Está en la página 1de 43

El Rey Salomón

En la Biblia(1) se dice del rey Salomón que:

1. Heredó un inmenso imperio conquistado por su padre David


que se extendía desde Nilo en Egipto hasta el río Éufrates en
Mesopotamia (1 Reyes 4:21; Gén. 15:18; Deut. 1:7,11:24; Jos.
1:4; 2 Sam. 8:3; 1 Crón. 18:3).
2. Tenía una gran riqueza y sabiduría (1 Reyes 10:23).
3. Administró su reino a través de un sistema de 12 distritos (1
Reyes 4:7).
4. Poseyó un gran harén, el cual incluía a "la hija del faraón" (1
Reyes 3:1; 1 Reyes 11:1,3; 1 Reyes 9:16).
5. Honró a otros dioses en su vejez (1 Reyes 11:1-2,4-5).
6. Consagró su reinado a grandes proyectos de construcción (1
Reyes 9:15,17-19), incluyendo:
a. el Templo (1 Reyes 6).
b. el Palacio Real (1 Reyes 7:2-12).
c. las murallas de Jerusalén,
d. el Milo (un relleno de tierra hecho para ampliar
Jerusalén) (1 Reyes 11:27)
e. las ciudades reales de Meguido, Hazor, y Gezer
f. las ciudades almacenes, ciudades para sus jinetes y
ciudades para sus carros a lo largo de su imperio.

Para ser consistentes con el modelo de otras culturas de la Edad del Bronce
y de la Edad del Hierro en el antiguo Cercano Oriente (egipcios, babilónicos,
asirios, e hititas), sería de esperar que numerosos documentos, artículos, e
inscripciones en edificios o monumentos públicos hubieran sido dejados por
este gran rey o más tarde por sus descendientes en su honor. (2) Todavía no
se ha encontrado ningún artículo de cualquier clase que lleve su nombre. (3)

Las ciudades de Hazor, Meguido y Gezer han sido excavadas extensamente


hoy en día. Se encontró en cada una de estas ciudades un estrato que
contenía grandes palacios, templos y fortificaciones. No se ha hallado el
nombre de Salomón, pero en cambio sí se ha encontrado el cartucho del
faraón de la XVIII Dinastía Amenhotep III. (4) En Jerusalén no ha sido posible
excavar en el monte del templo, sin embargo, las extensas excavaciones
realizadas en la ciudad, incluso en las áreas adyacentes al monte del templo,
no han revelado la existencia de ningún palacio salomónico. (5) Es más, la
excavación del Millo ha revelado (según la alfarería encontrada en él) que su
construcción original también fue contemporánea del reinado de Amenhotep
III de la XVIII Dinastía egipcia.(6)

Amenhotep III, conocido en tiempos antiguos como el "Rey de Reyes" y


"Señor de Señores,"(7) fue un faraón de la gloriosa XVIII Dinastía de Egipto. Al
igual que Salomón, heredó un inmenso imperio cuya influencia se extendía
literalmente desde el Nilo al Éufrates.(8) En contraste con el imperio de
Salomón, el imperio de Amenhotep es indiscutible. (9) Los edificios,
monumentos, documentos, artículos, y otros numerosos vestigios de su
reinado son universales e incomparables (con la posible excepción de los que
dejó el faraón de la XIX Dinastía, Ramsés II).

El reinado completo de Amenhotep III fue consagrado a la construcción de


monumentos a lo largo de Egipto, Canaán y Siria. (10) Aparte del templo más
glorioso de la antigüedad en Luxor, (11) construyó otros muchos templos de
diseño similar a lo largo de Egipto y en el resto de su imperio, (12) incluso en las
ciudades fortificadas cananeas de Hazor, Meguido, Gezer,(13) Laquis y Bet-
seán.(14)

Según los registros egipcios, el padre de Amenhotep, Thutmosis IV, y su


abuelo Amenhotep II deportaron a unos 80.000 cananeos. Los habitantes
cananeos de Gezer fueron específicamente incluidos en esta deportación. (15)
Fue durante el reinado de Amenhotep III cuando Gezer y otras ciudades
principales de Palestina fueron fortificadas como las guarniciones reales
egipcias, y se las dotó de refinados templos y palacios.

La Biblia dice que durante los días de Salomón, el faraón de Egipto capturó la
ciudad cananea de Gezer y se la regaló a su hija como dote de su matrimonio
con Salomón (1 Reyes 9:16-17).(16)

Era una costumbre obligatoria para Amenhotep III casarse con "la hija del
faraón" para asegurarse el trono.(17) Esto es precisamente lo que hizo cuando
se casó con Sitamon, la hija de su padre, el faraón Thutmosis IV.

La red de ciudades fortificadas de la XVIII Dinastía egipcia también incluía a


Jerusalén. Si las construcciones de Amenhotep III en Gezer, Hazor, Meguido
y otras guarniciones son alguna muestra, entonces Amenhotep
indudablemente edificó un magnífico templo en el venerado Monte del
Templo de Jerusalén.(18) La estructura adyacente al Monte del Templo de
Jerusalén, conocida tradicionalmente como los "establos de Salomón," es
consistente con la arquitectura de las ciudades fortificadas de Amenhotep. (19)
La arqueología también ha confirmado que durante su reinado se guardaron
carros en estas ciudades en grupos de entre treinta a ciento cincuenta cada
uno.(20)

Las antiguas minas de Timna, en el desierto del Neguev, conocidas como las
"minas de Salomón," "son anteriores a Salomón en unos trescientos años
[según la cronología convencional]," (21) datándolas una vez más en los
tiempos de Amenhotep III. Cobre de Timna, oro del Sudán, (22) otros metales
preciosos, joyas y piedra de alta calidad fueron utilizados en gran abundancia
en los templos de Amenhotep, así como en los de Salomón. (23) Una estela del
templo funerario de Amenhotep alardea de que el templo fue "embellecido
por todas partes con oro, su suelo brilla como la plata... con estatuas reales
de granito, de cuarcita y de piedras preciosas." (24) La cantidad de materiales
empleados en otro templo construido por Amenhotep es también "asombrosa:
3,25 toneladas de electro [una aleación de plata y oro], 2,5 toneladas de oro,
924 toneladas de cobre..."(25)
Se dice que la satisfacción más grande del Salomón bíblico fue el reto de
completar sus grandes proyectos (Eclesiastés 2:4-11). Lo mismo se dijo de
Amenhotep III. En un texto egipcio real del periodo se lee, "He aquí que el
corazón de su Majestad estaba satisfecho con la construcción de
monumentos muy grandes, como los cuales nunca se habían hecho realidad
desde las primeras edades de las Dos Tierras." (26) Sólo un rey enormemente
rico de un imperio bastante estable podría construir tan espléndidamente y en
muchos sitios tan distribuidos en la antigüedad. Amenhotep III fue
indiscutiblemente el rey más rico de la antigüedad. La realización de tales
magníficos proyectos requirió el mantenimiento de una considerable y
constante fuente de trabajo y de ingresos que se extendía a lo largo de un
periodo de muchas décadas.

La administración y el sistema de impuestos de Amenhotep con sus 12


distritos(27) es idéntico al de Salomón que se describe en la Biblia (1 Reyes
4:2-7,27; 5:13; 9:23). Amenhotep también se dedicó a redescubrir la
sabiduría, los misterios y las tradiciones de las dinastías egipcias anteriores.
(28)
Se ha establecido una fuerte relación entre los "Proverbios de Salomón"
de la Biblia y las "Máximas de Amenhotep III" encontradas en Egipto. (29)

Además de los proyectos ya mencionados, Amenhotep construyó también un


palacio completamente nuevo en Tebas. La nueva residencia real incluía
todos los elementos contenidos en el palacio de Salomón que se describe en
la Biblia (1 Reyes 7:2-12),(30) a saber:

1.       una casa fabricada casi completamente de cedros del Líbano


(construida para la fiesta del Jubileo de Amenhotep); (31)

2.       una sala de columnas con una terraza en la fachada y rodeado por un
patio de columnas;(32)

3.       un salón del trono construido con muchas columnas de madera y cuyo
suelo era la escena de un lago pintado (idéntico al que cruzó maravillada la
reina de Saba cuando se acercó al trono de Salomón, como se describe en el
Corán);(33)

4.       un palacio separado construido para Sitamon, "la hija del faraón"; (34)

5.       un palacio real (consistente en su propia residencia, la residencia de su


Gran Esposa, Tiye, y una residencia para el harén real). (35)

Amenhotep, como Salomón, fue incansable en la persecución de mujeres


para su harén, especialmente de mujeres extranjeras y hermosas tanto de
origen regio como humilde.(36) El harén de Amenhotep incluía a dos princesas
de Babilonia,(37) dos princesas de Siria, dos princesas de Mitani, y como el
harén de Salomón, incluía a una princesa de cada una de las siete naciones
enumeradas en 1 Reyes 11:1. (38) Como el rey más poderoso de Oriente
Medio, Amenhotep no envió a cambio a ninguna de sus propias hijas a otros
reyes, ni lo hizo ningún otro faraón de esta dinastía (ni probablemente ningún
otro en toda la historia de Egipto). (39) Denegó específicamente una petición
del rey de Babilonia para una esposa egipcia. (40) De forma pretenciosa, la
Biblia da énfasis a la pretendiente egipcia de Salomón, pero no menciona que
Salomón tuviera alguna esposa hebrea. (41) Roboam, del que se dice haber
sucedido a Salomón, fue el hijo de una princesa amonita. (42)

La corte de Amenhotep III era extremadamente liberal, y reflejaba cada


posible exceso de un reinado poderoso y seguro. (43) El erotismo en el arte y
en la vida de la corte alcanzó su plenitud durante el reinado de Amenhotep. (44)
La famosa pintura mural de las "bailarinas desnudas" data del reinado de
Amenhotep.(45) Al igual que Salomón, Amenhotep "no negó a sus ojos
ninguna cosa que desearan" y "apartó su corazón de cualquier placer"
(Eclesiastés 2:10). Sin embargo, los últimos años de los treinta y ocho del
reinado de Amenhotep no fueron agradables. Los largos años de indulgencia
habían pasado factura y tuvo muchas dolencias. Como gesto compasivo, su
cuñado mitani(46) le envió un ídolo de la diosa Ishtar (es decir, Astoret)(1
Reyes 11:5).

La "conclusión ineludible"(47) es que la historia de Salomón fue tomada


después y específicamente de la vida de Amenhotep III. El mismo nombre de
Salomón, que literalmente significa "paz" o "seguridad", apunta a Amenhotep
III, cuyo largo y penetrante reinado en el siglo XIV a. C. no incluyó ninguna
gran campaña militar, pero se caracterizó por una estabilidad sin precedentes
a lo largo del Cercano Oriente. (48) Después de la XVIII Dinastía egipcia, la
región entre los dos grandes ríos no fue controlada de nuevo por ningún
poder individual hasta el imperio asirio de Asurbanipal (el nieto de
Senaquerib), el cual invadió Egipto y saqueó Tebas en el siglo VII a. C., (49) y
el imperio de Ciro en el siglo VI a. C., el cual conquistó también Egipto y lo
convirtió en una provincia persa. (50) No hay ningún indicio de ningún imperio
de estos tiempos que controlara esta región y que cuya capital fuese
Jerusalén.(51)

Se dice que Salomón tuvo "mil cuatrocientos" carros (1 Reyes 1:26). Esto
representa un ejército prodigioso según los cánones antiguos, y el cual sólo
pudo haber sido reunido en un largo periodo de tiempo por una civilización
estable.(52) A pesar de eso, se nos dice que sólo cinco años después de la
muerte del gran rey Salomón, el faraón egipcio Sisak y sus aliados invadieron
Judá y capturaron sus ciudades fortificadas con poca o ninguna resistencia
militar (2 Crón. 12). La Biblia añade que la misma Jerusalén fue perdonada
sólo después de entregar a Sisak la totalidad de las riquezas acumuladas por
el rey Salomón.

La rapidez con la que se estableció el imperio de Salomón, como se describe


en la Biblia, y la facilidad con la que fue sometido después al poder extranjero
en un corto plazo de tiempo, tampoco es consistente con el modelo fijado
otras grandes civilizaciones antiguas.

1) Introducción
De entre todos los emperadores y reyes que gobernaron los países que rodean
el Mediterráneo posiblemente el más conocido sea el rey Salomón. Y esto no
se debe sólo a su presencia en la Thorá judía, la Biblia cristiana y el Corán
islámico, sino también a las leyendas populares basadas en su historia. El rey
Salomón fué idealizado con virtudes, aunque en la realidad no fue
exactamente así. Por ejemplo, recientes investigaciones demuestran que la
mayoría de los libros que se le atribuyen se escribieron siglos después.

El mismo proceso de mistificación se dió con su famoso Templo, construido


en el año 968 a.C. en un monte de la ciudad de Jerusalén, y que fue
inaugurado en el 961 a.C. con grandes fiestas y ofrendas. Tras la destrucción
de este Templo en el 586 a.C. por el ejército de Nabuconodosor no quedó en
pie ni una sola piedra. Sin embargo, las descripciones del edificio y las
leyendas que surgieron en torno a él le convirtieron en el arquetipo ideal del
Templo, influyendo durante siglos en la configuración de los edificios
religiosos y civiles occidentales.

