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net/publication/311965249
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Antoni Sanz
Autonomous University of Barcelona
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1
Este trabajo ha sido posible gracias a la ayuda PB94-0700 de la
Dirección General de Investigación Científica y Técnica (DGICYT)
2
AGRADECIMIENTOS
No puedo pasar por alto que esta tesis doctoral ha podido realizarse gracias al esfuerzo y al
apoyo de numerosas personas, entre las que quiero destacar especialmente a:
María José Gómez, Alba Comas, Antoni Jaén, Marta Rey, Ramón Campos y Lidia
Rocamora, quienes me ayudaron en la realización de las sesiones experimentales,
María Álvarez y Quim Limonero, cuya tesis doctoral y oposición a profesor titular,
respectivamente, han coincidido con la preparación de este trabajo. Con ellos he
compartido iras y alegrías en este intrincado mundo de la investigación y la docencia
que es la Universidad.
En general, todos los compañeros de los grupos de salud y deporte del área de
Psicología Básica, por el interés y apoyo mostrado hacia mi trabajo durante estos tres
años, y por su comprensión al compartir los recursos técnicos de investigación.
Paco Villamarín, quien, sin lugar a dudas, debe de ser uno de los directores de tesis
doctorales más concienzudo, disciplinado, meticuloso, preciso, responsable y paciente de
que uno pueda disponer. Como expiación de mis pecados, mi más profundo
reconocimiento por la flema que ha mostrado ante uno de mis talones de Aquiles: la
gestión del tiempo.
3
ÍNDICE
6
1.5. INFLUENCIA BIDIRECCIONAL DE LA
AUTOEFICACIA Y LA EXPECTATIVA DE
RESULTADOS CON LOS PROCESOS
MOTIVACIONALES Y AFECTIVOS. .................................. página 41
1.5.1. influencia recíproca entre las
expectativas y la motivación ........................................ página 42
1.5.2. Influencia recíproca entre las expectativas
y el afecto ..................................................................... página 47
CAPÍTULO 2.
REACTIVIDAD FISIOLÓGICA PERIFÉRICA ........................... página 55
2.1. CONCEPTO Y VARIABLES
CARACTERÍSTICAS ............................................................. página 55
2.1.1. Variables fisiológicas periféricas objeto
de estudio en el presente trabajo. ................................. página 57
2.2. REACTIVIDAD INESPECÍFICA VERSUS
REACTIVIDAD ESPECÍFICA. IMPLICACIÓN
EN LOS PROCESOS PSICOLÓGICOS. ................................ página 57
2.2.1. Activación fisiológica inespecífica. ............................... página 57
2.2.2. Reactividad fisiológica específica.
Concepto de fraccionamiento direccional.
Sistemas de respuesta. .................................................. página 62
7
3.3. INVESTIGACIÓN ASOCIADA A OTROS
MARCOS TEÓRICOS. ........................................................... página 78
3.4. SÍNTESIS DE LOS TRABAJOS EMPÍRICOS. .......................... página 80
3.5. SIGNIFICACIÓN MOTIVACIONAL Y
EMOCIONAL DE LOS CAMBIOS
FISIOLÓGICOS ASOCIADOS A LA
ACTIVIDAD COGNITIVA .................................................... página 84
8
DEL TRATAMIENTO DE DATOS
Y LA MUESTRA ESTADÍSTICA. ...................................... página 155
6.1.1. Filtrado de datos: preparación y
transformación para su tratamiento estadístico .......... página 155
6.1.1.1. Tratamiento pre-estadístico común ............... página 156
6.1.1.2. Variables cognitivas ..................................... página 157
6.1.1.3. Variables fisiológicas .................................... página 158
6.1.1.4. Variables conductuales ................................. página 162
6.1.2. Filtrado de la muestra experimental:
creación de la muestra estadística .............................. página 163
6.1.2.1. Selección de sujetos para los análisis
estadísticos ................................................................. página 163
6.1.2.2. Características diferenciales de la muestra
estadística ................................................................... página 164
6.1.3. Naturaleza de los datos analizados .............................. página 167
6.2. ESTUDIO PSICOMÉTRICO DE LOS
INSTRUMENTOS DE MEDIDA. ........................................ página 168
6.3. MANIPULACIÓN DE LAS VARIABLES
INDEPENDIENTES. ............................................................. página 171
6.3.1. manipulación de la autoeficacia. .................................. página 171
6.3.2. Manipulación del valor del incentivo. ......................... página 172
6.4. EFECTOS DE LA COMPETENCIA PERCIBIDA
Y EL VALOR DEL INCENTIVO SOBRE EL
ESTADO Y EL CAMBIO AFECTIVO. PAPEL
DE LA COMPETENCIA PERCIBIDA. ............................... página 174
6.4.1. comparación del estado de ánimo entre
grupos de manipulación del valor
del incentivo y de la autoeficacia ............................... página 174
6.4.2. Estado de ánimo en función de la
autoeficacia y del valor del incentivo
medidos por cuestionario ........................................... página 177
6.4.3. Papel de la competencia percibida. .............................. página 179
6.5. PREDICCIÓN DE LA PERCEPCIÓN DE SÍNTOMAS
FISIOLÓGICOS EN FUNCIÓN DE LA AUTOEFICACIA,
EL VALOR DEL INCENTIVO Y LA
COMPETENCIA PERCIBIDA ............................................. página 181
6.6. EFECTO DEL VALOR DEL INCENTIVO Y LA
9
AUTOEFICACIA SOBRE LA MOTIVACIÓN
INTRÍNSECA. PAPEL MODULADOR DE
LA COMPETENCIA PERCIBIDA ....................................... página 182
6.7. EFECTO DE LA AUTOEFICACIA Y
EL VALOR DEL INCENTIVO SOBRE
EL RENDIMIENTO CONDUCTUAL. . . . . . . . . . . . . . . página 185
6.7.1. Intensidad de la conducta. ........................................... página 185
6.7.2. Calidad de la ejecución. ............................................... página 186
6.7.2.1. Eficacia.............................................................. página 186
6.7.2.2. Eficiencia ........................................................... página 188
6.7.2.3. Potencia de la conducta. ....................................... página 191
6. 8. EFECTO DE LA AUTOEFICACIA Y
EL VALOR DEL INCENTIVO SOBRE
LA REACTIVIDAD FISIOLÓGICA. ................................... página 192
6.8.1. Presión arterial ............................................................ página 193
6.8.1.1. presión arterial sistólica. ....................................... página 193
6.8.1.2. Presión diastólica. ............................................ página 194
6.8.1.3. Diferencial de presión. ....................................... página 195
6.8.2. Frecuencia cardíaca. ..............................................página 197
6.8.3. Temperatura periférica. ................................................ página 199
6.8.4. Frecuencia respiratoria. ................................................ página 199
6.8.5. Resistencia electrodérmica........................................... página 201
6.8.6. Actividad mioeléctrica. ................................................ página 202
6.9. RELACIONES ENTRE VARIABLES
DEPENDIENTES. ................................................................. página 202
6.9.1. Predicción del rendimiento conductual
en función de la reactividad fisiológica. .................... página 202
6.9.2. Relación entre la percepción de síntomas
fisiológicos y el afecto. .............................................. página 204
6.9.3. Relación entre la reactividad fisiológica
periférica y la percepción de
síntomas fisiológicos. ................................................. página 207
CAPÍTULO 7.DISCUSIÓN ........................................................................ página 209
7. 1. FILTRADO DE LA MUESTRA EXPERIMENTAL. .............. página 209
7.2. MANIPULACIÓN DE LAS VARIABLES
INDEPENDIENTES. ............................................................. página 210
7.2.1. Manipulación del valor del incentivo. ......................... página 213
10
7.2.2. Manipulación de la autoeficacia. ................................. página 213
7.2.3. Consecuencias de la manipulación
experimental de variables cognitivas. ........................ página 216
7.2.4. La identidad de las variables independientes. .............. página 218
7.3. LA AUTOEFICACIA Y EL VALOR DEL
INCENTIVO: EFECTOS SOBRE
LA CONDUCTA. .................................................................. página 219
7.4. LA MODULACIÓN DE LA REACTIVIDAD
FISIOLÓGICA. . . . . . . . ....................................................... página 222
7.4.2. Comparación con los resultados del equipo
de Wright sobre reactividad cardiovascular. .............. página 227
7.4.3. Otras variables fisiológicas. ......................................... página 230
7.5. INFLUENCIA DE LA AUTOEFICACIA Y EL
VALOR DEL INCENTIVO SOBRE LA
MOTIVACIÓN, EL AFECTO Y LA
PERCEPCIÓN VISCERAL................................................... página 234
7.5.1. Influencia sobre la motivación intrínseca. ................... página 234
7.5.2. Influencia sobre el afecto. ............................................ página 236
7.5.3. Influencia de la autoeficacia y el valor
del incentivo sobre la percepción de
síntomas fisiológicos, y su relación
con el afecto. .............................................................. página 238
7.6. REPRESENTACIÓN GRÁFICO-MATEMÁTICA
DE LA RELACIÓN AUTOEFICACIA x
VALOR INCENTIVO MOTIVACIÓN
/EMOCIÓN. ........................................................................... página 241
7.7. LA COMPETENCIA PERCIBIDA Y SU IMPACTO
MOTIVACIONAL-EMOCIONAL. ...................................... página 244
7.8. ALGUNAS REFLEXIONES TEÓRICAS,
EPISTEMOLÓGICAS Y METODOLÓGICAS
SOBRE LOS RESULTADOS. .............................................. página 247
7.8.1. Magnitud de los efectos de las variables
cognitivas. Son importantes las expectativas
en los procesos afectivos y motivacionales? .............. página 247
7.8.2. Es la autoeficacia un epifenómeno? ............................ página 248
7.8.3. Son los cambios fisiológicos asociados
a la manipulación cognitiva un epifenómeno?........... página 250
11
7.8.4. Disponer de una alta autoeficacia,
es siempre más adaptativo? ...................................... página 253
7.9. LIMITACIONES METODOLÓGICAS DE NUESTRA
INVESTIGACIÓN Y PROSPECTIVA. ................................ página 255
12
Introducción
No conocemos la realidad,
sino la realidad sometida
a nuestra forma de interrogarla
W. Heisenberg
14
Introducción
I. INTRODUCCIÓN
16
Introducción
17
Introducción
18
Introducción
nos han sugerido algunas de las hipótesis, así como nos han inspirado en la
interpretación de los resultados obtenidos.
19
Introducción
Indicar por último que, a pesar de que este documento es el producto final de
un trabajo de investigación de laboratorio, con todas las connotaciones de experimento
básico que esto conlleva, no debe perderse la perspectiva y se debe recordar que, el
objetivo de nuestro equipo de investigación consiste en aportar alguna información
clarificadora acerca de un conjunto de fenómenos, vagamente conexionados o
estudiados, y etiquetados por algunos como estrés o procesos de adaptación
humana, en su relación con los estados de salud y enfermedad. Sería deseable que el
conocimiento teórico que se pueda aportar, desde la línea de investigación que este
trabajo representa, sirviera para inspirar el diseño de herramientas de intervención
psicológica en el campo de la salud más específicas y eficientes o, al menos, sirviera
para comprender y predecir mejor el éxito (o fracaso) terapéutico de determinadas
estrategias de intervención cognitivo-conductuales ya existentes. Sin embargo, somos
conscientes de la dificultad de extrapolación de los resultados de este trabajo de
investigación empírica a la vida real, debido, precisamente, a su carácter experimental
y de laboratorio.
20
II. PARTE TEÓRICA
25
Parte teórica
CAPÍTULO 1.
AUTOEFICACIA, EXPECTATIVAS DE
RESULTADOS Y VALOR DEL INCENTIVO:
EFECTOS MOTIVACIONALES Y EMOCIONALES.
26
Parte teórica
27
Parte teórica
1.3. AUTOEFICACIA.
28
Parte teórica
29
Parte teórica
1.2. En segundo lugar, dentro del uso de control percibido como una
etiqueta descriptora de ese amplio espectro de constructos, más o menos
emparentados, que acabamos de citar, conviene señalar que disponer de un
control percibido moderadamente alto (incluso si es algo sesgado o ilusorio), en
líneas generales, se considera positivo, en tanto se cree que amortigua los
efectos de los potenciales estresores e incrementa el ajuste psicosocial del
individuo (Fernández Castro, 1996).
30
Parte teórica
3.1. El control global que el sujeto cree que es capaz de ejercer sobre el
conjunto de sus propias conductas.
3.2. El control global que el individuo cree que sus conductas ejercen
sobre los estímulos del entorno (Fernández Castro y Edo, 1994).
31
Parte teórica
Dicho de otra forma: una orientación hacia la internalidad supone creer que los
sucesos experimentados son consecuencias de la propia conducta del individuo; pero
la internalidad no implica necesariamente controlabilidad. Es decir, un individuo
puede creer que, en general, los resultados dependen de las conductas efectuadas, pero
32
Parte teórica
puede sentirse, en general, poco competente para llevarlas a cabo. Esto podría explicar
por qué la competencia percibida es mejor predictora del estrés o la desadaptación que
el locus de control (Fernández Castro, Blasco, Doval, Álvarez y Sanz, 1997).
