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Alberto Rojo

“Borges y la física cuántica”

Por Viviana Kahn

¿Qué es lo que más le sorprende o asombra de la física?

La física es un desafío a la intuición. Tendemos a pensar que un cuerpo más pesado cae más
rápido, que el sol sale, que la Tierra es plana, y esas son intuiciones del sentido común. Después la
física demuestra que el sentido común no funciona. La cuántica es un nuevo paso sobre ese
avance contra el sentido común, poco equivalente a lo que sucede en el mundo macroscópico,
poco equivalente a nuestro imaginario concreto, cotidiano. No hay manera de representar
gráficamente o de visualizar (que es una estrategia histórica que hemos tenido) el mundo
cuántico. Eso es algo enigmático. Es un límite de nuestro leguaje y de nuestra comprensión. La
cuántica es la expresión de cierto límite a aquello que podemos llegar a entender.

¿Cuál sería, según su criterio, el concepto central de la Física Cuántica?

El concepto central de la cuántica es que el mundo es intrínsecamente azaroso, que una sola causa
puede dar lugar a muchos efectos, mientras que en la física clásica una causa da un efecto: dada la
causa, el efecto está predeterminado. En la física newtoniana, se especifica el estado de un
sistema ahora, y se sabe cómo se va a comportar en el futuro. En la cuántica hay una violación de
la causalidad.

¿Esto tiene que ver con el principio de incertidumbre?1

Tiene que ver. Pero el principio de incertidumbre podría llegar a interpretarse como que dada la
interacción que uno tiene con el sistema, lo afecta. En el proceso de evolución del universo de
modo microscópico solamente se puede predecir con cierta probabilidad cómo van a ocurrir las
cosas, aún por principio. En La física de Newton, el azar aparece como la limitación práctica. Si
uno, por principio, conociera todas las variables en un momento dado, podría saber cómo se
mueve todo en la estructura. Pero en la práctica no se puede porque hay muchas variables en
juego que se promedian y es imposible dar cuenta de un montón de cosas que se nos presentan
en el mundo macroscópico que es azaroso, de hecho la vida cotidiana está llena de azar. Pero ese
azar es un azar en la práctica y no un azar de principio. Mientras que en la cuántica es un azar de
principio. En lo macroscópico no tenemos acceso a la cantidad de variables que se entreveran y se
mezclan y que dan lugar a que el dado, cuando usted lo tira, tiene un sexto de probabilidad de
salir3. En lo micro no funciona así. No tengo manera, por principio, para predecir. Mientras que,
en la física newtoniana, por principio, tengo una manera de predecir: si yo supiese el ángulo con el
que sale, la velocidad con que va a chocar, cómo es la mesa donde va caer, podría saber cómo cae.

Decía que, desde la física newtoniana, si uno pudiera tomar en cuenta todas las variables, se
podría predecir, pero en cambio en la cuántica no. Me pregunto, entonces, si podemos pensar en
la existencia de una variable desconocida dentro de la cuántica.

Eso es lo que antes creían. Eso es lo que Einstein creía y propuso un famoso experimento para
demostrar que tiene que haber una variable oculta. Y en los ’60 un tal Bell probó un teorema2 que
dice que si hay variable oculta el universo va a actuar así, y si no hay variables ocultas, o sea si el
universo es intrínsecamente azaroso, se va a comportar de otra manera. O sea que propuso un
experimento para resolver un problema filosófico que es descubrir la variable oculta. Para mí es
uno de los teoremas más maravillosos del siglo XX, porque pasa de ser un problema especulativo,
a ser un problema físico que se mide y, desde ahí, las variables ocultas están prácticamente
descartadas.

Esto es lo que no me deja de asombrar de la física cuántica: el hecho de que el mundo parece que
se comporta así y hay una tensión muy grande que algunos ignoran, otros consideran que no es
muy importante y otros se pasan la vida tratando de entender. Hay una visión que dice que la
mecánica cuántica es incompleta. Esta sería la línea de Einstein y todo lo que Einstein dijo al
respecto se ha refutado. Pero todavía hay lugar para que haya una teoría más abarcadora, o
tenemos que comprar la idea de que hay muchos universos. Porque si es intrínsecamente azarosa,
la solución de Borges, lo que anticipa Borges, es que el universo se replica, que hay tantas copias
como alternativas hay, antes de la observación o de la medición o detección con algún aparato de
mundo macroscópico.

¿Esto tiene que ver con el experimento de las rendijas?3


El experimento de las rendijas es el que pone en evidencia esta naturaleza extraña, el resultado
del experimento es que no se puede entender lo que las partículas de luz hacen después de pasar
por un sistema de rendijas. Se envían fotones de uno en uno y van pegando en una pantalla. En
medio de ese trayecto hay una pared con dos rendijas, al final del día cuando tendremos todos los
puntitos por donde pegaron las balas microscópicas, se obtiene un patrón de puntos, que no es
compatible con decir que las partículas pasaron o por una rendija o por la otra. Cada fotón pasa
por las dos rendijas al mismo tiempo. Hay quienes dicen que las partículas no existen, que sólo hay
campos y que cuando tocan la pantalla se convierten en partículas. Es decir, no existirían las
partículas antes de tocar la pantalla, existe un campo y cuando tocan se corporizan, esa es una
visión.

