ENFOQUE ECOLOGICO DE INTERVENCIÓN ESPECIALIZADA

Gestión Intersectorial.

Psico-educación Género

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C
Interculturalidad

* Interacción constante entre contextos y enfoques transversales, desde una perspectiva

ecológica sistémica.

Según los informes del Servicio Nacional de Menores SENAME, el abandono

constituye “una de las formas más grave de maltrato” (SENAME 2010), en donde se
ha vulnerado el derecho a vivir en familia. Sin embargo, el inadecuado ejercicio del
rol materno y paterno también constituyen prácticas que afectan gravemente a
niños, niñas y adolescentes, puesto que se vulneran derechos tan fundamentales
como el cuidado, la protección y el vínculo afectivo. El diagnóstico que se realiza de
esta situación demuestra que “las familias de estos niños/as, presentan
comportamientos altamente negligentes, incurriendo en el abandono total o
progresivo de su hijo/a, o bien, manifestando comportamientos que dejan entrever
su incapacidad global para ejercer una parentalidad responsable” (SENAME 2010),
lo que se ve reflejado en contextos familiares con una definición difusa y ambigua
de roles, maltrato físico y emocional, abuso sexual, exposición a contextos de
violencia intrafamiliar, alcoholismo en los padres o adultos significativos, entre
otras. Sólo basta con atender a los informes de la UNICEF que establecen que “un
75% de los niños y niñas refieren haber sufrido algún tipo de maltrato” (UNICEF,
2006) , dentro del cual aparecen el abandono como uno de las formas de maltrato
por omisión, como una acción accidental que compromete la satisfacción de
necesidades básicas del niño o niña.

La red de protección infanto-adolescente ejerce la restauración de los derechos

vulnerados mediante la oferta de programas, no obstante las atenciones a niñas/os
y adolescentes en situaciones descritas anteriormente generan el aspecto nocivo de
la institucionalización lo cual gatilla retrasos globales en términos de salud
biopsicosocial en los sujetos, motivo por el cual la oferta se restringe mas bien a un
patrón proteccional transitorio que a una intervención integral y especializada
disminuyendo ciertamente el efecto y los riesgos de las problematicas familiares
descritas, pero limitando también las posibilidades psicoterapéuticas de reparación
y resignificación biográfica.

También suele olvidarse que en estos contextos es posible rescatar recursos

familiares por medio de los cuales la intervención sea mas efectiva, participativa y
significativa, respetando el interes superior del niño/ña o adolescente y su derecho
a no ser separado de su familia de origen. En tal sentido se puede indicar que
dentro de estos recursos se encuentra la apertura de la familia a participar del
proceso de cambio, donde es natural encontrar ciertas resistencias, también se
observa la aceptación de alternativas de resolución no violenta o traumatica de
conflictos, por ultimo aparece la importancia que la familia, niños/as y adolescentes
le otorgan al vinculo afectivo como motor relacional al interior del grupo familiar, en
la comunidad y en el desenvolvimiento social.

Es así como el reconocer a niños, niñas y adolescentes como seres únicos con
derechos, e intereses propios, permite que las intervenciones se centren en
potenciar sus capacidades, habilidades, herramientas personales y familiares y
cada uno de los elementos que le permitan desarrollarse de manera normal en la
sociedad. Esto brinda la posibilidad de aumentar desde la intervención las
posibilidades, que el niño (a) y adolescente logre por sus propios medios,
autogenerarse una nueva expectativa y proyectarse de manera mas segura ante un
futuro mas vinculante.