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Ediciones

del castillo

I
II
DEMOCRACIA DIRECTA
Y
GESTIÓN OBRERA

EL S.O.E.P.U.,
LA INTERSINDICAL DE SAN LORENZO
Y LA COORDINADORA DE GREMIOS

1962 - 1976

Leonidas Ceruti / Mariano Resels

Ediciones
del castillo

III
© 2006 Ediciones DEL castillo
Urquiza 2033 - Tel. (0341) 4259361
(2000) Rosario - Prov. de Santa Fe
E-mail: libreriasocial@hotmail.com

Hecho el Depósito que marca la Ley Nº 11.723

ISBN-10 987-21617-4-7
ISBN-13 978-987-21617-4-3

IMPRESO EN ARGENTINA

IV
Dedicamos este libro

a Néstor Moglia, ex Secretario del SOEPU y a su


esposa Betty, fallecidos el 8 de mayo de 1973;
a todos los trabajadores del SOEPU -Sindicato de
Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos-, entre
ellos Aníbal Gervasoni, Víctor Arellano, Juan Poles,
Ernesto Santoro, Tito Sacrispanti, Juan Vennanzi,
Armando Marchiol, Ernesto Sosa, y Luis Palmieri;

y muy especialmente a Juan Dowling y al ex


Asesor Letrado del Sindicato Dr. Horacio Zamboni,
guías y consultas obligados de esta investigación.-

V
ÍNDICE GENERAL

VI
PRÓLOGO .........................................................................................1

INTRODUCCIÓN ............................................................................
5

CAPÍTULO I
LA ZONA NORTE DEL GRAN ROSARIO

I. 1.- Características Generales ......................................................


13
I. 2.- P.A.S.A. Petroquímica Argentina: Su
Origen .....................14
I. 2.1.- La Producción .............................................................................17

CAPÍTULO II
EL S.O.E.P.U.
Sindicato de Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos

II. 1.-Aspectos de la Situación Política y Económica .................


23
II. 2.-El Movimiento Obrero entre 1963 y 1968 ...........................
26
II. 3.-El Origen del SOEPU:
Características, Conflictos, Métodos de Lucha,
Debates, Posiciones Políticas ..................................................
33

VII
II. 4.-Democracia Obrera en el Gremio
115
II. 4.1.- Su Práctica, en Distintas Instancias ........................................
115
II. 4.2.- Los Planteos de Democracia Obrera
en la Zona Industrial ..................................................................
120

CAPÍTULO III
EL S.O.E.P.U. Y LA INTERSINDICAL DE SAN LORENZO

III. 1.- Panorama de la Clase Obrera hacia


1969 ............................125
III. 2.- Origen, Composición y Características
de la Intersindical ...................................................................130
III. 3.- La Asamblea Obrero - Popular de Julio de 1971
140
III. 3.1.- Situación Política y
Social .......................................................140
III. 3.2.- La Convocatoria .......................................................................143
III. 3.3.- La Asamblea y la Represión por parte
del Comando del II Cuerpo de Ejército ................................145
III. 4.- El Conflicto de la Aceitera de Molinos Río de la
Plata .....148
III. 5.- Breve Balance de la
Intersindical .........................................152

CAPÍTULO IV
LA LUCHA POR LA CAPACITACIÓN
Y LA ROTACIÓN DEL TRABAJO

VIII
IV. La Lucha por la Capacitación
y la Rotación del Trabajo ......................................................
157

CAPÍTULO V
LA EXPERIENCIA DE LA TOMA DE FÁBRICA CON
GESTIÓN Y CONTROL OBRERO DE LA PRODUCCIÓN

V. La Experiencia de la Toma de Fábrica con


Gestión y Control Obrero de la
Producción .......................173

CAPÍTULO VI
EL S.O.E.P.U. Y LA COORDINADORA
DE GREMIOS EN LUCHA

VI. 1.- Los Antecedentes Económicos y Políticos


del “Rodrigazo” .....................................................................199
VI. 2.- Las Luchas de Junio - Julio de
1975 .....................................202
VI. 3.- El Surgimiento de la “Coordinadora”
y su Significado ......................................................................
209
VI. 4.-Algunas Reflexiones sobre
las Luchas de Junio - Julio de 1975 ......................................
216

IX
APÉNDICE DOCUMENTAL .........................................................
221
Boletín “EL PETROQUÍMICO”
223
1.- CUERPO DE VOLANTES
2.- AUMENTO?
Respuesta
3.- NO MÁS HORAS EXTRAS ! !
4.- 1º DE MAYO, DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJADOR
5.- 32 COMPAÑEROS INGRESAN A PASA Y AL SOEPU
6.- IMPACTO ECONÓMICO
7.- Editorial
8.- LA VERDAD
9.- MAYO 1969
10.- 23 y 30 DE MAYO
11.- EL CONTRASTE
12.- AUMENTO CON DISIDENCIAS
13.- HORAS EXTRAS
14.- CONSEGUIDO EN COMISIÓN DE RECLAMOS
15.- ¿ DIRIGENTES GREMIALES?
16.- NOVEDADES EN LA DISCUSIÓN
DEL CONVENIO COLECTIVO DE TRABAJO.
17.- ARGENTINA 69
18.- PARITARIAS ¿DISCUSIÓN DE CONVENIOS?
¡ERA UNA CARETA!
19.- LA INTERSINDICAL
20.- PLENARIO DE GREMIOS COMBATIVOS
21.- 1.000 MILLONES
22.- LA HUELGA DEL MINISTERIO
23.- LA NUEVA LEY DE ALQUILERES
24.- PORQUE NUNCA NOS SUCEDA
25.- “NUESTRA INSTITUCIÓN NO ESTÁ PARA
LA REPRESIÓN INDISCRIMINADA” General Lanusse

X
26.- Editorial SUB-COMISIÓN DE PRENSA
27.- LA VIOLENCIA OFICIAL
28.- OBREROS PRESTAN PLATA AL ESTADO
29.- OTRO PARCHE MÁS
30.- EL SISTEMA SOCIALISTA
31.- Editorial
32.- EL CIERRE DE MOLINOS
33.- LOS PAROS FAVORECEN A PASA
34..- LUZ NEGRA
35.- QUITE
36.- Editorial SUB-COMISIÓN DE PRENSA
37.- UN 1º DE MAYO
38.- SEÑOR LANUSSE
39.- DEBE TENER LA CLASE OBRERA SU PROPIO PROGRAMA O NO?
40.- Editorial
41.- BUROCRACIA SINDICAL
42.- EL PROBLEMA DE LA SALUD
43.- RENUNCIA
44.- SALARIOS
45.- Editorial
46.- LIBERTAD A TOSCO
47.- RENUNCIA ACEPTADA
48.- Editorial PARITARIAS
49.- ALGO PARA RECORDAR: 17 DE OCTUBRE DE 1945
50.- OBRA DE BESTIAS
51.- HACE UN AÑO
52.- EL TRABAJO EN TURNO
53.- Editorial
54.- BASTA DE REPRESIÓN. BASTA DE PRESOS
55.- DUPERIAL
56.- CONFLICTO EN CERÁMICA “RÍO PARANÁ”
57.- GIRO EN LA OEA
58.- DESPIDO DE DIRIGENTES DE APESUP
59.- SEGURIDAD VERDADERA

XI
60.- NÉSTOR MOGLIA
61.- NÉSTOR
62.- LAS BASES SE ORGANIZAN
63.- EL TIEMPO PERDIDO
64.- PETROQUÍMICOS DESOCUPADOS
65.- SALDOS DE GUERRA
66.- EL QUESO
67.- “…NO VA QUEDAR NI UN SOLO SINDICATITO…”
68.- LISTA VERDE
69.- ADIÓS A LA DICTADURA
70.- Editorial COMPAÑEROS
71.- LA NUEVA POLÍTICA ECONÓMICA
72.- LOS MATADORES DE SILVIA FILLER EN LIBERTAD.
AMNISTÍA EXCESIVA EN MAR DEL PLATA
73.- EN EZEIZA EL 20 DE JUNIO
LA BUROCRACIA REPRIME AL PUEBLO
74.- IMPERIALISMOS Y ALGO MÁS
75.- CAPACITACIÓN / ROTACIÓN
76.- CONTRATISTAS Y DESOCUPADOS
77.- FRENTE A LOS COMPAÑEROS CESANTEADOS
POR CAUSAS POLÍTICAS O GREMIALES DESDE EL AÑO 1955

78.- CONFLICTO EN INDO


79.- LUCHAS DE PAPELEROS Y CERAMISTAS
80.- COGESTIÓN OBRERA
81.- QUIEN ES QUIEN EN EL SINDICALISMO
82.- Editorial
83.- COMPAÑERAS DE EQUIPO DE LIMPIEZA EN LUCHA
EL SOEPU JUNTO A ELLAS
84.- A UN AÑO DE TRELEW
85.- EVITA
86.- LOS OBREROS QUÍMICOS CONTRA DUPERIAL
87.- CONTAMINACIÓN AMBIENTAL
88.- Editorial

XII
89.- COMUNICADO DE PRENSA DE LA C.D.:
FALLECIMIENTO DEL GRAL. PERÓN
90.- 29 DE JULIO:
NUESTRO HOMENAJE A LA COMPAÑERA EVITA
91.- EL ANIVERSARIO DE LA MUERTE DE EVITA
92.- ASAMBLEAS QUE MARCAN UN CAMINO
Asamblea en el Sindicato del 11 de Junio
Asamblea de Fábrica: 12 de Junio
Asamblea de Fábrica: 18 de Junio
93.- EL GENERAL PERÓN Y SU TESTAMENTO POLÍTICO
94.- CRÓNICA OBRERA
95.- EL FLACO MOGLIA: ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO
96.- OPERADORES VOLANTES
97.- Editorial del Secretario General del SOEPU: E. Sosa
98.- ¿ QUÉ PASA CON NUESTRO GREMIO?
99.- LA REPATRIACIÓN DE LOS RESTOS DE EVITA
100.- LA VIOLENCIA, EL ESTADO DE SITIO Y
LA DETENCIÓN DE HORACIO ZAMBONI
101.- DESPUÉS DE DOS MESES DE SU DETENCIÓN
ANTE SU LIBERTAD
102.- NUEVOS COMPAÑEROS EFECTIVOS
103.- CRÓNICA OBRERA
104.- CASO ZAMBONI
105.- HOMENAJE A MILITARES
106.- Editorial
107.- LA CRISIS
108.- CONTRA LA ESCALADA DEL TERROR Y EL MATONAJE
109.- QUIÉN DEBE PAGAR ESTA CRISIS?
110.- LA VIOLENCIA
111.- COORDINADORA DE GREMIOS EN LUCHA
112.- MAMÁ, PAPÁ, MAÑANA NO HAY CLASE
113.- HORAS EXTRAS
114.- Editorial
115.- CONTAMINACIÓN

XIII
116.- AQUÍ, AYER, HOY. ¿MAÑANA?
117.- F. ITURRASPE: HISTORIA REPETIDA DE UN PAÍS “LIBRE”
118.- UN ENFOQUE EQUIVOCADO
119.- A LA MUERTE INÚTIL DE UN OBRERO
120.- Solicitada UNA NUEVA VÍCTIMA DE LA REPRESIÓN:
JOSÉ ALBERTO POLENTA

CITAS .................................................................................................359
CAPÍTULO I ...................................................................................... 359
CAPÍTULO II ..................................................................................... 359
CAPÍTULO III .................................................................................... 362
CAPÍTULO IV ................................................................................... 363
CAPÍTULO V ..................................................................................... 364
CAPÍTULO VI ................................................................................... 364

BIBLIOGRAFÍA ................................................................................365

XIV
PRÓLOGO

Explican los autores, en la Introducción, que una de las razones


-tal vez la principal- de la investigación primero y luego la redacción de
un libro sobre la historia del SOEPU desde su fundación hasta el Golpe
de 1976, ha sido la de romper con lo que ellos llaman el “pacto del
silencio”.

XV
Coincido con ellos -de hecho soy de los primeros que lo
denunciara-, sólo que me parece más apropiado hablar de una
“conspiración del silencio”, que hizo de esta historia “niebla y humo”.
Las razones del olvido son fáciles de ubicar y de entender: ni las
organizaciones guerrilleras, ni los partidos políticos -tradicionales o no
tradicionales- pudieron influir, a pesar de sus intentos, en las decisiones
del SOEPU o de la INTERSINDICAL DE SAN LORENZO.
Por otra parte, el funcionamiento por asambleas -forma por
excelencia de la democracia directa que se rescataba como ideal político-
contrariaba absolutamente la línea militar y por ende verticalista de las
organizaciones guerrilleras y la representación por delegación en los
parlamentarios, de los partidos tradicionales.
Por otro lado, el SOEPU de esos años -que nada tiene que ver con
el actual en materia de lucha económica y social- fue uno de los pocos
casos en que una conducción clasista demostró ser superior a la
burocracia sindical en la lucha económica, medida ésta no sólo por los
métodos sino también -y muy especialmente- por sus resultados. La
burocracia sindical siempre hizo gala de ser mejor, en la defensa del
salario y de las condiciones de trabajo, de lo que eran sus críticos, fueran
éstos peronistas combativos o izquierdistas de cualquier orientación. En
los dos Capítulos especiales dedicados a la solución de la rotación y la
capacitación como repuesta a la necesidad de lo que hoy se conoce como
polifuncionalismo y el de la gestión y control obrero de la Planta de
PASA Petroquímica Argentina por 28 días en 1974, el lector advertirá la
diferencia de este Sindicato y sus hombres con el resto.
Los autores han preferido que “hablen” directamente los pro-
tagonistas y los documentos, limitándose a un interesante análisis de
la situación general, para facilitar -sobre todo a quienes no fueron
contemporáneos de la historia- la interpretación de los hechos y las
opiniones. Ello me parece un verdadero acierto, aunque conspire por su
confusión -propia del momento y de las circunstancias aquellas- contra
el entendimiento de algunos hechos y el análisis propio de los
protagonistas, en aquel momento, sobre los mismos. Temas como la
lucha contra las empresas contratistas, la aplicación de un solo con-

XVI
venio colectivo en la empresa, la bolsa de trabajo regional, el censo de
salud física y psíquica, se entenderían mejor de haber mediado una
separación entre ellos por subtítulos. De todos modos, la riqueza del
material y la amenidad del relato suplen largamente aquel defecto.
Escribiendo este Prólogo a fines de diciembre de 2005, cuando el
Gobierno Nacional avanza sobre el control de precios, leía en las
páginas 102 / 103 el análisis que el SOEPU hiciera en 1973 del Acuerdo
entre la Confederación General del Trabajo y la Confederación General
Económica, especialmente del punto titulado “En Materia Salarial de
Precios y Distribución de Ingresos”, ocasión en que la Asamblea de
Fábrica del 19 de junio reivindicó la plena vigencia de la Ley 14.250 de
Convenciones Colectivas de Trabajo, y me decía que era una pena que el
libro no estuviera ya publicado.
Estoy seguro de no equivocarme al afirmar que este libro será
una guía a tener en cuenta en la lucha por la defensa del salario, las
condiciones de trabajo y la democracia de la clase obrera en este tiempo;
el Apéndice con los artículos de El Petroquímico será una fuente muy
rica en ese sentido.
Finalmente, una aclaración para que el lector tenga en cuenta
desde el inicio de la lectura: Fui abogado del SOEPU desde mayo de
1968 hasta noviembre de 1974, cuando fui preso y puesto a disposición
del Poder Ejecutivo Nacional, lo que tenía que ver también con el
Sindicato. Luego lo fui desde 1986 hasta que el menemismo y la
patronal lo aplastaran luego de la ocupación de la Planta y una huelga
de 29 días en el primer conflicto testigo de tan siniestra década, en
noviembre de 1989, por defender la vigencia del convenio colectivo de
trabajo, iniciándose con ese conflicto la derogación sistemática de la
legislación laboral y convencional propia del neoliberalismo.
Por todo ello es que estas líneas no pudieron ser objetivas;
empero, creo que los lectores entenderán y sabrán comprender.-

HORACIO D. ZAMBONI

XVII
Rosario, 26 de Diciembre de 2005.-

XVIII
IN TRO D U CCIÓ N

La clase obrera argentina, entre 1963 -comienzo del


Plan de Lucha de la CGT- y el Golpe Militar de 1976, vivió
uno de los períodos más ricos en experiencias de su
historia, con luchas en la legalidad y la clandestinidad, años

XIX
de negociaciones, con derrotas y triunfos, con poder
creciente como clase y de sus organizaciones sindicales.
A la vez, enriqueció las vivencias de varias décadas
anteriores, como los cuerpos de delegados, comisiones
internas, la práctica de la democracia de base, las tomas de
fábricas, la organización de huelgas, movilizaciones, paros
activos, el accionar de los sindicatos, etc..
Se produjo un puente histórico entre distintas
generaciones, con prácticas y hábitos diferentes, y la
síntesis de ese proceso llevó a nuevos intentos. Así se
sucedieron acontecimientos, como el Plan de Lucha de la
CGT -entre mayo de 1963 y julio de 1965-, que incluyó la
ocupación simultánea de miles de fábricas en una jornada,
se produjo el crecimiento de la burocracia sindical, el apoyo
de importantes dirigentes sindicales al Golpe Militar de
Onganía en 1966, el Plan de Lucha del ‘67 y su posterior
derrota, el surgimiento de la CGT de los Argentinos con su
Programa del 1º de Mayo de 1968, el protagonismo en el
“Cordobazo” y el “II Rosariazo”, la huelga en El Chocón, la
Intersindical de San Lorenzo, el nacimiento de los gremios
clasistas, las luchas del SITRAC - SITRAM, las experiencias de
los gremios de la Zona Norte del Gran Rosario, el “Villazo”,
la CGT Clasista de Salta, el poder creciente de las
comisiones internas, las Coordinadoras de Gremios en
Lucha que surgieron durante el “Rodrigazo” en el ‘75,
sufriendo la represión de la “Triple A” y las FF.AA. antes y
después del Golpe de 1976.
Es en esa trama que ubicamos el objetivo general de
esta investigación, al abordar el recorrido de la primera
parte de la vida del SOEPU -Sindicato de Obreros y
Empleados Petroquímicos Unidos-, que abarca desde el
comienzo de la instalación de P.A.S.A. -Petroquímica
Argentina Sociedad Anónima- en Puerto San Martín
(Provincia de Santa Fe) en 1962, la posterior creación del

XX
Gremio en 1964, hasta su intervención en la tarde previa al
Golpe Militar del 24 de Marzo de 1976.
Esta búsqueda se centra especialmente en trazar el
desarrollo del SOEPU, que surge como un “sindicato de
empresa, amarillo, pro-patronal”, y realiza un recorrido
hasta plasmar una conformación combativa y convertirse en
un sindicato con varias particularidades, entre ellas la
práctica en todas las instancias de la democracia de base y
la solidaridad brindada en el ámbito local, nacional e
internacional.
A la vez, exploramos dos acontecimientos
protagonizados por los Petroquímicos como fueron, por una
parte, el debate y la elaboración del documento
“Anteproyecto para la Discusión con la Patronal sobre la
Escuela de Capacitación y Rotación en el Trabajo” y, por
otra, la Toma de la Fábrica con Gestión y Control Obrero de
la Producción durante un mes.
En el trabajo, abordamos en forma más amplia la
vinculación de los Petroquímicos con el accionar de las dos
organizaciones obreras que se conformaron en esos años en
la zona industrial: “La Intersindical de San Lorenzo” (1969
- 1973) y “La Coordinadora de Gremios en Lucha” (1975 -
1976); incursionamos en sus orígenes, características,
composición, luchas, y extinción.
Analizamos brevemente, en cada uno de los
Capítulos, el contexto nacional entre 1960 y 1976, años en
que se dieron las distintas experiencias de los Petroquímicos
y en los cuales acontecieron desde restauraciones
“democráticas”, con y sin proscripciones, golpes de Estado,
luchas por la hegemonía, hasta enfrentamientos en el seno
de la clase dominante y de ésta con el proletariado. Fue una
etapa de crisis del sistema capitalista, de la democracia, de
la representación política parlamentaria, con un estado

XXI
deliberativo en las FF.AA., de interacciones entre
gobernantes y gobernados, donde hubo momentos de
mayor coacción y mayor consenso, con grandes luchas del
movimiento obrero.
La segunda parte corresponde al Apéndice
Documental, con más de cien notas, documentos y
pronunciamientos del Boletín del Gremio “El Petroquímico”,
sobre muy variados temas.
En todos los Capítulos, hemos optado por que
“hablen” los protagonistas con sus escritos, pensamientos,
comunicados, testimonios; y fundamentalmente nos
apoyamos en el valioso reservorio documental que es el
Boletín del Gremio “El Petroquímico”. De esa manera,
tenemos un acceso directo a las huellas de lo que fue el
accionar de los Petroquímicos, en parte preguntando a los
testigos, a los actores, intentando reconstruir, conocer los
procesos y entender la historia del Gremio de una forma
más “viva”.
Uno de los objetivos de esta investigación era romper
definitivamente con lo que hemos llamado el “Pacto de
Silencio” sobre la historia de los Petroquímicos del SOEPU y
las luchas de los obreros de la Zona Norte del Gran Rosario.
Nos afirmamos en que, durante muchos años, sólo se
produjeron y conocieron trabajos en el exilio del Dr. Horacio
Zamboni y Juan Dowling, ‘Demandas Laborales y Luchas
de los Obreros Petroquímicos: 1964 - 1974’; Francisco
Iturraspe y José Luis Poles, ‘Movimiento Sindical y
Autogestión: El caso del control obrero en PASA
(Petroquímica Argentina Sociedad Anónima)’; Juan Alfonso
Dowling, ‘Petroquímicos, la Intersindical y la Democracia.
Una experiencia de lucha de los trabajadores en la zona
industrial de San Lorenzo’.

XXII
Una vez recuperada la democracia en Argentina, en
1987, el Dr. Gustavo Guevara realizó el estudio “Avances
para una Historia de la Clase Obrera en la Zona Norte del
Gran Rosario (desde fines de 1950 a 1976)”.
Posteriormente, en 1989, tomando como base todas esas
investigaciones, iniciamos este trabajo en distintas etapas;
lo fuimos presentando en varios Congresos, y comenzaron
los historiadores especialistas en movimiento obrero, la
militancia gremial y política, y los periodistas a descubrir
con asombro lo protagonizado por los Petroquímicos y el
resto del proletariado de la zona industrial en los años
sesenta y setenta hasta el genocida Golpe Militar de 1976.
Se sucedieron algunas publicaciones, charlas, conferencias,
conmemoraciones, micros radiales, entrevistas, citas en
algunos ensayos sobre el tema, y el “Pacto de Silencio” se
fue rompiendo. Luego, organizamos la conmemoración de
los “30 Años de la Toma y Control Obrero de PASA”, y
llegamos hoy a poder publicar este trabajo, después de
variadas dificultades que demora-ron su salida. Pero lo
hemos logrado; para que definitivamente de esto “se hable,
se comente, se difunda”, sea un aporte para la historia de la
clase obrera, y los nuevos investigadores sigan
profundizando en el tema.
Utilizamos distintas fuentes provenientes de diarios y
re-vistas de la época, volantes y declaraciones del
Sindicato, como así también una serie de entrevistas a
miembros de las Comisiones Directivas, obreros de
distintas secciones de la fábrica, asesores legales del
Sindicato, militantes sociales y políticos de la zona
industrial.
Queremos resaltar el aporte y la guía en nuestra labor
del Dr. Horacio Zamboni y del ex petroquímico Juan

XXIII
Dowling, para poder concretar este trabajo, como así
también agradecer las opiniones del Dr. Gustavo Guevara.

Persiguiendo los objetivos mencionados, los ejes


temáticos que abordamos son:
 Características de la Zona Norte del Gran Rosario y de
P.A.S.A. (Petroquímica Argentina S.A.)
 Origen y particularidades del Sindicato.
 El SOEPU y la Intersindical de San Lorenzo: 1969 - 1973.
Origen, conformación, desarrollo, conflictos, y extinción.
 La lucha por la capacitación y la rotación en el trabajo.
 La experiencia de la toma de fábrica, con gestión y
control obrero de la producción.
 El SOEPU y la Coordinadora de Gremios en Lucha: 1975 -
1976.
 Apéndice Documental del Boletín “El Petroquímico”.

LEONIDAS CERUTI - MARIANO


RESELS

XXIV
XXV
CAPÍTULO I

LA ZONA NORTE DEL GRAN ROSARIO

XXVI
XXVII
I. 1.- Características Generales

La zona industrial que analizamos abarca desde


Rosario hacia el norte hasta Puerto San Martín, atravesando
Granadero Baigorria, Capitán Bermúdez, Fray Luis Beltrán y
San Lorenzo.
La misma tomó impulso a partir de la segunda mitad
de la década del ‘50, contando con lugares apropiados y
dotados de infraestructura para la radicación de distintas
industrias. La construcción del Oleoducto y Gasoducto
Campo Duran (Salta) - San Lorenzo, a principios de la
década del ‘60, unido a la Destilería de YPF, sumado a la
posibilidad de tener puerto propio frente al río Paraná,
abundante disposición de agua, espacio físico para el
establecimiento de plantas de gran tamaño (superior al que
caracterizó el proceso industrial de Rosario), accesos
ferroviarios y camineros, contribuyeron al desarrollo y
expansión de industrias químicas, petroquímicas y
derivados del petróleo. Las empresas metalúrgicas no se

XXVIII
consolidaron, a excepción de las de tractores Jhon Deere,
Massey Ferguson y Hanomag, pero sí se asentaron
importantes fábricas de productos alimenticios que
acompañaron el desarrollo zonal.
“El papel protagónico estará en manos de las
industrias pesadas y semipesadas de capital extranjero y
nacional, donde el gran tamaño de las plantas estaban
asociados a un elevado producto por hombre. Estas
industrias pertenecían a las ramas dinámicas de la época y
utilizaban procesos de capital intensivos. Hacia 1970
numerosas empresas que utilizaban insumos químicos o
petroquímicos se habían instalado o estaban planeando
instalarse en la zona”. (1)
Las fábricas más importantes que existían en esta
zona industrial eran:
∗ Químicas: SULFACID, ELECTROCLOR, DUPERIAL,
CELULOSA ARGENTINA, JABÓN SAIPE.
∗ Petroquímicas: PASA ARGENTINA, AGA PETROLERA, YPF.
∗ Ceramistas: SAN LORENZO, VERBANO, ALBERDI.
∗ Aceiteras: MOLINOS RÍO DE LA PLATA, VICENTÍN, CARGILL,
INDO NIDERA, TANCAI.
∗ Metalúrgicas: MASSEY FERGUSON, JOHN DEERE, HANOMAG.
La población del conglomerado industrial oscilaba en
los 80.000 habitantes. El porcentaje del número de
establecimientos in-dustriales en el Departamento San
Lorenzo en relación al área metropolitana del Gran Rosario
-es decir, Rosario, San Lorenzo y Villa Constitución- sobre la
base del Censo Nacional Económico de 1974, era: 12 % de
elaboración de productos alimenticios, bebidas y tabaco; 10
% de industria de la madera y derivados, incluidos muebles;
8 % de fabricación de papel y mercaderías de papel
-imprenta, editoriales-; 55 % de producción de sustancias

XXIX
químicas, derivados del petróleo -carbón, caucho, plástico-;
y 15 % de industrias metálicas básicas. (2)
Pero de acuerdo al porcentaje del valor bruto de la
producción, el 22 % pertenecía a la producción de productos
alimenticios, bebidas y tabaco, el 79 % a la fabricación de
papel y productos de papel, y el 81 % a la industrialización
de sustancias químicas y de productos químicos, derivados
del petróleo y del carbón, correspondían a San Lorenzo con
relación a Rosario y a Villa Constitución. (3)
Sobre la base de los porcentuales mencionados, se
puede inferir que en la Zona Norte del Gran Rosario, las
industrias de productos del petróleo y sus derivados junto
con la producción de papel y productos químicos, tenían un
índice de participación mayoritario en la región.

I. 2.- P.A.S.A. Petroquímica Argentina:


Su Origen

En las elecciones presidenciales de 1958, Arturo


Frondizi -quien se había apartado de la Unión Cívica
Radical- supo capitalizar el fracaso de la “Revolución
Libertadora” y, con los votos del peronismo proscripto tras
el Pacto Frigerio - Perón, logró llegar a la Presidencia de la
Nación. Al asumir, lo hizo con un programa que tenía entre
los puntos principales en el plano económico, de-sarrollar un
complejo industrial integral, poniendo el mayor énfasis en
las llamadas “industrias básicas” o “industria pesada”, tales
como las del acero, química, petroquímica, celulosa y
maquinarias. Todo ello, a través del flujo masivo de
capitales extranjeros, para proveer los recursos requeridos.

XXX
La política industrial significó una apertura sin
restricciones a la inversión externa y se produjo una
concentración creciente en manos de las empresas
extranjeras, que controlaron así importantes sectores de la
economía. “Entre diciembre de 1958, fecha de la
promulgación de la ley de inversiones extranjeras
presentada por Frondizi, hasta 1962, se autorizaron
radicaciones por algo más de 500 millones de dólares, el 90
% de los cuales concentrados en las industrias químicas,
petroquímicas y derivados del petróleo, material del
transporte, metalurgia y maquinarias eléctricas y no
eléctricas. Los 25 mayores proyectos agruparon el 67 % de
las inversiones y un 65 % de ellas correspondía
directamente a empresas norteamericanas (...) cerca del 50
% de la producción de las empresas extranjeras
correspondía entonces a establecimientos que iniciaron su
actividad en 1958 y entre 1960 y 1968 el monto total de las
inversiones norteamericanas en Argentina subió de 472
millones de dólares a 1.148 millones, lo que implica un
incremento del 243 %, mientras que para América Latina
fue del 32 %.” (4).
En la Provincia de Santa Fe, del capital extranjero
invertido en esos años, el 80 % se hizo en las ramas
químicas y petroquímicas. Entre 1962 y 1966, de las quince
fábricas que se instalaron en la Provincia, ocho de ellas se
establecieron en la zona de San Lorenzo.
En síntesis, desde el Gobierno Nacional se trataba de
lograr una inversión masiva de capitales en la industria
pesada, en la infraestructura, y secundariamente en la
renovación del capital constante ya acumulado pero
ineficiente por el atraso tecnológico. Paralelamente, se
debía lograr la capacitación que permitiera poner el factor
humano a la altura de las necesidades del desarrollo
capitalista. Para concretarlo, era necesario invertir capitales

XXXI
públicos o privados, internos o externos, canalizados hacia
las ramas mencionadas.
Fue en ese contexto que el 23 de Agosto de 1962,
PASA -Petroquímica Argentina- comenzó a levantar su
planta industrial de 350 hectáreas, para la producción de
productos químicos y petroquímicos.
PASA construyó, en la zona norte del Gran Rosario, el
complejo petroquímico más importante de América Latina
para la época. Sus instalaciones se encuentran ubicadas en
Puerto San Martín, a ocho kilómetros al norte de la ciudad
de San Lorenzo. Las plantas industriales para producir
caucho sintético y una gran variedad de productos
petroquímicos demandaron una inversión inicial de más de
90 millones de dólares.
Cinco corporaciones norteamericanas unieron sus
respectivas experiencias industriales, conocimientos
técnicos y recursos financieros para constituir la empresa.
Esas Compañías eran: Continental Oil Co., Cities Service,
U.S. Rubber, Fish International Corporation y Witco Chemical
Compañy Incorporated.
Al entrar la fábrica en pleno funcionamiento, sus
productos -al sustituir a los importados- representaron un
ahorro para la economía nacional de más de 20 millones de
dólares anuales en divisas. El crecimiento y el desarrollo de
la industria argentina había creado la necesidad real de
contar con una industria petroquímica en el país y, al mismo
tiempo, el incremento operado en la producción del petróleo
y del gas natural aseguraron el continuo abastecimiento de
las materias primas necesarias para la manufactura de los
productos petroquímicos.
Los trabajos preliminares para levantar la fábrica
consistieron en: nivelación del terreno, trazado y
pavimentación del camino de acceso -4 kilómetros de

XXXII
extensión-, demarcación de calles internas y las primeras
construcciones que sirvieron de base a los grandes tanques
de almacenamiento. El intenso ritmo impreso a los trabajos
-que estuvieron a cargo de Fintar Fish International S.A.,
empresa filial de Fish International Corporation Inc.- requirió
el concurso conjunto de más de 2.000 obreros, con alta
capacitación técnica. La construcción de la planta industrial
demando tres años. (5)
Las máquinas y equipos especializados destinados al
reformador catalítico y planta de aromáticos, planta de
butadieno, planta de caucho sintético, generadores de
fuerza motriz y tanques de almacenamiento, fueron
adquiridos a empresas de Argentina, Estados Unidos, Gran
Bretaña, Japón y México.
PASA, en ese momento, fue la única planta de
procesos totalmente integrada de América Latina y que
resumía en una sola fábrica, la transformación de nafta,
propano y butano, obtenidos de una industria petrolífera en
una amplia gama de hidrocarburos derivados, entre los
cuales el más destacado era el caucho sintético.

I. 2.1.- La Producción

Los principales abastecedores de materias primas


para ser procesadas eran las entonces empresas nacionales
Yacimientos Petrolíferos Fiscales y Gas del Estado. La
primera proveía a la planta de nafta de carga, de la que se
obtiene nafta especial de 90 octanos, propano y butano,
para ser convertidos en intermediarios de la producción de
caucho sintético y estireno. Los hidrocarburos llegaban, a
través del oleoducto, desde Campo Durán -Provincia de
Salta- hasta la Destilería de San Lorenzo, y de allí, mediante
una red de cañerías, hasta el Complejo Industrial. Gas del

XXXIII
Estado, por su parte, construyó un gasoducto para proveer
el gas natural requerido para dotar de energía a la Planta.
En octubre de 1964, PASA puso en marcha su
reformador catalítico, produciendo nafta especial de alto
número de octanos para automotores, y posteriormente -en
diciembre- se comenzó a elaborar benceno y tolueno. El
resto de las plantas se incorporaron a la producción en este
orden: Caucho Sintético SBR, en junio de 1965; Etileno y
Etilbenceno, en septiembre de 1965; Estireno, en octubre
de 1965; Alquilato de Aviación, en noviembre de 1965; y
Butadieno, en febrero de 1966.
Las Secciones que componían PASA eran únicas en su
diseño, así como la Planta de Integración de sus procesos
químicos basados en la utilización de materias primas
argentinas. El uso industrial de los principales productos
era:
∗ Caucho Sintético SBR: Cubiertas para automóviles,
calzado, mangueras, correas, revestimientos de cables y
un sinnúmero de usos más.
∗ Benceno: Elaboración de estireno, fenol, detergentes
sintéticos, anilina, D.D.T., ciclohexano, etilbenceno,
hexaclorobenceno y clorobenceno. Este elemento es la
piedra angular de todo el campo de los productos
químicos orgánicos.
∗ Nafta de Aviación: Combustible empleado en aviones
convencionales a hélice.
∗ Nafta Especial de 90 Octanos: Usada en motores de
alta compresión, aumenta su poder y mejora su
rendimiento. Según un convenio, PASA entregaba toda su
producción de nafta especial de 90 octanos a YPF en San
Lorenzo.
∗ Tolueno: Explosivo Trinitrotolueno (TNT), nafta de
aviación, disolvente, productos farmacéuticos (alcohol

XXXIV
bencílico, etc.), insecticidas, perfumes, colorantes,
espumas flexibles para asientos de automóviles, caucho
sintético SBR, pinturas y revestimientos protectores.
∗ Xilenos: Solventes de pintura.
El Complejo Petroquímico en pleno funcionamiento
tenía, para esa época, la siguiente capacidad de producción
anual:
Productos Aromáticos: 42.000 ton.
Benceno - Tolueno - Xilenos (crudos)
Nafta Especial de 90 Octanos: 306.000 ton.
Etileno: 7.500 ton. - Etilbenceno: 15.000 ton. - Estireno:
14.000 ton.
Butadieno: 32.000 ton. - Butileno: 32.000 ton.
Nafta de Aviación (Alquilato): 50.000 ton.
Caucho Estireno - Butadieno (SBR): 37.600 ton.
La explicación técnica de PASA permite una real
compresión de las características de la fábrica, con
tecnología de punta, empleando obreros con una
preparación técnica de máxima especialización y entre cuyo
personal existían técnicos químicos, mecánicos, etc.,
altamente capacitados, que operaban una planta
semiautomática. Algunos productos eran consumidos en la
producción interna del establecimiento.
En los años siguientes, PASA realizó inversiones para
ampliar su planta industrial y la producción de la misma. En
los primeros meses de 1970, dio a conocer esta publicidad
informando:
“PASA sigue creciendo aceleradamente. Una nueva
inversión de 50 millones de dólares, que constituye la
primera etapa de su plan de expansión, ha sido aprobado
por Decreto 616 /70. Una unidad de craqueo de nafta se
incorporará a las actuales instalaciones, maximizando la

XXXV
capacidad productiva del complejo y disminuyendo su
estructura general de costos. El aumento de capacidad
resultante, permitirá a PASA satisfacer la demanda nacional
de productos básicos, especialmente benceno y butadieno,
por lo menos hasta 1980.
He aquí un cuadro comparativo:
Productos Capacidad Actual
Capacidad Ampliada
Etileno 15.000 T/a 200.000 T/a
Propileno 110.000 T/a
Butadieno 34.000 T/a 69.300 T/a
Benceno, Tolueno
y Xilenos 60.000 T/a 200.000 T/a
Simultáneamente, se asegurarán las materias primas para
la total producción en el país de derivados petroquímicos
tales como ciclohexano, ácido adípico, HMD, caprolactama,
cloruro de vinilo, fenol, anhídrido ftálico, acrilonitrilo, etc.,
para la elaboración de plásticos, fibras sintéticas, cauchos,
pinturas sintéticas, y productos medicinales.” (6).
Durante 1974, se concretó la cuarta expansión de una
unidad que comenzó con 4.600 toneladas y que se llevó a
50.000, con una inversión superior a los 3 millones de
dólares. El producto era el Monómero de Estireno, materia
prima fundamental para las industrias del caucho y del
plástico. Cabe destacar que era un caso único en América
Latina, y que la ampliación fue concebida por los obreros y
técnicos que trabajaban en la empresa.

XXXVI
XXXVII
CAPÍTULO II

EL S.O.E.P.U.
SINDICATO DE OBREROS Y EMPLEADOS
PETROQUÍMICOS UNIDOS

XXXVIII
II. 1.- Aspectos de la Situación Política y
Económica

Durante varios meses, una prédica golpista


proveniente de distintos sectores dio sus frutos el 28 de
junio de 1966, cuando el movimiento encabezado por el
General Juan C. Onganía destituyó al Presidente Arturo Illía.
Contribuyeron para la asonada militar desde los poderosos
intereses de las multinacionales hasta un enorme aparato
en el que intervinieron varios medios de prensa, las FF.AA.,

XXXIX
sus organismos “de inteligencia” y dirigentes sindicales que
se sumaron a la campaña desestabilizadora.
La autodenominada “Revolución Argentina” se apoyó
en el desprestigio del sistema parlamentario ante los ojos
de la clase obrera y de la pequeña burguesía, y contó
inicialmente con el consenso pasivo de las mismas, que
hicieron suyas las consignas lanzadas desde el Gobierno:
“Abajo el Parlamento”, “Abajo los partidos políticos que
nada solucionan”, “Adelante con la Revolución”.
Sin embargo, a medida que la misma fue avanzando
en su gestión, esa “revolución esperada y prometida”
mostró su verdadero rostro al ir profundizándose la crisis, y
la creciente acción represiva ante la lucha de clases en
ascenso fue deteriorando más y más esa Revolución “que
no tenía ni tiempos ni plazos, sino objetivos”.
Los ideólogos del Golpe del ‘66 esquematizaron sus
metas en los llamados “tiempo económico”, “tiempo social”
y “tiempo político”.
En el aspecto económico, los objetivos se centraron
en de- sarrollar la industria pesada y la infraestructura
necesaria para ello, en el difícil contexto que significaba la
coyuntura nacional e internacional. Ha de ser el Plan de
Krieger Vasena el que le dio un aire momentáneo y que
finalmente asfixió aún más al capitalismo argentino. De lo
que se trataba era lograr más plusvalía centralizando el
capital. El proyecto de crecimiento ideado no podía llevarse
adelante dejando librada la acumulación capitalista al libre
juego de las “fuerzas naturales” de la economía. Era
necesario imponer una planificación estatal lo más profunda
posible, en los marcos de una economía capitalista
anárquica por naturaleza.
La obligación de aumentar la proporción interna en el
total de la acumulación tenía una precondición básica:
aumento del excedente generado. En otras palabras,

XL
requería aumentar la parte del producto no insumida en
salarios y en los demás componentes del costo de
producción de mercancías. Por otro lado, por los sectores en
que se debía invertir el mayor excedente acumulado, se
necesitaba llevar adelante una serie de medidas que
permitieran canalizar dicho remanente, de tal modo que se
centralizara para hacer posible así su inversión dirigida. En
esta centralización debía jugar, y jugó, un papel
fundamental la política impositiva, como instrumento para
lograr la derivación de capitales, su centralización en manos
del Estado, y la coordinación con unos centenares de
empresas monopólicas, lo que le permitió -al comienzo-
complementar la planificación del desarrollo capitalista
programado.
El plan inmediato concitó el apoyo del FMI -stand by
por 125 millones de dólares en marzo de 1967- y del
Gobierno de Estados Unidos -préstamo de la Tesorería por
U$S 75 millones-.
Para atraer grandes inversiones, era necesario
retomar una tasa razonable de crecimiento en el corto
plazo, lo que hacía necesario el impulso reactivador del
Estado. La inversión estatal, en especial la destinada a
obras de infraestructura, logró mantener el nivel de
actividad económica en 1967 e impulsó el crecimiento en
1968. No sólo la reducción del déficit fiscal y los préstamos
externos facilitaron los fondos; también fue necesario un
fuerte aumento en las retenciones sobre las exportaciones
agropecuarias de la zona pampeana. La relación de fuerzas
políticas le permitió a Krieger Vasena, desde el aparato
estatal con el apoyo del capital monopolista industrial,
subordinar al capital nacional y a la burguesía agraria a los
patrones e intereses de acumulación.
A partir de diciembre del ‘68 comenzó a romperse uno
de los pilares que posibilitaron la vigencia de la política

XLI
kriegerista: la estabilidad en los precios internos de los
productos agropecuarios. Éstos comenzaron a evolucionar
en franco y progresivo aumento. Esa ruptura tenía su origen
en causas internas e internacionales:
a) En lo interno, se alteran profundamente las condiciones
en que se desarrollaba la producción agropecuaria. En
efecto, la política kriegerista determinó una gran
disminución en la base de ganancias del agro, y sobre todo
en aquellas ramas de su producción ligadas más
directamente a la composición de la llamada “canasta
familiar” (trigo, carne vacuna, etc.). Esta disminución de la
tasa de ganancia llevó a que las inversiones en el agro en
general, y más aún en las ramas mencionadas en
particular, fueran dejando de ser negocio rentable. Esta
menor inversión llevó finalmente a provocar una gran
caída en la producción agropecuaria. Una baja tasa de
ganancias lleva a los capitalistas a derivar sus inversiones
a sectores más lucrativos siguiendo el móvil del
capitalismo: el beneficio. A eso se agregó la acción de la
oferta y la demanda. Efectivamente, la menor
productividad por los factores mencionados disminuyó la
oferta al mercado de los productos correspondientes, los
cuales ascendieron su precio.
b) En lo internacional, los precios de los productos
agropecuarios deprimidos en el ‘67 - ‘68 comenzaron a
subir, siendo un claro ejemplo la evolución del precio de la
carne.
Las causas internas e internacionales señaladas
constituyeron los determinantes principales del ascenso en
los precios de las mercancías que, hasta fines del ‘69, se
pudieron mantener en baja.
En síntesis, los principales pivotes en los que se
asentó todo el desarrollo capitalista desde el ‘66 o, para

XLII
decirlo de otra manera, los principales apoyos que
permitieron lograr la mencionada acumulación interna de
capital, fueron:
a.- Aumento de la extracción de plusvalía a la clase obrera
(absoluta y relativa) que, a través de su transformación
en capital, satisface las necesidades mínimas de
inversión y desarrollo capitalista programado. Su
contrapartida natural fue la disminución de la
participación del salario dentro del producto económico
global.
b.- Gran aumento de la presión impositiva, que constituyó
uno de los instrumentos fundamentales para canalizar y
centralizar una mayor parte de esa plusvalía globalmente
aumentada, de acuerdo con lo mencionado en el punto
anterior.
c.- Derivación de capitales del agro a la burguesía
industrial, comercial, exportadora y, muy especialmente,
al Estado. Esta derivación de capitales al Estado fue parte
de los mecanismos utilizados para centralizar esa
plusvalía originada internamente y, a partir de esto,
canalizarla bajo la forma de inversiones en la
infraestructura y secundariamente en algunas ramas de
la industria pesada.
d.- Política exportadora tendiente a lograr una balanza
comercial favorable, de tal modo que -además de
satisfacer las importaciones necesarias para desarrollar el
ciclo económico- se compensasen las salidas de capital
hacia la economía mundial, en conceptos tales como la
amortización de deudas, remesas de ganancias, fletes,
etc..
e.- Los empréstitos públicos contratados constituyeron el
pivote que aquí queremos destacar. Los mismos fueron
elevando la deuda externa e interna del Estado, pero

XLIII
eran necesarios al plan en su conjunto, y muy
especialmente para poder mantener la estabilidad
monetaria, requisito importante para desarrollar una
política exportadora con las características señaladas.

II. 2.- El Movimiento Obrero entre


1963 y 1968

El sindicalismo en el ámbito nacional, en enero de


1963, celebró el Congreso Normalizador de la CGT, en el
cual se eligió una nueva conducción, formada por dirigentes
de las 62 Organizaciones Peronistas y de los gremios
independientes, en partes iguales. Además, se decidió un
Plan de Lucha que tuvo cinco etapas, desde mayo de 1963
hasta julio de 1965, con un programa de gobierno que
planteaba:
“En lo social: libertad de los presos sociales y políticos,
esclarecimiento de secuestros, investigación de torturas,
derogación de las leyes represivas, restitución de las
personerías gremiales, levantamiento de la clausura de
locales sindicales, inmediata solución de los conflictos
gremiales, autonomía para las cajas de previsión,
cumplimiento del aporte de los empleadores,
mantenimiento y creación de fuentes de trabajo,
participación de los trabajadores en la administración de
las empresas, reincorporación de los cesantes,
prohibición de despidos en masa, derogación del permiso
para que las mujeres trabajen de noche, créditos del
Banco Hipotecario Nacional para la construcción de

XLIV
viviendas populares, jerarquización de la enseñanza
pública.
“En lo económico: solución al problema de los salarios y
jubilaciones, salario mínimo, vital y móvil, actualización
de los salarios con relación al costo de la vida por parte
de comisiones paritarias, participación de los trabajadores
en los órganos de conducción de la vida económica,
control de costos y fijación de precios máximos para los
artículos de primera necesidad, rebaja de aforos
aduaneros para materias primas destinadas a la industria,
más gravámenes para importaciones suntuarias, créditos
para la producción y prohibición de las exportaciones de
capitales nacionales, rebaja de impuestos a las ventas,
control de cambios, represión a la especulación, de los
negocios públicos y del contrabando, anulación de los
contratos petroleros, eliminación del déficit en el
presupuesto, fomento de la producción cultural y de la
asistencia social, reforma agraria, defensa de la
producción del campo argentino, estímulo a las
cooperativas agrarias, expansión de la marina mercante.
“En lo político: retorno a la Constitución, libertad de
prensa, modificación del estatuto de los partidos políticos,
amnistía para todos los ciudadanos, eliminación de los
servicios de inteligencia y represión, defensa de los
bienes patrimoniales, esclarecimiento de la desaparición
de Felipe Vallese, vigencia del derecho de
(1)
autodeterminación de los pueblos.” .
El inicio de la Primera Etapa del Plan de Lucha se
programó para el 27 de mayo de 1963, continuando con
una semana de protesta, culminando el 31 de mayo con una
huelga general nacional de 24 horas.
Luego de la asunción a la Presidencia del radical
Arturo Illía, la relación del movimiento obrero con el

XLV
Gobierno fue conflictiva desde el comienzo. Con los años, en
1970, en un acto proselitista del radicalismo, se denunció
que el Plan de Lucha de la CGT fue gestado por Levingston y
Alonso. (2)
A partir de la segunda mitad del ‘63, el sindicalismo
sufrió un aislamiento relativo y una crisis de la unidad
sindical. El 6 de diciembre, la CGT convocó a la primera
huelga nacional y, al mes, el Comité Confederal decidió el
calendario de la Segunda Etapa del Plan de Lucha, que
consistió en ocupaciones masivas de fábricas durante mayo
y junio.
El movimiento obrero del país, en esa época, estaba
organizado a través de distintos agrupamientos. Por una
parte, se encontraban las 62 Organizaciones, que
aglutinaba a la mayoría de los sindicatos de obreros
fabriles; por otra, los Gremios Independientes, entre los que
encontraban sindicatos importantes como la Unión
Ferroviaria y la Federación de Trabajadores de Luz y Fuerza;
además el Movimiento de Unidad y Coordinación Sindical
(MUCS), de orientación comunista; y finalmente, una
agrupación antiperonista que no formaba parte de la CGT,
los 32 Gremios Mayoritarios Democráticos.
El 1º de mayo de 1964, se reunió el Comité Central
Confederal de la CGT, el cual aprobó “poner en ejecución la
Segunda Etapa del Plan de Lucha en la siguiente forma:
a) entre el lunes 18 de mayo y el día 15 de junio, ocupación
parcial, zonal y por grupos en la forma que indicara el
Consejo Directivo de la CGT;
b) entre el 15 y el 16 de junio, como culminación de esta
Segunda Etapa, ocupación total y simultánea en todo el
país por el término de 24 horas;
c) el Consejo Directivo de la CGT planificará con la consulta
correspondiente a los organismos confederados todas

XLVI
estas acciones de lucha a los efectos de una perfecta
eficacia y sincronización; ...”. (3)
Las masivas ocupaciones de fábricas se desarrollaron
a lo largo de siete operativos, entre el 21 de mayo y el 24
de junio de 1964. Las jornadas elegidas fueron el 21, 27 y
29 de mayo, 2, 3, 5, 18 y 24 de junio, en las cuales -según
datos de la CGT-, 3.913.000 trabajadores ocuparon 11.000
establecimientos. (4)
El Plan de Lucha continuó con la Tercera Etapa, que
comenzó el 3 de agosto de 1964, para exigir al Gobierno “el
cambio de estructuras económicas, sociales y políticas”.
Esta vez, las medidas de lucha fueron los cabildos abiertos
entre agosto y septiembre. Mientras que durante noviembre
y diciembre se desarrolló la Cuarta Etapa, con
concentraciones y marchas en distintas ciudades, para
culminar con una huelga general por 48 horas el 17 y 18 de
diciembre. Ese mes, además, dio comienzo el Operativo
Retorno de Perón al país.
Posteriormente, en julio, la CGT Nacional inició la
Quinta Etapa del Plan de Lucha, con marchas y actos en
Capital Federal y Gran Buenos Aires. A la vez, el 17 de
octubre, la Unión Popular realizó un acto en Parque de los
Patricios, donde hubo una fuerte represión.
A comienzos de 1966, surgieron en Tucumán las “62
Organizaciones de Pie junto a Perón”, encabezadas por
Framini y Olmos, en oposición a las “62 Organizaciones”
hegemonizadas por Vandor, quien las descalificó, en una
declaración, llamándolas “62 de Pie... junto al troskismo”.
En los meses siguientes -como hemos señalado-,
gremialistas como Vandor, Coria y Alonso, conspiraron
activamente para el derrocamiento de Illía, y su presencia
en la asunción de Onganía fue una muestra del aval de los
jerarcas sindicales. A los días, la firma del Convenio de los

XLVII
Metalúrgicos en la Casa de Gobierno fue otro símbolo de la
relación del ‘Lobo’ Vandor con los militares golpistas.
Entre las primeras medidas tomadas por la Dictadura
que afectaron a la clase obrera, estuvo la suspensión por
cuatro meses del Decreto Nº 969 /66 -dictado por el
Gobierno de Illía- devolviendo la personería gremial a varios
sindicatos que habían sido sancionados durante el gobierno
radical. A continuación, se promulgó la Ley Nº 16.936 de
‘Arbitraje Obligatorio’, medida duramente criticada por los
sindicalistas, ya que la misma limitaba el derecho de
huelga. Además, Onganía ordenó que fuesen intervenidos
varios gremios, como el Sindicato de Prensa y Canillitas,
Sindicato Unido Portuarios Argentinos (SUPA) luego de una
huelga de varias semanas, Trabajadores del Pescado de Mar
del Plata, Municipales de Córdoba, Empleados del Tabaco.
Producto de las disposiciones tomadas en materia de
legis-lación laboral y del plan económico, el sindicalismo
respondió con varios paros, como en General Motors,
empleados de farmacia, lecheros, papeleros, textiles,
metalúrgicos, transporte, portuarios, maestros, de la
construcción, y en Tucumán, los enfrentamientos de los
obreros del azúcar con el Gobierno llevaron a la ocupación
de varios ingenios azucareros, manifestaciones, asambleas,
lo que originó una fuerte represión, con la trágica muerte de
Hilda Guerrero de Molinas. De esa manera, se llegó al
primer paro general a nivel nacional, el 14 de diciembre de
1966.
La CGT Nacional decidió, a principios del ‘67, dos
medidas que terminaron en un rotundo fracaso: el Plan de
Lucha del 22 de febrero y el Paro General del 1º de marzo.
La dictadura contestó también con dos medidas: la
intervención de más gremios, como la UOM, la Unión
Ferroviaria y el Sindicato Único Petroleros del Estado -entre
otros- y reflotó el Decreto Nº 969 /66 de Illía.

XLVIII
La agresión hacia las conquistas históricas de la clase
obrera continuó en los años venideros. Agustín Tosco las
resumió en esta síntesis: “retiro de personería a sindicatos,
desconocimiento de las representaciones laborales en
organismos del Estado, imposición del arbitraje obligatorio,
anulación del salario mínimo, vital y móvil, legislación
contra el derecho de huelga, anulación de la Ley 1884 de
indemnización reduciendo sus montos a la mitad, cesantías,
suspensiones, rebajas de categorías, pérdidas de salario,
suspensión de la estabilidad en varias convenciones
colectivas de trabajo, aumento de la edad para jubilarse y
régimen de alquileres de libre contratación”. (5)
Luego del fracaso de las medidas de la CGT a
comienzos del ‘67, creció la relación de los sindicatos
colaboracionistas, encabezados por Coria, con el Gobierno.
Posteriormente, en el Congreso Normalizador ‘Amadeo
Olmos’ de la CGT, del 28 al 30 de marzo de 1968, se produjo
la fractura del sindicalismo y surgió la “CGT de los
Argentinos” (CGTA), siendo elegido Raimundo Ongaro como
Secretario General. Éste fue apoyado por un amplio arco
ideológico de gremialistas, mientras que se retiraron del
Congreso tanto vandoristas como colaboracionistas,
constituyendo la “CGT de Azopardo”, la que pasó a ser la
“CGT oficialista y colaboracionista” y, en las discusiones con
la CGTA, levantaba la consigna: "Primero la unión, después
la lucha”, en tanto que la Central -comandada por Ongaro-
le respondía planteando: "Primero la lucha, después la
unión”.
Dentro de la CGTA confluyeron varios sectores, entre
los cuales se destacaron:
∗ Direcciones Sindicales, que se enrolaban en el
“peronismo duro”, como Telefónicos, Sanidad, etc..
∗ Direcciones Sindicales influenciadas por el radicalismo y
los socialistas democráticos, expresados en Ferroviarios

XLIX
(Scipione), Viajantes (Arrausi), etc..
∗ Sectores sindicales que respondían a la política del
Partido Comunista y a grupos políticos, como el Partido
Comunista Revolucionario (PCR), Partido Revolucionario
de los Trabajadores, ex Movimiento de Liberación
Nacional, etc..
∗ Direcciones sindicales ideológicamente social -
cristianos, políticamente vinculados a sectores del
peronismo, como el ongarismo en el movimiento obrero,
la UNE en el movimiento estudiantil, sacerdotes del
Tercer Mundo, etc..
Los grupos de raíz marxista, especialmente el PCR y
otros no marxistas como UNE y FEN, expresaban su
influencia en la CGTA por la conjunción de un doble
fenómeno:
1.- Al formarse la CGTA, ésta pasó a aglutinar también a la
oposición antidictatorial y, desde ese punto, influyeron en
los sectores mencionados por constituir el grueso de la
dirección estudiantil, especialmente en aquel momento
del PCR.
2.- En el caso de la UNE y la FEN, lo hicieron a través de la
estrecha relación que éstos tenían a nivel político con
diversas direcciones sindicales de la CGTA, de cuño
nacionalista, peronista y social - cristiano, además de
influir por el caudal estudiantil que aportaban.
Todo ese conglomerado de fuerzas políticas,
sindicales y estudiantiles que se expresó en la CGTA o “CGT
de Paseo Colón”, lo hizo tras un programa antiimperialista,
antimonopolista y antioligárquico. Además, dicha Central
Obrera fue el producto de la presión social del proletariado
que, poco tiempo después del 28 de junio, fue adoptando
posiciones antidictatoriales y al mismo tiempo de la
necesidad, por parte de la clase obrera, de expresarse en

L
una organización sindical para su lucha económica ante las
medidas que la Dictadura tomaba.
En abril de 1968, un sector del Movimiento Obrero de
Rosario y del Cordón Industrial lanzó una convocatoria
titulada “Por una CGT... sin compromisos o ataduras
espurias”, donde se afirmaba: “Asumimos la
responsabilidad que el momento nos exige, UNIR en torno a
esta Regional de la CGT, a todos los que, sin compromisos o
ataduras espurias, entendemos que a los trabajadores se los
arma de fe y de ansias de lucha, con posiciones claras, que
no dividen, sino que unifican y sirven para hacer surgir
dirigentes leales a las ideas e intereses del pueblo
trabajador.” (6). Posterior-mente, el 17 de ese mes, un
plenario de 27 gremios conformó la “CGT de los Argentinos
Regional Rosario”, que adhirió a la Central Obrera que
lideraba Raimundo Ongaro, aprobando lo resuelto en el
Congreso Normalizador.

LI
II. 3.- El Origen del SOEPU:
Características, Conflictos, Métodos de
Lucha, Debates, Posiciones Políticas

Durante el gobierno de Frondizi, luego de varias


negociaciones, distintas empresas multinacionales
obtuvieron la aprobación para establecer “sindicatos por
empresa”. Entre las más importantes estuvieron las cuatro
plantas de FIAT -tres en Córdoba y una en Buenos Aires- y
PASA Petroquímica. Los mismos estaban facultados a
negociar convenios, y “en el período 1958 - 1966 distintos
titulares del Ministerio de Trabajo autorizaron un número
cada vez mayor de esos convenios por empresa, lo que
socavó el sistema de contratos por industria, de alcance
nacional, estipulado en la Ley Nº 14.250 de Convenciones
Colectivas; esto modificaba principios tradicionales de la
estructura gremial peronista” (7). Por esa vía se especulaba
que al negociar salarios y condiciones de trabajo por
empresas se debilitarían las posiciones obreras, al
apartarlas de las negociaciones nacionales.
Ese fue el origen del SOEPU, que se fundó en el año
1964; y. al decir de un petroquímico, como un sindicato de
empresa, “dócil y amarillo”, con acción geográfica limitada
al radio de acción exclusivamente de los departamentos de
Rosario y San Lorenzo, que “fue creciendo y desarrollándose
con el transcurso de los años hasta plasmar una
personalidad combativa, clasista y democrática que
mantendría hasta el momento de su intervención, en 1976.”

LII
(8)
. Sus integrantes eran mano de obra altamente
calificada, sumando más de mil obreros en algunos años.
Los primeros dirigentes del Sindicato fueron
“designados” por la empresa. Sus posiciones eran pro-
patronales y, tras su breve mandato, fueron acusados de
corrupción. Firmaron el primer convenio colectivo de trabajo
el 23 de junio de 1965, con vigencia hasta abril de 1966.
A los meses de la creación del Sindicato, un conjunto
de obreros comenzó a “reunirse y charlar sobre el sindicato
y una serie de problemas que teníamos los trabajadores”,
nos comentó Juan Dowling, ex obrero petroquímico, quien
continuó su relato sobre el proceso que se inició con la
constitución de una lista opositora y se prolongó con el
triunfo en las elecciones del gremio, destacando que:
“Nosotros habíamos comenzado a ganar fuerza en el Cuerpo
de Delegados de Sección, que juntamente con la Comisión
Directiva (CD) constituían los representantes de los
trabajadores ante la patronal. El 1º de mayo de 1967, a
pesar del estado de sitio implementado por la Dictadura
Militar de Onganía, un grupo de trabajadores petroquímicos
realizamos la primera reunión para constituir una lista, la
Verde, para participar de las elecciones sindicales
convocadas por un Triunvirato Provisorio, que había
suplantado a la Comisión Directiva, en la dirección del
SOEPU. Días después, enfrentando un aparato de
intimidación y persecución, con amenaza de despidos, por
escasos trece votos ganamos la dirección de nuestro
Sindicato, derrotando a la lista Blanca, apoyada, dirigida y
financiada por la empresa”. (9)
La Lista Verde se conformó con obreros jóvenes y
otros veteranos, de variado origen político; en su mayoría
eran peronistas, otros provenientes de la Federación Juvenil
Comunista, algunos socialistas, como así también miembros
de la Juventud Católica e independientes.

LIII
Estos y otros hombres -de distintas vertientes
ideológicas, con variadas experiencias sindicales, diferente
formación política- comenzaron a actuar en conjunto en el
Gremio. Al respecto, en el Boletín del mismo afirmaron:
“La diferencia de niveles entre los componentes de
nuestra C.D. acentuaba aún más esa incoherencia
existente; de ahí que un par de compañeros redactó una
pequeña fórmula de acuerdos que tiende a despojarnos
de posiciones personales y a obligarnos a todos al trabajo
permanente por tres objetivos: uno inmediato, el trabajo
permanente por las reivindicaciones de los obreros petro-
químicos; otro a mediano plazo, la concientización y
organiza-ción de las bases; y un objetivo final que se dará
a largo plazo y que será la liberación de los trabajadores.
También definimos una política de organización que la
sintetizamos en luchar contra la patronal por mejores
conquistas, contra la burocracia sindical, contra el
sectarismo y partidismo dentro de la organización gre-
mial que ponga en peligro la unidad del gremio y
aceptamos un método para todo: la aplicación de la
democracia obrera en todos los niveles, con lo cual
conseguiremos la discusión de distintos problemas sin
distinción de razas, religiones o partidos.” (10).
Desde que la Lista Verde se hizo cargo del gremio, los
dirigentes no percibieron remuneración alguna por su
función. Como sucedía en la mayoría de los sindicatos del
cordón industrial, los integrantes de la CD concurrían
diariamente a ocupar sus puestos en la planta industrial y
realizaban sus tareas sindicales “durante y fuera de las
horas de trabajo”. Esta fue una modalidad de desempeñar
la actividad gremial destacada por los compañeros de
trabajo.
En el SOEPU se dio un movimiento desde la base que

LIV
generó un nivel de organización singular, con
reivindicaciones y métodos de lucha novedosos,
conformando una corriente antiburocrática, antipatronal,
sumamente democrática y solidaria, con un alto grado de
protagonismo de los trabajadores.
Por otra parte, los sindicatos de la zona industrial de
San Lorenzo presentaban caracteres atípicos en relación al
conjunto de los del resto del país, como el hecho que la
burocracia sindical no hegemonizara la mayoría de ellos. En
las fábricas de los ceramistas, químicos, petroquímicos,
jaboneros, químicos papeleros, crecieron grupos clasistas
que en muchos casos accedieron a la dirección de los
Gremios.
Dichas agrupaciones, clasistas y democráticas,
lograron un gran nivel de movilización, lo que llevó a la zona
de San Lorenzo a transformarse en una de las más
combativas del país. Se concretaron distintas medidas de
lucha, tales como paros, tomas de fábricas con o sin gestión
de la producción, diversos intentos de “traspasar los
alambrados de las fábricas” y conformar organizaciones
para la acción conjunta y solidaria, como la “Intersindical de
San Lorenzo (1969 - 1971)” y la “Coordinadora de Gremios
en Lucha de la Zona Industrial (1975 - 1976)”.
Los petroquímicos se dieron nuevas formas de
organización y luchas radicalizadas, con planteos a la
patronal sobre la forma de organización en la fábrica. A la
vez, se dejó sentada la independencia del Sindicato de
todos los partidos políticos, de la patronal, del Estado, y de
los credos religiosos.
Durante esos años, el Gremio tuvo una dirección
sindical honesta, clasista y combativa, surgida desde las
bases, que apelaban a la acción directa como método de
lucha, al funcionamiento permanente en asambleas, con
movilizaciones callejeras, a la participación activa de los

LV
trabajadores, adoptando posiciones antiburocráticas,
antipatronales, anticapitalistas, antidictatoriales, y
antiimperialistas, como así también distintos
pronunciamientos con definiciones sobre el capitalismo y el
socialismo. “La lucha permanente por mejores salarios, el
transporte gratuito a los centros de trabajo, el comedor en
fábrica, la eliminación de las empresas subcontratistas, la
estabilidad del empleo y las mejores condiciones de trabajo
(salubridad, seguridad) formaron parte de las conquistas
más destacadas.” (11).
Las polémicas dentro de la C.D., el Cuerpo de
Delegados y los activistas, se suscitaron alrededor de
temas como las luchas económicas y políticas de la clase
obrera, el papel del sindicato y del sindicalismo, las alianzas
del proletariado, la organización del trabajo, el capitalismo,
la solidaridad, la política, las perspectivas autónomas de la
clase obrera, el socialismo, etc.. (12)
Otra de las características del Gremio fue la
solidaridad, que se manifestó no sólo entre los
petroquímicos sino también para con los obreros de la zona,
la región y el país, como asimismo a nivel internacional. En
distintas ocasiones impulsaron medidas de acción directa
para solidarizarse con trabajadores en lucha.
A continuación, abordamos el tratamiento que le
dieron a los distintos reclamos, luchas y problemáticas
-aumentos de sueldo, horas extra, cuerpo de volantes,
condiciones laborales, seguridad, etc.- como igualmente las
posiciones frente a distintos temas regionales, nacionales e
internacionales.
El primer conflicto que debió enfrentar la nueva
conducción del SOEPU fue en el año ‘68, cuando expresaron
su fraternidad para con los obreros de la construcción de las
empresas contratistas que realizaban trabajos de

LVI
mantenimiento en PASA como Simalay y Vega, Tadeo,
etc.. El objetivo de la lucha fue que se equiparara el salario
de los obreros de la construcción con el de los
petroquímicos y que también rigiera para ellos el Convenio
Petroquímico. De esa manera se iniciaba una larga lista de
disputas, que tendrían como eje la solidaridad de clase.
A comienzos de 1969, se iniciaron los reclamos y se
logró el Cuerpo de Volantes, considerado como una
importante conquista. La misma consistía -según lo
explicitado por el Gremio- en que “solamente habiendo en
toda la planta más de tres ausencias, tenemos la obligación
de quedarnos por falta de relevo, y hasta cumplir un
máximo de 30 horas mensuales o 120 anuales.
Consideramos que se trata de un doble logro: por un lado,
se ha posibilitado el ingreso de doce compañeros; por el
otro, hemos limitado las repetidas jornadas de 16 horas que
terminaban con nuestra salud, y nos transforman en simples
instrumentos del ‘deber’. Tenemos que comprender que los
8 o 10 mil pesos, que podamos sacar por horas extras, no
se suman a nuestro salario o sueldo haciéndolo más
importante. El mismo tendrá valor efectivo, cuando lo
consigamos con las horas normales de trabajo, es decir
luchando por incrementar el básico”.
La lucha por mejores salarios fue una constante
por parte del Gremio durante todo el período analizado. Por
una parte, no sólo se reclamó a la empresa, sino que hubo
pronunciamientos y requerimientos a los gobiernos de
turno. A comienzos de 1969, cuando el Plan de K. Vasena
mostraba los síntomas de la crisis económica, desde el
Sindicato se expresó que “Onganía y Krieger Vasena, en una
determinación tan esperada como descarada, otorga a los
trabajadores un incremento en sus salarios básicos del 8 %,
y congela nuevamente los convenios colectivos de trabajo,
únicas armas legales para defender nuestros intereses. Ante

LVII
este sombrío panorama, la C.D., tomando el análisis hecho
por empleados y obreros de PASA, sintetizó su posición en
estos términos:
a) Mayor Producción (léase grandes ganancias),
b) Prácticamente Igual Sueldo (léase peores condiciones
de subsistencia, debido al alza del costo de la vida),
solicita al Directorio de la Empresa, un justo aumento de
emergencia al Directorio de la misma, en carta dirigida a
A. O. Pipkin, el 7/1/69”.
Posteriormente agregaron que, “tras largas
discusiones y análisis profundo de las incidencias que el
aumento tendría en el normal desenvolvimiento económico
de la Empresa, el Directorio de PASA resuelve, después de
dos meses y seis días, conceder un incremento sobre las
bonificaciones de antigüedad, que representan menos del 1
% de nuestros salarios. Esto nos obligaría a pensar que
PASA no está en condiciones de afrontar lo pedido por
nuestra Organización; pero creer esto, significaría no tener
conocimiento de la superproducción de caucho y negar sus
extraordinarios ingresos. Al ser nosotros parte fundamental
con que la Empresa cuenta para llevar a cabo sus objetivos
de lucro, repudiamos en forma terminante su oferta, y nos
consideramos burlados en virtud del análisis anteriormente
realizado. Esta fue la determinación unánime de la
Asamblea General Extraordinaria del 14/3/69.” (13).
Las demandas continuaron y sobre fines de ese año,
ante la congelación de salarios y el incesante aumento de
precios, el SOEPU solicitó un aumento de emergencia. PASA
ofreció un incremento del sueldo insuficiente y, lo que es
peor, discriminado. Esto trajo como consecuencia largas
discusiones internas con diversas opiniones. Había que
balancear esta difícil situación y tomar una resolución más o
menos lógica, no obstante lo cual habría disconformes. El
Gremio analizó la situación planteada de esta forma:

LVIII
“Tal vez PASA no logró su objetivo: deteriorar nuestra
unidad, porque hemos hecho lo imposible por evitarlo, no
haciendo el juego a la empresa. Analicemos:
a) La equiparación a los mejores salarios de la zona fue un
cuento.
b) Las presiones a través de no realizar horas extras, PASA
las toleró a cualquier precio, y seguirá tolerándolas sintiendo
no obstante económicamente sus consecuencias.
c) PASA es una de las empresas que más se beneficia con la
actual política del gobierno (estabilidad del dólar, cierre de
importación de caucho, radicación de capitales para
empresas petroquímicas), y seguirá su línea paso a paso.
d) No había forma visible en ese momento de lograr mejoras
superiores.
e) El porcentaje superior (8 %), lo recibió el personal de
menor salario y es la misma cifra que el gobierno concede
por dos años.
f) Por lo expuesto anteriormente, principalmente en los
puntos d) y e), no pareció justo despreciarlo.
“Teníamos dos alternativas:
Rechazarlo, lo cual significaba despreciar un 8 % de
aumento para muchos compañeros.
Aceptarlo, marginando aproximadamente 40 compañeros y
recibiendo un 3 o 4 % de aumento la mayoría. Esto no era
satisfactorio. Puestas así las cosas se debía, a pesar de
todo, optar por una solución, y la Asamblea tomó la que
creyó más lógica, pensando en aquellos compañeros de
menor sueldo.” (14).
En la segunda mitad de 1972, el salario real de los
trabaja-dores -según las estadísticas oficiales- había llegado
en el mes de julio a colocarse por debajo del nivel de
diciembre del año anterior. De este modo, los dos
incrementos salariales concedidos ese año por el Gobierno

LIX
Nacional habían sido absorbidos con holgura por la marcha
acelerada del proceso inflacionario. El SOEPU dio a conocer
su opinión y lo hizo a través de un comunicado:
“Según la serie estadística llevada por el Instituto Nacional
de Estadísticas y Censos acerca de los salarios nominales
promedio pagados a un obrero peón de la industria
manufacturera, y ponderándolos por el índice de costo de
vida, se arribaba a la siguiente conclusión:
Salario Nominal Costo de la Vida
Salario Real
Abril 1971 1.059,3 847,7 124
Diciembre 1971 1.262,2 1.059,2 119
Mayo 1972 1.669,3 1.374,0 121
Julio 1972 1.669,3 1.527,7 109
(1)
Agosto 1972 1.669,3 1.588,8 105
(2)
Septiembre 1972 1.836,2 1.652,3 111
(1)
Se supuso un aumento del costo de vida del 4 % en el mes de Agosto.
(2)
Se supuso que el costo de vida crecerá 4 % en Agosto y otro tanto en
Septiembre y, además, que los salarios nominales aumentarán en un 10
% a partir del 1º de Septiembre.
Fuente: La Opinión, sobre datos del INDEC
“Proyectando esa serie y suponiendo: 1) que los salarios
sean incrementados en un 10 % a partir del 1º de
Septiembre y 2) que el costo de vida crecerá a un ritmo del
4 % en Agosto y Septiembre se comprueba que el salario
real así obtenido será sólo ligeramente superior al del mes
de Julio e inferior a los niveles habidos en Diciembre de
1970, Abril y Diciembre de 1971 y Mayo de este año. Por
otra parte, los aumentos salariales siempre son posteriores
al incremento de los precios. Ese desfasaje crea a los
trabajadores la necesidad de endeudarse, de forma tal que
los aumentos salariales concedidos a posteriori deban ser

LX
dedicados, en buena medida, a atender el endeudamiento
anterior. Esta disminución, en términos reales, del nuevo
salario no es medida por la estadística oficial. La conclusión
resulta más sorprendente si se compara lo aumentado por
el salario real entre 1960 y 1971, con los incrementos del
ingreso bruto nacional. Tomando esta última variable a
pesos constantes de 1960 se puede observar que el ingreso
bruto nacional creció en ese período en un 56 %. La
remuneración de los trabajadores, en el mismo lapso, lo hizo
sólo en un 19 %. El resto evidentemente, fue apropiado por
los restantes sectores sociales.” (15).
Fue insistente el tratamiento y la lucha en contra de
la realización de horas extras por parte de los
petroquímicos. A fines de 1969, en el Boletín del Gremio se
expresó:
“Transcribimos a continuación, parte de la resolución Nº 15
del Dto. Provincial de Trabajo, por la que se reglamentan las
excepciones a la ley 11544, sobre horas extras. Por los
artículos 1 y 2, “se dispone que cuando se solicite la
prolongación de la jornada legal en uno o varios días
de la semana, sea presentada constancia del acuerdo con
el personal o entidad sindical, identificación del empleado
y casa empleadora, razón del pedido, duración de la
excepción, etc.”. Por el artículo 4 se “reglamentan los
días de anterioridad con que debe efectuarse la solicitud,
el día en que se otorgará el descanso, recargo con que
serán abonadas las horas extras y otros detalles”. A partir
de ello se resolvió que “como consecuencia del mismo, a
partir del 1/4/69, no se realizarán más horas extras, salvo
caso de emergencia (peligro de explosión o incendio),
o ausencia en el turno de más de cuatro relevos”.” (16).
Además, la C.D. resolvió no admitir, salvo por falta de
más de tres relevos en toda la planta, la realización de

LXI
jornadas superiores a las doce horas (horas normales más
extras); manifestando que las mismas eran absolutamente
voluntarias y que lo único que haría sería el control de las
30 horas mensuales y 120 horas anuales; aclarando que
“cada compañero es soberano de demostrar su
disconformidad y no realizarlas si no lo desea, nadie puede
obligarnos a quedar, salvo por falta de volantes, sobre todo
considerando que te-nemos un hogar, y que el
esparcimiento y el descanso son derechos inalterables”.
Con los años, en 1975, el Sindicato declaró que “en
PASA, de acuerdo a nuestro convenio y a las modalidades de
trabajo de esta industria, existen dos posibilidades distintas de
prolongación de la jornada de trabajo normal: Las voluntarias,
que puede realizar el personal de Mantenimiento por simple
exceso de trabajo para completar trabajos atrasados
prolongados. Las que puede realizar el personal de
Operaciones y Laboratorio en forma voluntaria, por ejemplo
quedándose en la ausencia de un supervisor, o también por
exceso eventual de trabajos (en paradas, etc.). Las
involuntarias o por falta de relevos, que afecta solamente al
personal de Operaciones y Laboratorio, que de acuerdo al
artículo 18 del convenio, existe una obligación de cubrir las
ausencias producidas por falta de relevo, cuando no hay
pooles libres”.
Y se analizaba la historia de las horas extras en la
planta industrial: “En marzo de 1973, fue aplicada esta
medida como una forma de lucha por reivindicaciones y con el
correr de los meses fueron logradas o desvirtuadas. Las horas
extras involuntarias o por falta de relevo se continuaron
realizando siempre. Varias asambleas posteriores a la del año
‘73, ratificaron la posición de no hacer horas extras
voluntarias, cambiándose poco a poco la idea de que era una
forma de lucha, por la de que era una cuestión de principio
(principio de defensa de la jornada mínima de ocho horas,

LXII
principio de solidaridad de clase al no desplazar en la
posibilidad de trabajar a otro compañero desocupado). La no
comprensión de esto último, y la necesidad de aumentar los
ingresos mensuales insuficientes por el incremento
permanente del costo de la vida, lleva a muchos compañeros
de mantenimiento a impulsar una asamblea para levantar la
no realización de horas extras, y para que todos los
petroquímicos tengamos la posibilidad de ‘hacernos unos
pesitos’ más a fin de mes”.
Se aclaraba que, “en este sentido se hacen
diferenciaciones entre Operaciones y Laboratorio, que hacen
extras por falta de relevos, la gente de Cimolai y Vega, y la
supervisión que las hace sin límites, con el personal en
convenio de mantenimiento. La última asamblea volvió a tratar
este tema, y la decisión mayoritaria fue la de mantener la
quita de horas extras voluntarias aclarando que no se trata de
una forma de lucha, sino de una determinación de principios.
Para disminuir al máximo la posibilidad de tener que quedarse
por faltas de relevo, incrementar la dotación del cuerpo de
volantes tres o cuatro que hay actualmente a seis por turnos.
Invitar a través de panfletos a los compañeros de empresas
contratistas y dirigir al sindicato que los agrupa una nota
pidiendo que hagan suya la posición tomada por los
petroquímicos. Por otro lado era y sigue siendo necesario una
propaganda más amplia de esta postura que es ejemplar
dentro del movimiento obrero. Por último, aclara también que
la mayoría de los compañeros de operaciones y laboratorio
sobre todo los que tenemos varios años de trabajos en turno,
estamos cansados de nunca saber con certeza si a las 0 horas
nos vendrá o no el relevo. Nada se puede planificar con
seguridad, cualquier programa se puede frustrar”.
“Por todo esto, los seis pooles por turno se
transformaron en una necesidad por la cual habrá que luchar
ante la negativa de la patronal. Es necesario discutir esto en

LXIII
asambleas por turnos para decidir las medidas a adoptar y así
ganar el derecho de la jornada máxima de ocho horas.
Respecto de la forma de cómo a fin de mes llevar un sueldo
que nos alcance para satisfacer nuestras necesidades, existe
una fórmula justa y necesaria: la lucha salarial, que pronto,
por no decir ya, tendríamos que haber encarado.” (17).
La solidaridad del Gremio para con los obreros de las
empresas contratistas fue persistente y quedó manifestada
en distintas ocasiones. Cuando la crisis económica y la
política de “racionalización” del gobierno de Onganía
dejaban en la calle a miles de obreros, y esa situación
lanzaba a una carrera desenfrenada a cientos de
trabajadores, llegando a ocuparse con contratos ilegales y
sin posibilidades futuras, PASA -aprovechando ese
panorama- tomaba personal contratado y los Petroquímicos,
con una Declaración, se pronunciaron críticamente sobre la
situación en el primer trimestre de 1969:
a) Firma por un tiempo determinado, que se transforma en
indeterminado tras sucesivos contratos, hasta que la
Empresa prescinda de ellos.
b) No goza de los beneficios sociales de la Empresa.
c) No cobra igualmente que el personal efectivo, ni se les
pagan las distintas bonificaciones.
d) Realiza jornadas de 16 horas, y se somete a todo tipo de
tareas, con la esperanza de lograr la efectividad.
e) No tiene el amparo del Sindicato en sus relaciones
laborales, desconociéndosele artículos del Convenio
Colectivo (días pagos por examen, fallecimiento de
familiares, casamiento, nacimiento, etc.).
Posteriormente, en la reunión de Comisión de
Reclamos, se planteó:
1.- “Solicitamos que dentro de un plazo máximo, a fijarse
en esta Comisión de Reclamos, de común acuerdo, se

LXIV
efectivice al personal contratado por exceso de trabajo
que la Empresa considera necesario”.
2.- “Asimismo solicitamos el preaviso, y pago de
indemnización correspondiente al personal contratado
que no ha hecho relevo de vacaciones”. (18)
El primer pedido -punto 1- tuvo eco favorable. PASA, a
partir del 1º de mayo de 1969, efectivizó a treinta y dos
trabajadores contratados. Con respecto al punto 2, la
Empresa no renovó el contrato a ocho obreros, pero los
indemnizó de acuerdo a lo que dictaba la Ley. Además,
aproximadamente otros catorce operarios continuaron con
contratos por tiempo determinado, pero cobrando salarios y
beneficios de Convenio como si estuvieran efectivos y,
además, fueron indemnizados al finalizar su contrato. De
esa manera, la gestión del SOEPU trató de evitar que se
especulara con quienes, por no tener trabajo, se veían
obligados a aceptar contratos con condiciones inferiores al
Convenio.
En otra ocasión -julio de 1971- la situación de las
empleadas de limpieza, dependientes de una empresa
contratista, disparó un conflicto que ellas describieron en ‘El
Petroquímico’:
“Quienes nos dirigimos en esta edición, somos las 32
chicas que formamos el plantel del personal de Limpieza de
PASA. El motivo de nuestra presente nota es para dar
público conocimiento de las condiciones de nuestro trabajo
y la forma en que se nos trata. Nuestro patrón, que es el
tiene el contrato de la limpieza desde hace cuatro años es el
Sr. Rubén L. Barabino: trabajamos dos horas y media por día
de lunes a viernes y se nos paga $ 350 la hora desde hace
muy poco tiempo. Nos hace descuentos jubilatorios y aún no
sabemos el Nº de caja de aporte. Nos descuenta por Obra
Social que jamás hemos recibido asistencia médica (...)

