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Cantos de Amor - Ausias March PDF
Cantos de Amor - Ausias March PDF
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Ausiàs March
Cantos de amor
ePub r1.0
Titivillus 05.07.2019
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Título original: Cants d’amor
Ausiàs March, 1560
Traducción: Jorge De Montemayor
Diseño de cubierta: RLull
Editor digital: Titivillus
ePub base r2.1
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Índice
Al lector
CANTOS DE AMOR
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Al muy magnífico señor
Mossén Simón Ros,
Jorge de Montemayor
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Al lector
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Soneto de Micer Christóval Pillicer
al intérprete
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Soneto de un cavallero valenciano
a Jorge de Montemayor
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Jorge de Montemayor,
a Mossén Ausias March
Soneto
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Cantos de Amor
de Ausiàs March
traduzidas de lemosín
en castellano
por Jorge de Montemayor
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Canto I
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es el que a qualquier triste es concedido, 30
que más si él mismo llora se consuela,
que todo el mundo llore, y dél se duela.
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Canto II
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sino appetito bruto y osadía. 30
Si en fuego el que assí ama está caýdo,
no sea llorado, no, ni defendido.
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Canto III
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de Amor sostuve siempre; mas mi hado 30
me dio otro nuevo, que es tan insuffrible,
que muerte no podrá ser más terrible.
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Canto IV
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mi fuerça en este hecho es casi nada; 30
y pues sin él jamás yo hallo medio,
¿qué fin havrá, señora, en mi remedio?
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Canto V
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Canto VI
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ni en vos cresce el querer por su mandado; 30
porque mi fe jamás pueda acabarse,
no siento el bien, ni veo el mal llegarse.
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Canto VII
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alguno llamo, porque mi señora 30
Oýrme no rehúse y se me aparte,
pensando qu’es mi amor en mala parte.
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si están en división y sin concierto;
si Amor aun a sí mismo se haze tuerto,
¿cómo a sus siervos librará d’engaño?
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Canto VIII
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mas no las circunstancias propriamente; 30
quien lo padesce entiende la substancia,
juzgallo sin sentillo es ignorancia.
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Canto IX
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mas ¿qué fuera de mí, si no lo fuera? 30
Su lança hinque en mí el Amor crudo,
pues dan lustre sus golpes en mi escudo.
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Canto X
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Canto XI
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que no podrá faltar de ninguna arte: 30
al más devoto ciega y le entretiene,
su entendimiento a otros mil mantiene.
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Canto XII
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no lo sentís, ni veys qu’estoy perdido; 30
no usa amor aquí d’entendimiento,
dexando a vos contenta, a mí hambriento.
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Canto XIII
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pues el amor en mí por vos ha entrado, 30
y el ser perfecto y alto que en vos vido
me hizo a mí querer sin ser querido.
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Canto XIV
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con los desseos que siempre me presenta: 30
y no hay movellos ya de ningún arte,
ni mantenellos de otra alguna parte.
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Canto XV
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que sin la vuestra bive en gran tristura, 30
y fuera de vos misma yo no creo
que llamara a su puerta algún desseo.
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Canto XVI
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mostrar aquel querer tan firme y fuerte, 30
ni mi querer saldrá de tanta mengua,
porqu’entre vida y muerte está mi lengua.
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Canto XVII
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que amasse un coraçón de fiera brava, 30
hazelde blando, porque yo no basto
a resistir un rostro hermoso y casto.
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Canto XVIII
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que ymaginar la dama a quien se dieron: 30
aquello los deleyta de tal modo,
que a sí y al mal olvidarán del todo.
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Canto XIX
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Canto XX
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soy bivo, pero el mal que se recresce 30
es muy mayor, y más cruel y esquivo,
que si otros mueren, yo muriendo bivo.
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Canto XXI
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y a sólo el bien del alma encaminava, 30
dexé de todo el amor baxo y vano,
creyendo qu’estorvasse el sobrehumano.
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Canto XXII
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quien al femíneo sexo es sometido, 30
y se confía en falso amor de hembra?,
adonde coje el malo, el bueno siembra.
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Canto XXIII
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y el gran dolor qu’es causa qu’él me mate, 30
quitallo ýa yo triste en esse punto,
y quedaría libre el cuerpo y alma.
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Canto XXIV
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si en vos hallan lugar por algún arte, 30
porque en el más dispuesto entrarse vemos,
pudiendo contrastalle, no queremos.
