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CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO

COMPARATIVO*

Adrián MANCERA COTA**

RESUMEN: El presente artículo parte ABSTRACT: The following article starts from
de la idea de que el derecho compara- the idea that comparative law is a method that
do es un método que puede utilizarse can be used for the development of national
para el desarrollo del derecho nacional and international law through comparison,
e internacional por medio de la compa- nevertheless, there are several matters that they
ración, para ello existen varias cues- must be considered in order to reach an appli-
tiones que deben considerarse para cable comparison.
alcanzar una comparación aplicable.

Palabras clave: derecho comparado, Descriptors: comparative law, comparative


método comparativo, sistemas jurídicos, method, legal systems, methodology.
metodología.

* Artículo recibido en enero de 2007 y aceptado el 12 de junio de 2007.


** Licenciado en derecho por la Universidad de Sonora. Maestro en metodología
de la investigación por la Universidad de Liverpool. Actualmente, abogado litigante
y maestro en las materias de Derecho internacional y Metodología de la investiga-
ción en la Universidad de Sonora y Universidad del Valle de México, campus Hermo-
sillo.

Boletín Mexicano de Derecho Comparado,


nueva serie, año XLI, núm. 121,
enero-abril de 2008, pp. 213-243
214 ADRIÁN MANCERA COTA

SUMARIO: I. Introducción. II. El derecho comparado ¿disciplina, ciencia o


método? III. Relación del derecho comparado con otros sujetos. IV. Las fun-
ciones de derecho comparado. V. Guía para un estudio comparativo. VI. Pre-
cauciones durante el proceso comparativo. VII. Consideración final. VIII. Bi-
bliografía.

I. INTRODUCCIÓN
El derecho comparado es un método o técnica de investigación que per-
mite su empleo en prácticamente todas las áreas del derecho, ya sea para
identificar legislación extranjera o alcanzar una solución a problemas na-
cionales.
Cuando se hace referencia a la comparación, generalmente, pensa-
mos en cotejar e identificar las semejanzas y diferencias entre dos su-
jetos diferentes y así llegar a una conclusión, pero esto no es tan sim-
ple. Equiparar las similitudes y diferencias es uno de los pasos en la
comparación, pero no el único. Deben considerarse una serie de pre-
cauciones que afectan al derecho y al proceso de comparación como
son las cuestiones socioculturales, la interpretación del derecho, las
barreras lingüísticas, entre otros.
El presente estudio se desarrolla en dos apartados: el derecho com-
parado como método, y los aspectos a considerar durante el proceso
comparativo. Y se divide en cinco secciones: la primera sección expli-
ca por qué debe considerarse el derecho comparado como método.
La segunda sección habla acerca de la relación entre el derecho com-
parado con las otras ramas del derecho. La tercera explica las funcio-
nes y el uso del derecho comparado. La cuarta provee una manera
de elaborar un adecuado proceso comparativo. La quinta, y última
sección, destaca los principales obstáculos y criterios que deben consi-
derarse antes y durante un proceso de comparación.

II. EL DERECHO COMPARADO ¿DISCIPLINA, CIENCIA O MÉTODO?

El estudio del derecho comparado se puede realizar, según se le


consideré ya como una disciplina, una ciencia o un método.1 No obs-

1 Véase Kiekbaev, Djalil, “Comparative Law: Method, Science or Educational

Discipline?”, Electronic Journal of Comparative Law, vol. 7.3, septiembre de 2003,


http://www.ejcl.org/73/abs73-2.html.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 215

tante, se explicará por qué debe ser considerado más un método que
una ciencia o disciplina.
Las razones de considerarlo como una ciencia es por lo que se de-
be entender por ciencia.2 Rheinstein señala que:

Derecho comparado en ese sentido es la ciencia que observa y busca la


exactitud del derecho en general… éste procura recolectar, observar,
analizar y clasificarlos y, como en otras ciencias en el sentido estricto
de la palabra, busca clasificaciones, coincidencias y secuencias, o, en
otras palabras, ‘leyes’… leyes como la ley de gravedad de Newton o la
ley de Gresham en economía… leyes... donde la palabra es entendida
en la moderna concepción de ciencia.3

El motivo para considerarlo como método depende de la diferen-


cia en el concepto de ciencia y método. Se entiende por ciencia a la
sistematización de conocimientos que a través de varios métodos de
recolección de datos son sometidos a un proceso de verificación;
mientras, método se refiere al acercamiento sistemático de una activi-
dad que apunta a alcanzar un objetivo. Es decir, ciencia es el camino
por la cual un sujeto determinado puede ser estudiado por medio de
un proceso de verificación; mientras que método es un instrumento o
técnica que por un proceso de comprobación apunta a autentificar
un estudio. Si partimos de la premisa de que el objetivo del derecho
comparado es entender elementos extranjeros por medio de la com-
paración, más que la sistematización de conocimientos, como lo seña-
la el concepto de ciencia, entonces sería propio considerarlo como
método.

2 Quienes analizan derecho comparado como una ciencia son Levy-Ullman, Koh-

ler, Arminjon, Nolde y Wolff, Rabel y Brutuau, Yntema, M. Rheinstein, Hall, O.


Pfersmann, W. J. Kamba y Lambert.
3 “Comparative law in that sense is the observational and exactitude-seeking scien-

ce of law in general… it endeavours to collect, observe, analyse, and classify them


and, like other sciences in the narrow sense of the word, it searches for typical collo-
cations, coincidences, and sequences, or, in other words, for “laws”... laws of the kind
of Newton’s laws of gravitation or Gresham’s law in economics… laws... in which the
word is understood in modern natural science…”. (La traducción es del autor).
Rheinstein, Max, “Teaching Tools in Comparative Law”, American Journal of Compara-
tive Law, vol. 1, 1952, p. 98.
216 ADRIÁN MANCERA COTA

Puede considerarse como disciplina,4 por su capacidad para tener


su propio marco conceptual:

Existe una interacción entre el derecho y derecho comparado que fun-


ciona para redefinir el marco conceptual así como para ordenar los da-
tos empíricos. Conocimiento es una síntesis de forma y contenido, y
conocimiento jurídico es una síntesis del marco conceptual general pro-
porcionado por la jurisprudencia genérica y el detallado contenido em-
pírico proporcionado por el derecho comparado. Pero así como la rela-
ción entre forma y contenido no es absoluto, los conceptos de
jurisprudencia genérica pueden sufrir una transformación a la luz de los
datos proporcionados por derecho comparado. Si se demuestra que
los conceptos son inadecuados, se debe a la inhabilidad del jurista para
representar el contenido de los sistemas jurídicos en vez de su descono-
cimiento por algunos miembros de las sociedades en cuestión.5

Considerarlo como método se debe a las ventajas que otorga como


instrumento para la comparación. Al comparar y contrastar se verifi-
ca la relación entre los sujetos comparados. “La esencial tarea analítica
es buscar las similitudes en la relación entre dos variables en condi-
ciones diferentes mientras otras condiciones se mantengan como
constantes”.6 En derecho, la comparación puede ser entendida por