LXV
Donde trabajamos, se nos recarga de trabajo, pues donde
tiene que haber dos chicas, hay sólo una, cuando falta una
compañera, tenemos que hacer nosotras el trabajo (...).
“El Sr. Barabino cobra por quincena, pero a nosotras nos
paga por mes y siempre después del día 9. En la mayoría de
las veces carecemos de implementos de limpieza (...) Jamás
se nos ha entregado una muda de ropa, no cobramos
salarios familiares, casamiento, etc.; además tiene la
costumbre de hacernos firmar recibos en blanco o escritos
en lápiz. Queremos dejar en claro que estas son algunas de
las muchas anormalidades en nuestro trabajo, y esperamos
que se tomen medidas para que esto siga su cause”.
Otras empleadas de limpieza denunciaron los
atropellos de ese contratista, de la misma forma que en la
nota anterior, y llamaron a la unidad y a la lucha en los
siguientes párrafos:
“Compañeras: Hemos emprendido una lucha hace muy
poco, que no es una lucha de alguna en particular, ni de las
delegadas, ni de los dirigentes petroquímicos en forma
aislada, sino de todos juntos, especialmente en nuestra
lucha, que somos las afectadas. Contra quién luchamos?
Principalmente contra nuestro patrón, contra Barabino,
que es un explotador y un oportunista que se aprovecha de
los padeceres humanos, de la falta de trabajo y de la
miseria de las personas”.
“Ahora más que nunca unidas y fuertes contra el patrón.
Vivimos un momento crucial e importantísimo en nuestro
trabajo. No podemos permitir que ninguna afloje! Ganamos
o Morimos. Ganar es derrotar a Barabino, o al contratista, y
pertenecer a la empresa en forma directa, o sea derrotar al
explotador que se lleva toda la ganancia de nuestro trabajo.
Morir es perder la lucha y que nos despidan a todas.
Necesitamos la ayuda del Sindicato Petroquímico pero

LXVI
nosotras debemos también dar todo nuestro apoyo a ellos.
Ellos y nosotras podemos llegar algún día a trabajar juntos
en todo sentido. Adelante Compañeras! Compañeras del
Equipo de Limpieza”.
Ante la situación planteada, desde el Sindicato se
emitió un comunicado donde se decía:
“Creemos que las notas transcriptas hacen innecesario
abundar en detalle acerca de la sumisión a que se ven
sometidas estas trabaja-doras. El SOEPU ha realizado una
denuncia en el Dto. de Trabajo, pidiendo que estas
compañeras sean reconocidas como personal en Convenio
Petroquímico, y sean tomadas directamente por PASA. Este
es un caso más de los miles que existen en el país de
empresas contratistas: la empresa se llama Barabino, un
intermediario que gana dinero sin trabajar colocando mano
de obra a PASA quien gustosa la contrata porque le sale
más barato. Todo lo cual no es más que una especulación
con la desocupación que existe en la zona y con las diversas
maneras que hay para engañar a las autoridades laborales,
(lo del recibo en blanco es muy conocido por el obrero
argentino). Los obreros petroquímicos estaremos dispuestos
a luchar, hasta lograr la efectivización por parte de PASA de
todas las compañeras.” (19).
A dos años de ese conflicto, hacia julio de 1973,
durante una renovación de la C.D. del Gremio, los miembros
de la Lista Verde -en asambleas realizadas en el local
sindical con los obreros de Cimolai y Vega-, decidieron
-junto a Ceramistas y Químicos San Lorenzo- poner en
práctica un plan de trabajo para eliminar definitivamente el
sistema de empresas contratistas.
El proyecto comenzó con la invitación a las fuerzas
vivas de la Provincia (partidos políticos, intendencias,

LXVII
legisladores, vecinales, etc.) para hacerlas partícipes de las
inquietudes. El siguiente es el Comunicado enviado:
“Las Sindicatos Petroquímicos (SOEPU), Ceramistas
(SOCPA) y Químico San Lorenzo (SPIQA), ante la situación
de las empresas contratistas, y frente a los cesanteados
por causas políticas y gremiales en todo el país, y
especialmente en la Zona Industrial (de Puerto San Martín
a Granadero Baigorria), hacemos conocer nuestro
proyecto, dando participación en el mismo a las fuerzas
vivas de la provincia. Frente a las empresas contratistas:
Dijo el Presidente de la Nación en el Honorable Congreso
el día 25-5-73: “Por la misma ley se habrá de eliminar la
posibilidad de que el empleador mediante la introducción
en su actividad de intermediarios, contratistas y
subcontratistas, se libere de responsabilidad frente a las
obligaciones emergentes de los contratos de trabajo”. Los
sindicatos firmantes, vienen sosteniendo desde el año
1969, que las empresas principales no pueden eludir sus
responsabilidades asumidas en la firma de los contratos
de trabajo mediante el ‘subterfugio de la utilización de
terceros contratistas’.
“En Argentina, el Congreso de la Nación sancionó el 29-
6-49 la Ley 13.591 que establece: “Prohíbese el
funcionamiento de las agencias privadas de colocaciones
con fines de lucro. Entiéndese comprendida en la
prohibición, toda actividad lucrativa relacionada con la
colocación de trabajadores” (Art. 10). Si la aplicación de
esta Ley -que fue precedida en el tiempo por otras
normas menos categóricas y completas- había eliminado
aquellas siniestras agencias, el desarrollo de la industria,
el comercio y los servicios da la base material que
permite el surgimiento de nuevas y sutiles formas de
aquellas viejas prácticas, eludiendo dicha Ley. La

LXVIII
necesidad de mano de obra temporaria y calificada
permite el resurgimiento de las agencias de contratación.
“La explotación a que son sometidos los obreros
dependientes de empresas contratistas es doble, ya que
éstas reciben fabulosas sumas de dinero de las empresas
principales por el sólo hecho de colocarles la mano de
obra que necesitan temporaria o permanentemente. Y
especulando con la desocupación obrera, pagan a los
‘trabajadores golondrinas’ salarios miserables
desconociendo cualquier beneficio social.
“Por ello proponemos:
1.- La efectivización de los changarines que realizan
tareas permanentes en las plantas.
2.- La realización de un censo zonal de desocupados y
semidesocupados de la zona.
3.- Constitución de una Bolsa de Trabajo Zonal, dirigida
por los obreros, de donde las empresas puedan obtener
mano de obra en forma rápida y directa eliminando de
esta manera la intermediación de las empresas
contratistas.
4.- Elevación de un Petitorio de Ley al Congreso de la
Nación y a la Legislatura de la Provincia para la sanción de
una nueva Ley que contemple las modernas formas de las
viejas agencias de contratación, prohibiéndolas.
5.- Dar participación en este Plan a todos los
Intendentes de la zona, partidos políticos, vecinales, etc..
“Queremos aclarar que las patronales se verán
beneficiadas porque, por ejemplo, la Bolsa de Trabajo, por
carecer de interés de lucro, no les mandará peones por
oficiales especializados, y los compañeros de la zona
tendrán la seguridad, por el tipo de industria que existe,
que tendrán trabajo en forma permanente (paradas,
ampliaciones, etc.) con lo que evitaremos el éxodo de los
trabajadores a otras zonas.” (20).

LXIX
A fines del año 1969, la C.D. hizo llegar a los
miembros del Sindicato, el Anteproyecto del nuevo
Convenio Colectivo de Trabajo próximo a discutirse. Desde
varios meses atrás se venía trabajando su elaboración. En el
Anteproyecto, podía comprobarse la amplitud del mismo,
con artículos nuevos -tanto en la faz laboral como social-,
elevándolo a los momentos que se vivían, sociabilizándolo y
humanizándolo. Se debatió en las distintas secciones de la
fábrica, expresándose posteriormente:
“En diversas oportunidades, la empresa a través de sus
directivos, han hablado y explicado la nueva política de la
misma, en lo social, en lo laboral, etc.. Creemos que ha
llegado el momento de que todo lo expresado, todo lo
hablado se haga realidad, no haciendo nada más que un
acto de justicia hacia quienes estamos elaborando su
patrimonio y riqueza. Esto con honestidad, es lo que
esperamos. Pero el día 23 del cte. nos informó el
Departamento de Trabajo, de una nota cursada por el Jefe
de Relaciones Laborales, Dr. Molachino, declarando
incompetente al Departamento de Trabajo, para la
discusión del Convenio, y solicitó que el expediente sea
girado al Ministerio de Trabajo. Nos cabe aclarar, que en
dicho Ministerio, también denunciamos el vencimiento del
Convenio Colectivo de Trabajo, en tiempo y forma y que a
criterio de nuestra Organización no le es conveniente
discutirlo en esa Repartición. Serias dudas nacen de este
acto de la empresa, pero al margen de ello, de lo que sí
estamos conscientes, y todos y cada uno de nuestros
afiliados deben pensar, que para obtener un Convenio
Colectivo para nuestro Sindicato que satisfaga nuestras
necesidades, es necesario estar más unidos que nunca y a
la expectativa de lo que la C.D. disponga para el logro de
nuestros objetivos.” (21).

LXX
Luego de las luchas populares del ‘69, partiendo del I
Rosariazo, pasando por el Cordobazo y luego por el II
Rosariazo, desde el Ejecutivo Nacional se intentó frenar las
movilizaciones obreras con un llamado a paritarias. En el
SOEPU se comentó que había sucedido lo que el Gremio
había previsto “cuando consideramos el llamado a
discusión de Convenio decretado apresuradamente por el
Sr. Onganía, en los momentos más inestables de su
demagógica carrera. Anunció por todos los medios de
difusión, que las organizaciones sindicales podrían discutir
libremente los convenios colectivos y los salarios, debiendo
los Sres. Patrones absorber mejoras de hasta un 25 % de los
costos de los productos. Este anuncio fue consecuencia del
susto con que sacudió el pueblo cordobés a la oligarquía
nacional y al imperialismo internacional, que someten
actualmente nuestro destino. Pero inmediatamente,
cambiadas las caretas quemadas de Vasena y Borda,
señalados por el pueblo como malos, a quienes el Sr.
Presidente les hacía ‘dar la cara’ anunciado decretos feos,
plagadas las cárceles de dirigentes y obreros, y comprando
a 20 dirigentes traidores que se prestaron a realizar la CGT
oficialista a espaldas de los trabajadores, comenzó su
ofensiva. Así, por decreto, fijó en pesos 3.000 el aumento de
salarios, y tiró del hilo la careta al sentar en dicho Decreto
que: “Los mayores costos por cualquier mejora o beneficio
no podrán ser trasladados a los costos. La conciliación es
obligatoria. El funcionario del Gobierno será Juez y laudará
en los artículos que no se arribe a entendidos”.
“Y es así, que a los Empresarios, o a sus
representantes, sólo les cuesta decir la frase mágica: “No.
No es posible acceder a lo solicitado porque resultarían
mayores costos que nuestra empresa no puede absorber”, y
resuelven toda discusión que no les agrada.

LXXI
“PASA puede mejorar salarios y beneficios porque es
un monopolio, porque superproduce, porque vende toda la
producción y porque el costo de la mano de obra en las
empresas petroquímicas es ínfimo. No obstante poder,
como lo ha demostrado con los justos aumentos percibidos
por la Supervisión, nos dirá que no, y lo hará, porque poco
le interesan los problemas socioeconómicos de sus obreros,
y porque su mayor preocupación es cómo ganar más
dólares, como explotar más, y como hacer más capital para
explotarlo.” (21 bis).

Otro tema que preocupó a los Petroquímicos fue el de


los descuentos compulsivos. A partir de diciembre de 1971,
a los obreros de Luz y Fuerza se les descontó el 1 % de sus
salarios destinados a engrosar los fondos del Banco
Nacional de Desarrollo, según un acuerdo suscripto por los
dirigentes del Sindicato y autoridades de Luz y Fuerza. Más
adelante, les tocó a los trabajadores del SUPE (Petroleros del
Estado) y de la Federación Argentina de Gas del Estado.
Ante esa situación, los Petroquímicos recordaron que “una
vez más a los obreros, (esta vez sólo a los estatales), se les
realizan descuentos compulsivamente, sin consultarlos.
Todavía queda fresco en nuestra memoria los 500 pesos
que nos sacaron en mayo para la CGT, sin saber qué destino
se le dieron (aunque ya sabemos lo caro que son los viajes a
Europa, y los muchos dirigentes que han viajado).” (22).
La crisis económica iniciada en 1969 fue en aumento
y, a comienzos de 1972, según las estadísticas oficiales, el
aumento del costo de la vida en Enero y Febrero llegó a un
16 % y en Marzo al 7 %. Lo que significaba que, en lo que
iba de ese año, el alza del costo de la vida había llegado a
un 23 % contra el magro aumento salarial de una 15 % a
comienzos del mismo. La diferencia saltaba a la vista.

LXXII
Mientras tanto los artículos de primera necesidad
continuaban en aumento, los salarios congelados, y los
convenios sin poder discutirse. En esos días, se produjo un
exorbitante aumento aplicado a las tarifas de la luz. Los
integrantes del SOEPU analizaron la situación de esta forma:
“Se ha postergado su pago hasta tanto se realice un
estudio adecuado. Nosotros nos preguntamos: este estudio
será suficiente para que se den cuenta que este aumento
representaría un drama para la mayoría de los hogares? O
es que acaso se ignora que un hogar humilde, que tenga
seis lámparas de baja potencia, heladera, tele-visor,
ventiladores, lavarropas y plancha, el consumo supera los
200 KW? O se pretende que los trabajadores renunciemos a
estas mínimas comodidades? Resulta irrisorio pensar que así
sea mientras el mundo avanza científica y técnicamente,
mientras el hombre explora el Universo, mientras hay
países que continúan su marcha ascendente, acá en la
Argentina, retrocedemos a causa de medidas retrógradas
como ésta que exponen a millares de hogares a volver a las
velas, las barras de hielo y las planchas de carbón.
“Los obreros petroquímicos no podemos acallar esta
absurda disposición. Y sumamos nuestra voz de protesta a
todos los sectores que se han movilizado para no admitirla.
Y al heroico pueblo mendocino, que ofrendó tres vidas por
esta causa, vaya nuestro reconocimiento y solidaridad.” (23).
Posteriormente, los pronunciamientos contra el alza
del costo de la vida continuaron con esta declaración:
“En los primeros meses del año 1972, el anuncio del 15 %
de aumento junto con cambios en materia de política
económica anunciados por Lanusse en abril, quedó
demostrado que fueron, en los hechos, meras palabras
demagógicas destinadas a enmascarar la situación y a
frenar el alza de las luchas populares iniciadas en Mendoza

LXXIII
y continuadas en distintas partes del país (reflejo real del
descontento del pueblo, aunque la chispa haya sido las
tarifas de la luz y el conflicto de los maestros).
“El aumento incesante de los precios no sólo se devoró ya
ese 15 % sino que todos saben, y principalmente el
gobierno, que la tasa de inflación es superior al 76 %.
Decimos que fueron medidas demagógicas que trataron de
dilatar la situación y la tensión existente, pues la crisis por
la que atravesamos no se soluciona con simples medidas
coyunturales sino con cambios estructurales de fondo en
materia económica.
“La conducción ultra-liberal Brignone - Liciardo, fieles
discípulos de Krieger Vasena, está llevando al país a la
bancarrota total, únicamente para satisfacer necesidades de
sector, para provocar un ‘golpe de Estado salvador’, y de
esa manera interrumpir el proceso de institucionalización, o
bien entregar totalmente condicionado en materia
económica el gobierno a los que salgan ‘elegidos’ en ese
maltratado, discriminado y antidemocrático proceso
electoral (aunque lo disfracen de Gran Acuerdo Nacional y
sea la vedette en todos los discursos del viajero General
Presidente).
“Las FF.AA., que en este momento, más que nunca,
demuestran que gobiernan únicamente con el consenso de
las armas y de las grandes empresas monopolistas,
hablaron por medio de Lanusse en aquella época (abril) del
Acuerdo Social.
“¿Cómo va a ser posible ese acuerdo si cada vez nuestro
salario vale menos a pesar del aumento que nos dan!
“¡Cómo va a ser posible ese acuerdo si cada vez hay más
presos políticos, gremiales y estudiantiles y cada vez son
más las denuncias de torturas que sufren los militantes
honestos de las filas del pueblo.” (24).

LXXIV
El quite de colaboración fue una forma de protesta y
de lucha que se dio en distintas instancias durante el
período que analizamos. Durante 1972, se aplicó en enero y
cumplió perfectamente el objetivo propuesto. El desarrollo
del conflicto se produjo de esta forma: “Sostuvimos en
Asamblea y así lo publicamos que no es método para lograr el
aumento del 6 % que reclamamos, pero que es la mejor forma
para demostrarle a la patronal que no puede pretender mayor
colaboración de parte nuestra, a cambio de un aumento, que
ahora sólo es un parche ante el deterioro del salario real. La
medida aplicada por el gremio le demuestra todo lo que antes
colaboramos y que parece ser no tienen en cuenta. No
obstante, consideramos que la mejor forma de aplicar un quite
de colaboración es por períodos cortos y en los momentos
justos. Pero en la Asamblea del 28-2-72, previa al paro de 48
horas decretado por la CGT, más de 120 asambleístas
resolvieron por la continuación de la medida, hasta el 1º de
abril, facultando a esta CD para aplicar y levantar el quite
nuevamente en el momento más oportuno. En reunión de CD
del 3-4-72 se resolvió por la continuación de la medida, por
considerar que era uno de los momentos más exactos para
aplicarlo, ante la preparación y posterior parada de la Planta
de Butadieno. Por supuesto que esta medida, como todas,
tiene su pro y su contra. Es un hecho real que poco a poco lo
prolongado del quite nos va desgastando. Pero no es menos
cierto que el mayor desgaste lo sufre la Empresa. Para
nosotros queda como saldo positivo la extraordinaria
demostración de solidaridad y unidad ante la injusta
suspensión de 6 compañeros, la inmediata predisposición de
todos para la lucha y la posibilidad de discutir las categorías y
oficios en el Departamento de Trabajo que aún continúa. Y
para la Empresa representa la imposibilidad de planificar las
paradas imprevistas, la postergación de trabajos y el deterioro
que se va produciendo con la supervisión a través de las

LXXV
obligaciones que les imponen. Estos son algunos de los hechos
más visibles logrados mediante esta acción conjunta del
Gremio.” (25).
Los temas de discusión entre los Petroquímicos, en
fábrica, en el Cuerpo de Delegados, en el seno de la C.D., en
las Asambleas, se centraron en sobre distintas
problemáticas. La salud de los trabajadores fue una de ellas,
por motivos que hacían a los turnos rotativos o a las
enfermedades profesionales. El Gremio se pronunció sobre
el particular, en 1972, con un artículo en su Boletín y a
través de un volante, en el cual manifestaron:
“Las necesidades vitales del hombre en lo que se refiere al
normal funcionamiento de su organismo son atendidas por
el médico, bioquímico, odontólogo, etc.: los profesionales de
la salud. Así como las necesidades del hombre de venta de
calzado dan lugar al surgimiento de la industrialización y
comercialización de zapatos, la necesidad de comer a la
industria alimenticia, etcétera, las necesidades sanitarias
dan lugar a la aparición de la industria y el comercio de la
salud. Dentro de la sociedad en que vivimos, toda necesidad
humana tiende a transformarse en objeto de lucro. Es así
como la gran fábrica de zapatos, el frigorífico, el laboratorio
de especialidades medicinales, o el sanatorio están
incluidos todos dentro de la misma categoría: producen para
vender. Unos zapatos, otros embutidos, otros salud.
“Esta comparación es la cruda realidad que se da dentro
de una sociedad que como la nuestra subordina cualquier
necesidad vital a un supremo interés económico, la salud, al
transformarse en un bien de lucro, cuando debería ser un
bien social, cuestiona todas las determinaciones adoptadas
por organismos internacionales, como por ejemplo la
Organización Mundial de la Salud, que dice: “que es un
deber del estado velar porque se verifiquen las

LXXVI
condiciones para que los ciudadanos gocen de completo
bienestar físico, mental y social, a fin de que se realicen
íntegramente el concepto de salud, garantizando como
un derecho fundamental a todo ser humano, sin
distinción de raza, y de ideología política, religión o
condición económica y social”. Esto está lejos de
cumplirse, y por el contrario, en una sociedad que en
materia de salud se rige por la ley de la oferta y la
demanda, cada una compra de acuerdo a su poder
adquisitivo. Por lo tanto, y más y mejor calzado tiene, más y
mejores alimentos consumen, más perfecto será su estado
sanitario. A través de las estadísticas oficiales,
comprobamos que el estado sanitario de los distintos
sectores sociales, está en razón directa con su nivel
económico.
“La mayoría de las enfermedades e índices de mortalidad
tienen sus picos máximos en aquellos sectores de menores
ingresos y en las provincias más pobres: de las 3.600
muertes que se producen en conjunto por año, 1.400 son de
niños recién nacidos; en Río Negro, Jujuy, Neuquén y Salta,
las tasas de mortalidad infantil no descienden de 100 por
1.000. La causas de las muertes de los niños, en la mayoría
de los casos, están íntimamente relacionadas con
deficiencias en la alimentación, vivienda, mala o nula
atención médica de la parturienta y del recién nacido. En
estas mismas provincias se registran agudos déficits en el
campo de la educación: la tasa de deserción escolar en Jujuy
es el del 81,4 %, Chaco 84,2 % y en Neuquén es del 85,8 %,
y veremos cómo se aplica a la ley de la oferta y la demanda:
En las provincias pobres, y en los sectores de menos
recursos, donde se acentúa el déficit alimenticio y
habitacional, bajo es el nivel educativo, etcétera, el
complejo económico abocado al negocio de la salud
(laboratorios, sanatorios) no encuentra un mercado a todo

LXXVII
para revisar sus ganancias. En cambio, es para los centros
más poblados y los sectores con mayor respaldo económico,
que dedican su producción los laboratorios de
especialidades medicinales.
“El hospital, refugio de los enfermos pobres, ha dejado de
ser gratuito y muestra un panorama desolador, edificios
que se vienen abajo, sin material científico, medicamentos
ni personal. ... Concretamente el enfermo tiene que abonar
desde los aranceles hasta los medicamentos, hecho éste
que derriba todo intento de argumentar la asistencia
hospitalaria gratuita.
“La existencia de un ‘mercado de la salud’ hacia el que
orientan su producción las empresas que industrializa y
comercializa la asistencia sanitaria, y el marginamiento de
ese mercado de grandes sectores de población que son
justamente los más necesitados de atención médica
adecuada, son reflejo de las contradicciones existentes
entre los intereses de las clases poseedoras y el bienestar
de las mayorías.
“Causa indignación comparar los presupuestos del año ‘72
para sanidad: 67 millones de pesos, y para defensa y
seguridad: 3.474 millones. Y más aún, si consideramos el
millón de habitantes que padece el Mal de Chagas, el
incremento de los casos de tuberculosis (ej., de 1966 a la
fecha en la provincia del Chaco aumentó de 1.400 a los
1.500 casos, en Salta de 1.100 a 2.800, y en Tucumán de
1.000 a los 1.700), el constante aumento de la mortalidad
infantil: 61 niños de cada 1.000 mueren en el país antes de
cumplir el año, en 1966 la cifra era de 52,2 y en provincias
como Jujuy con 136/1000, Salta 114/1000, cuando en los
países desarrollados la tasa es menor de 30/1000, (ej.,
Alemania Oriental: 20,4/1000).
“Esto es violencia. Una violencia que se refuerza y
mantiene con la violencia de la represión militar a las

LXXVIII
protestas del pueblo cuando se moviliza ante tanta
injusticia.
“Y qué deberíamos exigir los trabajadores para solucionar
el problema de la Salud? Pues, como primer punto, un
aumento de los fondos destinados al Presupuesto Sanitario.
Y de dónde saldrán esos fondos? Porque a lo mejor se
pretende aumentar los impuestos, con lo que estaríamos
peor que antes. Debe salir de una disminución del
presupuesto militar, o sea cambiar aviones y tanques por
hospitales, fusiles FAL por vacunas y gasas.
“Debemos luchar por cambiar el concepto mercantilista de
la medicina, transformando los lujosos Sanatorios Privados
(verdaderas Sociedades Anónimas, cuyos dueños en
muchos casos ni siquiera son médicos, sino inversores de la
industria de la salud), en Hospitales públicos y gratuitos. (...)
O sea y resumiendo, debemos luchar por una prestación
médica integralmente gratuita, porque consideramos que la
misma debe dejar de ser un negocio, para transformarse en
un derecho inviolable de la sociedad toda.” (26).
En octubre de 1972, PASA festejó el haber llegado a
los seis millones de fardos de caucho sintético. Todo un
acontecimiento para la Empresa. Para los operarios, ese día
era una jornada “de fiesta para la gente de traje y corbata.
Petroquímica estaba toda engalanada, banderas, cintas de
colores, ropa nueva para muchos compañeros, máquinas
recién pintadas… y hasta el tiempo parecía asociarse a la
jornada, una lluvia torrencial anegaba San Lorenzo”. Los
festejos no se suspendieron por mal tiempo, aunque los
obreros decidieron no concurrir a los mismos. Las crónicas
de los Petroquímicos, en su Boletín, decían: “Pero eso no
importaba, había otra gente ‘importante’ que había venido.
Estaba el Gobernador de la Provincia Gral. Sánchez Almeira. El
representante de este gobierno hambreador, el defensor de

LXXIX
intereses patronales, el cómplice del levantamiento de Molinos
Río de La Plata y de la persecución de obreros de la zona.
Pequeño curriculum para visitar fábricas en expansión. Los
obreros petroquímicos no quisimos asociarnos a su visita. Y le
dimos la bienvenida con un repudio unánime. A la entrada de
la fábrica lo saludábamos con una leyenda. Pero la patronal se
encargó de hacerla borrar, ‘porque esas declaraciones de
tipo político no corresponden al Sindicato’. Había que salvar
la imagen. Y todo terminó pronto. Los obreros seguimos
poniendo el lomo. Y el Gobernador se fue. Posiblemente a
buscar otra fábrica en expansión.” (27).
La discusión de los Convenios de Trabajo convocada
por el Gobierno Nacional en 1972 fue realizada por los
Petroquímicos y su interpretación fue la siguiente:

“Esta convocatoria a paritarias por parte de Lanusse y Cía.


tiene características muy particulares en términos
generales, y en especial para nuestro Gremio. Nació en una
de la tantas componendas de la burocracia sindical con el
Ministro de Trabajo, San Sebastián, como elemento
‘apaciguador’ de la grave ‘tensión social’, que de no
amenguarse puede romper la farsa eleccionaria y el GAN,
así como también puede precipitar la caída de Coria, Rucci y
sus satélites. Está claro que el arreglo fue completo: El
Gobierno, por esta única vez, faculta a que los
anteproyectos, petitorios y firmas de convenios se realicen
con la aprobación de las respectivas Comisiones Directivas
de los Gremios. (En el año 1971 también fue por única vez).
Los trabajadores no deben participar en nada, así la
entrega se hace menos violenta y más oculta, las
asambleas ya no hacen falta, los locales sindicales ya se
pueden usar de centros comerciales, salones de belleza, o
de alquiler.

LXXX
“Es que si participan las bases, no se van a poder poner
topes como ya deben tener acordado patrones y CGT, y sin
topes, se generaría una crisis y una lucha de tal
envergadura, que puede significar para aquellos que viven
del sudor de otros, la sepultura del sistema de opresión y
explotación que hoy soportamos los trabajadores en
Argentina, por supuesto que con ello, caerá la casta social
que hoy gobierna nuestro país y los jerarcas sindicales serán
reemplazados por verdaderos dirigentes al servicio de su
clase.
“Para que esto no suceda, el aparato tramposo ya está
montado, y los únicos capaces de destruirlo son las propias
bases de las organizaciones más poderosas que
seguramente serán el termómetro de la discusión. En
resumen: sin la expectativa de estas paritarias, como
consecuencia del deterioro salarial, surgirían grandes luchas
que sobrepasarían, desbordarían las jerarquías sindicales
con probabilidades de destruirlas, así también correría
peligro de ser interrumpido el proceso eleccionario, que a
esta altura está claro, no tiene otro fin que asegurar
elecciones que permitan que todo quede como está. Por
otra parte, con la convocatoria a Paritarias como está
resuelta, (a pesar de ser peligrosa), se evita la participación
y presión de las bases, para permitir miserables acuerdos
que los patrones están aún en condiciones de pagar, sin que
se les agrave su crítica situación dentro del sistema
capitalista. Para ser más claro, en las próximas paritarias si
se pretende restituir el poder adquisitivo de los salarios y
mantenerlo luego, los trabajadores sin lugar a dudas van a
tener que cuestionar a la propia organización y planificación
económica en Argentina. Por ejemplo, en el gremio de la
construcción la mano de obra equivale al 40 % del costo
total, si se exige un 60 % de aumento de salarios, el precio
del metro cuadrado se elevaría de tal forma, que esta

LXXXI
industria está semiparalizada y sus obreros
semidesocupados, quedaría definitivamente paralizada y
con plena desocupación. A su vez nos preguntamos cómo es
posible que los obreros de la construcción estén
desocupados, que las cerámicas cierren, que los ladrillos, el
pórtland, arena, cal, abunden almacenados y por la otra
parte se necesitan dos millones de viviendas, existan un
millón de familias en villas miserias, no alcancen las
escuelas, los hospitales, etc..
“Dijimos que estas paritarias tienen características
especiales y particulares para nuestro gremio, es que
cuando el panorama afuera es difícil, PASA puede absorberlo
con gran facilidad, considerando que es una empresa en
expansión, monopolio por excelencia, altamente rentable,
donde el costo de nuestra mano de obra es del 2,5 - 3 % de
los montos producidos, donde las franquicias acordadas por
el Estado (el bolsillo de todos) en materias primas (gas
natural, propano, butano, nafta) le asegura éstos a precios
muy inferiores a los reales de costo, donde los salarios que
se pagan son muy inferiores a los de otros países, donde el
precio de venta de los productos que se elaboran exceden
en mucho a los valores del mercado internacional, no
obstante que PASA se radicó en Argentina para ‘asegurar
una estructura económica que permita producir a precios
ajustados a los niveles internacionales’. Esta suma de
hechos, más otros datos y estadísticas, permiten asegurar
-pese a que en sus alocuciones a la Supervisión, Rodríguez
Larreta tratara de afirmar que PASA es una empresa con
vocación nacional que no rindió un céntimo de ganancia a
los capitales inversores- que las inversiones están cubiertas
y que sus beneficios son de tal magnitud, que le permiten
abonar los salarios pedidos y las reivindicaciones levantadas
para la próxima discusión de convenios.

LXXXII
“Nuestro escollo entonces girará en la situación exterior,
es decir, una cuestión que para PASA es fundamental, si
tenemos en cuenta que el no cumplir fielmente las
directivas del gobierno, traería como consecuencia un roce
en las relaciones y un punto en contra en la disputa por
monopolizar el mercado del etileno, lo mismo sucedería con
una posible ‘ventilación’ de contratos ventajeros sobre la
economía nacional, que sectores de la burguesía
nacionalista nunca se animaron a denunciar.
“Por ejemplo, en este momento hay gran preocupación
dentro de la Cámara de Empresarios Químicos, puesto que
la Federación Argentina de Trabajadores de Industrias
Químicas (FATICA) está interesada en lograr un Convenio
que equipare, en alguna medida, nuestros salarios, y por
supuesto la Cámara Química presiona sobre PASA para que
esos desniveles no se agranden más. Serían las mismas
presiones que ejecutaría PASA sobre Duperial si a ésta le
ocurriera dar las 6 horas, lo que supondría el inmediato
estallido de un conflicto con nosotros por el mismo objetivo.
“Para definir:
La situación de crisis externa nos dificulta nuestra propia
discusión.
La burocracia sindical seguramente firmará topes ya
pactados.
Lograr nuestras reivindicaciones va a depender en gran
parte, de nuestra propia unidad y lucha, que acorrale e
imposibilite a PASA sostener los compromisos políticos y
empresariales a que tácitamente está obligada.” (28).
Los inconvenientes que afectan a quienes trabajan en
turnos rotativos son variados. Esos operarios viven a
contramano de la sociedad, de su familia; son aquellos para
quienes no existen los días sábados, ni domingos, ni días de
fiesta, ni fin de año. Son los que de noche trabajan y de día

LXXXIII
duermen sin descansar. Según una encuesta realizada entre
los trabajadores petroquímicos afectados al turno, el 80 %
respondió que se sentía frustrado y que debería dejar el
turno. La C.D. del SOEPU decidió profundizar el estudio de
ese problema, consultando a profesionales expertos,
quienes realizaron encuestas entre los miembros del
Gremio, utilizando diversos materiales especializados
(Revista Syndicalisma Nº 1388 de la CFDT de Francia,
Congreso Internacional del Trabajo en Turno - Oslo, 1969;
‘Psiquiatría y Poder’ de Giovani Berlinger). Las conclusiones
archivadas son las siguientes:
A.- RITMOS BIOLÓGICOS: Todos los órganos de los animales
y de los seres humanos tienen una actividad rítmica, es
decir tienen determinadas variaciones según un período
fijo. Con los animales se cuentan, por ejemplo, los ciclos
anuales: hibernación, migraciones estacionales,
actividades sexuales. El ritmo biológico más importante,
particularmente en el hombre, es el que se llama “ritmo
normal”. Es decir, el conjunto de variaciones de nuestros
órganos determinados en un período de veinticuatro
horas. La más familiar de esas variaciones es el descanso.
Tenemos otras, por ejemplo, variaciones de la
temperatura corporal, que son mínimas a la mañana
entre las 6 y las 7 horas, y son máximas a las 17 horas.
(...) desde este punto de vista biológico estricto, el
hombre puede invertir el ritmo. Él puede habituarse, por
ejemplo, a dormir de día y estar despierto de noche. Pero
esto, bajo varias condiciones:
∗ Que tenga la posibilidad de dormir de día también
como de noche.
∗ Que tenga la posibilidad de alimentarse en la noche tan
bien como en el día.
∗ Que disponga de un tiempo de adaptación suficiente.

LXXXIV
∗ Que tenga una vida equilibrada sobre el plano
psicológico.
Se suma a ello las repercusiones sobre el plano familiar
y la vida social.
B.- EL DESCANSO: La necesidad del descanso varía
igualmente según los individuos. Para un hombre adulto,
son necesarias generalmente ocho horas de descanso,
siete para algunos. Es necesario que esta cantidad de
descanso esté asegurada. Pero además es necesario una
cierta calidad de este descanso. El descanso tiene
necesidad de silencio y de oscuridad y debe
desenvolverse según ciertas fases de acuerdo con las
diversas funciones del cuerpo. Una falta de descanso o un
mal descanso entraña un estado general de menor
resistencia del organismo y tiene consecuencias sobre el
sistema nervioso, el sistema circulatorio.
Según la encuesta del SOEPU, “después del turno de 0 -
8, las horas que duerme el trabajador oscilan entre: 4
horas el 26 %; 5 horas el 35 %; 6 horas el 24 %; 7 horas
el 10 %; y el resto 8 horas”. Considerando que una
persona que realiza una vida normal necesita 8 horas
como mínimo para descansar, sumado a que el 75 % de
los encuestados manifiestan que por la sobre-excitación
posterior al trabajo nocturno, por los ruidos, por la falta
de comodidad en la casa, no pueden aislarse
suficientemente, les resulta imposible descansar bien,
corroboramos nuestras apreciaciones iniciales.
C.- LA SALUD: Además de los trastornos de descanso
mencionados, se encuentran otros tipos de trastornos que
inciden sobre la salud. Los más frecuentes son las
enfermedades del aparato digestivo y enfermedades del
sistema nervioso. A estos trastornos podemos llegar por
la falta de descanso, vida familiar y social, y por otros

LXXXV
factores que inciden directa y aun indirectamente,
como el peligro latente de incendios y explosiones, la
presencia de gases y nítidos tóxicos y corrosivos, las
señales de las alarmas, que obligan a nuestros sentidos a
percibir y reaccionar en tiempos mínimos y que nos
proyecta a una actitud cada vez más vigilante y tensa.
Esa condición de obreros vigilantes de la producción, va
anulando nuestra capacidad individual sin que los obreros
tengamos contacto directo con el proceso productivo ni
experimentemos de forma palpable el fruto de nuestro
esfuerzo.
D.- ACCIDENTES: Las diferencias constatadas con otros
sistemas de horarios son poco importantes. De los
estudios realizados en varios países, se nota que en los
turnos nocturnos se producen menos accidentes, pero
son más graves. Esto proviene sin duda de derecho que
el trabajador se encuentra menos distraído por factores
externos, pero su rapidez de decisión se ve disminuida.
E.- VIDA FAMILIAR: Una encuesta de Marc Maurice, en 1965
en Francia, muestra que sólo un turno de noche permite
la presencia del trabajador a las dos comidas cotidianas
en el 45 % de los casos, lo que hace suponer que éste
interrumpe prematuramente su descanso para participar
de alguna comida. Esto se ve aún más agravado cuando
se trabaja los sábados, domingos, jornadas que la
mayoría de los solares aprovecha para reunir a la familia.
Y cuando ocurre una ausencia de relevo que obliga al
obrero a realizar horas extraordinarias. El rol del padre o
madre de familia está perturbado, las relaciones entre
esposos, diálogos, vida sexual, son anormales. En varios
países se observa que las separaciones son
proporcionalmente más frecuentes en los trabajadores de
turno.

LXXXVI
F.- VIDA SOCIAL: La consecuencia sobre las relaciones
sociales de la familia son todavía más difíciles de corregir:
Si la familia puede en una cierta medida adaptar su modo
de organización a los horarios del padre, ello no es lo
mismo para la mayoría de las actividades culturales,
políticas, de esparcimiento, que son organizadas en
función de los horarios practicados por la mayoría de la
población.
El trabajador en turno no puede más que raramente
salir o participar de reuniones a la tarde o a la noche.
Porque cuando trabaja de tarde o de noche se ve
imposibilitado. Cuando lo hace de día en días feriados
debe acostarse temprano. Sus francos además muy de
cuando en cuando coinciden en feriados o domingos. “El
70 % no realiza ninguna actividad fuera de PASA ya que el
horario los aísla de una serie de contactos”. Todos estos
inconvenientes se ven agravados si los dos esposos
trabajan, y donde la jornada de descanso en el marido
muy pocas veces en el año se produce coincidiendo con
los de su mujer.
G.- LA ROTACIÓN: En la actualidad, la rotación se realiza
semanalmente: una semana de día, otra de noche y otra
de tarde. Es evidente que esto obliga a los trabajadores a
una adaptación fisiológica constante. Ciertos especialistas
estiman que una rotación menos rápida (todos los meses
o cada tres meses, por ejemplo) sería preferible. Los
estudios realizados no son concluyentes: los trabajadores,
cuando deben trabajar en el turno de noche, conocen los
trastornos en formas semejantes a los de rotación
semanal. En otro orden, la vida familiar y social es más
gravemente perturbada. Otros especialistas piensan que
una rotación más rápida -cada dos días, por ejemplo-
permite atenuar ciertos trastornos. Incluso se ha sugerido

LXXXVII
un sistema de desplazamiento de una hora cada día
(jornadas de 25 horas), pero ninguno ha sido
experimentado.
H.- ALGUNAS REIVINDICACIONES: A título de ejemplo
mencionaremos algunas reivindicaciones levantadas por
trabajadores químicos y petroquímicos de otros países:
∗ El trabajo en turno debe autorizarse en caso de
necesidad técnica absoluta.
∗ Reducción del tiempo de trabajo, sin reducción del
salario.
∗ Otorgamiento de una jornada de reposo suplementaria,
cada cuatro semanas.
∗ Todo día feriado trabajado tendrá derecho a una
jornada de descanso compensatorio pago.
∗ Cada período de tres años, consecutivos o no de
trabajo en turno, tendrá derecho al avance de un año
en la edad de la jubilación sin disminución de salario.
∗ Se deberá brindar información sobre los riesgos
inherentes al trabajo en turno.
∗ Revisión médica en general cada seis meses.
I.- CONCLUSIONES: La situación del obrero petroquímico
que trabaja en turno, de subsistir este estado de cosas,
se irá agravando de año en año. Nosotros vendemos
nuestra fuerza de trabajo, pero la salud y la vida familiar
y social no tienen precio. Ante esta medida, sabemos que
una mayor bonificación de dinero, no constituye una
solución al problema, como tampoco es solución un
cambio de horarios. La Asamblea General del Gremio así
lo entendió y aprobó entre otras reivindicaciones, la
demanda de las 6 horas de trabajo, sin disminución de
salario, entendiendo que este es el paliativo más
adecuado para los problemas de turno. (29)

LXXXVIII
Otra de las inquietudes permanentes de los obreros
de PASA fue la seguridad y la impotencia del Departamento
de Seguridad para imponer en la práctica lo que pregonaba
teóricamente. Eso dio motivo a una serie de contradicciones
entre los distintos Departamentos y ocasionó un hecho
desgraciado donde perdió la vida el petroquímico Enrique
Artero, de la Sección Garaje. Se sumó el reclamo de dos
bomberos por turno, el peligro de las nuevas construcciones
con las Plantas en marcha, las intimidaciones a los obreros
de Obras Civiles a realizar tareas riesgosas, y cientos de
ejemplos más que certificaban lo antes mencionado. A partir
de esa situación, los Delegados se expresaron con esta
declaración:
“Los obreros unidos y organizados conseguiremos con
nuestros pedidos poner más de manifiesto estas
contradicciones entre departamentos, y con la fuerza de
nuestras luchas lograr algunos objetivos. Cómo le temerán a
esta lucha organizada, que algunos jefes de departamentos
cedieron bajo nuestra presión, imponiendo el criterio de
‘primero la seguridad y después la producción’,
pretendiendo luego desvirtuar los hechos diciendo que lo
hacen “no porque el sindicato lo exigió, sino porque
estaba planificado”. Entonces, compañeros, ante una
empresa de organización capitalista, fría y deshumanizada,
y con todas las consecuencias que ello implica, seamos
nosotros los obreros unidos y organizados, los que
impongamos los criterios de Seguridad que serán nuestra
única garantía.” (30).
Una situación particular se vivió durante el día del
velatorio del Secretario del SOEPU, Néstor Moglia, cuando
toda la C.D. y Cuerpo de Delegados estuvo ausente de la
fábrica. Lo sucedido demostró cómo las bases se
organizaron inmediatamente ante una problemática

LXXXIX
conflictiva. En esa jornada, en la sección CVPT, un grupo de
obreros de la empresa contratista Cimolai y Vega fue
mandado a armar cajones para el día del paro. Este hecho
fue interpretado por el conjunto de operarios que se
encontraban en fábrica, como una acción incorrecta de la
Empresa. Los teléfonos comenzaron a sonar en todas las
Secciones. Había acuerdo: Ese trabajo no se debía realizar.
O se dejaba de hacer o se paraba la Planta.
Ante la ausencia de miembros del Sindicato, surgieron
aquellos que representaron en ese momento el sentir de
todos sus compañeros, los que se movilizaron para detener
lo que se consideraba un atropello patronal. Posteriormente,
se comentó lo sucedido:
“Es digno de destacar este hecho por el sentido combativo
y antiburocrático de los obreros petroquímicos, y es un
llamado de atención a la patronal, para que sepa que los
obreros nos sabemos organizar y luchar con dirección legal
o la que surja en cada momento.
Por eso desde este Boletín saludamos la actitud de las
bases y en especial la de los compañeros Gronda y
Fernández de Laboratorio que fueron fieles representantes
del sentir de sus compañeros. La burocracia en los
sindicatos termina por aniquilarlos como organismos de
defensa de los intereses de los obreros que ellos agrupan.
Siempre hemos luchado contra este mal que aqueja al
sindicalismo. Hoy podemos afirmar que vamos por buen
camino.” (31).
Cada año, luego del período de vacaciones, un
conjunto de trabajadores -los relevos contratados durante
esos meses- volvía a incorporarse a ese sector de la masa
trabajadora que eran los desocupados y que -hacia la
primera mitad de 1973- tanto en la zona industrial en
particular como en el país en general, se ampliaba cada vez

XC
más. La situación se repetía todas las temporadas y las
actitudes de solidaridad hacia ellos, por parte de los
integrantes del Sindicato, se manifestaba de distintas
maneras. Una de ellas fue la difusión del escrito de un
petroquímico que planteaba:
“Es que con la miseria física y social en la que se sumerge
a nuestra clase se pretende desvirtuar una realidad que
cada día que pasa es más clara en nuestra conciencia:
nosotros somos los verdaderos y únicos productores de
riqueza y los capitalistas lo único que hacen es expropiarnos
una parte de nuestro trabajo y lo acumulan en su propio
beneficio y para poder cada día sacarnos más tratan de
mantener un gran ejército de desocupados que son con
quienes permanentemente pretenden bajar el precio de
nuestra mano de obra, tomándose de la competencia y
tratan, para aumentar aún más la explotación, de
intimidarnos con su eventual reemplazo “por los cientos que
están esperando nuestro despido.
“La desocupación, un flagelo que atormenta a la clase
obrera como una epidemia, es un efecto del sistema que
traba en forma permanente el desarrollo de las fuerzas
productivas y que únicamente habrán de liberarse al
cambiar las relaciones entre los hombres y cuando los
objetivos de la producción sean sociales y no el lucro y la
especulación, metas que únicamente se alcanzarán en una
sociedad realmente justa, una sociedad sin explotadores ni
explotados.
“Pero además, a los contratados para relevos de
vacaciones les aflige otro problema, que es el privilegio y el
acomodo que en algunos casos los hace caer en la
obsecuencia, para poder quedar efectivos. Es que en una
situación tan conflictiva como por la que atraviesan estos
compañeros, entran en crisis un montón de valores que

XCI
nosotros no podemos justificar, pero tampoco criticar, sino
pasar a comprenderlos. Es que también se han agregado
algunas nuevas formas de discriminación, como ser la de no
tomar estudiantes pues son ‘aves de paso’ según el decir de
algunos de nuestros bondadosos cipayos de la patronal. Es
así como llevan a la práctica lo que está en su conciencia:
‘que los obreros trabajen... estudiar únicamente para los
hijos de los que tienen plata’ . Es así como quieren que no
estudiemos ni siquiera sacrificándonos doblemente.” (32).
A mediados de 1973, y ante los cambios a realizarse
en la Ley de Asociaciones Profesionales, se escuchaba decir
“No va a quedar un solo sindicatito…”, de parte de uno de
los dirigentes de la conducción de la CGT Nacional. Los
Petroquímicos sabían que se refería a gremios como el
SOEPU, que era un “sindicatito”, o sea un sindicato de
empresa, no federado, no controlado por la burocracia
sindical porteña; y a pesar de toda la indignación que les
producía la prepotencia de esas palabras, se reconocía que
la existencia de sindicatos de empresa no era favorable a la
unidad y organización del movimiento obrero. En la ocasión,
desde la C.D. se expresó, entre otros conceptos, que “es
correcto que los trabajadores nos unamos en organizaciones
cada vez más concentradas, y de acuerdo a ramas de la
producción. Lo que sucede es que los intereses de los
burócratas de las federaciones, son controlar y someter
política y económicamente a los sindicatos aislados, y se
pretende federarlos por decreto, seguramente, sin dar
posibilidad a las bases a que decidan. Este es un serio
problema que debemos tratarlo a la brevedad posible, para
que no nos agarren de sorpresa.” (33).
La prédica del ejercicio de la democracia de base en
todas las instancias de la vida gremial llevó, en ese año, a
que por primera vez en el Sindicato se diera el caso que una

XCII
agrupación eligiera sus candidatos en una asamblea. La
Lista Verde convocó a todos los afiliados simpatizantes de
tal conducción gremial, a una Asamblea Partidaria, que
contó con muchos adherentes y en la cual se debatió,
discutió y aprobó el Programa de la Agrupación que iba a
darse a conocer en la campaña electoral para las elecciones
del Sindicato. Asimismo se eligieron, por el método de
elección directa y voto secreto, los quince candidatos de la
Agrupación. Previamente se habían propuesto veinte
precandidatos, quienes habían aceptado dicha
responsabilidad.
La solidaridad fue una de las características del SOEPU
y la pusieron en práctica en distintas ocasiones. A
mediados de 1973, los obreros aceiteros pertenecientes a la
fábrica Indo de Puerto San Martín habían comenzado una
lucha contra los atropellos de la patronal, contra la
burocracia del Gremio y las condiciones de explotación a las
que se veía sometido el personal. Un artículo describió esa
situación, al comentar: “Desde condiciones pésimas de
seguridad (donde ni siquiera les dan zapatos de seguridad)
pasando por los mugrientos lugares asignados para comer
hasta llegar al problema de las empresas contratistas
(fenómeno muy conocido por nosotros los petroquímicos) y
donde las condiciones de superexplotación a que se ven
sometidos los changarines, se ponen de manifiesto a diario.
Los compañeros de INDO deben luchar no sólo contra la apatía
de los jerarcas del gremio en resolver sus problemas, sino
también contra las maniobras fraudulentas que realizan éstos
con los propios fondos de la organización, o con las denuncias
y persecuciones contra aquellos compañeros que se rebelan y
tratan de defender sus derechos”.
En la misma época, los trabajadores de Celulosa
-pertene-cientes al Sindicato Químico Papelero de Capitán
Bermúdez- estaban realizando paros parciales por turnos

XCIII
por reconquistar las seis horas de trabajo por insalubridad
que les fueran quitadas durante el gobierno de Onganía, y
por la reincorporación de los despedidos cuando el Gremio
se movilizó en aquella oportunidad. Se pensaba que la lucha
debería ser ardua porque la patronal se negaba a otorgar
las seis horas y a reincorporar sobre todo a muchos obreros
que estaban en la “Lista Negra” y que tenían “el cartel de
comunistas”.
Por otro lado, los obreros de Cerámica Oltolini habían
tomado la fábrica en lucha por una serie de atropellos que
los empresarios habían cometido con los obreros (deuda de
quincena, aguinaldos, etc.), desconociendo la posibilidad
que se pudiera subvencionar económicamente a la Empresa
ya que, reiteradas veces, los patrones demostraron la falta
total de solvencia moral usando, en otras situaciones, el
dinero así conseguido para cualquier cosa menos para
encarar las deudas con los obreros.
La situación se discutió entre los Petroquímicos,
manifestándonos un entrevistado que “se veía con
satisfacción ese resurgir, desde las bases de aceiteros que
hacía tambalear a la patronal y los jerarcas del gremio; pero
ese resurgir debe profundizarse en una organización desde
abajo con la unidad que da la lucha, y limpiando el camino
de alcahuetes y traidores; y además, esos conflictos que
tenían los otros dos gremios hermanos, nos mostraban la
necesidad de unión y solidaridad de los obreros, sin lo cual
iba a ser muy difícil ganar conflictos aislados”.
Uno de los debates, de los tantos que se dieron en
esos años, fue el que se planteó en el El Petroquímico,
cuando un operario opinó: “Hace tiempo escuchamos a
nuestros dirigentes hablar de la CGT o de las 62
Organizaciones como los burócratas o traidores del
Movimiento Obrero Argentino. Claro, nuestros dirigentes
responden a una línea, a la de la Intersindical que lidera

XCIV
Agustín Tosco, que ataca a la CGT. Yo supongo que mejor
que atacar desde afuera, lo mejor sería integrarla y desde
ese lugar, si es que la CGT no responde al sentir de los
obreros, tratar de mejorarla. Pero eso no le conviene a
Tosco. Para muestra de lo que digo, vean algo de lo que
dicen los compañeros de SMATA, en una solicitada
aparecida en el diario La Razón el día 26-6-73: “SMATA
resuelve: Hacer pública nuestra advertencia a quienes
pretenden dividirnos con una campaña de bajos
procedimientos, repartiendo volantes en las fábricas con el
apoyo de armas de fuego. Por otra parte, SMATA señala a
otro enemigo del pueblo: A. Tosco, individuo perturbador
de la clase obrera, que aliado con sus agentes marxistas y
sus secuaces gorilas...”. SMATA sigue fiel al Justicialismo,
que es la esencia vital de una tercera posición frente a
culpables del pueblo oprimido y sojuzgado, capitalismo
explotador y socialismo esclavizante”.
Ante esa nota de opinión, la C.D. aclaró su posición
con este comunicado:
"1.- Que diferenciamos perfectamente entre lo que es la
CGT, como organismo que nuclea, a través de los
sindicatos, a todos los trabajadores, y los dirigentes de
los últimos años que han entregado o esquivado
cualquier lucha obrera.
"2.- Que el SOEPU en ningún momento estuvo adherido a la
Intersindical Nacional de Tosco.
"3.- Que posiblemente el compañero confunda que (por
decisión de Asamblea) hemos pertenecido a la
Intersindical de San Lorenzo, que nada tiene que ver, con
la Intersindical Nacional (salvo el nombre).
"4.- Que el SOEPU, junto a los gremios que formaban la
Intersindical de San Lorenzo han participado siempre en

XCV
los plenarios de la CGT, y junto a algunos otros gremios
de Rosario, llevaron siempre posiciones de lucha.
"5.- Que nunca hemos sido divisionistas, y pensamos que
no se trata de mejorar la CGT, sino de cambiar los
dirigentes que traicionan, cosa que solamente podrá ser
realizada por los obreros.
"6.- Que reconocemos al compañero Tosco (al margen de
sus ideas políticas) como a uno de los dirigentes obreros
que se jugó con-tra la burocracia sindical, estando
siempre en defensa de los intereses de los trabajadores.
(34)

El trabajo en turno rotativo continuó siendo un grave


problema por las consecuencias físicas y psíquicas que
acarrea el hecho de trabajar en forma anormal, los días, las
tardes, las noches, los días de fiesta. Y más aún si se suma
el hecho que el trabajador debe permanecer en su lugar
hasta que sea relevado por el compañero de turno entrante,
y cuando éste falta, debe continuar trabajando un turno. El
Sindicato logró arrancarle a la patronal el Cuerpo de
Operadores Volante que, a razón de tres obreros por turno,
pasaban a cubrir las ausencias de los compañeros. Esta cifra
se determinó teniendo en cuenta el índice de ausentismo en
aquella oportunidad. Durante el año 1973, las ausencias
fueron cada vez mayores y se planteó reiteradamente a la
Empresa la necesidad de aumentar esas cifras, para evitar
las extensas jornadas a las que se veían sometidos muchos
operarios, porque la cantidad de Volantes no alcanzaba.
Los pedidos registrados en la Comisión de Reclamos
finalmente dieron sus frutos, lográndose aumentar la
dotación para cubrir las distintas ausencias; eso pasó a ser
considerado como “una nueva e importante conquista del
Gremio”, según lo reseñado por varios de nuestros
entrevistados.

XCVI
La nueva Ley de Asociaciones Profesionales fue
promulgada en los últimos meses del año ‘73. Mucho
tiempo antes trascendieron las consideraciones más
importantes de la misma y desde entonces el SOEPU la
denunció como “el compendio legal que permitiría la
consolidación de una estructura de gremial absolutamente
verticalizada, con grandes poderes concentrados en sus
cúspides, para permitir un perfecto control de todas las
luchas fabriles y con poder de intervención de las
organizaciones gremiales menores (comisiones internas,
sindicatos, delegados, etc.), cuando éstas no acatasen las
imposiciones de las organizaciones de grado superior”.
Como hemos comentado, desde entonces se comenzó
a hablar insistentemente de la desaparición de los
“Sindicatitos” o Sindicatos de Empresas, y de la necesidad
de tener en cada región una sola organización gremial por
rama de la producción. La C.D., al analizar la situación,
manifestó que “en general, esta concepción es justa, ya que
históricamente el sindicato de empresa (salvo honrosas
excepciones) fue casi siempre manejado e impulsado por la
patronal; por otro lado, es justo que los obreros de una
misma rama productiva tiendan a unirse y no a dispersarse.
El asunto está en ‘cómo’ y ‘para qué’ se concreta esa
Unidad: una cosa es unificarse a través de un
procedimiento democrático y por voluntad de las bases,
para el logro de una Organización Sindical que tenga más
poder de lucha por las reivindicaciones económicas de los
obreros, y otra cosa es someter contra la voluntad de los
trabajadores para formar un organismo burocrático que
olvide la lucha contra las patronales”.
“La FATIQYP (Federación de Industrias Químicas y
Petroquímicas) ha cursado con fecha 8-10-74 una nota al
Ministerio de Trabajo para que se nos quite la Personería
Gremial, aduciendo el Art. 24 de la Ley de Asociaciones

XCVII
Profesionales. Este artículo en absoluto corresponde ser
aplicado a nuestro caso, ya que se refiere al otorgamiento
de una personería a un sindicato en una determinada zona
geográfica, cuando en la misma existe ya un sindicato de la
misma rama de la producción; en tal caso, no corresponde
acceder al pedido. Nosotros ya tenemos personería
otorgada, y en realidad de lo que se debería tratar es de un
caso de encuadramiento sindical.
“En la nota presentada por FATIQYP, se nos considera
incorrectamente sindicato de empresa: somos el Sindicato
Petroquímico (o sea que representa a los trabajadores de
esa actividad en los Departamentos San Lorenzo y Rosario)
y no el sindicato de los obreros de PASA. Se nos acusa
indirectamente de oponernos a la unidad del movimiento
obrero y de ser divisionistas. Olvidan sus dirigentes la
trayectoria del SOEPU que siempre ha bregado por todas las
formas de unidad, inclusive aquélla de los obreros de
fábricas o sindicatos de distintas ramas de la producción.
Olvidan la solidaridad permanente de los petroquímicos con
cualquier lucha de los trabajadores de la zona, incluso
específicamente con los de Duperial cuando fuera
despedido el Secretario General del Sindicato Químico San
Lorenzo. Comentan que nuestra personería fue otorgada en
la época de la dictadura (¿quizás porque hayamos estado
con ella?), pero no dicen que una de las últimas resoluciones
que firmó el Ministro de Trabajo San Sebastián del
Gobierno de Lanusse, fue la de extender la
representatividad de la Federación Química hasta ese
entonces, a Química y Petroquímica, sin habernos pedido
opinión, como legalmente hubiera correspondido.
“La C.D. del SOEPU, en propuesta que será realizada a la
Asamblea del Gremio, está por la formación de un Sindicato
Único, Químico y Petroquímico, que represente a los
trabajadores de Rosario y San Lorenzo, o sea por una forma

XCVIII
de fusión de los actuales Sindicatos Químicos de las dos
zonas y el SOEPU. Lo único que pedimos, dado que se trata
del ingreso de 750 trabajadores de la fábrica más
importante de la zona industrial, es el derecho a tener
representantes en esa nueva Organización, y no a través de
una negociación que signifique incorporar algunos de los
que actualmente somos dirigentes del SOEPU, sino a través
de nuevas elecciones democráticas donde cualquier
petroquímico pueda integrar una lista junto a obreros de
Sulfacid, Duperial, Aga, o cualquier otra fábrica de la zona, y
que sean los propios trabajadores los que elijan sus
dirigentes y voten el programa de la lista que les interese.
“Para finalizar, estamos por la unidad, pero también por la
democracia, banderas que siempre hemos levantado y arma
de los trabajadores para decidir su propio destino.” (35).
En 1975 ingresaron a PASA, como efectivos, más de
ciento veinte obreros. Esa incorporación fue el producto de
la necesidad de mano de obra, sobre todo en tareas de
mantenimiento, que desde hacía mucho tiempo reclamaba
el Sindicato. El incremento del trabajo se cubrió con obreros
que hasta ese momento estaban desocupados y fue el fruto
de la actitud de los obreros petroquímicos de no realizar
horas extras desde los primeros meses del año ‘73.
Esa posición fue doblemente ejemplar: por un lado, la
defensa del concepto de la jornada mínima diaria; por el
otro, fue solidaridad de clase no quitándole la posibilidad de
trabajo a compañeros sin ocupación fija. Al respecto, un ex
petroquímico reflexionó sobre lo sucedido: “Aquí están los
resultados que a veces no se ven en la dimensión que tienen,
la no realización de horas extras ha sido ratificada en varias
Asambleas. Y esa sería la posición que, por lo menos, la
Comisión Directiva siempre defenderá, por ser de estricta
justicia”.

XCIX
Desde los años ochenta hasta la actualidad, mucho se
ha hablado de la contaminación de mares y ríos, de las
distintas capas inferiores de la atmósfera, de su peligro para
la vida humana. Ese tema fue analizado en varias ocasiones
por los petroquímicos en los años ‘60 y ’70, se pronunciaron
con distintas denuncias, tomaron acciones para combatirla y
realizaron las medidas más importantes durante la toma de
fábrica con control obrero de la producción durante 1974,
que será tratada en el Capítulo V.
Luego de debatirse en el Cuerpo de Delegados y entre
los miembros de la C.D., a fines de 1975 se dio a conocer un
comunicado, que fue divulgado en la fábrica, en la zona
industrial, teniendo amplia difusión en los medios de prensa
de la región:
“En primer lugar, se oculta un problema fundamental: son
los países altamente desarrollados quienes, a pesar de su
capacidad tecnológica, han polucionado sin miramiento
mares y océanos, lagos interiores y atmósfera de sus
propios países, rompiendo en muchos casos el equilibrio
ecológico. Pero si ellos arruinaron de esa manera sus
propios países, imagínense, compañeros, lo que habrán
hecho en los países donde radican sus industrias, en los
países del tercer mundo.
“Otro tanto ocurre con el aire, al que se arrojan sin
miramientos de ninguna especie miles de partículas que van
a parar, inexorablemente a nuestros pulmones. En una
palabra, un sistema de explotación de la riqueza que tiene
como meta el lucro, termina por producir, en los hombres y
en la naturaleza, efectos devastadores. Lo que le importa al
inversor son sus dividendos, lo que le importa al ejecutivo es
el aumento de la producción y la conquista de los mercados,
lo que le preocupa al ministro de economía es el producto
bruto mentirosamente per capita.

C
“En los marcos de una economía de saqueo de los recursos
naturales del tercer mundo, y de despilfarro de las fuerzas
de la naturaleza, impuesta por la etapa de la sociedad
capitalista de la sociedad de consumo es imposible siquiera
corregir el problema de la polución ambiental y
terminaremos destruyéndolo todo.
“La contaminación de los microclimas industriales,
causados por el polvillo, las emanaciones, los vapores,
radiaciones calóricas y de todo tipo, y que tienen lugar
dentro de los establecimientos fabriles son un problema
mucho más agudo e importante y sin embargo silenciado,
brutalmente ignorado. En efecto, la ley que trata de
implementar los medios para su erradicación no tiene
ninguna aplicación. Los problemas genéticos, biológicos, los
miles de enfermedades que lo tienen por causa continúan
haciendo presa de los trabajadores ante la casi indiferencia
de los encargados de evitarla.
“Es necesario asumir una actitud clara y responsable ante
el problema de la contaminación:
Exigir la aplicación de la ley
Exigir se tomen las medidas adecuadas para asegurara la
vida de los trabajadores en nuestras insalubres fábricas
Dar adecuada publicidad al problema dentro de los medios
con que contamos
Promover entre los trabajadores una adecuada conciencia
del problema para convertir la en una reivindicación sentida,
capaz de movilizarnos por uno de los bienes más precarios
que ‘tenemos’ (o perdemos): nuestra salud.
“Es necesario que los sindicatos, las comisiones internas,
las municipalidades, el gobierno, se hagan cargo del
terreno, porque es mucho más peligroso de lo que todos
imaginamos. No es posible trabajar ‘comiendo’ radiaciones,
ruido, polvillo, aerosoles en suspensión, emanaciones,
vapores, a la corta o a la larga. Por ello debemos coordinar

CI
tareas entre los compañeros de las fábricas y barrios más
castigados por el problema y extender la iniciativa a
sectores más importantes de trabajadores, profesionales,
intentando comprometer en su acción a los sindicatos, al
gobierno.” (36).
Por su parte, un instrumentista manifestó sobre el
tema que “en la edición de marzo de 1973 de una revista
especializada en petróleo y petroquímica leemos en un artículo
dedicado a una nueva refinería instalada en la localidad de
Ponce en Puerto Rico, que los medios instalados en este
complejo para disminuir los efectos de la producción de
contaminantes del medio ambiente, son de extraordinaria
eficacia.
“El programa para evitar la contaminación del aire, agua y
suelos, consta de dos fases. La primera está instalada en las
unidades de proceso, que están equipadas con detectores
de contaminantes. La contaminación del aire se elimina
virtualmente mediante depurado-res, colectores de polvo,
filtros de carbón activado e incineradores situados
estratégicamente.
“Los líquidos pesados y residuos difíciles de quemar se
cargan a incineradores que usan vapor de agua y gas
combustible para obtener combustión sin humo. Las
cenizas resultantes y los no combustibles se usan para
rellenar terrenos. Las aguas contaminadas se tratan en
instalaciones muy modernas y luego de una increíble
cantidad de procesos vuelve a la bahía con la pureza, el ph
y la temperatura exacta de acuerdo con las normas estrictas
impartidas por el gobierno. En la misma fecha PASA o
Industria Dow (en menor escala), ignorando olímpicamente
la Ley Nº 20.284 que legisla las normas a las que deben
ajustar las empresas que se dedican a quemar todo tipo de
desechos industriales. El humo de dichas quemas es bien

CII
conocido por los vecinos de la zona pues además de
respirarlo se ven afectadas por el hollín que cae sobre
quintas, casa y ropas tendidas al sol. Es hora que las
autoridades tomen en sus manos este grave problema.” (37).
Hacia fines de 1975, se produjo otra polémica entre
los Petroquímicos. La cuestión se refería al papel del
Sindicato, de los sindicalistas, del trabajo o no de los
miembros de la Comisión Directiva en fábrica, la relación
del Gremio con los trabajadores. Debemos relacionar este
debate con lo planteado anteriormente, cuando
comentamos que luego de los primeros triunfos de la Lista
Verde, los miembros de la C.D. desarrollaban sus tareas
cotidianas en la fábrica y luego se ocupaban de las propias
en el local sindical. Al respecto, un operario -que firmó como
Roque- expresó su posición en un artículo, al sostener que
“muchos dicen que el Sindicato se dedica mucho a la
política y a lo de afuera y no le presta atención a nuestros
problemas”, y explicitando a continuación:
“El Sindicato es la organización legal de los trabajadores
por rama de la producción. Como tal tiene derechos
otorgados por la ley, los más importantes logrados a través
de la lucha obrera, y tiene todas las limitaciones que la
misma ley les impone. Cuando el Estado, a través de sus
organismos correspondientes, el Ministerio de Trabajo, toma
determinaciones políticas como ser la anulación de los
convenios de trabajo, la prohibición de las huelgas por
aumentos salariales, la declaración de ilegal a un
movimiento de fuerza por cualquier reivindicación, o cuando
el Estado a través del ejército o la policía reprime
manifestaciones obreras, desaloja fábricas ocupadas,
detiene a dirigentes y activistas (como en Villa
Constitución). En fin, al regularse toda la actividad sindical a
través de leyes y decretos creados por los distintos

CIII
gobiernos, es ingenuo pensar que la actividad política puede
estar al margen del Sindicato. Por más que se hiciera un
esfuerzo por tener un sindicato apolítico, sus dirigentes y los
trabajadores que nuclea, son hombres que actúan ante cada
hecho de acuerdo a una concepción política, siendo
imposible dividir al hombre obrero del hombre político,
porque el hombre es uno solo en todo momento.
“Lo que debe tratar de evitarse, es que el Sindicato, por
determinación de sus dirigentes, sea la sucursal o el
adherente de un partido político, o adopte posiciones
partidistas. O sea, debe existir una lucha constante contra
todo lo que sea verticalidad (obedecer porque así nos lo
mandan, sin tener derecho a decidir nosotros). Y esto se
consigue como nosotros lo hacemos, con Democracia
Sindical.
“Ante la fortaleza de nuestros enemigos y ante la debilidad
del Movimiento Obrero cuando se encuentra escindido,
encasillado en las luchas particulares de los ceramistas
contra Verbano o Cerámica San Lorenzo, de los Químicos
contra Duperial o Sulfacid, o de los Petroquímicos contra
PASA, es necesario hacer todos los esfuerzos posibles para
lograr cada vez más una creciente unidad de los
trabajadores sin distinción. Lo que en este sentido hayan
hecho los compañeros de la CD, delegados o activistas de
fábrica, debe merecer el apoyo y la participación de todos.
La solidaridad, la coordinación de las luchas, etcétera, son
cuestiones inseparables, imprescindibles del accionar
obrero.
“Si hay una crítica que hacer a la Comisión Directiva en
este aspecto, es la falta de difusión de los hechos más
importantes sucedidos en otras fábricas de la zona, como
uno de los medios necesarios para despertar mayor
conciencia de unidad. Como vemos una crítica de lo poco y
desconocido que se hizo, y no de lo mucho. Donde los

CIV
compañeros tienen razón, con algunas aclaraciones para
hacer, es en la desatención de los problemas de fábrica,
críticas realizadas casi por unanimidad, y reconocida por el
compañero Sosa”.
“Pero he aquí una aclaración, no se trata de reclamar a tal
o cual compañero de Comisión Directiva que venga a la
fábrica para que nos resuelva nuestro problema particular
con sus ‘conocimientos o capacidad sindical’, o por el que
ellos ‘están en eso’, sino de exigirles a dichos compañeros,
que como hombres activos y esclarecidos estén junto al
resto de los Petroquímicos y cada una de las protestas, por
las categorías, por el trabajo inseguro, por el trabajo de
turno, etc.. Y no aislados de esa realidad cotidiana,
atendiendo en el local sindical cientos de trámites
administrativos, o en el ministerio de trabajo persiguiendo
expedientes que nunca se resuelven o que es inútil
iniciarlos, todo como verdaderos empleados de un club o
mutual llamado: SOEPU.
“Reclamemos de los compañeros que vuelvan a la fábrica,
no por comodidad nuestra, así no nos tenemos que molestar
a ir al local de Avenida San Martín, sino para contarlos junto
a nosotros en cada enfrentamiento con la patronal y para
encarar, con ellos, las muchas cosas que van siendo
postergadas o directamente que se han olvidado”. (38)
Uno de los acontecimientos que golpeó muy duro a
todos los Petroquímicos fue el fallecimiento en un accidente
del Secretario Gremial del Sindicato, Néstor Moglia. Las
crónicas de sus compañeros comentaron:
“El día 8 de mayo de 1973, fallecieron trágicamente
nuestro Secretario General, Néstor Moglia, y su señora
esposa. La noticia, que corrió rápidamente, fue dejando
helados e impotentes a todos quienes los conocimos.
Nuestras gargantas se anudaron y nuestros ojos se llenaron

CV
de lágrimas. Lo imposible era realidad. El ‘flaco’ había
muerto. La caravana de hombres que fue a saludarlo fue
incesante. Toda la zona industrial lloró a Néstor, porque
reconoció en él al obrero que luchó por su clase.
“Transcribimos a continuación el Comunicado de la
Comisión Directiva del SOEPU, del 9-5-73, con referencia a
este hecho y que no fuera dado a publicidad por la prensa
del régimen:

“Falleció a los 28 años de edad como consecuencia de


un accidente automovilístico, junto con su querida esposa
Beatriz. La clase obrera pierde en esta muerte absurda a
uno de sus mejores dirigentes. Secretario General del
Sindicato Petroquímico, se desempeñó durante seis años
en el secretariado de esta organización y esperaba cubrir
durante dos años más la conducción del Gremio en las
próximas elecciones.
“Al frente del SOEPU demostró su capacidad, su don de
gente, su empuje creador y su audacia para emprender
y solucionar problemas. Dedicó su juventud, su vida toda,
a la defensa de los intereses de la Clase Obrera,
posibilitando numerosas conquistas en el seno de su
Gremio. Uno de los fundadores de la Intersindical de San
Lorenzo, luchó en jornadas heroicas del Movimiento
Obrero como el Rosariazo, luchó contra las patronales,
burocracia y dictadura, y defendió las posiciones justas
que surgieran desde el seno de la clase.
“Se entregó siempre sin desmayo ni retaceos de
ninguna índole abrazando la idea de los explotados,
encabezando numerosas luchas en momentos
sumamente difíciles.
“Néstor Moglia nos marcó un rumbo del cual hoy no
podemos apartarnos.

