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PAUL Bercherie Fundamentos DE LA Clínica

Psicología (Universidad Nacional de San Luis)

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TEXTO. PAUL BERCHERIE: FUNDAMENTOS DE LA CLÍNICA

La clínica psiquiátrica es esencialmente la observación “morfológica”

(Charcot), la descripción formal de las perturbaciones psicológicas. La Mirada,
parece constituir la metáfora que obsesiona a esta práctica y la estructura.

Sostiene: que para un nuevo marco conceptual, es necesario la acumulación de

conocimientos nuevos, fundados en desarrollos diferentes; el desarrollo de la
práctica y la teoría psicoanalítica compone el comienzo de una nueva era.
La clínica no ha progresado en movimiento igual y unificado, su
movimiento está animado por controversias especialmente de un
espacio franco-alemán dado a 2 escuelas en comunicación y en
oposición constante.
 A los anglosajones, su pragmatismo natural y su desconfianza por los
conocimientos sin consecuencias prácticas inmediatas los alejaron de
esta disciplina.
 Existió una escuela italiana que maduro las nociones surgidas de las dos
escuelas y a remitírselas así afinadas.

LA CLÍNICA como método consciente de sí mismo y sistemático aparece con

Pinel.
Hay un punto de partida; la extensión en el espacio y el momento de
declinación y debilitamiento de este vasto movimiento. Considerado en su
conjunto aparece animado por una progresión dialéctica, efecto de la
interacción de los métodos de investigación, de hipótesis, del saber
acumulado, del encuentro imprevisible de los hechos, de la aparición de
medios técnicos y conceptuales.

CAPÍTULO I: PINEL
Pinel de espíritu claro y sintético muy dotado para la observación. Funda una
tradición: la de la clínica como camino consiente y sistemático.
Representa a Francia S. XVIII el conocimiento es un proceso cuya base es
la observación empírica de los fenómenos que constituyen la realidad, los
fenómenos son agruparlos en función de sus analogías y diferencias;
constituirá clases, géneros, especies... SE DEDICÓ a la aplicación rigurosa de
la doctrina, en el campo de la práctica médica: MEDICINA CLÍNICA,
NOSOGRAFÍA FILOSÓFICA y EL TRATAMIENTO DE LA ALIENACIÓN MENTAL.
Pinel abre la exploración sistemática y ordenamiento de los
fenómenos que lo constituyen, se constituye después el saber positivo
de la psiquiatría.

- Luego Bichat 10 años más tarde, planteará el principio de base del

método anatomo-clinico: la lesión local explica el cuadro clínico y este
la manifiesta en el exterior.
- Falret y su descendencia desbordara y conmociona la clínica de Pinel y
Esquirol.

PINEL CONSIDERA LA ALIENACIÓN MENTAL una perturbación de las

funciones intelectuales del SN. Las ubica en la clase de las neurosis,
afecciones del SN “sin inflamación, sin lesión de estructura”, (no

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entran ni en las flegmasías ni en las hemorragias o las lesiones orgánicas): son

también afecciones sin fiebre. Lo importante es que la lesión no es
constante, por lo tanto representa un elemento contingente.

LA ALIENACIÓN MENTAL forma parte de las neurosis cerebrales, que pueden

ser de dos tipos
1. Abolición de la función (afecciones comatosas)
2. Perturbación de la función (vesanías), que comprenden la alienación
mental, la locura propiamente dicha y algunas otras “enfermedades mentales
que no hacen del sujeto un alienado en sentido estricto:
2.1. Hipocondría 2.2. Sonambulismo 2.3. Hidrofobia

LA ALIENACIÓN MENTAL no forma una clase en la nosografía, no es una

categoría empírica, social (la enfermedades mentales crónicas justifican la
internación).

ESTUDIO DE LA LOCURA: las grandes clases en las que se reparten las

manifestaciones mórbidas:
 1. Manía: el delirio es general concierne a todos los objetos, hay
lesionadas muchas de las funciones del entendimiento (percepción,
memoria, juicio, afectividad, imaginación, etc.) acompañada de viva
agitación. Pinel distingue una subvariedad: manía sin delirio o manía
razonante.
 2. Melancolía: delirio limitado a objeto o serie particular de objetos, las
facultades mentales intactas fuera de ese núcleo delirante y el
comportamiento coherente y comprensible teniendo en cuenta las ideas
delirantes. Estado afectivo y el tema del delirio pueden ser de naturaleza
triste o alegre y exaltada.
 3. Demencia o abolición del pensamiento: el juicio. Es la
incoherencia en la manifestación de las facultades mentales, el desorden
y la movilidad, la existencia automática; la destrucción de la función de
síntesis.
 4. Idiotismo: supresión más o menos completa de la actividad mental,
el sujeto reducido a existencia vegetativa, con restos esporádicos de
actividad psíquica (ensoñaciones dulces, sonidos semiarticulados, crisis
de excitación). Puede ser congénita o adquirida, y a menudo transitoria.

Pinel con su nosología apunta a crear grandes clases fenoménicas.

Nosotros pensamos con categorías muy diferentes: son los pequeños signos los
que importan y los que definen el fenómeno. La manía de Pinel incluye los
estados de agitación maniacos o epilépticos, confusionales, esquizofrénicos,
delirantes, ansiosos, histéricos.

La nosografía clasifica enfermedades mentales en grandes categorías

sirviéndose de los síntomas más notorios. Pinel comienza su trabajo de
separación de las locuras sintomáticas y locuras idiopáticas o esenciales que
continuara por el S XIX con Georget, Magnan y Kraepelin. Se examinan las
perturbaciones de las diversas facultades del entendimiento: sensibilidad,
percepción, pensamiento, memoria, juicio, emociones y afecciones morales,
imaginación, carácter.

