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“Los procesos de urbanización” de Julio Vinuesa

>Origen y desarrollo histórico del proceso de urbanización en el mundo.

NACIMIENTO Y EVOLUCION DE LA CIUDAD PREINDUSTRIAL

Hace miles de años que existen ciudades, y estas han ido proliferando y evolucionando a lo largo
de los siglos y a la vez que han sentado en buena medida las bases de la ciudad actual. En
España, por ejemplo, que participa de la cultura urbana casi desde sus orígenes, la mayor parte
el espacio urbano actual apenas tiene treinta años. Puede ser sorprendente que esta forma de
organización espacial que se caracteriza por estar ligada al progreso y al dinamismo allá tardado
miles de años en imponerse y generalizarse.

Solo hay ciudades cuando los grupos humanos son capaces de construirlas y administrarlas y
cuando les resultan útiles y ventajosas para sus objetivos militares, comerciales, económicos,
políticos, etc.

ESQUEMA HISTORICO DE LA CIUDAD PREINDUSTRIAL

Las primeras ciudades surgieron hace unos cinco mil quinientos años cuando se hubo alcanzado
una tecnología neolítica avanzada que permitió el paso de un sistema de simple recolección a
otro en el que los alimentos eran ya cultivados. Se dan tres granes niveles de organización
humana a lo largo de la historia: primitivo, feudal o preindustrial e industrial.

+El nivel primitivo, de carácter pre-urbano se caracteriza por pequeños grupos urbanos
homogéneos y autosuficientes, cohesionados por la búsqueda del alimento. El excedente
alimentario es inexistente o en cantidades muy pequeñas. Esas circunstancias no permiten
asentamientos importantes y duraderos ni que nadie pueda dedicarse a otra cosa que no sea la
búsqueda de su propio sustento.

+El segundo nivel de organización denominado pre-industrial o feudal se caracteriza por una serie
de avances técnicos y diversas mejoras en los cultivos que incrementan la producción agraria y
propician la existencia de excedentes alimenticios. Cuando halamos de los excedentes agrícolas
como factor que hace posible la urbanización hay que pensar en los totales que producen toda la
comunidad y no solo en lo que es capaz de generar cada trabajador.
Esto añade un elemento importante en la explicación de los procesos ya que el tamaño y la
densidad de la población agrícola, son más importantes que la productividad en sí misma. La
fertibilidad de la tierra y la tecnología agrícola serian por tanto solo factores complementarios.
Estas circunstancias hacen posible los asentamientos estables de población.
Queda claro que los elementos que sustentan el proceso urbano, son unas ciertas densidades de
población, los excedentes de producción agrícola y la capacidad organizadora y de dominio de la
élite dirigente, a la que hay que suponer unas cuotas de poder religioso político y económico.
Pero este proceso solo se verá impulsado por la actividad comercial.
Las ciudades van a seguir evolucionando y extendiéndose muy lentamente a lo largo de los siglos
sí que se produzcan grandes transformaciones hasta la llegada de la revolución industrial.

+El tercer nivel de organización humana corresponde a la industrialización. La progresiva


desaparición del sistema feudal basado en la autarquía da paso a un sistema más abierto, con
relaciones comerciales internacionales y en el que se producen también granes cambios sociales.
Es a partir de la segunda mitad del siglo XVIII y en la mayor parte del mundo mucho más
recientemente, cuando tienen lugar los procesos de urbanización, que por su intensidad y
complejidad, relevan a una posición relativa uy poco relevante a todo el desarrollo urbano
anterior.

LAS PRIMERAS CIUDADES

La aparición de las primeras ciudades se da en la región de la Mesopotamia en la mitad del


cuarto milenio a.C. Cada una de estas ciudades estaba regida por un monarca. Existían otras en
relación con trabajos artesanales especializados, destinadas a satisfacer necesidades de las
clases dirigentes, la construcción y el comercio. El esquema físico de estas ciudades es el de un
recinto amurallado, organizado en torno a un palacio-templo, y sus calles son irregulares.

A partir del tercer milenio, en el Delta del Nilo aparecen como unidades que formaban unidades
políticamente independientes. En ellas, los faraones concentraban el poder político y religioso al
frente de un fuerte dispositivo central que controlaba el excedente económico y la fuerza de
trabajo.
Las primeras ciudades en el este de Asia aparecen en el valle del rio Amarillo, en el siglo XIV a.C.
en relación con sistemas de canalización de aguas que mejoran los rendimientos agrícolas. Su
estructura espacial es similar a la ya descripta, posee un recinto amurallado con el palacio en el
centro, y la existencia de artesanos especialistas en ornamentación. En el continente americano,
las primeras ciudades se sitúan en la península del Yucatán en Guatemala y en México.

LA PLORIFERACION DE LAS CIUDADES EN EL MEDITERRANEO

De los procesos de urbanización en este periodo se ha dicho que se produjeron por contagio, ya
que los nuevos territorios eran ocupados por poblaciones ya urbanizadas que reproducían en
ellos sus modelos de organización.
Todo el proceso va a girar en torno a diferentes elementos básicos: el ejército, como instrumento
de conquista y de defensa; la religión y otros elementos culturales como expresión de una
organización política y administrativa que debe imponer un cierto orden social al servicio de la
tarea de dominio y de colonización.
Los fenicios se dedicaron al comercio marítimo con lo que se convirtieron en agentes
transmisores de diversas culturas En su caso las ciudades son instrumentos necesarios para la
mejor organización de su actividad económica y se convierten por tanto en la expresión física de
su red comercial.

Las ciudades griegas van a reflejar una civilización superior y una sociedad más compleja.
Surgen también de las necesidades de defensa, de administración y de comercio de una
religión. Esta crece en torno a la acrópolis, lo que refleja la importancia de las ideas religiosas.
La democracia como forma de organización más participativa propicia la aparición de edificios
y espacio de uso común (teatros, estadios, etc.).
La expansión de esta ciudad es un proceso dilatado en el tiempo y obedece a diferentes
causas, a veces se trata de simples migraciones que van creando nuevas ciudades que por su
independencia no deberían ser consideradas como colonias.

En Roma el desarrollo del imperio y la asunción de buena parte de la tradición helenística


conducen a un mayor grado de urbanización. Se parte de unas estructuras absolutamente
rurales, pero con el paso del tiempo se va a producir un importante avance en el desarrollo de
la cultura urbana.
El plano de esta se configura a partir de dos ejes que se cortan en ángulo recto, con
orientación norte-sur el cardo y de este a oeste el decimando. El punto central es para algunos
un símbolo del orden militar y del poder del imperio, y en el que se localizan el pretorio, el foro
y los templos.
Por último es importante señalar como esta proliferación de ciudades implica a su vez un
progresivo desarrollo de determinadas clases y estructuras sociales propias de la vida urbana.

LA CIUDAD MEDIEVAL

El mediterráneo durante siglos fue el vehículo de propagación de la urbanización y por tanto


un elemento de vinculación cultural, pero con la expansión del Islam a partir del siglo VII va a
convertirse en una barrera entre dos mundos hostiles y antagónicos.

El mundo islámico protagoniza una expansión y representa una nueva concepción de la vida,
impuesta por una religión de rígidos preceptos y marcadas diferencias con el cristianismo.
La ciudad musulmana reúne unas peculiaridades morfológicas y funcionales muy marcadas
y constantes a lo largo y ancho del mundo musulmán así como a través del tiempo. Sorprende
la semejante morfología en distintas regiones a pesar de que éstas hubieran estado sometidas
a influencias muy diversas y profundas.
La morfología de la ciudad musulmana resulta inconfundible, es muy poco diferenciado, sin
apenas otros espacios abiertos y elementos estructurantes que unas calles de trazado
intrincado, estrechas y generalmente cortas, cuya principal función es servir de acceso a las
viviendas. Solo unas pocas calle principales se dirigen en forma radial pero tortuosa, desde el
centro hacia las distintas puertas de unas ciudades fortificadas y rodeadas de arrabales a
veces también cerrados en sus propias murallas.
Las casas no tienen ventanas hacia las calles, se organizan de espalda a ella con altos muros
ciegos que reflejan una actitud premeditada de preservar la intimidad de los moradores de las
viviendas. La calle es un acceso pero no un espacio en el que puede haberse reflejada la vida
humana.
Por otra parte Europa se continentalita durante la edad media y vuelve a unas estructuras
eminentemente rurales en las que el feudalismo y la merma de las actividades comerciales son
los elementos fundamentales desde la perspectiva de nuestro estudio. El comercio se restringe
a unos mercados de carácter local, de productos agrarios y a pequeña escala, en una
economía doméstica.

La morfología de las ciudades medievales presenta unos rasgos característicos marcados en


buena medida por las necesidades defensivas propias de la época. Los emplazamientos,
buscando el apoyo en el medio natural para dificultar aquellos ataque exteriores, implican
necesariamente accesos complicados y sobre todo unos terrenos muy movidos a los que de
manera espontánea se van adaptando unos trazados diarios necesariamente regulares.
En todos los casos, el centro de la ciudad medieval va a estar precedido por la Iglesia y otros
edificios civiles importantes, casi siempre complementados con una plaza que es cede del
mercado y que como el resto de los espacios abiertos es intensamente utiliza para la actividad
social. Esta ciudad es socialmente poco heterogénea y la diversidad del espacio interno se
debe al propio proceso de construcción o a los agrupamientos por especializaciones
profesionales, étnicas, lugares de procedencia y creencia religiosas.

EL RENACIMIENTO Y LA CIUDAD BARROCA.

El renacimiento es sobre todo un movimiento intelectual, fruto de la creciente vida mercantil y


urbana de la edad media. Se recuperan ideas de la cultura clásica sobre la masa adecuada
organización de las ciudades. Aporta a la necesidad del planeamiento racional, el deseo de
controlar el espacio y la creencia de que es conveniente que este sea creado de acuerdo con
unos criterios estéticos o científicos.
La ciudad barroca adquiere un gran dinamismo, es concebido como un escenario al que se
incorporan nuevos valores decorativos, como los jardines.

La organización administrativa del estado además de debilitar la antigua autonomía


municipal, supone el aumento del peso de las actividades burocráticas en la ciudad, contribuye
a cambiar con la creación de edificios públicos, como teatros, universidades, escuelas,
museos, etc.
El nuevo diseño urbano con calles anchas y rectas ha de facilitar enormemente los
desplazamientos dentro de la ciudad, y esta circunstancia se ve potenciada por la mejora de
los carruajes.
Todos estos cambios sociales van a facilitar el crecimiento de las ciudades.

ELEMENTOS SUSTANCIALES DE LO URBANO EN LA CIUDAD PREINDUSTRIAL.

La ciudad se constituye como plataforma de control militar, de organización administrativa y


de difusión cultural en los procesos de colonización.
Las ciudades primitivas son de barro, en ausencias de otras materias primas o de capacidad
para manipularlas.
La presencia de una gran edificación que destaca marcadamente del resto de la ciudad, es el
reflejo de unas determinadas estructuras socio religiosos. La confrontación de los aspectos de
las calles y de los espacios abiertos de la ciudad hispano musulmana e hispana cristiana pone
de manifiesto concepciones opuestas en cuanto al uso de espacios y a la construcción de las
viviendas.

Capítulo 3

A partir de la segunda mitad del siglo XVIII comienzan a producirse importante


transformaciones sociales vinculadas trascendentales avances tecnológicos. Con enormes
incrementos en la capacidad productiva, el nacimiento de la industria y la mejora de los
transporte impulsa a la ciudad hacia la etapa de mayores transformaciones de la Historia. A
partir de las transformaciones que se producen en los países de Europa occidental y central
desde mediados del siglo XVIII y sobre todo en la segunda mitad del siglo XIX, la ciudad
cambia sus dimensiones demográficas y espaciales, sus formas y su paisaje.

LOS PROGRESOS EN LA PRODUCCION AGRICOLA.


A partir del siglo XVIII se producen progresos en la actividad agrícola. Aumentan las
superficies cultivadas, se cierran los campos y se van intensificando los cultivos, se
perfeccionan los sistemas de rotación, y se mejoran las especies y las razas.
La mayor producción agrícola tuvo que favorecer el crecimiento demográfico durante el siglo
XIX. El aumento de la población significo que creciera la demanda. Los aumentos de la
productividad agraria, por la aplicación de los avances tecnológicos, supusieron que se
redujeron las necesidades de mano de obra en el campo, lo cual fue uno de los principales
factores de expulsión en la transferencia de población desde los ámbitos rurales a las
ciudades; desde la actividad agraria a la industria. Pero el mayor avance en la agricultura se
produjo cuando la alcanzaron los beneficios del progreso industrial atravesó de la
mecanización y de las mejoras en los transportes a finales del siglo XIX.

LA EVOLUCION DEMOGRAFICA.

El cambio demográfico va a dar pie al posterior proceso de urbanización. A nivel global, el


crecimiento se debe al descenso que experimenta la mortalidad como consecuencia del
progreso, mientras que en las áreas urbanas el crecimiento vegetativo queda ensombrecido
por el que producen los flujos migratorios. El proceso comenzó precisamente en los países
europeos.

MEJORAS EN LOS TRANSPORTES.

La aparición del ferrocarril y la navegación a vapor, junto con el telégrafo y el teléfono, fueron
innovaciones que se produjeron en el siglo XIX. Estos medios permiten los intercambios y las
comunicaciones a larga distancia y propician cambios en el funcionamiento de la economía
mundial, en la distribución espacial de la población y en la urbanización.
El desarrollo de los transporte en relación con su velocidad, su seguridad, su comodidad y su
abaratamiento suponen un acortamiento de las distancias.
Antes de la existencia del ferrocarril la imposibilidad de transportar mercaderías voluminosas a
grandes distancias obligaba al aprovisionamiento cercano. La posibilidad de transportar sin
grandes costes las materias primas permitió la concentración de actividades económicas y de
población.
El ferrocarril y el barco de vapor favorecieron la distribución de los productos, con lo que se
agrandaron progresivamente los mercados, lo que dio lugar a su vez a la aparición de
economías de escala, que habrían de dinamizar el desarrollo de la actividad económica.

El desarrollo de los transporte por carreteras a lo largo del siglo XX ha jugado un papel
fundamental en los procesos de difusión de la vida urbana por todo el territorio y en la aparición
de nuevos modelos de asentamientos urbanos. Los desplazamientos interiores en las ciudades
se intensificaron y aumentaron sus recorridos con el crecimiento. Estas mismas no pudieron
desarrollarse especialmente hasta que el tren vía tirado por caballos pudo disponer de motor y
hasta que no aparecieron los camiones y automoviles. Estos avances suponen una reducción
de distancia, que permite que las ciudades crezcan.
El crecimiento espacial de la ciudad permite separar ciertas actividades para que no se
interfieran y no se produzcan situaciones ambientales indeseables. Un ejemplo es la
separación de las fábricas y las viviendas en áreas industriales y residenciales.

Esta posibilidad de diferenciación del espacio urbano es también un elemento fundamental


de segregación fundamental. Frente a la ciudad tradicional que se caracterizaba por la
homogeneidad interna, la expansión física permitió reproducir sobre el espacio la división en
clases sociales que se había materializado con el nuevo orden económico y social. En esta
segregación horizontal, también participan otros avances técnicos. Los ascensores junto con
los nuevos materiales de construcción, permiten la construcción en altura y terminan con la
diferenciación social según las plantas de los edificios. Los de menos capacidad económica
tenían que subir más escaleras, las viviendas iban reduciendo su superficie y perdiendo
calidad. Esta segregación vertical suponía heterogeneidad social dentro de un mismo espacio
urbano pero el ascensor hace que desaparezca el valor diferenciado de las distintas plantas de
los edificios y además permite la edificación en altura.

LA ACTIVIDAD INDUSTRIAL.

Cuando a finales del siglo XVIII se sustituye a madera por el carbón en la producción del
hierro, no solo se inicia un camino en el que se irán reemplazando los objetos de madera por
los de hierro y que llevara a la construcción de grandes maquinas como el ferrocarril. Se
cambia también la localización de la producción de hierro, que de las zonas boscosas se
desplazara hacia las que cuenten con yacimientos de mineral y posteriormente a las que
demanden metales. Tras este cambio, los yacimientos de carbón y de hierro ponen a algunos
países de Europa central y occidental a la cabeza de la industrialización y de progreso técnico.
Esta revolución del carbón y de la siderurgia del acero, paso a la creación de máquinas y
motores que se aplican al transporte y a la fabricación de todo tipo de productos.
En un primer momento se produce un desarrollo extensivo en el que los aumentos de
producción son consecuencia de grandes incrementos de mano de obra con la incorporación
de maquinaria, y que afecta sobre todo a la industria de bienes de consumo, particularmente la
textil.
A mediados del siglo XIX la industrialización va a caracterizarse por el aumento de la
productividad, que no deja de crecer la demanda de mano de obra aunque se reducen
considerablemente las obras trabajadas por el obrero. Es el comienzo de lo que Geddes llama
la era neotécnica. Ahora el protagonismo está en la industria básica de bienes de producción,
en el desarrollo de los transportes y en la intensificación de las relaciones comerciales. Afloran
los grandes bancos, las sociedades anónimas y el capital financiero.
La producción industrial supone la aparición de la fábrica como un elemento arquitectónico
nuevo, modificador del paisaje urbano.

El tamaño de las edificaciones que fue haciéndose mayor con el tiempo, introduce cambio en
la estructura parcelaria y en la organización de las manzanas y del viario.

La competitividad lleva a la especialización de las industrias, buscando así el incremento de


las economías de escala y también a la de la mano de obra, para obtener de ella mayor
productividad con un mínimo adiestramiento.
En las decisiones de localización de las industrias intervienen los costes de transporte de las
materias primas y de la energía, la disponibilidad de mano de obra y la proximidad de un
mercado. La evolución de los transportes resto importancia al primer factor y llevo la industria a
la ciudad, donde además de mano de obra y un amplio mercado va a encontrar una serie de
ventajas económicas derivadas de la aglomeración de actividades económicas que propicia y
permite la existencia de una serie de infraestructuras y de servicios que no existirán, por no ser
viables económicamente, en aglomeraciones de menor tamaño.
El crecimiento económico y la evolución de los transportes intensifican las interrelaciones entre
distintas ciudades. De los mercados locales se pasa a los regionales e intercontinentales.
Toda esa rápida progresión económica genera paralelamente unas grandes necesidades de
suelo urbano. Y no solo se trata de la superficie ocupada por las fábricas, hay que añadir sobre
todo el espacio necesario para alojar a la población inmigrada y la demanda de suelo para una
amplia gama de actividades complementarias.
El suelo ha pasado de ser elemento productivo a ser un mero soporte, pero sobre todo se ha
puesto de manifiesto su escases.

Frente a una demanda que crece vertiginosamente, el largo plazo que se precisa para crear
las infraestructuras, las viviendas y los servicios necesarios, produce una situación de
desequilibrio en el mercado que se salda con hacinamiento y especulación.
Al ir desapareciendo la unidad vivienda-taller, se establece como característica urbana la
separación entre lugar de trabajo y residencia, lo cual generara nuevas necesidades de
transporte dentro de la ciudad.

NUEVO MODELO ECONOMICO Y SOCIAL

El modelo de producción capitalista hace que la ciudad se convierta en un ente productor y


que esa cualidad destaque, incluso sobre sus funciones esenciales de centralidad.
La rentabilidad se convierte en el principio rector de la economía y el dinero resulta un
elemento básico para los nuevos tipos de relacione sobre las que se sustenta el sistema. Los
mercados e preciosos y el trabajo asalariado son dos buenos ejemplos de ello. El orden
territorial va a verse también perturbado; las inversiones efectuadas en infraestructuras de
transporte y la organización de las redes comerciales y financieras dan lugar a una nueva
configuración del sistema de ciudades y de asentamientos humanos.
La generalización del trabajo asalariado sintetiza muchos de los cambios que caracterizan la
nueva estructuración social y el orden económico capitalista. El salario como indicador de
capacidad de renta va a ir convirtiéndose progresivamente en la principal referencia para la
nueva jerarquización social.
El mercado inmobiliario establece los límites espaciales de distintas zonas al contraponer los
precios del suelo y de las viviendas con las capacidades económicas de los demandantes.

SINTESIS DE LAS CONSECUENCIAS DE LA INDUSTRIALIZACION


Para que se produzca los flujos de población desde los ámbitos rurales a las ciudades es
necesario que existan unos excedentes de población agraria, pero las migraciones son
provocadas por los factores de localización urbana que a modo de potentes imanes atraen de
forma casi irresistible a los campesinos. Se trata de emigrar hacia donde se pueda participar en
una sociedad más libre, fuera de los esquemas feudales, en donde de la seguridad de obtener
un trabajo asalariado concede un status de independencia dentro de un sistema que hace
posible el progreso personal. Lo que en definitiva provoca la llegada de inmigrantes es la oferta
de empleo y esta depende de la dinámica de la actividad económica que es por tanto a base
principal del crecimiento urbano.
Las ciudades van a ir creciendo en número y en tamaño a la vez que tienen lugar en ellas
profundas transformaciones.
La llegada de la industrialización a la ciudad tradicional supone la transformación del núcleo
existente y la aparición de desarrollos periféricos que no tardaran mucho en adquirir centralidad
al aparecer otros barrios cada vez más alejados del centro histórico. Los espacios libres, los
huertos y jardines interiores que en la ciudad medieval representaban una gran parte de la
superficie van a ser edificados. Las calles no tienen el trazado ni las dimensiones adecuadas
para el volumen de transito que se ven forzadas a soportar. Las viviendas se dividen y
subdividen, buscando en la densificación una respuesta a la escases y a la carestía del suelo
urbano.

LOS PRIMEROS INTENTOS DE ORDENAR EL DESARROLLO URBANO


Desde las primeras décadas del siglo XIX se elaboran proyectos para organizar el desarrollo
espacial de las grandes ciudades americanas o la creación de nuevos asentamientos. Estos
planes recogen parcialmente la herencia barroca de la disposición de espacios y del trazado
diario, se trata de dar una mínima organización al espacio.
También en el curso de este siglo algunas de las principales ciudades europeas van a conocer
importantes actuaciones urbanísticas de reforma interior. Se trata de operaciones más o menos
extensas que abren el tejido urbano prexistente con amplias avenidas, que además, mejoran la
comunicación con los nuevos desarrollos de las periferias.

Arturo, Soria y Mata había propuesto en 1882 una brillante solución para encausar el
desarrollo urbano, que tuvo una muy parcial puesta en práctica en Madrid. La ciudad lineal que
propugna se apoya sobre un eje de comunicación entre núcleos ya existentes, que ha de
generar dinamismo urbano y que garantiza el contacto con la naturaleza al estar limitado su
desarrollo transversal. Esta tiene en cuenta los planteamientos higienistas y naturalistas de la
época.

