Emprender un negocio se caracteriza por una autonomía e independencia que son
incomparables al de la ocupación de un empleado por cuenta ajena. Independientemente
del trabajo que se realiza, la libertad que otorga el tener tu propia empresa y tomar tus propias decisiones son una gran ventaja que se tiene muy en cuenta a la hora de plantearse el ser emprendedor. Por supuesto la clave del éxito está en saber valorar y hacer uso de esta libertad en nuestro favor y el de la empresa, lo cual no es innato en cada uno, sino que se va desarrollando poco a poco a medida que nos vamos desenvolviendo con más soltura en nuestra nueva actividad. Además, no olvidemos que ser tu propio jefe te permite también seleccionar a las personas que quieres que formen parte de tu equipo de trabajo.
ventajas de ser un emprendedor
Mayor autonomía e independencia. ... La posibilidad de mayores ingresos. ... La satisfacción de crear algo propio y ver como prospera. ... Aportar algo nuevo a tu entorno y ser recompensado por ello. ... Saber administrar la autonomía recién adquirida. ... Inevitables riesgos económicos. esventajas de ser emprendedor Saber administrar la autonomía recién adquirida La autonomía también trae sus inconvenientes, y es que para ser emprendedor hay que exigirse un determinado grado de organización y disciplina para no hundirse a uno mismo de forma rápida y catastrófica. Asimismo, y a diferencia de un trabajador por cuenta ajena, las responsabilidades que se concentran en tu persona son mucho más grandes tanto en número como en dimensión. Las claves para ser un emprendedor de éxito nos exigen saber un poco de todo: administración y gestión empresarial, comercio, marketing, y, por supuesto, ser un as dentro de nuestro área de trabajo. Por otro lado, si piensas que has erradicado completamente la figura del jefe de tu vida, estás equivocado, pues de ahora en adelante tus jefes serán los clientes y la Agencia Tributaria, entre otros. Inevitables riesgos económicos
Otro de los aspectos negativos del emprendimiento es el inevitable riesgo económico al
que nos enfrentamos: todo negocio o actividad empresarial requiere de medios económicos para iniciarse, pero no hay seguro que valga aquí, pues todo emprendedor se arriesga a fracasar al comenzar un nuevo proyecto y perder todo su dinero. Es importante estar preparados y saber evaluar las dificultades que podrían surgir, así como organizar nuestros ingresos de forma responsable hasta que el negocio florezca y alcance una estabilidad que consideremos suficiente. Tampoco está de más tener guardado un plan B en la manga, siempre listo en el caso de que las cosas vayan realmente mal y no quedarnos en la miseria.
Tu tiempo libre siempre sujeto a la carga de trabajo
Ser emprendedor conlleva sacrificar noches sin dormir para sacar el negocio adelante la flexibilidad horaria podría convertirse en tu peor enemiga, aunque es cierto que en teoría eres el que se establece sus vacaciones y los días de trabajo. Pero si hay algún problema o muchísimo trabajo y eres el único que lo puede abarcar, despídete de los fines de semana y de la jornada de 8 horas al día, pues hay que estar siempre dispuesto a hacer todo lo que está en tus manos y más para sacar el negocio adelante. Y en ocasiones, esto podría significar pasar alguna que otra noche en vela.