4 Como una disciplina académica, sus principales precursores son Kahn-Freund,


Richard Tur, P. de Cruz, H. Gutteridge, Butler, Watson, Örücü, Gutteridge, Cons-
tantinesco y Lawson.
5 “There is an interplay of general jurisprudence and comparative law which ope-

rates to refine the conceptual frame as well as to order the empirical data. Knowled-
ge is a synthesis of form and content, and legal knowledge is a synthesis of a general
conceptual frame provided by general jurisprudence and the detailed empirical con-
tent of the actual provided by comparative law. But just as the relation of form and
content is not absolute, so the concepts of general jurisprudence can undergo trans-
formation in the light of the data gleaned by comparative law. If the concepts with
which the general jurist approaches his task can ever be shown to be inadequate, it
must be by their inability to represent the content of actual legal systems rather than
by their unfamiliarity to some of the members of the societies in question”. (La tra-
ducción es del autor) Tur, Richard H. S., “The Dialectic of General Jurisprudence
and Comparative Law”, The Juridical Review, 1977, p. 248.
6 “The essential analytic task is to seek out similarities in the relationship between

two variables under different conditions, with other conditions held constant”. (La
traducción es del autor). Warwick, Donald P. y Osherson, Samuel, “Comparative
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una declaración de Francis Bacon; en su propuesta de Digest decía


que al comparar las leyes de Inglaterra y Escocia, dichas leyes “pue-
den ser cotejadas y comparadas, a fin de que sus diferencias puedan
surgir y éstas sean distinguidas”.7 Esto es, al examinar y comparar las
leyes entre diferentes naciones se reconocerían los puntos de acuerdo,
desacuerdo e incompatibilidades.
Por otro lado, el acto de comparación no sólo es un asunto de dis-
tinguir similitudes y diferencias, sino también identificar la compatibi-
lidad entre los sujetos comparados. “En estudios jurídicos compara-
dos debe reconocerse y diferenciarse un espacio de otro dentro del
derecho. Es una cuestión de identificar las condiciones de diferencia,
de lugares, ocasiones, energías, y enfoques institucionales dentro de
cada diferencia, sus desemejanzas, u otros que puedan surgir”.8
Por lo que puede decirse que el derecho comparado es una técnica
metodológica que permite ser utilizada para realizar comparaciones
entre dos o más materias en varios sistemas jurídicos. Una ventaja
que ofrece el método comparativo es que permite entender un orden
jurídico diferente que el propio y navegar a través de diferentes siste-
mas jurídicos:

Derecho comparado, entonces, es una disciplina intelectual en su pro-


pio derecho, es algo más que el estudio de un sistema extranjero donde
se obtenga un panorama de todos los sistemas jurídicos o comparación
de reglas individuales o ramas del derecho entre dos o más sistemas, y
yo sugeriría que es el estudio de la relación de un sistema jurídico y sus
leyes con otro.9

Analysis in the Social Sciences”, en Warwick, Donald P. (comp.), Comparative Research


Methods, Nueva Jersey, Prentice-Hall Inc., Englewood Cliffs, 1973, p. 7.
7 “May be collated and compared and that the diversities may appear and be dis-

cerned of”. (La traducción es del autor). Butler, W. E., “Comparative Approaches to
International Law”, Recueil des Cours. Academy of International Law, vol. 190, 1986, p. 22.
8 “Comparative legal studies must recognize and lay out a space of the other wit-

hin the law. It is a question of identifying the conditions of difference, the places, oc-
casions, energies, and institutional focuses within which difference, as difference, can
appear or the other speak”. (La traducción es del autor). Legrand, Pierre “How to
Compare Now”, Legal Studies, núm. 2, vol. 16, julio de 1996, p. 240.
9 “Comparative Law, then, if it is to be an intellectual discipline in its own right,

is something other than the study of one foreign system an overall look at the world’s
systems or comparison of individual rules or of branches of law as between two or
218 ADRIÁN MANCERA COTA

Que a su vez permite contribuir al desarrollo y evolución de un


sistema jurídico. “El derecho comparado es una école de vérité que in-
tensifica y enriquece la ‘oferta de soluciones’ (Zitelmann), pues pro-
porciona al estudioso con talento crítico la oportunidad de hallar la
‘mejor solución’ a las situaciones de su tiempo y de su lugar”.10

III. RELACIÓN DEL DERECHO COMPARADO


CON OTROS SUJETOS

Cabe considerar que el derecho comparado puede actuar para lo-


grar un mayor enriquecimiento en las materias que se mencionan a
continuación: derecho internacional privado, derecho internacional
público, historia del derecho, etnología del derecho y sociología
jurídica.

1. Derecho comparado y derecho internacional privado

Mientras que el derecho internacional privado determina cuál es la


regla más conveniente a aplicar en casos de extranjería en derecho
comparado, éste sirve como instrumento para explorar la regla a eje-
cutar en diferentes sistemas jurídicos.11 Ambas materias permiten lo-
grar un mayor entendimiento y aplicación de conceptos, normas o le-
yes. Por ejemplo, en una controversia internacional entre dos países,
el derecho internacional privado interviene para determinar la juris-
dicción y las reglas que habrán de aplicarse; mientras que, el derecho
comparado proporciona las herramientas que permiten explorar y co-
nocer las áreas e instituciones involucradas para definir las leyes a
aplicar.

more systems, and I would suggest that it is the study of the relationship of one legal
system and its rule with another”. (La traducción es del autor). Watson, Alan, “Legal
Transplants”, An Approach to Comparative Law, Edimburgo, Scottish Academic Press,
p. 6.
10 Zweigert, Konrad y Kötz, Hein, Introducción al derecho comparado, 3a. ed., México,

Oxford University Press, 2002, p. 17.


11 Véase Fauvarque-Cosson, Bénédicte, “Comparative Law and Conflict of Laws:

Allies or Enemies? New Perspectives on an Old Couple”, American Journal of Comparati-


ve Law, vol. XLIX, 2001, pp. 407-428.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 219

2. Derecho comparado y derecho internacional público

El derecho comparado ayuda entender las reglas y principios inter-


nacionales que cada nación ha adoptado, pero también promueve el
desarrollo y aplicación del derecho internacional público. Por ejem-
plo, los principios generales del derecho internacional, estipulados en
la cláusula primera del artículo 38 del Estatuto de la Corte Interna-
cional de Justicia, establecen que los jueces internacionales pueden
aplicar los principios internacionales más apropiados para solucionar
disputas internacionales.12 En la interpretación de tratados internacio-
nales, el derecho comparado sirve como herramienta para la búsque-
da de algún criterio o fórmula que sea adecuado para el entendi-
miento de ciertos vocablos o frases.

3. Derecho comparado e historia del derecho

En historia del derecho, el método comparativo se utiliza para en-


tender el origen de ciertas instituciones jurídicas. Los historiadores le-
gales no pueden realizar un estudio apropiado de cierta institución, si
no se ha efectuado previamente un análisis de su origen.13 Sólo si se
estudia el nacimiento e historia de una institución existen mayores
posibilidades de comprender el actual funcionamiento de una institu-
ción. Al respecto, Maine menciona acerca de la relación entre méto-
do comparativo y método histórico:

Pienso que puedo aventurarme a afirmar que el método comparativo


ha sido redituable al proporcionar maravillosos resultados, pero no se
diferencia en algunos de los usos del método histórico. Si tomamos en
cuenta un cierto número de hechos contemporáneos, ideas y costum-
bres podemos deducir que la forma pasada de esos hechos, ideas y cos-
tumbres no sólo devienen de registros históricos, sino de ejemplos que

12 Los principios más communes en derecho internacional son pacta sunt servanda,

principio de estoppel, res judicata; principios conocidos y aplicados por la mayoría de las
naciones.
13 Véase Gordley, James, “Why Look Backward”, American Journal of Comparative

Law, vol. L, 2002, pp. 657-670.


220 ADRIÁN MANCERA COTA

aún no han muerto en el mundo y que todavía pueden ser encontra-


dos.14

4. Derecho comparado y etnología del derecho

Los cambios económicos y sociales de una nación han sido capaces


de poner al descubierto sociedades que, quizás incorrectamente, han
sido catalogadas como ‘primitivas’. Por decir, la migración es resulta-
do de los cambios sociales, políticos, económicos y culturales que han
logrado desplazar comunidades enteras a otras sociedades, ocasionan-
do que adopten nuevas prácticas y eliminen su constitución original.
La tarea del derecho comparado y etnología del derecho comienza
en estudiar esas comunidades en un contexto internacional. Por ejem-
plo, el Convenio Número 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales en
Países Independientes llama a fortalecer la identidad, las lenguas y
creencias de instituciones tribales o indígenas dentro de cada Estado.

