LOS PRIMIPAROS

Sábado 20 de Marzo de 2020

SER MODELO WEBCAM, UNA FACHADA MÁS DE LA TRATA DE

PERSONAS

Al igual
que los

establecimientos dedicados a la prostitución, el negocio del sexo por webcam

funciona en muchas ocasiones, como una fachada más detrás de la trata de
personas con fines de explotación sexual y trabajo forzoso. En un principio,
las víctimas acuden voluntariamente al lugar con la oferta laboral de modelo
webcam, allí se les prometen salarios atractivos por seducir a través de la red,
sin embargo, una vez son parte del negocio, las condiciones cambian y no se
les permite renunciar.
De acuerdo a un artículo publicado por el diario de economía y negocios
Portafolio en Colombia pueden existir en un año más de 20.000 modelos
webcam, aunque este tipo de trabajo se ha propagado por todo el país gracias
a lo lucrativo que parece dedicarse a este oficio, con la promesa de recibir
ingresos mensuales de hasta siete y ocho millones de pesos, decenas de
mujeres y hombres son tentados a realizar actividades sexuales en vivo.

Una práctica legal en el país, que muchas personas que se dedican a la trata de
personas por las redes aprovechan para reclutar víctimas y ganar dinero,
explotando sus cuerpos y distribuyendo material material audiovisual. En la
mayoría de los casos las páginas en las que se publican este tipo de videos
suelen ser extranjeras.

En algunas ocasiones las personas que sufren de esta trata de personas es

porque están pasando por alguna situación difícil económicamente y las
personas se aprovechan de esta situación para ofrecerles ser modelo webcam y
les ofrecen una suma de dinero muy considerable, pero al aceptar empiezan a
sufrir de maltrato no solo físico si no psicológico y luego cuando quieren salir
ya no se los permiten ,adicional a esto no les pagan lo que les prometieron, no
respetan su jornada laboral o voluntad.

En la actualidad cerca de 80 millones de usuarios de internet visitan alguna

página webcam por día, lo que reafirma la demanda de este tipo de
contenidos. Pero ¿Quiénes los prefieren? En su mayoría los consumidores son
hombres, muchos de ellos pagan aproximadamente $12000 pesos por minuto
por ver actividades sexuales en vivo, estos sin saber o ser conscientes de la
realidad que sufren muchas mujeres y hombres detrás de los videos: una
situación de esclavitud sexual de la que desean escapar.