2) La personalidad del rey Salomón

El estudio de las fuentes escritas sobre el rey Salomón señalan las principales
cualidades y actividades por las que fue conocido:
1) El rey Salomón como mago, que poseyó un extraordinario poder.
2) El rey Salomón dotado de una excepcional prudencia y sabiduría.
3) El rey Salomón como constructor del Templo de Jerusalén y los
majestuosos edificios que lo rodeaban.

El último de estos tres aspectos siempre ha sido el más destacado, como


veremos más adelante, pero los otros dos también han sido muy tratados en
los estudios históricos, pinturas, grabados y obras literarias.

3) El rey Salomón como mago

En la Biblia y el Corán podemos leer sobre los poderes mágicos del rey
Salomón. En el Sutra XXVII del Corán se menciona como el rey David,
cuando era un joven pastor en contacto con la naturaleza, aprendió «el idioma
de los pájaros», idioma que debió enseñar a su hijo Salomón. El conocimiento
de este «idioma natural» era la clave para que los reyes David y Salomón
entendieran las Leyes del Universo y pudieran materializarlas en el arquetipo
ideal de belleza.

Durante la Edad Media, David se representaba siempre con un arpa en sus


manos, simbolizando la armonía espiritual del Cosmos. El historiador judeo-
romano Flavio Josefo (37-100 d.C.) mencionaba unos interesantes detalles que
nos permiten comprender cómo el rey Salomón habría podido escribir varios
libros sobre magia. Durante la época del Imperio Romano, la magia ritual
influyó mucho en las gentes. Estos aspectos mágicos se mantuvieron hasta la
Edad Media, manifestados en hechos como la creencia en la existencia de
«diablos» y la lucha contra las enfermedades por medio de exorcismos.
Orígines -uno de los padres de la Iglesia- mencionaba estas curaciones, que
pudo leer en la literatura mágica atribuida al rey Salomón.

  

Miniatura persa antigua del rey Salomón. Grabado de Gustave Doré (s. XIX)
[Pulse en las imágenes para verlas ampliadas]

Para la lucha contra el Diablo se usaba el «Sello del rey Salomón», un


pentángulo o estrella de cinco puntas con el sagrado nombre de Dios escrito
en su interior. En aquellos tiempos se vendían amuletos con dicho símbolo, ya
que se le atribuía la propiedad de invocar al espíritu de Salomón para
defenderse de muchas enfermedades contagiosas. Después de todo, el rey
Salomón era el mayor mago de todos los tiempos y llegó a poner al Diablo a
su servicio.

Un manuscrito del siglo IV, el Testamento del rey Salomón, desmitificaba el


poder mágico del rey. El texto incluía una biografía de Salomón y de la época
de su gobierno, incidiendo especialmente en la construcción de su Templo. En
esa época se consideró que el libro era un hito en el campo de exorcismo, y
demuestra la creencia en la existancia de demonios en la Cristiandad del siglo
XVI.

4) El rey Salomón como filósofo

La segunda característica que tradicionalmente se destaca del rey Salomón es


una excepcional «sabiduría». En las tradiciones religiosas judía y cristiana, el
«juicio del rey Salomón» se ha convertido en el símbolo del concepto de
sabiduría, relacionado con su gran conocimiento mágico. Flavio Josefo
relacionaba la concepción del Viejo Testamento de la «Sabiduría» y la figura
del rey Salomón de un modo parecido al de la Biblia. También se refiere a los
enigmas que el rey Salomón intercambió con Hiram de Tiro y a las «pruebas»
que le puso la Reina de Saba cuando viajó a Israel para comprobar su gran
sabiduría.

  

«Salomón y la reina de Saba», fresco de Piero della Francesca (ca. 1452, Arezzo)
«El rey Salomon y la reina de Saba», del alemán Conrad Witz (1435)
Salomón y la reina de Saba en la Biblia de Guyart des Moulins (Biblioteca Nacional, París; s.
XV).
Pellegrino Tibaldi: «El rey Salomón interrogado por la Reina de Saba» (El Escorial, ca. 1586).
Salomón y la Reina de Saba. Grabado de Gustave Doré (s. XIX)
[Pulse en la imágenes para verlas ampliadas]

Los cristianos del siglo V hicieron grandes esfuerzos para diferenciar la idea
que se tenía de la sabiduría del rey Salomón de su conocimiento mágico. Así,
acentuaron la sabiduría de Salomón como el «Hagia Sophia», la Sabiduría
Divina. En el año 537 d.C. se dedicó una de las mayores iglesias de la época,
construida en Constantinopla, a este Hagia Sophia. En su ceremonia de
apertura el emperador Justiniano la asoció con el Templo de Salomón. La idea
fundamental de esta iglesia se encontró en el simbolismo de la relación entre
el Cielo y la Tierra a través de la Sabiduría Divina. La parte inferior del
edificio está formada por un cubo, símbolo de la Tierra desde los tiempos
antiguos. Encima de este cubo, la cubierta abovedada en forma semiesférica
símbolizaba el Cielo. En Europa Oriental este simbolismo puede encontrarse
aún en muchas iglesias de Grecia y Rumanía.

Planta y sección de Santa Sofía de Constantinopla según Georg Scheja, medidas en pies. Las
medidas interiores del Templo de Salomón (40x20 del Sancta más 20x20 del Sancta
Sanctorum) eran de 60x20 codos por 30 de altura (I Re 6,2-3). La cúpula original se subió
posteriormente (a puntos) para mejorar el sistema de empujes sobre los pilares.

Pero es sobre todo en el siglo XIII cuando se afianzó la idea de que Salomón
poseyó toda la sabiduría de su tiempo, convirtiéndo al rey en un símbolo de
la Sabiduría Divina. Esto también se expresó en numerosas estatuas e imágenes
de las fachadas y las vidrieras de las catedrales medievales. En la catedral de
Amiens (qué ha sufrido pocos daños importantes desde su terminación)
encontramos la estatua del rey Salomón, justo en el centro de la fachada
occidental, flanqueado por las dos columnas de su Templo. Sobre él,
encontramos la estatua del Cristo, dando la impresión de que el rey Salomón
está llevandolo sobre sus hombros. Esta composición se encuentraba en
muchas otras catedrales, aunque la mayoría se demolieron durante la
revolución francesa.

En los escritos medievales se señala a menudo que las catedrales góticas se


construyeron basándose en los principios del Templo de Jerusalén,
comenzado por el rey David y continuado por el rey Salomón. En la «Biblia
Moralisè» francesa, el rey Salomón es el símbolo de la Sabiduría Divina. En el
encuentro con la reina de Saba, ésta simbolizaba la Iglesia que había dejado de
escuchar las palabras de Dios dialogando con el rey Salomón. El «Juicio del
rey Salomón» es otro tema que podemos encontrar en las fachadas de casi
todas catedrales medievales. Normalmente el rey Salomón aparece sentado o
de pie entre las dos columnas de su Templo, junto a dos mujeres que se
pelean por el niño vivo, mientras que los soldados hacen ademán de partirlo
en dos. Investigaciones recientes han demostrado que esta leyenda popular es
muy anterior a la época del rey Salomón, y que simplemente se adaptó con su
nombre.
     

Hendrick Goltzius: «Salomo's Judgement». Grabado contra Felipe II del último tercio del s.
XVI
Francesco da Urbino: «El juicio de Salomón» (1581). Celda del Prior, Monasterio de El
Escorial
Juicio de Salomón (s. XIX), grabado de Gustave Doré
[Pulse en las imágenes para ampliarlas]

5) Los manuscritos del rey Salomón

Las excavaciones arqueológicas y el estudio de los textos que se escribieron en


la época del rey Salomón socavan cada vez más su imagen de héroe
legendario. Hoy sabemos que no escribió ningún libro del Viejo Testamento:
el Libro de Proverbios se compuso 500 años después de la muerte del rey
Salomón y deriva principalmente de los manuscritos egipcios descubiertos al
principio de este siglo. Orígenes ya señaló que Salomón no pudo escribir el
Cantar de los Cantares del Viejo Testamento.

Uno de los más conocidos libros apócrifos de la Biblia es el denominado


«Testamento del rey Salomón», escrito en el siglo I a.C. Aún mucha mayor
difusión tuvieron las «Clavículas de Salomón», un confuso ensayo de
exorcismo. Tras la invención de la imprenta, este libro se aumentó muchas
veces hasta el siglo XVIII, añadiéndosele nuevas ilustraciones y comentarios.
Actualmente se ha demostrado que su texto se escribió originalmente en el
siglo I d.C.

Además del rey Salomón que conocemos por la Biblia y la Thorá, está claro
que con el tiempo se creó un Salomón legendario, un soberano misterioso que
podía penetrar las Leyes del Universo. Pero la mayor reputación de Salomón
la logró como constructor del Templo de Jerusalén, destruído en el año 586
a.C. por Nabuconodosor, y que desde entonces ha quedado como un símbolo
en la religión judía, cristiana y musulmana.

El propio Salomón se ha considerado tradicionalmente como un autor


prolífico y de gran calidad. Las escrituras que se le han atribuido son el Libro
de los Proverbios, el Cantar de los Cantares, el Eclesiastés, el Libro de la
Sabiduría de Salomón, y los Salmos (Odas de Salomón). Los estudiosos
modernos han determinado, sin embargo, que algunos de estos libros se
escribieron siglos después. De hecho, las Odas son posiblemente de un autor
cristiano gnóstico.

6) El rey Salomón como constructor del Templo de Jerusalén

El Templo del rey Salomón, a diferencia de otros templos del siglo X a.C., no
tenía ningún ídolo dentro, tan sólo el Arca de la Alianza con las Tablas de la
Ley que Yahvé entregó a Moisés. El Templo se construyó en una meseta de
742 metros de altura y tenía la entrada dirigida al Este, hacia la salida del Sol
en el Monte de los Olivos.

No queda ningún rastro del Templo de Salomón: los 50 metros del Muro de
las Lamentaciones pertenecieron originalmente a los muros de contención
exteriores del Templo de Herodes, construido en el siglo I a.C. La situación
del Templo de Salomón es bien conocida, cerca de la roca santa conocida
como Moria, donde se quemaban en holocaustos animales a modo de
ofrendas. Esta piedra tenía un tamaño de aproximadamente 17 m de longitud
y 15 m de ancho, y resulta un punto de orientación fiable, ya que se situó
cerca de la entrada oriental del Templo. Hoy día la Mezquita de Omar, la
Kubat-as-Sachra, cubre este lugar, construida en el año 691 d.C. por Kaliff
Aw-al-Malik. La presencia de esta mezquita hace imposible toda
investigación arqueológica de los restos del Templo de Salomón.
El Domo de la Roca, en Jerusalén. Hipótesis de Ritmeyer de la situación original del Sancta
Sanctorum sobre la Roca

En la tradición judía se supone que el rey David recibió los planos del Templo
con la información exacta de su forma y medidas, en un pergamino entregado
por uno de los Profetas. Este pergamino debió ser entregado por el mismo
Dios a Moisés, y desde entonces fue custodiado hasta que llegó el momento
de la construcción. También la religión cristiana aceptó el origen divino de las
trazas del Templo. Pero el cristianismo supuso que, tras su destrucción en el
año 586 a.C., la reconstrucción de este Templo ideal no era posible por la
ausencia de los planos originales. Durante la Edad Media, las catedrales
europeas fueron consideradas como «reconstrucciones» del Templo de
Salomón, pero limitando este significado. El arquitecto medieval intentaba
usar las mismas proporciones obtenidas por inspiración divina, tal y cómo se
aplicó en el Templo original.

7) ¿Cuál fue la apariencia del Templo?

La construcción del Templo comenzó durante el cuarto año del gobierno de


Salomón. Se tardó en construirlo aproximadamente 7 años, lo que implica que
debió de terminarse en el año 961 a.C. El Templo propiamente dicho debió ser un
edificio largo y bastante estrecho, orientado sobre un eje longitudinal en
dirección Este-Oeste. El edificio debió tener una longitud de
aproximadamente 30 metros, 9 metros de ancho y una altura de casi 3 metros.
En la fachada oriental se construyó una escalera, junto a la puerta de la
entrada. A ambos lados de ésta se erigieron dos columnas, llamadas Jaquim y
Boaz, la primera a mano derecha de la entrada y la segunda a su izquierda.
Los sacerdotes y el rey entraban en el Templo a través de una gran puerta
chapada de oro, de aproximadamente 10 metros de alto y 4 de ancho. Trás de
esa puerta se encontraba el vestíbulo de entrada, el «Ulam». Después de este
vestíbulo, se encontraba la estacia principal, el «Hekal» o Santo, iluminado a
través de unas ventanas altas. Estas ventanas eran más grandes hacia dentro
que hacia fuera, simbolizando que la Luz vino del interior hacia el exterior. El
«Hekal» medía 13'5 metros de alto, 9 metros de ancho y 18 de largo, en una
proporción de 3:2:4. La anchura y longitud guardaban una proporción de 1:2,
lo que significa que la planta del «Hekal» estaba compuesta de un «doble
cuadrado», una proporción que puede encontrarse en muchas «estancias
sagradas». El forjado de piedra se cubrió con un solado de madera de cedro
en el que, según algunas fuentes, se grabó el «Sello de Salomón». Las paredes
del «Hekal» se cubrieron con lamas de cedro, traidas de las montañas del
Líbano; las vigas del forjado también se hicieron del mismo material.