5. Derecho comparado y sociología jurídica

Si consideramos a la ley como la formalización de las necesidades


sociales por un cuerpo legislativo, deben ser considerados los factores
que la componen, como es la economía, la cultura, la sociedad o la
religión de una comunidad. El derecho comparado y sociología jurí-
dica sugieren cómo se puede contribuir a la edificación de una mejor
comunidad por medio de la comparación entre diferentes sociedades.
Así, por ejemplo, la globalización ha logrado conjuntar sociedades in-
ternacionalmente diversificadas y crear esquemas comunes en una
comunidad.

14 “I think I may venture to affirm that the Comparative Method, which has al-

ready been fruitful of such wonderful results, is not distinguishable in some of its ap-
plications from the Historical Method. We take a number of contemporary facts,
ideas, and customs, and we infer the past form of those facts, ideas and customs not
only from historical records of that past form, but from examples of it which have
not yet died out of the world, and are still to be found in it”. (La traducción es del
autor). Maine, Henry Sumner, Village-Communities in the East and West, 7a. ed., Lon-
dres, Spottiswoode and Co., 1895, p. 7.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 221

IV. LAS FUNCIONES DE DERECHO COMPARADO

Una vez entendido que el derecho comparado es un método que


puede aplicarse en varias ramas del derecho, es pertinente explicar
sus ventajas. ¿En qué puede aplicarse método comparado?, ¿qué pre-
tende solucionar? Las respuestas a estas preguntas determinan cómo
el derecho comparado puede ser empleado y las funciones que puede
realizar
El derecho comparado cumple varias funciones dentro del dere-
cho. La posibilidad de ser aplicado en cualquier área del derecho de-
termina cómo, dónde y para qué va a utilizarse: “Si el proceso com-
parativo es llevado a cabo con éxito, es eminentemente deseable, sino
esencial, que para su empleo no debe ser confiado en ciertas catego-
rías”.15 Las principales funciones del derecho comparado se dividen
en cuatro grupos: disciplina académica, reforma legislativa y judicial,
unificación del derecho y derecho internacional.

1. Derecho comparado como disciplina académica

Como parte de una disciplina académica, el derecho comparado


tiene un uso fundamental en la investigación y docencia. Contar con
una infraestructura avanzada para desarrollar investigación, atrae un
mayor interés para desarrollar investigación comparativa. Simposios
internacionales, publicaciones en revistas nacionales e internacionales
y los avances en tecnología de la comunicación son ejemplos del in-
tercambio de información en temas de derecho comparado.

2. Reforma judicial y legislativa

El derecho comparado facilita encontrar una solución a conflictos


legislativos. Para ello, ciertas instituciones extranjeras pueden contri-
buir a dicho cometido. No es extraño que algunas instituciones hagan

15 “If the comparative process is to meet with success, it is eminently desirable, if

not essential, that its employment should not be hampered by confining it to specified
categories…”. (La traducción es del autor). Gutteridge, H. C., Comparative Law. An
Introduction to the Comparative Method of Legal Studies & Research, Cambridge, Cambridge
University Press, 1947, p. 26.
222 ADRIÁN MANCERA COTA

uso de material extranjero e inclusive hayan adoptado fórmulas ex-


tranjeras para prevenir o buscar una solución a conflictos locales, re-
gionales o nacionales. Por ejemplo, la British Law Commission, organis-
mo que se dedica a la preparación de proyectos de ley en Gran
Bretaña, indica que los comisionarios están bajo la obligación de
“obtener información de los sistemas jurídicos de otros países que
permitan a los comisionarios facilitar el desempeño de cualquiera de
sus funciones”.16 Asimismo, ciertas instituciones naciones utilizan los
servicios de centros de investigación jurídica, que a su vez realizan
sus estudios o investigaciones a partir del derecho comparado, como
es el caso en México. En donde diversas instituciones públicas,
privadas o sociales utilizan los servicios del Instituto de Investigacio-
nes Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Evidentemente, el estudio de experiencias extranjeras no implica la
simple importación de soluciones ni la imposición de figuras extranje-
ras, si no el estudio de la idoneidad de instituciones extranjeras a las
necesidades o problemas nacionales.17 Es por ello que debe destacar-
se la trascendencia del derecho comparado en la reforma legislativa.
Maine, al respecto, señala que: “la función principal del derecho
comparado es perfeccionar la legislación y mejoramiento práctico de
la ley”,18 y agrega, “por medio del examen y la comparación de le-
yes, es como se obtienen los materiales más valiosos para mejorar la
ley. No existe una rama más importante en la investigación jurídica
que ésta”.19

16 “Obtain such information as to the legal systems of other countries as appears to

the Commissioners likely to facilitate the performance of any of their functions”. (La
traducción es del autor). Cláusula (f), sección 3, de la Law Commission Act de 1965,
http://www.lawcom.gov.uk/act.htm.
17 Tallon considera que un estudio comparativo no pretende copiar soluciones de

propuestas extranjeras, sino adquirir ideas que puedan traer una solución de “institu-
ciones extranjeras similares” que puedan ser transplantadas y adaptadas de condicio-
nes locales. Véase Tallon, Denis, “Comparative Law: Expanding Horizons”, The Jour-
nal of the Society of Public Teachers of Law, vol. X, 1968-1969, pp. 265-272.
18 “The chief function of comparative jurisprudence is to facilitate legislation and

the practical improvement of the law”. (La traducción es del autor). Sumner Maine,
Henry, op. cit., nota 14, p. 4.
19 “By the examination and comparison of laws, the most valuable materials are

obtained for legal improvement. There is no branch of juridical enquiry more impor-
tant than this…”. (La traducción es del autor). Ibidem, p. 5.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 223

Las funciones del derecho comparado se han extendido a otras


áreas. En la reforma judicial es aplicable en dos situaciones: en la
aplicación e interpretación de una ley extranjera. Durante la aplica-
ción de la ley, el juez nacional no puede ser considerado como un
“super-comparatista”, como alguien capaz de dominar las leyes de to-
dos los países, sino como un juzgador que tenga buen conocimiento
del derecho extranjero con el fin de que pueda solucionar un proble-
ma local, estatal o nacional a partir de respuestas o fórmulas extran-
jeras. Sin embargo, la enorme carga de trabajo que tienen de su res-
ponsabilidad les impide estar en un perpetuo estudio; pero, sí son
capaces de formular las preguntas apropiadas que le proporcionen las
respuestas para entender la naturaleza y contenido de una ley extran-
jera, entonces estarían en mayor aptitud de aplicar derecho extranje-
ro. En este sentido, el derecho comparado sirve como ‘anexo’ del de-
recho internacional privado. Al hacer este ejercicio, el juez no sólo
debe combinar o comparar dos reglas distintas, sino debe compren-
der los sistemas jurídicos involucrados con el propósito de justificar
su ejercicio durante un conflicto de leyes. En cuanto a la interpreta-
ción, el derecho comparado ayuda a crear y entender reglas interna-
cionales. La existencia de principios internacionales obligan al com-
paratista a comprender y aplicar fórmulas extranjeras que lo puedan
asistir para la resolución de conflictos en tribunales nacionales. El de-
recho comparado puede ayudar a un Estado a elaborar un sistema
de reglas acorde a la práctica internacional.20

3. Unificar las leyes

La capacidad para conjuntar una amplia gama de leyes exige uni-


formar diversas tradiciones jurídicas. Unificar las leyes de diversos
países implica coordinar las reglas entre diversos sistemas para redu-
cir las barreras legales entre los sistemas jurídicos comparados con el
fin de crear una ideología común entre los sistemas estudiados y per-

20 Un interesante artículo que proporciona ejemplos como derecho comparado

contribuye a los tribunales y legislaturas. Véase Koopmans, T., “Comparative Law


and the Courts”, International and Comparative Law Quarterly, num. 3, vol. 45, julio de
1996, pp. 545-556.
224 ADRIÁN MANCERA COTA

mitir la aplicación de las mismas reglas entre naciones o regiones.21


Al realizar esta unificación se eliminan las diferencias entre los temas
comparados y crea un espacio donde se puedan solucionar problemas
comunes.

