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La Luna de Avellaneda

de
Fernando Castets
Juan Pablo Domenech
Juan José Campanella

Versión 6.0
1/5/03
1 EXT. KERMESSE - NOCHE 1
Un hombre sube al palo enjabonado. detrás de él, un enorme
cartel de bombitas dice “Luna de Avellaneda”. De un
altoparlante sale la voz de Castillo.

1 INT. GIMNASIO - NOCHE 1


Gran Baile Gran: Carnaval, 1959. Canta Castillo: “Así Se
Baila El Tango”. Decenas de parejas bailando entusiasmadas.

Unos tortolitos a su propio ritmo, mucho más lento y


apretados. El la empieza a besar en el cuello. Es separada
por un señor mayor que dice que “no” con la cabeza. El
hombre lleva a la chica fuera del gimnasio.

Una chica solitaria ve venir a un muchacho que saca a


bailar a las demás. Rebota con todas. Al llegar a ella, el
muchacho sigue de largo. La chica trata de ocultar su pena.

Una pareja de nenitos baila tango como puede. un grupo de


rock espera su turno, aburridos.

2 EXT. KERMESSE - NOCHE 2


8 pibes se descuelgan de la pared de atrás. Los del club
tratan de echarlos. Delante de ellos, un hombre anda en *
zancos. *

3 OMITTED 3

4 EXT. EMBARCADERO - NOCHE 4


Por el Riachuelo varios colados llegan en bote. Gente del
club trata de evitar el desembarco, con poco éxito.

5 EXT. KERMESSE - NOCHE 5


La rultea del chanchito funciona a pleno. *
La parrilla no da abasto con los sandwiches de chorizo. Un
muchacho echa un chorro de soda en un vaso de vino y se lo
toma de un trago.

Un tipo se está chamuyando a una chica, cuando una bombita


de agua se le revienta en la cara. El tipo corre a los
chicos.

Entre la gente aparece LUISITA MALDONADO, embarazada, con


su marido. Luisita goza de todo lo que sucede. Se acercan
al palo enjabonado, el marido se apresta a subir.

Los “tortolitos”, disimuladamente, se escabullen detrás de


los árboles.El marido de la embarazada empieza a trepar el
palo enjabonado. Los movimientos son grotescos,
desesperados.
2.

La embarazada alienta a su marido, poniéndose colorada. De


repente, una mueca de dolor. La pareja de chicos, junto a
ella, ve algo que le cae y se ríen. La embarazada mira
hacia abajo. Rompió bolsa. Un chorro de líquido cae de su
pollera. La audiencia se alarma. Rodean a la mujer.

6 INT. GIMNASIO - NOCHE 6


DON AQUILES JOVEN (41) y otros tratan de frenar a la gente
que se arremolina a la entrada.

La chica solitaria mira tristemente el baile. Unos jóvenes


mandan a un nene a que le suba la pollera delante de
todos.

La pareja que mejor baila es una chica joven con un hombre


de más de 60 años. Todos lo aplauden.

A través de la marea que entra riéndose, se abre paso la


chica solitaria, que sale llorando.

7 EXT. KERMESSE - NOCHE 7


Una gran cantidad de gente arrastra a Luisita hacia el
gimnasio, pero el esfuerzo hace que Luisita se caiga. La
levantan en andas y siguen camino.

Los “tortolitos” hacen el amor contra un árbol.

8 INT. GIMNASIO - NOCHE 8


Desde arriba, el baile a full. Termina la música. Con el
gran aplauso, sube el ANIMADOR al escenario.

ANIMADOR
Muchísimas gracias, queridos amigos y
fuerte ese aplauso a nuestro aún más
querido amigo Alberrrrto Castillo, el
doctor del tango. Fuerte y grande ese
aplauso. ¡Fuerte y Grande como el Luna
de Avellaneda, esta institución tan
querida y amiga de todos nosotros!

La orquesta larga con “Siga el Baile”. Siguen bailando.


Pero la gente que carga a Luisita irrumpe en el gimnasio.

Don aquiles Jóven sube al escenario y anuncia:

DON AQUILES
Por favor, señoras y señores. Un alto
en nuestra diversión para un llamado a
la solidaridad. Tenemos a Luisita
Maldonado en extremo estado de
gravidez. ¿Hay algún médico en el
salón, por favor?
3.

Al oír esto, Castillo, que estaba de espaldas tomándose un


vino, se pone en estado de alerta. Deja el vaso y baja
corriendo del escenario.

El público que colma el salón, abre dos pasillos: Uno para


Castillo y otro para Luisita, transportada por dos hombres.
Todos aplauden.

ANIMADOR
¡Fuerte ese aplauso para el Doctor del
Tango! ¡¡¡Qué noche, queridos amigos,
QUE NOCHE!!! ¡¡¡Una de esas noches que
sólo pueden acontecer en nuestro amado
Club!!!

8A EXT. KERMESSE - NOCHE 8A


La gente espera, mirando los altoparlantes. El muchacho que
bebía, vomita en el fondo. El zancudo aparece en PP plano. *
El hombre de los “tortolitos” espera nervioso. Una bombita
de agua se le estrella en la cara.

9 INT. GIMNASIO - NOCHE 9


La gente espera, en silencio. El animador come un sánguche
de chorizo.

De repente, se oye el llanto de un bebé y sale Castillo con


el bebé en sus brazos. Todos estallan en aplausos. Castillo
pone al bebé al lado del micrófono.

10 EXT. KERMESSE - NOCHE 10


El llanto del bebé sale por todos los parlantes.

11 INT. GIMNASIO - NOCHE 11


Castillo sube al escenario con el bebé en brazos, alzándolo
para que lo vea la gente. El Animador no puede con su
entusiasmo.

ANIMADOR
Y démosle la bienvenida por aclamación
a nuestro nuevo socio, nuestro
querido...
(el padre le grita un nombre)
¡Román!
(el padre le vuelve a gritar)
¡Alberto! ¡Román Alberto a quién le
deseamos que toda su vida sea una
continua Luna Llena! ¡Música Maestro!

Los músicos atacan con “Siga El Baile”. DON AQUILES JOVEN


toma el micrófono.
4.

DON AQUILES JOVEN


¡Momento, queridos amigos, silencio!
Al honor de ser fundador, presidente,
socio y amigo de nuesro Querido Luna,
agrego el de otorgar el primer carnet
de socio vitalicio a un miembro de
nuestra institución...¡Nuestro querido
Romancito!
(se pone serio)
Desde aquella lejana noche en que tres
galleguitos recién llegados de España
decidieron...

Varios de la audiencia se miran resignados. Ya lo oyeron


mil veces. El animador va al rescate.

ANIMADOR *
¡¡¡Fuerte ese aplauso para Don
Aquiles, Para El Doctor Castillo, para
nuestro querido Club, para el pequeño
Gran Román y para la madre que lo
parió!!! ¡Y música, maestros!

Castillo larga con “Siga El Baile”. Toda la concurrencia


vitorea el nombre de Román: “¡RO-MAN! ¡RO-MAN! ¡RO-MAN!”

Desde el techo vemos el enorme gimnasio, lleno de gente,,


con el bebé en el medio y todos vitoreándolo. Bailan en
círculos. Lentamente, van desapareciendo, como fantasmas.

12 INT. GIMNASIO - DIA 12


Fundido encadenado: la misma toma. 45 años más tarde. El
club caído. El viejo escudo del fondo descascarado y
descolorido.

En el lugar donde estaba el bebé ahora hay un hombre


ubicando un gran balde abajo de una gotera. El sonido de la
multitud vitoreando “¡RO-MAN!” se funde con la voz de un
joven.

ISMAEL
¡Román! ¡Román!

ROMAN
¡No corrás!

ISMAEL, 20, un dragón tatuado en el brazo, resbala en un


charco, puteando.

ROMAN
Te dije que no corrieras.
5.

ISMAEL
¡Loco, no pongan las duchas en el
medio de la cancha! ¿Cuándo van a
cambiar la membrana?

ROMAN
Cuando te pongas con las cuotas al
día.

ISMAEL
Se nos va a resbalar un pibe y ahí te
quiero ver.

ROMAN
¿Qué pasa?

ISMAEL
Dice Cristina que vayas a danza
urgente, no sé qué de una chica.

ROMAN
Poneme los baldes y secá los
charquitos.

ISMAEL
¿Vas a hablar esta noche por mí?

ROMAN
Cuando te pongas con las cuotas al
día.

ISMAEL
¡Pero minuto que tengo libre, minuto
que laburo acá! Si pago el club, ¿qué
le doy de morfar a mi hija?

ROMAN
Ah, no tenés guita para comida, pero
te encajaste un dragón en el omóplato.
Andá a vender los tatuajes, en una de
ésas te dan un kilo de bofe con agua
de la manguera.

ISMAEL
¡Loco, en una comisión directiva de un
club como este no pueden ser todos
viejos! ¡Yo quiero participar!

ROMAN
Poné los baldes y secá los charquitos.

13 INT. CLASE DE DANZA - DIA 13


Entra Román. 7 chicas vestidas de ballet esperando en un
rincón. CRISTINA (28), con malla, lo espera.
6.

Una nena del grupo saluda a Román. Es MACARENA (10).


Macarena tose en toda la escena.

MACARENA
¡Hola, papi!

ROMAN
Hola, mi amor... Che, esa tos...
(A Cristina, aparte)
¿Qué pasó?

CRISTINA
Le agarró un vahído, no sé qué...

ROMAN
(no reconoce a la nena)
Esa chica no es socia.

CRISTINA
(susurra)
No, no te des vuelta, no la mires.

ROMAN
¿Por qué?
(Cristina susurra
ininteligiblemente)
¿Eh, qué?

CRISTINA
(apenas un poco más alto)
No, que me parece que tiene un poquito
de hambre.

ROMAN
Pero, Cristina, no somos una sociedad
de beneficencia...

CRISTINA
Si la trajo tu hija, vive acá cruzando
el Riachuelo, se hicieron amigas, la
trajo a mirar, y a mí me dio no sé
qué, le puse una mallita y bueno...

Las chicas miran a Román, expectantes. Román va a la nena.

ROMAN
Hola, mi amor, ¿cómo te llamás?

DALMA
Dalma.

Dalma lo mira con ojos enormes, asustados.


7.

14 INT. BUFFET - DIA 14


Un salón amplio con mesas de ping-pong, pool, un flipper y
dos juegos electrónicos. AMADEO, (45, pelo largo teñido de
rubio, barbita a lo Tom Fogerty) pinta los muñequitos del
metegol puntillosamente, mientras toma una cerveza. Lo mira
EMILIO (63) aquel animador y actual buffetero. Román sienta
a Dalma en la barra.

ROMAN
¡A ver Emilio! Tenemos visitas.
(a Dalma)
¿Te gustan las milanesas?

DALMA
Con papas fritas.

ROMAN
Dale, una milanesa con papas frit...
(mira dentro de su billetera)
Epa, no, pará. ¿Te gustan los
alfajores?

DALMA
Prefiero las milanesas.

Román mira la billetera con dolor. Emilio lo frena,


irónico.

EMILIO
Pará, fanfarrón, no contés la guita
delante de los pobres. ¡Sale una con
fritas!

Román lleva a Dalma a una mesa. Amadeo mira y escucha


mientras pinta. Toma un trago de cerveza.

ROMAN
(para congraciarse)
Sabés que cuando tenía tu edad a mi
también me gustaban las milanesas, era *
mi plato preferido. Mi mamá a veces me
preparaba una fuente así...
(Román hace un gesto de
enorme. Dalma, seria. Román
se frena)
Eh... mirá... eh... Esto es un club.
Acá vienen socios, pagan una cuota, a
mí me encantaría que vos vengas, pero
no podemos, ¿entendés?
(Dalma lo mira. Entra
Macarena y se sienta con
ellos. Román se empieza a
poner nervioso)
No, le decía... Es lindo que quieras
traer una amiga al club...
8.

Está bien, pero lo que pasa es que es


un poquitito injusto para los otros
socios, ¿no es cierto? Encima la mitad
igual no paga la cuota... Ojo, no es
que yo no quiera...
(Dalma lo mira.)
¿Qué? No me mires así, no soy un... Yo
laburo gratis acá. Me paso doce, trece
horas por día en el remís, y minuto
que tengo libre me vengo acá, no es
fácil. Me rompo... la colita para...
más las cuentas, los arreglos que hay
qué hacer, la gente que se queja... Si
te cuento te morís... y tienen razón,
¿por qué ellos sí y otros no, me
entendés lo que te digo?... A nosotros
no nos regala nada nadie, en serio. Me
mirás como si fuera una porquería,
pero yo no tengo la culpa de... ¡No me
miren así!
(mira a Amadeo, pidiendo
ayuda)

AMADEO
Mechá un poco con globalización,
crecimiento sustentable. A los chicos
les encanta.
(Pasa un karateca de 10 años *
y le pega en la espalda) *
¡Pará, Nandito! *
El nene se va corriendo. Se oye un golpe en el vidrio. Es *
GRACIELA (45).

GRACIELA
¿Llamó el sorete?

Niegan con la cabeza. Graciela va directamente a la


oficina. Emilio aparece con las milanesas.

ROMAN
Comé la milanesa nomás.
(va hacia la oficina. A
Amadeo)
¿Cómo se hace para parar esto?

AMADEO
Y, habría que averiguarlo.

ROMAN
¿Qué estás haciendo?

Román agarra la cerveza de Amadeo como para tomar un trago.

AMADEO
Estoy pintando los jugadores con los
colores del club.
9.

ROMAN
¿Con todos los quilombos que tenemos
te ponés a pintar el metegol?

AMADEO
Es un detalle, amargo. Dios está en
los detalles.

ROMAN
Así le va.

Se va, llevándose la cerveza.

15 INT. OFICINA COMISION DIRECTIVA - DIA 15


Graciela en el teléfono. Ansiosa, camina, se come las uñas.

GRACIELA
Por favor, señorita, quiero hablar con
mi abogado... Graciela Fernández. Sí,
Fernández, todavía soy Fernández,
hasta que el abogado se ponga las
pilas... ¿Cómo qué abogado?

En ese momento entra Román. Tira la cerveza en un tacho.

ROMAN
Che, Graciela...

Graciela le hace ampulosos gestos de que se calle.

GRACIELA
MI abogado, o sea, SU jefe, seño...
¿cómo que no me conoce? ¡que no se
esconda! ¡que no sea sorete como mi ex-
marido!
(Román intenta un “pará”)
¡Tecallás-laboca!
(al teléfono)
No, no le estoy faltando el respeto.
¡Yo no le dije sorete! ¡NO! ¡A SU JEFE
TAMPOCO! ¡A mi ex-ma--¡YO NO LE DIJE
SORETE! ¡BOLUDA! ¡DEME CON SU JEFE!
(Román trata de sacarle el
teléfono. Forcejean)
¡Salí! ¡Salí te digo! ¡No lo
defiendas! ¿Pero qué son, La Hermandad
del Sorete? ¡Dame el teléf...

Román la mantiene a distancia. Habla al teléfono.

ROMAN
Perdonela, señorita, está muy
alterada...
10.

GRACIELA
¡El dentista no me atiende más!
¡Decile que le diga a su jefe que le
diga a su cliente que el dentista dijo
que no atiende más al hijo!

ROMAN
¿Qué?... No sé, espere que le
pregunto...
(a Graciela)
¿Con qué número querés hablar?

GRACIELA
Por favor, decile que no se haga más
la, la, la, dame, dame, dame...
(al teléfono)
El Doctor Pellegrini... ¿Cómo que...
(cambia rápido)
Ay... bueh. Perdoná, dulce, es que es
esta situac... mucha caca junta,
viste... bueno, chau.
(cuelga rápido)
Equivocado. ¿Te das cuenta? Yo te lo
dije siempre, para mí en esto de las
privatizaciones hubo curro.

ROMAN
¿Qué pasó ahora?

Graciela vuelve a salir. Román la sigue atrás.

16 INT. GIMNASIO - DIA 16


Cruzan el gimnasio. Varias chicas hacen patinaje artístico.

GRACIELA
Pasa que le tengo que sacar los
aparatos a Bruno, y el dentista no me
atiende más.

ROMAN
¿Y la prepaga?

GRACIELA
Nene, seis meses que Eduardo no me
llama, que no ve a Bruno, seis meses
que no me pasa un mango. ¡La
preimpaga, decí!

17 INT. BUFFET - DIA 17


Entran. Dalma y Maca comen. Amadeo pinta el metegol, con
otra cerveza. Graciela saca un papel de su cartera.
11.

GRACIELA
Tomá, Emilio, me ponés este aviso.
(a Amadeo)
¿Qué estás haciendo?

AMADEO
Estoy pintando los jugadores con los
colores del club.

GRACIELA
(a Román)
¿Ves? Este sí que es un santo,
pelotudeando todo el día, como se nota
que no tenés a nadie a quien joder en
la vida.

Amadeo la “mata” haciendo un revólver con los dedos. Entra


Don Aquiles (84) el fundador y presidente del Club.

GRACIELA
(se calma un poco)
No como el otro que le importa un
carajo que su hijo sea un retardado
dental. Eso sí, a la pendeja le hizo
las tetas, ¿podés creer? Ojalá se las
reviente el nene con los dientes
deformados.

EMILIO
(lee el papelito)
¿Clases de francés vas a dar?

GRACIELA
Oui, ¿pourquoi? ¿Qué tiene? Tanto
tiempo de la Alianza no fue al pedo...
La francesa.

EMILIO
No, al contrario, me parece
espectacular. Ya lo dijo el poeta: “no
te des por vencido, ni aún vencido”.

GRACIELA
Yo no estoy vencida, ¿qué decís?

EMILIO
Yo nada, el poeta lo dijo.

Don Aquiles se acerca a ellos. Graciela le hace señas a


Román que no diga nada.
12.

DON AQUILES
Hola, muchachos. Gracielita, cómo le
va... Vengo de Edesur, ¿vamos a la
oficina y le cuento?

GRACIELA
No me diga que se fue hasta allá.

DON AQUILES
Me reconocieron un error en la
factura.

GRACIELA
Ay, qué hombre...
(se lo lleva del brazo)
Digame, ¿usted no querría reincidir en
el matrimonio?

Se van. Entra SOFIA, la recepcionista, de la calle. Aplaude


con urgencia.

SOFIA
A ver, chicos, un viaje al centro para
Pelusa, ¿quién la lleva?

ROMAN
(mirándose con Amadeo)
Me vence el teléfono...

AMADEO
Andá, andá, que yo estoy con esto.

ROMAN
Maca, ¿querés venir para el centro?

Macarena salta alegre. Román se va con ella, sacándole la


nueva cerveza a Amadeo. Ismael se acerca a Amadeo.

ISMAEL
Che, Amadeo... Te quería pedir un
favor...

AMADEO
Lo que quieras, hermanito.

18 INT. CASA DE ROMAN. LIVING - NOCHE 18


Mientras Darío (19) trata de ubicar bien la antena de la
tele con contorsiones, Román tiene a Macarena encima. Le
está haciendo una nebulización, sosteniéndole la máscara.

ROMAN
¡No puede ser que trabajes doble turno
hasta los días de entrenamiento!
13.

DARIO
Es mi laburo, ¿qué querés?

ROMAN
Dejame ir a hablar con tu jefe.
Estamos ahí nomás del campeonato, vos
sos pilar del equipo y el tipo te
tiene laburando a doble turno. No
puede ser.

DARIO
¿Que querés, que no labure?

Entra Verónica (39), con una pila de libros.

VERONICA
¡Hoolaaa!

TODOS
(como chicos de la escuela)
Buenas noches, señorita...

Verónica va hacia Román, dándole un beso rápido a Darío y


otro a Román. Le mide la fiebre a Maca con los labios.

VERONICA
¿Qué te pasa, mi vida? ¿tenés fiebre?

ROMAN
Sigue con esa tos seca...

VERONICA
Pero esto es vapor sólo, no tiene el,
el, el, el...

ROMAN
Pero le afloja un poco...

VERONICA
Mamá mañana te lleva al médico, ¿sí,
mi amor?

MACARENA
Pero papá dice que esto alcanza.

VERONICA
Mañana te llevo al médico.

Se va a la habitación. Román la sigue.

19 INT. CASA DE ROMAN. DORMITORIO - NOCHE 19


Verónica se está sacando la ropa. Román cierra la puerta.
14.

ROMAN
¿Te parece un médico? Por una tos...

VERONICA
Dejá, lo llamo a mi primo y que la vea
él.
(se da vuelta en corpiño)
¿Me ayudás?

ROMAN
(habla mientras desabrocha)
No le digas que estamos atrasados con
la obra social, por favor, que después
le anda chusmeando a tu vieja...

Verónica se saca el corpiño y lo enfrenta con el torso


desnudo, sonriendo sensualmente.

VERONICA
Sabés que yo me siento un poco... no
sé... desnuda...
(Román la mira sin entender)
Dale, nene, ¿no me mirás más las lolas
como cuando éramos novios?

ROMAN
Cuando éramos novios me pedías que te
mire a los ojos.

Verónica sonríe, triste. Román, riéndose, le mira fijo las


tetas. Verónica se pone una remera. Román se cambia.

VERONICA
¿Cómo te fue hoy?

ROMAN
Maso, maso. Pero anuncian lluvia para
mañana, así que... ¿A vos?

VERONICA
(se encoge de hombros)
¿Vas a volver tarde de la reunión?

ROMAN
No sé, ¿por?

VERONICA
No, digo... para hablar.

ROMAN
Bueno, si vuelvo temprano...
15.

20 INT. OFICINA COMISION DIRECTIVA - NOCHE 20


Don Aquiles, Amadeo, Emilio, Román revisan carpetas;
Graciela, comiéndose las uñas, y Cristina.

