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continuar indefinidamente al interior de estos ciclos naturales, caracterizado por dos sistemas
distintos: el primero es un sistema abierto, correspondiente a la energía, donde la principal
fuente de energía de nuestro planeta corresponde al Sol; por otro lado, tenemos un sistema
cerrado respecto a la materia, donde nada se pierdo y todo fluye o se dispersa. Todos los
procesos que involucren a la acción humana y su capacidad para continuar con los ciclos
biológicos indefinidamente se mantienen dentro de la biosfera.
Con el paso del tiempo, el ser humano es cada vez más influyente en los cambios que se
realizan en los ciclos naturales, donde la forma de influir está caracterizada en tres grandes
formas: (1) Físicamente inhibiendo la capacidad de la naturaleza de mantener los ciclos, (2)
Introduciendo compuestos persistentes extraños a la naturaleza y, por último, (3)
Extrayendo largos flujos de materiales de la corteza terrestre.
Dentro de estos cambios, se pretende disminuir al mínimo todo el impacto de las acciones de
ser humano en el ecosistema, donde aparece el concepto de sustentabilidad, donde James y
Lahti (2010) establecen 4 principios importantes que deben cumplirse para que una sociedad
sea sustentable, primeramente, se tiene que es importante disminuir o evitar la concentración
de sustancias extraídas desde la corteza terrestre, junto con ello no podemos dejar de lado la
importancia de descender la concentración de nuestros propios deshechos o sustancias per sé
que se desarrollan y producen día a día, ya que la visión convencional sobre desarrollo es a
partir una concepción errónea sobre la gestión de recursos naturales, donde muchas políticas
públicas que existen en algunos países, predomina el crecimiento económico a partir de la
degradación del medio ambiente, es por esto que el tercer principio corresponde a la
disminución de la degradación del medio ambiente a través de medios físicos. Sin embargo, en
la sociedad de consumo en la que nos encontramos actualmente, las personas no están sujetas
a condiciones que sistemáticamente debiliten sus capacidades de satisfacer sus necesidades.
Por otro lado, existen acciones no consistentes con los principios de sustentabilidad, tales
como (1) crear mecanismos de compensación o subsidio para expropiaciones, adquisiciones y
restauraciones de bienes patrimoniales, (2) Fortalecer el papel de los espacios públicos
urbanos de calidad como elementos que contribuyen al bienestar, recreación, la articulación
social e imagen de las ciudades. Esto a través de la adecuada planificación de paquetes de
vivienda, la creación y mejora de espacios peatonales y la planificación del crecimiento y
expansión de los centros urbanos.
Conectividad
Sin embargo, es importante destacar la importancia del cuidado del medio ambiente dentro de
un desarrollo urbano y territorial, ya que se pretende disminuir el impacto de acciones
humanas en el territorio. A continuación, se indican las acciones que se consideran como muy
consistentes con los principios de sustentabilidad a partir del plan de desarrollo local de la
región del Maule:
Programas de corrección
Generar e implementar un plan de evaluación y corrección de los principales daños
ambientales en la región.
Con especial énfasis en la recuperación de fertilidad de la tierra, la reforestación
nativa, el control de la erosión, la protección y recuperación de especies en categoría
de conservación o en peligro extinción, y la limpieza del aire urbano.
Programas de prevención
Impulsar la investigación y desarrollo tecnológico tendiente a generar respuestas a las
problemáticas medio ambientales derivadas de los actuales procesos productivos y
estilos de vida.
Impulsar programas de capacitación, becas y pasantías, y programas de transferencia
tecnológica, que apunten a la solución y prevención de problemas medioambientales.
Fortalecer la unidad para la recolección y difusión de información, oportunidades y
amenazas relacionadas con los efectos del cambio climático.
Impulsar la recolección y tratamiento diferenciado de residuos sólidos (plásticos,
vidrios, papel y orgánico) a nivel domiciliario, hospitalario, industrial, entre otros.
Áreas protegidas y biodiversidad
Desarrollar una política regional que posibilite el reconocimiento y mantención de la
biodiversidad presente en los ecosistemas de la Región del Maule.
Producción Limpia
Incentivar al sector privado a suscribir acuerdos de producción limpia, incorporando e
innovando en tecnologías orientadas a la prevención de problemas medioambientales,
aprovechándose, además, de las franquicias tributarias existentes. Minimizar en origen
y/o manejar eficientemente los residuos (industriales y domiciliarios) regionales.
Apoyar y capacitar al sector industrial y agropecuario en el mejor uso del recurso
hídrico (tecnologías de goteo, cantidades óptimas de agua, etc.)
Difundir y fomentar técnicas alternativas al uso de fuego para el manejo de residuos
agrícolas.
Cultura Ambiental
Fomentar el desarrollo de valores, conceptos, habilidades, competencias y actitudes
en la comunidad regional de tal forma que la involucre como protagonista del proceso
de protección del medio ambiente, llegando a constituirlas en elemento primordial de
la gestión ambiental y en una sólida base del desarrollo sustentable efectivo de la
Región. Todo esto en concordancia con la educación para el desarrollo sustentable.
Normativa y Control
Fortalecer la aplicación, evaluación y fiscalización de una normativa ambiental, que
regule las emisiones contaminantes al aire, agua y suelos, con especial énfasis en la
aplicación de la normativa para las emisiones de los sistemas de calefacción
domésticos y equipos de combustión industriales.
Mejorar el uso del E-SIA por parte de los servicios públicos, especialmente los
municipios, incorporando, además, el uso de la firma electrónica avanzada.
Riego
Por último, tenemos una materia cada vez más importante en el mundo, país y región, ya que,
como una de las principales zonas agrícolas del país, es posible notar un mayor impacto
negativo producido por la sequía, ya que cada vez los agricultores se enfrentan a una mayor
dificultad a la hora de mantener un sistema de riego adecuado a cada producto. Pero en este
caso, la visión de desarrollo no contempla un nuevo sistema de riego o innovaciones
tecnológicas para combatir la escasez de agua, sino todo lo contrario, al planificar elevar la
cantidad, eficiencia y calidad del recurso hídrico para uso doméstico, silvoagropecuario e
industrial en la misma proporción, no es sustentable, ya que no se contempla el agua como un
recurso natural de especial cuidado, donde el aumento debería ser mayoritariamente en la
eficiencia de agua a través de innovaciones tecnológicas, pero no significa aumentar la
cantidad para suplir con las necesidades, ya que en este caso tenemos un claro ejemplo sobre
el principio fundamental de la economía donde las necesidades son infinitas y los recursos son
escasos. Es por esta razón que la tecnología no siempre es un enemigo de lo sostenible y
sustentable, ya que es necesario complementar técnicas tradicionales de sistemas de vida y
nuevas tecnologías que puedan ayudar a hacer estas acciones tradicionales, más eficientes.
Romina Muñoz