo, parte de su labor.
Ernst.- ¿Los Masones?
Falk. - Perdóname. Me olvidé que no deseas oir nada más de los Masones.
Nos llaman al desayuno. ¡Vamos!,
Errnst.- T.odavía no. Un ml.nuto. Dices que los Masones ...
Falk. - La discusión me llevó a ellos en contra de mis deseos. Perdón:ame.
¡Vamos! Allí, en compañía más numerosa, encontraremos motivo para
una conversa.ción m,ás útil. ¡Vamos!

NOTAS A LA CONVERSACION SEGUNDA

(1) Un dardo dirigido a Falk, quien, como la mariposa, habia puesto a Ernst
en elusiva •caz·a de un concepto de la Francmasonería que no alcanzaba
a compren.d er.
(2) Los diálogos prueban que Lessing no era Masón "ortodoxo". Uno de sus
biógrafos dice: "Con escasas excepciones, sus contemporáneos Masones
lo consideraban un visionario".
(3) Posiblemente signifique que hasta el momento en que Ernst lo indujo a
discutir el asunto, se• había contentado en pensar par:a si acerca de los
sorprendentes éxitos y grandes posibilidades de la FM.
(4) Por "orden" da a entender, aquí, aquella condición donde cada ciudadano
ejecuta sus deberes con sentido de lo que es justo, y no porque se vea
obligado bajo pena de castigo. Aunque Lessing expresa duda de que la
sociedad humana pueda alguna vez abandonar reglas punitivas de go-
bierno, en su obra "La Educación de la Raza Humana", mira al futuro,
cuando el hombre: "hará lo justo por el hecho de ser intrínsecamente
lo justo, no porque el ha.cerlo traiga consigo premios arbitrarios, lo que
anteriormente se hacia con el simple objeto de fij:ax y reforzar su vaci-
lante entendimiento de los beneficios internos, superiores, consecuentes
a la ejecución del bien".
(5) En su concepción odel Estado, Lessing le sigue las aguas a Aristóteles,
quien en su "Política" identifica la felicidad del individuo ·con la felicidad
del Estado.

-37
 lalp

(6) A¡:istóteles (Política, Libro I!), declara: ''Cada Estado es obra de la Natu-
rá.leza, desde luego que lo son, asimismo, los primeros lazos sociales;
pues a esto tienden todos como a un fin, y la naturale,za de una cooa se
juzga por su tendencia".
(') Falk mantiene que su hipótesis no es, bajo ningún punto de vista, suti-
leza, pero sí una suposición indispensable.
(s) Lessing se vio influenciado, aparentemente, por Montesquieu quien, en su
"Espíritu de las Le,yes", mantiene que las condiciones climáticas afec.t an
en forma profunda la vida de un pueblo, en cuanto ·a ética y religión.
(9) De acuerdo al argum,e:n:to de Falk la constitución política, u organización
de los Estados, necesariamente divide a la raza humana en: a) naciona-
lidades diferentes; b) religiones diferentes, y e) clases sociales diferentes.
{lo) Expone el ideal desinteresado de la Francmaso.nería, que trasciende los
limites trazados por el hombre.
(U) Este punto se alcanza cuando el patriotlismo origina .c eguera en cuanto a
loo defedos del país propio y odio hacia otras naciones, o sus ciudadanos.
{12) Es decir, los hombres inspirados en estos nobles ideales se encuentran
unidos por una "Organim.ción", por medio de la cual sus esfuerzos co..
bra.n efkacia.
(IS) Lessing expresa uno de los puntos básicos de la Francmasonería 'Universal.

* *

ACCA LAURENCIA

Antigua diosa itálica, personificación de la tierra fecunda. y ado-

rada como protectora de las cosechas. Sus fiestas, llamadas "laurenti-
nalias", se celebraban el 23 de diciembre y tenían carácter fúnebre. Una
tradición posterior da este nombre a la esposa del pastor Faustulo, que
amamantó y crió a Rómulo y Remo.

* * *

El hombre superior se desarrolla hacia arriba; el hombre inferior se

desarrolla hacia abajo.

Confucio.

38-

fi1 a sóvt ica de Chile
Con la presente publicación ponemos término a la reproduo~ón de este
interesante trabajo sobre los Es~atutos de la Augusta Orden, del nustre Her-
mano Dr. Luis Sand'oval Smart.
DE LOS MAESTROS DE CEREMONIA
!i ' /
Art. 168.- Los Maestros de Ceremonia 'no
tienen entre sí otra preeminencia sino la que
resulte del orden en que han sido elegidos.
Art. 169.- Los Maestros de Ceremonia d2-
berán ser oídos en todo lo que concierne al
ceremonial del Taller.
Art. 170.- Son especialmente encargados
tanto en Logia como fuera de ella, de hacer
los honores a nombre del Taller. Introducen
al Templo a las diputaciones y Visitadores,
cuidando de presentar separadamente, y
siempre en el último lugar, a aquel o a aque-
llos a quienes se deberán los mayores hono-
res masónir..,os.
Art. 171.- A la hora indi-cada para la Aper-
tura de los Trabajos, los Maestros ,de Cere-
monias invitan a los Hermanos a decorarse
y a entrar en Logia.
Art. 172,- Cuid::tn de que cada Hermano
ocupe el lugar debido a su rango y a su
Grado.
Art. 173.- Acompañan a los Iniciados en
todos los Grados desde el momento que le
son entregados por el Hermano Experto.
A.rt. 174.- En los banquetes, cuidan que
tanto los Dignatarios como los demás Her-
manos ocupen sus respectivos lugares; y en
cuanto a los Hermanos Visitadores. siguen
las órdenes recibidas del Venerable.
DEL GUARDA SELLOS Y TIMBRES
Es una función que ha desaparecido en la
lista de obligar.:iones de un Oficial especial-
mente destinado al efecto. Una parte la cum-
ple la Gran Secretaría de la Gran Logia de
Chile, en lo referente a Diplomas y Licen-
cias, y la otra el Secretario de la Logia res-
pectiva. Veamos qué decía el Estatuto o. me-
lalp
jor, Estatutos Generales que estamos trans-
cribiendo en parte:
Art. 175.- El Guarda Sellos es el deposi-
tario de los sellos y timbres del 'l'auer.
Art. 176.- Firma y pone el sello a todas
las planchas que emanan del Taller una vez
que se hallen firmados por las cinco prime-
ras luces, y adoptando la siguiente fórmula:
TIMBRADO Y SELLADO POR NOS GUAR-
DA SELLOS Y TIMBRES W . ..... , pero en
ningún caso debe firmar diplomas y lbencias
sino cuanct'o se encuentren revestidos de la
firma del Tesorero. En caso de no dar cum-
plimiento a esta disposición, se hace respon-
sable hacia la Logia de lo que debiere el Her-
mano que, sin ponerse a cubierto con el Te-
soro, hubiere recibido su diploma .o licencia.
AII~. 177.- Es obligación del Guarda Sellos
y Timbres llevar un registro, por orden de
fe---.,h:as y números, de todas las piezas que
sellare.
DEL ARCHIVERO
Este cargo ha tomado ahora la denomina-
ción de Bibliotecario y Archivero ocupando
el penúltimo lugar del cuadro de Oficiales de
la Logia,
Los "Estatutos de lo.. Orden Masónica" le
fijaba las siguientes atribuciones y deberes:
A.rt. 178«;),- El Ar~hivero es el depositario
de los Estatutos, Reglamentos, Libros anti-
guos de Arquitectura, informes y general-
mente de todos I:os objetos, cuyo depósito se
ordena.
Art. 179.- El Archivero d:::be formar un re-
gistro, en el que se inscribirán, por orden de
fechas y números todos los objetos archi-
vados.
A.rt. 180.- El Archivero no permitirá la
extracción de ningún documento archivado,
salvo que fuese el Venerable, el Orador, el Se-
-39

cretario o el T esorero, quien lo solicitase, en
cuyo caso los dejará extraer bajo recibo, fir-
mado en un regisuo especial llevado al efecto.
Art. 181.- Todos los demás hermanos, in-
distintamente, tienen el derecho de tomar en
el Archivo los datos necesarios para su ins-
trucción, pero sin extraer jamás pieza alguna
y sin que los document-os que regis~;ren con-
tengan conocimientos que vayan más allá del
Grado que poseen.
Art. 182.- Quince días antes de la instala-
ción de los nuevos Oficiules, el Archivero sa-
liente y el entrante, ayudados por el Arqui-
tecto iMlaestro de Banquetes forman un inven-
tario general de todas las piezas EXistentes
en los Archivos. Este Inventario será firmado
por los tres Hermanos que lo han formado,
y servirá para hacer efectiva la responsabi-
lidad de quien cc·r responda.
DEL DIPUTADO A LA GRAN LOGIA
Art. 183.- Los Talleres tienen un Diputado,
encargado de representarles a,nte la Gran Lo·
gia de Chile. Este diputado debe asistir a to-
das las Tenidas, tanto de la Gran Logia co-
mo de la Siección de la misma de que hicie-
re parte.
Art. 184.- El Diputado de la Logia que,
sin haber he::ho conocer los motivos de su
ausencia faltase a tres reuniones de la Gran
Logia o de la Sección a que pertenezca, po ·
G:rá ser considerado como dimisionario, y el
Taller que le ha nombrado invitado a reem-
plazarle.
(En la actualidad, sólo existe el Diputado
ante la Gran Logia, de los Talleres de Pro-
vincia. En Santiago ha sido suprimido y ha-
ce su papel el Venerable Maestro del Taller
respectivo) .
DEL HOSPITALARIO
A¡rt. 185.- E'l Hospitalario es el encargado
de todos los actos de beneficencia que ha::e
la Logia.
Art. 186.- En cada Tenida, el Hospitala-
rio recibe las erogaciones destinadas al so-
corro de los pobres; cuida que ningún Her-
mano se retire sin haber depositado su ofren-
da en el Tronco de pobres colocado al efec-
to. desde la apertura de los Trabaj-os en el
bufete del Primer Vigilante.
Art. 187.- La Caja del Hospitalario es en-
40-
lalp
teramente inde-pendiente de la del Tesorero.
Sus fondos se destinan exclusivamente al ali-
vio de los pobres y bajo pretexto alguno po-
drá dárseles una inversión distinta.
Art. 188.- El Hospitalario es obligado a lle-
var una cuenta instruida y do::m mentada d.c
entradas y salidas de los fondos del Tronco
de pobres.
A¡Irt. 189.- Los socorros en dinero que, pre-
vio el consentimiento cr~ la Logia, autorizas-e
la comisión de Beneficencia, no serán paga-
dos por el Hospitalar~o sino en vista de orden
expedida por dt::ha Comisión y firmada en
'Presencia del mismo Ho-s pitalario por las p er-
sonas en cuyo favor hubiese sido librada la
orden.
(Es una disposición absurda, ya que lo que
en la mayoría de los C<\.SOS se procura es que
la ayuda llegue sin que el interesado sepa a
cien~ia cierta de dónde proviene la misma_
Aún más, según las antigu[).s reglas, sólo el
Venerable y el Hospitalario conocían el nom-
bre del beneficiario y una vez cumplida la
orden de pago se destruía todo documento
nominativo).
Afortunadamente estos e-xigencias, que glo-
samos más arriba, no han perdurado en la
práctica.
Art. 190.- El Hospitalario será obligado a
presentar el estado de su C:::.ja cada vez que
el Venerable lo exij-a.
A'rt. 191.- El Hospitalario formará un ba.-
lance de sus cuentas parD. el día de la Ins-
talación de los Oficiales. Este debe ser veri-
fkado por la Comisión de Beneficencia, en
primer lugar; y en segundo, po:r una comi-
sión de tres miem.bros, nombrada por el Ve-
nerable Maestro, que es la que d efinitivamen-
te cierra dichas cuentas y al efecto estampa
la correspondiente liquid3ición en el libro del
Hospitalario, destruyendo los documentos que
no den derecho a reembolso a las respecti··
vas Logias.
De esta liquidación se dará copia al Hospi-
talario si así lo exigiese para su resguardo.
DEL ARQUITECTO MAESTRO DE
BANQUE'l'E
Art. 192.- El Arquitecto Maestro de Ban-
quete, es el ordenador de los trab:::.jos de fies-
tas y Banquetes, cuyo adorno corre entera-
mente a su cargo; ya sea por sí mismo, ya
por med'io de una comisión de la que él es
siempre el Jefe.