Detrás de un gran ventanal vemos un partido de basket.

EMILIO
¿Vieron que murió Cárdenas?

DON AQUILES
(señala detrás de él)
¿Quién? ¿el del quiosquito?

EMILIO
(señala en dirección opuesta)
No, el del garage.

DON AQUILES
Ah, sí.

GRACIELA
¿Pero no se le murió la esposa la
semana pasada?

EMILIO
(señala una cuarta dirección)
No, la que murió fue Ercilia, la de la
escuela 27.

AMADEO
Che, ¿no nació nadie? Digo, para
compensar.

Cristina le festeja el chiste. Amadeo la mira, flechado.


Cristina lo nota, se pone seria y mira hacia otro lado.

CORTE A:

Durante este momento, Amadeo sigue mirando a Cristina, que


lo mira de reojo, disimuladamente.

GRACIELA
Tema cobrador: se presentó el sobrino
de Resia.

AMADEO
(señala)
¿El de la ferretería?

EMILIO
(señala a otro lado)
No, el que tenía el Parripollo...
16.

AMADEO
(señala al lugar correcto)
Ah.

DON AQUILES
(se señala el codo derecho)
Hay un temita ahí con él para
comentar, ¿no? ¿Lo ubican?

Amadeo ve a Ismael por el ventanal. Ismael le hace señas de


“¿Y?”. Amadeo le guiña un ojo, calmándolo. Román los ve.

GRACIELA
Sí, es manco.

DON AQUILES
Pero bueno, se lo ve honesto.

EMILIO
Y, para cobrador viene bien.

CORTE A:

Graciela lee del libro. En el gimnasio, Nandito se roba la *


pelota y lo empiezan a correr. *
GRACIELA
Gas, 240. Prepaga social, 310. Luz,
nos mataron con la luz, 720.

DON AQUILES
Insisto, en los entretiempos de
básquet hay que apagar la luz.

CORTE A

ROMAN
Les presento oficialmente a Cristina,
nuestra nueva profesora de danza...
(Todos le dan la bienvenida. *
Cristina sonríe agradecida.) *
AMADEO
Muy bienvenida. Pero muy, muy
bienvenida.

GRACIELA
¿Pagó danza?

CRISTINA
Sí, las chicas están pagando todas...

CORTE A:
17.

AMADEO
Me pidió Ismael que hablara con
ustedes para integrarlo a la Comisión
Directiva. A mí me parece que no viene
mal tener a otro representante de la
juventud, además de mí...

Cristina es la única que le festeja. Hacen contacto visual.

ROMAN
Hace seis meses que no paga la cuota.

EMILIO
¡Pero minuto que tiene libre minuto
que trabaja acá! ¡No todo es la cuota!
Es como digo yo siempre, lo esencial
es invisible.

GRACIELA
A los ojos.

EMILIO
¿Y a qué va a ser?

AMADEO
(Sonríe. A Cristina)
Vas a ver que cuando empezás a conocer
esto, te enamorás.

ROMAN
Yo te entiendo, y lo quiero muchísimo
a Ismael, pero justamente, hay que dar
un ejemplo.

El muchacho ha dado pruebas de su


compromiso con el club.

EMILIO
Se lo ve optimista.

AMADEO
Tiene proyectos de acá a dos y tres
años.

DON AQUILES
A veces demasiado optimista.

CORTE A:

Bruno (10), el hijo de Graciela, va alrededor de la mesa,


besando a todos. Graciela lee una carta, anteojos con
correa.
18.

GRACIELA
(leyendo de una carta)
Atendiendo a estas bla bla bla blá, el
club adeuda los impuestos
inmobiliarios correspondientes a los
últimos QUINCE años... Es para
morirse, si nosotros estamos exentos
de impuestos, ¿qué es esto?

Todos se frenan. Silencio. Interrumpido por un tremendo


pelotazo al ventanal. Se sobresaltan. Román se acerca a
Graciela y lee con los anteojos de ella.

AMADEO
Esto es porque no les prestamos el
club para ese acto de fascinerosos.
Tirala.

ROMAN
...No es por los impuestos... es una
multa por no haber presentado los
balances de éstos años...

AMADEO
¡Mirá lo que inventan, por favor!

EMILIO
¿Cómo una multa? ¿De cuanto?

ROMAN
Cuarenta lucas...

Silencio. Bruno le pide algo a Graciela en el oído.

GRACIELA
No, qué flipper, no tengo.

EMILIO
Bueno, la Municipalidad puede cometer
un error, ¿no?

AMADEO
¿Qué nos van a sacar? ¿Las goteras?
Tirala, en serio...

Le da una ficha de flipper a Bruno. Cristina lo ve.

DON AQUILES
No, no. Si lo mandan hay que hacer
frente... Tendríamos que hablar con
Alejandro. La ayuda de un concejal...
19.

ROMAN
Yo lo conozco a Alejandro de toda la
vida, no perdamos tiempo.

AMADEO
Yo también lo conozco de toda la vida.
Mañana mismo le voy a hablar. Y si no
me da bola le rompo todo, dejenmé a
mí.

Todos se miran sutilmente. Don Aquiles mira fijo a Román.

ROMAN
No, dejá, está bien, voy yo.

Amadeo se queda callado, mientras los otros siguen


hablando. Cristina lo mira compadecida.

21 INT. MUNICIPALIDAD. PASILLOS - DIA 21


ALEJANDRO COSENTINO (45) saluda efusivamente.

ALEJANDRO
¡Don Aquiles! ¡Siempre un pibe usted,
eh!

Abraza a Román y Don Aquiles. Román fuerza una sonrisa.

ROMAN
Qué hacés, Ale...

ALEJANDRO
Romancito, ¿cómo andás? ¿Vero? ¿Maca,
Dari?

DON AQUILES
¿Quién?

22 INT. MUNICIPALIDAD. OFICINA ALEJANDRO - DIA 22


Román, Don Aquiles y Alejandro en la oficina.

DON AQUILES
Pero somos una entidad de bien público
sin fines de lucro, estamos exentos de
impuestos. La Municipalidad tiene
que...

ALEJANDRO
Pero esto no son impuestos, es una
multa porque no presentaron los
balances en quince años.
20.

ROMAN
Pero dejate de joder... Son mil pesos
que entran y mil cien que salen, ¿qué
balance?

ALEJANDRO
Eso, lo que acabás de decir. Es un
balance.

DON AQUILES
¿Cómo vamos a pagar 40 mil pesos? No
compramos la membrana que sale 58.

ROMAN
¿Qué? ¿Nos van a rematar el club?

ALEJANDRO
Y... no es joda. Puede pasar...

Román y Don Aquiles se paralizan. Silencio.

ROMAN
¿Y así me lo decís, lo más tranquilo?
¿A esto llegaste?

ALEJANDRO
Pará, no empecés con las ridiculec...

ROMAN
(explota)
¡Vos sos el ridículo! ¡Siempre fuiste
así! ¡Que negociemos, que nos
adaptemos, que hay que cambiar desde
adentro! ¿Qué cambiaste? Mirá lo que
sos, el idiota útil que labura de
mensajero.

ALEJANDRO
¿Pero qué estás diciend...

ROMAN
¡Siempre fuiste así!

ALEJANDRO
¡Pero pará, viejo! ¿qué te creés, que
sos el único que sufre por el club?
(Abre un cajón y saca un
carnet viejo, plastificado)
¡Yo también soy socio! Mirá, siempre
conmigo. A ver, mostrame tu carnet.

ROMAN
No tengo carnet, lo perdí, qué sé yo.
¿Qué tiene que ver?
21.

ALEJANDRO
Yo a mi carnet lo guardo como un
tesoro, porque para mí el club es un
símbolo. ¿entendés? Es un símbolo de
otra época, un símbolo de...

ROMAN
¡No es un símbolo! Es una realidad de
esta época, con 392 pibes que hacen
actividades todos los días.

ALEJANDRO
¡A mí también me preocupan los pibes!
¡Ya sé que son la única esperanza que
nos queda!

DON AQUILES
Bueno, basta, no se peleen más,
muchachos.
ALEJANDRO ROMAN
No estamos peleando. ¿Quién está peleando?

DON AQUILES
Mirá, Alejandro, esto tiene que ser un
error. Fijate si nos podés ayudar. Y
por favor, dejemos de escorchar a los
chicos con esto de que son la única
esperanza. Somos grandes. Queda feo.

23 EXT. ESCUELA - DIA 23


Román, con un paquete, se acerca a unos estudiantes.
Pregunta algo, uno de ellos señala un bar.

24 INT. BAR - DIA 24


Román entra y ve a Verónica al lado de la ventana, de
espaldas a él. Román se acerca lentamente.

ROMAN
Mi amor...

Verónica se da vuelta con una sonrisa luminosa, ansiosa. Se


sorprende y mantiene su sonrisa con esfuerzo. Perdió la
luz. Trata de recomponerse.

Román se da cuenta: Verónica esperaba a otro hombre, esa


sonrisa no era para él. Román comienza a sonreír, forzado.
Verónica se da cuenta. Trata de decir algo y no puede.
Román la interrumpe, sonriendo.
22.

ROMAN
Te venía a traer el jarabe... Vos..
¿vas para casa, no?

VERONICA
(confundida y nerviosa)
... Si, ahora después iba para allá...
¿querés, eh...?

ROMAN
No, no... me voy que se me hace
tarde...

Román se va, apurado. Vero cierra los ojos. Román apura más
el paso y se traga la puerta de vidrio. Un mozo va a
ayudarlo, pero él dice que está bien. Sigue sin mirar
atrás.

25 INT/EXT. COCHE DE ROMAN - DIA 25


Román maneja el remise. El pasajero habla de política. Por
fundido, los pasajeros van cambiando detrás, el sonido
mezclándose, cada uno con sus problemas.

Román no escucha, perdido en su mundo, al que ve


derrumbarse, respirando hondo, atrapado en el coche, su
jaula.

26 INT. GIMNASIO - NOCHE 26


Amadeo entrena a la primera. Se destacan Darío e Ismael.
Cerca está RAUL, su asistente, calentándose con una *
estufita a garrafa. Amadeo alienta a los jugadores, pero *
mira ansioso hacia el pasillo, por donde pasan las chicas
de ballet. Saca el cigarrillo de los dedos de Raúl y le da
una pitada, nervioso. Le agarra el brazo y mira su reloj.

ISMAEL
¡Falta, loco! ¿No viste eso?

Amadeo no lo vio, pero disimula y silba falta. Se le vienen


encima. “¿Qué falta? ¿Estás en pedo? ¡Ni lo tocó!” Amadeo
ve a Cristina cruzar el pasillo con un bolso y el pelo
mojado.

AMADEO
Bueno, basta, se acabó el partido.
¡Cristina!

ISMAEL
(horrorizado se interpone)
No, por favor, Amadeo. De nuevo no,
que estamos por salir campeones...

AMADEO
¿Qué hacés, nene? Soltame, ¡Cristina!
23.

ISMAEL
¡No, loco! Mujeres no, por favor, que
después te tenemos que aguantar
nosotros.

Amadeo protesta, mientras llama a Cristina. Cristina se da


vuelta y ve que todos los jugadores agarran a Amadeo, que
se suelta de un empujón. Se acerca a Cristina, canchero.

AMADEO
¿Como andas, bonina? Qué sorpresa.

CRISTINA
¿Qué hacían?

AMADEO
No, estábamos practicando una
estrategia.
Escuchame, quería hablar con vos por
un tema de Cosquín. ¿Tenés algo que
hacer?

CRISTINA
No, me iba a casa.

AMADEO
¿No te gusta la comida étnica? Porque
tengo un restaurant escocés estupendo.

27 EXT. MCDONALDS - NOCHE 27


Es un McDonalds. Dentro, Amadeo y Cristina.

28 INT. MCDONALDS - NOCHE 28


Amadeo come una hamburguesa. Cristina lo mira, incómoda.

AMADEO
No, que hay un Festival Nacional de
Danza y llamé para ver cómo era la
cosa y me mandaron los papeles para
inscribirse, yo creo que es genial
para tu grupo...

Cristina sonríe. Amadeo saca una lata de cerveza del bolso


y tose cuando la abre, para que no se escuche el ruido.

CRISTINA
Creo que no se puede tomar acá...

AMADEO
Nah, no pasa narola... ¿Querés?

CRISTINA
¡No!
24.

AMADEO
¿No tomás?

CRISTINA
No, qué sé yo, a veces sí.

AMADEO
Bueno, qué te parece. Yo te ayudo con
todos los trámites.

CRISTINA
Mirá... no sé si están listas las
chicas. ¿Qué pasa si no ganamos?

AMADEO
Y, perdemos, ¿qué problema hay? El
problema es si ganamos, porque ahí sí, *
ya tenemos que pasar al Internacional. *
CRISTINA
¿Qué? ¿Hay un certamen Internacional?

AMADEO
No sé, habría que averiguarlo. Y si no
ganan, conocen, la pasan bien,
Además... yo te vi bailar a vos, y si
las chicas llegan a causar el mismo
efecto en el jurado, el Nobel
ganamos...

CRISTINA
¿Dónde me viste bailar? Si yo siempre
cierro la puerta de salón...

AMADEO
(se ríe, nervioso)
No, es que estaba... yo estaba
cambiando la... ¿viste la trabita de
la puerta?

CRISTINA
Sí, que no cerraba.

AMADEO
Ahora cierra. Bueno, la estaba
cambiando, y el vidrio, bah, el
panel... tenía un agujerito, chiquito,
medio...
(agarra la tapa del vaso de
Cristina y la mira a través
del agujero)
Y te vi... y...
(se cuelga, mirándola)
La mano... me quedé con cómo ponías la
mano, así, tan elegante...
25.

Demuestra con la mano. Se queda colgado. Cristina,


sonriendo, pone la mano en posición de baile. Amadeo se
muere. Baja la tapa, y tiene los ojos húmedos.

AMADEO
¿Cómo no van a ganar?

29 EXT. PLAZA - NOCHE 29


Amadeo y Cristina esperan, sentados en un banco, esperando
el colectivo. Amadeo sigue tomando.

CRISTINA
Pero el papelerío debe ser un
quilombo...

AMADEO
Vos ocupate del baile que de los
detalles me ocupo yo. ¿Hace mucho que
no estás en pareja?
(Cristina se sorprende)
Pregunto nomás. Como nunca te veo en
el teléfono, ni recibir llamados, te
invito a salir y salimos, no estás en
pareja.

CRISTINA
No, hace tres meses. Y estoy bárbara.

Se quedan en silencio, esperando el colectivo. Cristina,


instintivamente, se lleva una mano a la panza.

AMADEO
¿Por qué te ponés la mano en la panza?

CRISTINA
¿Eh? Ah, qué sé yo, ni me di cuenta.

AMADEO
No, digo, porque a veces cuando las
mujeres se llevan así la mano a la
panza están o embarazadas, o pensando
en un embarazo.

CRISTINA
Ah, no, qué sé yo... che, cuánto
tarda...

AMADEO
¿Y por qué estás bárbara sola? Digo,
habrás tenido un conflicto fuerte
entonces, ¿estuviste embarazada?
26.

CRISTINA
¡Pará, flaco! ¿Qué sos, Sherlock
Holmes? Son problemas míos. ¿A vos
nunca te cagó una mina?

AMADEO
¿A mí? ¡Ja! Mónica. Pero estaba
totalmente loca.

CRISTINA
¿Bueno, viste? Son cosas tuyas, y
yo...

AMADEO
Y Silvia, también. Esa sí que estuvo
mal.

CRISTINA
No me cuentes, cosa tuya.
(Amadeo asiente y sonríe)
¿De qué te reís?

AMADEO
No, me estaba acordando de Adriana.
Personaje. Cómo me recagó esa hija de
puta.

CRISTINA
¿Bueno, viste? Y después de sufrir
tanto, ¿no estás bárbaro solo?

AMADEO
(la mira)
No.
(toma)

CRISTINA
No tomes más... Estás un poco...
(le saca la lata)
Ahí viene...

Se apronta para despedirse. Amadeo la mira.

AMADEO
¿Querés venir a casa?

Cristina lo mira un segundo y niega con la cabeza. Amadeo


asiente. El colectivo arranca, y Cristina lo corre

CRISTINA
¡Colectivo! ¡Espere!
(el colectivo frena)
Eeehhh... chau.
27.

Amadeo vuelve a recoger la lata de cerveza y la saluda,


como brindando. Cristina sube al colectivo. Amadeo se queda
solo.

30 INT. CASA DE ROMAN. LIVING - NOCHE 30


Verónica está dormida sobre unos exámenes. Entra Román y la
ve. Se sienta sigilosamente al lado. Verónica, dormida,
tiene una cara angelical. Román la mira embelesado.
Verónica se despierta y se sobresalta.

VERONICA
¡Ah! ¡Ay, tonto! ¡Me asustaste!

ROMAN
Perdoname.

VERONICA
Son las doce. ¿Dónde estuviste?

ROMAN
Trabajé hasta tarde.

VERONICA
Tengo una descompostura.

ROMAN
(saca un paquete de Mylanta)
¿Querés chuparte un Mylanta?

VERONICA
(lo agarra)
Por favor, Román, tenemos que hablar.

MACARENA (OFF)
Papi...

ROMAN
Sí, mi amor, sí. Dormite.

31 EXT. TERRAZA - NOCHE 31


Vemos todas las terrazas del barrio a la luz de la luna.
Verónica chupa el Mylanta, muy nerviosa, llorando,
caminando de un lado a otro.

VERONICA
No sé, no sé lo que pasó. No sé, por
ahí yo estoy en un momento muy frágil,
no sé... Nosotros no venimos bien, no
venimos bien...

ROMAN
Bueno, no sé si es tan...
28.

VERONICA
No, no venimos bien, Román. La verdad,
dale. No venimos bien.

ROMAN
Pero ahora vamos peor.

VERONICA
Román, por favor, no me das bola
nunca, ¿Cuánto hace que te quiero
hablar?

ROMAN
Bueno, si me hubieras dicho que era
por este tema...

VERONICA
¡Qué querés! “Perdoname, mi amor, dame
dos minutos esta noche, te quiero
hablar de mi am...

ROMAN
(susurra)
¡Callate que te van a oír los chicos!

VERONICA
Yo no quería que te enteraras así, no
quiero hacerte mal... En realidad no
quería que te enteraras de ninguna
manera, qué sé yo lo que quería... por
ahí era una cosa pasajera...

Se tapa la cara con las manos. Román la mira, destrozado.

ROMAN
Y esto es...¿es serio?

VERONICA
(asiente)
Bah, no sé, no sé nada, estoy... ¿Qué
sería “serio”?

ROMAN
(malhumorado)
Y, no sé, qué sé yo, si se encamaron,
por ejemplo, le daría a la cosa un
cierto aire de seriedad.

VERONICA
¿Qué importa si me encamé o no me
encamé? Es un tipo que se enamoró. ¡De
mí! Y me dice que me ama, no que me
quiere, que me ama y yo lo miro a los
ojos y le creo, porque tiembla cuando
me lo dice.
29.

ROMAN
Mirá si va a temblar.

VERONICA
Te juro que tiembla. Y yo también
tiemblo. Se puede temblar, Román.

ROMAN
Estará nervioso. A ver, ¿cómo *
tiemblan?

VERONICA
Temblamos, qué sé yo...
(trata de temblar. Sonríe)
Pero mirá las pelotudeces que me hacés
hacer. ¡Tiembla! Y me espera ansioso,
y se perfuma para encontrarse conmigo,
y...

ROMAN
¿Y eso es importante?

VERONICA
¡Es importantísimo!

ROMAN
Encamarse no es importante. Ponerse
perfume es importante.

VERONICA
Por favor, escuch... ¡Ayyy!

Verónica pisa una lona en el suelo, que tapaba un agujero.


Se cae, pero la lona frena la caída. Román la agarra.
Quedan los dos sentados en el suelo.

VERONICA
¡La puta madre! ¿Cuándo vas a arreglar
este agujero de mierda?

ROMAN
Ahora en el club vamos a poner la
membrana. Le pido al techista que me
haga precio...

Los dos se calman, ahí sentados.

VERONICA
¿Cuánto hace que no nos damos un beso?
No de despedida a la mañana, un
chuponazo, abrazados, acá, dale, ¡dame
un beso!

ROMAN
Primero me hablás de la membrana y ahí
nomás ipso facto me pedís un
chuponazo.
30.

VERONICA
Dale, dale. Te quiero dar un beso,
dale.

Incómodo, Román la abraza. Intentan besarse, muy


torprmente. No es el momente. Verónica pone su cara en sus
hombros.

VERONICA
Vamos a tratar de hacer algo, ¿dale?
(Román asiente)
Yo sé que podemos encontrar cosas de
nosotros, no sé, como antes...

ROMAN
Sí, sí... Yo te entiendo, es
difícil... Veinte años con la misma
persona...

VERONICA
(sonríe resignada)
Ojalá fuera siempre la misma
persona...

Los dos se quedan en silencio, a la luz de la luna.

32 INT. REMISERIA - DIA 32


Román está despatarrado en una silla, mirando el vacío.
Sofía mira un televisorcito. Programa estilo Moria.

SOFIA
Qué vida de mierda...

ROMAN
Sé...

SOFIA
Lo que no entiendo es por qué salen en
televisión.

Román se da cuenta de que habla de la tele. Se levanta de


un salto, impulsado por un ataque de vitalidad, gruñendo.

ROMAN
¡Aaagggghhh!

SOFIA
(se sobresalta)
¿Qué hacés, nene? ¡Me asustaste!

Román mira una de las tarjetas del mostrador y marca.

ROMAN
Sí, ¿florería?... Sí, para un envío a
domicilio ¿Qué flores tienen por...
(mira en su billetera)
31.