Asimismo, los autores de este trabajo indican que los sujetos de mayor
competencia percibida parecen ser menos vulnerables a los efectos disruptores de los
estímulos que son fuente de estrés. Especialmente relevante parece ser la relación
entre competencia percibida y depresión. Este efecto se aprecia incluso cuando se
efectúa un control estadístico de la internalidad, lo cual significa que es el matiz de
control percibido el que, fundamentalmente, tiene relación con el estrés y la depresión.
Congruentes con estos resultados son los hallados por Fernández Castro,
Rovira, Jiménez y Torralba (1996), en un estudio que compara la adaptación
psicosocial entre padres con hijos afectados de deficiencia mental y padres cuyos hijos
no manifiestan este trastorno; el trabajo muestra que ese evento vital, por sí solo, no
repercute en el nivel estrés. Sin embargo, los padres de mayor competencia percibida,
tanto si tienen o no hijos discapacitados, son los que menor número e intensidad de
síntomas de estrés presentan.
33
Parte teórica
34
Parte teórica
Asimismo, autores como Kirsch (1985) han sugerido que las expectativas de
resultados hacen referencia a dos acepciones bien diferenciables que suelen
confundirse:
35
Parte teórica
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Parte teórica
37
Parte teórica
eventos que éste experimenta, y fue formulado por Rotter (1954) dentro de su Teoría
del Aprendizaje Social. La creencia de que los eventos que acontecen o afectan a un
sujeto son enteramente dependientes de la ejecución conductual es denominada locus
de control interno, reservando la denominación de locus de control externo a la
creencia de que, en general, los resultados dependen más, o fundamentalmente, de
causas poco controlables y relativamente impredecibles, como la suerte, el azar y la
acción de otras personas.
38
Parte teórica
1. Por una parte, es un reflejo del tono hedónico y, por tanto, de la experiencia
afectiva, que induce un determinado estímulo o conjunto de estímulos.
Por lo tanto, el valor del incentivo refleja la anticipación cognitiva del afecto
que el sujeto cree que experimentará como consecuencia de la aparición de una
estimulación particular, fruto de la emisión de una conducta particular.
39
Parte teórica
las que...
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Parte teórica
41
Parte teórica
conductual de un sujeto, éste tiende a ejecutar aquellas para las que se percibe más
competente (Betz y Hackett, 1981). Desde su apreciación subjetiva, las conductas
asociadas a una mayor autoeficacia son las que permiten al individuo disponer de un
mayor control sobre el medio (Bermúdez y Pérez, 1989). Por otro lado, este efecto de
la autoeficacia está limitado a aquellas situaciones en las que el sujeto decide las
conductas que va a ejecutar; es decir, aquellas situaciones en las que dispone de
control de elección (Averill, 1973).
42
Parte teórica
presentado, o bien como muy capacitado, o bien como poco capacitado, para una tarea
consistente en la ejecución de una actividad de resistencia muscular estática
(levantamiento de una pierna hasta formar un ángulo recto con el suelo y
mantenimiento de esta posición). Los resultados indican que los sujetos de mayor
autoeficacia tienen una mayor persistencia en la conducta, cuantificada mediante el
tiempo total de resistencia antes de abandonar libremente su ejecución (Weinberg,
1985). Además, tanto la autoeficacia manipulada experimentalmente como la
autoeficacia preexistente (es decir, previa a las estrategias de manipulación
experimental) son predictores del rendimiento expresado en persistencia (Weinberg,
Gould, Yukelson y Jackson, 1981).
43
Parte teórica
44
Parte teórica
la motivación intrínseca que la autoeficacia. Esto, a nuestro parecer, podría ser debido
a que la percepción de éxito integra apreciaciones contextuales y específicas, tanto de
capacidad percibida como de expectativas de resultados. Posiblemente, es el
equivalente a la competencia percibida en el campo de las expectativas específicas.
45
Parte teórica
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Parte teórica
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Parte teórica
cualquier individuo, existe una falta de contingencia entre sus acciones y los estímulos
reforzadores (ni yo ni nadie controla el entorno), y corresponde, desde la
perspectiva de la teoría cognitivo-social, a una baja expectativa de eficacia y una baja
expectativa de resultados.
48
Parte teórica
También la ansiedad social parece estar vinculada a los juicios que efectúan los
sujetos acerca de su habilidad para interactuar de forma óptima y oportuna con los
demás. Según un trabajo de Kazdin (1979), efectuado con sujetos sometidos a
diferentes estrategias de modelado, se encontró una correlación significativa entre el
nivel y la fuerza de la autoeficacia, evaluada tras la intervención, y las medidas
subjetivas y conductuales de asertividad.
49
Parte teórica
sujetos que valoraban como altamente relevantes las consecuencias del fracaso (valor
incentivo alto) mostraban valores más elevados de ansiedad. En este estudio se indica
que la autoeficacia y el valor del incentivo también intervienen en otras dimensiones
del afecto, como la tristeza/depresión. En particular, se produce un incremento de la
intensidad del componente experiencial de esta emoción cuando la autoeficacia es
baja y el valor del incentivo (en este caso, las consecuencias del fracaso en la
conducta) es alto; es decir, existen indicios de interacción entre ambas variables sobre
la tristeza-depresión, tal y como postula Bandura (1978b, 1982).
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Parte teórica
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Parte teórica
CAPÍTULO 2.
REACTIVIDAD FISIOLÓGICA PERIFÉRICA
55
Parte teórica
diferenciar entre los tejidos, órganos y sistemas regulados por el sistema nervioso
somático, de los controlados por el sistema nervioso autónomo.
o bien...
2. la actividad de órganos sometidos a control por el sistema nervioso
autónomo, ya sea la rama simpática, como las glándulas sudoríparas (resistencia
electrodérmica, conductancia, potencial cutáneo) o por el efecto conjunto simpático-
parasimpático, como el sistema cardiovascular (frecuencia cardíaca, presión arterial,
gasto cardíaco, temperatura periférica, etc).
56
Parte teórica
que van a ser objeto de estudio en el presente trabajo. Todos ellos son ya clásicos en la
literatura psicofisiológica, por lo que no nos detendremos en describirlos de manera
exhaustiva. Remitimos a los manuales más difundidos (Coles, Donchin y Porges,
1973; Greenfield y Sternbach, 1986) para una mayor profundización en la materia.
psicológico es la que se produce en las palmas de las manos o en las plantas de los
pies, puesto que cumple una función anti-abrasión que está fuertemente ligada ver con
la ejecución de conducta abierta (locomoción, manipulación y asimiento de objetos,
etc.). No resulta tan relevante, en cambio, el estudio de la sudoración de otras partes
del cuerpo, que responde a la necesidad de regulación de la temperatura interna del
organismo (Fowles, 1986).
La actividad de las glándulas sudoríparas está controlada únicamente a través
de la rama simpática del sistema nervioso autónomo, siendo el único tejido que,
estando inervado por esta rama autonómica, recibe terminaciones sinápticas
colinérgicas (Navarro, 1992). La actividad sudomotora puede también evaluarse a
través de la conductancia cutánea, que es el inverso de la resistencia (según la ley de
57
Parte teórica
Por otra parte, parece que en los últimos años se está imponiendo más la
utilización de la medida de conductancia (Cacioppo y Tassinary, 1990), debido a que
este parámetro tiende a establecer relaciones lineales con las variables psicológicas,
mientras que la resistencia establece con éstas funciones no lineales (por ejemplo,
logarítmicas). Nosotros, como se comenta en el método (capítulo 5), hemos optado
por la utilización de la resistencia electrodérmica, debido a que el aparato que
disponemos es de intensidad constante. Por otra parte, nada se opone a que,
eventualmente, efectuemos la transformación de este parámetro a medidas de
conductancia, si es que aparecieran funciones no lineales.
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Parte teórica
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Parte teórica
producida en músculos adyacentes. En nuestro caso, optamos por hacer una medición
conjunta de la actividad de los músculos frontales (situados en la frente). Esta
musculatura está fuertemente ligada a la expresión emocional.
60
Parte teórica
Partiendo de esta premisa, Cannon enunció una teoría de las emociones, según
la cual estas son indiferenciables respecto de los cambios fisiológicos que se derivan
de las mismas, teniendo estos cambios una función de aportación de recursos
energéticos proporcional a la demanda de la conducta desencadenada por la emoción
(Vila y Fernández, 1.990).
61
Parte teórica
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Parte teórica
En este trabajo, los autores asumen que estas distintas formas de responder
fisiológicamente a situaciones de reto/amenaza constituyen, por sí mismas, una
diferencia individual. A nuestro juicio, sin embargo, tales diferencias podrían también
ser el efecto resultante de evaluaciones subjetivas como la expectativa de eficacia y el
valor del incentivo.
63
Parte teórica
1. En las tareas o situaciones que requieren una alta dedicación y demanda
atencional, se produce un incremento de la concentración sanguínea de noradrenalina,
lo que indica una liberación masiva a nivel de médula suprarrenal, y una pequeña
descarga adrenérgica.
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Parte teórica
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Parte teórica
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Parte teórica
CAPÍTULO 3.
ACTIVIDAD COGNITIVA/EVALUATIVA Y REACTIVIDAD
FISIOLÓGICA.
3.1 INTRODUCCIÓN.
En los últimos años hemos asistido a un cambio, cualitativamente importante,
aunque aún incipiente, en el campo de la psicofisiología. Desde una perspectiva más
clásica y consolidada, el interés de los investigadores en este campo se hallaba
focalizado en la relación funcional entre las condiciones ambientales a las que era
sometido el organismo y los cambios conductuales y fisiológicos que de ello se
derivaban. Por tanto, se pretendía explicar la conducta (y los procesos en ella
involucrados) en términos de las manipulaciones instrumentales que el investigador
efectuaba sobre las condiciones ambientales a las que eran sometidos los individuos
objetos de estudio (Toro, 1983).
69
Parte teórica
2. Por otra parte, Bandura (1.986) postula una relación de proporcionalidad
inversa entre la percepción de autoeficacia y la reactividad fisiológica. De esta forma,
bajos niveles de autoeficacia han de generar incrementos de activación biológica
mayores, en el momento de ejecutar la conducta operante.
70
Parte teórica
71
Parte teórica
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Parte teórica
1. La primera fase consitía en un registro del nivel de base en que se medían
tanto las variables independientes como las dependientes.
2. En la segunda fase, los sujetos interactuaban con el objeto fóbico (una
serpiente) a fin de ir adquiriendo un progresivo incremento de su capacidad percibida
para enfrentarse al estímulo amenazante
3. En la tercera fase, los sujetos volvían a efectuar la interacción con el objeto
generador de fobia tras recibir un entrenamiento (mastery) dirigido a maximizar su
percepción de eficacia.
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Parte teórica
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Parte teórica
de investigación.
76
Parte teórica
Por otra parte, en algunos trabajos aparecen resultados que indican una relación
entre autoeficacia y reactividad fisiológica diferente a la postulada por Bandura:
77
Parte teórica
78
Parte teórica
instrumentalidad de la misma.
Del conjunto de investigaciones llevadas a cabo por este equipo parece emerger
la idea de que la frecuencia cardíaca y la presión arterial sistólica y diastólica parecen
incrementarse en los sujetos de manera proporcional a la dificultad de la tarea que
están ejecutando, hasta el límite en que esta dificultad supera la capacidad percibida
por el sujeto, nivel a partir del cual la reactividad cardiovascular decrece
dramáticamente. Esto indica que el efecto de la percepción de dificultad de la tarea
sobre la activación cardiovascular depende del nivel de percepción de habilidad.
Asimismo, los resultados empíricos de este equipo (Wright y Dill, 1.993;
Wright y Gregorich, 1.989; Wright, Shaw y Jones, 1.990; Wright, Williams y Dill,
1.992) muestran como los efectos fisiológicos de la percepción de dificultad de la
tarea sobre la reactividad cardiovascular dependen de la instrumentalidad de esta
tarea. Cuando la instrumentalidad de la conducta es alta, los sujetos muestran
incrementos de frecuencia cardíaca y presión sistólica directamentes proporcionales a
la percepción de dificultad. En cambio, cuando la instrumentalidad de la conducta es
baja, parece no existir ningún efecto diferencial de la percepción de dificultad sobre la
reactividad cardiovascular (la instrumentalidad es definida com la utilidad de la
conducta para controlar los estímulos -reforzadores- del entorno; como se comentó
anteriormente, es evidente su analogía o solapamiento con el concepto de expectativas
de resultados).
Wright, Shaw y Jones (1990) parecen haber constatado que el valor del
incentivo y la percepción de dificultad de la tarea tienen un efecto interactivo en la
determinación de la reactividad autonómica: cuando el valor del incentivo es alto, un
aumento de la dificultad de la tarea supone mayores cambios fisiológicos (frecuencia
cardiaca y presión sistólica); en cambio, cuando el valor incentivo es bajo, la
dificultad de la tarea parece no tener un efecto significativo sobre la reactividad
autonómica.