CVI
“Debemos estrechar filas cumpliendo cada uno con sus
tareas ante las exigencias de cada día para
reencontrarnos con él en algún día glorioso y junto a
otros tantos mártires, en el triunfo definitivo del pueblo.
Esto ha de ser nuestro mejor homenaje.
“Sus restos los despidieron en improvisadas palabras,
que salieron trabadas de tanto dolor, los compañeros
Zamboni, Asesor Legal, y Venanzi por los compañeros
Petroquímicos, compañeros de los Sindicatos Químicos,
Ceramistas, y Sulfacid, y amigos de Néstor y Beatriz.” (39).
Una de las oraciones que fueron leídas durante el
sepelio de Néstor Moglia, es la siguiente:
Tu vida fue una ofrenda a la causa de los explotados
Viviste intensamente las injusticias que todos los días
nos muestra
esta sociedad
Y la enfrentaste
Entregando todas tus horas en la lucha dura, negando
la
importancia de tu ser individual
por unirte a las filas de los obreros y levantar sus
banderas.
Nada de lo tuyo fue importante para vos. Todo lo de
todos tocó tus
fibras de revolucionario.
Ayer presentamos la Lista para las próximas
elecciones, y tú la
encabezas.
Porque para nosotros seguirás siendo nuestro líder.
Néstor:
No te pierde solamente tu familia
No te pierden solamente tus amigos
No te pierde solamente el Gremio

CVII
Te pierde el movimiento obrero, donde dejas un vacío
tremendo que
los que quedamos trataremos de llenar,
levantando tu bandera caída, tomando tu
ejemplo de hombre justo.
Para seguir tu camino que es el camino del AMOR
Porque luchar por los oprimidos y clamar justicia es
vivir
AMANDO.
Siempre con vos y con tu ejemplo, es el mejor
homenaje que te
podemos brindar
Y a vos Betty, nuestra admiración de haber sido una
compañera fiel,
y un apoyo
constante en los momentos difíciles
Tu fidelidad y tu apoyo, fueron tu lucha, la de Néstor, la
nuestra.
Sólo les decimos hasta pronto, porque volveremos a
encontrarnos
junto a tantos mártires,
en algún día que será glorioso para todos los
trabajadores del mundo.
¡CHAU NÉSTOR! ¡CHAU BETTY!
(40)

Hacia 1971, la situación económica de distintos


sectores de la clase obrera era crítica, ya que la
desocupación aumentaba y los despedidos crecían día a día.
El panorama en el país mostraba a ciento ochenta cesantes
del Sindicato de Empleados Públicos de Córdoba, doscientos
cincuenta y nueve de Sitrac - Sitram, quince despedidos en
Tafí Viejo -Tucumán-, cincuenta y dos obreros del
Transporte Automotor -AOTA- de Rosario en la calle, mil

CVIII
trescientos suspendidos en el SWIFT, conflictos en Oltolini,
Laminfer y decenas de fábricas más, a lo que se sumaban
cinco mil trabajadores de FIAT trabajando apuntados por
armas, intervención a sindicatos, obreros presos, obreros
perseguidos, represión y más represión.
Ante ese panorama, la Sub-Comisión de Prensa se
solidarizó con los trabajadores afectados, emitiendo este
comunicado de protesta y solidaridad:
“Jamás tuvimos tantos atentados a los derechos humanos.
Jamás ha sido tan cruel la ley de la fuerza y de los dueños
del dinero. Tal era el panorama el día del plenario de la CGT
de Rosario. Pero... ¿Qué pasó? Lo de siempre. Pretender
utilizar a la clase trabajadora para satisfacer intereses
particulares, usando como máscara el problema de AOTA,
problema que no podemos negar. ¿Pero es que debemos
cerrarle los ojos a todos los demás y mirar para donde nos
conviene? O es que estos títeres de Rucci, también piensan
como el Gobierno que todos los problemas enumerados son
provocados ‘por los agentes del caos y la subversión’? Un
paro para el 18 de noviembre por AOTA es todo lo que salió
del plenario de la CGT. Y quizás cuando este Boletín esté en
circulación, con cualquier pre-texto el paro se habrá
levantado. Porque ya estamos acostumbrados a estas
cosas. Nuestro gremio concurrió a la CGT con mandato de
Asamblea de parar con un plan de lucha o no parar. Pero las
consecuencias ya son previsibles. Esta es una hora
dramática. Lo comprendemos, lo vivimos y lo sentimos. Allí
cuando parece que no se va a llegar nunca a tierra, allí
cuando el ataque es más feroz, allí cuando se nos quita todo
y sólo queda resistir, nadie debe consentir lo que no se
quiere, nadie cambiará su dolor ni aplacará su rebeldía por
un plato de lentejas. Porque nacimos para ser libres aunque
crezcan los atropellos, porque nos causa repugnancia ser

CIX
esclavos. El clamor del pueblo continuará creciendo. Aún a
costa de la traición de muchos dirigentes. No habrá cárceles
que puedan detener nuestros ideales.
“Y en la hora de triunfo, recordaremos el valor de aquellos
que no se arrodillaron ante ningún poder de la tierra. Y en
esa hora, que la veremos de acá o del más allá, sabremos
darnos cuenta que el hambre que hoy padecemos, sirvió
para lo más grande a que puede aspirar un hombre: que de
él se diga que vivió para servir a la liberación de su pueblo.”
(41)
.
Una fecha que siempre se conmemoró en el Gremio
fue el 1º de Mayo. Se lo hizo con notas de memoria,
recordando su origen, a las víctimas, los reclamos en las
distintas épocas, y con artículos donde se vinculaba la fecha
histórica con la actualidad de los trabajadores. Hacia 1969,
cuando comenzaban las luchas populares contra la
Dictadura, se dio a conocer esta nota:
“Suena en nuestros oídos, como un ruido lejano, la lucha
de los Mártires de Chicago, como así el padecimiento de
miles de obreros en jornadas inagotables de trabajo, de 13 y
hasta de 16 horas, en condiciones inhumanas.
“Costó a la clase obrera años de lucha para poder unirse e
iniciar el camino hacia una jornada de 8 horas, con un
sueldo para poder subsistir en forma más humana.
“Actualmente dicha jornada, es parte integrante de las
leyes vigentes en casi todo el mundo; pero en nuestro país,
debido al constante deterioro del poder adquisitivo de la
moneda, es prácticamente imposible que ello se cumpla.
Algunos sacrifican su descanso en agotadoras horas de
recargo; otros, se ven obligados a trabajar en dos lugares.
Evidentemente esta no es la solución de subsistir. Por ello es
que el 1º DE MAYO es un día de protesta, que se
transformará en un día de gloria, cuando consigamos

CX
posibilidades de trabajo iguales para todos, y una jornada de
8 horas, con un sueldo acorde a las necesidades actuales.
Por eso queremos llegar, en este día, a todos los
compañeros del SOEPU, con estas líneas, puesto que nuestra
actitud fue y será consecuente con este planteo, y para que
cada uno de nosotros, reflexione sobre la importancia que
tiene la preservación de nuestras conquistas laborales, por
la cual esta Organización viene bregando.” (42).
En otra ocasión, se reivindicaron las luchas de la clase
obrera por mejores condiciones de vida y laborales, a través
de un editorial en el cual se planteó: “Manifestamos sentir
en las fibras más íntimas, el clamor incesante de justicia de los
trabajadores de todos los tiempos, a través de un historia
manchada de sangre y brutalidad. El castigo, el sufrimiento y
el hambre, fueron motivos para que el esclavo, el obrero, el
oprimido, se sublevaran. El trabajador cambió su tremenda
fuerza productiva por miserables condiciones de vida,
considerando su vida como el solo hecho de existir. Pero
pronto quiso elevarse a la condición de hombre. Y luchó. Y su
lucha fue y parece ser eterna, pues mediante ella pudo, puede
y podrá conseguir los más elementales derechos humanos.”
(43)
.
Buena parte del análisis de los hechos aquí expuestos
abarca el período de la Dictadura Militar que se extendió
entre 1966 y 1973; y durante todos esos años, desde el
SOEPU se asumieron distintas posturas antidictatoriales,
enfrentando a la Dictadura en la calle, en las
movilizaciones, con pronunciamientos y actitudes solidarias
para con las víctimas de la represión dictatorial, contra la
tortura, y reivindicando los alzamientos populares.
En ocasión del I Rozariazo y del Cordobaza, de mayo
del ‘69, el Gremio opinó con un artículo titulado ‘La
Verdad’, donde se valorizaban las movilizaciones

CXI
estudiantiles y obreras:
“- El estudiante no salió a la calle, simplemente porque se
aumentó el ticket del Comedor Universitario en la
Universidad del Nordeste.
“- El obrero no salió a la calle simplemente en apoyo del
estudiante, ni en solidaridad con los obreros mecánicos,
perjudicados por las quitas zonales y el sábado inglés.
“- Onganía y Lanusse, entre tantos, no asesinaron,
encarcelaron, reprimieron, etc., para restablecer la paz
perdida (?), protegiendo al pueblo (?) de 2.000 extremistas
rosarinos o 2.500 obreros - extremistas cordobeses, que
perturbaban el orden, con el solo fin de agitar y sin motivo.
“- El estudiante salió a la calle, en expresión de repudio por
la Ley Universitaria, por el limitacionismo, por los
aranceles, por la eliminación del gobierno tripartito, contra
los antiquísimos programas de estudios, contra las infinitas
trabas que se le imponen (exámenes preuniversitarios
filtros, correlatividades, aumento de años de carrera),
contra la privatización de los comedores universitarios,
contra la privatización de la enseñanza (muy incentivada
por el gobierno), contra la presencia de la policía en la
Universidad, etc.. El estudiante consciente, salió a la calle
para luchar con-tra la filosofía de las botas y de las clases
altas: ‘El hijo de obrero, obrero’.
Cabral y Bello murieron luchando por una Universidad
abierta al pueblo, y por la formación de profesionales aptos
al servicio del país (del pueblo).
“- El obrero salió a la calle, en expresión de lucha contra el
con-gelamiento de salarios, contra el alza de los precios de
los productos de primera necesidad, contra el aumento del
costo de la vida, por la discusión de los convenios
colectivos de trabajo, contra la racionalización (despidos
masivos, para producir más con menos hombres), contra la

CXII
entrega de las riquezas nacionales, por la ley de
jubilaciones, contra la intervención de sindicatos, contra la
persecución de dirigentes sindicales, contra la
desocupación, con-tra el hambre en Tucumán, Chaco, etc..
El obrero salió a la calle por un profundo desprecio contra
el gobierno elegido por nadie, antipopular y asesino.
“- Onganía y Lanusse, entre tantos, reprimieron con
salvajismo y responsabilizaron a los extremistas, de una
movilización popular de proyecciones. Esta es la clásica
técnica que usa la dictadura para desprestigiar el
levantamiento de un pueblo todo que quiere cobrarse
venganza por sus hijos caídos y que clama justicia
impulsado por su necesidad humana”.
A la vez, se analizaba que:
“El Orden y la Paz Social se rompen como consecuencia
de un ‘no aguanto más’ a una conducción política, social y
económica totalmente impopular y al servicio de unas
minorías.
“El pretendido Orden se consigue mediante una serie de
leyes represivas que pretenden maniatar al pueblo,
eliminando las únicas armas hasta entonces legales que
poseían, como ser el derecho de huelga y la conducción
sindical.
“La Estabilidad Económica se desmorona como producto
del aumento de la nafta, la leche, el pan, las frutas y los
artículos de primera necesidad.
“La Paz Social es totalmente destruida como consecuencia
de la violencia impuesta por la dictadura para contener
a un pueblo indefenso. No podrá haber ya Paz Social,
cuando una parte de esa sociedad, la ‘fuerte’, la ‘brava’,
asesina cobardemente a la otra parte de la sociedad, la
oprimida, la manoseada.” (44).

CXIII
Además, desde el SOEPU se saludó y se felicitó “al
Gremio por su más honrosa y sensible participación en los
problemas de la clase trabajadora. Nos emocionamos todos
ante la actitud humana de identificación con las lágrimas
del pueblo. Fueron días de duelo los tristes días de mayo. Se
reflejaron en las caras pálidas de todos, en los que
participamos en las marchas de silencio, en los que vivimos
el silencio”. Y la nota de la C.D. ofrecía el contraste de dos
situaciones, de aquellos que fueron premiados y otros
castigados por sus actitudes:
"A.- La empresa agradeció los servicios prestados en esos
días, con 10.000 pesos a su personal fuera de convenio, y
algunos que están bajo convenios a pesar de sus renuncias al
Sindicato (ejemplos, Fanelli, Smolars, Martín, Galassi), para
‘prestigiarse’. ¿Pudo PASA comprar con 10.000 pesos el sentir
del corazón de su gente? ¿Fue la intención de PASA destacar
a esa gente con 10 mil pesos, por prestar sus servicios en
tremendos días de dolor? ¿Habrá aceptado gustosa, esa
gente, el premio a la insensibilidad, a la ‘contracción al
trabajo’?
"B.- Al obrero de Petroquímica, adherirse al duelo le costó
entre 5 y 6 mil pesos a cada uno, más lo hizo sin siquiera
pensar en ese ‘detalle’, que es importante para él, pero que
realmente pasará desapercibido ante la magnitud de la lucha,
que es su lucha. ¡Salud, compañeros!” (45).
Desde esos días de mayo y septiembre del ‘69, las
movilizaciones de la clase obrera y del estudiantado
universitario aumentaron; las mismas fueron acorralando a
la Dictadura Militar, y al año siguiente se produjo el Golpe
dentro del Golpe, desplazándose a Onganía, quien sería
reemplazado por el desconocido Levingston. Un editorial del
Boletín comentaba:

CXIV
“Un año ya recorrido, que ha sido un camino largo, con
algunas victorias, con masacres, con angustias. Etapas cada
vez más cercanas hacia la victoria definitiva del pueblo.
Innumerables salidas a la calle desde las fábricas y desde
las aulas han tropezado con las tropas de la represión,
manifestaciones populares han sido corridas por las ‘fuerzas
del orden’, marchas interrumpidas por la razón de las
cachiporras, las 45 y los fusiles Fal.
“Innumerables barrios de emergencia han sido
atropellados repetidamente para ser el teatro de ‘razzias’
sistemáticas. Innumerables pueblos han sido invadidos por
las botas y han tenido que tragar su indignación ante la
imposibilidad de expresar las justas reivindicaciones de sus
derechos y dignidad. Sangre de lucha derramada por
nuestras calles: Cabral, Bello, Blanco y Jáuregui, los mártires
de Córdoba y Rosario, etc.. Cárceles llenas de compañeros,
ejemplos de coraje que han canjeado su libertad, en lucha
por la libertad de todos. Decenas de militantes torturados en
todo el país por la salvaje policía del régimen.
“Consejos de guerra, estado de sitio, liquidación de la CGT
de los Argentinos, detestable participación del gobierno en
la formación de una CGT con los traidores de siempre,
aumentos para militares, jueces, fabuloso presupuesto
destinado a la compra de armamento para la represión,
aumento de 3.000 pesos, etc., etc..
“Compañeros, que este 1970 sobre la base de nuestra
unidad en la lucha, encaremos el camino de liberación.” (46).
Desde que la Lista Verde se hizo cargo del Sindicato,
siempre se tuvo una clara posición antiburocrática,
denunciado a los burócratas gremiales, “amigos” de los
patrones.
“En nuestra plataforma electoral, dijimos en reiteradas
oportunidades que queríamos un Sindicato que apuntalase

CXV
fundamentalmente a lo gremial, y en segundo aspecto a lo
social, y pusimos ejemplos de otros gremios con grandes
entradas de dinero por recaudo de las cuotas sindicales, con
lo cual muy poco les costaba emprender grandes obras, con
inversiones millonarias, mientras sus afiliados tenían
sueldos de hambre, y condiciones de trabajo inhumanas.
“Y así nombramos a grandes traidores de la clase obrera
que transforman lentamente al Sindicato en una Sociedad
de Beneficencia o un Club Social, y no en un núcleo de
fuerza organizada que impida el avasallamiento, y bregue
para lograr mejores condiciones de trabajo, salarios justos,
jornadas reducidas.
“Todo esto quedó confirmado últimamente con dos
acontecimientos indignantes:
Armando March, Secretario General de la Asociación de
Empleados de Comercio y Presidente del Banco Sindical,
dueño de cuadros de valor de más de 200 millones de pesos
y de los mejores perros de raza del país, desaparece
repentinamente con sus bolsillos cargados de dinero.
Serbali, ex Secretario del Sindicato de la Carne, acusado
por dolo por su propia organización: 1.000 millones de
pesos, propietario de muchas líneas de ómnibus de Rosario,
o sea, dirigente sindical por un lado, patrón por el otro.
“Estos dos delincuentes, entre tantos, permanecen
impunes ante la triste realidad de sus dirigidos. El primero
ante los sueldos de 20 a 25 mil pesos de los empleados de
comercio. El segundo, entregando públicamente un lucha de
los obreros del Swift Rosario, a quienes se les hace trabajar
a dos grados de temperatura, sin proveerlos de ropa
especial, con la consiguiente insalubridad del trabajo, lucha
que deja en la calle a más de 35 obreros.
“La práctica nos enseña que no se puede desvirtuar el fin
con que hace años se iniciaron las organizaciones gremiales.
La historia comienza cuando se luchaba por reducir las 14

CXVI
horas de trabajo. Hoy los obreros italianos reclaman la
jornada de 6 horas.” (47).
Cuando el gobierno de Lanusse se vio en la necesidad
de convocar a elecciones y al GAN -Gran Acuerdo Nacional-,
para intentar frenar las luchas populares y por temor al
“Argentinazo”, desde distintos sectores se denunció la
maniobra del Dictador, con su propuesta de democracia
restringida y salida negociada para los militares golpistas.
En el SOEPU, ese fue un tema debatido; se realizaron
distintos análisis y pronunciamientos. Hacia 1972, uno de
ellos fue el siguiente:
“El país marcha hacia el proceso de normalización
institucional. Así rezan la mayoría de los comunicados
oficiales de este gobierno de nadie. Pero la realidad nos
muestra algo muy distinto. Los posibles principios de
soluciones para el pueblo en salud, economía, educación,
cultura, etc., ni fu ni fa. El costo de la vida sigue para arriba.
La libertad no existe. Las cárceles siguen llenas de presos
gremiales, políticos y estudiantiles. Los arrestos por estas
actividades continúan. La pena de muerte está a la orden
del día. Los dirigentes obreros de la CGT de Córdoba
perseguidos por ‘subversión’. La represión sigue en el país.
“A este panorama se sumó en los últimos días los
repudiados hechos de Trelew. Ante los mismos el SOEPU
junto a otras organizaciones solicitaron inmediatamente un
plenario a la CGT para tomar medidas. Pero ésta sólo se
limitó a hacer oír su voz de protesta. Estamos convencidos
que estas cosas no se solucionaran con comunicados de
repudio. Sabemos de la indignación de las bases y de la
fuerza combativa en potencia de nuestro pueblo.
“Una organización como la CGT no puede ni debe
permanecer por más tiempo sin una dirección
auténticamente representativa y que por sobre todas las

CXVII
diferencias defienda nuestros sagrados intereses.
Consideramos que es necesario que cada militante, cada
agrupación trate de ayudar a la organización de los
trabajadores para recuperar sus sindicatos.” (48).
La Dictadura iniciada en 1966, que se extendió hasta
1973, se caracterizó por la represión y la violencia ejercida
sobre la población, y especialmente contra aquellos que la
enfrentaron en las calles, en las fábricas, los sindicatos y las
universidades. Desde la destitución del presidente Illía,
pasando por la “noche de los bastones largos” y el desalojo
de las universidades, hasta las cárceles colmadas de
obreros y estudiantes, la represión fue en aumento. Luego
del llamado al GAN, nada cambió y los Petroquímicos
denunciaron con fuerza la represión a la Asamblea Obrero
Popular de julio de 1971:
“El SOEPU, condena la represión policial, en la Asamblea
Obrero Popular realizada en nuestro Sindicato el 29 de julio.
Una vez más, hemos sido objeto de la persecución y
represión por parte del gobierno que reclama el Gran
Acuerdo Nacional. Dirigentes de nuestro gremio, como así
también compañeros del SITRAC - SITRAM invitados al acto y
numerosos obreros y estudiantes fueron detenidos. La
Intersindical, el viernes 30 dispuso la convocatoria
inmediata a Asambleas de base, para tomar urgentes
medidas de fuerza, que quedaron sin efecto al quedar todos
los detenidos en libertad. Es indudable que mientras en
los hechos la dictadura encarcela y asesina a todos aquellos
que luchan por la liberación nacional, muy lejos estamos de
jugar el partido del gobierno. Expresamos nuevamente
nuestro enérgico repudio a la represión policial y señalamos
que hechos como éste, lejos de intimidarnos nos vigorizan
para continuar en la lucha del pueblo y jugar el gran partido
de los trabajadores. Las reivindicaciones planteadas

CXVIII
(49)
siguen en pie.” .
En otra ocasión, entre marzo y abril de 1972, se dijo:
“Volvemos a reiterar hoy la posición del gremio ante los
difíciles momentos que atraviesa el pueblo argentino.
Estuvimos y estamos en contra de la represión
indiscriminada y de toda legislación represiva. Estuvimos y
estamos en contra de la privación ilegítima de la libertad.
Estuvimos y estamos en contra de los métodos de tortura.
Estuvimos y estamos en contra de los actos de provocación.
Estuvimos y estaremos siempre en contra de toda injusticia.
“Creemos que con la aplicación de estos métodos no se
solucionan los problemas. Los males que soporta el país
siguen existiendo, agravándose cada día más. Y somos
plenamente conscientes de ello. Nosotros queremos de
nuestra Patria, una sociedad de hombres libres sin
opresores ni oprimidos. Y para lograr esos objetivos y las
reivindicaciones mínimas de los trabajadores no habremos
de retacear la lucha.
“Pero nadie se llame a engaño. Nuestra lucha tiene su
propio método: el método del movimiento obrero.” (50).
A sólo un mes de la asunción del gobierno popular
elegido el 11 de marzo de 1973, se realizó entre los obreros
de PASA una encuesta que constaba de una serie de
preguntas referidas a su vida en familia, a los problemas
personales y, a su vez, a la relación que eso tenía con las
condiciones de trabajo, turnos rotativos, etc.. El resultado
de la misma mostraba cómo la explotación a que eran
sometidos por la patronal, repercutía en la salud física y
mental, expresándose en las conclusiones que:
“Ese no es más que uno de los tantos tipos de violencia
que nos hace el sistema, y que en forma solapada, casi
inadvertida, soportamos diariamente. Así todos los días nos

CXIX
enteramos que compañeros de otras fábricas de la zona y
de otros lugares, deben responder a los atropellos a que se
ven sometidos. Hambre, miseria, analfabetismo, son
algunos de los pilares donde se asienta este sistema
capitalista explotador.
“Pero cuando los trabajadores reaccionamos para defender
nuestra dignidad, para que nuestro trabajo no se compre o
venda, para recuperar todo lo que nos pertenece y nos ha
sido quitado, para destruir este régimen injusto, para
liberarnos, ellos responden con la represión. Represión que
va desde la suspensión y el despido hasta la persecución, el
encarcelamiento, la tortura y el asesinato. Cuántos
compañeros han caído en el largo camino de lucha que
venimos recorriendo? Vallese, Martins, Bello, Blanco, Cabral,
Maestre, Lauchowski, Brandazza, los 16 fusilados de Trelew,
son algunas de las tantas víctimas que hoy y siempre
tenderemos presente en nuestras luchas.
“Hoy pueblan las cárceles del régimen más de 600
compañeros que cometieron el único delito de luchar contra
las injusticias. Compañeros que soportan diariamente
condiciones infrahumanas, con noches tremendas en que a
cada rato se los despierta so pre-texto de revisarlos, con
amenazas constantes de fusilamientos, con celdas de 2 x 2
sin posibilidades de ver el sol, con falta de recreos, etc..
Después de la huelga de hambre de diciembre de nuestros
presos, parecían haberse solucionando algunos de estos
problemas. Pero las cosas volvieron a ser como siempre.
Todo esto ha traído como consecuencia que la mayoría de
los detenidos, sufran trastornos físicos y mentales (40 % con
trastornos psíquicos).
“El gobierno surgido del pueblo en estas últimas
elecciones, ha prometido una ley de amnistía para todos los
presos políticos. Pero los trabajadores debemos estar
alertas, para exigirlo, con nuestras luchas y que no quede

CXX
sólo en promesa. Los presos políticos deben salir vivos y
sanos. Y después debemos continuar juntos este camino,
para construir la nueva sociedad que termine con este
sistema inhumano.” (51).
La solidaridad para con los trabajadores en conflicto
fue continua y, al cumplirse en 1972 un año de que la Planta
de la empresa FIAT en Córdoba era ocupada militarmente
por las tropas del 3er. Cuerpo de Ejército -dirigidas por el
General López Aufranc, Comandante en Jefe del Ejército-, el
despido de cuatrocientos obreros, el encarcelamiento de
doscientos dirigentes y activistas, y la intervención a los
Sindicatos SITRAC y SITRAM -que nucleaban a siete mil
trabajadores de FIAT-, desde el SOEPU se denunció el
atropello:
“La ocupación militar imposibilitó la organización de las
bases para defenderse de tamaño atropello. Así murió la
cabecera del Movimiento Sindical Clasista, que a pesar de
todos sus defectos y errores, era visualizado como un polo
de unión de los sindicatos y agrupaciones de base
democráticas y combativas. Hace unos días, el Ministro de
Trabajo de la Nación ‘otorgó’ a la Unión Obrera
Metalúrgica de Rucci, el dominio de los obreros que antes
estaban nucleados en SITRAM (Sindicato de Trabajadores
Materfer) y probablemente los trabajadores antes nucleados
en SITRAC (Sindicato de Trabajadores Concord) queden bajo
la dirección de SMATA (Mecánicos), constituyendo esto el
final de una maniobra del Gobierno, que comenzó
liquidando a una dirección combativa, y terminó dividiendo
a los obreros de FIAT de Córdoba.” (52).
Como consecuencia de las ideas vertidas en el
Plenario de Gremios Combativos de Córdoba -al cual asistió
el SOEPU con mandato de Asamblea-, desde la C.D. se
consideró conveniente aclarar a los integrantes del Gremio

CXXI
el significado del “socialismo” -idea predominante de
dicho Plenario- y se lo hizo con estos conceptos:
“Los obreros son los que producen todo lo que existe: las
fábricas, las tierras no producen por sí mismas. Es necesario
aplicar el trabajo humano para concebir nuevos productos y
mercaderías. Para tener casa, ropa, comida, los obreros
venden el único bien que tienen: su capacidad para
trabajar, su fuerza, sus conocimientos, con los cuales
mueven las máquinas y hacen producir la tierra. Como los
obreros no tienen ‘medios de producción’ (ni máquinas, ni
tierras, ni fábricas), se emplean por un salario a los
propietarios de dichos medios: los capitalistas.
“Socialismo se opone a Capitalismo. Y si bien no podemos
negar que existen detrás de ambos extremos determinadas
ideologías, ambas se definen principalmente por referencias
económicas:
Capitalismo significa ‘medios de producción’ en manos
privadas.
Socialismo significa ‘medios de producción’ en manos de la
sociedad toda.
“Un par de zapatos, una camisa, estos son bienes de
consumo, cuya propiedad es individual, o sea del que lo
adquiere. A los capitalistas les interesa conservar esta
sociedad, donde ellos que son muy pocos, acumulan todas
las riquezas y privilegios con motivo de ser propietarios de
todos los resortes de la producción. Ellos producen para un
mercado, en cantidades tales que obtengan la máxima
ganancia con el menor costo. Su único objetivo es el lucro, y
tras el lucro, invierten sus capitales allí donde la producción
se realiza de acuerdo a las necesidades de la sociedad. Al
no haber propiedad privada los ‘medios de producción’, no
hay lugar a la especulación.

CXXII
“Al sistema capitalista lo sostiene un poder político basado
en leyes que garantizan la propiedad privada de los
medios de producción. Y lo defiende un aparato
represivo, cuya función es mantener el ‘orden existente’:
fuerzas armadas, policía, cárceles, etc.. Los medios de
educación y comunicación: las escuelas y universidades, los
diarios, revistas, radio, televisión, etc., imponen día a día a
la población lo ‘normal’ de este orden existente. Y su
propaganda intensifica el concepto de ‘mala palabra’, ‘cuco’
o ‘terror’ de la palabra socialismo, sonándonos como
extranjerizante y ocultando la verdadera esencia de ambos
sistemas económicos.
“Algunos países ‘socialistas’ han desvirtuado casi
totalmente sus principios. No obstante en distintos países,
principalmente los subdesarrollados, parecen encaminarse
tras un cambio de estructuras que posibilite la liberación del
hombre.” (53).
La Subcomisión de Prensa fue la encargada de emitir
los comunicados, expresando el pensamiento de la C.D. o
las resoluciones de las Asambleas. Los pronunciamientos
políticos frente a distintas medidas de los gobiernos
provinciales o nacionales, siempre tuvieron su espacio en el
Boletín del Sindicato. En mayo de 1972, se analizó la
situación política, económica y social del país, de esta
manera:
“El anuncio del 15 % de aumento junto con cambios en
materia de política económica anunciados por Lanusse en
abril, quedó demostrado que fueron, en los hechos, meras
palabras demagógicas destinadas a enmascarar la situación
y a frenar el alza de las luchas populares iniciadas en
Mendoza y continuadas en distintas partes del país (reflejo
real del descontento del pueblo, aunque la chispa haya sido
las tarifas de la luz y el conflicto de los maestros).

CXXIII
“El aumento incesante de los precios no sólo se devoró ya
ese 15 % sino que todos saben y principalmente el gobierno,
que la tasa de inflación es superior al 76 %. Decimos que
fueron medidas demagógicas que trataron de dilatar la
situación y la tensión existente, pues la crisis por la que
atravesamos no se soluciona con simples medidas
coyunturales sino con cambios estructurales de fondo en
materia económica.
“La conducción ultra-liberal Brignone - Liciardo, fieles
discípulos de Krieger Vasena, está llevando al país a la
bancarrota total, únicamente para satisfacer necesidades de
sector, para provocar un ‘golpe de Estado salvador’, y de
esa manera interrumpir el proceso de institucionalización, o
bien entregar totalmente condicionado en materia
económica el gobierno a los que salgan ‘elegidos’ en ese
maltratado, discriminado, y antidemocrático proceso
electoral (aunque lo disfracen de Gran Acuerdo Nacional y
sea la vedette en todos los discursos del viajero general
presidente).
“Las FF.AA., que en este momento, más que nunca,
demuestran que gobiernan únicamente con el consenso de
las armas y de las grandes empresas monopolistas,
hablaron por medio de Lanusse en aquella época (abril) del
Acuerdo Social. ¿Cómo va a ser posible ese acuerdo si cada
vez nuestro salario vale menos a pesar del aumento que nos
dan! ¡Cómo va a ser posible ese acuerdo si cada vez hay
más presos políticos, gremiales y estudiantiles, y cada vez
son más las denuncias de torturas que sufren los militantes
honestos de las filas del pueblo!” (54).
Otro de los temas que no faltó en los debates fue la
situación internacional. En 1973, se criticó el giro que se
produjo en la OEA, comentando que:

CXXIV
“La situación de EE.UU. en sus relaciones con los países
latino-americanos se hace cada día más tensa. Su postura
como gendarme avasallador de los pueblos que luchan por
su liberación para garantizar los gobiernos de los oligarcas y
explotadores ligados a ellos; la ventilación de los complots y
golpes de estado que se planifican a través de la CIA. con las
empresas multinacionales diseminadas y dominadores de la
economía de todos los países de América (ITT en Chile); el
odio que se han sabido ganar por los horribles asesinatos y
vejámenes cometidos en Vietnam; hace que no sólo los
pueblos protesten, sino que sus gobernantes tiendan a
cambiar las relaciones de fuerza y los objetivos de la OEA.
“Hasta hoy, la OEA no ha sido más que la institución que le
ha servido a EE.UU. para legalizar su dominio político y
económico sobre América Latina. Con las dictaduras de la
derecha militar, que gobiernan la mayoría de los países de
este Continente, o con el derecho al veto!, siempre se
aseguró su situación de dominio y explotación.
“Sin embargo, la lucha de los pueblos no sólo cambia a los
hombres que gobiernan, sino también obliga a cambiar de
idea a quienes gobiernan.
“Es así que el canciller argentino, el ‘célebre’ Eduardo Mc
Loughin, vestido con piel de cordero, pidió ante la OEA que
se resuelva sin demorar el problema cubano. Criticó la
política norteamericana hacia América Latina, se refirió a las
corporaciones multinacionales cuando dijo: “a la acción de
grandes empresas multinacionales que tratan de
interferir en las determinaciones de nuestro gobierno
como se ha comprobado recientemente en el caso que ha
afectado a una república hermana (Chile y el caso GA -
ITT). Nos hallamos ante una nueva forma de
imperialismo”.
“No debemos olvidar que hace tan sólo 11 años (1962), a
instancias de EE.UU. se realizó y se realiza todavía un boicot

CXXV
económico a Cuba. Hoy por inmensa mayoría se reclama la
‘pluralidad ideológica’ y la restauración de relaciones con
ese país. Diecinueve países sostenían esta teoría,
encabezados por Chile, Perú y Colombia. Se oponen, por
supuesto, EE.UU., Brasil, Paraguay y Bolivia.
“El canciller panameño (país dominado territorialmente por
EE.UU.) reclamó el cambio de sede de la OEA a una capital
latinoamericana y el representante peruano exigió diciendo
‘que en Washington no es apropiado, tanto por su
relación geográfica que aleja y desvincula a la realidad
latinoamericana, cuanto por el hecho de constituir la
capital del país donde están ubicadas un hecho de
innegable influencia política’.
“Sin ninguna duda la OEA quedará en la historia como la
institución legal que utilizó EE.UU. para el avasallamiento y
dominio de los pueblos latinoamericanos.” (55).
Uno de los acontecimientos internacionales que
conmovieron al mundo en los años sesenta y setenta fue la
Guerra de Vietnam. Se hizo un balance de los saldos de la
guerra, informándose que “por sus pérdidas de vidas
humanas, elementos y costo global, la guerra de Vietnam
ha sido uno de los conflictos más graves de la historia. Las
cifras son más que elocuentes, lamentablemente:
“Bajas militares: 1.153.875 hombres; bajas civiles: 2
millones de personas aproximadamente; aviones caídos:
8.937 aparatos; tonelaje de bombas lanzadas desde febrero
de 1965: 8 millones de toneladas; herbicidas: 64 millones de
litros, que destruyeron un total de 2 millones de hectáreas
de Vietnam del Sur; prisioneros: en Vietnam del Norte hay
539 norteamericanos y 1.143 desaparecidos, en Vietnam del
Sur hay un total de 36.362 prisioneros de guerra, de ellos,
8.600 son nor-vietnamitas, excluidos 2.900 mutilados y
2.700 mujeres.

CXXVI
“Caja Chica: en siete años, los norteamericanos han
gastado en la Guerra de Vietnam 128.000 millones de
dólares (no hay error de imprenta). Si el tío Sam, en un
demencial delirio, hubiera resuelto regalarnos a los
argentinos esta cifra, nos hubiera tocado a cada uno la
razonable cifra de 6.000.000 de pesos moneda nacional por
cabeza. Además, los soviéticos invirtieron la suma de
14.000 millones de dólares en el conflicto.
“Se calcula que hay 600.000 huérfanos de militares en el
Vietnam del Sur, sin contar los huérfanos de civiles. Los
refugiados suman más de 1 millón de personas, desde que
se inició la ofensiva norvietnamita. (...) Colaboró: Medio
Oficial Instrumentista.” (56).
Como ya hemos comentado, desde el Sindicato se
tuvo, en esos años, una firme posición antiimperialista. Pero
además, distintos trabajadores enviaron colaboraciones al
Boletín con sus opiniones; en una nota firmada por David, se
podía leer:
“Cuando el dueño del Chase Manhattan Bank, el ‘popular’
David Rockefeller, viaja por Latinoamérica, miles y miles de
inscripciones en las paredes y volantes suelen cubrir y
constatar las huellas de sus pasos, y de paso nos enteramos
de sus negocios, su curriculum, sus ‘affaires’ y las de su
madre por rebote, pues ese nombre es símbolo claro y vivo
del sistema capitalista norteamericano.
“Pero resulta que un mes atrás don David viajó nada
menos que a la propia Moscú, capital de un país cuyo
sistema, ‘dicen ellos’, es la antinomia del liberal capitalista y
lo hizo no de paseo, como en otra oportunidad en 1964, sino
a inaugurar una sucursal de su banco. Lógicamente previa
entrevista con el Premier Alexei Kosigin y otras altas
autoridades. Y a propósito de estos dirigentes de la URSS,
habrán consultado para esta decisión al proletariado? No sé,

CXXVII
pero sigamos. Yo creo que si Lenín se levantara de la tumba
y leyera la prensa rusa acerca de tal visita, que calificó a
D. Rockefeler de ‘eminente banquero’ y ‘personalidad
americana’, volvería a yacer en ella.
“En esta oportunidad el ‘camarada David’ declaró estar
compla-cido con la marcha de los acontecimientos y que las
dificultades que aún se oponen al incremento y desarrollo
de los negocios entre EEUU y URSS, confía en que serán
superados, además que Rusia tiene necesidad de bienes
de consumo elementales incluyendo artículos de tecnología
bastante avanzada y que a cambio sólo tiene que ofrecer
materia prima.
“El mundo no está dividido en dos imperios antagónicos en
disputa. No, el mundo está dividido en muchos países,
donde la gran mayoría de ellos responden perfectamente a
dos imperialismos divididos por la distancia física pero
fuertemente unidos para dominar el propio mundo y
repartírselo en dos fracciones o sistemas. A quienes se les
hace sentir la división ideológica es a los pueblos y mientras
tanto en la cumbre Nixon recibe a Brezhnev, Kosigin viaja
para reencontrarse con Brandt y en el mismísimo Hotel
Metropol de Moscú está instalado D. Rockefeller,
‘nortiameriyankee’, para poner en marcha la sucursal de su
banquito. En fin, son cosas de los imperialismos. El
comentario podemos redondearlo con una pregunta que
quiero dejar sin contestar. ¿Se comprende y se justifica la
incisiva posición no alineamiento del tercer mundo?” (57).
Ante la retirada de la Dictadura Militar y la salida
electoral, el SOEPU no dejó de fijar su posición.
Primeramente, se hizo un balance de los años de los
Gobiernos Militares entre 1966 y 1973, con
“Más de 600 compañeros presos por causas políticas,
gremiales o conexas, 6.500 millones de dólares de deuda

CXXVIII
externa declarada. El país vendido al capital extranjero.
Represión, hambre, miseria, analfabetismo. Más de 100
compañeros muertos en las luchas contra la dictadura. Esto
es sólo una muestra de lo que nos queda como saldo de la
llamada Revolución Argentina. Este 25 de Mayo, el pueblo,
ante la decisión de las urnas, vuelve al gobierno y el milicaje
retorna a sus cuarteles. No creemos que con esto se hayan
solucionado todos nuestros problemas. Hay que proseguir la
lucha, hasta lograr la liberación definitiva de la clase
obrera.” (58).
Y frente a las históricas elecciones del 11 de marzo de
1973, el Gremio opinó:
“Compañeros: En estas elecciones el SOEPU no ha tomado
posición a favor o en contra de ningún partido político. Cada
uno de nuestros afiliados ha tenido y tiene la libertad de
pertenecer o votar al partido de su agrado sin que ello le
signifique discriminación alguna. Nosotros trabajadores,
más allá de las diferencias partidistas, tenemos nuestras
propias banderas, que son las banderas de la clase obrera.
El pronunciamiento general del pueblo en las urnas, el
pasado 11 de marzo, dio por tierra con las aspiraciones
continuistas de la dictadura. Hambre, miseria, cárceles,
asesinatos, torturas, secuestros, han sido algunos de sus
signos y contra ellos votó también el pueblo. La fuerza
política triunfante, deberá responder en los hechos al apoyo
popular que se le brindó. Aún así, creemos que no se
solucionarán todos los problemas de los trabajadores.
Porque haber derrotado en las urnas a la dictadura no es
haber terminado con la explotación. Porque los patrones, ya
sean norteamericanos, europeos o argentinos, seguirán
subsistiendo y querrán seguir poniéndonos los pies
encima. Y los Rucci y los traidores de siempre que hoy
festejen junto al pueblo, buscarán acomodarse con nuestros

CXXIX
enemigos. A ellos tenemos que seguir combatiendo. Como
lo hicimos durante todos estos años de oprobio, en que
luchamos contra patrones, burócratas y dictadura. Y como lo
seguiremos haciendo en los años venideros. Porque como
trabajadores que somos, somos conscientes que ‘La
liberación de los trabajadores será obra de los
trabajadores mismos’, y por ende continuaremos nuestra
marcha ascendente, hacia la liberación definitiva de la
clase obrera.” (59).
Posteriormente, ante la asunción del Presidente
Cámpora y el regreso de Perón desde el exilio, se dijo:
“25 de Mayo y 20 de Junio. Dos fechas patrias que este año
han cobrado especial interés porque marcan el comienzo de
un nuevo gobierno constitucional, el fin de la dictadura
militar y el retorno del Gral. Perón a la Argentina. Dos
jornadas con un amplio apoyo popular, que muestra la
decisión inquebrantable de lucha de nuestro pueblo y la
búsqueda de una revolución que quizás todavía no sabe
definir. Dos jornadas que fueron posibles especialmente por
el papel protagónico que jugó la clase obrera con sus luchas
y con sus muertos en los años de dictadura, lucha que
obligó a los milicos a dar elecciones proscriptivas y lucha
que sin lugar a dudas preparó las condiciones que
posibilitaron el regreso de Perón.
“Realmente algo distinto está pasando en el país. Ante la
sorpresa y desesperación de algunos y la alegría de muchos
se producen los primeros impactos políticos de importancia
del nuevo gobierno. La liberación de todos los presos
políticos y gremiales, la abolición de toda legislación
represiva, el restablecimiento de relaciones con Cuba,
Vietnam del Norte, Corea del Norte, Alemania Oriental. En el
campo económico no ocurre lo mismo, eligiéndose un
camino en el cual se pretende que la clase trabajadora

CXXX
pague los platos rotos de una situación económica
catastrófica, producto del avance de la crisis de
capitalismo en la Argentina y en el mundo.
“En otros aspectos se han producido y se siguen
produciendo nuevos hechos casi a diario. Como la ola de
ocupaciones, muchas de las cuales fueron realizadas con
justicia por los mismos trabajadores levantando
reivindicaciones ampliamente sentidas o desalojado a los
representantes del continuismo militar. Pero no todas
fueron así: porque otros sectores que no representan el
sentir de las mayorías laboriosas, trataron de imponer por la
fuerza sus intereses sectoriales. Estos son los individuos que
encamados entre los gorilas, burócratas y traidores
provocaron los desgraciados episodios de sangre de Ezeiza
disparando a mansalva sobre el pueblo indefenso que había
concurrido a manifestar su júbilo. Estos son los mismos
individuos que bregarán por darle al movimiento popular su
ideología fascista o que se aliarán con los monopolios,
patronales y milicos para intentar dar de nuevo el golpe
gorila.
“Es cierto que la clase obrera está a la ofensiva. Que la
conciencia revolucionaria de nuestro pueblo está en marcha
ascendente. Pero esa marcha no ha terminado aún. La lucha
debe proseguir.
“Los petroquímicos tenemos nuestro lugar natural para
esta lucha. Y aquí debemos darle la batalla a la patronal,
continuando además con nuestra organización desde las
bases. Pero nuestro accionar no debe quedar reducido a ese
marco. Debemos dar respuesta de los hechos políticos que
se producen más allá del alambrado, con nuestra solidaridad
y presencia de clase, con nuestras movilizaciones, de
manera de marcar el rumbo junto a la clase obrera, que nos
lleve definitivamente hacia la construcción de una sociedad
mejor, más justa, más digna.” (60).

CXXXI
La política económica del gobierno elegido
constitucionalmente en 1973 se basó en el Acuerdo
realizado por la Confederación del Trabajo -CGT- y la
Confederación General Económica -CGE-. En el Apartado IV
de dicho Acuerdo, en el punto titulado “En Materia Salarial
de Precios y Distribución de Ingresos”, decía su inciso d)
“que cumplida la finalidad social, con el ajuste de los
salarios que le restituyen su poder adquisitivo, debe
procederse en forma inmediata a la convocatoria de las
Comisiones Paritarias de Con-venios Colectivos de Trabajo
previstas en la Ley 14.250”. Y en su inciso f), “que la
discusión de los Convenios Colectivos de Trabajo conforme
a lo señalado en los incisos anteriores, constituyen un real
aporte al ordenamiento laboral en el que las partes
conforman salarios en mérito a la capacidad profesional del
trabajador, regulada en función de categorías y/o
escalafones, como así mismo en mérito a la calificación de
las tareas que terminan su remuneraciones”.
Desde el Gremio, se expresó que:
“Queda claro con lo transcripto, que el Frente Justicialista
de Liberación, una vez gobierno, no está cumpliendo en este
punto de especial interés para los trabajadores. Ha sido
otorgado un aumento de 20 mil pesos, que inclusive en este
mes no podremos cobrar, que no cubre las necesidades de
recuperación del salario real. Se han congelado precios de
muchos productos de la canasta familiar, pero comienzan a
escasear algunos de ellos (la carne por ejemplo). Otros
precios han sido aumentados en forma notable, como los
servicios públicos (transporte, luz, gas, impuestos), la nafta,
etc., que hacen temer, porque la inflación continúa
avanzando.
“La tregua social, impone la congelación de salarios por el
término de un año (en el que el gobierno haría un ajuste de

CXXXII
salarios de ser necesario) y la suspensión de todas las
paritarias en la parte salarial por el término de dos años.
Entendemos que el movimiento obrero, debe seguir
bregando por reconquistar una vez más el derecho a discutir
los salarios con los patrones. Y así lo resolvió la asamblea de
fábrica del 19 de junio cuando nos expresamos por reclamar
la plena vigencia de la Ley 14.250.” (61).
Desde esa época, en El Petroquímico se publicaron
varias notas de ese tenor, como la enviada por un afiliado
del Gremio:
“Cuando el 17 de octubre de 1945, los trabajadores en
masa pararon las fábricas y salieron a las calles, marcando a
fuego la historia política argentina, ese día conocimos
nuestra enorme fuerza, empezamos a ver nuestra presencia
directa, sin intermediarios, reclamando a Perón que era el
único capaz de cambiar un estado de cosas, cambio que de
otra manera no hubiera sido posible lograr.
“Las conquistas que logramos a través de la lucha junto a
Perón, fueron mucho más allá de los aumentos salariales,
del aumento de nuestra fuerza sindical, la mayor de América
Latina, y el fin de muchas amarguras e injusticias. Porque
fundamentalmente nos hicieron sentir capaces de ser
respetados como hombres, de no ser basureados por los
patrones, y de ser, en gran parte, dueños de nuestro propio
trabajo.
“Tenemos que reconocer que así como los trabajadores
dieron aquel gran paso adelante que fue el 17 de octubre de
1945 y después las luchas del Rosariazo, el Cordobazo y
tantos otros, los mismos también nos marcan las
limitaciones que tiene la improvisación organizativa.
“Si en aquel 17 de octubre se rescató a Perón y pudimos
participar en el poder, hoy ya no quedan dudas de que para
traer a Perón y concretar la verdadera Justicia Social desde

CXXXIII
el poder, no alcanza ni basta con la lucha espontánea por
más masiva que sea.
“Para reconquistar el poder, tenemos que tomar conciencia
y no olvidarnos que aquellos que hoy se dicen defensores de
la clase trabajadora, no vacilaron un día en aliarse con
quienes explotan y chupan la sangre del obrero argentino
formando lo que se llamó la UNIÓN DEMOCRÁTICA, que estaba
en contra de lo auténticamente nacional.
“Es por eso que no hay que dejarse engañar con bonitas
palabras y fijarse en los hechos y la forma de actuar de
quienes pretenden implantar sistemas que en la Argentina
tendrán cabida sólo cuando no quede un solo peronista que
recuerde lo que en algún momento conocimos, y que a no
dudarlo volveremos a ver: Una Argentina Socialmente Justa,
Económicamente Libre y Políticamente Soberana. CASILDO.”
(62)
.
Posteriormente, ante un nuevo aniversario de la
muerte de Evita, se publicó este artículo:
“Desde el 26 de julio de 1952, año tras año, los obreros y
trabajadores de la Patria, al aproximarse esta fecha, nos
sentimos hermanados y unidos en el dolor ante esta pérdida
irreparable. Pero todos los 26 de julio, año tras año, los que
estamos en su lucha, que es la lucha de los obreros y el
pueblo en el camino de la liberación nacional y social,
mantenemos a través de los ejemplos que diera en su
trayectoria de militante revolucionaria, la llama viva de su
pensamiento.
“La lucha que emprendiera Evita permanece totalmente
vigente. Dos tareas fundamentales que nos marcara en su
vida, permanecen aún sin resolver. Una, que debíamos
organizarnos. Y la otra, terminar con los traidores de
adentro y de afuera.

CXXXIV
“El imperialismo, la oligarquía, y los patrones que
pretenden disfrazarse de más peronista que el propio
pueblo, la burocracia que entrega nuestras luchas y los
renegados de nuestra clase son nuestros enemigos que aún
permanecen de pie.
“Y nuestra organización, pese a que somos número y
fuerza, no está todavía organizada como para lograr el
triunfo definitivo y ser así artífices de nuestro propio destino.
Es por todo esto, porque todavía sus trabajadores, sus
descamisados, no hemos logrado los objetivos que ella nos
propusiera, que prometemos como mejor homenaje en su
memoria, redoblar nuestra lucha para hacer realidad lo que
nos dijera: ‘...Caiga quien caiga, cueste lo que cueste,
con sangre o sin sangre, la raza de los oligarcas y
explotadores no pasarán de este siglo...’.”. (63).
Y ante la repatriación de los restos de Evita, el
Prosecretario J. Poles se manifestó con una extensa nota
que puede leerse en el Apéndice Documental.
Al producirse el fallecimiento del Presidente Perón,
fueron varios los artículos -entre ellos un editorial del
Boletín- dedicados a la figura del creador del Movimiento
Justicialista. La C.D. dio a conocer un comunicado:
“Ante el fallecimiento del Presidente de la República,
Teniente General Juan Domingo Perón, los trabajadores
petroquímicos y todos los trabajadores y el pueblo, por
encima de banderías, sentimos con profundo pesar esta
irreparable pérdida para el país todo.
“El mundo ha sido sacudido por la infausta noticia. El País
llora a este ilustre muerto, en particular los trabajadores,
sus descamisados, para quienes Perón no ha muerto. El
estará vivo en cada corazón humilde, en cada fábrica, en
cada rancho, en cada lucha por la justicia.
“Los petroquímicos manifestamos nuestro homenaje

CXXXV
concurriendo a manifestar nuestro reconocimiento junto a
millones de hombres y mujeres que desfilarán ante su figura
inmortal. Ante esta tremenda pérdida del líder, debemos
seguir el camino recorrido desde 1945 y sin claudicar en esa
lucha. San Lorenzo, 1º de Julio de 1974.” (64).
En otro Número, el Secretario del Gremio Ernesto
Sosa, trató la significación que tenía la muerte del General
Perón en la política argentina:
“De todos modos era de suponer que la oligarquía tampoco
podía tener la desfachatez de mostrarse a cara descubierta
como en la época de la dictadura militar y buscarían otras
formas para no perder sus privilegios. Esos métodos ya son
bien conocidos: boicotear económicamente, mentir a través
de los diarios y revistas que le respondan, amenazar con el
golpe de estado, realizar atentados contra el pueblo, etc..
“Pero lo más peligroso, lo que más debe preocuparnos y
mantenernos alerta, es cuando se meten en nuestras filas.
Como decía Evita, ‘peor que la misma oligarquía es el
espíritu oligárquico infiltrado en nuestras filas’. En las filas
del pueblo, del gobierno, de las estructuras sindicales y
políticas.
“Por eso es que ante situaciones como éstas, que se
producen en todos los procesos populares, cabe a quienes
están en el gobierno elegir entre dos caminos: el más fácil, y
aflojar ante estas presiones para poder mantenerse, o el
más dificultoso que es seguir enfrentando desde el gobierno
a esos grandes intereses económicos, asumiendo el riesgo
que ello significa junto a su pueblo, que es la única fuerza
capaz de hacer frente al enemigo más poderoso y vencerlo.
“Todo indica que este último es el camino que indicaba el
General Perón en el histórico 12 de junio, cuando luego de
marcar a fuego a los monopolios, los oligarcas, y ciertos
dirigentes sindicales, llamó desde los balcones al pueblo a

CXXXVI
estar alertas en la tarea de nacionalizar los resortes básicos
de la economía y redistribuir los ingresos en beneficio de los
trabajadores.
“Ahora, habría que ver si esto se ha ido cumpliendo luego
de su desaparición. Con una característica que no se daba
desde la caída de Perón en el ‘55, como es la movilización
popular, se sucedieron varios avisos presidenciales: la
nueva Ley de Contrato de Trabajo, el llamado a la Gran
Paritaria Nacional, la argentinización de las empresas Ítalo
Argentina de Electricidad, Siemmens y Standard Electric, la
nacionalización de las bocas de expendio de combustibles,
entre otras. Todas estas medidas en general fueron bien
recibidas por el pueblo.
“La Ley de Contrato de Trabajo habla de varios beneficios
para los trabajadores (aún cuando no tiene alcance para los
empleados estatales y para los trabajadores rurales) sobre
insalubridad, indemnizaciones, vacaciones, derechos
indispensables para la mujer, etc..
“La caída del salario real también hacía indispensable la
convocatoria a la Gran Paritaria Nacional. El empresariado
no había respetado en absoluto el pacto social mientras a
los trabajadores los trataban de subversivos si exigían
aumentos salariales.
“Las argentinizaciones representan una cierta participación
del Estado en empresas históricamente monopolizadas por
capitales extranjeros, aunque la tecnología, la organización
de la empresa, la provisión de los bienes de capital, los
créditos internacionales, sigan en sus manos.
“En fin, todas estas medidas fueron respaldadas por el
pueblo porque eran justas y necesarias. No se podían
postergar.
“Pero seríamos injustos si dijeran sólo esta parte de la
realidad. Porque junto con esto no podemos olvidar que así
como miles de compañeros trabajadores se congregaban en

CXXXVII
Plaza de Mayo a aplaudir esas medidas, también miles de
obreros se movilizaban ante arbitrarias intervenciones a sus
direcciones sindicales y ante reivindicaciones que no se
cumplían. Los azucareros de Tucumán, los gráficos de
Buenos Aires, los mecánicos cordobeses, nosotros, que
haciendo lo imposible mediante el control de la planta para
no bajar la producción, no recibíamos sin embargo ninguna
respuesta del Ministerio de Trabajo ante las exigencias de lo
más elemental que negaba la patronal.
“Tampoco se explican las intervenciones a muchos de los
gobiernos provinciales que habían sido legítimamente
elegidos, ni la detención de militantes y personas que como
nuestro asesor letrado, fueron detenidos sin acusación
alguna. Vimos clausurar diarios y revistas, como Noticias,
sólo por decir la verdad en conflictos como el nuestro o por
denunciar negociados de empresas extranjeras demasiado
‘comprometedores’.
“Se implanta el estado de sitio, tratando de esta manera
de detener la ola de violencia sin antes tratar de analizar a
fondo sus causas. Tampoco vimos, lamentablemente, la
iniciativa del gobierno para que los restos de Evita
estuvieran con nosotros mucho antes. Y cuando fueron
repatriados, sólo pudimos enterarnos un día antes, como si
se tuviera miedo que fuéramos los trabajadores a recibirla
masivamente.
“Todo esto debe llevarnos a la reflexión. Debemos saber
que las argentinizaciones pueden llegar a ser un frasco de
tinta en el océano cuando de las cien empresas que más
venden apenas treinta son argentinas, cuyas ventas no
superan el 25 % del total.
“Un gobierno elegido por el pueblo no puede dejar de
nacionalizar los grandes monopolios extranjeros como: Fiat,
Ford, General Motors, IKA, Mercedes Benz, Chrysler,
Safrar, Philips, Squibb, Lepetit Pfizer, Gillette, Olivetti,

CXXXVIII
Duperial, PASA, Compañía Química, Atanor, Good Year,
Pirelli, Firestone, etc., porque estos monstruos son los que
dominan la economía argentina. Si no se empiezan a tocar
estos intereses y las tierras se dejan en manos de los
terratenientes, no hay aumentos salariales que valgan,
porque mientras los sueldos están subiendo por la escalera,
los precios lo están haciendo por el ascensor. Un ejemplo de
esto puede ser en estos momentos los combustibles.
“Por todas estas cosas es que ante este nuevo año que
comienza sugerimos la reflexión del gobierno y también la
de los compañeros del Gremio, para que luego de la alegría
de las fiestas, estemos atentos y seamos responsables, para
retomar el camino de la liberación y no el de la
dependencia, para recuperar las banderas de la democracia
sindical y no permitir la digitación y la burocracia sindical
para que la redistribución de los ingresos favorezcan al
trabajador y no al monopolio, para que se comprenda
definitivamente que la violencia se detendrá con justicia
social y no con represión indiscriminada. Y veremos que por
más poderoso que sea el enemigo, por más amenazas que
haga, por más presiones económicas que intente, aunque
sea el camino más difícil, podemos enfrentarlo con la fuerza
del pueblo, porque como decía el General Perón, ‘cuando
los pueblos agotan su paciencia y se lanzan a la lucha,
suelen ser invencibles. ERNESTO SOSA”. (65).
Desde 1974, la represión hacia el movimiento obrero
y la nueva izquierda fue creciendo. El gobierno de Isabelita
dispuso el estado de sitio el 6 de noviembre de ese año, y
esa misma noche fue detenido el Asesor Letrado del
Gremio, Dr. Horacio Zamboni. El impacto entre los
Petroquímicos fue inmediato, y la C.D. del SOEPU, emitió
este comunicado de prensa:
“La opinión pública se ve sacudida casi a diario por

CXXXIX
distintas formas de violencia que azotan
indiscriminadamente a nuestra Patria. Asesinatos,
secuestros, presos políticos, miedo, parecen ser el signo que
caracteriza este momento difícil que vive el país y que
asistimos con asombro e impotencia millares de hombres y
mujeres libres. Nuevamente, el estado de sitio se aplica en
nuestra Patria siendo implementado en muchos casos
contra quienes luchan por los intereses de los trabajadores.
Así es como ha sido detenido arbitrariamente por el Poder
Ejecutivo Nacional, el Dr. Horacio Zamboni, abogado
rosarino, Asesor Letrado del SOEPU, del Sindicato de Obreros
Ceramistas (Filial 4) y del Sindicato de Obreros de la
Alimentación de Firmat, no ha cometido delito alguno,
ningún cargo pesa sobre él, no hay proceso abierto, la
Justicia dispuso su libertad pero recién a más de sesenta
días de su detención a disposición del Poder Ejecutivo se
dispone su extradición. ¿Cuál es la causa de la prolongada
privación de su libertad? ¿Acaso que haya estado
permanentemente al lado de las luchas de la clase obrera?
“No concebimos que so pretexto de la existencia del
Estado de Sitio se prive de la libertad a honestos
ciudadanos por el solo hecho de pensar distinto que los
funcionarios de gobierno. Sabemos que muchos casos
similares a los aquí planteados se vienen presentando, lo
que debería llamar a la reflexión a las autoridades de
manera que reconsidere las medidas que se tomen en este
sentido para no caer en los errores de una época
tristemente recordada y a la que el pueblo no desea
volver, épocas en la que cientos de presos políticos
inundaron las cárceles y la que los argentinos repudiamos
mayoritariamente el pasado 11 de marzo de 1973.
“Los petroquímicos suscribimos esta declaración
solicitando la in-mediata libertad de todo detenido político
que se encuentre injustamente privado de la misma y la

CXL
plena garantía de las libertades democráticas de los
ciudadanos. La Comisión Directiva del SOEPU.” (66).
Esa situación dio lugar a numerosas muestras de
solidaridad; en el Boletín, fueron varias las notas que hacían
referencia a la arbitraria detención, solicitando su libertad
(algunas de las cuales se encuentran en el Apéndice
Documental). Posteriormente, se informó que:
“Al momento de entrar en redacción este Boletín, nos
enteramos que el Poder Ejecutivo Nacional accedió en poner
en libertad a un número de ochenta y cuatro presos
políticos, entre los que se encuentra nuestro compañero
Horacio Zamboni. De este grupo, diez de ellos tomaron el
camino hacia el exilio, en distintos países de América.
Horacio decidió su rumbo hacia Perú. Lástima grande para
el SOEPU que pierde, de hecho, a uno de sus más preclaros
colaboradores, en la función de Asesor Letrado a través de
muchos años de labor. ¡Suerte Horacio en el nuevo camino
de tu vida! Te lo deseamos en favor de otros compañeros
en esta otra parte del mundo.” (67).
Hacia fines de 1974 y principios de 1975, la crisis
económica, social y política del país era debatida en toda la
sociedad. Sobre la misma, un editorial de la C.D. expresó:
“Compañeros:
“Hace poco más de dos años, los trabajadores y el pueblo
elegimos un gobierno con la gran esperanza de que fuera el
comienzo de las soluciones que anhelábamos, después de
tantos atropellos, de tantas frustraciones. Pero esa
esperanza se fue desmoronando poco a poco, para
convertirse en una frustración más, en una nueva traición al
mandato popular.
“Hoy, ya no creemos en este gobierno, por más que
quieran convencernos mediante cuantiosas solicitadas, u

CXLI
horribles discursos de cuanto nuevo ministro asuma, porque
son palabras huecas, porque son carentes de verdad,
porque la verdad está en la calle, en la escuela, en el
almacén, en la farmacia, en el sanatorio. Porque hay
salarios de miseria, hay hambre, desocupación,
analfabetismo, represión, asesinato, cárceles, miedo,
terror.
“Porque los insultos y la bronca de los compañeros, que se
expresa día a día, contra la patronal, contra el gobierno,
nos dicen a la claras el sentir del hombre de trabajo, del
hombre del pueblo, sin entrar en falsas especulaciones
intelectuales.
“¿Qué más resta decir? La situación es verdaderamente
difícil, pero no debemos escaparle a esa realidad, aunque a
veces la tentación de evadirnos de ella sea grande. A esa
realidad debemos enfrentarla, pero enfrentándola para
modificarla, estrechando filas, uniéndonos, hoy más que
nunca, conversando, luchando, buscando el camino que
corresponda para cada situación, dándonos sobre la marcha
la organización que nos hace falta y nos lleve a construir,
definitivamente, nuestro destino como hombres libres,
felices y fraternos.” (68).
Posteriormente sobrevendrían las heroicas jornadas
de Junio - Julio de 1975, para enfrentar las medidas de
Isabelita y su Ministro Rodrigo -que analizamos en el
Capítulo VI-, lo que trajo una ola de represión, terror y
matonaje sobre la clase obrera, que quedó reflejada en
varios artículos en el Boletín del Sindicato (algunos de ellos
se encuentran en el Apéndice Documental y otros en el
Capítulo mencionado). Otro editorial de la C.D., a fines de
1975, manifestaba:
“Compañeros:

CXLII
“En la culminación del año, ya no hace falta repetir
slogans, ni echarle la culpa a los agentes del caos y del
desorden para justificar los males que todos padecemos.
Quienes nos gobiernan ya han probado todo. Y no han
solucionado nada. Por lo menos para el pueblo. Ya que para
sus bolsillos pareciera que sí. Y cada día que pasa el país se
sigue empobrecido más, endeudado, desorientado,
desesperanzando.
“Y la crisis que nos carcome a todos los niveles, con los
magros salarios, con el desabastecimiento, con la
desocupación, con la inflación, que nos coloca a los
trabajadores en situaciones angustiosas en las que las
necesidades más elementales no alcanzan a ser satisfechas.
“Observamos atónitos, además, casi impotentes diríamos,
toda la violencia en la cual hoy estamos todos inmersos.
Numerosos hijos del pueblo se encuentran detenidos, o
torturados, o salvajemente asesinados o emigrados a otros
países. La más mínima protesta es brutalmente reprimida.
La libertad que tanto se declama, ya no existe entre
nosotros. Los militares en las calles, en nuestros hogares, en
las fábricas decoran este triste paisaje.
“Y frente a todo esto los trabajadores no pudimos callar,
aunque muchos tuvimos que apretar los dientes y morder la
bronca del silencio frente a las balas, el terror y la
represión. Y aún así se hicieron jornadas heroicas como las
de Villa Constitución, o como las movilizaciones de julio de
las cuales fuimos protagonistas, o como la lucha de Sierra
Grande en el Sur, o como los cientos de conflictos que se
sucedieron en reclamo de mayor justicia. Estas fueron las
respuestas rebeldes que dio la clase obrera en este 1975.
“Y junto a nosotros sufriendo similares consecuencias
estuvieron los trabajadores rurales, los campesinos, los
pequeños comerciantes, los profesionales, los intelectuales,
los estudiantes. Pretender enumerar los continuos

CXLIII
desaciertos producidos, la falta de autoría política, el
deterioro moral, etc., requeriría cientos de páginas. Pero
sólo en esta nota editorial pretendemos sintetizar los
principales descalabros que todos conocemos porque los
vivimos juntos día por día. No queremos desear felicidad a
los compañeros en este año nuevo que se inicia. Porque la
felicidad es imposible mientras exista este sistema injusto.
Pero sí queremos transmitir aliento, coraje en estos
momentos tan difíciles, para todos los compañeros
petroquímicos, para los compañeros presos que pagan en
las celdas el delito de ser leales a su clase, a los exiliados, a
los desocupados, a los despedidos, a todos los trabajadores
y todos aquellos que sin serlo están en el campo del pueblo
y en contra del opresor y en favor de la liberación de los
oprimidos.
“Alentamos librar nuevas luchas y sin miedo, en ese largo
camino para construir todos juntos nuestra propia felicidad,
la de nuestras familias, la de nuestros hijos. Para este 1976.
Para 1980. O para el futuro no muy lejano.” (69).
Una de las víctimas de la represión que se vivía en el
país fue el Petroquímico José Polenta. El Sindicato se
manifestó con una solicitada, titulada Una Nueva Víctima de
la Represión: José Alberto Polenta, expresando:
“En horas de la madrugada del 21 de septiembre, dos
parejas jóvenes regresaban a sus hogares después de
haber participado de una reunión familiar. Al pasar por la
Ruta 11, frente a la Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán,
fuerzas del ejército balearon el automóvil en que viajaban
terminando con la vida del compañero Petroquímico JOSÉ
ALBERTO POLENTA. Con sus 24 años, deja detrás de si una
limpia trayectoria de trabajador honesto, un montón de vida
por andar, una señora embarazada de ocho meses, un
inmenso dolor entre sus familiares y una tremenda bronca

CXLIV
entre sus compañeros que vemos como con impotencia
cómo se asesina impunemente al pueblo.
José se movilizó junto a miles de trabajadores en las
jornadas de julio luchando en defensa del salario que
significaba el bienestar de su familia. Le pudo haber tocado
entonces. Le pudo haber tocado a algún dirigente. Pero le
tocó a él.
¿Qué se dirá de este asesinato?
¿Qué dirán los asesinos?
Fue un lamentable accidente. No acató la voz de alto.
Estas, o parecidas, serán las expresiones de la fuerzas
represivas.
¿Qué dirá la Empresa donde José trabajaba?
¿Acaso callará con su silencio...? El silencio de otras veces?
¿Qué decimos nosotros?:
Los trabajadores petroquímicos decimos que José ha sido
muerto producto de la violencia del sistema que se
manifiesta esta vez en la prepotencia y alevosía de quienes
dan órdenes de tirar a matar para después preguntar, estos
son los ‘custodios del orden y la paz’.
En la brutalidad perpetrada contra este compañero
repudiamos la violencia absurda y la represión desatada a lo
largo y a lo ancho del país, estén sus autores uniformados
como en este caso, encapuchados como los que
secuestraron y asesinaron recientemente a tres
vecinalistas, con caras descubiertas como los que intentaron
amedrentar a un compañero de Sulfacid y su familia, o
emboscados en las sombras como los que volaron la Casa
del Maestro en Rosario.
Ante todos estos hechos decidimos paralizar nuestras
actividades desde las 18 hs. del día 21 hasta las 24 hs. del
22 del corriente y movilizarnos convocando a los
trabajadores, a las organizaciones gremiales hermanas y a
la CGT, a los partidos y organizaciones políticas y al pueblo

CXLV
en general, a sumarse a nuestro repudio y a oponerse
firmemente a esta barbarie generalizada contra la clase
obrera y el pueblo. Asamblea de Fábrica de Trabajadores
Petroquímicos - 22 de Septiembre de 1975.” (70).
Por otra parte -como hemos planteado- tanto algunos
miembros de la Comisión Directiva como varios Delegados
eran simpatizantes o adherían a distintos partidos o grupos
políticos. Juan Dowling nos comentó que: “Dos corrientes
clasistas, más radicales, tenían influencia en la zona
industrial. Una, de origen marxista, el Socialismo
Revolucionario -S.R.- que, originándose a partir del Partido
Comunista Argentino, fue radicalizando su posición. Primero,
negando aspectos tácticos de la línea política del P.C.A.
-como el carácter de las alianzas que los trabajadores
deberíamos hacer para cambiar la sociedad-, y después
profundizando los aspectos estratégicos, tales como la
caracterización de la revolución necesaria para transformar
la sociedad, o el carácter del partido de los trabajadores
necesario para eso. Otra, de origen peronista, vinculada al
Peronismo de Base -P.B.-. Podemos destacar una
característica fundamental, que creo diferencia el
movimiento de la zona industrial de San Lorenzo, en cuanto
a su militancia más clasista: una posición clara contra las
opciones militaristas existentes en la época”. (71)

Además, existían entre los obreros del SOEPU y la


zona industrial, militantes del Partido Comunista, Partido
Socialista Popular y Partido Comunista Revolucionario. Por
otra parte, una división dentro del P.B. dio lugar a la
existencia de militantes vinculados a Montoneros. El Partido
Revolucionario de los Trabajadores y el E.R.P. -Ejército
Revolucionario del Pueblo- también contaban con cuadros
políticos en la región. Si bien la mayoría de los trabajadores

CXLVI
eran peronistas, la Izquierda llegó a tener una influencia
considerable en la zona industrial.
Los militantes del S.R. y del P.B. hacían hincapié en el
ejercicio de la democracia directa en todas las actividades
de los trabajadores y de la sociedad, en el papel
transformador y revolucionario de la clase obrera, y en la
lucha por el socialismo.