...dos pesos?
(Sofía lo carga con la cara)
Ajá... ¿Y crecen rápido esas semillas?

33 INT. PERFUMERIA - DIA 33


Una vidriera. Perfumes caros de marca llenan la pantalla.
En off se oye la conversación de Román y el vendedor.

ROMAN
Mirá, yo hace rato que no compro
perfume y quería saber si el que yo
usaba, el Calvin Klein, se sigue
haciendo.

VENDEDOR
Sí, caballero, son varias fragancias.
(la mano saca el perfume de
la vidriera)
Arrancan desde 67 pesos.

ROMAN
Ah... ajá. Y... ¿los que LLEGAN a 67
pesos desde dónde arrancan?

VENDEDOR
(la cámara baja a otros
perfumes más berretas)
Bueno, tiene fragancias nacionales muy
buenas. Está Skittish, está saliendo
mucho...
(la mano lo saca del estante)
32 pesos...

ROMAN
Apa...
(la mano lo vuelve a poner)
Mirá, la verdad, es mucho para mí.

VENDEDOR
A ver, acompáñeme al anexo.

La cámara retrocede a la vereda, en donde hay un stand con


caballetes y perfumes y otras baratijas. Román y el
Vendedor salen a la vereda.

VENDEDOR
Acá tenemos una línea de imitación.
Muy buena, ojo.
(la mano toma una cajita)
Tenemos el Fashion Fantasy que es una
fragancia tipo Calvin Klein.

ROMAN
¿Igual que el Calvin Klein?
32.

VENDEDOR
No, tipo Calvin Klein. Taiwaneses.
Eso sí, muy accesible. 22 pesos.

ROMAN
Ah, caramba.

VENDEDOR
Mirá, hay una serie de fragancias
artesanales hechas acá en el país.

ROMAN
Ah, dale, de paso colaboramos.

La cámara baja con la mano a una caja que está en la


vereda, con frascos sin etiqueta ni marca. Saca uno.

VENDEDOR
Se realiza de manera artesanal en un
establecimiento de Turdera. Se dejan
oler. Lo bueno es que como no tiene
gastos de marketing, ni packaging, ni
etiqueta, no tiene un carajo, te sale
dos pesitos. Y la próxima, si me traés
el envase, te hago un descuento.

La cámara llega a la vereda, a un desagüe de la cañería del


que sale agua podrida.

34 INT. CLUB. DEPOSITO - DIA 34 *


Román se termina de afeitar. Se pone perfume. Entra *
Graciela con Bruno. *
GRACIELA
¡Román! Román, por favor, me tenés que
ayudar.

35 INT. CLUB. DEPOSITO - DIA 35


En una sección del depósito, está la sala de herramientas
de Amadaeo. Román está sentado frente a Bruno, con anteojos
partidos y un cortacables en mano. Graciela, detrás, camina
frenética.

ROMAN
A ver, Brunito, calmate un poco, que
no pasa nada. ¡Calmate!
(Bruno gime cada vez más
alto)

GRACIELA
¡CALLATE UN POCO! ¡Abrí la boca y
quedate callado!
33.

Román le está cortando los aparatos con el cortacables.


Bruno, la boca abierta, mira la herramienta con terror.

ROMAN
Pensá que no te va a molestar más,
ahora vas a poder comer bien.

GRACIELA
No le alimentés falsas expectativas.
Aunque como sigamos así es con lo
único que se va a alimentar.

Román corta un alambre, Bruno gime.

GRACIELA
¡AAAYYY! ¡Cuidado, lo vas a lastimar!
(casi llorando, a Bruno)
¡Y vos si querés quejarte, quejate a
tu padre, que te abandonó como a un
forro!

ROMAN
¡Pará, che! ¡No le digas eso! ¿Así son
las mujeres cuándo se separan?

GRACIELA
¡Pero si es la verdad! ¡Che, qué olor
a pis de gato hay acá!
(Román grita)
¿Qué pasó, qué pasó?

ROMAN
Me corté, la puta madre. Esto es un
alambre de púa.

GRACIELA
¡Y no me extrañaría con esa prepaga de
mierda!
(ve que Bruno se ríe)
¿De qué te reís?
(se agarra la cabeza)
¡Ay, Dios mío! ¡Lo único que falta,
que me salga pelotudo como el padre!

Entra Amadeo.

AMADEO
Che, ¿qué hacen en mi taller? ¿Qué...
¡No! ¡Pará, animal!
(Los empuja a los dos)
¿Qué le estás haciendo al enano?

Bruno balbucea algo con los aparatos sacados por la mitad.


34.

ROMAN
¡Se lo estaba por sacar y justo me
empujaste!

AMADEO
A ver, dejame ver un poquito.

Le toma la cabeza con las manos y le inspecciona la boca.

AMADEO
Vos no te preocupés, Bruningui. A
ver...
(huele el aire)
Che, qué olor a hinojo...

ROMAN
Yo voy a la remisería.

AMADEO
A ver, Graciela, pasame la pincita
chica.

36 INT. GIMNASIO - DIA 36


Alejandro mira la práctica de básquet. Darío se luce. Llega
Amadeo con Graciela y Bruno. Lo ven.

AMADEO
¡Alejandro!
(Alejandro fuerza una
sonrisa)
¡Qué placer verte!

Se acerca a él con la mano extendida, y a último momento se


saca el reloj. Estrechan la mano.

ALEJANDRO
(cantando)
Cuatro a uno, cuatro a uuuuno...

AMADEO
Uy, loco, mirá con lo que salís, hace
más de veinte años de ese partido, ya
ni me acordaba...

ALEJANDRO
Cuatro a uno, cuatro a uno, cuatro a
uno.

AMADEO
(serio, le aprieta la mano)
Te llevaste la pelota, hijo de puta.

ALEJANDRO
Sí, calentito quedaste. Che, ese pibe
es bueno, ¿eh?
(Señala a Darío)
35.

AMADEO
Sí, es el hijo de Román. Y Verónica.

Alejandro acusa recibo: hay historia. Disimula.

ALEJANDRO
Es bueno. A ver si alguna vez ganamos.

37 INT. BUFFET - DIA 37


Alejandro, Román y Graciela toman café en una mesa. Emilio
e Ismael en el mostrador. Don Aquiles en mesa aparte.
Amadeo en una mesa lejana, juguetea con los aparatos y la
pinza.

GRACIELA
¿Me podés explicar de dónde vamos a
sacar 2000 pesos por mes?
(huele el café con sospecha)

ALEJANDRO
Y no saben lo que me costó llegar a
ese arreglo. Es muy bajo interés, y en
dos años están libres.

ROMAN
Buenísimo, si nos matamos dos años
volvemos a estar como hace diez.

AMADEO
Octubre del 98, la última vez que les
dejamos hacer un acto partidario.
Desaparecieron 72 caballetes.

EMILIO
76.

AMADEO
Tomenseló como pago y acá no ha pasado
nada.

GRACIELA
Che, Emilio, ¿qué le pusiste al café?

EMILIO
Leche le puse.

ALEJANDRO
(va hacia Don Aquiles)
Don Aquiles, por favor, explíqueles.
Es una buena propuesta.
36.

DON AQUILES
A ver, Román, Gracielita, tratemos de
razonar.

GRACIELA
¿Estará cortada?

ROMAN
¡Pero cómo pueden cobrar 40.000 pesos
de multa! ¡No puede ser!

Entra Cristina y se sienta en una mesa, mirando. Amadeo la


ve, y comienza a moldear los aparatos de Bruno con la
pinza.

EMILIO
Es de una arbitrariedad francamente
pasmosa. Al final estos sujetos dicen
equis plata y es equis plata.

ALEJANDRO
Eso pasa en todo el mundo.

GRACIELA
Acá se complica un poco porque tampoco
existen las leyes ni la moral, ni la
ética, ni la más básica buena onda.

ISMAEL
A los veteranos de Malvinas les
expropiaron los campitos con no sé qué
verso y un testaferro del intendente
puso unas canchas de papi-fútbol.

ALEJANDRO
¿Qué tiene que ver eso? Román, por
favor, se mete cualquiera...

ISMAEL
(se levanta)
¿Pero qué “por favor”, a mí no me...

ROMAN
(lo frena)
No es cualquiera. Ismael es de la
Comisión Directiva.

ISMAEL
(sorprendido, lo mira)
No jodás.
(se queda chocho. Se sienta
frente a Alejandro)
37.

ROMAN
(va a Don Aquiles)
No tenemos más nada para alquilar,
tenemos veinte mil clases, no podemos
hacer nada.
(Don Aquiles huele el aire)

ISMAEL
¡Yo doy por terminada la charla con
este señor y que se junte la Comisión
Directiva a tratar el tema!

ROMAN
(en voz baja)
No te agrandés, pelotudo.

GRACIELA
Hagamos quilombo, no sé, llamemos a
los medios.

AMADEO
Que les metan una cámara oculta en el
orto, así se ven las cagadas que hacen
en vivo y en directo...

ROMAN
¡Callate!

Amadeo camina hacia Cristina y le entrega un regalo: una


pulsera hecha con los aparatos. Cristina lo mira con
ternura. Amadeo va al mostrador y agarra otra cerveza.

AMADEO
Además, cuando te llevaste la pelota
faltaban quince minutos.

ALEJANDRO
¡Perdían cuatro a uno!

AMADEO
En quince minutos pueden pasar muchas
cosas.

ROMAN
¡Terminala con ese partido de mierda y
pensá algo para ayudar al club!

ALEJANDRO
Nosotros hicimos lo que pudimos.

ROMAN
¿Quiénes son “nosotros”?
38.

ALEJANDRO
La Municipalidad.

ROMAN
No, la municipalidad somos nosotros.
Ustedes son ustedes. Si decís nosotros
cuando hablás de ustedes, vas a decir
ustedes cuando hablás de nosotros, y
así andamos, ustedes por un lado y
nosotros por otro, hasta que ustedes
acaben con nosotros o nosotros con
ustedes.

AMADEO
(a Román)
¡Che, sos vos el del olor!

ROMAN
¡Me puse una colonia, terminala!
(a Alejandro)
¡Vos nos podés ayudar!

ALEJANDRO
Yo te puedo ayudar a vos. ¿Cómo?
¿Rompiendo el expediente? ¿Moviendo
influencias? ¿qué querés, que
transemos?

ROMAN
¡Es lo que hiciste toda la vida!

AMADEO
¿O vos te creés que antes de Newton
las manzanas flotaban?

ROMAN
¡PERO DEJA DE DECIR PELOTUDECES,
BORRACHO DE MIERDA!

DON AQUILES
¡Román!

Román le arranca la botella y la estrella contra una pared.


Todos se quedan en silencio. Amadeo se queda duro. Pausa.

Amadeo se va, sin decir nada. Cristina sale detrás.


Silencio. Román se frota la cabeza, arrepentido. Alejandro
se levanta.

ALEJANDRO
¿Cuánto debo por el café?

GRACIELA
No, dejá, no te...
39.

EMILIO
(interrumpe, serio)
Dos pesitos.

Alejandro tira un billete sobre la mesa y se va.

38 EXT. EMBARCADERO - DIA 38


Cristina ve a Amadeo cerca del embarcadero, al lado de un
bote de remos carcomido.

CRISTINA
¡Amadeo!

Amadeo, se sorprende y trata de sonreír. Sigue en lo suyo.

CRISTINA
Gracias por la pulserita. Está divina.

AMADEO
Sí, la verdad que me salió linda.

CRISTINA
Che, ¿anda el bote?

AMADEO
No, le patina el embrague. Es un bote,
nena, ¿cómo no va a andar?

39 EXT. RIACHUELO - DIA 39


Amadeo y Cristina en bote. El panorama es desolador.

AMADEO
La verdad que como paseo romántico se
me ocurren cosas mejores...

CRISTINA
¿Por qué? ¿Por qué es feo? ¿Por que no
hay árboles maravillosos?

AMADEO
(ve pasar una cabeza de
caballo flotando)
Bueno, la fauna tampoco es gran cosa.
Mejor volvamos que estamos entrando en
territorio comanche.

Cristina sonríe. Amadeo mira su sonrisa, algo embelesado.


40.

CRISTINA
¿Conocés el cuento de la vendedora de
cerillas?

Cristina se pasa al asiento frente a él. El bote se sacude.

AMADEO
¡Pará, pará!

CRISTINA
Bueno, bueno, un cuentito, dejá de
remar. Dale...
(Amadeo mete los remos
adentro. Cristina se acerca
mucho)
Año nuevo. Una nenita vende cerillas
en la calle...

AMADEO
¿Acá transcurre el cuento?

CRISTINA
No importa dónde. Se está por morir de
frío en el medio de la nieve...

AMADEO
Ah, no, si hay nieve acá no puede ser.
Imaginate, lo único que nos...

CRISTINA
Escuchame. Pobrecita, está congelada,
hace días que no come, y se acurruca
en un callejón entre dos casas...

AMADEO
Será Dinamarca... Oslo...

CRISTINA
Shhh...
(le pone un dedo en los
labios)
Para calentarse prende una cerilla, la
llama la hace sentir como si fuera una
estufa de leña. Se quiere entibiar los
pies pero, claro, la cerilla se acaba
y se queda con el cabito, nomás.
Prende otra y la luz le hace ver un
comedor enorme, con un pavo suculento,
y mazapán, y turrones, y...

AMADEO
Hace mil años que no como mazapán...
41.

CRISTINA
...pan dulce, langostinos, mucha
sidra...
(se va emocionando por su
propio cuento)
Así hasta que enciende la última y ve
a su abuelita, a la que le pide que la
lleve, porque cuando se apague no va a
haber más ni estufa, ni pavo, ni pan
dulce, ni sidra... Y la llama se
enciende como ninguna antes.
(Amadeo cada vez más
enamorado)
Y la abuela, hermosa, abre sus brazos
y se la lleva, lejos del frío, del
hambre, de la tristeza. A la mañana de
año nuevo, la encontraron muerta en la
nieve y con todos los restos de
cerillas a su alrededor, alguien dijo
“Qué barbaridad. Debe haber querido
calentarse y no pudo”.
(Cristina también mira a
Amadeo, mirándola a ella, y
también se va enamorando)
Lo que no sabía nadie era que había
encontrado la felicidad gracias a los
fósforos. Ahora estaba en el Cielo con
su abuela, y nunca más volvería a
pasar frío...

AMADEO
(en trance)
¿Y qué tiene que ver ese cuento
conmigo?

CRISTINA
(también lo mira fijo)
Que vos te la pasás prendiendo *
fósforos. A las chicas de danza, a
Bruno, a todos. No me importa lo que
diga nadie, para mí sos muy valioso...
y...
(casi entregada)
... ¿por qué me mirás así?...

AMADEO
... ¿La verdad?...
(Cristina asiente)
Es que...

CRISTINA
No, pará. No, mejor volv...

AMADEO
Es que estoy enamorado de vos.
41A.

CRISTINA
¡No! ¡No me podés decir eso!
42.

Se vuelve a su asiento en el bote. Amadeo avanza hacia


ella. El bote se mueve para todos lados.

AMADEO
¿Por qué? ¡No es mi culpa! ¡Sos vos!
Te miro y no sé qué es, te juro, le
pregunté acá a los muchachos, pero
ellos tampoco saben...

CRISTINA
¡No! ¡No, no, no, y no! ¡Me lo tengo
que sacar de...¡Vos! ¡Vos te lo tenés
que sacar de la cabeza! ¡volvamos!

Amadeo se queda duro. No dice nada, serio. Agarra los remos


y empieza a remar hacia el embarcadero. Cristina se queda
mal.

CRISTINA
No te enojes...
(Amadeo no contesta)
¿Ves? Ya estás enojado. Amadeo,
contestame. ¡Contestame!

Pero Amadeo no contesta.

40 EXT. EMBARCADERO - DIA 40


Amadeo baja del bote. Cristina lo sigue atrás.

CRISTINA
¡Pará un poco! ¿Qué? ¿Ahora no me vas
a hablar más?

AMADEO
¡No! ¡No te voy a hablar más! ¡Y no me
vengás más con cuentitos! Esa es la
tuya, puro cuentito. ¿Sabés lo que le
pasó a esa pendeja?

CRISTINA
¿A quién?

AMADEO
La pendeja esa, la dinamarquesa. Se
murió congelada, sola, muerta de
hambre y loca. Y si vos te creés que
con esos cuentitos me vas a ayudar,
cagaste. Lo único que lográs es que me
enamore de vos, que te vea como la
mujer más hermosa, más tierna, y más
pura del mundo. ¡Y que se me estalle *
el corazón!Y me parece una cagda que *
hagas esto si a vos no se te estalla *
el tuyo! *
43.

¡El amor no es un fosforito, querida!


¡El amor no es joda! ¡Y vos no te lo
bancás al amor!

CRISTINA
¡Sí que me lo banco!

AMADEO
¡No te lo bancás!

CRISTINA
¡Me lo re-banco!

AMADEO
¿A ver?

Y caen los dos en brazos del otro. Se dan un larguísimo


beso. Pero de repente, Cristina se suelta.

CRISTINA
¡No!

AMADEO
¡Dale, Cristina! ¡Bancate el amor!

CRISTINA
¡No, mi am... Amadeo, no, es que...
vos no entendés. A mí me lastimaron
mucho, Amadeo, te juro.

AMADEO
A mí también y no me importa.

CRISTINA
Pero yo vengo baqueteada mal, elijo
siempre mal y basta. No puedo ser
boluda ayer, hoy y mañana. Ayer,
bueno. Hoy, puede ser. Pero mañana no,
loco, pará. Yo quiero una vida mejor.
Me estoy rearmando bien, quiero
empezar de a poquito con el club y con
decisiones ra-cio-na-les, ¿entendés?
No lo digo por vos, no es personal, no
lo digo por tu pelo ni nada.

AMADEO
¿Qué tiene mi pelo?

CRISTINA
Nada, te digo que no es el pelo. La
verdad que me encanta tu pelo, pero es
todo, y que tomes y eso.
44.

Necesito un tipo sólido, con laburo,


y, y, la verdad, vos estás acá, y el
tipo que yo busco está...
(mira alrededor, se da vuelta
y señala a lo lejos)
Allá. No me quiero volver a enganchar
con el dolor de otro, con, con la
soledad, no quiero ser mamá de nuevo.
Soy siempre mamá y no es sano. Quiero
algo sano, quiero ser... hija. ¡Por
favor! ¡Seamos hij... adultos! *
AMADEO
Ya mismo me devolvés la pulsera.

CRISTINA
¿Qué puls... ¡No, loco, la pulsera es
mía!

Amadeo trata de sacarle la pulsera. Forcejean. Amadeo


grita.

CRISTINA
¿Qué te pasó?

AMADEO
¡Me pinché el dedo, la puta que lo
parió!

CRISTINA
Perdoname, yo...

AMADEO
¡Dejame, dejame!
(se chupa el dedo)
¡No me hablés nunca más! ¡Metete las
cerillas en el culo!

Y se va, chupándose el dedo. Cristina se queda sola.

41 INT. AULA - DIA 41


Verónica pinta ríos en un croquis de Europa.

VERONICA
Y, eeh... el Danubio, que no es azul,
como dice la canción...
(Los alumnos se miran: ¿qué
canción?)
Sino que en realidad, por su baja
profundidad es utilizado con...

Y es interrumpida por un sonoro bostezo que viene del


fondo. Risas de los alumnos.
45.

VERONICA
Silencio, por favor.

Otro bostezo. Pronto, es una seguidilla de bostezos y


risas. Verónica los mira seria.

VERONICA
¿Por qué me hacen esto?

SEBASTIAN
Es que es un plomo... ¿para qué sirven
los ríos de Europa? No sirven para
nada.

VERONICA
Hagamos una cosa, si usted prefiere
ser un ignorante no pierda más tiempo
en aprender y yo no pierdo tiempo en
enseñarle. Retírese.

“Eeppa”, “OO-OO-oo-oo-o”. Exclamaciones. Se levantan diez


alumnos y se van. Verónica los intercepta.

VERONICA
¿Adónde van?

SEBASTIAN
¿Y no nos dijo que nos vayamos?

Verónica trata de frenarlos, pero los alumnos la empujan


torpemente. Verónica se asusta. Sebastián se ríe y se
acerca.

SEBASTIAN
Disculpe, profe, no se ponga...

Le agarra los brazos. Verónica le pega un cachetazo.

VERONICA
¡No me toques, animal!
(los alumnos se quedan duros)
¿Te creés que sos tan vivo, imbécil?
¿Te creés que no te puedo enseñar
nada? ¡Te puedo mostrar lo que va a
pasar con el resto de tu vida día por
día!
(chasquea los dedos)
¡Así te tengo, boludo! Te puedo contar
como vas a dejar a tu novia con el
bombo, porque te creés muy piola para
ponerte un forro, ¿o no? ¿O NO?
(Sebastián trata de sonreír.
La clase empieza a gritar.
Verónica se hace oír)
46.

Y como vas a terminar en un laburo


roñoso para mantener a tu familia, y
cuando te empiecen a empujar a vos,
mañana nomás, vas a pedir perdón.
(el ruido es ensordecedor)
¡Poné ganas, querido, empezá a usar
esto,
(le señala la cabeza)
que con esa cara de idiota es la única
que te queda!

La clase se queda dura. Apenas unos “uuuhhh”. Verónica mira


a Sebastián, furiosa. El le mantiene la mirada.

SEBASTIAN
Usted no sabe nada de mi vida.

Verónica se da cuenta de que perdió el control. Se le


llenan los ojos de lágrimas, y sale corriendo. Vuelve el
kilombo a la clase, y Sebastián, tapando su dolor, larga
una carcajada.