Art. 193.- Es obligación d él Arquitecto
Maestro de Bc:nquete llevar un registro o in-
vr:ntario dsta.Ha.cto del material que se halla
bajo su custodia. Ese registro contendrá,
también, los planos autorizados por el Taller
o discutidos y aprobados por el Consejo d~
Administración según los casos, para las de-
coraciones ne~esarias en las Tenidas de fiesta .
(El manejo d'e planos explica la denominv..-
ción de Arquitecto Maestro de Banquete, hoy
desaparecida, y reemplazada por la más mo-
desta de Maestro de Banquete. El inventario
a que hace alusión el Art. anterior en ciu-
dades grandes como Santiago, no se estila, ya
que el Club respectivo, en nuestro caso el de
la República, tiene uná administra~ión apar-
te que responde del menaje).
Art. 194.- El Arquitecto Mlaestro de Ban-
quete es especialmente encargado de cuidar
de que no se traspasen las de~Isiones de la
Logia, en lo relativo a fiesta de Orden y Ban-
quetes. En consecuencia, es su obligación for-
mar para tales fiestas o Banquetes un rpre-
supuesto que, por conducto del Venerable
Maestro, someterá a la aprobación del Con-
sejo de Administración.
(Actualmente es el Tesorero quien se pre-
O.::!-upa de los presupuestos para estas Fiestas
y Banquetes y quien cancela los mismos. El
Consejo de Administración se ha convertido
en el Consejo de Oficiales).
A1r:t. 195.- Tanto los registros de suscrip-
ción como las invitaciones 1para las Fiestas y
Banquetes de Orden corren a cargo del Ar-
quitecto Maestro de Banquete, quien es es-
pecialmente responsa,ble al Tesorero por las
cantidades que debieran haberse cole~tado
según el registro de suscripción, como así mis-
mo, . de la oportunidad con que se remitan
las esquelas de invitación.
(El Secretario y el Tesorero corren ahora
con estas funciones, y los ágapes d'e las Fies-
tas de Obligación, son cancelados por la Lo-
gia. En casos extraordinarios se fijan ·c uotas
que -deben ser canceladas hasta determinada
fecha antes de la fiesta o banquete, para te-
ner derecho a asistir a ellas. En las grandes
reuniones de la Gran Logia, dos veces al año.
tos gastos del ágape corren de cuenta de la
Gran Logi:a, salvo acontecimientos extraordi-
narios que demandan gast.os muy .considera-
blrs que se pagan mediante cuotas <proporcio-
nales por los Hermanos adherentes).
Art. 196.- Es obligación del Arquitedo
lalp
Maestro de Banquete ·~uidar que las decora-
ciones de los Oficiales Dignatarios se encuen-
tren a la disposición cJ:e éstO!S a 10. apertura
de los Trabajos, y que la sala de pasos per-
didos esté siempre en .disposición cte recibir
a los Hermanos.
(Como vemos, no puede ser más enredada
la serie de atribuciones y obligaciones que
los Estatutos Generales de la Orden Masó-
ntca de Chile fijaban para nuestro actual
Maestro de Banquete. La obligación del pri-
mer párrafo del Art. 196 es privativa del
Maestro de Ceremonias y la final, del Guar-
cra Templo exterior).
DEL GUARDA TEMPLO
Art. 197.- El Guar.da Templo ayuda e:. los
expertos en todo lo que tiene relación ccn la
seguridad interior de los Trabajos. Se colo~a
al frente de la puerta del Templo, la cual n J
abre sino por orden del Segundo Vigilan'.c
y recibe de los visitadores la Palabra ds-1
semestre.
(Ahora recibe órdenes directas del Venera-
ble Maestro, habiéndose perdido la tradición,
que exige que sea el Segundo Vigilante quien
le dé las óxdenes necesarias. En cuanto a
la palabra semestral, que era un resabio
francés, ha desaparecido sin pena ni gloria) .
Art. 198.- El Guarda Templo no franqusa-
rá la entrada en él a ningún Hermano que s z
presente, mientras se lee la plancha de la
Tenida anterior; mientras resume el Venera-
ble las discusiones y fija las proposiciones,
mientras el Orador da sus con::Iusiones; y,
finalmente·, mientras se circula el escrutin~o
o se toma una votación.
A los Hermanos que se presentasen en el
momento en que tienen lugar los actos enu-
merados en el inciso P,nterior, el Guarda
Templo les dará a conocer que está prohibi-
da la entrada, dando un golpe en la parte
interior.
DE LOS DIACONOS
En los artículos anteriores sobre la Oficia-
lidad de la Logia, recordamos que estos Ofi-
ciales existieron en nuestro Oriente para
luego desaparecer. Sus obligaciones estaban
condensadas en un solo artículo, el:
Art. 199.- Los Diáconos se halla-n especial-
mente encargados de llevar las órdenes del
Venerable o de los Vigilantes.
- 41

En las marchas masónicas acompañan al
Porta Estandarte.
(Tanto las marchas o procesiones masóni·
cas, como los estandartes de Logia han de-
saprure•:ido, junto con los Diáconos y el Por-
ta Estandarte).
DEL PORTA ESTANDARTE Y PORTA
ESPADA
Estos oficiales han desaparecido de nues-
tros Talleres, al simplificarse la Oficialidad
d'e la Logia. Sus obligaciones estaban consig·
nauas en el:
Art. 200.- Es .obligación de estos Oficiales
llevar los atributos que se expresan en sus
respecti~os nombres, en las mar:chas y pro·
cesiones masónicas y demás actos en que· así
lo creyese ne,cesario el que preside la Tenida.
DEL HERMANO SIRVIENTE
Art. 201.- Los Talleres pueden tener uno
o varios Hermanos sirvientes según sus ne-
cesidades; pero siempre en virtud de un
acuerdo especial.
Art. 202.- E:l Salario del Hermano Sirvien-
te será determinado 1p:or el Taller, pero a más
de dicho salario, pued'en asignárs.ele gratifi-
caciones extraordins.rias, según las circuns-
tandas.
Arrt. 203.- El Hermano Sirviente estará
especialmente a las órdenes del Venerable
Maestro, del Secretario, del Tesorero y del
Arquitecto Maestro de Banquete.
Art. 204.- El Hermano Sirviente es el en·
cargado de la limpieza y de la decoración del
Templo y sus dependencias; y vigila a los
obreros que· por ord'en de la Logia hicieran
o
alguna reparación en el Templo sus depen-
dencias.
Art. 205.- Sin muy legítimo y justificado
motivo, el Hermano Sirviente no podrá dejar
de asistir al Templo en los días de ~enida.
I{J'na vez en él es de su obligación 'P'l'eparar
todo lo necesario P:a ra los Trabajos, por lo
menos una hora antes de aquella fijada para
su apertura.
(En la actualidad existen emple·a dos y obre·
ros manej ad'os por un Henn.ano que hace de
Administrador del recinto de la Logia y sus
dependencias. En las ciudades grandes en que
hay v.a rlas Logias que funcionan bajo el mis·
mo techo, lo relacionado .con los ágapes y
42-
lalp
Fiestas está a cargo de personal ajeno al
Taller, bajo la ·dirección cl'e uno o más Her·
manos. Ei adorno de los Templos en muchos
Valles lo hacen los QQ.: Hermanos Aprendices
o Compañe1·os según el caso, en ocasiones
ayudados por sus esposas).
Art. 266.- Cualquiera que sea el Grado Ma·
sónico del Hermano .Sirviente, no debe jamás
decorarse sino con el delantal de Aprendiz y
la insignia correspondiente a su oficio.
Ar'/;. 207 _. E1 Hermano Sirviente debe co-
locarse siempre en la parte exterior cerca de
la puerta del Templo, a fin de indicar a los
Visitadores y demás Hermanos el Grado en
que se hallan abiertos los Trabajos de la LQ·
gia, como también con' el de prevenir el Her·
mano Guarda Templo.
(En nuestro Oriente y los Valles de su de·
pendencia, no existe un Guarda Templo ex·
terior, y los Herm~nos Visitadores o del Ta-
ller, se enteran del Grado en que se traba-
ja por la pizarra de avisos de los Talleres y
por el Hermano Guarda Templo interior, que
al abrir para ver quién llama les indica, a.de·
más , el Grado en que labora el Taller, en
ese momento, antes d'e anunciar su presen-
cia al Venerable Maestro).
Art. 208.- Sin permiso del Arquite.cto Maes·
tro de Banquete, no puede el Hermano Sir·
viente hacerse ayudar en sus tareas por un
sirviente profano.
(Estas disposiciones, como las anteriores,
han caído en desuso, y debemos ·a.:!larar que
aún en los "Estatutos Generales" el o los Her-
manos Sirvientes, a pesar de ser Iniciados,
no f.ormaron nunca parte del Cuadro de la
Oficialidad de la Logis,. Esto, tomad'o sin nin·
gún sentimiento peyorativo, ya que Hermanos
que ocuparon estos cargos llegaron a ocupar
altos <puestos en la Orden, como corresponde
dentro de la Francmasonería).
Art. 209.- El Hermano Sirviente responde
personalmente de todos los objetos que le han
sido confiados.
Con este Artk:ulo damos fin a la parte co-
n·espondiente de los Estatutos Generales de
la Orden Masónica en Chile, en lo que res-
peda a los Oficiales de la Logia, que trata-
mos en artículos sucesivos aparecidos en és-
ta, nuestra "Revista Masónica", y a los cua-
les sólo pudimos referirnos, en cada caso, al
Sumario, dado 1p or nuestro Dustre Hermano
Oviedo, a quien pedimos nos facilitara el do·
 lalp

cument.o que, ahora, damos en par&e y que, A él y a los Queridos Hermanos que nos
como dijimos al iniciar esta publicación, nos han alentado c.on su valioso estímulo en es-
fuera prorpol1:!ionado, en su edición de 1907, ta tarea de reconstruir jalones masónicos de
reimpresión de la primera, complementaria nuestra Orden en Chile, nuestros cálidos agra-
de nuestra Primera Constitución, por genti- decimientos.
leza frate·r nal de nuestro Ilustre y Querido S.: E. : U.:
Hermano F. R. de la Respetable Logia "Mbn- L. S. S.
taña" N<? 50. Jefe del Depto. de
Ritos y Simbolismos
* * *

CARTA DE MI MADRE LOGIA

Querido hijo :
Con el sentido fraternal que debe caracterizar a todas las madres
que, como yo, llevamos encerrados en nuestro ·fuero interno. los verda-
deros sentimientos de amor y fraternidad, nacidos al calor del más puro
y acendrado cariño que·imaginar pudiera el ser humano, me estoy diri-
giendo a ti para recordarte tu ineludible deber, como buen hijo que eres,
de brindarnos la feliz oportunidad de darnos tu grata compañía durante
los trabajos, aunque sea una o dos veoes al mes.
Bien poco es lo que te pido, querido hijo mío, ¿serás taln insen-
sato que te niegues a responder a la llamada ·cariñosa y fraternal que
te hace tu madre?
... Soy tu madre simbólica, soy aquella que te abrió su corazón un
día, que te acogió en su regazo espiritual y te brindó la LUZ en nuestra
amada Orden, para que pudieras seguir orientándote en oscuro mundo
profano, la que está dispuesta a salvaguardarte de la maldad y de 1a
ignorancia, que tratan de cerrarte el paso por doquiera. Tú me juraste
fidelidad un día, ¿te acuerdl;IS ?... y ya ves, me has abandonado. ¡Cuánto
y cuánto sufro en las noches de trabajo, cuando observo que solamente
un grupo reducido de mis hijos vienen a mi regazo!... se allegan a mí
para escuchar los sabios consejos que, como buena madre, debo impar-
tirles, pero éstos no me bastan, me faltas tú. Dirás que soy exigente,
pero ... soy tu madre simbólica y, como tal, estoy en el deber de recla-
marte lo que justamente me pertenece : la presencia constante de todos
mis queridos hijos.
Tus hermanos también te lo reclaman porque, como yo, sufren por el
total abandono en que nos has sumergido; sin embargo, te seguimos que-
riendo, queriendo mucho, porque comprendemos que eres el hijo y el her-
mano bueno, sencillo, noble 1 cariñoso y fraternal que está atento siempre
a las más leves palpitaciones del dolor humano; sin embargo, te has
dejado lleva.r por la apatía y la indolencia, que te han hecho caer de
plano en un extremo que tal vez no pensaste. No obstante, ya es tiempo
de que reflexiones, no me abandones, ven a mí, a mi regazo, pues sigo
esperándote con los brazos abiertos. Además, piensa qué contentos esta-
rán tus hermanos cuando vuelvas a mí.
Te abraza cariñosamente,
TU MAJ)RE LOGIA

(De la Rev ista "MUNDO MASONICO" de la Habana, Cuba, 1962)

-43
 lalp

61 )lusir~ !1ermano

Gabriel Kirschenbaum
En su oportunidad, nos fue muy grato informar acerca de la de-
signación como Gran Representante y Garante de Paz y Amistad de la
Gran Logia de Chile ante la Gran Logia de Nueva York del Ilustre y
Querido Hermano Dr. Gabriel Kirschenbaum.
Tenemos el agrado, en esta ocasión, de reproducir un extracto de
la información que la prestigiosa revista "The Empire State Mason" pu-
blicara en su edición correspondiente a los meses de enero y febrero del
presento año -vol. N0 12, N'' 6- con velación a la recepción del Ilustre
Hermano Kirschenbaum como Gran Representante de la Gran Logia de
Chile en la Gran Logia de Nueva York.

"NOTICIAS DE LOS DISTRITOS.- 7P DISTRITO MANHATT AN

La noche del27 de octubre de 1964 será recordada por mucho tiem-

po en la Logia "INTEGRIDAD" NQ 917. En la solemne Tenida realizada
en la fecha indicada, el Dr. Gabriel Kirschenbaum fue puesto en posesión
de su cargo de Gran Representante de la Gran Logia de Chile. La Tenida
estuvo a cargo del Venerable Hermano Dr. Sonny Chikofsky y del Vene-
rable Hermano Jules S. Lux, V.: M.:
La Designación fue presentada por el Ilustre Hermano David Innes,
Jr., Diputado Distrital del Gran Maestro; el Mandil por el Venerable
Maestro Murray J. Chikofsky, ex-Venerable Maestro, y la Joya por el
Ilustre Hermano Alfred E. Hochstein, ex-Diputado Distrital del Gran
Maestro. Fue portador de las Palabras de Saludo el Ilustre Hermano
Leslie B. Carpenter, Gran Maestro de Ceremonias.
El Ilustre y Poderoso Hermano Dr. René García Valenzuela, Se-
~'enísimo ex-Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, se refirió, por su
parte, a la magnífica labor desarrollada por el Dr. Kirschenbaum en fa-
vor de muchas personas enfermas de su país.
El Ilustre Hermano y Coronel. Paul Akst, del Servicio de R~clu­
tumiento, se refirió también a la fecunda obra realizada por el Dr. Kirn-
chenbaum en beneficio de numerosos jóvenes que ingresan y se retiran
de las fuerzas armadas estadounidenses.
Finalmente, los Ilustres y Poderosos Hermanos Leo D. Halbreich,
Diputado Distrital del Gran Maestro; Alfred E. Hochstein, ex-Diputado
Distrital y Charles W. Froessel, mencionaron, en brillantes términos, la
acción benéfica y de rehabilitación cumplida con suprema abnegación
por el Dr. Kirschenbaum".

44
 lalp

'I'RFJS SONFJTOS.

