Está en la página 1de 2

Crisis de pánico

¿Qué es una crisis de pánico?

Es una respuesta corporal, física y mental, frente a una amenaza externa.

Genera un estado de alerta en el cuerpo, el pulso cardiaco y la respiración se aceleran, provocando


una sensación de haber perdido el control del propio cuerpo.

Invaden pensamientos de amenaza y hostilidad, llegando a sentir y creer que se va a morir.

Esta amenaza no siempre es real, es decir, que no necesariamente es algo en particular lo que lo
provoca, sino más bien la percepción de peligro que la persona tenga en el contexto que le ocurra.

¿Por qué ocurren?

Esta respuesta está ligada a factores biológicos y psicológicos. Dado la singularidad de cada caso,
no se puede generalizar sobre su origen, pero hay factores que pueden ser compartidos, como:

- La genética (factores hereditarios)


- Un alto nivel de estrés
- Un carácter que es más sensible al estrés y proclive a las emociones negativas
- Ciertos cambios en la manera en que funcionan las partes del cerebro

Puede entenderse como una respuesta de supervivencia, la cual es desencadenada por un


contexto que le pueda resultar hostil y peligroso a la persona.

Algunos Síntomas

Los ataques de pánico suelen abarcar varios síntomas ligados a lo corporal. Es importante poder
reconocer estos síntomas como una respuesta frente a una situación de alto estrés. Entre ellos
podemos encontrar:

- Sensación de peligro o fatalidad inminente


- Miedo a perder el control o a la muerte
- Taquicardia y palpitaciones
- Sudor
- Temblores o sacudidas
- Falta de aliento u opresión en la garganta
- Escalofríos
- Sofocos
- Náuseas
- Calambres abdominales
- Dolor en el pecho
- Dolor de cabeza
- Mareos, sensación de desvanecimiento o desmayos
- Sensación de entumecimiento u hormigueo
- Sentimientos de irrealidad o desconexión

¿Qué hacer frente a una crisis de pánico?

Hay que entender la crisis de pánico como una bola de nieve que desciende. A medida que esta
avance, se va incrementando, acentuando la intensidad de las sensaciones que esta provoca. Por
eso, es importante reconocer los síntomas como un aviso, y no como un destino inevitable.

Dentro de nuestras recomendaciones:

- Tratar de mantener la calma, estos pensamientos que invaden son producto de unx
mismx, hasta que eventualmente algo en el exterior lo confirme
- Respirar lenta y profundamente, tratar de estabilizar la respiración nos ayudará a
recuperar la sensación de control de nuestro cuerpo.
- Aceptar estas emociones de inseguridad. Es normal sentir y reconocer el miedo y la
preocupación. Recriminarse de estas emociones solo agrava nuestro propio estado,
pudiendo caer en sentimientos de culpa.
- Desviar la atención de estos pensamientos. Se puede sugerir concentrarse en elementos o
aspectos que sean externos a la situación que pueda provocar. Como por ejemplo,
nombrar y contar los objetos que se encuentren presentes.
- Si es posible, retirarse del lugar que este provocando esta reacción, con la finalidad de
poder tomar un poco de aire y salir de este estado de alerta.

Entender la crisis de pánico nos puede ayudar a sobrellevarla, o acompañar a alguien que este
pasando por esto. Es de suma importancia el conversar para poder reconocer. La terapia
psicológica cumple su función en este proceso de reconocer la crisis y reconocerse a unx mismx
dentro de esta.

Sin embargo, estas emociones y pensamientos no nos definen como personas. No se adjudica esta
respuesta a una persona “porque es así”, sino que hay que entender más allá, que quizás la
inseguridad de la propia persona, o el contexto en particular, estén afectando y provocando esta
respuesta.

También podría gustarte