42 INT. BAR - NOCHE 42


Román y Verónica en un bar. Ella está bajoneada, agotada.

ROMAN
Bueno, che, un sumario, quedará en la
nada. Y si no, al final, gastabas más
de lo que ganabas.

VERONICA
O sea que ni para ganar plata.
Inservible total. Encima me la agarré
con los pibes que están más perdidos
que nosotros...

ROMAN
No es para tanto...

VERONICA
Sí que es para tanto. ¿No te acordás
todos los sueños que teníamos? La
mejor pareja, los mejores hijos, un
mundo mejor y mirá... Mundo, prrr.
Pareja, buáh. Mis hijos... ni como
madre... Macarena si no estás vos no
se ríe...

Se frena por contener el llanto. Román le acaricia la


cabeza, ocultando una sonrisa satisfecha.

VERONICA
Che, qué olor a desinfectante que hay
en este bar.
(Román retira la mano. Se le
borra la sonrisa)
47.

Darío no tiene relación con ninguno de


los dos...

ROMAN
¿Cómo que no? Yo lo veo todos los
días, no sabés cómo está jugando.

VERONICA
¿Y eso es para vos nomás, el jugador
estrella? ¿vos qué sabés de él afuera
del club? ¿Tiene novia, ambiciones?
¡No sabemos nada de él!
(Román la mira, tocado)
¡Tiene que estudiar, tiene que hacer
algo de su vida! Va a ser otro *
inservible, tiene razón Sebastián... *
ROMAN
¡No me digas el nombre!

VERONICA
¿Sebastián? El alumno de tercero, al
que le pegué el tortazo.

ROMAN
Ah, bueno...

Verónica lo mira, y se afloja. Sonríe con cariño.

VERONICA
Sos el hombre de mi vida, tonto.

ROMAN
¿Quién, yo?

VERONICA
No, el Papa.

ROMAN
No se nota.

VERONICA
¿Ah, no? En la facultad, cada vez que *
vos hablabas, yo no podía respirar, de
amor, pasión, calentura, admiración,
todo.
(sonríe maternalmente)
Es bárbaro... Dale, ¿a vos no te
gustaría encontrar alguien que te *
despierte todo eso?
(le acaricia la mano)
Nos lo merecemos los dos...

Román retira la mano, aguantando su enojo.


48.

43 INT. CASA DE ROMAN. HABITACION DE MACA Y DARIO - NOCHE 43


Maca duerme. Entra Román y se sienta al lado. La acaricia,
con lágrimas en los ojos. La corre hacia un costado y se
acuesta junto a ella. Se tapa con la manta. Ya debajo de la
manta, se saca los zapatos, dejándolos caer. Maca se mueve.

ROMAN
Dormí. Dormí, mi amor.

Maca lo abraza en la oscuridad. Son un solo bulto.

MACARENA
Tenés rico olor, papi.

ROMAN
(Pausa)
Gracias, hija.

44 EXT. CASA DE ROMAN - DIA 44


Román está con el auto en marcha, ansioso. Darío sale.
Román le hace señas de que suba. Darío lo mira extrañado.

ROMAN
Dale que te acerco.

45 INT/EXT. COCHE DE ROMAN - DIA 45


Darío, callado. Román lo mira, buscando contacto. De
repente, le palmea la pierna, con una gran sonrisa.

ROMAN
¿Qué hacés, chabón?

DARIO
(lo mira sorprendido)
Bien...

ROMAN
Mató.

DARIO
¿Pasó algo?

ROMAN
¿Eh? ¡No! Bah... qué sé yo, sí.
Estuvimos hablando con tu mamá, y
bueno, decidimos que nos vamos a
separar por un tiempo. No le digas a
Maca todavía, porque no está
totalmente...
49.

DARIO
¿Cómo? ¿Por qué?

ROMAN
Es algo nuestro. Son veinte años,
viste.

DARIO
¿Y qué?

ROMAN
Es una cosa temporal, seguramente.
Ustedes no tienen nada qué ver y esto
no cambia en nada tus cosas ni las de
tu hermana.
(Darío no dice nada. Se mete
en sí mismo)
Por eso te quería traer, para que
nuestra vida de todos los días siga
como todos los días...

DARIO
Si nunca me traés.

ROMAN
Bueno, a partir de hoy, como todos los
días.

Frena. Darío baja sin decir una palabra. Román lo sigue.

46 INT. LOCUTORIO - DIA 46


El Gordo CHICHA (60) abrocha boletas, sin lograr que la
abrochadora funcione. Román sigue a Darío.

ROMAN
Pará, hablemos un poco...

DARIO
No tenemos nada que hablar, si ustedes
ya decidieron, qué tenemos que
hablar...

Hay un adolescente, JONATHAN, detrás del mostrador. Darío


lo saluda con curiosidad. El chico responde con timidez.

DARIO
Eh, Chicha, te presento a mi viejo...

CHICHA
Qué tal, mucho gusto...

ROMAN
Encantado. Che, Dari, ¿te vengo a
buscar hoy? Te llevo al partido, así
charlamos.
50.

DARIO
No, dejá. Hagamos como todos los días.

CHICHA
Che, Darío, tengo que hablar con vos
un minutito...

DARIO
¿Quién es este chabón?

CHICHA
No, es un pibe de acá, de Gerli.

Darío nota algo raro, mientras sale un CLIENTE de una


cabina.

CLIENTE
Loco, esa cabina es un sauna.

CHICHA
Sí, pero no te lo cobro. 70 centavos.

DARIO
¿Qué pasa? ¿Todo bien?

CHICHA
No, es que... no te voy a necesitar
más. Te estoy pagando un dineral, y la
verdad no me cierran los números...

DARIO
¿Qué dineral? ¡300 mangos!

CHICHA
Bueno, pero acá Yucatán...

JONATHAN
Jonathan...

CHICHA
...me labura por 150, mirá la
diferencia.

Chicha vuelve a lidiar con la abrochadora. Darío lo sigue.


Román vuelve a acercarse.

DARIO
¡Pero no podés hacer esto! ¡Hace un
año que laburo acá! ¡Por favor,
Chicha!

ROMAN
Vamos, Darío.
51.

DARIO
No, ¿qué vamos? ¡Oíme, contestame! ¿No
era tu segundo hijo yo? ¡Contestame!

CHICHA
(le pega un golpe a la
abrochadora con bronca)
¡Y qué querés qué haga! ¿querés
laburar por esa guita? Lo rajo a este
boludo de una patada en el orto y te
quedás vos.

ROMAN
¡Callate un poco, animal! ¡Vamos,
Darío!

DARIO
¡Nunca falté! ¡Me debés dos mil dobles
turnos! ¡No podés ser tan hijo de
puta!

ROMAN
Sí, puede, vamos.

DARIO
Gordo turro... ¡Soltame!

Román empuja a Darío hacia la puerta. Darío sale, al borde


de las lágrimas.

CHICHA
¡Maricón de mierda, llorón!

Román se frena. Vuelve a Chicha. Trata de controlarse, pero


explota. Arranca un fax y lo estrella contra las cabinas,
rompiendo varios vidrios.

ROMAN
¡A ver, ya que sos tan macho, hacete
el vivo conmigo!

Darío mira a Román azorado. Jonathan sale corriendo.

CHICHA
¡Vayansé de acá o llamo a la cana!

ROMAN
¡Llamala, cagón!

DARIO
¡Dale, llamala!
(tira algo del mostrador)
¿A qué no te animás a llamarla?

Sonríe de la excitación. Chicha quiere frenarlos, lo


empujan.
52.

47 INT. CELDA COMISARIA - DIA 47


Una celda llena de presos. Entre ellos, Román y Darío. Se
cruzan las miradas. Román fuerza una sonrisa.

DARIO
¿Así van a ser todos los días?
(Román hace gestos de “qué sé
yo”. Darío sonríe)
La primera vez que veo una cárcel
desde adentro.

ROMAN
Al principio es lindo pero después de
varias veces pierde la magia. Y
después te cansa.

DARIO
Yo ya estoy cansado... Bah, igual tan
al pedo no laburé. Por lo menos me
ahorré para el pasaje y un poquito
más.

ROMAN
¿Qué pasaje?

POLICIA
¡Maldonado! ¡Padre y hijo!

PRESO (OFF)
E hijo, burro.

Risas ahogadas de los otros presos. Román y Darío van a la


reja. Entra Alejandro. Román se pone serio.

ALEJANDRO
Como en los viejos tiempos. ¿Cuántas
me debés?

Se aparta para que el policía abra.

48 INT. CASA ROMAN - DIA 48


Desde la puerta, vemos a Vero abrazando a Darío. Román está
junto a ellos, pero no sabe muy bien qué hacer. Vero revisa
a Darío, para ver si está lastimado o algo así.

VERONICA
¡Ay, por Dios, están locos! ¿Estás
bien?
(Darío asiente)

ROMAN
Y yo también.
53.

Entran. Alejandro queda solo parado en la puerta.

ALEJANDRO
(levanta la voz)
Che, bueno... ¡De nada, chicos!

VERONICA
(a Alejandro)
¡Vení, perdoname, pasá!¡Qué bestias
que somos, pasá, vení, ya hago café.

ROMAN
Yo prefiero pegarme una ducha, estoy
con un olor a cadena perpetua que no
se banca.

Vero vuelve hacia la puerta y le da un beso a Alejandro. *


Hablan en voz baja. *
ALEJANDRO
¡Estás igual! ¡Im-pre-sio-nan-te!

VERONICA
¡Ojalá! Ya me dicen señora hasta por
teléfono...

ALEJANDRO
No, en serio, el mismo cuerpito,
¡Todo!

VERONICA
Mil gracias, en serio, te juro que no
sabía a quien llamar.
(ve a Román merodeando y *
habla en voz alta) *
¿Querés que te haga un cafecito? Algo *
bien cargadito.

ALEJANDRO
No, agua si tenés. Me tomo un café *
negro después de las cinco y no duermo
en toda la noche.

ROMAN
¿No será el alma negra lo que no te
deja dormir?
(Alejandro sonríe)

VERONICA
Te hago un té entonces. *
54.

ALEJANDRO
Ah, un tecito sí. Che, Darío, te vi *
jugar al basquet. Shapó, eh.

Mientras Alejandro y Darío hablan, Román se mete con


Verónica en la cocina. Verónica tira el café viejo.

ROMAN
¿Por qué tirás el café?

VERONICA
Dejame que le haga café fresco, che,
no seas miserable.

ROMAN *
¿Qué te estaba diciendo? *
VERONICA *
¿No te ibas a dar una ducha vos? *
Román se queda duro. Mira hacia el living. Una sospecha lo
invade. Román en voz muy baja, casi sólo con mímica,
pregunta “¿No será éste?. Verónica hace gesto de “Pará, me
ofendés, ¿ves como sos?” Román hace gesto de pedir
disculpas “Perdón, perdón, perdón.” Verónica vuelve al
comedor, Román la sigue.

DARIO
(sigue la conversación)
¿Cómo “el récord”, qué récord? ¿de
qué?

ALEJANDRO
No, de tu viejo, que se quedó con la *
más linda del barrio...
(Vero oye y sonríe)
Y ni siquiera te puedo decir “no sabés
lo que era tu mamá hace veinte años”
porque está igualita. Tiene el
mismo...
(Se queda sin palabras)
Che, ¿y se puede preguntar la edad?

VERONICA
Sabés muy bien la edad que tengo.

ALEJANDRO
No la tuya, de Yanina.

VERONICA
¿De quién?

ALEJANDRO
La novia de Darío.
54A.

VERONICA
¿Cómo la novia?
(a Darío)
¿En serio?
(Darío asiente)
55.

¿Vos sabías?
(Román niega)
¿Y así me vengo a enterar? *
DARIO
Bueno, estoy saliendo con Yanina,
cortala, todo bien.

ALEJANDRO
Euu, se preocupa por vos, está bueno,
creeme, ojalá hubiese gente que se
preocupara por mí.

ROMAN
Vos la tenés bastante preocupada a la
gente, quedate tranquilo.

ALEJANDRO
(irónico)
La próxima te dejo adentro.

ROMAN
Bueno, basta de “bla, bla”, che, me
voy a dar una ducha.

Mientras se va al baño, Verónica lo sigue detrás. *


VERONICA
¿Pero qué “bla, bla”? Acá no blablea
nadie, es todo ¡“Mmmmmm”!
(gesto de “cierre” en la
boca)
¡Por favor, blableen un poco! ¿Cómo *
puede ser que no sepamos nada? *
Román le cierra la puerta del baño en la cara. Verónica
vuelve al comedor.

DARIO
¿Y ustedes que se van a separar y no
nos dijeron nada?

VERONICA *
(se queda dura) *
¿Quién te dijo? *
ROMAN
(desde el baño)
Se lo dije yo esta mañana. Después lo *
hablamos, por favor. *
DARIO *
¿Y por qué no lo podemos hablar ahora? *
56.

VERONICA
(mira a Alejandro) *
¡Porque no es momento de hablar del *
tema!

ALEJANDRO
Pucha, che, qué duro, les llegó todo
junto...

VERO
¿Cómo “todo junto”? *
ALEJANDRO
Y, lo de ustedes, éste que se va a
España...

VERO
¿Quién se va a España? ¿Pero me están *
jodiendo? *
(Alejandro se queda duro)
¿Vos te vas a España? ¡No sabía nada!

DARIO
¿Y qué voy a hacer acá?...

VERO
¡Román!

Sale disparada al baño. Abre la puerta y sorprende a Román


entrando a la ducha desnudo. Román se mete en la ducha y se *
tapa con la cortina. En su abrupto movimiento golpea varios *
frascos que caen al piso.

ROMAN
¡Pará! ¿Qué hacés?

VERONICA
¿Vos sabías que Darío se va a España?

ROMAN
(sigue cubriéndose)
Me enteré en la comisaría, Verónica,
¿podemos hablar después de todo esto? *
VERONICA
¿Y no vas a hacer nada?
57.

ROMAN
¿Y qué querés que haga si estoy en
pelotas?

VERONICA
¡Yo no lo voy a permitir! ¡No, señor, *
de ninguna manera!

DARIO
Ya lo tengo decidido, mamá.

ROMAN
¿Cómo que lo tenés decidido? De eso sí *
no sabía nada.

DARIO
¡Si te conté, papá!

ROMAN
Que juntabas la plata, no que lo *
tenías decidido... *
Darío entra al baño. *
DARIO
No se puede hacer nada acá, mamá.

Silencio. Verónica no encuentra respuesta. Se viene abajo.


Los ojos se le llenan de lágrimas. Se sienta en el inodoro, *
exhausta. Román, desde la ducha, le acaricia el hombro. *
Alejandro mira esta postal. Pausa.

ALEJANDRO
Porqué no te venís a laburar conmigo,
Román.
(Todos se quedan duros)
A la Municipalidad. Para que no se
sigan yendo.

VERONICA
¡Darío no se va a ningún lado! ¡Está
muy contento acá! ¡Decile, Darío!
(Darío no responde)
¡Sí que estás contento, tarado!

ALEJANDRO
No es momento de ser apolítico, Román.

ROMAN
Apolítico no, apartidario. Yo hago
política en el club.
58.

ALEJANDRO
¿Para quién? ¿Para veinte chicas que
quieren bailar?

ROMAN
No son veinte, son más de
trescientas...

ALEJANDRO
Dejate de joder. ¿Qué te pasó, Román? *
Vos no te imaginás lo que era tu viejo *
hace veinte años. Acordate aquel día *
de la Asamblea por el comedor. ¿Cuánta *
gente había? 300, 500, qué sé yo, el *
aula magna a pleno. Y vos parado ahí *
enfrente de todos, y te escuchaban. *
¡Te escuchaban! Ese poder... que te *
escuchen... Era envidiable... ¿Te *
acordás, Verónica?
(Verónica se encoge de
hombros)
¿Te acordás o no te acordás?
(Verónica no dice nada) *
Te acordás. *
(silencio de todos) *
¿Qué pasó?

ROMAN *
(en voz baja) *
Andate. *
ALEJANDRO *
¿Sabés lo que sería si vos y yo *
estuviéramos de acuerdo? *
ROMAN *
Andate. *
Se mantienen la mirada un segundo. Alejandro concede una *
sonrisa y se va. *
59.

49 EXT. EMBARCADERO - DIA 49


Román llega al embarcadero. Frente a él, el río angosto.
Del otro lado, una villa.

ROMAN
¡¡Dalmaaa!!... ¡Daaalllllmmmmaaaaa!!!

Una señora mayor en la otra orilla, mira a Román y grita.

SEÑORA
¡¡¡¡Glaaaadyyyys!!!!

ROMAN
¡¡Dalmaaaaa!!!

Gladys (30) aparece en otra casa.

SEÑORA
¡¡Que la llaman a Dalma, del club!!

GLADYS
(grita hacia otra casa)
¡Dalmaaaa!!!!

Dalma se asoma por una ventanita. Ve a Román haciéndole


señas del otro lado del río.

50 EXT. CANCHA DE HOCKEY SOBRE CESPED - DIA 50


Román camina junto a Dalma, un poco asustada, hacia el
club.
60.

ROMAN
¿Vos vas a la escuela?

DALMA
Sí...

ROMAN
¿Seguro? ¿Y cómo se llama tu escuela?

DALMA
Escuela...

ROMAN
Ah, ahora sí, me quedo más
tranquilo... Vamos bien vos y yo... ¿Y
de dónde te gusta el ballet?

50A EXT. MONOBLOCKS DE AMADEO - NOCHE 50A


Román baja del auto. Saca una valija del baúl y va hacia
los monoblocks.

51 INT. DEPARTAMENTO DE AMADEO - NOCHE 51


Amadeo mira televisión, tomando cerveza, parado en la
puerta. Timbre. Abre. Es Román, con un bolso, que sonríe
incómodo.

ROMAN
Buenas, la niñera...

AMADEO
(lo abraza)
Hermano, qué cagada... Che, olvidate
lo del otro día...

ROMAN
¿Qué? ¿Que me separé, que me metieron
en cana, que a Darío lo rajaron, que
nos quedamos sin club...

AMADEO
Buah, ya te olvidaste.

ROMAN
(sonríe)
No, boludo, perdoname.

AMADEO
(Saca una cerveza de la
heladera y se la ofrece )
Nah, si tenías razón.
61.

ROMAN
No, ¿qué razón?...
(mira la cerveza de Amadeo)
Che, ¿No tenés ganas de comerte un
heladito?

AMADEO
Si, bueno, si tenés ganas.

ROMAN
¿Tenés cable?

AMADEO
Estoy colgado. Es buenísimo. Tenés 80
canales y cien años de perdón.

52 INT. DEPARTAMENTO DE AMADEO - NOCHE 52


Román y Amadeo miran televisión, sentados en el sofá, con
las pies sobre la mesita ratona. Comen helado de sendos
potes.

AMADEO
(mete la cuchara en el pote
de Román)
A ver esa mierda.

ROMAN
Pará, ¿no era que no te gusta el
limón?

AMADEO
(lame la cuchara)
Y, ahora sí, será la edad. ¿Cómo se lo
tomó Macarena?

ROMAN
Le dije que te venía a cuidar, que
estabas con gripe...

AMADEO
¡No, boludo, cómo le decís eso! ¡Se va
a preocupar! ¡Si nos adoramos con la
pendex!

ROMAN
Si querés la llamo y le digo que la
madre me dejó por otro así se queda
tranquila.

AMADEO
Si no tengo teléfono.
(lame la cuchara)

ROMAN
¿Cómo no tenés teléfono?
62.

AMADEO
¡Si me llamaras para disculparte lo
sabrías! ¿Para qué le voy a dar guita
que no tengo a una compañía que no
hace más que estafarme?

ROMAN
Para que te dé un teléfono.
(Amadeo pone la cuchara
lamida en el helado de
Román)
¿Qué hacés, asqueroso?
(Amadeo lo ignora)
¿Y si me llama Verónica?

AMADEO
Que te llame al celular.

ROMAN
¡No me llama nunca al celular, si es
carísimo! ¡El celular es para el
laburo!

AMADEO
Que se joda. Al final, uno es el
boludo que se preocupa y cuando ellas
se quieren rajar, les importa un
carajo de vos.

ROMAN
Eso sí, para una mina cuando fuiste,
fuiste.

AMADEO
Te echó flit y cero culpa.

ROMAN
Hasta con placer, te diría.

AMADEO
Nacimos para sufrir.

Se quedan los dos en silencio, mirando tele. Después de


unos segundos, Amadeo se levanta un poco de costado,
emitiendo un sonoro y largo flato.

AMADEO
Esto es la felicidad.

53 INT. RESTAURANTE DE CATEGORIA - NOCHE 53


Lujoso restaurante francés. Entra Graciela, muy elegante.
La atiende una señorita.
63.

GRACIELA
Buenos días... Busco al señor...
(mira un papelito)
Julio Quintana...

Ve que JULIO (50), elegantísimo, le hace señas. Graciela


sonríe, impactada. Le hace señas de que espere.
Disimuladamente, se mira en un espejo y se pinta un lunar
cerca del labio. Va hacia él.

JULIO
Bonjour mademoiselle...

GRACIELA
No, Je ne suis plus mademoiselle
malheuresement, je suis deja madame,
mon chere...

JULIO
(se ríe, es encantador)
No, me mataste. No entendí nada. ¿Ves
por qué necesito tomar clases?
(le besa la mano)
Julio, mucho gusto.

GRACIELA
Enchantee, Jules.

JULIO
Por favor, me estás humillando.
(se sientan)
Te agradezco infinitamente que hayas
venido. Estoy como loco con la
empresa, espero que no sea mucha
molestia.

GRACIELA
No, por favor. Todo lo contrario. Pero
no era necesario, podía ir a tu
trabajo.