EL APRENDIZ
Con el cincel y el mazo traba_:a largas horas MODESTO FARERA
desbastando Za piedra, puliendo sns aristas.
En st~ fre,nte florecen kts futuras r:turoras
mientras su mente forja nwgnífioas conqu"stas.
La comprenswn hu,manci; lct dulce tole;·a:zckt,
el amor, la cuUura e11¡1wblecen la vida, ...
Hay en todas las cosas w~a grata fragcmcict.
Por la faz de la Tierra los Principios se ex-
[tien,den.
Y es la Fnxte1·nidad generosa y consciente.
Todos los hombres buenos se quieren y se en-
[tiende•n ...
Y la Luz in:ciática ilumina el Oriente.
Y mientr.as sueña y piensa el Aprendiz lCibora,
pues lo imptüs,a 'Umia fe prrofnnda y conmovida,,
que es la Fuerza q1w imptllsa m~estrra acción
[creador..'!.

DEL FONDO DE LOS TIEMPOS

Del fonao de los tiempos nace la vieja histor:a:

junto al met.al, al trigo, al olivo y la vid,
el hombre desarrolki su singular mem1oria
en pugna con¡ las cosr:ts oomo un nuevo adalid.
Siempre ten afán perenne fustiga sus ~nstantes
de ennoblecer las cosas, honrar ki cre&ción.
Proa siempre a lug,ctres ajen,os y distwntes
En tritinfos y en derrotas vive lr:r •hermosa glor:a
de embelleoer parajes en stt perpettw lid,
y 1'11/ientras si•embra flores elimina la escorifi
qué crece en kis laderas del huerto de David.
crea mwvos valores, y en su valoración
an:a.a entre stis brazos piadosos y constcmtes
un ansia inextingnible de eterna perfección,.

ANTONIO MACHADO
Del verde limonero del huerto de tu infancia
los zwnos he tomado con manos temblorrosas:
eran d.e miel y acacia. Su exquis:t,a frag:xniCia
hablaba de jazmines, de perfnmes, de ros.as.
Dulcemente cantaste a la gloriosa España;
fttiste la viejo, encina del parque solctriego;
el sol y la alegría, la vidri y aún! la hazaña

Tu jardín cultivaste como 1wble rnasón:

con yunques y martillos, escnadms y cin;eeles; se vieron -cimentados en el fec.undo riego
tn verso l\lmpio y p.uvo oonmueve el corazón de ?tn ver8o ~bable y oa.sto, ágil y siempre vivo
y deja e<n mwstvos labios el sabor de kis mieles. que lleva e'n 81~ belleza z.,
palmfi dgl .olivo.

-45
 lalp

Inauguración de la Secretaría
de la Logia PLUS ULTRA 98

El lunes 31 de mayo se inauguró, e.n el sexto pi~o de .Euestra magnífica Sede

Masóniéa, la Secretar;a de la Resp. : Log. : "Plus Ultra" N9 98 que, merced al es-
fuerzo generoso y entusi.:tsta de sus obreros, sustituía un mobiliario ya anticuado
y poco confortable por unos muebles mcdernos metálicos, de tipo funcional y en
armonía ce,::~. la> necesidades de los tiempos actuales y el tono grandioso del nuevo
edificio de la Francmaso.::~.ería chilena.
Fue una fiesta íntima, sencilla y modesta y a la que únicamente asistió, como
invitado de honor, el Il. : H .: Osear Pereira H., Gran Secretario de la Gran Logia,
pues, por no estar aún instala dos los ascensores no se quiso comprometer al Ser.:
Gra.-:1 Maestro, l.: y Pod.. H.: Art:;tóteles Berlendis Sturla y obrgarle a subir
seis pisos.
El Gran Secretario se mo·s tró altamente complacido al ver la forma confor-
table y de gran dignida:d con que los HH. : de "Plus Ultra" habían acomodado su
Secretaría, que estimó un ejemplo a imitar.
El Ven.: M.: Alfonso Lobato Barrera leyó la siguiente plancha grabada, fiel
reflejo del sentir de todos los obreros del Taller.

Ilustre H&rtrruano Oso.ar P ere:ra, Gran• Secretario de la Gran Logia de Ol1ile,

queridos lherrma.n.os todos:
El motivo que 1~os r eúne en este acto frater>11ial es dar por inaugurada esta
Secretaría q!Ue desde hoy será el hogar particular e íntimo de nuestra querid,a Logia.
Ocupamos, como tod.cs los demás Talleres, ttna pequeña parte de esta mo-
mtmental obra m.;Lterial, que es egf;e edificio, del CUf.ll podemos sentirnos orgullosos
todos los masones y muy particularmente ws hermmws de esta Logia, que desde e1
primer momento participaron en sn proyecc:ón y re;alizwción oon f e, talento, en-
tus'Í.aSI:m.o y sp,crificio.
Sen'timos la satisfacción del deber cumplido y la de haber aportado nuestro
granito de aren.a par.a q'<le esta aspira.ción t.ft.n sentida y que ¡::~recía inalca.nz,able,
sea ?:x hermosa realidad que estmnos contemplando en este momEmto.
Cumpl:.endo un deseo de r.Juestro Seren~simo Gran M ,aestro, no s propusimos
alhajar nuestra Secret.aría con ~m mobiliario modffT1W y funcio1'tr2l. Graci.as a la
generosidad y axcrificio económioo de todos los herma1ws d e "Plus Ultr,rt" w esta-
mos com<Siguiendo. Aprovecho esta, oportunidad, queridos hermanos, pa-ra detros mis
más expres:vas grx:wias por v ttestra entu,siast.a ooope;ración.
Est<Jy seguro que todos los f n2n¡cmaso.nes en Chile nos sentimos sa tisfechos
y contentos de haber detm.dstl'ado que hem1os sido c.ap:a.ces de darle a m¿estrn insti--
tución la sede que el7a se merecía.
Y es ést,a también la oportunidad de r endir urn ihomena,je de gratit-ud a mws-
tro Ser61nisimo Gran Maestro y a ese grupo de esclarecidos herma1ws que lo secun-
daron, que sin más oapital que stl car:ño a ~a Orde?b y stt ilimitada oonfianza en
sus her'm.an.os, acometieron esta inmensa obra con visión, empttje y ·contagioso opti-
mi8mo, dándon¡as con ello una l ección más de fervor y responsab:lidad masónicos.
Oj.al,á que este edificio que hemos sido capaces de oonstruir nos sirva como
un símbol-o, un motivo de em.ula.IC'ión, más bien wn des,af!.o, q~¿e nos compulse a llevar
a cabo con más t erwcidad y f ervor que nwnca ?.a principa! ·constnwción <;:tle tenemo.s
~ obligación de re.a~zar ws francma.sones, cua! es ?a de trabajar incansablemente
on nuestro prop·io perfe:ccionam.iento y en un serio y profund.o estudio de nuestros

46-
 lalp

principios y doctrinas y que llevándolos a la. práctica, nos proyeote'ffi,()S en el mundo

profaoo con, el máximo de ejicaci.a, e.n p·os de nuestros postu!.ados, qwe no son otros
q.u,e los de construir una s.oc:edad más justa, más dig'Y!(L, más li.hre y más fraterrlfLl.
Hacerrn100 interiormente esta promesa y poner toda nuestra. voltmtad para con-
vertirla en realidad, es el mejor homen.aje espiritua! (!ue pod.e.m,os ofrecer al tritvnfo
de esta obra rl'lla'terial que estamos celebrando en este ,:wto.
FVn.almen1te deseo expr.etJar a nuestro Ilustre Herman.o Gran Sec-retario de l,a
Gran Logia de Chile nuestro nl.ás sincero agra•decimiento por el hon·or de tenerlo en-
tre nosotros y por el realce y jerarqui.a que su presenc:a confiere a este acto.
Queridos Hermanos,· al dar po1· inaug.t¿rada este¿ secretaria, l:;ago votos por que
estos mu11os que delsde ahora servirán de lwg.ar a la masoneria •chilena, seflin testi-
gos de muchas jornadas de triunfo de ntu::stra Orden, por el bien de Chile y de l1X
humaniaad todia.
Porque así sea, os invito a brind-ar, querW.os herma1~os.

El Il.: H.: Osear Pereira contestó con unas bellísimas palabras improvisadas,
modelo de buen decir y sentido masónico, manifestando el profundo agrado con que
veí.a el admirable esfuerzo de "Plus Ultra" 98, a la que dedicó encomiásticos elo-
gios, en nombre del Ser.. Gran Maestro y el suyo propio. Manifestó que el Gran
Maestro no había podido asistir al acto por impedírselo atenciones inaplazables,
pero considerándose presente en espíritu, ya que se trataba de un Taller cuya labor
masón~ca y profana es de mucha hondura y trascendencia. Hizo voto·s por que las
cl.emás Logias, estimuladas con su ejemplo, emulen tan loables esfuerzos y brindó
por la prosperidad de "Plus Ultra" , sus obreros y familiares, así como por ·la Gran
Logia de Chile, de la nación chilena y de la Humanidad.
Una estruendosa salva de aplausos acogió el final de la magnífica oración del
Gran Secretario, Hermano Osear Pereira.

PEDRO ABELARDO
Filósofo. Uno de los más audaces pensadores escolásticos. Se vio
envuelto en grandes dificultades por su apasionado amor por Eloísa, be·
lla y culta joven que había sido su discípula. Tuvieron un hijo, pero antes
que pudieran casarse, Fulberto, canónigo, tío de la joven, hizo que una
cuadrilla de rufianes mutilara brutalmente a Abelardo. Eloísa profesó
como monja y Abelardo se retiró a un yermo cerca de Nogent-sur-Seine,
donde llevó una vida ascética. Después de diez años de persecuciones le
fue devuelta su cátedra en París, pero fue acusado de herejía por San
Bernardo de Claraval. Murió cuando estaba en camino de Roma para
defender su causa. Su obra más notable fue "Sí y no".

HERMETICA

La eternidad penetra al tiempo, y es en el tiempo que todo mo·

vimiento ocurre... La eternidad no está limitada por las condiciones del
tiempo, y el tiempo es eterno en v~tud de su recurrencia cíclica.
Asclepius III

-47

Simbolismo del "CentriQ11
Es muy pr.ob¡¡¡bJe que, al menos en el caso
de las religiones centro-asiáticas y siberianas,
este símbolo del Centro se halle influenciado
por esquemas cosmológicos indo-iranios, y en
última instancia, mesopotamlos. Entre otras
cosas, parece '!}robarlo la importancia del nú-
mero 7. Pero es preciso distinguir claramente
entre la copia de una te,oría cosmológica ela-
borada en torno al simbolismo del Centro
-como sería, por ejemplo, la cen::epción de
siete niveles celestes-- y el propio simbolismo
del Centro. Ya hemos visto que este simbolis-
mo es muy arcaico, y que lo conocen los pig-
meos de la península de Malaca. Y si bien
pudiera sospecharse una remot.a influencia
india sobre estos pigmeos Semang, quedaría
por explicar el simbolismo del Centro hallados
en los monumentos prehistóri::os (Montañas
Cósmicas, los cuatro ríos, el Arbol y la espiral,
et::.). Todavía más; se ha podido demostrar
que el simbolismo de un eje cósmico era ya
conocido en las culturas arcaicas (las Urkul-
tlll'en de la escuela de Graebner-Schmidt) y,
en primer lugar, por las poblaciones árticas
y norteamericanas: el poste central de la ha-
bitación de estos pueblos se asimila al Eje
Cósmi-;o. Al pie de es ~ e poste se de·p ositan las
ofrendas dedicadas a las divinidades c~lestes,
porque solamente a lo largo de este eje pue-
den subir al cielo las ofrendas. Cuando cam-
bia la forma de la habitación, y a la cabaña
sustituye la yurta (como, por ejemplo, entre
los pastores-ga::J.aderos del Asia Central), la
fun.c ión mítico ritual del pilar central queda
asegurada por la abertura superior, destinada
a la salida del humo. En ocasión de los sacri-
ficios, se in1Jroduce en la yurta un árbol, cuya
cima sale por esta abertura. Este árbol sacri-
ficial simboliza las siete esferas por sus siete
ramas.. Así, por una parte, la casa se homl!)lo-
ga 'al Universo, y por o~.ra parte, ce cJ•nsid~F1
como sita en el centi.ro del mwtdo; la abertura
para el humo se halla, en efecto, frente a la
estrella polar.
Volveremos más tarde sobre esta asimilación
simbólica de la habitación al "Centro del
Mundo", porque revela uno de los comporta-
mientos más instructivos del hombre religioso
arcaico. Por el momento, detengámonos en los
ritos de la ascensión, que tlienen lugar en un
"centro". Hemos visto que el chamán tártaro
48-
lalp
o siberiano trepa a un árbol y que el sacrifi-
cador védico sube por una escala. Los dos ritos
persiguen el mismo fin: la ascensión al Cielo.
Considerable número de mitos hablan de un
árbol, de una liana, de una .c uerda, de un hilo
de ~ raña o de una escala que unen la .T ierra
al Cielo, y por intercesión de los ·cuales se
suben, efectivamente, al Cielo, ciertos seres
privilegiados. Naturalmente, estos mitos tie-
nen .correspondencias rituales -como, por
ejemplo, el árbol chamánico o el poste del sa-
SIMBOLISMO
DE LA
ASCENSION
crificador védico . La escala .c eremonial des-
empeña, análogamente, un papel importante.
Basten unos pocos ejemplos: Polyaen us
(Strat·agemaCon, VII, 22) nos habla de Kosin-
gas, sa~erdote-rey de algunas_ poblaciones de
Tracia, que amenazaba con dejar a sus súb-
ditos subiendo por una escala de madera has-
úa la diosa Hera. Lo cual prueba que existía
semejante escala ritual, y que se pensaba podía
conducir al sacerdote-rey hasta el Cielo.
Probablemente, la ascensión celeste por la
subida ceremonial de una escala, formaba
parte de una iniciación órfica. En todo caso,
la encontramos también en la iniciación
mithraica. En los misterios de Mithra, la es-
cala (climax) ceremonial tenía siete peldañ.os,
y cada uno estaba hecho de un metal distinto.
Según Celso (Orígenes, Conrt11a, Cel~um, VI,
22), el primer peldaño era de plomo y corres-
pondía al "Cielo" del planeta Saturno; el se-
gundo, de estaño (Venus); el tercero, de
bron~e (Júpiter); el cuarto, de hierro (Mer-
curio); el qu1nto, de "aleación monetaria"
CMia.rte); el sexto, de plata (Luna); el séptimo
de oro (Sol). Celso nos dice que el octavo,

