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LABOR POLICIAL EN LA SOCIEDAD
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único de emergencias que permite a la policía, bomberos o servicios médicos
actuar en caso de emergencia.
Se llama también policía a cada agente perteneciente a dicha organización. Los
reclutas suelen recibir formación especializada y deben presentarse a una
oposición.
La Policía Nacional del Perú es una institución del Estado creada para
garantizar el orden interno, el libre ejercicio de los derechos fundamentales
de las personas y el normal desarrollo de las actividades ciudadanas. Es
profesional y jerarquizada. Sus integrantes representan la ley, el orden y la
seguridad en toda la República y tienen competencia para intervenir en todos
los asuntos que se relacionan con el cumplimiento de sus funciones.
La finalidad fundamental de la Policía Nacional del Perú es garantizar,
mantener y restablecer el orden interno. Presta protección y ayuda a las
personas y a la comunidad. Garantiza el cumplimiento de las leyes y la
seguridad del patrimonio público y privado. Previene, investiga y combate la
delincuencia. Vigila y controla las fronteras.
Son funciones de la Policía Nacional del Perú las siguientes [Ley orgánica de
la PNP]:
a. Mantener la seguridad y tranquilidad públicas para permitir el libre ejercicio
de los derechos fundamentales de la persona consagrados en la
Constitución Política del Perú.
b. Prevenir, combatir, investigar y denunciar los delitos y faltas previstos en el
Código Penal y leyes especiales, perseguibles de oficio; así como aplicar
las sanciones que señale el Código Administrativo de Contravenciones de
Policía.
c. Garantizar la seguridad ciudadana. Capacita en esta materia a las
entidades vecinales organizadas.
d. Brindar protección al niño, al adolescente, al anciano y a la mujer que se
encuentran en situación de riesgo de su libertad e integridad personal,
previniendo las infracciones penales y colaborando en la ejecución de las
medidas socio-educativas correspondientes.
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e. Investigar la desaparición de personas naturales.
f. Garantizar y controlar la libre circulación vehicular y peatonal en la vía
pública y en las carreteras, asegurar el transporte automotor y ferroviario,
investigar y denunciar los accidentes de tránsito, así como llevar los
registros del parque automotor con fines policiales, en coordinación con la
autoridad competente.
g. Intervenir en el transporte aéreo, marítimo, fluvial y lacustre en acciones de
su competencia.
h. Vigilar y controlar las fronteras, así como velar por el cumplimiento de las
disposiciones legales sobre control migratorio de nacionales y extranjeros.
i. Brindar seguridad al Presidente de la República en ejercicio o electo, a los
Jefes de Estado en visita oficial, a los Presidentes de los Poderes Públicos
y de los organismos constitucionalmente autónomos, a los Congresistas de
la República, Ministros de Estado, así como a diplomáticos, dignatarios y
otras personalidades que determine el reglamento de la presente Ley.
j. Cumplir con los mandatos escritos del Poder Judicial, Tribunal
Constitucional, Jurado Nacional de Elecciones, Ministerio Público y de la
Oficina Nacional de Procesos Electorales, en el ejercicio de sus funciones.
k. Participar en la seguridad de los establecimientos penitenciarios, así como
en el traslado de los procesados y sentenciados de conformidad con la ley.
l. Participar en el cumplimiento de las disposiciones relativas a la protección
y conservación de los recursos naturales y del medio ambiente, la
seguridad del patrimonio arqueológico y cultural de la Nación.
m. Velar por la seguridad de los bienes y servicios públicos, en coordinación
con las entidades estatales correspondientes.
n. Participar en la Defensa Nacional, Defensa Civil y en el desarrollo
económico y social del país.
o. Ejercer la identificación de las personas con fines policiales.
p. Ejercer las demás funciones que le señalen la Constitución y las leyes.
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delincuencia mayor, mediante el accionar de las direcciones especializadas; y
el segundo tipo de medidas están centradas a luchar contra la delincuencia
común, a través de la actuación de las unidades territoriales a nivel nacional.
En la práctica, es difícil establecer una línea divisoria que señale con claridad
cuándo un hecho es un delito mayor y cuándo es un delito común. Por lo
general, las unidades operativas de la Policía, sean estas especializadas o
unidades territoriales, en el momento que se presenta un hecho policial
actúan de inmediato. Luego si el hecho amerita, por su gravedad, la
intervención de una unidad especializada, entonces las unidades territoriales
comunican de inmediato para que se hagan cargo de ellas. Mientras tanto, se
encargan de resguardar el lugar para evitar la alteración de la escena del
delito
Como la relación laboral es, de un lado, conflictiva, porque los intereses de los
trabajadores -como individuos y como categoría- son diferentes y a veces
opuestos a los de los empresarios -como individuos y como categoría-, siendo
ambos legítimos, se requiere regulación, para que el conflicto discurra entre los
márgenes del sistema; pero como, de otro lado, es estructuralmente desigual,
porque los trabajadores no tienen poder económico y los empresarios sí, se
requiere que esa regulación sea equilibrada.