JULIO
No, ¿qué trabajo? Si soy el dueño...
(se ríen los dos)
No, en serio, si vamos a empezar una
relación empecemos con todo. Conozco
otra palabra en francés. ¿Champagne?

Graciela sonríe. Julio la mira seductor. Graciela está


nerviosa, pero excitada. Julio le muestra la carta de
vinos.

JULIO
A ver, este. Decilo en voz alta.
64.

GRACIELA
(ve el precio)
¿Este, seguro? ¿No querés uno de más
arriba? Por mí no hay drama.
(Julio hace gesto de “no son
buenos”)
Bueno... Dom Perignon, mil neuf cent
quatre vingt quatorze.

JULIO
¿No será muy dulce, no?

GRACIELA
No, más bien tirando a salado.

Se ríen. Graciela va entrando.

54 INT. RESTAURANTE DE CATEGORIA - NOCHE 54


JULIO
Mirá, viene un grupo francés en dos
semanas, y quiero impresionarlos un
poco. Es un contrato multimillonario,
viste.

Llegan los platos, suculentos, finos. Graciela los mira,


casi con lágrimas en los ojos.

JULIO
¿Seguro no querés una ensalada con
queso de cabra?

GRACIELA
Sí..., bah, nunca comí, pero...

JULIO
Algo más tenés que comer, en serio.
(al mozo)
Perdón, una ensalada con queso de
cabra, por favor. ¿Qué decías?

GRACIELA
No, que... no sé, tres o cuatro veces
por semana sería ideal. O todos los
días, yo por mí... No sé si en dos
semanas llegás.

JULIO
(resopla frustrado)
¿Y vos no vendrías conmigo como
intérprete? Te pago aparte, claro.

GRACIELA
¿Yo? Ay, no sé si me animo...
65.

JULIO
¿Por que no? Oíme, hablás perfecto,
creo, sos simpatiquísima, sos hermosa,
me podés llegar a salvar

Graciela se queda sin palabras. Balbucea un “bueno”.

55 INT. RESTAURANTE DE CATEGORIA - NOCHE 55


Café. Postres terminados. Hay menos gente en el
restaurante. Julio sirve más champagne. Graciela está un
poco entonada.

GRACIELA
Y bueno, me tuve que poner firme. Le
dije, mirá Eduardo, si vos estás tan
enamorado de esa...
(le hace señas con el dedo de
que complete la frase)

JULIO
Mademoiselle...

GRACIELA
(corrige)
Fille... Si estás tan enamorado de
ella, te vas a tener que ir.

JULIO
Bien hecho. ¿Y él que te dijo?

GRACIELA
Nada. Se fue. Y hace seis meses que no
me habla.
(Termina la copa de
champagne)
C’est fini.
(se seca con la servilleta y
se le borronea el “lunar”)

JULIO
(la mira. Pausa. Se acerca)
Mirá, yo no sé mucho francés, pero me
acuerdo de un tango... “Se adivina con
mirarte que no te han querido bien”.

GRACIELA
(seductoramente, muestra el
lunar borroneado)
Sé... a los franceses les encanta el
tango...
(se ríen)
Bueno, ¿cuándo empezamos entonces?
66.

JULIO
(seductor)
Cuando vos quieras...

GRACIELA
Bueno, mañana si querés... Demain... A
ver: Demain,

Julio repite. Ella corrige. Los dos se quedan mirándose a


los ojos. Interrumpe el momento una nena FLORISTA.

FLORISTA
¿Me compra una, don?

Aparece el Mozo y se lleva a la Florista fuera del lugar.


Graciela la ve irse, con una semi-sonrisa. Julio mira a la
nena, luego a Graciela...

JULIO
Enseguida vuelvo.

GRACIELA
¿Qué vas a hacer? ¡No!

JULIO
Dale, un poco de ¿“romance”? (románs)

GRACIELA
Romantisme.

Julio sale a la calle, detrás de la Florista. Graciela lo


ve alejarse con emoción. Llega la cuenta. Graciela mira
disimuladamente, y larga un pequeño “Oh, la, la”. Se queda
sonriendo, en trance total.

56 INT. HABITACION DE AMADEO - NOCHE 56


Amadeo se saca los pantalones. Román, camiseta y
pantalones, se tira en el sofá cama y se clava el armazón.

ROMAN
Uy, ¿se lo compraste a un fakir este
sofá?

AMADEO
¿Por qué no te sacás los pantalones?

ROMAN
No, dejá, así me acolcha un poco. Si
no me voy a dormir al club...
(se acuesta)
Uy, boludo... ¿De dónde vamos a sacar
40 lucas?
67.

AMADEO
Y, no sé, habría que averiguarlo.
Bueno, che no rompas el climita ahora.
Venite conmigo, papi.

Se acuesta al ado de él. Román salta, disparado.

ROMAN
Pará, boludo, no jodás.

AMADEO
Eh, qué miedito, eh... Dale, contame
qué pasó con Verónica.

ROMAN
No, que...
(Se sienta. Huele el aire)
Pará... ¿olés? ¿Quién está? ¿Patoruzú
en el armario? Qué olor a pata, sucio.

AMADEO
¡Será esa colonia de anchoas que te
compraste, grasa!

ROMAN
¡Sacá estas armas letales de acá!

Va a la cocina con las zapatillas de Amadeo.

AMADEO
Bueno, che, ¿Me vas a contar qué pasó
con tu mina, mal amigo?

ROMAN
¡Y qué sé yo! Le agarró el viejazo, no
sé, quiere romance, pasión...

AMADEO
¿Te metió los cuernos?

ROMAN
¡No, boludo! Qué sé yo, conoció un
tipo, está media así, obnubilada.
(se vuelve a acostar)

AMADEO
¿Se lo garchó o no se lo garchó?

ROMAN
¡Pero qué importancia tiene eso!

AMADEO
¡Cómo que no! Si se lo garchó cagaste.
68.

ROMAN
¿Y si se enamoró nada más?

AMADEO
Y, también cagaste.

ROMAN
¿Y si es lo mismo qué importancia
tiene?

AMADEO
Sigamoslós, boludo. Dale.

ROMAN
¿Estás loco, para qué?

AMADEO
¿Cómo para qué? ¡Para sacarte la duda!
¡Para encararlos! ¡Hacer kilombo! ¿No
estás indignado?

ROMAN
¡Así no se soluciona nada!

AMADEO
¿Te parece?

ROMAN
¿Sabés lo que me dijo? Que con este
tipo tiembla, que siente cosas que
conmigo ya no... que la pasión, bah,
qué sé yo...

AMADEO
Se lo garchó. Qué hija de puta.

ROMAN
(se vuelve a parar)
Me voy al club, boludo.

AMADEO
¡Pará! ¿qué te dije?

ROMAN
¡No es una hija de puta! Tiene dudas,
está insatisfecha, por ahí yo no le
pude dar lo que necesitaba....

AMADEO
Bueno, viéndolo así... pobre mina...

ROMAN
Tampoco “pobre mina” ¿es todo mi culpa
ahora? ¿De quién sos amigo vos?
69.

AMADEO
¿Sabés que me estás volviendo loco?

ROMAN
¡Bueno, no hablemos más de Verónica!

AMADEO
¡Sí, no hablemos más de minas! ¡Te
revientan la cabeza!
(se vuelven a acostar)
Como esta histérica de Cristina.

ROMAN
¿Qué? ¿qué onda con Cristina?

AMADEO
(se apoya en el hombro)
No, salimos un par de veces, la mina
MUY seductora, y después no sé, que no
soy el tipo... que quiere algo sólido
y confiable que la lleve a su
objetivo.

ROMAN
Dale el número de Angelito que vende
un Falcon del 79. La cagada que es
verde.

AMADEO
Está bien que Adán en el Paraíso haya
dado una costilla por tener una mujer,
pero yo ahora tengo mi tele, mi
cable...
(le pasa los dedos por el
pecho a Román)
... mi chico...

ROMAN
(salta)
¡Pará, boludo! ¡Mirá que me voy al
club!

57 INT. RESTAURANTE DE CATEGORIA - NOCHE 57


Graciela sigue esperando. Se acerca el Mozo.

MOZO
Perdón, ¿Señora Graciela? Tiene un
llamado en recepción.

Graciela lo sigue hacia recepción, extrañada. Atiende.

GRACIELA
¿Hola? ¿Bruno?

JULIO (OFF)
No, Julio.
70.

GRACIELA
¿Dónde estás, qué te pasó? Te estoy
esperando preocupada y...

JULIO (OFF)
(interrumpe)
Disculpame, te juro que me caíste
genial, pero... si no, no como.

Y corta. Graciela se queda dura. El del mostrador la mira.


Graciela trata de decir algo, pero no puede hablar, sin
aire.

58 INT/EXT. COCHE DE ROMAN - NOCHE 58


Román maneja. Graciela con la cabeza apoyada en el vidrio.
Respira hondo y el aliento empaña el vidrio. Silencio.

ROMAN
No te pongas así, che... Si ya me
estaban por cancelar la tarjeta por
falta de uso. Me lo pagás cuando
puedas...

GRACIELA
Por qué no me invitó a un tenedor
libre este sorete...

ROMAN
Y bueno... un día de vida es vida.

GRACIELA
Te voy dando algo en cuanto pueda,
dejame ver cómo hago...

ROMAN
No te preocupés.

GRACIELA
¿Cómo no me di cuenta? Si era obvio,
¿qué me van a llevar a mí de traduc...
(se contiene)
Qué boluda... Me hace acordar a la
mina ésa, la periodista...

ROMAN
¿Magdalena?

GRACIELA
No, Luisa Lane. Lo tenía a Súperman al
lado de ella y no se daba cuenta que
con sacarle los anteojos ya estaba...
(con lágrimas en los ojos)
Súperman... otro sorete...
71.

59 INT. DEPARTAMENTO DE AMADEO - NOCHE 59


Román llega. Se apoya en el marco de la puerta, sonriendo
con cariño, como quién contempla a su mujer dormida. Vemos
que es Amadeo, durmiendo despatarrado. Román se tira en el
suelo.

60 INT. DEPARTAMENTO DE AMADEO - NOCHE 60


Román desvelado. Se agita y se lastima. Suena el timbre.
Atiende el portero. Amadeo se despierta.

ROMAN
Hola...

AMADEO
¿Qué pasó? ¿quién es?

ROMAN
Ah, si... Pasá.
(abre)
Cristina...

AMADEO
¿Qué? ¿Y por qué le abrís?

ROMAN
Quiere hablar con vos.

AMADEO
¿A esta hora? ¡Que me llame por
teléfono!

ROMAN
¡Si no tenés teléfono!

AMADEO
Dale tu celular.

Suena el timbre. Amadeo se encierra en el baño. Román abre.


Es Cristina, ojos enrojecidos. Se sorprende.

CRISTINA
Ah... ¿está Amadeo?

ROMAN
Qué sorp... a ver, esperá...
(grita)
¡Amadeo!

AMADEO (OFF)
¿Sí, quién es?

CRISTINA
¡Cristina! Necesito hablar con vos.
72.

AMADEO (OFF)
(Pausa)
¿Cristina qué?

CRISTINA
No me quiere hablar... se ve que lo *
hice mierda... Mirá, yo le traía una
cosita... ¿se los das vos?
(Le da dos anillos de
alambre)
Son dos anillos que hice con...
(Román sonríe, enternecido)
Con los aparatos de Bruno...

A Román se le borra la sonrisa. Va al baño. Cristina, a


punto de llorar, escucha el cuchicheo “Pelotudo” “¡No”
“Mirá lo que te hizo” “¿qué es esto? ¡Ay, me pinché!” “Andá
porque te cago a tortazos” “Bueno”. Román vuelve,
sonriendo.

ROMAN
Ya está todo bien. Vení, pasá.

El brazo de Amadeo aparece y prende el CD: “Night time is *


the Right Time” de Creedence. Cristina sonríe. Román ofrece *
su brazo y la invita a entrar, como a una novia al altar.

Amadeo aparece, en slip y remera, al lado de la cama,


iluminado por la luna. Se suelta el pelo y lo agita. Estira
el brazo hacia Cristina.

Román entrega a Cristina. Amadeo le pone el anillo, como un


novio en el altar. Se abrazan y se besan. Román agarra la
campera y se va.

61 INT. CLUB. DEPOSITO - NOCHE 61


Román abre el depósito.

Botes rotos, cosas oxidadas. Se arma un catre. Se sienta y


mira el enorme depósito. La luz de la luna entra por las
ventanas. Lentamente, empieza a oír ruido de baile. Un
lejano Alberto Castillo cantando “Siga el Baile”, las
risas, los gritos, los bombos, de manera fantasmal. Se
acerca a un rincón y ve viejos elementos de kermesse
arrumbados. El avión oxidado, el palo enjabonado, stands
rotos. Se empieza a oír música de kermesse.

62 EXT. KERMESSE - NOCHE 62


A lo lejos, se ve la cancha de fútbol: “LUNA DE AVELLANEDA”
se lee gigante, hecho con bombitas de colores. Stands con
juegos, el enorme palo enjabonado. Una kermesse a pleno. Se
oye a Emilio por los altoparlantes:
73.

EMILIO (OFF)
¡Muchísimas gracias, queridos amigos!
Gracias por acudir a nuestra
institución en este momento crucial.
Desde lo alto de este palo enjabonado,
70 años de historia nos contemplan.
Nos vemos unidos por un lazo de amor y
fe, un manantial de dicha y esperanza,
y una deuda de contante y sonante.

63 INT. GIMNASIO - NOCHE 63


En el gimnasio hay un gran escenario, de donde habla
Emilio, engominado, elegante. Darío y otros ponen sillas.
Román y Amadeo preparan un stand de premios.

AMADEO
¿Cómo que se va a a España? ¿Y vos qué
le dijiste?

ROMAN
Ya lo decidió. ¿Qué querés que le
diga?

AMADEO
Es que vos no tenés feeling con los
pibes. Dejame que le hablo yo,
geronte...

Amadeo camina canchero hacia Darío y se le planta.

AMADEO
A ver, boludazo, dame tres buenas
razones para irte a España.

DARIO
Trabajo estable, poder ahorrar, vivir
tranquilo...

Sigue poniendo sillas. Amadeo lo mira serio y camina de


vuelta hacia Román. Toma una lata de cerveza de un balde.

AMADEO
Me cagó.

Abre la lata con un “ppffft”.

64 EXT. KERMESSE - NOCHE 64


Vemos un hombre con zancos. Graciela camina con Bruno. *
74.

GRACIELA
Mirá, Bruni, mamá está mal de plata,
no por culpa tuya ni mía, ya sabés muy
bien de quién, pero bueno, vos no
comprés nada, no pidás nada, no toqués
nada. ¿está claro?
(Bruno, serio, asiente)
Bueno, andá, divertite.

BRUNO
¿Y qué hago?

GRACIELA
No sé, mi amor, mirá cómo juegan los
demás. Vení que te enseño.

Se acercan al palo enjabonado. Un Hombre trata de trepar al


palo enjabonado. Graciela lo alienta, aplaudiendo
histérica.

GRACIELA
¿Ves? ¡Aplaudí, Bruno, aplaudí que es
divertido!

65 EXT. KERMESSE - NOCHE 65


La campana del chanchito se abre. Aparece el chanchito de *
rey. La gente no grita, impresionada. Detrás de ellos está *
el hombre con zancos. *

66 INT. GIMNASIO - NOCHE 66


Emilio termina y Don Aquiles se acerca al micrófono.

DON AQUILES
Desde aquel día, hace ya 70 años, en
que tres galleguitos se detuvieron en
un...

Y la música de cumbia a todo volumen lo interrumpe.

67 EXT. KERMESSE - NOCHE 67


En la parrilla, Ismael corta un poco de chorizo y se lo
pone en la boca a un bebito, en brazos de una joven.

ISMAEL
A ver, mamita, a ver... mire qué rico
choricito que le da papá...
75.

68 INT. GIMNASIO - NOCHE 68


Ya con toda la gente instalada, comienza la entrega de
premios. Emilio anuncia.

EMILIO
Y le damos el premio al Mejor
Compañero de la división mini-basquet
a...

AMADEO
¡Ramiro Cohen!

Un chico de seis años se adelanta. Todos aplauden. Amadeo


entrega el premio, lo alza y se saca una foto con él.

Roman ve que Don Aquiles lo llama desde lejos.

69 INT. OFICINA COMISION DIRECTIVA - NOCHE 69


Román, Alejandro y Don Aquiles.

ALEJANDRO
Hay unos tipos, que yo venía pateando
porque, bueh, por el club, que quieren
comprar las instalaciones para poner
un casino. No un bingo, eh. Un CASINO.
Con todo, no te digo Las Vegas, pero
gigante.

ROMAN
¿Qué?... ¿pero qué... no entiendo...

ALEJANDRO
Escuchame, es la solución. Ellos pagan
la deuda, y además ofrecen 200 puestos
de trabajo para los socios del club.
Yo ya hablé con los comerciantes de la
zona y no lo pueden creer. Va a traer
gente de la capital, del sur...

ROMAN
Ustedes no pueden hacer nada, el
estatuto dice que...

ALEJANDRO
El estatuto dice que se vende si lo
deciden los socios.

ROMAN
También dice que en caso de venta la
plata va a beneficencia, no a ellos.
76.

ALEJANDRO
Pero los empleos sí son para ellos.
Pidamos una Asamblea.

ROMAN
...Los socios no van a disolver el
club.

ALEJANDRO
¡Llamá a una Asamblea a ver qué
eligen! ¡No es mucho lo que pide la
gente, un laburito nada más! Yo trato
de ayudar, pero necesito que me des
una mano.

ROMAN
Y porqué no usás la que tenés en la
lata.

ALEJANDRO
¿Qué me estás, diciendo chorro ahora?

Se le tira al humo. Román se pone en guardia.

DON AQUILES
(golpea la mesa)
¡Bueno, basta, carajo!

Se sorprenden ambos. Nunca dijo una “mala palabra”.

DON AQUILES
¡No los aguanto más a ninguno de los
dos! ¡Si no es por las figuritas, es
por Verónica o por una foto ridícula,
la cuestión es pelearse! ¡El club no
se vende, porque lo digo yo y basta!

ALEJANDRO
Las cosas no son así, hay que...

DON AQUILES
¡Las cosas son como siempre! No te
creas tan moderno. Sos como el gordo
que le marcaba el ritmo a los remeros
del César, y se creia el patrón hasta
que entraba el ariete. El club no se
vende. Lo va a salvar el trabajo de la
gente honesta. Y si no iremos a la
Justicia. Y si no sirve ni la
honestidad, ni el trabajo ni la
justicia, pondremos un abogado.
(a Román)
Vamos a trabajar.

Se va. Alejandro y Román se miran, como chicos retados.


77.

ALEJANDRO
¿Viste? Dijo que era ridícula la foto.
¿Por eso tiraste el carnet, no?

ROMAN
¡No lo tiré, lo perdí!

70 INT. GIMNASIO - NOCHE 70


Sigue la entrega de premios. Una chica recibe el premio a
la mejor actitud carismática. Las amigas la abrazan
emocionadas, y la chica recibe el premio llorando. Nandito *
quiere sacarle el premio a Ramiro Cohen. *
Amadeo sigue entonándose. Cristina se acerca y lo abraza.

CRISTINA
Hola, amorcito...
(se besan)
No empieces a tomar, eh...

AMADEO
¡Pero, che! ¡Un poquito, qué mala sos!
¡Es un día especial!

CRISTINA
¿Tenés buena ubicación?

AMADEO
¿Vos dónde vas a estar?

CRISTINA
Yo voy a estar atrás del telón.

AMADEO
Entonces mi asiento es una porquería,
se ve el escenario nada más.

Se ríen y se dan besos con gruñidos. Están en llamas.

EMILIO
¡Y pasamos de basquet a patín
artístico! Quiero recordarles a
nuestros socios que las chicas han
salido segundas en la Interclubes
de...

Una voz interrumpe. Es Ismael, con todos los de básket.

ISMAEL
¡Perdón! ¡Perdón, Emilio, pará!
Nosotros también queremos dar un
premio.
(sube al escenario)
78.

Acá los de primera de basket hicimos


una colecta y nos dio para un premio
solo, así que tenemos que combinar
todos, mejor deportista, mejor
compañero, mejor onda y peor aliento
al Glorioso ¡Amadeo Grinberg!

Amadeo se sorprende. Aplausos. Cristina lo besa. Amadeo


sube, emocionadísimo. Todos los jugadores se le tiran
encima.

71 EXT. KERMESSE - NOCHE 71


Graciela habla con el parrillero.

GRACIELA
Pero si están pagando un peso van a
pagar un peso veinte ¿Qué problema
hay?

PARRILLERO
¡Es el 20 por ciento de un cantazo!

GRACIELA
Oíme, marmota, tenemos que recaud...

Se frena. Ve a Bruno jugando en un puesto, con un hombre.


Bruno se ríe. Graciela reconoce al hombre, y se queda dura.
Junta fuerzas y se acerca, firme.

GRACIELA
Eduardo...

Eduardo (± 50), su ex-marido, se sorprende. Incómodo.

EDUARDO
Hola... ¿cómo estás?

Le sonríe y le da un beso. A Graciela se le caen las


medias.

GRACIELA
Qué sorpresa... No me... nos podríamos
haber encontrado en otro lado.

EDUARDO
Es que me invitó Brunito.

GRACIELA
Ah, ¿te llama Brunito? Hay que tener
cuidado con la cuenta de teléfono,
hijito, que después la paga mamita.
(sincera)
Me parece bárbaro, me pone contenta.
Si querés nos encontramos nosotros,
tenemos mucho para hablar.
79.

EDUARDO
Sí, claro, cuando quieras.