La unificación no puede alcanzarse simplemente invocando un derecho


ideal respecto de cualquier tema y esperando que se le adopte. Primero
que nada, hay que identificar los elementos comunes de las jurisdiccio-
nes a fin de integrarlos al derecho uniforme. Cuando haya diferencias
en determinadas áreas, hay que reconciliarlas, ya sea adoptando la me-
jor variante de que se disponga o ingeniando, con métodos comparati-
vos, una solución que resulte mejor y se aplique con más facilidad que
las opciones existentes.22

Esta unificación ocurre cuando un cuerpo legislativo codifica las


reglas de varios Estados, por decir la actual elaboración de una
Constitución Europea, o cuando ciertos organismos logran codificar
las leyes de múltiples países como es el Instituto Internacional para la
Unificación del Derecho Privado.

4. Derecho internacional

El derecho comparado facilita la creación, formulación y aplica-


ción de principios o reglas de derecho internacional. Son múltiples
las organizaciones y ejemplos que hacen uso del derecho comparado
para la formulación de proyecto de tratados internacionales en temas
de derecho internacional, por ejemplos: la Comisión de Derecho
Internacional de la Organización de las Naciones Unidas, o la Cor-
te Internacional de Justicia, las cuales por medio del derecho compa-
rado hacen uso de cualquiera de las herramientas señaladas en el ar-
tículo 38 del Estatuto de la Corte Internacional de Justicia para diri-
mir la controversia entre los Estados.

21 Véase Sacco, Rodolfo, “Diversity and Uniformity in the Law”, American Journal of

Comparative Law, vol. XLIX, 2001, pp. 171-190.


22 Zweigert K. y Kötz, H., op. cit., nota 10, p. 26.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 225

V. GUÍA PARA UN ESTUDIO COMPARATIVO

Una vez entendido que el derecho comparado es un método que


tiene varias funciones, resulta pertinente abordar la utilización del
mismo. Una acertada metodología comparativa debe reunir varios re-
quisitos y seguir un procedimiento.
1. Selección de un sistema jurídico
A pesar de la existencia de más de un centenar de diferentes órdenes
jurídicos en el mundo, éstos han logrado reunirse en pocas catego-
rías. La categorización de sistemas jurídicos en grupos se conoce co-
mo familia jurídica. Sin embargo, permanece la pregunta ¿cómo pue-
den clasificarse tantos órdenes jurídicos? René David señala que esto
puede ser posible si se agrupan por sus principales características:

Estas características pueden ser identificadas al examinar los elementos


fundamentales de un sistema donde las normas a aplicar pueden ser
descubiertas, interpretadas y evaluadas. Mientras que las reglas pueden
ser infinitamente variadas, las técnicas para su enunciación, la manera
en como son clasificadas, los métodos de razonamiento en su interpre-
tación están, por el contrario, limitadas a ciertos tipos. Por tanto, es
posible agrupar ciertas leyes en “familias” y en comparar y contrastar-
las cuando adoptan o rechazan principios comunes en cuanto a su sus-
tancia, técnica o forma.23

Entonces, ¿cuáles son las principales familias jurídicas? Actualmen-


te existen cinco familias jurídicas: derecho romano-germánico; com-
mon law; derecho africano; derecho asiático; y derecho musulmán.24

23 “These characteristics can be identified by examining those fundamental elements

of the system through which the rules to be applied are themselves discovered, interpre-
ted and evaluated. While the rules may be infinitely various, the techniques of their
enunciation, the way in which they are classified, the methods of reasoning in their in-
terpretation are, on the contrary, limited to a number of types. It is therefore possible to
group laws into “families” and to compare and contrast them when they adopt or re-
ject common principles as to substance, technique or form”. (La traducción es del au-
tor). David, René y Brierley, John E. C., Major Legal Systems in the World Today. An
Introduction to the Comparative Study of Law, 3a. ed., Londres, Stevens & Sons, 1985, p. 20.
24 Hoecke, Mark van y Warrington, Mark, “Legal Cultures, Legal Paradigms and

Legal Doctrine: Towards a New Model for Comparative Law”, International and Com-
parative Law Quarterly, vol. 47, 1998, p. 502.
226 ADRIÁN MANCERA COTA

Cada familia jurídica contiene numerosos elementos que lo diferen-


cian de otro.
El derecho romano-germánico se desarrolló del ius civile, represen-
tado por el código Justiniano (Digest e Institutes) durante la vigencia del
Imperio romano. Uno de sus atributos es la codificación de la ley por
cuerpos legislativos. En la aplicación de la ley se emplea el precepto
que mejor se adapta al caso; y en la interpretación, se explican dispo-
siciones normativas. En cuanto a las fuentes del derecho, tiene prima-
cía la legislación sobre la costumbre y los principios generales del de-
recho. Esta familia es dominante en Europa Occidental, América
Latina, África y Asia.25
La Common Law o derecho anglosajón se remonta al sistema jurídi-
co inglés. Su método de razonamiento es la fuerza obligatoria del
precedente donde un tribunal de inferior jerarquía está obligado a se-
guir las decisiones de tribunales superiores. Aunque en Estados Uni-
dos no existe la regla del precedente, en lugar de referirse a la norma
para resolver un caso, como sucede en derecho romano-germánico,
los jueces pueden hacer uso de resoluciones anteriores, de preceden-
tes. Esta familia se encuentra vigente en Gran Bretaña, Irlanda, Esta-
dos Unidos de América, Canadá, Australia, Nueva Zelanda y países
de Asia y África.26
La familia jurídica asiática, practicada en países como China y Ja-
pón, e influenciada por la teoría confuciana del orden natural de la
realidad en la cual cada persona tiene la obligación de respetar el or-
den natural de las cosas, existe un mayor compromiso hacia la socie-
dad que hacia el individuo. La ley es aplicada por los tribunales para
resolver conflictos y restaurar el orden social en una comunidad, por
lo que resulta preferible la persuasión, mediación y conciliación.27
Las reglas en el derecho musulmán son establecidas por el islam.
Éstas son consideradas como una revelación divina, guiadas por el

25 Véase Henry Merryman, John, The Civil Law Tradition. An Introduction to the Legal

System of Western Europe and Latin America, Stanford University Press, 1969, p. 172.
26 Véase Atiyah, P. S. y Summers, Rober S., Form and Substance in Anglo-American

Law. A Comparative Study of Legal Reasoning, Legal Theory, and Legal Institutions, Clarendon
Press, 1987, p. 464.
27 Véase Danner, Richard A. y Bernal, Marie-Louise H., Introduction to Foreign Legal

Systems, Oceana Publications Inc., 1994, pp. 95-170; MacCormack, Geoffrey, The Spi-
rit of Traditional Chinese Law, The University of Georgia Press, 1996, p. 262.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 227

principio de inmutabilidad donde los mandatos establecidos por Dios


no pueden cambiarse o alterarse. Las reglas cubren todas las áreas de
la vida, incluyendo el Estado y la sociedad. Son varias las fuentes del
islam que ayudan a interpretarlo. Su principal fuente es el Corán, se-
guido por el Sunna, que sirve para interpretar y clarificar las reglas
del Corán. Además, el Igma el cual resuelve las preguntas que existen
sobre las obligaciones del fiel. Finalmente, el Qiyas, usado para la
aplicación de las reglas establecidas por el Corán, Sunna o Igma. El
derecho musulmán puede ser encontrado en países musulmanes o
dentro de minorías musulmanas.28
El derecho africano considera a la costumbre como parte de su or-
den jurídico. Se considera a la ley como medio para mantener o res-
taurar la paz dentro de una comunidad.29