representa la esfera de las estrellas fijas. Al
subir esta escala ,ceremonial, el iniciado re-
corría., efectivamente, los siete cielos, eleván-
dose de este modo hasta el Empíreo. Lo mis-
mo que se subía hastla el último c.ielo ascen-
diendo los siete pisos del ziqqu,rat babilonio, o
que se atravesaban las diferentes regiones
cósmicas es~alando las terrazas del templo de
Barabudur, que constituía en sí mismo, hemos
visto, una Montaña Cósmica y una imago
mundi. ·-
Fácilmente se comprende que la escala de la
iniciación mithraica era un Eje del Mundo y
se hallaba en el Centro del Universo; de otro
modo, hubiera sido imposible la ruptura de
los niveles. "Iniciación" significa, ya se sabe,
muerte y resurrecdón del .neófito o, en otros
contextos, descenso a los Infiernos seguido
de ascensión al Cielo. La muerte -de inicia-
ción o nQc-- es la ruptura de un nivel por
excelencia. Por esto se simboliza mediante
una escala, y muchas veces los ritos funera-
rios utilizan escalas o escaleras. El alma del
muertlo sube por los senderos de una monta.
ña, o trepa por un ár;bol o por una liana,
hasta los cielos. E'sta concepción se halla un
poco por todo el mundo, desde el antiguo
Egipto hasta Australia. E;n asirio, la expresión
habitual para el verbo "morir" es: "agarrarse
a la montaña'~. Análogamente, en egipcio
my¡ny, "agarrarse" es un eufemismo por "mO-
rir''. En la tradición mítica india, Yama, el
primer muerto, trepó sobre la montaña, y ha
recorrido "los altos desfiladeros" para ense-
ñar "el .camino a muchos hombres". Así habla
el Rig-Ved (X,. 14, 1,). El camino de los muer-
tos en las creencias populares ural-altaicas
escala los montes; Bolot, héroe Kara-Kirghiz,
lo mismo que Kesar, rey legendario ,de los mo-
goles, penetra en el mundo del Más Allá, a
manera de prueba de iniciación, por una gru-·
ta situada en la cima de las montañas; el
descenso del chamán a los Infiernos se realiza
igualmente por mediación de una gruta. Los
egipcios han conservado en sus textos fune-
rarios la expresión •asket pet (asket: "pelda-
ño") para indicar que la escala de que dis-
pone Re, es una escala real, que une a la
Tierra al Cielo. "Para mí está instalada la
escala, par.al ver a los dioses", dice el Libro de
los Muertos. "Los dioses le hacen una escala
para que, valiéndose de ella, suba al Cielo",
habla siempre el Libro de los 'Muertos. En mu-
chas tumbas de tiempo de las dinastías ar-
lalp
calcas y medievales se han encontrado amu-
letos en que figuraban una escala (maqet) o
una escalera. Por lo demás, el empleo de la
escala funeraria ha perdurado hasta nuestros
días: varias poblaciones asiáticas primitivas,
c-omo, por ejemplo, los Lolos, los Karens, etc.,
elevan sobre sus tumbas escalas rituales, que
les sirven a .los difuntos para subir a los cielos.
Como acabamos de ver, la escalera tiene un
simbolismo extremadamente rico, sin dejar de
ser perfectamente coherente: fig,ura plástica-
me¡nte la ruptura de nivel que hace P'osible el
paso d.e un modo de ser a. ot:ro; o bien desde
un plano cosmológico, que hace posible la co..
munic!ación entre1 Cielo, Tierra e Infierno. Por
esto, la escalera y la ascensión desempeñan
un papel considerable, tanto en los ritos y
mitos de iniciadón como en los ritos funera-
rios, para no decir .nada de los ritos de entro-
nización real o sacerdotal, o de los ritos ma-
trimoniales. Ahora bien, se sabe que el simbo-
lismo de la ascensión y de los peldaños ap,a-
rece con bastantle frecuencia en la literatura
psicoanalíttca, lo cual significa que nos halla-
mos ante un comportamiento arcaico de la
psique humana, y no ante una creación "his-
tórica", una innovación debida, a determina-
do momento histórico (,digam-os: Egipto anti-
guo, o la India védica, etc.). No daré sino un
solo ejemplo de redescubrimiento espontáneo
de este simbolismo primordial.
Julien Green anota en su Journal el 4 de
abril de 1933: "En todos mis libros, la idea
del miedo o de cualquier otra emoción un
poco fuerte parece hallarse unLda de modo
inexplicable a una es~alera. Ayer me dí cuen-
ta, cuando pasaba en revista todas las nove-
las que he escrito•. . . (siguen referencias). Me
pregunto cómo he podido repetir con tantla
frecuencia este efecto, sin haberme dado cuen-
ta de ·ello. Niño, soñaba que me perseguían
en una escalera. Mi madre en su juventud
padeció los mismos temores; acaso me haya
quedado algún residuo... "
Ahora sabemos por qué en el escritor fran-
cés la: idea de miedo se hallaba ligada a la
imagen de una escalera, y por qué todos los
sucesos dramáticos que en su obra había es-
crito -amor, muerte, crimen- sucedía.n siem-
pre en una escalera. La escalada o ascensión
simboliza el camino hacia la realidad absoluta;
y, en la conciencia profana., el a~ercamiento
a esta realidad produce un sentimiento ambi-·
valentle de miedo y de alegría, de atracción y
-49
 lalp

de repulsión etcétera. Las ideas de santi-
ficación, de muerte, de amor y de libera-
ción van implicadas en el simbolismo de la
escalera. En efe·cto, cada uno de estos modos
de ser representa la abolición de la condición
humana profana, es decir, una. ruptura de ni-
vel ontológico: a través del amor, la muerte,
la santidad, el conocimiento metafísico, pasa
el hombre, como dice el Brihadá.ranyaka Upa-
nisad, de lo "irreal a la; realidad''. Pero no hay
que olvidar que la escalera simboliza todas
estas cosas porque se cuenta con que se eleva
en un "centro", porque hace posible la comu-
nicación entre los distintos niveles del ser,
porque, en fin, no es sino una fórmula con-
creta de 1(1¡ escala mítica, de la liana o del hilo
de araña, -del árbol Cósmico o del Pilar Uni-
versal que une las tres zonas cósmicas.
MIRCEA EUADE

.· ~

LA ORACION INDIA

En los tiempos antiguos, la Oración era esencialmente palabra,

acento, ritmo, vibración sonora d.e la !más profunda realidad ·del ser.
Su eficacia mágica residía más an la precisión de la. enunciación, con-
forme a cánones aue hadan el objeto de una tradición esotérica, que
en el mislmo sentido de la.s palabras pronunciadas.
La pleg-aria del hinduísmo ha conE".erva.do más o menos este
carácter mágico, pero se ha interiorizado. Su omnLpotettlcia ya no de-
pende del sonido: "La ofrenda hecha de oraciones 'susurradas es diez
veces más eficaz que un sacrificio realizado según las regola.s del Veda",
leemos ya en las Leyes de Ma11m; "una plegaria inaudible Jo e·s cien
veces más; una pleg-aria mental. mil veiCes más". La. meditación triun-
fa sobre toda otra. forttna ,<;".ensible u oral de adoración; el 'hamsah, aue
goza de gran favor es una esrpecie de .p legaria muda, ritmada por las
inspiraciones y espiradones. A.si. se puede l'lega.r, en veinticuatm ho<ras,
a un total de 21.600 adoraciones:.
La Oración india por excel.enda es el mantl'\a,: unas ve·ces Sle tra-
ta. de una breve fórmula. como la famosa .g'atyatri. la invocac~ón al Sol
extraída del Rigveda: "Que podamos recibir esta luz eminente del dios
Savitar, para que excite nuestn)s pensamientos"; otras veces de una s•im-
ple llamada a dios. namah siivaya o sivo-ham..entre los sivaítas, ramaya
!n!amah o srikrlsnah sarama:m, entre los visnuítas, .etc.: finalmente, y
más a menudo todavía, consiste en la silaba sagrada A UM, el "man-
tra esencial, que resume todos los demás". dke Louis Renou, y ha sido
identificado con el B.rahmám absoluto. con el Maestro eterno del mun-
do, con el Trimurti (en cuyo caso las letras designan a Brahma, Vi-:mú,
Siva), etc. El mantra es más aue un ,signo eminente, más aue una
fórmula de jn,iciación para Jos rruembros de las distirntas sectas, má.~
aue una. repres.entación del dios; es el prorpio dios. El n01mb.'re y la reali-
dad son i'Clénticos; el nombre es el corazón y el alma de la rea1id.ad.
Pronunciar el ma.ntr!'t es, pues., realizar la presencia. de la divinidad.
La repetición del mantl'a nuede incluso cc·nseguir la Liberación, y por
esto los hindúes piadosos rivalizan en hazañas dentro de este camuo de
acción. y un texto tántrico nrescribe una. d!evO'C!ián que entraña 32.000
repeticiones, acompañadas de oblaciones, aspersiones, etc.

50
 lalp

.Afuesfro /Uediocha ---------~

Los Rituales del Primer Grado de la Francmasonería Universal establecen, sin

excepe'i6n alguna, que los Trabajos se abren al Mediodía.
Sobra esta importante disposición es necesario y conveniente hacer un exahus-
tivo aná'is's para aprender su sentido esotérico, pues, esta norma, como todas lcrs
contenidas en los Rituales, ancierra un cúmulo de significalC'iones ·ocultas que es pre-
ciso conocer en su exacta valoración.
A este respecto debemos empezar por considerar el sentido exotér~co que nada
agrega más allá del contexto de la letra del Ritual y que sólo captan, de muy buen
grado, aquellos que nunca llegarán a ser Francmasones en el estricto significado del
vocablo.
Contrariamente a esta apreciación, corriente y vu 1gar, el Mediodía no es ni
puede ser una simple relación al tiempb cronológico, pues, como nadie ignora, las
reuniones masónicas se realizan, por lo general, cu=do el sol físico se oculta tras el
horizonte.
La Luz Masónica, como =títesis de las tinieblas de la ignor=cia, emplea, me-
tafóricamente la palabra Mediodía para indicar en fo::ma objetiva que las labores
masónicas deben iniciarse en la hora y la edad en que el so,L interno de nuestra
personalidad masónica se ha desprendido totalmente de las sombras y brilia:, en
todo su esplendor en el cénit.
Los Trabajos que pued= iniciarse y que no cumplan espedficamen!e con esta
disposición no pueden considerarse como masónicos, ya que carecen de la limpieza Y"
diafanidad indispensables para ser considerados, ritualísticame.nte, como tales.
Este esplendor del Mediodía masónico iLumina nuestras mentes y aleja de nos-
otros todo recuerdo, toda influencia y toda sombra exterior. Al Mediodía el Templo
resplandece aureolado por todas •las virtudes masónicas. Es el instante preciso para
íniciar nuestros Trabajos.
En las reuniones de Herm=os Masones rea:Uzadas en horas profanas, que no co-
rresponden a nuestro Me diodía, se infiltran, a veces, sombras traídas y p:-oyectadas
desde el exterior, que perturban la serenidad, ponderación y elevación que siempre de-
bieran presidir nuestros actos.
Por eso es recomendable que toda: asamblea de Hermanos Masones sea inicia-
da bajo los auspicios de un Mediodía justo y perfecto.
El abandono, por la relajación de las costumbres, de algunas de nuestras prác-
ticas; el poco respeto que, en ocasiones, se tiene por ·preceptos y disposiciones que,
frívolamente, se consideran arcaicos, o de poca tr=scendencia, ha llevado, inc'uso, a:
olvidar el severo significado del Mediodía: masónico a tal 'punto que es corriente el
que en algunos Templos se dicten "charlas profanas" para considerar y tratar asuntos
que nada: tienen que ver con la Orden y que sólo eslún destinadas a entretener a los
asistentes y a dar satisfacción a .sus autores.
Los que asi actú=, --que por sue:te .no son muchos-, olvidan que a la Francma-
sonería se viene a: hacer Masonería y no a pasar un rato de solaz esparcimiento.
Las sombras y las tinieblas p:ofanas que traen desde el mundo exte:-ior estos
"charlistas" oscurecen nuestro Mediodia y perturban los Trabajos de la Institución.
Todos debemos llegar a: las Tenidas "limpios de preocupaciones". El concurrir
a los trabajos agobiados por afanes e inquietudes profanas, es traer sombras al Tem-
plo. Nadie debe ll<ilgar a las Tenidas con este ·lastre exterior. Al Tal)er se debe venir
ccn ánimo alegre y liviano, dispuestos a trabajar intensamente por el bien de la Hu-
manidad.
Acudir a una Tenida masónica preocupado por asuntos familiares, problemas eCO-
nómicos, pasionales o políticos, do'encias y cansancios físicos, causa: distorsiones y es·