GRACIELA
(sacándole unas pelusitas)
Che, no hacía falta que vinieras tan
elegante, mirá yo cómo vine...

EDUARDO
No, es que tenemos un cumpleaños de
quince después...

GRACIELA
Ah, no... Brunito se tiene que
quedar... Me tendrías que haber
avisado...

Le ajusta el nudo de la corbata. Interrumpe HEIDI (±30).

HEIDI
¿Vamos yendo, amor?

Graciela entiende. Instintivamente le aprieta más fuerte el


nudo, ahogándolo. Eduardo le agarra la mano y se suelta.

EDUARDO
Graciela, te presento a Heidi.

GRACIELA
(sonríe con esfuerzo)
Ah, vos sos la que te jeidi.

EDUARDO
Bueno, nos vemos el jueves, ¿eh?

GRACIELA
Dale, ¿dónde?

EDUARDO
En el juzgado. ¿No era la audiencia?

Graciela hace gesto de “ah”. Eduardo le da un beso, se


disculpa con Bruno y se va con Heidi, apurado. Graciela se
queda hecha mierda. Bruno la ve triste y empieza a aplaudir
para alegrarla.

72 EXT. KERMESSE - NOCHE 72


Amadeo, con todos los de basket, van avanzando entre la
gente. Riéndose. Tomando. Se van para el fondo.

73 INT. GIMNASIO - NOCHE 73


Cristina sube al escenario. Va al micrófono.
80.

CRISTINA
Hola, ¿qué tal? Yo soy Cristina, soy
la profesora de danza del club...
bueno... con las chicas preparamos un
espectáculo para mostrarles lo que
hacemos... y...
(muy nerviosa)
Bueno, yo se lo quería dedicar...
también... me ganaron de mano...
(se ríe, nerviosa)
A Amadeo... mi amor.

Todos hacen "uuuhhhh", mezclados con aplausos y risas.


Cristina se pone muy colorada, y mira a ver si está Amadeo,
pero Amadeo no está.

CRISTINA
(se ríe, incómoda)
Parece que justo no está... bueh...

Empieza la música. Salen chicas adolescentes. Bailan un *


tango. Cristina mira desde atrás, preocupada. Dos parejas *
de chicas bailan tango entre ellas, muy sensualmente. Don *
Aquiles se acerca a Cristina. *
DON AQUILES *
Pero están bailando juntas dos chicas. *
CRISTINA *
Sí, así es un poquito más sexy. *
Don Aquiles mira a Cristina, extrañado. Román va hacia los *
camarines.

74 INT. CAMARINES - NOCHE 74


Caos total. Los otros grupos de chicas se preparan con
otras ropas. Verónica se mueve de un grupo a otro ayudando
con los detalles.

Entra Román y la ve, de lejos. La mira, transpirada, con el


pelo revuelto. Se queda extasiado. Verónica lo ve y sonríe.
Se quedan así, un segundo.

Pero lo interrumpe Macarena, que se le tira encima.

ROMAN
¡Pero qué hermosa princesa!

MACARENA
¡No soy princesa, papá, es el traje de
ballerina!

ROMAN
¿Querés que salga a bailar con vos.
Mirá que soy bueno, eh, mirá.
80A.

Baila con ella unos pasos de baile ridículos. Se ríen.


Román se arrodilla.
81.

ROMAN
Maca, mi vida... Después, cuando
salgas a bailar, quiero que salgas a
bailar para vos, ¿dale? No para mí, ni
para mamá. Para vos. Y para tu club.
Porque no es el club ni de mamá ni de
papá. Es tuyo, ¿sí?

Maca asiente. Román le toma la cabeza y le da un beso. Por


un segundo es mucho más profundo de lo que parece.

75 EXT. KERMESSE - NOCHE 75


La campana del chanchito se vuelve a subir, pero el *
chanchito no está. Ven que se lo está llevando el hombre de *
zancos. Lo empiezan a correr. El zancudo salta por la valla *
y escapa. *

76 INT. GIMNASIO - NOCHE 76


Danza española. Es un tango andaluz. Don Aquiles se acerca *
a Cristina. *
DON AQUILES *
Pero oye, niña, esto es música *
andaluza. *
CRISTINA *
Sí, ¿usted no me pidió música *
española? *
DON AQUILES *
Pero una jota, una muñeira, no esto. *
CRISTINA *
¡Pero esto tiene vida, don Aquiles, *
tiene sexo! *
Cristina lo deja y le pregunta a un chico por Amadeo. Don *
Aquiles mira la danza andaluza, apreciándola por primera *
vez. *

77 EXT. COSTADO DE LA KERMESSE - NOCHE 77


Darío está con unos amigos. Román lo separa del grupo.

DARIO
Ah, papá, te presento a Yanina...

ROMAN
Ah, qué lindo, un placer.
(arastra a Darío)
Vení, vení un poquito.

ROMAN
Che, Darío, decime una cosa... ¿Cómo
la ves a tu vieja?
81A.

DARIO
Y, no sé, últimamente anda medio...

ROMAN
Sí, a mí también me pareció...

DARIO
¿Y vos cómo estás?

ROMAN
Yo, bien... Acá estoy perfecto. Tiro
el catre y...

DARIO
¿Por qué no te venís conmigo?
82.

ROMAN
¿Adónde? Estás loco, mirá si me...

DARIO
¿Por qué no? ¿qué tenés acá?

ROMAN
(señala a su alrededor)
¿Y todo esto?

DARIO
¿Qué? ¿Para qué? ¿Salió algún genio de
acá? ¿Alguien que juegue en primera?
Te cagó la vida el club.
(Román lo mira, sorprendido y
dolido)
Bueno, yo no tengo nada acá.

ROMAN
Tenés tu casa.

DARIO
Pero entraron ladrones en mi casa.

ROMAN
¿Y qué hacemos? ¿Dejamos la casa o
echamos a los ladrones?

DARIO
(con cariño)
O les rompemos los vidrios, como al
Gordo Chicha...
(sonríen los dos) *
Yo quiero empezar algo nuevo, nada *
más. *
ROMAN *
Y eso se llama irse. *
DARIO *
¡No! Eso se llama “empezar- *
algo’nuevo”. Nada más. ¡No quiero *
aceptar cualquier cosa que me tiren! *
Ahí, resignado, indefenso, ¿para qué? *
¿para llegar a qué, eh? ¿a qué *
llegaste vos, papá? *
(Román, sin palabras. Darío *
recula, culpable) *
No te pongas así, che, no es para
tanto. Hay teléfonos, podés viajar. No
es como en la época de Don Aquiles.
Ahora es distinto.

ROMAN
Sí, es distinto. Nosotros los mandamos
sabiendo leer y escribir.
83.

DARIO
No seas malo que vas a terminar en
cana.

Tratan una sonrisa. Se quedan sin saber qué decir.

78 INT. GIMNASIO - NOCHE 78


MUSICA CLASICA. Salen las chicas. Román entra al gimnasio.
Maca, en el escenario, lo saluda feliz. Las chicas bailan
con entusiasmo. Macarena es muy grácil. Verónica la mira
desde el costado. Román sonríe, nota algo en el fondo y
deja de sonreír.

La última y más chica de la formación es Dalma. Tiene


zapatillas de baile gastadas y un agujerito en las medias.
Dalma no baila muy bien, apenas puede ponerse en puntas de
pie, pero parece estar en otro mundo, de puro placer. Se
mueve con una gracia inesperada. Sonríe extasiada.

Román, casi sin darse cuenta, empieza a quebrarse. Sus ojos


se humedecen y sólo parece mirar a Dalma. Se da cuenta de
que ahí, en esa nena que por esta noche se siente única,
está todo el sentido del club. Alejandro se le acerca.

ALEJANDRO
¿Cuál es tu hija?

Román se encoge de hombros, casi contestaría “Todas”, pero


termina señalando a Macarena.

ROMAN
Aquella.

La música termina, y todos aplauden. Dalma saluda,


sonriendo como nunca. Román la mira, emocionado y con
orgullo.

79 EXT. RINCON SOLITARIO CLUB - NOCHE 79


Varias parejas apretando. Amadeo está sentado en el suelo,
contra una pared, tomando de una botella. Cristina lo
busca.

CRISTINA
¡Amadeo! ¡Amadeo!

Amadeo trata de taparse con las manos, sin éxito.

CRISTINA
Mi amor... ¿qué hacés?

AMADEO
Nada, estaba descansando.

Trata de pararse, pero le cuesta. Cristina lo ayuda.


84.

CRISTINA
¿Estuviste tomando?

AMADEO
Dejame que puedo solo.
(la empuja)
¡Pero dejame, te digo! ¡No me rompás
más las pelotas!

CRISTINA
¿Pero qué pasó? ¿Por qué...

AMADEO
(burlándose, con voz de
tonto)
“Qué pasó, por qué”. ¡Pasó que me
tenés las pelotas llenas, eso pasó!

Algunos muchachos de las parejas se empiezan a levantar.

CRISTINA
¿Qué estás diciendo? ¿Por qué...

AMADEO
¡ANDATE, CARAJO!

La empuja, pero dos de los muchachos lo agarran. Cristina


no lo puede creer.

MUCHACHO 1
Pará, Amadeo.

MUCHACHO 2
Andá, Cristina, está en pedo, ya se le
va a pasar.

AMADEO
¡No estoy en pedo! ¡Estoy perfecto!
(ve a Cristina, congelada)
¿Qué me mirás? ¡Andate!

Los muchachos lo sientan. Cristina se va, humillada.


Después de varios pasos, vuelve y le empieza a pegar
patadas.

CRISTINA
¡Sos una mierda! ¡Hice el baile para
vos!

Los muchachos ahora la agarran a ella.

MUCHACHO 1
Pará, loca, ¿estás en pedo?
85.

CRISTINA
¡Si yo no queria estar con vos! ¿No me
bancaba yo el amor? ¿Quién no se banca
el amor?

Los muchachos la sueltan. Cristina se afloja y se empieza a


ir. Pero antes le mete otra patada. Ahora sí, se va.

79A EXT. KERMESSE - NOCHE 79A *


Por los altoparlantes se oye la voz de Nandito: “Culo... *
teta... pis... caca... pedo”, y una voz que lo saca de una *
patada: “¡Pará, Nandito!”. Ruido del micrófono que se cae. *

80 EXT. EMBARCADERO - NOCHE 80


Graciela sola. Román se acerca.

ROMAN
¿Qué hacés acá?

GRACIELA
No, un poquito de aire...

ROMAN
Se llenó al final. Por ahí zafamos.

GRACIELA
Sí... Te vi ahí con Verónica. ¿Todo
bien?

ROMAN
(se encoge de hombros)
¿Y vos con el sorete?

Graciela se encoge de hombros. Román ve un bote que cruza


el río: Dalma y el padre remando. Dalma está con la ropa de
baile y un globo.

81 INT. OFICINA COMISION DIRECTIVA - NOCHE 81


Graciela, Emilio, Don Aquiles, Román e Ismael, cuentan
plata. Muchas monedas y billetes arrugados desparramados
sobre una mesa. En el fondo, gente desarmando la kermesse.

GRACIELA
¿Acá está todo?

Desaliento y silencio. Finalmente, habla Don Aquiles.

DON AQUILES
Y, la gente quiere pero no puede.
85A.

GRACIELA
Bueno, igual lo meto en la caja
fuerte.

EMILIO
¿Acá?
86.

GRACIELA
Y, no la voy a llevar al banco, a ver
si se la afanan.

ROMAN
(ve que Don Aquiles está
serio)
Don Aquiles, al final lo interrumpimos
en la presentación, ¿cómo era lo de
los galleguitos que iba a contar?
(le guiña el ojo a Graciela)

DON AQUILES
No... Ya lo conté un montón de
veces...

GRACIELA
Dele, que la cuente, que la cuente...
(incitando a los demás)
¡QUE LA CUENTE!

DON AQUILES
No, bueno, un cuento de gallegos...
tres galleguitos que volvían de jugar
un partido de fútbol y el Chevrolé que
los traía se quedó en medio del campo.
Bah, no, una pavada...

GRACIELA
No, es linda...

DON AQUILES
No, que mientras uno lo arreglaba los
otros intentaron jugar un picadito...
y bueh, de a poco empezaron a
acostumbrarse a la oscuridad. Un
partido a la noche en medio del campo,
y se veía perfecto... y ahí la
vieron... una luna llena.. rozando el
horizonte... enorme, amarilla. En
Galicia, con las montañas, nunca se
veía así, con tanta luz... Yo ya se
los había contado, ¿no?

ISMAEL
Yo no la conocía.

EMILIO
Yo del Chevrolé no sabía nada.

DON AQUILES
Bueh... Al final del partido pensamos
que sería bueno tener un lugar donde
haya siempre luz, una luna
permanente...
(se ríe de sí mismo)
Parece una idiotez...
87.

y que porqué no podía ser ese mismo


lugar si parecía tener magia...

ROMAN
Y en ese campito construyeron el
club...

DON AQUILES
No, ahí al final pusieron un
Minimax...
(señala para un lado pero
duda. Señala para otro,
difuso)
No se vio más la luna. Pero fundamos
nuestro propio club.
(en gallego, muy cerrado.
Canturreando)
“A lúa non che falla,
sempre está ahí, aínda coas nubes. A
lúa, dáche todo, apenas sube”

82 EXT. RINCON SOLITARIO CLUB - NOCHE 82


En la oscuridad total se sienten unos gemidos. Se prende un
fósforo, iluminando la cara de Amadeo, tratando de ver
dónde está. El fósforo se apaga. Oscuridad. Prende otro.

Ve junto a él la botella de cerveza. Se apaga el fósforo.


Prende otro. Su vista se distrae en la llama, dejándose
llevar por ella. Tira el fósforo en la botella. Pfffff...
En la oscuridad se oye la botella estallando en la pared.

83 EXT. CASA DE CRISTINA - NOCHE 83


Cristina, sorprendida, sale a la calle de su departamento.
Ve a Amadeo sentado en la vereda, de espaldas a ella. Se
acerca y se para frente a él. Lo mira. Amadeo levanta los
ojos.

AMADEO
No sé cómo se hace para cambiar...

CRISTINA
(sonríe)
Y... habría que averiguarlo.

Se sienta al lado.

AMADEO
Hago lo que vos quieras.

CRISTINA
(le pasa la mano por el
hombro)
Hacé lo que puedas...

Se quedan así, abrazados, en silencio.


88.

84 INT. PASILLO HOSPITAL - NOCHE 84


Román corre por un largo pasillo. Amadeo y Emilio lo
saludan. Graciela discute con una enfermera en el fondo.

ROMAN
¿Qué pasó?

EMILIO
No sé, parece una especie de pequeño
preinfartito, algo así. Estábamos
tomando mate y... ahora estamos acá.

Román va hacia la sala.

AMADEO
¿Querés que vaya con vos?

Pero Román lo ignora. Entra a la sala.

85 INT. SALA DEL HOSPITAL - NOCHE 85


Hay 10 camas a cada lado del pasillo central. Román ve a
Don Aquiles en una cama del fondo. Va hacia él. Al
acercarse, se sorprende: Don Aquiles, por primera vez,
parece un anciano.

ROMAN
Don Aquiles...

DON AQUILES
Román... Qué susto, ¿no? ¿Me abrís la
ventana un poquito?

Román busca: no hay ventanas. Desde la entrada, Amadeo


mira.

ROMAN
No, no hay ventanas...

DON AQUILES
Quiero ver la luna...

ROMAN
Pero... no, está nublado, no se ve.

DON AQUILES
Ah, entonces despreocupate porque hoy
no me muero.

ROMAN
¡Pero claro, hombre! Si mañana es la
semifinal de básquet.
89.

DON AQUILES
¿Y cuándo es la votación?

ROMAN
¿Qué vota... ah, sí, la Asamblea es la
semana que viene. Pero de eso
olvídese, ¿quién va a votar por un
Casino?

DON AQUILES
¿Vino gente del club?

ROMAN
Sí... Todo el mundo...

DON AQUILES
¿Y mamá? No la dejes sola... No me vas
a fallar ahora.

ROMAN
No... algo... vamos a encontrar.

DON AQUILES
Abrime la ventana un poco.

ROMAN
No salió la luna todavía...

DON AQUILES
¡Mejor! Así la veo salir. ¿Viste cómo
sale acá? Naranja... Hace frío acá,
tenía razón Antonia...
(Román lo tapa con la manta)
El ruso me había dicho: “Ven conmigo”,
ahí a inmigración, así decía que era
mi papá. Imaginate, yo, 8 años, solo,
bah, con mi hermano Miguel, hablaba
gallego nomás, con un papá ruso...
Estabamos aterrados...El pelado de la
aduana lo miró al ruso y se empezó a
reír, y el ruso también... cómo se
reía el pelado... nos dejó pasar de
lástima... ¿No podés abrir la ventana?

Don Aquiles señala a lo lejos. Román ve un cortinado con


una lámpara apagada detrás.

DON AQUILES
¿Mamá te dijo que no abras? ¿Está
afuera?

ROMAN
...No sé, Don Aquiles...
90.

DON AQUILES
(en gallego)
¡Miguel! No le dijiste a mamá lo de
los conejos, ¿no? Por favor, abrí.

Román va hacia la cortina. Prende la lámpara y corre la


cortina, traslúcida, delante de ella.

DON AQUILES
Si lo ves al pelado decile gracias...

Román mira el trasluz de la lámpara y se pierde en ese


brillo. Sonríe con tristeza. Se da vuelta.

Don Aquiles está inmóvil, los ojos sin vida, mirando la


lámpara. Amadeo cierra los ojos. Román tarda en perder la
sonrisa.

86 EXT. CHACARITA - DIA 86


Amadeo y Román caminan en un lugar que no distinguimos.
Román tiene una caja en sus manos, Amadeo, media docena de
rosas.

AMADEO
Feliz, feliz como nunca. Esta mina
vale oro, me cambió la vida.
(Román finge interés)
¿Sabés que ayer fui a mi primer
reunión?

ROMAN
¿De qué?

AMADEO
(en voz baja)
De Alcohólicos Anónimos. Espectacular.
¿Vos sabías que siempre va a haber un
día peor y un día mejor? O sea que
pase lo que pase hoy va a ser un día
promedio. ¡Te cambia la vida, loco!
Ojo: hay que bancarse esta felicidad,
¿eh? Eso también te lo avisan.

ROMAN
Que bueno, che, en serio...

AMADEO
No, no sabés. Estoy así...

Amadeo aprieta el puño y, eufórico, grita: “HUUAA”. Los


descubrimos en medio de un cortejo en la Chacarita. Algunos
se dan vuelta a mirarlo. La caja que tenía Román es la urna
con Don Aquiles.
91.

Un poco más lejos están Emilio, Alejandro, y otro grupo de


gente. Graciela discute con el Empleado.

GRACIELA
A mí me dijeron en la cochería que las
manijas de bronce se reciclaban.

EMPLEADO
Señorita, son temperaturas muy
fuertes. Encima ese cajón, hubieran
comprado uno de roble, le dura toda la
vida.

Emilio intercepta a Román, de espaldas al grupo.

EMILIO
Pará un cachito. Quedate quieto.

ROMAN
¿Qué?

Emilio saca una lata de café de un bolsito. Abre la urna,


mete la mano y saca un puñado de cenizas. Las guarda en la
lata y vuelve a tapar la urna. Se limpia la mano en el
pantalón. Román está congelado.

EMILIO
Lo quiero tener en el club, con las
copas.

ROMAN
¿Qué copas?

EMILIO
Las de vino blanco. ¡Las copas de los
premios, querido!

Se va. En el camino lo intercepta Alejandro.

ALEJANDRO
Emilio, no tengo palabras...

EMILIO
Yo tampoco.

Le da la mano que acaba de meter en las cenizas.

Graciela le saca las flores a Amadeo, a pesar de él.

El Empleado está subido a una escalera, abriendo un nicho


chiquito.

EMPLEADO
A ver, ¿me pasan la urna?
92.

Graciela trata de alcanzarle la urna, pero no llega.

GRACIELA
A ver, Ismael...

Ismael, alto, le pasa la urna. Se oye una voz.

VOZ
Vamos, básquet.

Pequeñas risitas. Alejandro mira a Román, como diciendo


“¿ves? no les importa” por la falta de respeto. Román está
tenso. Alejandro hace la señal de la cruz, entrecruza sus
manos y las lleva hacia su cara.

ALEJANDRO
Padre nuestro que estás en los
cielos...

Los demás lo siguen tímidamente. Román ve que Amadeo está


robándose unos claveles en un nicho cercano. Va hacia él.

Alejandro, con las manos en la nariz, huele algo raro. Con


disimulo, se huele la mano que le estrechó Emilio. La baja.

Román se acerca por detrás a Amadeo, que no lo ve venir.

ROMAN
¿Qué hacés?

AMADEO
¡Ay, boludo! ¿Cómo me asustás así en
un cementerio?

ROMAN
¿Te estás afanando flores?

AMADEO
Las que compré me las sacó Graciela.
Hoy es nuestro mesario con Cri.

ROMAN
¿La vas a llevar flores de nicho?

AMADEO
¿Y qué culpa tengo yo si Don Aquiles
va y se muere justo en mi mejor
momento?

ROMAN
Es una falta de respeto.

AMADEO
No, uno no elige los momentos. Es día
a día, día a día.
93.

Mirá, hay que tener: alegría para


cambiar lo que se puede cambiar,
resignación para aceptar lo que no se
puede... coraje... no. Pará. Coraje
para cambiar lo que, pará, ¿cómo era?

ROMAN
Volvé a chupar, pelotudo.

AMADEO
No, en serio, la cosa es cambiar. Yo
estoy repensando un montón de cosas.
Mi relación con el club, por ejemplo.

ROMAN
¿Qué estás “repensando” con el club?