El Templo propiamente dicho según la reconstrucción de Juan Bautista Villalpando (1595)

La tercera cámara, el «Debir» o Santo de los Santos (Sancta Sanctorum), se


encontraba en la parte trasera, a un nivel más alto que el «Hekal», y sólo
podría accederse a él subiendo por una escalera. El «Debir» tenía la forma de
un cubo de 9 x 9 x 9 metros, y en su centro se puso el Arca de la Alianza. Éste
era un arcón grande, hecho de madera de acacia, cubierta con planchas de oro
y con cuatro anillas a las esquinas en las que se ponían varas para
transportarla. Dentro del Arca se guardaron las Tablas de la Ley, entregados
por el mismo Dios a Moisés. En estas Tablas se grabaron los Diez
Mandamientos, sirviendo de conexión entre Yahvé e Israel.

Durante los tiempos del Éxodo del pueblo judío el Arca estaba oculta en el
Tabernáculo, que fue finalmente traído a Jerusalén por el rey David. Ya se
había acreditado el poder mágico del Arca cuando se derrumbaron las
murallas de Jericó al pasar los judíos ante ellas con el Arca.
Las dos columnas Jaquim y Boaz se erigieron frente a la entrada del Templo y
se fundieron en bronce en una sola pieza. Tenían una altura de más de 12
metros, con unos capiteles esféricos de aproximadamente 2 metros de
diámetro. Las columnas sólo tenían una función simbólica y no sujetaban
ninguna viga ni ningún elemento estructural. Los investigadores relacionan
estas columnas con los obeliscos encontrados a la entrada de los templos
egipcios. El arquitecto romano Vitruvio contaba que estos obeliscos se usaban
como un reloj, midiendo su sombra como hacemos nosotros con los los relojes
de sol. Sin embargo, las esferas ornamentales de encima de las dos columnas
del Templo de Salomón habrían hecho muy inexacta esta función de reloj.

Jakim y Boaz, las columnas del Templo, y el Mar de Bronce, según Juan de Caramuel (1678)

Cerca del Templo se situó un altar para los holocaustos (sacrificio de animales
en la hoguera) y un gran cuenco de bronce, el «Mar de Bronce» o «Mar
Cobrizo». Éste era un gran cuenco semiesférico de 4'5 metros de diámetro,
apoyado en las partes traseras de 12 toros, también fundidos en bronce, tres
en cada dirección de los puntos cardinales. El cuenco debió pesar en vacío
más de 25.000 Kg. El propósito de este depósito (descrito detalladamente en II
Cron 4:1) no está muy claro. Quizás se usara como un espejo para observar los
cuerpos celestiales. En el idioma hebreo antiguo, las palabras para cobre y
bronce eran idénticas: el bronce era un metal más duro y menos proclive a la
corrosión, debido a la aleación de una cierta cantidad de estaño. Algunos
autores creen que el «Mar» debió hacerse de bronce y no de cobre. Todas las
herramientas de metal como martillos y cinceles se hicieron de bronce hasta el
siglo XII a.C., cuando comenzó la producción de herramientas de hierro.
Existió una gran tradición en la producción de bronce el Oriente Medio,
donde el cobre se encontraba fácilmente en las minas de Arabia, el desierto al
sur del Mar Muerto del que Salomón obtenía la mayor parte de sus fuentes de
ingreso.

Lo problemático era más bien encontrar el estaño, un metal que entonces


podía hallarse al aire libre en grandes cantidades sólo en las minas del Sur de
Inglaterra. Los fenicios, dándose cuenta de este problema, navegaron con sus
pequeños barcos hasta allí, atravesando el Mediterráneo y el Océano
Atlántico.

8) La construcción del Templo

En la época del rey David y su hijo Salomón, el pueblo de Israel estaba


convencido de que el monte del Templo estaba situado exactamente en el
centro de la Tierra. Por lo tanto, el que orase en ese lugar estaría en contacto
directo con Dios, que moraba justo encima de las esferas celestiales (I Rey
8:30: «Oye, pues, la plegaria de tu siervo y de tu pueblo Israel cuando oren en
este lugar. Escucha tú desde el lugar de tu morada, desde el cielo, escucha y
perdona»). Podría decirse sin exageración que los diez primeros años del
reinado de Salomón estuvieron dominados por el «orden» resultante de la
construcción del Templo, tal y como fue planeado por David.

Toda la política del reinado de Salomón se supeditó a la enorme cantidad de


dinero que se necesitaba para la construcción del Templo. Éste, además de ser
la Casa de Dios, debía expresar la unidad entre el estado y la religión, para
librar el reino del «separatismo» de las tribus y disminuir la importancia de
los viejos santuarios. Sin embargo, después de la construcción del Templo de
Salomón, los altares de Canán continuaron existiendo a lo largo y ancho del
territorio israelita: el Templo de Jerusalén se había convertido en la más
hermosa y cara residencia de Yahvé, pero no pudo convertirse en la única. La
importancia del Templo aumentó durante los siglos siguientes, pero fue sobre
todo tras su destrucción en el año 586 a.C. cuando el Templo pasó de ser algo
real a convertirse en una leyenda.

Aunque siempre asociamos el nombre del rey Salomón a la construcción del


Templo, en realidad su contribución no fue demasiado grande. La idea y las
trazas se realizaron durante el reinado de su padre David, los arquitectos y
los artesanos eran Fenicios y los enormes gastos de la construcción fueron
sufragados por los esforzados trabajadores de las minas de cobre, los
marineros de la gran flota de naves comerciales y los soldados que saqueaban
los países circundantes.

Recientes investigaciones del arqueólogo alemán Konrad Rupprecht han


demostrado que el rey David debió encontrar un templo más antiguo en ese
lugar, que debió ampliar para cobijar al Arca de la Alianza. El rey Salomón
debió modificar la planta del viejo templo de su padre con sucesivas
ampliaciones y modernizaciones, de acuerdo con las trazas que había dejado
su padre. En el Viejo Testamento no se señala que en el monte Moria existiera
este templo más antiguo, pero sí que se menciona en varios lugares como el
rey que David envió a ese monte un gran número de materiales y trabajadores
a lo largo de su gobierno. En I Cron 22 se señala cómo el rey David gastó 3.000
talentos de oro y 7.000 talentos de plata de sus propias posesiones en la
construcción del Templo. Dado que en esa época un talento pesaba 60 kilos,
está claro que el edificio ya en el tiempo de David necesitó de una grandísima
cantidad de dinero. En I Cron 28 podemos leer cómo el rey David tenía a su
disposición muchos dibujos del Templo, en que los que se incluían hasta los
más pequeños detalles. El rey David también tuvo los primeros contactos con
Hiram y sus consejeros. Por ello, el rey Salomón sólo se encargó de la
ejecución (y pago) de trabajos ya dispuestos por su padre.

Hiram enseña los planos a Salomón. Grabado de J.J. Scheuchzer, «Physica Sacra Iconibus
Illustrata», Augsburgo, 1731

El edificio se situó en una meseta rocosa llamada Moria, que en tiempos del
rey David era más pequeña, de aproximadamente 40 x 100 metros. Durante el
reinado de Salomón se agrandó. Pero fue en los tiempos del rey romano
Herodes cuando su superficie se aumentó hasta aproximadamente 500 metros
de largo por 300 metros de ancho. El patio interior del Templo se rodeó por
un muro formado por tres capas de bloques de piedra cubiertas por vigas de
madera de cedro. En este patio interior podían entrar los peregrinos y las
masas de fieles, pero el Santuario del Templo sólo era accesible al rey y a los
sacerdotes.

Durante las fiestas, las ofrendas en la hoguera se hacían en el patio interior,


para lo que se construyeron utensilios especiales. El gran altar de hierro
donde se encendía la hoguera se puso en medio del patio interior, con una
llama que se mantenía encendida día y noche para realizar las ofrendas; las
cenizas se dejaban caer a través de una reja sobre la Piedra Santa.

Durante las últimas décadas se han hecho excavaciones arqueológicas en


diferentes lugares de Israel para comparar el Templo de Salomón con los
restos de otros templos de la misma época. En 1957 se encontró en Hasor un
templo fenicio del siglo XIII a.C. La restauración de sus habitaciones y sus
detalles decorativos clarificaron la tesis de que pudo ser un modelo directo
del Templo de Salomón. El templo de Hasor tenía los mismos tres sectores
cerrados con las dos columnas frente a la puerta de entrada, un vestíbulo
principal y un recinto sagrado en la parte trasera sobre una plataforma algo
más alta. El arqueólogo alemán concluyó: «Los arquitectos fenicios diseñaron
el Templo de Salomón adoptando como modelos los edificios sagrados que
existían en Caná. Sin embargo, en ese tiempo en Israel esos edificios eran
considerados como templos paganos» (Hans Heinrich Schmid, Altorientalische
Welt in der alttestamentlichen, Zurich 1974).

9) El palacio real de Salomón y los edificios de sus mujeres

Tras terminar el Templo, el rey Salomón comenzó la construcción de su


palacio, que era considerablemente más grande y más lujoso que el Templo,
por lo que tardó en construirlo más del doble de tiempo. Con la terminación
de estos edificios, Salomón comenzó a alejarse de su pueblo, que empezó a
verle cada vez más como un dictador con aspiraciones totalmente diferentes a
las de su padre.

Un problema mayor surgió cuando muchas de sus mujeres extranjeras


quisieron erigir templos y altares para los que eran, a los ojos israelitas, dioses
paganos. Se construyeron varios santuarios, como el de la esposa más
importante de Salomon, la hija del faraón egipcio, que quería cumplir sus
deberes religiosos hacia los Dioses egipcios en sus viajes por Israel. Era bien
sabido que el rey Salomón se comprometió con esas mujeres por razones
políticas, pero a los sacerdotes y al resto de los israelitas no les gustaban esos
templos paganos. Incluso el arquitecto que trajo el rey Hiram de Tiro para la
construcción del Templo no fue bien recibido por el pueblo de Israel, ya que
este rey adoraba a ídolos paganos.

Cuando el rey comenzó a hacerse mayor, aumentaron las cíticas a su estilo de


vida y a su actividad política. Al final de sus días, quedaron del rey Salomón
dos percepciones diferentes:
1) La del Salomón real que tenía cada vez más dificultades para ejecutar las
ideas de su padre y
2) La del rey legendario que fue subido a un pedestal siglos más tarde.

Finalmente, prevaleció esta última idea por lo que el rey sólo podía
compararse con personajes de la talla de Alejandro Magno.

10) El Templo de Salomón como edificio ideal

La construcción del Templo de Jerusalén fue el evento más importante del


reinado de Salomón, gracias al cual su nombre se ha recordado hasta 30 siglos
después de su muerte. Ya en el Viejo Testamento el Templo había acaparado
la mayoría de los escritos donde aparecía el rey Salomón. En las catedrales
medievales las imágenes de las esculturas y las vidrieras del Templo de
Salomón, y sobre todo de su destrucción en el 586 a.C. a manos de
Nabuconodosor, simbolizó el pasado del pueblo judío, así como su «grandeza
perdida».

El escritor judeo romano Flavio Josefo dedicó muchas páginas al Templo,


añadiendo algunos detalles que no se mencionaban en la Biblia, pero que él
transcribió de manuscritos ya desaparecidos. Ya en el siglo XII d.C., William
de Malmesbury nos apuntaba que los autores de su época estaban
familiarizados con los escritos de Flavio Josefo, Eucherio y Beda sobre el
Templo de Salomón. En el siglo VII d.C. el monje inglés Beda (672-735) fue el
primero de otros muchos escritores que trataron en profundidad la
importancia del Templo de Salomón. Éxplicó cómo ningún edificio era
comparable en belleza con el Templo y lo designó como una de las Siete
Maravillas del Mundo. En un largo manuscrito, llamado «De Templo
Salomonis», Beda se centró en la interpretación alegórica, una idea que en
todo el mundo Occidental siguió desde entonces. Su discurso empieza como
sigue: «La Morada de Dios, construida por el rey Salomón en Jerusalén, se
diseñó siguiendo la forma de la Iglesia Universal, que deberá ser reconstruida
por el Primero del Pueblo Elegido hasta el Último que nazca al final de los
días, por la gracia del Rey Pacíficador, su Salvador». Este último nombre
evoca al rey Salomón, porque su nombre proviene de la palabra hebrea
«Shalom» que significa «Paz». Gracias a la relevancia de los escritos de Beda,
se dio gran importancia al aspecto alegórico de la reconstrucción del Templo
(destruido en el año 586 a.C.). El aspecto alegórico nunca debería pasar a un
segundo plano ante la reconstrucción de un edificio real. Este punto de vista
fue aceptado por la mayoría de los escritores medievales, que también vieron
los detalles del Templo de Salomón de la misma forma alegórica.