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Parte teórica
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Parte teórica
Por otra parte, no parece posible describir un panorama tan simple, en el que,
en cualquier contexto, ante cualquier conducta a desarrollar y para todo ajuste
fisiológico, se reproduzca la relación de proporcionalidad inversa entre autoeficacia y
reactividad postulada por Bandura (1982). En primer lugar, conviene destacar que el
estudio de Sanz y Villamarín (1996), indica que la autoeficacia y el valor del
incentivo tienden a determinar la reactividad autonómica, pero no la reactividad
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Parte teórica
Asimismo, este resultado es compatible con los obtenidos por Obrist (1976),
quien sugiere una divergencia entre el control ejercido por el sistema nervioso central
sobre la reactividad autonómica y sobre la actividad somática en condiciones de
afrontamiento activo. Los resultados indican que, en ese control disociado, participan
la autoeficacia y el valor del incentivo.
Por otra parte, conviene, a nuestro juicio, efectuar una objeción respecto del
grueso de investigación llevada a cabo hasta el momento acerca de la relación entre
variables cognitivas y reactividad biológica periférica. En muchos de estos estudios se
ha trabajado asumiendo el supuesto de una activación fisiológica inespecífica que
entra en contradicción con el fraccionamiento de respuestas puesto de manifiesto en
numerosos trabajos empíricos y que no parece idóneo para analizar los cambios
específicos que se produce en los distintos sistemas y órganos.
82
Parte teórica
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Parte teórica
con alta autoeficacia y bajo valor incentivo son los que presentan un mayor
rendimiento. Por otro lado, los resultados también indican que los sujetos que mejor
rinden son lo que presentan un perfil ajustes fisiológico específico: una mayor
reducción de la resistencia electrodérmica (indicando mayor activación sudorípara) y
un incremento mayor de la frecuencia cardíaca. Para ajustarse a una hipótesis de
consistencia total (o transitividad) en esta tríada cognitivo-fisiológico-conductual,
debería haberse observado que los sujetos de alta autoeficacia y bajo valor incentivo
presentasen una mayor reactividad, tanto sudorípara como cardíaca. Sin embargo, se
observa que estos sujetos presentan un perfil de cambio fisiológico que,
aparentemente, es el que debería producir el peor de los niveles de rendimiento
posibles (baja reactividad cardíaca y alta reactividad dérmica). Por tanto, se detecta
una grave inconsistencia, que impide sostener las hipótesis arriba formuladas.
2. ...el rendimiento está determinado parcialmente por los ajustes fisiológicos
experimentados por los sujetos durante la ejecución conductual no determinados por
las variables cognitivas anteriormente citadas
En resumen, los resultados de este trabajo indican que los ajustes fisiológicos
subyacentes a la valoración de la capacidad del sujeto (autoeficacia) y al grado de
aversión de las consecuencias del fracaso (valor del incentivo), no tienen efecto sobre
el rendimiento conductual, a pesar de que dicha valoración repercute, tanto sobre la
intensidad de la conducta manifiesta, como sobre la eficacia en la ejecución.
84
Parte teórica
Por otro lado, no parece del todo justificable atribuir todos los cambios
fisiológicos observados en nuestra investigación a las necesidades de consumo
energético requeridas para la ejecución de la conducta, dado que las tareas
habitualmente requeridas a los sujetos (pruebas de concatenación de palabras, de
tiempo de reacción, de razonamiento matemático, etc.) implican una actividad
muscular de muy poca intensidad y muy localizada, y una gran actividad cognitiva de
tipo lingüístico; ninguna de las dos actividades justifica los grandes ajustes
fisiológicos observados en el conjunto de sujetos de nuestro experimento, por lo que
tales cambios no pueden ser exclusivamente explicados en términos de preparación
para la acción.
Además, nos parece más que dudoso que estos cambios fisiológicos tan
específicos cumplan la función de ajustar la actividad de los diferentes sistemas a las
demandas conductuales de los sujetos, dado que todos efectúan la misma conducta (es
decir, el afrontamiento activo a la situación estresante a la que eran expuestos los
sujetos sólo se podia hacer de una manera). Conviene tener en cuenta que los sujetos,
en estos experimentos, disponen de la posibilidad de ejercer control sobre los
estímulos, pero no tienen control de elección sobre las conductas. Por ejemplo, no
existe la posibilidad de abandonar el experimento una vez se había iniciado (por tanto,
de hacer conductas de huida).
85
Parte teórica
86
cambios fisiológicos que manifiesta el sujeto durante dicha conducta de evitación.
Aunque se encuentra una correlación alta y significativa entre tensión/ansiedad y
percepción de síntomas fisiológicos, la metodología utilizada no permite hacer
inferencias sobre la relación causal entre ambas. En cualquier caso, este resultado es
compatible con un supuesto efecto de la autoeficacia y el valor del incentivo sobre el
estado afectivo a través de los cambios fisiológicos autopercibidos. Esta vía de
relación vincula la reactividad fisiológica, que es un fenómeno eferente, con la
percepción de síntomas, que es un fenómeno aferente. Debe demostrarse la existencia
de esa relación. En resumen, los resultados obtenidos en este trabajo, aportan indicios
acerca del efecto que puede tener sobre el estado afectivo la autopercepción de los
cambios autonómicos generados por la evaluación que efectúa el individuo acerca del
contexto instrumental.
Como anticipo al capítulo de plantemamiento, proponemos que los resultados
obtenidos en los trabajos comentados nos inducen a cuestionarnos lo siguiente:
1. si los cambios fisiológicos debidos a los juicios sobre la eficacia para
efectuar la conducta y sobre el valor de sus consecuencias tienen un
efecto sobre el estado emocional...
2. ...posiblemente a través de la autopercepción de síntomas;
3. si la autoeficacia y el valor del incentivo influyen sobre la ejecución
conductual a través, o independientemente, de sus efectos fisiológicos;
4. si la reactividad fisiológica que afecta a la ejecución de la conducta es
debida, total o parcialmente a los juicios de autoeficacia y el valor del
incentivo.
87
III. PARTE EMPÍRICA
88
Parte empírica
CAPÍTULO 4.
PLANTEAMIENTO EXPERIMENTAL
91
Parte empírica
92
Parte empírica
(valor del incentivo alto) o no (valor del incentivo bajo) de la aparición de un estímulo
aversivo contingente al fracaso conductual. La autoeficacia, en este caso, fue
únicamente evaluada, pero no manipulada experimentalmente. Los resultados
indicaron que...
A pesar de esto, no se pudo determinar con claridad que los ajustes fisiológicos
derivados de las expectativas actuasen como mediadores en el efecto que éstas ejercen
sobre la conducta; por lo tanto, no se pudo precisar la funcionalidad de la reactividad
fisiológica gobernada cognitivamente como de preparación para la acción.
93
Parte empírica
94
Parte empírica
2. Los cambios operados por los juicios de eficacia sobre la reactividad
fisiológica periférica no tienen por qué ser de la misma magnitud y dirección en todos
los órganos, tejidos o sistemas fisiológicos. Posiblemente, estos ajustes converjan en
el denominador común de preparar al individuo para la conducta a desarrollar.
95
Parte empírica
96
Parte empírica
5. La mayoría de trabajos en los que se estudian los efectos fisiológicos de las
variables cognitivas, imponen tareas a los sujetos que implican la ejecución de
actividad motora. Por este motivo, no se puede discernir con claridad si los cambios
fisiológicos detectados son independientes de la conducta instrumental, o bien si son
una consecuencia de ésta. En este útimo caso, nos encontraríamos con la circunstancia
de que, los registros de reactividad fisiológica efectuados durante la ejecución de la
97
Parte empírica
98
Parte empírica
CAPÍTULO 5.
MÉTODO
5.1. SUJETOS.
El reclutamiento de sujetos se llevó a cabo entre los alumnos de primer curso
de psicología de la Universitat Autònoma de Barcelona (1). Todos los interesados se
inscribieron en una hoja de reclutamiento, y recibieron una llamada telefónica del
investigador, a fin de...
1. ...ratificar su voluntad de 1. El reclutamiento tuvo lugar en 8 grupos de
participación, prácticas, de reducido número de alumnos.
Además de disponer de una cohorte de
2. convenir la fecha y la hora individuos cuantitativamente suficiente, se
pretendía también que el sesgo de la muestra
de la sesión, y fuera lo más pequeño posible. Aunque no
3. recibir instrucciones sobre disponemos de información acerca del posible
efecto de distintas metodologías de reclutamiento
la conducta a seguir durante el sobre las características de la muestra, partimos
periodo previo a la sesión del supuesto de que los sujetos más
predispuestos a la participación en cualquier
experimental. Mediante estas investigación podrían presentar algunos rasgos
consignas, que tenían por objeto diferenciales, como mayor necesidad de
estimulación (búsqueda de sensaciones) o mayor
reducir el posible impacto de algunos extraversión. Esto posiblemente conduce a que,
cuanto menor sea el porcentaje de sujetos que
hábitos de conducta sobre las
acepten intervenir en un procedimiento
variables sujetas a estudio en este experimental, respecto del conjunto de personas
a las que se les demanda su participación, mayor
trabajo, se les instó a que... sea el sesgo de la muestra. En la medida en que
se buscaba reducir ese sesgo, se diseñó una
estrategia de reclutamiento que debía ser
3.1. ...evitaran, durante suficientemente persuasiva como para motivar a
las 2 o 3 horas previas a la participación al mayor porcentaje posible de
entre los sujetos potenciales. De esta forma, se
la sesión experimental, consiguió el concurso de aproximadamente un
el consumo de 40% de las personas a las que se les demandó su
participación.
sustancias psicoactivas,
como tabaco, café,
refrescos de cola, té y alcohol (sin embargo, se les comentó que era
referible proceder al consumo moderado de tales sustancias antes que
99
Parte empírica
5.2. INSTRUMENTOS.
5.2.1. Aparatos.
En la parte experimental de esta investigación se emplearon los siguientes
100
Parte empírica
recursos tecnológicos:
1. Un microordenador compatible Jeppsen, dotado de un procesador Intel
486, de 4 Megabytes de memoria RAM, y de una pantalla de baja radiación y de 60
Hz. (Hertzios) de frecuencia de refresco. Asumió el estatus de ordenador de
interacción con el sujeto experimental, para lo cual estaba dotado del programa
informático Tesitask, que se describe con posterioridad. Asimismo, este ordenador se
utilizó para el almacenamiento de los datos conductuales y cognitivos registrados en
cada sesión, para lo que disponía del programa informático Compulet-2, que se
describe posteriormente.
101
Parte empírica
4. Un amplificador de
actividad mioeléctrica EMG-905, y 3. El amplificador EMG-905 dispone de
circuitos de filtrado, que eliminan las frecuencias
un juego de 3 electrodos de Ag-AgCl de onda fuera del rango característico de la
(plata-cloruro de plata), ambos de actividad eléctrica de las fibras musculares, que
suelen constituir el denominado ruido (Carrobles
Letica Instruments, mediante los que y Godoy, 1987). Asimismo, el dispositivo
se obtuvo un electromiograma del dispone de varias constantes de integración, que
permiten promediar la señal en segmentos de
paquete muscular frontal (3). Los corta duración temporal. Se eligió la constante de
integración de 150 msegs., que es la propuesta
electrodos, de superficie y planos, para paquetes musculares pequeños (Letica
disponen de una superficie activa de Instruments, 1984a).
12 mm. de diámetro; dos de los
electrodos son activos y el tercero es
de referencia o de masa.
4. El amplificador LE-135 no dispone de
circuitería de filtrado, dado que no recibe una
5. Un cardiotacómetro señal eléctrica directa, sino la transducción
eléctrica de una onda mecánica (el flujo
Cardioback LE-135, y un sanguíneo pulsátil). Además, presenta cierta
pletismómetro de célula fotoeléctrica, latencia de respuesta, por lo que los cambios
fásicos de la frecuencia cardíaca quedan
ambos de Letica Instruments. El amortiguados; los de mayor frecuencia no llegan
a ser detectados. Por este motivo resulta muy
foto- pletismómetro está diseñado adecuado para efectuar registros de estado
para detectar cambios en el flujo fisiológico a largo plazo y para la detección de
cambios tónicos; por este motivo fue utilizado en
sanguíneo de las falanges distales de nuestra investigación.
los dedos de la mano, señal mediante
la que se cuantifica la frecuencia cardíaca (4).
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Parte empírica
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Parte empírica
7.2. Aunque el aparato viene inicialmente dotado por el proveedor de un tubo de goma que conecta
el manguito con la bomba de aire, éste fue reemplazado, debido a su corta longitud (de 50 cms.) por
uno de mayor tamaño (150 cms.) y mayor rigidez. Pruebas empíricas mostraron que el error de
medición descrito por el fabricante, de 3 mm/Hg (milímetros de mercurio), se redujo, en promedio,
a 1 mm/Hg al sustituir el tubo de conexión (este error es tanto más bajo cuanto mayor es la
frecuencia cardíaca del sujeto).