AMADEO
Nada. Pregunto. ¿Es tan mala idea lo
del casino o una oportunidad?

ROMAN
Pará, ¿me estás jodiendo?

AMADEO
¡Te tiro una, che, estoy pensando
nomás! Digo: ahora que cambié, ahora
que tengo una mujer que amo y puedo
formar una cosa estable, ¿Está mal que
que quiera estar mejor? ¡Decimeló!
¿Está mal?

ROMAN
No, estás mezclando todo, ¿qué tiene
que ver una cosa con otra?

AMADEO
¿Cómo que no tiene que ver? Alejandro
me dijo que me podía encargar del
mantenimiento...

ROMAN
¿Cuándo te dijo eso? ¿Hablaste con él?

AMADEO
El otro día, qué sé yo.

ROMAN
¿Vas a votar en contra?

AMADEO
¡Te digo que estoy pensando, che!
Todavía no tengo nada decid... al
final, yo era el pelotudo que no
servía para nada y ahora parece que mi
opinión es importante
94.

ROMAN
¿Vos sabés que eso es un curro que va
prendido todo el mundo y a vos te
tiran una migaja?

AMADEO
Pero eso yo no lo puedo cambiar. Puedo
cambiar mi vida. Y hay que tener, ahí
está, hay que tener sabiduría para ver
la diferencia.

AMADEO
Vas a votar en contra.

AMADEO
No puedo seguir con changas, quiero
empezar una vida nueva, qué nueva,
empezar una vida, por primera vez
en... bueno, en mi vida... Quiero
cuidar lo que tengo. A Cristina, bah.
(Román lo mira atónito)
¿Qué me mirás? ¿Por qué note mirás
vos? ¿No vas a hacer nada para evitar
que tu mujer se vaya?

Román lo mira, pensando.

87 EXT. CASA DE ROMAN - NOCHE 87


La casa de Román, de noche. Entra en cuadro Román.

ROMAN
No quiero, volvamos.

AMADEO (OFF)
Vamos, Román, bolas.

EMILIO (OFF)
Dale, metele antes que caiga la cana.

Arrancan los primeros acordes de “La Vieja Serenata”. Vemos


que están Emilio, y Amadeo tocando la guitarra.

ROMAN
(cantando)
“Mujer, mujer no te olvida, aquél que
fue y te cantó...” No, boludo, chau.

AMADEO
¡No, señor! ¡Bolas! ¡Apostá a la vida!
95.

ROMAN
Tengo más chance con la lotería.
Encima que me tiene poco respeto...

EMILIO
¡Dale! Mujer, mujer, no te olvida,
aquel que fue y te cantó...

AMADEO Y EMILIO
En noche de luna llena...

ROMAN
(se prende)
Junto a la reja tu amor...

Se enciende la luz de la habitación. Román se frena.


Retrocede unos pasos. Emilio se pone detrás, para frenarlo.

Se levanta la persiana. Es Verónica. Emilio ataca con la


segunda estrofa. Verónica no lo puede creer. Román se
embala. Sale Macarena. Verónica la mete adentro y sale a la
calle.

VERONICA
Shhh, cortenlá, che, por favor...

Se frenan. Silencio. Ladridos lejanos. Pausa.

ROMAN
Vamos, vamos, yo dije que era una
boludez.

EMILIO
Perdoneló, Verónica, fue un intento.

AMADEO
Apostá a la vida, linda. Bancate el
amor.

ROMAN
¡Vamonos te digo!

VERONICA
Román...

ROMAN
(se da vuelta enseguida)
Sí, mi amor...

Verónica sonríe.

88 INT. GARAGE ROMAN - NOCHE 88


Verónica y Román entran. La única fuente de luz es la luna
que entra por el agujero en el techo.
96.

ROMAN
Qué lindo, ¿pasamos al living?

VERONICA
No quiero que nos oiga Maca... ¿A
quién se le ocurrió esto de la
serenata?

ROMAN
Fue idea de Amadeo, a mí...

VERONICA
¡Qué divino!

ROMAN
(sin perder un segundo)
... me pareció brillante, me encantó
hacerlo.

VERONICA
Y a mí me encantó oírla, pero...
(se agarra el estómago)
Hace días que vengo con el hígado
hecho torta.

ROMAN
(saca los Mylanta)
Tomá, chupate uno.

VERONICA
No, te queda uno solo.

ROMAN
Agarrá, tengo otro paquete.

VERONICA
(mientras abre el sobre)
Román, yo no quiero volver a lo mismo
de antes. Yo quiero un cambio más
profund...

Pero se convulsiona con vómitos. Román la ayuda.

VERONICA
Ay, por favor... Mirá el enchastre...
Te salpiqué los zapatos...

ROMAN
No, no. La parte de arriba nomás.

VERONICA
Pero, che, justo los negros que van
con todo. Es que vengo medio medio
con...
97.

ROMAN
¡No me digás el nombre!

VERONICA
(sonríe)
Bueno, ¿no era que sos mi mejor amigo?

ROMAN
(también sonríe)
¿Quién te dijo esa pavada? Bueno, bah,
si andás mal y necesitás apoyo...

VERONICA
No, no es que ande mal, no ando mal...

ROMAN
No, mirá, mejor no me contés nada.

VERONICA
Qué sé yo, nadie me enseñó como
empezar una relación a los 40 años.
Eso tendrían que enseñar en el
colegio, no los ríos de Europa.

ROMAN
También este tipo aparece un día, te
hace temblar, cagarte, vomitar, qué sé
yo, parece el Virus del Ebola el flaco
este. Y vos largás todo lo que tenemos
por...

VERONICA
¿Pero qué es todo lo que tenemos, por
favor?

ROMAN
¡La casa, los chicos!

VERONICA
¿Ves, ves, ves? ¡Ahí está! Yo estaba
aterrorizada de que si te enterabas no
ibas a soportar que otro me toque, me
ibas a matar, lo ibas a matar a él,
iba a correr sangre, qué sé yo lo que
soñaba, algo más... ¡FAAA! Pero no, ni
me mataste, ni corrió sangre, ni
siquiera me seguiste. No hiciste nada.

ROMAN
¿Y qué querés que haga?
98.

VERONICA
“La casa, los chicos”. Los chicos se
van a ir. Darío ya se va. ¿Y qué le
podemos decir? ¿Le dijiste algo?

ROMAN
¿Y qué querés que le diga?

VERONICA
¡VOS qué querés decirle! ¡VOS que
querés hacer! ¡Qué querés VOS! ¿Te das
cuenta? ¡Cada vez queremos menos! ¡Y
por eso cada vez tenemos menos, y
queremos menos y tenemos menos
yqueremosmenostenemosmenosqueremosmeno
s hasta que no tengamos ni queramos
más nada!
(se queda sin aire. Mira el
agujero)
La casa se viene abajo, mirá... No, yo
quiero algo más, algo...
(hace gesto de
“efervescencia”, pero se
rinde. Sonríe)
El virus del Ébola, qué boludo...

ROMAN
Mirá, yo sé que las cosas no fueron
como soñábamos, pero si ponemos todo
en el debe y el haber seguro que es un
buen balance...

VERONICA
¡Pero de que debe y haber me estás
hablando! ¡Mi vida no es un almacén!
(trata de abrir el Mylanta)
¡Cómo mierda se abre esto! ¡Yo no me
voy a resignar, Román!

ROMAN
(explota)
¿Pero dónde mierda estuviste vos estos
22 años? ¡Yo nunca te vi vestida de
Odalisca! ¿Quién fue la que me empujó
a agarrar el remís? Vos fuiste la que
siempre hinchó con las cuentas, la
ropa, la casa, las cosas. ¡En todo
caso este almacén lo armamos juntos!
(se empieza a quebrar)
99.

¡Yo no tomé ninguna decisión en mi


vida por mi cuenta! ¡Yo no fracasé
solo!
(trata de contener el llanto) *
Porque si no es así, si yo me fui *
cayendo por mi cuenta y vos estando al
lado mío no hiciste nada para
ayudarme, tengo que pensar que sos una *
hija de puta... Lo armamos entre los *
dos...

89 EXT. PUENTE DE AVELLANEDA - NOCHE 89


Román, solo, cruza un puente. En la inmensidad de la
estructura, Román parece insignificante. Descubre algo y se
detiene. Es la luna. Baja, enorme y naranja.

La mira intensamente. Se apoya en la baranda. Sin darse


cuenta junta sus manos, como rezando. Mira alrededor para
ver si está solo. Busca las palabras. Llora. Finalmente...

ROMAN
Tirame un palo que no esté enjabonado.

Pero la luna no contesta. Román, resignado, se recupera y


sigue caminando.

90 OMITTED 90

91 INT. GIMNASIO - NOCHE 91


Román entra al gimnasio, oscuro. Oye un ruido. Se frena,
atento. De nuevo, ruidos. Hay alguien adentro.

Ve un palo de escoba tirado y lo esgrime como un arma.


Cruza el gimnasio vacío. Los ruidos vienen de la oficina.
Se acerca, listo para atacar. Transpira.

Finalmente, con un gran salto, irrumpe en la oficina.

92 INT. OFICINA - NOCHE 92


ROMAN
¡Vayansé, pendejos de mierda!

Le pega un palazo a alguien. Gritos. Román va a pegar de


nuevo cuando ve que es Graciela, que se agarra la nariz con
dolor soltando unos billetes.

GRACIELA
¡Ay, boludo! ¡Casi me matás del susto!

La caja fuerte está abierta. Román la mira serio.


100.

ROMAN
¿Qué hacías?

GRACIELA
(muy, muy nerviosa. No lo
mira)
Nada, no me podía dormir y vine a
hacer un arqueo que me había quedado
de hoy... No, ya está, ya me voy...

ROMAN
(serio)
¿Qué hacías?

GRACIELA
¡Te dije lo que hacía!

Y lo mira a los ojos. Román la mira fijo, serio. A Graciela


se le llenan los ojos de lágrimas. Se quiebra.

GRACIELA
No tengo un mango. Perdoname. No sé
qué hacer, estoy desesperada. Ya vendí
todo, Román, vendí la, la, la, la
licuadora. No se lo cuentes a nadie,
por favor, te lo pido.

ROMAN
Pará, calmate, sentate.

GRACIELA
(sin parar, histérica)
Que no se entere mi hijo, te lo pido
por favor. Yo lo iba a reponer, te lo
juro. Es más, mirá, me anoté acá lo
que me llevaba. Te juro que lo iba a
devolver.

ROMAN
Bueno, calmate. Calmate un poco.

Román le pone una mano en la cabeza.

93 EXT. BAR “EL TRIANGULO” - NOCHE 93


Román y Graciela caminan.

ROMAN
¿Cuánta guita necesitás?

GRACIELA
No, dejá, ya te debo bastante. Me
cortarán la luz, qué sé yo. Total, pa’
lo que hay que ver.
101.

ROMAN
Si no te podés venir al club. Algo
armamos.

GRACIELA
¿Estás loco? Lo único que saqué en
limpio de doce años con el sorete es
la casa y no la pienso dejar. No
entiendo como podés vivir vos ahí...
¿Por qué no me dijiste? ¿Verónica
sabe?

ROMAN
Te mato si le contás. Ya bastante
lástima me tiene esa guacha.

GRACIELA
La podemos juntar con el sorete a ver
qué sale. Por ahí ganamos un Nobel.

ROMAN
Sí, el Nobel de la Paciencia.

94 EXT. CASA GRACIELA - NOCHE 94


Caminan. Cubiertas de coches asoman por las alcantarillas.

GRACIELA
Y encima te están por desalojar
ahora...

ROMAN
Encima eso, “La Asamblea
Extraordinaria”. ¿Vos podés creer
Alejandro? El tipo se crió en el club
y ahora convenció a todos para vender.
Hasta Amadeo, ¿podés creer?

GRACIELA
Me estás jodiendo.

ROMAN
¿Vos te das cuenta? Todos esos pibes
en la calle, sin nada qué hacer...

GRACIELA
Y vos.

ROMAN
¿Yo qué?
102.

GRACIELA
No, digo, vos siempre que hay que
trabajar por los pibes, que si no
estuviera el club dónde estarían los
pibes... Y si no estuviera el club,
¿dónde estarías vos?

Román se queda duro. Graciela abre la puerta.

GRACIELA
Bueno, que duermas bien.

ROMAN
Bueno.

Un besito. Se quedan los dos callados. Se miran. Tensión.

ROMAN
¿Qué te parece que votará la gente?

GRACIELA
No me hablés de la gente, flor de
sorete la gente...
(se miran, a punto de
besarse)
Dormís cómodo en el club, ¿no?

ROMAN
Sí, bah, más o menos.

GRACIELA
No, te digo porque si querés... bah,
qué sé yo. Bruno está con mis viejos,
si querés dormir en su cama...

ROMAN
No, no, dejá, no te molestes.

GRACIELA
Bueno, chau.

Otro besito. Al separarse, Graciela lo agarra.

GRACIELA
¿Y no tenés ganas de hacer algo?

ROMAN
Sí...
(se besan de nuevo)

GRACIELA
Por el club, digo...
103.

ROMAN
Ah, también.
(otro beso)

GRACIELA
¿Querés quedarte y lo charlamos?

ROMAN
Dale, si no te jode. Algo tenemos que
pensar.

GRACIELA
Sí, pensemos algo.

Y se abrazan con todo. Se empiezan a besar. Siguen hablando


mientras se besan, con respiración entrecortada.

GRACIELA
Vos los vas a convencer, Román...Vos
sos fuerte...

ROMAN
...¿Qué te parece que haga?...

GRACIELA
Hablales... que no nos ganen, Román...
no somos una mierda...

ROMAN
...Tenemos que luchar...

GRACIELA
Tenés que ponerte duro...

ROMAN
Es que estoy medio nervioso...

GRACIELA
Con la gente digo... Somos bárbaros...
Ay, qué bárbaros que somos...

En el paroxismo, Graciela lo separa. Se miran fijo. Pausa.

GRACIELA
Yo sigo enganchada con el sorete.

ROMAN
Y yo con la guacha.

GRACIELA
Bueno, mientras la tengamos clara...
104.

Y se meten adentro. Al cerrar la puerta, se ve la luna


reflejada en el vidrio.

95 INT. GIMNASIO - DIA 95


Asamblea Extraordinaria en el gimnasio. Son sesenta
votantes, más acompañantes. Están todos, Ismael, Darío y
todos los habitués. Amadeo, expectante, del brazo de
Cristina.

96 INT. BUFFET - DIA 96


Alejandro camina nervioso. Emilio mira detrás del
mostrador.

ALEJANDRO
Hace media hora que está la gente
esperando, larguemos.

EMILIO
¿Cómo vas a largar sin Román? Es el
vocal principal.

Tímidamente, entra Verónica.

ALEJANDRO
¿Qué hacés acá?

VERONICA
Vine a votar. ¿Dónde es la cosa?

ALEJANDRO
¿Qué? ¿sos socia vos?

VERONICA
¿Vos te creés que Román hubiera tenido
dos hijos conmigo si no fuera socia?

ALEJANDRO
Bueno, basta. No espero más.

97 INT. GIMNASIO - DIA 97


Alejandro está en el medio de su charla.

ALEJANDRO
También le agradezco al Sr. Bengoa, al
licenciado Santángelo, y muchos más
que...

ISMAEL
¿Qué Bengoa? ¿El que compró la Textil
Santa Marta para desmantelarla? ¿Es
usted?
105.

Unos socios dicen: “Dejate de joder” “Qué tiene que ver”.

ISMAEL
Es que mi viejo, que era uno de los 78
tipos que quedaron en la calle le
manda un mensaje, que se vaya a la
puta que lo parió.

BENGOA
¡No te voy a permitir que me digas
eso!

Todos: “Pará, che” “Cortala”, “Fue hace 5 años eso”.

98 INT. BUFFET - DIA 98


Román y Graciela, con el pelo mojado, entran corriendo.

EMILIO
¡Era hora, viejo! ¿Qué estaban
haciendo?

ROMAN
No, nos quedamos enganchados con...
(Graciela se hace la
distraída)
¿Vamos?

Román ve a Dalma sentada en el mostrador. Lo mira fijo.


Román la mira, sin palabras.

99 INT. GIMNASIO - DIA 99


ALEJANDRO
Antes de que votemos quiero refrescar
la propuesta. Ya la sabemos, es muy
simple...
(entran Román y Graciela)
Ah, bueno. Era hora.

Román trae a Dalma de la mano, pero Verónica no la ve,


obstruída por la gente. Verónica los mira extrañada:
¿Vienen juntos? Graciela la saluda sonriendo. Román avanza
a la primera fila y sienta a Dalma.

ROMAN
Miralo a él.
(A Alejandro)
Dale, seguí.

Román saluda a Verónica con un guiño de ojos. Verónica lo


ve con los ojos brillosos por primera vez en mucho tiempo.
Román cruza su mirada con la de Amadeo, que sonríe con
culpa.
106.

ALEJANDRO
Bueno, decía que la propuesta es muy
simple.
(mira a Dalma al pasar)
200 puestos de trabajo, concesiones
para tres bares y dos restaurantes,
una ...
(mira de nuevo a Dalma, se va
poniendo nervioso)
una... una reactivación con un...
(Dalma lo mira fijo)
200 puestos de trabajo, bueno, ya
eso...
un capital que queda acá en
Avellaneda, para... ¿qué me mirás,
nena?

ROMAN
Se llama Dalma. Yo quiero recordar
a...

ALEJANDRO
La mano.

ROMAN
(levanta la mano)
Quiero recordar a los socios que para
todo eso primero hay que disolver el
club.

ALEJANDRO
No es “disolver” el club. El club que
fundó don Aquiles ya no existe. Yo
estoy hablando del club real y vos de
un club imaginario, el que querrías
que fuera, pero ya no es. Acá hay 60
votantes porque son los únicos activos
que pagan la cuota. 60 que mantienen a
300. Y esto es porque la mayoría no
puede pagar los cinco pesos. Así el
club no va más, el ciclo terminó. Yo
pienso que...

ROMAN
¡Ya sabemos lo que vos pensás! Yo
quiero saber lo que piensan los
socios. A ver, levanten la mano los
que están por vender.

ALEJANDRO
¿Querés que votemos ya?

ROMAN
No, no, no. Esto no es el voto, quiero
saber lo que piensan los socios.
106A.

ISMAEL
Yo también quiero saber.
107.

EMILIO
Vamos. Levanten la mano.

Tímidamente, los socios comienzan a levantar la mano.


Primero dos o tres, después de a cinco. No paran.

VERONICA
Che, ¿está lloviendo afuera?

GRACIELA
No, ¿por?

VERONICA
No, como tenés el pelo mojado.

GRACIELA
Ah, no, es que recién me duché.

Verónica se queda dura. Amadeo levanta la mano con dolor.

ISMAEL
Pará, Amadeo se equivocó. Che, loco,
bajá la mano.

AMADEO
No, no me equivoqué.

ISMAEL
¿Cómo que no? ¿Qué sos, tarado?

Otras voces lo callan a Ismael. Termina la votación: 43 a


17.

ALEJANDRO
43 a favor de la venta. Enfrentemos la
realidad, Román.

ISMAEL
(a Amadeo)
Devolvéme el premio, loco.

Todos están desconcertados. Amadeo se agita en su silla. Se


levanta y se va del gimnasio.

JAVIER
(tímidamente)
Yo soy Javier, yo tenía la carnicería
acá en Mitre...
(señala)

ALGUIEN
(señala)
¿La de frente a la plaza?
108.

JAVIER
(señala para el otro lado)
No, la otra cuadra. Yo vendía 1200
kilos por semana. Para no cortar
alambre con el... ¿no? yo tendría que
vender mínimo 800 y no llegaba ni a
500. Tuve que cerrar. Yo lo lamento
Román, mis hijos vienen acá a básquet
y todo, pero yo necesito trabajar y
ellos también.

Algunos: “Tiene razón”, “Está muy jodida la mano”. Otros:


“Era una suela tu carne” “Hubieras puesto una zapatería”

100 INT. BUFFET - DIA 100


Hay muchos chicos esperando el resultado de adentro. Amadeo
saca una cerveza de la heladera. La está por abrir y se
encuentra con Cristina, plantada delante de él.

Amadeo la mira, con enojo a sí mismo, pero a la vez


suplicante. Cristina lo mira comprensiva. Silencio. Se
entienden sólo con la mirada.

CRISTINA
Una vez que lo conocés, te enamorás.

Amadeo sonríe. Cristina también. Amadeo deja la botella y


va a los chicos.

AMADEO
¡Chicos!

Cristina se da vuelta y toma de la botella.

101 INT. GIMNASIO - DIA 101


Habla una señora de 50 años, muy apasionada.

MUJER
Acá en el club mi mamá ganó el premio
al mejor disfraz de Geisha, y ese es
un recuerdo que yo no me puedo borrar.

HOMBRE
¡Pero, mi amor, si nos estamos cagando
de hambre!

MUJER 50
Tiremos propuestas: podemos pedir
subsidios, formar una cooperativa,
hacer una feria artesanal, pero el
club se mantiene.
109.

Algunos: “Pará” “¿Qué decís?” “Andá a vender bijouterie”


Otro: “¡Ojo como le hablás a mi vieja!”

ALEJANDRO
¡Y ponele que paguemos la deuda! ¿Con
qué pagás los techos que se llueven,
las vigas que se caen? ¿O vas a
esperar que se te caiga un techo sobre
una nena para acordarte de que la
realidad existe? El hormigón es real,
no depende de tus buenas intenciones.
Con eso no alcanza. Qué vamos a hacer,
no alcanzó. Hay que tratar de acá en
más construir otra cosa, pero no negar
la realidad gritando ¡No, el club se
mantiene! Tenemos que asumir que las
cosas no funcionaron, y valorar los
200 puestos de trabajo que le van a
cambiar la vida a mucha gente.