COMO MODELAR EL DESARROLLO Y LA DINÁMICA DE LA CIUDAD LATINOAMÉRICA


(Axel Borsdorf)
Advertencias preliminares: La época colonial (1820), la primera fase de urbanización influida
fuertemente por la inmigración europea (1920), la segunda fase marcada por el éxodo rural y la
migración interna (1970) y la ciudad contemporánea (2000), segregación socio-espacial bajo la
forma de barrios cerrados.
La época colonial, La ciudad Compacta: Hacia 1573 las capitales fueron ubicadas en el
centro de sus regiones administrativas y en valles o cuencas con condiciones de clima sano.
La plaza mayor denominada plaza de armas constituía el centro de cada ciudad como
estructura clave para la red de calles urbanas, además actuaba como núcleo de la vida social.
La posición de cada ciudadano estaba determinada por la distancia de su casa con respecto de
la plaza principal. Cerca de esta estaba ubicada la aristocracia, los funcionarios de la corona y
los grandes hacendados, el circulo siguiente fue ocupado por la clase media (comerciantes y
artesanos) en este barrio se ubicaba el mercado municipal. El último circulo el más periférico
Vivian los “blancos pobres”, los indios y mestizos. En resumen, Orientación hacia un solo
centro (plaza), un desarrollo lento causado por el crecimiento natural, una orientación
económica basada en la explotación de los recursos naturales y una sociedad estable pre-
industrial colonial.
La ciudad Sectorial (1820-1920): Independencias de colonias españolas, lo que genero la
inmigración europea (comerciantes, industriales, artesanos, agricultores) a nuevos estados,
estos trajeron modas urbanísticas como el boulevard francés. Diferenciación sectorial:
crecimiento de los sectores de la clase alta, que se orientó al boulevard principal. Los primeros
barrios obreros se desarrollaron en las casas abandonadas por la clase alta, bajo la forma de
conventillos, tugurios o vecindades. El desarrollo sectorial rompe la estructura circular de la
ciudad colonial, expansión lineal del centro que pasa a ser administrativo. En esta época los
sectores claves de la economía nacional pasaron a manos de empresas extranjeras (1850).
La ciudad polarizada (1920-1970): Entre 1920 y 1930, el objetivo del desarrollo hacia fuera
comenzó en América latina a ser desplazado por el desarrollo hacia dentro. La política
económica era loa sustitución de importaciones. Los barrios de clase baja y marginales se
expandieron en el centro a través de estructuras en forma de pasaje (imitaban el modelo de
conventillo). En simultaneo nacen los barrios marginales periféricos (barriadas, villas miserias)
localizados en nichos no edificados dentro del perímetro urbano como lotes aislados fuera de la
ciudad. Al mismo tiempo, también fueron construidos barrios de vivienda social en dicha
periferia urbana. Los ricos se alejaban cada vez más del centro de la ciudad, nacen los
primeros centros comerciales, nuevos barrios de “lujo”, los clubes de campo, torres de
departamentos protegidas por servicios de seguridad y se comenzaron a cerrar las primeras
calles mediante barreras y cercos. El contraste entre una ciudad y una ciudad pobre se fue
intensificando. Motorización del desarrollo urbano debido a: la industrialización, poder estatal
en la economía, éxodo rural, papel rector del estado. En los años 70 y 80 se genera movilidad
horizontal y vertical, importantes flujos migratorios se dirigieron a los conventillos centrales y
desde ahí a los barrios marginales periféricos.
La ciudad fragmentada (1970 hasta hoy): Construcción de autopistas intraurbano
modernizadas y ampliadas con capital privado facilito la aceleración del tránsito. Las zonas
periféricas y periurbanas volvieron a ser atractivas para clases medias y alta. Proyectos
urbanísticos; Nordelta en Bs.As ciudad- pueblo. O en Sao pablo Brasil “Alphaville”; áreas
gigantes amuralladas con instalaciones de seguridad, con centros de comercio, espacios de
entretenimientos, escuelas, etc. Principio de fragmentación; una nueva forma de separación
de funciones y elementos socio-espaciales. Elementos económicos y barrios habitacionales se
dispersan y se mesclan, urbanización de lujo en barrios muy pobres, centros de comercio en
todas partes de la ciudad, barrios pobres en sectores de clase alta, muros y cercos, barreras
con que se separan y asegurar contra la pobreza.
Los barrios cerrados son urbanizaciones con dos o más departamentos o casas que cuentan
con una infraestructura común cercados por muros o verjas, separados del espacio público
mediante una barrera o puerta y vigilados por guardias o cámaras de video. Incluye áreas
verdes, áreas infantiles, deportivas, piscina, sauna y club house.

Unidad 2
“Geografía Humana” de Juan Romero
La subversión: el discurso blanco, masculino y de clase media.
La nueva geografía cultural tiene en estudio especialidades y sociabilidades de un amplísimo
abanico de grupos minoritarios y o subalternos que tienen como único elemento en común su
carácter de minoría, entre ellas encontramos: las de carácter religioso, por razón de edad,
orientación sexual, condición física, comunidades salidas de la inmigración o La minoría de
mujeres.

Geografía del deseo cuerpo y sexo


Desde principios de los años 90 los aspectos relacionados con la sexualidad empezaron a
ser considerados como un elemento propio de las estructuras políticas, económicas y sociales .
Entendiendo que cualquier forma de identidad es construida socialmente se hace necesario
analizar los espacios a través de los cuales estás identidades se constituyen y desarrollan y a
su vez entender que la Constitución y el desarrollo de dichas entidades produce un
determinado tipo de espacios y de visiones del mundo.
Muchos estudios han cartografiado los barrios residenciales y los distritos comerciales gays o
los lugares de turismo internacional gay o lesbiana, en un intento de relacionar la sexualidad
con algunas de las dinámicas propias del capitalismo. En lo que respecta a las geografías
heterosexuales muchas de ellas ponen su atención en la prostitución analizando las
representaciones morales de los discursos sociales y las prácticas políticas a la hora de
marginar a los que trabajan en ellos.
Es a partir de los años 90 cuando el cuerpo se convierte en objeto de estudio y de
fascinación. El cuerpo será tratado como una superficie que puede ser cartografiado como una
frontera permeable entre el sujeto individual y el otro. La tensión entre economía política y
cultura también se plantea en geografía a partir del estudio de cómo el espacio contribuye a la
sexualización del cuerpo atrás de las representaciones de masculinidad y feminidad.
Territorios de las minorías espacios de exclusión
La geografía también se ha abierto al estudio de la discapacitación corporal y mental. Si la
teoría psicoanalítica localiza la formación del género y de la identidad sexual en el cuerpo, los
geógrafos han extendido esta teoría a la comprensión de los procesos de exclusión social
analizando las pautas que llevan a la sociedad a excluir, a marginar o a oprimir a los que por
impedimentos físicos o mentales se consideran o son considerados desviados o desviantes.
Desde una óptica más materialista, las discapacidades también se estudian tratando las
distintas problemáticas y necesidades socioeconómicas.
Así un cuerpo considerado no normal por su forma o sus capacidades puede convertirse de
nuevo en frontera para las relaciones sociales y espaciales, a la vez que como en el caso de la
sexualidad o de la raza crea sus propias espacialidades e identidades territoriales.
El interés geográfico es evidente, ya sea analizando en individuos o en comunidades su
posible islamiento social y espacial en relación a los cánones establecidos. Pueden tratarse así
sus propias geografías exclusiónarias ya que hay investigaciones acerca de mujeres, gente de
color, disidentes sexuales, niños, ancianos, discapacitados y enfermos crónicos.

Cultura y políticas urbanas


La consolidación del modelo posfordista de regulación social y económica ha ido
progresivamente relacionado con el llamado proyecto neoliberal a través del cual se habían ido
instrumentando estrategias de acumulación basadas en la privatización y en la introducción de
la lógica del mercado en el sector público, y la liberación y desregulación de la práctica total de
los sectores.
Este nuevo orden económico y social se manifiesta en cambios en las estructuras urbanas y
en las condiciones económicas y sociales lo que implica que las políticas urbanas hayan tenido
que adaptarse a las nuevas condiciones derivadas del proyecto neoliberal. La presencia de la
cultura es constante para describir o justificar el cambio urbano y promover un nuevo modelo
de regulación en concordancia con un proyecto de ciudad lo cual implica graves y grandes
cambios en la forma urbana.
Otro modo por el que la cultura está siendo utilizada es en la creación de un imaginario para
reforzar la competitividad de la ciudad y su inserción en los circuitos económicos
internacionales. Uno de los ejemplos más habituales es la promoción de lo urbano como lugar
del conocimiento entendido éste como los diferentes aspectos relacionados con la formación e
innovación y las tecnologías que se identifican más directamente como industria cultural.
El centro urbano es la base del proceso de formación de la imagen de la ciudad ya que sigue
representando Al conjunto de la ciudad. A pesar de que ya estaba presente en el siglo XIX
triunfo la economía simbólica mediante óptimas campañas de marketing y estrategias de la
apariencia a través de las cuales se combinan el progreso, la renovación urbanística, el
desarrollo económico, la promoción turística, y por supuesto la necesaria participación de la
comunidad global.

La reacción de los ciudadanos


Uno de los primeros efectos de los cambios introducidos en los procesos económicos,
sociales y urbanísticos de las ciudades es la reacción de los grupos más directamente
implicados y menospreciados.
Cuando los habitantes y usuarios locales toman conciencia de lo que está sucediendo a su
alrededor se ven obligados de pronto a negociar usos y significados del lugar. Para los que
están bien conectados y tienen recursos estás negociaciones son también fáciles y rápidas y
además muy productivas ya que no sólo se establecen socialmente y se delimitan
territorialmente los nuevos símbolos, funciones y significados urbanos sino que se adoptan
posicionamientos ventajosos en relación a otros individuos, barrios fortaleza o selección
sociolaboral.
Contrariamente los ciudadanos que resultan estar poco globalizados por razones de edad,
por ignorancia en el acceso a los mecanismos de las redes o por falta de oportunidades y
recursos a menudo reaccionando una forma también marginal y marginada lo que no impide
que en este marco se creen nuevos y distintos significados culturales urbanos. Su actitud
adopta una óptica inevitablemente defensiva manteniendo escasa incidencia en las esferas de
decisión política y en los pasillos del poder y sin mucha capacidad para incidir en otra cosa que
no sean sus necesidades más inmediatas. Así a menudo se reafirman los nacionalismos de
barrio.

La ciudad Dual integración y exclusión


Los efectos de la globalización interna tanto locales como de identidad llegan también a la
cara oculta de la ciudad Dual ya que las formas culturales de los grupos sociales que viven en
las zonas de exclusión en el núcleo central o en el casco antiguo, son animadas, manipuladas
y posteriormente distribuidas, consumidas y apropiadas por el mercado global.
La constante reinvención de las estrategias de transformación urbana surgen también formas
alternativas de resistencia ciudadana que hacen uso de las nuevas tecnologías para
comunicarse compartir información y estrategias y divulgar las campañas locales de las luchas
urbanas a niveles más amplios e incluso para impulsar campañas globales y establecer redes
de ayuda mutua. Con el apoyo de las políticas de igualdad y un gran esfuerzo propio, muchos
jóvenes de segunda y tercera generación empiezan a sentirse cómodos en la ciudad global a
pesar de que sus padres no lo estén, y alguno incluso acabará constituyendo una clase media
multicultural en un constante y enriquecedor desplazamiento pendular entre lo local y lo global.

Mercantilización de los espacios la identidad a través del consumo.


Los parámetros de localización han pasado a fijarse en función de una coalición de intereses
y perspectivas supralocales en la que intervienen desde los distintos niveles de las
administraciones públicas hasta capitalistas con iniciativa y organismos financieros
internacionales.
La ciudad Industrial moderna era cerrada opresiva gris indiferente a la propia imagen exterior
dado que su único objetivo era el control de sus funciones internas. La ciudad posmoderna vive
de las transacciones y de los intercambios simbólicos y tienen en la imagen y la atracción su
capital más valioso siempre buscando las inversiones más rentables para incrementar la
cantidad y calidad las interconexiones exteriores.
Para los gestores de las ciudades, las expectativas y los deseos de los turistas y de los
visitantes son tanto o más importantes que la de los residentes habituales ya que son un
producto y a la vez un indicador de una integración en las redes. El turismo resulta ser uno de
los exponentes más claros de la globalización en el turismo posmoderno y posindustrial, en
donde el lugar se convierte en mercancía. El lugar no es sólo un espacio para consumir sino
que él mismo se convierte en combustible en objeto de consumo.
Los parques temáticos intensifican y condensan esta experiencia en pocas hectáreas y
permiten al visitante trasladarse sin viajar o si se quiere viajar virtualmente a través de la
música de la escenografía de la cocina o incluso de los olores.
Los parques temáticos fragmentan el espacio geográfico y el tiempo histórico convencional a
través de una intensa combinación de lugares interiores creando un zapping ecléctico con
imágenes espaciales como un simulacro de geografía universal sustituyendo a la original.

Centros comerciales o centros culturales


Un ejemplo parecido de los parques temáticos es el de los centros comerciales, los cuales
son denominados malls, son complejos arquitectónicos en los que el comercio y el ocio se
funden en una sola experiencia. Actúan como elementos estructuradores de los nuevos
espacios urbanos, de las nuevas periferias, incluso de algunas ciudades.
El mall es uno de los espacios más característicos de la geografía urbana posmoderna ya
que posee diversidad de usos y funciones dentro de un mismo espacio. Son el último episodio
en la evolución de los centros comerciales suburbanos fenómeno que empezó adquirir ciertas
la autoridad a mediados del siglo XX. La suburbanización es uno de los procesos espaciales
más característicos de la geografía fordista norteamericana. Las nuevas áreas residenciales
periurbanas pretendían resolver parte de los problemas inherentes a los centros urbanos
compactos como la contaminación, escasez de suelo, el precio de la vivienda, es así cómo se
forman los barrios residenciales que pretenden convertirse en la alternativa y en su negativo .
Los primeros malls, dimensiones menores a los actuales, son una respuesta comercial a la
suburbanizaacion. Son ante todo un espacio cerrado y su arquitectura pretende crear mundos
espaciados, aislados física y psicológicamente del exterior. Los málls presentan la geografía
alternativa que rompe con las reglas habituales del espacio y del tiempo además son espacios
controlados. En definitiva es una lógica espacial y temporal posmoderna basada en la
transgresión de las barreras geográficas e históricas tradicionales.

Conclusión
Los múltiples cambios que caracterizan la posmodernidad se enmarcan en una mutación
espacial básica la comprensión espacio temporal. La revolución de los transportes y de las
telecomunicaciones no ha anulado el espacio Pero ha transformado profundamente su
organización sobre todo en la escala planetaria propiciando que el fenómeno de la
globalización explique gran parte de las transformaciones. Muchas fronteras han sido borradas
el espacio es más fluido y se presta a todas las conexiones.
En el seno de este hiperespacio de una red mundial y descentralizada a los individuos les es
fácil localizar se confrontados como están ya no a su medio más inmediato sino a un Horizonte
inmenso multiple y fragmentado.
Minorías y grupos subalternos cuyas voces habían sido anteriormente excluidas reclaman
ahora atención como partes esenciales del sistema social: las variables de género, de clase, de
etnia, de edad, de condición corporal, delimitan las singularidades culturales de grupos
específicos, cada cual con unas estructuras sociales y unas espacialidades concretas que
obligan a replantear la geografía de la cultura y de la sociedad y las relaciones entre cultura y
espacio.
Los nuevos contextos de la producción la distribución las tecnologías y las comunicaciones
hacen que el consumo se convierta No sólo en una transacción económica para suplir
determinadas necesidades sino en un activo esencial que modela la vida individual.

Capítulo 7 el proceso de Urbanización.


La ciudad capitalista.
La ciudad como forma de asentamiento humano tiene su origen en la revolución neolítica,
cuando la introducción de la agricultura permitirá las primeras formas de especialización social
del trabajo. Es la introducción de la agricultura y la ganadería lo que requiere y permite la
división del mismo: requiere destinar una parte de la población a la producción de utensilios, al
almacenaje de los alimentos y la organización del trabajo, y permite la generación del
excedente necesario para que algunos miembros de la sociedad se vean liberados de la
producción directa de alimentos y puedan dedicarse a estas funciones.
Las primeras ciudades aparecen en el Tercer Milenio antes de Cristo en los valles del Tigris
y el Eufrates del Nilo y del Indo. Será durante el primer Milenio antes de Cristo con el
nacimiento y expansión de Grecia y Roma cuando surgirán a orillas del Mediterráneo las que
han sido denominadas primeras civilizaciones urbanas.
Las ciudades griegas se forman como ciudades- estado con vocación comercial y un
territorio propio reducido. Entre el siglo 2 antes de Cristo y el 2 después de Cristo Roma cubre
a su imperio de ciudades. A partir del siglo 2 con el inicio de la disolución del Imperio Romano
prácticamente se detiene la creación de nuevas ciudades con la excepción de Constantinopla.
En la Edad Media europea la ciudad mantiene una interdependencia estrecha con el campo
que la rodea un elemento independiente del sistema feudal dominante. La consolidación del
impulso urbano medieval con la creación de redes de ciudades es lo que permitirá el estallido
creativo y científico del Renacimiento. Son Así mismo las ciudades las que vertebrar a los
estados nación que a partir de este momento van conformando ciudades y las monarquías
absolutas que habrán de gobernarlos. Entrada a la Edad Moderna las urbes europeas
conservan todavía en términos generales los rasgos principales que habían caracterizado las
ciudades en los albores de la historia. Desde el punto de vista físico eran unidades compactas
normalmente cerradas por murallas y fosos que la separaban y diferenciaban del campo
circundante. Sus habitantes Tenían un estatuto distinto al de la población rural que era
ampliamente mayoritaria. Las ciudades eran ante todo lugar de intercambio comercial de
producción artesanal y de creación cultural. Finalmente desde el punto de vista social eran el
lugar de residencia del poder real y eclesiástico de parte de los grupos sociales hegemónicos
de la burguesía ascendente y de los pequeños artesanos y menestrales.

La ciudad industrial el discurso anti urbano y la te taylorizaciónn de la vida urbana.