104
10. Un temporizador-promediador AVG LI-1010, de Letica Instruments. Es
un aparato intermediador que recoge cualquier señal analógica, la integra según una
constante de tiempo efectuando su promediación, la transforma en un valor que
expresa unidades de medida estándar, y emite esta señal a través de una salida
analógica a intérvalos regulares de tiempo, mediante un temporizador variable. En el
presente estudio su entrada recibía la señal del amplificador de temperatura TMP- 805,
y la señal de salida iba a parar a la impresora LI 3330, efectuándose una integración de
señal nula (el valor de salida era igual al valor de entrada) y estableciendo una salida
de datos cada 30 segs.(es decir, la frecuencia de muestreo era de 0.033 Hz).
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Parte empírica
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Parte empírica
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Parte empírica
9. En la creación del programa se puso especial cuidado en sus aspectos formales. Por ejemplo,
para incrementar la atención del sujeto hacia los cambios de pantalla, a fin de reducir la pérdida de
información captada y de respuestas emitidas por éste, pero evitando a la vez la elicitación de
reflejos de orientación asociados a cambios estimulares bruscos, se buscó un efecto especial de
transición entre pantallas (efecto fade), que es lento y progresivo, y que emula la transformación
de una pantalla gráfica en la siguiente. Por otro lado, se escogió una combinación de colores que
permitiera dar mayor contraste al texto y los gráficos, facilitando la rapidez de lectura: sobre fondo
azul oscuro, texto amarillo con borde y/o sombra negros. Los textos especialmente relevantes se
enfatizaron mediante recuadros de color celeste o con sombreados grises. Se escogió la letra de
mayor facilidad de lectura disponible en la versión de Harvard Graphics utilizada para crear el
programa (letra executive). El tiempo de presentación de cada pantalla estaba dentro del rango [7-
15] segs., siendo el mínimo que, según pruebas preliminares, garantizaba que un 100% de sujeto
pudieran leerlo y comprenderlo. Esta frecuencia de refresco de imagen, acompañada del efecto de
transición fade, imprimió lentitud al transcurso del programa, lo cual se pensó que podía ser
relevante para la reducción de la ansiedad preexperimental y, por lo tanto, para conseguir una
línea de base en los parámetros afectivos y fisiológicos de la mayor validez posible.
Para facilitar la compresión de cada pantalla, se estudiaron con detalle sus elementos
infográficos. Por ejemplo, la estructura espacial y estilo de los componentes de los textos (preguntas,
alternativas de respuestas, etc.) se mantuvo idéntica durante todo el programa. Para indicar que el
sujeto debía dar respuesta a alguna cuestión o problema, las etiquetas de las alternativas de respuesta
(numéricas o alfanuméricas) eran enfatizadas por iconos que simulaban botones de aparato
electrónico. Además, parte de la información fue emitida mediante iconos de fácil reconocimiento; de
esta forma se indicó el inicio de cuestionarios y de tareas, el tipo de teclado a utilizar (numérico o
alfanumérico), la forma de rectificar errores o la finalización del tiempo para responder a cada uno de
los ensayos constituyentes de la tarea experimental.
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Parte empírica
111
Parte empírica
5.2.3. Cuestionarios.
Debido a la
11. La diferencia fundamental entre el formato original
estandarización del (en soporte impreso) y el nuevo formato electrónico de
procedimiento experimental, los cuestionarios radica en la cantidad de información
que el sujeto ve simultáneamente. Mientras en el sistema
todos los cuestionarios convencional se presentan todos los ítems y sus
administrados, excepto el alternativas de respuesta en una misma hoja, el programa
Tesitask presenta sólo un ítem a la vez, sin posibilidad de
cuestionario de credibilidad volver a leer ni los ítems anteriores ni sus respuestas
CR, debieron ser adaptados a asociadas, y con la rectificación de respuesta limitada al
ítem recién contestado. Siempre que fue posible, se
formato electrónico, para su presentaron juntos en una misma pantalla el enunciado
exhibición en la pantalla del del ítem y todas sus alternativas de respuesta. En algunos
cuestionarios, sin embargo, las alternativas de respuesta
ordenador de interacción, seguían a la pantalla del enunciado. Este recurso se
integrados dentro del programa utilizó únicamente cuando el tamaño de letra imposibilitó
la inclusión de toda la información en una misma
informático Tesitask, y para su pantalla, puesto que se pensó esto que podía dificultar las
contestación mediante teclado, respuestas del sujeto y fomentar la contestación al azar.
En esta investigación, todos los elementos diferenciales
a través de los codificadores de entre las versiones originales de los cuestionarios y sus
adaptaciones en formato electrónico hicieron que el
eventos Compulet-5 (11). estudio de sus cualidades psicométricas tuviera una gran
Además, debió procederse a la importancia.
adaptación al catalán de
algunos de los cuestionarios, al
ser ésta la lengua vehicular del
experimento. Los instrumentos utilizados se describen a continuación:
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Parte empírica
todas las subescalas originales con una alta fiabilidad. Los dos cuestionarios permiten
la evaluación de 5 componentes afectivos: ira-cólera, tristeza-depresión, tensión-
ansiedad, vigor y fatiga. La estructura factorial asigna 3 ítems a la evaluación de cada
uno los cinco componentes, en ambas versiones. Según los autores de la adaptación
castellana, las fiabilidades de las subescalas son, según el coeficiente alfa de
Cronbach, de =0.80, =0.79, =0.78, =0.70 y =0.81, para la depresión, vigor,
cólera, tensión y fatiga, respectivamente, en la versión abreviada A, y de =0.83,
=0.75, =0.80, =0.71 y =0.79 en la versión B. Además, la estructura factorial
permite generar un indicador global, cuya fiabilidad es de =0.77 y =0.70 para las
versiones A y B, respectivamente. Este índice general expresa la intensidad de afecto
o emocionabilidad.
2. Cuestionario PSF-abreviado. Fue diseñado por Sanz (1994) para medir la
percepción de síntomas fisiológicos, como constructo unidimensional. Consta de siete
ítems indicadores de síntomas característicos de estrés (por ejemplo, sequedat de
boca). El sujeto debe indicar la intensidad de cada síntoma en una escala tipo Likert
de 5 categorías, cuyos valores extremos son gens (nada) y moltíssim
(muchísimo). El enunciado del ítem y las alternativas de respuesta aparecen en una
misma pantalla. Este cuestionario, estaba aún en proceso de estudio psicométrico en el
momento de efectuar el presente trabajo.
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Parte empírica
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Parte empírica
enunciado.
115
Parte empírica
7.1. Por una parte, se pretendía estudiar las causas que explican las
diferencias individuales respecto al impacto que tiene el feedback sobre
la ejecución en el cambio de la autoeficacia.
7.2. Por otro lado, se pretendía detectar a los sujetos que no atribuían
credibilidad al procedimiento, a fin de descartarlos en algunos o todos
los análisis estadísticos.
Junto a cada uno de los tres ítems del cuestionario, aparecían cuatro
alternativas de respuesta, que indicaban posibles pensamientos o reflexiones que el
sujeto
116
Parte empírica
5.3. LABORATORIO.
El laboratorio donde se efectuaron todas las sesiones experimentales consta de
dos compartimentos adyacentes: la sala de control y la sala experimental.
1. La sala de control, donde se ubicaba el investigador y todos los
instrumentos de registro.
117
Parte empírica
2. Por otro lado, la información 14. Esta supervisión, en tiempo real, de
las variables fisiológicas, permitió
permitía la construcción en pantalla a tiempo
detectar errores en las señales, que
real, de ventanas gráficas donde aparecía la tuvieron su origen en fallos de los
transductores, de las conexiones o en
evolución en el tiempo de cada variable y su bloqueos de ordenador de control. Las
valor en sistema decimal, lo que permitía al anotaciones efectuadas en tiempo real de
esos fallos permitieron depurar los
investigador comprobar la correcta ubicación archivos de datos antes de proceder al
de los electrodos y la correcta detección de la análisis estadístico de los mismos.
señal durante cada una de las sesiones (14).
Por su parte, el amplificador de TMP-805 de temperatura periférica estaba
conectado al temporizador-promediador AVG LI-1010, y éste a la impresora térmica
120
Parte empírica
121
5.4. PROCEDIMIENTO.
5.4.1. Descripción sintética del procedimiento experimental. Diseño
Experimental.
Dada la complejidad del procedimiento parece conveniente, para su mejor
comprensión, hacer una descripción sintética previa que defina sus rasgos generales,
estableciendo su estructura de manera simple, antes de pasar a descripción
microanalítica de todos sus elementos componentes.
123
Parte empírica
Cada sesión, que era individual, constaba de una serie de maniobras previas a
la parte experimental, como la acomodación del sujeto, la colocación de electrodos y
transductores y la verificación del instrumental; al finalizar la parte experimental, se
ponían en práctica una serie de rutinas de reversión del proceso, a fin de preparar
posteriores sesiones.
124
Parte empírica
incentivo, cada una de las cuales presenta dos niveles, alto y bajo, definidos
operacionalmente por la información que recibían los sujetos, y que iba dirigida a la
manipulación de tales variables. De esta forma, se obtuvieron 4 grupos
experimentales:
Autoeficacia alta, valor del incentivo alto (n=21).
Autoeficacia baja, valor del incentivo alto (n=18).
Autoeficacia alta, valor del incentivo bajo (n=21).
Autoeficacia baja, valor del incentivo bajo (n=18).
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6.6. Por último, el termistor de temperatura se ubicaba en la yema del dedo pulgar de
la mano izquierda (19).
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Parte empírica
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Parte empírica
22. El investigador 2 inicializaba los dos codificadores de eventos desde la sala experimental,
mientras que el investigador 1 inicializaba los dos ordenadores desde sus respectivos teclados,
situados en la sala de control, así como el cronómetro; el investigador 1 verificaba la sincronización
a través del espejo unidireccional, y ésta se repetía si no resultaba óptima. Los investigadores
efectuaron un adiestramiento previo en sincronización, donde se evidencian que el error entre
aparatos inicializados por un mismo investigador era inferior a 0.05 segs., mientras que el error
entre investigadores era inferior a 0.3 segs. La sincronización daba inicio al programa de interacción
con el sujeto y al registro de las variables sujetas a estudio. El error de sincronización en las
sesiones experimentales fue de 0.2 segs. de promedio, siendo el rango de error de [0.05-0.80] segs.
132
Parte empírica
13. Control de timing del programa de interacción Testitask: por los mismos
motivos aducidos al comentar la importancia de la sincronización de dispositivos, se
efectuó un seguimiento, en todas las
sesiones, de la duración del programa 23. Fue necesario efectuar este control de
timing porque la velocidad de procesado de un
Tesitask de interacción con el sujeto. programa gráfico como éste puede variar según
Se efectuó un seguimiento del ajuste al las fluctuaciones en el espacio ocupado en el
disco duro o en la memoria RAM.
timing previsto en varios momentos de Afortunadamente, no fue necesario descartar
las sesiones, según las mediciones ninguna sesión experimental del análisis
estadístico debido a desajustes en el timing.
preliminares efectuadas, que
demostraron que los 4 subprogramas
(uno para cada grupo experimental) tenían exactamente la misma duración total y
parcial (1746 segs.)(23).
133
Parte empírica
una serie de rutinas que tenían por objeto preparar la siguiente sesión
experimental y la protección de los archivos de datos, que se efectuaban
en la siguiente secuencia:
134
Parte empírica
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Parte empírica
4. Registro fisiológico basal. 25. Para evitar la distracción del sujeto respecto
El programa informaba a continuación de la pantalla, con el riesgo de pérdida de
información que podía conllevar sobre las
del inicio de un tiempo de descanso; se actividades posteriores, el programa fue
explicaba que el objetivo era proceder refrescando la pantalla a intervalos de 30
segundos, exhibiendo alternativamente dos
al registro de las variables fisiológicas estímulos neutros, cado uno de los cuales se
en reposo. En el momento de inicio de repitió 5 veces.
136
Parte empírica
que el sujeto inició su posición estática en la butaca experimental (25). Esta fase tuvo
una duración de 5 min. y 30 segs. El tiempo acumulado desde el principio del
programa fue de 21 min.
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Parte empírica
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Parte empírica
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Parte empírica
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Parte empírica
8. Manipulación del valor del incentivo. Puesto que el valor del incentivo se
definió operacionalmente, para el presente estudio, como la cantidad de estimulación
aversiva que el sujeto creía contingente al fracaso conductual, la manipulación
consistió en una descripción del valor nociceptivo de la presunta estimulación
eléctrica, que era diferenciada para los dos grupos de manipulación experimental de
esta variable cognitiva:
141
Parte empírica
(levantar el brazo derecho) para advertir que algo no iba bien y, consecuentemente,
abandonar el experimento. Esta manipulación pasó por el filtrado de un experto en
aspectos éticos de la investigación en Ciencias de la Conducta, quien indicó que, tanto
ésta como el resto de las estrategias procedimentales empleadas, eran perfectamente
compatibles con las normas éticas de la APA (American Psychological Association).