II. 4.- Democracia Obrera en el Gremio

II. 4.1.- Su Práctica, en Distintas Instancias

Desde la conformación de la Lista Verde y luego de


ganar las elecciones del Sindicato, comenzó a practicarse
activamente la Democracia de Base en el Gremio. En el
Boletín del Gremio, se destacó que “aceptamos un método
para todo: la aplicación de la democracia obrera en todos
los niveles, con lo cual conseguiremos la discusión de
distintos problemas sin distinción de razas, religiones o
partidos y porque en el camino de la liberación de la clase
obrera nuestro Gremio nunca participó de movimiento
alguno, llámese CGT, Intersindical, o Movimiento Sindical
Clasista, ni lo va a hacer sin el consentimiento y la
aprobación mayoritaria de la Asamblea de los Trabajadores
Petroquímicos que comprenden que por encima de las
diferencias salariales y divisiones en ramas de producción,
los trabajadores deben estar unidos por pertenecer a una
misma clase y para luchar por los intereses de esa clase”. A
la vez, resaltaron que “la historia de la burocracia sindical,
podrá ser rota sólo cuando los trabajadores se organicen
desde abajo, practicando y luchando con la única arma del

CXLVII
triunfo: LA DEMOCRACIA SINDICAL”. (72)
Los miembros de la C.D. y los delegados entrevistados
manifestaron que el principio fundamental de ese tipo de
democracia es que el poder descansa totalmente en manos
de las bases obreras. Destacaron que en dicha democracia,
lo principal no consiste sólo en la decisión cada tantos años,
frecuentemente, o incluso a cada momento y ante cada
cuestión, sino que deliberación y decisión se
correlacionan con la ejecución por parte de los
trabajadores. O sea que, los que deliberaban, decidían y
ejecutaban eran todos los integrantes del SOEPU. A lo que
algunos militantes agregaron estos conceptos: “que esa
nueva forma de ejercicio democrático, permitiría una
reorganización de toda la vida social, y en primer lugar, UNA
NUEVA FORMA EN LA ORGANIZACIÓN SOCIAL DEL TRABAJO Y DEL
PROCESO PRODUCTIVO, a través de los Comités de Fábrica y
los Consejos Obreros”.
En las solicitadas y en distintas publicaciones, la C.D.
del Sindicato dejó explicitado que no era ella la que definía,
sino que las resoluciones sobre distintos temas eran
adoptadas en las Asambleas de Bases, y se hacía referencia
permanentemente a que las propuestas y decisiones eran
sometidas al debate y referéndum de las distintas secciones
de la fábrica. (73)
Y como señala Dowling, esa forma de actividad
gremial democrática no fue tarea sencilla, describiéndola
así: “...en los primeros años, las Asambleas se realizaban
en el local sindical, siendo la participación una decisión
personal de cada compañero; estas reuniones fuera de la
fábrica eran irregulares, dependiendo del asunto, del clima
político, etc.. Un buen día, nuestra osadía nos permitió
hacer una Asamblea en la puerta de la fábrica. Muchos
compañeros, que por diversos motivos no se arrimaban al
Sindicato, tenían la oportunidad de participar. Realizábamos

CXLVIII
esos encuentros a la entrada o salida de los turnos. Otro
día, al calor de una lucha más enervante, por la resistencia
patronal a nuestras reivindicaciones, decidimos hacer la
Asamblea dentro de la fábrica, en el corazón del Complejo,
el Galpón de Mantenimiento. En esas primeras Asambleas
de Fábrica, una parte de los trabajadores seguía
trabajando.” (74).
Siguiendo esos conceptos, durante el año 1974, se
dieron varias Asambleas en pocos días, que según la C.D.
“marcaban rumbos”. De una de ellas, la del 11 de junio, se
comentó:
“Los últimos acontecimientos de estos meses en nuestro
país fueron vividos en su total magnitud por los trabajadores
petroquímicos, que llevamos al seno de nuestras asambleas
cada uno de los problemas gremiales y políticos de los que
necesitábamos tomar decisiones.
“Viejas inquietudes del gremio, comenzaron a ser
analizadas en reuniones de secciones como las realizadas
por los compañeros de Instrumentos, de Trabajo de Turno,
Administrativo, Brigadas de Incendio, etc.. Además de los
problemas concretos en cada uno había un punto que era el
eje central de las discusiones: el salarial. Ante esta realidad
interna y viendo que externamente se estaban dando luchas
por aumento de sueldo, la conducción del gremio decidió
convocar a una asamblea para que el gremio en su conjunto
decidiera la posición a tomar ante la patronal. Esta
propuesta fue tratada en esta asamblea numerosa que
después de considerar las distintas reivindicaciones
propuestas, incluida la salarial, decide elevar un petitorio a
PASA con un plazo de cinco días para que el mismo sea
satisfecho en su totalidad; de lo contrario una nueva
asamblea de fábrica decidiría las medidas a adoptar. Una
asamblea extraordinaria, por la gran participación de

CXLIX
compañeros en el debate y donde se puso de manifiesto
el alto grado de conciencia del gremio y su espíritu de lucha,
en el transcurso de la misma se recibió información desde la
fábrica de que la patronal había realizado una denuncia
policial contra un compañero, al que se sindicaba de un
atentado perpetrado contra un jefe de PASA. Analizado este
problema y considerando la total inocencia del mismo, se
decidió brindarle la solidaridad unánime de todo el gremio.
La misma se manifestó en caravanas de colectivos, autos y
todo medio de movilidad que fue hasta el complejo para
exigirle a la patronal que retirara la denuncia y para
brindarle seguridad al compañero. Fue una extraordinaria
prueba de solidaridad de la que somos capaces los
petroquímicos cuando vemos pisoteados nuestros derechos
o nuestra dignidad.” (75).
Al día siguiente, sobre otra Asamblea masiva, se dijo:
“Con posterioridad al discurso del Gral. Perón, la
Confederación General del Trabajo realizó una movilización
popular a Plaza de Mayo en apoyo al Presidente de la
Nación. Una vez conocida la noticia, se convocó
inmediatamente a una asamblea de fábrica para analizar la
medida y fijar posiciones al respecto. En el transcurso de la
asamblea se dieron varias mociones que sintetizaban el
pensamiento de los compañeros. Una de ellas, fue apoyada
por una inmensa mayoría, que planteó acatar el paro
decretado por la CGT, en apoyo del gobierno elegido por el
pueblo, y mantener el petitorio presentado a la patronal
para ser considerada en la fecha prevista y a decir al
respecto. La otra posición planteada el no, porque
significaba avalar el Pacto Social y en consecuencia no se
podía emprender la lucha por salario y que éste lo impedía.
Esta posición sometida a votación representó sólo una
minoría de compañeros. A través de una decisión

CL
totalmente democrática el gremio petroquímico adhirió a la
medida de fuerza.” (76).
Posteriormente, la Asamblea realizada en la fábrica el
18 de junio, se analizó desde la conducción del Gremio de
esta forma:
“En esa fecha expiraba el plazo que tenía la patronal para
responder al petitorio presentado por el gremio, en el que
estaban incluidas mejoras salariales. Como era de suponer,
nuestra bien amada patronal imperialista yanki, se escudó
en el Pacto Social y en algunas frases del discurso
presidencial, para decirnos que NO y otras excusas (...).
Analizado el problema en la asamblea que hicimos en el
Taller de Mantenimiento y después de discutir
exhaustivamente la situación política externa (la totalidad
de los gremios que se encontraban en conflicto por salarios
habían levantado las medidas ante el llamado de Perón), la
Asamblea decidió:
a) suspender el pedido de aumento de salarios
b) mantener en pie las demás reivindicaciones
c) formar una comisión para control de precios en la zona y
para controlar la producción y precios de los productos
fabricados en PASA.
“En el desarrollo de la Asamblea se produce un
enfrentamiento político de distintas tendencias partidarias
llegándose en el momento a una discusión nerviosa y
agresiva y de la que no estuvieron ajenos algunos
compañeros de esta Comisión Directiva. En algunos
instantes se dio la sensación de tumulto, pero
afortunadamente no se llegó a fisura en la unidad de los
Petroquímicos, que permanece intachable y sigue adelante
contra las injusticias y toda forma de opresión.” (77).
En agosto de ese año, ante un conflicto con la
patronal, se decidió la toma de la fábrica con gestión y

CLI
control obrero de la producción, y el ejercicio de la
democracia directa fue una cons-tante durante toda la
ocupación, desde el funcionamiento de los Comités que se
organizaron hasta las Asambleas de todos los obreros. En la
solicitada del 13 de agosto de 1974, en el diario ‘La Capital’
de Rosario, se aclaraba que las decisiones que se adopten
serían tomadas en las Asambleas de Fábrica.
Otra de las experiencias más ricas se dio en el año
1975, durante la Presidencia de Isabel Perón, quien
presionada por la clase obrera y los sindicatos, convocó a
discutir libremente los convenios colectivos de trabajo. El
SOEPU logró un aumento salarial de más del 100 %, entre
otras conquistas. Rodrigo, a cargo del Ministerio de
Economía, anuló los convenios colectivos de trabajo y
decretó un aumento de salarios del 40 %, en muchos casos
inferior a la suba que habían obtenido los obreros en las
discusiones paritarias. La clase obrera se movilizó, en
estado deliberativo permanente. En PASA se convocó a una
Asamblea de Fábrica y, según el relato de un entrevistado,
“se decidió marchar sobre Rosario, pasando fábrica por
fábrica convocando a los compañeros. Ese día realizamos
asambleas en las puertas de cada establecimiento que
visitamos, en la ciudad fueron varias, en la puerta de la
CGT, en las calles, junto a obreros de otros gremios”. Las
jornadas siguientes se vivió el mismo clima de movilización
y asambleas masivas, en las cuales la decisión y el poder
estuvo en las bases.
Fue en la Intersindical de San Lorenzo y en la
Coordinadora de Gremios en Lucha, donde el SOEPU impulsó
el ejercicio de ese tipo de democracia, para el tratamiento
de las distintas problemáticas.
Todas esas prácticas, desde la recuperación del
Sindicato, el funcionamiento del mismo, la Asamblea Obrero
Popular de julio de 1971, la Intersindical, la toma de PASA

CLII
en 1974, hasta la marcha sobre Rosario en 1975, y la
Coordinadora de Gremios en Lucha, tuvieron como eje una
metodología: el ejercicio de la Democracia Obrera.

II. 4.2.- Los Planteos de Democracia Obrera


en la Zona Industrial

El Socialismo Revolucionario -S.R.- y el Peronismo de


Base -P.B.-, los dos grupos políticos con mayor influencia
entre los miembros de la Comisión Directiva del SOEPU, y
los obreros Petroquímicos, tenían como eje principal de sus
postulados la Democracia Directa como forma de
organización gremial y política.
La Democracia Obrera era definida, por los militantes
del Socialismo Revolucionario, como el “ejercicio de la
democracia del proletariado organizado en asambleas,
comités de fábrica, juntas, soviets; incluso antes de la toma
del poder, como la forma que necesariamente deben
revestir los órganos de combate del proletariado, ya en esta
etapa en el seno del capitalismo”. (78)
En el órgano periodístico de la Dirección del S.R.,
‘Unidad Proletaria’ Nº 2, se pronunciaron porque era
necesario “terminar con la democracia burguesa
parlamentaria, históricamente perimida, y reemplazarla por
una democracia superior: la democracia basada en los
concejos obreros, la democracia soviética sin comillas, o la
democracia propia del Estado tipo COMUNA DE PARÍS”. (79)
Y fundamentaban ese objetivo en el hecho de que la
organización política que presupone la democracia
burguesa ya no corresponde a la base material del
capitalismo. Esa nueva democracia debería ser el
instrumento que permita poner a las fuerzas productivas en
correspondencia con las relaciones de producción, “para lo

CLIII
cual, necesariamente se deberán romper las actuales
relaciones capitalistas que frenan y distorsionan el
desarrollo de aquéllas. Esa nueva organización política no
será el resultado de la toma del actual poder estatal (...)
sino que por el contrario resultará de la destrucción total
del actual aparato del Estado y su reemplazo por una nueva
organización estatal. (...) El proletariado revolucionario no
puede limitar sus exigencias a la vigencia de la república
democrático burguesa parlamentaria”. (80)
Destacando que la tarea del proletariado es luchar en
los marcos del capitalismo por la máxima ampliación
posible de la democracia, pero NO LIMITA sus objetivos a la
vigencia de la demo-cracia burguesa, sino que debe luchar
por un nuevo tipo de Estado, realmente democrático, “en la
que se suprimen radicalmente y definitivamente la policía y
el ejército profesional y se reemplacen por el armamento
general de la población, en la que todos los cargos públicos
sin excepción sean cubiertos por elección directa, en la que
quien desempeña un cargo público de cualquier natura-leza
pueda ser removido en cualquier momento por exigencias
y decisión de la mayoría simple de sus electores, en donde
los sueldos de cualquier funcionario electo se fijen sin
excepción dentro de los límites del salario medio de un
obrero medio calificado, en la que los organismos
parlamentarios sean sustituidos gradualmente en el orden
nacional por estas Comunas Revolucionarias o Consejos
Obreros o Soviets.” (81).
El Peronismo de Base -P.B.-, otra de las principales
fuerzas políticas de la zona y con militantes en la C.D. del
SOEPU e influencia en obreros de base, reivindicaba esas
prácticas ‘sui generis’ de democracia. Sostenían que para
conquistar la recuperación sindical, los trabajadores deben
volver al clasismo, impulsando no sólo reivindicaciones

CLIV
económicas, sino también dando lucha política (control
obrero, expropiación de las empresas monopolistas).
A la vez, proponían promover las Asambleas como
máxima expresión de decisión, y en la revista Militancia
expresaron: “... organización de masas de la clase obrera
(...) que haga de la participación plena y democrática de las
mismas el método permanente de funcionamiento. (...) En
las fábricas: Impulsar la Democracia Obrera a través de la
Asamblea para tomar decisiones, elegir a nuestros
delegados y controlar el cumplimiento de las decisiones
tomadas entre todos. Formar nuestras Agrupaciones de
Base, que apunten a convertir a los sindicatos en
herramientas a nuestro servicio y al mismo tiempo que sean
la forma en que nos agrupemos para crear nuestra propia
organización.” (82).

CLV
CAPÍTULO III

EL S.O.E.P.U. Y
LA INTERSINDICAL DE SAN LORENZO

CLVI
III. 1.- Panorama de la Clase Obrera hacia
1969

CLVII
En el ámbito nacional, desde mediados de 1968, la
crisis económica se profundizó y aumentó el descontento;
así, durante el año ’69, se fueron dando una serie de
protestas, desde la Marcha del Hambre de Villa Ocampo
(Santa Fe) y las movilizaciones estudiantiles en Corrientes,
el I Rosariazo, el Cordobazo, hasta el II Rosariazo, el
Alzamiento en Cipolletti y otras puebladas, que terminaron
derrotando el proyecto “sin límites” de Onganía, mientras
en el poder crecía el temor al “Argentinazo”.
Fueron fracasando las distintas alternativas
ensayadas por la “Revolución Argentina” en sucesivas
etapas, para recuperar el consenso pasivo hacia la misma.
Se frustraron las opciones desde el plano exclusivo y
eminentemente social, como la alternativa sindical -
participacionista y corporativa de Onganía, Imaz y Borda,
así como la que combinaba la perspectiva de apertura
política en cinco u ocho años, vía partidos de la
“generación intermedia”, intentada por Levingston, C.
Aguirre y Cía..
De ese modo, la clase obrera y la pequeña burguesía
inicialmente descreídas del Parlamento -y deseando esos
cambios profundos, “revolucionarios”- terminaron
rechazando esa presunta capacidad revolucionaria de las
FF.AA., o sea, el objetivo que las mismas levantaron. El “ni
golpe... ni elección... revolución”, voceado o no pero
presente en la conciencia popular, barrió y suplantó a la
expectativa inicial. El “ni golpe...” expresaba la pérdida de
confianza total en la capacidad transformadora de los
militares. El “ni elección...”, claro índice de que perduraba
la total desconfianza en el sistema parlamentario, como
medio para realizar esa “revolución” anhelada y
“traicionada” por el militarismo. “Revolución” expresaba
la persistencia -y más aún, el acrecentamiento- deseando

CLVIII
los cambios genéricamente denominados “revolución”,
aunque en la conciencia real no expresaba más que el afán
por reformas capitalistas que per-mitieran salir de la
desastrosa situación. La burguesía, que en su mayoría se
encontraba inicialmente “unida” en lo esencial de los
objetivos económicos y de la salida política -en ese
momento previsible sólo a muy largo plazo- consistente en
restablecer la estabilidad política del sistema -o sea, esa
“democracia estable, eficiente y moderna”-, ve
resquebrajarse progresivamente su “unidad” inicial.
El deterioro de la economía ponía en discusión el
conjunto de planes que cada sector de la burguesía
preconizaba, para proseguir con el desarrollo de la
infraestructura y de la industria pesada de acuerdo a su
interés particular pero buscando, simultáneamente, que los
efectos de la crisis recayeran sobre las fracciones opuestas.
La huelga política, por otra parte, cuestionaba los distintos
esquemas políticos para recuperar el consenso pasivo
perdido, enfrentándose en este terreno los partidarios de
“continuar la revolución” -esquema corporativo de por
medio (Onganía y Cía.)-; los sostenedores de “profundizar
la revolución”, aunque dispuestos a la “salida
democrática” a largo plazo -vía elecciones, Parlamento y
partidos políticos-; y finalmente, los interesados en
“terminar con la ‘Revolución Argentina’”, salida
electoral acordada de por medio.
Una típica situación de crisis política se fue esbozando
a través de los dos fenómenos mencionados: la huelga
política in crescendo por un lado, y la profundización de las
contradicciones en el campo de la burguesía por el otro.
Varios años de dictadura exacerbaron notablemente
la explotación económica y la opresión política de las masas
populares, y fueron determinando la aparición de indicios
que demostraban, en la búsqueda espontánea, la existencia

CLIX
de una nueva forma de democracia, un tipo superior de
democracia.
Durante el conflicto en El Chocón, los obreros
destituyeron a los delegados digitados, eligieron los propios
y llegaron a defender ese derecho, al margen de lo que
marcaba la Ley de Asociaciones Profesionales. Dispuestos a
combatir incluso contra el poder armado de la burguesía -en
asambleas democráticas y permanentes en las que
participaban las familias de los obreros y toda la población-,
ejercieron el control civil -por ejemplo, contra la ebriedad,
robos, etc.- sin necesidad de ninguna “policía especializada”
y separada de la sociedad en un organismo especial. En
otras palabras, organizaron su propia vida social de acuerdo
a la voluntad expresada en forma directa por la mayoría.
Esa experiencia fue en nuestro país, pese a que se la
interpretó de otra forma- ni más ni menos que un “soviet”
embrionario de la región.
Por otra parte, las asambleas obreras y populares que
se realizaron en Córdoba, en las Jornadas de Mayo del ‘69,
reunieron en su seno a obreros y a gran parte de la
población pobre de los barrios tomados y rodeados de
barricadas, y en algunos lugares con la población ejerciendo
el poder de policía (por ejemplo, el de permitir la entrada y
salida de los bomberos), también constituyeron una forma
embrionaria de órganos de poder, con democracia directa,
abarcando casi toda la ciudad, aunque su incipiente
desarrollo no permitió la unificación de las Asambleas
barriales entre sí, a través de delegados electos, en un
consejo único de la ciudad.
A la vez, en el movimiento estudiantil se observaba
-par-ticularmente en los últimos años- una tendencia a la
disolución de los tradicionales Centros de Estudiantes. Y esa
tendencia se profundizó más en los lugares donde fue
masiva la participación estudiantil y donde primó el carácter

CLX
antidictatorial de la lucha. Junto a esto, surgieron
organizaciones con delegados electos en Asambleas por
curso o generales y renovables.
La clase obrera, e incluso vastos sectores de la
pequeña burguesía, manifestaban una desconfianza total en
los partidos políticos tradicionales; nada se esperaba de los
militares o de un Golpe de Estado, ni veían soluciones
alrededor de la “salida electoral”. Al mismo tiempo, crecía la
avidez política, aumentaba la participación en las
Asambleas obreras y se registraban fenómenos como los
señalados, que indicaban una fuerte tendencia a la
“democracia directa”, de abajo hacia arriba, apuntando a la
participación, a la discusión y a la elaboración de las
diversas propuestas políticas puestas en juego.
Las luchas relativamente crecientes del proletariado,
entre las que se destacaron el Cordobazo, el II Rosariazo, El
Chocón, etc., daban la pauta de una tendencia espontánea
de la clase obrera hacia la constitución de sus propios
órganos de lucha, distintos al Sindicato. Órganos de lucha
nacidos al fragor de la misma, con un alto grado de
combatividad y de solidaridad. Tendencia espontánea,
porque en realidad no existía la organización del
proletariado, capaz de orientar la lucha con un sentido
clasista, con conciencia de la necesidad de vislumbrar el
poder del Estado, aunque no había en esas circunstancias
condiciones propicias para el acceso al mismo.
Decimos “sus propios órganos de lucha” para
expresar la composición de los mismos, (no podemos darles
un nombre específico, como ser asambleas, consejos, etc.),
con un claro contenido de clase en el sentido que
expresaban socialmente una estructura no de tipo gremial
como el sindicato, sino de organización obrera: nucleaban a
proletarios de distintos gremios, e incluso sectores
populares no proletarios, cuyos objetivos -si bien no

CLXI
específicos en política- superaban las reivindicaciones
gremiales para orientarse a los de clase en sí. Por eso
hablamos de solidaridad en cuanto a clase, siempre -por
supuesto- en el marco de la espontaneidad.
El Chocón -a diferencia de lo que antes señaláramos
para Córdoba y Rosario-, aparecía con algunos caracteres
de mejor organización y conducción, pero no alcanzaba a
salir de los marcos indicados, aunque logró una mayor
permanencia y organicidad, con vigencia en su seno de
marcadas expresiones de democracia obrera.
No obstante, esos embriones de democracia obrera
aparecían como contradictorios con la misma esencia del
poder burgués, ya que su sola existencia encerraba en
ciernes una situación opuesta a la autoridad de la
burguesía, es decir, adonde ésta como tal no llegaba. Lo
que equivalía a la existencia, si bien muy primigeniamente,
del “no poder” o “poder negativo”. Y lo fundamental de este
aspecto se expresó en que la clase obrera participante de
los sucesos de Córdoba, Rosario y El Chocón, imprimió a su
lucha un contenido profundamente político, no sólo
antidictatorial sino clasista -clase en si-. Pero destacamos, y
esto debe quedar en claro, sin conciencia de que ello era
así, y al decir clasista, queremos significar la composición
social y el sentimiento de la explotación.
O sea, las asambleas obreras, consejos,
organizaciones de barrio, o como se quiera llamar a esas
expresiones de la lucha de clases durante los sucesos
de Córdoba y Rosario, teñidas de un rasgo de total
espontaneidad, cobraron -al calor de la disputa- el carácter
de órganos de combate político de la clase obrera.
Los hechos que se sucedieron a fines de 1970 y
principios de 1971, en Catamarca, Tucumán, Casilda y
otras ciudades más, confirman la tendencia descripta.

CLXII
Recordemos especialmente lo sucedido en Córdoba a
comienzos de 1971, cuando fueron despedidos siete
delegados de FIAT que formaban parte de los nucleamientos
de vanguardia en ese sector de la clase obrera. Ante esto,
los obreros tomaron las plantas industriales en pro de la
reincorporación de sus delegados. A las pocas horas se
difundió el rumor de la posible militarización de la ciudad
por parte de la dictadura, y ante eso se produjo, en forma
casi totalmente espontánea, un abandono masivo de las
principales empresas de la ciudad y miles de obreros se
concentraron frente a las fábricas tomadas de FIAT en
actitud de solidaridad en la lucha de clases. ¿Qué
significaba esa actitud del proletariado cordobés? Al
plantarse frente a la Fábrica FIAT, le estaba diciendo a la
dictadura: “como clase unida enfrentaremos la
militarización del gobierno”.
En síntesis, la acción política del proletariado
revelaba, a partir del Cordobazo y del II Rosariazo, un
sentido en su desarrollo, caracterizado por:
 Tendencia a la unidad del proletariado como clase y el
alineamiento junto a él de otros sectores oprimidos.
 Las manifestaciones callejeras.
 La democracia directa.
Todo esto mostraba, por lo menos hasta el Golpe de
Lanusse, un claro desarrollo en el camino de la huelga
política de masas. A su vez, este proceso señalaba un
profundo crecimiento desigual considerando al país en su
conjunto, que tenía su pico más alto en Córdoba y Rosario.
Fue en ese contexto económico, político y social, que
surgió una experiencia de organización obrera: la
“INTERSINDICAL DE SAN LORENZO (Provincia de Santa Fe)”,
que se extendió desde mediados de 1969 hasta fines de
1973, de la que participaron activamente los miembros del
SOEPU.

CLXIII
III. 2.- Origen, Composición y
Características
de la Intersindical

Los orígenes y las motivaciones de la conformación de


esta Organización Obrera se encuentran, en primera
instancia, en “dos hechos que podríamos destacar a nivel
regional: uno, como consecuencia del ‘I Rosariazo’ se unifica
la CGT local, que hasta ese momento había estado
alineada con la CGT de Paseo Colón, la más combativa; dos,
los obreros de la Zona Industrial de San Lorenzo, totalmente
descreídos de esa unificación, pasamos a concretar un viejo
anhelo cuyo origen se pierde en el pasado de la propia zona
industrial, crear una ‘Intersindical de Gremios’ de la zona.
Reforzaba este deseo, la bronca que nos provocaba el
levantamiento del paro nacional que la CGT había
convocado para los primeros días de octubre de 1969”. (1)
Apuntalaba esa idea la sensación de debilidad y de
aislamiento de los Gremios de la Zona Industrial, tras las
derrotas que durante 1967 y 1968 sufrieran los obreros de
San Lorenzo, que habían perdido cuatro conflictos: en PASA
-Petroquímica Argentina-, Cerámica San Lorenzo, Electroclor
y Celulosa.
De esa manera, la INTERSINDICAL surgió como una
“alianza sindical defensiva” y creció hasta tornarse en una
organización cuyas características fueron la solidaridad, la
democracia de base, la combatividad y el clasismo.
Desde su nacimiento hasta su extinción, las luchas se
dieron por la defensa de los puestos de trabajo, contra los
intentos de despidos, por aumentos salariales, mejores

CLXIV
condiciones de trabajo, por libertades gremiales y políticas,
llegando al paro en solidaridad con distintos conflictos hasta
fijar posiciones frente a la salida electoral de 1973, la
democracia política y contra el Golpe Militar de Pinochet a
Salvador Allende en 1973 en Chile.
Las primeras vivencias coincidieron con los
alzamientos populares de Mayo del ‘69, momento en que
los sindicatos de la zona industrial realizaron una huelga
solidaria con los trabajadores cordobeses. Fue esa la
oportunidad de dejar las limitaciones de la lucha interna, de
transponer “el alambrado de la fábrica y emprender una
acción colectiva con otros trabajadores”, nos relataron
miembros de algunos gremios.
Entre los obreros del SOEPU se discutió la necesidad
de conformar una organización interfabril; posteriormente
lo hicieron con compañeros de distintos gremios. Como
corolario y suma de todos esos elementos nació la
Intersindical. Los Petroquímicos, en su periódico, evaluaron
el surgimiento de la nueva estructura de los obreros de la
zona industrial:
“Las empresas tienen hombres muy bien pagos que
defienden sus intereses. Hombres expertos en relaciones
públicas, humanas, laborales e industriales. Representantes
patronales encargados de mantener todos los contactos
posibles, con el gobierno, el ejército, con colegas de otras
naciones, de tal manera de consolidar una posición
privilegiada, ya sea en el campo económico, ya sea en el
campo social o político, recurriendo a quien sea para que se
le garantice la paz social necesaria, la paz que se obtiene
con cordiales relaciones con sus obreros o sometiendo a los
rebeldes, a los fines de cumplir cómodamente sus objetivos
de producción y ganancia. Y como estos objetivos son
comunes a todos los patrones, se unen, se organizan,

CLXV
actúan en conjunto constituyendo una fuerza muy poderosa.
A todo esto, los trabajadores debemos oponerles una
organización superior. Superior porque los representantes
patronales se mueven y luchan por medio de un sueldo
importante, cuando no son ellos mismos accionistas o
dueños de la empresa. Su accionar responde a intereses
individuales, ya sea para obtener condiciones más
favorables de explotación de sus obreros y de esa manera
acrecentar su ganancia.
Los trabajadores nos unimos por intereses comunes de
clase. Luchamos en los sindicatos por una mejor venta al
patrón de nuestras fuerzas y capacidad de trabajo, por
mejores condiciones laborales, etc.. Y como los capitalistas
son fuertes y están unidos, aquella lucha contra nuestro
patrón a veces es insuficiente, y debemos enfrentarlos
uniendo las fuerzas de los trabajadores de una zona, y del
país todo como clase social que somos. Por eso debemos
tratar que la organización de la zona que nuclea a sus
obreros: la Inter-sindical, no sólo sea la unión de los
dirigentes clasistas de los gremios, sino que la misma
esté apoyada sobre una sólida base obrera, unida sin
distinción de salarios ni categorías, para formar una
conciencia única por su único interés.” (2).
Esta ‘Inter’ -como la llamaban los trabajadores- estuvo
integrada por el SOEPU, el Sindicato de Químicos Papeleros,
el Sindicato Químicos de San Lorenzo, el Sindicato de
Aceiteros, la Comisión Interna de Sulfacid, el Sindicato de
Ceramistas, y distintas agrupaciones de base. No formaban
parte de la misma los Gremios de la construcción,
metalúrgicos, petroleros y los de los Establecimientos Delta
e Indo de Puerto San Martín.
Las Comisiones Directivas de los Sindicatos y las
Comisiones Internas estaban conformadas por obreros

CLXVI
combativos, clasistas, con una presencia mayoritaria de
peronistas, y “en el aspecto sindical, empero, se trata de un
sector que presentaba algunos caracteres atípicos en
relación al conjunto de la clase obrera del país. Salvo
algunos sindicatos, como petroleros, uno de los más
antiguos, y una rama no fabril, como la construcción, en
general no se verificaba la hegemonía de la burocracia
sindical sobre las organizaciones de los trabajadores como
ocurría en casi todo el resto del movimiento obrero del
país”. (3)
Juan Carlos Torre, al referirse a este tema, manifestó
que “en efecto, la articulación del descontento en Córdoba y
el Litoral no sólo fue favorecida por la centralidad de la
fábrica sino también por el menor grado de control ejercido
por los aparatos sindicales”. (4)
La primera lucha encarada fue ofensiva y solidaria, al
exigir elecciones libres en el Sindicato de Indo -Aceitera de
Puerto San Martín- que se encontraba intervenido. La
insinuación de paralizar la zona, (se había organizado un
plan de lucha con paros parciales) determinó la inmediata
convocatoria a elecciones. Los Petroquímicos analizaron ese
conflicto en un artículo titulado “Unidad Obrera alrededor
de la Intersindical: un éxito más”, donde expusieron que
“... se pedía que los obreros eligieran, democráticamente,
sus representantes sindicales, y se pusiera fin a la
intervención de cuatro meses que pesaba sobre el
Sindicato. Y las autoridades legales correspondientes,
accedieron a lo exigido por la Intersindical. Y fueron Uds.,
Trabajadores de la Zona, los que consiguieron darle a 130
obreros, hasta ayer totalmente desamparados, la posibilidad
de recuperar su Sindicato”. (5)
Este mecanismo de defensa fue efectivo y disuasorio,
ya que durante el período de existencia de la Organización
no se produjeron despidos en la zona.

CLXVII
La Inter fue adquiriendo fuerza al calor de las luchas
en defensa de los intereses obreros, como el caso de la
paralización de la Zona Industrial por el intento de un solo
despido injustificado -el de un obrero de Cerámica
Verbano-, donde además fueron a la huelga los obreros de
Villa Constitución. Esa solidaridad se extendió en el ámbito
nacional, ya que durante el “Viborazo”, en Córdoba (1971),
se decidió la paralización de la zona con asambleas en las
distintas fábricas. La medida se concretó por:
1.- Solidaridad con los trabajadores de Córdoba.
2.- Exigir a la CGT Regional y al Comité Central Confederal
de la CGT que adopte medidas de fuerza por:
a.- Aumento Inmediato de Emergencia
b.- Plena vigencia de la Ley 14.250
c.- Derogación de los Decretos 18.886 / 18.887,
que fijan topes salariales
d.- Solidaridad con el Movimiento Obrero de Córdoba
e.- Libertad de los presos políticos, gremiales, y
estudiantes
f.- Levantamiento inmediato de las intervenciones a las
organizaciones gremiales y restitución de sus
personerías
g.- Repudio a los actos vandálicos ocurridos en los
recientes
sucesos de la capital mediterránea. (6)
El 24 de marzo pararon los obreros de Molinos Río de
la Plata, Duperial, Cerámica San Lorenzo, PASA, Sulfacid,
Electroclor y Porcelanas Verbano. Se sumaron a la medida
dispuesta la Unión de Comerciantes e Industriales del
Departamento San Lorenzo, quienes pararon entre las 9 y
las 11 hs., fundamentando su actitud en que ante “el
posible cierre de fuentes de trabajo, todos los sectores
deben procurar salvaguardarlas”. (7)

CLXVIII
Tras el Golpe Militar de Pinochet al Gobierno de
Salvador Allende, en Chile -septiembre, 1973-, la “Inter”
convocó a una concentración bajo la consigna “Marcha de
Solidaridad con la Clase Obrera Chilena”, fundamentando la
medida al plantear que “A raíz del golpe fascista orquestado
por el imperialismo y la reacción en la hermana República
de CHILE, convocamos a los trabajadores y al pueblo de esta
zona industrial, a expresar su solidaridad con el pueblo y la
clase obrera chilena”. La concentración se efectuó frente al
local del SOEPU, y la posterior movilización abarcó más de
cinco cuadras, recorriendo la ciudad de San Lorenzo,
expresando la solidaridad internacionalista con los
trabajadores transandinos y repudiando al golpe fascista. (8)
En el año 1973, conjuntamente con el Gobierno de
Héctor Cámpora, llegó la Ley de Amnistía para presos
políticos y gremiales. Frente a esa sanción, la Intersindical
fijó su posición al sostener: “Queremos la ampliación de la
Ley 20.508 para que alcance a los cesanteados por las
mismas causas en las distintas empresas y la
reincorporación de los obreros cesanteados por causas
políticas y gremiales desde el año 1955” . (9)
En ese año, se produjo un conflicto clave en la zona
industrial. Al ser despedido el “Negro” Acevedo, Secretario
General del Sindicato Químico de San Lorenzo y fundador de
la Inter, los obreros de Duperial tomaron la fábrica,
produjeron el primer control de la producción de la zona
durante cuarenta y ocho horas, y paran los químicos del
país. Pero “al ofrecer la solidaridad de la Inter, los dirigentes
de la Federación de los Químicos, rechazan nuestro apoyo.
Pero esto terminó de una manera trágica, repentina,
inesperada, el negro Acevedo vivió con tanta magnitud este
conflicto que una embolia cerebral le produjo la muerte.
Muerte que tiene sus victimarios: este sistema inhumano

CLXIX
por un lado, que diariamente se cobra nuevas víctimas, y la
patronal por el otro al disponer esta cesantía absurda”. (10)
La importancia de ese conflicto para los obreros y
dirigentes que entrevistamos se verificó en tres
acontecimientos: la pérdida de uno de los fundadores de la
Inter -obrero combativo y clasista-, el control obrero de la
producción durante cuarenta y ocho horas en Duperial, y el
rechazo de la solidaridad por parte de la burocracia de la
Federación de los Químicos (FATICA).
Por otra parte, la Inter no pidió en ningún momento su
reconocimiento legal como organización gremial y, según lo
expresado por varios dirigentes, fue una forma de evitar
que fuese intervenida por la CGT Nacional, a pesar de que
en los hechos fue reconocida por las autoridades
provinciales, pues el gobernador militar de la Provincia de
Santa Fe recibió en la Casa de Gobierno a los dirigentes de
la misma. Por otra parte, cada Gremio permaneció dentro
de la estructura de la CGT - Rosario, mientras concurrían en
bloque a las reuniones y plenarios, con posturas unificadas,
previamente discutidas en los distintos Sindicatos y
Asambleas Fabriles.
Otra de las particularidades de la Organización fue la
práctica activa de la “democracia directa”. La base legal de
las decisiones que en ella se tomaban eran las Asambleas
de Trabajadores. Funcionaba con un mecanismo ágil que le
permitía resolver las acciones a emprender en el día: a
partir de cualquier sugerencia de un sindicato, se realizaban
asambleas en todas las fábricas donde se consideraba el
tema, y participaban delegados de otras asambleas o
dirigentes de otros sindicatos llevando las distintas
posturas. En las resoluciones, se contemplaba la posibilidad
de que obreros con posiciones minoritarias defendieran en
otras asambleas sus puntos de vista, esto facilitado “por la
cercanía de las distintas fábricas y la rápida comunicación

CLXX
entre las comisiones internas y comisiones de los
sindicatos”. Se trataba de asambleas conjuntas, de las
cuales la Asamblea Obrero - Popular de 1971 fue el mayor
ejemplo. Este método se aplicaba para todo; “democracia
obrera en todos los niveles, con lo cual conseguiremos la
discusión de distintos problemas sin distinción de razas,
religiones o partidos”.
En las solicitadas y publicaciones de la Organización
se dejaba constancia de que no eran ni los Secretarios
Generales de los Sindicatos ni las Comisiones Directivas los
que resolvían, sino las Asambleas, como lo demuestra la
convocatoria a la Asamblea Obrero - Popular de 1971,
donde se planteó que las propuestas y decisiones serían
sometidas al referéndum de las asambleas en las distintas
fábricas. (11)
La Inter asistió a distintas instancias organizativas a
nivel nacional de gremios combativos y clasistas, y lo hizo
previa deliberación en asambleas, concurriendo con
mandato de las mismas.
Los días 22 y 23 de mayo de 1971 se reunió en
Córdoba, convocado por la Regional de la CGT, el Plenario
Nacional de Gremios Combativos, participando del mismo
124 Agrupaciones Sindicales de Capital Federal, Buenos
Aires, Santa Fe, Mendoza, Chaco, Neuquén y Tucumán. La
Intersindical de San Lorenzo concurrió con una delegación
compuesta por dos representantes del SOEPU, dos de
Químicos, uno de Ceramistas y uno de Jaboneros.
El Plenario se realizó bajo la denominación “29 de
Mayo”, y en la inauguración hizo uso de la palabra el
Secretario de la CGT de Córdoba, Atilio López, quien
reivindicó “la posición combatiente del pueblo de Córdoba y
replantear las bases programáticas indispensables para la
meta de la clase trabajadora argentina”.

CLXXI
Uno de los miembros de la Delegación comentó sobre
lo sucedido “luego de algunas anormalidades en la
presentación de la documentación, ya que nuestros
representantes fueron rechazados en primera instancia para
posteriormente ser aceptados en las deliberaciones del
Plenario. Debemos sumar una nueva irregularidad que fue
la no aceptación de la Intersindical como bloque y tal como
había concurrido a Córdoba. Pudimos participar del Plenario,
no ya como Intersindical sino como Gremios. Pero nuestros
representantes no fijaron posturas debido a que no existía
mandato de las bases haciéndose conocer al Plenario esta
situación”.
En la Reunión predominaron varias líneas importantes
y otras de menor gravitación en el Movimiento Obrero:
∗ los Peronistas Combativos,
∗ los Gremios Clasistas encabezados por SITRAC - SITRAM
de Córdoba,
∗ los “Independientes” de Córdoba,
∗ la línea del Partido Comunista.
Más allá de los matices y expresiones propias de
estos plenarios, se coincidió en analizar -de acuerdo a la
convocatoria- la realidad nacional, pasando por los
Programas de La Falda, Huerta Grande y 1º de Mayo de la
CGT de los Argentinos. Los oradores recordaron
afectuosamente a los presos políticos y gremiales,
especialmente a Agustín Tosco y Raymundo Ongaro,
detenidos en la Unidad Penitenciaria Nº 9. Fue amplia la
coincidencia en el repudio al gobierno y a la conducción
nacional de la CGT.
Fueron presentados varios documentos a
consideración del Plenario, uno de la regional Córdoba, otro
de las 62 Organizaciones, un tercero del SITRAC - SITRAM, y
finalmente un último documento del Sindicato de la Sanidad
de Santa Fe adherido a la Comisión Nacional Intersindical.

CLXXII
El documento de la INTER fue en un principio rechazado,
siendo posteriormente considerado.
Las conclusiones del Plenario fueron enviar las
distintas mociones presentadas a todas las organizaciones
gremiales combativas del país para ser analizadas por las
bases, y poder elaborar en un próximo plenario nacional el
documento definitivo. El SOEPU hizo conocer oportunamente
la documentación mencionada, que planteaba entre otros
conceptos: “El sistema derrotado en las calles en 1969 y
1971 no acepta voluntariamente su desplazamiento, hoy,
con métodos distintos en la persona del General Lanusse,
juega su última carta intentando engañar una vez más al
pueblo argentino”. Y agregaba que la “Argentina, que se
constituyera en auténtica avanzada, concluida la Segunda
Guerra Mundial, del movimiento que hoy integran los
llamados países del tercer mundo, debe rescatar para sí la
experiencia que marcan en todos los continentes y en forma
propia en nuestra propia frontera, Bolivia, Chile y Perú, el
camino hacia la socialización, la libertad, justicia y
soberanía”.
A la vez, el Programa que se postulaba planteaba,
entre otros puntos: “Nacionalización de todos los sectores
decisivos de nuestra economía, Planificación
descentralizada e integral de la economía pública y privada,
Autogestión y control popular de las empresas y en la
producción y distribución de los bienes, Reforma urbana,
Política cultural que garantice al pueblo el acceso a todos
los niveles de la educación, Desconocimiento de los
compromisos internacionales lesivos a la soberanía popular,
Política nacional independiente, Solidaridad con los pueblos
que luchan por su liberación”. Se bregaba por la eliminación
de la pena de muerte y toda legislación represiva,
reclamándose la libertad de los presos políticos, gremiales y
estudiantiles. (12)

CLXXIII
Posteriormente, en agosto de 1971, se realizó el
programado “Plenario Nacional de Sindicatos Combativos,
Grupos Clasistas y Obreros Revolucionarios”, al que
concurrió otra representación de la Inter. El encuentro se
convocó para considerar este temario:
A.- Análisis de la situación económica, política y social del
país, vista desde la perspectiva de la clase obrera.
B.- Situación del Movimiento Obrero:
a) Penetración actual de la burguesía, estatización
del Sindicalismo, corrupción de los cuadros.
b) Despertar de las luchas y de la concientización obrera.
C.- Coordinación de la lucha antipatronal, antiburocratica y
antidictatorial.
D.- Solidaridad con los trabajadores que luchan por
imponer una línea clasista.

Treinta y cinco delegados de la Delegación de la


Intersindical fueron detenidos durante varias horas, no
pudiendo asistir al encuentro. Se votó una serie de medidas,
denunciándose “las falsas opciones de la burguesía
representadas en el GAN, la Hora del Pueblo y el Encuentro
de los Argentinos”, y se planteó la destrucción del
capitalismo para la construcción del socialismo. Se aprobó
un Plan de Lucha, que incluía el reclamo de la libertad de los
presos gremiales, estudiantiles y políticos, aumentos
salariales, derogación del estado de sitio y de toda
legislación represiva. A la vez, se convocaba a un nuevo
Plenario, para septiembre, habiéndose acordado el nombre
del encuentro, MOSICLA -Movimiento Sindical Clasista-.
Luego, el SOEPU convocó a una Asamblea para el 22
de septiembre, con el fin de discutir las posturas a llevar al
nuevo Plenario del MOSICLA, resolviendo los Petroquímicos
propiciar que se avance en la redacción de un programa

CLXXIV
para nuclear a la corriente sindical clasista, con el objetivo
de recuperar los sindicatos y la CGT Nacional, considerando
incorrecta la consigna “ni golpe ni elección, revolución”,
impulsando la que planteaba “contra los golpes militares y
las falsas opciones, democracia obrera”. (13)

III. 3.- La Asamblea Obrero - Popular


de Julio de 1971

III. 3.1.- Situación Política y Social

En el ámbito nacional, a comienzos de 1971, la


progresiva tendencia a la acción directa del proletariado,
más las crecientes contradicciones interburguesas, rompían
más y más los puentes entre la “Revolución Argentina” y los
trabajadores. Ese deterioro debía compensarse
necesariamente con una mayor injerencia de las FF.AA. en la
función política gubernamental.
Eso llega a su máxima expresión después del “Golpe
dentro del Golpe” del 23 de marzo de 1971, ya que el
ascenso del General Lanusse legalizó la función de
“gobierno y cogobierno”, directamente por las FF.AA. como
Institución, cuando se modificó el Estatuto de la Revolución
Argentina. Lo que habitualmente es órgano de reserva del
sistema estatal de la burguesía, se encontraba como único
depositario activo del gobernar. Esto no hizo más que
expresar la culminación del proceso mencionado: ruptura
del consenso pasivo por un lado, y profunda división de la
burguesía por el otro.

CLXXV
Tras el Golpe del ‘66, detrás de Onganía se
encontraba la Junta de Comandantes, y el Estatuto de la
Revolución Argentina destacaba que “las FF.AA. no
gobiernan ni cogobiernan”. Al ascender Levingston, el
Artículo 5º de dicho Estatuto sufrió la primera modificación y
su resultado fue el agregado “las FF.AA. no gobiernan, pero
cogobiernan”, participando de la función legislativa en la
sanción de todos los proyectos. Pero luego de la caída de
Levingston, se puntualizó un fenómeno particular: “las
FF.AA. gobiernan y cogobiernan”. Siempre el poder político,
del ‘66 en adelante, estuvo -en última instancia- en manos
de las FF.AA.; pero lo que introdujo el Golpe de Lanusse fue
que la función política de gobierno se encontraba
directamente en manos de las cúspides del aparato militar.
En eso se expresaba el deterioro de la Revolución
Argentina. Por una parte, la existencia de una situación de
crisis profunda, con los “Cordobazos” estallando o a punto
de hacerlo en el momento menos pensado; la amenaza del
estallido general de un “Argentinazo”; con las FF.AA.
“gobernando y cogobernando”, claro índice de la ruptura de
todos los puentes entre el Gobierno Militar con la clase
obrera y la pequeña burguesía. Por otra parte, habían
fracasado las sucesivas opciones que desde el plano social y
socio - político se ensayaron para recuperar el consenso
pasivo perdido, sin opción para atenuar las contradicciones
de clases con salidas desde el plano económico - social por
la crisis capitalista y por los propios intereses específicos de
las cúspides militares, que se oponían a la mínima reforma
económica. En el marco de toda esta situación se impuso la
propuesta consistente en la salida electoral, cuyo
equivalente no era otra cosa que la opción para recorrer el
camino que permitiera a las FF.AA. dejar de ejercer
directamente -como institución- la función de gobernar;
cuestión ésta que, por cierto era bastante

CLXXVI
“comprometedora”. La salida electoral surgió entonces
como una necesidad.
Dicho de otra manera, era una propuesta para lograr
que el gobierno deje de estar “sentado directamente y
únicamente sobre las bayonetas”. En pocas palabras, puede
decirse que la Dictadura Militar se vio obligada a convocar a
elecciones y, en esas circunstancias, buscar el logro de un
acuerdo que se exprese en el llamado “gobierno de
transición y consolidación”, un gobierno que resulte del
Gran Acuerdo Nacional (G.A.N.); su eje debía ser,
forzosamente, el acuerdo alrededor de un programa cuyos
lineamientos generales fueron los que, en su momento,
levantara la “Hora del Pueblo” (Agrupación integrada por
Justicialistas, Radicales, Demo-progresistas, Conservadores
Populares, Bloquistas de San Juan y algunos socialistas).
El GAN, propuesta política por cierto bastante más
compleja que la simple salida electoral con banderas de
juego limpio -que era sólo su apariencia-, tuvo entre sus
componentes fundamentales:
 La propuesta de salida electoral.
 La bandera de los presuntos atributos no proscriptivos
de la misma.
 Un acuerdo interburgués, pero no en general sino muy
concreto entre la mayor parte de las cúspides militares y
las cúspides de las fracciones políticas representadas a
nivel de la Hora del Pueblo -muy especialmente-, el
peronismo paladinista y el radicalismo balbinista.
 CONDICIONAMIENTO REAL de esa SALIDA ELECTORAL.
Los sectores de la Hora del Pueblo que estaban
dispuestos a pactar con las cúspides militares tras el
acuerdo que el GAN presuponía, no demostraban ser
capaces de canalizar tras de si a la clase obrera. Ésta
esperaba algo distinto. Este hecho fue percibido claramente

CLXXVII
por Perón y el Justicialismo, de tal modo que se constituyó
en el ingrediente fundamental que obligó al peronismo a
virar hacia una nueva alianza política: el Frente Cívico de
Liberación Nacional -FRECILINA-, que luego se profundizó
dando lugar a la aparición del Frente Justicialista de
Liberación -FREJULI- y su Programa de Reconstrucción
Nacional.
Que el peronismo percibió, en su momento, el fracaso
de la Hora del Pueblo para canalizar las diversas
aspiraciones, lo expresó claramente el propio Perón en su
documento “La única verdad es la realidad” -base de
constitución del FRECILINA- al decir: “entre tanto en el país
se advertía una marcada discordancia entre las bases y la
actividad de las direcciones partidarias, porque mientras
algunos dirigentes... se mantienen dentro de los moldes de
la rutina y la pura formalidad procurando acuerdos
orientados hacia la faz política, social o exclusivamente
electoral, las masas se abstienen de seguirlos, los miran con
indiferencia y espontáneamente se suman a la propuesta
diaria contra la falta de trabajo y la insuficiencia de
salarios”. (14)
Por cierto que Perón sabía muy bien que no eran
“acuerdos sin contenido” en las cúspides. Esos acuerdos
tenían un contenido muy explícito en el programa de La
Hora del Pueblo, que expresaba la alianza de sectores de la
gran burguesía industrial con la burguesía comercial
exportadora - importadora y la burguesía proclive a la
estrategia del capitalismo norteamericano. El viraje del
caudillo justicialista fue el viraje de la exigencia de un
programa nacional - desarrollista, tendiente a aliviar algo la
situación económica y que presuponía atacar a quienes
“intentaban” mantener en vigencia la política económica
social, continuación de la inaugurada por K. Vasena. En
otras palabras, es el proletariado el que obligó a virar

CLXXVIII
comenzando con ello a romper esos primitivos “acuerdos”
sin contenido en las cúspides, so pena de que le siga
correspondiendo “la indiferencia popular” y se geste “otra
conducción táctica de conjunto”. La Hora del Pueblo y el
FREJULI fueron dos alianzas programáticas de direcciones
políticas de la burguesía, pero de ninguna manera
constituyeron la misma cosa.

III. 3.2.- La Convocatoria

“Asamblea Obrera en San Lorenzo”, tituló el diario La


Tribuna de Rosario para informar que “La Comisión
Intersindical Zonal de Gremios de San Lorenzo y zona de
influencia, dio un comunicado en el cual anuncia que ha
resuelto paralizar las actividades el 29 del corriente y
realizar una Asamblea Obrera”; y agregaba que, “como es
norma de la organización, la medida resuelta por la
dirección del nucleamiento, deberá ser ratificada,
modificada o rechazada por la decisión de las asambleas
gremiales”. (15)
Las reivindicaciones por las cuales se convocó a la
Asamblea Obrero - Popular fueron:
1.- Por la reincorporación de los cesantes en el
Establecimiento Aceitero INDO de Puerto San Martín, la
desocupación policial de la fábrica, y la inmediata
normalización de ese Gremio.
2.- Por la reincorporación de los despedidos en los últimos
cinco años, en todas las empresas de la zona, y la
eliminación de las empresas contratistas.
3.- Contra la carestía de la vida, por un aumento general de
emergencia, y la inmediata rediscusión de las cláusulas
salariales.

CLXXIX
4.- Por la rebaja de la edad jubilatoria a 55 años de edad.
5.- Por la derogación de la Ley de Alquileres; suspensión de
todos los desalojos en curso, y toda legislación que
afecta los intereses de la clase trabajadora. Cancelación
de los impuestos municipales que afectan a los frentistas
propietarios de no más de una vivienda, y que viven de
su propio trabajo.
6.- Por la derogación de las leyes represivas (estado de
sitio, pena de muerte, etc.). Por la libertad de los presos
gremiales, políticos y estudiantiles. Por la disolución de
las bandas fascistas, y la investigación pública de los
crímenes cometidos que intentan intimidar a los mejores
combatientes populares. Por la inmediata libertad y
reaparición pública de Mirta Maestre, Centeno, Martins, y
otros.
7.- Por la conquista de una nueva y verdadera democracia,
y contra los golpes en danza cuyos intentos son tan o
más antiobreros que los que hemos soportado en los
últimos años.
Señalaban además, los dirigentes de la Inter, “que se
sentían responsables de enfrentar el asfixiante alza del
costo de vida, que ha anulado ya los aumentos otorgados
en las últimas discusiones de convenios colectivos de
trabajo, y resulta imposible permanecer pasivamente sin
hacer nada, hasta abril de 1972, fecha en que recién será
posible volver a discutir los aumentos salariales”.
Finalizaban haciendo un llamado a la clase obrera y al
pueblo para “expresar en la misma libremente sus
opiniones y voluntad, y también a los representantes
obreros, que con su acción concreta hayan demostrado ser
fieles defensores de los intereses populares, para que
expresen sus opiniones y transmitan su experiencia”. (16)
Fue ese un momento importante en la vida de la
organización, por el carácter obrero - popular de la

CLXXX
Asamblea, las reivindicaciones planteadas, y las
repercusiones en la clase obrera de la zona, en los partidos
políticos y en los ámbitos gubernamentales provinciales y
nacionales.
Juan Dowling nos aclaraba que la iniciativa se debía
además a que “Lanusse estaba orquestando una salida a la
dictadura, negociando con Perón la realización de un Gran
Acuerdo Nacional, el famoso GAN. Las paredes de la zona
industrial y de Rosario fueron cubiertas por pintadas con
consignas anti - GAN, contra los golpes y falsas
democracias, Democracia Obrera”. Remarcándonos que por
otro lado, un acontecimiento latinoamericano -el transitorio
gobierno de Torres en Bolivia, con su Asamblea Popular- fue
fuente de inspiración y ponía “a la orden del día” entre esa
militancia de izquierda, la forma de democracia directa. (17)
El origen de la convocatoria partió de miembros y
simpatizantes del Socialismo Revolucionario, decidiéndose
realizarla luego de discutirse en el SOEPU, en la Intersindical
y en los distintos Gremios. Por su parte, los miembros del
Peronismo de Base apoyaron la propuesta, ya que también
reivindicaban la promoción de Asambleas como máxima
expresión de decisión y donde poder manifestar y coordinar
todos los conflictos en lucha. (18)

III. 3.3.- La Asamblea y la Represión


por parte
del Comando del II Cuerpo de Ejército

Luego de realizar paros de dos horas por turno en las


distintas fábricas, los obreros se dirigieron al local del
SOEPU. A la medida no adhirieron los Gremios de la
construcción, metalúrgicos y petroleros, como los de los
Establecimientos Delta e Indo de Puerto San Martín.

CLXXXI
El Comando del Segundo Cuerpo de Ejército
implementa el Operativo “Mónica”, para reprimir la
Asamblea, con despliegue de Gendarmería y Policía
Provincial por toda la ciudad de San Lorenzo y zonas
aledañas. Con carros de asalto y vehículos militares se
rodeó el local del SOEPU y, con el apoyo de helicópteros, se
controlaba el desplazamiento de los contingentes obreros.
Además, se dispuso el oscurecimiento de la zona y con la
complicidad de la Empresa de Transporte “Coordinadora
San Lorenzo”, que sus-pendió la parada frente al Sindicato,
detuvieron a más de cien militantes, entre ellos al
Secretario Adjunto del SITRAC - SITRAM de Córdoba, Juan
Vizzi, y a otros gremialistas cordobeses que concurrían
como invitados.
A pesar de la represión, más de cien obreros y
militantes políticos realizaron la Asamblea. En ella, hicieron
uso de la palabra -entre otros- los dirigentes Juan Acevedo
(Duperial), Néstor Moglia (Soepu) y Juan Orso (Químico
Papelero), quienes repudiaron la represión policial; y un
delegado de la construcción de Rosario, perteneciente a la
Agrupación de la tendencia Clasista “1º de Mayo”,
condenando los sucesos, expresó: “Mientras se habla de
legalidad y de elecciones, no se permite la realización de
actos sindicales y se detiene a los trabajadores por el
delito de reclamar más justicia social, la libertad de sus
presos y mejoras económicas”. (19)
Antes de finalizar la Asamblea, se dio lectura a las
adhesiones recibidas, que abarcaron un amplio arco político
que iba desde el MID, UCRP, Sindicato Obreros Mosaistas,
MUCS, el Encuentro Nacional de los Argentinos, hasta todos
los partidos de izquierda.
Finalizada la Asamblea, con la firma de los dirigentes
Juan Acevedo, Vicente Manuelo y Raúl Orso -miembros del

CLXXXII
Secretariado de la INTER-, se dio a conocer un comunicado
sobre lo acontecido:
“1) Los paros programados para el jueves 29 de julio, se
cumplieron en su totalidad. 2) La Asamblea Obrero -
Popular, programada como acto central, se realizó no
obstante la represión desatada por la policía. Se detuvo a
muchos obreros, estudiantes e incluso dirigentes gremiales
que viajaban en vehículos automotores de pasajeros. 3)
Siguen en pie los reclamos y puntos por los cuales esta
Intersindical ha convocado a la Asamblea Obrero - Popular.
4) Están detenidos tres dirigentes del Sindicato SITRAC -
SITRAM de Córdoba, que habían venido a San Lorenzo a
participar de la Asamblea...”.
“La Intersindical, visto los puntos 3 y 4 principalmente en
lo que se refiere a los estudiantes y dirigentes cordobeses
aún presos resuelve: Convocar a asamblea general a
todos los gremios para el lunes próximo, con el objeto de
discutir y resolver como único punto medidas de fuerza a
adoptar en reclamo de la libertad de todos los detenidos el
29 de julio.” (20).
En Córdoba, cesaron sus actividades los trabajadores
de FIAT y MATERFER, reclamando la libertad de los
Dirigentes del SITRAC - SITRAM detenidos en el Operativo.
Ante la amenaza de parar en toda la zona industrial, se
liberó a todos los encarcelados.
Por su parte los Petroquímicos, a través de su Boletín,
repudiaron lo sucedido con este artículo: “Nuestra
Institución no está para la represión indiscriminada, Gral.
Lanusse”, en el cual expresaron que:
“El SOEPU, condena la represión policial, en la Asamblea
Obrero Popular realizada en nuestro Sindicato el 29 de julio.
Una vez más, hemos sido objeto de la persecución y
represión por parte del Gobierno que reclama el GRAN

CLXXXIII
ACUERDO NACIONAL. Dirigentes de nuestro Gremio, como así
también compañeros del SITRAC - SITRAM invitados al acto y
numerosos obreros y estudiantes fueron detenidos. La
Intersindical, el viernes 30 dispuso la convocatoria
inmediata a Asamblea de base, para tomar urgentes
medidas de fuerza, que quedaron sin efecto al quedar todos
los detenidos en libertad.
“Es indudable que mientras en los hechos la dictadura
encarcela y asesina a todos aquellos que luchan por la
liberación nacional, muy lejos estamos de jugar el partido
del gobierno. Expresamos nuevamente nuestro enérgico
repudio a la represión policial y señalamos que hechos como
éste, lejos de intimidarnos, nos vigorizan para continuar en
la lucha del pueblo y jugar el gran partido de los
trabajadores. Las reivindicaciones planteadas siguen en
pie.” (21).

III. 4.- El Conflicto de la Aceitera


de Molinos Río de la Plata

Entre marzo y abril de 1972, Molinos Río de la Plata,


empresa de Bunge y Born, decidió levantar la fábrica de
aceite comestible de San Lorenzo, que ocupaba a más de
trescientos obreros y empleados. Los motivos esgrimidos se
referían a concentrar el total de la producción en una
fábrica de Avellaneda (Provincia de Buenos Aires) -zona con
mayor mercado- donde ahorrarían gastos de flete, con
puerto de salida al mar, siendo el argumento más utilizado
la escasez de semillas de girasol -dadas las malas cosechas
de los últimos años-, responsabilizando al Gobierno

CLXXXIV
Provincial de no haber incentivado la elaboración de dicha
materia prima.
Ante esa situación, los Gremios de la zona fijaron su
posición y denunciaron:
“1.- El cierre de la fábrica Molinos Río de la Plata de San
Lorenzo, con la secuela de desocupación que trae
aparejada.
“2.- Las menciones de cierre o traslado de otras fuentes
de trabajo de la zona industrial, según propias declaraciones
del Gobernador de la Provincia, Gral. Sánchez Almeida, del
22-2-72.
“Frente a este desolador panorama, los Gremios agrupados
en la Intersindical de Gremios resolvemos: Convocar a las
comisiones directivas e internas, cuerpos de delegados y
activistas de todos los sindicatos de la zona a una reunión,
para debatir la difícil situación creada en todo el cordón
industrial y su zona.” (22).

En dicha Asamblea, se elaboró un Plan de Lucha que


comenzó con paros escalonados y en aumento, los días 24,
27 y 29 de marzo. Aquí cabe una aclaración: La efectividad
de los mismos fue casi total; de los tres días de paro, sólo el
último no paró Cerámica San Lorenzo, y fue la única fábrica.
Los obreros de dicho Establecimiento venían de sufrir una
derrota en el año ’69, cuando fueron despedidos todos los
delegados y activistas sindicales. Además, los reclamos se
extendieron a la reincorporación del Secretario General del
Sindicato de Ceramistas, solicitando a la CGT Rosario la
convocatoria a un plenario general.
Por otra parte, en el Sindicato de Obreros y
Empleados Aceiteros, se realizó una Asamblea con la
participación de organizaciones sociales, los miembros de la
Unión Comerciantes e Industriales de la zona, y los partidos

CLXXXV
políticos UCR, PJ, UDELPA, FIP, PC, P. Obrero Trotskista. En la
misma, los miembros de la C.D. de los Aceiteros expusieron
las cifras de las ganancias de la Empresa de Molinos, que no
justificaban la clausura del establecimiento; se denunció
que las oleaginosas destinadas a esa fábrica eran desviadas
hacia las nuevas instalaciones de Avellaneda (Buenos
Aires), y que se trataba de destruir el Movimiento Obrero, a
cuyos dirigentes les ofrecieron “indemnizaciones siderales”.
El Secretario del Gremio planteó distintas opciones, como la
nacionalización de la fábrica y ponerla en manos de los
trabajadores, descartándose la posibilidad de una empresa
mixta. (23)
La CGT Regional Rosario dispuso el estado de alerta
de los gremios de la zona y realizó gestiones formales
ante los directivos de la Empresa y el Gobernador de la
Provincia. El conflicto se extendió a otros sectores, y fue así
que la Unión Comerciantes e Industriales del Departamento
San Lorenzo reclamó ante el Gobernador General Guillermo
Sánchez Almeyda. (24)
Por su parte, Bunge y Born planteó la estrategia de
presionar individualmente a cada obrero y a sus familias,
enviando una carta a todos los operarios con distintas
promesas, como ofreciéndoles el traslado a la otra Planta,
pero sin aclarar si había vacantes y con sueldos inferiores al
del Convenio de Molinos San Lorenzo (25). Las
indemnizaciones ofrecidas eran las que correspondían por
ley, “salvo a los obreros mayores de 40 años, a los que se le
otorgó un porcentaje mayor. Aquí estuvo la tentación de
algunos obreros próximos a jubilarse y de otros más
jóvenes, que el mismo día del paro de tres horas, cobraron
alrededor de diez, y otros cincuenta comenzaron a
tentarse”. (26)
Ante la nueva situación, la Intersindical dio un
comunicado donde planteaba que, “a pesar de la

CLXXXVI
indemnización a sesenta obreros, la lucha debe continuar en
defensa de la fuente de trabajo”, destacando la “disciplina
gremial observada durante los paros por turno efectuados
los días 24, 27 y 29 de marzo ultimo”. (27)
A partir de ese momento, el conflicto cambió por
completo; todos los trabajadores se sumaron al cobro de las
indemnizaciones, la fábrica cerró y fue trasladada.
Los Petroquímicos comentaron críticamente lo
acontecido.
“Aquí la Inter, con la bandera de la defensa de la fuente de
trabajo, y del deseo de las direcciones sindicales de
brindarles toda la solidaridad posible que surja de sus bases,
tendría que haber ido a hablar al resto de los obreros
aceiteros en la puerta de fábrica o en una asamblea, para
detener el cobro de la indemnización y alentarlos a seguir
luchando o por lo menos para evaluar el estado de ánimo y
la intención de los interesados. Además denunciar a los
obreros y a la opinión pública las falsas promesas de
Molinos. Pero todo esto se dejó sólo en manos del Sindicato
Aceitero, se llevó el problema a la CGT y se esperó a ver si
las indemnizaciones se seguían cobrando o no. Y aquí
fracasó el movimiento. Los más viejos, los que tenían otro
trabajo y los menos combativos, cobraron, desconcertando
al resto de los trabajadores. En una asamblea reciente (8-4)
con la presencia de la CGT y de los 4 miembros de la
Intersindical, los obreros aceiteros decidieron el cobro de la
indemnización y el abandono de la lucha. Debemos estar
orgullosos. Los obreros que luchamos y pedimos salarios, no
podemos dejar de estar orgullosos de la solidaridad
brindada”.
Y agregaron:
“Cinco mil obreros de la zona industrial dieron su apoyo a
Molinos, y esto tiene mucho valor, a pesar que no haya

CLXXXVII
conseguido que la planta no cierre. El error fundamental lo
tenemos en el miedo de algunos y la poca confianza de
otros a la Democracia más amplia y posible. Es necesaria la
participación directa de los delegados y miembros de
Comisión en la discusión de los problemas y la toma de
decisiones a proponer a las bases, en un primer paso para
democratizar más la Intersindical.”
Y como conclusión, expresaron que:
“Como consecuencia del cierre de Molinos se da un hecho
insólito e inconcebible. El gobierno dice querer combatir la
desocupación (10 %). También dice necesitar crear fuentes
de trabajo para lograrlo. En la zona hay más de mil
desocupados o trabajadores changarines y queda una
fábrica rentable cerrada, por conveniencia de un patrón.
Porque la semilla se podía importar, o bien trabajar con
‘soya’ (el aceite de soya tiene copado el mercado mundial),
cuyas cosechas en Argentina están en marcha. Ahora bien,
pero aquí saltan las contradicciones de la ‘libre empresa’,
con los intereses populares: Si Molinos produciría aceite en
San Lorenzo, además de Avellaneda, la producción podría
superar la demanda con la consiguiente baja de los precios.
En cambio, cerrando Molinos, regula la producción de
Avellaneda de tal manera de producir lo justo para
mantener altos precios que le signifiquen a Bunge y Born
enormes ganancias con menores esfuerzos. Mientras, el
aceite tiene un elevado precio que podría ser bajado y
quedan trescientos trabajadores en la calle. ¿No es esto una
violencia legal?”. (28).
Varios protagonistas destacaron otros factores
negativos como “la represión al conflicto que alcanzó a
algunos delegados combativos de la Aceitera que fueron
detenidos por algunas horas, y una reunión en donde los

CLXXXVIII
burócratas de la CGT Rosario negociaron con los Gerentes
de Bunge y Born”.

III. 5.- Breve Balance de la Intersindical

Como planteáramos anteriormente, la coalición


gremial surgió como una organización defensiva y solidaria,
producto de la situación del movimiento obrero regional y
los importantes conflictos perdidos. Posteriormente, esta
instancia resultó efectiva a los intereses obreros de la zona
industrial de San Lorenzo por diversos motivos, entre ellos,
que no se produjeron despidos durante su existencia, por la
solidaridad brindada, por el ejercicio de la democracia en las
comisiones internas, sindicatos y asambleas fabriles e inter-
fabriles, además del saldo en experiencia, que volvió a
tomar cuerpo en la Coordinadora de Gremios en Lucha de la
Zona Norte del Gran Rosario en 1975. En los últimos años,
con las numerosas luchas que tuvieron lugar en la zona,
fueron varios los intentos de recrear la experiencia ante la
ofensiva de las patronales.
Creación y alianza defensiva sumamente
democrática. Su primera lucha fue ofensiva, pidiendo
elecciones libres en un sindicato de la zona, y fue creciendo
hasta la convocatoria a la Asamblea Obrero - Popular con
planteos que fueron desde los de carácter reivindicativo en
el plano económico hasta los políticos, cuando se
pronunciaron contra todo tipo de golpe de estado, por la

CLXXXIX
ampliación de las libertades democráticas y “contra los
golpes y falsas democracias, por la democracia obrera”. (29)
A partir de marzo - abril de 1972, luego del conflicto
por el cierre de la Aceitera Molinos Río de la Plata, comenzó
el debilita-miento y extinción de la organización. En esa
contienda “que golpeó fuerte al movimiento obrero de la
zona por la solidaridad brindada a los obreros de la aceitera
y la traición de algunos dirigentes y obreros de base y de la
CGT, la Intersindical comenzó a perder fuerza”, según la
opinión de varios militantes y delegados entrevistados.

Además, se sumaba la situación en que se hallaba la


clase obrera y el gremialismo clasista y combativo post
1973 fue otro factor debilitante, que bien describe Daniel
James cuando plantea: “Para la oposición sindical interna,
es decir la ‘clasista’, la situación fue más compleja. La
disociación entre el plano de la lucha social y el plano de
la lealtad política en las bases peronistas, que se había
notado antes de 1973, se convirtió en factor crítico en los
años posteriores e influyó profundamente sobre el
desarrollo del movimiento sindical opositor”. (30)
Por último, otros hechos fueron destacados en las
publicaciones obreras y en todas las entrevistas realizadas a
integrantes de esa Organización Gremial: En el primer
semestre de 1973 fallecieron en circunstancias poco claras
dos Secretarios Generales de los Gremios hegemónicos -el
Sindicato Químico de San Lorenzo y el SOEPU-, el “Negro”
Acevedo y Néstor Moglia, obreros combativos, clasistas y
fundadores de la INTER. Además, fue trasladado a Buenos
Aires para ocupar un cargo en la Federación Ceramista, el
dirigente Moreira, por persecución debió emigrar Samuel
Dangelo, y la represión aumentó sobre gremialistas,
militantes y obreros de la zona.