Desde la mitad del siglo 18 la revolución industrial y su principal consecuencia la ampliación
de los mercados a escala mundial fueron determinantes para esta evolución exponencial del
derecho urbano. Los crecimientos de población más espectaculares siempre correspondieron a
las ciudades manufactureras e industriales protagonistas también de la progresiva
concentración de capital y financiera que caracterizó el capitalismo monopolista.
Las relaciones entre el proceso de Urbanización e industrialización, zonas y evidentes tienen
que ver no sólo con los avances técnicos sino con la creación de grandes áreas industriales
progresivamente especializadas.
En 1780 el vapor empezó a ser utilizado como energía para las primeras maquinarias, y eso
favoreció el crecimiento de ciudades con disponibilidad de recursos y materias primas básicas
como el agua y el carbón en lo que fue la primera revolución industrial.
La segunda fase en el proceso urbanizador corresponde así al crecimiento de las áreas
urbanas con funciones especializadas que crecían de la mano del desarrollo exponencial de
producción, es como la industria textil del algodón. Al mismo tiempo otras áreas comenzaron a
desarrollarse al amparo de la Industria del acero o la construcción del ferrocarril. En esta
segunda fase y hasta 1870 el papel de los grandes centros industriales es esencial en la
distribución del poblamiento de forma que la especialización del territorio urbano va de la mano
de la concentración poblacional en esos lugares.
Con el tiempo además dan cuenta de que tras esas murallas no se permitía el intercambio de
oxígeno dentro de los hogares, por lo tanto se realizaron ciertas políticas para incentivar la
higienización y ambientes limpios.
Desde mediados del siglo 19 y durante todo el siglo 20, la ciudad sin murallas, colonizado
apresuradamente, los espacios Rurales que había provisto de alimento a sus habitantes y que
ahora pasan de forma progresiva a formar parte de un espacio fragmentado. Se construyeron
grandes avenidas ensanchadas, como asi obras de infraestructura y el tranvía y sobre todo el
metro un nuevo modo de transporte que supuso un hito en la evolución de ciudades tan
diversas como Londres.
En la percepción es que mundo urbano nuevo transitorio los cambios que la industrialización
introdujo no sólo son en la Esfera productiva sino también en las relaciones sociales y
culturales. También al generalizarse con la presencia masiva de las fábricas y plantas de
producción en serie nuevas formas de trabajo apoyadas en la maquinación la producción
estandarizada y la disciplina de la fábrica.
Durante este tiempo de economía fordista las ciudades no eran más que extenderse y crecer
de manera desordenada en la mayoría de casos dando lugar a metáforas como la mancha de
aceite. Este modelo de producción industrial desarrollado a partir de la introducción de la
cadena de montaje y de la producción estandarizada primero y en serie después de bienes de
consumo a precios asequibles para garantizar un mercado de compradores homogéneos y
entendido a gran escala un mercado Qué será progresivamente de masa.
La tía productiva comenzó a estructurarse internamente y a localizarse en el territorio de una
forma muy diferente a como lo había venido haciendo. Esta evolución que se puede resumir a
partir de dos procesos interrelacionados:
* El primero es la Desindustrialización consistente en la crisis de algunos sectores y
actividades industriales que fueron perdiendo importancia y peso económico a escala local y
regional como la minería la siderurgia y metalurgia o la Industria Del automóvil.
* El segundo es la disponibilidad de nuevas tecnologías como la microelectrónica la robótica o
los sistemas de información y telecomunicación que hicieron posible eliminar algunos procesos
dentro de la cadena de producción.
Al mismo tiempo gracias también a la incorporación de estas nuevas tecnologías, las redes
de transporte mejoraron mucho tanto en términos de extensión y cobertura del territorio, como
en términos de eficiencia Y capacidad de gestión.
El resultado era entonces muy claro, ya no se necesitaba concentrar todas las etapas de la
producción en un mismo punto del territorio. Pero además la producción podía trasladarse y
localizarse en lugares lejanos o menos próximos. Al mismo tiempo que las Industrias pesadas
y extractivas perdían importancia e incluso iban desapareciendo, se fue produciendo una
relocalización Industrial en función de nuevos factores como la integración de nuevas
tecnologías o determinados criterios de calidad ambiental. Lugares y ciudades que nunca
habían estado en el mapa de las actividades productivas comenzaron a emerger como
territorios donde se podían localizar fragmentos específicos de un proceso productivo de
escala global.
Pero durante las últimas décadas del siglo 20 las nuevas tecnologías no sólo se incorporaron
a los sectores productivos sino también lo hicieron en el sector terciario el cual se desarrollaba
y diversificada rápidamente.
A finales de los años 80 se empezó incluso a hablar de hiper industrialización para referirse a
esta nueva situación creada por las nuevas tecnologías aplicadas a la producción y a los
servicios. Al mismo tiempo las actividades industriales clásicas que habían protagonizado la
segunda Revolución Industrial comenzaron a ser sinónimo de espacio urbano abandonado o
pasaban a ser patrimonio rescatado por la economía del turismo cultural.
El nuevo escenario económico se caracterizó a partir de entonces Y más que nunca por la
progresiva segmentación y especialización tanto de la actividad económica como de sus
localizaciones en el territorio:
Del sistema de las grandes factorías industriales aprovechando la tradicionales economías
de escala y aglomeración se fue pasando a una organización en red donde a cada unidad
productiva corresponde a una etapa concreta y diferenciada del paso productivo.
De la localización de las áreas urbanas centrales se fue pasando a un modelo territorial que
combinaba la ubicación urbana con una distribución más dispersa sobre el territorio a lo largo
de regiones metropolitanas, cada vez más extensas e integradas.
Las tres últimas décadas del siglo pasado en cambio significaron una progresiva
fragmentación de los mercados de consumo y la consecuente aparición de tipos de
consumidores diferentes. Si durante la era Industrial la rentabilidad de la producción había
dependido siempre de la existencia de un mercado de consumo masivo y homogéneo la era
post-industrial comenzaba caracterizarse por la fragmentación de Este mercado de masas y la
multiplicación y jerarquización de los estilos de vida.
Por otro lado la internacionalización de los flujos económicos y la globalización de los
circuitos de información han hecho adquirir a los núcleos urbanos de hoy en día más
importantes condiciones de sobre centralidad es decir unas condiciones de extrema centralidad
como lugares privilegiados de conexión a una red es económicas definitivamente
mundialisadas.
Sin embargo se produce un proceso paralelo y simultáneo de desconcentración económica y
territorial que es necesario para garantizar las condiciones de sobre centralidad urbana.
La ciudad difusa completar
Físicamente este proceso ha conocido diversas fases que han sido bien estudiadas. Ver
crecimiento de la ciudad en mancha de aceite a la suburbanizacion( la aparición de periferias
metropolitanas más o menos densas a menudo sin solución de continuidad como la ciudad
central), de la Suburbanización a la peri urbanización ( la integración en las dinámicas
metropolitanas de los antiguos núcleos rurales ) de la periurbanizacion a la rururbanizacion( la
difusión de las dinámicas metropolitanas hasta los antiguos espacios Rurales más alejados de
los núcleos primigenios) .
Como consecuencia del proceso de Urbanización el territorio se organiza en redes de
relación. Redes espacio-temporales que lo articulan lo integran y lo conectan con flujos de
alcance continental y mundial. Se configuran las y los actuales territorios en los cuales la
distinción tradicional entre ciudad y campo basada No ya en la densidad sino en la estructura
económica ha dejado de ser operativa desde el punto de vista científico. La vieja dualidad
ciudad campo queda cierre legada las construcciones del espíritu la percepción de los paisajes
el espacio vivido las representaciones sociales.
Como es sabido uno de los rasgos característicos de la difusión de la ciudad sobre el
territorio es la salida de contingentes significativos de población desde las áreas más densas y
pobladas de los sistemas urbanos hacia áreas vecinas de poblamiento más difuso
Al ser reguladas en buena parte por el filtro de los mercados del suelo y la vivienda estas
migraciones no afectan a todos los grupos sociales por igual. Así los que se desplazan son
sobre todo jóvenes con niveles de ingresos y formación superiores a la media y con capacidad
de satisfacer sus necesidades de vivienda fuera de las áreas centrales.
Es evidente que actividades productivas y servicios Se difunden hoy sobre el territorio. Lo
cual tiene efectos positivos la dispersión de la ocupación sobre el territorio y la homogenizacion
relativa en la dotación de servicios. Ahora bien estos movimientos no afectan por igual a todas
las actividades económicas y son distintos los comportamientos de la industria de alto y bajo
valor añadido del terciario estratégico y de los servicios a las personas.
Así el territorio de la ciudad difusa además de conocer nuevas formas de segregación social
presenta nuevos tipos de especialización y fragmentación funcional.
La concentración difusa caracteriza actualmente las dinámicas de crecimiento en la ciudad y
modelo del territorio a partir de aquella doble paradoja entonces mencionada:
× La misma implementación de infraestructuras y tecnología que posibilita la dispersión en
las actividades y los usos urbanos favorece al mismo tiempo la sobre centralidad de las
ciudades más importantes.
× Así el proceso de desconcentración territorial es algo necesario actualmente para asegurar
grados de centralidad en las ciudades más importantes las cuales ya habían sido privadas para
el desarrollo económico fordista.
La aparición las llamadas ciudades mundiales hora ciudades globales se explica si por la
necesidad de organización y control de esta economía global sobrecentralizada construida
sobre mercados segmentados y mundializados. Mientras las ciudades globales desarrollan
esta nueva función urbana de jerarquía superior el resto de núcleos urbanos participan con
intensidad y condiciones de especialización diversas en economía entendida allá a escala
transnacional.
La cartografía de la sobre centralidad urbana es la de la desigualdad territorial. De hecho
existe una red urbana planetaria Dónde está asignación de funciones diferentes se puede
observar en toda su extensión. Existen múltiples redes de ciudades y entornos urbanos en
función del tipo de actividad económica que se análice: los servicios médicos especializados
los diferentes tipos de turismo o todo el entramado económico que soporta el tráfico global de
drogas o armas a escala planetaria serían algunos ejemplos. Como se puede intuir la
especialización funcional de la ciudad depender entonces de la red o redes concretas en las
que esa ciudad participe. Como por ejemplo siguiendo a castells una ciudad con un Maiami se
puede considerar como un centro financiero especializado y vinculado al blanqueo de dinero
procedente del comercio ilegal de drogas.
Este proceso continuo de expansión de la ciudad en el que estamos insistiendo se
desarrollado desde el siglo 19 muy ligado y dependiente de la tecnología. Los transportes y las
comunicaciones de formas diversas en cada momento histórico han propiciado de la dispersión
de los lugares de trabajo de consumo o de ocio frecuentados por los habitantes de la ciudad . El
ferrocarril primero y el automóvil después significado de momentos claves en este proceso el
ferrocarril permitió dirigir el crecimiento de la ciudad en forma lineal y expandió áreas
residenciales e industriales fuera de los primeros límites de una ciudad hasta entonces
concentrada. El automóvil significó la extensión de la vida urbana hasta Arias mucho más
lejanas y permitió generar crecimiento de tipos urbano radiales y en mayor o menor medida
caóticos en función el trazado de las autopistas metropolitanas. Significado también la
aparición de la ciudad suburbana y de nuevas formas de habitar el territorio que tenían que ver
con la movilidad cotidiana.
Nuevos tipos de habitantes como el residente Welcome uttar han ido poniendo de manifiesto
un hecho muy claro como maneras de habitar la ciudad desde lo que se denomina como
metrópoli de primera generación es decir un estadio inicial en evolución de las ciudades en el
que los habitantes de la ciudad viven mayoritariamente en la ciudad. A estos habitantes que
podemos llamar como a tiempo completo se añadirán los habitantes pendulares que pueden
trabajar allí Pero en cambio recién en otras ciudades. La metrópoli de segunda generación se
caracteriza precisamente por el crecimiento importante de esta población pendular y por la
aparición de un tercer tipo de habitante : los visitantes consumidores o usuarios de la ciudad
que ni Residen y trabajan en ella. La transición a la metrópoli de tercera generación se
consumaria con la aparición de una serie de poblaciones flotantes dedicadas a un uso
intensivo y continuo de áreas muy específicas de la ciudad. este sería el caso de las personas
que viajan por negocios o los turistas cuyos itinerarios urbanos están muy claramente
circunscriptos a espacios muy específicos de la ciudad.
En conclusión las formas de habitar el espacio propias y típicas de la ciudad preindustrial
definidas por el modelo del habitante se habían multiplicado para dar lugar a toda una galería
de situaciónes.
Un uso temporal del espacio en el que están implicadas población es muy diversas desde los
propios residentes a Los visitantes de fin de semana desde los consumidores puntuales a las
poblaciones flotantes y ocasionales Cómo pueden ser los turistas estudiantes intercambio o
trabajadores temporales.
Estas poblaciones flotantes en donde un grupo de turistas puede ser sustituido por otro
pueden formar algunos barrios donde suelen concentrarse como los centros históricos o
tramas urbanas del siglo 19. Provocando así una gentrificación afectando a precios del suelo y
actividades que desaparecen o se incorporan basta con localizar los cafés internet lugares de
comida o lavanderías en la ciudad para encontrar Estás claras correspondencias territoriales.
El autor por lo tanto propone Para aprovechar las potencialidades y hacer frente a los
problemas que el desarrollo difuso de la ciudad plantea dotarse de un proyecto colectivo capaz
de Ordenar el desarrollo urbano En beneficio de la mayoría de la población.

“Suburbanizacion y periurbnizacion. Ciudades anglosajonas y ciudades latinas” de


Giuseppe Dematteis
Los recientes procesos de periurbanizacion y de difusión reticular de la ciudad (ciudad difusa)
están dando origen a periferias urbanas. Estas nuevas periferias son el resultado de profundos
cambios en las estructuras territoriales urbanas, en las tecnologías de la comunicación y de la
información, en la organización y en la regulación social, que han transformado a los países
industrializados a partir de finales de la década de 1960.
Las nuevas periferias aparecen así destinadas a convertirse en la verdadera metrópolis.
En el área latina, la vida suburbana tradicional es una expresión de la dependencia del campo
cercano respecto de la ciudad. Es un fenómeno difuso, pero que sigue siendo rural, en el sentido
de que está basado en “segundas residencias” que son también predios rústicos, es decir,
unidades de producción agrícola, donde trabajan aparceros o jornaleros. Es una suburbanizacion
sin expansión de la ciudad. Crea un paisaje rural creado por la ciudad. Una espacie de gran jardín
productivo.
En los anglosajones, la suburbanizacion es más reciente, en tanto que deriva de la expansión
urbana consiguiente a la revolución industrial. Una expansión como esta se extiende en forma de
mancha de aceite con el acceso de las clases medias y obreras a la vivienda individual aislada o
en hilera y estallara con el acceso de las mismas clases a la propiedad del automóvil.
Esta suburbanizacion no será de tipo rural, sino una invasión de los espacios rurales por parte de
la ciudad, que incluirá, conservándolo, algún elemento, como el verde de las arboleadas, de los
pequeños jardines, de los parques existentes. Tenemos así dos tipos de expansión suburbana.

El proceso de suburbanizacion de las ciudades europeas occidentales sufre un cambio


considerable a partir de finales de los años sesenta. No solo núcleos centrales de las grandes
ciudades comienzan a perder población, sino que también las coronas suburbanas.
La geografía de las variaciones demográficas más recientes revela la presencia contemporánea
de dos dinámicas positivas diferentes: la primera consiste en la recuperación de la polarización
urbana que ahora, en cambio, se manifiesta como dilatación progresiva de las coronas externas y
de las ramificaciones radiales de los sistemas urbanos con una reducción tendencial e los
residentes en los núcleos centrales. La segunda dinámica se manifiesta en aquellas formas de
expansión urbana independientes de los campos de polarización de los grandes centros, que en
Italia se indican con la denominación de ciudad difusa. Estas tienen como soporte el crecimiento
de las estructuras de asentamiento reticulares en forma de mallas, más o menos tupidas.
De la combinación de estas dos dinámicas se derivan tres tipos morfológicos: la periurbanizacion,
la difusión reticular, y la superposición de ambas. La periurbanizacion puede interpretarse como la
situación de desarrollo más débil, en la cual el crecimiento depende solo de las funciones de
servicio (y eventualmente industriales) de un polo urbano dentro de un contexto regional
relativamente pobre tanto en servicios como en actividad productiva. La difusión reticular (ciudad
difusa) es característica de los tejidos mixtos residenciales y productivos (industriales, terciario-
productivo, agro-industriales, turísticos). Donde estos dos tipos se suman, aparecen las áreas
metropolitanas (monocentricas o policentricas), es decir, los contextos territoriales favorables al
desarrollo de niveles industriales y terciarios más avanzados.
Las formas del desarrollo periurbano y difuso reticular que caracterizan a las regiones más
desarrolladas presentan graves debilidades desde el punto de vista territorial y medioambiental.
Se presentan como formas de desarrollo no sostenible a medio-largo plazo, en tanto que grandes
consumidoras de suelo y de energía, fuentes de contaminación del aire y del agua con unos
costes de infraestructuras y de gestión de los servicios destinados a crecer rápidamente. Ya se
puede advertir en las primeras fases de la periurbanizacion con crecimiento desequilibrado de los
asentamientos rururbanos y de las formaciones lineales según los ejes varios principales.
Lo que lleva a la eliminación del paisaje rural originario. Este proceso va acompañado de la
desarticulación de los tejidos urbanos y territoriales históricamente consolidados, cuyos ricos
legados materiales y culturales dejan de ser matrices generadoras de nuevos desarrollos en los
asentamientos, reduciéndose a un cierto hallazgo fósil aislado protegido.
El mayor crecimiento de los sistemas menores y periféricos deriva del saldo de dos movimientos:
uno de descentralización (puestos de trabajo durante un tiempo localizados en los sistemas
metropolitanos) y un movimiento de centralización que afecta al desarrollo en los centros
metropolitanos de nuevos puestos de trabajo, en la mayoría de los casos ligados a una actividad
muy cualificada, no presentes, al menos por ahora, en los sistemas menores.

Las innovaciones de carácter tecnológico y organizativo han comenzado a actuar conjuntamente


desde finales de la década del sesenta, con el efecto de extender a los sistemas urbanos
menores aquellos campos de externalidad que en la primera mitad del siglo se habían
desarrollado en forma de mancha de aceite alrededor de las ciudades principales, originando en
este periodo, las áreas metropolitanas de forma compacta. Actualmente los nuevos campos de
externalidad no tienen y una forma de área compacta. Actualmente los nuevos campos de
externalidad no tienen y a una forma de área compacta, ni un radio tan limitado, sino que se
configuran como retículas articuladas en centros y sistemas urbanos pequeños o grandes, en
extensiones territoriales macreoregionales.

Viejas y nuevas imágenes de las periferias urbanas


La periferia (comprendida como parte de la ciudad que rodea al centro) se encarga de
significados valorativos cuando se convierte en metáfora de dominación (el centro que decide y
controla) y de dependencia (la periferia que se estructura pasivamente en función del centro,
alojando aquello que el centro rechaza). También el criterio residual, según el cual la periferia no
es una verdadera ciudad, ni verdadero campo, no es meramente descriptiva sino valorativo, en
tanto que, especialmente en los países mediterráneos, sugiere la imagen de un área en la que
tanto los valores relacionados con lo urbano y lo medioambiental son mínimos.
Las periferias de las grandes ciudades se han concebido como espacios donde las patologías
urbanas y las desvalorizaciones son máximas: la degradación física y social, la marginalidad, la
exclusión y la desviación. Periferias: “lugares donde la gente habita por necesidad “, lugares en
donde solo se duerme, se trabaja, se pasa, espacios que no producen identidad ni sentido de
pertenencia, ni enraizamiento de quienes las habitan.
La falta de identidad se ha relacionado con los tiempos demasiados rápidos del crecimiento
periférico, que no habrían permitido la sedimentación de las cualidades culturales, sociales y
estéticas características de la ciudad tradicional, representada por el centro.
Las nuevas periferias actualmente no se definen ya de un modo negativo respecto al centro. En
las preferencias de los sujetos que las escogen y las habitan, estas presentan cualidades
medioambientales que el centro no tiene, y en los espacios reticulares de la ciudad difusa se
reduce también mucho la vieja dependencia del centro metropolitano como lugar de trabajo y de
los servicios cualificados.
Además de la cualidad medioambiental y la autonomía respecto a los centros metropolitanos, las
periferias revelan cada vez más otro carácter positivo: el de ser los laboratorios sociales y
territoriales en los que se experimentan innovaciones y cambios importantes en la forma de
habitar y estilos de vida.
Se afirma que dúrate los últimos años la periferia ha sido metrópolis, en el sentido etimológico de
ciudad-madre, generadora de nuevos modelos culturales, sociales y políticos.
La nueva periferia aparece como a ciudad sin centro que deriva de la interconexión física y
funcional de los lugares y de los sistemas urbanos que conservan y potencian la propia identidad,
porque ven en la misma un recurso que pueden hacer valer en la competición global. La imagen
de las nuevas periferias es entonces compleja: en la escala macro aparece una única gran
estructura difusora en forma de red, mientras que en la escala micro cada nodo de esta red revela
caracteres específicos, identidades particulares y, por lo tanto, principios de organización espacial
característicos de la misma.

Criterios Periferias de la ciudad fordista Periferias de la ciudad


posfordista
Posición geográfica En torno al centro gravita Periuranizacion y ciudad
sobre el centro difusa reticular, distante de los
centros principales.
Posición geopolítica Espacio dominado por el Ciudad sin centro, red
centro, soporte pasivo de lo interconexa de sistemas
que el centro rechaza o no urbanos autónomos
puede contener complementarios.
Calidad y valores urbanos Espacios urbanos sin calidad, Ciudad diversa con algunos
en los que los valores urbanos valores, sobre todo
son siempre1 inferiores a los ambientales y de calidad de
del centro y los valores vida, considerados superiores
medioambientales inferiores a a los del centro.
los del campo
Deseabilidad Partes de la ciudad habitadas Espacios habitados por
por quienes carecen de quienes no quieres vivir en el
medios para vivir en el centro. centro
Identidades, cualidades Espacios edificados Espacios laberinticos,
formales monótonos, sin orden ni forma mosaicos de lugares con
reconocible, atópicos. cualidades formales propias
Tiempo, historia Emplazamientos desprovistos Emplazamientos enraizados
de historias, sin identidad, sin en su preexistencia y en sus
raíces. Espacios de tramas sociales, con sentido
modernización forzada, de territorial de pertenencia.
emigrantes y de la movilidad
social y territorial
Conflicto y cooperación Barrios del conflicto Lugares de las ventajas
constructivo, capital-trabajo, competitivas y de la
de la cohesión social de las afirmación individual.
clases.
Innovación Lugares de la Lugares de los nuevos estilos
experimentación social: de vida, de las nuevas clases
servicios colectivos, obras sociales emergentes, de la
públicas, planificación relación local/global no
urbanística. mediada por los centros
metropolitanos.

“La ciudad global una introducción al concepto y su historia” de Sassen, Saskia


Características de la ciudad global:
 Las actividades económicas que caracterizan a globalización Cuanto más se estén
dispersas en diversos países tanto más funciones se volverán complejas y estratégicas.
 Las funciones centrales de las empresas adquieren tal complejidad que las grandes
empresas globales tienen tendencia a subcontratar ya sea totalmente o en parte a otras
empresas altamente especializadas: contabilidad, fiscalidad, relaciones públicas,
investigación, telecomunicaciones.
 Mediante la concentración de estas empresas los talentos y los expertos se hallan
inmersos en un gran abanico de sectores especializados y el entorno urbano que los acoge
funciona como un centro de información.
 Cuanto más se exteriorizan las sedes centrales mayor libertad encuentran en la elección
de su ubicación al no estaría sujeto el trabajo que hacen a las economías de agregación
esto nos muestra que el sector clave es el de los servicios altamente especializados y
conectados en redes.
 Estas sociedades de servicios especializados deben operar a nivel mundial Lo que implica
una red global de a filiales y Asociados. El crecimiento de los mercados globales
financieros y de servicios la necesidad de redes transnacionales de vida al auge de las
inversiones internacionales el papel limitado de los gobiernos en La regulación de la
actividad económica internacional y Consecuentemente la aparición de otros actores como
los mercados y empresas globales son los elementos que señalan la emergencia de una
serie de redes urbanas transnacionales. El crecimiento económico de las ciudades
depende cada vez menos el territorio circundante o de las economías nacionales la
importancia de los grandes centros de negocios radica en gran parte sobre en redes
transnacionales no existe la ciudad global única sino que participa siempre un sistema
urbano más extenso Y esta es la mayor diferencia con las antiguas capitales imperiales.
 El número creciente de equipos altamente cualificados y de sociedades de servicios
especializados incrementa los márgenes de desigualdad socioeconómica y espacial en el
seno de las ciudades.

LAS NUEVAS FORMAS DE CENTRALIDAD


Las telecomunicaciones y el progreso de la economía global han producido una nueva
geografía de la centralidad en la que para simplificar identificó 4 formas:
*Puesto que la centralidad puede emplazarse en diversos espacios físicos el centro de
negocios se mantiene como un lugar estratégico para las empresas.
* el centro debe verse como una zona metropolitana que cubre una red de actividades
comerciales intensas.
* estamos asistiendo a la formación de un centro transterritorial constituido en parte por el
espacio digital a través de las intensas transacciones económicas de la red de ciudades
globales. Estás redes relacionan los principales foros internacionales y constituyen las nuevas
geografías de la centralidad. Las más pujantes relacionan los grandes centros internacionales
de las finanzas y negocios como Nueva York Londres Tokio y París. La intensidad de las
transacciones entre esta ciudad es así como su volumen en particular atrás de los mercados
financieros de la oferta de servicios y de las inversiones aumenta considerablemente.
Tras ellas vienen las diversas geografías de la periferia las divisiones este oeste y norte sur
y otras más recientes.
*Nuevas formas de centralidad aparecen en los espacios generados electrónicamente Como
por ejemplo las componentes estratégicas en las finanzas. La relación entre el espacio real y el
espacio digital es compleja y varía según los sectores económicos.

LA CIUDAD GLOBAL Y LAS NUEVAS LÍNEAS POLÍTICO CULTURALES


La integración de las ciudades en esta nueva centralidad transnacional nos deja entrever que
es una geopolítica. Las grandes ciudades se convierten en lugares estratégicos no solamente
para el capital global sino también para el trabajo de los emigrantes y para la Constitución de
comunidades e identidades translocales.
La ciudad es un espacio que está físicamente centralizado y Atrapado en los lugares
estratégicos concretos y a la vez es transterritorial puesto que enlaza puntos geográficamente
alejados pero intensamente conectados unos con otros. Si las grandes ciudades engloban los
sectores clave del capital global y Al conjunto creciente desfavorecidos los inmigrantes las
mujeres explotadas las minorías en general y en las megalópolis de los países en vías de
desarrollo se concibe que se han convertido en el campo de todos los conflictos y
contradicciones. A partir de aquí pueden ser pensadas como los lugares donde se manifiestan
las contradicciones de la globalización del capital
Además el concepto de Ciudad global hace hincapié en la economía en red en función de las
actividades que se encuentran en ella como las finanzas y los servicios especializados los
nuevos sectores multimedia y las telecomunicaciones. Estas actividades se caracterizan por
las conexiones transnacionales y por un reparto de especialidades entre las ciudades. En el
caso de las finanzas globales y de los servicios especializados proveedores de las firmas y los
mercados globales nos encontramos sin duda ante un sistema Sin fronteras integrado en un
grupo de ciudades de diferentes países es de hecho un sistema global.

ORGANIZACIÓN ESPACIAL DE SANTA ROSA - Organización espacial urbana.