142
11. Ejecución de la tarea (28). Los sujetos efectuaron, uno tras otro, una serie
de 15 ensayos de cálculo aritmético, formalmente idénticos a los que aparecieron en el
ejemplo y en las dos series de ensayos previos (de manipulación de la autoeficacia), y
de una dificultad similar. El tiempo de respuesta posible, definido por la latencia de
aparición del icono de finalización de ensayo (reloj) respecto del momento de
aparición de la pantalla del problema, fue de 7 segs. Se impuso este intervalo a fin de
impedir que dieran siempre respuesta correcta. En caso contrario, la calidad de
respuesta sería un valor constante, puesto que, con tiempo ilimitado, resulta posible
resolver todos los problemas para la totalidad de sujetos, y sólo se dispondría, como
parámetro de rendimiento, la latencia de respuesta. El tiempo de respuesta fue
determinado según los resultados de pruebas preliminares, que mostraban que, en una
muestra no significativa, ese tiempo era suficiente para resolver el 65% de problemas,
aproximadamente.
ha pretendido ejercer sobre las variables extrañas al experimento, las cuales ya han
sido tratadas, aunque de forma no sistemática, en páginas precedentes. Asimismo,
enunciaremos las variables contaminantes principales, que han quedado al margen del
control experimental.
Antes de ello, sin embargo, conviene recordar que, en cualquier investigación,
no todas las variables extrañas son conocidas y, de las conocidas, no todas son
controlables (McGuigan, 1978). Asimismo, en nuestro esfuerzo de depuración
experimental nos hemos encontrado con algo que hemos denominado
incompatibilidades de control, consistente en la imposibilidad de ejercer control
directo simultáneamente sobre dos factores que se suponen agentes productores de
variabilidad en las variables dependientes. Un ejemplo de esto se ha producido con el
control de variables extrañas que pueden influir sobre la reactividad fisiológica
periférica. En la literatura aparecen dos factores que pueden influenciar la reactividad
biológica ante situaciones de estrés: los ritmos circadianos y la temperatura externa, es
decir, la temperatura fuera del laboratorio (Johnson y Lubin,1972). La estrategia más
adecuada para controlar la primera consiste en efectuar todas las sesiones
experimentales a la misma hora del día, estableciendo una franja horaria lo más
estricta posible. El control de la segunda implica concentrar todas las sesiones en el
menor número de días posibles, con el fin de que no existan variaciones estacionales
entre sesiones (es decir, que unas sesiones se realicen en invierno y otras en verano).
La solución que dimos a esta incompatibilidad fue la de priorizar la concentración
144
Parte empírica
1. En caso de que un análisis estadístico confirme una supuesta relación entre
dos o más variables, se produce una mejora de la apreciación de la magnitud de los
efectos de las variables independientes sobre las dependientes.
145
Parte empírica
146
Parte empírica
3.1. Duración de las sesiones y las fases. Por los motivos aducidos
anteriormente, se puso un gran énfasis en el control de estas fuentes de
variabilidad (ver apartados 5.2 y 5.4.).
147
Parte empírica
148
Parte empírica
más fiables, por que se las ha considerado objetivas y variables duras, lo cierto
es que su registro dista mucho de ser perfecto. En todo el proceso que va desde la
detección de la actividad fisiológica hasta la representación de la misma en un
indicador matemático, existen una serie de elementos técnicos y humanos que
distorsionan la información. En la presente investigación, hemos identificado varios
tipos distintos de fuentes de variabilidad que pueden haber distorsionado los datos
fisiológicos. A continuación de efectúa una rápida enumeración de las mismas:
1.1. Falta de precisión en la transducción de los fenómenos biofísicos
(presión arterial, temperatura, actividad cardíaca, actividad
respiratoria) o en la detección de la actividad electrofisiológica
(actividad electrodérmica, actividad mioeléctrica).
1.2. Fluctuaciones en la tensión de la red eléctrica.
149
1.3. Movimientos accidentales de los cables y alargos conectores.
1.4. Permutación (debida a error humano) de cables conectores entre
distintos aparatos.
1.5. Interferencias producidas por los campos electromagnéticos de los
propios aparatos de detección y registro o de otros aparatos
(tubos fluorescentes, pantallas de ordenador, etc.)
1.6. Polarización de los electrodos (especialmente los de actividad
electrodérmica).
1.7. Ruido producido por la circuitería interna de los amplificadores de
señal.
1.8. Error en la conversión analógica/digital (estimada en 0.5
unidades de medida).
1.9. Errores humanos en la manipulación del instrumental.
1.10. Cambio en la sensibilidad de los amplificadores (es decir, en la
cantidad de amplificación que efectúan los amplificadores).
1.11. Falta de simultaneidad entre registros (afecta al registro de la
presión arterial sistólica y diastólica, así como al registro de la
temperatura periférica).
1.12. Desincronización en el activado de los aparatos.
Deben también tenerse en cuenta las fuentes de variabilidad residual que
reducen la fiabilidad de los cuestionarios utilizados en la presente investigación.
Algunas de ellas son internas a los sujetos, como las tendencias de respuesta, la
contestación al azar o las respuestas de complacencia. Otras son externas, como los
errores que introdujo el experimentador en la transformación de datos (tratamiento
previo de los datos antes de ser utilizados en el análisis estadístico).
2. Fuentes de variabilidad no controlada que afectan a los sujetos.
Proponemos una lista no exhaustiva de factores que, a nuestro juicio, pueden haber
afectado a las variables dependientes del estudio y que no han sido controladas:
2.1. Humedad relativa del aire, tanto externa como interna (laboratorio).
2.2. Estilos atribucionales de los sujetos
2.3. Expectativas de eficacia pre-experimentales
2.4. Incongruencia entre el feedback interno y el feedback externo, en la
prueba previa de cálculo aritmético, en base a la cual se
150
manipulaba la autoeficacia. Por definición, este factor es
incontrolable, debido a que el feedback externo es completamente
aleatorio.
2.5. Diferencias individuales en la sensibilización a los sensores. Por
ejemplo, en algunos sujetos, el hinchado del manguito de presión
arterial resulta muy molesto, mientras que en otros la molestia es
mínima.
2.6. Neuroticismo. Esta variable puede influir en la construcción de los
juicios acerca del valor de los incentivos, así como en la
reactividad fisiológica periférica (Sanz, datos no publicados).
151
Parte empírica
CAPÍTULO 6.
RESULTADOS
Los datos que ha sido utilizados en los análisis estadísticos son de dos tipos.
Algunos de ellos son datos brutos; con esto queremos decir han sido usados
directamente en los análisis estadísticos, sin que se haya efectuado sobre ellos
alteración alguna respecto de su registro original durante las sesiones experimentales;
un ejemplo de éstos son los valores de frecuencia cardíaca máxima y mínima durante
el primer ensayo de la prueba de cálculo. Sin embargo, la mayoría de datos sufrieron
transformaciones de mayor o menor profundidad antes de su utilización en los análisis
estadísticos inferenciales; por ejemplo, los datos provenientes de cuestionarios (como
el POMS, en sus dos versiones) fueron sometidos a un proceso de estudio
psicométrico, que derivó en la creación de escalas y subescalas de medida integradas
por distintos ítems.
155
Parte empírica
Todos los datos, tanto los fisiológicos, como los conductuales o los cognitivos,
pasaban por dos procesos de depuración.
1. El primero de ellos consistía en una serie de pequeñas rutinas informáticas,
que permitían verificar la correcta detección de los datos, identificar y crear algunas
variables directas, y eliminar datos que no estuvieran comprendidos en un rango de
valores predefinido.
156
Parte empírica
los ítems inconsistentes, con lo que se definían las escala definitivas, que eran
expresadas en puntuaciones directas (suma de ítems); en ningún caso se emplearon
puntuaciones tipificadas. Para las subescalas de estado de ánimo del POMS se
crearon, además, índices de variación pre-post tarea, que reflejan la fluctuación
emocional experimentada por los sujetos durante la ejecución de la prueba de cálculo
respecto de la fase de reposo (se asume que el POMS-B es indicador del estado
anímico durante la prueba de cálculo, mientras que el POMS-A lo es del estado de
ánimo en reposo).
6.1.1.3. Variables fisiológicas (ver figura 3).
Antes de explicar el procesamiento de los datos fisiológicos, convendrá
justificar la estrategia que se utilizó para adquirir los datos, es decir, la metodología de
muestreo, ya que:
157
Parte empírica
158
Parte empírica
159
Parte empírica
160
Parte empírica
realización de las sesiones experimentales (de 1.5C) y que, además, se cumplió con
suma precisión el timing previsto (recodamos que hubo una desviación de 1 min. en
la duración total de las sesiones y de 0.8 segs. durante la parte experimental de la
sesión), decidimos que el único criterio de exclusión de los sujetos sería el
cuestionario de credibilidad. La forma de emplear este cuestionario como filtro sigue
una lógica puramente estadística: debía escogerse el criterio más estricto que
pudiéramos utilizar, para garantizar la pureza de la muestra, pero manteniendo un
número de sujetos suficientemente elevado como para dar potencia a las pruebas de
estadística inferencial.
161
Parte empírica
6.1.2.2. Características
diferenciales de la muestra
estadística.
162
Parte empírica
163
Parte empírica
164
Parte empírica
componentes principales.
165
Parte empírica
166
Parte empírica
167
Parte empírica
intermediación o modulación de
la competencia percibida en el
éxito conseguido en tales
manipulaciones experimentales.
6.3.1. manipulación de la
autoeficacia.
Los sujetos a los que se
les dio un feedback falso sobre
su ejecución en los ensayos de
previos (que según se les explicaba, eran ensayos irrelevantes, de prueba), indicando
que habían rendido por encima de la mediana de la población general, presentaron un
valor de autoeficacia medida a
través de cuestionario (M=5.9)
superior al grupo de sujetos a los
que se les dio la información
contraria (M=4.4; t=3.57; g.l.=
43; p=0.001; escala de rango [0-
9]; ver figura 7).
Por otra parte, la
manipulación dirigida a
modificar el valor del incentivo
(descripción de la estimulación
eléctrica) no afectó a la
autoeficacia (M=4.9 y M=5.2 en
la escala de autoeficacia, para los grupos experimentales de valor del incentivo alto y
bajo, respectivamente; t=-0.8; g.l.=43; p=0.42).
168
Parte empírica
169
Parte empírica
Por otra parte, la puntuación en la escala de valor del incentivo negativo fue la
misma para los grupos de manipulación de autoeficacia alta y baja (M=3.5 y M=4.1,
respectivamente; t=-0.79; g.l.=47; p=0.43).
170
Parte empírica
cuatro subpoblaciones que surgen al diferenciar a los sujetos según sus puntuaciones
en los cuestionarios de autoeficacia y de valor del incentivo negativo.
6.4.1. comparación del estado de ánimo entre grupos de manipulación del valor
del incentivo y de la autoeficacia (ver tabla 4).
La autoeficacia y el valor del incentivo no diferencian a los sujetos en las
puntuaciones de vigor, fatiga, tensión ni tristeza cólera en la versión A del POMS,
que fue pasada antes de la manipulación experimental. En la versión B del POMS,
que refleja el estado de ánimo durante la tarea (este cuestionario se contesta
inmediatamente después de la finalización de la misma), aparecen diferencias en las
puntuaciones en tensión y fatiga, aunque no en tristeza-cólera ni en vigor. Los
resultados indican que tanto el valor del incentivo como la autoeficacia afectan a la
percepción de fatiga post-tarea: cuanto mayor es el valor del incentivo, mayor fatiga
se experimenta (F(1,45)=5.80; p=0.20), pero cuanto mayor es la autoeficacia menor
experiencia de fatiga que presentan los sujetos (F(1,45)=7,69; p=0.008). Por otra parte,
en la descomposición de la variabilidad de la tensión, sólo aparece como significativo
el efecto del valor del incentivo (F(1,47)=3.95; p=0.05); cuanto mayor es el valor del
incentivo, mayor es la tensión (M=11,1 y M=9,7 para los grupos experimentales de
valor incentivo alto y bajo, respectivamente).
vigor-A vigor-B fatiga-A fatiga-B fatiga-AB emo-B
incentivo alto,
autoeficacia alta 10.0 7.5 4.8 5.3 0.5 33.0
incentivo alto,
autoeficacia baja 10.3 8.2 3.8 7.2 3.4 38.0
incentivo bajo,
autoeficacia alta 10.2 8.7 3.7 4.4 0.7 32.1
incentivo bajo,
autoeficacia baja 9.6 8.4 3.4 5.5 2.1 34.1
efectos de -valor
significación incentivo
estadística -autoefica -autoefica
hallados cia cia
171
Parte empírica
incentivo alto,
autoeficacia alta 5.3 9.4 1.0 6.1 10.8 4.6
incentivo alto,
autoeficacia baja 4.6 10.0 2.2 6.6 11.6 4.9
incentivo bajo,
autoeficacia alta 5.0 8.8 0.9 6.5 9.9 3.4
incentivo bajo,
autoeficacia baja 5.4 9.1 0.6 6.1 9.5 3.5
efectos de
significación
estadística -valor -valor
hallados incentivo incentivo
tabla 4. Puntuaciones tónicas y de cambio en las subescalas de estado emocional del POMS
A y B, en función de la autoeficacia y el valor del incentivo, definidos por los grupos
experimentales de la investigación.