2. Sujeto-materia de comparación

El sujeto de comparación es el tema o tópico a comparar; pero an-


tes de tomar esta decisión debe decidirse qué va a compararse. Y pa-
ra ello, deben formularse dos preguntas: “¿Qué sistemas jurídicos y
temas deben ser seleccionados para un estudio comparado o de inves-
tigación? y ¿cómo esos sistemas y temas son seleccionados?”.30 Por
ejemplo, si van a estudiarse contratos en derecho inglés y estadouni-
dense, procedimientos migratorios entre derecho francés y canadien-
se; o las combinaciones que se deseen.31

28 Véase Ferrari, Silvio y Bradney, Anthony, Islam and European Legal Systems, Alders-

hot, Ashgate, 2000, p. 203; Oba, A. A., “Islamic law as Customary Law: The Chan-
ging Perspective in Nigeria”, International and Comparative Law Quarterly, vol. 51, 2002,
pp. 817-850; Chibli, Mallat, “From Islamic to Middle Eastern Law. A Restatement of
the Field (Part I)”, American Journal of Comparative Law, vol. LI, 2003, pp. 301-430;
Zweigert, K. y Kötz, H., op. cit., nota 10, pp. 329-338; David, René y Brierley, John
E. C., op. cit., nota 23, pp. 455-483.
29 Véase Danner, Richard A. y Bernal, Marie-Louise H., op. cit., nota 27, pp.

171-204.
30 “What legal systems and what topics should be selected for comparative study or

research? And, how should such systems and topics are selected?”. (La traducción es
del autor). Kamba, W. J., “Comparative Law: A Theoretical Framework”, International
and Comparative Law Quarterly, núm. 3, vol. 23, julio de 1974, p. 506.
31 Kahn-Freund habla acerca de la libertad que tiene el autor para seleccionar

cualquier materia y de la existencia de una gran cantidad de temas que pueden ser
228 ADRIÁN MANCERA COTA

3. Delimitar el nivel de comparación

Una vez seleccionado el tema para la comparación, se debe deter-


minar el nivel de comparación, micro o macrocomparación. Cuando
el rango de comparación es pequeña se conoce como microcompara-
ción y si es a gran escala, se conoce como macrocomparación.
La macrocomparación es la comparación entre dos o más sistemas
jurídicos. Este tipo de comparación no sólo consiste en comparar dos
o más sistemas jurídicos, sino que comprende los métodos y procedi-
mientos que conforman un sistema legal. Las diferentes técnicas legis-
lativas, medios de interpretación, decisiones judiciales, estilos de codi-
ficación, procedimientos judiciales u organización judicial son ele-
mentos que integran un sistema. Al realizar una comparación en
gran escala se debe tomar en cuenta todos los factores que integran
un sistema jurídico.
En la microcomparación se selecciona un tema específico dentro
de un sistema jurídico, lo que tiene que ver con seleccionar el sujeto
a comparar:

(a) Características de un sistema jurídico: estructura, fuentes del dere-


cho, sistema judicial y judicatura, profesión jurídica y demás.
(b) Ramas del derecho nacional.
(c) Instituciones o conceptos.
(d) Desarrollo histórico del sistema jurídico.32

Al decidir el tema a comparar se debe estar atento a que las nor-


mas, conceptos o instituciones con las que se relacione se localicen en
el mismo nivel de comparación. Por ejemplo, al comparar la institu-
ción del matrimonio, primero debe preguntarse qué sistema jurídico
extranjero lo incluye, y segundo, qué institución se encuentra con el
matrimonio en una fase similar de desarrollo.

seleccionados para la comparación. Véase Kahn-Freund, O., “Comparative Law as


an Academic Subject”, The Law Quarterly Review, vol. 82, 1966, pp. 40-61.
32 “(A) the various characteristics of a legal system: the structure, the sources of

law, judicial systems and the judiciary, the legal profession and so on; (b) the various
branches of national law; (c) institutions or concepts; (d) the historical development of
legal systems”. (La traducción es del autor). Kamba, W. J., op. cit., nota 30, p. 509.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 229

4. Identificar similitudes y diferencias

Hasta ahora se determinó que el proceso comparativo comienza


con la selección del sistema jurídico, para después escoger un tema
en específico, delimitar su nivel de comparación, y entonces se proce-
de a identificar sus semejanzas y diferencias. Éstas han sido las pri-
meras tres etapas del proceso comparativo, pero a continuación se
procede con la identificación de las similitudes y diferencias entre los
sujetos a comparar.
El proceso de comparación no sólo consiste en decir las semejan-
zas y diferencias entre los temas comparados, sino en describir, iden-
tificar y explicar a los sujetos comparados. Para completar esta activi-
dad deben seguirse tres etapas: descripción, identificación y expli-
cación.33
La fase descriptiva consiste en describir cada uno de los conceptos,
reglas, instituciones o procedimientos seleccionados. Al suministrar
una descripción de las partes o elementos que integran el sujeto a
comparar, éstas se vuelven a separar, reconstruir y, otra vez, describir
como un todo, y entonces así se podrán reconocer las principales ca-
racterísticas de cada sujeto descrito.
En la fase de identificación se reconocen las semejanzas y diferencias
de los elementos descritos. Esto se realiza identificando las semejan-
zas y diferencias que distinguen los sujetos descritos, para después se-
pararlos en diferentes apartados, para que así se tenga una clara idea
de los puntos de compatibilidad y desacuerdo.
En la fase explicativa se señalan cada una de las semejanzas y dife-
rencias identificadas entre los sujetos comparados. Esto es, cómo y en
qué detalle son similares o diferentes.

5. Prueba de funcionalidad

El importar un elemento extranjero a un sistema jurídico no signi-


fica la solución a un problema. Para poder determinar la convenien-
cia de adoptar un elemento extranjero en otro sistema legal, implica
la realización de un estudio que determine su viabilidad y funcionali-

33 Ibidem, pp. 510-512.


230 ADRIÁN MANCERA COTA

dad. Es necesario verificar si el objeto de la comparación puede im-


portarse en otro sistema. Esto es posible mediante una prueba que
evalúe su eficacia:

¿Acaso la técnica comparativa cumple adecuada o eficazmente el pro-


pósito que el comparatista definió? Acaso, por ejemplo, ¿promueve un
mejor entendimiento de su propio derecho, la formulación de teorías
confiables, promueve una reforma legislativa o la unificación del dere-
cho? ¿los resultados obtenidos pueden ser considerados como confia-
bles?34

Asimismo, debe responderse si sería posible determinar la factibili-


dad de adoptar una solución extranjera por medio de dos preguntas:
“primera, si ha resultado satisfactoria en su país de origen y, segun-
da, si funcionará en el país donde se propone su implantación”.35 La
primera pregunta determina la eficacia del sujeto, es decir, ¿acaso el
objeto de estudio ha resuelto con eficacia el problema en su país de
origen? Independientemente de qué tan similar o diferente sea un sis-
tema jurídico de otro es posible llegar a resultados comunes a partir
de fórmulas similares. A esta prueba se le denomina praesumptio simili-
tudinis. La cual permite verificar si al comparar las leyes de dos siste-
mas jurídicos, sean diferentes o no, es posible llegar a resultados
similares.

