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Monos y Monadas: textos expositivos y argumentativos

Los textos argumentativos y los expositivos, que ustedes ya conocen, están presentes durante todo
el día en nuestra vida diaria, ya sea al encender la televisión, al conversar con un amigo, leer un
periódico o abrir alguna plataforma virtual por mera diversión. Es más, estos tipos de texto los
comenzamos a utilizar desde antes de entrar al colegio, es decir, los llevamos en nuestra cognición
de modo permanente y casi innato.

Haciendo una síntesis esencial, podemos decir que argumentar es un modo de defender o debatir un
punto de vista. Este acto comunicativo está atravesado por instancias culturales, las cuales dan más
o menos valor a nuestros argumentos. Es decir, el hecho de que seamos avezados doctores en
teología, nos da mucho más peso que una sencilla santiguadora de campo; el hecho de que una teoría
aceptada combata con una incipiente, da una desventaja abismante para quien defienda la segunda.
Por otro lado, la argumentación resulta del instinto animal de evitar el conflicto violento, alcanzar el
acuerdo, irrigar de respeto nuestra historia. Sin embargo, ni las hegemonías culturales aseguran lo
valioso de uno u otro argumento, ni tampoco ha dado resultado el debate entre nuestras sociedades.
Lo cierto es que el abuso de autoridad es el origen de crímenes y retrocesos, como lo fue la inquisición
en la edad media, como lo es el genocidio de los pueblos originarios, hasta nuestros días. Las guerras
no acaban ni retroceden un ápice de sus intenciones, la sombra de la muerte enmudece a los más
sabios…

Por otro lado, la exposición de la realidad objetiva, en su lado más oscuro, pervierte lo que
entendemos por “objetividad”, haciendo un uso deshonesto de plataformas aparentemente
confiables. Noticieros
tendenciosos, investigadores
ambiciosos, manipulan datos y
números para lograr sus fines. Los
textos expositivos, que solamente
deberían informarnos al respecto
de algo, terminan engañándonos
como a los más inocentes, sino,
cómo se explican las listas
nutricionales de los productos
alimenticios, en donde una bebida
altamente venenosa como “Coca-
cola” “no tiene azúcar”, y los
productos “Soprole” son bajos en
sodio…
A fin de cuentas, la realidad, así como el lenguaje y sus usos, son realidades en constante cambio,
secuestrada por la voluntad y el anhelo de cada quién, inestable como el corazón de los átomos que
la conforman…

Ahora… ¿es positivo o negativo lo que digo? Argumente con vehemencia.

Actividad virtual:

 Sumérgete en la búsqueda de alguna noticia de riguroso carácter expositivo. Analiza


detenidamente en busca de juicios de valor que puedan estar implícitos en el texto.

 Participa de alguna polémica en los foros de discusión o los comentarios virtuales, observa
los argumentos utilizados por los participantes. Anota tus resultados

…No es redonda… pero se mueve. Galileo Galilei, ante los tribunales clericales.

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