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UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

Especialización en Pedagogía
Aportes y corrientes conceptuales sobre la didáctica

IVONNE CAICEDO DUQUE

NATURALEZA Y OBJETO DE LA DIDÁCTICA

Los procesos de enseñanza y aprendizaje son vitales para la definición y la construcción de la


sociedad en todos sus aspectos. Estos procesos permiten la creación, continuidad y
transformación de los saberes, conocimientos y significados que comparten los individuos. En
estos procesos, participan de forma dinámica tres agentes: el que aprende, el que enseña y lo
que se enseña. Estos agentes y sus continuas relaciones están inmersos en un entorno de
niveles macro y micro, con el que interactúan de forma constante.
La práctica pedagógica es el espacio donde se integran estos agentes y se crean y transforman
sus múltiples vínculos. La didáctica se enfoca en estas relaciones generadas al interior del
proceso de enseñanza aprendizaje llevado a cabo en dicha práctica. Responde a inquietudes
sobre el que se enseña, como enseñarlo, a quién y con qué. Su saber se centra en el análisis y
diseño de las estrategias, herramientas y métodos que hacen posible la acción educativa. Sin
embargo, no plantea métodos únicos ni la aplicación de procedimientos repetitivos, sino que
propone el reconocimiento de particularidades en términos de sujetos, espacios y tiempos.

El saber que enseña el maestro tiene que ver con la idea de mundo que él concibe, resultado de
su experiencia y de su interacción social en un contexto histórico particular. El maestro no sólo
transmite un conjunto de datos e información de una disciplina específica, también comunica
un ideal de sujeto y de sociedad, que responde a unos imaginarios particulares determinados
por un entorno.

El estudiante es también un sujeto de saber, con una visión y representación del mundo que ha
construido de acuerdo a su experiencia. Posee diversos modos y fuentes de motivación hacia el
aprendizaje. El maestro responde a las particularidades de cada estudiante y de cada grupo,
sintetizando sus conocimientos, desarrollando estrategias, procedimientos y herramientas, que
le permitan interrelacionar y orientar esos saberes, los propios y los de los estudiantes, hacia la
comprensión y la acción.

Una continua reflexión sobre la intención del maestro en su acción de enseñar y sobre la
motivación del estudiante hacia el aprendizaje, contribuirá a la generación de recursos, y
herramientas que permitan la apropiación, la transformación y construcción de los saberes y
por lo tanto de la cultura y la sociedad.

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