Este procedimiento es de gran utilidad en dos sentidos. Para iniciar un


estudio comparativo, se emplea como principios heurístico, pues indica
a qué fuentes debemos recurrir en el derecho y en la vida jurídica del
sistema extranjero a efecto de observar similitudes y diferencias. Al tér-
mino del estado mencionado, dicho principio puede utilizarse para re-

34 “Does the technique of comparison employed adequately or effectively fulfil the

object which the comparatist has decided on? Does it, for example, promote the bet-
ter understanding of one’s own law, the formulation of reliable theories of law, the
promotion of law reform or unification? Can the results obtained be safely depended
on as accurate?”. (La traducción es del autor). Kamba, W. J., op. cit., nota 30, p. 512.
No obstante, Kamba dice que una respuesta negativa a cualquiera de estas preguntas
exige su examen mediante la realización de lo que llama Jurisprudential Outlook, So-
cial Context and Legal Context, prueba que debe ser considerada vagamente, como
diferentes métodos de interpretación.
35 Zweigert, K. y Kötz, H., op. cit., nota 10, p. 19.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 231

visar resultados. El comparatista deberá darse por bien servido cuando


sus investigaciones en los materiales relevantes lo llevan a la conclusión
de que los sistemas comparados obtiene resultados idénticos o simila-
res. Empero, si descubre que hay diferencias significativas o resultados
opuestos. Deberá tomar esto como una advertencia, por lo que habrá
de comprobar si los términos en los que planteó la pregunta original
eran los adecuados y si, en efecto, ha extendido la red de sus investiga-
ciones lo suficientemente.36

La segunda interrogante pretende determinar si el tema selecciona-


do puede funcionar en otro sistema jurídico. Porque puede ser que
exista una solución a problema comunes, pero al tratar de implemen-
tar los mecanismos para resolver el problema en cuestión, éstos no
resultan ser los más aptos:

Las soluciones que detectemos en las diferentes jurisdicciones deben


aislarse de su contexto conceptual y despojarse de todo acento doctri-
nal nacional a fin de que se les pueda visualizar a la luz de su función,
como un intento de satisfacer una necesidad legal particular. Si descu-
brimos que los países satisfacen una misma necesidad de maneras dis-
tintas, debemos preguntarnos por qué.37

A la prueba que pretende proporcionar una solución a problemas


comunes se denomina tertium comparationis.
Pero las preguntas siguen: ¿qué sistema jurídico, rama, norma o
instituciones realizan una función equivalente al sistema comparado?,
¿qué sistema jurídico facilita el mismo resultado?, ¿es funcionalmente
equivalente utilizar el sujeto seleccionado en otro ambiente? o ¿el su-
jeto de estudio puede alcanzar el mismo resultado en otro lugar? En
la mayoría de los casos, se seleccionan esquemas avanzados que pue-
den servir como modelos ideales, pero hay que tener cuidado en lo
que se considera como un modelo perfecto, y justificar cómo y de qué
manera opera en el sistema de origen.
No obstante, una vez que son alcanzados resultados similares entre
sistemas jurídicos, y se ha determinado que un tema de estudio es
funcionalmente equivalente en otro sistema legal, entonces es posible

36 Ibidem, p. 45.
37 Ibidem, p. 49.
232 ADRIÁN MANCERA COTA

llegar a la conclusión, si son funcionalmente equivalentes o aplicables


en otro sistema legal. Sin embargo, hay cuestiones extra legales que
deben considerarse para llegar a esta conclusión.

VI. PRECAUCIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO

Como fue mencionado, para poder alcanzar una comparación fun-


cional deben reunirse varios requisitos y seguirse varias etapas. Sin
embargo, van a encontrarse varios obstáculos antes y durante el pro-
ceso de comparación.

1. Contextos en la investigación comparativa

La multiplicación de relaciones entre diferentes Estados representa


una internacionalización de las dificultades. A pesar de esto, los pro-
blemas de un país no necesariamente significan los mismos para otro.
Por lo que es posible dividir el número y tipo de problemas entre di-
ferentes países. No obstante, esto puede servir para realizar un estu-
dio comparativo entre distintos países sobre diversos temas. Ahora
bien, la investigación que se realiza entre varias naciones sobre un te-
ma específico con fines comparativos se conoce como investigación
transnacional o cross-national. Esta es una técnica analítica que permite
la comparación y análisis de datos para entender la realidad social
utilizando encuestas,38 análisis del contenido39 y otros instrumentos de
recolección de datos. Hantrais señala que ésta se realiza:

Cuando los individuos o equipos deciden examinar cuestiones o fenó-


menos particulares entre dos o más países con la intención expresa de
comparar las manifestaciones en diferentes entornos socioculturales
(instituciones, costumbres, tradiciones, sistemas de valores, estilos de vi-
da, idioma, modo de pensar), usando los mismos instrumentos de in-

38 Véase Teune, Henry, “Analysis and Interpretation in Cross-National Survey Re-

search”, en Szalai, Alexander y Petrella, Riccardo (eds.), Cross-National Comparative Sur-


vey Research. Theory and Practice, Londres, Express Litho Service, 1977, pp. 95-128.
39 Véase Turner, Ralph H., “A Comparative Content Analysis of Biographies”, en

Kohn, Melvin L. (ed.), Comparative Methodology. Theory and Practice in International Social
Research, Londres, SAGE Studies, 1990, pp. 134-150.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 233

vestigación, ya sea para realizar un análisis secundario de datos o llevar


a cabo investigación empírica. El objetivo puede ser para encontrar
una explicación de las semejanzas y diferencias u obtener un mayor co-
nocimiento y entendimiento de la realidad social en diferentes contex-
tos nacionales.40

A pesar de que las creencias, prácticas o ideologías de una comu-


nidad son ingredientes que pueden determinar el grado de similitud y
diferencia entre sistemas legales, éstos no son factores decisivos que
determinan el grado de compatibilidad entre una sociedad y otra. El
grado de compatibilidad entre los sujetos comparados puede ser alto,
pero no significa que puedan ser consideradas como idénticas.41 Si
bien el grado de semejanza y diferencia entre las naciones compara-
das no es determinante para la selección de un elemento extranjero,
las semejanzas entre sistemas pueden ayudar a identificar qué aspec-
tos de un sistema está más relacionado con otro. “El objetivo es en
buscar una explicación de las semejanzas y diferencias, para que a
partir de ellas se pueda generalizar u obtener un mayor entendimien-
to y conciencia de la realidad social en diferentes contextos naciona-
les”.42

40 “When individuals or teams set out to examine particular issues or phenomena

in two or more countries with the express intention of comparing their manifestations in
different socio-cultural settings (institutions, customs, traditions, value systems, life
styles, language, thought patterns), using the same research instruments either to
carry out secondary analysis of national data or to conduct new empirical work. The
aim may be to seek explanations for similarities and differences or to gain a greater
awareness and a deeper understanding of social reality in different national contexts”.
(La traducción es del autor). Bryman, Alan, Social Research Methods, Oxford University
Press, 2001, p. 52.
41 Se recomienda algunas críticas de trasplantación jurídica. Véase Berkowitz, Da-

niel et al., “The Transplant Effect”, American Journal of Comparative Law, vol. LI, 2003,
pp. 163-203; Miller, Jonathan M., “A Typology of Legal Transplants: Using Socio-
logy, Legal History and Argentine Examples to Explain the Transplant Process”, Ame-
rican Journal of Comparative Law, vol. LI, 2003, pp. 839-902; Örücü, Esin, “Law as
Transposition”, International and Comparative Law Quarterly, vol. 51, 2002, pp. 205-223.
42 “The aim may be to seek explanations for similarities and differences, to genera-

lise from them or to gain a greater awareness and a deeper understanding of social
reality in different national contexts”. (La traducción es del autor). Hantrais, Linda,
Comparative Research Methods, Issue Thirteen, 1999, http://www.soc.surrey.ac.uk/sru/
SRU13.html.
234 ADRIÁN MANCERA COTA

2. Incompatibilidad

Otra dificultad es el grado de incompatibilidad entre diferentes ins-


tituciones. La diferencia entre sistemas jurídicos es resultado del desa-
rrollo y de quienes intervienen en la edificación de un sistema jurídi-
co. Debe partirse de la idea que cada sistema jurídico tiene un nivel
de desarrollo diferente de cualquier otro. “La estricta observancia en
la comparabilidad implica… que la comparación debe extenderse a la
misma etapa evolutiva entre los diferentes sistemas legales que están
siendo comparados”.43
Otra particularidad es que la similitud entre dos instituciones no
significa la homogeneidad en sus funciones. La semejanza en nombre
o constitución no garantiza que los objetos comparados sean compa-
tibles. Esto puede parecer como una ilusión, al respecto Watson ha
señalado que “es como si un comparatista dice que los leones y las
hormigas son similares porque están en el mismo nivel de desarrollo
por ser de sangre caliente y son cuadrúpedos”.44 Por eso, al seleccio-
nar el sujeto a comparar debe preguntarse ¿acaso los sujetos compa-
rados están en el mismo nivel de desarrollo?