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LA MENTE es una manifestación del funcionamiento del cerebro y las

“relaciones de lo físico y de lo moral del hombre” le parecen fundamentales y
permanentes.
LA LOCURA la concibe un desarreglo de las facultades cerebrales y propondrá
cierto n° de CAUSAS:
1. Físicas: a) Directamente cerebrales: golpe violento en la cabeza,
conformación viciosa del cráneo (tamb casos de idiotismo congénito)
b) Simpáticas: que alcanzan el cerebro como consecuencia de sus
lazos con los otros órganos del cpo: afección cutánea, herpes, gota,
diversas fiebres.
2. Herencia, que le otorga un lugar destacado
3. Causas morales: ordenadas en dos rubricas:
3.1. Pasiones intensas y fuertemente contrariadas o prolongadas
3.2. Excesos de todo tipo, irregularidades de las costumbres y del modo
de vida y la “institución” viciosa.

Para Pinel la ACCIÓN DE LAS CAUSAS MORALES son las más numerosas e
importantes en la alienación mental. Ejercen acción sobre el organismo
“todo funcional, perturbándolos”.
Cita a Crichton que elaboró un catalogo de los diversos efectos ejercidos por
las pasiones (alegría, cólera, miedo, tristeza) sobre las vísceras y de las
grandes funciones: circulación y respiración. Adquirida esta perturbación
visceral, el cerebro se altera por vía simpática, siendo las causas
morales una rúbrica de las causas físicas simpáticas.

Las PERTURBACIONES de sentimientos afectivos y carácter constituyen

uno de los síntomas más importantes de la locura con rasgos de
exaltación pasional.
Pinel condena a los empíricos, y a su búsqueda de un remedio “especifico” por
vía del azar. A la idea de que la enfermedad tal como se nos presenta es
esencialmente una reacción saludable del organismo contra la acción de
causas que perturban su equilibrio, cuya terminación natural es la cura.
El método expectante de Hipócrates, donde el médico debe abstenerse al
máximo de toda intervención, que fuera a perturbar el desarrollo del ciclo vital
de la enfermedad. Cuando el organismo haya desarrollado su reacción
sobrevendrá la “crisis”, la enfermedad finalizará, por eliminación de la “materia
mórbida”.

EL TRATAMIENTO MORAL, en cambio cuenta con su apoyo, la mente alterada

puede ser conducida nuevamente a la razón con ayuda de la institución
curativa. Los contenidos de la mente dependen de percepciones y
sensaciones y modificando éstas, se modifica, por medio de la
afectividad “único motor humano”, todo el estado mental.
 El medio ambiente del alienado es capital en la cura. Es necesario
aislarlo en institución especial para retirarlo de sus percepciones
habituales, de las que engendraron la enfermedad o al menos
acompañado en el inicio.
 Sometido a una disciplina severa y paternal, en un mundo regulado por
la ley medica.

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 Por el juego de amenazas, recompensas y consuelos, cuidado y firmeza,

se lo someterá progresivamente a tutela médica y a la ley colectiva de la
institución, al trabajo mecánico y a la policía interior que la reglan.
 El objetivo es subyugar al alienado en dependencia de un hombre para
ejercer sobre él un poder y cambiar el círculo vicioso de sus ideas.
 Para obtener esa transferencia paternal es necesario intimidar al
alienado con demostraciones de fuerza, nunca con violencia ni métodos
degradantes, los furiosos y agitados, se los dejara divagar muñidos del
chaleco de fuerza, o en el peor de los casos encerrados en celdas.
 El asilo es un centro de reeducación modelo y panóptico, sumisión es el
primer a la cura.
 El sujeto adquirirá una educación que se prolongará en los consejos
profilácticos para evitar una recaída.
Aquí perfila un movimiento filantrópico y social, apunta a una reforma de
costumbres, de la sociedad sana y reglada.

En relación a la anatomía patológica de la alienación mental Pinel desconfía de

los sistemas explicativos que dan cuenta de la locura por un daño
material en el cerebro. Las autopsias que practicó no le mostraron nada
específico. Encontró lesiones en personas que no habían presentado
manifestaciones delirantes, la mayoría de las veces ninguna lesión en la locura,
exceptuando el idiotismo congénito, (deformación cráneo- encefálica) parece
frecuente.

Esta posición trae una consecuencia, proporcionar a la idea de

curabilidad de la locura una base teórica: el cerebro no está dañado, la
mente solamente está alterada en su funcionamiento, es posible la
acción del tratamiento moral y la curabilidad potencial de la locura en
proporción muy elevada, para manía y la melancolía.

En la demencia y idiotismo: Las curas son raras: Otorga gran importancia a

la manía intermitente. La intermitencia es el modelo y la prueba de la
curabilidad. La manía intermitente tiene sentido amplio de la alienación metal,
aun Pinel no separó sus categorías nosológicas. El idiotismo adquirido ej. de
manía intermitente.
Esta desconfianza a la anatomía patológica tendrá una consecuencia a
mediano plazo: colocar a Pinel contra la corriente del gran movimiento
anatomico-patologico que Bichat inauguró.

En relación a las neurosis y a la locura será atacado y abandonado por sus

alumnos; su posición sólida, se corresponde mas con la realidad objetiva. Se
produce un hiato entre Pinel y su escuela psiquiátrica, por un lado, y la
medicina de la época por el otro.
Pinel introduce una distancia entre la observación de los fenómenos y el
ensayo de una teoría explicativa que oriente al comportamiento del
practicante. Esa distancia y la jerarquía entre observación y explicación
son la que funda la clínica y la que constituye la ruptura que opera
Pinel rompiendo con la unidad sincrética.

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