CXC
CXCI
CAPÍTULO IV

LA LUCHA POR LA CAPACITACIÓN

CXCII
Y LA ROTACIÓN DEL TRABAJO

CXCIII
IV.- La Lucha por la Capacitación
y la Rotación del Trabajo

Desde el Boletín del SOEPU, se encaró la problemática


de la organización del trabajo en PASA con una serie de
artículos, el primero de los cuales -titulado “Escalafón?,
Nuevas Categorías?, Ascenso por Permanencia en
Categoría?”- planteaba:
“Hay operarios que hace que están en la misma categoría,
haciendo siempre el mismo trabajo, rutinoso, mecánico,
embrutecedor. Y es justo algún cambio para aquel que hace
años, hace casi siempre lo mismo. Maneja las mismas
máquinas, saca las mismas muestras, opera en las mismas
válvulas, etc.
“Ese cambio tiene algo de necesidad de que el operario
sea motivado por un ascenso, y mucho de una indiscutida

CXCIV
necesidad de ganar más plata. Algunos lo encaran en forma
incorrecta:
“Unos quieren que se creen más categorías. Por ejemplo
los “A” plantean la Ac, como el mantenimiento. Pero a
cambio de ello qué tendremos que dar? Los “B” y los “C”
querrán la “B1” y “C1” y así sucesivamente hasta llegar
dentro de algunos años a pedir que se inventen otras
nuevas categorías, cansados de permanecer nuevamente
estacionados.
“Otros reclaman el ascenso por permanencia en el puesto,
porque realmente para promoverse hay que esperar que se
produzca una vacante por muerte o por renuncia (cosas
poco probables porque la mayoría del personal es joven y la
desocupación existente y la falta de trabajo nos obliga a
permanecer aquí).
“El camino que se busca creemos que tiene dos facetas:
a) de la plata (mejores salarios), que es un problema que
afecta no sólo a los obreros petroquímicos, sino a toda la
clase obrera y que debe ser resuelto por una accionar
conjunto de todos los trabajadores.
b) de las promociones o ascensos, buscándose algún tipo
de movilidad de categorías (como hay en
Mantenimiento, se dice) que no permita sacar más
sueldos y nos dé algún aliciente en el trabajo.” (1).
Durante enero de 1972, los integrantes del SOEPU
resolvieron un quite de colaboración a la Empresa en
reclamo de diversas mejoras. La aplicación de esa medida
trajo como consecuencia que varios obreros fueran
suspendidos por no realizar tareas fuera de su categoría u
oficio. El Gremio salió en defensa de los mismos, parando
para que les fuera levantada la sanción, lo cual se
consiguió. El Departamento de Trabajo llamó a conciliación
y se constituyó una Comisión Paritaria de Interpretación del

CXCV
Convenio Colectivo de Trabajo, para analizar los alcances
del Artículo 4º (personal comprendido, categorías del
mismo).
La discusión de esa problemática llevó a los
Petroquímicos a una lucha por dos reivindicaciones
fundamentales dentro del ítem “Capacitación y Rotación del
Trabajo”: mejoras salariales y movilidad de categorías. El
debate se dio en las distintas Secciones de fábrica, en el
Sindicato, en Asambleas; duró alrededor de dos años y
culminó con la redacción de un Anteproyecto para discutir
con la patronal en paritarias.
En dicho documento, los obreros petroquímicos
explicitaron -entre otras cosas- su oposición a las formas de
organización del trabajo en la fábrica: la división en
jerarquías (peón, ayudante, medio oficial, oficial, oficial
especializado), el hecho que la distribución del trabajo
estuviera a cargo de la patronal, y la división por oficios (34
en PASA).
A la vez, destacaron que “la revolución científico -
técnica le planteó problemas muy serios al movimiento
obrero: cuanto más se perfeccionó la máquina más perdió
el obrero su especialización; además cobró relevancia el
mantenimiento, en desmedro de la producción; por último
quien controla o dirige la máquina debe poseer una
capacitación superior”. Puntualizaron además: “...He ahí
nuestros problemas: Conservación (o Mantenimiento) y
Control o Dirección de la Máquina (u Operaciones). En
nuestro caso, la cuestión puede verse mucho más
fácilmente ya que en la industria petroquímica, la máquina
no ha suplantado a ningún artesano. La industria
petroquímica es una creación misma del progreso científico
- técnico y en él todo es nuevo: el Mantenimiento y las
Operaciones. De acuerdo a lo señalado, tanto el
mantenimiento como las operaciones requieren de los

CXCVI
obreros una capacitación infinitamente superior a la
capacidad media exigida anteriormente en la industria, y la
que se exige, aún hoy, en gran parte de la industria.” (2).
Se cuestionó la estructura jerárquica de la
organización del trabajo que impide el progreso de los
obreros a través del ascenso, lo que trae aparejado dos
problemas fundamentales: la cuestión del salario y el hecho
que los trabajadores se pasan años realizando la misma
rutinaria tarea, privándolos de una de las experiencias más
ricas de la vida: el aprendizaje.
Por su parte, la patronal fijó su posición en estos
puntos:
“a) En Mantenimiento los obreros tienen como oficio el
‘mantenimiento’, o sea que la empresa puede contratar al
personal de mantenimiento p/la realización de los 34 oficios
que señala el Art. 4º inc. ‘A’ del C.C.T. (Contrato Colectivo de
Trabajo)
“b) Sin embargo, son calificados o jerarquizados de
acuerdo a su habilidad en un solo oficio.
“c) El menoscabo material no existe. El menoscabo moral
es la realización de tareas subalternas o de otro oficio.
“d) Se pueden encomendar tareas de otro oficio, siempre
que las necesidades de distribución, organización, vigilancia
o mantenimiento de la disciplina -facultades patronales- así
lo requieran, de acuerdo a su propio criterio. De esa manera
se podría dar este caso: un hombre “con especialidad en 34
oficios pero no con suficiente habilidad para ser considerado
oficial en ninguno de ellos”, cobraría como medio oficial,
mientras que un oficial con un solo oficio, cobraría más
que aquel. Otro caso: de acuerdo a las necesidades
patronales cualquier obrero está obligado a realizar tareas
de cualquier tipo. Las tareas que realizan fuera de su oficio,
deberán ser realizadas con la habilidad de su categoría, so

CXCVII
pena de tener que caer bajo la calificación de “subalternas”
y por ende de menoscabo moral. Pero entonces entraría en
la “urgencia” que es el elemento que resuelve todo: porque
ella es la “arbitrariedad” patronal erigida en ley EN la
fábrica.” (3).
El SOEPU, en cambio, sostuvo que:
“a) El obrero es contratado por un oficio y clasificado de
acuerdo a su capacidad en ese oficio.
“b) En consecuencia, no puede ser destinado a la
realización de tareas ajenas a su categoría y oficio. El
menoscabo moral, que lo es para el Convenio, aún cuando
así no lo consideramos en nuestra organización sindical y en
el trato con los demás compañeros, ya que somos firmes
defensores de la igualdad, lo impide. No fuimos nosotros los
que impusimos este modo de organización de la producción
en PASA.
“c) La urgencia es sinónimo de emergencia: riesgo en las
instalaciones o la vida de personas y no necesidades de
mayor rendimiento económico de la empresa, en cuyo caso
-y lo hemos demostrado- hacemos cualquier cosa y hasta lo
imposible.” (4).
Además, los Petroquímicos plantearon que si el
personal de Mantenimiento fuera contratado para la
realización de las tareas correspondientes a la totalidad de
los oficios señalados en el Inciso ‘A’ del Artículo 4º del
Convenio, se derivarían las siguientes consecuencias:
 El personal estaría obligado a la realización de tareas
correspondientes a los 34 oficios allí contemplados y sus
varias especialidades.
 El personal debería estar categorizado -oficial, medio
oficial, etc.-, de acuerdo al dominio de todos los oficios y
no sólo de uno de ellos. (Esto va contra el espíritu mismo

CXCVIII
del Convenio, que fija por ejemplo, al medio oficial como
aquel “que tiene una especialidad”). El derecho al salario
del obrero es la contraprestación de la puesta a
disposición del patrón de su fuerza de trabajo, y si el
patrón se ha reservado el derecho de “organización y
distribución de trabajo” (Artículo 79) podría, en
consecuencia, exigir al obrero la realización de tareas de
cualquiera de los 34 oficios del Inciso ‘A’. La defectuosa
realización de la tarea encomendada daría derecho al
patrón a rescindir el contrato sin abonar indemnización
de ninguna naturaleza.
El SOEPU resaltó que no existía ningún obrero que
dominara los 34 oficios, y la posibilidad de despido era una
amenaza permanente para todos los Petroquímicos, pues
bastaba encargar una tarea de un oficio que el operario no
pudiera realizar para que fuese cesanteado. Naturalmente
era posible argumentar -como lo hacía PASA- que estaba de
por medio el Artículo 6º referente a los cambios de labores,
y que con los elevados salarios que se pagaban, nadie iba a
encargar a un especialista trabajos “subalternos”, salvo en
casos de urgencias; fuera de esos momentos, no se permitía
la sustitución si ello significaba al obrero menoscabo
material o moral.
Los Petroquímicos argumentaron que “el menoscabo
material no puede existir -si entendemos por tal a la
disminución de salario- ya que el Artículo 4º, más los
Artículos 8º y 41 no permiten la rebaja del sueldo por la
realización de una tarea correspondiente a una categoría
inferior; la jurisprudencia en la materia, que es unánime, ha
determinado lo mismo. En lo referente al menoscabo moral,
reiteradamente el SOEPU ha sostenido que no existe trabajo
indigno como en épocas anteriores (los enterradores, por
ejemplo, eran excluidos de la sociedad en la práctica, y
durante muchos años ocurrió lo mismo con los actores de

CXCIX
teatro que eran considerados como especie de bufones). La
Constitución Nacional que establece la igualdad de los
hombres ante la Ley -Artículo 16-, en su Artículo 14 Bis
-sancionada en la Convención de 1957- establece que “el
trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de
las leyes…”. Si se protegen las diversas formas de trabajo,
está claro que no existe ninguna de ellas que pueda ser
considerada como algo que implique menoscabo moral. Por
otra parte, el SOEPU en sus Estatutos no establece
distinción de ninguna naturaleza entre sus afiliados, y
menos aún distintos derechos en función de la ‘jerarquía’ de
los trabajos o las categorías de los compañeros (en épocas
anteriores sí ocurría, en la Edad Media, sólo los maestros
participaban en las decisiones de las corporaciones de
oficios, quedando excluidos los oficiales y los aprendices)”.
(5)

Sin embargo, y pese a las disposiciones


constitucionales y al juicio de la parte obrera, el Artículo 6º
mantenía el principio del menoscabo moral, ya que ese
concepto no podía ser interpretado de otra manera que no
sea aquélla, que entendía como la realización de tareas
“subalternas”, o sea trabajos que correspondían a un
inferior jerárquico, y a partir de esa interpretación el primer
párrafo del Artículo 6º era claro: no se puede destinar al
obrero a realizar faenas fuera de su especialidad o
“jerarquía”, porque precisamente de acuerdo a ese criterio
la ejecución de esos quehaceres subordinados implica un
daño moral. Ese era el parecer adoptado en el Convenio
Colectivo de Trabajo Petroquímico.
Mientras, la patronal entendía por “urgencia” todo
aquello que consideraban conveniente para la producción,
distinguiéndola de la “emergencia”, que es aquella que
pone en riesgo inmediato las instalaciones o la vida de las
personas.

CC
A la vez, en esos días, los Petroquímicos discutieron
sobre la organización del trabajo. Se planteó -para
comprender lo expuesto- que era necesario recordar,
aunque sea brevemente, las características del régimen de
organización del trabajo propio del sistema capitalista hasta
la revolución científico - técnica:
“La primera característica es la jerarquización del personal.
En este sentido se retoman en el convenio colectivo de
trabajo los criterios del modo de producción de las
corporaciones de oficio: maestro, peón, ayudante, medio
oficial, oficial. Por razones que en otra oportunidad
trataremos, los patrones incorporan nuevas categorías:
oficial especializado, oficial especializado ‘C’, etc..
“La segunda característica es que la distribución y
ordenamiento del trabajo corresponden en exclusividad a
los patrones, así como el ‘poder disciplinario’.
“La tercera característica, estrechamente relacionada con
la primera, es la división por oficios (la que a su vez
determina -en algunos lugares- el tipo de organización
sindical).
“La cuarta y última era que el trabajo es utilizado
directamente, en un porcentaje abrumadoramente
mayoritario para la producción, antes que para el
mantenimiento de los instrumentos de producción;
podríamos decir -a título de ejemplo- que sobre 100 horas
de trabajo, 90 eran para la producción y 10 para el
mantenimiento o reparación de los instrumentos de trabajo,
y siempre teniendo en cuenta, que en muchos casos la
reparación corría por cuenta del mismo obrero que utilizaba
el instrumento. Con el avance de la legislación social o
laboral, consecuentemente con la creación jurídica del
‘contrato de trabajo’ y principalmente con el
establecimiento de la ‘indemnización por despido’

CCI
(productos todos estos del fortalecimiento de las
organizaciones sindicales), se faculta a los obreros a dar por
rescindido el contrato, con derecho al cobro de las
indemnizaciones correspondientes, cuando media una
modificación arbitraria y esencial del contrato de trabajo.
Por otra parte, correlativamente, es facultad de las
patronales dar por rescindido el contrato de trabajo ‘con
justa causa’, en la medida que el dependiente no cumpla
satisfactoriamente las tareas que se le encomiendan, y ante
tal caso no pagar indemnizaciones.” (6).
El sistema jurídico vigente desde la sanción del
Código Civil basado en el contrato tiene como principio la
“equivalencia de las obligaciones”; dicho de otra manera, el
cambio de valores de igual magnitud, quiere decir que lo
que constituye una obligación para el obrero es a su vez un
derecho para el patrón, y lo que establece una obligación
para el patrón instaura un derecho para el obrero, siendo en
dinero igual lo que se intercambia.
A la vez, el SOEPU analizó la realidad de la industria
petroquímica, destacando que el fenómeno de la revolución
técnica o científico - técnica ha suscitado problemas muy
serios para el movimiento obrero, subrayando el ejemplo
de Francois Barret -encargado de conferencias de la
Facultad de Derecho y de Ciencias Económicas de la
Universidad de París- quien analizaba el fenómeno de esta
manera: “Señalemos, sin embargo, que cuando más se
generaliza y perfecciona el empleo de la máquina, en mayor
medida pierde el obrero su especialización. En cierta forma la
tarea del obrero disminuye. La productividad del artesano
diestro es usurpada por la máquina. Ésta tiende cada vez más
a separarse e independizarse. Pero por su parte la máquina
exige para su conservación, técnicos cada vez más capaces. La
complejidad de su estructura y de su mecanismo necesita

CCII
que quien la controla y dirige posea conocimientos técnicos
cada vez más amplios”.
Por eso, los trabajadores expresaron: “Y he ahí
nuestros problemas: ‘Conservación’ (o Mantenimiento) y
control o dirección de la máquina (u Operaciones)”. Y en el
caso de ellos, la cuestión podía verse más fácilmente, ya
que en la industria petroquímica, la máquina no ha
suplantado a ningún artesano.
La industria petroquímica es una creación misma del
progreso científico y técnico; en ella todo es nuevo: el
mantenimiento y las operaciones.
De acuerdo a lo señalado, ambos procedimientos
requieren de los obreros una capacidad infinitamente
superior a la capacidad media exigida anteriormente en la
industria.
Por otra parte, se daba el fenómeno siguiente:
∗ OPERACIONES: Durante un largo período de la jornada de
trabajo, el obrero no ejercita directamente su fuerza de
trabajo. Es, desde este punto de vista, una jornada donde
el obrero en gran parte de la misma está vigilando el
funcionamiento.
∗ MANTENIMIENTO: Ocurre que los obreros altamente
especia-lizados suelen, por diversas causas, no tener
trabajo específico para su especialidad.
En ambos casos, se pretende ocupar ese tiempo de “no
trabajo directo” para la realización de tareas fuera de su
oficio o categoría: limpieza de las áreas de trabajo y de
las máquinas (en Operaciones), trabajo de ayudantes o
simplemente de peones en oficios ajenos a su
especialidad (en Mantenimiento). Es esta pretensión la
que va contra la ley. Quiere esto decir que, como
comentábamos, choca el modo de producción con las
disposiciones legales y convencionales objetivamente
contrapuestas, y en más de un caso se ponen en riesgo

CCIII
las instalaciones y la misma vida de las personas, al
insistir la patronal en su actitud.
A la vez, el Artículo 75 del Convenio puntualizaba que
“en atención al estímulo individual y colectivo que surge de
la debida capacitación del personal para promoverse a
puestos superiores y los beneficios recíprocos que de ellos
resulten, la empresa tratará de intensificar los medios
tendientes a facilitar a su personal deseoso de progreso,
mayores posibilidades de enseñanza y capacitación teórica
y práctica, de acuerdo a la índole de las respectivas
actividades”.
A partir de ese enunciado, surgen las siguientes
conclusiones:
∗ La capacitación es brindada en función de los ascensos
en la jerarquía. Ahora bien, como las promociones y su
aprendizaje previo son otorgados por la posibilidad de
cubrir vacantes ya, o en un futuro inmediato, la
formación tiene como límites las necesidades de
reemplazantes en la jerarquía. No existe oportunidad de
capacitarse sino para promoverse a puestos superiores;
sin esa contingencia, no hay ocasión de formarse. Y como
es inimaginable una fábrica de todos capataces que no
tengan a quien dirigir, sí es perfectamente imaginable
que la capacitación del Convenio está en función de una
minoría, y que esa minoría es la que mejor sirve a los
intereses exclusivamente patronales y no a las
aspiraciones y capacidad de los obreros.
∗ Los beneficios recíprocos, en consecuencia, deben
interpretarse como el aumento individual del salario del
obrero que se promueve y la cobertura de la vacante,
pero nunca partir de allí un aumento en el rendimiento
del trabajo.
∗ La enseñanza o capacitación teórico - práctica es
brindada en las “respectivas actividades” (¿será en los

CCIV
34 oficios al mismo tiempo?). Cabe concluir que no existe
posibilidad de capacitarse fuera de su especialidad pero,
eso sí, cuando hay una urgencia, trabajar fuera de la
especialidad es obligatorio.
Mientras que en el Artículo 78, ambas partes
acordaban en la necesidad de mejorar la productividad de la
industria petroquímica como un medio efectivo de optimizar
el nivel de vida de la población y, en tal sentido, arbitrarían
los medios que tiendan a lograr ese objetivo.
No existe forma de aumentar la productividad que no
sea partir del mejor aprovechamiento del trabajo, y éste
pasa necesariamente por la mejor capacitación del
personal. Ahora bien, esto está en contradicción con lo
expuesto anteriormente, pues la capacitación tiene como fin
el ascenso individual y la consecuente mejora salarial del
personal, pero -repetimos- individual; y por otra parte, la
mejora de la productividad irá a beneficiar el nivel de la vida
de la población en general y no de la población en
particular, o sea de quienes viven de los salarios que se
abonan en la industria: los obreros petroquímicos.
La C.D., en nombre de todos los obreros de PASA,
manifestó que “piensa que el progreso -que suele no ser
exactamente lo mismo que el aumento de la productividad-
no es un enemigo del movimiento obrero; muy por el
contrario, piensa que es el principal aliado. Y que las
posibilidades de educación y desarrollo de la personalidad
del hombre en general y de los obreros petroquímicos en
particular, son ilimitadas”. De esa forma de mirar el futuro
observamos:
1.- Que la capacitación de los obreros petroquímicos, no
puede tener como límite las necesidades patronales de
cubrir puestos jerárquicos vacantes o puestos jerárquicos
a crearse.

CCV
2.- Que si así fuera, de antemano existiría un número
-mayoritario- de obreros sin posibilidad alguna de
capacitarse y mejorar su situación económica. Que esto
significa condenar de antemano a la mayoría al
estancamiento de por vida, ya que no se concibe una
organización jerárquica donde las jerarquías superiores
sean numéricamente mayoría ante las jerarquías inferiores
(más capataces que obreros, por ejemplo).
3.- Que el aumento de la capacidad de la industria,
depende del progreso de la ciencia y de la capacidad de
los obreros (en ambos casos, progreso del hombre: del
científico y del obrero que fabrica la nueva máquina, o del
que opera o del que mantiene) y que ese progreso, tarde o
temprano, redundará en beneficio del conjunto de la
sociedad.
4.- Que la capacidad de los obreros petroquímicos sólo
tiene los límites que le impone la sociedad, y que en
consecuencia, en la medida que obtengamos posibilidades
de mejorarla mediante la enseñanza y el aprendizaje,
existe la seguridad del logro de los objetivos y en
consecuencia de una mano de obra de rendimiento
infinitamente superior.
5.- Que existen posibilidades de conjugar la enseñanza
teórica y práctica, no abandonando las tareas de la
fábrica, y que sólo la capacitación previa asegura una
mayor seguridad en las labores y un mayor rendimiento
en las mismas.
6.- Que bajo estas condiciones, capacitación previa y sin
límites para la educación, es posible producir un aumento
en el rendimiento del trabajo incalculable.
7.- Que en algunos oficios esto ha sido puesto en práctica:
caso de la brigada de lucha contra incendios. Y,
previamente a la producción, en el conjunto de

CCVI
‘operaciones’, donde la capacitación precedió en todos los
casos a la producción.
8.- Que de tal manera alguno de los aspectos que
determinan un mal generalizado, la frustración de que al
llegar a los 25 años en el trabajo, LA VIDA YA NADA TIENE QUE
OFRECERNOS MÁS QUE PERMANECER REALIZANDO SIEMPRE LAS
MISMAS TAREAS, LO QUE TERMINA POR VOLVERSE UN HECHO
MECÁNICO QUE NINGÚN ALICIENTE OFRECE A NUESTRAS
PERSONALIDADES, desaparecerá en parte.
9.- Que lo expuesto en el punto 8 es válido especialmente
para el personal de operaciones, donde la monotonía en el
trabajo, más la tarea de vigilancia durante la mayor parte
de la jornada, crean serios desequilibrios psíquicos.
Efectivamente, el hecho de vigilar y nada más que vigilar,
sin ocupar el tiempo en otra cosa, sumado al hecho que el
resultado del trabajo no sale directamente de sus manos (a
diferencia de los compañeros de mantenimiento), y a la
prohibición de cualquier tipo de distracción, ya que la
distracción pone en riesgo el proceso de producción,
termina por generar un serio desequilibrio en el
funcionamiento del sistema nervioso, el que a su vez
termina por producir lesiones orgánicas; la úlcera gastro-
duodenal es la más común junto a su antecedente
inmediato: la gastritis. La rotación en los trabajos,
consecuencia de la capacitación, será sin lugar a dudas un
factor importantísimo en la eliminación de este riesgo
mayor que atenta contra la salud de todo el personal de
operaciones y pone en riesgo el funcionamiento mismo de
la industria.
El Anteproyecto del SOEPU fijaba posiciones frente al
estímulo individual, al colectivo y a la productividad. Tanto
la Patronal como el Gremio coincidían en la necesidad de
mejorar la producción de la industria petroquímica, como un

CCVII
medio efectivo de mejorar el nivel de vida de la población.
El Sindicato planteaba que no existe forma de aumentarla
que no sea a partir del mejor aprovechamiento del trabajo y
éste debía pasar por la mejor capacitación de los obreros.
En definitiva, se propusieron para la discusión entre
todos los Petroquímicos, los siguientes ítems:
1.- Posibilidades de capacitación para todo el personal, sin
distinción de ninguna naturaleza en secciones u oficios
ajenos a su especialidad y con posibilidades de adquirir
conocimientos máximos en el nuevo oficio o sección.
2.- La capacitación se hará dentro de la jornada de trabajo y
con materiales y dictado de cursos a cargo de la patronal.
3.- En la medida que se obtenga el conocimiento
correspondiente, se abonarán los jornales de acuerdo a la
máxima jerarquía que se alcance hasta que llegue el día
en que desaparezcan las jerarquías.
4.- La enseñanza combinará la teoría con la práctica. La
primera estará a cargo de personal suficientemente
capacitado. La segunda se efectuará en el trabajo
productivo mismo, cuando sea posible y necesario.
5.- No existirá limitación alguna en la adquisición de nuevos
conocimientos y especialidades.
6.- Se acordará la forma entre Sindicato y Patronal para que
la enseñanza no altere la producción.
7.- El personal realizará, sin rebaja de salarios, todo tipo de
tareas fuera de su especialidad o jerarquía cuando sea
necesario, y ambas partes buscarán la manera de que
las tareas más groseras sean realizadas en forma
mecánica de acuerdo a las jerarquías inferiores que
vayan subsistiendo.
8.- Se entenderá que serán beneficiarios del acuerdo
resultante, todos los hombres y mujeres que trabajan en

CCVIII
tareas permanentes en la Planta de PASA en Puerto San
Martín.
“(...) El aumento de la productividad que resultará de la
aplicación de este sistema de capacitación y rotación, no
significará para la patronal una posibilidad para reducir su
personal, sino por el contrario, la obligará a reducir las
jornadas de trabajo comenzando por el trabajo en turno
rotativo.” (7).
Esta última reivindicación fue planteada, entre otras,
en la Toma de Fábrica con Control Obrero de la Producción
durante un mes en 1974, sin resultado positivo, a pesar de
que en la práctica los obreros demostraron que podían
hacer funcionar la fábrica con turnos de seis horas.
Luego de dos años de debates entre los obreros y la
patronal, se logró la capacitación de Mantenimiento y la tan
ansiada Escuela de Capacitación. Según las entrevistas a
algunos protagonistas de las polémicas, las mismas
contaron con gran participación de los obreros e interés en
las temáticas abordadas, habiendo contribuido activamente
el Asesor Letrado del Sindicato, Dr. Horacio Zamboni, quien
fue el redactor final del Anteproyecto.

CCIX
CCX
CAPÍTULO V

LA EXPERIENCIA DE
LA TOMA DE FÁBRICA CON
GESTIÓN Y CONTROL OBRERO
DE LA PRODUCCIÓN

CCXI
V.- La Experiencia de la Toma de Fábrica
con
Gestión y Control Obrero de la
Producción

En 1973, las FF.AA. se retiraron a los cuarteles y las


elecciones del 11 de marzo no hicieron más que
institucionalizar lo ya realizado por los “cordobazos” en las

CCXII
calles. El gobierno peronista, con sus siete millones de
votos, recibió el apoyo del proletariado y de amplios
sectores de la pequeña burguesía. En tanto que la inmensa
mayoría de la burguesía observaba con neutralidad
complaciente al nuevo gobierno de unidad nacional. Pero
hacia fines de 1973, principios de 1974, comenzó la crisis
capitalista mundial, y lo que hasta ese momento había sido
una posibilidad -sosteniendo e incluso mejorando el nivel de
vida de los trabajadores, manteniendo simultáneamente la
tasa de ganancia capitalista- pasó a transformarse en su
contrario. Las tensiones entre la conducción peronista por
un lado, y el proletariado por el otro, se incrementaron a tal
punto que existía el peligro real que la dirección social y tal
vez política de la clase obrera pasara a manos de una
pequeña burguesía radicalizada con veleidades
independentistas.
La gran burguesía nucleada en la UIA, que se había
puesto a la cola de la CGE, y ambas bajo las directivas de la
política redistribuida de Gelbard, desatada la crisis, se
separaron del proceso arrastrando detrás de ella incluso a la
mediana burguesía. Gelbard y Bronner quedaron entonces
como dos fantasmas de algo que ya no existía.
La imposibilidad de conciliación del proletariado y la
burguesía, en las nuevas condiciones creadas por la crisis,
se manifestó también en el partido peronista, con
tendencias disgregantes que se expresaron aún con mayor
facilidad después de la muerte del líder unificador. La
dificultad de mantener simultáneamente el salario y la tasa
de ganancia dejo más y más al gobierno en el aire, y se
genero así el llamado “vacío del poder”.
En ese contexto, los Petroquímicos de PASA -durante
1974- llevaron adelante una de las experiencias más ricas
de la clase obrera de Rosario y el país, por esos años. El 26
de julio fueron protagonistas, según sus expresiones, “de un

CCXIII
hecho imborrable”. La agresión a un compañero del servicio
del comedor por parte del concesionario, motivó la
respuesta inmediata de los trabajadores con el llamado a
una Asamblea de Fábrica. En ella se resolvió exigirle a la
patronal, en el lapso de tres horas, la caducidad del
contrato, “ya que éste provocaba continuos roces entre el
gremio y la patronal”. Al ser rechazada la petición y luego
de un largo debate, se decidió “la toma de fábrica con
gestión y control obrero de la producción”, ante la
propuesta de un obrero de base.
Desde ese momento, el Comité de Lucha dio a
conocer una serie de Comunicados dirigidos a la opinión
pública. En el Nº 1, fechado el 26-7-74, el Gremio denunció
al concesionario -Señor E. Gallucci- por agresiones
físicas, insultos, amenazas de muerte a un dirigente del
Sindicato, manoseo del personal del comedor, el trabajo de
menores en horas nocturnas, suspensiones arbitrarias, mala
calidad de la comida, escasa provisión de la misma,
aumento del vale respectivo, y que al personal no se le
pagaba de acuerdo al Convenio del Gremio según dispuso
el Ministerio de Trabajo.
Finalizaba el Comunicado con lo resuelto por la
Asamblea General Extraordinaria realizada en la fábrica,
donde se planteaba:
1) Expulsión inmediata del concesionario del comedor.
2) Que PASA se haga cargo de la dirección y administración
del mismo.
3) Que tome en relación de dependencia a los 18
compañeros que en él se desempeñan.
4) Extensión del beneficio de la comida a los compañeros
administrativos de Rosario (beneficio establecido por
Convenio, que la patronal nunca concretó pese a
reiteradas promesas).

CCXIV
Y agregaban que “Los representantes de la patronal
escamotearon las únicas respuestas que esperábamos los
trabajadores. Nos preguntamos: ¿Qué hubiera pasado si un
obrero hubiera agredido a un patrón? PASA, empresa al
servicio del imperialismo yanqui, no deja de demostrar en
cuanta oportunidad puede su mentalidad represora y
antiobrera y en contra del pueblo argentino, provocando
constantemente situaciones conflictivas, creando
situaciones de desabastecimiento y promoviendo a su vez
la desocupación, como prueban estos últimos
acontecimientos en que permite que 18 compañeros
queden cesanteados con el grave problema social que esto
acarrea”. (1)
La gestión y el control obrero de la producción se
organizó a partir de distintos “Comités”, cuyos miembros
eran elegidos en Asambleas en cada una de las Secciones
de la Fábrica; en ellos se debatieron todas aquellas
medidas necesarias para el funcionamiento de la fábrica.
Todos los trabajadores, luego de los turnos de trabajo,
permanecieron dentro de la Planta y percibieron sus sueldos
y aguinaldos.
El funcionamiento de la fábrica se hizo sobre la base
de:
 Asamblea General
 Asambleas de Sección: Mantenimiento, Operaciones,
Instrumentos
 Comité Central: Compuesto por integrantes de
la C.D.
y funcionó en Portería
 Comité de Producción: Compuesto por el Cuerpo de
Delegados
y funcionó en el Laboratorio

CCXV
 Comité de Seguridad: Responsable por C.D. el
compañero Echenique
 Comité de Abastecimiento: Responsable el compañero
Rodríguez
Comité de Vigilancia: Responsable por C.D. el compañero
Quintana
 Comité de Propaganda: Responsable por C.D. el
compañero Palmieri
 Comité de Operaciones
 Comité de Lucha
Al irse desarrollando el conflicto, en el Comunicado Nº
8 del Comité de Lucha se informó que se había creado el
Comité de Disciplina, el cual tenía las funciones de analizar
los distintos casos de indisciplina gremial que se fueran
presentando, y las facultades para sancionar a los
trabajadores que dificultasen el normal desenvolvimiento de
la lucha, aclarándose que las medidas a tomar se
someterían a referéndum de una Asamblea.
El Comunicado Nº 2 aclaraba que “los petroquímicos
estamos más unidos que nunca y estamos llevando
adelante una lucha que tiene como objeto que esta patronal
al servicio de los monopolios, no siga pisoteando la dignidad
de los trabajadores desatendiéndose de los justos reclamos
de los mismos”. En cuanto al funcionamiento de la Planta,
se indicaban las funciones de los distintos Comités y se
daba una serie de instrucciones a los compañeros, como
por ejemplo, “cuando se salga o se entre del complejo serán
rigurosamente revisados los bolsos y mochilas”,
aclarándose que “los directivos de la empresa permanecen
en el recinto de la misma por LIBRE VOLUNTAD sin que exista
oposición por parte nuestra, y ante cualquier pregunta de
cualquier funcionario el compañero debe manifestar que se

CCXVI
encuentra en la empresa en ESTADO DE ASAMBLEA
PERMANENTE, para deliberar sobre la forma más correcta
de conseguir la satisfacción de nuestros reclamos. Ante
cualquier duda, negarse a declarar, sin que esto constituya
una prueba en su contra”.
Las instrucciones continuaban con indicaciones de
seguridad, notificando que “Todos aquellos que deseen
retirarse deberán retirar la planilla (previa justificación de
problemas de salud o familiares o personales debidamente
justificados) autorizada por los compañeros de C.D. que se
encuentren en el Servicio de Vigilancia y deberán
presentarlo en cada uno de los portones de acceso”. Y
anticipándose a que el conflicto se extendería por varios
días, se organizaron los distintos turnos de manera de
garantizar la mayor cantidad de compañeros posible dentro
de la fábrica, aclarando que “Después de casi una jornada
que nos encontramos en estado de Asamblea Permanente
es indudable que la fatiga y el sueño nos comienza a
afectar. Teniendo en cuenta esta situación, y por si la
patronal está dispuesta a enfrentarnos durante mucho
tiempo, es que debemos acumular energías y no entrar en
la desesperación”.
Pese a esa posibilidad, fueron muchos los operarios
que permanecieron en la Planta durante todo el tiempo que
duró la toma, realizando tareas de colaboración. Los Cursos
de Capacitación continuaron dictándose, sólo que se
reorganizaron los turnos.
Ante versiones que distorsionaban lo que sucedía en
el interior de la fábrica, el SOEPU dio a conocer un
Comunicado en el cual plantearon: “Desmentimos el
contenido de un artículo aparecido el domingo en un diario
matutino de Capital Federal, que informaba de un
desabastecimiento de productos petroquímicos como
consecuencia del conflicto. Advertimos acerca de la

CCXVII
posibilidad de que se produzca un boicot a la provisión de
materias primas, necesarias para mantener el proceso
productivo. Haremos lo posible para que esto no suceda. De
concretarse dicho boicot, se podría producir la disminución
o suspensión de la producción, con el consiguiente
desabastecimiento del que responsabilizamos a PASA”.
Además, señalaron que el personal estaba en
Asamblea Permanente en la fábrica, con plena producción
en el complejo, para no entorpecer el desarrollo económico
del país ni provocar situaciones de desocupación en las
industrias subsidiarias, y aclararon: “Se ha mantenido el
nivel de producción en todas las áreas del complejo y en
algunos casos, como se detalla a continuación, ha sido
aumentada de acuerdo con el criterio de los operadores:
Planta de Etilbenceno, producción con planificación
patronal: 50 toneladas de etileno, producción con
planificación obrera: 58 toneladas de etileno. Se realizó la
carga y descarga de camiones de diversos productos en
forma totalmente normal. Fue enviado un camión con
etileno a Duperial, con carga normal y con custodia obrera.
La producción de las demás Plantas se realizó en forma
normal”.
Se destacó que el Comité de Producción había
recopilado datos de que se habían mejorado los tiempos de
rendimiento de distintas reparaciones -como
intercambiadores, bombas, instrumentos, pérdidas de
líneas- por la eficacia de los compañeros, que
demostraban en los hechos la organización dada a la
producción, distinta a “la planificada por la patronal en
forma rutinaria y alienante, o que posibilita en realidad
una mayor productividad de la industria, porque los
trabajadores nos sentimos dueños de nuestro propio
trabajo, lo cuidamos y damos paso a la actividad creadora,

CCXVIII
que nos ha llevado en un solo día a recoger experiencias
totalmente positivas como las que relatamos”.
La responsabilidad con que tomó la gestión de la
producción se evidenció en distintos momentos.
Uno de ellos fue cuando el Comité de Lucha -a
sugerencia de la Supervisión- decidió parar la Sección
Reacción de Estireno, con todas las consecuencias que
podría implicar, para reparar una pérdida de vapor que, de
no hacerse, podría transformarse en una situación de
emergencia. Se movilizaron todos los trabajadores de las
distintas especialidades para la reparación en el menor
tiempo posible. Además, se fabricó un manchón para un
compresor de Reformadora, que no había en plaza por
varias semanas y que costaba $ 230.000. El costo de la
tarea fue solamente las horas hombre de trabajo,
destacándose que eso “demuestra lo que nosotros hace
tiempo venimos denunciando: el vaciamiento de mano de
obra petroquímica para dar tareas afuera que pueden
realizarse en fábrica”.
En otra ocasión, cuando el conflicto llevaba casi
veinte días, en el Comunicado Nº 9 quedó demostrada la
responsabilidad y seriedad con que se seguía desarrollando
la lucha, al expresar:
“Para encarar los trabajos de Mantenimiento de
planificación y preventivos, que en las dos semanas pasadas
se descuidaron por atender los trabajos de urgencia de las
Plantas, se resolvió, con la opinión favorable de los
compañeros, retomar el grueso del personal de día que
estaba en turnos, al trabajo en el horario de 8 - 17. Todos
los días deben evaluarse los trabajos de la planificación
requeridos, para dar las prioridades de acuerdo al criterio
obrero, descartando aquellos que pueden ser postergados.
En este sentido, es fundamental la opinión de los

CCXIX
responsables de cada Planta quienes deben explicar con
claridad cuáles son los trabajos urgentes y cuáles los que
pueden esperar. Más que nunca estamos comprobando la
necesidad de incorporar más personal de mantenimiento
efectivo, analizando la cantidad de trabajos atrasados o los
que no se hacen. Se planteó al Ing. Gschwind lo
imprescindible que la empresa tome contratados para la
parada de Reforma y para refuerzo en los trabajos de
planificación de las Plantas, los que serían propuestos por
nosotros de acuerdo a la necesidad del proceso productivo.
También fueron reclamados dos vehículos para
Mantenimiento para la movilización de los compañeros en
las Plantas, traslado de materiales, etc.. Ambos pedidos
fueron negados. La semana pasada, el Supervisor General
de Reforma, Ingeniero Mulet, ratificó a los compañeros de la
Sección y al Comité de la Producción la necesidad de
realizar la regeneración del catalizador, lo que implica la
parada de la Planta. Los Compañeros evaluaron esta
sugerencia, coincidiendo con el Ingeniero, por lo que se
comunicó que se realizaría con control obrero, lo que fue
rechazado por Mulet, quien estimaba que el personal no era
lo suficiente capacitado para asumirla. Luego de varias
discusiones y de amenazas de los representantes
patronales, el Comité de Producción resolvió realizar la
regeneración que se realizó con control obrero, aceptando
cualquier sugerencia técnica como se lo ha hecho en las
demás Plantas”.
Por otra parte, las actividades sociales del SOEPU
continuaron desarrollándose de acuerdo a lo programado
antes del conflicto: los hijos de los trabajadores realizaron
las excursiones a Santa Fe y Paraná, siguieron las clases de
folklore, etc.. Mientras tanto, varios petroquímicos
estuvieron custodiando en forma permanente el Local

CCXX
Sindical en la ciudad de San Lorenzo. Además, la C.D. y los
distintos Comités garantizaron la llegada del camión
transportador de dinero para el pago de los sueldos, con
toda la seguridad necesaria dentro de la Planta, para que
los pagadores pudieran desempeñar sus funciones.
El conflicto fue llamando la atención y causó la
admiración de muchas organizaciones gremiales y políticas.
En el Comunicado Nº 5 se decía que: “Los ojos de país
están puestos en este proceso que desarrollamos. Pero esta
experiencia no ha sido casualidad. Se ha venido poniendo
en práctica y acumulado, sin haber valorado que en un
futuro, el comentario sería: ¿Cómo los obreros en poder de
la Producción?”.
Entre las adhesiones que fueron llegando, se hallaban
las de:
Comisión Interna de Sulfacid, Sindicato Ceramista,
Juventud Peronista, Juventud Radical, Partido
Socialista de los Trabaja-dores, Peronismo Descamisado,
Juventudes Políticas, obreros de Acindar, Maratón y
Metcon de Villa Constitución, delegados Lista Celeste de
Hanomag, Frente de Izquierda Popular, Juventud
Trabajadora Peronista, Sindicato Trabajadores de la
Educación Rosario, Movimiento Obrero Clasista, Poder
Obrero, Sindicato Químico Sulfacid, Revistas ‘De Frente’ y
‘Nuevo Hombre’, Sindicato de la Alimentación de Firmat,
delegados de Jhon Deere, Sindicato Municipal de la
Zona Industrial, Sindicato de Obreros Jaboneros, Sindicato
de Trabajadores de la Educación de San Lorenzo,
Asociación de Médicos Residentes de Rosario, ATE,
Asociación de Empleados Judiciales y Unión de
Comerciantes e Industriales de San Lorenzo, como
también las de distintos partidos políticos.
Se pidió y se logró el apoyo de los obreros de la
construcción de la Contratista Cimolai Vega y Tadero,

CCXXI
solicitándose el acatamiento de las medidas dispuestas por
los distintos Comités.
La solidaridad se expresó también en un Plenario de
Gremios, Comisiones Internas y Fuerzas Vivas de la zona
industrial de San Lorenzo, reunido en el Local Sindical, en el
cual -entre otras medidas- se resolvió: conformar una
Comisión de Apoyo, que visitaría a organizaciones gremiales
y políticas para interesarlas del conflicto e intercedería ante
PASA para la solución del mismo; publicar una solicitada
de apoyo; y realizar una reunión con organizaciones de
Rosario que habían hecho llegar su adhesión.
La situación del Personal Fuera de Convenio fue
aclarada principalmente en el Comunicado Nº 4; en éste se
explicaba que se respetaba su permanencia en el recinto de
la fábrica y que su entrada y salida eran totalmente
voluntarias, sin que ello constituya un elemento que pueda
ser usado como provocación. Por eso, y para evitar
situaciones desagradables, dicho Personal debía ajustarse a
una serie de instrucciones impartidas por el Comité Central
-entre ellas, que debían permanecer en sus puestos de
trabajo realizando las tareas de su competencia; que toda
colaboración en la producción sería bien recibida; que para
los desplazamientos dentro de las plantas del complejo
debían portar la autorización otorgada por los responsables
de cada Departamento o ser acompañados por algún
operario designado al efecto-, y se especificaba
especialmente que cualquier contravención a esas normas
por parte del Personal No Afiliado al Gremio, sería tomada
como un acto de provocación y el Comité de Disciplina
decidiría las sanciones, que podían culminar con su
expulsión de la Planta. A la vez, se recomendaba a los
trabajadores que se hicieran cumplir estrictamente esas
disposiciones, pero no en forma individual sino por el
Organismo que les correspondiera, y se hacía un llamado a

CCXXII
extremar las medidas de seguridad al máximo.
Por otra parte, el APESUP -Personal de Supervisión de
PASA- expresó, desde el inicio del conflicto, su solidaridad
con la lucha; y en distintas ocasiones, los operarios
aclararon que la medida de fuerza no era contra ellos sino
contra la patronal. Dicho Personal, en una Asamblea,
decidió enviar una nota a la Gerencia fijando su posición
ante el conflicto. En ella, criticaba la indiferencia de la
empresa ante la situación planteada, denunció el estado de
desconocimiento por parte de los obreros del principio de
autoridad, y acuerdan no informar ninguna novedad ni
pasar los partes diarios al personal jerárquico superior y
seguir brindando cualquier asesoramiento requerido por los
trabajadores pero, en este caso, a través de una Comisión
Permanente en Planta formada a tal efecto.
En otra ocasión, la C.D. -a través de un Escribano-
interrogó a los Jefes de los distintos Departamentos acerca
de si prestarían cualquier tipo de asesoramiento técnico
para el correcto funcionamiento del proceso productivo y
del mantenimiento de los equipos. La respuesta en todos los
casos fue afirmativa. Por otra parte, se hicieron presentes
un abogado apoderado de la Empresa y un Oficial de Justicia
por orden del Juez de Trabajo, para efectuar una
constatación de diversos aspectos relacionados con la
situación en la fábrica.
El conflicto tuvo amplia repercusión en los medios de
prensa de Rosario y Buenos Aires, con distintas
informaciones, algunas correctas y otras distorsionadas. Por
ese motivo, en el Comunicado Nº 4 se denunció “Una nota
publicada por el diario La Nación con evidente mala intención y
parcialidad, tergiversando los hechos. En efecto, nuestro
Comunicado Nº 1 fija la posición de la Asamblea
Permanente de mantener la plena producción del Complejo
para no provocar situaciones de desabastecimiento que

CCXXIII
originarían graves consecuencias para otros trabajadores y el
país, dada la importancia de la materia prima petroquímica.
Los trabajadores venimos controlando la producción de la
fábrica y no sólo la hemos mantenido sino que la hemos
mejorado en algunos casos. Pero la campaña de acción
psicológica desarrollada por los diarios de la oligarquía y otros
elementos antinacionales, siguen trabajando. La Nación dice
que “nuestro conflicto ha provocado la suspensión del
suministro de caucho sintético, ya que las secciones de
estireno, etileno y etilbenceno se encuentran
semiparalizadas”. No hace falta decir más nada sobre esto.
Porque los compañeros saben perfectamente quiénes son
estos señores y a qué intereses responde este diario al servicio
de la patronal y el imperialismo. La producción se desarrolló en
forma absolutamente normal, y los distintos problemas que
fueron surgiendo fueron totalmente solucionados”. También
se criticaba al diario Crónica de Rosario, por un comentario
patronal del conflicto.
El clima de confraternidad entre los Petroquímicos fue
en aumento a medida que pasaban los días en un ambiente
de tranquilidad, al tiempo que se aclaraba: “La patronal
sepa que nuestro espíritu sigue en pie. Que nuestro corazón
sigue caliente y nuestras mentes frías para poder pensar. Y
aunque ellos actúen con aparente indiferencia ante este
proceso, nos encontramos firmes en nuestros puestos, porque
el tiempo es nuestro aliado, para consolidar más nuestras
fuerzas”. Mientras se referían a la Patronal de esta manera:
“¿Qué dice PASA, en sus más altas esferas, cuando los obreros,
esos mismos obreros a los que no les paga su eficacia
acumulada durante años, están controlando la producción, la
que se desarrolla en forma normal, cuidando que la materia
prima, combustibles y repuestos no falten? Ante la misma
sospecha de boicot, PASA será la responsable y se reafirmará
que es la que drena la economía de la Nación”.

CCXXIV
Las deliberaciones en las distintas Secciones fueron
permanentes. Y en el Comunicado Nº 6 se hizo referencia a
la Asamblea en Puerta de Fábrica, donde se comentó:
“Tuvimos una de las más claras demostraciones de la
conciencia de lucha de nuestro Gremio. El obrero petroquímico
razonó, y es por eso que ese razonar los llevó a gritar un apoyo
rotundo a continuar la lucha hasta la victoria final.
Posiblemente sería obvio decir que fue una Asamblea
democrática, porque en nuestra trayectoria, el Gremio pudo
siempre expresarse libremente y es así que los compañeros
contratados que hoy están trabajando, que producen, que
sufren todas las injusticias a que son sometidos por la
patronal, tuvieron la ocasión de expresarse con su voto. Los
otros compañeros que estaban en una posición distinta pero
que con valentía, con la mirada al frente se expresaron en la
Asamblea, tuvieron su reconocimiento con un sostenido
aplauso de los demás compañeros. Pudo verse emoción y
hasta lágrimas, pudieron verse abrazos de unidad porque
comprendieron que al final va a ser la victoria”.
La patronal, luego de ocho días de iniciada la toma de
la fábrica, denunció el hecho ante las autoridades. Los
trabajadores rechazaron las intimaciones del Ministerio de
Trabajo, a la vez que reafirmaron que se hallaban en
Asamblea Permanente y que mantenían el ritmo de
producción -incluso incrementándola en algunos casos-,
subrayando que “la venta de estireno, materia prima
fundamental en la industria del plástico, registra las siguientes
ventas: sábado 131.990 litros, domingo 108.860, lunes
105.390, y martes 167.940 litros. En cuanto al caucho, entre
los días martes y miércoles último la venta fue de 131.910
kilogramos para el país, y 162.762 kilogramos para la
exportación”. (2)
Las leyes represivas imperantes en ese momento
ayudaron a concretar un deseo que estaba madurando en la

CCXXV
conciencia de los trabajadores de PASA: la producción bajo
control obrero. Esta decisión transforma la relación con los
técnicos e ingenieros, ya que la producción pasa a ser
organizada y dirigida por los obreros, caducando el poder
patronal en cuanto director del proceso de producción.
Posteriormente, durante un mes, sin la mínima participación
de jefes, supervisores e ingenieros, gestionaron la planta
industrial.
Durante el conflicto, la vida en la fábrica deparó a los
trabajadores una muy variada experiencia, en lo que hace a
la organización de la producción, abastecimiento, vigilancia,
propaganda, etc.; acerca de la misma, Juan Dowling nos
comentó:
“Cuando los obreros, reunidos en un Comité de Producción,
nos sentamos a discutir en el galpón de Mantenimiento
(nuestro ‘cuartel general’) qué medidas tomar para asegurar
la continuidad del proceso productivo, nos miramos por
algunos instantes y alguien naturalmente dijo: lo de
siempre, dejar que la Planta siga produciendo, pues ella se
encarga de que las cosas continúen. Es sólo tener un
poco más de cuidado, hacer las cosas de forma tal de
demostrar a la empresa y a la sociedad que los obreros
somos capaces con nuestras propias manos de gestionar
fábricas.
“Esto es posible entonces porque en este caso la industria
petroquímica se trata de un proceso autosostenido en su
propia estructura, que con un mínimo esfuerzo humano y
con un trabajador colectivo e individual capaz, asegura de
forma natural el normal funcionamiento del proceso, sin
necesidad de todo el aparato montado artificialmente por el
capital para mantener un poder despótico sobre el trabajo.
“La vida en la fábrica se organizó de tal manera que varios
Comités funcionaron asegurando todas aquellas medidas

CCXXVI
necesarias (...) Un Comité de Producción que se reunía todos
los turnos en las primeras horas de trabajo y funcionaba
de la siguiente manera: Cuando un conjunto de compañeros
entraba a trabajar, se dirigían a sus respectivos puestos. En
cada Sección se reunían los operarios y discutían los
problemas existentes, las prioridades en cuanto a
mantenimiento, etc.. Se nombraba a un Delegado que
llevaba a la reunión del Comité de Producción lo resuelto en
su Sección. En este Comité, el conjunto de representantes
de todos los sectores de la fábrica coordinaba la forma de
llevar a cabo el trabajo de turno. Se consideraban las
prioridades y en función de las mismas se distribuían los
compañeros de Mantenimiento.
“También en esas reuniones se consideraban todas las
informaciones sobre el estado del conflicto, las discusiones
con la patronal, las posiciones del Departamento de Trabajo,
las posiciones de los grupos políticos, etc.. Inmediatamente
todos los compañeros se dirigían nuevamente a sus puestos
de trabajo. Otros Comités completaban las funciones
excepcionales que existían. Uno de seguridad, controlaba el
movimiento de entrada y haciendo guardia en el perímetro
de la fábrica para evitar cualquier intento de sabotaje o
infiltración de elementos ajenos a los obreros. Un Comité de
Abastecimiento aseguraba los alimentos necesarios para la
subsistencia, otro se encargaba de las relaciones hacia
afuera, como así también lo referente a las discusiones con
la Empresa a través del Departamento de Trabajo para
resolver el conflicto.
“La fábrica, quedando en nuestro poder, se estructuró de
tal manera que se permitía el paso del Personal Fuera del
Convenio, es decir jefes, supervisores, etc.. Éstos
podían circular libremente dentro de la fábrica, previa
requisa en la entrada, cosa que irritaba a muchos ‘cascos
blancos’ autoritarios. Ahora bien, esta medida vista desde

CCXXVII
fuera puede parecer como debilidad, pero en los hechos fue
una de las cosas más interesantes. Los que otrora se sentían
los aseguradores del funcionamiento de la fábrica,
‘irreemplazables dirigentes’, de una hora para otra vieron
sus funciones inútiles. Deambulaban por la fábrica como
turistas, como visitantes que inservibles, observaban
superar récords de producción, mantenimiento,
modificaciones en el proceso productivo, que ellos nunca
antes hubieran aceptado, impotentes al no poder incidir de
manera alguna. La reacción de este sector frente al conflicto
fue diversa. Algunos más compenetrados de la realidad
social que los colocaba en la función de ‘vigilantes’
innecesarios de los hombres en vez del proceso productivo,
se sentían mancomunados con los obreros, apoyaban sus
luchas. Otros, más fieles a sus funciones de lacayos, sufrían
terriblemente y anidaban la ‘venganza’ para cuando
volviera la normalidad. Pero todos, sin excepción, recibieron
el mensaje de la clase obrera, en ese momento
protagonizado por un pequeño destacamento de avanzada
del proletariado industrial: “vuestro parasitismo no es
necesario, tienen los días contados”.
“La rutina en el trabajo, la labor en turnos rotativos sin
sábados, domingos ni feriados, la separación entre la
planificación y eje-cución, etc., quita todo el sabor del
trabajo necesario y creador de riquezas. Sumado a esto
todas las enfermedades físicas y mentales, hace que los 28
días de libertad significaran para muchos la mejor terapia a
sus males. Compañeros escépticos, pesimistas, en esos días
adquirieron tal dinamismo que parecían irreconocibles.
Muchos de nosotros por varios días no salimos del Complejo,
durmiendo escasas horas al día.” (3).
A partir del momento en que se hicieron cargo de la
fábrica, se insinuó el mejoramiento de la producción,

CCXXVIII
lográndose superar los índices considerados habituales. Las
tareas se ampliaron además con la reparación de uno de los
hornos de estireno, que tenía averías preexistentes al
conflicto, y se procedió a apagar una pileta utilizada para la
quema de desechos que provocaba emanaciones tóxicas y
otros inconvenientes para la población de la zona. Ese
trabajo fue a pedido de los vecinos de la planta industrial.
Se trató de evitar la contaminación ambiental y la
eliminación de desechos al río Paraná. De esa manera, se
anticiparon en varios años a las acciones que hoy realizan
los grupos ecologistas. Los trabajos de riesgo o insalubres
se realizaron tomando las precauciones y normas
aconsejables, disminuyendo considerablemente los
accidentes de trabajo.
Fueron numerosas las negociaciones con la patronal,
las entrevistas con el Gobernador Dr. Silvestre Begnis y el
Presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia, Dr.
Rubén Dunda, enviándose telegramas a la Presidenta de la
Nación, a los Ministros de Trabajo, de Economía, y a
distintos Bloques de Diputados.
El conflicto tuvo repercusiones nacionales, no sólo en
los medios de comunicación, sino también porque los
miembros de la C.D. dieron una conferencia de prensa en
el Sindicato de Gas del Estado y se entrevistaron con el
Diputado Nacional Zabala Rodríguez, quien se
comprometió a informar a los distintos bloques de la
situación.
A su vez, el Ministerio de Trabajo de la Nación intimó
a los trabajadores a que dispusieran la normalización de
la situación, amenazando con retirar la Personería Gremial
al SOEPU. El rechazo de la amenaza del Ministerio se
produjo luego de una Asamblea “con la participación de 600
obreros, mientras un centenar de ellos continuaba en los

CCXXIX
lugares de trabajo”, quienes resolvieron por unanimidad
mantener la actitud tomada y los reclamos iniciales. (4)
Las repercusiones sociales y políticas fueron variadas
y los apoyos de distintos sectores se incrementaron con los
días. La Patronal y el Sindicato se cruzaron comunicados
con denuncias. Llamo la atención a los Petroquímicos el
silencio de la prensa oral y escrita durante varios días, y
por ello, desde el SOEPU se propagandizó el conflicto con
veinticinco mil volantes repartidos en las fábricas de la zona
y Rosario, con afirmaciones como las planteadas en esta
Solicitada:
¡EN PASA SIGUE LA LUCHA!
“Los obreros petroquímicos llevamos 18 días de lucha,
controlando la Planta de PASA Petroquímica, con un
rendimiento productivo superior. Este hecho sin precedentes
en la historia del Movimiento Obrero Argentino, se produce a
raíz de la agresión del Contratista del Comedor de Fábrica a
un compañero, estando advertido PASA, desde tiempo
antes, de las irregularidades y atropellos que este sujeto
realizaba. Como consecuencia de ello se originó el conflicto
y en una Asamblea de Fábrica resuelve:
“a) EXIGIRLE A LA PATRONAL:
1) Expulsión inmediata del Concesionario del Comedor.
2) Que PASA se haga cargo de la dirección y administración
del mismo.
3) Que tome en relación de dependencia a los 18
compañeros que en él se desempeñan.
4) Extensión del beneficio de la comida a los compañeros
administrativos de Rosario (beneficio establecido por
Convenio que la Patronal nunca concretó pese a
reiteradas promesas).
“b) Continuar el PROCESO PRODUCTIVO con CONTROL
OBRERO.

CCXXX
“c) Declararse en ESTADO DE ASAMBLEA PERMANENTE.”
ES ABSOLUTAMENTE CLARO QUE NOS ASISTE RAZÓN;
NUESTRO OBJETIVO A ALCANZAR SON SÓLO
LOS CUATRO PUNTOS SEÑALADOS
“En el curso del conflicto una nueva Asamblea resolvió
sugerir al Gobierno Nacional que se interese en la
NACIONALIZACIÓN de esta importante fuente de riqueza,
estimando que éstas deben quedar a favor del pueblo de
nuestro país y no engrosar las arcas del imperialismo
yanqui.
“Aquí no existen veladas intenciones ni hacemos el juego a
ningún sector interesado en la adquisición de dicha
Empresa. Los Trabajadores Petroquímicos queremos que el
pueblo sepa que ninguna maniobra se oculta tras nuestra
lucha y que denunciaremos todo intento de instrumentarla
tras objetivos extraños al origen del conflicto. Ni la
Patronal -que sólo debe acceder a otorgar justas y mínimas
reivindicaciones- ni las autoridades responsables de
obligarla a satisfacer nuestros reclamos, parecen darse por
enteradas. Por el contrario, el Ministerio de Trabajo amenaza
con disolver nuestra Organización Gremial.
“Reiteramos que ante posibles denuncias de
desabastecimiento de productos petroquímicos, nosotros los
trabajadores CONTROLAMOS Y ASEGURAMOS LA
PRODUCCIÓN, pero sigue siendo PASA la que comercializa y
en ese sentido deslindamos responsabilidades.
“Queremos destacar la información dada de nuestro
conflicto por diversos medios de difusión como la que
permanentemente suministra el diario ‘Noticias’ de Buenos
Aires. Solicitamos a la prensa que ha permanecido en
silencio (especialmente en los últimos días) y de la que ha
tergiversado la realidad sobre el conflicto, una mayor y
veraz información. Hemos demostrado a lo largo de 18 días

CCXXXI
nuestra capacidad de trabajar sin la dirección patronal y
debe saber la población que estamos también dispuestos a
continuar el tiempo que sea necesario para conseguir
nuestros objetivos. Reina entre nosotros una fraternidad y
espíritu de lucha en niveles superiores a las que
conocíamos y que nos permite hacer esta afirmación.
CON NUESTRA UNIDAD Y ORGANIZACIÓN
SEGUIREMOS ADELANTE
…HASTA LA VICTORIA!!!
(5)

Entre los distintos temas que se debatieron durante la


Toma, dos fueron los que produjeron más polémica. Por un
lado, paralelamente a las reivindicaciones ya mencionadas,
se planteó por parte de un grupo de trabajadores, una
conquista que consideraban debía exigirse en una Empresa
de las características de PASA: ¡6 horas por turno!... Por
otra parte, se intercambiaron ideas sobre si se debía
levantar la consigna de la nacionalización de PASA y se
resolvió -con posiciones encontradas- “sugerir al
Gobierno Nacional que se interese en la NACIONALIZACIÓN
de esta importante fuente de riqueza, estimando que éstas
deben quedar a favor del pueblo de nuestro país y no
engrosar las arcas del imperialismo yanqui”. (6)
Los días del conflicto pasaban y la voluntad de lucha
no cedía; y así lo expresaron en el Comunicado Nº 8,
cuando afirmaron: “La conciencia de los trabajadores
petroquímicos es lo suficientemente madura y clara como para
comprender que acá no hay claudicación posible. PASA se
equivoca si pretende jugar a nuestro desgaste, porque si hay
algunos compañeros embargados de cierto pesimismo, de
ninguna manera han podido contagiar a la inmensa mayoría de
los trabajadores petroquímicos que permanecen con una moral
irreductible y con un gran espíritu combativo” . Se informaba a

CCXXXII
los operarios qué consecuencias resultarían si se claudicaba
en la lucha; éstas serían posibles despidos, quite de la
personería gremial y jurídica o la afiliación compulsiva a
otra Federación, que no se tendría fuerza para continuar con
otros reclamos, pasar de ser trabajadores a ser siervos de la
patronal, y “que una derrota significaría un duro golpe al
movimiento obrero y al pueblo argentino que en estos
momentos están emprendiendo la lucha por la liberación”.
El factor tiempo era aquel con el que especulaba la
Empresa, pero fue sucediendo todo lo contrario; y en el
Comunicado Nº 9 se analizaba el estado de ánimo de los
trabajadores de esta forma:
“Dieciocho días al frente del control de la producción, no es
un hecho casual, es el fruto de la eficacia, responsabilidad y
esfuerzo común puesto al servicio de un solo objetivo:
PRODUCIR PARA TRIUNFAR. (...) Los compañeros que están
firmes en sus puestos, ven pasar los días sin una solución
concreta, pero sin desaliento y cada vez con más
organización, concientes que el triunfo está cerca, y cuando
éste llegue será el júbilo de 700 hombres que a través de
años fueron postergados y manoseados.
“Hay compañeros que durante estos días conciente e
inconscientemente han puntualizado errores o señalado a
los compañeros que han tomado con responsabilidad el
control productivo. A ellos les decimos que ningún
movimiento, ni siquiera el obrero, es puro. Pero lo que es
necesario dejar en claro, es que lo que importa es el balance
final, y ese balance de 18 días nos muestra la inmensidad
de hechos favorables, hasta emocionantes, frente a las
pequeñeces de casos ingratos, de señores que siembran la
desunión o de compañeros que han defraudado, LO BUENO
HA SIDO ENORMEMENTE SUPERIOR A LO MALO, y ante el
posible cansancio físico opusimos los rostros felices, fruto de

CCXXXIII
nuestro trabajo en libertad”.
El Comunicado finalizaba con esta arenga:
“Compañeros: Queremos que el espíritu de unidad siga
como hasta ahora: éste se suele templar en la fragua de la
injusticia. Nuestras armas son nuestras manos y nuestro
cerebro. Fruto de ellos es la producción que sacamos al
servicio de la Sociedad. Esta es nuestra lucha. No
necesitamos matones, y los partidos políticos, legisladores,
fuerzas vivas, etc., que quieren ayudarnos en los hechos,
deben ponerse a nuestra disposición y hacer eje en nuestra
forma de lucha”.
La Empresa, ante la firmeza de los trabajadores en
sostener la lucha, comenzó a tender líneas de
negociaciones. Primeramente surgió un llamado desde
Buenos Aires, adonde concurren los compañeros Sosa y
Gervasoni, no llegándose a ningún acuerdo. Posteriormente,
en Planta, el Departamento Relaciones Laborales informó
sobre los deseos de iniciar un diálogo, proponiendo levantar
la medida y disentir en el Ministerio, propuesta confirmada
por el Ingeniero Dietl. Luego, el Sr. Haslop pidió una
entrevista con Sosa, “de amigo a amigo”. La prudencia de
los trabajadores hizo que decidieran que fuese acompañado
por Gervasoni y Alonso, este último elegido por una
Asamblea. La situación molestó al representante de la
patronal, quien no atendió a la delegación obrera,
reafirmando la posición de que se debía levantar la medida
y con-ciliar en el Ministerio.
La medida de lucha produjo distintas posiciones
dentro del Movimiento Obrero, desde los que apoyaron
hasta la postura de las 62 Organizaciones de San Lorenzo,
que se expresó a través de un Comunicado que nos permite
entender el clima sindical reinante:

CCXXXIV
“El nucleamiento gremial peronista califica el accionar de
SOEPU como puramente político que tiende a poner escollos
en el camino del gobierno popular de la compañera Isabel y
crear por el lado de la izquierda cipaya mediante la
agitación y el desorden, el clima propicio para un golpe
gorila... Las 62 advierten luego a los trabajadores que no
deben responder a la provocación de la derecha y de la
izquierda unidas, que tratan de poner incesantemente vallas
a la auténtica revolución nacional que está consolidando el
gobierno del pueblo. No se debe permitir que se use a los
trabajadores para defender intereses oscuros de enanos
enrolados en la antipatria.” (7).
El Movimiento Nacional de Solidaridad con los Presos
Políticos, a través de una Solicitada expresó, en esos días,
que denunciaba
“todas las formas que asume la represión en nuestro país,
a los allanamientos y detenciones arbitrarias, a las torturas
físicas y morales que se están desatando en estos
momentos contra militantes y hombres del pueblo; se
agregan también otras formas encubiertas de represión,
como son los despidos arbitrarios, la desocupación, el
desabastecimiento de los artículos de primera necesidad,
etc.. Dentro de esta avanzada de la represión debemos
mencionar:
* Allanamientos y detenciones en las ciudades de Rosario,
Villa Constitución y Villa Diego
* Asesinato del Diputado del Pueblo Rodolfo Ortega Peña y
posterior represión en su velatorio.
* Atentado con explosivos en el local de la Lista Marrón de
Acindar (Villa Constitución)
* Intimidación del Ministerio de Trabajo amenazando
retirar la Personería al SOEPU por el conflicto existente en la
empresa imperialista PASA.

CCXXXV
Llamamos a la Unidad de todos los sectores para
movilizarse contra la represión y por la democracia.
Libertad a todos los presos políticos!!!” (8).
Los Petroquímicos, en la Asamblea realizada el 22 de
agosto, logradas las exigencias peticionadas a la patronal,
dieron por culminada la medida de lucha. (9)
La Empresa PASA, luego de varios días de finalizado el
conflicto y ante las repercusiones de la medida de fuerza en
medios gremiales y políticos, se manifestó con esta
Solicitada:
“A LA OPINIÓN PÚBLICA Y AL PERSONAL DE PASA”
“Según es de público conocimiento, en los últimos días, el
Complejo Petroquímico de PASA, en San Lorenzo Provincia
de Santa Fe, fue ocupado por el personal obrero a raíz de un
episodio al cual la empresa era totalmente ajena. Es
costumbre invariable de PASA no efectuar declaraciones
públicas que signifiquen un menoscabo a sus trabajadores.
Más aun en su convicción profunda que el diálogo serio y
constructivo continúa siendo el instrumento más idóneo
para solucionar las diferencias que pueden surgir en el seno
de una empresa o de la sociedad en su conjunto.
Sin embargo, a raíz del acontecimiento antedicho, se han
efectuado algunas manifestaciones que por el profundo y
peligroso error que a nuestro juicio encierran, PASA
considera que no pueden quedar sin respuesta.
Se ha sostenido, en efecto, que se demuestra por la
ocupación de Planta y la continuidad de su actividad que el
personal obrero está en condiciones de operarla con
prescindencia de los cuadros de Supervisión y Conducción
de la empresa. A ello debe responderse:
1.- Todo el personal de PASA, desde el comienzo de las
actividades ha sido constantemente capacitado para operar
las unidades a las cuales estaba asignado. Ello ha permitido

CCXXXVI
que la Planta no se detuviera en esos días. Pero debe
puntualizarse que no hubiera podido hacerlo, no digamos
ya con plena eficacia sino en mínimas condiciones de
seguridad, si la Supervisión de PASA no hubiera prestado su
total colaboración a las constantes consultas efectuadas. La
Supervisión superó toda frustración personal, y con cabal
conciencia de que la defensa de las fuentes de trabajo
(coincidente en un todo con la defensa del interés nacional)
requiere la continuidad de las operaciones, prestó la
colaboración expresada.
2.- Por otra parte, nadie que conozca el cada vez más
complejo mundo de la empresa moderna ignora que su
actividad no se agota en la operación de una planta fabril.
Ello es sólo una parte de una totalidad que abarca
también y de una manera indisoluble los aspectos
técnicos, administrativos, financieros y comerciales sin los
cuales la Planta operaría en un vacío absolutamente e
irremediablemente, a corto plazo, llegaría a paralizarse.
3.- El aspecto que pueda rescatarse de los episodios
vividos es pues, ante todo, el valioso capital humano que
posee la Empresa en todos los niveles y que constituye una
de las garantías de su supervivencia y expansión.
4.- No deja de llamar la atención empero que el conflicto
suscitado, absolutamente desproporcionado con la causa
que le dio origen, se produzca cuando la Empresa ha
presentado al Superior Gobierno de la Nación, un serio y
concreto programa de expansión y argentinización.” (10).
Por su parte, Dowling analizó así lo vivido en esos
días:
“Por primera vez ejercitamos una forma de democracia
directa, ahora como productores, una experiencia nunca
antes experimentada por nosotros, que dio mayor sentido
a nuestros días de trabajo, otrora interminables. Una

CCXXXVII
forma de participación libre, con elección rotativa de
funciones, en las distintas Comisiones necesarias para
gestionar la fábrica y el conflicto, con delegación de
mandatos temporarios, cada uno de nosotros, además de
ejercer nuestras funciones habituales, participábamos
alternativamente en las diversas tareas. Por un momento,
percibimos que, por lo menos, para una industria con tal
grado de automatización como PASA deja de tener
sentido un trabajo esclavizante, alienante, desprovisto de
cualquier atractivo. Sólo se justifica tal aberración por la
existencia de un sistema económico social, basado en
(11)
la explotación de los trabajadores.” .
De esa manera, los Petroquímicos se sumaron a la
lista de empresas tomadas por sus operarios, y algunas de
ellas autogestionadas. En Argentina, uno de los primeros
antecedentes se dio en 1951 con las fábricas textiles
Royaltex, Produtex y Medias París, que llegaron a
comercializar sus productos en Uruguay. Posteriormente se
concretó la ocupación sin control obrero del Frigorífico
Lisandro de la Torre, en enero de 1959, ante el intento de su
privatización. Llegaron luego las 11.000 fábricas ocupadas
en 1964 durante el Plan de Lucha de la CGT, y las
ocupaciones en 1970 en Córdoba de las grandes industrias
automotrices, entre otras.
Debemos destacar, además, que los Programas La
Falda (1957) y Huerta Grande (1960), planteaban el control
obrero de la producción.
La autogestión obrera tiene su nacimiento, a nivel
internacional, en la Comuna de Paris, pues ella fue la
primera que entregó a “las asociaciones obreras, a reserva
de indemnización, todos los talleres y fábricas cerrados, lo
mismo si sus respectivos patronos habían huido que si
habían optado por parar el trabajo”. (12)

CCXXXVIII
Posteriormente se realizó en algunas fábricas, durante
el alzamiento revolucionario de 1905 en Rusia y la
Revolución Rusa de 1917, entre los meses de marzo y julio.
Vinieron más tarde las tomas en Turín y Baviera en
1920; en Francia, en junio de 1936; en Cataluña, durante la
Guerra Civil Española; en Yugoslavia, en la pos Segunda
Guerra Mundial; y en Japón en 1946 y 1947, bajo la
ocupación militar de EE.UU., las cuales fueron reprimidas,
significando una derrota para la clase obrera nipona. Con los
años, la vivencia se repitió en Francia, en cientos de
empresas, durante el Mayo del ’68.
En América Latina, sobresalieron las ocupaciones de
las salitreras en Chile; también en las minas de estaño en
Bolivia, con los Programas de Pulacayo y Colquiri, durante el
doble poder en la Revolución Boliviana de 1952,
declarando el control obrero con derecho a veto sobre la
minería nacionalizada; en las minas de cobre en Perú; en
Costa Rica y Honduras; en Uruguay, en junio de 1973,
contra la asonada militar; y en Chile, ante el golpe de
Pinochet en septiembre de 1973.

CCXXXIX
CAPÍTULO VI

EL S.O.E.P.U. Y LA COORDINADORA
DE GREMIOS EN LUCHA

CCXL
CCXLI
VI. 1.- Los Antecedentes Económicos y
Políticos
del “Rodrigazo”

Luego del fallecimiento del Presidente Juan D. Perón y


la asunción de su esposa Isabelita al frente del Ejecutivo
Nacional, se fortaleció el poder de López Rega, creció la
ofensiva de la derecha peronista y de la “Triple A” y
aumentaron los desaciertos económicos, todo lo cual fue
creando un clima de crisis económica, social y política.
Las condiciones de la economía capitalista mundial
hasta principios del ’74 permitían que los capitalistas de la
Argentina vendieran caro y compraran relativamente
barato. Eso se expresó como balanza comercial y de pagos
favorable (1.000 millones de dólares en 1973). En
consecuencia, buenas reservas de oro y en divisas; por
ende, posibilidades de emisión monetaria que no equivalía a
la falsificación de billetes, expandiendo aún más el
mercado; y, por otra parte, el crédito abundante, ágil y
barato era un factor más para compensar la caída de la tasa
de ganancia.

CCXLII
La contradicción insoluble tardó en manifestarse por
la mencionada coyuntura mundial, pero la depresión a nivel
internacional iniciada a fines del ‘73 y principios del ‘74
revirtió todo el proceso. El mercado exterior se estrechó,
especialmente el de medios de consumo de las personas;
los precios de lo que se exportaba de la Argentina cayeron
más que los de las importaciones, o sea, lo que compraban
los capitalistas del país. Las reservas de oro y divisas se
esfuman, los billetes ya impresos se deprecian totalmente;
a las nuevas emisiones que quieren compensar la caída de
las reservas se agrega un presupuesto ultradeficitario pero
sin respaldo; el crédito cesa, dejando de ser abundante para
transformarse en caro y tardío. De esa manera, explota la
contradicción entre producción y cambio.
La caída de Gelbard, en octubre de 1974, fue la
expresión a nivel del Gobierno Nacional del fin de las
posibilidades del “distribucionismo” inicial. La firma del Acta
de Compromiso Nacional en febrero del ‘75 fue su
certificado de defunción, ya que las “partes” que
inicialmente pactaron voluntariamente la distribución,
dejaron de poder concertar y el Estado -en febrero del ’75-
impuso a las “partes” el 15 %, lo que para “unos” era
demasiado poco y para “otros”, excesivo.
A partir de ese momento, el Gobierno que nació
apoyado en la unión nacional de la mediana y gran
burguesía industrial por un lado y el proletariado por el otro,
perdió aceleradamente el respaldo de ambos y sólo
conservó el sostén del cascarón burocrático sindical,
partidista y empresario, que fue quedando más y más
vacío de contenido: el proletariado marchaba a su
constitución fabril, generando nuevas formas
organizativas; los empresarios de la CGE dejaron de
responder a Broner y pasaron a seguir a los ex dirigentes de
la UIA o a los de la gran burguesía nucleados en la Asamblea

CCXLIII
Permanente de Entidades Empresarias. El Partido
Justicialista sufrió, además de la fragmentación, los efectos
de su aislamiento de la clase obrera.
Desde el agotamiento del mecanismo distribucionista,
la tendencia inexorable de la economía capitalista conducía
a la caída del salario y germinaba entonces la necesidad de
organizar esa orientación espontánea, pero como
planificación distributiva in-versa a la voluntariamente
acordada entre la burguesía y el proletariado en 1973. (En
última instancia, esa necesidad es la razón del Golpe del 24
de marzo de 1976).
Por otra parte, luego del 25 de mayo de 1973, toda la
legislación represiva sancionada por la Dictadura Militar fue
derogada y disuelto el Fuero Antisubversivo. Pero esa
primavera duró poco, y comenzó una nueva etapa,
iniciándose con el envío del Poder Ejecutivo a las Cámaras
para modificar el Código Penal. La reforma fue considerada
de la misma naturaleza que las leyes promulgadas por el
régimen militar que gobernó el país entre 1966 y 1973.
La primera respuesta vino del General Perón, quien
advirtió que si la ley no era aprobada, se apelaría a las
mismas armas que se buscaba combatir; y el 23 de enero
de 1974 declaró al diario La Nación: “Nosotros vamos a
proceder de acuerdo a la necesidad, cualquiera sean los
medios. Si no hay ley, fuera de la ley, también lo vamos a
hacer y lo vamos a hacer violentamente. Porque a la
violencia no se le puede oponer otra cosa que la propia
violencia. Eso es una cosa que la gente debe tener en claro,
pero lo vamos a hacer, no tenga la menor duda”.
Después de la muerte de Perón, se tomaron distintas
medidas represivas. En septiembre de 1974 se aprobó la ley
de represión del terrorismo, que penaba la difusión de
información relacionada con esos hechos y la obstrucción al
trabajo cuando el conflicto era declarado ilegal. De acuerdo

CCXLIV
a esa Ley, el Ministerio de Trabajo prohibió las huelgas por
motivos salariales, los paros y las ocupaciones de plantas, y
comenzó a intimar, amenazar y suspender personerías
gremiales con más frecuencia que anteriormente. Hasta ese
momento, la participación de las FF.AA. en forma abierta era
evitada y la lucha era encabezada por grupos paramilitares,
“ejecutores del trabajo sucio”, a través de la Triple A.
En el mes de noviembre de 1974, se declaró el estado
de sitio en todo el país. Como ya hemos comentado, fue en
esa circunstancia que el Dr. Horacio Zamboni, Asesor
Letrado del SOEPU, fue detenido y puesto a disposición del
Poder Ejecutivo. La reacción de los Petroquímicos fue
inmediata, reclamando su liberación a través de distintas
declaraciones y solicitadas de denuncia, una de ellas dirigida
expresamente a la “Sra. Presidente”, firmada además por los
otros Gremios de los cuales era Asesor, como el Sindicato
Obreros Ceramistas, Porcelanas y Afines y el Sindicato de la
Alimentación de Firmat.
Se denunció que el día 8 de noviembre a la
madrugada había sido detenido por efectivos de la Policía.
Luego de un allanamiento en su domicilio que se prolongó
por más de dos horas, fue trasladado a la Jefatura de Policía
de Rosario; posteriormente a la Policía Federal ante un Juez
Federal. El magistrado resolvió que debía ser liberado de
inmediato, por no encontrarse motivo que justifique su
detención. Pese a esa determinación, la Policía Federal dio a
conocer el Decreto Nº 1404 /74, por el cual era puesto a
disposición del Poder Ejecutivo Nacional, siendo trasladado
a Buenos Aires.
Los Gremios firmantes de la publicación expresaron:
“Nuestro compañero de lucha de estos últimos años, el
abogado que no mira la camiseta política ni el gremio al
que pertenece el obrero que reclama su ayuda, el hombre
que está en cada una de las conquistas de los

CCXLV
trabajadores ceramistas, petroquímicos y de la
alimentación; el hombre que está junto a nosotros
compartiendo alegrías y amarguras, corriendo los mismos
riesgos, recibiendo amenazas, es ahora un preso político,
un preso por su militancia de años junto a la clase obrera
para la cual vive dedicado todos los minutos de su vida.
Por todo lo dicho, consideramos este hecho como un
agravio contra el conjunto de los trabajadores de los
gremios a los que pertenecemos.” (Rosario, 13 de
noviembre de 1974).

