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Discurso Religioso

Estudiante:

Edda Yurany Ruiz Perez

Docente:

Melisa Puentes Díaz

Estrategias de expresión y comunicación en Público

Universidad Minuto De Dios

Facultad De Las Ciencias Empresariales

Contaduría Pública

Semestre IX

Lérida, Tolima

2019
Presentación…

¡Me alegra que todos ustedes se encuentre aquí!

En este día tan hermoso, le daremos gracias a nuestro Dios único y todopoderoso…

Dios te damos gracias por bendecir a nuestras familias, por darnos tranquilidad y esperanza
en momentos de angustia, por cada vez que témenos miedo y nos brindas seguridad, por
cada vez que alguno de nosotros perdemos control y volvemos a retomar la dirección, por
las personas a nuestro alrededor que sin ser familia nos ayudan, por cada día que pasa y
compartimos con nuestros seres queridos, por ser nuestro guiador en momentos difíciles,
por permitir superarnos, crecer como seres humanos, por las experiencias, sabiduría,
protección y amor que nos das.

Hoy los invito amar a Dios, y no perder la fe en él.

Los invito a cuidar a la familia, a inculcar valores, a sobre saltar el buen trato, ayudara sus
vecinos, a respetar y tolerar a los demás, a compartir y valorar el sacrificio de los suyos.
Ya es común como los hijos agreden a sus padres, como los abandonan a sus suerte, En el
cuarto mandamiento de la ley de Dios nos dice “Honrarás a tu padre y a tu madre” el cual
nos invita amar, respetar, tolerar, ser solidarios, cariñosos y honestos con las personas que
hacen todo lo posible por bridarnos lo mejor… sus padres.

Así que no temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te
fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa (Isaías 41:10)

En los noticieros observamos que todos los días, en cualquier parte del mundo ocurren
accidentes, mueren inocentes, muchas familias perjudicadas por cambios ambientales,
hogares divididos a causa del alcohol, drogas, y malas decisiones que no solo perjudican
una familia sino que a varias. La intolerancia es una de las principales problemáticas de
nuestro país, los valores ya no se aplican, la fe se está perdiendo, los actos de maldad se
escuchas por en todos lados. Es hora que aquí tomemos conciencia y entendamos que el
camino hacia a Dios no está perdido.
Para cada hogar que ha sufrido pérdidas de un ser querido, perdida financiera, a los que
tienen problemas de salud en capítulo 46 de Salmos, versículo 1 “recuerda que Dios es
nuestro amparo y nuestra fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia”. A
quienes el camino les ha parecido largo e injusto, y que no saben sin continuar o déjalo todo
en salmos 16, versículo 8 rescato “Siempre tengo presente al Señor; con él a mi derecha,
nada me hará caer”.

Dios es nuestro guardián, él sabe nuestro presente y nuestro futuro dejen sus vidas en
manos de él. Él nos guiara al éxito, nos dará una vida llena de felicidad, oportunidades,
salud, sabiduría y grandes historias de vida. Así como se evidencia en Jeremías capitulo29,
versículo 11 “Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor
—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza”.

El amor es la clave para ser más tolerantes, pues abre nuestra mente y corazón para aceptar
a los demás a pesar de sus imperfecciones y diferencias. La biblia nos aconseja en
Colosenses capítulo 3, versículo 13. “De modo que se toleren unos a otros y se perdonen si
alguno tiene queja contra otro. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.”

Recuerden San Mateo 5:3 “Bienaventurados (Felices) los pobres en espíritu, pues de ellos
es el reino de los cielos. San Mateo 5:4 “Bienaventurados los que lloran, pues ellos serán
consolados. San Mateo 5:5“Bienaventurados los humildes, pues ellos heredarán la tierra.
San Mateo 5:6 “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, pues ellos serán
saciados. San Mateo 5:7 “Bienaventurados los misericordiosos, pues ellos recibirán
misericordia. San Mateo 5:8 “Bienaventurados los de limpio corazón, pues ellos verán a
Dios. San Mateo 5:9 “Bienaventurados los que procuran la paz, pues ellos serán llamados
hijos de Dios.

Mi llamado es para reconstruir la fe, amar nuestros seres queridos, respetar a los demás, ser
personas de bien, buscar la felicidad y el crecimiento personal en compañía de Dios; a dejar
en nuestro caminos huellas que sirvan de guía a otros a encontrar la espiritualidad, amor,
paz, y sobre todo creer en Dios. Los invito a que estas palabras toquen sus corazones y
permita saber y comprender que Dios nos ama, quiere que seamos felices y reitero que
Dios nunca los desamparara.
Que Dios los bendiga y valla con ustedes por siempre.

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