La interpretación alegórica del Templo de Beda y sus sucesores no evitó el uso


de algunos elementos del Templo de Salomón en muchas de las iglesias y
catedrales que se han construido en la Europa Occidental desde el año 800 de
nuestra era. Uno de los primeros ejemplos fue la iglesia-catedral de Aquisgrán
(Alemania), construida por Carlomagno en las primeras décadas del siglo IX
d.C. El Ministro Alcuin señaló que esta iglesia estaba «construida totalmente
según los principios que el mismo rey sabio Salomón había aplicado a la
construcción de su Templo». Comparó a Carlomagno con el rey Salomón y
con su padre, el rey David. Debemos notar que el octógono de la iglesia de
Aquisgrán no guarda ningún parecido con las descripciones del Templo de
Salomón del Viejo Testamento, un edificio más bien rectangular. La opinión
de Alcuin acerca de los «principios» que había aplicado Salomón no se refería
a la apariencia exterior de la iglesia, sino al trasfondo simbólico de la
realización del edificio, en el que el Templo de Jerusalén jugó un importante
papel. Por otra parte, el profesor Juan Antonio Ramírez ha relacionado los
edificios de planta octogonal con la idea del Templo de Salomón que traían
los peregrinos de Jerusalén, que confundían el destruido Templo de Salomón
con el Domo de la Roca, también de planta octogonal, ya que además los
caballeros templarios pusieron junto al Domo su cuartel general (en la
mezquita de El-Aqsa) y con ese nombre aparecía en muchas guías para
peregrinos del siglo XV. No en vano, era el edificio más espectacular que
encontraban en Jerusalén.

   

1) El Domo de la Roca como Templum Salomonis. 2) La iglesia templaria de Tomar. 3) Sta.


María de Eunate, en Navarra
Este dilema se dió durante toda la Edad Media hasta el siglo XIV y se vió en la
construcción de muchas iglesias y catedrales. Por un lado estaba el deseo de
presentar como una alegoría la idea del Templo de Salomón, mostrando todos
los detalles de la historia del rey Salomón y su edificio a la población
analfabeta. Pero por otro lado se ambicionaba encontrar un esquema
arquitectónico moderno en el que los arquitectos medievales pudieran
expresar su conocimiento técnico. Sobre todo fue en el siglo XIII cuando esta
búsqueda llevó a alcanzar alturas interiores grandiosas, como nunca antes se
habían alcanzado en las catedrales. Simbólicamente se usaron plantas en
forma de cruz, simbolizando la crucifixión de Cristo.

11) Las Catedrales Medievales

A mediados del siglo XII apareció en la Europa meridional y occidental la


«Leyenda Áurea», un libro con todo tipo de historias, la mayoría reconocidas
como apócrifas, con detalles de leyendas y tradiciones. Muchos símbolos
presentes en las fachadas y vidrieras de las catedrales medievales se pueden
atribuir a historias antiguas escritas en este sencillo manual. La vida de rey
Salomón y la construcción de su Templo tenía un papel importante en la
«Legenda Áurea». Otro libro, el «Bestiarium», daba mucha información sobre
el significado simbólico de los animales en las historias y las imágenes usadas
en la ornamentación de fachadas y los interiores de las catedrales.

Pero el gran impulso en el conocimiento del Templo de Salomón fue dado por
los Cruzados que volvieron a Europa después del año 1118, cuando un grupo
de aristócratas franceses pasó más de diez años en Jerusalén recopilando
objetos y tradiciones locales. Volvieron después de 1128 con una gran
cantidad de material, tras lo cual Bernardo de Clairvaux organizó un concilio
en Troyes, donde se tomó la decisión de crear la Orden de los Caballeros
Templarios. La Orden debía seguir haciendo estudios sobre el Templo y
proteger a todos los futuros peregrinos de Tierra Santa.

La antigua iglesia del Temple de París según Viollet-le-Duc. Su rotonda principal (de 20 m de
diámetro) databa de mediados del siglo XII, aunque fue destruída en 1811.

Ya conocemos el destino de la Orden de los Templarios, una de las


organizaciones más poderosas de la Europa de finales de siglo XIII. Las
noticias que traían los templarios a su vuelta no siempre fueron muy fiables:
todos vieron un edificio en la explanada donde se había construido el Templo
de Salomón veinte siglos antes, pero muchos no comprendieron que allí ya no
quedaba ni una sola piedra del templo original. Ya en el siglo VIII el Obispo
Arculf había observado: «En el emplazamiento del templo original del rey
Salomón, junto al muro oriental de Jerusalén, los sarracenos han erigido una
Casa de Oración que ellos visitan a menudo». Pero hasta el año 1700 se hacían
grabados, como en Holanda, con la imagen de la Mezquita de Omar de
Jerusalén con el texto de «Templum Salomonis».

   

Es bien conocida la miniatura de Jean Fouquet, artista en la corte del rey


francés Luis XI, mostrando la catedral de Giras en obras. En el balcón de un
palacio, al otro lado de la catedral, se representa al propio rey Salomón dando
instrucciones como si fuera el arquitecto del edificio. Esta miniatura es un
claro ejemplo de cómo en la Edad Media había personas interesadas en dar un
«mensaje cristiano». Muestra también, por ejemplo, cómo la talla de la piedra
se hizo fuera de la catedral, de acuerdo con las reglas establecidas en el Viejo
Testamento: «La Casa fue construida con piedras preparadas en la cantera;
durante su construcción no se oyeron en la Casa martillazos ni sierras ni
instrumentos de hierro» (I Reyes 6:7).

Durante el invierno el recinto del edificio estaba cerrado, pero los albañiles y
los otros artesanos continuaron su labor a cubierto. Por consiguiente,
necesitaron detallados dibujos en papel (muy caro en esa época), en tablas de
madera o en superficies enyesadas. Estos dibujos se basaban en un sistema de
dimensiones geométricas heredado de los tiempos antiguos y que
probablemente fue ya puesto en práctica por los constructores del Templo de
Salomón.

Pueden encontrarse imágenes del rey Salomón y su Templo en las estatuas y


vidrieras de muchas catedrales medievales. Sobre todo en la primera mitad
del siglo XIII estas imágenes son muy apreciadas, en muchos casos
presentando al rey Salomón con su padre el rey David. En muchos rosetones
se presentan a ambos reyes, a veces en compañía de la Virgen María, como en
la Catedral de Chartres. En la fachada occidental de la catedral de Amiens
fueron «relatadas en piedra» diferentes historias del rey Salomón y su Templo
en el denominado «quatrefeuilles», esculturas en piedra con la forma de un
trébol de cuatro hojas.

12) El Monasterio de Escorial

Como reacción al comienzo de la Reforma en Europa, el sacerdote español


Ignacio de Loyola fundó en 1534 la Sociedad de Jesús, también conocida como
la Orden de los Jesuitas, para proteger los valores originales de la Iglesia
romana. Bajo el reino del tolerante emperador Carlos V las posibilidades del
Orden estaban muy limitadas, pero la situación cambió totalmente cuando su
hijo, el rey Felipe II, llegó al trono en 1556. Éste encargó al jesuita Villalpando
que hiciera un estudio sobre el Templo de Salomón con la intención de erigir
un edificio que simbolizara la unidad de la iglesia y del estado en el siglo XVI.
Este edificio debía convertirse en el centro desde el que Felipe II gobernara su
extenso imperio.

Durante las jornadas que el rey pasó en los Países Bajos en la década de los 50,
ofreció a las ciudades varias vidrieras a las principales iglesias donde se
mostraba al entonces príncipe y a su esposa la reina María Tudor junto a su
querido Templo. Una de las más bellas aún existe: la Vidriera del Rey en la
iglesia de San Juan Bautista de Gouda (Holanda), realizada entre 1557 y 1559
por el famoso vidriero Dirk Crabeth. Pueden señalarse otros ejemplos, como
la Iglesia Vieja de Delft (1563) y la desaparecida Gran Iglesia de Harderwijk.

En 1562 comenzaron las obras de El Escorial bajo la dirección del arquitecto


Juan Batista de Toledo, que fueron terminadas por Juan de Herrera. Se trata
de una magnífica combinación de palacio, monasterio e iglesia, basada en el
conocimiento que se tenía en el siglo XVI del Templo de Salomón y sus
Palacios Reales. Después de veintidós años, el enorme complejo se terminó,
convirtiéndose en el edificio más grande de la Europa de su tiempo. Su
construcción sólo pudo financiarse gracias a las enormes cantidades de oro y
plata traidas por los españoles de sus conquistas de América.
Grabado de El Escorial de «Architectvra civil recta y obliqva, considerada y dibvxada en el
Templo de Iervsalen [...] Promovida a svma perfeccion en el Templo y Palacio de S. Lorenço,
cerca del Escvrial, que invento con su Divino Ingenio, delineo con su real mano, y con
excessivos gastos empleando los mejores Architectos de Europa erigio el Rey D. Philippe II»
(3 vols.), de Juan de Caramuel y Lobkowitz (Vigeven, 1678)

El rey Felipe II, como le había ocurrido antes al rey Salomón durante la
construcción de su Templo, sufrió constantemente grandes dificultades
financieras. Esto fue en aumento al ir terminandose las obras de el Escorial,
debido al gran coste de los materiales necesarios para su decoración interior.
Estas dificultades financieras influyeron en otros actos, como cuando en 1570
las fuerzas armadas del Duque de Alba en los Países Bajos, que estaban muy
mal pagadas, hicieron un motín que influyó mucho en el desarrollo de la
guerra.

13) Conclusión

Los escritos de Villalpando y la construcción de El Escorial no fueron


ignorados al norte de los Pirineos. En los Países Bajos se publicó un estudio
sobre el asunto realizado por el teólogo holandés Ludovicus Capellus,
titulado «Templi Hierosolmitani triplex delinatio». El estudio incluía la
descripción del Templo hecha por Villalpando y los escritos de Flavio Josefo y
Maimónides. Pero se prestó mucho más atención a los trabajos del portugués
Jacob Jehuda León, nacido en 1603, que pronto emigró a Middelburg
(Holanda) y se hizo rabino de la comunidad judía de Amsterdam. Judá León
escribió varios libros, desde el «Retrato del Templo de Salomo» de 1642 hasta
«Las Alabancas de Santidad» en 1671. En 1659 el rabino publicó una
descripción de su maqueta del Templo que se exhibió en una exposición en
Londres en 1729. En el Diario de la Corte se puso un anuncio que decía:
«podrá verse todos los días en el Royal Exchange, el Modelo del Templo de
Salomón, con todos sus Vestíbulos, Paredes, Verjas, Cámaras y Vasos Santos,
el gran Altar de los Sacrificios, el Mar de Bronce, el Lavadero y el Sancta
Sanctorum con el Arca de la Alianza, el Sillón de la Misericordia y los
Querubines Dorados, el Altar de Incienso, los Candeleros, las Mesas, y las dos
famosas columnas Jakim y Boaz». En el Museo Bíblico de la Heerengracht de
Amsterdam, podemos ver una copia de esta maqueta con todos los detalles,
junto con mucha información sobre la literatura publicada desde el siglo XVII
en los Países Bajos.

La admiración que se tuvo por El Escorial inspiró a muchos gobernantes de


otros países hacer complejos similares con iglesias y palacios, con o sin
monasterios. El más famoso es el palacio de Versalles, cerca de París,
empezado en 1669. Sin embargo, debemos admitir que la ostentación de Luis
XIV de Francia se produjo de una forma diferente a la arquitectura de Felipe
II, marcada por su fanatismo religioso. El Templo de Salomón tuvo un
importante papel en la idea original de Luis XIV, aunque cambió con el paso
de los siglos en un tipo de arquitectura que mostraba a sus sucesores la
imagen de la despótica dictadura del «Rey Sol».

Ya no han continuado las reconstrucciones del Templo de Salomón a tamaño


real. Tan sólo se han hecho pequeñas maquetas, publicándose descripciones
detalladas con magníficos grabados en casi todos países occidentales, pero los
extraordinarios costes desmotivaron cada intento de reconstrucción. El
Templo, demolido totalmente en el año 586 a.C., se había convertido
definitivamente en una leyenda, tanto en las religiones judía y cristiana como
en el Islam.

Bibliografía

Puede encontrarse un listado de libros muy completo sobre el rey Salomón y


su templo en:

 Gabriel Mandel and Petra Eisele: King Solomon, Scherz Verlag Bern, 1978.
Otros libros consultados fueron:

 Albright, W.F.: Archeology, Historical Analogy & Early Biblical Tradition,


Baton Rouge, Louisiana 1966.
 Busink, Th.A: Der Tempel von Jerusalem. 1. Der Tempel Salomos, Leiden, 1970.
 Goeree, W.: Joodse Oudheden, 2 volumes, Amsterdam, 1690.
 Josephus, Flavius: Judische Altertumer, translated by H. Clementz, Halle,
1900.
 Male, Emile: L'Art religieux du XIIIe siecle en France, Paris, 1898.
 Miller, M.S. & J.L.: Bible Dictionary, Harper & Brothers, New York, 1974.
 Ramírez, Juan Antonio: "La iglesia cristiana imita un prototipo: el Templo
de Salomón como edificio de planta central (algunos ejemplos medievales)",
en Edificios y sueños (Ensayos sobre Arquitectura y Utopía), Málaga, 1983.
 Rupprecht, K.: Der Tempel von Jerusalem, Berlin, 1977.
 Schmid, H.H.: Altorientalische Welt in der alttestamentlichen Theologie, Zurich,
1974.
 Yadin Yigael, Hazor: The rediscovery of a great citadel of the Bible, London,
1975.