VI. 2.- Las Luchas de Junio - Julio de


1975

En los primeros meses de 1975, ante el deterioro del


salario tras la trepada de los precios, creció la preocupación
en el Movimiento Obrero. Por ese tiempo, debían reunirse
las Comisiones Paritarias, congeladas por dos años desde
1973. La convocatoria del Gobierno no estipulaba topes en
la discusión salarial; se preveía que los acuerdos no serían
fáciles de lograr. En marzo, tras la presión sindical, el
Ministerio de Economía concedió un aumento de
emergencia de 400 pesos mensuales y devaluó la moneda
en un 50 %.
Los obreros del SOEPU, durante varias semanas,
discutieron en la fábrica y en el Gremio la situación que se
les planteaba. Comenzaron los contactos y las reuniones se
intensificaron. El punto central de las deliberaciones era
cómo organizarse, cómo encarar la lucha por las Paritarias,
y tras los debates señalaron:

CCXLVI
“Es indudable que la carestía crece día a día y, por lo
tanto, es lógico que los trabajadores tengan expectativas
sobre la posibilidad de conseguir importes reivindicaciones.
Estas expectativas han venido generándose
especialmente a partir de las falencias que ha venido
teniendo este gobierno. Por eso los trabajadores tratan de
conseguir en las paritarias parte de esas reivindicaciones
tanto tiempo postergadas. Lo del ‘arbitraje obligatorio’ no es
nuevo. Ya estamos acostumbrados desde la época de la
dictadura militar y ahora lo vemos de nuevo con este
‘gobierno popular’. Tampoco son nuevas las maniobras de la
burocracia sindical contra las aspiraciones de los
trabajadores. Nosotros creemos, lo venimos sosteniendo y
pregonando desde hace tiempo: los trabajadores de base
deben tener la máxima participación en la elaboración de
los anteproyectos de convenio. El proceso de discusión debe
venir desde abajo, impulsado por los delegados y activistas
de cada sección y luego a través de las asambleas de cada
lugar de trabajo y gremio. De esta manera, aparte de lo que
concretamente se consiga en las paritarias, iremos
contribuyendo a reforzar la organización y la participación
democrática de los obreros en la lucha por sus
reivindicaciones.” (1).
La oposición a la política del Gobierno Nacional se
expandió por todo el país. En marzo, en Villa Constitución
(Provincia de Santa Fe) se produjo una fuerte represión y la
detención de cientos de activistas y dirigentes de la UOM
local. La inquietud fue en aumento y los conflictos se
centraron principalmente en Córdoba, Rosario y Buenos
Aires.
Con el antecedente inmediato de la experiencia de la
Intersindical de San Lorenzo (1969 - 1973) y con numerosos
Gremios en conflicto, se pensó en la “coordinación de las

CCXLVII
luchas”. Luego de varias Asambleas en la planta industrial
de Sulfacid, los obreros se pronunciaron por la instancia de
aunar las distintas luchas de la zona. En el SOEPU
acordaban con lo resuelto:
“Los trabajadores de la zona tienen características y
reivindicaciones similares. Nuestro gremio no permanece
ajeno a este proceso de luchas que se va dando en toda la
zona y, constantemente, cuando han surgido conflictos por
reivindicaciones concretas, hemos expresado nuestra
solidaridad permanente en cada uno de ellos. Creemos que
ha llegado el momento en que esta solidaridad efectiva se
plasme en la unidad de los trabajadores a partir de las
necesidades concretas. Esto permitirá que, frente a los
problemas de insalubridad y a la lucha por mejores salarios,
se puedan encarar luchas de conjunto para facilitar el
logro de los objetivos que son comunes.
“Los distintos gremios de la zona ya han intentado en
varias oportunidades constituir a un organismo que los
nuclee. Algunos de estos intentos tuvieron resultados más
satisfactorios que otros, pero hasta ahora no se ha llegado a
una coordinación solidaria efectiva y permanente. Esta
ausencia ha permitido que las patronales, que sí actúan
apoyándose mutuamente, derrotaran algunas luchas de
gremios de la zona, que se desarrollaron en forma aislada.
Las experiencias vividas no pueden caer en el vacío. Es
necesario concretar este viejo anhelo de los trabajadores
de la zona, que puede traducirse en la celebración de un
acuerdo destinado a asegurar la mejor defensa de las
luchas obreras. No queremos la desunión actual del
movimiento obrero que se manifiesta en todo el país, y
creemos que hay que concretar la unidad de los
trabajadores sobre la base de una práctica verdaderamente
democrática.” (2).

CCXLVIII
Mientras tanto, en mayo, la CGT Nacional logró un
arreglo con el Gobierno: habría un aumento masivo y
uniforme del 38 %. El Ministro de Economía Gómez Morales
manifestó su desacuerdo y renunció antes de que se
firmaran los acuerdos de las Paritarias. El 2 de junio
asumió Celestino Rodrigo, con un plan económico que
constaba de la aplicación de una política de “shock” para
desacelerar la inflación y favorecer la inversión mediante el
aumento de la rentabilidad. Se trataba de lograr una
contracción del salario real y un aumento de las tarifas
tanto de los servicios públicos como de los combustibles. La
devaluación impuesta por Rodrigo beneficiaba a los
exportadores de cereales y a los ganaderos y tendía a la
concentración del gran capital industrial. La mejora para los
productos cárneos fue del 60 % y el tipo de cambio neto
para los cereales implicó un incremento del 184 al 239 %.
Vía devaluación y reembolsos se apoyaban las
exportaciones industriales dominadas por las
multinacionales.
Tras los primeros aumentos de precios, desde el
Ministerio de Economía se ofertó un incremento salarial del
45 %, que no tuvo eco. El 14 de junio se reanudaron las
Paritarias. Los aumentos logrados en las mismas por los
Gremios oscilaron desde el 60 u 80 % hasta el 200 %; pero
éstos debían ser ratificados por el Gobierno. De
homologarse lo surgido de las Paritarias, se daría por tierra
con el Plan Rodrigo.
La situación política, económica y social se fue
complicando, el estado deliberativo en la clase obrera
aumentó y crecieron las movilizaciones. Los titulares de los
diarios anunciaron sucesivamente un Plenario de la CGT, la
marcha de ocho a diez mil obreros de la Ford Motor
Argentina de Pacheco, ánimos caldeados por aumento del
costo de la vida, los trabajadores de Mendoza protestaron

CCXLIX
por el centro de la ciudad, la UOCRA logró en su Paritaria un
45 % de aumento, paritarias sin acuerdos en otros gremios,
clima de agitación en los grandes establecimientos
industriales, etc.. Por otra parte, no fue homologado ningún
convenio, luego que varios Gremios firmaran sus acuerdos:
UOCRA, UOM, UNIÓN OBRERA TEXTIL, SEGUROS, EMPLEADOS DE
COMERCIO. Sobre la última semana de junio, el Gobierno
informó que finalizaba el plazo para las Paritarias.
En Rosario, los afiliados de UPCN se concentraron en
la Plaza 25 de Mayo para rechazar las Paritarias del sector;
se sucedieron paros de los choferes de colectivos del
transporte urbano -apoyados por los conductores de
trolebuses-, huelga de los docentes, de los empleados de
comercio que reclamaban mayores aumentos de los
obtenidos en el Convenio. En la Zona Norte, protestaron los
Ceramistas, y el SOEPU dio a conocer un comunicado
firmado por su Secretario General, Ernesto Sosa,
expresando que “ante la falta de aceptación por parte de la
patronal de las justas reivindicaciones peticionadas por la
organización sindical, permanecemos en estado de
asamblea permanente, rechazando el aumento del 45 %
ofrecido por la parte empresaria. La cifra no cubre las
aspiraciones mínimas de los trabajadores”, y destacando la
masiva concentración de los Petroquímicos ante el
Ministerio de Trabajo, para lograr el aumento del 150 % y
otras aspiraciones. (3)
En el plano nacional, a raíz del estado de
movilización de los trabajadores, el viernes 27 de junio se
realizó un paro con una gran concentración en Plaza de
Mayo, convocado por la CGT, las 62 Organizaciones y la
UOM, para obtener definiciones del Gobierno sobre las
Paritarias. Hubo agitadas gestiones sindicales ante una
posible derogación de las Convenciones Colectivas del
Trabajo. Al día siguiente, la Presidenta Isabel Perón

CCL
contestó, dando a conocer su determinación: la anulación
de las Paritarias y el otorgamiento de un aumento general
del 50 % y de un 15 % más en octubre y enero de 1976. A
partir de esos anuncios, las protestas se intensificaron en
todo el país y el descontento creció entre los obreros.
En la Zona Norte del Gran Rosario, el estado
deliberativo entre los activistas, los miembros de
comisiones internas y las conducciones sindicales aumentó,
con reuniones e intercambio de opiniones sobre las medidas
a tomar. Lo sucedido fue narrado por un obrero
Petroquímico:
“En PASA se convocó inmediatamente a una asamblea de
fábrica. En poco tiempo nos reunimos en el galpón de
mantenimiento los obreros del turno, dejando pequeñas
guardias, los de la noche no fueron a sus casas. Fue una
asamblea con pocas palabras. El ‘Negro’ Sosa, nuestro
secretario general, hizo una panorámica de la situación,
concluyendo “tenemos que sacar la lucha fuera de la
fábrica. A la empresa ya la pusimos contra la pared,
ahora hay que doblegar la política del gobierno, que
había demostrado su carácter de clase, a pesar de su
careta popular”. Los discursos eran encendidos y cortos.
Impactantes, muy aclamados. Paradoja: no era contra la
dictadura militar y sí contra el ‘gobierno de los
descamisados’. Proponemos medidas impactantes, de
acuerdo con el momento y carácter de la lucha. “Tenemos
que movilizarnos conjuntamente a los otros obreros de la
zona”. Yo planteo con otros compañeros: “Marchemos
hacia Rosario, tratando de levantar las otras fábricas”. La
consigna levantada fue “Acabar con la medida decretada,
respetar los acuerdos firmados” (...). Todos los
trabajadores de la zona industrial recibieron nuestra visita.”
(4)
.

CCLI
Partiendo de esa iniciativa comenzó la marcha hacia
Rosario, tomando contacto con cada una de las fábricas de
la zona. Desde los aceiteros de San Lorenzo hasta los
textiles en Arroyito, se fueron sumando a la caravana. “A
pesar de que los químicos de Duperial habían sido los
principales compañeros de otras luchas, esta vez no
quieren acompañarnos, (se unirán el día siguiente), pero
otros trabajadores se unen a la marcha. En el centro de
Rosario nos encontramos con contingentes de obreros de
la ciudad y de Villa Constitución, cantando nuestras
consignas nos apoderamos del centro de la ciudad.
Finalmente nos concentramos frente a la CGT, pidiendo a
grito vivo, para que los burócratas salieran al balcón. Una
delegación de los sindicatos movilizados fue a pedirles que
asumieran la acción que espontáneamente -no tanto- la
clase trabajadora manifestaba en la calle el repudio a las
medidas del gobierno peronista”. (5)
La crónica periodística destacó la importante
movilización interfabril: “Un numeroso grupo de obreros
procedente de la zona industrial comprendida entre Puerto
San Martín y Granadero Baigorria, recorrió en la tarde de
ayer el centro de nuestra ciudad. Los manifestantes
portaban un cartel que decía: ‘Plena vigencia a la Ley
14.250’ y apoyaban con estribillos esa petición. Según lo
manifestado, se trataba de trabajadores petroquímicos,
químicos, ceramistas, del tractor, mecánicos, jaboneros y
también textiles”. A la vez, señaló que “la manifestación
tenía como objetivo pedir por la plena vigencia de la Ley
14.250, la homologación de los convenios de trabajo ya
concertados y la libre discusión de los restantes, y que la
CGT ratifique el pedido elevado el jueves pasado durante la
movilización en la Plaza de Mayo”. (6).
A los obreros de la Zona Norte se sumaron los
metalúrgicos de Rosario y de Villa Constitución, en una

CCLII
columna que superaba el número de tres mil personas;
éstas, luego de recorrer las calles céntricas, se dirigieron al
local de la CGT, donde el Secretario General a cargo de la
Central Obrera -Hugo Ortolán- desde los balcones del primer
piso se dirigió a los trabajadores exhortándolos a mantener
la calma y reiterando la postura de la CGT Rosario de
“acatamiento a todo lo que disponga la CGT Nacional”. La
mayoría de los manifestantes, que exigían una posición más
drástica por parte de la dirigencia cegetista, respondieron
con silbidos e insultos, retornando hacia la zona bancaria y
solicitando la adhesión de los trabajadores bancarios,
mientras se sumaban a la protesta los docentes.
Al día siguiente se produjo otra manifestación de los
metalúrgicos, a la que se unió la columna más numerosa
proveniente del cinturón industrial de la Zona Norte,
abarcando más de cinco cuadras. Luego de pasar por el
local de la UOM, se agruparon ante el edificio de la CGT,
donde se procedió a forzar la puerta y copar ese sitio;
arribaron posteriormente los dirigentes de la CGT,
produciéndose una acalorada discusión. Los manifestantes
continuaron con sus reclamos por las calles céntricas.
El panorama gremial mostraba a los metalúrgicos en
huelga, a lo que se agregaban los paros de las grandes
fábricas de la zona de San Lorenzo y Granadero Baigorria, el
cese de actividades de los docentes y los empleados
judiciales. Durante varios días, los obreros del cinturón
industrial y de Rosario reclamaron con masivas
manifestaciones (algunas, según las crónicas periodísticas,
superaban los ocho mil obreros), requiriendo la libre
discusión de los convenios en el marco de la Ley 14.250 y la
homologación de los ya pactados. Los dirigentes sindicales
de varios gremios fueron desbordados por las bases, como
también ocurrió en muchas zonas del país.
Ante la movilización de la clase obrera en todo el

CCLIII
territorio nacional, con paros regionales y zonales en
Rosario, Córdoba y el Gran Buenos Aires, la CGT Nacional
adoptó la determinación de realizar un paro por 48 horas, a
partir de la hora cero del día 7 de julio. La paralización del
país fue total; mientras tanto, desde el gobierno y la
burocracia sindical se intentaba negociar y, cuando se
estaba cumpliendo el segundo día del cese de actividades,
el Gobierno cedió: los acuerdos logrados en Paritarias
fueron homologados.

VI. 3.- El Surgimiento de la


“Coordinadora”
y su Significado

En esas jornadas surgió la “Coordinadora de Gremios


en Lucha” y los Petroquímicos, a través de su Boletín,
sintetizaron esos momentos:
“Los trabajadores petroquímicos ante la noticia de que no
se homologarían las convenciones colectivas de trabajo y se
daría un aumento por decreto del 50 %, ganamos la calle
para defender con nuestra lucha lo que la clase dominante
pretendía quitarnos con la lapicera. En esas jornadas nos
encontramos en la calle con miles de trabajadores de
distintas ramas de la producción, y codo a codo luchamos
hasta abortar la política económica, arrancando de los
resortes del poder a los ministros del hambre popular.
Pero los salarios conseguidos en las paritarias van perdiendo
día a día su poder adquisitivo ante el incesante alza del
costo de la vida, que se refleja en el aumento de tarifas e
impuestos, gas, electricidad, materiales de construcción,

CCLIV
ropa, útiles escolares, y todos los artículos de la canasta
familiar, etc.. Se nota también en la quiebra de los
pequeños productores, en la paralización de los planes de
vivienda, en el estado calamitoso de los hospitales,
desabastecimiento, en la inflación que ha alcanzado
porcentajes que van desde el 200 % al 450 %; en la gran
cantidad de desocupados, que genera una mayor oferta de
mano de obra y por consiguiente una constante
desvalorización de la misma; en la supresión de las
libertades democráticas; manteniendo el Estado de Sitio,
que hace que compañeros como Piccinini, Ongaro, Zamboni,
etc., deban permanecer presos o irse del país sin haber
cometido otro delito que defender los intereses de la clase
trabajadora. En la intervención a sindicatos democráticos,
Luz y Fuerza, Smata (Córdoba), UOM (Villa Constitución),
Cetera (Nacional), etc., se aprecia que nuestra victoria fue
parcial en nuestros compañeros más representativos y
honestos que han regado con su sangre el camino de
nuestra emancipación definitiva, mudos testigos de la
represión y la barbarie a la que nos somete la clase
dominante. Todo lo expuesto deja meridianamente claro
que la crisis social, política y económica día a día se
agudiza. Por ello se hace necesario que los trabajadores
coordinemos nuestras luchas, que nos unamos, a los
efectos de que, unidos y organizados demos por tierra
con todos los intentos del gobierno, burocracia sindical,
milicos y explotadores, de sumergirnos en la miseria
física y social que han programado para nuestra clase, y
que se viene cumpliendo tal cual lo detallamos
sintéticamente en los párrafos anteriores. Con ese
pensamiento y esa necesidad y como consecuencia de las
luchas de julio, la C.D. del Sindicato Petroquímico junto al
frente gremial docente, compañeros de John Deere,
Hanomag, Construcción, UPCN, Judiciales, Municipales,

CCLV
Bancarios, Mercantiles, Metalúrgicos, Sanidad, Duperial,
Ceramista, Vilver (Villa Constitución y Rosario), Sulfacid,
etc., constituyeron la Mesa Provisoria de la ‘Coordinadora
de Gremios en Lucha’ y sigue trabajando para la
conformación definitiva de la misma.”
“SI LOS PATRONES COORDINAN PARA EXPLOTAR, LOS
TRABAJADORES COORDINAMOS PARA ERRADICAR LA
(7)
EXPLOTACIÓN.” .
Los Petroquímicos y otros Gremios de la Zona
Industrial volvían a integrar una nueva Organización, como
lo habían hecho cuando se conformó la Intersindical en
1969. La “Coordinadora de Gremios en Lucha” estuvo
integrada por algunas conducciones sindicales, comisiones
internas de varias fabricas, agrupaciones obreras y
activistas gremiales. Su funcionamiento se caracterizó por
un amplio ejercicio de la democracia obrera, en todas las
instancias.
Luego de las jornadas de lucha, la polémica de lo
acontecido continuó en las fábricas, en los sindicatos y en
toda la zona industrial. En el SOEPU analizaron críticamente
la situación:
“Después de Gelbard, hemos tenido cuatro ministros de
Economía, de los cuales tres viajaron a los EE.UU.,
reincidiendo en actitudes que anteriormente no sólo no
habían solucionado el ‘subdesarrollo’ sino que terminaron
encadenando aun más al país a la dependencia. Invocando
una supuesta ‘crisis mundial’, que técnicamente no es más
que la crisis del sistema Capitalista mundial, el ministro
Rodrigo provocó un desmesurado aumento de los precios, e
invocando irónicamente los ‘intereses nacionales’, quiso
implantar una política salarial de hambre e infraconsumo.
Son conocidas las consecuencias que tuvo esta política. La
clase obrera a la cabeza, junto a otros sectores

CCLVI
nacionales, consiguieron el desplazamiento de Rodrigo y de
casi todo el grupo Lópezrreguista, o sea de los grupos más
fascistizantes y pro-imperialistas. Sin embargo, si bien se
logra un desplazamiento de personas y la firma de
convenios salariales más acordes con las necesidades, no se
ha logrado que variara fundamentalmente la política
económica. A una situación de zozobra e improvisación, el
nombramiento de Cafiero pareció señalar el inicio de una
nueva etapa. Pero el nuevo equipo económico no ha
presentado todavía a la Nación un plan global que
contemple esencialmente los intereses nacionales. La
situación es verdaderamente difícil; pero no debemos
escaparle a esa realidad (...) debemos estrechar filas,
uniéndonos hoy más que nunca, conversando, luchando,
buscando el camino que corresponda para cada situación,
dándonos sobre la marcha la organización que nos hace
falta y que nos lleve a construir, definitivamente, nuestro
destino como hombres libres, felices y fraternos.” (8).
Las luchas contra el Plan de Rodrigo - Isabelita y por la
homologación de los aumentos salariales obtenidos en las
Paritarias, fue una de las movilizaciones obreras como quizá
nunca haya vivido la Argentina y que dejaron a la burocracia
sindical sin sustentación, viéndose obligada a llamar dos
veces al Paro General, el 27 de junio y el 7 - 8 de julio de
1975. Fueron quince días en que el país estuvo
prácticamente paralizado, con masivas y permanentes
marchas obreras en todo el territorio nacional,
especialmente en los cordones industriales del Gran Buenos
Aires, Rosario y Córdoba. Las concentraciones en Plaza de
Mayo y en las principales plazas del país, a pesar de la
burocracia, adquirieron un claro contenido político,
exigiendo y logrando la anulación del “decretazo” de
Isabel Perón y la renuncia de sus Ministros Rodrigo y López

CCLVII
Rega.
Las movilizaciones, la organización que se dio en esas
jornadas, el estado deliberativo, la rebelión de las bases y la
bronca de toda la clase obrera, hicieron fracasar el “Plan
Rodrigo”, y fue la base para que la burocracia sindical
negociara, para posteriormente sostener al debilitado
Gobierno de “Isabelita”, logrando parar la movilización.
Durante esos días de junio y julio de 1975 se vivió un
clima de agitación, de enfrentamiento a la política
gubernamental; y se fue dando un espacio que viabilizó el
surgimiento de esas formas organizativas de la clase
obrera, sustentadas en la solidaridad, los principios de la
democracia de base y la defensa de sus intereses.
“Las gloriosas jornadas de julio muestran lo poderoso que
somos cuando nos decidimos a luchar por nuestros
intereses. La producción del país, en esos días, bajó
considerablemente y cuando al gobierno se le ocurrió
sacarnos lo que habíamos conseguido en la lucha, salimos a
la calle y como un solo hombre expresamos nuestra bronca
contra nuestros circunstanciales enemigos López Rega
-Rodrigo, etc.. Patrones, burócratas, milicos y gobierno
temblaron, marcha y contramarcha, comunicados,
reuniones, trataron de parar esta incontenible demostración
de fuerza y combatividad. No lo consiguieron. Triunfo parcial
de la clase obrera. Fue parcial porque el enemigo está
asustado, pero en pie. Ya están reacomodándose: licencia
presidencial, cambio de ministros, arreglo entre partidos,
discursos, palabras y más palabras. Con un solo objetivo:
QUE LA CRISIS LA PAGUEN LOS OBREROS.
“Fuertemente unidos, junto al resto de la clase obrera,
discutiendo y decidiendo en asambleas democráticas, sin
delegar en otros lo que nosotros mismos debemos resolver,
nos fortaleceremos cada vez más para responderle a la

CCLVIII
patronal ante cada atropello y a las bandas armadas ante
cada amenaza. Los petroquímicos hemos demostrado lo
que somos capaces de hacer: recordemos la presencia
masiva en el Ministerio de Trabajo, la recorrida de las
fábricas, las manifestaciones en Rosario. Por ese camino
iremos marchando, hasta derrotar a nuestro enemigo,
haciendo pagar la crisis a los verdaderos culpables: LOS
(9)
PATRONES.” .
En el caso de la “Coordinadora de Gremios en Lucha”,
a diferencia de otras surgidas en distintos puntos del país,
donde las organizaciones fabriles desbordaron a los
dirigentes sindicales, ésta estuvo integrada e impulsada por
varias conducciones sindicales combativas y clasistas. Las
movilizaciones, las luchas y los saldos organizativos de esas
semanas, deben verse como un hito de la lucha de la clase
obrera, ya que además de los logros obtenidos, surgieron
nuevas formas de coordinación en zonas de grandes
concentraciones obreras que enfrentaron la política del
gobierno nacional y en muchos casos al margen de las
dirigencias sindicales.
“El control por el Estado desde arriba, a través de los
dirigentes peronistas, el empuje y la organización de los
trabajadores desde abajo, marcó desde entonces (1945) a
los sindicatos industriales de masas argentinas. En el
‘Cordobazo’ de 1969, pero sobre todo en la huelga general
de julio de 1975, la tensión permanente entre estas dos
determinaciones entró en conflicto antagónico. En ambas
ocasiones, el factor decisivo de organización de las luchas
fueron los organismos de fábrica. Pero en 1975 éstos
desbordaron durante varios días a la alta dirección sindical,
se coordinaron independientemente de ella y entraron en
contradicción directa con el gobierno peronista y con el
Estado. No tenían los medios ni la preparación, sin embargo,

CCLIX
para ofrecer una alternativa política a esa crisis. Este
desbordamiento por los organismos de fábrica fue
posiblemente el índice más determinante en la decisión del
ejército de tomar en sus manos el Estado para reprimir y
tratar de destruir al movimiento sindical.” (10).
Las fechas en que se conformaron la Intersindical de
San Lorenzo y la Coordinadora de Gremios en Lucha fueron
dos momentos de ascenso de las luchas de la clase
obrera. La primera surgió con las movilizaciones del
Cordobazo y los Rosariazos en 1969; la segunda, durante
los pronunciamientos proletarios de Junio - Julio de 1975.
Decíamos que la “Inter” nació durante las luchas de
Mayo del ‘69 y, tras el descontento con la dirigencia de la
CGT Rosario, impulsó reivindicaciones en el plano
económico y político. A la vez, manifestó la solidaridad a
nivel local, nacional e internacional, y practicó en forma
activa la democracia de base. Por su parte, la
“Coordinadora” lo hizo durante las marchas desde Puerto
San Martín hasta Rosario y las luchas de Junio - Julio de
1975, por la homologación de las Paritarias, durante lo que
se dio en llamar “la rebelión de las bases”. Por eso
afirmamos que ambas organizaciones surgieron por y para
la lucha, por la solidaridad de clase, en defensa de sus
intereses, practicando en todo momento la democracia
obrera.
Ambas fueron perseguidas y reprimidas, desde sus
dirigentes sindicales, comisiones internas y militantes
obreros hasta los abogados laboralistas de la zona, con
cárcel, desapariciones, torturas e intervenciones a los
Sindicatos, bastante tiempo antes del Golpe Militar de 1976,
o sea durante el gobierno de Isabel Perón.
Coincidimos con la apreciación que plantea “cuando
el consejo sale de su fábrica y se une a los de otras fábricas
en una red que se extiende al cuerpo social,

CCLX
inevitablemente entra en un conflicto con el poder del
Estado (...) Cada vez que un acontecimiento similar se ha
presentado o ha amenazado presentarse, ha coincidido con
un alto nivel de la actividad huelguística, social y política del
proletariado, y ha provocado la inmediata reacción del
Estado para recuperar sus prerrogativas amenazadas y
restablecer la autoridad del capital -o del Estado- en las
fábricas”. (11)
En los meses posteriores a junio - julio, comenzaron a
aparecer frecuentemente en el discurso de militares,
empresarios, políticos y sindicalistas, las apelaciones a la
lucha contra la “guerrilla fabril”, “las huelgas salvajes” y los
“infiltrados en el movimiento obrero”, tras lo cual “toda la
potencia represiva del Estado... se concentró furiosamente
sobre las fábricas, los trabajadores y sus aliados con todos
los medios a su alcance...”.
El SOEPU denunció la represión desatada en esos días,
a través de un pronunciamiento -Contra la Escalada de
Terror y Matonaje- en el cual plantearon: “La escalada
terrorista que invade el país, y que invariablemente ha
quedado impune (jamás se encontró un asesino a sueldo del
imperialismo), los asesinatos, cárceles, invención de falsos
complots. Secuestros, amenazas a auténticos exponentes del
arte popular, a políticos, etc.. Las amenazas a nuestro asesor
letrado y a uno de nuestros dirigentes, las amenazas a un
dirigente de los obreros de Sulfacid y su familia, la
inmolación del joven compañero José Polenta. No podríamos
comprender la existencia del terrorismo y el matonaje impune,
sin entender el poder que lo nutre”. (12)
Desde 1969 se fueron dando formas organizativas
democráticas, con gran participación de las bases obreras,
estableciéndose así profundas relaciones interfabriles, con
innumerables contactos regionales y nacionales. A esto, se
sumó la intensificación de los vínculos y debates en el

CCLXI
interior de las plantas industriales, de una fábrica a otra, de
las zonas industriales a los barrios obreros. Por eso, el
principal objetivo de la Dictadura Militar del ‘76 fue frenar
ese proceso en ascenso, destruir y paralizar toda esa
organización que se venía gestando. La represión más
violenta fue contra los dirigentes, militantes y cuadros
obreros. Miles de miembros de comisiones internas,
sindicalistas, abogados laboralistas, integran la lista de los
desaparecidos; otros tantos fueron asesinados; otros miles
encarcelados; muchos marcharon al exilio externo e interno.
Los militares genocidas continuaron lo que desde hacía un
tiempo venían llevando a cabo las bandas parapoliciales:
asesinar delegados de fábrica.
Las limitaciones de esas luchas de junio - julio de
1975 pueden ubicarse las Coordinadoras, que no
pudieron evitar que la burocracia sindical negociara con
la fuerza de las movilizaciones, a lo que se sumó la posterior
derrota infligida al proletariado por parte de la burguesía,
con la represión desatada en los meses siguientes. Por
otra parte, numerosos entrevistados nos destacaron la falta
de formas organizativas de autodefensa, para la protección
de los activistas, militantes y miembros de comisiones
directivas.

VI. 4.- Algunas Reflexiones sobre

CCLXII
las Luchas de Junio - Julio de 1975

La lucha por el derecho a la organización sindical del


proletariado, en tanto vendedor de fuerza de trabajo y
organizado en sindicatos, signó toda una etapa de la
historia de la clase obrera, en la cual se dispuso a discutir
con la burguesía el valor de cambio de su mercancía.
La clase obrera se organizó en los Sindicatos para
resistir bajo una forma que se destaca porque el
proletariado pugna para que dinero - mercancía se pague
por más dinero. Por supuesto que la mercancía es fuerza de
trabajo. Pero, para entender mejor esto, ¿cómo resiste el
proletariado? Igual que el tendero, porque regatea con su
mercancía: como libre vendedor de su fuerza de trabajo,
exige más dinero; en el caso que se lo nieguen, no vende y
hace huelga.
En todo ese largo camino de resistencia del
proletariado a la burguesía, los libres vendedores de fuerza
de trabajo fueron necesitando de una organización externa
a las fábricas. Porque: ¿Quién organiza al proletariado
dentro de la fábrica? La burguesía. ¿Dónde y Cómo se
organiza el proletariado? Estar dentro o fuera de las
fábricas no consiste simplemente en un hecho geográfico,
porque fuera están los libres vendedores de fuerza de
trabajo y dentro están los obreros desposeídos de su
fuerza de trabajo. Dentro de las fábricas, la fuerza de
trabajo es posesión del capital y el salario se ha convertido
en capital variable. El vendedor de fuerza de trabajo está
siendo desplazado por el desposeído, en la que el libre
ciudadano, en el plano del intercambio, está siendo
reemplazado por el esclavo asalariado en el plano de la
producción.

CCLXIII
La Organización Sindical, organización de los libres
vendedores de fuerza de trabajo, no se proponía -por lo
menos en su surgimiento- más que el papel de resistencia
a la explotación capitalista, ya fuere en lo concerniente a las
condiciones de trabajo como en el plano salarial. Y la
organización sindical por rama de la producción pasó a
ser estimulada por la propia burguesía, que necesitaba
planificar la producción y, por ende, necesitaba planificar el
precio de la mercancía fuerza de trabajo. Surgieron así los
Contratos Colectivos de Trabajo, que inclusive fueron
incorporados por la legislación del Estado burgués y pasaron
a ser la forma más difundida del contrato de trabajo.
Los contratados ya no eran los obreros individuales
sino el conjunto de los obreros en cada rama de la
producción. Es decir, se constituía el monopolio de los
propietarios de la mercancía fuerza de trabajo, en oposición
a los intentos de monopolización de la fuerza de trabajo por
parte de la burguesía. Esto era expresión también de que se
terminaba la etapa de libre cambio entre los propios obreros
y era equivalente, en lo atinente a la venta de la fuerza de
trabajo, de lo que es la expansión capitalista en la fase de
los monopolios.
El contrato colectivo de trabajo, por ley, no es ley
para el conjunto, pero sí es ley para las partes. El Estado se
limita al papel de “guardián” para que lo acordado entre las
partes se cumpla. O sea, hay una injerencia del Estado, el
cual si bien no toma parte en la libre contratación, sí vela
por su cumplimiento. Pero en realidad, ¿qué es lo que se
está haciendo al firmar el convenio colectivo de trabajo? Se
está planificando la venta de la fuerza de trabajo a tiempo
fijo por rama de la producción.
Con las Paritarias, como órgano de discusión,
continuaron afirmándose los convenios colectivos,
conteniendo la posibilidad que arbitrase el Estado en caso

CCLXIV
de desacuerdo entre las partes. El Estado aparece así
reglando “por encima” de las clases -claro está, de las
clases “compradora y vendedora”-. Esto evidencia una
contradicción mayor entre el proletariado y la burguesía
-que ya no podían ponerse de acuerdo- aunque más no sea
en la esfera del intercambio. Por eso, el guardián del
“interés general” -el Estado burgués- debió comenzar a
intervenir, decidiendo lo que las partes no podían conciliar.
La contradicción entre “compradores” y
“vendedores”, aunque las partes aparecen como iguales
ante la ley, se expresa primero en la esfera del intercambio,
pero termina por introducirse en la esfera de la producción:
El valor de cambio de la fuerza de trabajo, vía Convenios
Colectivos y Paritarias, progresivamente se transformó en
una limitación al uso capitalista indiscriminado de la fuerza
de trabajo. Así, “los vendedores” le fueron arrancando a la
burguesía una serie de derechos laborales bajo la forma de
derechos especiales de los trabajadores, lo que significaba
una profundización del reconocimiento de que el obrero es
un ser humano. Esto no representaba otra cosa que la tan
mentada “humanización” del capitalismo.
Y relacionando esto con las luchas de junio - julio de
1975, ¿Por qué se desató el conflicto? ¿Cuál fue el conflicto?
¿Qué tipo de respuesta tuvo la clase obrera ante la No
Homologación por parte del Gobierno Nacional de los
aumentos salariales acordados en Paritarias? ¿Qué expresó
la lucha en esas jornadas?

Durante esos días, el Estado no homologó lo acordado


entre los compradores y los vendedores; el Estado “reguló
por encima de las partes, por sobre las clases”. Los obreros
reaccionaron como ciudadanos “libres vendedores de su
fuerza”, ante una medida política del gobierno. La lucha fue
de lo económico a lo político, se enfrentó la disposición

CCLXV
política de “regular por encima de las parte, por sobre las
clases”. Se pasó de la discusión en Paritarias, de los
acuerdos entre “las partes” no sin conflictos y amenazas de
huelgas, a enfrentar el Decretazo de la Presidente Isabelita
y su Gobierno Nacional. Se produjeron grandes
movilizaciones contra esa medida, en una lucha política
contra el mismo Gobierno, y surgieron nuevas formas
organizativas de la clase obrera. El resultado fue el logro de
la homologación de lo convenido en las distintas Paritarias y
las renuncias pedidas de los Ministros Rodrigo y López
Rega.
En esas jornadas se logró un nexo activo y articulador
entre los Comités de Fábricas, Comisiones Internas,
delegados de fábrica, algunas Comisiones Directivas con
mandatos de Asambleas y activistas gremiales, lo que dio
lugar al surgimiento de las Coordinadoras de Gremios, como
la de la Zona Norte del Gran Rosario, La Plata, el Gran
Buenos Aires y Córdoba. Fueron el vínculo de los obreros
entre si, fue la conexión de los libres vendedores de su
fuerza de trabajo fuera de las fábricas, que enfrentaron una
medida arbitraria del gobierno, que laudaba por sobre las
partes, por encima de las clases.

CCLXVI
APÉ NDI CE DO CUME NT AL

CCLXVII
Como consecuencia de una Reunión de la Comisión
Directiva y el Cuerpo de Delegados, realizada el 21 de Febrero
de 1969, se hizo realidad un postergado deseo de muchos
Petroquímicos: publicar un Boletín del Gremio, cuyo primer
número apareció en Abril de ese año.
En el primer editorial se especificaba que “son nuestras
intenciones, hacer conocer a los afiliados del SOEPU, las
actividades que realiza la C.D., en lo que respecta a sus
reuniones internas, tratativas con la empresa, denuncias
presentadas al Departamento de Trabajo, aclaración de
artículos del Convenio, y todas las inquietudes que de una u
otra manera, nos hagan llegar los compañeros”.
Luego de publicarse varios números, en agosto de 1971
el Boletín pasó a denominarse “El Petroquímico”, marcando
el comienzo de una nueva etapa en materia de informaciones.
Aseguraba la Subcomisión de Prensa que, “de ahora en más,
cualquier compañero puede dar a conocer una idea o
comentario que le pertenezca o reproducir cualquier noticia
que lo haya impactado, de cualquier índole: gremial, social,
cultural, económica, política, etc.. Las notas podrán salir
rubricadas por nombre o por seudónimo”.
Se pretendía dar a los afiliados la posibilidad de
expresar libremente sus ideas, y se aclaraba que no era
patrimonio de un grupo. “Todos podemos y debemos escribir
en ‘El Petroquímico’, porque no es solo el órgano de expresión
de la C.D. y el Cuerpo de Delegados, sino del Obrero de PASA.
Somos defensores de la crítica constante. Porque de ella sale
la verdad”, rezaba una de las convocatorias a los afiliados del
SOEPU. La Subcomisión de Prensa, en esa época, estaba
integrada por Víctor Arellano, José Poles y Luis Palmieri.
La publicación aparecía cada dos, tres o cuatro meses,
según las circunstancias gremiales o políticas que se vivían; no

CCLXVIII
existió una regularidad en la misma. Entre Abril del ‘69 y el
Golpe Militar del 24 de Marzo de 1976 -cuando fue intervenido
el Sindicato- se editaron treinta y cinco números, de los cuales
hemos recuperado una buena cantidad.
Los temas que se trataron y publicaron durante los siete
años de existencia del Boletín pueden incluirse en seis grandes
grupos: gremiales, políticos, sociales, culturales,
internacionales, y deportivos.
De esa manera, se pueden leer artículos sobre el cuerpo
de volantes, los aumentos salariales, las horas extras, el Día
Internacional de los Trabajadores, el ingreso de nuevos
operarios, el impacto económico de los aumentos de los
productos de la canasta familiar, las luchas populares de 1969,
las tratativas en la Comisión de Reclamos, los dirigentes
gremiales, las novedades en las discusiones del Convenio
Colectivo de Trabajo, las Paritarias, la Intersindical, el Plenario
de gremios combativos, la democracia de base, las huelgas de
distintos Gremios, la Ley de Alquileres, la represión y la
violencia oficial, el sistema socialista, los quite de
colaboración, la burocracia sindical, los problemas de salud de
los petroquímicos, los pedidos de libertad a los presos
gremiales, políticos y estudiantiles, el 17 de Octubre de 1945,
el trabajo en turno y sus consecuencias, las posiciones
políticas de la O.E.A., los saldos de la Guerra de Vietnam, el
falleci-miento del Secretario General del Sindicato Néstor
Moglia y su señora esposa, la Ley de Asociaciones
Profesionales, el adiós a la dictadura, el imperialismo, la lucha
por la capacitación / rotación, las empresas contratistas, notas
sobre Perón y Evita, las Asambleas del Gremio, crónicas de
conflictos obreros, la detención del Asesor Letrado del Gremio
Dr. Horacio Zamboni, la escalada de terror y matonaje, la
Coordinadora de Gremios en Lucha, la contaminación, los
torneos de fútbol, los ciclos de cine y teatro, la obra social, las
vacaciones, etc..

CCLXIX
Uno de los objetivos de este Apéndice, con 120 artículos
y notas del Boletín de los Petroquímicos, es dar a conocer esta
base documental, cuya difusión permita conocer lo realizado
por los miembros de este Gremio -uno de los Sindicatos clave
de la historia del movimiento obrero en los años ‘60 y ’70- y
posibilite distintas investigaciones con otros abordajes y
miradas.-

Boletín “EL PETROQUÍMICO”

1.- CUERPO DE VOLANTES

Una de las más importantes conquistas de nuestro sindicato,


fue conseguir el Cuerpo de Volantes. Mediante el mismo,
solamente habiendo en toda la planta más de tres ausencias,
tenemos la obligación de quedarnos por falta de relevo, y hasta
cumplir un máximo de 30 horas mensuales o 120 anuales.
Consideramos que se trata de un doble logro: por un lado, se
ha posibilitado el ingreso de doce compañeros; por el otro, hemos
limitado las repetidas jornadas de 16 horas que terminaban con
nuestra salud, y nos transforman en simples instrumentos del
“deber”.
Tenemos que comprender que los 8 o 10 mil pesos, que
podamos sacar por horas extras, no se suman a nuestro salario
o sueldo haciéndolo más importante. El mismo tendrá valor
efectivo cuando lo consigamos con las horas normales de trabajo,
es decir luchando por incrementar el básico.
El hipotético buen sueldo, obtenido de aquella manera, no
compensa, indiscutiblemente, el descanso forzado, ni el privarnos
de estar junto a nuestra familia.
Por eso que insistimos en que no tenemos bajo ningún punto
de vista, la obligación de quedarnos por falta de relevo, o por
exceso de trabajo, siempre que no haya más de tres ausencias en
el turno. Es problema de la Empresa si el Cuerpo de Volantes no
está capacitado para hacer los reemplazos, ya que esto se puede
lograr cuando no hay falta de personal.-
Boletín Nº 1 - Abril 1969; pág. 1.-

CCLXX
2.- AUMENTO ?

Fue la primer noticia del año: Onganía y Krieger Vasena, en


una determinación tan esperada como descarada, otorga a los
trabajadores un incremento en sus salarios básicos del 8 %, y
congela nuevamente los convenios colectivos de trabajo, únicas
armas legales para defender nuestros intereses.
Ante este sombrío panorama, la C.D., tomando el análisis
hecho por empleados y obreros de PASA, sintetizando en:
a) MAYOR PRODUCCIÓN, (léase grandes ganancias),
b) PRÁCTICAMENTE IGUAL SUELDO (léase peores condiciones
de subsistencia, debido al alza del costo de la vida),
solicita al Directorio de la Empresa, un justo aumento de
emergencia al Directorio de la misma, en carta dirigida a A. O.
Pipkin, el 7/1/69.-
Boletín Nº 1 - Abril 1969; pág. 1.-

Respuesta

Tras largas discusiones y análisis profundo de las “incidencias


que el aumento tendría en el normal desenvolvimiento económico
de la Empresa”, el Directorio de PASA resuelve, después de dos
meses y seis días, “conceder” un incremento sobre las
bonificaciones de antigüedad, que representan menos del 1 % de
nuestros salarios.
Esto nos obligaría a pensar que PASA no está en condiciones
de afrontar lo pedido por nuestra Organización; pero creer esto,
significaría no tener conocimiento de la superproducción de
caucho y negar sus extraordinarios ingresos.
Al ser nosotros parte fundamental con que la Empresa cuenta
para llevar a cabo sus objetivos de lucro, repudiamos en forma
terminante su oferta, y nos consideramos burlados en virtud del
análisis anteriormente realizado.
Esta fue la determinación unánime de la Asamblea General
Extra-ordinaria del 14/3/69.-
Boletín Nº 2 - Abril 1969; pág. 2.-

CCLXXI
3.- NO MÁS HORAS EXTRAS ! !

Transcribimos a continuación, parte de la Resolución Nº 15


del Departamento Provincial de Trabajo, por la que se
reglamentan las excepciones a la Ley 11.544, sobre horas extras.
Por los Artículos 1 y 2, “se dispone que cuando se solicite la
prolongación de la jornada legal en uno o varios días de la
semana, sea presentada constancia del acuerdo con el
personal o entidad sindical, identificación del empleado y casa
empleadora, razón del pedido, duración de la excepción, etc.”.
Por el Artículo 4 se “reglamentan los días de anterioridad con
que debe efectuarse la solicitud, el día en que se otorgará el
descanso, recargo con que serán abonadas las horas extras y
otros detalles”.
COMO CONSECUENCIA DEL MISMO, A PARTIR DEL 1/4/69, NO SE
REALIZARÁN MÁS HORAS EXTRAS, SALVO CASO DE EMERGENCIA
(PELIGRO DE EXPLOSIÓN O INCENDIO) O AUSENCIA EN EL TURNO DE
MÁS DE CUATRO RELEVOS.-
Boletín Nº 1 - Abril 1969; pág. 2.-

4.- 1º DE MAYO, DÍA INTERNACIONAL DEL


TRABAJADOR

Suena en nuestros oídos, como un ruido lejano, la lucha de los


Mártires de Chicago, como así el padecimiento de miles de
obreros en jornadas inagotables de trabajo, de 13 y hasta de 16
horas, en condiciones inhumanas.
Costó a la clase obrera años de lucha para poder unirse e
iniciar el camino hacia una jornada de 8 horas, con un sueldo para
poder subsistir en forma más humana.
Actualmente dicha jornada, es parte integrante de las leyes
vigentes en casi todo el mundo; pero en nuestra país debido al
constante deterioro del poder adquisitivo de la moneda, es
prácticamente imposible que ello se cumpla. Algunos sacrifican su
descanso en agotadoras horas de recargo, otros, se ven obligados
a trabajar en dos lugares. Evidentemente esta no es la solución
de subsistir.
Por ello es que el 1º DE MAYO es un día de protesta, que se
transformará en un día de gloria, cuando consigamos

CCLXXII
posibilidades de trabajo iguales para todos, y una jornada de 8
horas, con un sueldo acorde a las necesidades actuales.
Por eso queremos llegar, en este día, a todos los compañeros
del SOEPU, con estas líneas, puesto que nuestra actitud fue y
será consecuente con este planteo, y para que cada uno de
nosotros, reflexione sobre la importancia que tiene la
preservación de nuestras conquistas laborales, por la cual esta
Organización viene bregando.-
Boletín Nº 2 - Mayo 1969; pág. 2.-

5.- 32 COMPAÑEROS INGRESAN A PASA Y AL SOEPU

Reunión de Comisión de Reclamos, día 15 de abril: los puntos


2 y 3 dicen textualmente:
1.- “Solicitamos que dentro de un plazo máximo, a fijarse en
esta Comisión de Reclamos, de común acuerdo, se efectivice al
personal contratado por exceso de trabajo que la Empresa
considera necesario”.
2.- “Asimismo solicitamos el preaviso, y pago de
indemnización correspondiente al personal contratado que no ha
hecho relevo de vacaciones”.
El primer pedido (punto 1) tuvo eco favorable. PASA, a partir
del 1/5/69 efectivizó a 32 compañeros contratados.
Respecto del punto 2, la Empresa no renovó contrato a 8
compañeros, pero los indemnizó de acuerdo a lo que dicta la ley.
Aproximadamente 14 compañeros continúan con contratos
por “tiempo determinado”, pero cobrando salarios y beneficios de
Convenio, como si estuvieran efectivos, además serán
indemnizados al finalizar su contrato.
Se vio coronada así la gestión del SOEPU de evitar se especule
con quienes, por no tener trabajo, se veían obligados a aceptar
contratos con condiciones inferiores al Convenio.
Se velará de aquí en más, para que aquellos que ingresen con
contratos “por tiempo determinado”, lo hagan en esas
condiciones.-
Boletín Nº 2 - Mayo 1969; pág. 3.-

CCLXXIII
6.- IMPACTO ECONÓMICO

En el curso del corriente mes, se dispuso el aumento de la


nafta de $ 7 por litro, lo que en realidad equivale a un aumento
superior del 20 %. Reporteados funcionarios del Gobierno,
manifestaron, que en el costo de la vida, solo incidiría en un 5 %.
A través de la larga experiencia que nos toca vivir, en una
incesante desvalorización de nuestra moneda, sabemos
conscientemente, de las falsas declaraciones oficiales.
Como ejemplo, tomaremos un solo artículo necesario e
imprescindible en todos los hogares, actualmente el litro de leche
nos cuesta $ 35 y se anuncio un aumento que oscila de $ 3 a $ 6
por litro. Es decir un aumento del 10% de ser la cifra menor, hasta
un incremento del 19 %.
El transporte ferroviario aumentó el 25 %, por este medio de
comunicación se transporta el 60 % de los artículos de primera
necesidad.
La deducción final es sencilla: nuevamente los hogares de los
trabajadores Argentinos, sufren un impacto económico
desastroso.-
Boletín Nº 2 - Mayo 1969; pág. 5.-

7.- Editorial

Escribíamos en nuestro último Boletín, un artículo acerca del


1º de mayo, donde manifestamos sentir en las fibras más íntimas,
el clamor incesante de justicia de los trabajadores de todos los
tiempos, a través de una historia manchada de sangre y
brutalidad. El castigo, el sufrimiento y el hambre, fueron motivos
para que el esclavo, el obrero, el oprimido, se sublevaran. El
trabajador cambió su tremenda fuerza productiva, por miserables
condiciones de vida, considerando su vida, como el solo hecho de
existir. Pero pronto quiso elevarse a la condición de hombre. Y
luchó. Y su lucha fue y parece ser eterna, pues mediante ella
pudo, puede y podrá conseguir los más elementales derechos
humanos.-
Boletín Nº 3 - Junio 1969; pág. 1.-

CCLXXIV
8.- LA VERDAD

*.- El estudiante no salió a la calle, simplemente porque se


aumentó el ticket del Comedor Universitario en la Universidad del
Nordeste.
*.- El obrero no salió a la calle simplemente en apoyo del
estudiante, ni en solidaridad con los obreros mecánicos,
perjudicados por las quitas zonales y el sábado inglés.
*.- Onganía y Lanusse, entre tantos, no asesinaron,
encarcelaron, reprimieron, etc., para restablecer la paz perdida
(?), protegiendo al pueblo (?) de 2.000 extremistas rosarinos o
2.500 obreros - extremistas cordobeses, que perturbaban el
orden, con el solo fin de agitar y sin motivo.
*.- El estudiante salió a la calle, en expresión de repudio por
la Ley Universitaria, por el limitacionismo, por los aranceles, por la
eliminación del gobierno tripartito, contra los antiquísimos
programas de estudios, contra las infinitas trabas que se le
imponen (exámenes preuniversitarios filtros, correlatividades,
aumento de años de carrera), contra la privatización de los
comedores universitarios, contra la privatización de la enseñanza
(muy incentivada por el gobierno), contra la presencia de la
policía en la Universidad, etc..
El estudiante consciente, salió a la calle para luchar contra la
filosofía de las botas y de las clases altas: “El hijo de obrero,
obrero”.
Cabral y Bello murieron luchando por una Universidad abierta
al pueblo, y por la formación de profesionales aptos al servicio del
país (del pueblo).
*.- El obrero salió a la calle, en expresión de lucha contra el
congelamiento de salarios, contra el alza de los precios de los
productos de primera necesidad, contra el aumento del costo de
la vida, por la no discusión de los convenios colectivos de trabajo,
por la racionalización (despidos masivos, para producir más con
menos hombres), por la entrega de las riquezas nacionales, por la
ley de jubilaciones, por la intervención de sindicatos, por la
persecución de dirigentes sindicales, por la desocupación, por el
hambre en Tucumán, Chaco, etc..
El obrero salió a la calle por un profundo desprecio contra el
gobierno elegido por nadie, antipopular y asesino.
*.- Onganía y Lanusse, entre tantos, reprimieron con
salvajismo y responsabilizaron a los extremistas, de una

CCLXXV
movilización popular de proyecciones. Esta es la clásica técnica
que usa la dictadura para desprestigiar, el levantamiento de un
pueblo todo que quiere cobrarse venganza por sus hijos caídos y
que clama justicia impulsado por sus necesidades humanas.-
Boletín Nº 3 - Junio 1969; págs. 1 - 2.-

9.- MAYO 1969

Se rompe definitivamente la imagen creada por el Gobierno:


a) Orden y Paz Social, b) Estabilidad Económica
El Orden y la Paz social se rompen como consecuencia de un
“no aguanto más” a una conducción política, social y económica
totalmente impopular y al servicio de unas minorías. El pretendido
Orden, se consigue mediante una serie de leyes represivas que
pretenden maniatar al pueblo, eliminando las únicas armas hasta
entonces legales que poseían, como ser el derecho de huelga y la
conducción sindical.
La Estabilidad Económica se desmorona como producto del
aumento de la nafta, la leche, el pan, las frutas y los artículos de
primera necesidad.
La Paz Social es totalmente destruida como consecuencia de
la violencia impuesta por la dictadura para contener a un pueblo
indefenso. No podrá haber ya Paz Social, cuando una parte de esa
sociedad, la “fuerte”, la “brava”, asesina cobardemente a la otra
parte de la sociedad, la oprimida, la manoseada.-
Boletín Nº 3 - Junio 1969; pág. 2.-

10.- 23 y 30 DE MAYO

Primero Rosario, luego todo el país va a la huelga, en la más


importante medida de reprobación popular de los últimos
tiempos.
Las bases, la clase trabajadora, rebasa obstáculos que se le
imponen, y va al paro. Desoye los consejos de sus llamados
dirigentes, traidores, entregadores de luchas, que piden a su
gremio la no adhesión al paro (Ej. Coria).
Las masas hacen oídos sordos a las intimidaciones realizadas
por la patronal.

CCLXXVI
Las masas no dialogan con Onganía, como sus sucios
dirigentes sindicales, dando la espalda al sentir de la clase, las
bases desprecian a Loholaberry, Rosales, Zorila, etc..
Los afiliados al SOEPU se hacen eco de todo un sufrir de sus
hermanos de clase y en las dos asambleas no dejan ni hablar a
los dirigentes del gremios, y PIDEN, EXIGEN, parar, con una unidad
de criterios y sensibilidad que nos llena de orgullo. Y Rosario
primero, el país después, era lucha sin cuartel con piedras y
palos contra bombas y balas, ora se enluta en un silencio de calle
y dolor, llorando sus muertos, prometiendo venganza a sus
hermanos presos.-
Boletín Nº 3 - Junio 1969, pág. 3.-

11.- EL CONTRASTE

El SOEPU, saluda y felicita al gremio por su más honrosa y


sensible participación en los problemas de la clase trabajadora.
Nos emocionamos todos ante la actitud humana de
identificación con las lágrimas del pueblo.
Fueron días de duelo los tristes días de mayo. Se reflejaron en
las caras pálidas de todos, en los que participamos en las
marchas de silencio, en los que vivimos el silencio.
A.- La empresa agradeció los servicios prestados en esos
días, con 10.000 $ a su personal fuera de convenio, y algunos que
están bajo convenios a pesar de sus renuncias al Sindicato (Ej.
Fanelli, Smolars, Martín, Galassi), para “prestigiarse”.
¿Pudo PASA comprar con 10.000 $ el sentir del corazón de su
gente?
¿Fue la intención de PASA destacar a esa gente con 10 mil
pesos, por prestar sus servicios en tremendos días de dolor?
¿Habrá aceptado gustosa, esa gente, el premio a la
insensibilidad, a la “contracción al trabajo”?
B.- Al obrero de Petroquímica, adherirse al duelo le costó
entre 5 y 6 mil pesos a cada uno, más lo hizo sin siquiera pensar
en ese “detalle”, que es importante para él, pero que realmente
pasará desapercibido ante la magnitud de la lucha, que es su
lucha. ¡Salud, compañeros!.-
Boletín Nº 3 - Junio 1969; pág. 3.-

CCLXXVII
12.- AUMENTO CON DISIDENCIAS

Ante la congelación de salarios y el incesante aumento de


precios, el SOEPU solicitó un aumento de emergencia. PASA
ofreció un aumento de sueldo insuficiente y lo que es peor
discriminado.
Esto trajo como consecuencia muy largas discusiones internas
con diversas opiniones. Había que balancear esta difícil situación,
y tomar una resolución más o menos lógica, no obstante lo cual
habría disconformes. Tal vez PASA no logró su objetivo: deteriorar
nuestra unidad, porque hemos hecho lo imposible por evitarlo, no
haciendo el juego a la empresa.
Analicemos:
a) La equiparación a los mejores salarios de la zona fue un
cuento.
b) Las presiones a través de no realizar horas extras, PASA las
toleró a cualquier precio, y seguirá tolerándolas sintiendo no
obstante económicamente sus consecuencias.
c) PASA es una de las empresas que más se beneficia con la
actual política del gobierno (estabilidad del dólar, cierre de
importación de caucho, radicación de capitales para
empresas petroquímicas), y seguirá su línea paso a paso.
d) No había forma visible en ese momento de lograr mejoras
superiores.
e) El porcentaje superior (8 %), lo recibió el personal de
menor salario y es la misma cifra que el gobierno concede
por dos años.
f) Por lo expuesto anteriormente, principalmente en los
puntos d) y e), no pareció justo despreciarlo.
Teníamos dos alternativas:
Rechazarlo, lo cual significaba despreciar un 8 % de aumento
para muchos compañeros.
Aceptarlo, marginando aproximadamente a 40 compañeros y
recibiendo un 3 ó 4 % de aumento la mayoría. Esto no era
satisfactorio.
Puestas así las cosas se debía, a pesar de todo, optar por una

CCLXXVIII
solución, y la Asamblea tomó la que creyó más lógica, pensando
en aquellos compañeros de menor sueldo.-
Boletín Nº 4 - Noviembre / Diciembre 1969; pág. 3.-

13.- HORAS EXTRAS

La C.D. ha resuelto no admitir, salvo por falta de más de tres


relevos en toda la planta, la realización de jornadas superiores a
las doce horas (horas normales más extras).
Las mismas son ABSOLUTAMENTE VOLUNTARIAS, y la C.D. lo
único que hará será el control de las 30 horas mensuales y 120
horas anuales. Pero cada compañero es soberano de demostrar
su disconformidad y no realizarlas si no lo desea.
Nadie puede obligarnos a quedar, salvo por falta de volantes,
sobre todo considerando que tenemos un hogar, y que el
esparcimiento y el descanso son derechos inalterables.
Boletín Nº 4 - Noviembre / Diciembre 1969; pág. 3.-

14.- CONSEGUIDO EN COMISIÓN DE RECLAMOS

Cuando en horario de entrada o salida la fábrica estuviese


lloviendo, la empresa debe proveer transporte desde portería
hasta el área de trabajo y viceversa. Los compañeros deberán
esperar en el hall de entrada.
A aquellos compañeros que por cambio de turno realizado a
pedido de la Cía., deban de trabajar más de seis días seguidos,
cobraran el 7º y 8º día con 100 % de recargo. Inclusive después
del 6º día, si quieren, pueden tomarse los dos de franco.
Todo aquel que realice tareas de reemplazo en categoría
superior, debe solicitar una notificación de la empresa que
garantice el pago de diferencia de salario antes de realizar la
tarea. Esto debe ser así, pues tenemos el antecedente de varios
compañeros a los que la empresa les ha negado el reajuste y
cómputo de las jornadas para el ascenso correspondiente.
A aquellos compañeros que por cambio de turno, realizado a
pedido de PASA, trabajen menos horas de las que les hubiere
correspondido, le serán abonadas estas horas. El cálculo se hará
de la siguiente manera: Se considerará la cantidad de horas

CCLXXIX
que hubiese trabajando en su turno normal, y se le comparará con
las horas trabajadas en su nuevo turno, tomando como
referencia para el cálculo la quincena del cambio y la posterior.-
Boletín Nº 4 - Noviembre / Diciembre 1969; pág. 3.-

15.- ¿DIRIGENTES GREMIALES?

En nuestra plataforma electoral, dijimos en reiteradas


oportunidades que queríamos un Sindicato que apuntalase
fundamentalmente a lo gremial, y en segundo aspecto a lo social,
y pusimos ejemplos de otros gremios con grandes entradas de
dinero por recaudo de las cuotas sindicales, con lo cual muy poco
les costaba emprender grandes obras, con inversiones
millonarias, mientras sus afiliados tenían sueldos de hambre, y
condiciones de trabajo inhumanas.
Y así nombramos a grandes traidores de la clase obrera que
transforman lentamente al Sindicato en una Sociedad de
Beneficencia o un Club Social, y no en un núcleo de fuerza
organizada que impida el avasallamiento, y bregue para lograr
mejores condiciones de trabajo, salarios justos, jornadas
reducidas.
Todo esto quedó confirmado últimamente con dos
acontecimientos indignantes:
Armando March, Secretario General de la Asociación de
Empleados de Comercio y Presidente del Banco Sindical, dueño
de cuadros de valor de más de 200 millones de pesos y de los
mejores perros de raza del país, desaparece repentinamente con
sus bolsillos cargados de dinero.
Serbali, ex-Secretario del Sindicato de la Carne acusado por
dolo por su propia organización: 1.000 millones de pesos,
propietario de muchas líneas de ómnibus de Rosario, o sea,
dirigente sindical por un lado, patrón por el otro.
Estos dos delincuentes, entre tantos, permanecen impunes
ante la triste realidad de sus dirigidos. El primero ante los sueldos
de 20 a 25 mil pesos de los empleados de comercio. El segundo,
entregando públicamente una lucha de los obreros del Swift
Rosario, a quienes se les hace trabajar a dos grados de
temperatura, sin proveerlos de ropa especial, con la consiguiente
insalubridad del trabajo, lucha que deja en la calle a más de 35
obreros.

CCLXXX
La práctica nos enseña que no se puede desvirtuar el fin
conque hace años se iniciaron las organizaciones gremiales. La
historia comienza el relato cuando se luchaba por reducir las 14
horas de trabajo.
HOY LOS OBREROS ITALIANOS RECLAMAN
LA JORNADA DE 6 HORAS.-
Boletín Nº 4 - Noviembre / Diciembre 1969; pág. 4.-

16.- NOVEDADES EN LA DISCUSIÓN


DEL CONVENIO COLECTIVO DE TRABAJO

El día 24 del corriente ha llegado a manos de todos los


compañeros, el Anteproyecto del nuevo Convenio Colectivo de
Trabajo próximo a discutirse. Desde varios meses atrás, la C.D. y
el Cuerpo de Delegados ha volcado todo su trabajo y
conocimiento en la elaboración del mismo. En el Anteproyecto,
fácilmente puede comprobarse la amplitud del mismo: con
artículos nuevos, tanto en la faz laboral como social, elevando el
mismo a los momentos actuales, sociabilizándolo y
humanizándolo.
Esperamos que en un lapso de tiempo breve, todos los
compañeros, nos hagan llegar su conformidad, o cambio de algún
artículo, incorporando otros, o su disconformidad con alguno de
ellos.
En este Convenio que nos toca discutir, no se pide nada
extraordinario, sino lo que a conciencia nos corresponde.
En diversas oportunidades, la empresa a través de sus
directivos, han hablado y explicado la nueva política de la misma,
en lo social, en lo laboral, etc.. Creemos que ha llegado el
momento de que todo lo expresado, todo lo hablado se haga
realidad, no haciendo nada más que un acto de justicia hacia
quienes estamos elaborando su patrimonio y riqueza. Esto, con
honestidad, es lo que esperamos. Pero el día 23 del cte. nos
informó el Departamento de Trabajo, de una nota cursada por el
Jefe de Relaciones Laborales, Dr. Molachino, declarando
incompetente al Departamento de Trabajo para la discusión del
Convenio, y solicitó que el expediente sea girado al Ministerio de
Trabajo.
Nos cabe aclarar que en dicho Ministerio, también
denunciamos el vencimiento del Convenio Colectivo de Trabajo,

CCLXXXI
en tiempo y forma, y que a criterio de nuestra organización no le
es conveniente discutirlo en esa repartición.
Serias dudas nacen de este acto de la empresa, pero al
margen de ello, lo que sí estamos conscientes, y todos y cada uno
de nuestros afiliados deben pensar, que para obtener un
Convenio Colectivo para nuestro Sindicato que satisfaga
nuestras necesidades, es necesario estar más unidos que nunca y
a la expectativa de lo que la C.D. disponga para el logro de
nuestros objetivos.-
Boletín Nº 4 - Noviembre / Diciembre 1969; págs. 4 - 5.-

17.- ARGENTINA 69

Un año ya recorrido, que ha sido un camino largo, con algunas


victorias, con masacres, con angustias.
Etapas cada vez más cercanas hacia la victoria definitiva del
pueblo.
Innumerables salidas a la calle desde las fábricas, y desde las
aulas, han tropezado con las tropas de la represión,
manifestaciones populares han sido corridas por las “fuerzas del
orden”, marchas interrumpidas por la razón de las cachiporras,
las 45 y los fusiles Fal.
Innumerables barrios de emergencia han sido atropellados
repetidamente para ser el teatro de “razzias” sistemáticas.
Innumerables pueblos han sido invadidos por las botas y han
tenido que tragar su indignación ante la imposibilidad de expresar
las justas reivindicaciones de sus derechos y dignidad.
Sangre de lucha derramada por nuestras calles: Cabral, Bello,
Blanco y Jáuregui, los mártires de Córdoba y Rosario, etc..
Cárceles llenas de compañeros, ejemplos de coraje que han
canjeado su libertad, en lucha por la libertad de todos.
Decenas de militantes torturados en todo el país por la salvaje
policía del régimen.
Consejos de guerra, estado de sitio, liquidación de la CGT de
los Argentinos, detestable participación del gobierno en la
formación de una CGT con los traidores de siempre, aumentos
para militares, jueces, fabuloso presupuesto destinado a la
compra de armamento para la represión, aumento de 3.000 $,
etc. etc..
Trescientos sesenta y cinco días que se unen a la larga

CCLXXXII
historia de un pueblo que quiere sacudirse el yugo de su
esclavitud y vivir en libertad.
La historia de un pueblo que para lograr ese ideal, se ve en la
obligación de luchar contra una oligarquía ávida de ganancias y
dominación.
La confusión y el terror han sido cultivados con mucha astucia
por estos pseudos gobernantes.
Y, en nosotros mismos, compañeros, la pereza para
reflexionar unas veces, la cobardía para actuar, otras, son meras
consecuencias de este régimen.
Compañeros, que este 1970, sobre la base de nuestra unidad
en la lucha, encaremos el camino de liberación.-
Boletín Nº 5 - Enero 1970; pág. 1.-

18.- PARITARIAS
¿DISCUSIÓN DE CONVENIOS? ¡ERA UNA CARETA!