El espacio interurbano: Distribución de las ciudades en el territorio, u organización de centros
en el territorio y las relaciones o vínculos que las ciudades desarrollan entre sí.
La ciudad en su espacio regional: Santa Rosa se funda el 22 de abril de 1892 y desde
entonces inicia un ritmo de crecimiento sostenido que le permite obtener la designación de
capital a partir de 1900. La población original estuvo conformada por migrantes de otras
provincias argentinas y posteriormente por la llegada de inmigrantes de origen europeo. El
proceso de crecimiento acelerado de la población tiene dos hitos fundamentales, con la llegada
de los inmigrantes en las primeras décadas del siglo xx y con la provincialización en 1951;
fortaleciendo su función administrativa al ser nombrada capital.
El espacio intraurbano: es aquel que esta contenido dentro de la ciudad, dentro de los límites
Morfología de la Ciudad de Santa Rosa: Según Tomas Masson, la entrada de su estancia se
encontraba en el cruce de dos caminos de galeras, que coinciden con las actuales rutas
nacionales N° 5 y 35°. Ya en 1890 existían 7 casas alrededor de la tranquera. Con la fundación
de 1892, aparece un plano en damero, aparece la plaza principal sobre la Avenida San Martin
y alrededor de ella el municipio, comisaria, capilla, comercios, entre otros.
En agosto de 1897 llega el ferrocarril que funciona como medio de comunicación de interés
social y económico; pero a la vez creara una barrera que dividió a la ciudad en dos sectores en
relación a las vías. En la actualidad el área urbanizada de la ciudad ha adoptado una forma
tentacular, siguiendo los trazados de las rutas N° 5 y 35. Los ejes de crecimiento son, hacia el
este, coincidiendo con el trazado de la Ruta Nacional N° 35 y hacia el sudoeste, con la Avenida
Juan Domingo Perón. La ciudad ocupa una parte de una cuenca centrípeta que tiene su base
en la laguna “Don Tomas”; ésta ciudad junto con Toay conforman el Gran Santa Rosa.
Su emplazamiento: A fines del siglo XIX, la ocupación definitiva del área se dio luego de la
campaña del desierto (1879), el coronel Gil fue quien obtuvo las primeras tierras, Masson fue
quien administro sus bienes y fue el gobernador de La Pampa.
Usos del suelo: Desde sus comienzos la actividad económica de la ciudad estuvo ligada a la
agricultura y ganadería, al sector servicios y pequeña industria. En la actualidad podemos
observar que la ciudad está dedicada especialmente al sector servicios. Esto nos indica el
carácter netamente de servicios del centro urbano por ser asiento del gobierno provincial; en
canto a los usos del suelo más relevantes, estos son:
 Residenciales, comerciales, educacionales, recreativos, sanitarios,

 Administrativos, vías de circulación, seguridad, religioso, ambiental, industriales.

Periurbano: franja o borde de mixtura de usos urbanos y rurales, área de transición entre
ambos, usos compatibles con el uso residencial, explotaciones intensivas, etc.
Suburbano: Zona, área o franja que bordea el área consolidada de una ciudad. Coexisten
diferentes usos:
 Residenciales, equipamientos específicos (planta de abastecimiento de agua potable)

 Usos industriales, usos recreativos, terrenos vacantes

Usos residenciales suburbanos:


Urbanizaciones cerradas: Un grupo poblacional ocupa un espacio cerrado que es privado y
rodeado por un cerco perimetral, único acceso y controlado. Estas urbanizaciones, traen
problemas de gestión y organización en los demás ciudadanos, ya que privatizan sectores, los
cuales son públicos; y otros problemas en su ubicación, en muchos casos sectores
suburbanos.
Casas de fin de semana: casas quinta, segunda residencia
Conjuntos habitacionales: operatorias de viviendas sociales, programas financiados por el
fondo nacional de la vivienda.
El valor del suelo urbano. Políticas públicas y viviendas sociales
En nuestra provincia se han mantenido algunas premisas del Estado de bienestar,
básicamente en el área social, dentro de esas premisas, la vivienda cumple un rol importante
en el ataque de la pobreza para mejorar las condiciones de vida de la población mental, ya que
son reconocidos los lazos entre una vivienda adecuada y la salud física y mental, la seguridad
personal, la generación de ingresos, la productividad y los logros educacionales. Los
programas para sectores de bajos ingresos siguen siendo un vehículo fundamental para
erradicar la pobreza y la exclusión social.
Por vivienda social se entiende a aquella residencia que es producto de las políticas
habitacionales dirigidas a los grupos más desposeídos de la sociedad, que no pueden optar
por sus propios recursos a las viviendas del mercado inmobiliario.
Los imaginarios urbanos
El estudio de los imaginarios respecto del espacio urbano, conlleva el estudio del espacio y
la espacialidad como experiencia, percepción, vivencia y representación. Para Alicia Lindón, se
han ido construyendo abordajes urbanos que incluyen dimensiones socio-simbólicas, miradas
que articulan lo socio-económico y material, con lo socio-simbólico.
Existen significaciones que pueden corresponder al orden de lo percibido, de lo racional o del
imaginario. Por lo tanto la significación o resignificación de determinados lugares por parte de
los sujetos sociales tiene la capacidad de influir en las prácticas sociales respecto de la fijación
de valor al suelo urbano. Las significaciones atribuidas al lugar poseen numerosas
dimensiones: simbólicas, emocionales, culturales, políticas y biológicas.

Conjuntos de viviendas sociales, significación y resignificación del suelo urbano


Desde hace décadas, el Estado es el actor protagónico en la expansión urbana horizontal de
las ciudades. Este fenómeno genera un valor, una desvalorización inmediata del entorno a
causa de la percepción del resto de los habitantes de la ciudad. En Santa Rosa el Plan Federal
Plurianual, se encuentra situado al sudeste de la ciudad de Santa Rosa.
Se hicieron relevamientos y consultas a diferentes agentes inmobiliarios sobre este tema, y
los mismos manifestaron la desvalorización de los terrenos aledaños al barrio, y que a pocas
cuadras de allí, los terrenos con las mismas características tenían un mayor valor de mercado
En el nuevo barrio, se producen distintas significaciónes y resignificaciónes de la vivienda y
el lugar, por un lado, la necesidad del residente de diferenciarse de los demás mediante la
modificación de la fachada de la vivienda con el objeto de lograr diferenciarse del otro y de
esta manera romper con la monotonía paisajística del barrio. Produciéndose al mismo tiempo
escaso nivel de integración social urbana, relacionado esto con las dificultades que se
presentan al momento de conformar un tejido social sobre la base de redes o ligazones de
bases sólidas y vínculos estrechos.
La periferización de las viviendas sociales dificulta a sus habitantes la accesibilidad a
determinados valores urbanos vinculados con el trabajo, la cultura, la diversidad social, la
recreación, una localización inadecuada o la deficiente cobertura de servicios le niega a sus
habitantes la posibilidad de interacción y contacto con personas y lugares diferentes. Como
consecuencia las quejas más frecuentes radican en que no pueden elegir el sitio de la ciudad
donde les gustaría vivir, como así tampoco la comunidad de vecinos con la que deberían
integrarse.

PROCREAR:
Este programa ha impactado en el acceso a la vivienda, no solo en aquellas personas que
contaban con su terreno particular, sino también en aquellas que no lo tenían, a los cuales se
les dificulta el acceso a la vivienda a causa del aumento desmedido de los precios de los
terrenos en Santa Rosa, orientando su búsqueda a la vecina localidad de Toay; la importancia
de la tierra urbana como bien social quedo desplazada por las especulaciones de la
reproducción del capital.
Consideraciones del suelo urbano: Todo esto estimula los usos del suelo intensivos y de
mayor rentabilidad en el área central de la ciudad. Castells advierte que la periferia, es el
poder político a través del Estado quien tiene el protagonismo en la definición del crecimiento
urbano. El desmedido aumento de los valores del suelo se da por numerosos factores, uno de
ellos es la escasa oferta de suelo urbanizable.
Derecho a la vivienda: Éste está integrado necesariamente en el derecho a la ciudad. La
vivienda si no está integrada en un tejido urbano articulado con el resto, en el que conviven
oblaciones y actividades dispersas, puede suponer, de hecho, la marginación de los sectores
de bajos ingresos. Harvey (2012) plantea que si bien en una época en que los derechos
humanos se han situado en el primer plano como modelo político y ético, la propiedad privada
y la tasa de ganancia prevalecen sobre los derechos de las personas y en ello explora el
derecho a la ciudad.
La urbanización ha desempeñado un papel crucial en la absorción de excedentes de capital
a costa de procesos que implican la desposesión de las masas urbanas de cualquier derecho a
la ciudad. La ciudad de Santa Rosa ha experimentado un crecimiento de magnitud
considerable que requiere intervención inmediata para regular no solo el crecimiento, sino los
desequilibrios producidos por una demanda sostenida y oferentes de terrenos urbanizables
altamente especuladores.
ASENTAMIENTOS PRECARIOS: Estos asentamientos ocupan el espacio suburbano por la
disponibilidad de terrenos vacantes con menor valor, donde no se conoce el dueño, son de
ocupación ilegal. Respecto a la vulnerabilidad ambiental de los terrenos, en ellos puede
observarse basureros, industrias, autopistas, lechos de ríos, áreas inundables, etc.
Denominadas generalmente villas miseria, favelas, callampas, barriadas o chabolas. En
América Latina este fenómeno convive desde hace más de 50 años, generando en algunos
casos situaciones de:
 Informalidad, fuera del circuito de la economía en cuanto a lo laboral, no pudiendo acceder
a un sueldo fijo.

 Invisibilidad en la población que vive en los asentamientos y exclusión

Surgimiento de nuevas tipologías de asentamientos en Santa Rosa:


En los 90’ la incorporación de las periferias modifico los patrones de uso del suelo urbano,
generando la valorización y apropiación de nuevos lugares y estilos de vida. En el caso del
asentamiento “El Nuevo Amanecer” surge en 2005, en el suburbano de Santa Rosa y por otro
lado, también aparece la creación del Club de Campo “Cuesta del Sur”.
Estos ejemplos muestran como las ciudades intermedias funcionan como expulsoras de
flujos migratorios hacia zonas suburbanas y periurbanas, y como diferentes grupos sociales
territorializan nuevos espacios en base a realidades de vida diferentes y a necesidades
antagónicas.
Ciudades y espacios fragmentados: Jordi Borja sostiene que la ciudad actualmente sufre un
triple proceso negativo de disolución, fragmentación y privatización. Para Lefebre, se conformó
una triada: homogeneización, fragmentación y jerarquización del espacio. La primera se
manifiesta en formas comunes repetidas en la urbanización y donde se evidencian las
relaciones entre capitalistas con las bases más frágiles de las periferias. La fragmentación es
producto de la separación en partes de funciones que dejan en claro las diferencias entre
grupos con intereses contrapuestos separados por barreras visibles o invisibles.
El proceso de suburbanización de la población está asociado con la expansión de una clase
media, que se interpreta como un mejoramiento de la calidad de vida, asociada con el
desarrollo económico y la privatización de la vida social, para ello se multiplican los grandes
centros comerciales y lúdicos, los parques temáticos, los barrios cerrados y, se manifiestan
“tendencias a la segregación social, a la guetización de comunidades temerosas del otro”. Por
otro lado, según Svampa (2001:14) el actual proceso urbano se caracteriza por “el
desplazamiento de un modelo de ciudad abierta”, centrado en la noción de un espacio público
y en valores como la ciudadanía política y la integración social, hacia un régimen de ciudad
cerrada, propio del modelo norteamericano.

EL ESTUDIO DE LAS CIUDADES: EVOLUCION, CNCEPTOS Y METODOS – Población y


Ciudades cap. 6
La evolución de las ciudades desde las primeras aldeas neolíticas pasando por la polis
griega y la urbe romana, ha transformado sus estructuras sustancialmente con el devenir
histórico. El proceso de urbanización se identifica como la concentración constante de
población en las áreas urbanas, en las que se destacan dos tipos de movimientos: unos de
carácter centrípeto y otros centrífugos.
Con respecto a los primeros, se iniciaron en el siglo XIX con el traslado de pobladores
rurales a los centros fabriles de las ciudades industrializadas, los centros urbanos fueron
creciendo y centralizando no solamente población, sino también capacidad mediante la
absorción de territorios vecinos y poblaciones adyacentes conformando áreas metropolitanas,
pueblos, ciudades pequeñas, intermedias, metrópolis y conurbaciones.
¿Qué estudia la Geografía Urbana?
Esta ciencia aborda el análisis de los procesos sociales, políticos y económicos en un
espacio determinado, la ciudad, y en un contexto histórico particular ya que estos forman pare
de la construcción social. Por otro lado el contenido de la Geografía Urbana se ha ido
modificando con el transcurso de las décadas en función de los nuevos enfoques teóricos y
metodológicos propios de la ciencia, con el fin de dar respuesta a las nuevas problemáticas
relacionadas con los estudios urbanos.
Con la reestructuración económica y social de los últimos tiempos surge la necesidad de
estudiar los nuevos problemas urbanos en conexión con la teoría social, con la denominación
del espacio urbano. Cobra interés además, el análisis del espacio urbano como un sistema de
símbolos, como productor de significados y lugares capaces de expresar las prácticas políticas
y sociales de los grupos que habitan las ciudades.
Nociones teóricas sobre lo urbano:
Los datos indican que la mayoría de la población del planeta vive en áreas urbanas desde
principios del siglo XXI; las áreas rurales forman parte del sistema de relaciones económicas,
políticas, culturales y de comunicación organizando a partir de los centros urbanos. Saskia
Sassen (1999:13) expresa que la “nueva economía global se articula territorialmente en torno a
redes de ciudades y modifican la estructura espacial y social de las mismas, de acuerdo al
nivel de desarrollo, su cultura, su historia, etc.
La ciudad constituye básicamente el espacio receptor de los procesos económicos y sociales
resultantes del modelo económico actual y sus habitantes la perciben “como lugar de crisis
permanente, de acumulación de problemas sociales, de exclusión y de violencia, de límites
difusos y crecimientos confusos. Alicia Lindón (2007) “expresa que la ciudad es un territorio
complejo y multidimensional”; donde las posibilidades de intercambio con otros, la diversidad,
las mixturas funcionales y sociales son, en gran medida, los factores que contribuyen a
remarcar el carácter de ciudad, más allá de la concentración de población o de la relevancia de
sus funciones.
Por otro lado, el deterioro de la atractividad de las ciudades y la destrucción de su imagen
positiva contribuye a vaciar el contenido del concepto de ciudad como integradora, como
elemento de cohesión social, la cual asegura una plena libertad e igualdad de los derechos
inherentes a los ciudadanos. En el caso de las telecomunicaciones, los medios de transporte y
las redes de circulación rápidas contribuyen a facilitar los desplazamientos de la población, de
forma transitoria o permanente, provocando movimientos centrífugos y nuevos dinamismos
intra e interurbanos.
Dentro de la movilidad urbana “las redes de transporte y comunicación se encuentran
fuertemente imbricadas con los territorios que articulan y son a su vez expresión y
consecuencia de las interrelaciones que estas mantienen con los sistemas socioeconómicos”.
Las redes como estructurantes del territorio pueden facilitar intercambios, manifestándose las
consecuencias en la polarización, fragmentación o expulsión de algunos territorios.
Es posible a su vez, visibilizar la creciente inseguridad ciudadana, producto del aumento de
las desigualdades y falta de oportunidades en determinados grupos sociales, percibiendo el
espacio público como peligroso.
Nuevas configuraciones espaciales urbanas:
Las transformaciones y cambios estructurales globales afectan no solo a la morfología social
o territorial, sino que acentúan la polarización y segregación social, dando como resultado el
surgimiento de fenómenos tales como la suburbanizacion, periurbanización y policentrismo.
Conformando entre ellas una red, la cual emerge y se reafirma, revalorizando el rol que cada
ciudad desempeña en la misma, según las funciones que realiza, el potencial de desarrollo que
la caracteriza, su ventaja competitiva o las políticas de promoción urbana implementadas. A su
vez, la apertura del espacio ha sustituido los sistemas tradicionales por un sistema
internacional de ciudades, cuya multiplicidad de relaciones da lugar a la formación de nuevas
redes.
En la actualidad según Bahr y Borsdorf (2005), las dinámicas de estructuración urbana se
modelan en cuatro momentos: el periodo de la ciudad colonial o compacta, la ciudad sectorial,
la ciudad polarizada y la ciudad fragmentada. En el caso de América Latina, en el presente
siglo se caracteriza por una progresiva incorporación de estos países a la dinámica de la
globalización, un aumento de las desigualdades sociales y un mayor grado de transnalización
de las actividades económica, en particular de los sectores vinculados a los servicios.
La articulación de la red y su conectividad interna permiten una mayor o menor inserción en
un modelo de red nacional o regional; es por ello que las áreas metropolitanas se constituyen
en los centros nodales de la dinámica económica global y se generan profundos cambios en su
organización, funcionamiento, morfología, actividades y tendencias. Mientras que la
suburbanizacion expandida y discontinua con cambios locacionales de las actividades y la
residencia es uno de los dinamismos intraurbanos vinculados a la movilidad que conjuga las
necesidades de desplazamiento de las personas y sus capacidades de satisfacerlas.
En lo referente a la utilización de modos de transporte de colectivo e individual conllevan la
aparición de numerosos problemas colaterales como la congestión de la circulación,
dificultades de acceso, escasez de espacio para estacionamiento, incremento en el valor del
suelo, daños ambientales, entre otros. Mientras que la utilización de nuevas tecnologías en los
transportes y el funcionamiento de espacios urbanos diferenciados: de producción y de
consumo, de trabajo y de ocio.
El espacio suburbano, es el área donde actualmente se producen los cambios morfológicos,
funcionales y sociales más profundos, comportándose como un espacio físico heterogéneo y
conflictivo. La aparición de nuevas tipologías residenciales enmarcadas dentro del concepto de
“urbanización cerrada” aparece como la alternativa de una nueva forma de vida de grupos
sociales que perciben la ciudad abierto como insegura. La mayoría de estos habitantes,
comparten una serie de valores, como lo son la demanda de espacios verdes para obtener un
mayor vínculo con la naturaleza y la seguridad.
La ejecución de grandes conjuntos habitacionales por parte del Estado, es la respuesta que
en muchos países y particularmente Argentina ha implementado para solucionar el déficit de
viviendas producido por el aumento de la urbanización y el deterioro progresivo de las
condiciones económico-sociales. Por otro lado, los asentamientos precarios de América Latina
son denominados de diversas formas: favelas, colonias proletarias, villas miseria, callampas,
tugurios, etc. y albergan gran parte de la población pobre, ubicándose en su mayoría en
lugares de vulnerabilidad e inestabilidad social.

SVAMPA.M (2009) Protesta, Movimientos Sociales y Dimensiones de la acción


colectiva en América Latina Conicet-Argentina. Jornadas de Homenaje a C.Tilly,
Universidad Complutense de Madrid-Fundación Carolina, 7-9 de Mayo de 2009.

De los Nuevos Movimientos sociales a la protesta


En América Latina, las sucesivas crisis de paradigmas se advierten a la hora de dar cuenta
del cambio de las unidades de análisis que han regido los estudios sobre la acción colectiva.
Así, entre los años 60 y 80, la unidad de análisis por excelencia fue “movimiento obrero”, pese
a que en nuestras latitudes el referente empírico del movimiento social histórico no fue
propiamente hablando la clase obrera, sino más bien “las clases populares”, en plural, y en un
sentido amplio. En efecto, recordemos que en América Latina históricamente lo popular ha
designado un conglomerado que reúne mundos heterogéneos, entre los que se cuentan
indígenas, campesinos, trabajadores informales y clase obrera urbana. Por ello mismo, la
acción colectiva ha estado atravesada desde el inicio por una multiplicidad de dimensiones y
llamados, en nombre de la clase, la nación y el antiimperialismo, sin que ninguno de ellos
lograra un primado estructural sobre los otros. Tocaría al populismo dar expresión política a
esta abigarrada realidad popular, a través de la noción unificadora de pueblo; concepto que
designaba tanto un sujeto colectivo imaginario homogéneo, como un sector social real
heterogéneo. En esta línea, el modelo nacional-popular apuntaría también a la
homogeneización de los sujetos sociales, mediante la inclusión simbólica de los bordes o
márgenes de la nación, como lo ilustra el indígena, incorporado al lenguaje populista en tanto
“campesino” (Gilly:1997). Sin embargo, para una gran parte del pensamiento social, marcado
por las corrientes estructuralistas, el problema mayor era la construcción de un sujeto histórico,
lo cual remitía tanto a la heterogeneidad social como a la falta de autonomía del movimiento
sindical, frente al llamado político del líder desde el aparato del Estado.

Fue entre los años 70 y 80 cuando en gran parte de América Latina se llevó a cabo el pasaje
de la movilización del "pueblo" a los "nuevos movimientos sociales", visible en un conjunto de
acciones colectivas, marcadas por su carácter local y puntual. En el espacio urbano, la época
estaría recorrida por la emergencia de nuevas luchas, ligadas a las condiciones de vida y, por
ende, al reclamo de la tierra y la vivienda y de los servicios públicos. En este sentido, los
llamados “movimientos sociales urbanos” venían a poner de manifiesto los límites de
integración del proyecto de modernización nacional-popular, visibles en la pauperización
económica y marginalidad urbana de amplios sectores populares. En todo caso, el proceso
ilustraba el nacimiento de una nueva matriz de acción territorial, con componentes altamente
pragmáticos y una fuerte orientación de demandas hacia el Estado. Por otro lado, el uso
latinoamericano de la categoría de nuevos movimientos sociales resultaba muy engañoso,
pues varios de los movimientos analizados (como aquellos indígenas-campesinos), poco
tenían de “nuevo”.

Por último, vale la pena agregar que durante los años `80, los análisis daban cuenta de un
fuerte proceso de heterogeneidad de las luchas, lo cual fue leído en términos de creciente
disociación entre lo social y lo político Hacia los años `90, el pasaje a un nuevo tipo societal,
marcado por la asociación entre globalización y neoliberalismo, tuvo una repercusión
importante en el plano de la acción colectiva, algo que se expresó en la escasa eficacia de los
repertorios tradicionales (marchas, movilizaciones, huelgas) y, posteriormente, en la
explosión/generalización de nuevas formas de acción. En efecto, en términos de acción
colectiva, una de las primeras consecuencias fue la proliferación de repertorios de acción
nuevos o no convencionales, ligados de manera privilegiada a la acción directa (saqueos,
estallidos sociales, puebladas, cortes o bloqueos de ruta, escraches, entre otros).

Sin embargo, al alba del nuevo siglo, asistimos a una nueva inflexión, vinculada a la apertura
de un nuevo ciclo de acción colectiva, visible en la desnaturalización de la relación entre
globalización y neoliberalismo. Esta inflexión, que impulsó un cambio en el escenario político
latinoamericano, rehabilitó nuevamente el uso del concepto de movimiento social, en un
sentido altamente ejemplificador, o para decirlo de otro modo, en un sentido “fuerte” del
concepto. Recordemos que, aunque el ciclo anti-neoliberal se abrió en 1994 con la irrupción del
zapatismo, en Chiapas, suele señalarse el inicio de un nuevo ciclo de acción colectiva, esto es,
una fase que señala una progresiva acumulación de las luchas contra las reformas
neoliberales, con la Guerra del Agua, en Cochabamba, en el año 2000, seguido éste por otros
momentos de inflexión, tanto en Argentina, en diciembre de 2001 y durante 2002, Ecuador, en
2005, nuevamente Bolivia en 2003 y 2006, entre otros.