Finalmente, hemos encontrado mucha información en el Agnes Scott College


de la Universidad de Atlanta (Georgia, USA), extraída de la investigación de
Howard-Carter, que fue encargada por la Fundación Carnegie.

Oda 1

1 El Amo* está sobre mi cabeza como una corona, y nunca estaré sin Él.
2 Ha trenzado para mí una corona de Verdad, y sus ramas dan brotes en mí.
3 Pues no es como una corona muerta que no puede germinar,porque Tú vives en mi
cabeza y has florecido sobre ella,
4 Y Tus frutos están maduros y son perfectos, están llenos de Tu salvación.

Oda 2

Ningún verso de esta Oda ha sido encontrado.

Oda 3

Las primeras palabras de esta Oda han desaparecido.

1...Me puse la Vestidura.


2 Y sus miembros están con Él. y sobre ellos estoy de pie, y Él me ama:
3 Porque no hubiera conocido el Amor del Amo si Él no me amase,
4 ¿ Pues quién es capaz de distinguir su Amor excepto uno que es amado por Él?
5 Yo Amo al Amado, y mi alma le Ama:
6 Y donde está Su descanso ahí estoy Yo también,
7 Y nunca seré un extraño frente al Altísimo Amo pues en su gran misericordia no
hay reparos.
8 He sido unido a Él, y el Amante ha encontrado al Amado,
9 Y porque Amo al que es el Hijo llegaré a ser un hijo,
10 Y porque me uní al Inmortal llegaré a ser inmortal,
11 Y aquel que se deleita en el Viviente obtendrá la Vida.
12 He aquí la** Espíritu del Amo, que no miente, y quién enseña a los hijos de los
hombres a conocer Sus caminos.
13 Sé sabio, entendedor y permanece despierto y vigilante. Aleluya.

Oda 4

1 Ningún hombre, Oh mi Dios, puede cambiar tu Santuario,


2 Ni tampoco le es posible cambiarlo de lugar, porque no tiene poder sobre él: (el
hombre)
3 Porque Tu Santuario lo creaste antes de que hicieras los otros lugares:
4 Y Aquello que es Mayor no puede ser alterado por esos que nacieron después.
5 Tú has entregado tu corazón, Oh Amo, a Tus creyentes: nunca fallarás ni negarás
tus frutos,
6 Pues una hora de Tu Fe equivale a días y años.
7 ¿ Quién hay revestido de tu Gracia que pueda ser herido?
8 Porque tu sello es reconocido: y Tus criaturas lo reconocen, Tus huestes celestiales
lo poseen, y los arcángeles elegidos están marcados con él.
9 Nos has dado tu comunión, y no es que necesites de nosotros sino que nosotros
necesitamos de ti.
10 Destila tu rocío suavemente sobre nosotros, abre Tus abundantes fuentes de las que
manan leche y miel:
11 Pues no hay arrepentimiento contigo, nunca te arrepentirías de darnos nada de lo
que nos has prometido,
12 Porque el fin se ha Revelado delante de ti, todo lo que das, lo das generosamente,
13 Así que no quitas nada ni lo tomas de vuelta,
14 Porque todas las cosas fueron reveladas ante ti como Dios y ordenadas desde el
principio delante de Ti, y Tú, Oh Dios, hiciste todas las cosas.
Aleluya.

Oda 5

1 Daré gracias a Ti, oh Amo, porque te amo,


2 Oh, Altísimo, Tú nunca me desampararas, pues eres mi esperanza:
3 Libremente he recibido de ti la Gracia, y por eso Viviré,
4 Mis perseguidores vendrán y no podrán encontrarme:
5 Una nube de oscuridad caerá sobre sus ojos; y una espesa penumbra los oscurecerá,
6 No tendrán luz para verme, y no podrán atraparme.
7 Sus consejeros estarán a oscuras, y cuánto ellos han malignamente ideado contra mí
se volverá contra ellos,
8 Porque ellos han hecho un consejo pero no tuvieron éxito,
9 Pues mi esperanza esta en el Amo y no tendré miedo, y porque el Amo es mi
Salvación, no temeré:
10 Él es una guirnalda (de luz) sobre mi cabeza y no seré conmovido; incluso si todo
se sacude a mi alrededor yo estaré firme;
11 Y aunque todas las cosas visibles perezcan, yo no moriré, porque el Amo esta
conmigo y yo estoy con Él. Aleluya.

Oda 6

1 Así como las manos se mueven sobre el arpa y hacen resonar las cuerdas,
2 Así hace hablar mi cuerpo la Espíritu del Amo, y yo hablo gracias a su Amor,
3 Que hace desaparecer todo lo es extraño y amargo.
4 Así era desde el Principio y será hasta el fin: nada puede ser Su adversario ni
levantarse contra Él.
5 El Amo ha multiplicado el Conocimiento de Si mismo, y se afana en que estas cosas
sean conocidas, las cuales por su Gracia nos han sido concedidas.
6 Porque Él nos ha dado la alabanza de Su Nombre nuestras Espíritus alaban su Santa
Espíritu.
7 Aquello que fue un arroyo ha llegado a ser un río grande y ancho,
8 Que Inundó y disolvió todo a su paso y trajo Aguas al Templo,
9 Y las barreras de los hijos de los hombres no fueron capaces de detenerlas, ni los
artificios de aquellos cuya ocupación es contener las Aguas. (de sabiduría)
10 Y (las aguas) se han extendido sobre toda la faz de la tierra, y lo han llenado todo,
y a todos los sedientos se les ha dado de beber,
11 Toda sed fue aliviada y extinguida: Desde lo más alto se nos brindó la copa.
12 Benditos son aquellos a quienes se les dió de esa Agua (viva)
13 Calmaron sus labios secos, los desfallecidos fueron levantados,
14 Las almas que estaban a punto de morir fueron salvadas de la muerte:
15 Las ramas caídas fueron enderezadas y levantadas:
16 Fortalecieron su debilidad y la luz llegó a sus ojos:
17 Todos se conocieron en el Amo, y vivieron por las Aguas de la Vida para siempre.
Aleluya.

Oda 7

1 Como el ímpetu de la ira se dirige al mal; igualmente el impulso de la alegría lleva


hacia lo amable, y atrae sus dulces frutos sin medida.
2 Mi alegría es el Amo y mi impulso es hacia Él, y la ruta es bella,
3 Porque tengo quien me auxilia, el Amo.
4 Él me ha dejado conocerlo por completo, sin reparos, sencillamente, y con bondad
se ha despojado de Grandeza.
5 Él se ha vuelto como yo a fin de que yo pudiera recibirlo:
6 Y fue considerado como uno semejante a mí para que así yo pudiera vestirme de Él.
7 Y por eso no temblé cuando lo ví, porque Él fue bondadoso conmigo.
8 Se volvió según mi naturaleza para que yo pudiera aprender de Él, Y tomó una
forma semejante a la mía con tal de que no me alejara de Él.
9 El Padre de todo Conocimiento es también la Palabra de Conocimiento,
10 Quien creó toda Sabiduría es más sabio que sus obras.
11 Él me creó cuando todavía yo no sabía qué haría cuando entrara en el ser,
12 Por eso se apiadó de mí, y en su inmensa gracia me concedió pedirle y
beneficiarme de su sacrificio,
13 Porque Él permanece incorruptible por todas las generaciones.
14 Él se ha entregado a sí mismo para ser visto por aquellos que son suyos, para que
ellos puedan reconocer a Aquel que los Creó, y no imaginaran que venían de ellos
mismos.
15 Para alcanzar su Conocimiento Él nos ha señalado un camino, y lo ha extendido y
ensanchado para traer a todos Perfección,
16 Y ha puesto en el señales de Su Luz, y yo he caminado en este camino desde el
principio y lo haré hasta el fin.
17 Por Él fue forjado, y Él descansaba en el Hijo, y para Su Salvación proveerá de
todo,
18 Y el Altísimo será reconocido a través de Sus Santos, para anunciar a los que le
hacen canciones la venida del Amo:
19 Para que ellos vayan delante a reunirse con Él, y puedan cantarle con alegría y con
el arpa de muchos tonos:
20 Los profetas vendrán antes de Él y serán vistos primero,
21 Ellos alabarán al Amo por Su Amor: porque Él está cerca y es posible de
contemplar,
22 Y el odio será arrancado de la tierra, y será ahogado junto con la envidia,
23 Pues la ignorancia ha sido destruida, gracias al Conocimiento del Amo que ha
llegado.
24 Aquellos quienes hacen melodías cantarán la Gracia del Amo Altísimo,
25 Y traerán sus voces, y sus corazones serán como el día, y bella como la excelsa
belleza del Amo será su cantar,
26 Y nadie ni nada que respire carecerá de conocerle y nadie será privado de voz,
27 Porque Él ha dado una boca a su Creación, para que sus voces se dirijan a Él y lo
alaben.
28 Confiesen vosotros Su Poder, y declaren Su Gracia.(que Él les ha otorgado)
Aleluya.

Oda 8

1 Abran, abran vuestros corazones a la exaltación del Amo!


2 Y dejen que su Amor se multiplique (y se extienda ) desde el corazón y alcance los
labios,
3 Para que den a luz (se manifiesten) vuestros frutos al Amo, frutos vivientes y
Santos, para que así puedan hablar con Él despiertos en medio de Su luz.
4 Elévense y párense derechos, Ustedes que alguna vez estuvieron abatidos:
5 Proclamen, ustedes que estaban en silencio, pues ahora vuestras bocas han sido
abiertas.
6 Ustedes, que fueron despreciados serán de aquí en adelante alzados, porque vuestra
Justicia ha sido exaltada,
7 Ya que la mano derecha del Amo está con ustedes: y Él los auxilia.
8 Pues la paz estaba lista (preparada) para ustedes desde antes que vuestra
guerra comenzara.
9 Escuchen la Palabra de la Verdad, y reciban en su ser el conocimiento del Altísimo.
10 Vuestra carne nunca antes ha percibido lo yo les estoy diciendo: ni sus corazones
han conocido lo que les estoy mostrando.
11 Mantengan mi secreto, Ustedes quienes son guardados por él,
12 Mantengan mi Fe, Ustedes quienes son protegidos por ella,
13 Entiendan mi conocimiento, Ustedes que me conocen en verdad,
14 Ámenme intensamente, aquellos que me aman,
15 Porque no esconderé mi rostro a aquellos que son míos,
16 Porque los conozco y aún desde antes que entraran en el ser tuve conocimiento de
ellos, y en sus rostros puse mi Sello:
17 Yo modelé sus miembros, y mis propios pechos preparé para ellos, para que
pudieran beber mi Santa leche y así vivir.
18 En ellos me complazco y nunca me avergonzaré de ellos,
19 Son obra de mis manos y del poder de mis pensamientos:
20 ¿ Quién podrá levantarse contra el fruto de mis manos o quién hay que no se
someta ellos?
21 Yo concebí y formé en ellos mente y corazón, y son míos, y por mi propia mano
derecha fueron elegidos:
22 Y mi Justicia va delante de ellos y los guía. Nunca serán despojados de (el
conocimiento de) mi Nombre, porque reposa siempre en ellos.
23 Pidan, y abundará el Amor del Amo y permanecerán en Él,
24 Y serán los amados elegidos del Amado, los que son guardados en el Viviente:
25 Y serán Salvados por el que estaba salvado,
26 Y serán incorruptibles en todas las generaciones por el nombre de vuestro Padre.
Aleluya.