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El asunto es que los conflictos laborales deben discurrir entre el respeto entre
ambas partes y la PNP no puede balancear estos conflictos para uno y el otro
lado. El conflicto laboral será resuelto a través de los mecanismos que franquea la
Ley.[4]
LA SUBORDINACIÓN LABORAL DE LOS TRABAJADORES Y LA
SUBORDINACIÓN DE LA POLICÍA A LOS PODERES CONSTITUCIONALES
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empleador no puede trasladarse del empleador hacía el miembro policial. Esa
situación afectaría la institucionalidad policial que custodia todos los bienes
jurídicos y no sólo de algunos.
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la concurrencia reiterada de la conducta y esa calificación constituye una
facultad del empleador y no de la PNP.
Como se puede apreciar en ambos casos lo que hace la policía nacional es
constatar hechos y no está realizando una investigación de carácter laboral por
cuanto esa facultad corresponde enteramente al empleador y no puede ser
delegable ni transferible.
El artículo 31 del Decreto Supremo 003-97-TR expresa que el empleador no
puede despedir al trabajador sin antes otorgarle por escrito un plazo razonable no
menor a 6 días para que pueda defenderse por escrito de los cargos que se le
formulare, salvo aquellos casos de falta grave en que no resulta razonable tal
posibilidad. La facultad central es del empleador que la ejerce por su función de
dirección empresarial y que tiene mecanismos terapéuticos para resolver los
conflictos que desborden esa relación conflictual. Pero dentro de estos márgenes
la PNP no puede jugar un papel de investigación de la falta laboral. Puede
constatar hechos pero no investigar faltas laborales. Es necesario remarcar esta
situación porque no estamos disminuyendo las funciones de la PNP sino la
estamos reconduciendo a sus cauces constitucionales.
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misma de la actividad laboral, como un espacio para desarrollar sus proyectos y
planes de vida, pero además en la posición de sujeción del trabajador frente al
empleador y en la posición propicia de este frente a aquel para causar lesiones a
la dignidad personal.
Además, señala que el examen polígrafo en el ámbito de las relaciones laborales,
en principio constituye una práctica constitucionalmente cuestionable en la
medida en que la invasión del ámbito propio de la persona para la obtención de
determinada información de la que se pueden derivar consecuencia desfavorable
vulnera los derechos fundamentales del trabajador desmejorando su condición
humana. Así, pues, el examen polígrafo no sería admisible, por ejemplo, para
decidir el acceso del empleo, la determinación de una supuesta falta de buena fe
laboral, el despido de un trabajador por la negativa a someterse a dicho examen,
entre otros supuestos.
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Estados. En consecuencia, una de las formas de defender la sociedad es velar
por el mantenimiento de dicho orden, lo cual implica necesariamente la defensa y
el respeto del sistema democrático y de los Derechos Humanos. Es obligación del
Estado y por ende de la Policía proteger los Derechos Humanos y en
determinados casos lo normado en el Derecho Internacional Humanitario,
teniendo en consideración que, en todo Estado democrático, es fundamental que
las transgresiones cometidas por agentes del Estado sean sancionadas de
acuerdo a ley.
En este sentido, aún a pesar de la existencia de una situación de violencia, esta
no puede alterar la obligación de proteger y respetar los Derechos Humanos,
frente a los grupos delictivos que resultan responsables de actos atentatorios
contra el resto de la población, no se puede concebir una respuesta del Estado
que renuncia a su superioridad moral para aplicar procedimientos criminales de
semejante categoría.
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Presta protección y ayuda a las personas y a la comunidad. Garantiza el
cumplimiento de las leyes y la seguridad del patrimonio público y del privado.
Previene, investiga y combate la delincuencia. Vigila y controla las fronteras.,
objetivo que no puede ser logrado fuera del marco de la propia Constitución del
Estado. En consecuencia, una de las formas de defender la sociedad y cumplir
con la finalidad fundamental de la Policía Nacional del Perú es velar por el
mantenimiento de dicho orden, lo cual implica necesariamente la defensa y el
respeto del sistema democrático y de los Derechos Humanos.
La Policía Nacional del Perú, mantendrá el control interno con el apoyo de las
Fuerzas Armadas durante los Estados de Emergencia, Las Fuerzas Armadas
asumen el control del orden interno si así lo dispone el Presidente de la
República.