172
Parte empírica
incentivo alto,
autoeficacia alta 11.4 8.4 3.4 4.6 1.2 31.7
Incentivo alto,
autoeficacia baja 9.7 8.6 4.1 5.9 1.9 37.4
incentivo bajo,
autoeficacia alta 9.8 8.8 4.4 5.0 0.6 30.3
incentivo bajo,
autoeficacia baja 9.7 7.8 3.4 5.2 1.8 31.9
efectos de interacción
significación autoefica
estadística cia*incenti
hallados vo
incentivo alto,
autoeficacia alta 5.0 7.2 -0.2 6.6 10.6 4.0
incentivo alto,
autoeficacia baja 4.8 9.9 1.8 6.3 11.4 5.1
incentivo bajo,
autoeficacia alta 5.4 8.6 0.3 6.1 8.3 2.2
incentivo bajo,
autoeficacia baja 5.3 8.8 0.5 6.3 10.0 3.7
efectos de interacción interacción -valor -valor
significación autoefica autoefica incentivo incentivo
estadística cia*incenti cia*incenti -autoefica -autoefica
hallados vo vo cia cia
tabla 5. Puntuaciones tónicas y de cambio en las subescalas de estado emocional del POMS
A y B, en función de las puntuaciones en las escalas de autoeficacia y de valor del incentivo.
173
Parte empírica
174
Parte empírica
controlando estadísticamente la
tensión inicial -tensión/A).
La variable de evolución
pre-post para esta dimensión
afectiva presenta un panorama
similar. En primer lugar, se
aprecia que los 4 grupos de
sujetos experimentan un
incremento en ansiedad ante la
ejecución de la tarea (M=6.3
versus M=10.4 antes y después de
la tarea, respectivamente; t=-4.06;
g.l.=47; p<0.0005). El incremento de la tensión, sin embargo, es mayor cuanto más
amenazantes son las consecuencias del fracaso (M=5.1 versus M=3.0,
respectivamente, para los grupos de nivel alto y bajo en la puntuación de valor del
incentivo; F(1,42)=5.11; p=0.02); contrariamente, el incremento de tensión es menor
cuanto mayor es la autoeficacia es alta (M=2.8 y M=4.5 para autoeficacia alta y baja,
respectivamente; aunque este efecto no llega al nivel de significación estadística
(F(1,42)=3.4; p=0.07).
175
Parte empírica
La competencia
percibida (figura 12) también
predice los valores de la escala
global del POMS (EMO) en su
pase B (post-tarea): un mayor
nivel de competencia percibida
va asociado a una menor
puntuación en intensidad
emocional global (M=31.4 vs.
M=37.9 para competencia
percibida alta y baja,
respectivamente; t=-2.78;
g.l.=43; p=0.008).
176
Parte empírica
177
Parte empírica
En primer lugar, ninguno de los efectos simples del valor del incentivo en cada
178
Parte empírica
Asimismo, la dimensión de
la motivación intrínseca
denominada dedicación-
implicación (dedic) parece
depender solamente de la
autoeficacia: los sujetos del grupo
de autoeficacia alta presentan una
mayor experiencia subjetiva de
dedicación por la tarea de cálculo
(M=9.95 vs. M=8.13; F(1,44)
=13.44; p=0.001; figura 16).
Por otra parte, sobre la escala de motivación intrínseca general (figura 17),
aparece un efecto principal de la autoeficacia y un efecto de interacción de ésta con la
competencia percibida que obliga al estudio de los efectos simples. Estos muestran el
siguiente panorama: los sujetos de autoeficacia alta presentan mayor motivación
intrínseca que los de autoeficacia baja (M=27.4 vs. M=19.3) cuando la competencia
179
Parte empírica
180
Parte empírica
Por otra parte, para los indicadores de calidad de ejecución se han efectuado
dos estimaciones, una que hace referencia al conjunto de 15 problemas que
constituyen la prueba, y otra que sólo integra los problemas de dificultad alta. La
dificultad de los problemas ha sido determinada de forma empírica. Los etiquetados
como de dificultad alta son el 40% de problemas que mayor índice de dificultad
presentaron para la muestra estadística de sujetos; en este estudio, se ha usado como
indice de dificultad el inverso del porcentaje de sujetos de la muestra experimental
que son capaces de resolver el problema. Por ejemplo, si sólo el 30% de sujetos de la
muestra resuelve un determinado problema, el índice de dificultad del mismo es: D=1-
0.3=0.7].
En la figura 18 se resumen los indicadores de ejecución que se han utilizado en
el presente estudio.
181
Parte empírica
182
Parte empírica
F(1,45)=7.76; p=0.008). En
cambio, entre los grupos de bajo
valor incentivo, la autoeficacia no
afecta al número de respuestas
incorrectas emitidas de manera
estadísticamente significativa
(figura 20).
6.7.2.2. Eficiencia
La eficiencia en la ejecución conductual hace referencia a la cantidad de
resultado o éxito obtenido, respecto del esfuerzo conductual efectuado. Por lo tanto, es
una evaluación de costes-beneficios. Hemos operacionalizado este fenómeno de dos
formas diferentes: en primer lugar, mediante el número de respuestas correctas
(beneficio) dividido por el número de respuestas contestadas (coste), lo que hemos
denominado eficiencia. Este parámetro indica el porcentaje de respuestas correctas
respecto el total de intentadas. Y, por otro lado, el número de respuestas incorrectas
dividido por el número de respuestas correctas, lo que hemos denominado ratio coste-
beneficio y que es, conceptual, aunque no matemáticamente, el inverso de la
eficiencia (puesto que eficiencia=correctas decidido por correctas más incorrectas).
Podría parecer más lógico que hubiéramos generado este índice al revés, esto es,
número de respuestas correctas partido por número de respuestas incorrectas; sin
embargo, esto producía una indeterminación en algunos sujetos, dado que el
denominador (incorrectas) era 0. Puesto que la mayoría de los sujetos en los que
183
Parte empírica
El análisis de la variancia
indica que la eficiencia depende
de la autoeficacia y de la
interacción de ésta con el valor
del incentivo (figura 21). Al
analizar los efectos simples, se
comprueba que los sujetos de alta autoeficacia tienen una eficiencia de un 77.9%,
frente a tan sólo el 58.7% de los sujetos de autoeficacia baja (F(1,45)=6.25; p=0.01),
cuando el valor del incentivo es alto. Entre los grupos de incentivo bajo, los
promedios de eficiencia son prácticamente idénticos (68.2% y 66.7% para los grupos
de autoeficacia alta y baja,
respectivamente). Este efecto
sereplica y amplifica para los
problemas de dificultad alta
(figura 22): la eficiencia media
de los grupos de autoeficacia alta
y baja es, respectivamente, del
71.0% y 43.0% (F(1,45)=5.07;
p=0.02). Este efecto se produce
cuando el valor del incentivo es
alto, pero no en el caso contrario
(60.1% y 59.2% de eficiencia
para los grupos de autoeficacia
alta y baja, respectivamente).
184
Parte empírica
185
Parte empírica
promedio de respuesta.
La diferencia de
promedios entre los grupos de
autoeficacia alta y baja cuando el
valor del incentivo es alto se
hace más acusada entre los
problemas de dificultad elevada
(figura 25; M=9.2 vs. M=4.6,
respectivamente; se puede decir
que la potencia del primer grupo
es el doble que la del segundo;
F(1,45)=5.84; p=0.02). Entre los
grupos de valor incentivo alto,
existe una diferencia de potencia
favorable a los sujetos de
autoeficacia alta (M=6.7 vs. M=5.3), aunque no es estadísticamente significativa.
186
Parte empírica
una respuesta psicofisiológica depende del nivel tónico basal; es decir, cuanto mayor
el valor en reposo, más pequeñas serán las respuestas a estímulos (Coles, Gratton,
Kramer y Miller, 1986). Esto obliga a que, antes de efectuar cualquier análisis
estadístico, se estudie la correlación entre ambos parámetros. Con el fin de corregir
este sesgo, siempre que se hemos detectado esta correlación en algún parámetro
fisiológico, hemos adoptado la estrategia consistente en introducir el valor basal como
covariante del valor de reactividad. De todas formas, aunque hemos efectuado la
mayoría de análisis inferenciales con indicadores de reactividad, en muy pocos ha sido
necesario introducir la covariante, dado el incumplimiento generalizado de la ley de
los valores iniciales.
187
Parte empírica
El análisis de la variancia
de la reactividad global (figura
26) indica que, tanto los efectos
principales de la autoeficacia y el
valor del incentivo, como su
interacción, son estadísticamente
significativas. El incremento de
la presión sistólica parece ser
inversamente proporcional a la
autoeficacia y directamente
proporcional al valor del
incentivo. Al efectuar un análisis
de efectos simples, se observa
que los sujetos de autoeficacia alta tienen un menor incremento de la presión sistólica
(M=4.4 vs. M=18.6 mmHg; F(1,35)=14.0; p=0.001), pero únicamente cuando el valor
del incentivo es alto. La tendencia es la misma entre los grupos de valor del incentivo
bajo, aunque la diferencia no es estadísticamente significativa (M=5.2 vs. M=8.7
mmHg, para los grupos de autoeficacia alta y baja, respectivamente).
188
Parte empírica
Por otra parte, la autoeficacia parece ser el único factor que explica
parcialmente la variabilidad de la reactividad total, aunque la diferencia observada
entre grupos no llega a ser estadísticamente significativa.
6.8.1.3. Diferencial de
presión.
La diferencia de presión
sistólica-diastólica, factor que
determina la cantidad de flujo
sanguíneo circulante en la
periferia de organismo, fluctúa
durante la ejecución de la tarea,
respecto del momento previo,
dependiendo de un efecto
principal de la autoeficacia y de
la interacción (en el límite de la
189
Parte empírica
190
Parte empírica
191
cardíaca. Así, se han estudiado los posibles efectos de los factores de manipulación
experimental sobre el pico de frecuencia cardíaca que, de forma sistemática, se
produce en la mayoría de sujetos justo al inicio de la tarea (es decir, la frecuencia
cardíaca máxima detectada durante el primer ensayo). En el análisis de la variancia se
detecta un efecto principal de la autoeficacia y una tendencia a la interacción entre
ésta y el valor del incentivo que conviene estudiar. El análisis de efectos simples
indica que los sujetos de autoeficacia baja presentan un pico de frecuencia cardíaca
mucho más alto que los sujetos de autoeficacia alta (figura 31), pero este efecto se
circunscribe únicamente a los grupos para los que el valor del incentivo es alto
(M=108.3 vs. M=88.4 para autoeficacia baja y alta, respectivamente; F(1,43)=10.2;
p=0.003).
193
Parte empírica
Por otra parte, a pesar de que se observa en los promedios de los cuatro grupos
experimentales resultados paralelos a los anteriores confirmando la interacción de la
autoeficacia y el valor de incentivo, no se observa ningún efecto significativo de estas
variables sobre la reactividad observada durante la tarea respecto de la fase de reposo.
En particular, se produce
una disminución acusada de la
resistencia electrodérmica (M=-
13.83 kOhms.; t=-6.49; g.l.=46;
p<0.0005) entre estas dos fases
que se prolonga o mantiene hasta
el final de la sesión
experimental, con cierta
tendencia a irse incrementando
de forma paulatina (se produce un incremento global de 1.9 kOhms desde la segunda
serie de ensayos de prueba hasta el final de la prueba de cálculo; t=-2.36; g.l.=46;
194
Parte empírica
p=0.02).
195
Parte empírica
El análisis de la variancia
de la eficiencia muestra una
interacción significativa entre la
frecuencia cardíaca y la
temperatura periférica (figura
36). Al efectuar la
descomposición en análisis de
efectos simples, aparece un
efecto estadísticamente
significativo de la temperatura
entre los sujetos de mayor
incremento de la frecuencia
cardíaca (F(1,42)=7.67; p=0.009).