Oda 9

1 Abran vuestros oídos y les hablaré. Denme sus almas que yo también les daré la
mía,
2 La Palabra del Amo y sus deleites, los Santos pensamientos que Él ha pensado
respecto a Su Mesías.
3 Por cuanto la voluntad del Amo es vuestra Salvación, y Sus pensamientos vida
eterna, y vuestro fin la inmortalidad.
4 Enriquézcanse en Dios el Padre, reciban los pensamientos del Altísimo.
5 Sean fuertes y los redimirá su Gracia.
6 Porque Yo les anuncio la Paz, a ustedes sus Santos;
7 Y ninguno de los que me oyen puede caer en guerra, y los que han conocido al Amo
no pueden perecer, y aquellos que le reciben no pueden ser avergonzados.
8 Una corona imperecedera es por siempre la Verdad. Benditos son aquellos que la
han puesto en sus cabezas:
9 Es una gema invaluable; y han habido grandes guerras por obtenerla.
10 Y la Justicia la ha tomado y la ofrece a vosotros,
11 Vistan la corona de la verdadera Alianza del Amo,
12 Y todos los que la han conquistado estarán inscritos en Su libro,
13 Pues su libro es la victoria que les pertenece. Y ella (la Victoria) los verá en su
presencia porque desea que sean salvados. Aleluya.
Oda 10

1 El Amo ha dirigido mi boca con Su Palabra, y ha abierto mi corazón con Su Luz, y


ha hecho morar en mí Su Vida inmortal;
2 Y me concedió que yo pudiera pronunciar el fruto de la Paz,
3 Para convertir las almas de aquellos que están anhelantes de venir a Él y para guiar
a los cautivos a un buen cautiverio de Libertad;
4 Yo fui fortalecido y hecho poderoso y tomé al mundo en mis manos;
5 Porque fue hecho para mí y para alabanza del Altísimo, de Dios mi Padre.
6,Y los Gentiles fueron reunidos, aquellos que habían sido dispersados en el destierro,
7 Y no fui contaminado por ellos porque los amaba, y ellos me reconocieron en las
alturas: y la señal de la luz fue puesta en sus corazones,
8 Y ellos entraron en mi vida y fueron salvados y serán mi pueblo para siempre.
Aleluya.

Oda 11

1 Mi corazón fue rasgado y su flor apareció, y la Gracia brotó de el, y dio a luz fruto
agradable al Amo,
2 Porque el Altísimo circuncidó mi corazón con su Santa Espíritu y halló mi cariño
hacia Él; y entonces me llenó con Su Amor.
3 Y la abertura que hizo en mi se convirtió en mi Salvación, y pude fluir en Su senda
plácidamente por el camino de la Verdad:
4 Desde el principio y hasta el fin yo adquirí Su conocimiento.
5 Fui asentado sobre la roca de la Verdad, donde Él me ha situado,
6 Y las Aguas que hablan tocaron mis labios abundantemente desde la fuente del
Amo,
7 Y bebí y me embriagué con el agua viviente que no muere,
8 Y mi embriaguez no fue una embriaguez sin Conocimiento, pero sí me hizo olvidar
la fatuidad y me volví al Altísimo mi Dios.
9 Y fui enriquecido generosamente, y dejé de lado la falsedad que se expande sobre la
tierra, me despojé de ella y la lancé lejos de mí,
10 Y el Amo me renovó con Su Vestidura, y me poseyó con su Luz, y desde arriba me
concedió el reposo incorruptible.
11 Y llegué a ser como la tierra que florece y se regocija en sus frutos,
12 Y el Amo era como el Sol resplandeciendo sobre la faz de la tierra,
13 Él alumbró mis ojos y mi faz recibió el rocío y la placentera fragancia del Amo,
14 Y me llevó a Su Paraíso, donde esta la abundancia de los placeres del Amo,
15 Y entonces adoré al Amo al ver Su Gloria, y dije: Benditos, oh Amo, son aquellos
que están plantados en tu tierra y tienen un lugar en Tu Paraíso,
16 Y que pueden tomar los frutos de Tus árboles. Ellos han pasado de las tinieblas a la
Luz.
17 ¡Mira! Todos Tus siervos son justos, hacen el bien y se alejaron desde la maldad
hasta Tu Bondad, Y han eliminado la amargura que había en sus raíces cuando fueron
sembrados en tu tierra;
18 Y todo se hizo semejante a una reliquia de Ti mismo, monumento eterno de tus
fieles trabajos.
19 Hay abundante espacio en tu Paraíso, y ningún lugar es improductivo allí dentro,
20 Sino que todo está lleno de frutos, gloria a ti, Oh Dios, y a la delicia del Paraíso
eterno. Aleluya.

Oda 12

1 Él me ha llenado mi boca con palabras de Verdad para que yo pueda comunicarlas:


2 Como caudal de aguas fluye la Verdad de mi boca, y mis labios declaran Su fruto.
3 Él ha hecho que su Conocimiento abunde en mi, porque la boca del Amo es la
Palabra verdadera y la puerta que conduce a Su Luz.
4 El Altísimo ha estipulado Sus palabras, las cuáles expresan Su propia Belleza;
repiten sus alabanzas y son informadoras de Sus consejos; heraldos de sus
pensamientos y correctoras de Sus siervos.
5 Porque lo sutil de la Palabra es inexpresable, y como lo que expresa es su rapidez y
fuerza.
6 Su rumbo no conoce limites. Nunca falla, pues es siempre certera, no se ve donde
desciende ni hacia donde se dirige.
7 Así es su labor y su propósito: es la luz y el amanecer de los pensamientos.
8 Por ella los mundos hablan uno al otro; y en la Palabra estuvieron aquellos que
fueron silenciados;
9 De ella vienen el Amor y la Armonía que comunica a los suyos; a los que han sido
traspasados por la Palabra;
10 Y así ellos pudieron conocer a quién los creo, porque estuvieron en comunión y la
boca del Altísimo les habló, y Su explicación corría por Su cuenta:
11 Porque la morada de la Palabra es el hombre: y su Verdad es Amor.
12 Benditos son los que por medio de ella han entendido todo, y han percibido al
Amo en Su Verdad. Aleluya.

Oda 13

1 He aquí! El Amo es nuestro espejo: abre tus ojos y velos en Él: y aprende la manera
de tu rostro:
2 Y proclama en adelante alabanzas a Su Espíritu: y limpia la inmundicia (falsedad)
de tu rostro: ama su Santidad, y vístete con ella:
3 Y permanecerás sin mancha todo el tiempo delante de Él. Aleluya.

Oda 14

1 Como los ojos de un hijo están en su padre, así están mis ojos, oh Amo, todo el
tiempo puestos en Ti.
2 En Ti está mi consuelo y mi deleite.
3 No me quites Tu misericordia, oh Amo, ni me retires Tu bondad.
4 Extiéndeme todo el tiempo Tu diestra: y sé mi guía hasta el fin, según Tu
complacencia.
5 Déjame ser de tu agrado ante Ti, por Tu gloria y por Tu Nombre,
6 Presérvame del mal, y permite que Tu humildad, oh Amo, more en mi, con los
frutos de Tu Amor.
7 Enséñame los Salmos de Tu Verdad, para que pueda dar a luz frutos en Ti:
8 Abre para mí el arpa de tu Santa Espíritu, para que con todas sus notas pueda
alabarte, oh Amo,
9 Conforme a la abundancia de dulces favores que me darás, concédenos pronto
nuestras súplicas, Porque Tú eres capaz de velar por todas nuestras necesidades.
Aleluya.

Oda 15

1 Como el sol es la alegría de quienes esperan el alba, así me alegra el Amo;


2 Porque Él es mi Sol y Sus rayos me han exaltado, y Su luz ha disipado toda
oscuridad (falsedad)de mi rostro.
3 En Él he adquirido ojos y he visto Su Santo día:
4 Y he obtenido oídos y escuchado Su Verdad.
5 Los conceptos de Su Conocimiento han sido míos, y he sido complacido por Él.
6 Dejé el camino errado y tomé el camino hacia Él para recibir Su Salvación sin
reparos.
7 Salvación que con generosidad me ha otorgado, y conforme a Su excelsa Belleza
me ha formado.
8 Me vestí de incorrupción por medio de Su Nombre, me despojé de corrupción por
Su Gracia.
9 La muerte ha sido destruida delante de mi rostro, y "Seol" fue removido de mi
vocabulario,
10 Se ha puesto de pie la inmortalidad en la tierra del Amo,
11 Se ha dado a conocer a Sus fieles elegidos, y ha sido otorgada sin restricciones a
todos aquellos que creen en Él. Aleluya.
Oda 16
1 Como el trabajo del labrador es la reja del arado: y el trabajo del timonel es guiar la
embarcación,
2 Así los Salmos del Amo son mi trabajo, mi arte y alabanzas:
3 Porque Su Amor nutre mi corazón, y hasta mis labios Sus frutos se derraman.
4 Porque mi amado es el Amo, a Él le cantaré:
5 Porque Su Alabanza me hizo fuerte y tengo Fe en Él.
6 Abriré mi boca y Su Espíritu aclamará en mi la gloria del Amo y Su belleza;
el trabajo de Sus manos y la acción de Sus dedos:
7 La abundancia de su misericordia y el poder de Su Palabra.
8 Porque la Palabra del Amo escudriña en todas las cosas, tanto en las invisibles como
en las que revelan Sus Pensamientos,
9 Para que los ojos vean Sus trabajos y los oídos escuchen sus pensamientos.
10 Él extendió la tierra y asentó las aguas en el mar,
11 Él midió los cielos, fijó las estrellas y estableció la creación,
12 Y Él descansó de Sus trabajos,
13 Y las cosas creadas siguieron sus cursos e hicieron su trabajo,
14 Sin saber como detenerse o desocuparse, Y Sus huestes celestiales están sujetas a
Su Palabra.
15 El lugar secreto del tesoro de la luz es el sol, y el tesoro de la oscuridad es la
noche:
16 Y Él hizo el sol para que el día brillara, pero la noche trae oscuridad sobre la faz de
la tierra,
17 Y sus sucesiones cuentan la belleza de Dios,
18 Y no hay nada que exista sin el Amo, porque Él existía antes que cualquier otra
cosa llegara a existir,
19 Y los mundos fueron hechos mediante su Palabra, y mediante los designios de Su
corazón. Gloria y honor a Su nombre. Aleluya.

Oda 17

1 Fui coronado por mi Dios: mi corona es Viviente:


2 Y fui justificado en mi Amo, Él es mi incorruptible salvación.
3 Fui liberado de lo que es falso, y no fui condenado,
4 Las sofocantes ataduras fueron cortadas por Sus manos: y recibí la faz y la forma de
una nueva persona. entré en ellas y fui salvado;
5 Los conceptos de la Verdad me guiaron, la seguí y caminé sin deambular.
6 Todos los que me vieron se sorprendieron, y fui considerado por ellos como un
desconocido,
7 Pero quien me conoció y trajo es el Altísimo en toda Su Perfección. Él me glorificó
con Su bondad, y alzó mis pensamientos a la altura de Su Verdad.
8 Y desde entonces me dio el sendero de Sus preceptos y abrí todas las puertas que
estaban cerradas.
9 Rompí en pedazos los barrotes de hierro: mis propios grilletes se fundieron y
disolvieron delante de mí, 10 Nada se me cerraba: porque yo era la puerta de todo,
11 Registré todas mis ataduras humanas para soltarlas; Porque no podía permitir
ningún lazo humano o atadura:
12 E impartí mi sabiduría sin reparos: y mi oración nacía de mi Amor:
13 Y sembré mis frutos en los corazones y los transformé dentro de mi mismo: y ellos
recibieron mi bendición y vivieron;
14 Y fueron congregados ante mí y fueron salvados; porque ellos eran míos como mis
propios miembros y yo era su cabeza. Gloria a ti, nuestra cabeza, el Amo Mesías.
Aleluya.

Oda 18

1 Mi corazón fue alzado en el Amor del Altísimo y fue engrandecido: Para que yo
pudiera alabarlo por Su Nombre.
2 Mis miembros fueron fortalecidos para que no cayeran desde Su fuerza.
3 La enfermedad fue removida desde mi cuerpo, que pudo estar de pie y firme delante
del Amo por Su Voluntad, Pues Su reino es Verdadero.
4 ¡Oh Amo! ¡Por el bien de aquellos que carecen de Ti no quites tu Palabra de mi
boca!
5 ¡ Y por el bien de sus obras no reprimas en mí Tu perfección!
6 Que la Luz no sea conquistada por la oscuridad, ni que la Verdad sea ahuyentada
por el engaño,
7 Tu me has destinado a ganar; nuestra salvación es Tu diestra, y vendrán a ti gentes
de todos los lugares.
8 Y Tú resguardarás a cualquiera de las ataduras del mal.
9 Tú eres mi Dios. El engaño y la muerte no están en Tu boca:
10 Porque Tú eres Perfección, y no conoces la falsedad,
11 Ni ella te conoce a Ti.
12 Y no has conocido el error,
13 Ni él te ha conocido a Ti.
14 Y la ignorancia se parece a un hombre ciego; y a la espuma del mar,
15 Y muchos supusieron que el engaño era algo grande;
16 Y entraron en la semejanza de lo falso y se convirtieron en eso, excepto aquellos
que Te han comprendido, Conocido y Te han meditado,
17 Esos son los que no han sido corrompidos en sus imágenes, y de tal modo estaban
en la mente del Amo.
18 Ellos no hicieron caso a los que caminaban en la senda del error,
19 Sino que les hablaron la Verdad con la inspiración que el Altísimo inspiró dentro
de ellos. Alabanza y gran gracia a Su Nombre. Aleluya.

