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Isla Lemuy
Isla Lemuy
Entre paisajes que encantan y relatos que embrujan, sus habitantes han perpetuado un
modo de vida ancestral ligado la naturaleza y el misticismo. Su historia, sus costumbres y
su patrimonio natural y arquitectónico son algunos de los atractivos que invitan a descubrir
este maravilloso destino.
Tercera isla más grande del Archipiélago de Chiloé, isla Lemuy se ubica 36 kilómetros al sur
de Castro, frente a la localidad de Chonchi. Separada de esta última por el canal de Yal, su
nombre significa “boscoso” en mapudungún y la totalidad de sus 92 km cuadrados
conforman la comuna de Puqueldón. Sus principales poblados -además de Puqueldón- son
Aldachildo, Chulchuy, Detif, Ichuac, Lincay, Liucura, Puchilco y San Agustín, lugares que
aún conservan la esencia chilota.
Las más de 4 mil personas que habitan esta isla se dedican principalmente a la agricultura y
la ganadería de pequeña escala, además de faenas relacionadas con la acuicultura. Sin
embargo, al igual que en diferentes zonas del archipiélago, la actividad turística está siendo
vista como una oportunidad para el desarrollo de sus habitantes. Para conocer más sobre
ello, Revista Puerto a Puerto conversó con Pedro Montecinos, alcalde de la comuna de
Puqueldón (Isla Lemuy).
Por otra parte, uno de los atributos más reconocidos de Isla Lemuy es nuestro patrimonio
arquitectónico, representado por 8 capillas que se encuentran repartidas en diferente puntos
del territorio y de las cuales 3 fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco:
Ichuac, Aldachildo y Detif. Estás fueron levantadas hace más de 100 años y son una
muestra de la técnica de construcción en madera nativa, rasgo que compone la identidad
del archipiélago de Chiloé.
-Nos han comentado que usted tenía un sueño. El Parque Municipal Hueñoco, que
hoy es otro de los puntos turísticos de la comuna ¿Qué me puede contar al respecto?
Fue inaugurado el año 2016 y se construyó con el objetivo de atraer más visitantes a Isla
Lemuy. Antiguamente no contábamos con un lugar idóneo para realizar actividades como
fiestas costumbristas y comunales, por ello definimos su emplazamiento en un sitio que
reúne las cualidades naturales y culturales de nuestra comuna. Desde su ubicación,
distante 600 metros al oeste del poblado de Puqueldón, es posible apreciar el mar, los
bosques y praderas de la isla. Además, ha servido como semillero de papas y cuenta con
algunos símbolos que representan el modo de vida de nuestros primeros habitantes: un
fogón, grandes cestos de fibra vegetal y un letrero de isla Lemuy forrado en lana de oveja
de diversos colores. Así es cómo enseñamos nuestro legado ancestral, para que sea
reconocido por el visitante y valorado por las nuevas generaciones.
¿Cómo ve la evolución del turismo en isla Lemuy en los últimos años y como lo
proyecta a futuro?
Hace ya 7 años decidimos apostar por el turismo como estrategia de desarrollo. Para ello
conformamos una Oficina de Turismo a cargo de Andrea Céspedes, profesional del área
que ha realizado una importante labor: asesorando a los vecinos que desean abrirse paso
en esta actividad, generando nexos con los operadores turísticos de la zona y buscando
financiamiento para proyectos de capacitación turística.
Sin embargo, no ha sido una tarea fácil. Muchas veces el centralismo impide que exista una
mayor asignación de recursos para zonas aisladas y pequeñas como Puqueldón, lo que se
suma a una excesiva burocracia cuando nuestros emprendedores postulan a recursos
públicos o privados. Otra limitante es nuestra conectividad. Sería ideal contar con una o dos
barcazas adicionales durante el verano, a fin de agilizar el flujo de turistas que desean
visitar la isla. Asimismo, esperamos que prontamente se realicen mejoras en las carreteras
que presentan daños, tanto en isla Lemuy como en el resto del archipiélago.
De todas maneras, creo firmemente que en los próximos 10 años Isla Lemuy será muy
diferente. Ya puedo ver que muchos vecinos, incluso personas que han llegado desde
afuera, están creciendo de la mano de sus emprendimientos turísticos y servicios de
hospedaje. sirviendo de motivación y ejemplo para los demás habitantes. Por eso mi
mensaje a los lemuyanos y lemuyanas es que no emigren ni vendan sus tierras. Somos
dueños de un lugar privilegiado, con grandes potencialidades para el desarrollo del turismo.
Como municipalidad haremos todo lo posible para entregar herramientas que les ayuden a
capacitarse. Les pido que confíen en nuestro trabajo y que sueñen igual que nosotros.