Para expresarlo de forma simple, indicaremos que uno de los 4 grupos experimentales
presenta una eficiencia muy inferior al resto: mientras que los sujetos de alta
reactividad cardíaca y baja reactividad térmica obtiene un 50.0% de eficiencia, los
demás presentan un rendimientomuy similar, al entorno del 70%. Como se recordará,
los sujetos de valor del incentivo alto y autoeficacia baja presentan el perfil fisiológico
196
Parte empírica
197
Parte empírica
198
Parte empírica
La segunda estrategia
estadística utilizada, el análisis correlacional entre las puntuaciones directas de PSF y
cada uno de los indicadores de estado o cambio afectivo (tabla 7), dibuja un
panorama bastante similar, si bien se verifican algunos de las relaciones que, en el
análisis precedente sólo aparecían como tendencias cercanas a la significación
estadística. La PSF no correlaciona de manera significativa con ninguna de las
dimensiones afectivas cuando se midieron antes de la ejecución de la tarea (POMS-
A), siendo algunas muy próximas a 0.
199
Parte empírica
200
Parte empírica
temperatura temperatura
-0.13
psf -0.14 (n.s.) (n.s.)
201
Parte empírica
CAPÍTULO 7.
DISCUSIÓN
209
Parte empírica
210
Parte empírica
del valor del incentivo) es debido , a nuestro juicio, a la conjunción de dos tipos de
causas: metodológicas y funcionales.
211
Parte empírica
2. En segundo lugar, puede indentificarse una causa funcional que explica,
parcialmente, porqué ante la misma información, unos sujetos han sido influenciados
de forma distinta de otros acerca de su predicción sobre las consecuencias de la
conducta: la interacción entre la competencia percibida y la información externa. El
hecho de que la información con la que se pretende persuadir a los sujetos no afecte a
la valoración de los incentivos asociados al fracaso cuando la competencia percibida
es baja, mientras que sucede lo contrario cuando esta última es alta, podría
interpretarse en el sentido siguiente: una alta competencia percibida es un mecanismo
protector, que atenúa la aversión (anticipada cognitivamente) del fracaso conductual.
En cambio, cuando se dispone de una competencia percibida baja, la información
emitida al sujeto afecta poco a su percepción de amenaza: al margen de los inputs
externos, un individuo de baja competencia percibida tendría tendencia a sentirse, con
mayor frecuencia (tal vez de forma crónica) altamente amenazado. En este sentido,
cabe recordar que la competencia percibida ha sido emparentada con el optimismo,
que es una dimensión estable referente a la valoración global de la valencia de los
212
Parte empírica
Estos resultados, por tanto, tal vez sugieren que la competencia percibida es, en
parte, una disposición global y estable a valorar, de una forma estereotipada, las
consecuencias del comportamiento, y que interactúa con estímulos específicos y
contextuales, generando las expectativas específicas acerca de las cualidades
hedónicas de los estímulos consecuentes a las acciones que el individuo puede llegar a
desarrollar.
213
Parte empírica
pudiera ser evaluada con la suficiente precisión como para constituir, no un agente
causal, pero sí, al menos, un predictor de los fenómenos fisiológicos, conductuales y
cognitivos que son nuestro objeto de estudio.
214
Parte empírica
215
Parte empírica
Además, la mayoría de los sujetos creían que todo esto sucedía en un contexto
(el supuesto objetivo del experimento) que, en realidad, no existía. Por otra parte,
creían estar interactuando con un ordenador, que supuestamente no sólo emitía
información, sino que además les proporcionaba feedback acerca de la calidad de su
comportamiento. Y sin embargo, esta supuesta interacción o comunicación
bidireccional con la máquina era una ilusión diseñada por los investigadores.
Conviene, pues, no perder la perspectiva de que las diferencias en la apreciación o
interpretación de este mundo virtual que hemos reproducido en el laboratorio,
plasmadas en esos dos factores cognitivos denominados autoeficacia y valor del
incentivo, son lo que explica, una buena parte de las diferencias sistemáticas que
hemos observado en todas las dimensiones psicológicas evaluadas: la conductual
(rendimiento en la tarea), la cognitiva (estado de ánimo, percepción de síntomas,
motivación intrínseca) y la fisiológica (reactividad autonómica).
216
Parte empírica
217
Parte empírica
Nosotros consideramos que la segunda vía es más válida, precisamente por que
se puede establecer de una forma más clara la direccionalidad en las relaciones entre
variables. Es más, incluso si no hubiera quedado demostrado que, efectivamente, las
manipulaciones experimentales afectaron a las puntuaciones de las variables que
presuntamente deberían haber quedado afectadas, se podría argüir que el problema
pudiera estar tanto en la falta de eficacia de tales manipulaciones experimentales,
como en la falta de fiabilidad de las escalas de medida de las variables manipuladas
(independientes: autoeficacia y valor del incentivo). aunque, en este caso, las
conclusiones quedarían afectadas, al no poder justificar de forma clara cuál es la
variable o mecanismo mediador entre la manipulación experimental y la variación en
las variables dependientes.
218
Parte empírica
SOBRE LA CONDUCTA.
La autoeficacia y el valor del incentivo son factores responsables de una parte
significativa de la variabilidad de una serie de factores cognitivo-conductuales.
El conjunto de resultados que más fácilmente se pueden describir, por el
enorme paralelismo entre todos ellos, es el referente a los efectos conductuales. Todos
los indicadores de calidad de ejecución, tanto los de eficacia, como los de eficiencia y
potencia, indican que la autoeficacia y el valor del incentivo ejercen su influencia de
manera interactiva. Los sujetos de autoeficacia alta presentan un mayor número de
respuestas correctas, un menor número de respuestas incorrectas, una mayor
eficiencia, ratio coste beneficio y potencia que los sujetos de autoeficacia baja. Sin
embargo, este hecho está asociado únicamente a consecuencias del fracaso conductual
altamente relevantes, es decir, se circunscribe a los grupos de sujetos de valor
incentivo alto.
219
Parte empírica
difíciles, en las que la literatura indica que la activación o motivación excesiva puede
generar un efecto interferidor (Duffy, 1972). Este hecho se refleja en nuestros
resultados de la forma siguiente: los sujetos de baja autoeficacia y alto valor del
incentivo, que presentan los mayores niveles de reactividad fisiológica y afectiva,
sufren de una manera mucho más acusada que los demás el deterioro de la calidad de
la ejecución entre los problemas de mayor dificultad.
220
Parte empírica
Asimismo, nuestros resultados parecen compatibles con los obtenidos por los
equipos de Weinberg y de Schunk (Bandura y Schunk, 1981; Weinberg, 1985;
Weinberg et. al., 1979; Weinberg et. al, 1981), en el sentido de que un incremento en
la autoeficacia supone una mejora en el rendimiento. Sin embargo, nuestros resultados
indican una restricción a la generalización de este fenóneno, puesto que es únicamente
manifiesto cuando las consecuencias de la conducta son relevantes (valor del
incentivo alto).
221
Parte empírica
222
Parte empírica
autoeficacia alta, mientras que apenas experimenta modificación alguna entre los
sujetos de autoeficacia baja.
223
Parte empírica
224
Parte empírica
del reflejo barorreceptor), con una importante reducción del flujo sanguíneo en el
encéfalo y una redistribución de la sangre hacia la periferia (Vila, 1997).
1. En primer lugar, que un sujeto de autoeficacia baja e incentivo alto tiene
una muy alta expectativa de recepción de un estímulo aversivo; para este sujeto podría
resultar más adaptativo prepararse para amortiguar los estímulos punitivos que le
pueden ser administrados o, en el mejor de los casos, ajustar sus sistemas para facilitar
una conducta de huida, que esforzarse en una conducta instrumental de afrontamiento
(coping) activo que le va a reportar un beneficio nulo y un gasto innecesario.
2. En segundo lugar, este sujeto de baja autoeficacia y alto valor del incentivo
presenta un estado anímico, según los cuestionarios POMS (alta ansiedad, fatiga,
tristeza/ira y emocionabilidad general) que puede tener un efecto potenciador de la
respuesta cardíaca de defensa (Vila, 1997)
225
Parte empírica
7.4.2. Comparación con los resultados del equipo de Wright sobre reactividad
cardiovascular.
En general, los resultados obtenidos en nuestra investigación, son equiparables
a los del equipo de investigación de Wright. Globalmente, de los resultados obtenidos
por estos autores, se desprende que el valor del incentivo, la instrumentalidad, la
habilidad percibida y la dificultad de la tarea, establecen su impacto fisiológico de
manera interactiva. De forma similar, nuestros resultados también indican, en general,
que la autoeficacia y el valor del incentivo interaccionan en su influencia sobre la
reactividad fisiológica cardiovascular.
Por una parte, dos estudios distintos (Wright y Gregorich, 1989; Wright et. al,
1992) indican que un incremento en la dificultad de la conducta sólo supone una
mayor reactividad cardiovascular (frecuencia cardíaca, presión sistólica y presión
diastólica) cuando la instrumentalidad (operacionalizada como la probabilidad de que
el fracaso conductual sea seguido de la aparición de un estímulo aversivo) es alta. Si
se tiene en cuenta que, percibir una tarea como difícil es, hasta cierto punto,
equiparable a disponer de una autoeficacia baja, en el sentido de que ambas suponen
esperar una menor probabilidad de éxito, parece claro el paralelismo de estos
resultados con los nuestros.
Otro estudio de este mismo equipo aporta datos que sugieren, también, la
interacción entre la dificultad y el valor del incentivo (Wright et al., 1990). Los sujetos
226
Parte empírica
Estos tres estudios, por lo tanto, indican que disponer de una probabilidad de
éxito (percibido) baja y considerar a las consecuencias de la conducta como altamente
relevantes (valor del incentivo alto) o altamente probables (instrumentalidad de de la
conducta alta), genera un incremento de la reactividad cardiovascular mucho más
acusado que en cualquier otra condición. Estos resultados son plenamente
coincidentes con los de nuestro trabajo.
Por otra parte, los resultados de otras investigaciones (Wright y Dill, 1993,
Wright y Dismukes, 1995), ponen de manifiesto la interacción entre la habilidad
percibida y la dificultad de la tarea sobre la reactividad cardiovascular. Los autores
indican que, cuando el sujeto se cree hábil, un incremento de la dificultad supone una
mayor activación cardiovascular, mientras que, si el sujeto no se considera hábil, un
incremento de dificultad genera una menor activación.
1. una habilidad percibida alta y una dificultad percibida baja equivalen,
aproximadamente, a una autoeficacia alta.
2. una habilidad percibida baja y una dificultad percibida alta equivalen,
aproximadamente, a una autoeficacia baja.
227
Parte empírica
con nuestra hipótesis de que la autoeficacia, por sí sola, no es una buena predictora de
la reactividad fisiológica, y que conviene considerar, en paralelo, el estudio de las
expectativas de resultados (es decir, el valor del incentivo, la instrumentalidad de la
conducta, etc.).
228
Parte empírica
Por otra parte, el fracaso en encontrar una relación de las variables cognitivas
con la electromiografía y la resistencia electrodérmica, contrasta con los resultados
obtenidos en otras investigaciones (Sanz y Villamarín, 1996; Sanz, Limonero y
Villamarín,1996).
229
Parte empírica
2. Los electrodos utilizados son de superficie, por lo que recogen la actividad
músculos adyacentes mucho más potentes que el propio músculo analizado. Esto
siempre exige la depuración de la series de datos registradas. Tal vez, la estrategia
utilizada por nosotros, con este fin, no haya sido la más acertada.
Por otra parte, tanto motivos técnicos como metodológicos podrían ser
aducibles, también, para justificar el fracaso en hallar relaciones de la autoeficacia y el
valor del incentivo con la resistencia electrodérmica:
1. Si bien la temperatura del laboratorio estuvo bastante controlada, habiendo
pocas diferencias entre sujetos, bien es cierto que la temperatura de ejecución del
experimento fue superior a la recomendada en la bibliografía, por los motivos ya
comentados en el capítulo de método (poder tener a los sujetos en manga corta). Los
valores iniciales de la resistencia (al entorno de 60 k) están bastante por debajo de
los que se acostumbran a detectar con nuestros propios instrumentos (entre 100 y 200
k). Cuando existe una sudoración permanente a causa de la temperatura, quedan
enmascarados los cambios debidos a otros factores, si no bloqueados por efecto de la
Ley de los Valores Iniciales (Coles et al., 1986).
230
Parte empírica
Por otra parte, se pone de manifiesto que, en todas las variables fisiológicas
(excepto en la frecuencia respiratoria y el diferencial de presión), se produce una
activación generalizada, que afecta a los 4 grupos experimentales, tanto en las
variables en las que se ha observado una influencia de la autoeficacia y del valor del
incentivo como en las demás. Este fenómeno, como señala Cacioppo (1997, en
prensa), indica que el mero hecho de ejercer una actividad abierta, incluso si no
implica actividad motora, supone una activación fisiológica en paralelo, al margen de
las cogniciones que el individuo puedan realizar sobre la misma o sobre sus
consecuencias.