Oda 19

1 Una copa de leche me fue brindada: y bebí en la dulzura de la delicia del Amo.
2 El Hijo es la copa y la leche provino del Padre,
3 Y la Santa Espíritu extrajo la leche: Porque Sus pechos estaban llenos y era
necesario para Él que Su leche fuera liberada,
4 Y la Santa Espíritu destapó su seno y mezclo la leche de los dos pechos del Padre y
brindó la preparación al mundo sin que el mundo lo supiera,
5 Y quienes la recibieron son los elegidos de Su diestra.
6 La Espíritu abrió la matriz de la Virgen y ella recibió concepción y dio a luz, y la
Virgen llegó a ser una Madre con muchas misericordias,
7 Y entró en labor de parto y dio a luz un Hijo, sin incurrir en dolor,
8 Y porque Ella no estaba suficientemente preparada, y no buscó una partera (porque
Él la trajo a dar a luz así) Ella por su propia voluntad dio a luz como los humanos,
9 Y lo parió abiertamente, y lo hizo con gran dignidad,
10 Y lo amó en sus pañales y lo cuidó tiernamente, y lo presentó con Majestuosidad.
Aleluya.

Oda 20

1 Soy un sacerdote del Amo, para Él hago oficio sacerdotal, y a Él ofrezco el


sacrificio de Su Pensamiento.
2 Porque Sus Pensamientos no son como los del mundo ni los de la carne, ni como los
de aquellos que sirven carnalmente.
3 El sacrificio del Amo es Justicia, y pureza de labios y corazón.
4 Presenta tu interior intachable ante Él: y que tu corazón no cause violencia a otro
corazón ni tu alma a otra alma.
5 Tú no adquieras a un extraño por el precio de unas monedas de plata ni busques
despojar a tu vecino,
6 Ni prives a nadie del cubrimiento de su desnudez,
7 Sino que revístete con la gracia del Amo sin restricciones, entra en Su Paraíso y
hazte una guirnalda con hojas de sus árboles;
8 Ponla en tu cabeza, alégrate y recuéstate en Su descanso, y la gloria irá delante de ti,
9 Y recibirás de Su bondad y de Su gracia, y florecerás en la verdad por la Alabanza
de Su santidad. Gloria y honor a Su Nombre. Aleluya.
Oda 21

1 Alcé mis brazos al Altísimo, hasta Su gracia, porque quitó de mí las ataduras: fue Él
quién me auxilió y me levantó hasta Su gracia y Su Salvación,
2 Y me quité las tinieblas y me vestí con Su luz,
3 Y mi alma adquirió un cuerpo libre de pesares o aflicciones o dolores,
4 Y ayudarme cada vez mas era la intención del Amo, pues Su comunión es
incorrupción,
5 Y yo fui exaltado en Su luz; y serví ante Él,
6 Y estuve cerca Suyo alabándolo y confesándolo,
11 Mi corazón se escapó y llegó a mi boca, y ascendió a mis labios, y el regocijo del
Amo se multiplicó en mi rostro, igual que Su Alabanza. Aleluya.

Oda 22

1 Él, quien me bajó de lo alto, también me subió desde las regiones inferiores,
2 Y Él, quien junta las cosas que están en medio, es también quien me lanza abajo:
3 Él es quien dispersó a mis enemigos y adversarios desde la antigüedad:
4 Él es quien me dio potestad sobre las ataduras para que pudiera soltarlas,
5 Él derribó al dragón de siete cabezas usando mis manos: y me asentó sobre sus
raíces para que pudiera destruir su simiente.
6 Tú estuviste ahí y me ayudaste, y en todos lados tu nombre era un baluarte para mí.
7 Tu diestra destruyó su malvado veneno, y Tu mano allanó el camino para esos que
creen en Ti.
8 Tú los elegiste desde los sepulcros y los apartaste de la muerte,
9 Tú tomaste huesos muertos y los cubriste con cuerpos.
10 Ellos estaban inertes, y Tú les diste energía para vivir.
11 Tu camino y tu rostro estaban sin corrupción, pero Tú trajiste el mundo a
corrupción (de muerte) para que todo pudiera ser disuelto y entonces renovado,
12 Para que la fundación de todo pudiera ser Tu roca: porque sobre ella construiste tu
reino; y llegó a ser el lugar donde moran los Santos. Aleluya.

Oda 23

1 ¡Regocijo de los Santos! ¿ Quiénes lo disfrutarán sino Ellos?


2 ¡Gracia dada a los elegidos! ¿ Quiénes la recibirán excepto aquellos que han creído
en ella desde el principio?
3 ¡El Amor de los elegidos! ¿ Quiénes se revestirán de el excepto aquellos que lo han
disfrutado desde el principio?
4 Caminen ustedes en el Conocimiento del Altísimo sin resistirse a Su alborozo y a la
perfección de su Sabiduría.
5 Su pensamiento vino como una carta, Su voluntad descendió de las alturas, y fue
enviada como una flecha desde un arco,
6 Y muchas manos se precipitaron a la carta para apresarla, tomarla y leerla:
7 Pero escapó de sus dedos y ellos se aterraron de eso y del sello que estaba sobre
ella.
8 Porque no les fue permitido a ellos soltar su sello: pues el poder que estaba sobre el
sello era superior a ellos,
9 Pero otros la vieron y fueron detrás de ella porque podían saber donde descendería,
y quién la leería y quién la escucharía.
10 Pero una rueda la recibió y se posó sobre ella.
11 Y se halló en ella una señal del Reino y de su Potestad:
12 Y todo el que trató de detener la rueda fue segado y desechado.
13 Y congregó a la muchedumbre de sus adversarios, y cruzó los ríos sacó de raíz
muchos bosques e hizo un ancho sendero.
14 Las cabezas se inclinaron a los pies de hacia quien corría la rueda, y que tenía una
señal sobre ella.
15 La carta era de mandato, y abarcaba a todas las regiones;
16 Y fue vista a la cabeza de quién fue revelado como el Hijo de Verdad del Altísimo
Padre,
17 Y Él heredó y tomó posesión de todo. Y los pensamientos de muchos fueron
reducidos a nada.
18 Y todos los traidores se apresuraron a huir. Y esos quienes enfurecidos la
persiguieron fueron extinguidos.
19 La carta era un gran libro, escrito enteramente por el dedo de Dios:
20 Y el Nombre del Padre, el del Hijo y el de la Santa Espíritu estaba en el, para regir
para siempre. Aleluya.

Oda 24

1 La paloma revoloteó sobre el Mesías, y cantó sobre Él y se oyó su voz:


2 Y los habitantes se asustaron y los viajeros se perturbaron:
3 Las aves bajaron sus alas y todas las cosas reptantes murieron en sus madrigueras:
Y los abismos que habían estado ocultos fueron abiertos, y ellos clamaron al Amo
simulando a una mujer pariendo:
4 pero no se les dio alimento porque no era para ellos.
5 Y fueron encerrados en los abismos con el sello del Amo. Y perecieron en los
pensamientos de esos que han existido desde tiempos antiguos;
6 Porque eran corruptos desde el principio, y el fin de su corrupción era la vida,
7 Y los que eran imperfectos perecieron: porque no era posible darles una Palabra que
pudieran retener:
8 Y el Amo destruyó las imágenes de todos los que no tenían la Verdad consigo.
9 Porque ellos, quienes fueron elevados en sus corazones pero estaban deficientes de
Sabiduría fueron rechazados porque la Verdad no estaba en ellos.
10 Pero el Amo reveló Su Camino y derramó Su Gracia: y aquellos que la
entendieron, conocen su Santidad. Aleluya.

Oda 25

1 Fui rescatado desde mis ataduras y hacia Ti, mi Dios, Yo corro:


2 porque Tú eres la mano derecha de mi Salvación y quién me auxilia.
3 Tú has sujetado a aquellos que se levantan contra mí,
4 Y ya no los veré más: porque Tu rostro estaba conmigo, y me salvó Tu gracia.
5 Aunque fui despreciado y rechazado a los ojos de muchos: porque estaba ante sus
ojos como caudillo,
6 Pero la fuerza y el auxilio vinieron a mí desde Ti mismo.
7 Tú pusiste una lámpara en mi mano derecha y en mi izquierda: en mí no habrá
ningún lugar que no brille:
8 Y fui vestido con el cubrimiento de tu Espíritu, y me quitaste mi vestidura de piel,
9 Porque tu mano derecha me levantó y quitó la enfermedad de mí,
10 Y me volví poderoso en la Verdad, y santo por Tu justicia; y todos mis adversarios
tuvieron miedo;
11 Y me volví admirable por el nombre del Amo, y fui justificado por Su bondad, y
Su descanso es para siempre. Aleluya.

Oda 26

1 Derramaré alabanzas al Amo, porque le pertenezco:


2 Y deseo pronunciar santas canciones porque mi corazón está con Él.
3 Porque su arpa está en mis manos, y las Odas de Su descanso nunca serán
silenciadas.
4 Yo clamaré hacia Él con todo mi corazón: lo alabaré y exaltaré con todos mis
miembros.
5 Desde el este hasta el oeste está Su alabanza:
6 Y desde el sur hasta el norte está Su confesión:
7 Y desde la cima de las colinas hasta sus extremos se extiende Su perfección.
8 ¿ Quién puede escribir los Salmos del Amo, o quién puede leerlos?
9 ¿ Quién puede instruir su propia alma en la Vida para que pueda ser salvada,
10 O quién puede descansar sobre el Altísimo a fin de que su boca pueda hablar?
11 ¿ Quién es capaz de interpretar las maravillas del Amo?
12 Pues quien pudiera interpretarlo se disolvería para llegar a ser como el
interpretado.
13 Es suficiente entonces Conocer y reposar: pues los Odistas están de pie en el
descanso
14 Como sobre un río de abundante manantial, que fluye al auxilio de aquellos que le
buscan. Aleluya.

Oda 27

1 Extendí mis manos para santificar a mi Amo,


2 Pues la extensión de mis manos es su signo:
3 Y mi expansión es como el árbol recto(o cruz).

Oda 28

1 Como las alas de las palomas sobre sus polluelos; y la boca de los polluelos hacia
sus bocas,
2 Así son las alas de la Espíritu sobre mi corazón:
3 Mi corazón es complacido y regocijado: como el bebé que se regocija en el vientre
de su madre.
4 Yo creí, y por eso estuve en reposo; pues fiable es aquel en quién he creído:
5 Me ha bendecido generosamente y mi cabeza está con Él: y ni la espada ni la
cimitarra me apartarán de Él;
6 Porque estoy preparado para cuando venga la destrucción, y he sido puesto en Sus
inmortales alas:
7 Y Él me mostró Su signo y me dio de beber, y desde entonces la Vida es la Espíritu
dentro de mí y no puede morir.
8 Aquellos que me vieron se maravillaron, porque fui perseguido, y ellos suponían
que había sido devorado, y les parecía que estaba perdido;
9 Y mi opresión se transformó en mi salvación; y recibí desaprobación de ellos,
10 Porque hice el bien a todos los hombres fui odiado,
11 Y se acercaron rodeándome como perros rabiosos, que ignorantemente atacan a
sus dueños,
12 Porque sus pensamientos están corrompidos y su entendimiento pervertido.
13 Pero yo estaba trayendo agua en mi mano derecha y la amargura de ellos resistí
con mi dulzura:
14 Y no perecí, pues yo no era su hermano ni fue mi nacimiento como el de ellos.
15 Y ellos buscaron mi muerte pero no lo consiguieron: pues yo era más antiguo que
sus recuerdos,
16 Y en vano me atacaron y fueron tras de mí sin recompensa,
17 Pues inútilmente buscaban destruir el recuerdo de quién existía desde antes que
ellos.
18 Porque los pensamientos del Altísimo no pueden ser anticipados; y Su corazón es
superior a toda Sabiduría. Aleluya.

Oda 29

1 El Amo es mi esperanza: en Él no seré confundido.


2 De acuerdo a Su alabanza Él me formó, y de acuerdo a su bondad me dió,
3 Y conforme a Su misericordia me exaltó: y de acuerdo a Su perfecta belleza me
puso en lo alto
4 Y me extrajo de las profundidades del Seol, desde las fauces de la muerte me sacó.
5 Tú, Amo, derribaste a mis enemigos y me justificaste por tu gracia.
6 Porque creí en el Mesías, y creí que Él es el Amo;
7 Él me mostró Su señal: y me guió con Su luz, y me dio el cetro de Su poder,
8 Para que yo pudiera dominar las imágenes de las gentes; y humillar la potestad de
los poderosos,
9 Y hacer la guerra con Su Palabra, y tomar victoria con Su poder.
10 El Amo derrocó a mi enemigo con Su Palabra: y este llegó a ser como el rastrojo
que el viento se lleva;
11 Y yo alabé al Altísimo porque exaltó a Su siervo y al hijo de Su criada. Aleluya.

Oda 30

1 Llénense de las aguas de la fuente viviente del Amo, porque esta abierta a Ustedes,
2 Vengan todos los sedientos y tomen un sorbo; descansen cerca de las fuentes del
Amo.
3 Porque su agua es buena y pura y da reposo al alma, y es más dulce que la miel,
4 Los panales de abejas no pueden comparársele,
5 Porque emerge desde los labios del Amo y es nombrada desde Su corazón.
6 Viene sin limites e invisible: y hasta que llega al centro ellos no la perciben:
7 Benditos son los que han bebido y que por eso han encontrado el descanso. Aleluya.