Quienes diariamente se informan a través de los periódicos y


revistas de lo que sucede en el campo gremial, habrán apreciado
que resultó totalmente cierto lo previsto por nosotros, cuando
consideramos el llamado a discusión de Convenio decretado
apresuradamente por el Sr. Onganía, en los momentos más
inestables de su demagógica carrera. Anunció por todos los
medios de difusión, que las organizaciones sindicales podrían
discutir libremente los convenios colectivos y los salarios,
debiendo los Sres. Patrones absorber mejoras hasta un 25 % de
los costos de los productos. Este anuncio fue consecuencia del
susto con que sacudió el pueblo cordobés a la oligarquía nacional,
y al imperialismo internacional que someten actualmente nuestro
destino.
Pero inmediatamente, cambiadas las caretas quemadas de
Vasena y Borda, señalados por el pueblo como malos, a quienes
el Sr. Presidente les hacía “dar la cara” anunciado decretos feos,
plagadas las cárceles de dirigentes y obreros, y comprando a 20
dirigentes traidores que se prestaron a realizar la CGT oficialista a
espaldas de los trabajadores, comenzó su ofensiva. Así, por
decreto, fijó en pesos 3.000 el aumento de salarios, y tiró del hilo
la careta al sentar en dicho decreto que: “los mayores costos por
cualquier mejora o beneficio no podrán ser trasladados a los
costos. La conciliación es obligatoria. El funcionario del Gobierno

CCLXXXIII
será Juez y laudará en los artículos que no se arribe a
entendidos”.
Y es así que a los Empresarios, o a sus representantes, sólo
les cuesta decir la frase mágica: “No. No es posible acceder a lo
solicitado porque resultarían mayores costos que nuestra
empresa no puede absorber”, y resuelven toda discusión que no
les agrada.
O sea, compañeros, por decretos dictatoriales no podemos
defender ni siquiera las condiciones por las que ofrecemos
nuestro trabajo.
PASA Petroquímica Argentina S.A. puede mejorar salarios y
beneficios porque es un monopolio, porque superproduce, porque
vende toda la producción y porque el costo de la mano de obra en
las empresas petroquímicas es ínfimo. No obstante poder, como
lo ha demostrado con los justos aumentos percibidos por la
Supervisión, nos dirá que no, y lo hará, porque poco le interesan
los problemas socioeconómicos de sus obreros, y porque su
mayor preocupación es cómo ganar más dólares, cómo explotar
más, y cómo hacer más capital para explotarlo.-
Boletín Nº 5 - Enero 1970; págs. 3 - 4.-

19.- LA INTERSINDICAL

Las empresas tienen hombres muy bien pagos que defienden


sus intere-ses. Hombres expertos en relaciones públicas,
humanas, laborales e industriales. Representantes patronales
encargados de mantener todos los contactos posibles, con el
gobierno, el ejército, con colegas de otras naciones, de tal manera
de consolidar una posición privilegiada, ya sea en el campo
económico, ya sea en el campo social o político, recurriendo a
quien sea para que se le garantice la paz social necesaria, la paz
que se obtiene con cordiales relaciones con sus obreros o
sometiendo a los rebeldes, a los fines de cumplir cómodamente
sus objetivos de producción y ganancia. Y como estos objetivos
son comunes a todos los patrones, se unen, se organizan, actúan
en conjunto constituyendo una fuerza muy poderosa. A todo esto,
los trabajadores debemos oponerles una organización superior.
Superior porque los representantes patronales se mueven y
luchan por medio de un sueldo importante, cuando no son ellos
mismos accionistas o dueños de la empresa. Su accionar

CCLXXXIV
responde a intereses individuales, ya sea por un mayor sueldo, ya
sea para obtener condiciones más favorables de explotación de
sus obreros y de esa manera acrecentar su ganancia.
Los trabajadores nos unimos por intereses comunes de clase.
Luchamos en los sindicatos por una mejor venta al patrón de
nuestras fuerzas y capacidad de trabajo, por mejores condiciones
laborales, etc.. Y como los capitalistas son fuertes y están unidos,
aquella lucha contra nuestro patrón a veces es insuficiente, y
debemos enfrentarlos uniendo las fuerzas de los trabajadores de
una zona, y del país todo como clase social que somos. Por eso,
debemos tratar que la organización de la zona que nuclea a sus
obreros, LA INTERSINDICAL, no sólo sea la unión de los dirigentes
clasistas de los gremios, sino que la misma esté apoyada sobre
una sólida base obrera, unida sin distinción de salarios ni
categorías, para formar una conciencia única por su único
interés.-
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; págs. 5 - 6.-

20.- PLENARIO DE GREMIOS COMBATIVOS

Los días 22 y 23 de mayo se reunió en Córdoba, convocado


por la Regional de la CGT, el Plenario Nacional de Gremios
Combativos, participando del mismo 124 agrupaciones sindicales
del país, asistiendo la INTERSINDICAL de San Lorenzo con dos
representantes del SOEPU, dos de Químicos, uno de Ceramistas y
uno de Jaboneros.
Luego de algunas anormalidades en la presentación de la
documentación, nuestros representantes fueron rechazados en
primera instancia para posteriormente ser aceptados en las
deliberaciones del Plenario. Debemos sumar una nueva
irregularidad que fue la no aceptación de la INTERSINDICAL como
bloque y tal como había concurrido a Córdoba. Pudimos participar
del Plenario, no ya como Intersindical sino como Gremios. Pero
nuestros representantes no fijaron posturas debido a que no
existía mandato de las bases haciéndose conocer al plenario esta
situación.
En la reunión predominaron varias líneas importantes y otras
de menor gravitación en el movimiento obrero:
los Peronistas Combativos
los Gremios Clasistas encabezados por SITRAC - SITRAM de

CCLXXXV
Córdoba
los “Independientes” de Córdoba
la línea del Partido Comunista
Más allá de los matices y expresiones propias de estos
Plenarios se coincidió en analizar -de acuerdo a la convocatoria-
la realidad nacional, pasando por los programas de La Falda,
Huerta Grande y 1º de Mayo de la CGT de los Argentinos.
Los oradores recordaron afectuosamente a los presos políticos
y gremiales, especialmente a Agustín Tosco y Raymundo Ongaro,
saludándose además a las vanguardias armadas del pueblo. Fue
amplia la coincidencia en el repudio al gobierno y a la conducción
nacional de la CGT.
Fueron presentados varios documentos a consideración del
Plenario, uno de la regional Córdoba, otro de las 62
Organizaciones, un tercero del SITRAC - SITRAM y finalmente un
último documento del Sindicato de la Sanidad de Santa Fe
adherido a la Comisión Nacional Intersindical.
Las conclusiones del Plenario fueron las siguientes: enviar las
distintas mociones presentadas a todas las organizaciones
gremiales combativas del país para ser analizadas por las bases,
y poder elaborar en un próximo Plenario Nacional el documento
definitivo. El SOEPU hará conocer próximamente la
documentación mencionada.-
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; págs. 6 - 7.-

21.- 1.000 MILLONES

Por resolución del Ministerio de Trabajo, se nos descontaron


500 pesos a todos los obreros del país para entregárselos a la
CGT nacional.
La cifra oficial de cotizantes sindicales es de casi 2.000.000 de
trabajadores. Lo que quiere decir que, en pago por traicionar a la
clase trabajadora, y para costear propaganda electoral, viajes a
Madrid, y matones a sueldo, Rucci recibió aproximadamente MIL
MILLONES DE PESOS, descontados de prepo a los trabajadores
argentinos, por este gobierno antipopular y de común acuerdo
con el “líder” de la CGT Nacional.
¡Cuidado Rucci, los trabajadores algún día te pediremos
rendición de cuentas!.-

CCLXXXVI
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; pág. 7.-

22.- LA HUELGA DEL MINISTERIO

Los maestros de todo el país, y en especial los de nuestra


provincia, después de tolerar pasivamente durante muchos años
decidieron salir a la calle y lo hicieron para reclamar mejores
salarios. A fuerza de voluntad y tesón estuvieron más de 45 días
en la calle protestando y haciendo protestar a los padres de los
alumnos. Maestros, padres y el pueblo todo pedía al gobierno una
justa solución del conflicto: por una vida digna y decorosa para
quienes son artífices de la cultura de nuestro pueblo y porque en
nosotros todos portamos algo de quienes nos trataron de ubicar
como un elemento útil a la sociedad.
La lucha terminó como casi siempre terminan las luchas a
largo plazo. La ganó el gobierno por cansancio (parcialmente).
Nosotros entendemos que los compañeros del magisterio
enfocaron mal su lucha. Como los estudiantes cuando sólo exigen
la eliminación de los cursos preuniversitarios o las trabas que se
suman día a día en todas las universidades, como los no docentes
cuando sólo piden mejores salarios, como el pueblo solamente
reclaman por la miseria y la precariedad en que se vive en los
hospitales públicos.
Los maestros se equivocaron dos veces. Primero porque
reclamaron un sueldo básico de 40.000 $ cuando lo menos que se
necesita para vivir son 75.000 $. Segundo, reclaman agua de un
pozo seco. Piden mejores salarios, cuando éstos dependen
directamente del presupuesto de Sanidad y Educación que está
agotado. Solicitaron los maestros que el gobierno les reconozca lo
que era justo. Y el gobierno lo reconoció.
Maestros, estudiantes, el efecto es producto de la causa, y a
la causa es a la que hay que corregir. Aquí el efecto de que los
salarios sean malos, las universidades no tengan bancos, los
hospitales públicos presten servicios precarios, es por causa de
que del presupuesto nacional se destina para sanidad y educación
una cifra tremendamente insuficiente. Por el contrario, del mismo
se cubren partidas multimillonarias para el presupuesto militar y
de los aparatos de seguridad. En una palabra, no hay dinero para
universidades, profesores, hospitales, porque se gasta una
barbaridad en mantener los aparatos represivos, y un ejército que

CCLXXXVII
se usa sólo para pelear con el pueblo y con la clase obrera.
Se gasta tanto como si se estuviese en guerra con otro país,
por supuesto, se está en guerra, la guerra de una minoría
que somete al pueblo para mantenerse en el poder.
Si como se dice, quieren gobernar para unir al país, para
hacer justicia, qué necesidad de fundir el país en gastos policíacos
- militares, para qué mantener un servicio militar obligatorio de
12 a 24 meses en vez de hacer instrucción intensiva en 30 días,
para nutrir tanto las filas de oficiales y suboficiales con sueldos
privilegiados, si no se los necesita, ni producen para el país, para
que pertrecharse de tantos elementos de guerra, si no existe ni
siquiera la posibilidad de una. Ésta debió ser la denuncia pública
constante y permanente de los maestros, estudiantes y no
docentes.
A este objetivo debieron apuntar. Se debió luchar para que se
destinen más medios económicos al presupuesto de sanidad y
educación, a expensas de eliminar gastos del presupuesto militar.
Tienen elementos de sobra para probarlo, en 1966 el
presupuesto militar no alcanzaba los 100.000 millones de pesos,
hoy sobrepasa los 300.000 millones de pesos. En 1966 el
presupuesto educacional era de 100.000 millones, hoy apenas
llega a 140.000 millones. Es decir que cuando el gasto para
educación y sanidad se elevó en un 40 %, el gasto de los militares
se superó en un 300 %.
Y hubo hechos irritantes para denunciar, cuando por ley a los
obreros nos fijaron un 6 % de aumento, los militares se fijaron
entre 30.000 y 70.000 pesos de aumento. Los maestros no
debieron luchar solo por su causa, sino ofrecer públicamente la
solución factible para su causa, a pesar de caer hoy sobre quienes
representan al gobierno.-
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; págs. 7 - 9.-

23.- LA NUEVA LEY DE ALQUILERES

El gobierno de la “Revolución Argentina” decretó la nueva Ley


de Alquileres, bien llamada por muchos sectores “la Ley del
Desalojo”, ya que grandes sectores de la población, lo más
pobres, están quedando en la calle. Actualmente, a la inmensa
mayoría de los obreros, les resulta casi imposible construir su
propia vivienda. Consecuencia de lo cual es hacer artimañas por

CCLXXXVIII
conseguir un alquiler barato y así es que surgen los barrios
obreros muy pobres y las villas miserias.
Lo cierto fue, pensamos, que el gobierno se equivocó y
mucho. En ningún momento se pensó censar a la población
inquilina de modo tal de fijar unas cifras bien determinadas de
déficit habitacional y elaborar un plan consecuente al respecto.
Sin llegar a nombrar el foco vivo de la burocracia que representa
el Banco Hipotecario no acorde en ningún momento con la
existencia real de necesidades. En un cálculo estimativo oficial se
sabe que el déficit habitacional es en estos momentos de 2
millones de unidades, es decir que ante esta demanda tan grande
y de acuerdo a la nueva Ley los precios de la locación se elevarán
en forma desconsiderada.
La ley anterior data del año 1943, que salvo pequeñas
modificaciones estuvo vigente hasta el 30/12/70. Mediante ella
aproximadamente 2 millones de personas vivían por un alquiler
bajo que se incrementaba un 10 % anual. Otros 2 millones de
habitantes, los que alquilaron entre 1954 y 1967, según la ley
debían llegar a un acuerdo en el precio con los propietarios, caso
contrario había una decisión judicial, pero el desalojo era casi
imposible.
Las locaciones celebradas a partir de agosto de 1967
quedaron totalmente “liberadas”. Es decir sometidas al capricho
de la especulación.
Además, la nueva Ley castiga al segundo sector, es decir a
aquellos que alquilaron a partir de 1954. Han quedado al margen
de la protección legal. Esta Ley dispone que los propietarios fijen
los nuevos alquileres que en caso de ser aceptados son llevados
al Código Civil y son causa de desalojo. Los juicios dieron
comienzo en junio del corriente año.
Y finalmente, el otro sector castigado (2 millones de personas)
tienen otra sanción. Se los condenó a pagar el alza del costo de la
vida, desde que se hizo el contrato de locación hasta ahora y
también la que vendrá. Para los inquilinos de 1943 o anteriores, el
alquiler original se multiplica ahora por 260. Para los del año 1947
por 159 veces. Para los de 1950 por 80 veces. Ejemplo: un
alquiler de 1943 de 100 pesos deberá convertirse en $ 26.000
m/n. (...).
Además, cuando se trate de familias numerosas, con varios
ingresos, no se tendrá en cuenta estas escalas, sino que se
contratará la casa al 25 % del total del ingreso. Es decir que si

CCLXXXIX
entre toda la familia se reunieran $ 180.000 -la tasa locataria
alcanzaría a $ 45.000- y no la escala prefijada. Sencillamente
podríamos decir es una aberración intolerable.
Y finalmente, volviendo a nuestras primeras palabras y
teniendo presente la prensa fílmica, radial o escrita (los casos de
desalojo -algunas veces drásticos y dramáticos- se suceden día a
día a partir de junio de 1971) ¿Alcanzamos a medir la magnitud
de tal medida? Se justifica la reacción airada de extensos núcleos
de personas en conjunto con CADI? (agrupación de los inquilinos).
Es la 18.880, una Ley de “protección” o de “desalojo lisa y
llanamente? Pensamos que es esto precisamente. Ley de
Desalojo, y nuestra postura es por lo menos de oposición.
Pensamos que antes que la 18.880, los entes estatales deberían
haber consultado al sector del pueblo afectado y decidir
mancomunadamente las soluciones. Es muy fácil decir, como se
ha hecho en estos días, que el BID en conjunto con el BHN lanzará
en el presente año un plan de construcción de 100.000 o más
viviendas, cosa semejante en el 1972, pero mientras no se
posibilite adquirir las mismas, sería Justicia dejar sin efecto la
mencionada Ley.-
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; págs. 9 - 10.-

24.- PORQUE NUNCA NOS SUCEDA

Transcribimos textualmente, parte de un artículo de un


matutino de Buenos Aires, “Luego de obtener un incremento
salarial del 45 %, a costa del despido del cuerpo de delegados y
de los activistas de fábrica, el personal de Petroquímica
Sudamericana reinició esta mañana sus tareas luego de 70 días
de huelga.
La decisión fue adoptada en una asamblea realizada el
domingo con la presencia de 400 personas, luego de una reñida
votación que arrojó el triunfo de la conducción textil sobre el
comité de huelga.
El laudo emitido por el Ministerio de Trabajo significa un
aumento de importancia, pues hasta última instancia la empresa
se resistía a pagar más del 32 %, pero a cambio, los obreros
vuelven a sufrir la expulsión de la comisión de fábrica, un hecho
reiterado tres veces en cinco años, y esta vez 74 compañeros en
la calle. La empresa y el Ministerio de Trabajo prefirieron otorgar

CCXC
un aumento respetable para lograr el descabezamiento de la
conducción sindical, que había inquietado a los servicios de
seguridad por su combatividad y por la persistencia de la huelga.
Con sólo el apoyo verbal de la Seccional La Plata de la
Asociación Obrera Textil y del Consejo Directivo de la AOT, los
integrantes del comité de huelga -admiradores de SITRAC -
SITRAM- mantuvieron el movimiento de fuerza y realizaron
manifestaciones casi todos los días, con apoyo de sectores
estudiantiles.
En la asamblea del domingo, la presencia de miembros del
Consejo Directivo de la AOT encabezados por Manuel Pedreiros
originó continuos altercados. Los obreros criticaron duramente a
la conducción del gremio por no haber adoptado ninguna medida
de solidaridad.
Creemos que el contenido del artículo, y el título con que lo
encabezamos, nos eximen de todo comentario.-
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; págs. 11 - 12.-

25.- “NUESTRA INSTITUCIÓN NO ESTÁ


PARA LA REPRESIÓN INDISCRIMINADA”
General Lanusse

El SOEPU, condena la represión policial, en la Asamblea


Obrero Popular realizada en nuestro Sindicato el 29 de julio.
Una vez más, hemos sido objeto de la persecución y represión
por parte del gobierno que reclama el GRAN ACUERDO NACIONAL.
Dirigentes de nuestro gremio, como así también compañeros del
SITRAC - SITRAM invitados al acto y numerosos obreros y
estudiantes fueron detenidos. La Intersindical, el viernes 30
dispuso la convocatoria inmediata a Asamblea de base, para
tomar urgentes medidas de fuerza, que quedaron sin efecto al
quedar todos los detenidos en libertad.
Es indudable que mientras en los hechos la dictadura
encarcela y asesina a todos aquellos que luchan por la liberación
nacional, muy lejos estamos de jugar el partido del gobierno.
Expresamos nuevamente nuestro enérgico repudio a la represión
policial y señalamos que hechos como éste, lejos de intimidarnos,
nos vigorizan para continuar en la lucha del pueblo y jugar el gran
partido de los trabajadores. Las reivindicaciones planteadas
siguen en pie.-

CCXCI
Boletín Nº 10 - Agosto 1971; pág. 12.-

26.- Editorial
SUB-COMISIÓN DE PRENSA

Ciento ochenta cesantes del Sindicato de Empleados Públicos


de Córdoba, doscientos cincuenta y nueve echados de Sitrac -
Sitram, quince despedidos en Tafí Viejo, Tucumán, cincuenta y
dos obreros del transporte automotor (AOTA) de Rosario en la
calle, mil trescientos suspendidos en el SWIFT, conflictos en
Oltolini, Laminfer y decenas de fábricas más a lo largo del país.
Cinco mil trabajadores de FIAT trabajando apuntados por armas
de la represión. Intervención a sindicatos, obreros presos, obreros
perseguidos, represión y más represión. Jamás tuvimos tantos
atentados a los derechos humanos. Jamás ha sido tan cruel la ley
de la fuerza y de los dueños del dinero.
Tal era el panorama el día del Plenario de la CGT de Rosario.
Pero... ¿Qué pasó? Lo de siempre. Pretender utilizar a la clase
trabajadora para satisfacer intereses particulares, usando como
máscara el problema de AOTA, problema que no podemos negar.
¿Pero es que debemos cerrarles los ojos a todos los demás y
mirar para donde nos conviene? O es que estos títeres de Rucci
también piensan como el Gobierno que todos los problemas
enumerados son provocados “por los agentes del caos y la
subversión”?
Un paro para el 18 de noviembre por AOTA es todo lo que salió
del Plenario de la CGT. Y quizás cuando este Boletín esté en
circulación, con cualquier pretexto el paro se habrá levantado.
Porque ya estamos acostumbrados a estas cosas. Nuestro gremio
concurrió a la CGT con mandato de asamblea de parar con un
plan de lucha o no parar. Pero las consecuencias ya son
previsibles.
Esta es una hora dramática. Lo comprendemos, lo vivimos y lo
sentimos. Allí cuando parece que no se va a llegar nunca a tierra,
allí cuando el ataque es más feroz, allí cuando se nos quita todo y
sólo queda resistir, nadie debe consentir lo que no se quiere,
nadie cambiará su dolor ni aplacará su rebeldía por un plato de
lentejas. Porque nacimos para ser libres aunque crezcan los
atropellos, porque nos causa repugnancia ser esclavos. El clamor
del pueblo continuará creciendo. Aún a costa de la traición de

CCXCII
muchos dirigentes. No habrá cárceles que puedan detener
nuestros ideales.
Y en la hora de triunfo, recordaremos el valor de aquellos que
no se arrodillaron ante ningún poder de la tierra. Y en esa hora,
que la veremos de acá o del más allá, sabremos darnos cuenta
que el hambre que hoy padecemos, sirvió para lo más grande a
que puede aspirar un hombre: que de él se diga que vivió para
servir a la liberación de su pueblo.-
Sub-Comisión de Prensa
Boletín Nº 13 - Noviembre 1971; pág. 2.-

27.- LA VIOLENCIA OFICIAL

Transcribimos textualmente parte de un artículo aparecido


en el diario La Opinión de Buenos Aires, el 2/11/71, pág. 24,
titulado “El Comandante del Tercer Ejército cree necesario
reeducar al pueblo”.
Con motivo del paro activo decretado para el 29 de octubre
por la Regional Cordobesa de la CGT, el Comando del Cuerpo del
Ejército III, remitió una serie de comunicados que fueron
difundidos por radios y TV. La siguiente es la síntesis del
mensaje que transmitían: Las demandas de los trabajadores
cordobeses son impropias, y con ella “individuos enquistados en
sectores laborales, pretenden encubrir los oscuros intereses de
ideologías antinacionales que sólo perjudicarán al trabajador
honesto y consciente, de responsabilidad ante su familia y su
pueblo”.
Las dos alternativas de la población eran plegarse o no
plegarse al paro. Si el trabajador “interpreta, después de las
experiencias vividas, que la huelga es la mejor solución para sus
problemas económicos”, o bien si “no tiene carácter frente a una
huelga, o el valor suficiente para luchar por los intereses
familiares y nacionales”, entonces debe plegarse. En cambio,
quienes se sienten argentinos y comprendan que “toda huelga y
sus disturbios callejeros, iniciados por agitadores profesionales
que son seguidos por incautos, nada tienen de común con sus
honestas aspiraciones”, no deben plegarse. La división implícita
en el comunicado es que hacen la huelga los antipatría, los
subversivos, los incautos y los cobardes. Los argentinos, en
cambio, no.

CCXCIII
El quinto comunicado del Tercer Cuerpo sintetizaba toda la
argumentación: las demandas obreras son desmedidas e
imposibles de cumplimentar. Llevan el germen del desorden,
sirven para instrumentar la reacción contra la autoridad, “algo
que no tiene sentido para el trabajador, sino para el dirigente
gremial cuyo trabajo es la subversión y su causa la violencia”.
“¿Hasta cuándo -pregunta a los obreros- sentirán temor de hacer
oír su propia voz y de actuar según sus convicciones?”.
La actitud de trabajar, que recomienda a los obreros, es
esperada por “su familia, su ciudad y su país”. Afirma, también,
que “empleado, obrero, profesional, hombre de Córdoba, usted
que está atemorizado por unos pocos seudos dirigentes
gremiales, reaccione: defienda su trabajo, su jornal, su propio
futuro. Asuma la actitud que le cabe en toda circunstancia:
trabaje”.
Todo el planteo implícito en los comunicados del General
López Aufranc se basa en identificar a los dirigentes gremiales
con delincuentes comunes o ideológicos, a los trabajadores
huelguistas con cobardes o idiotas -en el mejor de los casos- o
con antipatrias, a los reclamos sindicales con incitaciones a la
violencia y a las protestas sociales con intentos de destruir una
sociedad a la que pintan como idílica”.
Aclaramos: Este señor López Aufranc es uno de los ideólogos
de la avalancha represiva desatada en Córdoba y en Tafí Viejo
(Tucumán). Es uno de los directores de la invasión militar a las
plantas de FIAT, donde soldados con metralletas apuntaban a los
obreros en los patios de la fábrica, es uno de los responsables de
los encarcelamientos de dirigentes y trabajadores de Empleados
Públicos, SITRAC - SITRAM, Luz y Fuerza, etc., de los allanamientos
a casas de activistas y de los Sindicatos UTA (Tranviarios
Automotor) y Luz y Fuerza.
Y nosotros, como obreros y dirigentes que somos, no podemos
dejar de repudiar su profundo odio a todos aquellos que luchan
defendiendo a los eternamente postergados en esta sociedad
injusta: los trabajadores.-
Boletín Nº 13 - Noviembre 1971; págs. 3 - 4.-

28.- OBREROS PRESTAN PLATA AL ESTADO

A partir de diciembre, a los obreros de Luz y Fuerza se les

CCXCIV
descontará el 1 % de sus salarios destinados a engrosar los
fondos del Banco Nacional de Desarrollo, según un acuerdo
suscripto por los dirigentes del sindicato y autoridades de Luz y
Fuerza.
Más adelante, les tocará a los trabajadores del SUPE
(Petroleros del Estado) y de la Federación Argentina de Gas del
Estado. Una vez más a los obreros, (esta vez sólo a los estatales),
se les realizan descuentos compulsivamente, sin consultarlos.
Todavía queda fresco en nuestra memoria los 500 $ que nos
sacaron en mayo para la CGT, sin saber qué destino se le dieron
(aunque ya sabemos lo caro que son los viajes a Europa, y los
muchos dirigentes que han viajado).-
Boletín Nº 13 - Noviembre 1971; pág. 5.-

29.- OTRO PARCHE MÁS

Sí, otro parche más aplica el gobierno, (debería decir los


militares de turno que mandan) al sistema resquebrajado,
agotado de un capitalismo desfalleciente. Me refiero a la Ley
18.610 de Obras Sociales, que imponen por decreto, usando a los
sindicatos para que la pongan en marcha y alivien así la situación
de sus obreros, casi en todos los casos desesperados.
Digo parche, porque el espíritu de este Decreto (18.610) es
que las organizaciones obreras a través de sus organismos
trabajen para resolver o aliviar principalmente las necesidades en
materia de prestaciones médicas asistenciales, medicamentos,
etc.. Ahora, yo pregunto: ¿No es el Estado, o sea el gobierno, el
que debe solucionar estos problemas? Fundamentalmente el de
medicina, reactivando los hospitales estatales gratuitos y
aumentando cada vez más sus servicios hasta terminar de una
vez por todas con el monstruoso comercio que realizan los
sanatorios privados.
Hay que terminar, como así también los laboratorios
productores de medicamentos, deben ser socializados.-
UN OPERADOR TRISTE QUE TIENE
EL POXIPOL DEL PARCHE EN SUS MANOS

Boletín Nº 13 - Noviembre 1971; pág. 5.-

CCXCV
30.- EL SISTEMA SOCIALISTA

Como consecuencia de las ideas vertidas en el Plenario de


Gremios Combativos de Córdoba, al cual asistimos con mandato
de asamblea, consideramos conveniente aclarar a nuestros
compañeros el significado del socialismo, que fue la idea
predominante de dicho Plenario.
Los obreros son los que producen todo lo que existe: las
fábricas, las tierras no producen por sí mismas. Es necesario
aplicar el trabajo humano para concebir nuevos productos y
mercaderías.
Para tener casa, ropa, comida, los obreros venden el único
bien que tienen: su capacidad para trabajar, su fuerza, sus
conocimientos, con los cuales mueven las máquinas y hacen
producir la tierra. Como los obreros no tienen “medios de
producción” (ni máquinas, ni tierras, ni fábricas), se emplean por
un salario a los propietarios de dichos medios: los capitalistas.
Socialismo se opone a Capitalismo. Y si bien no podemos
negar que existen detrás de ambos extremos determinadas
ideologías, ambas se definen principalmente por referencias
económicas: Capitalismo significa “medios de producción” en
manos privadas. Socialismo significa “medios de producción” en
manos de la sociedad toda.
Un par de zapatos, una camisa, estos son bienes de consumo,
cuya propiedad es individual, o sea del que lo adquiere.
A los capitalistas les interesa conservar esta sociedad, donde
ellos que son muy pocos, acumulan todas las riquezas y
privilegios con motivo de ser propietarios de todos los resortes de
la producción. Ellos producen para un mercado, en cantidades
tales que obtengan la máxima ganancia con el menor costo. Su
único objetivo es el lucro, y tras el lucro, invierten sus capitales
allí donde la producción se realiza de acuerdo a las necesidades
de la sociedad. Al no haber propiedad privada de los “medios de
producción”, no hay lugar a la especulación.
Al sistema capitalista lo sostiene un poder político basado en
leyes que garantizan la propiedad privada de los medios de
producción. Y lo defiende un aparato represivo, cuya función es
mantener el “orden existente”: fuerzas armadas, policía, cárceles,
etc..
Los medios de educación y comunicación: las escuelas y
universidades, los diarios, revistas, radio, televisión, etc., imponen

CCXCVI
día a día a la población lo “normal” de este orden existente. Y su
propaganda intensifica el concepto de “mala palabra”, “cuco” o
“terror” de la palabra socialismo, sonándonos como
extranjerizante y ocultando la verdadera esencia de ambos
sistemas económicos.
Algunos países “socialistas” han desvirtuado casi totalmente
sus principios. No obstante en distintos países, principalmente los
subdesarrollados, parecen encaminarse tras un cambio de
estructuras que posibilite la liberación del hombre.-
Boletín Nº 13 - Noviembre 1971, págs. 7 - 8.-

31.- Editorial

Volvemos a reiterar hoy la posición del gremio ante los


difíciles momentos que atraviesa el pueblo argentino. Estuvimos y
estamos en contra la represión indiscriminada y de toda
legislación represiva.
Estuvimos y estamos en contra la privación ilegítima de la
libertad. Estuvimos y estamos en contra de los métodos de
tortura. Estuvimos y estamos en contra de los actos de
provocación. Estuvimos y estaremos siempre en contra de toda
injusticia.
Creemos que con la aplicación de estos métodos no se
solucionan los problemas. Los males que soporta el país siguen
existiendo agravándose cada día más. Y somos plenamente
conscientes de ello.
Nosotros queremos de nuestra Patria, una sociedad de
hombres libres sin opresores ni oprimidos. Y para lograr esos
objetivos y las reivindicaciones mínimas de los trabajadores no
habremos de retacear en la lucha.
Pero nadie se llame a engaño. Nuestra lucha tiene su propio
método: el método del movimiento obrero.-
Boletín Nº 16 - Marzo / Abril 1972; pág. 2.-

32.- EL CIERRE DE MOLINOS

No, Compañeros: Bajo ningún punto de vista podemos decir


que los paros y las asambleas realizadas por el cierre de Molinos

CCXCVII
fueron inútiles, o carecieron de valor.
La lucha era necesaria y justa: Molinos Río de la Plata,
una fábrica de aceite comestible que emplea a más de 300
obreros y empleados, fábrica rentable, que llenó los bolsillos de
los patrones Bunge y Born durante años a costas del sudor de los
trabajadores, va a cerrar. Los motivos: el interés del gigante
monopolio de concentrar el total de la producción de aceite en
una fábrica en Avellaneda, provincia de Buenos Aires, donde tiene
un mayor mercado, donde se ahorran gastos de flete, donde
tienen un puerto y salida al mar que le posibilite futuras
exportaciones, donde existe una impresionante desocupación que
posibilita la elección de una personal dócil, y porque (quien puede
asegurar que no importa), no existe una Intersindical de Gremios
más o menos combativa. El argumento más utilizado por Molinos
fue la escasez de semillas de girasol, dado la producción de los
últimos años, responsabilizando al Gobierno de no haber
incentivado la explotación de dicha materia prima, ya que los
productores agropecuarios prefirieron la cría de ganado. Todo
esto es posiblemente cierto, pero todo no deja de ser un conjunto
de situaciones propias del sistema capitalista en que estamos
viviendo, donde cada uno invierte donde mayores ganancias
puede obtener, especula con la producción, la concentra y trata
de ser único productor, y se mueve en definitiva por el único
móvil de la ganancia, con entera libertad, sin una planificación
que pudiera considerar los intereses y necesidades de la
población. Y, ¿Quiénes pagan estos privilegios?: LOS OBREROS,
quienes totalmente ajenos a este hacer y deshacer del proceso
productivo, lo único y más importante que hacen es TRABAJAR Y
PRODUCIR.
Por eso es que exigir la permanencia de la fuente de trabajo
de Molinos era justo. Porque los obreros aceiteros no tienen otro
medio de subsistencia más que sus brazos, y no son responsables
de que Bunge y Born quiera acrecentar sus ganancias, o que los
productores agropecuarios prefieran criar vacas a sembrar
girasol.
Por todo esto, y porque precisamente la Intersindical fue
creada fundamentalmente para la defensa de las fuentes de
trabajo de la zona, la lucha era necesaria y justa.
Pero, podíamos derrotar a Bunge y Born? Los obreros
han peleado en todo el mundo por mejorar sus condiciones de
trabajo. Las 8 horas, el derecho de agremiación, la seguridad y

CCXCVIII
salubridad en las tareas, los salarios, etc., costaron miles de
obreros muertos en todo el mundo, y decenas de años de lucha.
Hoy, muchos paros, movilizaciones y denuncias se realizan por la
libertad de los presos gremiales, en contra de la persecución
ideológica y la tortura, por conseguir discutir los convenios, por el
goce de las libertades públicas, etc., etc., y no se consigue rápido,
y muchos quedan en el camino. Pelear contra Bunge y Born era
pelear contra una colosal organización capitalista, que contaba
con toda una legislación que le permitía hacer lo que está
haciendo, o sea dejar en la calle a 300 trabajadores con la
indemnización que es pan para hoy y hambre para mañana, e irse
en busca de mejores condiciones de explotación y ganancia. El
éxito de la lucha, (de ésta como de cualquier otra), en definitiva
iba a depender de un balance de fuerzas entre los sectores
enfrentados. Ahora bien, era realmente imposible encarar este
conflicto sin relacionarlo con la situación económica y política del
país, y sin alertar al conjunto de trabajadores de los riesgos de
una represión ejemplar. Y así lo encara el SOEPU, y así fue llevado
al seno de la Intersindical que lo tomó muy fríamente.
Entendíamos, y así lo manifestamos, que se podía evitar el cierre
de Molinos, no solamente con paros, sino con un verdadero plan
de lucha que signifique una verdadera movilización de los
trabajadores y del pueblo en general.
Esto, o no se logró, o bien los trabajadores aceiteros
claudicaron antes que se lograra. De ahí la derrota.
El Plan de Lucha: Comenzó con una reunión de delegados,
comisiones directivas y activistas de la zona, que fue un éxito
desde el punto de vista del número de compañeros reunidos, no
así de la participación que se les dio en la elaboración del plan de
lucha a proponer a las bases. La democrática participación de las
bases, en los hechos se limitó a decir que sí o que no al plan
propuesto por la mesa directiva de la Intersindical, cosa que se
criticó. Siguió con una reunión de los partidos políticos,
comerciantes, fuerzas vivas, etc., que no tuvo la propaganda
adecuada y el reflejo de todo lo tenemos en la casi nula
participación obrera. Al día siguiente comenzaron los paros, y
aquí sí cabe una aclaración favorable: la efectividad de los
mismos fue casi total, de los 3 días de paro sólo el último día
Cerámica San Lorenzo no paró, y fue la única fábrica. Cabe una
explicación: Los obreros de dicha fábrica vienen de sufrir una
derrota en el año ‘69 donde despidieron todos los delegados y

CCXCIX
activistas sindicales. Tras 2 años de represión de la patronal,
donde el que abría la boca lo echaban, se consiguió formar una
comisión interna el año pasado, con el respaldo de la
Intersindical. En la actual C.D., sólo hay un obrero de dicha
fábrica, todo lo cual explica lo muy difícil que resulta manejar a
1.200 trabajadores que allí existen. Una maniobra patronal, en
arreglo con algunos servidores de siempre, tras una campaña de
mentiras y amenazas, lograron boicotear el paro de 3 horas. Los
dos anteriores fueron acatados, salvo algún grupo pequeño de
“eternos carneros” (a decir de los Ceramistas).
Y comienzan los errores: Hasta aquí, con algunos defectos,
se cumplió lo programado. Bunge y Born, muy hábilmente, envía
una carta a la casa de cada obrero de Molinos, llena de mentiras y
promesas de falsa validez. Les ofrece traslado -si hay vacantes- a
la otra planta, con sueldos inferiores, ya que el convenio de
Molinos San Lorenzo es un poco mejor, sin asegurarles la
efectividad en el empleo, y teniendo que ir a vivir, con seguridad,
a alguna villa miseria.
Las indemnizaciones que ofrece son las que corresponden por
ley, salvo a los trabajadores mayores de 40 años, a los que les
dan un porcentaje mayor. Y aquí viene la tentación de algunos
obreros próximos a jubilarse, que cobrarían alrededor de 2
millones de indemnización, y de otros más jóvenes que tienen
algún “rebusque”. Y el mismo día del paro de 3 horas, cobran
alrededor de 10, y otros 50 comienzan a tentarse.
Aquí la INTERSINDICAL, con la bandera de la defensa de la
fuente de trabajo, y del deseo de las direcciones sindicales de
brindarles toda la solidaridad posible que surja de sus bases,
tendría que haber ido a hablar al resto de los obreros aceiteros en
la puerta de fábrica o en una asamblea, para detener el cobro de
la indemnización y alentarlos a seguir luchando o por lo menos
para evaluar el estado de ánimo y la intención de los interesados.
Además, denunciar a los obreros y a la opinión pública las falsas
promesas de Molinos.
Pero todo esto se dejó sólo en manos del Sindicato Aceitero,
se llevó el problema a la CGT y se esperó a ver si las
indemnizaciones se seguían cobrando o no.
Y aquí fracasó el movimiento. Los más viejos, los que tenían
otro trabajo y los menos combativos, cobraron, desconcertando
al resto de los trabajadores. En una asamblea reciente (8/4) con la
presencia de la CGT y de los 4 miembros de la Intersindical, los

CCC
obreros aceiteros decidieron el cobro de la indemnización y el
abandono de la lucha.
Debemos estar orgullosos. Los obreros que luchamos y
pedimos salarios, no podemos dejar de estar orgullosos de la
solidaridad brindada.
Hoy todas las semanas se cierran talleres o fábricas, y ni
siquiera el Sindicato correspondiente para solidariamente
Cinco mil obreros de la zona industrial dieron su apoyo a
Molinos, y esto tiene mucho valor, a pesar que no haya
conseguido que la planta no cierre. El error fundamental lo
tenemos en el miedo de algunos y la poca confianza de otros a la
DEMOCRACIA más amplia y posible. Es necesaria la participación
directa de los delegados y miembros de Comisión en la discusión
de los problemas y la toma de decisiones a proponer a las bases,
en un primer paso para democratizar más la INTERSINDICAL.
Claro, eso no es lo que el Acta de Acuerdo dice, pero creemos que
es el intento más importante para cometer nuevos errores.
La burocracia es el peor de los males de una dirección gremial
no traidora. Y en ella caemos muchas veces sin darnos cuenta.
Ustedes, compañeros, tienen parte de la responsabilidad de no
dejarnos caer en este mal.
UNA CONCLUSIÓN: Como consecuencia del cierre de Molinos
se da un hecho insólito e inconcebible. El gobierno dice querer
combatir la desocupación (10 %). También dice necesitar crear
fuentes de trabajo para lograrlo. En la zona hay más de mil
desocupados o trabajadores changarines y queda una fábrica
rentable cerrada, por conveniencia de un patrón. Porque la
semilla se podía importar, o bien trabajar con “soja” (el aceite de
soja tiene copado el mercado mundial), cuyas cosechas en
Argentina están en marcha.
Ahora bien, pero aquí saltan las contradicciones de la “libre
empresa”, con los intereses populares: Si Molinos produjera
aceite en San Lorenzo, además de Avellaneda, la producción
podría superar la demanda con la consiguiente baja de los
precios. En cambio, cerrando Molinos, regula la producción de
Avellaneda de tal manera de producir lo justo para mantener altos
precios que le signifiquen a Bunge y Born enormes ganancias con
menores esfuerzos. Mientras, el aceite tiene un elevado precio
que podría ser bajado y quedan 300 trabajadores en la calle. ¿No
es esto una violencia legal?”.-
Boletín Nº 16 - Marzo / Abril 1972; págs. 3 - 7.-

CCCI
33.- LOS PAROS FAVORECEN A PASA

Y no nos cabe ninguna duda. El mismo día en que la


Intersindical terminaba su primer plan de lucha, para evitar el
levantamiento de Molinos y el previsto futuro levantamiento de
otras industrias, el gobernador de la provincia utiliza la “presión”
de la zona, para pedir en altas esferas del gobierno, igualdad de
trato en el desarrollo de la petroquímica, en Bahía Blanca y San
Lorenzo. No cuestionó el montaje de Petroquímica Bahía Blanca
(ésta tiene el 51 % de capital estatal, y PASA es una empresa
privada y para colmo extranjera), pero si reclamó igualdad para
que se de-sarrolle la actividad petroquímica en la provincia como
estaba previsto en los papeles, y que se evite el receso de lo poco
realizado en San Lorenzo. Duperial tiene o tenía previsto ampliar
varias veces la planta que consume etileno, Electroclor montar la
nueva. Todo queda en cero, y lo probable es que el hecho se
levante cuando funcione Petroquímica Bahía Blanca. Por todo
esto, las preocupaciones del gobierno de la provincia, que quiere
soluciones para apaciguar la zona. Teniendo en cuenta el
aumento de la desocupación de la zona, hace falta la creación de
nuevas fuentes de trabajo, para que esto no termine en un
Tucumán. El desarrollo de la petroquímica, que en Argentina está
en pañales, es una buena oportunidad para la zona. Por eso,
como decimos en el título, esta vez, PASA estuvo con el plan de
lucha.-
Boletín Nº 16 - Marzo / Abril 1972; pág. 8.-

34.- LUZ NEGRA

Según las estadísticas oficiales el aumento del costo de la


vida en Enero y Febrero llegó a un 16 %. En Marzo al 7 %. Quiere
decir que hasta el presente el alza del costo de la vida ha llegado
a un 23 % contra el magro aumento salarial de una 15% a
comienzos de año. La diferencia salta a la vista. Y esto
considerando estadísticas oficiales que están muy lejos de la
realidad. Mientras tanto los artículos de primera necesidad
continúan en aumento. Nuestros salarios congelados. Nuestros
convenios sin poder discutirse.

CCCII
Así está nuestro nivel de vida. Y así nuestras perspectivas de
mejora. A todo esto, debemos añadir el ridículo y exorbitante
aumento aplicado a las tarifas de la luz. Porque estos no han sido
suprimidos. Sino que se ha postergado su pago hasta tanto se
realice un “estudio adecuado”. Nosotros nos preguntamos: este
estudio será suficiente para que se den cuenta que este aumento
representaría un drama para la mayoría de los hogares? O es que
acaso se ignora que un hogar humilde, que tenga seis lámparas
de baja potencia, heladera, televisor, ventiladores, lavarropas y
plancha el consumo supera los 200 KW? O se pretende que los
trabajadores renunciemos a estas mínimas comodidades?
Resulta irrisorio pensar que así sea mientras el mundo avanza
científica y técnicamente, mientras el hombre explora el Universo,
mientras hay países que continúan su marcha ascendente, acá en
la Argentina, retrocedemos a causa de medidas retrógradas como
esta que exponen a millares de hogares a volver a las velas, las
barras de hielo y las planchas de carbón.
Los obreros petroquímicos no podemos acallar esta absurda
disposición. Y sumamos nuestra voz de protesta a todos los
sectores que se han movilizado para no admitirla.
Y al heroico pueblo mendocino, que ofrendo tres vidas por
esta causa, vaya nuestro reconocimiento y solidaridad.-
Boletín Nº 16 - Marzo / Abril 1972; págs. 9 - 10.-

35.- QUITE

El quite de colaboración iniciado en Enero viene cumpliendo


perfectamente el objetivo propuesto. Sostuvimos en asamblea y
así lo publicamos que no es método para lograr el aumento del 6
% que reclamamos, pero que es la mejor forma para demostrarle
a la patronal que no puede pretender mayor colaboración de
parte nuestra, a cambio de un aumento, que ahora sólo es un
parche ante el deterioro del salario real. La medida aplicada por el
gremio le demuestra todo lo que antes colaboramos y que parece
ser no tienen en cuenta. No obstante, consideramos, que la mejor
forma de aplicar un quite de colaboración es por períodos cortos y
en los momentos justos. Pero en la Asamblea del 28-2-72 previa
al paro de 48 horas decretado por la CGT, más de 120
asambleístas resolvieron por la continuación de la medida, hasta
el 1º de abril, facultando a esta CD para aplicar y levantar el quite

CCCIII
nuevamente en el momento más oportuno. En reunión de CD del
3-4-72 se resolvió por la continuación de la medida, por
considerar que era uno de los momentos más exactos para
aplicarlo, ante la preparación y posterior parada de la planta de
Butadieno. Por supuesto que esta medida, como todas, tiene su
pro y su contra. Es un hecho real que poco a poco lo prolongado
del quite nos va desgastando. Pero no es menos cierto que el
mayor desgaste lo sufre la Empresa. Para nosotros queda como
saldo positivo la extraordinaria demostración de solidaridad y
unidad ante la injusta suspensión de seis compañeros, la
inmediata predisposición de todos para la lucha y la posibilidad
de discutir las categorías y oficios en el Departamento de
Trabajo que aún continúa. Y para la Empresa representa la
imposibilidad de planificar las paradas imprevistas, la
postergación de trabajos y el deterioro que se va produciendo con
la supervisión a través de las obligaciones que les imponen. Estos
son algunos de los hechos más visibles logrados mediante esta
acción conjunta del gremio.-
Boletín Nº 16 - Marzo / Abril 1972; págs. 10 - 11.-

Editorial
36.-
SUB-COMISIÓN DE PRENSA

El anuncio del 15 % de aumento junto con cambios en materia


de política económica anunciados por Lanusse en abril, quedó
demostrado que fueron, en los hechos, meras palabras
demagógicas destinadas a enmascarar la situación y a frenar el
alza de las luchas populares iniciadas en Mendoza y continuadas
en distintas partes del país (reflejo real del descontento del
pueblo, aunque la chispa haya sido las tarifas de la luz y el
conflicto de los maestros).
El aumento incesante de los precios no sólo se devoró ya ese
15 % sino que todos saben y principalmente el gobierno, que la
tasa de inflación es superior al 76 %.
Decimos que fueron medidas demagógicas que trataron de
dilatar la situación y la tensión existente, pues la crisis por la que
atravesamos no se soluciona con simples medidas coyunturales
sino con cambios estructurales de fondo en materia económica.
La conducción ultra-liberal Brignone - Liciardo, fieles

CCCIV
discípulos de Krieger Vasena, está llevando al país a la bancarrota
total, únicamente para satisfacer necesidades de sector, para
provocar un “golpe de Estado salvador”, y de esa manera
interrumpir el proceso de institucionalización, o bien entregar
totalmente condicionado en materia económica el gobierno a los
que salgan “elegidos” en ese maltratado, discriminado, y
antidemocrático proceso electoral (aunque lo disfracen de Gran
Acuerdo Nacional y sea la vedette en todos los discursos del
viajero general presidente).
Las FF.AA., que en este momento, más que nunca,
demuestran que gobiernan únicamente con el consenso de las
armas y de las grandes empresas monopolistas, hablaron por
medio de Lanusse en aquella época (abril) del Acuerdo Social.
¡Cómo va a ser posible ese acuerdo si cada vez nuestro
salario vale menos a pesar del aumento que nos dan!
¡Cómo va a ser posible ese acuerdo sí cada vez hay más
presos políticos, gremiales y estudiantiles y cada vez son más las
denuncias de torturas que sufren los militantes honestos de las
filas del pueblo!.-
Boletín Nº 17 - Mayo 1972; pág. 1.-

37.- UN 1º DE MAYO

En el siglo pasado los obreros trabajaban entre once y catorce


horas diarias con toda normalidad, en justa protesta contra tan
criminal abuso y reclamando la jornada de 8 horas, el 1º de mayo
de 1886 en la ciudad de Chicago desfilaron más de 80.000
hombres, siendo brutalmente agredidos por la policía. Frente a
este ataque y a las represalias ordenadas por algunos industriales
-como Mc Cormick que despidió a 1.200 obreros- se realizaron
mítines consecutivos los días 2 y 3 de mayo, en donde, como
respuesta, las fuerzas del orden mataron a seis obreros e hirieron
a muchos más. La Plaza de Haymarket fue el nuevo lugar para
protestar por la agresión. Pero esta vez se reprime. Estalla una
bomba. Un policía muere.
Allí se genera la causa que conducirá a muchos compañeros a
la prisión. De todos estos en un injusto proceso, son condenados a
quince en la prisión: Nebbe, Schwad y Fielden. Y a la pena de

CCCV
muerte: Spies, Parsons, Ligg, Fischer y Engels. El fiscal había
presentado una larga acusación, cuyo cargo más importante
señalaba la culpabilidad de los acusados en el asesinato del
policía. Ellos mismos hicieron su propia defensa. Desafiando la
muerte defendieron su causa. Las causas de la clase obrera.
Nebbe, sentenciado a quince años, fue el primero en hablar:
“Vi que a los panaderos de esta ciudad se los trataba como
perros. Y ayudé a organizarlos, es ese un crimen? Ahora trabajan
diez horas al día en vez de catorce o dieciséis horas, que
trabajaban antes. Es esto otro crimen? Pues cometí otro mayor.
Una madrugada observé que los trabajadores cerveceros
comenzaban sus tareas a las cuatro de la mañana. Regresaban a
sus casas hacia las siete u ocho de la noche. Nunca veían a sus
familiares y a sus hijos a la luz del día. Fui a trabajar para
organizarlos. Pero, vuestras honorabilidades, aún cometí otro
crimen: Vi a los empleados de comercio y otros empleados de
esta ciudad que trabajaban hasta las diez y once de la noche.
Emití una convocatoria, y hoy están trabajando solamente hasta
las siete de la noche y no trabajan los domingos. ¡Estos son mis
crímenes! Nebbe concluyó exigiendo que también ha él se lo
condenara a muerte, declarando a voz en cuello que no era
menos culpable que sus compañeros, ya que todos eran
inocentes.
Continuando con los alegatos habló Parsons: “En los últimos
veinte años de vida he estado individualmente identificado y
participado activamente, en lo que se conoce como el Movimiento
Obrero de los Estados Unidos. Soy anarquista. Ahora golpeen!
Pero antes de hacerlo, escúchenme. Qué son el socialismo o el
anarquismo? Brevemente, son el derecho del trabajador a tener
igual y libre utilización de las herramientas de la producción y el
derecho de los productores a su producto. Eso es el socialismo. Yo
soy socialista. Soy uno de esos que piensan que el dinero
esclaviza, que es injusto, que es injusto para mí, para mi vecino y
para mis compañeros. Pero no aceptaría dejar de ser esclavo del
salario para convertirme en patrón y dueño de esclavos y yo
mismo. Si hubiese escogido otro sendero en la vida, ahora podría
estar viviendo en una de esas casas, rodeado de mi familia, con
lujo y tranquilidad, con esclavos obedeciendo mis órdenes. Pero
escogí otro camino, y hoy estoy aquí en el banquito. Estos son mis
crímenes (...).
Y como todos sabemos, no hubo clemencia para ninguno de

CCCVI
los condenados. Ligg se suicidó. Y los otros cuatro compañeros
cayeron sin acallar su voz.
Y ha pasado ya mucho tiempo de aquellas jornadas. Casi un
siglo. Muchos nombres, muchas vidas inmoladas por una causa: la
causa de los explotados. Muchos 1º de mayo sangrientos registra
nuestra historia. Pero todo esto no es sólo pasado. Es también
presente. Y no sólo en otras fronteras. En Argentina cunde el
ejemplo por doquier.
Y aquí, entre nosotros, los obreros petroquímicos celebramos
nuestro homenaje a los mártires de Chicago apuntados por las
armas de la represión. Detenidos, humillados, ante un despliegue
represivo impresionante so pretexto de una búsqueda de
guerrilleros. Gobiernos de nadie, son los que mantienen este
estado de cosas. Ayer y hoy, pero no mañana. Queremos terminar
con este orden “injusto” que ningún trabajador quiere, porque
equivale al hambre, a la miseria.
¡Que se escuche la voz del pueblo!, grito Parsons antes de
morir. Y el pueblo todavía no se ha escuchado pese al clamor de
tantos y la sordera de pocos.
Queremos ser hombres! No queremos ser esclavos!
Terminemos con este sistema opresor. Unámonos desde las bases
y luchemos unidos.-
Boletín Nº 17 - Mayo 1972; págs. 3 - 4.-

38.- SEÑOR LANUSSE

Sr. Mor Roig:


EN LA ARGENTINA SE TORTURA
En vuestros discursos siempre se citan, con honor y con
orgullo hechos y fechas de nuestra Historia.
De esa Historia, nos permitimos recordarles una fecha: enero
de 1813, y un hecho: la Asamblea General Constituyente, y un
artículo de la misma: la abolición de los métodos y elementos de
tortura.
Qué sentimientos especiales llevaron a esos hombres a
dictaminar estas medidas? Los más elementales que debe tener
un ser racional para considerarse humano.
Pero 150 años después, existen monstruos que torturan de la
forma más feroz y salvaje que pueda imaginarse.

CCCVII
Y Uds., señores Lanusse y Mor Roig, deben investigar y
descubrirlos, porque si no, son cómplices.-
Un Argentino
Boletín Nº 17 - Mayo 1972; pág. 5.-

39.- DEBE TENER LA CLASE OBRERA


SU PROPIO PROGRAMA O NO?

Permanentemente en la actualidad se habla de la


imposibilidad de seguir manteniendo el actual régimen, de la
corrupción y anarquía existente en él, de la necesidad de un
cambio de estructuras, otros de una revolución que puede ser
“nacional” o no, etc.. Pero qué significa ese cambio del cual
muchos hablan y desde qué punto de vista debemos los obreros
analizar cada una de las posiciones planteadas por los distintos
sectores políticos.
Antes que nada debemos empezar por comprender que no
son causales dichas posiciones y que responden cada una de ellas
a intereses de clases diferentes o de distintos sectores de clase,
pese a que todos nieguen esa parcialidad y manifiestan que son
soluciones “globales” que benefician a las mayorías.
Creemos también que ninguno de los caminos que se pueden
proponer deja sin perjudicar a algún sector. O bien a uno u otro
sector de la clase de los capitalistas o bien a los obreros y
explotados en general. Todo esto a pesar de las verborrágicas y
demagógicas manifestaciones que quieren arrastrar tras de sí al
proletariado y otros sectores sociales.
Hasta ahora la clase obrera fue simple espectador en lo que
se refiere a la conducción política, económica y social y sólo fue
llamada, o mejor dicho utilizada cuando se pretendía presionar
con su fuerza de masa para imponer dentro del gobierno la
conducción de tal o cual sector de la burguesía. Nunca fue
realmente consultada, y siempre se trató de desorganizarla
políticamente, cuando aparecieron las posibilidades embrionarias
de esa organización, para que no adquiera conciencia de que
únicamente independizándose políticamente podría tratar de
imponer o imponer unas medidas que verdaderamente la
beneficien a ella como clase y al país conjuntamente. Todos los
políticos de la burguesía comprenden que no hay que despertar a

CCCVIII
ese león aletargado que es la clase obrera y tratan de separar al
individuo de la clase, al ciudadano del trabajador, como si fueran
dos cosas distintas. Por un lado (como ciudadano) le limitan, y
cuando se lo permiten, a votar de vez en tanto, y afiliarse a tal o
cual partido cuya “manija” no la tienen ni la tendrán nunca los
obreros, y por otro lado (como obrero) lo único que puede hacer
es resistir la explotación capitalista y luchar por alguna
reivindicación económica. No, eso no debe seguir siendo así.
El obrero y el ciudadano son una misma cosa, un mismo ser
en el cual las necesidades políticas y económicas están
indisolublemente unidas, pues comprendemos que no habrá
reales cambios económicas sin profundos cambios políticos,
cambios realmente revolucionarios y porque creemos que la única
clase revolucionaria es la Clase Obrera y no habrá posibilidades
de esos cambios sin nuestra participación activa y directa.
Consideramos que para llegar a concretar un programa que
verdaderamente exprese nuestras aspiraciones, es imprescindible
recabar la opinión que surja del seno mismo de las masas obreras
y que dichas opiniones se orienten hacia la síntesis de un
Programa que sirva de instrumento para unir, organizar y fijar
claros objetivos a nuestra lucha de clase.-
Lisandro
Boletín Nº 17 - Mayo 1972; págs. 13 - 14.-

40.- Editorial

El país marcha hacia el proceso de normalización institucional.


Así rezan la mayoría de los comunicados oficiales de este
gobierno de nadie.
Pero la realidad nos muestra algo muy distinto. Los posibles
principios de soluciones para el pueblo en salud, economía,
educación, cultura, etc., ni fu ni fa. El costo de la vida sigue para
arriba. La libertad no existe. Las cárceles siguen llenas de presos
gremiales, políticos y estudiantiles. Los arrestos por estas
actividades continúan. La pena de muerte está a la orden del día.
Los dirigentes obreros de la CGT de Córdoba perseguidos por
“subversión”. La represión sigue en el país.
A este panorama se sumó en los últimos días los repudiados
hechos de Trelew.

CCCIX
Ante los mismos el SOEPU junto a otras organizaciones
solicitaron inmediatamente un plenario a la CGT para tomar
medidas. Pero ésta sólo se limitó a hacer oír su voz de protesta.
Estamos convencidos que estas cosas no se solucionaran con
comunicados de repudio. Sabemos de la indignación de las bases
y de la fuerza combativa en potencia de nuestro pueblo.
Una organización como la CGT no puede ni debe permanecer
por más tiempo sin una dirección auténticamente representativa
y que por sobre todas las diferencias defienda nuestros sagrados
intereses. Consideramos que es necesario que cada militante,
cada agrupación trate de ayudar a la organización de los
trabajadores para recuperar sus sindicatos.-
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; pág. 1.-

41.- BUROCRACIA SINDICAL

Lo que sigue, es una publicación de una organización


periodística especializada del mundo del trabajo, “Documentación
e Información Laboral”. Analiza las distintas formaciones de los
distintos nucleamientos sindicales del año ‘55 en adelante.
“En este breve trabajo, podemos ver como se mueven,
rompen y agrupan las direcciones sindicales, la mayoría
seguramente al margen de los obreros, constituyendo lo que
podría llamarse breve Historia de la Burocracia Sindical, que
podrá ser rota solo cuando los trabajadores se organicen desde
abajo, practicando y luchando con la única arma del triunfo: LA
DEMOCRACIA OBRERA.
1955: Intervención de la CGT. Destitución de la alta
conducción peronista.
1956 - 57: Actúa la Comisión Intersindical (organización que
reúne a peronistas y comunistas del PCA pro-ruso) con buena
adhesión de las bases.
Agosto del ‘57: Fracasa el Congreso de la CGT. Se forman dos
sectores enfrentados: Los “32 Gremios Mayoritarios
Democráticos” y las “62 Organizaciones”. Poco después sectores
de izquierda se separan de “las 62” y forman el grupo de “los 19”,
que luego se convertiría en el MUCS (Mov. de Unidad y Coord.
Sindical).
1961 - 62: Dominan las direcciones sindicales: Las “62” (con
sectores que apoyan a Frondizi y otros “ortodoxos” que lo

CCCX
enfrentan), los “32”, que van reduciendo paulatinamente sus
cuadros en favor de los Independientes, y el MUCS que le quedan
muy pocos sindicatos en su mayoría intervenidos. En 1961, el
gobierno entrega a la “Comisión de los 20” la dirección de la CGT,
con la protesta de los ortodoxos, de las 62, de los 32 y del MUCS.
Dicha Comisión debía llamar a un Congreso Normalizador, pero
por diversas circunstancias lo hace recién en 1963. Comienza a
pesar un hombre: Vandor, que maniobra con independencia de
Perón, y que tiene un sector de los independientes que luego
forman los “NO ALINEADOS”.
1965: En un nuevo Congreso de la CGT, comparten la
dirección las “62” y los “NO ALINEADOS”. En este año se forman las
“62 de pie junto a Perón” (antivandoristas) y las “62 leales a
Perón” (vandoristas). Vandor, en 1966, controla la CGT con los
“Leales” y los “No Alineados”. Los “De Pie” estaban divididos en
“Alonsistas y Ortodoxos”. Los “32” y el MUCS en la práctica no
existen.
1967: El Comité Central Confederal entrega la CGT a una
Comisión de “20”, y se llama a un Congreso en marzo de 1968. A
todo esto, las agrupaciones viejas van siendo reemplazadas por
los “Participacionistas”, provenientes en su mayoría de las “62”
dispuestas a la colaboración con el gobierno de Onganía, los
“Dialoguistas” (vandoristas), sin romper con el gobierno, pero sin
colaborar tanto como los “participacionistas”.
1968: La CGT queda en manos de los sectores que formarán
luego la CGT de los Argentinos (Ongaro) que ganarán sobre el
Vandorismo, que a su vez forma una CGT paralela y va
incorporando a los participacionistas, ahora llamados “Nueva
Corriente de Opinión”. Las “62” expulsa a un sector: los “8”.
1970: En un Congreso de la CGT toman la conducción el
Vandorismo (los “8”, las “62” y “la nueva corriente de opinión”) y
los “No Alineados”. La CGT de los Argentinos va perdiendo fuerza,
algunos grupos de ésta van a formar, junto a otros de la izquierda
(radicales y comunistas pro-rusos) el “Movimiento Nacional
Intersindical”. En la actualidad, las “62” reúnen prácticamente a
todos los sectores antes enfrentados del peronismo, dominando la
inmensa mayoría de los sindicatos.
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 7 - 8.-

CCCXI
42.- EL PROBLEMA DE LA SALUD

Las necesidades vitales del hombre en lo que se refiere al


normal funcionamiento de su organismo son atendidas por el
médico, bioquímico, odontólogo, etc.: los profesionales de la
salud.
Así como las necesidades del hombre de venta de calzado dan
lugar al surgimiento de la industrialización y comercialización de
zapatos, la necesidad de comer a la industria alimenticia,
etcétera, las necesidades sanitarias dan lugar a la aparición de la
industria y comercio de la salud. Dentro de la sociedad en que
vivimos, toda necesidad humana tiende a transformarse en objeto
de lucro. Es así como la gran fábrica de zapatos, en el frigorífico,
el laboratorio de especialidades medicinales, o el sanatorio están
incluidos todos dentro de la misma categoría: producen para
vender. Unos zapatos, otros embutidos, otros salud.
Esta comparación es la cruda realidad que se da dentro de
una sociedad que como la nuestra subordina cualquier necesidad
vital a un supremo interés económico, la salud, al transformarse
en un bien de lucro, cuando debería ser un bien social, cuestiona
todas las determinaciones adoptadas por organismos
internacionales, como por ejemplo la organización mundial de la
salud, que dice: “que es un deber del estado velar porque se
verifiquen las condiciones para que los ciudadanos gocen de
completo bienestar físico, mental y social, a fin de que se realicen
íntegramente el concepto de salud, garantizando como un
derecho fundamental a todo ser humano, sin distinción de raza, y
la ideología política, religión o condición económica y social”. Esto
está lejos de cumplirse, y por el contrario, en una sociedad que en
materia de salud se rige por la ley de la oferta y la demanda, cada
una compra de acuerdo a su poder adquisitivo. Por lo tanto, más y
mejor calzado tiene, más y mejores alimentos consumen, más
perfecto será su estado sanitario. A través de las estadísticas
oficiales, comprobamos que el estado sanitario de los distintos
sectores sociales, está en razón directa con su nivel económico.
La mayoría de las enfermedades e índices de mortalidad
tienen sus picos máximos en aquellos sectores de menores
ingresos y en las provincias más pobres: de las 3.600 muertes
que se producen en conjunto por año, 1.400 son de niños recién
nacidos, en Río Negro, Jujuy, Neuquén y Salta, las tasas de

CCCXII
mortalidad infantil no descienden de 100 por 1.000. La causas de
las muertes de los niños, en la mayoría de los casos, están
íntimamente relacionadas con deficiencias en la alimentación,
vivienda, mala o nula atención médica de la parturienta y del
recién nacido. En estas mismas provincias se registran agudos
déficit en el campo de la educación: la tasa de deserción escolar
en Jujuy es el del 81,4 %, Chaco 84,2 % y en Neuquén es del 85,8
% y veremos cómo se aplica a la ley de la oferta y la demanda: en
las provincias pobres, y en los sectores de menos recursos, donde
se acentúa el déficit alimenticio y habitacional, bajo es el nivel
educativo, etcétera, el complejo económico abocado al negocio
de la salud (laboratorios, sanatorios) no encuentran un mercado a
todo para revisar sus ganancias. En cambio, en los centros más
poblados y los sectores con mayor respaldo económico, ya que
son éstos, y para estos dedican su producción los laboratorios de
especialidades medicinales.
El hospital, refugio de los enfermos pobres, ha dejado de ser
gratuito y muestra un panorama desolador, edificios que se
vienen abajo, sin material científico, medicamentos ni personal.
Las mínimas necesidades del paciente desde las clases deben ser
financiadas por el mismo, o a través de las cooperadoras.
Concretamente el enfermo tiene que abonar desde los aranceles
para su extensión, hasta los medicamentos, hecho éste que
derriba todo intento de argumentar la asistencia hospitalaria
gratuita.
La existencia de un “mercado de la salud” hacia el que
orientan su producción las empresas que industrializan y
comercializan la asistencia sanitaria, y el marginamiento de ese
mercado de grandes sectores de población que son justamente
los más necesitados de atención médica adecuada, son reflejo en
el campo de la realidad sanitaria, de las contradicciones
existentes entre los intereses de las clases poseedoras y el
bienestar de las mayorías.
Causa indignación comparar los presupuestos del año ‘72
para sanidad: 1.267 millones de pesos, y para defensa y
seguridad: 3.474 millones. Y más aún, si consideramos el millón
de habitantes que padece el Mal de Chagas, el incremento de los
casos de tuberculosis (ej. de 1966 a la fecha en la provincia del
Chaco aumentó de 1.400 a los 1.500 casos, en Salta de 1.100 a
2.800 y en Tucumán de 1.000 a los 2.700), el constante aumento
de la mortalidad infantil (861 niños de cada 1000 muere en el país

CCCXIII
antes de cumplir el año), en 1966 la cifra era de 52,2 y en
provincias como Jujuy con 136/1000, Salta 114/1000, cuando en
los países desarrollados la tasa es menor de 30/1000, ej.
Alemania Oriental: 20,4/1000.
Esto es VIOLENCIA. Una violencia que se refuerza y mantiene
con la VIOLENCIA de la represión militar a las protestas del pueblo
cuando se moviliza ante tanta injusticia.
Y qué deberíamos exigir los trabajadores para solucionar el
problema de la Salud? Pues, como primer punto, un aumento de
los fondos destinados al Presupuesto Sanitario. Y de dónde
saldrán esos fondos? Porque a lo mejor se pretende aumentar
los impuestos, con lo que estaríamos peor que antes. DEBE SALIR
DE UNA DISMINUCIÓN DEL PRESUPUESTO MILITAR, o sea cambiar
aviones y tanques por hospitales, fusiles FAL por vacunas y gasas.
Debemos luchar por cambiar el concepto mercantilista de la
medicina, transformando los lujosos Sanatorios Privados
(verdaderas Sociedades Anónimas, cuyos dueños, en muchos
casos ni siquiera son médicos, sino inversores de industria de la
salud), en Hospitales públicos y gratuitos. (...) O sea y
resumiendo, debemos luchar por una PRESTACIÓN MÉDICA
INTEGRALMENTE GRATUITA, porque consideramos que la misma
debe dejar de ser un negocio, para transformarse en un derecho
inviolable de la SOCIEDAD toda.-
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 9 - 10.-

43.- RENUNCIA

Días pasados presentó la renuncia a esta C.D. el compañero


Juan Dowling. La misma, que al entrar en impresión este Boletín
no había sido considerada, es la siguiente:
“Compañeros: A partir que me veo obligado a renunciar a la
C.D. del SOEPU, quiero dejar claro los motivos de la misma. Se ha
planteado la necesidad, engendrada por la vida, de discutir sobre
los objetivos que unifique el accionar de la C.D. Se logra una
propuesta, que en principio consigue ese objetivo. Se plantea una
discusión sobre la forma a la cual se recurre para concretar los
mismos. Por mayoría de C.D. se resuelve: que no es necesario
publicar la resolución tomada, y por consiguiente no se la somete
al conjunto del gremio para que en Asamblea ratifique o rectifique

CCCXIV
la misma.
Discrepando con esta metodología, que evidencia, una mala
interpretación, una contradicción o un concepto totalmente
equivocado de lo que significa LA DEMOCRACIA SINDICAL DE LA QUE
TANTO SE HABLA.
Si de lo que se trata es, discutir nuevos objetivos que
unifiquen el accionar del SOEPU, y no siendo el Sindicato la
Comisión Directiva sino el conjunto de los afiliados, incluyendo la
eventual dirección corresponde que los mencionados objetivos
que “unifiquen el accionar del SOEPU” sean definidos por quien
corresponde -todos los componentes del sindicato- por el único
mecanismo apto: LA ASAMBLEA GENERAL.
Aclaro también que no comparto el contenido de la resolución
tomada por la C.D. Pero esto no es lo fundamental que determina
mi renuncia en este momento. En efecto, lo que hoy me lleva a
renunciar es la mencionada metodología empleada para dotar al
SOEPU de esos “nuevos objetivos que unifiquen su accionar”. En
la metodología aplicada en los hechos, se está poniendo de
manifiesto una negación de la esencia misma de la DEMOCRACIA
SINDICAL, cuestión que a mi juicio constituye el primero y más
importante de los elementos que conforman un programa obrero
y sindical.
Aquí se lo ha negado en los hechos aunque se lo formule en
los papeles, y esa negación de hecho, se pone de manifiesto
cuando debe resolver ni más ni menos que ese conjunto de
nuevos objetivos para unificar el accionar de la C.D., como si esta
fuera por si sola el sindicato.
No niego a la C.D. el derecho de elevar una plataforma de
objetivos unificándose alrededor de los mismos, lo que cuestiono
y no puedo avalar con mi silencio, es quién debe ser el “juez” que
decida finalmente acerca de cuales deban ser los objetivos del
SOEPU y por ende de la C.D..
Siendo esta cuestión metodológica, lo fundamental que hoy
me lleva a renunciar, teniendo además de esta discrepancia con
todo el contenido de la resolución aprobada, considero que es mi
deber dejar en su momento absolutamente clara las críticas a esa
resolución y la propuesta supera-dora. Aunque recalco que esto
último no es hoy lo fundamental -renun-ciaría también- en el caso
de coincidir con toda la resolución pero utilizándose la misma
metodología hoy empleada.
Obviamente seguiré trabajando junto al conjunto del gremio

CCCXV
contra cualquier sector que intente llevar al sindicato a posiciones
contrarias a los intereses de los obreros.-
Juan Dowling
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 15 - 16.-

44.- SALARIOS

El salario real de los trabajadores, según las estadísticas


oficiales, han llegado en el mes de julio último a colocarse por
debajo del nivel de diciembre del año pasado.
De este modo, los dos incrementos salariales concedidos este
año por el gobierno nacional han sido absorbidos con holgura
por la marcha acelerada del proceso inflacionario.
Según la serie estadística llevada por el Instituto Nacional de
Estadística y Censos acerca de los salarios nominales promedio
pagados a un obrero peón de la industria manufacturera, y
ponderándolos por el índice de costo de vida, se arriba a la
conclusión:
Salario Nominal Costo de la Vida
Salario Real
Abril 1971 1.059,3 847,7 124
Diciembre 1971 1.262,2 1.059,2 119
Mayo 1972 1.669,3 1.374,0 121
Julio 1972 1.669,3 1.527,7 109
(1)
Agosto 1972 1.669,3 1.588,8 105
(2)
Septiembre 1972 1.836,2 1.652,3 111
(1)
Se supuso un aumento del costo de vida del 4 % en el mes de Agosto.
(2)
Se supuso que el costo de vida crecerá 4 % en Agosto y otro tanto en
Septiembre y, además, que los salarios nominales aumentarán en un 10 % a
partir del 1º de Septiembre.
Fuente: La Opinión, sobre datos del INDEC
Proyectando esa serie y suponiendo: 1) que los salarios sean
incrementados en un 10 % a partir del 1º de septiembre y 2) que
el costo de vida crecerá a un ritmo del 4 % en agosto y
septiembre se comprueba que el salario real así obtenido será
solo ligeramente superior al del mes de julio e inferior a los

CCCXVI
niveles habidos en diciembre de 1970, abril y diciembre de 1971
y mayo de este año.
Por otra parte, los aumentos salariales siempre son
posteriores al incremento de los precios. Ese desfasaje crea a los
trabajadores, la necesidad de endeudarse, de forma tal que los
aumentos salariales concedidos a posteriori deban ser dedicados,
en buena medida, a tender el endeudamiento anterior.
Esta disminución, en términos reales, del nuevo salario no es
medida por la estadística oficial.
La conclusión resulta más sorprendente si se compara lo
aumentado por el salario real entre 1960 y 1971, con los
incrementos del ingreso bruto nacional. Tomando esta última
variable a pesos constantes de 1960 se puede observar que el
ingreso bruto nacional creció en ese período en un 56 %. La
remuneración de los trabajadores, en el mismo lapso, lo hizo sólo
en un 19 %. El resto evidentemente, fue apropiado por los
restantes sectores sociales.-
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 15 - 16.-

45.- Editorial

Compañeros:
Días pasados festejamos los seis millones de fardos de caucho
sintético. Todo un acontecimiento para PASA. Ese día de fiesta
para la gente de traje y corbata. Petroquímica estaba toda
engalanada. Banderas, cintas de colores, ropa nueva para
muchos compañeros, máquinas recién pintadas...
Hasta el tiempo parecía asociarse a la jornada. Una lluvia
torrencial anegaba San Lorenzo.
Pero la fiesta no se suspendió por mal tiempo, aunque los
obreros decidimos no concurrir a esa fiesta.
Pero eso no importaba. Había otra gente “importante” que
había venido. Estaba el Gobernador de la Provincia Gral.
Sánchez Almeira. El representante de este gobierno
hambreador, el defensor de intereses patronales, el cómplice del
levantamiento de Molinos Río de la Plata y de la persecución de
obreros de la zona. Pequeño curriculum para visitar fábricas en
expansión.
Los obreros petroquímicos nos quisimos asociar a su visita. Y

CCCXVII
le dimos la bienvenida con un repudio unánime. A la entrada de la
fábrica lo saludábamos con una leyenda. Pero la patronal se
encargó de hacerla borrar, “porque esas declaraciones de tipo
político no corresponden al Sindicato”. Había que salvar la
imagen.
Y todo terminó pronto. Los obreros seguimos poniendo el
lomo. Y el Gobernador se fue. Posiblemente a buscar otra fábrica
en expansión.-
Boletín Nº 19 - Octubre 1972; pág. 1.-

46.- LIBERTAD A TOSCO

Los petroquímicos nos alegramos de la liberación del


compañero de Luz y Fuerza de Córdoba, Agustín Tosco, que
injusta y arbitrariamente permanecía detenido. Pero sabemos que
numerosos trabajadores, estudiantes y políticos continúan en las
cárceles de la dictadura, por el solo delito de luchar contra este
régimen de hambre y represión. Para ellos también reclamamos
su inmediata libertad.-
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 15 - 16.-

47.- RENUNCIA ACEPTADA

En respuesta a la renuncia del compañero Juan Dowling, la


C.D. da a conocer lo siguiente:
Esta C.D., tras analizar la renuncia presentada por Ud. al cargo
que ocupa en el SOEPU, ha resuelto aceptarla, rechazando los
términos con que la eleva, por considerarlos improcedentes y
desajustados de la realidad.
Como Ud. bien conoce, entre los hombres que componen la
C.D. no existía la coherencia necesaria que la dirección de nuestro
gremio requiere.
Algunos miembros de la C.D., siempre le restaban importancia
a la lucha por las reivindicaciones inmediatas, nunca le
preocupaban mucho las violaciones del Convenio Colectivo de
Trabajo en que la patronal incurriera, ni colaboraron en el
esfuerzo y sacrificio que mantener en marcha nuestra Obra Social
significa.

CCCXVIII
Otros, por su parte, se dedicaban nada más que a la lucha
antipatronal o a la aplicación correcta del Convenio, sin
comprender que los acontecimientos políticos, económicos y
sociales que suceden en la Argentina afectan directamente los
intereses de los trabajadores petroquímicos y del sector que
tenemos la obligación de defender: la clase obrera.
Por otra parte, la diferencia de niveles entre los componentes
de nuestra C.D. acentuaba aún más esa incoherencia existente,
de ahí que un par de compañeros redactó una pequeña fórmula
de acuerdos que tiende a despojarnos de posiciones personales y
a obligarnos a todos al trabajo permanente por tres objetivos: uno
inmediato, el trabajo permanente por las reivindicaciones de los
obreros petroquímicos; otro a mediano plazo, la concientización y
organización de las bases; y un objetivo final que se dará a largo
plazo y que será la liberación de los trabajadores. También
definimos una política de organización que la sintetizamos en
luchar contra la patronal por mejores conquistas, contra la
burocracia sindical, contra el sectarismo y partidismo dentro de la
organización gremial que ponga en peligro la unidad del gremio y
aceptamos un método para todo: la aplicación de la democracia
obrera en todos los niveles, con lo cual conseguiremos la
discusión de distintos problemas sin distinción de razas, religiones
o partidos. Ud. tuvo diferencias con este acuerdo y no lo aprobó,
con lo cual no acepta despojarse de posiciones personales y
renuncia al gremio según el texto elevado, “por la metodología
empleada para aprobarlo, a nivel de dirigentes y a espaldas de los
trabajadores teniendo un falso concepto de la democracia sindical
que tanto pregonamos”.
Esta acusación la consideramos improcedentes por cuanto el
acuerdo es a nivel de C.D. porque es para y entre los hombres de
C.D. en primer lugar. En segundo lugar porque no nos hemos
propuesto ni los objetivos a reivindicar, ni los métodos a usar ni lo
vamos a hacer ni lo hemos hecho nunca, sin consultar mediante
asamblea lo que los propios obreros que representamos quieren y
están decididos a lograr.
En tercer lugar porque nos parece incongruente consultar con
las bases se están de acuerdo en que realicemos un trabajo de
elevación de conciencia y organización que va a ir dirigido a las
propias bases. Lo que sí siempre hicimos y vamos a continuar
haciendo, es resolver con todos los compañeros dirigentes,
delegados, miembros de Sub-Comisiones y activistas, cuál es el

CCCXIX
camino para que el resto de compañeros eleve su nivel de
conciencia y participe en las determinaciones del gremio.
Por último, porque en el camino de la liberación de la clase
obrera, n/gremio nunca participó de movimiento alguno, llámese
CGT, Inter-sindical o Movimiento Sindical Clasista, ni lo va hacer
sin el consentimiento y la aprobación mayoritaria en asamblea de
los trabajadores petroquímicos que comprendan que por encima
de las diferencias salariales y divisiones en ramas de producción,
los trabajadores deben estar unidos por pertenecer a una misma
clase y para luchar por los intereses de esa clase.
Sin otro particular, saludamos a Ud. atentamente.-
La Comisión Directiva
Boletín Nº 18 - Septiembre 1972; págs. 17 - 18.-

48.- Editorial
PARITARIAS

Cuando este Boletín se encuentre en circulación, es muy


probable que la discusión de Convenios de Trabajo se encuentre
en marcha.
Esta convocatoria a paritarias por parte de Lanusse y Cía.
tiene características muy particulares en términos generales, y en
especial para nuestro gremio. Nació en una de la tantas
componendas de la burocracia sindical con el Ministro de Trabajo,
San Sebastián, como elemento “apaciguador” de la grave
“tensión social”, que de no amenguarse puede romper la farsa
eleccionaria y el GAN, así como también puede precipitar la caída
de Coria, Rucci y sus satélites. Está claro que el arreglo fue
completo: “El gobierno por esta única vez, faculta a que los
anteproyectos, petitorios y firmas de convenios se realicen con la
aprobación de las respectivas comisiones directivas de los
gremios”. (En el año 1971 también fue por única vez). Los
trabajadores no deben participar en nada, así la entrega se hace
menos violenta y más oculta, las asambleas ya no hacen falta, los
locales sindicales ya se pueden usar de centros comerciales,
salones de belleza, o de alquiler.
Es que si participan las bases, no se van a poder poner topes
como ya deben tener acordado patrones y CGT, y sin topes, se
generaría una crisis y una lucha de tal envergadura, que puede

CCCXX
significar para aquellos que viven del sudor de otros, la sepultura
del sistema de opresión y explotación que hoy soportamos los
trabajadores en Argentina, por supuesto que con ello, caerá la
casta social que hoy gobierna nuestro país y los jerarcas
sindicales serán reemplazados por verdaderos dirigentes al
servicio de su clase.
Para que esto no suceda, el aparato tramposo ya está
montado, y los únicos capaces de destruirlo son las propias bases
de las organizaciones más poderosas que seguramente serán el
termómetro de la discusión. En resumen: sin la expectativa de
estas paritarias, como consecuencia del deterioro salarial,
surgirían grandes luchas que sobrepasarían, desbordarían las
jerarquías sindicales con probabilidades de destruirlas, así
también correría peligro de ser interrumpido el proceso
eleccionario, que a esta altura está claro, no tiene otro fin que
asegurar elecciones que permitan que todo quede como está. Por
otra parte, con la convocatoria a Paritarias como está resuelta, (a
pesar de ser peligrosa), se evita la participación y presión de las
bases, para permitir miserables acuerdos que los patrones están
aún en condiciones de pagar, sin que se les agrave su crítica
situación dentro del sistema capitalista. Para ser más claro, en las
próximas paritarias si se pretende restituir el poder adquisitivo de
los salarios y mantenerlo luego, los trabajadores sin lugar a dudas
van a tener que cuestionar a la propia organización y planificación
económica en Argentina. Por ejemplo, en el gremio de la
construcción la mano de obra equivale al 40 % del costo total, si
se exige un 60 % de aumento salarios, el precio del metro
cuadrado se elevaría de tal forma que esta industria está
semiparalizada y sus obreros semidesocupados, quedaría
definitivamente paralizada y con plena desocupación. A su vez
nos preguntamos cómo es posible que los obreros de la
construcción estén desocupados, que las cerámicas cierren, que
los ladrillos, el portland, la arena, la cal, abunden almacenados y
por la otra parte se necesitan dos millones de viviendas, existan
un millón de familias en villas miserias, no alcancen las escuelas,
los hospitales, etc..
Es posible que los obreros consigan un 60 % de aumento y
tengan trabajo luego, pero para ello deberán reemplazar y tomar
en sus manos la planificación que el estado tiene en los papeles
o debería tener para asegurar una digna vivienda a cada familia.
A su vez debería tener la dirección, administración y control de

CCCXXI
las grandes empresas constructoras. Por otra parte está la otra
alternativa: que todo quede como está, y que el “compañero”
Coria firme por 15 % los nuevos salarios.
Dijimos que estas paritarias tienen características especiales y
particulares para nuestro gremio, es que cuando el panorama
afuera es difícil, PASA puede absorberlo con gran facilidad,
considerando que es una empresa en expansión, monopolio por
excelencia, altamente rentable, donde el costo de nuestra mano
de obra es del 2,5 - 3 % de los montos producidos, donde las
franquicias acordadas por el estado (el bolsillo de todos) en
materias primas (gas natural, propano, butano, nafta) le asegura
estos a precios muy inferiores a los reales de costo, donde los
salarios que se pagan son muy inferiores a los de otros países,
donde el precio de venta de los productos que se elaboran
exceden en mucho a los valores del mercado internacional, no
obstante que PASA se radicó en Argentina para “asegurar una
estructura económica que permita producir a precios ajustados
a los niveles internacionales”. Esta suma de hechos, más otros
datos y estadísticas, permiten asegurar -pese a que en sus
alocuciones a la Supervisión, Rodríguez Larreta tratara de
afirmar que PASA es una empresa con vocación nacional que no
rindió un céntimo de ganancia a los capitales inversores- que las
inversiones están cubiertas y que sus beneficios son de tal
magnitud, que le permiten abonar los salarios pedidos y las
reivindicaciones levantadas para la próxima discusión de
convenios.
Nuestro escollo entonces girará en la situación exterior, es
decir, una cuestión que para PASA es fundamental, si tenemos en
cuenta que el no cumplir fielmente las directivas del gobierno,
traería como consecuencia un roce en las relaciones y un punto
en contra en la disputa por monopolizar el mercado del etileno, lo
mismo sucedería con una posible “ventilación” de contratos
ventajeros sobre la economía nacional, que sectores de la
burguesía nacionalista nunca se animaron a denunciar.
Es bien conocido, que a pesar de que con la competencia
tratan de fundirse unos a otros, los sectores empresariales se
unen para cumplimentar y ejecutar hechos que le aseguren su
supervivencia y explotación de la mano de obra de los
trabajadores, y PASA dentro de ese mecanismo, hará todo lo
posible para no ir mucho más allá de los que otros sectores van.
Por ejemplo, en este momento hay gran preocupación dentro

CCCXXII
de la Cámara de Empresarios Químicos, puesto que la Federación
Argentina de Trabajadores de Industrias Químicas (FATICA) está
interesada en lograr un Convenio que equipare, en alguna
medida, nuestros salarios, y por supuesto la Cámara Química
presiona sobre PASA para que esos desniveles no se agranden
más.
Serían las mismas presiones que ejecutaría PASA sobre
Duperial si a ésta le ocurriera dar las 6 horas, lo que supondría el
inmediato estallido de un conflicto con nosotros por el mismo
objetivo.
Para definir:
- La situación de crisis externa nos dificulta nuestra propia
discusión.
- La burocracia sindical seguramente firmará topes ya
pactados.
- Lograr nuestras reivindicaciones va a depender en gran
parte, de nuestra propia unidad y lucha, que acorrale e
imposibilite a PASA sostener los compromisos políticos y
empresariales a que tácitamente está obligada.-
Boletín Nº 20 - Noviembre 1972; págs. 1 - 3.-

49.- ALGO PARA RECORDAR: 17 DE OCTUBRE DE 1945

La siguiente es una colaboración para El Petroquímico, de


un compañero afiliado:
Cuando el 17 de octubre de 1945, los trabajadores en masa
pararon las fábricas y salieron a las calles, marcando a fuego la
historia política argentina, ese día conocimos nuestra enorme
fuerza, empezamos a ver nuestra presencia directa, sin
intermediarios, reclamando a Perón que era el único capaz de
cambiar un estado de cosas, cambio que de otra manera no
hubiera sido posible lograr.
Las conquistas que logramos a través de la lucha junto a
Perón, fueron mucho más allá de los aumentos salariales, del
aumento de nuestra fuerza sindical, la mayor de América Latina, y
el fin de muchas amarguras e injusticias. Porque
fundamentalmente nos hicieron sentir capaces de ser respetados
como hombres, de no ser basureados por los patrones, y de ser,
en gran parte, dueños de nuestro propio trabajo.