231
Parte empírica
232
Parte empírica
la competencia percibida es baja. Parece, por otra parte, que entre los sujetos que se
sienten altamente competentes, la autoeficacia no parece ser especialmente predictor
de la motivación intrínseca. Un resultado ciertamente poco esperable, aunque de
sentido común, se obtiene de la comparación entre los 4 grupos en función de la
autoeficacia
y la competencia percibida. La combinación que produce la mayor
motivación intrínseca no es la de una alta competencia percibida y una alta
autoeficacia, sino la de una baja competencia percibida combinada con una alta
autoeficacia.
Haciendo una metáfora, podríamos decir que un vaso de agua quita más la sed
en el desierto del Sáhara que en la región noruega de los Mil Lagos.
Por otra parte, se ha observado que, aquellos sujetos en los que las
consecuencias del fracaso en la conducta son evaluadas como altamente aversivas
(valor del incentivo alto), manifiestan un deterioro de la motivación intrínseca. Este
hecho coincide con los resultados empíricos de investigaciones precedentes (Lepper,
233
Parte empírica
Green y Nisbett, 1973), de las que se desprendió la hipótesis de que una orientación
motivacional extrínseca debe disminuir la motivación intrínseca. La orientación
motivacional extrínseca se caracteriza por que el sujeto tiene la expectativa de que la
conducta irá seguida de determinados resultados, que son tangibles y manifiestos. Por
tanto, su interés estará focalizado sobre la contingencia conducta-resultados, más que
sobre la propia ejecución conductual.
En resumen, podemos indicar que, en general, los resultados obtenidos en
nuestro trabajo empírico coinciden plenamente con aquéllos que sugieren una relación
estrecha entre autoeficacia y el interés y placer experimentados en la ejecución de una
conducta (McAuley, Wraith y Duncan, 1991). Sin embargo, nuestros resultados
sugieren que las expectativas generalizadas de control, representadas aquí por la
competencia percibia, modulan dicha relación.
234
Parte empírica
Los resultados, sin embargo, no son todo lo consistentes que cabría esperar,
respecto a la naturaleza, aditiva o interactiva, de dicha relación. Así, se ha observado
un efecto aditivo de la autoeficacia y el valor del incentivo sobre la fatiga y la
tensión, mientras que estas dos expectativas interactúan en su influencia sobre la
tristeza-ira y la intensidad emocional general.
De todas formas, los resultados que hemos obtenido son similares a los
reportados por otros autores, respecto al papel desempeñado por la autoeficacia sobre
el afecto: disminuye la ansiedad, tanto en su dimensión estado como como en su
dimensión rasgo (Bandura et. al, 1982; Bandura et al., 1983; Balaguer et al., 1990;
McAuley et al., 1994), y disminuye la fatiga (Bozolian et al., 1994).
235
Parte empírica
similares a los encontrados por Davies y Yates (1982). Asimismo, nuestros resultados
respaldan las conclusiones de estos autores, quienes indican que, en la situación de
baja autoeficacia y bajas expectativas de resultados, no debe producirse depresión, a
diferencia de lo postulado en la teoría reformulada de la indefensión (Abramson,
Seligman y Teasdale, 1978).
236
Parte empírica
Por lo tanto, los resultados indican que los sujetos de autoeficacia alta dirigen
su atención fundamentalmente a estímulos vinculados con la tarea, mientras que los
sujetos de autoeficacia baja prestan atención selectiva a otros estímulos, como los
viscerales. Además, es posible que los sujetos de autoeficacia baja e incentivo alto
estuvieran también atentos a los estímulos externos (en este caso, los electrodos de
electromiografía que, supuestamente sevían para aplicar la estimulación eléctrica).
237
Parte empírica
embargo, estos autores sugirieron que la percepción de síntomas era mejor predictor
de la autoeficacia que ésta de la percepción de síntomas, es decir, establecieron una
relación de causalidad inversa a la que nosotros hemos detectado. Sin embargo,
mientras que el nuestro es un estudio experimental, el trabajo de Feltz y Mugno es una
investigación correlacional, en la que se estableció la dirección de causalidad a través
de procedimientos estadísticos (concretamente, un análisis de vías -path analysis).
Esto es, a nuestro juicio, una razón de peso en nuestro favor.
Por otra parte, parece ser que la percepción de síntomas fisiológicos está
relacionada de manera consistente con el estado afectivo. Los análisis estadísticos
efectuados indican que, cuanto mayor es la percepción visceral, tanto más altas son las
puntuaciones de los sujetos en fatiga, tristeza-ira, tensión-ansiedad e intensidad
emocional general. Sin embargo, no es posible atribuir de manera inequívoca, una
direccionalidad a esta relación, debido al procedimiento experimental utilizado. A
pesar de esto, con anterioridad (en este mismo apartado) nos permitimos especular
acerca de la posible relación bidireccional entre los dos elementos.
238
Parte empírica
compatible con nuestros resultados, dada la falta total de correlación que hemos
observado entre la percepción de síntomas fisiológicos y la reactividad fisiológica
periférica. Esta descorrelación ha sido constatada también en otros trabajos empíricos
(Feltz, 1982; Feltz y Mugno, 1983; Steptoe y Vögeler, 1992).
239
instrumentalidad, etc.).
cual expresa que la autoeficacia no tiene efecto sobre la conducta. Conforme el plano
se acerca a nosotros (es decir, se incrementa el valor del incentivo) sufre una creciente
inclinación, lo cual es la plasmación gráfica de que, cuanto mayor es el valor del
incentivo, tanto mayor es la influencia que ejerce la autoeficacia sobre los procesos de
motivación y emoción y, consiguientemente, mayores son las diferencias de promedio
240
Parte empírica
en tales variables entre sujetos de distinto nivel de autoeficacia. Por otra parte, se
puede apreciar que el eje de rotación es totalmente paralelo al suelo, lo cual
corresponde a un modelo en el que el valor del incentivo, por sí solo, no afecta a los
procesos motivacional-emocionales, sino que toda su función es la de modulador de la
autoeficacia.
241
Parte empírica
242
Parte empírica
más sensibles a estímulos contextuales, sino que, además, son más crédulos. Por
contra, los sujetos de alta competencia percibida son más escépticos y, como se acaba
de indicar, aunque crean en la información, ésta repercute menos en su
comportamiento. El efecto conjugado de la credibilidad con la dependencia de
estímulos contextuales parece conferir al sujeto de baja competencia percibida, que
suele mantener un nivel tónico de tristeza e ira alto, una alta labilidad, es decir, su
estado motivacional-emocional puede ser muy fácilmente manipulado.
243
Parte empírica
7.8.1. Magnitud de los efectos de las variables cognitivas. Son importantes las
expectativas en los procesos afectivos y motivacionales?
244
Parte empírica
245
Parte empírica
A nuestro juicio, los resultados que hemos obtenido son bastante sugerentes de
la influencia causal de la autoeficacia. La clave fundamental radica en las
características de la muestra estadística. Como se recordará, los sujetos que fueron
excluidos del análisis estadístico, a causa de su incredulidad hacia la información
proporcionada por los investigadores, disponían de una característica diferencial: Su
autoeficacia correlacionaba de forma clara con el rendimiento obtenido en las series
de prueba, mientras que no tenía nada que ver con falso feedback proporcionado. El
246
Parte empírica
hecho de que, en este grupo, los sujetos de mayor autoeficacia (y alto valor del
incentivo) presentaran un mayor rendimiento no resultaría nada extraño incluso para
los consideran a la autoeficacia como un epifenómeno. Desde tal punto de vista, si el
rendimiento en una conducta es predicho por el rendimiento conseguido en el pasado,
y la autoeficacia es un reflejo de ésta, a su vez la autoeficacia debería predecir el
rendimiento futuro. En el argot bioquímico, la autoeficacia sería un marcador del
rendimiento. Ahora bien: la muestra seleccionada para el análisis estadístico es
radicalmente opuesta a la que acabamos de comentar. Se ha constatado que la
autoeficacia no correlaciona en absoluto con el nivel de rendimiento real de los
sujetos, puesto de manifiesto en las series de ensayos prueba; y, sin embargo, está
fuertemente influenciada por el falso feedback proporcionado por los investigadores.
Un hecho de gran importancia es que los 4 grupos experimentales de la muestra
estadística son absolutamente idénticos en cuanto a rendimiento inicial y, por tanto, se
presume que tienen la misma capacidad de ejecución. Sin embargo, cuando se
manipulan las expectativas de estos grupos de sujetos, aparecen diferencias muy
acusadas en su nivel de rendimiento, lo cual se hace, como se podría prever, aún más
patente entre las tareas de alta dificultad. Cómo admitir estos resultados como
válidos, no fruto de una casualidad, y a la vez mantener el estatus de epifenómeno
para la autoeficacia?.Estos resultados son similares a los hallados en el estado
anímico, puesto que no se observa la más mínima diferencia en ninguna de las
dimensiones del POMS, cuando su versión A fue pasada antes de la manipulación de
la autoeficacia y del valor del incentivo, mientras que son manifiestas la diferencias
entre grupos tras la ejecución da la tarea, en la administración del POMS-B.
A nuestro juicio, este conjunto de resultados son un claro indicador de que la
autoeficacia no es un mero epifenómeno, sino que actúa como un agente causal que
ejerce su influencia sobre la conducta y el afecto.
247
Parte empírica
248
Parte empírica
presenta más que relaciones espúreas con el estado anímico y es un buen predictor de
la calidad de la ejecución.
249
Parte empírica
Ahora bien, podemos hacer dos reflexiones que indican que, tal vez, no
siempre sea así:
250
Parte empírica
251
Parte empírica
alternativas. Por ejemplo en nuestro experimento, lo más adaptativo hubiera sido que
los sujetos de baja autoeficacia y alto valor del incentivo hubieran elegido abandonar
la tarea, esto es, efectuar una conducta de escape de la situación instrumental, en la
que se ha demostrado que fracasaron de forma manifiesta.
252
Parte empírica
3. El tipo de tarea requerida a los sujetos era una conducta muy específica, de
carácter cognitivo, posiblemente de poca validez ecológica Se producirán los mismos
cambios fisiológicos cuando la tarea implique una actividad motriz mucho más
evidente (como, por ejemplo, en una situación deportiva)?
253
Parte empírica
254
IV. CONCLUSIONES
257
Conclusiones
259
Conclusiones
3. Cuando el valor del incentivo afecta de forma independiente a los procesos
antes citados, establece su relación con estos de forma inversa a como lo hace la
autoeficacia: un alto valor del incentivo se asocia con altos niveles y mayores
incrementos tónicos de ansiedad/tensión, con un incremento en la percepción de
síntomas fisiológicos y con una disminución (o interferencia) de la motivación
intrínseca.
260
Conclusiones
instrumental: los sujetos de autoeficacia baja y de valor incentivo alto. Este grupo
presenta los mayores niveles en las dimensiones afectivas de tristeza/ira,
ansiedad/tensión, fatiga e intensidad emocional (factor general), las mayores
puntuaciones en percepción de síntomas fisiológicos, un empeoramiento de la
motivación intrínseca, una pobre ejecución conductual, medida tanto en eficacia como
en eficiencia y potencia (este efecto es aún más pronunciado ante tareas difíciles) y,
por último, presenta una serie de cambios fisiológicos que recuerdan a la respuesta
cardíaca de defensa: mayor incremento de la presión arterial sistólica, de la frecuencia
cardíaca y del diferencial de presión, atenuación del incremento de presión arterial
diastólica, menor disminución de la temperatura periférica y disminución de
frecuencia respiratoria. Sin embargo, esto no significa que, de forma sistemática, se
pueda concluir que, disponer de este perfil cognitivo (baja autoeficacia y alto valor del
incentivo), sea siempre más desadaptativo que cualquiera de los otros tres perfiles.
5. La autoeficacia y el valor del incentivo, no tan sólo son meros predictores
de la conducta y de los procesos subyacentes (motivacionales, afectivos, fisiológicos y
perceptuales), sino que son, en parte, sus agentes causales. Un indicio empírico claro
es el hecho de que los 4 grupos de sujetos experimentales, en los que se ha
comprobado que presentaban un nivel de ejecución idéntico para una conducta
específica, difieran de forma intensa en los logros de ejecución en esa misma
conducta, tras la manipulación experimental de la autoeficacia y del valor del
incentivo.
261
Conclusiones
que éstos generan efectos aferentes y eferentes de manera independiente, tal vez a
distintos niveles neurales.
10. La competencia percibida parece ejercer como modulador del impacto que
tienen los juicios de autoeficacia y del valor del incentivo sobre:
262
Conclusiones
263
Conclusiones
4. Los resultados son claramente compatibles con la hipótesis 4, que sugería el
papel del valor del incentivo como modulador de la relación entre la autoeficacia y la
reactividad fisiológica, la ejecución conductual, la motivación intrínseca, la
percepción visceral y el afecto. Tan sólo los resultados referidos a percepción visceral
y, en parte, el afecto, son contrarios a esta hipótesis.
5. La hipótesis 5 también parece quedar avalada por los resultados obtenidos,
indicativos del papel fundamentalmente modulador de la competencia percibida sobre
la relación entre las expectativas específicas y la motivación intrínseca, el afecto y la
percepción de síntomas.
264
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