Oda 31

1 Los abismos fueron disueltos delante del Amo: y la oscuridad destruida ante Su
presencia:
2 El error fue desviado y pereció en Su mano: La falsedad no encontró sendero por
donde ir, y fue hundida por la Verdad del Amo.
3 Él abrió Su boca y anunció gracia y alegría, y entonó una nueva canción de alabanza
a Su Nombre:
4 Alzó Su voz al Altísimo y presentó a los hijos que estaban con Él.
5 Y su rostro fue justificado, pues de esta manera Su Santo Padre se lo había dado.
6 Acérquense, Ustedes que han sido atribulados y reciban dicha, sean dueños de sus
almas por Su gracia; y adquieran para ustedes vida inmortal.
7 Ellos me hicieron un deudor cuando fui alzado, cuando ellos me debían: y se
repartieron mi botín, aunque nada se les adeudaba.
8 Pero yo resistí y mantuve mi paz y estuve en silencio como si no me perturbaran.
9 Pues permanecí inconmovible como una roca firme que es azotada por las olas y
resiste.
10 Y soporté su amargura en favor de la humildad:
11 Para poder así redimir mi gente, y heredarles y que no fueran en vano mis
promesas a los padres a quienes les prometí la salvación de su simiente. Aleluya.

Oda 32

1 A los Benditos: que haya alegría en sus corazones, y que la luz de Él more en ellos:
2 Y también las Palabras de la Verdad de quién se originó a Sí Mismo: porque Él es
fortalecido por el Santo poder del Altísimo: y permanece inmutable para siempre.
Aleluya.

Oda 33

1 Nuevamente fluyó la Gracia y despidió a la corrupción y descendió en Él para


hacerla desaparecer;
2 Porque Él destruyó la perdición que tenía delante y a Su orden todo fue demolido,
3 Se puso de pie sobre una elevada colina y pronunció Su Voz desde un extremo al
otro de la tierra:
4 Y atrajo a Sí a todos aquellos que le obedecen; y no se manifestó como si fuera una
persona de mal.
5 Sino que allí de pie estaba una Virgen perfecta, quien estaba proclamando y
llamando y diciendo:
6 " Regresen, vosotros hijos de hombres, y vengan, vosotras hijas de hombres,
7 Abandonen los caminos de la corrupción y alléguense a mí, y entraré en ustedes, y
los haré emerger desde la perdición,
8 Y los haré sabios en los caminos de la verdad, para que no sean destruidos ni
perezcan
9 Escúchenme y sean redimidos. Porque la Gracia de Dios estoy anunciando en medio
de ustedes, y por medio de mí serán redimidos y llegarán a ser benditos.
10 Yo soy vuestro juez, y aquellos que se vistan de mi no serán dañados, pues
poseerán el nuevo mundo que es incorruptible
11 Mis elegidos caminaran en mí, y mis senderos daré a conocer a aquellos que me
buscan, y haré que confíen en mi nombre". Aleluya.

Oda 34

1 Ningún camino es duro cuando hay un corazón sencillo,


2 Ni hay heridas donde los pensamientos son rectos:
3 Ni tampoco hay tormentas en las profundidades de la razón iluminada:
4 Cuando se está rodeado por todos lados de belleza no hay nada que esté dividido.
5 La Semejanza de lo de abajo es lo de arriba; pues todo es de arriba: lo de abajo no es
nada más que el engaño de aquellos que carecen de conocimiento.
6 La gracia ha sido revelada para vuestra salvación. Crean, vivan y serán salvados.
Aleluya.

Oda35

1 El Amo suavemente destiló Su rocío sobre mí,


2 E hizo que una nube de paz ascendiera encima de mi cabeza, la cuál me protege
continuamente;
3 Esto era para mi salvación: pues todo fue sacudido y mis perseguidores estaban
aterrados:
4 Y emergió desde ellos humo y juicio; pero yo estaba tranquilo por causa del Amo:
5 Más que un refugio fue Él para mí, y más que un cimiento.
6 Yo era llevado como un niño por su madre, y me dio por leche el rocío del Amo:
7 Y crecí muy grande gracias a Su generosidad, y descansé en Su perfección,
8 Y extendí mis manos en la elevación de mi alma: y fui hecho justo y redimido
gracias al Altísimo. Aleluya.

Oda 36

1 Descansé en la Espíritu del Amo, que me llevó a las alturas:


2 Me puso de pie en las alturas del Amo, delante de Su perfección y Su gloria,
mientras lo alababa componiendo Sus Odas.
3 La Espíritu me trajo adelante frente al rostro del Amo: y, a pesar de ser un hijo de
hombre, fui llamado el Iluminado, el Hijo de Dios:
4 Mientras lo alababa entre sus elegidos que también lo adoraban grande era yo entre
los poderosos.
5 De acuerdo a la grandeza del Altísimo, así me formó: con Su renovación me
revivió, y me ungió con Su propia Perfección:
6 Y llegué a ser uno de Sus allegados; y mi boca fue abierta como una nube de rocío;
7 Y de mi corazón manó a raudales un diluvio de justicia,
8 Y llegué a Él en paz; y fui establecido por la Espíritu de Su autoridad. Aleluya.
Oda 37

1 Extendí mis manos hacia mi Amo: y hasta el Altísimo elevé mi voz:


2 Y hablé con los labios de mi corazón; y Él me escuchó cuando mi voz le alcanzó:
3 Su respuesta vino a mí y me brindó los frutos de mi trabajo;
4 Y me concedió el descanso por la gracia del Amo. Aleluya.

Oda 38

1 Ascendí a la luz de la Verdad como si fuera dentro de un carruaje:


2 La Verdad me llevó y guío a través de abismos y trampas; y en medio de las rocas y
olas me resguardó;
3 Se convirtió en mi refugio de Salvación y me posó en los brazos de la vida inmortal,
4 Marchó conmigo y me hizo descansar, y no me hizo sufrir con un vagabundeo
incierto porque era la Verdad.
5 Yo no corría ningún riesgo, porque caminaba con Él,
6 Ni cometí ningún error porque Le obedecía.
7 Porque el error huye de la Verdad y no la conoce, y la Verdad prosigue por el
camino correcto,
8 Y lo que nunca antes percibí se hizo evidente para mí: todos esos venenos del
engaño, y las plagas de la muerte que ellos piensan que es dulzura:
9 Y ví al destructor y su destrucción, en el momento en que la novia corrompida se
engalanaba y vi al novio corruptor;
10 Y le pregunté a la Verdad: ¿ quiénes son estos? Y me dijo: 'Este es el engañador y
la mentira:
11 Ellos imitan al Amado y Su Novia: Y conducen al descarrío y corrompen al mundo
entero:
12 E invitan a muchos a su banquete de bodas,
13 Y les dan del vino de su borrachera, y les sustraen así sabiduría y entendimiento, y
los dejan sin inteligencia,
14; Y cuando ya están contaminados y sin razón entonces los abandonan; puesto que
se han quedado sin corazón ni tampoco lo buscan'.
15 Pero Yo fui hecho sabio para no caer en las manos del embaucador; y me felicité
de que la Verdad viniera conmigo,
16 Y fui implantado y viví y fui redimido,
17 Porque mis cimientos fueron arraigados sobre la mano del Amo: Él me puso ahí.
18 Él plantó la raíz, la regó, afirmó y bendijo, y sus frutos son eternos.
19 Y penetró profundamente, brotó y se extendió y estuvo completa y grandiosa,
20 Y el Amo fue glorificado en Su siembra y labranza: por Sus cuidados y la
bendición de Sus labios,
21 Por la bella plantación de Su mano derecha: y por el descubrimiento de Su
siembra, y por los pensamientos de Su mente. Aleluya.

Oda 39

1 El poder del Amo es como grandes ríos:


2 Que llevan de cabeza a aquellos que Le desprecian y enreda sus caminos:
3 Y destruye sus travesías, y captura sus cuerpos y disuelve sus vidas.
4 Porque son más veloces que el relámpago y más rápidos, pero aquellos que los
atraviesan con Fe no son conmovidos;
5 Y aquellos que los transitan sin manchas nada deben temer.
6 Porque en ellos está la señal del Amo, y la señal es un rumbo para aquellos que lo
atraviesan en Su nombre.
7 Vístanse entonces con el nombre del Altísimo, conózcanlo y podrán cruzar sin daño,
porque los ríos te obedecerán.
8 El Amo los ha atravesado por el poder de Su Palabra; los ha cruzado y recorrido a
pie:
9 Y Sus huellas se mantienen firmes sobre el agua, sin ningún problema, pues son tan
firmes como un árbol que está verdaderamente levantado.
10 Y las olas se levantan a Su lado, pero las huellas de nuestro Amo Mesías
permanecen firmes y no son borradas ni desfiguradas.
11 Un sendero así Él ha señalado para aquellos que lo atraviesan después de Él, para
aquellos que se adhieren a la ruta de Su fe y veneran Su nombre. Aleluya.

Oda 40

1 Como la miel emana de los panales de abejas,


2 Y la leche fluye desde la mujer que ama a su niño,
3 Así también fluye mi esperanza hacia Ti, mi Dios.
4 Como el agua que brota de la fuente
5 Así de mi corazón brotan las alabanzas del Amo, mis labios pronuncian alabanzas a
Él y mi lengua dice Sus Salmos,
6 Y mi rostro se exalta con Su felicidad y mi Espíritu se regocija en Su Amor y mi
alma resplandece en Él:
7 Y al venerarlo confío en Él; y mi redención en Él está asegurada:
8 Y Su herencia es vida inmortal, y aquellos que toman parte en ella son
incorruptibles. Aleluya.

Oda 41

1 Todos los niños del Amo lo alabarán, y cosecharán la Verdad de Su fe.


2 Y Sus niños seremos conocidos para Él, por eso cantaremos en Su Amor:
3 Pues vivimos en el Amo por Su gracia: y recibimos vida en Su Mesías:
4 Porque un gran día ha brillado sobre nosotros, y maravilloso es el que nos ha dado
de su gloria.
5 Vamos entonces, todos nosotros unidos en el nombre del Amo, y rindámosle
honores a Su bondad,
6 Y que nuestros rostros brillen en su luz: y que nuestros corazones mediten en Su
Amor noche y día,
7 Seamos exaltados con la alegría del Amo.
8 Todos estarán asombrados al verme, pues soy de otra raza ahora,
9 Pero el Padre de la Verdad se acordó de mí, pues Él me poseía desde el principio:
10 Y por Su generosidad me concibió, y por los pensamientos de Su corazón:
11 Y Su Palabra esta con nosotros a lo largo de todo nuestro camino;
12 El Salvador que hace vivir no rechazará nuestras almas.
13 El es el hombre que fue humillado y exaltado por Su propia justicia,
14 El es el Hijo del Altísimo que apareció en la perfección de Su Padre,
15 Y la luz amaneció desde la Palabra que estaba en Él antes del tiempo,
16 El Mesías es verdaderamente uno; y era conocido desde antes de la fundación del
mundo,
17 Y porque Él podría salvar almas para siempre por la Verdad de Su nombre, un
nuevo cántico se levanta desde aquellos que Le aman. Aleluya.

Oda 42

1 Extendí mis manos y las acerqué a mi Amo,


2 Porque la extensión de mis manos es Su signo:
3 Mi expansión es el árbol extendido, el cuál estaba levantado en el camino del Justo.
4 Me volví pequeño ante aquellos que no me recibieron, pero siempre estaré con los
que me aman.
5 Todos mis perseguidores están muertos; y los que me buscaron después tuvieron
esperanza en mí, porque yo estaba vivo:
6 Y ascendí y estoy con ellos, y hablaré por sus bocas.
7 Porque ellos desprecian a quienes los persiguen;
8 Yo levantare sobre ellos el yugo de mi Amor;
9 Como el brazo del novio sobre la novia
10 Así es mi yugo por encima de aquellos que me conocen,
11 Y como la cama preparada en la casa del novio y la novia,
12 Así es mi Amor sobre aquellos que creen en mí.
13 No fui rechazado aunque pareció ser así,
14 No perecí aunque ellos planearon eso contra mí.
15 El Seól me vio y trató de destruírme,
16 Pero la muerte me lanzó fuera y a muchos junto conmigo.
17 Fui hiel y amargura para ella, y descendí al extremo de sus profundidades:
18 Y los pies y las manos tuvo que soltarme, porque no fue capaz de resistir mi rostro:
19 Y entonces hice una congregación de vivientes de entre sus muertos, y hablé con
ellos por medio de labios vivientes,
20 Para que mi Palabra no fuera infructuosa,
21 Y esos que habían muerto corrieron hacia mí: y clamaron y dijeron: 'Hijo de Dios,
ten piedad de nosotros, y haz con nosotros de acuerdo a Tu bondad,
22 Sácanos de las ataduras de la oscuridad, y ábrenos la puerta para poder emerger
hacia Ti,
23 Porque hemos visto que nuestra muerte no te ha tocado,
24 Déjanos ser redimidos contigo, porque Tú eres nuestro Redentor'.
25 Y atendí sus voces; y mi nombre fue sellado sobre sus cabezas,
26 Porque ellos ahora son libres y son míos para siempre. Aleluya.

También podría gustarte