-51
 lalp

tragos en las mentes y ,Los espíritus de los Hermanos de una Logia y es el o~;gen de
los males que afectan en OCOISiones a algunos de nuestros Talle~ es, cuya acción posi·
ti.wa y creadora declina por falta de cohesión y de la armonía que sie~pre debe reinar
entre illosotros.
Todas las instituciones y sociedades profanas están expuestas a que las "som-
bras" de las pasiones subalternas oscurezcan su acción y ana~quicen sus actividades.
La Francmasonería, en su sabiduría i:niciática, se puso a cubie:to de estas experienc:.as
p::>r medio de las reglas que estab~ece nuestro Ritual, ycr. que en el Mediodía nuestro,
el sol espiritual irrad'a la plenitud de su luz y las tinieblas no tienen, ni espacio, ni
tiempo, para manifestarse y prolife:-ar.
Por com;" guiente, para iniciar los Trabajos masÓ.olicos no sólo es indispe!liSable que
se señale la "hora" del meridiano sino que cada uno de los asistentes debe manifes-
tar su edad, la que debe ser compatible con el Mediodía en punto. Es ·decir, cuando
r::uestros potenciales mentales y espirituales mues tren una electiva madurez.
El Mediodía, en el aspecto de las individualidades, no puede determ:narse por
las edades cronol6g,icas, estudios, cu!.tura, agilidad mental, inteligencia, laboriosidad y
ot""Os footores tan variables como disímiles.
Se sostiene que la juventud contemporánea está dotada de potenciales mentales
de una su,perioridad mayor que 'la de sus antecesores y, al respecto, se cita e 1 caso
de las aulas universitarias en que algunos alumnos logran. imponerse a sus profeso:-es
en una u otra forma.
En realidad, los momentos de crisis que vivimos están marcados por un floreci-
miento intelectual extraordinario. Quizás este mismo potencial sea el causante de los es-
taHidos "coléricos'' que se han producido tnesperadamente en muchos países de la
tierra, induso en aquellos más ponderados y cultos.
Empe•-o esta prematura madurez que es posible apreciar en una juventud mejor
dotada y documentada <l"le las precedentes, influya pa: a que s~ realización espiritua:l
sea más tardía que en las generaciones anteriores.
El término medio de la vida actual se ha duplicado virtualmente e n el tranwurso
del presente siglo. Por esto no es aven!u':ado afirmar que .~a j·uventud contemporánea
está en condiciones de disfrutar de un mayor número de años pa:a lograr su total des-
arrd!lo. En consecuencia, la madurez puede tardar en producirse; pero, este atraso se
compensa po:-que esta madurez se mantiene en todo su esplendor por varias decenas
de aña.s y se extiende, a veces, hasta una avanzada ancianidad. Hoy: es co:rie.nte ver
hombres en pleno uso de sus facu1tades sobre los 80 y 90 años.
Es te :nteresante fenómeno q ue nos ofrece la vida moderna debe enfrentarse con se-
renidad, pues, aparte d e la !'esponsabilidad que hemos contraído con la sociedad, tenemos
la ob1igaci6n de renovar .nuestros. Cuadros, para lo cual se hace indispensab'! e presen-
tar postu!=tes de gran valía, cuya p ersonalidad sea compatible >Con nuestro Mediodía.
Las elecciones que hagamos al respecto, e·l' a;poyo que prestemos para el ingreso
de aspirantes que hayamos conocido en il1ue.strOIS actividades prof=as, debe estar
inspirado por una estricta y severa critica que nos ponga a salv.o de toda debilidad
sentimental, pues, en estos momentos de crisis, no podemos incurrir en errores que nos
podrían acarrear serias molestias y crueles ·desengaños en un cercano futuro. En esta
hora de agudas decisiones, de desorientadón y de inquietudes de toda laya, no esta-
mos en situación de equivocarnos, ni de ser ligeros y frívolos en nuestra búsqueda, por-
que ello sería fata;l para la Institución que nos ha ca.ncedido el honor de cobijarnos en
su seno.
Tampoco debiéramos desco.nocer que, a veces, la marca del Mediodía se ma-
nifiesta también en una edad avanzada. Esto se debe, en muchos casos, a que la lucha
por la vida se ha tornado dura y difícil y :hay que dec:Lícarle, en ocasiones, la suma
de nuestras anergías y eslue~zos. Los profanos que, ,por las circunstancias, se ven for-
zados a t~abajar intensamente no tienen, por lo gener<lill, el tiempo necesario para de-
dicarse con tranquilidad y ref!ex.'ión, a los negocios del espíritu. Por esto, 'llegan tarde

52-
 lalp

a goÍpear desordenadamente las puertas de nuest os TemP,l.os. Pero cuando esto ocu-
rre, todos los HermanoS debemos tenderles ,nuestra mano, frate:ncil y IC'ariñosamente,
para ayuda:les a recuperar el tiem,po que i.nvoluntariamente han perdido.
Si nos atenemos a Ia realidad, estos elementos fogueados en la vida profana,
han dado muy ·buenos resultados, ya que, por ''o general, dedican sus mejores energias
y capacidad al s.ervicio de la Inst.tuc:ón. Su bien desa:~rollado sentido de la respo.nsa-
bilidad les imp\).lsa a sostener una asidua asistencia, a concentrarse en e:l' trcibajo ma-
sónico y a desorrollar ta .eas fecundas para compe nsar e-n a'guna forma los añ-os per-
didos en que la Luz no había ilum:nado sus 'espíritus.
Como se_ puede apreciar, .nuestro Mediodía no puede constituir normas cerradas
y absolutal3, pues en esta expresión inciden múltiple::; factores cuya objetivación no pue-
de estar sujeta o circunscr:ta o regpamentaciones, dadas la relatividad y hete~ogenei-
dad de estos valo-r es. ·
La sabiduría de nuestros Rituales 13e demuestra en cada pa1'a bra. Toda frase hay
que aquilata~la en su verdadero sentido esotérico, oomo lo hemos tratado de demos-
trar con la expresión Mediodia.
Po~ eso la búsqueda de la Verdad comienza con el estud·,o exhaustivo de los Ri-
tuales y los sim:Qoli.smos masónicos, sin nos cuales toda cultura y todo conocimiento no
pasa de ser profano y, acaso, artificial, sin la sustancia y la transcendencia que t:ene
nuestra enseñanza.
Si nuestro comp~rtamiento masónico lo ajustamos a estos ,principios primordia·
les, habremos cumplido lealmente con nosotros mismos, con nuestra Augusta O:den y
por extensión, con la Humanidad que espera de nosotros una ve~dadera y efectiva
redenc:6n social fundamentada en la Libertad, la Justicia, la Tolerancia, la Equidad,
la Fraternidad y la Sabiduría.
Para cumÍ:f.ir con esta altísima tarea, con esta misión superior, debemos prepa-
rarnos eficiente-mente en los Talleres tomando en ·cuenta y en conside~ación que es-
tamos en la hÓra del Mediodía, y que nuestro Sol interno, ro~locado en el meridiano
de nuestra persona.ídad, ilumina nuestra mente y fortalece nuestro espíritu.

A. V. M.
Respetable Logia "UNION FRATERNAL" NO 1

* * *
SOBRE LAS RIQUEZAS
, Estoy firmemente convencido de que ninguna de las riquezas del
mundo está en condiciones de hacer progresa1~ a la Humanidad, aun cuan-
do esas riquezas se hallen en manos -de un hombre dedicado única y exclu-
sivamente a ello. Sólo f3l ejemplo de Zas per-sonalidades grandes y puras
puede llevar a conceptos y acciones nobles. El dinero conduce sólo al
egoísmo y, con su seducción irresistible, a los abusos.
¿Puede alguien imaginar a Moisés, a Jesús o a Gamdhi cargado
con la bolsa de oro de un Carnegie?
Albert Einstein

ALFONSO DE LAMARTINE Y LA FRANCMASONERIA

"Sois los grandes eclécticos del mundo moderno. Entresacáis de

todos los tiempos, de todos los países, de todos los sistemas y de todas
lft8 filosofías los eternos príncipios fundamentales de la rnoral universal
y, de :esta manera, obtenéis el dogma infalible de la Fraternidad. Com-
batís lo que divide a los espíritus y confesáis lo que une a los corazones''.

-53

Es costuru.bré comenzar un t,rabajo
de esta naturaleza definiendo el concep-
to y hurgueteando su raíz et~mológ·ica
y su origen, ya sea en un diccionario o
en una enciclopec.Lia. Pues bi-en, esta vez
parliiremos de unas sinceras y hermosas
palabras que .se pronuncian en una de
las ocas~ones que para cada uno de naso-
LA TOLERi\.NCIA
tros ha quedado señalada en nuestra~
vidas; me r.ef1ero a la I!niciwción. En
:efecto, du.rante el Ritual de la Ini!Ciación
se pronuncian las siguie!Iltes palabras:
•· Los veréis reunidos, poderosos y hu-
mildes, ancianos y jóvenes, trabaJando
en soc•iedad con e1 mismo entusiasma y
ardor; sin dist~nción de cal:..dades ni Je-
rarquías sociales.
"¿Cuál imagináis que es la v~rtud que
han debido y deben practicar esos hom-
bres para 'Congregarse en tales condi-
ciones de armonía.?
"Es la tolerancia. Sin ella no puede
exist·ir una oociedad como la nuestra.
Por eso os la recoinelndamos con vivo
encarecimiento y porque con propagarla
en .el mundo entero, la Masonería ha evi-
tada muchos horrores y ha enjugado
mucha.s lágrimas".
Al analizar los conceptos, las -ideas y
la problemáti'c a que estos párrafos en-
cierran nos darrnos cuenta de la enorme
importalllcia que ti.ene la tolerancia, más
que en su concepto y etimología, en su
práctica constante y sin ,renuncios.
Me atrevería a afirmar que es una de
las virtudes básicas que colocan a la Or-
den a 'cubierto de los embates de este
duro mundo de transición e!Il que nos ha
tocado vivir. Junto a los princip~os de li-
bertad y de prog.reso, la tolerancia es
una de las armas de d.efensa que desar-
ma los fanatismos, los ánimo.s exaltados,
Los coraZQilles impetuasos y las malas pa-
siones.
En su primer párrafo se alude a las
jerarquías sociales, a los poderosos, a los
54-
lalp
humildes, A loo jóvenes Y. á los viej,os,
todos Ulllidos por un mismo vínculo, el
trabajo en soc.edatd. Y bien, ¿cuál es la
virtud que permite que hombres de di-
v.ersas categorías sociales, de diferentes
edades y religiones trabajen en armonía
en pos de wn engrandec:.miento común?
La tolerancia.
A continuación se encarece vivamente
su propagación y se agrega que con ella
nuestra Augusta Orden ha evitado mu-
chos hor,rores y enjugado muchas lá-
grimas.
Y esta propagac:ón, a la cual tan viva-
mente .estamo'S llamados a difundir, va
cLesde el ámbito personal y sO'cial hasta
el campo de las relaciones políticas, tan-
to nacionales como internac•ionales.
La tolerancia en sí, coma una virtud
personal, significa el domin:'o de las pa-
siones, el saber razonar, el saber pensar
y el no dejarse llevar ciegamente por
ímpetus emocíooa1.es o escapes de de&e-
qul1ibrios pasajer,as, ·casi siempre de or-
den emocion.a.l que influirán en nuestras 1
ac-ciones haciéndolas poco justas.
En el campo de la política veníos que,
gradas a ella, las d~stintas facciones y
partidos políticos pueden convivir y aún
más; a través de las diferencias que los
separan, trabajar en b~en del progreso
de sus conciudadanos. En el campo in-
ternacional, en el cual desgraciadamen-
te hasta hoy impera. la. ley del más fuer-
te, tenemos muchos y numerosos ejem-
plos de esta tolerancia que imp~de que
el planeta sea bañado en sangre o se
p,r.oduzca su aniquilamiento total.
Pero, pas,emos a otro problema. ¿S.erá
cierto que por ser tolerantes o practicar
la tolerruncia debamos de transigir en
nuestras ideas y en nuestras actitudes?
¿Será cierto que para que ella impere
muchas veces se deje abierta la puerta
a una ·c omponenda o a un renuncio?
¡No!
Creo que la tolerancia, para ser prac-
ticada, debe ser bien entendida y que las
faltas a ella son verdaderos actos de in-
tolerwncia. Me explico: la tolerancia de-
be ser practicada frente a los valores del
intelecto y .a loes derechos inherentes a
cada individuo; frente a las cr.eencias de
cada cual, ya sean religiosas, políticas

o éticas. En un plano más amplio, fren-
te a las instituclO'nes que no comparten
nuestros pareceres. Es más; es ouscar
lo que hay de común en todos ellos y en
lo cual puedan coinoidir para que de es-
ta suma de esfuerzos se produzca algo
concreto en b.en de la soc1edad. Por 10
tanto, no es tolerancia el ser un fanáti-
co, el ser un pelele de una ideología, la
mayoría de las v,eces mal entenmaa y
ma1 digerida o, como en la mayoría de
los casos que van desde un par&Hiar.smo
deportivo nasta uno presidencial, tomar
las cosas con un sentido emocional mal
entendido, dejando a la mente y al sano
raciocinio relegados a un segundo tér-
mmo. De estos oajos partlCI.ar1smos, tde es-
tas malas pasiOnes emanadas de una po11-
1iiquería que ·cubre todas nuestras ac&lVi-
dad.es, nace un espíritu y una forma de
actuar que por rdesg;rac.a se ha enseñorea-
do de! ambtente profano: desde una sa-
na manife.stac"ón {feportiVa que es toma-
da oon un abanderamiento y una exal-
tación desorbitadas, hasta 1a ·CPimma1
acción · polit..ca de mtroctucir la ponzo.
ña ma1sana de la politiquería, sea de
cualqute,r color, entre los estuct1antes de
las .escuelas y Universidades. En esta
forma, al mucnacho en formac . . ón, cuyo
deber es aprender, cUltivarse y formarse
una propu:~. personal·Ielad, le es deforma-
da su ps1qms po¡r U!Il falSo aban:deramien_
to pontico que muchas veces sólo toca
lo emoc1onru o la convenienC'ia personal
y oportunislta de una prebenda a corto
plazo. De esto nace el sábelo todo, el de-
magoga, el oportunista, el hombre que
ha,b1a de todo y no sabe nada, pero que
trata que los aemás piensen como él o
se_cunaen sus designtos. Todoo los que
hemos pasado por la Universidad sane-
mos cómo se producen desde el pr>me.r
día la.5 divisiones polítkas de grupos
irreconciliables y capaces de recurnr a
todas las armas con tal de atacar al con-
trario. Cómo se forman o se inventan di-
mes y direte.s que contribuyen a aumen-
tar eJ. -espíritu gregario en el cual no en-
tra ni la libre decisjón ni la honradez
frente a uno mismo. Y ·esto 1continúa y
abarca todo. Si hay que elegir e111 algún
cargo d.e responsabilidad a una persona
idónea, no se pensará en el mejor sino
lalp
en el del grupo o del rebaño. Que tal es
de mi partido o que 'tal es del otro. No·
pasa por la mente pensar en colocar al
mejor, sea de la idea que sea. De esta ma.
nera comienza la nivelación por abajo;
el tr~unfo de los mediocres, la paraliza-
ción o la destrucción de las funciones o
de la imstitución que este individuo poco
preparado dirige. Y esto es general. Los
casoo se pueden citar al infinito. Se ar-
gumenta que es preferible tener a una
persona que pertenezca a un grupa de-
terminado a pesar que el grupo contra-
rio tenga otra superiOr, ya que los prin-
cipios, las doctrinas y otras cosas tan va-
puleadas harám. lo demás. Pero esto a la
larga se paga y muy duro: con la des-
trucción o el descrédito de la institución
o función. ,,
He citado todos estos casos porque
ellos son ejemplos de ·i ntolerancia en la
vida nuestra. Qu~enes no respetan a sus
instituciones, quienes dicen detentar
ciertas ideas y principios y no los cum-
plen son tamoien ·i ntolerantes. Los polí-
ticos -los politicastros, seria mejor cte-
'Cir- que hacen tabla rasa de lo que sus-
tentan y toman posiciones oportunistas,
tamb~én cometen un atentado ·c ontra la
tolerancia. La división par·L·idista, ¡a ca-
si obl:..gación ·implícita ·ae encontrar todo
malo o de atacar al contrario aún por
sobre la objetividad y la razón, sólo con-
tribuyen al despedazamiento y al de-
rrumbe de una sociedad y de una na-
ción. La tolerancia es enemiga inflexible
de las transgresiones morales .e intelec-
tuales. E'lla aboga por una armonía en
el trabaJo en el total de los :m.1embros
de una comunidad social y en especial
entre grupos antagónieo.s. Este trabajo
en común no implica la renuncia ni la
postergación de creencias ni de princi-
pios -cosa muy distinta al contubernio
politiquero de corto alcance, oportUJll.ista
y sd.n ningún dejo de moral-; todo lo
contrar:o: practicando de verdad lo que
se cree mejor y supeJrtior, aunando es-
fuer~a.s y superando vanidades y orgu-
llos que sólo son propios de los medio-
cres, es como se construye una sociedad.
Lo contrario sólo conduce al fracaso y
¡(Concluye en pág. 56)
-55