Es importante señalar que el equipo del GEPSAC ha venido haciendo una rigurosa
sistematización de las protestas en la Argentina, que abarca el periodo de 1989 a 2006, y que
constituye la base estadística más completa del país. También los trabajos de Auyero,
discípulo de Ch. Tilly, se han orientado en esta dirección, al retomar la noción de protesta, en el
marco de una concepción que subraya la importancia de los procesos políticos y los cambios
en las formas del reclamo en Argentina, básicamente centrados en las revueltas de los
empleados estatales, las puebladas en las localidades petroleras y los saqueos en el
Conurbano Bonaerense (:2002, 2008).

Por otro lado, M. López Maya, quien inició junto a su equipo un proceso de sistematización de las
protestas en 1997, retoma el concepto de “protesta popular”, basado explícitamente en el enfoque
de Tilly (política beligerante o proceso político), al cual define como “una acción colectiva
disruptiva y discontinua, desarrollada en espacios públicos por multitudes y otros actores sociales
y políticos, para expresar malestar o descontento con normas, políticas, instituciones, fuerzas,
condiciones sociales y políticas, etc.” (2005:518). Sin embargo, L. Maya habla también de “la
política en la calle” para dar cuenta de un tipo de instrumento político por antonomasia de los
sectores más pobres o más alejados del poder, una conceptualización que, como veremos más
adelante, está muy presente en la teoría de la acción colectiva en América Latina.

En suma, a fines de los `90, gran parte de las investigaciones realizadas en países de la
región, adoptaron el concepto de protesta, en detrimento de la noción de movimientos sociales,
a fin de subrayar la proliferación de repertorios de acción no convencionales, con un fuerte
poder disruptivo, que combinaban diferentes formas de acción directa, y señalaban como
interlocutores privilegiados los diferentes niveles del Estado.

El retorno de los Movimientos Sociales


No constituye un dato menor recordar que en América Latina la apertura del ciclo de luchas
contra la globalización neoliberal y asimétrica no provino de las fuerzas de la política
institucional. Fueron las organizaciones y movimientos sociales los grandes protagonistas de
este nuevo ciclo, los que a través de sus luchas y reivindicaciones, aun de la práctica
insurreccional, lograron abrir la agenda pública y colocar en ella nuevas problemáticas: el
reclamo frente a la conculcación de los derechos más elementales, la cuestión de los recursos
naturales y de las autonomías indígenas, la crisis de representación de los sistemas vigentes,
contribuyendo con ello a legitimar otras formas de pensar la política y las relaciones sociales.

Así, en las últimas décadas, los movimientos sociales en América Latina se han multiplicado
y han extendido su capacidad de representación, esto es, han ampliado enormemente su
plataforma discursiva y representativa en relación a la sociedad: movimientos indígenas y
campesinos, movimientos urbanos territoriales, movimientos socio-ambientales, movimientos y
colectivos glttb, en fin, colectivos culturales, dan cuenta de la presencia de un conjunto de
reivindicaciones diferentes, identitarios, configurando un campo multiorganizacional
extremadamente complejo en sus posibilidades de articulación. Heterogéneos en sus
demandas, al igual que en otras latitudes, éstos trasmiten una tendencia a la reafirmación de la
diferencia y el llamado al reconocimiento, al tiempo que se expresan a través de una
multiplicidad de repertorios, ligados a la acción directa.

Los movimientos sociales son comprendidos así dentro de una historia mayor, que
comprende diferentes momentos y etapas, desde los orígenes, ascenso, apogeo, crisis y
reconfiguración, en sus diferentes alineamientos y vertientes político-ideológicas. Estamos
pues frente a un enfoque que privilegia una concepción de los movimientos sociales en tanto
actores colectivos plurales, abiertos, impuros, dinámicos, que inscriben su acción en diferentes
niveles, siempre en un campo multiorganizacional y, por ende, de articulaciones difíciles y
complejas. Lejos de toda linealidad o imagen purista, reconoce que hay momentos en los
cuales los movimientos sociales reflejan tendencias corporativas y particularistas y otros
momentos, sobre todo, en procesos de movilización ascendente, en los cuales desarrollan la
capacidad de articular demandas más generales, capaces de interpelar el conjunto de la
sociedad, a través del cruce con otros movimientos u organizaciones sociales.2 Finalmente, la
concepción de movimientos sociales en sentido fuerte, más teórico, debe ser entendida menos
como una definición normativa (lo que debe ser un movimiento social, a la manera de A.
Touraine), y más como un concepto límite que nos recuerda el carácter asimétrico y antagónico
de las relaciones de poder, y por ende, coloca en el centro la idea de la dominación.

Los repertorios son definidos como “un conjunto limitado de rutinas aprendidas, compartidas
y actuadas a través de un proceso de elección relativamente deliberado. Los repertorios son
creaciones culturales aprendidas, pero no descienden de la filosofía abstracta ni toman forma
como resultado de la propaganda política, sino que surgen de la lucha. Es en la protesta donde
la gente aprende a romper ventanas, atacar presos sujetos al cepo, derribar casas
deshonradas, escenificar marchas públicas, hacer peticiones, mantener reuniones formales u
organizar asociaciones de intereses especiales” (Tilly, 2002, 31-32).

Una segunda cuestión remite al análisis más comprensivo de las transformaciones de los
repertorios, sus usos y puestas en escena públicas. En realidad, en esta segunda vía, no sólo
se destacan los aspectos estratégicos, sino las dimensiones culturales y simbólicas, a saber, la
importancia de los repertorios de acción como elementos nodales en la construcción de una
identidad positiva y, por ello mismo, las dificultades que conlleva tanto su inserción en
contextos de conflicto alto como las consecuencias de su inevitable rutinización. Un ejemplo en
el cual pienso, y que he analizado para el caso argentino, es el de los desocupados o
piqueteros, para quienes el corte de ruta, un repertorio de acción que luego adoptaría un
carácter modular, no sólo constituyó una forma de confrontación, sino una experiencia de
autoafirmación de una identidad excluida.

Los movimientos sociales y la perspectiva territorial


En la actualidad, parecería haber un consenso implícito entre diferentes analistas
latinoamericanos (entre los cuales nos incluimos) acerca de que una de las dimensiones
constituyentes de los movimientos sociales latinoamericanos es la territorialidad. En términos
generales, tanto en los movimientos urbanos como rurales, el territorio aparece como un
espacio de resistencia y también, progresivamente, como un lugar de resignificación y creación
de nuevas relaciones sociales. En fin, para un arco bastante extenso y representativo de las
ciencias sociales latinoamericanas, los movimientos sociales latinoamericanos deben ser
entendidos como movimientos socio-territoriales.

Como afirma Milton Santos (2001), la apropiación del territorio nunca es solo material, sino
también simbólica. La territorialidad, como dimensión “material”, ha sido muchas veces
comprendida exclusivamente como auto-organización comunitaria, tanto de los movimientos
campesinos, muchos de ellos de corte étnico, como de los movimientos urbanos, que asocian
su lucha a la defensa de la tierra y/o a la satisfacción de las necesidades básicas. La
importancia que adquirió la construcción de la territorialidad, asociada primeramente al habitat
y las condiciones de vida, está ligada a la desarticulación entre empleo y urbanización, operada
a fines de los años ´60 y ´70, que dieron lugar a la emergencia a los primeros asentamientos
urbanos. Este fenómeno de marginalidad urbana señalaba el desfase entre las demandas de
consumo y la calidad de vida en general, y por ende, ponía de manifiesto los límites de
integración del modelo populista-desarrollista.

Como hemos señalado, esta situación daría origen a los movimientos sociales urbanos,
caracterizados por la auto-organización en redes de proximidad social y espacial (el barrio
como centro organizado) y la orientación hacia el Estado (en reclamo de servicios y la tenencia
de la tierra). En este período, los movimientos sociales urbanos despertaron expectativas en
algunos analistas, que proponían una articulación entre luchas sociales (urbanas) y luchas
políticas (sindicales, partidarias). Sin embargo, desde fines de los ´80, el territorio se fue
erigiendo en el lugar privilegiado de disputa, primero, a partir de la implementación de las
nuevas políticas sociales, de carácter focalizado, diseñadas desde el poder con vistas al
control y la contención de la pobreza. Estas transformaciones deben ser entendidas en el
marco de una dinámica recursiva. En efecto, como se vería en años posteriores, el correlato de
este proceso sería el desarrollo y consolidación secuencial de un Estado de seguridad y un
Estado Asistencial, con el objeto de contener, controlar, disciplinar a las poblaciones pobres y
movilizadas, concebidas como nuevas “clases peligrosas”.

De manera más reciente, la disputa por el territorio ha tenido otras inflexiones, a partir de las
nuevas modalidades que adoptaría la lógica del capital en los espacios considerados
estratégicos en términos de recursos naturales. Recordemos que el impulso del capitalismo
neoliberal posdictaduras ha tenido diferentes fases en América Latina: un primer momento,
desde finales de los ´80, estuvo marcado por la desregulación económica, el ajuste fiscal, la
política de privatizaciones (de los servicios públicos y de los hidrocarburos), así como por la
introducción del modelo de agronegocios. Esta primera fase, en la cual se sentaron las bases
del Estado meta-regulador.
En los últimos tiempos, el proceso mismo de construcción de la territorialidad se haya
cargado de nuevas significaciones y valoraciones, como lo muestra el desarrollo de
movilizaciones de fuerte carácter socio-ambiental en gran parte de la región. Así, las acciones
de los movimientos campesinos e indígenas, como de aquellos socio-ambientales, orientadas
contra el Estado y contra sectores privados (grandes empresas transnacionales), generalmente
se inician con reclamos puntuales, aunque en la misma dinámica de lucha tienden a ampliar y
radicalizar su plataforma representativa y discursiva, incorporando otros temas, tales como el
cuestionamiento a un modelo de desarrollo monocultural y destructivo, y la exigencia de
desmercantilización de los llamados “bienes comunes”.

En suma, la territorialidad es una dimensión que atraviesan el conjunto de los movimientos


sociales, por encima de sus diferencias nacionales y sectoriales, sea que hablemos de los
movimientos indígenas (como el zapatismo en México, la CONAIE en Ecuador o las
organizaciones mapuches, en Chile y Argentina), de movimientos territoriales urbanos (las
organizaciones piqueteras en Argentina, la Fejuve en Bolivia, Los Sin Techo en Brasil) o
rurales (el MST en Brasil), o los movimientos socio-ambientales (movimientos anti-represa en
Brasil, movimientos de resistencia campesino-indígena en Perú y Ecuador, nuevas asambleas
ciudadanas contra la minería a cielo abierto en Argentina y Chile), entre otros.

Incluso, los nuevos espacios de coordinación que inicialmente estuvieron marcados por la
evolución de los llamados acuerdos sobre liberalización comercial y especialmente frente a la
iniciativa norteamericana de subsumir a los países de la región bajo un Área de Libre Comercio
de las Américas (ALCA), hoy se erigen contra el IIRSA (Iniciativa para la Integración de la
Infraestructura Regional Suramericana), los avances del modelo extractivo exportador y la
extensión del modelo de agro-negocios. De este modo, la constitución de espacios de
coordinación a nivel regional aparece cada vez más centrada en la defensa de la tierra y el
territorio.

La “perspectiva plebeya” y las formas de participación de lo popular


Cuando se habla de lo plebeyo en América Latina se hace referencia ciertos rasgos
culturares del mundo de los excluidos; pero cuando hablamos específicamente de la irrupción
de lo plebeyo, estamos ligando esta dimensión cultural y simbólica a fuertes procesos de
cambio social. En Argentina, lo plebeyo como voluntad de autoafirmación de lo popular
emergió como resultado de un conflicto con otros sectores sociales (clases medias y altas),
que asimilaban su carácter impugnador con la incultura, al tiempo que reclamaban para sí la
superioridad de sus modelos culturales y estilos de vida. En este sentido, la presencia de lo
plebeyo remite la historia de diferentes movimientos populares, tanto del yrigoyenismo como
sobre todo del peronismo, y más cercanamente los movimientos territoriales urbanos, como los
desocupados o piqueteros.

Pero, lejos de ser privativo de la Argentina, la asociación entre lo plebeyo y las formas de
participación de lo popular, recorre sin duda gran parte de los países latinoamericanos, y
aparece cristalizada en la imagen de la “invasión” de los pobres y excluidos, que bajan de los
cerros, para “cercar” o “sitiar” el centro político y económico de la ciudad. Las revueltas
urbanas de las últimas décadas y la visibilidad persistente que han adquirido los sectores
excluidos (símbolo de las clases peligrosas), vuelven a traer al presente estás imágenes
fantasmáticas.

“El nuevo modelo de la ciudad latinoamericana fragmentación y privatización” de


Michael Janoschoka
Cada vez más ciudadanos buscan una organización privada y eficiente de su vecindario que
les provea de los servicios que antes eran públicos. El abandono de la gestión y control del
desarrollo urbano por parte del Estado y su apropiación por parte de actores privados dio como
resultado la aparición de formas urbanas comercializables, redituables y valiosas para el
mercado. Estas nuevas formas urbanas están básicamente dirigidas a los ganadores de las
transformaciones económicas es decir shopping malls Urban entretainment Center y escuelas
privadas así como complejos residenciales cerrados.
En el área suburbana de Buenos Aires aparecieron complejos de viviendas unifamiliares,
barrios llamados barrios privados, mientras que en lugares centrales surgieron edificios altos
comercializados habitualmente con el nombre de Torres jardín. La tendencia hacia la vivienda
vigilada y segura se convirtió en el factor determinante del crecimiento de la superficie de la
metrópolis.
El punto culminante de este desarrollo Está marcado por el establecimiento de Nordelta,
declarada Ciudad privada y denominada ciudad pueblo.
El aumento masivo de barrios residenciales de acceso restringido abarca a las capas de
altos ingresos, en creciente medida a la clase media e incluso a la clase media baja.
La invasión de la clase media y media alta en zonas habitualmente populares, condujo a una
intensificación de las desigualdades sociales. En realidad la multiplicación de complejos
habitacionales vigilados permite suponer que se trata de una forma de aislamiento que
representa una nueva cualidad de segregación.
El mercado inmobiliario no ofrece muchas oportunidades de elección a las clases de menos
ingresos y se creó una división social del espacio urbano. La consecuencia directa de la
segregación social económica o cultural y la exclusión es la conformación de una clase baja
urbana. La división espacial se expresa ahora mediante barreras físicas y limitaciones en los
accesos. Un aislamiento mutuo reemplaza el patrón previo de la ciudad abierta e integradora.
De este modo se forman Islas funcionales de bienestar con lugares de alto nivel de servicios
consumo y vida nocturna.
Y paralelamente se expanden las no Go áreas en las cuales Los extraños se sienten
físicamente amenazados. En esta producción de Barreras también entra en juego la provisión
de bienes públicos y el abandono de la función de planificación urbana que originalmente
realizaba el estado.
La transferencia de la gestión del desarrollo urbano a inversores privados y la producción
espacial de una sociedad público privadas son ejemplos más evidentes del nuevo tipo de
producción del espacio urbano. Una característica interesante esta sociedades es la aparición
de restricciones al acceso como un fenómeno generalizado Aunque no es ningún fenómeno
nuevo sino una actitud humana extendida.
A través de regulaciones estatales y conductas ciudadanas las gated communities era una
forma de vida aceptada sólo para una reducida élite.
Los barrios privados son comercializados por una coalición de empresas inmobiliarias y
grandes periódicos e incluso promovidos por las administraciones municipales. Para las
inmobiliarias requiere una estrategia ya que con costos marginales más altos se puede
alcanzar una ganancia mucho mayor que con la venta de parcelas normales. Se puede ver que
el conjunto de habitantes en nordelta no es homogéneo: porteño, bonaerense, porteño
suburbano, proveniente del interior. Todos ellos coinciden en buscar un lugar para habitar con
buenas condiciones ambientales con mayor verde y silencio para relajarse luego al trabajo.
Justamente el aislamiento Residencial y espacial conduce una creciente fragmentación del
espacio urbano.
Atrás de su lugar de trabajo muchos nordelta nos siguen frecuentando la capital Federal.
Esto está relacionado con la falta de un fuerte proceso de su Urbanización de edificios de
oficinas. Para la mayoría de la población laboralmente activa el lugar de trabajo no cambia pero
si las modalidades de viaje. Si antes de la mudanza se utilizaban medios de transporte público
ahora no queda otra posibilidad es de nordelta que el automóvil particular.
Al rep llegué a la individualidad en la elección del medio de transporte no sólo es poco
sustentable para las zonas centrales de la ciudad altamente contaminadas sino que también se
trata de un retraimiento de la percepción comunitaria de la sociedad. Mila vigilada y aislada
nordelta se va a la oficina por la autopista segestion el auto en un lugar vigilado y privado en
muchos casos en el mismo edificio oficina. El contacto con espacios urbanos de acceso público
se reduce al mínimo y esto lleva una nueva manera de percibir el espacio. Aprovechando la
creciente flexibilidad que resulta de los métodos modernos de comunicación muchos
habitantes empleados en el centro aspiran a la posibilidad de reducir su presencia en el lugar
de trabajo a tres o cuatro veces por semana Y cumplir con sus obligaciones profesionales
desde su casa. Esta estrategia también conduce a una menor interacción con otros espacios
urbanos y aún mayor retraimiento. Todos los habitantes entrevistados envían a sus hijos a
escuelas privadas ya que la escuela Estatal no es una alternativa para la clase media y media
alta.
Generalmente la mudanza conduce el cambio de escuela Por ejemplo nordelta Existen los
institutos de renombre cardenal pironio y northlands.
Las escuelas no están ubicadas en el área urbana tradicional sino en la cercanía de algún
eje de transporte individual. Por este motivo los padres deben recoger a sus hijos en auto lo
que provoca una doble exclusión y una masía fragmentación de los espacios sociales.
Ahora los escolares van rumbo a Islas en medio de un medio deshabitado el contacto físico
Con otras clases sociales está descartado. La fragmentación en las escuelas en nordelta es
todavía más profunda los niños no abandonan a Ciudad privada nunca.
Los horarios ilimitados de atención de los comercios permiten que los trabajadores puedan
solucionar las compras para sus necesidades diarias espontáneamente en el camino de
regreso a casa. La estructura comercial llena las calles y veredas de vida y los negocios Son
puntos de encuentro de la interacción social. Es importante mencionar que dentro de cada
barrio de nordelta no están permitidas las actividades comerciales por lo que ir de compras
significa tener que usar el auto. Las compras diarias y en pequeña escala de medios de vida se
ven reemplazadas por grandes adquisiciones semanales o quincenales en grandes shopping
centers suburbano. Al mismo tiempo esto genera una mayor fragmentación del espacio urbano
dado que el hipermercado aislado reemplaza lentamente a los pequeños comercios minoristas.
La decisión de mudarse a nordelta se encuentra estrechamente vinculada con el deseo de
emprender una nueva etapa de vida y cambiar modos personales de conducta. Generalmente
esto significa la decisión concreta de pasar más tiempo con la familia en espacios verdes
dónde poder dormir relajado de noche y Durante los fines de semana con los niños . También
ofrece un enorme Plaza de juegos de Aventuras donde al mismo tiempo se puede hacer
deporte andar en bicicleta correr y otras actividades deportivas que se recuperan como una
parte vital de una nueva organización del tiempo libre. El tercer aspecto de la Nueva Vida
incluye la nueva comunidad de los vecinos mucho de los habitantes se encuentran y conocen
en el proceso de búsqueda de vinculación comunitaria.
Las nuevas formas urbanas poseen un carácter marcadamente insular:
La difusión de complejos habitacionales vigilados para las clases acomodadas en el espacio
Metropolitano. Estos desarrollos se ubican en la cercanía de autopistas y rutas principales. El
resultado es una distribución dispersa en la totalidad del espacio suburbano de la metrópolis .
Anteriormente los espacios suburbanos eran ocupados masivamente por las clases bajas
ahora han sido apropiados también por las clases media y alta a través de complejos
habitacionales vigilados.
A todo esto se agrega la construcción de Torres residenciales vigiladas en lugares centrales
de la ciudad y el cierre posterior de vecindades ya construidas.
Se ha creado una nueva división espacial de la cultura y consumo que conduce a una
descentralización de las funciones urbanas ya que la distribución hipermercados se ubican en
espacios suburbanos.
La instalación de escuelas y universidades privadas en cercanía a las nuevas áreas
residenciales privadas trasladándose así una función básica de un lugar central a otro no
integrado al continuo urbano.
La suburbanizacion en la producción industrial o el nuevo asentamiento de empresas
industriales y logísticas en la periferia gracias a la inversión externa y los bajos costos se han
instalado nuevos parques industriales urbanos en cercanía a las autopistas.
El creciente aislamiento y accesibilidad de los barrios de la clase baja provocando Así que la
clase media baja se aísla por miedo la criminalidad de Los Barrios marginales.
Estas características subraye una tendencia hacia una ciudad extremadamente segregada y
dividida. La metrópolis latinoamericana actual se desarrolla hacia una ciudad de Islas.
La autora sostiene que las estructuras de la ciudad se dividen en cuatro dimensiones que se
superponen:
Islas de riqueza: la diversa nomenclatura en los países de América Latina apenas posibilita
una denominación con validez general. En el espacio suburbano se pueden distinguir tres
elementos el barrio privado como lugar de residencia el barrio privado como lugar de residencia
secundaria así como también mega proyectos de tipo nordelta con la unión de más de una
función.
Islas de producción: el modelo distingue Dos clases de áreas industriales por un lado de las
áreas industriales nuevas desarrolladas y comercializadas en forma privada frente a esto áreas
industriales ya existentes a las cuales se ha revalorizado.
Islas de consumo: en el modelo se distinguen centros urbanos de compras recién
construidos y centros que reciclan infraestructura edilicia previamente existente.
Islas de precariedad: el modelo muestra barrios informales o precarios centrales barrios
informales o precarios en el borde de la ciudad y los barrios de viviendas sociales.
Esta clase social vive en burbujas e islas cuyo tamaño en complejidad aumenta en el medio
del mar de pobreza que las rodea y son la respuesta a las fuerzas del mercado y a la ausencia
del estado.

“Redes, nodos y ciudades: transformación de la metropoli latinoamericana” de Carlos


de Mattos
Desde mediados de la década de los años 70 al Buscar una salida del agotamiento del
modelo de crecimiento hacia adentro vía industrialización sustitutiva que habían aplicado por
varias décadas los países latinoamericanos se fueron plegando con diversa convicción e
intensidad a las recomendaciones realizadas para los países en desarrollo por algunos
organismos multilaterales como el FBI y Banco Mundial qué preconiza van la realización de un
conjunto de reformas estructurales como camino para restablecer la competitividad y el
crecimiento.
Es lo que venimos a llamar como el modelo neoliberal. Lo que Entonces comenzó a aplicarse
en estos países fue una estrategia encaminada a producir una profunda reestructuración o
ajuste estructural de las respectivas economías nacionales.
Con este objetivo, la mayoría de estos países impulsó una radical liberalización económica
basada en principios de subsidiaridad y neutralidad del estado que incluye diversas medidas en
materia de desregulación y privatización, apertura externa, flexibilización salarial, etcétera.
Estos procesos de reestructuración significaron la progresiva incorporación de estos países a
la dinámica de la globalización.
En la mayoría de estos países se produjo una revalorización del papel de las áreas
metropolitanas principales acompañadas por una transformación que parece seguir la misma
dirección que se observa en las grandes ciudades de los países desarrollados, esta
transformación ha sido de tal magnitud que diversos autores han considerado necesario
proponer nuevas denominaciones para aludir a la ciudad emergente. Más allá de las
transformaciones resulta evidente la persistencia de la identidad particular de cada ciudad no
parece probable que los efectos de la globalización puedan hacer evolucionar a esta ciudad es
hacia un mismo tipo de imagen urbana.