¿Podría comentar algo del experimento de elección retardada y sus consecuencias sobre el
concepto de Tiempo?4

Es un experimento del mismo grado de extravagancias. Va pasando el tiempo y hay algo en el


pasado, hay como una rémora del pasado que queda, persiste. Midiendo ahora parece que se
cambia el pasado, es “como si” cambiara el pasado. No es estrictamente cambiar el pasado. Se
cambia el registro del pasado. Se reescribe. El problema del enigma cuántico es que hay una cosa
simultáneamente en varios lugares y cuando la mide, elige un lugar. Entonces al elegir, ya queda
trabado en una de las posibilidades. De alguna manera hay cosas que van ocurriendo y en el
pasado quedó alguna coherencia, una cosa que todavía no fue medida y al decidir medirla en el
futuro, traba lo que pasó en el pasado. Se cambia el estado en el que estaba en el pasado.

En el prólogo de su último libro Borges y la física cuántica cita a Heisenberg cuando menciona la
“limitación de nuestro lenguaje” para entender las cuestiones que plantea la mecánica cuántica.
Heisenberg formuló el principio de incertidumbre en 1925. Transcurridos ya más de 80 años, ¿le
parece que sufrimos de las mismas limitaciones? ¿Esas limitaciones del lenguaje se acentuaron a
partir de los nuevos descubrimientos?

Sigue persistiendo. En cuántica hablamos de ondas o de partículas, pero en realidad es una


entidad distinta. Vemos ondas o vemos partículas y esto está en el medio y no sabemos cómo
nombrarlo. Cuando uno hila fino, el pasado y el futuro no son tan rígidos, en el futuro quedan
cosas confusas del pasado, no está totalmente definido el pasado. Los registros del pasado son
archivos y estos archivos están perfectamente determinados, pero puede haber archivos que
todavía estén indeterminados, y que cuando haga una medición ahora, usted determina al archivo
del pasado. Es decir, hay una realidad en el pasado que podría modificarse con la medición actual.
Hay que revalorizar estas cuestiones de lo que es el pasado y el futuro, así como hay cosas que en
el espacio están indeterminadas, el tiempo no es una cosa tan distinta del espacio.

¿Hoy cómo define un físico el concepto de tiempo?

Es aquello que mide un reloj. La asimetría futuro-pasado es algo complicado en la física.


Justamente en “El jardín de los senderos que se bifurcan” de Borges o en el concepto de “los
múltiples universos” se insinúa una ramificación. En cada decisión se ramifican muchos universos.
Pero hay ramificaciones que aún no han ocurrido y que cuando usted toca algo en el presente, se
ramifica algo en el pasado. En cada observación o medición cuántica el mundo se ramifica.

Está la flecha del tiempo, pero es sorprendente que la distinción de pasado y futuro es una
distinción en promedio. Si ve microscópicamente, en el mundo clásico al menos, el pasado y el
futuro son indistinguibles. Cuando usted empieza a mirar en escala más grande, se pierden un
montón de variables, entonces aparece la distinción de pasado y futuro. ¿Por qué? El mundo
empezó con un estado así llamado “ordenado”, de entropía baja, y las cosas se fueron
desordenando, y así hay una dirección entre el “orden” y el “desorden” (entre comillas).

¿Podría definir conceptos como la nada y el vacío?

El vacío es un problema de la física: no existe un vacío en la física. El vacío cuenta con cosas que
están bullendo microscópicamente, es un vacío en promedio. Es como si tuviese una cuenta
bancaria que está en cero en promedio, pero tiene deudas, tiene plata, después tiene menos,
tiene algo y después tiene poco, y esas son partículas que aparecen y desaparecen, se llaman
partículas virtuales, tienen una existencia efímera, aparece y desaparece, están constantemente
ahí. El vacío tiene energía en la física cuántica. No existe la nada en la descripción cuántica de la
ausencia de materia. En la ausencia de materia sigue habiendo cosas.

www.albertorojo.com

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1. El principio de incertidumbre es un resultado fundamental de la mecánica cuántica que


sostiene que es imposible conocer a la vez la posición exacta y la velocidad de una partícula
atómica en un momento determinado. Si se tiene gran certeza de una de ellas, la otra se toma
muy incierta. Como para predecir la posición futura de una partícula es necesario conocer tanto la
posición inicial como la velocidad inicial, el principio de incertidumbre impide predecir de manera
precisa el futuro (de una partícula) desde el pasado, aun cuando se conozcan los valores de todas
las leyes de la física.

2. El teorema de Bell es un meta teorema que muestra que las predicciones de la mecánica
cuántica no son intuitivas, y afecta a temas filosóficos fundamentales de la física moderna. Es el
legado más famoso del físico John S. Bell. El teorema de Bell es un teorema de imposibilidad, que
afirma que: “Ninguna teoría física de variables ocultas locales puede reproducir todas las
predicciones de la mecánica cuántica”

3. http://es.wikipedia.org/wiki/Experimento_de_Young

4. Según la física cuántica, el universo no tiene un solo pasado o una historia única. Que el
pasado no tenga forma definida significa que las observaciones que hacemos de un sistema en el
presente también afectan su pasado.

Ello es puesto de manifiesto espectacularmente en un tipo de experimento concebido por el físico


John Wheeler, denominado el «experimento de la elección retardada».En síntesis, un experimento
de elección retardada es como un experimento de doble rendija como el ya descrito en que
tuviéramos la opción de observar el camino que toma la partícula, salvo que en el experimento de
elección retardada posponemos la decisión de observar o no el camino hasta justo antes de que la
partícula esté a punto de chocar contra la pantalla detectora.

Los experimentos de elección retardada conducen a resultados idénticos a los obtenidos si


escogemos observar (o no observar) qué camino ha seguido la partícula iluminando
adecuadamente las rendijas. Pero, en ese caso, el camino que toma cada partícula, es decir, su
pasado, es determinado mucho después de que la partícula haya atravesado las rendijas y
presumiblemente haya tenido que «decidir» si pasa sólo por una rendija, y no produce
interferencias, o por ambas rendijas, y sí produce interferencias.

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