El viernes M de mayo ppdo., la fies-
petable Logia "ARMONIA" N<? 76 celebró
una solemne Tenida, en conjunto oon
las Respetables Logias "UNION FRA-
TERNAL" NQ 1 y "AURORA DE ITA-
ANIVER~AHI ODE
LA RESPETABLE
LOGIA AHMONIA N~ 7~
LIA" NQ 24, para conmemorar el vigési-
mo quinto aniv;ersario de su nacimiento
a la vida masónica.
La Tenida se realizó en el Templo
magno del nuevo edificio y alcanzó bri-
llantes pmporciones. Concurrieron el
Serenísimo Gran Maestro, Ilustre y Po-
deroso Hermano, Aristóteles Berlendis
Sturla; el Primer Gran Vigilante, Ilustre
y Poderoso Hermano Ignacio LO;rca; el
Graill Secretario, Ilustre Hermano Osear
Pereira, :el Gran Hospitalario, Ilustre
Hermano, Manuel Te'llo; los !Venera-
bles Maestros, en título de las Respe-
tables Logias "Aurora de Italia" N<? 24
y "Unión Fraternal" NQ 1, numerosas
(pe la pág. 55)
a la derrota. Es la tolerancia, tal 'Como
se 1!1os indica que la difundamos, una de
nuestra.s mejores armas. Praetiquémosla
de acuerdo a las enseñanzas de la Or-
tdie n en su bien entendido tono, de tal
forma que si en algo la tmponemos en
el mundo profruno, ha,b remos efectuado
56-
lalp
Comisi01nes y altos dignatarios de 1a
Orden. ·
Una vez iniciados los Trabajos, el Ve-
nerable Maestro, Ilustre Herma!Ilo Juan
FuenzaHda Ríos, procedió a hacer en-
trega de una hermosa joya masónica al
ex-Venerable Maestro Ilustre Hermano
Sergio Carrasco Torrea1ba.
A 'continua.ción, el IVene;table Maestro
coodecoró, asimismo, a 1os nuevos miem-
bros honomrios del Taller, Queridos
Hermanos Gustavo Schafer Drevet y
Carlos Klockmann Tonolli.
El Trabajo sobre el aniversario de la
Logia estuvo a cargo del Primer Gran
Vigilante, Ilustre y Podéroso Hermano
Ignacio Lorca Garnham.
En seguida, el Orador de la Logia, Que-
rido Hermano Merary Castillo Venegas,
leyó el Acta de fundación de la Logia.
Terrnilnada esta lectura, se procedió a
rendir un sentido hommaje a los diver-
sos Hermanos fundadores del TaHe;r, a
cada uno de los cuales se les hizo entre-
ga de una hermosa joya masónica.
Eh el Bien General, numerosos Her ·
manos vindierO!Il un cálido y conmovido
homenaje a la querilct:a y Respetable Lo-
gia "Armonía" N9 76 que, en sus pocos
años de existencia, ha realizado una la-
bor encomiable y una acción trascen-
dente.
F-inalmente, hizo uso de la palabra el
Gran Maestro quien, además de desta-
car la fecunda y provechosa jornada
masónica efectuatdia por la Respetable
Logia "Armonía" N<? 76, rindió un emo-
tivo h9menaje al Primer Gran Vigilante,
Vene.rable Hermano Ignacio Lorca G.
Finalizada la Tenida, se desarrolló un
concurrido ágape fraternal en 1o:s come-
dores del nuevo edificio.
LA TOLERANCIA
una labor tan grande en el progreso so-
c~.al, que de seguro su influencia no será
olvidada y será recordada por la historia.
J. de L.
Respetable Logia
"Giordano Bruno" N9 17

De nuestros lecturas
QUE
PLATON, CON UN MUNDO MEJOR
Por lo general, los historiadores han apre-
ciado siempre con exageración las victorias
guerreras. Sin embargo, pod :: mos observar
que en la marcha de la civilización la vic-
toria no implica gloria, ni la derrota .ctesgra-
da. No siempre es necesaria la victoria para
hacer grancre a una nación. Esparta ganó
la guerra del Peloponeso, pero siguió siendo
un pueblo oscuro y bárbaro. Atenas la 'Per-
dió, pero no por eso dejó de ser el pueblo
impulsor de todo progreso humano.
Estas verdades históricas han sido frecuen-
temente olvidadas por los profesores que ado-
ran las victorias guerreras. Bueno es hacerles
observar que Platón y Aristóteles, los dos in-
telectuales supremos de tod:a la historia grie-
ga, fueron ciudadanos de una nación vencida.
* * *
Platón" nació en el año 427 a. de C., justa-
mente un año después de la muerte de Perí-
cles, y vino al mundo -como Goethe- ar-
mado con los mejores dones que los dioses
pueden poner en un mortal: distinguida as·
cendencia, agradable aspecto, y una mente lu-
minosa en cuerpo sano (le llamaban Platón a
causa del amplio tórax). Al crecer en el am-
biente malsano de la guerra del Peloponeso,
llegó a aficionarse desde temprano a las ac-
tividades bélicas. Sin embargo, a la edad de
veinte años empezó a sufrir lu. influencia de
Só~rates y, cres.de entonces, abandonó los
asuntos de la guerra para dedicarse por en-
tero al estudio de la sabiduría.
Desde ese momento, no dejó de ser nunca
discípulo de Sócrates hasta la muerte del gran
maestro. De este modo integró siempre el
grupo de brillantes jóvenes que seguían al "tá-
bano" (como Sócrates se llamaba a sí mis-
mo) a través ode las calles ere la ciudad. Así
escuchó siempre con asombro y deslubramien-
to la palabra del gran sabio aguijoneando la
estupidez de casi todos los que le oían. For-
nido como un sátiro y delicado como un san-
to, amante del gesto elegante y la frase su-
blime, este filósofo descalzo podía beber y
argumentar mejor que ningún otro hombre
lalp
SONABA
de Atenas. Su oficio era la escultura. Pero
trabajaba en eso muy poco, si es que trab3.-
jaba. Tenía en completo abandono a su fami-
lia y pred'icaba la · justicia social. Se llamabJ.
a sí mismo: el hombre más sabio .de su épa-
ca. Pero sostenía al mismo tiempo que "sólo
s9.1bía que no sabía nada". Antes de él, 103
filósofos habían tratado de descifrar el mis-
terio de la vida. Sócrates decía en c:.mbio:
"No presumas conocer los misterios del mun-
do. Basta con que aprendas a conocerte a
tí mismo".
Conó:::ete a ti mismo. Esta era la esencia
y la substancia de su filosofía. Para Sócrates,
el conocimiento era la puerta de la virtud.
Si la gente es mala, no lo es a causa de sus
vicios, sino a causa de su ignorancia. El cri-
minal es un hombre que se encuentra enfer-
mo o es un estúpido. En ambos casos no sabe
lo que hace.
De esta manera, el deber del filósofo es en-
señar al hombre a conocer. Sócrates dedicó
su vida a enseñar a las gentes ya lo quisie-
ran o no. Actuaba como una matrona de al-
mas, según su propia expresión, para ayu-
dar a los otros a alumbrar sus propias ide·a s.
Su método de detener a las gentes en la
calle para plantearles cuestiones d'ífíciles le
había creado muchos enemigos. Para hacer
eso, Sócrates prefería a los políticos, a quie·
nes demostraba que no conocían nada acerca
del buen gobierno y que, en consecuencia,
manejaban los asuntos de la ciudad en la
misma forma que un zapatero podía manejar
un barco.
Además, Sócrates despertó la curiosidad in-
t.electual de la juventud. De esta manera, los
hijos de familia solían presentarse en sus
hogares a implantar nuevas ideas a sus pro·
píos pa.dres. Los viejos se sentían por ello a
vo~es humillados y no tardaron en lanzarse
contra Sócrates acusándolo de "corruptor de
la juventud".
Al fin, Sócrates encontró un día la siguien·
te acusación estampada en el mercado públi·
co, como era la costumbre ateniense: "Sócra-
-57

tes es culpable de crimen. En primer lugar,
por no adorar a los Dioses en los cuales cree
la ciudad y por querer levantar otros dioses
en cambio. En segundo t-érmino, por corrom-
per a la juventud. La pena que debe serie
impuesta, es la muerte".
...Sócrates habría podido obtener su absolu-
ción si se hubiese preocupado de hacer una
defensa apropiada. Pero se negó a hacerla,
deliberadamente. "He vivido ya setenta años
-decía-, un tiempo bastante largo para
cualquiera. Y es mucho mejor morir así aho-
ra, con todas mis facultades activas, que se-
guir viviendo hasta llegar a una indigna e
incompetente segunda infancia".
...Durante treinta días lo tuvieron en una
prisión, encadenado a su lecho como un vul-
gar criminal. Cuando al fin le llevaron la co-
pa de cicut::1,. sus amigos más queridos, que
se encontraban junto a él en ese instante, no
rpudieron contenerse y se pusieron a llorar
des.consoladamE:nte. Sólo Sócrates permaneció
sereno, impasible hasta el fin.
* mismo y viviendo en el jardín del cielo jus-
Una vez muerto Sócrates, Platón creyó con-
veniente abandonar la ciudad. Atenas no era
ya un lugar favora.ble para los filósofos. Du-
rante veinte años, el joven sabio no hizo más
que viajar. Conoció ampliamente Italia y Si-
cilia, y se hizo un ad'epto de la escuela mís-
tica de Pitág.oras, el "pescador de hombres''
que supo encontrar oraciones en la aritmé-
tica y divina.s verdades en la geometría. Des-
pués se dirigió a Egipto, donde se inició en
la antigua sabiduría. Se dice que viajó tam-
bién por Judea y a la India ...
Tenía ya unos cuarenta años .cuando retor-
nó de sus viajes. Las pasiones en Atenas se
habían aplacado y la vida no era otra cosa
tan menoS!prreciada como en el pasado. La
misma enseñanza de la filosofía no implicaba
ningún peligro, siempre que sus tendencias
no fueran demasiado heréticas y que se tu-
viera el cuidado de no lastimar los oidos d-;
algunos ciudadanos hipersensibles.
Platón abrió, pues. una academia doncfe
conversaba con sus dis~ípulos acerea de los
misterios de la vida. de la muerte y del des-
tino hu_mano. En sus horas de descanso, se
dedicaba a escribir. Disgusk.do con un mun-
do que había obligado a mor.i.r a Sócrates,
soñaba con otro mundo más noble v dibu-
j:>I':Ja sus sueños en una serie de diálogos.
En la mayor parte de estos diálogos, Sócra-
58~
lalp
tes es la figura direetora pero, por lo gene-
ral, el anciano S'abio de Atenas no hace más
que expresar el punto de vista platónico an-
tes que el so.crático. La voz es de Só~rates,
pero los pensamientos son de Platón a lo lar-
go de los diálogos .
Se decía que Sócrates había heeho "bajar
la filosofía d'el cielo a la tierra". Platón la
hizo subir de nuevo al cielo. O, mejor dicho,
trató de remodelar la tierra, a fin de que fue-
ra una imagen perfecta del cielo. "La tierra
-dice'- es un sótano <pTofundo hasta donde
no puede llegar la luz de la razón. No.s.otros
somos los prisioneros encadenados de ese só-
tano, y los objetos que vemos no son más
que sombras d'e la realidad, que aletean en
la negrura de los muros ante nuestros ojos.
El mundo perfecto .el mundo real existe co-
mo una idea (co~o un cielo), y el mundo
que nosotros vivimos no es más que una ima-
gen imperfecta de esa idea".
Platón, como 'Mloisés, miraba a Dios como
a una especie de divina prolongación de sí
tamente en la misma forma que Platón pa-
seaba por los jardines de su Academia, con-
templando la idea perfecta .de un mundo her-
moso y tratando de hacer una copia, pres-
cindiendo de los malos materiales que tenía
a la mano. Tratando de hacer un cielo con
ladrillo y piedra, Dios creó a la tierra; y lue-
go. deseando hacer un ángel con material d'e
lodo, creó al hombre ...
Sin embargo, cuando Platón deja de teori-
zar acerca de las ideas de Dios y retorna a sus
propias ideas, se vuelve uno de los más a.~aba­
dos maestros de todas las edades. Platón es
el eterno modernista. Sus doctrinas políticas
y sociales no sólo fueron avanzad'as para su
tiempo, sino que resultan aún avanzadas pa-
ra el nuestro. Difícilmente podemos encon-
trar un tema de vital interés para nuestra
épo~a que no haya sido ya tratado por Pla-
tón con una extraordinaria comprensión del
drama humano. La fraternidad universal del
hombre, la eugenesia, el control de nacimien-
tos, la comunidad de las mujeres·, la aboli-
ción cfé la familia, el Estado tutor del niño,
la igualdad de los sexos, la abolición de la
propiedad privada, el amor libre, la prohibi-
ción, k censura, son solamente algunos de los
tema.s tratados en sus "Diálogos''. Pero ani-
mando de manera latente todas estas discu-
siones se encuentra un simple impulso: su