ROMAN
Yo tengo una contrapropuesta. Es algo
que trabajamos con Graciela ayer a
la...

Verónica mira de uno al otro, alarmada.

ALEJANDRO
Ah, no, esta Asamblea es para votar mi
propuesta. El estatuto dice que si...

ROMAN
(pega un tremendo grito)
¡ESTAMOS ACA PARA DECIDIR SOBRE LA
VIDA DEL CLUB Y ME IMPORTA UNA MIERDA
LO QUE DIGA EL ESTATUTO Y MUCHO MENOS
LO QUE DIGAS VOS! ¡Seremos pocos,
habrá goteras por todos lados y las
paredes se estarán viniendo abajo,
pero se construyeron con el trabajo de
miles de personas a lo largo de
setenta años y aunque más no sea por
ellos me vas a escuchar!

Alejandro se calla. Una nena le dice a la madre: “A mí me


gustan las goteras...”.Algunos dicen “Que hable”, “Dale
Román.” Verónica mira fijo a Román. Respira hondo. Darío
también. Irrumpe Amadeo con cuarenta socios jóvenes más.

AMADEO
¡Momentito! ¡Que todos los chicos sean
testigos de lo que estamos por hacer!

Mientras entran todos los chicos, Alejandro se enoja.


110.

ALEJANDRO
¡Pero no puede ser! ¡Estamos en
Asamblea! ¡Son socios menores!

AMADEO
¡Pero ya tienen edad para enfrentar la
realidad! ¡A ver! ¿A vos cuánto te
toca por el casino? Dale, la realidad.

ALEJANDRO
No se puede así. Tratémosnos con
respeto, por favor.

AMADEO
¿Qué? ¿Encima que sos el idiota útil
no te tiran ninguna ficha?

ISMAEL
¡Se quiere afanar el club como se
afanaron todo!

ALEJANDRO
¡Pero no seas ridículo! ¡Ahora yo
tengo la culpa de todo!

AMADEO
¡Al pibe no lo insultés que te rompo
la jeta!

ISMAEL
¡Justo ahora que estamos por salir
campeones!

Empiezan los de basket: “¡Vamos, basket!” “EEE-eo-eeeo”.

ALEJANDRO
¿Y eso es lo que te preocupa? ¿Ese es
tu único sueño? ¿Ves, Román, por qué
necesitamos trabajos? ¡Para que
podamos volver a soñar en grande
TODOS! ¡No tres o cuatro, TODOS!

AMADEO
¡YO TENGO UN SUEÑO! ¡Que te metan en
cana a vos y a todos los hijos de puta
como vos y les tengan que coser el
culo con hilo de matambre!

Se le tira al humo. Gran revuelo. Muchos aplauden. Lo


interceptan.

ROMAN
¡Pará, pará! ¡Calmate un poco!
111.

Amadeo se libera, agarra a Román de las solapas y lo empuja


contra una pared.

AMADEO
¡Hay que hacer algo, boludo! ¡Hacé
algo!

ROMAN
¡Pero si vos querías vender!

Entre varios lo agarran a Amadeo y lo arrastran.

AMADEO
¡SUELTENME! ¡Este es mi club y quiero
votar!

Lentamente, la gente se empieza a calmar. Amadeo vuelve a


su silla. Pero antes de sentarse, ataca de nuevo.

AMADEO
Te llevaste la pelota, hijo de puta.

Vuelta a aplaudir. Román pide silencio. Se callan.

ROMAN
Yo pido disculpas por Amadeo, son
muchas cosas, la muerte de Don
Aquiles...
El prácticamente se crió acá...

GRACIELA
La contrapropuesta, Román, la
contrapropuesta.

ROMAN
Sí. Bueno. Tiene razón Alejandro, así
el club no va más. Llegamos a tener
8.000 socios y ahora, bueh, miren los
que quedamos. Y si seguimos tratando
de sobrevivir, en poco tiempo no queda
nadie.

ALEJANDRO
Eso es lo que digo yo.

ROMAN
Cada vez tenemos menos, cada vez
queremos menos.
(Verónica lo mira sonriendo)
No nos queda otra. O volvemos a tener
8.000 socios o ponemos un casino. Mi
propuesta, nuestra propuesta...

Se mira con Graciela. Verónica pierde la sonrisa.


112.

ROMAN
...es volver a tener 8.000 socios, y
para eso propongo duplicar la cuota.

Silencio. Todos lo miran a Román como si estuviera loco, o


esperando más. Alejandro niega con la cabeza.

ALEJANDRO
¿Querés que votemos ahora?

ROMAN
No, no, esperá. Me explico. Somos 60
activos, y más de 200 menores. Con los
que no pagan, hay 392 socios. Si en
vez de 5 pesos, pagamos 10, podemos
hacer que 300 personas más vengan
gratis.
(muestra los papeles)
Acá Graciela hizo todas las cuentas.
Si de esas 300 personas, 60 le toman
amor al club como para sacrificarse y
pagar otros 10 pesos, ahí hacemos
entrar otras 300. Y ahí ya somos mil.
Con que cada uno de ellos traiga una
sola otra persona en un año, ya somos
dos mil.

Silencio. Todos piensan. Miran a Román con vergüenza ajena.

ALEJANDRO
Ah, qué bueno, cómo no se me ocurrió
antes. Ahora entiendo la estrategia,
qué boludo que soy, juntos podemos
porque somos todos buenos... Es como
lo de los mails, “mandele esto a diez
amigos, y después a otros diez y cien
y cien mil, y en diez días somos 40
millones pidiéndole a Bush que no haga
la guerra en Irak ¡Qué fantástico! La
única macana es que Bush se caga en
los 40 millones, porque la realidad es
más compleja, y no se soluciona con
los delirios de un...

ROMAN
¡NO ES UN DELIRIO! Así se formó el
club.

ALEJANDRO
¡Es un delirio y es totalmente
ingenuo, es voluntarista, y hasta es
peligroso, porque estás llevando a
todos a la ruina! ¡El club se formó
rodedado de fábricas con gente que
laburaba y ganaba bien y ahora el
barrio es un cementerio de hormigón!
¡Las cosas cambiaron!
113.

ROMAN
¡QUE CAMBIEN DE NUEVO! ¡No es tan
difícil! Ya se hizo, se hizo durante
décadas. La gente venía, estaba con
sus amigos, se preocupaba por el otro,
¡vivía! ¡VIVIA! en el club. Ahí está,
no es sobrevivir, es vivir, es cómo
vivir la clave. Ya sé que nos dijeron
que eso no importa, que tienen que
cerrar los números, y no sé, les
creímos, qué sé yo, y de repente, “las
cosas cambiaron”. Y ahora que no
tenemos una mierda nos ofrecen un
laburito de lástima en un rubro
miserable. Nos están comprando.

ALEJANDRO
Nos están comprando lo único que nos
queda para vender, que es nuestra
capacidad de trabajo. ¿Qué problema
hay?

VIEJO
Román tiene razón. Yo acá antes venía
y me sentía en contacto con amigos,
pero ahora qué puedo tener en común
con estos hijos de puta, yo estoy por
vender.

Se arma otra protesta.

OTRO
Es buen negocio...

ROMAN
“Buen negocio”...

ALEJANDRO
¡Claro que es buen negocio! ¿Qué tiene
de malo que sea un buen negocio, por
favor? Los negocios es lo que tira
para arriba cualquier país. No un
romanticismo, perdoname, pelotudo que
nos llevó a la ruina.

ROMAN
¿Pero qué romanticismo? ¡Hace años que
no se usa el romanticismo, ni el
pelotudo ni el otro, así que no sé lo
que nos llevó a la ruina, pero no fue
el romanticismo! Yo no digo “no
hagamos negocios” digo hagámoslo
nosotros. Con dos mil personas podemos
hacer otras actividades, no sólo
deportes, no sé, huertas, enseñar
cosas, qué sé yo, fabricar algo. ¿Se
acuerdan lo que era?
114.

Yo volvía a casa y decía “Vero, hoy


fabriqué 100 heladeras”. ¿Qué le digo
ahora? “¿Vieja, no sabés qué bueno,
hoy le gané los ahorros de toda la
vida a un pobre viejo desesperado”.
Ganó la banca, perdió el punto. Como
siempre.

A Verónica le falta el aire. Mira a Román sin poder


creerlo.

ALEJANDRO
O sea que a vos lo que te molesta es
el Casino.

ROMAN
¡Yo estoy pensando en el club!

ALEJANDRO
¡Yo también pienso en el club! Yo
pagué la cuota durante 30 años, me
gané ser vitalicio, a mí no se me
regaló nada.

ROMAN
Yo propongo que todos paguemos la
cuota, hasta los vitalicios.

ALEJANDRO
Vos estás pensando sólo en el club, y
a mí me preocupa todo el barrio.

ROMAN
¡A mí también! Por eso digo que
traigamos a todos, hagámoslos socios.

MUJER
A mí también me preocupa el barrio. Mi
marido y yo queremos un barrio mejor
para nuestros hijos.

OTRO
¡Y mudate!

Empieza otra discusión. La gente expone sus opiniones.

RAUL
Yo entiendo totalmente la posición de
Román. Pero creo que la de Alejandro,
si la redondeamos un poco puede ser
más vistosa.

GRACIELA
Pensemos en Dalma.

Verónica la mira con odio, fuera de esa complicidad.


115.

ROMAN
¡En Dalma! Que parecerá una tontería
pero acá es el único momento de
felicidad que tiene...

VERONICA
¡No es ninguna tontería!

La mira a Graciela, “tomá”.

ALEJANDRO
¡ES una tontería! Ahora resulta que
tenemos que perder una oportunidad de
trabajo para muchos porque una nena
quiere bailar ballet, como si fuera
una gran estrella. Yo estoy
defendiendo lo mismo que vos, pero lo
defiendo desde la razón. ¿O los sueños
de los 200 tipos que van a tener
laburo no cuentan? 200 personas que
ahora tienen un club pero no lo pueden
usar porque no pueden comprarse
zapatillas, o si viene, se llueve.
¿Qué les decimos a esas personas,
Román? “No, muchachos, quedensé
tranquilos, estarán sin trabajo, pero
Don Aquiles les sonríe desde el
cielo”. Tenemos que recuperar la
dignidad. Y la dignidad no se recupera
jugando al tute, o haciendo piruetas
con un tutú. La dignidad se recupera
con trabajo.

Silencio. Román se queda mudo. Todas las cabezas goran


hacia él, expectantes. Román los mira. Pausa. Habla en voz
baja.

ROMAN
Antes que nada quiero aclarar que acá
en el club, Dalma ES una gran
estrella. Aunque desde la razón, eso
no debe valer mucho. ¿Cuánto vale
conocer a alguien como Don Aquiles, o
ser amigo de Emilio? Seguro que no
tanto como un par de zapatillas,
especialmente las importadas. No tengo
nada que decir, porque Alejandro tiene
razón... Tenés razón.
(todos lo miran tristes. Sólo
Verónica sabe que algo más
viene)
Una cosita, nomás. No sé ustedes pero
yo no tengo que recuperar mi dignidad.
Todavía no la perdí. Estuve a esto, lo
reconozco.
116.

Porque cuando allá afuera compré el


laburito, que perdí, la licuadora, que
se quemó, y la cassetera, que me
aburrió, como un pelotudo, acá adentro
seguía siendo el mejor amigo, el más
importante, el más admirado, igual que
Dalma, igual que todos nosotros, y eso
algo debe valer, porque yo me di
cuenta de muchas cosas últimamente, a
la fuerza, lo reconozco. Me di cuenta
de que puedo vivir sin video, sin
cable, sin cine, sin teléfono, sin
prepaga, sin ropa nueva, sin
seguridad, sin luz, sin gas y sin
perfume. Pero no puedo vivir sin la
admiración de mi mujer y mi hijo... No
puedo.

Silencio. Ismael sonríe. Verónica está boqueando. Graciela


mira a todos, satisfecha.

GRACIELA
¡Votemos ya! ¡YA!

ALEJANDRO
Quiero decir una última cosa: 200
puestos de trabajo.

102 INT. GIMNASIO - DIA 102


Emilio y Alejandro sacan los votos de una caja. Los miran y
se los van pasando. Verónica va al baño, abriendo un
Mylanta. Emilio anota los resultados en una planilla.
Alejandro abre un papel: “VENDER”. Otro: “NO VENDER”. Otro:
“¡¡¡NO!!!” Otro: “ANDATE A LA PUTA QUE TE PARIO”. Alejandro
mira a Amadeo, que le levanta el pulgar. Lo pone en la pila
de no vender.

Del baño se oye un vómito. Finalmente, Emilio, anota el


último voto. Con voz resignada, anuncia.

EMILIO
26 por no vender, 33 por vender.

No hay clima de victoria, ni sonrisa de triunfo.

GRACIELA
No puede ser...

Silencio. Román ve que Dalma lo está mirando. Román se va.


Darío lo sigue, medio paso detrás.

103 EXT. VEREDA CLUB - DIA 103


Román y Darío salen a la vereda. Pasan frente a la
remisería. Sofía mira un programa en donde se agarran a
trompadas.
117.

104 INT. CLUB - DIA 104


Verónica sale del baño, limpiándose la boca.

VERONICA
¿Y Román?

GRACIELA
Se fue.

VERONICA
¿Adónde? ¿Y lo dejaron irse?

Se va corriendo detrás de él. Se para frente a todos


tratando de decirles algo, y sólo atina a gruñirles a
todos.

105 EXT. CALLE - DIA 105


Verónica sale. Román y Darío están por subir a su auto.

VERONICA
¡Román!

Román no la oye, sube y arranca. Verónica va corriendo


atrás.

VERONICA
¡Román! ¡Esperá!
(sigue corriendo)
Román... ¡Pará! Pará... la puta que te *
parió, pará... *
Verónica busca una tarjeta telefónica de la cartera
mientras sigue corriendo. Para en un teléfono, mete la
tarjeta, marca un número, mientras ve el auto alejarse.

VERONICA
¡Soy yo, tarado, pará!

El auto se detiene. Verónica deja el tubo colgando y sale


corriendo. Un segundo después, vuelve a colgar bien y
vuelve a irse corriendo. Román baja de su auto,
esperándola. Darío se queda adentro. Verónica corre hacia
él, ya no da más. Al llegar a cinco metros, se apoya en
otro coche, jadeando...

VERONICA
Loco, corré un poco vos que no soy una
pendeja...

Román se acerca a ella y se abrazan muy fuerte. Verónica


jadea, no tanto por el amor, sino por la corrida. Se besan.

FUNDIDO A NEGRO
118.

106 INT/EXT. CASA DE ROMAN. PATIO - NOCHE 106


119.

Una mesa larga en el patio. Emilio transpira, al lado de la *


parrilla. Se sirve vino con soda. Amadeo toca “En La *
Esquina” de Creedence en la guitarra. La canta mal. *
AMADEO *
Esta parte la aprendí por fonética, el *
resto es más complicado. *
Ismael, su mujer y la beba escuchan con atención. Cristina *
se recuesta en él, acariciándose la panza. *
GRACIELA *
Che, Emilio, ¿salen las mollejas? *
EMILIO *
Sí, salen caras. Conformate con *
chinchulines y un poco de vacío. *
ROMAN *
¡Bueno, che, vamos a brindar! ¡Por el *
viaje de Darío y Yanina! *
Darío y su novia, YANINA, levantan la copa. *
EMILIO *
No, yo por eso no brindo. *
GRACIELA *
Emilio, se van a España, están *
ilusionados, no les pinchés el globo. *
(Silencio. Aplaude) *
¡Bueno, che! ¡Vamos a brindar por *
algo! *
ROMAN *
¡Entonces brindemos por que conseguí *
comprador para la casa! *
EMILIO *
No, yo no brindo. *
ROMAN *
Bueno, viejo, ¿Al final para qué *
viniste? *
EMILIO *
Vine a hacer el asado que me lo *
pediste vos, y si querés me voy. No *
vine para festejar que se van todos. *
ROMAN *
Me estás tratando como a si fuera un *
traidor. *
EMILIO *
Al que le caiga el sayo que se lo *
ponga. Yo lo digo siempre. *
119A.

VERONICA *
Mirá, Emilio, no es tan fácil la cosa. *
ROMAN *
¿Ahora te tengo que dar exámen a vos? *
¿Después de todo lo que nos rompimos *
el culo juntos para que vengan 33 *
pelotudos a destruír todo? ¿cuántas *
veces querés que me dé la cabeza *
contra la pared? *
AMADEO *
¿Y los otros 26? Pregunto, hubo 26 *
tipos que votamos en contra. *
ROMAN *
(tambalea, pero se recupera) *
Que traten de armarse algo, como me lo *
armo yo, con mi mujer, y mis hijos. *
Nada más. *
GRACIELA *
Bueno, nadie te dice nada, si eso es *
lo que vos quer... *
ROMAN *
Sí, eso es lo que yo quiero. *
Silencio. Nadie sabe qué decir. Verónica le pone la mano en *
el hombro. *
VERONICA *
Bueno, estos son temas para hablar más *
tranquilos, ya lo vamos a hablar *
nosotros, ¿Sí, Román? *
ROMAN *
¡Pero qué hablar! No tengo nada que *
hablar. *
EMILIO *
Yo a la despedida de ustedes no vengo. *
Encargá empanadas. *
Se saca el repasador y se va. Nadie mira a Román. Pausa. *
CRISTINA *
Bueno, podemos festejar que estoy *
embarazada... *
La notica es recibida por unos desganados “Ah, mirá... ¿en *
serio?” “Qué bueno” “¿quién es el padre?”... Todos se *
quedan en silencio. Amadeo puntea “En La Esquina”. *
119B.

107 EXT. CASA DE ROMAN - NOCHE 107


Están todos entrando en dos coches de la remisería. Román
trata de levantar una valija al baúl, y se le rompe. Se cae
todo al piso. Puteadas generales.

DARIO
¡Pará, papá! Mis CDs...

VERONICA
Andá al garage que hay otros bolsos.
Dale que perdemos el avión.

Román va hacia el garage.

108 INT. CASA DE ROMAN. GARAGE - NOCHE 108


Oscuro. Sólo un rayo de luna que entra por el agujero del
techo.

Entra Román. Corre cartones, juguetes viejos, una


bicicleta. De afuera lo apuran. Román se trepa a un estante
con valijas viejas. Agarra una y cuando baja, pierde el
equilibrio. Pega un manotazo y muchas cosas de los estantes
caen.

Román levanta la valija del suelo. Debajo de ella había


caído un pequeño cartoncito marrón.

Parece que va a quedar ahí, pero no. La mano de Román entra


en cuadro y lo levanta. Pero está muy oscuro, y Román se
para bajo el agujero, para poder leer a la luz de la luna.

Viejo, sucio, ajado, con manchas de humedad: es el carnet.

Román se queda duro, la falsa sonrisa que tuvo toda la


noche desaparece.
120.

Lee claramente: “Club Social y Deportivo Luna de


Avellaneda. Román Alberto Maldonado. SOCIO VITALICIO”. Un
poco más abajo, su foto carnet a los 8 años, haciendo una
morisqueta para la cámara. Román mira a ese chico contento,
esos ojos felices, payasescos, y casi no se reconoce en él.

109 EXT. CASA DE ROMAN - NOCHE 109


Amadeo sale de la casa cargando otra valija.

AMADEO
¡Bueno, ya no queda nada!
(ve la valija rota)
¿Qué pasó?

VERONICA
¡Pasó que tu valija es una bosta!
Ayuda a Román a buscar otra.

Amadeo va al garage, cargando la valija.

110 INT. CASA DE ROMAN. GARAGE - NOCHE 110


Amadeo entra y se detiene extrañado. Román está parado
inmóvil, mirando el carnet bajo el rayo de luz de luna,
como un actor en un escenario.

AMADEO
¿Vamos?

Román lo mira y niega. Tiene los ojos llenos de lágrimas.


Pero con vida, con fuego, brillantes.

ROMAN
...¿Cómo se hace un club nuevo?

Amadeo apenas sonríe.

AMADEO
No sé. Habría que averiguarlo...

Amadeo, de golpe, deja caer la valija al piso.

Se oye “Siga el baile”.

PRIMEROS TITULOS... Y DESPUES...

111 INT. RESTAURANTE DE CATEGORIA - NOCHE 111


Graciela cena con Eduardo, su ex-marido.
121.

GRACIELA
Mirá, Eduardo, yo quiero que este sea
el comienzo de una nueva etapa, por
eso te quise invitar al mejor
Restaurante de Buenos Aires, que
comamos bien...

EDUARDO
Pero esto te va a salir una fortuna,
mirá que a mí me cortaron la tarjeta.

GRACIELA
Por favor, me está yendo genial con
las clases. Si necesitás te doy...

EDUARDO
No, no...

GRACIELA
¡Mozo! Tarte Tatin y... bah... otra
botella de Dom Perignon. Un día de
vida es vida.

EDUARDO
No, pará, me está dando vergüenza.

GRACIELA
¿Esto te da vergüenza? ¡Esto no es
nada!
(él se queda sin cigarrillos)
Ya vengo, te voy a comprar
cigarrillos.

EDUARDO
No, voy yo.

GRACIELA
¡No! ¿Con qué vas a pagar? Si no tenés
tarjeta. Une nuit memorable. Pour moi.

Graciela se va. Eduardo se queda solo. Pasan los títulos.


Le traen el champagne, el tipo espera, se va poniendo
serio. Mira la hora. Se limpia disimuladamente un diente.
Terminan los títulos y Eduardo hace el gesto de teléfono.

EDUARDO
¿Teléfono? ¿Para mí?

FIN

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