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Los pilares del carisma son una experiencia del Espíritu Santo que implica un modo
específico de ser, una específica misión y espiritualidad, estilo de vida fraterna y estructura
al servicio de la misión eclesial. El carisma agustiniano se resume en el amor a Dios sin
condición, que une las almas y los corazones en convivencia comunitaria de hermanos, y
que se difunde hacia todos los hombres para unirlos en Cristo dentro de su Iglesia. La
vivencia del propio carisma les transmite la vitalidad que procede del Espíritu Santo, los
renueva constantemente y los impulsa a la formación permanente para estar disponibles
en el servicio de la Iglesia. Las Constituciones son la expresión del carisma de la Orden y
proponen la manera peculiar de seguir a Jesús respondiendo a la vocación de agustinos
recoletos.
3. ¿Cuáles son las ramas de las que está compuesta la familia agustiniana?
La Familia Agustiniana está formada por la Orden de San Agustín en sus tres ramas:
hermanos, hermanas de vida contemplativa, y laicos de las fraternidades seculares.
También la componen las congregaciones religiosas agregadas a la Orden, otros grupos de
laicos agustinianos y los fieles afiliados a la Orden. Todas estas partes constituyen un solo
cuerpo bajo San Agustín como único padre.
-Hermanos: Como miembros de la Orden de San Agustín, constituyen el núcleo
fundamental de la familia agustiniana. Instituidos jurídicamente en el siglo XIII, se
reconocen herederos de las fundaciones monásticas agustinianas. Por ello asumen como
propios tanto la herencia de la familia religiosa fundada por el mismo San Agustín como
los principios fundamentales de las órdenes de fraternidad apostólica.
-Hermanas de vida competitiva: Las monjas o hermanas de vida contemplativa, tanto de
clausura papal como constitucional, constituyen la rama femenina de la Orden de San
Agustín. Dentro de ella ocupan un puesto eminente. Su fin consiste en buscar y honrar a
Dios, y trabajar con todas sus fuerzas al servicio del pueblo de Dios, juntas,
concordemente, en fraternidad y en amistad espiritual. Este fin lo consiguen por la
consagración a Dios mediante los votos religiosos, el culto divino, especialmente el
litúrgico; la vida común en fraternidad y amistad; el compromiso comunitario y personal la
vida interior y el estudio; el celo por las necesidades de la Iglesia; y la entrega al trabajo,
tanto manual como intelectual.
-Laicos: El concilio Vaticano II promovió una eclesiología de comunión, de profundas raíces
agustinianas. La Iglesia es el nuevo pueblo de Dios integrado por todos los bautizados, que camina
a la luz del Espíritu. Todos los miembros de este pueblo, aunque desempeñan diferentes
funciones, forman un todo comunitario y fraterno.
Por fidelidad a esta Iglesia-comunión, la Orden ha mantenido desde siempre una fuerte
vinculación con los laicos que se acercan a ella y los ha integrado en su familia religiosa según
diversos niveles. El vínculo más fuerte lo establece con los miembros de las fraternidades
seculares agustinianas legítimamente erigidas por el Prior General, que forman parte de la Orden.
Un segundo nivel lo constituyen otros grupos laicales agustinianos que, sin constituir fraternidades
seculares, pretenden vivir en común la espiritualidad agustiniana. Finalmente pertenecen en cierto
modo a la familia agustiniana también los afiliados a la Orden.
En Colombia:
Colombia se ubica en la provincia “Nuestra señora de la candelaria” junto con Chile, España ,
Guatemala, Republica dominicana y Panamá
5. ¿Cuáles son las tareas fundamentales a las que se dedica la Orden de Agustinos
Recoletos?
Los Agustinos Recoletos son una orden religiosa que, viviendo la vida fraterna en comunidad,
quieren seguir a Cristo, buscan la verdad y están al servicio de la Iglesia; se esfuerzan por crecer en
la caridad según el carisma de san Agustín y la intensidad propia de la Recolección, movimiento de
interioridad y radicalidad evangélica.
Adriano VI, con la bula Onmimoda, había renovado los privilegios de las órdenes mendicantes para
evangelizar a los paganos, reforzando su papel frente a las órdenes monásticas tradicionales,
como las contemplativas y las órdenes militares, protagonistas de la reconquista española. Las
primeras órdenes mendicantes en América fueron la franciscana y la dominicana, acompañadas
por la Merced, una orden no mendicante que a través de uno frailes, había acompañado a Colón
en su segundo viaje. Posteriormente arribaron los agustinos y a mediados del siglo XVI los jesuitas,
la cuarta orden mendicante en hacer acto de presencia, seguida de otras orden menores, como
carmelias descalzos, capuchinos, etc
La Recolección Agustiniana surgió de un modo de entender la vida agustiniana que hunde sus
raíces en la reforma tridentina y en el ansia de vivir una vida más perfecta. Confluyen en ella dos
fuentes principales. La primera es la herencia de la Orden de San Agustín, con sus leyes, su liturgia,
sus santos, su organización y sus tradiciones.
Pobreza común
No solamente el individuo tenía que ser pobre; también la comunidad como tal, pues “sólo
admitían la propiedad del convento y del huerto circundante, rechazando rentas y herencia
8. ¿En qué lugares del mundo está presente la Orden de Agustinos Recoletos en la
actualidad?
La Orden de Agustinos Recoletos está presente en 20 países alrededor del mundo:
1. Argentina
2. Brasil
3. España
4. Venezuela
5. Costa Rica
6. Estados unidos
7. Italia
8. México
9. Reino unido
10. China
11. Taiwán
12. Chile
13. Perú
14. Colombia
15. Panamá 17.Filipinas 19.Guatemala
16. Republica dominicana 18. Sierra leona