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Canto XXV
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jamás mi gran desseo cumpliría, 30
qu’el día que yo muera y mis dolores,
Amor fenescerá y sus amadores.
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Canto XXVI
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otro sin mí meresce ser culpado: 30
querelde mal, porqu’el Amor es cierto
quien este servidor os ha encubierto.
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Canto XXVII
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d’esfuerço ya tan pobre y consumido, 30
que con mi boz no puedo, aunque yo quiero,
dexir que sola en vos, señora, espero.
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Canto XXVIII
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en mi sepulchro escrivan desta suerte: 30
«N’os alteréys, señora cuyo soy,
que por vos muero, y no sé adónde voy».
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Canto XXIX
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y sigue la fortuna mal mirada!, 30
mudad los dos vuestra costumbre estraña,
y no parezcáys en cosa a quien me daña.
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Canto XXX
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y tras pequeño gozo affán doblado, 30
como un bocado dulce que al doliente
aplaze al gusto y dobla el accidente.
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Canto XXXI
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consigo trae la falta que ha mostrado; 30
si no le creen, consuélese consigo,
que no hay quien jamás crea a su enemigo.
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Canto XXXII
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que nunca se verán en sus temores, 30
pero con sólo ver su bien fingido
blasfemarán del tiempo que han perdido.
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Canto XXXIII
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pues qu’es ygual a todos ley tan dura, 30
según cada uno está en amor dispuesto,
y quanto puede nos la estrecha en esto.
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Canto XXXIV
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se puede sentenciar quién ha vencido, 30
porque cada uno tiene tal potencia,
que mi saber no le halla differencia.
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Canto XXXV
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que en vida muere y su tormento es uno, 30
que quien bive en deleyte acá consigo,
de tal dolor no puede ser testigo.
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Canto XXXVI
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si no es al desseado, y me revela 30
si parto del desseo al desseado,
qu’entre uno y otro me veré anegado.
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Canto XXXVII
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qu’es loco el que le duele mi agonía.
Pues n’os duela el dolor que suffro, y callo,
si no queréys, señora, acrescentallo.
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Canto XXXVIII
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y no os lo pongo en cuenta, ni me fundo 30
en más que en declarar que por vos muero,
y me agraviáys dudando en lo que os quiero.
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Canto XXXIX
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y no puede creer qu’en mi ventura 30
cabrá que en algún tiempo sea querido,
y d’un estremo al otro voy perdido.
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Canto XL
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y están discordes todos en la cuenta: 30
uno querría junto a tierra hallarse,
y el otro en alta mar, y allá engolfarse.
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Canto XLI
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de honestidad contrario y enemigo, 30
por él, ánima y cuerpo se han amado,
y muestran paz y guerra todo en uno.
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pues en batalla el cuerpo vence al alma;
si no se tiemplan los desseos pequeños,
dezid: ¿cómo podréys templar los grandes?
A este Amor no escucha aquel juyzio,
pues sólo quiere contentar la carne; 70
con gran seguro de vencella tienta
y ablanda los diamantes con sus manos.
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Canto XLII
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razón sirva su officio, pues la llamo, 30
y mi sentir subtil sea torpe luego,
y no tenga respecto a aquel qu’es ciego.
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Canto XLIII
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el mío, qu’en morir seré olvidado: 30
sólo este pensamiento me cautiva,
mas no creo que será, si vos soys biva.
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Canto XLIV
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que con vergüenca enfrena el alma mía, 30
¿cómo será que con serena cara
estienda mi razón perfecta y clara?
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Canto XLV
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seguro seré uno entre amadores, 30
porqu’esto es lo que falta solamente,
que por aora basta el bien presente.
No me deleytaría a mí tocaros, 25
de solo vuestro Amor soy desseoso,
y tal passión me da, qu’al contemplaros
el cuerpo está temblando y temeroso.
A tanto Amor querría yo inclinaros,
Si no me lo embiáys, forçadamente
mi complexión verné a seguir en esto,
dexando la razón como innocente,
al crudo Amor me bolveré de presto. 20
No pienso estar ocioso y negligente,
ni aun huvo en mí jamás tal prosupuesto;
más quiero amar do muera cada día,
que ver el alma queda, ociosa y fría.
Esparsa
Esparsa
Esparsa
Esparsa
Esparsa
Epístola
Fin
Epístola
Vi pretender dignidades
títulos, honrras y estados, 115
los menos exercitados
en saber dezir verdades;
vi que las informaciones
encubren grandes dolencias,
por donde son las sentencias 120
hijas de las opiniones.
Fin