Módulo V.

Objeciones

Tema 4. Recomendaciones

Algunas de las recomendaciones para objetar son:

1. Tener presentes los temas relevantes y objetar estratégicamente

Se decía que al estudiar las entrevistas de testigos se identifican los temas importantes
que cada uno podría aportar y las repercusiones que esa información tendría en la teoría
del caso. Una vez que te encuentres en la audiencia, deberás afrontar cada interrogatorio
y contrainterrogatorio con la dimensión de lo importante y lo secundario para valorar las
preguntas y decidir si vale la pena objetarlas o no, de acuerdo a lo que más convenga a
tu teoría del caso.

2. Elaborar una lista de preguntas objetables

Se ha dicho que para objetar es necesario indicar al tribunal el motivo de la objeción.
Puede ocurrir que al escuchar una pregunta intuitivamente identifiques que debe refu-
tarse. Contar con una lista de preguntas objetables te facilitará esta tarea, así como
identificar el motivo para objetar.

3. Pedir a quienes integran el tribunal que den indicaciones a las y los testigos
Antes del interrogatorio, quienes integran el tribunal suelen indicarle a cada testigo que
escuche la formulación íntegra de cada pregunta antes de contestar. También advierten
que, si finalizada ésta escuchan la palabra objeción, deberán abstenerse de responder
hasta que se resuelva si la pregunta es objetable o no. Si se observa que va a dar inicio el
interrogatorio y esto no se le ha hecho saber a la o el testigo, hay que pedir que se haga.

4. Hablar con el volumen de voz adecuado

Es importante que jueces, juezas y quien testifica escuchen que has objetado la pregun-
ta. Utilizar el volumen de voz adecuado lo posibilitará. Recuerda, se trata de evitar que
quien es testigo responda una pregunta cuestionable.

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Universidades como instituciones clave para la consolidación del Sistema de Justicia Penal Técnicas de litigación oral

5. Hacer contacto visual con las y los jueces y cada testigo

Al momento de pronunciar la palabra objeción hay que hacer contacto visual con la o el testigo, esto
le reafirmará el mensaje de que debe abstener de contestar la pregunta. Una vez que el tribunal te dé
la palabra para que indiques el motivo de la objeción, la mirada debe dirigirse hacia quienes integran
el tribunal para expresarles el porqué. Puede que esto sea más veloz de lo que piensas. De hecho, una
buena práctica es decir “objeción” e inmediatamente indicar la razón o base de la objeción. En tal caso,
el contacto visual puede ser hacia la o el testigo y mirar a las o los jueces cuando vayan a contestar.

6. Mantener la concentración y ser proactivos cuando se nos objete una pregunta

Escuchar la palabra objeción a una pregunta que has formulado detiene el ritmo del interrogatorio
y puede desconcentrarte. Andrea DeShazo (2007) aconseja mantener la concentración y para ello
sugiere hacer un “paréntesis mental” o, de ser necesario, anotar el tema que se está preguntando de
modo que una vez resuelta la objeción se pueda continuar cuestionando sobre ese tema y volver al
ritmo que se había establecido. En ese momento se debería, además, pensar si la pregunta en efecto
es o no objetable. De no serlo, hay que argumentarlo así. Si sí lo es, DeShazo sugiere que se le indique
al tribunal que se reformulará la pregunta. Para esto suelen utilizarse frases como “reformulo su se-
ñoría”, “voy a replantear la pregunta”, etcétera.

A continuación, te propongo dos actividades de aprendizaje, una para reflexionar sobre las sugeren-
cias para objetar y otra para evaluar una práctica de esta habilidad. ¡Mucho éxito!

Visita la plataforma y realiza

las actividades de aprendizaje
“Reflexiona y escribe” y
“Análisis y evaluación sobre
el tema”

Centro de Estudios sobre la Enseñanza y el Aprendizaje del Derecho, A.C. 2