GLOBALIZACIÓN Y UNA NUEVA ARQUITECTURA PRODUCTIVA.


El Punto de partida de las mutaciones que se observan en buena parte de las áreas
metropolitanas productivas del mundo entero se encuentra básicamente en el hecho de que el
avance de la globalización se tradujo en una progresiva descomposición y o desintegración de
numerosos procesos que hasta entonces se habían desarrollado principalmente en y entre
economías nacionales para dar paso a su reintegracion en un ámbito supranacional a través de
empresas que funcionan en red. Lo que desencadenó un proceso de integración
organizacional que reposa en la coordinación de tareas y de funciones. Esta nueva forma de
integración organizacional Materialista la transición desde una situación en la que la activa
económica se vertebra va en un plano eminentemente Interestatal hacia otra en la que
predominan las relaciones inter empresas.
De la incorporación de sectores y de lugares a la dinámica globalizada resultó la
conformación de un espacio mundial de acumulación en el que innumerables empresas
revalorizan sus capitales en un número creciente de actividades y territorios. En este espacio
de acumulación son las empresas las que producen y efectúan lo esencial de las relaciones
económicas entre los territorios internacionalizados sus actividades mediante tres mecanismos
diferentes: el comercio internacional la inversión directa productiva en el extranjero Y su propia
organización productiva en red.
Las políticas de ajuste estructural hicieron posible que estos países logras en configurar un
ámbito propicio para el arribo y desembarque en sus territorios de distintos tipos de cadenas
globales. Las reglas del juego tenían como uno de sus objetivos transformar el capital
empresarial privado en el protagonista central del proceso de acumulación y crecimiento.
Con la multiplicación del número de empresas y actividades que se reestructuraron se fue
desarrollando También en estos países un tipo de configuración productiva llamada modelo
celular en red en el que tres evoluciones principales se sitúan como denominador común : la
descomposición de las grandes empresas integradas verticalmente la externalización creciente
de las actividades consideradas como no estratégicas y la multiplicación al interior de las
fábricas de unidades elementales semiautónomas. Acompañando la influencia de la
organización y el funcionamiento reticular de las empresas se impuso una progresiva
financiación de la economía mundial donde el capital se ha ido autonomizado progresivamente
de las indicaciones o regulaciones gubernamentales.
Países latinoamericanos todos ellos terminaron embarcándose en la reestructuración de sus
economías esto se reflejó en los indicadores del comercio internacional donde las
exportaciones como las importaciones experimentaron significativos aumentos y un importante
crecimiento de la inversión extranjera directa siendo la misma de la participación de las
empresas en sectores claves de la economía nacional.
El funcionamiento del modelo celular en Red desató dos tendencias simultáneas y
complementarias Por una parte una amplia dispersión territorial de las distintas células o nodos
de las RTF y por otra parte la concentración en eterna dos lugares en tanto de las funciones de
comando y coordinación como de una diversidad de nodos principalmente productivos. Como
Afirma Saskia Sassen las nuevas tecnologías de la comunicación favorecen la localización de
las actividades de producción.
Fueron seleccionados como receptores de nodos aquellos lugares que ofrecían un conjunto
de atributos y factores que las rtf percibían como condición necesaria para el mejor desarrollo
de sus actividades y por lo tanto para intensificar su crecimiento y expansión. En este sentido
tenían especial incidencia aspectos tales como existencia o disponibilidad de sistemas de
comunicaciones capaces de permitir contactos instantáneos con el entorno Global en su
conjunto, oferta de servicios avanzados especializados diversificada y eficiente, condiciones
para una comunicación directa cotidiana entre las personas que desarrollan las tareas y un
mercado capaz de asegurar el acceso a una demanda amplia y diversificada.
Al recibir y concentrar en su seno a un número creciente de nodos de empresas articuladas
diversas áreas metropolitanas productivas se constituyeron en sí mismas en nodos de una red
de ciudades fronterizas. Cada una de estas aglomeraciones se ha tornado en el lugar en el que
en el que las redes técnicas de transportes y de comunicaciones a las empresas redes
transnacionales redes de las universidades y de investigación concentran sus modos para
realizar conexiones y sinergias recíprocas. Las metrópolis modernas dejan de ser sistemas
auto concentrados para transformarse en potentes entrecruzamientos de redes múltiples.
Empresas red y una nueva base económica Metropolitana
A medida que estás transformaciones se fueron procesando comenzó a producirse cambios
económicos sociales y territoriales y además comenzó a localizarse en ellas un número
creciente de nodos y eslabones de diversas rtf cuya presencia significó la Progreso
transformación de sus respectivas bases económicas metropolitanas. Este cambio se
desarrolló asociado a una mayor crecimiento relativo del sector servicios con respecto al sector
industrial y a una todavía mayor Urbanización de la economía.
A medida que las respectivas economías nacionales se fueron globalizando las áreas
metropolitanas productivas tendieron a concentrar especialmente:
*las funciones de dirección gestión coordinación y control de las principales estructuras
empresariales globalizadas Incluyendo los eslabones principales de las empresas globalizadas.
* la más importante de los servicios a la producción y de las actividades asociadas Ah
servicios a familias como comercio educación salud cultura.
* las actividades relacionadas con la distribución y comercialización de los productos
globales.
Se puede decir que este conjunto de actividades arrastra el crecimiento de un conjunto de
actividades de menor entidad. Este circuito inferior de carácter cuasi Residencial incluye una
variada gama de servicios de baja productividad desempeñados Generalmente por
trabajadores poco calificados, receptores de bajos salarios e ingresos entre los que predomina
el trabajo precario formando parte mayoritariamente del denominado sector informal.
El aumento de la concentración de no2 de diversa naturaleza en las áreas metropolitanas
principales redondo en que ya se constituyen a su escala en sitios estratégicos para las
operaciones económicas globales.
Junto a la redefinición del papel de las áreas metropolitanas principales y a la recomposición
de su base económica junto con otros cambios estuvieron asociados al nuevo enfoque de la
gestión urbana al significativo aumento de la tasa de motorización y a la generalizada difusión y
utilización de las nuevas tecnologías de la información y Comercio.
El nuevo enfoque consideraba que el suelo urbano no era un recurso escaso y que por lo
tanto su uso debía ser decidido por el mercado en función y sus rentabilidades alternativas; al
mismo tiempo legitimaba el sector privado como encargado de materializar una adecuada
oferta de bienes y servicios. Aún cuando esta concepción fue adoptada con diferente
convicción e intensidad por las administraciones nacionales o metropolitanas de los distintos
países los fundamentos teóricos que le inspiran han ido ganando terreno en la mayoría de
ellos. Se liberalizar on las condiciones para la materialización de las preferencias locacionales
de las empresas y de las familias cuyas estrategias decisiones y acciones ganaron fuerza en
los procesos de desarrollo urbano. Las nuevas reglas del juego establecieron mayor libertad y
flexibilidad para la operación de las respectivas coaliciones de miembros de élites directa o
indirectamente relacionadas con los negocios inmobiliarios que buscan asegurar las
precondiciones para el crecimiento de su ciudad y que conducen las correspondientes políticas
urbanas.
Desde el momento en que los administradores del capital inmobiliaria percibieron que la
recuperación de la importancia económica de las áreas metropolitanas principales las
transformadas en residencia de la parte más moderna y dinámica de los correspondientes
aparatos productivos nacionales y Consecuentemente de los sectores sociales perceptores de
más altos ingresos, el suelo Metropolitano cobró mayor importancia por lo que las inversiones
inmobiliarias cobraron un significativo y sostenido aumento en este ámbito es por eso que los
negocios inmobiliarios jugaron un papel fundamental.
Las condiciones derivadas de la apertura externa y la globalización favorecieron Un
incontrolable aumento de la tasa de motorización en la mayoría de estas áreas metropolitanas
principales de forma que el explosivo aumento de la utilización de vehículos motorizados en la
movilización individual y colectiva incidió significativamente en la reducción de la importancia
de la distancia en las decisiones de localización de un número creciente de familias y de
empresas. Este fenómeno generó un aumento de la demanda por carreteras y autopistas las
cuales ganaron importancias como eje para la expansión metropolitana contribuyendo a afirmar
una morfología territorial de tipo tentacular en la mayoría de estas ciudades y a fortalecer la
tendencia a la metropolizacion expandida o dilatada.
Finalmente la amplia difusión y la adopción generalizada de las nuevas tecnologías de
información y comercio estímulo el crecimiento del periurbano como lugar alternativo para la
localización Residencial y productiva.
Polarización social y metropolización expandida
La dinámica económica y social en la estructura y en el funcionamiento de las áreas
metropolitanas principales ha contribuido a intensificar los fenómenos por un lado la
persistencia y consolidación de una estructura urbana polarizada y segregada donde la
estratificación social tiene una Clara lectura territorial y por el otro la acentuación de la
metropolización expandida bajo la dilatación continuada de un peri urbano difuso de baja
densidad de estructura policentrica que prolonga la ciudad hacia todas las direcciones posibles.
Los cambios en estructura socio-territorial metropolitana deben ser observados considerando
el impacto de las transformaciones económicas producidas por el avance de la globalización
sobre sus mercados de trabajo:
La creación de puestos de trabajo ha sido insuficiente en relación al rápido crecimiento de
la población económicamente activa
A medida que se han ido desarrollando los procesos de privatización y de terciarización
atendido aumentar la informalización y la precarización.
Los salarios son todavía más bajos que en 1980 y el desempleo afectó más a las mujeres
y a los jóvenes.
También se ha acrecentado la concentración del ingreso Y el nivel de pobreza actual es
todavía mayor que el de 1009 80.

Estas características muestran la segmentación de los mercados de trabajo cuyos rasgos


básicos serían: mayor polarización entre los salarios de un sector primario con altos
salarios y seguridad del empleo y un sector secundario que presenta las características
inversas.
A medida que el proceso de desarrollo desigual concentra tanto a las actividades
dinámicas como al trabajo menos cualificado en las grandes áreas metropolitanas dichas
áreas se convierten en la expresión espacial de las condiciones sociales en las que se
traducen en último terminó los efectos del proceso de restructuración.
Sakias hacen destacó la presencia de este fenómeno como inherente a las global Cities en
función de la creciente demanda de personal altamente calificado con elevadas
remuneraciones que permiten sofisticados niveles y pautas de consumo como al mismo
tiempo que también se acrecienta un conjunto de servicios complementarios que compran
a otras empresas como limpieza mantenimiento seguridad lo que expande la demanda de
empleo poco calificado con bajas remuneraciones y a menudo precario lo que se traduciría
en una creciente polarización económica.
El aspecto relativamente nuevo es que los procesos de exclusión social más profundos se
manifiestan en una dualidad intrametropolitana particularmente en distintos espacios del
mismo sistema Metropolitano sin articularse y a veces sin verse la funcion mas valorizada
Sí a las más degradadas los grupos sociales productores información en contraste con los
grupos sociales excluidos y las personas en condición de marginación.

Entrecruzamiento reticular periurbanización y policentrismo


Lo que ha sido considerado como distintivo de una ciudad impulsada y modelada por el
entrecruzamiento de redes múltiples es la acentuación de la expansión territorial
metropolitana fruto de una prácticamente Incontenible periurbanización por lo que el tejido
urbano prolifera se extiende consumiendo los recibos de vida agraria.
Con la periurbanizacion y la ciudad difusa los modelos de suburbanización de tipo latino
Mediterráneo y de tipo anglosajón tienen ahora a converger en un modelo único común de
ciudad sin centro de estructura reticular cuyos nodos conservan y acentúan su identidad a
través de procesos innovadores de competición y cooperación, es así como la ciudad es
más difícil de delimitar y de medir.
Las características importantes de la nueva ciudad son:
Configuración de sistemas productivos centrales, organizados reticularmente y que
sustentan la formación de ciudades región.
De crecimiento demográfico de las antiguas áreas centrales y fuerte crecimiento hacia los
bordes y el periurbano.
Poli centralización de la estructura y el funcionamiento Metropolitano.
Urbanización de los modos de vida en las áreas intersticiales periurbanas
Proliferación de artefactos urbanos que impactan la estructura y la imagen urbana(
sistemas productivos centrales organizados reticularmente: un aspecto fundamental que
incide en la nueva morfología metropolitana resulta del hecho de que un número
importante de ciudades y pueblos no conurbados ubicados en el exterior cercano a la
unidad urbana se ensamblan a la dinámica económica metropolitana como parte de un
espacio central de flujos. Este proceso de ensamblaje de centros urbanos periféricos a la
dinámica metropolitana concierne especialmente a los que están ubicados en las áreas
circundantes a cada área metropolitana principal. A medida que esta ciudades y pueblos
aledaños se articulan a la dinámica metropolitana Pasan a formar parte del área urbana y
comienzan a perder su condición de centros independientes y a cambiar sus estilos de vida
cotidiano.
Por detrás de la formación de estos sistemas productivos centrales subyace una razón
básica de la mano de las innovaciones tecnologías se ha materializado una significativa
ampliación del campo de externalidad metropolitana a un área de influencia en continúa
expansión que incluye a un número creciente centros urbanos próximos que así Pasan a
formar parte del sistema productivo central. Bajo esta dinámica la imagen de la Mancha
aceite pierde pertinencia para describir el fenómeno urbano en tanto que la de un
archipiélago de Islas urbanas interconectadas Parece ser más adecuada.
La mayor parte del crecimiento ya no se da dentro del perímetro urbano sino que se ha
trasladado a un número importante de ciudades medias y pequeñas dentro de una amplia
región metropolitana a una distancia considerable del núcleo central de la megaciudad.
La expansión periurbana no obedece al aumento de la población metropolitana sino que
obedece al incremento de los desplazamientos intra metropolitanos y al consecuente
aumento del consumo de tierra per cápita. Estos movimientos internos de población según
los cuales una parte considerable de los habitantes de la ciudad desplaza su lugar de
residencia hacia las áreas del borde contribuyen a mantener la continuidad de la dilatación
metropolitana que ya se ha mencionado la persistencia este fenómeno significa que aún
con de crecimiento de la población podría continuar la expansión de la Mancha urbana.
Aún así la pérdida de población de las áreas centrales no debería interpretarse como una
declinación de las grandes ciudades sino como el producto de una recomposición funcional
y social del espacio urbano.
Esta tendencia que se complementa con el crecimiento de un periurbano más extenso
incluyendo el ensamblaje con o sin conurbación de numerosos centros urbanos de la
ciudad de región en expansión se está produciendo no solamente en las metrópolis de
mayor dimensión como Sao Pablo II o Ciudad de México y Buenos Aires sino también en
algunas más pequeñas como la paso Montevideo.
En esta dinámica a medida que el transporte automotor acentuó su influencia en la
expansión metropolitana en muchas de estas aglomeraciones se comprobó Un aumento
de la densificación urbana en torno a las principales vías de transporte. A partir del
momento en que algunos de estos ejes viales se fueron transformando en autopistas este
fenómeno ha intensificado de la formación de corredores o fajas urbanas que siguen a
dirección de esas rutas de acceso dibujando una morfología tentacular donde en su
marcha hacia el exterior cada tentáculo va ensamblando nuevos componentes urbanos al
espacio central de flujos.

POLICENTRALIZACIÓN METROPOLITANA.
Una de las principales consecuencias del proceso simultáneo de expansión territorial y
dispersión productiva que afectado a las principales metrópolis latinoamericanas durante
las últimas décadas ha sido significativo aumento del número de funciones y actividades
que hasta entonces habían estado de localizadas en sus centros tradicionales que se
desplazan hacia nuevos lugares del territorio Metropolitano. Este proceso que afirma la
transición desde una estructura articulada en torno a un centro principal hacia una
organización policentrica redunda en una progresiva declinación del papel y de la
importancia de esos centros tradicionales.
Esta transformación tuvo sus principales fuerzas impulsoras por una parte en la afirmación
y el despliegue de las empresas organizadas en red y por otra en ciertos cambios en las
preferencias vocacionales de las principales actividades productivas bajo el estímulo
derivado de los nuevos sistemas y condiciones en transportes y Comunicaciones. También
incidió en el fortalecimiento de esta tendencia el ensamblaje a la dinámica Metropolitana de
algunos pueblos y ciudades al de años que hasta entonces habían funcionado en forma
independiente y que ya contaban con centros relativamente consolidados los que al
articularse en el sistema productivo central se constituyeron en nuevos centros
metropolitanos Incluso en muchos casos al hacerlo reforzaron sus funciones centrales con
el agregado de nuevos tipos de servicios especialmente comerciales.
Las sedes corporativas y oficinas centrales de las grandes empresas comenzaron a
desplazarse desde los tradicionales Distrito centrales de negocios hacia nuevas
localizaciones intermedias. Aún cuando en muchos casos estos desplazamientos ya se
habían iniciado en la época Industrial desarrollista fue la creciente importancia que lograron
los factores mencionados en la época de la globalización lo que incidió en la preferencia
por lugares más alejados del centro.

Ejemplo de dos grandes megalópolis Ciudad de México y Sao Paulo.


A medida que se fue intensificando la tercerización de cada economía metropolitana fueron
las actividades y los edificios el sector servicios los que tuvieron mayor incidencia los
cambios en la estructura y funcionamiento de la ciudad y por lo tanto en la configuración de
una estructura policentrica. En particular tuvo especial impacto la irrupción de ciertos
artefactos arquitectónicos que pueden ser observados como imágenes representativas de
las transformaciones que caracterizan una ciudad globalizada.
Urbanización de áreas intersticiales periurbanas.
En la formación de los sistemas productivos centrales Se observa la aparición de un tipo
diferente de espacio Generalmente ubicado en los intersticios no construidos de los
mismos que estrictamente no puede calificarse como urbano o rural aun cuando en ellos
se hayan impuestos los estilos de vida urbanos. Estos nuevos espacios resultan de dos
tendencias diferentes por una parte de la existencia de una población que se mantiene
dedicada a labores Rurales pero nuevas condiciones laborales y residenciales y por otra
parte del desplazamiento de habitantes urbanos hacia el periurbano en busca de un hábitat
diferente más relacionado con el paisaje natural.
En el caso de la población que se mantiene vinculada a tareas Rurales se encuentra bajo
el predominio del trabajo estacional y precario vinculado a empresas agroexportadoras y
por otro está afectada por una creciente Urbanización dado que una buena parte de
ciudades pequeñas se encuentran ubicadas en la proximidad de sus lugares de trabajo
rural.
En algunas de estas ciudades se ha intensificado la ocupación de áreas Rurales situadas
en su entorno por parte de sectores de ingresos medios y altos de la población urbana que
busca en un hábitat semirural condiciones de vida diferentes de las que puede encontrar
en la ciudad consolidada esto ha generado nuevos barrios externos Generalmente
localizados en lugares privilegiados de la periferia de cada metrópolis y originado diversas
modalidades de configuraciones periurbanas que van desde los barrios cerrados
amurallados y los clubes de campo hasta verdaderas ciudades satélites de Gran dimensión
como la ciudad pueblo de nordelta en Buenos Aires.
Este tipo de preferencia ha dado lugar a una gran variedad de negocios inmobiliarios que
promueven la ocupación y el fraccionamiento de grandes extensiones de tierra periurbana
que en muchos casos habían estado hasta entonces plenamente dedicadas a tareas
agrícolas.
Las actividades que componen la nueva base económica metropolitana son las terciarias.

Entre las configuraciones que han tenido hasta ahora mayor repercusión en la conformación
de ese nuevo paisaje Metropolitano merecen ser destacadas las siguientes como
especialmente relevantes:
Espacios comerciales diversificados y o especializados: especialmente shopping malls Qué
son en sí mismos lugares concebidos para facilitar el entrecruzamiento de múltiples redes
principalmente comerciales y por lo tanto para facilitar la localización y el funcionamiento de
sus nodos. De esta manera sus configuraciones de Última Generación han debido ser
adecuadas a los cambios comerciales impuestos por la globalización de manera de hacer
posible el despliegue de un mix de productos y servicios equivalentes al que se ofrecen en las
economías centrales. Dado que muchos de estos mails fueron concebidos y promovidos
explícitamente para cumplir la función de subcentros urbanos, su actualización ha requerido
incorporar a sus actividades comerciales habituales la oferta de complejos de salas
cinematográficas centros médicos hoteles de lujo patios de comida instalaciones para eventos
culturales.
Igualmente han multiplicado su presencia otros tipos de grandes superficies comerciales
tanto enfocadas hacia el consumo diversificado como especializado entre ellos los centros
comerciales del automóvil de la computación de materiales del hogar. Que también tienen una
fuerte influencia en los cambios que afectan a la estructura urbana de la ciudad difusa y
policentrica.
Edificios corporativos y complejos empresariales: concebidos conforme a las más modernas
tecnologías (edificios inteligentes) Generalmente diseñados por arquitectos de renombre
internacional.
Hoteles de lujo y gran lujo y conjuntos para la celebración de ferias internacionales
conferencias y grandes eventos.
Nuevas configuraciones para el esparcimiento que corresponden a modalidades asociadas a
productos vinculados a las nuevas tecnologías especialmente en el campo de la electrónica es
el caso de los complejos integrados de salas cinematográficas.

CONCLUSIONES
Cómo podríamos caracterizar a la metrópoli emergente latinoamericana.
La misma aparece como el producto de la consolidación de una dinámica reticulada que le
impone un nuevo papel en una red mundial de ciudades en competencia y establece las bases
para la recuperación de su crecimiento económico. De esa dinámica emerge una aglomeración
que sin haber perdido totalmente sus raíces me su identidad específica resulta invadida por un
conjunto de tendencias artefactos monumentos símbolos que pueden considerarse como
congénitos a esta nueva fase de desarrollo capitalista. Sujeta esos cambios la ciudad de la
globalización es ante todo Una ciudad polarizada y segregada. Una polarización social
asociada de la existencia de amplios sectores que no logran insertarse en unos mercados de
trabajo estructurados en función de la competitividad junto a otros grupos para los que la
acumulación de riqueza parecen encontrar límites de esta manera se imponen nuevas
modalidades de segregación y exclusión socio territorial donde tiende a agudizarse en forma
imprevisible la conflictividad social.

“La metamorfosis del sistema de asentamiento de la Argentina desde 1950. “ de


Vapñarsry.