3. Culturas

La ley no sólo esta constituida por prescripciones normativas del


deber ser en una sociedad, sino por los elementos sociales que consti-
tuyen a una sociedad. Uno de esos factores es la cultura de una co-
munidad. Sin embargo, no es el propósito de este apartado explicar
qué es cultura, sino puntualizar algunos de los rasgos más representa-
tivos que conforman lo que se entiende por cultura, y así entender
las recetas que conforman y diferencian una sociedad y un Estado de
otro.

43 “The strict observance of comparability implies… that the comparison must ex-

tend to the same evolutionary stage of the different legal systems which are under
comparison”. (La traducción es del autor). Kamba, W. J., op. cit., nota 30, p. 96.
44 “If a comparative anatomist were to say that lions and ants are similar and are

at a comparable level of development since both are warm-blooded, have six legs and
are always winged”. (La traducción es del autor). Watson, Alan, op. cit., nota 9, p. 12.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 235

“La cultura de una sociedad consiste en lo que uno tiene que co-
nocer o creer para funcionar en armonía con sus miembros”.45 La
cultura es aprendida por los individuos que pertenecen a un grupo en
particular, quienes actúan según lo que se enseña en esa comunidad.
Nuestra conducta y actos están determinados por los diferentes tipos
de comportamientos que otros hombres han formulado en un lugar.
La manera de concebir el mundo es resultado de la conjunción de
las experiencias de varias personas que han logrado determinar el
modo de operar y guían el proceder del individuo en la sociedad. Al
seguir las reglas que guían ese proceder, será más fácil adherirse y
ser congruentes con el actuar en una comunidad.
La cultura refleja la religión y tradición de una comunidad. Exis-
ten numerosos ejemplos de cómo la religión ha influido en una socie-
dad, basta con remontarnos al origen, desarrollo y sus efectos en una
región; por ejemplo, la promulgación del catolicismo durante la épo-
ca de la conquista en varios países de América Latina logró sustituir
prácticas prehispánicas por la religión católica y así conformar una
nueva ideología.
La cultura es ideología jurídica. La ley es resultado de los usos y
prácticas sociales formadas por la ideología, experiencia y comporta-
miento social de una comunidad. Éstas prácticas reiteradas gobiernan
la forma de actuar de cierto entorno. Ese proceder puede llegar a
conformar las reglas que lo gobiernan en un sitio, formando así lo
que se conocen como orden jurídico, ya que esas leyes son una mani-
festación de las maneras de pensar, reflejan la cultura jurídica de un
sitio:

La clave esencial para apreciar una cultura jurídica recae en desentra-


ñar la estructura cognoscitiva que caracteriza a esa cultura. El objetivo
es definir el marco de percepción y entendimiento de una comunidad
jurídica, así como explicar qué piensa una comunidad acerca del dere-
cho y por qué lo hace de ese modo. El comparatista debe, por tanto,

45 “A society’s culture consists of whatever it is one has to know or believe in order

to operate in a manner to its members”. (La traducción es del autor). Geertz, Clif-
ford, The Interpretation of Cultures, Nueva York, Hutchinson & Co., 1973, p. 11.
236 ADRIÁN MANCERA COTA

enfocarse en la estructura cognoscitiva de cierta cultura legal y, especí-


ficamente, en las bases epistemológicas de esa estructura cognoscitiva.46

Los elementos mencionados ayudan a entender lo que se entiende


por cultura. Sin embargo, existen más factores que constituyen el
concepto de cultura, es por ello necesario preguntarse ¿qué entiende
cada pueblo o persona por cultura? y ¿cuáles son sus elementos? Hay
que estar atentos a que su conceptualización puede variar de una so-
ciedad a otra. No obstante, existe una técnica que puede ayudar a
comprender una sociedad extraña conocida como método “safari”.
“Este método, generalmente, es adoptado cuando un pequeño número
de países están involucrados, y principalmente en estudios cualitativos,
donde los investigadores estudian una cuestión bien definida en dos o
más contextos nacionales, y requieren tener un conocimiento más
profundo de los países bajo estudio”.47 Este procedimiento permite un
conocimiento más íntimo del lugar, utilizando algunos de los princi-
pales instrumentos en la investigación cualitativa y cuantitativa.48 Pero
de igual manera, no puede existir una total comprensión sobre la cul-
tura de una comunidad si no se establece contacto directo con ella.

4. Prejuicios personales y profesionales

Al hacer una comparación, el comparatista debe despojarse de es-


tigmas profesionales y personales, antes y durante la comparación.

46 “The essential key for an appreciation of a legal culture lies in an unravelling of

the cognitive structure that characterizes that culture. The aim must be to try to defi-
ne the frame of perception and understanding of a legal community so as to explicate
how a community thinks about the law and why it thinks about the law in the way it
does. The comparatist must, therefore, focus on the cognitive structure of a given le-
gal culture and, more specifically, on the epistemological foundations of that cognitive
structure”. (La traducción es del autor). Legrand, Pierre, “European Legal Systems
are Not Converging”, International and Comparative Law Quarterly, núm. 1, vol. 45, enero
de 1996, p. 60.
47 “This method is often adopted when a smaller number of countries is involved

and for more qualitative studies, where researchers are looking at a well-defined issue
in two or more national contexts and are required to have intimate knowledge of all
the countries under study”. (La traducción es del autor). Hantrais, Linda, op. cit., nota 42.
48 Curran, Vivian Grosswald, “Cultural Immersion, Difference and Categories in

U.S. Comparative Law”, American Journal of Comparative Law, vol. XLVI, 1998, p. 66.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 237

Evitar que sus creencias, experiencias, impresiones y opiniones sean


capaces de nublar el proceso comparativo. Una comparación valiosa
es aquella llevada a cabo por un procedimiento científico que permi-
ta analizarlo de manera objetiva, y siguiendo una metodología. Esto
también incluye desprenderse de elementos subjetivos que puedan
llevar al comparatista a formular un punto de vista parcial e incom-
pleto antes y durante la comparación. Legrand menciona que el
comparatista no debe pensar como abogado local, sino que debe dis-
tanciarse de lo que ha aprendido para tener una perspectiva desde
afuera.49
Se debe someter, también, el propio sistema jurídico al escrutinio
por autores nacionales y extranjeros. Eliminar aquellas actividades
que le impidan crecer, porque no se le quiere ceder al estudio por
académicos y profesionales, sean nacionales o extranjeros. Aquí pue-
de percatarse de una especie de sentimiento nacionalista, donde su
análisis por actores extranjeros puede parecer ser desleal a su propio
sistema jurídico, y el adoptar fórmulas extranjeras semeja una trai-
ción. “La recepción de las instituciones legales extranjeras no es cues-
tión de nacionalidad, sino de utilidad y necesidad. Nadie se molesta-
ría en adquirir una cosa del exterior cuando, en casa, tiene una igual
o de mejor calidad; sin embargo, sólo un necio se negaría a que le
administrasen quinina sólo porque ésta no se produjo en el jardín de
su casa”.50

5. Problemas lingüísticos y de traducción

El hecho de que dos o más países tengan idiomas similares no sig-


nifica que cuenten con una paridad en sus vocablos. La semejanza de
términos es una cuestión lingüística y terminológica entre sociedades
y naciones, aún en aquellas con idiomas análogos. La disparidad pue-
de dar lugar a un diferente uso y entendimiento de una idea común.
Un idioma común entre dos países no significa una total similitud
en su vocablo o ideas. Diferentes entendimientos de una palabra, in-
clusive en un mismo idioma en distintas sociedades, es uno de los

49 Legrand, Pierre, “European Legal Systems…”, cit., nota 46, p. 60.


50 Zweigert, K. y Kötz, H., op. cit., nota 10, p. 18.
238 ADRIÁN MANCERA COTA

principales obstáculos para una equivalente comprensión de vocablos.