indeclinable deseo de ver que la justicia se
establezca en la tierra. Justicia en el aspec-
to indivtdual y en el aspecto colectivo. Pla-
tón deseaba ver un estado en el cual un Só-
crates, en vez; de ser asesinado, hubiera sido
un rey.
• • • tas y las estrellas son su cuerpo. Sin ella la
Platón pinta esta tierra, imaginada por el
deseo de su corazón en su "República", como
"la primera utopía de la historia.
Con el objeto de que podamos hacernos una
id:ea más o menos exacta de la "Repúblic'a"
de Platón, examinemos la vioda de sus ciu-
dadanos desde el día en que nacen hasta
el fin.
El niño nacido en la Re'P'\Íblica debe ser el
resultado de un apareamiento comunal. Los
mejores hombres deben aparearse con las me-
jores mujeres, con el exclusivo propósito de
producir ejemplares superiores. El hombre
puede poseer a estas mujeres en común. No
debe haber ni matrimonios ind'ividuales, ni
familias <privadas. Tan pronto como nace el
niño. debe ser recogido del hogar de sus pa-
dres y colocado en cunas maternales del Es-
tado. Es esencial que los padres no conozcan
a sus hijos. ni los hijos a sus padres. Sólo
de esta manera podrá ser un hecho efectivo
el ideal de la fraternidad universal. Sólo en
un estado comunal de este género todos se-
rán mirados, en verdad, como hermanos unos
de otros.
Por otra parte, los padres no tienen ne-
cesidad de restringir sus experiencias sexua-
les a una constante monogamia. Si después
de haber dado niños al Estad() dP.sean ~egu\r
en su apareamiento "podrán hacerlo asi, con
la condición de que harán lo posible por evi-
tar el nacimiento de un nuevo niño". La
cuestión del amor libre queda así a voluntad
discrecional del individuo. ya sea hombre o
mujer. La vtda privada del individuo no es
asunto del Estado.
Ahora bien, volvamos al niño.
Ya hemos visto que desde su nacimiento
va a parar a manos del Estado. Hasta la edad
de veinte años todos reciben la misma edu-
cación. Esta educación preliminar consiste,
sobre todo, en prácticas de gimnasia y mú-
sica -la gimnasia para desarrollar la sime-
tría del cuerpo y la música para desarrollar
la armonía del espíritu. "Desconfía del hom-
bre que no ama la música", porque su espíritu
está torcido , sus pasiones son desequilibradas
lalp
y su sentido del bien y del mal está estra-
gado. La música -Y para Platón música quie-
re decir toda armonía, ya sea audible o no--
es el principio latente que imrp1de al mundo
precipitarse en el caos. Ella es el alma del
universo, en la misma forma que los plane-
tierra sería un carbón ardiente y el cielo un
puñado de ceniza.
...Por otra parte, la educación del niño de-
be estar libre, no sólo de gazmoñería sino
también de todo trabajo ingrato. El apren-
dizaje tiene que ser un placer y no una tor-
tura. Bajo la recta dirección del maestro, un
niño normal g.ozará al hacer gimnasia men-
tal, tanto como el hacer ejerci(!ios físicos. De
esta manera una escuela sería un gimnasio
de la mente, una arena intelectual, donde los
niños tratarían de sobresalir en el fascinante
deporte de los cambios de ideas.
...Durante los diez años siguientes, esto es,
desde la edad de veinte a treinta años, se
dedican al estudio de las ciencias -aritmé-
tica, geometría y astronomía. No hay que
olvidar que estos estudios persiguen más
bien fines estéticos que ejecuciones prácticas.
...Des,p ués de esos diez años de estudios cien-
tíficos, viene una segunda selección. Aquellos
que fracasan en la prueba para seguir estu-
dios superiores van a formar la clase media.
Son los soldados. Ellos serán los guard'ianes
del Estado. Platón, con toda su sabiduría, no
alcanzó, ni siquiera de lejos, a tener la vi-
sión de los profetas judíos, chinos o hindúes.
El ideal de la paz se encontró simplemente
más allá del horizonte del pensamiento grie-
go, aun en el caso de sus más altas lumbre-
ras . Los soldados desempeñan por eso, un pa·
pel imrportantísimo en ia R~públlca de Pla-
tón. Una nación sin soLdados era para Pla-
tón una cosa tan inimaginable como una na·
ción sin esclavos. Sus ideas sobre la guerra y
sus sanciones de esclavitud son las dos man-
chas que perjudican el esplendor de su espi-
ritu luminoso y noble en los demás aspectos.
Ya tenemos, pues, en su República, una cla-
se media de soldados o guard'ias, sobre la
clase baja de agricultores, obreros y nego·
ciantes. Recordemos que esta clase baja está
formada por aquellos que a la edad de veinte
años han demostrado su incapacidad para
proseguir en el desarrollo mental. Aquellos d'e
mentalidad surperior, que superaron las dos
eliminaciones, están ya listos para el estudio
-59

de la filosofía. Tienen treinta años de edad
y son los hombres y las mujeres destinados
a gobernar al Estado. Como vemos, en la Re-
pública de Platón hay una completa igual-
dad entre los sexos. Ambos obtienen la mis-
ma preparación y ambos tienen el crerecho a
ocupar las mismas posiciones cuando se en-
cuentran capaces para dirigir los altos asun-
tos de la vida. Después de un adiestramiento
de cinco años en cuestiones de filosofía, esos
hombres extraordinariamente dotados, no es-
tán aún en condiciones de ejercer un buen
gobierno. Les falta todavía bajar descre las
alturas de la contemplación, al terreno de la
vida corriente o cotidiana de las gentes. Pri-
mero tienen que obtener el "sentimiento" de
la vida antes de tomar partici'P'ación en el
manejo de su ·dirección. Quince años dura es-
te nuevo ejercicio de los asuntos prácticos,
hasta que a los cincuenta años de edad se
encuentran ya perfectamente capacitados pa-
ra asumir las funciones de filósofos-reyes y
filósofos-reinas . Porque en la República ideal,
solamente el filósofo tiene el derecho a go-
bernar ...
* * * la esclavitud para desembarazarse de él.
Ya tenemos la estructura completa de nues-
t,ro Estado ideal. Inscribamos a su entrada:
"Esta es la Ciudad de la Justicia" y penetre-
mos en ella con el objeto de examinar algu-
nos de sus aspectos más interesantes. Nues-
tra primera observación será que los filósofos-
gobernantes han expulsado de la ciudad a los
profesores de religión, incluso a Homero con
su Biblia. Y esto porque resulta insultante
para su inteligencia el creer en las historias
infantiles acerca de unos dioses que andan
por arriba, con sus míseras pasiones humanas,
como se relata en "La Ilíada". La religión
debe ser purificada de todos los mitos salva-
jes y de sus supersticiones. Mejor es no tener
ninguna religión antes que tener una reli-
gión incompatible con la razón humana ...
La principal poreocupación .d el gobernante
en la República platónica es hacer feliz al
gobernado dándole salud. alegria y cres.c anso.
"Dadme salud y un día de des-::anso para que
pueda hacer ridícula la pompa de los empera-
dores'', dice Emerson también. Salud, alegría
y acremás un día -un día de belleza lo más
largo posible. azul y dorado- es para Platón
el máximo de la felicidad humana. Una vida
de belleza, una vida de justi~ia , una vida de
amor, tres palabras que resumen la filosofía
60-
lalp
de Platón. El hombre bueno, el hombre feliz
.......JPOrque ser feliz es ser buenO-, es siempre
un hombre justo, el hombre armonioso que
anhela belleza y ayuda a crearla ya sea en
ejemplares vivientes, en obras de arte o en
nobles hazañas. La belleza es el pasaporte pa-
ra la inmortalidad. Porque creando un objeto
de belleza conquistamos la muerte.
Buda fue el apóstol del amor; Confucio el
heraldo de la justicia; Jeremías el profeta de
la paz; Platón es el más alto sacerdote de la
Belleza. Imaginó una ciudad de super-hom-
bres y la dedicó a su dios-hermano Apolo, el
Señor de la Luz. Luego la colacó entre las
estrellas a fin de que los arquitedos del fu-
turo puedan contemplarla y aprender en ella
para sus revolucionarios sueños.
Sin embargo, Platón no se contentó con la
mera creación de una idea. Como Confucio,
trató de aplicar en la práctica sus teorías
filosóficas. Por invitación de Dionisia, rey .de
Siracusa , se dirigió a Sicilia y trató de mos-
trar al monarca la forma 'cómo gobernaría
un hombre sabio. Pero Dionisia tuvo miedo
de algunas ideas de Platón, y lo cond'enó a
El mundo no estaba todavía preparado pa-
ra tener un gobierno honrado.
Platón fue rescatado poco después, gracias
a la generosidad de un discípulo suyo. Enton-
ces retornó a Atenas, donde continuó por lar-
go tiempo sus diálogos filosóficos en el jar-
dín de su Academia. Un día, cuando había
cumplido ya ~ us ochenta y un años, el ruido
de un banquete de bodas llegó en un instan-
te dado a fatigarlo. Entonces presentó sus
excusas y se retiró a otra sala para "tomar
una pequeña siesta" como él decia. La fiesta
se hizo cada vez más escandalosa, y los no-
vios olvidaron por completo al fatigado filó-
sofo que estaría tratando ere reposar a pesar
del bullicio.
Pero en realidad, Platón estaba ya dormi-
do en la habitación cercana. Las bulliciosas
fiestas del mundo no lo turbaron ya. El fi-
lósofo-rey, el rey de los filósofos , había lo-
grado llegar, por fin , a las puertas de la pa-
cífi::a república de la muerte. *
Dr. Hetnry Thomas
(De su hbro "Hombres y Dioses en la His-
toria de la Raza Humana". Editorial "Cla-
ridad ' .)