Urbanización
La aglomeración hace referencia a un punto de concentración. Se produce de dos maneras: por
multiplicación de puntos de concentración y por aumento de tamaño de puntos de concentración
específicos. El punto de concentración de población se lo llama localidad, siendo esta, una
concentración espacial de edificios vinculados entre sí por una red de calles: es una
aglomeración. La población censada en aglomeraciones se llamara población aglomerada. Pero
las aglomeraciones solo son pequeñas manchas salpicadas aquí y allá sobre el territorio nacional.
La inmensa superficie restante se llamara campo abierto y población dispersa la censada en el
campo abierto.
Sistema Nacional de asentamiento: conjunto articulado de las aglomeraciones y el campo abierto
de todo el país.
Crecimiento urbano: que variación absoluta experimento la población aglomerada.
Crecimiento urbano diferencial: variación absoluta que experimento la población de cada uno de
diversos tramos de población de aglomeraciones.
Términos que pueden caracterizar a un asentamiento:

Primacía: cuando la población de la aglomeración primate, la mayor de todas, supera por lejos la
de la que inmediatamente le sigue en orden decreciente de población (supera casi en más del
doble). Es decir, conocida como la preponderancia demográfica y económica que la primera
ciudad de un país tiende a poseer con respecto a su propia red urbana nacional. La primacía
crece de forma casi ininterrumpida hasta alcanzar un tope a partir del cual se estanca y comienza
a descender.

Macrocefalia: cuando la población de la mayor de todas las aglomeraciones es mayor que la


población conjunta de las demás aglomeraciones que alcanzan o superan cierto umbral. Este
último se fijó en 50.000 habitantes. Excepto las aglomeraciones primates, las aglomeraciones que
lo alcanzan o superan se llamaran aglomeraciones de tamaño intermedio.

En geopolítica se le llama macrocefalia a la tendencia, en muchos países, a la concentración del


poder político, económico y la administración en la ciudad capital por lo general.

La macrocefalia es un fenómeno que se da en los países cuya red urbana está muy
desequilibrada por el predominio de una gran ciudad que concentra a gran parte de la población
urbana. Algunos ejemplos son: Buenos Aires, Argentina; Montevideo, Uruguay;
Caracas, Venezuela; Lima, Perú.

Categorías de aglomeración:
1) Población dispersa y en aglomeraciones de menos de 50.000 habitantes.
2) Población en aglomeraciones de tamaño intermedio (ATis). Las que mas septuplicaron su
pobacion fueron: San Ramon de la Nueva Oran, Fromosa.
3) Población en la aglomeración primate, Gran Buenos Aires.

Cohorte: conjunto de aglomeraciones. (1ro Buenos Aires, luego Gran Córdoba y Gran Rosario).
Consecuencias de las metamorfosis:

+ha disminuido la distancia promedio entre la residencia de cada habitante del país y algún centro
potencial de servicios especializados que requieren la presencia del usuario en persona.

+Ha disminuido la distancia promedio entre la residencia de cada habitante del país y algún
mercado potencial de trabajo marcadamente diversificado.

+Ha proliferado el número de centros potenciales de distribución de bienes de consumo masivo


hasta abarcar en sus áreas de influencia inmediata casi toda la población nacional.

El sistema argentino de asentamiento sigue y seguirá siendo un sistema de altísima primacía.


Pero tiende a ser cada vez menos un sistema macrocéfalico.

“Etapas de modernización y diferenciación socioterirtorial en la Argentina” de Gomez


Lende y Guilermo Velazquez
Antes de haber surgido como Estado Nacional, la tendencia a la concentración de actividades en
la región pampeana, planteo un proceso de desigualdad en la distribución de la población y las
actividades económicas.
Paralelamente existe un incremento de la participación relativa, de la cantidad y de la distribución
regional de las Aglomeraciones de Tipo Intermedio en los tres últimos periodos intermensuales
(1970-2001). Históricamente esta categoría comprendida ciudades entre 50.000 y 1.000.000 de
habitantes pero, desde 1991, Córdoba y Rosario han superado ese límite y la mayoría de los
autores sigue considerándolas intermedias.
La población rural agrupada (residente en localidades de menos de 2000 habitantes) y la
población dispersa (la residente en campo abierto) es la siguiente: la población rural agrupada
tiende a disminuir, mientras que la población rural dispersa se mantiene más constante, llegando
incluso a verificarse procesos d emigración de retorno o de revalorización de los espacios rurales.
Población dispersa y aglomerada: disminuye la población aglomerada y la de pueblos grandes
(2.000 a 20.000), mientras que la población rural dispersa permanece más estable. Ello se debe
al carácter históricamente despoblador de la actividad agropecuaria y a los efectos demográficos
de la oferta de empleo urbano.
En cambio la población de ciudades pequeñas (20.000 a 50.000) aumenta.
Ciudades medias (incorporaciones desde abajo, ciudades pequeñas que logran superar los
50.000 habitantes. Entro de este grupo crecieron las ATis.
Disminución de la proporción relativa de población del Gran Buenos Aires a partir de mediados de
los setenta.
Esta dinámica se asocia con:
1) Los efectos negativos del modelo de exclusión profundizado, precisamente desde
mediados de los setenta.
2) Deseconomias de aglomeración, particularmente a lo que respecta a la provisión de
servicios.
3) Las cuestiones vinculadas con la calidad de vida (costo prohibitivo de vivienda,
revalorización de lo natural, sensación de alienación e inseguridad.

El sistema urbano argentino en 1947 reflejaba la configuración espacial propia de la etapa


agroexportadora, con predominio absoluto de la región pampeana y participación minoritaria
de las economías regionales tradicionales. Más de la mitad de las ciudades medias y grandes
se localizaba en la región y ninguna en la Patagonia a pesar de los casi 70 años transcurridos
desde campaña militar contra los indígenas.
El sistema urbano en 2001 muestra una situación bastante diferente, ya que las 63 ATIS se
encuentran mucho más distribuidas entre las diferentes regiones argentinas. Si bien el área
pampeana sigue concentrando la mitad de las ciudades intermedias y grandes, por primera
vez todas las provincias argentinas cuentan con ciudades intermedias.
El mayor crecimiento relativo de las ATIs estuvo vinculado con regresiones económicas. Sin
pretender cuestionar este hecho, creemos que debe además indagarse en otras posibilidades
como las deseconomias de aglomeración, la propensión a migrar por motivos no laborales y
las tendencias estructurales de la población argentina.
Como sostienen los estudios urbanos clásicos, la aglomeración de población tiene inicialmente
efectos positivos al establecer un umbral de mercado que hace posible la aparición de nuevos
paquetes de funciones urbanas.
Pero más allá de cierto punto, el incremento de población no agrega nuevas funciones.
Comienza a generar problemas típicos de las deseconomias de aglomeración (incremento de
bienes inmobiliarios, costos prohibitivos para el suministro de bienes esenciales como el agua
potables) y externalidades negativas (inseguridad urbana, problemas ambientales).
A esto se agrega un sector social que está compuesto por jóvenes familias con tradición
urbana que revaloriza otros aspectos que están más allá de lo estrictamente laboral o
económico a la hora de decidir o redefinir su lugar de residencia. Hay grupos que optan por la
nueva mercancía: los countries y barrios cerrados, mientras que otros que lo hacen por
ciudades intermedias.
A estos se suman también segmentos provenientes de economías regionales deprimidas y de
la población pasiva que también optan por las ciudades intermedias.
A su vez los flujos migratorios son selectivos según edad y sexo. El conocido fenómeno de
expulsión de población en edades activas se combina con la migración de retorno de pasivos
definitivos. Por su parte, la dinámica demográfica argentina global tiene tendencias claras:
disminución de la tasa de crecimiento vegetativo y migratorio, envejecimiento, creciente
feminización de los flujos migratorios. Estas tendencias también podrían contribuir a explicar el
mayor crecimiento relativo de las ATis , ya que a disminución del crecimiento vegetativo
implico también cierta merma en las diferencias de fecundidad rural-urbana. La retracción de
la dinámica migratoria argentina entre 1991 y 2001 tenga mayor efecto en las grandes
ciudades.
La combinación de deseconomias de aglomeración, propensión a migrar por motivos no
laborales, y las tendencias estructurales de la población argentina, además de contribuir al
mayor crecimiento relativo de las AtIs, de como resultado cierto proceso de redistribución
interprovincial de población.
Con el nuevo sistema urbano la población que tienen mayores posibilidades de obtener a
menor distancia los bienes o servicios que requiera. También, en el marco de devaluación de
las credenciales educativas disminuyo considerablemente la distancia promedio a recorrer
para acceder a servicios más especializados; todos ellos, en un marco de profundo
distanciamiento entre diferentes grupos sociales, evidenciando el proceso de fragmentación
social del territorio argentino.
El mayor crecimiento relativo de las ciudades intermedias no implica necesariamente mejoras
en la calidad de vida de la población, más bien vino paralelamente con la aparición de nuevos
fenómenos tales como: la privatización de espacios públicos, la coexistencia de villas miseria y
countries privados, la utilización de recursos públicos para los sectores de privilegio o el
incremento de la inseguridad urbana, que antes eran fenómenos típicos de grandes ciudades
y ahora proliferan también es escalas urbanas intermedias.
Etapas de modernización y diferenciación socio territorial en Argentina:
Según Rofman y Romero (1997) consideran que las etapas que estructuran el sistema
socioeconómico argentino pueden iniciarse en una época anterior al surgimiento de la
organización del Estado Nacional y con apertura del país al mercado mundial.
Etapa Altoperuana (siglos XVI-XVIII): Etapa colonial y compacta vinculada con la conquista
europea, la llegada de las primeras lógicas extractivas, el reinado del mercantilismo del viejo
mundo como variable motora y la explotación de metales preciosos (oro y plata) en el nuevo
mundo. Los conquistadores europeos, debieron arrasar con las poblaciones, culturas y
técnicas nativas para preparar a los territorios americanos para el ejercicio de una nueva
función productiva ligada al comercio mundial y a una división internacional del trabajo. Las
civilizaciones americanas preexistentes a la llegada de las expediciones europeas no
coincidían con diversos objetos técnicos. El trabajo era asignado en distintas fracciones del
territorio en virtud de su dependencia con el entorno. Despojados de la racionalidad del cálculo
y el lucro, la esencias del modo de existencias de las sociedades y territorios nativos
preexistentes a la llegada de los conquistadores europeos, era un orden vital perpetuado
durante siglos y milenios, animado por el afán de la supervivencia. Con la llegada de los
invasores, en las ciudades, poblados, aldeas, las epidemias arrasaron con ellas. Posterior a las
conquistas, la fundación y localización de las ciudades no revestían una naturaleza azarosa,
sino que se hallaba subordinada a normas estipuladas “Leyes de Indias” (diseño de trama
urbana en plano regular o tablero ajedrez). En el caso de Buenos Aires, su puerto se mostraba
como un medio estratégico para los nuevos circuitos mercantiles, transformando a esa aldea
en una ciudad portuaria.
La Argentina criolla (1776-1860): La época tiene como manifestación espacial el
posicionamiento del espacio pampeano como centro de las actividades comerciales y de las
inversiones; por su parte algunas áreas del interior del país se comportaron como economías
de aglomeración, en tanto productoras y abastecedoras de artículos de especificidad regional
demandadas por el mercado mundial. En esta etapa se independiza el país y re organiza el
territorio. En Argentina, la sociedad y el territorio se transformaron significativamente para
responder con rapidez y eficacia a las exigencias de la revolución industrial europea y las
ambiciones expansionistas de Gran Bretaña. La consecuente independencia (del Virreinato Del
Río de la Plata) de la Confederación de Provincias trajo una nueva división interna del trabajo
que implicaría cierta prosperidad para el Litoral generando la decadencia y devastación de las
economías del interior del país. Las innovaciones técnicas desarrolladas en los países
centrales, las nuevas demandas británicas, las especializaciones productivas, las
inmigraciones europeas, la finalización de la conquista de la totalidad del territorio
sudamericano argentino y la unificación del Estado nacional, fueron las líneas fundamentales
de la organización y reproducción de la sociedad y el territorio argentino. Se da la
concentración de población, inversiones e infraestructura en Buenos Aires.
Modelo Agro exportador (1860-1930): La aceleración de la producción industrial en los
países de Europa occidental y EE. UU generó la organización de la economía mundial
incorporando el sistema capitalista distintas áreas de la periferia sobre la base de la
especialización funcional. Se produjo un proyecto de reorganización territorial y dinámica social
que generaría la difusión del discurso de la modernización, ligado al imperio de la “civilización”
y el fin de la “barbarie”. La construcción de la red ferroviaria (trazada en abanico, con centro en
Buenos Aires) resultó un elemento fundamental en el proceso de conformación de pueblos y
ciudades en las provincias de: Buenos Aires, Córdoba, Santa Fé y La Pampa. Este período
coexistió en el desequilibrio ecológico-demográfico que se manifestó en un rápido crecimiento
poblacional de los núcleos del sistema urbano regional que actuaron como ejes de vinculación
con el resto del mundo. La modernización y expansión de los ferrocarriles y la supresión de las
aduanas provinciales, permitían que esas importaciones fluyeran libremente hacia el interior del
país, pero el modelo exigía también la producción y renovación de la materialidad del territorio.
Grandes inversiones en puertos, ferrocarriles y comercio.
Proceso de Sustitución de Importaciones (1930-1976): Afectó a la estructura económica
argentina que respondió con distintas estrategias fruto del efecto acumulador del período
anterior. Simultáneamente se dió un nuevo impulso a la actividad industrial. El crecimiento
urbano alcanzó su punto máximo en el área suburbana del Gran Buenos Aires, producto de los
factores de localización favorables y además por la fuerte intervención del Estado en el
proceso de inversiones. La consecuencia de la metropolización en las que las ciudades del
sistema nacional se ven afectadas por el proceso de desequilibrio re distribucional de la
población. Máximo nivel de primacía.
La principal innovación de la historia mundial de la época objetivada en el país fue
organizacional: la reestructuración del Estado nacional, gracias a la emergencia del Estado
populista como nuevo régimen de gobierno, verdadera ruptura institucional de la dinámica de
acumulación capitalista a escala mundial y nacional.
La industrialización aceleró el proceso de migraciones internas: grandes masas de población
rural, empujada por la crisis agrícola, se volcaron hacía los centros industriales. El país
comenzaba a abandonar sus rasgos rurales, para dar lugar, a la existencia urbana. En 1947 el
62 % de la población era urbana, el conurbano bonaerense concentraba el 49,7 % de los
movimientos migratorios totales del país; y en el mismo año contaba con un tercio de la
población argentina. El Gran Buenos Aires recibió entre el ‘47 y el ‘70 un contingente migratorio
superior a los 2 millones de personas. El Estado aseguraba la perpetuación de esos flujos
migratorios.
En 1955, se produce un Golpe de Estado que aplica medidas de estabilización monetaria,
restricciones salariales y reducción del gasto público; promoviendo el ingreso de Argentina al
FMI y Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento. Las migraciones internas y la
reestructuración del sistema urbano no se detuvieron, sino que se exacerbaron durante los
años ‘50 y ‘60. Se retroalimentaba la hegemonía del Gran Buenos Aires, en tanto centro
urbano univoco a escala nacional. El conurbano se constituía nuevamente en el centro de
poder del país, concentrando los excedentes, centralizando las decisiones y acaparando los
recursos materiales e inmateriales disponibles.
A partir del Golpe de Estado de marzo de 1976, comienza una etapa de apertura de la
economía, centrada en la especulación financiera, el protagonismo destacado del mercado y
una retracción del rol institucional del Estado. La instauración de la dictadura, significó una
envión decisiva al movimiento de destrucción con caídas muy marcadas en los salarios reales.
Se trató de cambios cualitativos y cuantitativos, dejando lugar a la reconversión especulativa
de la élite económica local, el ingreso masivo de empresas extranjeras, un nuevo ciclo de
endeudamiento externo acelerado y una mayor degradación industrial.
Era de la modernización excluyente (1976-2005): el retorno al régimen democrático en
1983 inicia un período histórico diferente poniendo fin a la alternancia de gobiernos civiles y
militares. A partir de 1990 el modelo neoliberal se consolidó durante toda la década. La política
económica se caracteriza por la apertura del mercado interno, la desregulación del mercado
favorecida por un tipo de cambio sobrevaluado, las privatizaciones de los servicios e
infraestructuras públicas, la incorporación de inversiones extranjeras directas con altos niveles
de rentabilidad en la explotación de los recursos naturales, los hidrocarburos, las
telecomunicaciones, el sector automotriz y el sector financiero.
El ajuste estructural tiene una estrategia selectiva en distintos lugares y regiones. Así los
espacios y sectores económicos “adaptables” al modelo verán con rapidez los beneficios de la
privatización, del abandono del rol protector del Estado y de la apertura financiera. Por otro
lado el mayoritario sector de los “no adaptados” contribuyó al engrosamiento de la pobreza en
Argentina. El crecimiento de las ciudades del interior del país se produjo a partir de los años
80. La carga poblacional del Gran Buenos Aires, sumada a los altos índices de pobreza urbana
generó un proceso de redistribución que dirigió a la población hacía ciudades del interior.
Disminuye la macrocefalia.
Algunas políticas como por ejemplo, las leyes de Promoción Industrial, fomentaron la
desconcentración y alimentaron aún más el proceso distributivo. Las ciudades intermedias
empiezan a replicar los procesos de las ciudades metropolitanas.

“El caso de la ciudad intermedia” de Beatriz Cossio.


La Ciudad de santa rosa se funda el 22 de abril de 1892 y su designación del capital es
APRTIR DE 1900.Se ubica en una franja de transición entre la zona subhúmeda y la árida y
entre ellos relieves planos de la llanura y LAS ondulaciones DE LOS valles. La isohieta de 500
ml. Delimita as áreas donde es posible la agricultura de secano.
El emplazamiento
El emplazamiento estuvo ligado al medio físico y ha ejercido una considerable influencia en
la expansión horizontal en la superficie edificada. La ciudad ocupa parte de una cuenca
centrípeta que tiene su nivel de base en la laguna don tomas hacia donde drenan las aguas
pluviales del área circundante.
Las mayores alturas se encuentran en el este con dos pequeñas mesetas relituales ubicadas
a 200 mts sobre nivel del mar. Este borde elevado se observa también al norte, con alturas de
hasta 195 mts. Alrededor del hospital. Desde aquí el relieve desciende hacia el oeste y el sur.
El sector sudoeste es la zona más baja y menos ondulada.
La ocupación efectiva del área se inicia a fines del siglo 19 luego de la campaña al desierto.
En el cruce de los caminos que comunicaban los pueblos entre si y buenos aires se va a fundar
sata rosa en el camino que conecta buenos aires-toay en el cruce de caminos de las actuales
rutas nacionales 35 y 5.
El área urbanizada de la ciudad ha adoptado de forma tentacular, siguiendo los trazados de
las rutas 35 y 5.
La edificación urbana es en su mayoría de tipología moderna si bien existen numerosos
edificios de interés histórico o arquitectónico que merecen ser preservados.
La consolidación como ciudad intermedia
El proceso de crecimiento acelerado de la población tiene dos hitos fundamentales: con la
llegada de los inmigrantes en las primeras décadas del siglo 20 y con la provincialización en
1951 cuando santa rosa se convierte en la capital de la provincia de la pampa. Esto provoca el
fortalecimiento de la función administrativa, generación de empleos y un incentivo para la
llegada de pobladores.
A partir de la década de los años 70 y especialmente n los 80 antes un alto grado de
mecanización de las tareas y una estructura agraria cristalizada, muchos pobladores del
campo emigraron a las ciudades.
Impacto reciente de los movimientos territoriales
La ciudad también recibió inmigración extra provincial especialmente en la década del 80,
procedente del sur mendocino y de las áreas inundadas del oeste bonaerense.
El primer caso fue una crisis en el sector vitivinícola, en el segundo inundaciones provocadas
por el desborde del rio 5.
En la década de los 90 a la actualidad el proceso de crecimiento de la ciudad disminuyo su
ritmo, aun mucho más que el de la provincia.
En la estructura del empleo tiene una neta preponderancia el sector terciario, hay un
insuficiente desarrollo industrial y una escasa participación del sector primario. Esto nos indica
el carácter del sector del centro urbano por ser asiento del gobierno provincial.
En sus orígenes queda delimitada e área central ocupada por residencias y comercios pero
paulatinamente se orientara hacia la especialización comercial.
ACITVIDAD ECONOMICA Y EMPLEO EN LA CIUDAD
Desde sus orígenes la actividad económica de santa rosa estuvo ligada al desarrollo de la
agricultura y la ganadería, al sector servicios y a la pequeña industria.
En 1974 el desarrollo del sector terciario.
Hacia 1920 la división producida por el ferrocarril se hará notoria a partir de este momento
por 2 razones: hacia el sur se concentraran los comercios principales, las instituciones
administrativas, culturales, hacia el norte recién comienza a edificarse. La ubicación de la
estación de pasajeros en el sector sur y los galpones de carga y embarcadero al norte y al
oeste, definen dos formas de vida a las que responde dos categorías de comercio; a partir de
la estación sobre la calle Pellegrini, se encuentran los hoteles adecuados a la época para servir
a los viajeros y al núcleo social de mayores recursos económicos. Hacia el norte, galpones y
corrales asociados a la presencia d bolseros entonces la infraestructura comercial se adapta a
las exigencias de estos trabajadores: fondas, boliches y almacenes se instalaban sobre la calle
primera de mayo.
El área central se fue consolidando con la especialización DEL SSECTOR COMERCIAL,
mientras que al norte y al oeste de las vías férreas, se ha desarrollado como área residencial
par sectores medio y bajos. Factores como el pautado, al que se agregaron después al
deterioro natural a raíz de las presencia de la laguna don tomas, las piletas de tratamiento de
líquidos cloacales, el basurero municipal y la carencia general de agua de buena calidad han
generado el bajo costo de la tierra lo que a su vez a traído a los sectores sociales de menores
recursos económicos.
En 1920-1930 cuando ya se insinuaban estas características los sectores sociales altos de la
ciudad buscaran para su residencia el área opuesta, como el barrio parque fite.
El continuo proceso de urbanización complejiza la estructura socio económico potenciando
un estrato de clase media que depende fundamentalmente del desarrollo del sector terciario, la
que va ocupando distintas zonas de la ciudad: villa Alonso, villa Santillán, colonia Escalante.
Estas características se refuerzan además con la provincialización que estimuló el desarrollo
del sector servicios, la aparición de una clase media alta ligada a él, constituida por
profesionales, funcionarios y comerciantes. Estos elegirán para su residencia los alrededores
del centro cívico, finalizando en la primera mitad de la década del 60.
Con la instalación de algunas grandes industrias, aparece en forma muy incipiente el obrero
de fábrica que se asienta en distintos puntos de la trama urbana, la construcción de barrios
obreros que generalmente se implantan alrededor de las fábricas o zonas industriales.
La desocupación muestra valores significativos más bajos que los del país y la región. La
explicación es sencilla: en mayor porcentaje de ocupados tienen un empleo estable en algún
organismo de la administración pública lo que genere una mayor estabilidad en las condiciones
del empleo.
EL CRECIMIENTO URBANO
El crecimiento urbano trae como resultado un desborde de la superficie urbana siguiendo los
trazados de las rutas nacionales 35 y 5.ello también ha sido provocado por los límites y
barreras tanto naturales como artificiales, que restringen y condicionan su expansión
fundamentalmente en los sectores noreste, sur y oeste. Tales condiciones son por ejemplo: el
aeropuerto al norte,la colonia penal y la estación de cargas del ferrocarril al nor este; el parque
industrial al sur y el basurero, las piletas de tratamiento de líquidos cloacales y la laguna don
tomas al oeste.
INFRAESTRUCTURA Y SERVICIO
El crecimiento del área urbanizada ha sido acompañada por una cobertura de servicios y
equipamientos: red de agua potable, cloacas, gas natural, pavimento, alumbrado público,
recolección de residuos.ad3mas de un equipamiento en los ámbitos educativos, sanitario,
recreativo, transporte y comunicaciones comercial E INDRUSTRIAL.
La presencia de la universidad nacional de la pampa también influye en la urbanización, que
atrae no solamente a numerosos estudiantes del interior de la provincia y de provincias
vecinas, sino también numerosos docente y profesionales del medio, de la provincia de todo el
país.
La situación estratégica en virtud de su localización central Y DE EXCELENTE
CONETIVIADD con el resto del país, que la convierten en un sitio privilegiado para la
realización de eventos nivel nacional e internacional, congresos, reuniones académicas y de
carácter científico.
Desde el punto de vista demográfico presenta algunas condiciones características de las
ciudades intermedias definidas por su función, su posición y su relación con el territorio
circundante.
Así mismo y sobre todo en los últimos años comienza a evidenciar procesos de la
globalización: áreas concentradas, sub urbanización y la fuerte presencia de barrios de
viviendas colectivas asociados a la demanda permanente.