Dentro de una región o sociedad existen diferencias entre vocablos, a
pesar de que se refiera a una misma idea, sea para identificar ciertos
objetos o actividades. Lo mismo acontece con términos jurídicos en-
tre países. La similitud y diferencia en idiomas comunes no significa
su uso indistinto en las leyes o normas que pueden parecer como si-
milares entre países.51 Por ejemplo, la diferencia sobre el uso y enten-
dimiento entre murder, manslaughter y homicide en derecho inglés y dere-
cho de los Estados Unidos. “Inclusive cuando los básicos conceptos
jurídicos son similares, pueden utilizarse diferentes términos para
crear una impresión de divergencia y esto puede ocurrir dentro de
una misma familia jurídica. Aunque los términos pueden ser idénti-
cos, su contenido sustancial o aplicación práctica puede ser bastante
diferente”.52
Otra dificultad es la ausencia de significados comunes entre países
que comparten instituciones similares. Donde la diferencia de térmi-
nos puede representar un obstáculo para alcanzar un completo enten-
dimiento, función y aplicación de cierta figura jurídica. Por ejemplo,
la diferencia entre lo que se entiende por “abogado” entre el sistema
de los Estados Unidos y el inglés. Ambos se refieren a la profesión
jurídica, pero el sistema británico lo divide en “solicitor” y “barrister”, y
en los Estados Unidos se conoce como “lawyer”.
En cuanto a la traducción, a pesar de que la traducción es un ins-
trumento que permite trasponer una palabra en otro idioma, hay que
ser cautos al realizarla. “Cada idioma proporciona una concepción
del mundo y traducir significa unir dos opiniones diferentes del mun-

51 Véase Geeroms, Sofie M. F., “Comparative Law and Legal Translation: Why

the Terms Cassation, Revision and Appeal should Not be Translated…”, American
Journal of Comparative Law, vol. L, 2002, pp. 201-228.
52 “Hence, even if the basic legal concepts are similar, different terms may be utili-

sed so as to create an impression of divergence and this may even occur within the
same legal family. Conversely, although the terms used may be identical their sub-
stantive content or actual application in practice may be quite different”. (La traduc-
ción es del autor). Cruz, Peter de, Comparative Law in a Changing World, Londres, Ca-
vendish Publishing Limited, 1995, p. 550.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 239

do”.53 Las traducciones logran descifrar el significado y estilo de un


texto en su idioma original, pero al traducir pueden encontrarse dos
dificultades: inequivalencia de términos e inaplicabilidad en otro or-
den jurídico. Mientras que un término puede referirse a cierta figura
jurídica en un país, este puede ser bastante diferente en otro, lo que
puede proporcionar razones para su inaplicabilidad en cierto sistema
o contexto.54 Por ejemplo, tort en derecho de los Estados Unidos per-
mite suministrar una solución a las personas que han sido lesionadas
por la conducta de otros. En derecho mexicano, lo que se conoce co-
mo tort en los Estados Unidos de América, se trata como agravio y
sirve como calificativa en varias ramas del derecho, como dolo en
derecho penal o para determinar la nulidad en materia de contratos.
Una alternativa para evitar problemas en la traducción es seguir
un proceso que permita un profundo conocimiento de los elementos
que han ayudado a la constitución de una palabra:

Para que la traducción de un término jurídico sea significativa, se re-


quiere un íntimo conocimiento del sistema que está siendo traducido,
así como del sistema original. Inclusive si un término es traducido fiel-
mente, y está relacionado con una institución o estructura jurídicamen-
te comparable, existe el peligro de encontrar ambigüedades en el len-
guaje que generalmente se encuentra en todo sistema del derecho.55

Todos estos factores deben considerarse, ya que una traducción no


necesariamente proporciona la exacta aplicación de un término en
cualquier idioma y entorno. He aquí, la importancia de estudiar un
sistema de manera directa, sin restricciones y en su forma no traduci-
da. “De lo contrario no se percibirá con suficiente hondura los aspec-

53 “Each language renders a whole world view, and translation means uniting two

different world views”. (La traducción es del autor). Curran, Vivian Grosswald, op.
cit., nota 48, p. 56.
54 Véase Jones, Michael A., Textbook on Torts, 8a. ed., Oxford University Press,

2003, p. 9.
55 “For a translation of a legal term to be meaningful, intimate knowledge is requi-

red both of the system being translated, as well as that of the native system. Even if a
term is translated faithfully, and related to a comparable legal institution or structure,
there is always the danger of being unaware of ambiguities of language which are
found in every system of law”. (La traducción es del autor). Cruz, Peter de, op cit.,
nota 52, p. 213.
240 ADRIÁN MANCERA COTA

tos fundamentales y poderosos de las culturas jurídicas estudiadas que


están afianzadas, en lugar de resultar ser inarticuladas e inconsisten-
tes”.56

6. Interpretación

Finalmente, un aspecto a cuidar durante el proceso comparativo es


la interpretación de un término. El propósito de la interpretación
es conocer el verdadero significado de un concepto, norma o institu-
ción. Para conocer ese significado deben atenderse los métodos y téc-
nicas existentes para obtener un conocimiento íntegro del objeto a in-
terpretar. A pesar de que los actuales métodos de interpretación
ayudan a comprender el significado de lo que se quiere interpretar,
esta no sería completa si no se toma en cuenta la correlación que
existe entre derecho y sociedad. Para lograr el exacto entendimiento
de un sistema jurídico debe analizarse la sociedad bajo estudio.

El estudioso de los problemas legales debe abarcar el derecho de todo


el mundo, del pasado y del presente, así como todo aquello que afecta
a la organización del derecho, como la geografía, el clima y la raza, los
acontecimientos que determinan el derrotero histórico de los pueblos
—guerra, revolución, colonización, subyugación—, la religión y la éti-
ca, la ambición y la creatividad de los individuos, las necesidades de
producción y consumo, los intereses de los grupos, los partidos y las
clases. Cada idea —y las hay de todos tipos— surte efectos propios,
pues no son solamente el feudalismo, el liberalismo y el socialismo los
que producen diferentes tipos de leyes; una vez adoptadas, las institu-
ciones legales pueden generar consecuencias lógicas, siendo una de las
más importantes la lucha por alcanzar un ideal político o legal. Todo
interactúa en los planos social, económico y legal. El derecho que rige
a los pueblos desarrollados observa un movimiento constante, y el ca-
leidoscópico horizonte que constituyen dichas leyes es cosa que nadie,
hasta ahora, ha podido vislumbrar con claridad.57

56 “Otherwise, they will fail to perceive with sufficient acuity those fundamental,

powerful aspects of target legal cultures which are so entrenched as to be unarticula-


ted and even unconscious”. (La traducción es del autor). Grosswald Curran, Vivian,
op. cit., nota 48, p. 58.
57 Zweigert, K. y Kötz, H., op. cit., nota 10, p. 40.
CONSIDERACIONES DURANTE EL PROCESO COMPARATIVO 241

VII. CONSIDERACIÓN FINAL

El derecho comparado es un método que puede ser aplicado en


cualquiera de las ciencias jurídicas. Considerarlo como un método
más que una ciencia o disciplina le permite moverse libremente por
varias ramas y campos del derecho. Sin embargo, para que pueda
cumplir varias funciones y utilizarse como método deben de seguirse
una serie de pasos que pueden determinar la viabilidad de lograr una
comparación adecuada.

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