En situaciones normales, el encargado del mantenimiento del orden interno es la
Policía Nacional. Las Fuerzas Armadas tienen otro rol, el de garantizar la
independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República, y solamente
intervienen en el control del orden interno cuando hay un régimen de excepción y
así lo decide el presidente de la República"
El diario El Peruano publicó la Ley 28222, que señala que "la autoridad política o
policial podrá solicitar la intervención de las Fuerzas Armadas por un plazo no
mayor de 30 días cuando se produzcan actos de terrorismo, actos de violencia
consistentes en atentados, ataques armados a entidades públicas o privadas o
servicios públicos en los que
se utilicen armamentos de guerra o artefactos explosivos o cuando se descubran
elementos suficientes de peligro real o inminente de su perpetración, que
sobrepase la capacidad operativa de la Policía Nacional del Perú; por ejemplo,
que esa interpretación debe resaltar que según la Constitución, la Policía Nacional
es la que asume el control ordinario del orden interno y por ello, ante la invocación
de esta figura de excepción, las Fuerzas Armadas tendrían que subordinarse a las
decisiones de la Policía, aunque la norma no lo especifica. En los casos de grave
alteración del orden público y/o cuando se declaren los estados de excepción
previstos en la Constitución Política del Perú, en cualquier lugar del país, el
personal de la P.N.P., aun encontrándose en uso de licencia, vacaciones, permiso
o comisión, está en la obligación de reincorporarse inmediatamente a la Unidad o
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Subunidad donde presta servicios. Si por causas ajenas a su voluntad se
encontrara imposibilitado de hacerlo, se incorporará a la Unidad o Subunidad de
la jurisdicción en que resida o a la más próxima del lugar en que se encuentre.
CONCLUSIONES
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ignorancia y así garantizar la integridad el derecho a ser libre y a no ser
humillado.
6. Anteriormente he mencionado que la educación es la base para evitar
abusos en nuestro país, existe un alto índice de analfabetos que aceptan
castigos por parte de aquello que consideren superiores que por llevar un
uniforme siempre tienen la razón, hay que educarlos, capacitarlos
para lograr el desarrollo del país.
7. “Hecha la ley hecha la trampa” es una frase que se ha hecho muy cotidiana
en nuestro país, debido a que nuestros legisladores solamente se han
dedicado a copiar las leyes que han tenido éxito en otros países sin tener
en cuenta la realidad social en la cual nos encontramos.
8. Los Regímenes de Excepción en nuestro país son dos; el Estado de
Emergencia y Estado de Sitio, ambos expresan y didácticamente descritos
en el Art. 137° de la Constitución Política del Perú; en él se señalan los
casos por los que se promulgan, qué derechos se restringen o suspenden
(Estado de Emergencia), o cuales no se restringen o suspenden (Estado
de Sitio); el plazo de duración y cómo proceder en caso de prórroga.
9. Durante el periodo Republicano, tomando como base las últimas tres
décadas. A lo largo de la historia nuestro país ha pasado por distintas
formas de gobierno, que, desde el inicio de la época de la República, nos
encontraremos con gobernantes unos más que otros respetuosos de los
derechos humanos, por lo tanto, que cuando se establece formalmente los
Regímenes de Excepción, se producen variadas acciones por parte de la
PNP y por ende del Gobierno que vulneran los derechos humanos.
10. La humanidad ha representado y sigue haciéndolo un proceso de
progresiva afirmación de la dignidad personal. Las luchas sociales en
reclamo de justicia y libertad son expresión de tal proceso, por lo que los
países se ven obligaos establecer medidas específicas, como la
declaración de Regímenes de Excepción, que son utilizados como
instrumento principal para poder lograr los objetivos políticos de cada
gobierno, de acuerdo a su perspectiva particular sobre la ruptura del orden
interno.
11. La Policía es una institución que constitucionalmente se encuentra
concebida para la defensa de la sociedad, objetivo que no puede ser
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logrado fuera del marco de la propia CPP. En consecuencia, una de las
formas de defender la sociedad es velar por el mantenimiento de dicho
orden, lo cual implica necesariamente la defensa y el respeto del sistema
democrático y de los Derechos Humanos. En este sentido, aún a pesar de
la existencia de una situación de violencia, esta no puede alterar la
obligación de proteger y respetar los Derechos Humanos, frente a los
grupos delictivos que resultan responsables de actos atentatorios contra el
resto de la población, no se puede concebir una respuesta del Estado que
renuncia a su superioridad moral para aplicar procedimientos criminales de
semejante categoría.
12. Durante la vigencia de la Constitución de 1979 y 1993, las mismas que han
desarrollado la temática sobre los regímenes de excepción, aún no se ha
registrado alguna ocasión que haya merecido decretarse el Estado de Sitio.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
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