Rito de la Reconciliación (27-28-29-30)

a) Se hace de rodillas en señal de arrepentimiento, se reza el Yo Pecador, un canto

oportuno y la oración dominical, luego los sacerdotes van al lugar señalado para
escuchar las confesiones del penitente. Cuando todos hayan terminado, el
sacerdote vuelve al presbiterio para rezar un salmo o cantar por esta acción de
gracias. Luego el sacerdote da la bendición final.

DISCIPLINA DE LA ABSOLUCIÓN GENERAL (31-32-33-34)

El único modo de recibir esta absolución es que sea individual, a no ser que tenga
algún impedimento deberá cumplir los siguientes requisitos:

a) Que esté en peligro de muerte y el sacerdote no pueda escuchar la confesión.

b) Cuando no hay suficientes sacerdotes para mucha cantidad de confesores, esto
sucede generalmente en las peregrinaciones.

El obispo tiene la autoridad para determinar cuando las cosas sean de real necesidad y
para que esta confesión sea válida es importante que el penitente haga el compromiso
de poder confesarse en la medida que pueda y recibir su confesión personal por lo
menos una vez al año.

RITO DE ABSOLUCION (35-36-37)

Este rito es muy parecido al general, solo que cambia lo siguiente:

a) Después de la Homilía se les dice que quien esté dispuesto a enmendar su error
deberá confesar su pecado.
b) Luego el diácono los invita a recibir la absolución con algún gesto de
arrepentimiento.
c) El sacerdote invoca Espíritu Santo para que derrame el perdón
d) Y finalmente da gracias y bendice a la comunidad.