Ciudad y desarrollo urbano de Andrés Precedo Ledo


Si en la etapa industrial se asumía que no existía una relación biunívoca entre la dimensión
del centro y la posición en el sistema de ciudades, y que la posición relativa estaba
determinada por las funciones que desempeñaba cada ciudad, y no solo por el tamaño
demográfico, o del mercado de trabajo.
LA CIUDAD Y LAS REDES URBANAS
Toda red urbana está formada por un conjunto de nodos o unidades locales, entre los que
las interacciones son más intensas que con cualesquiera otros centros. Entre los nodos se
establecían relaciones de intercambio basadas en la complementariedad de las funciones, pero
ahora el factor determinante no es como antes no es como antes era la posición de rango de
cada centro, sino que viene determinado por el tipo de actividad, el tipo de empresas y sus
relaciones y la especialización y la especialización y funciones de la ciudad dentro de la red.
El papel década ciudad en la red dependerá de su capacidad para alcanzar la masa crítica
necesaria que le permita competir en los mercados de esa red.
Otro factor decisivo para la articulación de la red era y sigue siendo su conectividad interna,
han de producirse dos hechos. En primer lugar, que la especialización de cada ciudad
favorezca la complementariedad de sus funciones con las de otras ciudades de la red; y en
segundo lugar, que exista una red de transporte y comunicaciones que mantenga las
intercambios horizontales dentro de la red. Este segundo aspecto, la accesibilidad interna, es
uno de los factores que ha experimentado mayores transformaciones.
Por otro lado, la apertura del espacio ha generado la ruptura del modelo de redes nacionales
o regoi2nalese, en el que cada ciudad desesmpeñaba un papel bien definido, dentro de una
malla territorial estable y con limites fijos, para ser sustituido por un sistema internacional de
ciudades, que engloba a un nuevo orden relacional formado por multiplicidad de
combinaciones, derivadas de las redes urbanas que organizaban los subsistemas de la etapa
anterior. En este nuevo marco, cada ciudad puede estar vinculada a varias redes urbanas,
mediante relaciones de diferente tipo, ya sea porque pertenecen a ámbitos distintos, ya sea
debido a la existencia de flujos diferenciados. Así, junto a las redes de carácter local, un mismo
centro2 puede formar parte de las redes de carácter internacional, y por otro lado, las
relaciones que antes se establecían entre los centros urbanos de la red.
Esta diversidad de situaciones de carácter múltiple de las relaciones dio lugar al predominio
de los modelos reticulares de relaciones complejas, en los que las redes especializadas se
superponen unas a otras en un espacio multifuncional. Cada ciudad se inserta, a la vez, en
varias redes y en cada una posee un rango y una posición diferente. Pues bien, la
adicionalidad de esas posiciones diferencian a unas ciudades de otras, estableciendo
nuevamente una diferenciación jerárquica entre ellas, siendo la suma de inserción lo que
determinara el rango urbano.
La formación de estas redes se ve aún mas forzada por el desarrollo creciente de las
relaciones internacionales entre centros urbanos de pequeñas y medianas dimensiones. Es
este un fenómeno que se ira acrecentando, favorecido por le desarrollo de las
telecomunicaciones y la internacionalización de la economía y de la información.
Secuencia evolutiva simple de este proceso:
1) Etapa del modelo clásico: En la etapa en la que predominaban los intercambios y las
relaciones eran de ámbito local o regional, los centros de mayor rango ofrecían las
funciones más especializadas a los de rango inferior, generando flujos de interdependencia
y complementariedad verticales. Cada ciudad tenía una posición dentro de una red
netamente definida.

2) Etapa industrial: numerosas modificaciones en las estructuras productivas, en los costes


del transporte, en la dinámica demográfica, en los niveles de renta y en la especialización
funcional de las ciudades introdujeron una primera flexibilización del modelo. Según la
evolución del área de mercado, cada ciudad ascendía o descendía en su rango, de
acuerdo con las modificaciones de su entorno. Pero los flujos y las relaciones seguían
siendo verticales. El modelo de R. Par es el más ilustrativo de esta dinámica.
3) Sistema horizontal de redes: A. Pred, con su modelo de relaciones intermetropolitanas,
introdujo un primer avance explicativo de la sustitución de las relaciones verticales por las
horizontales, pero solo en los niveles altos de la jerarquía: los metropolitanos. Ahora, la
flexibilización de la distancia hace posible que también las pequeñas y medianas ciudades
establezcan flujos horizontales entre ellas, formándose así un sistema horizontal de redes,
con funciones y tamaños diversos que se superponen, aunque no lo anulen del todo, al
sistema de lugares.

LA JERARQUÍA EN REDES
La reorganización del sistema urbano tiene su plasmación en el modelo de jerarquía de
redes propuesto por G. Dematteis, quien diferencia inicialmente dos tipos básicos y un tercero
derivado, ambos conectados a través de relaciones horizontales y que son:
A) Las redes de complementariedad: están formadas por centros especializados y
complementarios, interconectados a través de un conjunto de relaciones input-output y de
mercado.
B) Las redes sinérgicas, constituidas por centros funcionalmente similares que tienen
relaciones de cooperación con mercados integrados a través de infraestructuras avanzadas de
telecomunicaciones.
Dentro de esta categoría se incluyen también las redes de innovación, formadas por centros
que cooperan, en nuevos proyectos de infraestructura o productivos, con el fin de alcanzar una
masa crítica.(por ejemplo), acuerdos de cooperación para la construcción de aeropuertos, tren
de alta velocidad, servicios tecnológicos y culturales).
Estas redes de ciudades constituyen, por tanto, un sistema abierto predominantemente
horizontal. Las nuevas de ciudades generan nuevas externalidades o economías de
especialización, de complementariedad, de cooperación y de innovación.
A la jerarquía de lugares, debe añadirse una realidad nueva: la jerarquía de redes. Según la
mayoría de los estudios se organiza en tres niveles:
+La red de las ciudades mundiales: que desempeñan todas las funciones, y compiten a
través de redes de transporte y comunicación avanzadas.
+La red de las ciudades nacionales especializadas: entre las que tienen lugar las relaciones
de input-output , intercambio de tecnología y de comercialización.
+La red de las ciudades regionales especializadas: unidos por el mismo tipo de relaciones de
cooperación.
Una importante consecuencia es que bajo esta perspectiva, la economía de los centros
urbanos ya no está determinada tan solo por su función de oferta de bienes y servicios
dirigidos a la población de sus respectivas aéreas de influencia, sino que, cada vez más, la
ciudad desempeña una función derivada de su modalidad en una red internacional de flujos en
un mercado abierto.
Cada ciudad y cada territorio tendera a diferenciarse de los demás por la forma en que
organice los flujos de relaciones y los flujos de información y de servicios, que vincularan entre
sí a centros urbanos de diversas dimensiones. Son esos flujos los que determinan las
características de cada red y condicionan el papel de cada ciudad.
Las estrategias de inserción aportan, de este modo, una nueva dimensión al modelo
productivo de planificación estratégica.
CIUDADES COMO REDES Y COMO LUGARES.
El geógrafo italiano Dematteis sostenía que cada ciudad puede ser pensada como un
conjunto de nodos internos diferenciados pertenecientes a diversas redes. De esta forma, cada
ciudad es una suma de nodos pertenecientes a distintos sistemas, en los cuales se integra a
través de las relaciones horizontales correspondientes, pero a la vez cada uno de ellos
mantiene relaciones verticales diversas de ámbito local o regional.
Es la especialización funcional de los nodos lo que permite a la ciudad integrarse en la red
urbana exterior. Entonces, la red urbana aparece como una red interna de nodos
especializados.
En este contexto se pueden distinguir otros tres tipos de redes:
A) Redes jerárquicas monocentricas: se trata de redes con base espacial o territorial. Son
propias de regiones de componente rural o con un bajo nivel de urbanización. Cada nodo
funcional mantiene relaciones de dependencia y subordinación con el nodo central, y en
base a esos flujos se organizaba una red jerárquica predeterminada por la propia
estructura espacial.
B) Redes multipolares: están formadas por nodos locales especializados. Las funciones
urbanas se subdividen entre los diversos nodos de la red. La dinámica de cada nodo es
dirigido por mecanismos circulares acumulativos, propios de los procesos de aglomeración
y de polarización, mientras que a nivel de red no existen situaciones estructurales de
equilibrio. Entre los diversos nodos de la red global se establecen externalidades
sinérgicas basadas principalmente en la complementariedad de las funciones (sistema
circular interconectado).
C) Redes equipotenciales o de indiferencia locacional: las funciones urbanas se subdividen
entre los nodos de manera aleatoria, es decir, sin que intervengan los factores de
distancia, o los procesos de aglomeración-polarización, en la regularización de la
distribución espacial de las funciones urbanas entre los nodos de la red, siendo la
ubicuidad el principio organizativo predominante.
Es un tipo de red teórica, pero que quiere representar la posibilidad de competencia
espacial y de ubicuidad que las nuevas aportaciones tecnológicas y productivas hacen
posible. Se adapta bastante bien a modelos de organización locacional de las
corporaciones multinacionales y permite vislumbrar la vulnerabilidad a que se encuentran
sometidas las ciudades o nodos dependientes de una gran empresa y por ello de las
decisiones de tales organizaciones.

Capitulo “PROCESOS DE DESARROLLO Y REESTRUCTURACION ESPACIAL”


La nueva dinámica territorial
a) La desurbanizacion de los centros urbanos asociada a la suburbanizaciones de las
periferias, motivada por la descentralización de ciertas actividades productivas y
residenciales.
b) La expansión de los flujos de crecimiento hacia espacios no metropolitanos cada vez más
extenso, que están dando lugar a amplios desarrollos megalopolitanos y configuran redes
urbanas policentricas, formadas esencialmente por ciudades pequeñas y áreas rururbanas
y la innovación hacia ciudades medias convertidas en focos difusores de primera o
segunda generación.
c) La desindustrialización de regiones o ciudades especializadas en actividades obsolentes,
que se transformaron en áreas en declieve. Algunas recuperaron su dinamismo mediante
la implantación de modelos estratégicos de reindustrialización y reconversión industrial:
otras abordaron la transformación funcional de su base económica; pero una gran parte de
ellas no logro superar la situación de declive, cuyos efectos afectaron a las áreas
gravitacionales en las que aquellas estaban inscritas.
d) El cambio económico derivado de la tercerización influyo directamente en los ritmos de
crecimiento urbano y en la composición cuantitativa y cualitativa del mercado de trabajo,
afectado, a su vez, por la reestructuracion tecnológica y productiva.
e) La nueva división internacional de las funciones regionales acentuó la importancia de los
espacios de ocio, produciendo en ellos una fase expansiva del crecimiento, e intrudiciendo
nuevos modelos de desarrollo regional relacionados con una oferta cultural y ambiental en
constante revalorización económica.
f) Las regiones rurales, tecnológicamente competitivas o dotadas de algunas ventajas
diferenciales en la estructura de la demanda internacional, generaron un proceso
ascendente de crecimiento, incorporándose al sistema rururbano, donde la expansión del
potencial endógeno actuó como factor de reactivación económica, con notables efectos
multiplicadores en el sistema territorial.

Antes las áreas centrales, regiones centrales o centros estaban constituidos por espacios
dinámicos, casi siempre regiones urbanas cuya característica definitoria era su capacidad de
concentración de los procesos productivos finales, principalmente aquellos derivados de la
industrialización. Por el contrario, los espacios periféricos, o periferias, estaban vinculados a
procesos iniciales, muy a menudo de abastecimiento o primera transformación de los recursos
locales, que hicieron crecer las actividades comerciales, las de transporte e incipientes
sistemas financieros.
TEORÍA DE LA DIFERENCIACIÓN ESPACIAL DEL CRECIMIENTO
Las ventajas comparativas y también las desventajas reactivaron las relaciones dinámicas
interregionales y como suele ocurrir con la implementación de un nuevo ciclo, se rompió la
inerci0a de las fases anteriores, produciéndose una nueva fase de diferenciación espacial o
regional.
Los procesos de diferenciación son ahora más rápidos y los reajustes favorecen más a las
regiones con mayor PDA (potencial de desarrollo adquirido), y una vez que las primeras fases
de cambio están en marcha, los procesos de concentración tienden a consolidarse. Podemos
distinguir tres tipos de procesos de internacionalización de las ventajas comparativas iniciales
del PDA:
(Áreas innovadoras) Las regiones o áreas urbanas generadoras, es decir, aquellas que
primero adoptaron las innovaciones, son las que tienen mayor capacidad para adaptar su
producción al nuevo mercado, porque pueden funcionar como centros innovaodres.
(Áreas adoptivas o imitativas) En un segundo escalón están las áreas y regiones con
estructura favorable a la llegada y adopción de innovaciones, ya sea por imitación y/o por
asimilación de procesos. Se incorporan a las áreas de crecimiento, pero con menor capacidad
de inserción en los circuitos privilegiados.
(Áreas pasivas) En un tercer grupo quedan las zonas que recibieron la innovación
tardíamente, por la existencia de barreras internas a la difusión. Así como en el caso anterior
la adopción imitativa genero ligazones hacia adelante e innovación local, estas se mantienen
en una situación de subordinación o dependencia.

LOS SISTEMAS DE INSERCIÓN


La capacidad de respuesta e integración de un área en los sistemas territoriales avanzados
dependerá del potencial sinérgico de inserción. Esto vendrá dado por la suma del PDA de los
subsistemas funcionales especializados. Son tres los factores básicos: el económico, el
organizativo y el conectivo. A ellos llamamos factores de instalación:
+La base económica urbana o regional: dada la organización del espacio en redes
internacionales especializadas, cada ciudad para alcanzar esa necesaria proyección exterior y
captar nuevos segmentos de mercado, deberá contar con funciones diferenciadas, mediante
la cualificación y especialización de su oferta, y esto tanto en lo que afecta a la producción
como a la distribución.
+La función de organización: es la más específica de las ciudades y está ligada al
dinamismo de los centros locales de decisión, en particular los financieros, políticos y
empresariales. Para su influencia efectiva en los circuitos internacionales deberá existir una
acción integrada.
+La conectividad: teniendo en cuenta el aumento de la interdependencia espacial, derivada
de la existencia de nodos urbanos y regionales heterogéneos, un factor fundamental es el
subsistema de conexión, de naturaleza topológica y que afecta a todos los sistemas de
transporte y comunicación.

EL PROCESO DE URBANIZACIÓN (Nello, Orion y Francesc Muñoz)


La ciudad, como producto social, es ante todo una construcción histórica, que además, tiene
una particularidad; suele conservar en su trazado, en los edificios, en los monumentos,
vestigios de las sociedades periféricas que, habitándola, la han construido.
La ciudad Pre capitalista: la ciudad como forma de asentamiento humano tiene su origen en
la revolución neolítica de la mano de la agricultura, primeras formas de especialización social dl
trabajo. La ciudad surge como la concreción espacial de esta división del trabajo. Las primeras
surgen el tercer milenio A.C en los valles del Tigris y Éufrates., luego a orillas del Mediterráneo
Grecia y Roma, dos civilizaciones que han hecho las bases del sistema urbano europeo. Más
tarde se disuelven los imperios y se inicia el periodo feudal, donde las ciudades europeas
conocerán un nuevo impulso donde el renacimiento será fundamental, “la ciudad es hija del
comercio” (mercados, ferias). En la edad media europea la ciudad mantiene una
interdependencia con el campo que la rodea. En la edad moderna las ciudades eran unidades
compactas encerradas por murallas y fosos que las separan y diferencian.
La ciudad Industrial: los crecimientos de población siempre correspondieron a las ciudades
manufactureras e industriales, progresiva concentración del capital. Las relaciones entre el
proceso de urbanización y el de industrialización tienen que ver no solo con los avances
técnicos sino con la creación de grandes áreas industriales especializadas.
El discurso anti-urbano y la ciudad industrial: siglo XVII se consolida una línea de
pensamiento que entiende la salud como una necesidad colectiva. Las epidemias de cólera en
los centros urbanos, este discurso entiende la ciudad como un lugar de enfermedad y muerte.
Al mismo tiempo se entiende a la ciudad como el lugar del progreso individual de forma
paralela la idealización del campo. Los médicos higienistas serán los primeros gestores
urbanos.
Densidad y mortalidad como primeros atributos de lo urbano: Se llevo a los médicos
higienistas a aterrorizar la ciudad asignando cualidades diferenciales en las distintas áreas y
barrios en función de la calidad del aire. Fue así la construcción de alcantarillado la obra de
ingeniería que contribuyo a las mejora de las condiciones higiénicas en la ciudad. L capacidad
para diluir los residuos y hacer fluir las aguas contaminadas que coincidió con el tiempo de los
descubrimientos de Pasteur y el nacimiento de la microbiología.
El Fordismo y la economía urbana industrial: Introducción de la cadena de montaje a partir
de la cinta transportadora sino en mucha mayor medida el hecho de posibilitar los mismos
obreros que producían los modelos T-Ford, pudieran ser capaces de adquirirlos una vez que
salían de la fábrica. La producción podía trasladarse y localizarse en lugares lejanos o menos
próximos. La misma localización de infraestructuras que posibilita la dispersión favorece la
centralidad.
Cuando lo urbano desbordo la ciudad: Mientras que las actividades más productivas con
altos niveles de tecnología se concentran en núcleos urbanos importantes, los sectores
industriales menos tecnificados, el llamado terciario marginal se localizan en las periferias. La
evolución de las ciudades dl mundo occidental se explica bien si se tiene en cuenta este
binomio centralidad-difusión. Los territorios de la concentración difusa muestran así un mundo
urbano donde estados y grandes ciudades con nuevas organizaciones de poder representando
por conglomerados no necesariamente continuos, capaces de definir políticas, propiciar
cambios y transformar el territorio.
Como consecuencia del proceso de urbanización el territorio se organiza en redes de
relación. Redes espacio-temporales que lo articulan, lo integran y lo conectan con flujos de
alcance continental y mundial.
Cinco tipos de parámetros: el estatuto jurídico, las definiciones morfológicas, los espacios
funcionales, la estructura económica y la jerarquía de los servicios.
El estatuto jurídico: Partiendo de las delimitaciones existentes, se identifica la localidad y en
caso de superar un determinado umbral de población se la considera ciudad.
Definiciones morfológicas: a partir de la interpretación de la cartografía, la fotografía aérea o
la imagen satelital la extensión del espacio construido.
Las áreas funcionales: la movilidad de las personas, el movimiento de las mercancías y los
flujos de información tejen redes sobre el territorio, integrando espacios, que no tienen a
menudo continuidad física. Se pueden delimitar espacios urbanos a partir del estudio de las
redes de relación. Cada función urbana tiene un espacio propio que varía en el tiempo.
La estructura económica: la mecanización de la agricultura y la integración del territorio se ha
comportado en áreas donde antes eran rurales en vastas áreas de servicios, con un porcentaje
bajo de población activa agraria y una ocupación absoluta de la ocupación terciaria.
Los servicios y su jerarquía: Cada función se asocia a un ámbito diverso, de manera que
habría tantas limitaciones posibles como funciones presentes. Hoy el distrito industrial tiende a
ser un espacio urbano extendido sobre el territorio y delimites flexibles. La cuestión sobre los
límites urbanos hoy es una cuestión irresoluble.
La ciudad difusa: efectos positivos; disminución de las densidades en áreas urbanas
centrales y la homogenización en la dotación de lugares de trabajo, equipamientos,
infraestructuras y servicios sobre el territorio. El territorio de la ciudad difusa, además de
conocer nuevas formas de segregación social, presenta nuevos tipos de especialización y
fragmentación funcional. La fragmentación de los espacios urbanos es un gran número de
niveles y unidades administrativas es al mismo tiempo, causa y reflejo de las divisiones
económicas y sociales, esto deriva en dificultades para la financiación, la coordinación
administrativa y el diseño de un planeamiento urbanístico efectivo.
La urbanización y el lugar: la ciudad como producto social en la área global: la aparición de
las llamadas ciudades mundiales se explica por la necesidad de organización y control de esta
economía global sobre centralizada, construida sobre mercados segmentados y mundializados.
Las ciudades globales desarrollan esta nueva función urbana de jerarquía superior, el resto de
los núcleos urbanos participan con una intensidad y condiciones de especialización diversas en
una economía entendida ya a escala trasnacional. Existen múltiples redes de ciudades y
entornos urbanos en función del tipo de actividad económica que se analice es decir la
especialización funcional de la ciudad dependerá de la red o redes concretas que esas ciudad
participe.(Castell y veltz).
Las nuevas formas de movilidad: en su día a día los habitantes habitan los espacios en más
de una ciudad según donde está su lugar de trabajo, su residencia o donde utilizan los
servicios que las ciudades ofrecen.
 Metrópoli de primera generación; un estado inicial en la evolución de las ciudades en el
que los habitantes de la ciudad viven mayoritariamente en la ciudad. La metrópoli de
segunda generación se caracterizara por el crecimiento de esta población pendular y
por la aparición de un tercer tipo de habitante; los visitantes, consumidores o usuarios
de la ciudad, que ni residen ni trabajan en ella. Por último la metrópoli de tercera
generación; aparición de una serie de poblaciones flotantes dedicadas a su uso
intensivo y continuo de áreas muy específicas de la ciudad (negocios, turistas).

 Gentrificación: afecta a precios del suelo y actividades que desaparecen o se


incorporan. Existen también habitantes o residentes de un lugar pero al mismo tiempo
son usuarios de otros lugares y visitantes aun de otras ( habitantes a tiempo parcial)

 Territorios sin discurso, ciudades sin imaginario: Binomios como centro periferia.

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