El Advenimiento
del J-fijo sierto, aBí es necesario. que el HIJO DEL HOM-
BRE sea lm>antado".- S. Ju,nn, C.rtp. 3 v er 11¡.
del J-fombre
El Evangelio de San Juan, relata la in.~re ­
dulidad de los judíos respecto al advenimien-
to del Hijo del Hombre e increpaba al Maes-
tro de Galilea, de esta manera:
-"Nosotros hemos oído la Ley, que el Cristo
p <:rmanece para siempre: ¡cómo dices tú:
¿Conviene qu2 el Hijo del Hombre sea levan-
tado? ¿Quién es ese HIJO DEL HOMBRE?"
Entonces J esús les respondió:
-"Aún por un po~o estará la luz e.ntre· vos-
otros ; a.ndad entre tanto que tenéis luz, por-
que no os sorprendan las tinieblas; porque
el que anda en tinieblas, NO SABE DONDE
VA. Entre tanto tenéis la luz, creed en la luz,
para que séais HIJOS DE LA LUZ". . . (S.
Juan, Cap. 12., Vers. 34, 35 y 36).
Como es del conocimiento de todo Franc-
masón, salvo contadas exce•p :!iones, el Evan-
gelio de San Juan es el Mensaje de la Inicia-
ción, y su contexto responde ampliamente a
nuestro simbolismo en los diferentes Grados.
Y ya hemos dicho, en más d e una oportuni-
dad, en estas mismas columnas, que Juan o
Ian, significa "comienzo", "iniciación", "puer_
ta", igualmente que Janos, Januario (enero)
y otros tantos otros derivados de estos nom-
bres.
Por eso, a nosotros, Francmasones especu-
la.tivüs, no nos causa extrañeza ni novedad
que se nos identifique como los HIJOS DE LA
LUZ y que, en .nuestro simbolismo, se usen
profusamente · los términos relacionados con
la Luz (conocimiento), falta de luz o Tinie-
blas (ignorancia), Medio Día (edad adecuada
para re.c ibir la luz masónica) , Noche (tér-
mino de una jornada, de una labor o de la
vida), y muchas otras denominaciones seme-
jantes que sería largo enumerar.
En el pasaje bíblico del epígrafe, se hace
referencia al Hijo del Hombre como un sím-
bolo del Hombre del mañana, constructor de
lalp
"Y oomo Moisés levantó la serpiente en el de-
la Nueva Humanidad. Del mismo modo, ser-
piente significa inteligencia y Moisés, salvado
de las aguas, la levanta en pleno desierto.
Igualmente hemos explicado que agua, iniciá-
ticamente, representa a las mu(!hedumbres,
lenguas y gentes Y, co.nsecuencialmente, de-
sierto puede considerarse como los campos
mentales de los seres humanos inaptos para
el cultivo. En este cas o particular, aquellas
personas aferradas a los dogmas, prejuicios,
conveu:!ionalismos y demás taras que esteri-
lizan toda a,c ción emancipadora y mantienen
aherrojado su espíritu por un fanatismo tan
ascendrado que le impide ver la Luz.
Si tratamos de comprender este pasaje bL
blico en su verdadero sentido iniciático, pues
el aspecto religioso que se le pretende dar, ca-
rece de todo valor, llegaremos a la condu-
sión de que su Venerable Maestro que se libe-
ró (del tumulto acuoso) de las muchedumbres
fanatizadas, pus.o en evi·dencia que el .conoci-
miento nos conduce a la sabiduría, que nos
potencia como seres espirituales. Aún cuando
vivamos en el desierto de la vida profana,
plena de supersticiones, m entes anquilosadas,
prejuÍ!::ios y oscurantismos, nos erguiremos
a nte ese mundo y le ayudaremos, desintere-
sadamente, a conquistar la Verdad que hará
libre el espíritu, y pueda levantarse el hom-
bre ante la faz de la tier ra como verdadero
Hijo del Hombre completamente emancipado.
Como se puede apreciar, el Hijo del Hom-
bre del relato bíblico, es la serpiente que se
levanta sobre el desierto .de las incompren-
siones, intereses, mezquindades, errores que
mantienen artificialmente el actual estado de
cosas, cuyos usufructuarios, que representan
una minoría, tratan, por todos los medios
posibles, de conservar a las masas en la igno-
rancia, para lo cual se valen del temor y del
castigo, de la alabanza y el premio.
En la época que vivimos, el Hijo del Hom-
bre, puede decirse que representa una por-
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.c!ón muy reducida eh la poblacion del pla-
neta que, en h~.s mejores condiciones, no su-
pera al uno por mil, como ocurre en Chile,
pues el sendero está plagado de obstáculos
que la mayoría no tiene la voluntad de sor-
tear.
No hay que olvidar que, el despzrtar de lc.s
concien,~ias se realiza en un · proceso lentísi-
mo. Por esto, es tarea muy difícil conseguir
algunas realizaciones.
Para la gran mayoría n ada es más placen-
tero que re.c ibir r esueltos todos los problemas
que inquietan la conciencia, aun cuando las
soluciones sean simples quimeras o burdas
fantasías, pero que satisfa cen, ampUamente,
a quienes mantienen el espíritu "inédito" en
lo más re,~óndito de su ser, durmiendo el
más dulce sueño de una perenne infancia.
Esta actitud, cómoda y placentera, es la
preferida por la inmensa mayoría de nues-
tros congéneres aun .c uando muchos de ellos,
en su fuero interno, se consideren' engañados.
Esta actitud tíene la ventaja aparente de que
todos los problemas que presenta la Vtda han
sido solucionados satisfactoriamente. De esta
manera no es necesario pensar ra~ ionalmen­
te, y se puede desarrollar una plácida exis-
tencia sin mayores problemas ni complica-
ciones y disfrutar intensamente del mundo y
sus placeres, haciendo caso omiso de la suerte
del hermano o del vecino.
En estas circunstancias, con el materia l
humano aletargado en su mayoría, no es po-
sible el advenimiento del Hijo del Hombre en
los momentos actuales, pues debemos consi-
derar que gran proporción de nuestros con-
géneres viven todavía en las más densas ti-
nieblas y se les hace muy dificultoso alcanzar
la Luz, .c on la agravante de que aquellas in-
terrogaciones que inquietan la co.n~iencia se
adormeeen fácilmente por medio de disciplL
nas r eligiosas, sofismas y toda esa suerte de
narcóticos intelectuales de que es heredera
la so.c iedad contemporánea.
No obstante estos fa,~tores negativos, la
semilla humana portadora del germen del
cual surgirá el Hijo del Hombre, o el Gran-
de Arquitecto del Universo constructor de la
Nueva Humanidad, se cultiva en los Templos
masónicos, a cubierto del bullicio de la turba-
multa y al cuidado de una élite de hombres
de buena voluntad.
Por otra parte, debemos considerar que la
labor primordial de los Hijos de la Luz, si-
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lalp
miente fecunda de los forjadores de la Nué-
va Humanidad se materializa al plasmar las
bases arquetíplcas de esta nueva espe.cie hu-
mana, generada, por .cierto, en los troncos
actuales, en sus estructuras psi-ca-somáticas,
pero de una superioridad inconmensurable en
lo que respecta a los problemas de la mente
y, particularmente, a la realización espiritual,
vale decir, en la perfecta integración del ser
humano.
S::m, pues, los Francmasones, Hijos de la
Luz los progenit ores del Hijo del Hombre que,
en buen romance, es el Hombre Superior, o
super-hombre como diría el filósofo germano
que, si bien es cierto, difiere de nosotros e.n
los campos mentales y espirituales, en lo físi-
co pasa más allá de presentar una marcada
pobreza capilar que, para nosotros, puede
ser antiestética como lo sería la nuestra para
nosotros progenitores cavernarios, .como tam-
bién mostrarán una esbelta silueta al estar
sometidos a dietas científicas.
Es curioso. hacer notar que en la evolu~ión
de la Humanidad se ha ido perdiendo la fuer-
za capilar y no es aventurado asegurar que
en su total desarrollo le queden únicamente
pequeños vestigios pilosos, lo cual vendría a
modifi.car el sentido estético y regirse por
normas muy diferentes a las actuales. Empe-
ro, la cavidad encéfalo-craneana no mostrará
mayores proporciones que las nuestras, a pe-
sar de su notable superioridad en su produc-
ción mental y espiritual.
Se espera que el Hijo del Hombre surja
en plena época espacial, es decir, en la pre-
sente Era del Aguador (Acuarius) en los mO-
mentos en que el Hombre logre conquistar y
colonizar los planetas Marte y Venus, como
las primeras escalas en la conquista del es-
pacio.
No es posible imr.ginar que otro ser viviente
de nuestro contorno pueda presentar un cos-
morama semejante, pues sus limitaciones son
tan inmensas y profundas que no les permite
siquiera vislumbrar ni aproximadamente las
más pequeñas os~ilaciones del acontecer uni-
versal, pues si esto pudiera ocurrir, estada
ys. incorporado a la especie humana en sus
más avanzados exponentes ...
Hemos hablado el mismo lenguaje <!.Oncep-
tual que San Juan evangelista hace unos dos
mil años y hacemos propia la denominación
de Hijo del Hombre, pues otra apreciación no
estaría encuadrada dentro de la razón y la
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lOgica, ya. que 1a evoiudón integra! será. con-
quistada por la propia especie humana, ex-
cluyendo todo aporte mesiánico y la contribu-
ción que pudieran aportar entidades extra-
humanas, concebibles sólo en mentes retarda-
tarias que esperan recibir favores y benefi-
cios de actos miseric.o rdes de personajes ima-
ginarios, creados por la fkción humana.
Como Francmasones libres y especulativos,
podemos aceptar ampliamente los estadios
más avanzados de nuestra especie, con las
denominaciones de Hijos de la Luz y del Hijo
del Hombre, que nos presenta el Evangelio de
San Juan y que hemos analizado somera-
mente en uno sólo de sus versículos, en una
de sus siete diversas interpretacio.nes, coinci-
dentes con nuestn•.s prácti~as y doctrinas.
Por este motivo, no nos cansaremos en r2-
comendar "el estudio analítico" de todos y
cada uno de los pasajes de este Evangelio de
San Juan o Mensaje de la Iniciación, pues
encontraremos en él inmensos tesoros escon-
didos para el mundo profano y que nos brin-
da un sendero pleno .de la luz de la sabiduría,
que nos potencia como verdaderos iniciados.
Hemos dicho, "estudiar" y meditar, no leer
únicamente, pues esto último sólo es propio
para mentes simples que quedan satisfechas
eón la letra de los textos bÍblicos, siempre in-
congruentes e incoherentes para muchos.
Nuestra primordial obligación como Apren-
dices Francmasones es la de buscar el signi-
ficado de l:as "claves iniciáticas" y actualizar-
las de acuerdo con la ciencia y la técnica
actuales, de otro modo la Biblia .c olocada en el
Ara de los Juramentos, seria un objeto intras-
cendente y no el Libro de la Vida, como debe
ser para todo iniciado.
La Iniciación no es, pues, el hecho de reci-
bir con mayor o menor emoción los toques
misteriosos que nos puede dar un Venerable
Maestro, es algo más que todo el formalismo
de la Liturgia y el Ritual, siendo una de sus
labores fundamentales, desentrañar los ocul~
tos misterios del drama cósmico que vivimos
y la razón de nuestra propia existencia como
seres pensantes y crer.dores; es decir, en po-
cas palabras, potenciarnos convenientemente
con la prá~ tica de nuestras dodrinas, para
responder ean pleno conocimiento, surgido
como resulta.nte de nuestra propia persona-
lidad, al primer gran interrogante que nos
hace la Francmasonería: ¿De dónde veni-
mos?, posteriormente, con mayores antece-
dentes de juicio, las dos siguientes: ¿Qué
somos?. . . ¿A dónde vamos? ...

LA EPOPEYA DE GILGAMESH

La epopeya de Gilgamesh -Sha magba imuru- es el texto épico

más antiguo de la Humanidad. Su primera versión conocida, en sumerio,
data aproximadamente del año 2.500 a. de J .C. Nos cuenta cómo el héroe
Gilgamesh, rey de Uruk, a la vez dios y )hombre, fue presa del dolor a
la muerte de su compañero Enkidu, cómo se lanzó a la búsqueda 1de la
planta de la inmortalidad y se la dejó arrebatar después de haberla en-
contrado. Este dato traduce fielmente la concepción melancólica, deses-
perada, que los babilonios tuvieron de la muerte. El interés principal del
poema estriba en la tablilla onceava, la del encuentro de Gilgamesh con
Utnapishtim -una especie de Noé babilónico-, quien relata a Gilga-
mesh la historia del gran diluvio. El recuerdo, muy vivo entre los su-
merios y los akkadios, de un terrible cataclismo ocurrido en tiempos
remotos, parece confirmado por las excavaciones de Ur, al sur de Meso-
potamia, donde se había establecido la civilización proto-histórica de
Obeid, hacia los años 4000-3400 a. de J.C.: depósitos de inundaciones
demm~stran que aquella zona, en determinado momento, se encontró com-
pletamente sumergida; el cataclismo se produjo, sin duda, a consecuen-
cia de una de las inundaciones periódicas del Tigris y el Eufrates, que
aquella vez había alcanzado (o aquellas veces, puesto que las hu.ellas
geológicas inducen a creer que el desastre se repitió una y otra vez)
una amplitud y una violencia excepcionaLes.

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SUMARIO
Editorial. Pág.
Que cada cual cumpla con su deber 1

La Voz de la Maesttría.
Nuestra Belleza . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3

Adeodato García Valenzuela, por Benjamín Oviedo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5

La Gran Logia de Chile celebra las Tenidas .de Pentecostés . . . . . . . . . . . . 7

Homenaje a la memoria del Gran Maestro Frodden . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25

Las Siete Ciencias liberales, por Eduardo Phillips Müller . . . . . . . . . . . . . . . 27

Los Diálogos Masónicos de Lessing, por Andrés Allán G. . . . . . . . . . . . . . . . . 32

Los Estatutos de la Orden Masónica de Chile, por L. S. S. . . . . . . . . . . . . . . 39

El Ilustre Hermano Dr. Gabriel Kirschenbaum . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44

Tres Sonetos, por Modesto Parera . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45

Inauguración de la Secretaría de la Logia "PLUS ULTRA" . . . . . . . . . . . . . . 46

Simbolismo del "Centír·o".

Simbolismo de la Ascensió.n, por Mircea Eliade . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48

Nuestro MediodÍa, por A. V. M. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51

La Tolerancia, por J. de L. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 54

25 aniversario de la Logia "ARMONIA" N" 76 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56

Platón, que soñaba con un mundo mejor, por Dr. Henry Thomas . . . . . . . 57

El advenimiento del hijo del Hombre . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61

Sumario .................. .. . .. . ............. . ... .. ..... ·. . . . . ...... . .. .. . 64

Contraportada: Necesidad de la Ley

Páginas de ot·1o: Lírica Breve. El Jardinero, de Rabin-
dranaz Tagore.
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1 PAGINAS VDE ORO 1

1
Lírica Breve.

POEMA 68

Nadie es eterno, Hermano, y nada pervive. Recuerda esto y alégrate.

No es nuestra vida la sola carga añosa, nuestro sendero no es el
único camino largo. Ningún poeta tiene el deber de cantar }a antigua
canción. La flor se marchita y muere; pero el que la lleva no ha de llorar-
la siempre ...
Hermano, recuerda esto, y alégrate.
Llegaro un silencio absoluto y la música será, entonces, perfecta.
Decae }a vida hacia poniente para ahogarse en sombras doradas. El amor
ha de ser l!amado de su juego a que beba penas y suba al cielo de los
llantos ...
Hermano, recuerda esto, y alégrate.
Cojamos, vo~ando, nuestras flores, no las robe el viento pasajero.
Nuestra sCllllgre se enciende y se avivan nuestros ojos, robando besos que
se mustiarían si los olvidáramos. Avidez es nuestra vida y pujanza nues-
tro deseo, porque el tiempo está tocando a muerto.
Hermano, recuerda esto, y alégrate.
No podemos, en un punto, abrazar las cosas, hacerlas pedazos y
echarlas al polvo. Las horas pasan lige·r as, can los sueños bajo el manto.
La vida, sin fin para el trabajo y el hastío, s.ólo nos da un día para e~ amor.
Hermano, recuerda ésto, y alégrate.
La belleza no es dulce porque el ritmo voluble de su danza es el de
muestras vidas. La sabiduría nos es .cara porque no tenemos tiempo de
completarla. En lo eterno todo está hecho y concluído, pero las flor~:; de
la ilusión terrena, son eternamente frescas, gracias a la muerte.
Hermano, recuerda esto, y alégrate.

POEMA 79

A veces me pregunto qué es lo que separa a} hombre de la bestia,

cuyo corazón no entiende lengua humana alguna.
¿Por qué remota mañana, de qué primer paraíso, de qué creación,
iba el selrldero claro por donde sus dos corazones. se entendían? Pues
las huellas de su andar gemelo no se han borrado aún, aunque su paren-
tesco se haya olvidado hace tanto tiempo ...
De pronto, en una música sin palabras, el recuerdo dormido se
despierta; y la bestia mira a .! hombre en los ojos can una confianza tier-
na y el hombre mira en los ojos a la bestia con indulgente sonreír.
Parece que los dos amigos se reconocieran vagamente a través de su
difraz ...

RABINDRANAZ TAGORE
Premio Nobel 1913
(Traducción de Zenobia Camprubi de Jiménez).
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Impresores: CENTRAL DE TALLERES DEL S. N. S. - SANTIAGO DE CHILE