CCCXXIII
Tenemos que reconocer que así como los trabajadores dieron
aquel gran paso adelante que fue el 17 de Octubre de 1945 y
después las luchas del Rosariazo, el Cordobazo y tantos otros, los
mismos también nos marcan las limitaciones que tiene la
improvisación organizativa.
Si en aquel 17 de Octubre se rescató a Perón y pudimos
participar en el poder, hoy ya no quedan dudas de que para traer
a Perón y concretar la verdadera Justicia Social desde el poder, no
alcanza ni basta con la lucha espontánea por más masiva que
sea.
Para reconquistar el poder, tenemos que tomar conciencia y
no olvidarnos que aquellos que hoy se dicen defensores de la
clase trabajadora, no vacilaron un día en aliarse con quienes
explotan y chupan la sangre del obrero argentino formando lo que
se llamó la UNIÓN DEMOCRÁTICA, que estaba en contra de lo
auténticamente nacional.
Es por eso que no hay que dejarse engañar con bonitas
palabras y fijarse en los hechos y la forma de actuar de quienes
pretenden implantar sistemas que en la Argentina tendrán cabida
sólo cuando no quede un solo peronista que recuerde lo que en
algún momento conocimos, y que a no dudarlo volveremos a
ver: UNA ARGENTINA SOCIALMENTE JUSTA, ECONÓMICAMENTE
LIBRE Y POLÍTICAMENTE SOBERANA.-
Casildo
Boletín Nº 20 - Noviembre 1972; págs. 4 - 5.-

50.- OBRA DE BESTIAS

El obrero Ángel E. Pablo, candidato a Secretario General de


una lista opositora a la actual conducción del Sindicato Municipal
fue secuestrado y torturado durante dos días en Buenos Aires. La
víctima responsabiliza de este brutal atentado, a los actuales
dirigentes del gremio enrolados en las 62 Organizaciones
Peronistas, y tenía como objetivo hacerlo desistir de su intención
de presentarse en las elecciones de renovación de CD del gremio.
Este hecho nos repugna como obreros y como hombres, y la
acusación, de ser cierta, confirmaría una vez más lo duro de la
lucha contra la burocracia traidora en los grandes Sindicatos y
Federaciones.-

CCCXXIV
Boletín Nº 20 - Noviembre 1972; pág. 4.-

51.- HACE UN AÑO

El martes 26 de octubre de 1971, hace ya un año, la planta de


la empresa FIAT en Córdoba era ocupada militarmente por las
tropas del 3º Cuerpo de Ejército dirigidas por el General López
Aufranc, actual Comandante en Jefe del Ejército.
Luego vino el despido de 400 obreros, el encarcelamiento de
200 dirigentes y activistas y la intervención a los Sindicatos
SITRAC y SITRAM, que nucleaban a 7 mil trabajadores de FIAT.
La ocupación militar imposibilitó la organización de las bases
para defenderse de tamaño atropello. Así murió la cabecera del
Movimiento Sindical Clasista, que a pesar de todos sus defectos y
errores, era visualizado como un polo de unión de los sindicatos y
agrupaciones de bases democráticas y combativas.
Hace unos días, el Ministro de Trabajo de la Nación “otorgó” a
la Unión Obrera Metalúrgica, de Rucci, el dominio de los obreros
que antes estaban nucleados en SITRAM (Sindicato de
Trabajadores Materfer) y probablemente los trabajadores antes
nucleados en SITRAC (Sindicato de Trabajadores Concord), queden
bajo la dirección de SMATA (Mecánicos), constituyendo esto el
final de una maniobra del Gobierno, que comenzó liquidando a
una dirección combativa, y terminó dividiendo a los obreros de
FIAT de Córdoba.-
Boletín Nº 20 - Noviembre 1972; pág. 5.-

52.- EL TRABAJO EN TURNO

Es por todos conocida, aunque superficialmente, la diversidad


de problemas que afecta a los compañeros que trabajan en turnos
rotativos. Estos compañeros son los que viven a contramano de
su familia y de la sociedad. Son aquellos para quienes no existen
los días sábados, ni domingos, ni días de fiesta, ni fin de año. Son
los que de noche trabajan y de día duermen sin descansar.
Según una encuesta realizada entre los trabajadores
petroquímicos afectados al turno, el 80 % responde que se siente
frustrado y que debería dejar el turno. La C.D. del SOEPU ha
profundizado el estudio de este problema, consultando a

CCCXXV
profesionales de nuestro medio, realizando encuestas en el
gremio, y utilizando diversos materiales especializados (Revista
Syndicalisma” Nº 1388 de la CFDT de Francia, Congreso
Internacional del Trabajo en Turno, 1969, Oslo; Psiquiatría y Poder
de Giovani Berlinger). Las conclusiones archivadas son las
siguientes:
A.- RITMOS BIOLÓGICOS: Todos los órganos de los animales y
de los seres humanos tienen una actividad rítmica, es decir tienen
determinadas variaciones según un período fijo. Con los animales
se cuentan por ejemplo los ciclos anuales: hibernación,
migraciones estacionales, actividades sexuales. El ritmo biológico
más importante, particularmente en el hombre es el que se llama
“ritmo normal”. Es decir el conjunto de variaciones de nuestros
órganos determinados en un período de 24 horas.
La más familiar de esas variaciones es el descanso. Tenemos
otras, por ejemplo, variaciones de la temperatura corporal, que
son mínimas en la mañana de 6 y de 7 horas, y son máximas a las
17 horas. (...) desde este punto de vista biológico estricto el
hombre puede invertir el ritmo. Él puede habituarse por ejemplo a
dormir de día y estar despierto de noche. Pero esto bajo varias
condiciones:
*.- Que tenga la posibilidad de dormir de día también como
de noche.
*.- Que tenga la posibilidad de alimentarse en la noche tan
bien como en el día.
*.- Que disponga de un tiempo de adaptación suficiente.
*.- y tenga una vida equilibrada sobre el plano psicológico.
El aspecto ideológico no es el único a considerar. El trabajo en
turno tiene sus repercusiones sobre el plano familiar y social y
sobre la salud.
B.- EL DESCANSO: La necesidad del descanso varía
igualmente según la edad y según los individuos. Para un hombre
adulto, son necesarias generalmente ocho horas de descanso,
siete para algunos. Es necesario que esta cantidad de descanso
esté asegurada. Pero además es necesario una cierta entidad de
este descanso: El descanso tienen necesidad de silencio y de
oscuridad, y debe desenvolverse según ciertas fases de acuerdo
con las diversas funciones del cuerpo. Una falta de descanso o un
mal descanso entraña un estado general de menor resistencia del
organismo y tiene consecuencias sobre el sistema nervioso, el
sistema circulatorio.

CCCXXVI
Según la encuesta del SOEPU: “Después del turno de 0 - 8,
las horas que duerme el trabajador oscilan entre: 4 horas el 26
%, 5 horas el 35 %, 6 horas el 24 %, 7 horas el 10 % y el resto 8
horas. Considerando que una persona que realiza una vida normal
necesita 8 horas como mínimo para descansar, sumado a que el
75 % de los encuestados manifiesta que por la sobre excitación
posterior al trabajo nocturno, por los ruidos, por la falta de
comodidad en la casa, les resulte imposible descansar bien,
corroboramos nuestras apreciaciones iniciales”.
C.- LA SALUD: Además de los trastornos de descanso
mencionados, se encuentran otros tipos de trastorno que inciden
sobre nuestra salud. Los más frecuentemente dados son las
enfermedades del aparato digestivo y enfermedades del sistema
nervioso. A estos trastornos podemos llegar por la falta de
descanso, vida familiar y social, y por otros factores que inciden
directa y aun indirectamente, como el peligro latente de incendios
y explosiones, la presencia de gases y líquidos tóxicos y
corrosivos, las señales de las alarmas, que obligan a nuestros
sentidos a percibir y reaccionar en tiempos mínimos y que nos
proyectan a una actitud cada vez más vigilante y tensa. Esa
condición de obreros vigilantes de la producción, va anulando
nuestra capacidad individual sin que los obreros tengamos
contacto directo con el proceso productivo ni experimentemos de
forma palpable el fruto de nuestro esfuerzo.
D.- ACCIDENTES: Las diferencias constatadas con otros
sistemas de horario son poco importantes. De los estudios
realizados en varios países, se nota que en los turnos nocturnos
se producen menos accidentes, pero son más graves. Esto
proviene sin duda del hecho que el trabajador se encuentra
menos distraído por factores externos al trabajo, pero su rapidez
de reacción ante casos imprevistos se ve disminuida.
E.- VIDA FAMILIAR: Una encuesta de Marc Maurice en 1965 en
Francia, muestra que sólo un turno de noche permite la presencia
del trabajador a las dos comidas cotidianas en el 45 % de los
casos, lo que hace suponer que éste interrumpe prematuramente
su descanso para participar de alguna comida. Esto se ve aún
más agravado cuando se trabaja los sábados, domingos y feriados
que la mayoría de los hogares aprovecha para reunir a las
familias, y cuando ocurre la ausencia de relevo que obliga al
obrero a realizar horas extraordinarias. El rol del padre o madre
de familia está perturbado, las relaciones entre esposos, diálogo,

CCCXXVII
vida sexual, son anormales. En varios países se observa que los
divorcios, separaciones, son proporcionalmente más frecuentes
en los trabajadores de turno.
F.- VIDA SOCIAL: Las consecuencias sobre las relaciones
sociales de la familia son todavía más difíciles de corregir: si la
familia puede en una cierta medida adaptar su modo de
organización a los horarios del padre, ello no es lo mismo para la
mayoría de las actividades culturales, políticas, de esparcimiento,
que son organizadas en función de los horarios practicados por la
mayoría de la población.
El trabajador en turno no puede más que raramente salir o
participar de reuniones a la tarde o a la noche. Porque cuando
trabaja de tarde o de noche se ve imposibilitado. Cuando lo hace
de día en días feriados debe acostarse temprano. Sus francos
además muy de cuando en cuando coinciden en feriados o
domingos. El 70 % no realiza ninguna actividad fuera de PASA ya
que el horario los aísla de una serie de contactos. Todos estos
inconvenientes agravados si los dos esposos trabajan, y donde la
jornada de descanso del marido muy pocas veces en el año se
produce coincidiendo con los de su mujer.
G.- LA ROTACIÓN: En la actualidad la rotación se realiza
semanalmente: una semana de día, otra de noche y otra de tarde.
Es evidente que esto obliga a los trabajadores a una adaptación
fisiológica constante. Ciertos especialistas estiman que una
rotación menos rápida (todos los meses o cada tres meses por
ejemplo) sería preferible. Los estudios realizados no son
concluyentes: los trabajadores cuando deben trabajar en el turno
de noche, padecen los trastornos en formas semejantes a los de
rotación semanal. En otro orden, la vida familiar y social es más
gravemente perturbada. Otros especialistas piensan que una
rotación más rápida, cada dos días por ejemplo, permite atenuar
ciertos trastornos. Incluso se ha sugerido un sistema de
desplazamiento de 1 hora cada día, jornadas de 25 horas pero
ninguno ha sido experimentado.
H.- ALGUNAS REIVINDICACIONES: A título de ejemplo
mencionaremos algunas reivindicaciones levantadas por
trabajadores químicos y petroquímicos de otros países:
*.- El trabajo en turno debe autorizarse en caso de necesidad
técnica absoluta.
*.- Reducción del tiempo de trabajo, sin reducción del salario.
*.- Otorgamiento de una jornada de reposo suplementaria,

CCCXXVIII
cada cuatro semanas.
*.- Todo día feriado trabajado tendrá derecho a una jornada
de descanso compensatoria paga.
*.- Cada período de tres años, consecutivos o no, de trabajo
en turnos, tendrá derecho al avance de un año en la edad de la
jubilación sin disminución de salario.
*.- Se deberá brindar información sobre los riesgos inherentes
al trabajo en turno.
*.- Revisión médica en general cada seis meses.- (...)
Desde ya en ciertas empresas europeas las acciones de los
trabajadores han permitido obtener satisfacción sobre parte de
estas reivindicaciones.
I.- CONCLUSIONES: La situación del obrero petroquímico que
trabaja en turno, de subsistir este estado de cosas, se irá
agravando año a año. Nosotros vendemos nuestra fuerza de
trabajo, pero la salud y la vida familiar y social no tienen precio.
Ante esta realidad, sabemos que una mayor bonificación de
dinero, no constituye una solución al problema, como tampoco es
solución un cambio de horarios. La asamblea general del gremio
así lo entendió y aprobó, entre otras reivindicaciones, la demanda
de las seis horas de trabajo, sin disminución de salario,
entendiendo que éste es el paliativo más adecuado para los
problemas de turno.-
Boletín Nº 20 - Noviembre 1972; págs. 5 - 9.-

53.- Editorial

Compañeros:
En estas elecciones el SOEPU no ha tomado posición a favor o
en contra de ningún partido político. Cada uno de nuestros
afiliados ha tenido y tiene la libertad de pertenecer o votar al
partido de su agrado sin que ello le signifique discriminación
alguna. Nosotros trabajadores, más allá de las diferencias
partidistas, tenemos nuestras propias banderas, que son las
banderas de la clase obrera. El pronunciamiento general del
pueblo en las urnas, el pasado 11 de marzo, dio por tierra con las
aspiraciones continuistas de la dictadura. Hambre, miseria,
cárceles, asesinatos, torturas, secuestros, han sido algunos de sus
signos y contra ellos votó también el pueblo. La fuerza política

CCCXXIX
triunfante, deberá responder en los hechos al apoyo popular que
se le brindó. Aún así, creemos que no se solucionarán todos los
problemas de los trabajadores. Porque haber derrotado en las
urnas a la dictadura no es haber terminado con la explotación.
Porque los patrones, ya sean norteamericanos, europeos o
argentinos, seguirán subsistiendo y querrán seguir poniéndonos
los pies encima. Y los Rucci y los traidores de siempre que hoy
festejen junto al pueblo, buscarán acomodarse con nuestros
enemigos. A ellos tenemos que seguir combatiendo. Como lo
hicimos durante todos estos años de oprobio, en que luchamos
contra patrones, burócratas y dictadura. Y como lo seguiremos
haciendo en los años venideros. Porque como trabajadores que
somos, somos conscientes que “la liberación de los trabajadores
será obra de los trabajadores mismos”, y por ende continuaremos
nuestra marcha ascendente, hacia la liberación definitiva de la
clase obrera.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; págs. 1 - 3.-
54.- BASTA DE REPRESIÓN. BASTA DE PRESOS

Hace poco tiempo se realizó entre los compañeros de la


fábrica una encuesta que constaba de una serie de preguntas
referidas a nuestra vida en familia y nuestros problemas
personales entre otras cosas, y a su vez la relación que esto tiene
con las condiciones de trabajo, turnos, etc..
El resultado de la misma nos mostraba, como la explotación a
que nos somete la patronal, repercute en nuestra salud física y
mental. Este no es más que uno de los tantos tipos de violencia
que nos hace el sistema, y que en forma solapada, casi
inadvertida, soportamos diariamente. Así todos los días nos
enteramos que compañeros de otras fábricas de la zona y de
otros lugares, deben responder a los atropellos a que se ven
sometidos.
Y por supuesto la situación general del país no es más que un
reflejo de esto. El índice de mortalidad infantil es cuatro veces
superior al de los países más ricos. En Jujuy por ejemplo un niño
de cada tres muere antes de cumplir un año de edad. En Neuquén
un 40 % de chicos padece bocio. La tuberculosis y el Mal de
Chagas causan estragos por todas partes. Ni que hablar de la
situación inhumana en que viven los obreros cañeros de Tucumán
y los de los obrajes chaqueños.

CCCXXX
Hambre, miseria, analfabetismo, son algunos de los pilares
donde se asienta este sistema capitalista explotador.
Pero cuando los trabajadores reaccionamos para defender
nuestra dignidad, para que nuestro trabajo no se compre o venda,
para recuperar todo lo que nos pertenece y nos ha sido quitado,
para destruir este régimen injusto, para liberarnos, ellos
responden con la represión. Represión que va desde la
suspensión y el despido hasta la persecución, el encarcelamiento,
la tortura y el asesinato.
Cuántos compañeros han caído en el largo camino de lucha
que venimos recorriendo?
Vallese, Martins, Bello, Blanco, Cabral, Maestre, Lauchowski,
Brandazza, los 16 fusilados de Trelew, son algunas de las tantas
víctimas que hoy y siempre tendremos presente en nuestras
luchas.
Hoy pueblan las cárceles del régimen más de 600 compañeros
que cometieron el único delito de luchar contra las injusticias.
Compañeros que soportan diariamente condiciones infrahumanas,
con noches tremendas en que a cada rato se los despierta so
pretexto de revisarlos, con amenazas constantes de
fusilamientos, con celdas de 2 x 2 sin posibilidades de ver el sol,
con falta de recreos, etc..
Después de la huelga de hambre de diciembre de nuestros
presos, parecían haberse solucionando algunos de estos
problemas. Pero las cosas volvieron a ser como siempre. Todo
esto ha traído como consecuencia que la mayoría de los
detenidos sufran trastornos físicos y mentales (40 % con
trastornos psíquicos).
El gobierno surgido del pueblo en estas últimas elecciones, ha
prometido una ley de amnistía para todos los presos políticos.
Pero los trabajadores debemos estar alertas, para exigirlo, con
nuestras luchas y que no quede sólo en promesa. Los presos
políticos deben salir vivos y sanos. Y después debemos continuar
juntos este camino, para construir la nueva sociedad que termine
con este sistema inhumano.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; pág. 5.-

55.- DUPERIAL

Inesperado epílogo del conflicto de Duperial. Éste como

CCCXXXI
sabemos se había iniciado a raíz del despido de su Secretario
General. La toma de fábrica, el control de la producción por parte
de sus obreros, los paros de los obreros químicos del país
(incluido el nuestro), las maniobras dolosas de la patronal, el
rechazo de la solidaridad de los gremios de la zona (Intersindical
de San Lorenzo) por parte de los dirigentes federacionistas, la
traición de Raúl López (Sec. Adj. de FATICA) que quiso negociar las
luchas de los trabajadores por unos pesos miserables para
Acevedo.
Esto es algo de los que hoy nos queda como saldo de estas
luchas por reincorporar al compañero despedido.
Pero esto se terminó. De una manera trágica, repentina,
inesperada.
El “Negro” Acevedo vivió con tanta magnitud este conflicto
que una embolia cerebral le produjo la muerte. Muerte que tiene
sus victimarios: este sistema inhumano por un lado que
diariamente se cobra nuevas víctimas y la patronal por el otro al
disponer esta cesantía absurda. Vaya para el “Negro” nuestro
homenaje postrero. Y que todo esto nos sirva de experiencia para
que jamás nos encuentre desorganizados en momentos difíciles.
El sindicato no es un hombre. El sindicato no es la C.D.. El
sindicato somos todos y tenemos que organizarnos por abajo,
sección por sección, turno por turno. Con la unidad y la
organización no habrá imprevistos que nos detengan.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; pág. 6.-
56.- CONFLICTO EN CERÁMICA “RÍO PARANÁ”

Sólo 70 compañeros trabajan en Cerámica Río Paraná de


Puerto San Martín. Diferente a lo que había motivado el
conflicto de Cerámica Oltolini esta empresa es rentable y
moderna.
Su propietario y explotador “patrón” Rosinski, parece ser que
se pasaba de vivo. Se atrasaba en el pago de quincenas
enteras, no abonaba los últimos aumentos, “vaipaseaba” salarios
familiares, desconocía enfermedades, y para colmo suspendía al
personal sin razón, sin justificación fehaciente. Como otra cara de
la moneda invertía las ganancias de esta empresa en otra
Compañía. Además realizó un cambio de nombre a la sociedad y a
partir de esa fecha comenzó a desconocer la antigüedad de sus
obreros.

CCCXXXII
Es decir, lo característico de cualquier explotador capitalista,
nacional (como este) o extranjero. Le chupa la sangre a la clase
obrera para enriquecerse, vivir en la abundancia, y reinvertir en
otras empresas para extender su explotación.
Pero aquí los compañeros ceramistas, junto a los dirigentes de
su gremio dijeron basta. Realizaron un paro activo, rodearon la
fábrica y se plantaron con carteles de protesta en los portones de
ingreso.
Y la lucha y la organización pudo, lo que no habían podido los
reclamos en las audiencias de conciliación. Rápidamente se logró
poner fin a los abusos y al pago del 70 % de los salarios perdidos
por suspensiones injustas.
Los obreros de la fábrica “Cerámica Río Paraná” dijeron: “Si la
patronal no nos oye, si los que manejan las leyes son sordos a
nuestros reclamos, si no nos queda nada que perder porque lo
perdimos todo. Sólo nos queda un camino! LUCHAR. Sólo nos
queda un arma! NUESTRA FUERZA DE CONJUNTO”. Salud
Ceramistas!.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; pág. 7.-

57.- GIRO EN LA OEA

La situación de EEUU en sus relaciones con los países


latinoamericanos se hace cada día más tensa. Su postura como
gendarme avasallador de los pueblos que luchan por su liberación
para garantizar los gobiernos de los oligarcas y explotadores
ligados a ellos, la ventilación de los complots y golpes de estado
que se planifican a través de la CIA con las empresas
multinacionales diseminadas y dominadores de la economía de
todos los países de América (ITT en Chile). El odio que se han
sabido ganar por los horribles asesinatos y vejámenes cometidos
en Vietnam, hace que no sólo los pueblos protesten, sino que sus
gobernantes tiendan a cambiar las relaciones de fuerza y los
objetivos de la OEA.
Hasta hoy la OEA no ha sido más que la institución que le ha
servido a EEUU para legalizar su dominio político y económico
sobre América Latina. Con las dictaduras de la derecha militar,
que gobiernan la mayoría de los países de este continente, o con
el derecho al veto!, siempre se aseguró su situación de dominio
y explotación.

CCCXXXIII
Sin embargo la lucha de los pueblos no sólo cambia a los
hombres que gobiernan, sino también obliga a cambiar de idea a
quienes gobiernan.
Es así que el canciller argentino, el “célebre” Eduardo Mc
Loughin, vestido con piel de cordero, pidió ante la OEA “que se
resuelva sin demora el problema cubano. Criticó la política
norteamericana hacia América Latina, se refirió a las
corporaciones multinacionales cuando dijo: “a la acción de
grandes empresas multinacionales que tratan de interferir en las
determinaciones de nuestro gobierno como se ha comprobado
recientemente en el caso que ha afectado a una república
hermana (Chile y el caso GA-ITT). Nos hallamos ante una nueva
forma de imperialismo”.
No debemos olvidar que hace tan sólo 11 años (1962) a
instancias de EEUU se realizó y se realiza todavía un boicot
económico a Cuba. Hoy por inmensa mayoría se reclama la
“pluralidad ideológica” y la restauración de relaciones con ese
país. Diecinueve países sostenían esta teoría encabezadas por
Chile, Perú y Colombia. Se oponen, por supuesto, EEUU, Brasil,
Paraguay y Bolivia.
El canciller panameño (país dominado territorialmente por
EEUU) reclamó el cambio de sede de la OEA a una capital
latinoamericana y el representante peruano exigió diciendo “que
en Washington no es apropiado, tanto por su relación geográfica
que aleja y desvincula a la realidad latinoamericana, cuanto por el
hecho de constituir la capital del país donde están ubicadas un
hecho de innegable influencia política”.
Sin ninguna duda la OEA quedará en la historia como la
institución legal, que utilizó EEUU para el avasallamiento y
dominio de los pueblos latinoamericanos.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; págs. 8 - 9.-

58.- DESPIDO DE DIRIGENTES DE APESUP

“LO ÚNICO CONDENABLE ES LA INDIFERENCIA”, C. Dietl,


Presidente de PASA. A la aparición de este Boletín, ya esto es
historia, pero vale la pena recordarlo porque el hecho tiene
vigencia en todas las fábricas del mundo, todos los días.
El mes pasado fueron despedidos tres compañeros de la

CCCXXXIV
dirección del APESUP (Sindicato de Supervisores). Sí, los llamamos
compañeros, porque ellos estaban luchando por la formación de
una organización que como la nuestra, pudiera resistir las
arbitrariedades de la patronal. Pero a qué se debe esta medida
tan drástica de la Empresa?
Como hacerle esto a estos compañeros que lo único que
hacían era ejercer el derecho que la ley de libre agremiación les
permite?
Por qué era tan peligrosa esa organización para los intereses
de la empresa?
La aparición de esta nueva agrupación puede dejar a la
patronal sólo con sus objetivos, ya que aquellos soldados que se
les paga bien para hacerlos cumplir, también tendrían su fuerza
dificultando de esta manera la facilidad con que actualmente
compra la patronal a sus servidores. (Y podría discutírselos, ya no
iba a ser tan fácil comprarlos como hasta ahora).
La causa del despido fue “el no estar de acuerdo con los
objetivos de la empresa” (por arriba), pero por abajo, lo de
siempre “porque eran comunistas”.
El resto de los “compañeros” de los despedidos se acobarda
de tal forma que ni una expresión pública, ni una medida se toma.
Ante el puñetazo de la empresa se le responde con pedidos
livianos, por el temor que la limpieza siguiera.
Vemos en estos días a qué grado llega el efecto de los
mangos más que ganan. No sólo carnerean en nuestros paros,
sino que ahora entre ellos no hay ni las más mínima solidaridad,
ni compañerismo. Son apenas un conjunto de esclavos bien
pagados.
Pero tengan en cuenta que así como ayer fueron PÉREZ, BUSI,
LINGO, mañana cuando la empresa no los necesite más o sus
objetivos sean distintos a los de ella... a la calle!
Esto que le pasó a este personal cualquier día nos puede
pasar a nosotros, o al menos la empresa puede intentarlo, aunque
creemos que el saldo será muy distinto. Pero recordemos siempre
lo que esto nos deja como lección:
La falta de UNIÓN, COMPAÑERISMO, SOLIDARIDAD Y CONCIENCIA,
es aprovechada por la patronal para atropellar con todo y sacarse
la careta democrática que a veces se pone. A no ser que la
democracia sea esto: “O pensás como yo o te liquido”.
Creemos que todo no está perdido, que todavía debe quedar
algo en las conciencias del personal de supervisores, ingenieros,

CCCXXXV
empleados, que con el tiempo les hará ver la necesidad de
agruparse y de ver que ellos también están de este lado del
alambrado.-
Boletín Nº 22 - Abril 1973; págs. 9 - 10.-

59.- SEGURIDAD VERDADERA

Se nos ocurre preguntar. Si actuamos o trabajamos con


seguridad. Creemos que no. Pero. Cuál es la causa que motiva
este comportamiento, o quiénes hacen que a través de una
práctica, un método, una forma de vida nos comportemos así?
Para no desarrollar el problema en forma general nos
remitiremos a nuestro lugar de trabajo, una experiencia
compartida. Es muy sencilla la respuesta. Mientras PASA siga
siendo una organización cuya FINALIDAD PRINCIPAL sea el LUCRO,
todas sus actividades internas estarán subordinadas a esa
finalidad.
Esto demuestra la impotencia del Departamento de
Seguridad para imponer en la práctica lo que pregona
teóricamente. Esto de motivo a una serie de contradicciones
entre departamentos (ejemplos sobran). Hace muy poco,
tuvimos un hecho desgraciado donde perdió la vida el compañero
ENRIQUE ARTERO de la Sección Garaje. Es evidente que trabajar
sólo de turno (con las consecuencias que ello implica) y en tareas
riesgosas, nos dicen a las claras de las falencias que hacen a la
Seguridad. El reclamo de dos bomberos por turno, el peligro de la
nuevas construcciones con las plantas en marcha, las
intimidaciones, a los compañeros de Obras Civiles a realizar
tareas riesgosas, y cientos de ejemplos más certifican lo arriba
expresado. Los obreros UNIDOS Y ORGANIZADOS conseguiremos
con nuestros pedidos poner más de manifiesto estas
contradicciones entre departamentos, y con la fuerza de
nuestras luchas lograr algunos objetivos. Cómo le temerán a
esta lucha organizada, que algunos Jefes de Departamentos
cedieron bajo nuestra presión, imponiendo el criterio de “primero
la seguridad y después la producción”, pretendiendo luego
desvirtuar los hechos diciendo que lo hacen “no porque el
sindicato lo exigió, sino porque estaba planificado”.
Entonces, compañeros, ante una empresa de organización
capitalista, fría y deshumanizada, y con todas las consecuencias

CCCXXXVI
que ello implica, seamos nosotros los obreros UNIDOS Y
ORGANIZADOS, los que impongamos los criterios de Seguridad que
serán nuestra única garantía.-
Pedro Pueblo
Boletín Nº 22 - Abril 1973; pág. 11.-

60.- NÉSTOR MOGLIA

El día 8 de mayo de 1973, fallecieron trágicamente nuestro


Secretario General, Néstor Moglia y su señora esposa.
La noticia que corrió rápidamente, fue dejando helados e
impotentes a todos quienes los conocimos. Nuestras gargantas se
anudaron y nuestros ojos se llenaron de lágrimas. Lo imposible
era realidad. El “Flaco” había muerto.
La caravana de hombres que fue a saludarlo fue incesante.
Toda la zona industrial lloró a Néstor, porque reconoció en él al
obrero que luchó por su clase.
Transcribimos a continuación el comunicado de la Comisión
Directiva del SOEPU del 9-5-73 con referencia a este hecho y que
no fuera dado a publicidad por la prensa del régimen:
“Falleció a los 28 años de edad como consecuencia de un
accidente automovilístico, junto con su querida esposa Beatriz. La
clase obrera pierde en esta muerte absurda a uno de sus mejores
dirigentes. Secretario General del Sindicato Petroquímico, se
desempeñó durante seis años en el Secretariado de esta
Organización y esperaba cubrir durante dos años más la
conducción del Gremio en las próximas elecciones”.
“Al frente del SOEPU demostró su capacidad, su don de gente,
su empuje creador y su audacia para emprender y solucionar
problemas. Dedicó su juventud, su vida toda, a la defensa de los
intereses de la Clase Obrera, posibilitando numerosas conquistas
en el seno de su gremio”.
“Uno de los fundadores de la Intersindical de San Lorenzo,
luchó en jornadas heroicas del Movimiento Obrero como el
Rosariazo, luchó contra las patronales, la burocracia y la dictadura
y defendió las posiciones justas que surgieran desde el seno de la
clase”.
“Se entregó siempre sin desmayo ni retaceos de ninguna
índole abrazando la idea de los explotados, encabezando

CCCXXXVII
numerosas luchas en momentos sumamente difíciles”.
“NÉSTOR MOGLIA NOS MARCÓ UN RUMBO DEL CUAL HOY NO
PODEMOS APARTARNOS”.
“Debemos estrechar filas cumpliendo cada uno con sus tareas
ante las exigencias de cada día para reencontrarnos con él en
algún día glorioso y junto a otros tantos mártires, en el triunfo
definitivo del pueblo. ESTO HA DE SER NUESTRO MEJOR
HOMENAJE”.
“Sus restos los despidieron en improvisadas palabras, que
salieron trabadas de tanto dolor, los compañeros Zamboni,
Asesor Legal, y Venanzi por los compañeros Petroquímicos,
compañeros de los Sindicatos Químicos, Ceramistas, y Sulfacid, y
amigos de Néstor y Beatriz”.
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; págs. 1 - 2.-

61.- NÉSTOR

Esta es una de las oraciones que fueron leídas durante el


sepelio del compañero Néstor Moglia:
Tu vida fue una ofrenda a la causa de los explotados
Viviste intensamente las injusticias que todos los días nos
muestra
esta sociedad
Y la enfrentaste
Entregando todas tus horas en la lucha dura, negando la
importancia de tu ser individual
por unirte a las filas de los obreros y levantar sus banderas.
Nada de lo tuyo fue importante para vos. Todo lo de todos
tocó tus
fibras de revolucionario.
Ayer presentamos la Lista para las próximas elecciones, y tú
la
encabezas.
Porque para nosotros seguirás siendo nuestro líder.
Néstor:
No te pierde solamente tu familia
No te pierde solamente tus amigos
No te pierde solamente el gremio
Te pierde el movimiento obrero, donde dejas un vacío

CCCXXXVIII
tremendo que
los que quedamos trataremos de llenar,
levantando tu bandera caída, tomando tu
ejemplo de hombre justo.
Para seguir tu camino que es el camino del AMOR
Porque luchar por los oprimidos y clamar justicia es vivir
AMANDO.
Siempre con vos y con tu ejemplo, es el mejor homenaje que
te
podemos brindar
Y a vos Betty, nuestra admiración de haber sido una
compañera fiel,
y un apoyo
constante en los momentos difíciles
Tu fidelidad y tu apoyo, fueron tu lucha, la de Néstor, la
nuestra
Sólo les decimos hasta pronto, porque volveremos a
encontrarnos
junto a tantos mártires,
en algún día que será glorioso para todos los trabajadores del
mundo
¡CHAU NESTOR! ¡CHAU BETTY!
Boletín Nº 23 - Mayo 1973;
pág. 2.-

62.- LAS BASES SE ORGANIZAN

La burocracia en los sindicatos termina por aniquilarlos como


organismos de defensa de los intereses de los obreros que ellos
agrupan. Siempre hemos luchado contra este mal que aqueja al
sindicalismo. Hoy podemos afirmar que vamos por buen camino.
Durante el primer día del velatorio del compañero Moglia,
como es obvio, toda la C.D. y Cuerpo de Delegados estuvo
ausente de la fábrica.
Ese día surgió un problema en la sección CVPT. Allí un grupo
de compañeros de la empresa contratista Cimolai y Vega fue
mandado a armar cajones para el día del paro. Este hecho fue
interpretado por el conjunto de compañeros que se encontraba
en fábrica, como una acción incorrecta de la empresa. Los

CCCXXXIX
teléfonos comenzaron a sonar en todas las Secciones. Había
acuerdo: Ese trabajo no se debía realizar; o se dejaba de hacer o
se paraba la planta.
Es así, ante la ausencia de miembros del sindicato surgen los
dirigentes NATURALES, los que representan en ese momento el
sentir de todos sus compañeros, los que se movilizan para
detener lo que se consideraba un atropello patronal. Y no se
detienen ni ante la amenaza de ésta, que los responsabiliza
personalmente de lo ocurrido.
Es digno de destacar este hecho por el sentido combativo y
antiburocrático de los obreros petroquímicos, y es un llamado de
atención a la patronal, para que sepa que los obreros nos
sabemos organizar y luchar con dirección legal o la que surja en
cada momento.
Por eso desde este boletín saludamos la actitud de las bases y
en especial la de los compañeros GRONDA y FERNÁNDEZ de
Laboratorio que fueron fieles representantes del sentir de sus
compañeros.-
Boletín Nº 23 - Mayo 1973, págs. 3 - 4.-

63.- EL TIEMPO PERDIDO

Ante la puerta de la fábrica


El obrero se detiene de repente
El buen tiempo ha tironeado de su chaqueta
Y no bien se vuelve
Y mira al sol
Muy rojo muy redondo
Sonriente en su cielo de plomo
Le hace guiño
familiarmente
Di camarada sol
¿No te parece
Una reverenda burrada
Regalarle un día como éste
Al patrón?
Jacques Prevert
Colaboración de Juan Pueblo
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 4.-

CCCXL
64.- PETROQUÍMICOS DESOCUPADOS

Finalizó el período de vacaciones y un conjunto de


compañeros (los relevos) vuelven a incorporarse a ese sector
de la masa trabajadora que es la gran legión de desocupados que
en la zona en particular y en el país en general se amplía cada
vez más. Nuevamente se encuentran como les ocurre desde hace
años, ante la incertidumbre de si conseguirán o no alguna
“changa” para poder subsistir y llegar hasta octubre o noviembre
que es cuando PASA habrá o no de contratarlos nuevamente.
Es en este momento cuando nos ponemos más seriamente a
pensar en la gran cantidad de hermanos de clase que pasan por
situación parecida. Es que en los contratados nos toca el
problema más de cerca y la solidaridad es más sentida.
Se despiden tristemente por seis meses esperando poder
volver, como si PASA les hiciera un favor al darles trabajo.
Es que con la miseria física y social en la que se sumerge a
nuestra clase se pretende desvirtuar una realidad que cada día
que pasa es más clara en nuestra conciencia: NOSOTROS SOMOS
LOS VERDADEROS Y ÚNICOS PRODUCTORES DE RIQUEZA Y LOS
CAPITALISTAS LO ÚNICO QUE HACEN ES EXPROPIARNOS UNA PARTE DE
NUESTRO TRABAJO Y LO ACUMULAN EN SU PROPIO BENEFICIO y para
poder cada día sacarnos más tratan de mantener un gran ejército
de desocupados que son con quienes permanentemente
pretenden bajar el precio de nuestra mano de obra, tomándose
de la competencia y tratan, para aumentar aún más la
explotación, de intimidarnos con su eventual reemplazo “por los
cientos que están esperando nuestro despido”.
La desocupación, un flagelo que atormenta a la clase obrera
como una epidemia es un efecto del sistema que traba en forma
permanente el desarrollo de las fuerzas productivas y que
únicamente habrán de liberarse al cambiar las relaciones entre
los hombres y cuando los objetivos de la producción sean
sociales y no el lucro y la especulación, metas que únicamente se
alcanzará en una sociedad realmente justa, una sociedad sin
explotadores ni explotados.
Pero además, a los contratados para relevos de vacaciones les
aflige otro problema que es el privilegio y el acomodo que en
algunos casos los hace caer en la obsecuencia, para poder quedar

CCCXLI
efectivo. Es que en una situación tan conflictiva como por la que
atraviesan estos compañeros entran en crisis un montón de
valores que nosotros no podemos justificar, pero tampoco criticar,
sino pasar a comprenderlos.
Es que también se han agregado algunas nuevas formas de
discriminación como ser la de no tomar estudiantes pues son
“aves de paso” según el decir de algunos de nuestros
bondadosos cipayos de la patronal. Es así como llevan a la
práctica lo que está en su conciencia: “que los obreros trabajen...
estudiar únicamente para los hijos de los que tienen plata”. Es así
como quieren que no estudiemos ni siquiera sacrificándonos
doblemente.
Es por eso que hago un llamado a la CD y por su intermedio
de ella al conjunto del gremio para se adopte una posición más
activa para defender los intereses de estos compañeros que
temporariamente están afiliados. (...).-
Lisandro
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; págs. 6 - 7.-

65.- SALDOS DE GUERRA

Por sus pérdidas de vidas humanas, elementos y costo global,


la Guerra de Vietnam ha sido uno de los conflictos más graves
de la historia.
Las cifras son más que elocuentes, lamentablemente:
Bajas militares: 1.153.875 hombres; bajas civiles: 2 millones
de personas aproximadamente; aviones caídos: 8.937 aparatos;
tonelaje de bombas lanzadas desde febrero de 1965: 8 millones
de toneladas; herbicidas: 64 millones de litros que destruyeron un
total de 2 millones de hectáreas de Vietnam del Sur; prisioneros,
en Vietnam del Norte hay 539 norteamericanos y 1143
desaparecidos, en Vietnam del Sur hay un total de 36.362
prisioneros de guerra, de ellos, 8.600 son norvietnamitas,
excluidos 2.900 mutilados y 2.700 mujeres.
Caja chica: en siete años, los norteamericanos han gastado
en la Guerra de Vietnam, 128.000 millones de dólares (no hay
error de imprenta). Si el tío Sam, en un demencial delirio,
hubiera resuelto regalarnos a los argentinos esta cifra, nos
hubiera tocado a cada uno la razonable cifra de 6.000.000 de
pesos moneda nacional por cabeza.

CCCXLII
Además los soviéticos invirtieron la suma de 14.000 millones
de dólares en el conflicto.
Se calcula que hay 600.000 huérfanos de militares en el
Vietnam del Sur, sin contar los huérfanos de civiles. Los
refugiados suman más de 1 millón de personas, desde que se
inició la ofensiva norvietnamita. (...).-
Colaboró: Medio Oficial Instrumentista
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 8.-

66.- EL QUESO

Quizá cuando salga este artículo, ya sepamos quien es el


nuevo Ministro de Trabajo que ejercerá sus funciones a partir
del 25 de mayo. Cuando escribo este artículo están en disputa por
adueñarse del puesto, la CGT y las 62 Organizaciones. Lo que
parece quedar claro es que un dirigente sindical va a ocuparlo. Al
principio se hablaba de Rucci (CGT) y Miguel (62) como
candidatos, pero estos señores conscientes de la
“responsabilidad” que significa, prefieren delegarlo a algunos de
sus seguidores.
Lo que en la teoría parecía incomprensible es como un
dirigente obrero puede mediar entre los intereses del Capital y el
Trabajo que son antagónicos.
Dicho en otras palabras: cuando los petroquímicos peleemos
por la reducción de la jornada de trabajo en turnos, y la patronal
tome represalias o no quiera conceder lo que año a año más se
hace sentir y una necesidad de los trabajadores afectados: ¿Qué
hará el dirigente obrero - Ministro? ¿Qué va a conciliar? ¿A quién
le va a dar la razón?
Pero esto es en la teoría. En la práctica, como conocemos los
seguidores de Rucci y de Miguel sabemos que como dirigentes
sindicales o como Ministro de Trabajo, seguirán traicionando una
y otra vez al Movimiento Obrero. Y así será.-
Colaboración de Roque
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 9.-

67.- “…NO VA A QUEDAR UN SOLO SINDICATITO…”

CCCXLIII
Fueron palabras de uno de los dirigentes de la conducción
cegetista. Compañeros, el nuestro es un “sindicatito”, o sea es un
sindicato de empresa, no federado, no controlado por la
burocracia sindical porteña, y a pesar de toda la indignación
que nos produce la prepotencia de esas palabras, debemos
reconocer que la existencia de sindicatos de empresa, no es nada
favorable a la unidad y organización del movimiento obrero.
Es correcto que los trabajadores nos unamos en
organizaciones cada vez más concentradas, y de acuerdo a ramas
de la producción. Lo que sucede es que los intereses de los
burócratas de las federaciones, son controlar y someter política
y económicamente a los sindicatos aislados, y se pretende
federarlos por decreto, seguramente, sin dar posibilidad a las
bases a que decidan.
Este es un serio problema que debemos tratarlo a la brevedad
posible, para que no nos agarren de sorpresa.-
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 9.-

68.- LISTA VERDE

Por primera vez en nuestro gremio se dio el caso que una


agrupación eligió sus candidatos en forma democrática.
Efectivamente, la Lista Verde convocó a todos los afiliados
simpatizantes de tal conducción gremial y mediante una
Asamblea Partidaria, que contó con muchos compañeros, se
debatió, discutió y aprobó el Programa de la agrupación que se
iba a dar a conocer al gremio.
Así mismo se eligió por método de elección directa y voto
secreto, los 15 compañeros candidatos de la agrupación.
Previamente se habían propuesto a 20 compañeros
precandidatos, los cuales aceptaron tales responsabilidades.-
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 11.-

69.- ADIÓS A LA DICTADURA

Más de 600 compañeros presos por causas políticas,


gremiales o conexas, 6.500 millones de dólares de deuda
externa declarada.

CCCXLIV
El país vendido al capital extranjero.
Represión, hambre, miseria, analfabetismo.
Más de 100 compañeros muertos en las luchas contra la
dictadura.
Esto es sólo una muestra de lo que nos queda como saldo de
la llamada Revolución Argentina.
Este 25 de mayo, el pueblo, ante la decisión de las urnas,
vuelve al gobierno y el milicaje retorna a sus cuarteles.
No creemos que con esto se han solucionado todos nuestros
problemas. Hay que proseguir la lucha, hasta lograr la liberación
definitiva de la clase obrera.-
Boletín Nº 23 - Mayo 1973; pág. 11.-

70.- Editorial
COMPAÑEROS

25 de Mayo y 20 de Junio. Dos fechas patrias que este año


han cobrado especial interés porque marcan el comienzo de un
nuevo gobierno constitucional, el fin de la dictadura militar y el
retorno del Gral. Perón a la Argentina. Dos jornadas con un
amplio apoyo popular, que muestra la decisión inquebrantable de
lucha de nuestro pueblo y la búsqueda de una revolución que
quizás todavía no sabe definir. Dos jornadas que fueron posibles
especialmente por el papel protagónico que jugó la clase obrera
con sus luchas y con sus muertos en los años de dictadura, lucha
que obligó a los milicos a dar elecciones proscriptivas y lucha
que sin lugar a dudas preparó las condiciones que posibilitaron
el regreso de Perón.
Realmente algo distinto está pasando en el país. Ante la
sorpresa y desesperación de algunos y la alegría de muchos se
producen los primeros impactos políticos de importancia del
nuevo gobierno. La liberación de todos los presos políticos y
gremiales, la abolición de toda legislación represiva, el
restablecimiento de relaciones con Cuba, Vietnam del Norte,
Corea del Norte, Alemania Oriental. En el campo económico no
ocurre lo mismo, eligiéndose un camino en el cual se pretende
que la clase trabajadora pague los platos rotos de una situación
económica catastrófica, producto del avance de la crisis de
capitalismo en la Argentina y en el mundo.

CCCXLV
En otros aspectos se han producido y se siguen produciendo
nuevos hechos casi a diario. Como la ola de ocupaciones, muchas
de las cuales fueron realizadas con justicia por los mismos
trabajadores levantando reivindicaciones ampliamente sentidas o
desalojado a los representantes del continuismo militar. Pero no
todas fueron así: porque otros sectores que no representan el
sentir de las mayorías laboriosas, trataron de imponer por la
fuerza sus intereses sectoriales. Estos son los individuos que
encamados entre los gorilas, burócratas y traidores provocaron
los desgraciados episodios de sangre de Ezeiza disparando a
mansalva sobre el pueblo indefenso que había concurrido a
manifestar su júbilo.
Estos son los mismos individuos que bregarán por darle al
movimiento popular su ideología fascista o que se aliarán con los
monopolios, patronales y milicos para intentar dar de nuevo el
golpe gorila.
Es cierto que la clase obrera está a la ofensiva. Que la
conciencia revolucionaria de nuestro pueblo está en marcha
ascendente. Pero esa marcha no ha terminado aún. La lucha debe
proseguir.
Los petroquímicos tenemos nuestro lugar natural para esta
lucha. Y aquí debemos darle la batalla a la patronal,
continuando además con nuestra organización desde las bases.
Pero nuestro accionar no debe quedar reducido a ese marco.
Debemos dar respuesta de los hechos políticos que se
producen más allá del alambrado, con nuestra solidaridad y
presencia de clase, con nuestras movilizaciones, de manera de
marcar el rumbo junto a la clase obrera, que nos lleve
definitivamente hacia la construcción de una sociedad mejor, más
justa, más digna.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 1 - 3.-

71.- LA NUEVA POLÍTICA ECONÓMICA

La política económica del gobierno elegido


constitucionalmente se basa en el acuerdo realizado por la
Confederación General del Trabajo (CGT) y la Confederación
General Económica (CGE) concretado en el mes de septiembre del
año pasado. En el Apartado IV de dicho acuerdo, en el punto
titulado “En materia salarial de precios y distribución de ingresos”

CCCXLVI
decía su inciso d) “que cumplida la finalidad social, con el ajuste
de los salarios que le restituyen su poder adquisitivo, debe
procederse en forma inmediata la convocatoria de las Comisiones
Paritarias de Convenios Colectivos de Trabajo previstas en la Ley
14.250”.
En su inciso f) “Que la discusión de los Convenios Colectivos
de Trabajo conforme a lo señalado en los incisos anteriores,
constituyen un real aporte al ordenamiento laboral en el que las
partes conforman salarios en mérito a la capacidad profesional
del trabajador, regulada en función de categorías y/o escalafones,
como así mismo en mérito a la calificación de las tareas que
terminan su remuneraciones”.
Queda claro con lo trascripto, que el Frente Justicialista de
Liberación, una vez gobierno, no está cumpliendo en este punto
de especial interés para los trabajadores.
Ha sido otorgado un aumento de 20 mil pesos, que inclusive
en este mes no podremos cobrar, que no cubre las necesidades
de recuperación del salario real. Se han congelado precios de
muchos productos de la canasta familiar, pero comienzan a
escasear algunos de ellos (la carne por ejemplo).
Otros precios han sido aumentados en forma notable, como
los ser-vicios públicos (transporte, luz, gas, impuestos) la nafta,
etc. que hacen temer, porque la inflación continúa avanzando.
La tregua social impone la congelación de salarios por el
término de un año (en el que el gobierno haría un ajuste de
salarios de ser necesario) y la suspensión de todas las paritarias
en la parte salarial por el término de dos años.
Entendemos que el movimiento obrero, debe seguir bregando
por reconquistar una vez más el derecho a discutir los salarios
con los patrones. Y así lo resolvió la asamblea de fábrica del 19 de
junio cuando nos expresamos por reclamar la plena vigencia de la
ley 14.250.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 3 - 4.-

72.- LOS MATADORES DE SILVIA FILLER EN LIBERTAD.


AMNISTÍA EXCESIVA EN MAR DEL PLATA

Es el título de un artículo aparecido en la revista “El


Descamisado” (Nº 4) donde comenta la liberación de cuatro
delincuentes comunes asesinos de Silvia Filler, la muchacha

CCCXLVII
estudiante de Ciencias Económicas, muerta a balazos en Mar del
Plata el 6-12-71, cuando una banda llamada Concentración
Nacional Universitaria (CNU) copó al mejor estilo de los gangster,
un asamblea estudiantil que se realizaba en la facultad. Estos
delincuentes fueron liberados junto a los combatientes del pueblo
y se incorporarán seguramente a las bandas fascistas existentes
para atacar todo intento de organización de los trabajadores.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; pág. 4.-

73.- EN EZEIZA EL 20 DE JUNIO


LA BUROCRACIA REPRIME AL PUEBLO

El pueblo argentino todavía se encuentra bajo la impresión del


trascendental acontecimiento que significó el retorno del Gral.
Perón a la Argentina. Desgraciados hechos tiñeron de sangre un
día que debió ser de júbilo para millones de compañeros. Un día
que no tiene precedentes en la historia política del país.
¿Quiénes fueron realmente los culpables de esta masacre?
Para ello y antes de entrar a emitir un juicio creo oportuno
señalar algunas notas aparecidas en el diario “Mayoría”
(peronista) del 22-6-73, pág. 10, “...hoy muchos se dicen
peronistas o por lo menos nacionales. Comparemos los dichos con
los hechos.
1) Los que en ámbito universal defendieron la colonización
del país y la represión popular, alertan contra las ideologías
foráneas. El Movimiento Universitario de centro, entre ellos, en
maridaje con la Academia de Derecho y defensores del estatuto
legal del coloniaje.
2) Un dirigente muy cercano, nada menos que de Rogelio
Coria, se permite decir que niega el carácter de peronistas a
Montoneros, FAR y FAP. Dijo el Dr. Cámpora reivindicando la
resistencia contra la dictadura “que en vano se ha intentado
atribuirle motivaciones ideológicas extrañas”.
3) Grupos que actúan sucesivamente en distintos lugares
tratan de presionar a la gente, deslizan un feroz macartismo o
atacan indiscriminadamente a Tosco o Mercedes Sosa pero
curiosamente nunca enfocan la dictadura militar ni el
continuismo. No piden la investigación de los peculados, ni de la
masacre de Trelew, ni de la acción de organismos parapoliciales,
ni de Vallese, ni de Maestre.

CCCXLVIII
4) Se abusa de la buena fe de funcionarios de la poca
memoria de la gente. Periodistas que vilipendiaron a Perón,
asesores que inventaron la cláusula proscriptiva del 22 de agosto,
creen que estamos en carnaval y se disfrazan de peronistas...”.
Estos sujetos son los mismos que hicieron los negociados a
espaldas del pueblo, pactando con la dictadura militar y
traicionando una y otra vez. Allí está la burocracia sindical y
política enquistada en el movimiento obrero y en el mismo
gobierno del FREJULI, que pretende imponer la política patronal y
engancharnos detrás de ella.
Por si hiciera falta algo más contundente, existen pruebas
concretas de quienes fueron los causantes directos de la masacre
de Ezeiza, que pese a no salir de los medios oficiales porque
están en su mayoría controlados por ellos mismos, sí están en
poder de organismos populares. Entonces pocas dudas quedan
acerca de los verdaderos responsables:
1) La burocracia sindical que así como a diario traiciona a los
trabajadores ante las patronales con “pactos sociales” y llamadas
a la tregua con quienes nos explotan, no dudó en hacerlo en este
acontecimiento político valiéndose de los viejos y conocidos
matones a sueldo, hoy escondidos tras el sello Juventud Sindical
Peronista. 2) Fieles a ellos los integrantes de la Comisión
Organizadora que a conciencia saboteó el orden, la seguridad y
tranquilidad del acto. 3) Las bandas armadas del Tte. Cnel.
Osinde, reclutadas entre una resucitada Alianza Libertadora
Nacionalista, y un comando parapolicial Concentración Nacional
Universitaria (CNU). 4) Lógicamente la CIA no estuvo ajena a
esto, sino que se hizo presente en la alianza con los nombrados
arriba, con los infiltrados de siempre. En los días posteriores a los
hechos aparecieron informes oficiales y solicitadas que atribuyen
los asesinatos y torturas a grupos minoritarios que quisieron
impedir que el pueblo se comunicara con Perón. Pero sin dar
mayores explicaciones de las verdaderas causas que motivaran a
éstos. Entonces nace la pregunta ¿Por qué no querían esa
comunicación?
En Ezeiza se coreaban dos consignas: POR LA PATRIA PERONISTA
Y POR LA PATRIA SOCIALISTA, que más allá del grito sintetizan dos
caminos posibles a seguir en el actual momento político. La
primera levantada por quienes como más arriba decíamos, tras
una presunta “patria peronista” quieren que las cosas queden
como están, que los patrones y los obreros marchemos de la

CCCXLIX
mano tras los objetivos de Gelbard, Rucci, Miguel, etc.. Que la
explotación a que nos someten en las fábricas y la entrega a los
monopolios tengan otro nombre simplemente.
Y la otra, que lamentablemente para ellos comienza a ser
asumida por los sectores más avanzados de la clase obrera y el
pueblo y que amenazaba con expresarse masivamente ante
Perón el día 20, es la que comenzamos a transitar nosotros
cada vez más organizados. Es el camino que caminamos y que no
acepta “pactos” con patrones y monopolios, sean yankees,
europeos, japoneses o mezcla de todos ellos. Es el único camino
que nos garantiza a los trabajadores el triunfo definitivo, porque
sin la PATRIA SOCIALISTA aquí no hay liberación posible.
Claramente la definía nuestra inmortal compañera EVITA cuando
nos decía: “A mi no me importa solamente que Uds. tengan un
mejor nivel de vida, que en las fábricas y las plantaciones les
aumenten a Uds., importa que Uds. controlen la fábrica, la
plantación, por eso quiero instalarlos a Uds. en los lugares de
decisión política fundamentales. Quiero que Uds. construyan la
organización integral del pueblo porque cuando yo caiga nadie los
podrá sacar de allí si están organizados, de lo contrario todo se
perderá...”.-
Petroquímico Peronista
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 5 - 6.-

74.- IMPERIALISMOS Y ALGO MÁS

Cuando el dueño del Chase Manhattan Bank, el “popular”


David Rockefeller, viaja por Latinoamérica, miles y miles de
inscripciones en las paredes y volantes suelen cubrir y constatar
las huellas de sus pasos, y de paso nos enteramos de sus
negocios, su curriculum, sus “affaires” y las de su madre por
rebote, pues ese nombre es símbolo claro y vivo del sistema
capitalista norteamericano.
Pero resulta que un mes atrás don David viajo nada menos
que a la propia Moscú, capital de un país cuyo sistema, “dicen
ellos”, es la antinomia del liberal capitalista y lo hizo no de paseo,
como en otra oportunidad en 1964, sino a inaugurar una sucursal
de su banco. Lógicamente previa entrevista con el premier Alexei
Kosigin y otras altas autoridades. Y a propósito de estos
dirigentes de la URSS, habrán consultado para esta decisión al

CCCL
proletariado? No sé, pero sigamos. Yo creo que si Lenín se
levantara de la tumba y leyera la prensa rusa acerca de tal visita,
que calificó a D. Rockefeler de “eminente banquero” y
“personalidad americana” volvería a yacer en ella.
En esta oportunidad el “camarada David” declaró estar
complacido con la marcha de los acontecimientos y que las
dificultades que aún se oponen al incremento y desarrollo de los
negocios entre EEUU y URSS, confía en que serán superados,
además que Rusia tiene necesidad de bienes de consumo
elementales incluyendo artículos de tecnología bastante
avanzada y que a cambio sólo tiene que ofrecer materia prima.
El mundo no está dividido en dos imperios antagónicos en
disputa. No, el mundo está dividido en muchos países, donde la
gran mayoría de ellos responden perfectamente a dos
imperialismos divididos por la distancia física pero fuertemente
unidos para dominar el propio mundo y repartírselo en dos
fracciones o sistemas.
A quienes se les hace sentir la división ideológica es a los
pueblos y mientras tanto en la cumbre Nixon recibe a Brezhnev,
Kosigin viaja para reencontrarse con Brandt y en el mismísimo
Hotel Metropol de Moscú está instalado D. Rockefeller,
“nortiameriyankee”, para poner en marcha la sucursal de su
banquito.
En fin, son cosas de los imperialismos.
El comentario podemos redondearlo con una pregunta que
quiero dejar sin contestar.
¿Se comprende y se justifica la incisiva posición no
alineamiento del tercer mundo?. -
David
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 6 - 7.-

75.- CAPACITACIÓN / ROTACIÓN

Transcribimos a continuación un artículo del diario Clarín,


pág. 3, del 16-6-73, que aborda un problema que los
petroquímicos hemos encarado y que aún discutimos con la
patronal: “REACCIONES LABORALES CONTRA EL TEDIO DE LA
PRODUCCIÓN EN SERIE”:
El primer ministro británico, Edward Heth, ordenó una
investigación, a cargo de un comité formado por delegados

CCCLI
gubernamentales, sindicales y empresarios, acerca de las quejas
generalizadas de los obreros sobre la monotonía del trabajo en las
grandes fábricas que producen en serie. Al anunciar la decisión, el
ministro de Empleos, Maurice McMillan destacó la importancia de
resolver las tensiones sociales causadas por el aburrimiento,
indiferencia y sensación de insignificancia que señalan los
trabajadores.
La medida anunciada responde a la existencia de conflictos
laborales en la industria automotriz, modelo clásico de producción
en serie desde que Henry Ford introdujo el sistema de líneas de
montaje.
Jack Jones, presidente del gremio de obreros del transporte, el
mayor sindicato de Gran Bretaña, acusó a la industria automotriz
de tratar a sus obreros como si fueran gallinas ponedoras. Esta
semana, en una planta de Birmingham se acusó a un operario de
haber saboteado la línea de montaje arrojando un objeto para
detenerla; el acusado alegó que lo hizo impulsado por la
monotonía de su trabajo. Cada vez que la línea se de-tiene por
desperfecto -comentó el obrero- toda la fábrica grita de alegría.
Un informe publicado por el Instituto Británico de Psicología
Industrial advierte que hay tanto tedio en los lugares de trabajo,
que son inevitables las huelgas por ese motivo. Entre las causales
de resentimiento obrero se mencionan las siguientes: trabajo
obligatoriamente acompasado, repetición de ciclos breves de
actividad y estructuras organizativas impersonales.
Este fenómeno no es privativo de la industria británica. En
toda Europa los empresarios estudian modificaciones al
régimen de trabajo y la General Motors norteamericana
desarrolla estudios para transformar los métodos en sus plantas
automotrices.
Este mes, la dirección de la empresa Fiat, en Italia, reveló que
con-vertirá sus conflictivas líneas de montaje en plantas
concebidas en base a “islas”, en las que cada operario
desarrollará sucesivamente operaciones complejas y variadas. En
Suecia, en tanto, se aplica ya un sistema de grupos de
producción integral, que tienen a su cargo todas las operaciones
de armado de un automóvil. Esta última solución, no obstante, es
considerada ineficaz para un nivel elevado de producción, como el
que se obtiene en la generalidad de las plantas norteamericanas
y europeas.
Otra implicancia de estos cambios sería la posibilidad de

CCCLII
incorporar a las plantas de producción en serie el hasta ahora
experimental régimen de horario flexible. Éste, que permite a los
trabajadores comenzar sus tareas dentro de un lapso de varias
horas, a condición de cumplir un total semanal, está destinado a
combatir el ausentismo, que es otra de las consecuencias de la
alienación que experimentan los trabajadores. Hasta el
agotamiento, sin embargo, ese régimen encontraba serios
obstáculos para implementarse en fábricas regidas por la
producción en cadena”.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973, págs. 7 - 8.-

76.- CONTRATISTAS Y DESOCUPADOS

Como nos habíamos comprometido en el programa de la Lista


Verde, y ante asambleas realizadas en nuestro local
conjuntamente con los compañeros de Cimolai y Vega, hemos
encarado junto a los Ceramistas y Químicos San Lorenzo un plan
de trabajo para eliminar definitivamente el sistema de empresas
contratistas, plan que comienza con la invitación a las fuerzas
vivas de la provincia (partidos políticos, Intendencias,
legisladores, vecinales, etc.) para hacerlos partícipes de nuestras
inquietudes. El siguiente, es el Comunicado repartido a dichas
fuerzas vivas.
“Las Sindicatos Petroquímicos (SOEPU), Ceramistas (SOCPA) y
Químico San Lorenzo (SPIQA), ante la situación de las empresas
contratistas, y frente a los cesanteados por causas políticas y
gremiales en todo el país, y especialmente en la Zona Industrial
(de Puerto San Martín a Granadero Baigorria), hacemos conocer
nuestro proyecto, dando participación en el mismo a las fuerzas
vivas de la provincia.
FRENTE A LAS EMPRESAS CONTRATISTAS: Dijo el Presidente de la
Nación en el Honorable Congreso el día 25-5-73: “Por la misma
ley se habrá de eliminar la posibilidad de que el empleador
mediante la introducción en su actividad de intermediarios,
contratistas y subcontratistas, se libere de responsabilidad frente
a las obligaciones emergentes de los contratos de trabajo”.
Los sindicatos firmantes vienen sosteniendo desde el año
1969, que las empresas principales no pueden eludir sus
responsabilidades asumidas en la firma de los contratos de
trabajo mediante el “subterfugio de la utilización de terceros

CCCLIII
contratistas”.
En Argentina, el Congreso de la Nación sancionó el 29-6-49 la
Ley 13.591 que establece “prohíbese el funcionamiento de las
agencias privadas de colocaciones con fines de lucro. Entiéndese
comprendida en la prohibición, toda actividad lucrativa
relacionada con la colocación de trabajadores” (Art. 10).
Si la aplicación de esta Ley, que fue precedida en el tiempo
por otras normas menos categóricas y completas, había eliminado
aquellas siniestras agencias, el desarrollo de la industria, el
comercio y los servicios de la base material que permite el
surgimiento de nuevas y sutiles formas de aquellas viejas
prácticas, eludiendo dicha Ley. LA NECESIDAD DE MANO DE OBRA
TEMPORARIA Y CALIFICADA PERMITE EL RESURGIMIENTO DE LAS
AGENCIAS DE CONTRATACIÓN.
La explotación a que son sometidos los obreros dependientes
de empresas contratistas es doble, ya que éstas reciben
fabulosas sumas de dinero de las empresas principales por el sólo
hecho de colocarles la mano de obra que necesitan temporaria o
permanentemente. Y especulando con la desocupación obrera,
pagan a los “trabajadores golondrinas” salarios miserables
desconociendo cualquier beneficio social.
Por ello proponemos:
1.- La efectivización de los changarines que realizan tareas
permanentes en las plantas.
2.- La realización de un censo zonal de desocupados y
semidesocupados de la zona.
3.- Constitución de una Bolsa de Trabajo Zonal, dirigida por los
obreros, de donde las empresas puedan obtener mano de obra en
forma rápida y directa eliminando de esta manera la
intermediación de las empresas contratistas.
4.- Elevación de un petitorio de Ley al Congreso de la Nación y
a la Legislatura de la Provincia para la sanción de una nueva ley
que contemple las modernas formas de las viejas agencias de
contratación, prohibiéndolas.
5.- Dar participación en este plan a todos los Intendentes de la
zona, partidos políticos, vecinales, etc..
Queremos aclarar que las patronales se verán beneficiados
porque, por ejemplo, la Bolsa de Trabajo, por carecer de interés
de lucro, no les mandará peones por oficiales especializados, y los
compañeros de la zona tendrán la seguridad, por el tipo de
industria que existe, que tendrán trabajo en forma permanente

CCCLIV
(paradas, ampliaciones, etc.) con lo que evitaremos el éxodo de
los trabajadores a otras zonas.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 9 - 10.-

77.- FRENTE A LOS COMPAÑEROS CESANTEADOS


POR CAUSAS POLÍTICAS O GREMIALES DESDE EL AÑO
1955

Así como alcanzó con justicia a los presos políticos y


gremiales liberados por la Ley de Amnistía, queremos la
ampliación de la ley 20.508 para que alcance a los cesanteados
por las mismas causas en las distintas empresas.
EXIGIMOS LA INMEDIATA REINCORPORACIÓN DE LOS COMPAÑEROS
Y SOLICITAMOS EL APOYO DE LAS NUEVAS AUTORIDADES.-
Firman:
Sindicato Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos (SOEPU),
Sindicato Químico San Lorenzo (SPIQA) y Sindicato Obrero
Cerámica, Porcelanas y Azulejos (SOCPA).-
Boletín Nº 24 - Julio 1973, pág. 10.-

78.- CONFLICTO EN INDO

Los obreros aceiteros pertenecientes a la fábrica Indo de


Puerto San Martín han comenzado una lucha contra los atropellos
de la patronal y contra la burocracia del gremio, que nada hizo
para hallar soluciones a los problemas de los compañeros.
La situación de explotación a la que se ve sometido el
personal de INDO ha llegado a situaciones realmente deplorables.
Desde condiciones pésimas de seguridad (donde ni siquiera
les dan zapatos de seguridad) pasando por los mugrientos lugares
asignados para comer hasta llegar al problema de las empresas
contratistas (fenómeno muy conocido por nosotros los
petroquímicos) y donde las condiciones de superexplotación a
que se ven sometidos los changarines, se ponen de manifiesto a
diario.
Como si esto fuera poco, y según un mismo comunicado de
compañeros de INDO, deben luchar no sólo contra la apatía de los
jerarcas del gremio en resolver sus problemas, sino también

CCCLV
contra las maniobras fraudulentas que realizan éstos con los
propios fondos de la organización, o con las denuncias y
persecuciones contra aquellos compañeros que se rebelan y
tratan de defender sus derechos.
Los petroquímicos vemos con satisfacción este resurgir, desde
las bases de aceiteros que hace tambalear a la patronal y los
jerarcas del gremio. Pero ese resurgir debe profundizarse en una
organización desde abajo con la unidad que da la lucha, y
limpiando el camino de alcahuetes y traidores.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 11 - 12.-

79.- LUCHAS DE PAPELEROS Y CERAMISTAS

Los trabajadores de Celulosa pertenecientes al Sindicato


Químico Papelero de C. Bermúdez, están realizando paros
parciales por turnos en lucha por reconquistar las seis horas de
trabajo por insalubridad que les fueran quitadas durante el
gobierno de Onganía, y por la reincorporación de los despedidos
cuando el gremio se movilizó en aquella oportunidad. Pensamos
que la lucha deberá ser ardua porque la patronal seguramente se
negará a otorgar las seis horas y a reincorporar sobre todo a
muchos compañeros que están en la “Lista Negra” que tienen el
“cartel de comunistas”.
Por otro lado, los obreros de Cerámica Oltolini han tomado la
fábrica en lucha por una serie de atropellos que los empresarios
explotadores han cometido con los obreros (deuda de quincena,
aguinaldos, etc.), desconociendo la posibilidad que se pudiera
subvencionar económicamente a la empresa, ya que los patrones
reiteradas veces demostraron la falta total de solvencia moral
usando en otras situaciones el dinero así conseguido para
cualquier cosa menos para encarar las deudas con los obreros.
Estos conflictos que tienen dos gremios hermanos, muestran
la necesidad de unión y solidaridad de los obreros, sin la cual va a
ser muy difícil ganar conflictos aislados.-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 11 - 12.-

80.- COGESTIÓN OBRERA

CCCLVI
Desde la conclusión de la Segunda Guerra Mundial, con la
llegada al poder de la Democracia Cristiana en Alemania e Italia y
desde la construcción de fuertes partidos democristianos en el
resto del mundo capitalista, la participación en las ganancias han
sido inscripta en todos o casi todos los programas de los
socialcristianos. Hubo -y hay- distintas formas de participación en
las ganancias: a) un porcentaje sobre lo facturado; b) un
porcentaje sobre las ganancias reales; c) la cogestión.
¿Qué significa entonces, la pura y simple participación en las
ganancias? Suponiendo que las ganancias declaradas por la
empresa son reales y que los balances sean correctos, la
participación en las ganancias significa resarcirse de una parte de
la plusvalía producida. Toda ganancia (beneficio, interés, renta de
la tierra) es plusvalía arrancada al trabajador. De lo que el
trabajador “participa”, pues, desde lo que él mismo ha producido.
Pero como su participación se acrecienta a medida que se
acrecienta la ganancia, el trabajador se siente impedido a
aumentar el ritmo y la eficiencia de su trabajo, se transforma en
su propio explotador. Luego, va tomando un interés directo, no
sólo en el quantum de la producción y de las ventas, sino también
en el precio.
Al obrero textil no le es indiferente que los tejidos se vendan
caros o baratos, pero a partir de ese interés que se ha creado
entre su trabajo y el resultado final de su producción -el mercado-
estará vitalmente interesado en un alza de los precios, a mayor
precio, mayor ganancia, a mayor ganancia, mayor participación.
A medida que este proceso se intensifica, la comisión interna,
o se convierte en vigilante del obrero o deja de desempeñar papel
alguno en la relación empresa - obrero. Y, desde que la comisión
interna pierde su condición de defensa de los intereses obreros,
en la hipótesis de que la participación, se extienda a toda esta
rama de industria, también el sindicato será superfluo, por lo
menos en cuanto organización primaria de la clase trabajadora. El
sistema de convenios colectivos de trabajo dejará de funcionar y
todos los puntos de controversia se trasladarán a la empresa. El
punto de partida será siempre el aumento de la producción,
indistintamente del grado de tecnificación de los procesos
productivos.
La cogestión no es otra cosa que una forma más sutil, más
sofisticada, de la participación. Se impuso durante los primeros
gobiernos democristianos en Alemania, aunque la iniciativa la

CCCLVII
tuvo la socialdemocracia. La cogestión se organizó aquí en base a
unos “consejos de fiscalización”, instancia que, por lo menos
teóricamente, dirigía -dirige- la empresa. Si el “Consejo de
Fiscalización” es de 11 miembros (puede aumentar su número
hasta 21), se constituirá con 4 representantes de los accionistas,
más 1 suplente que no debe tener intereses “directos”, la
representación del personal empleado será de 2 miembros y 3 del
sindicato, uno de los cuales no será miembro de la organización ni
trabajará en la empresa. Un décimo hombre, plenamente
“neutral”, tiene como cometido deshacer los empates en caso de
votación.
El mejor estudioso del sistema dice al respecto: “Con
frecuencia la experiencia ha demostrado que lo más corriente es
que este undécimo hombre se someta perfectamente a los
deseos del patronato”.
Por último el “Consejo de Fiscalización” designa un director
general de la empresa.
Los capitalistas alemanes no aceptaron sin protestas el
sistema. Un “Consejo de Fiscalización” tenía, y tiene, acceso a los
balances, aunque no tiene participación en la elaboración, que es
donde está la trampa. No podrá, ni puede, impedir que la
empresa lleve dos “juegos” de balance.
Las resistencias patronales terminaron apenas cayeron en la
cuenta que la cogestión no amenazaba el orden actual ni la
propiedad privada. Por si hubiera dudas, el Presidente de la
Confederación de Sindicatos dijo en una publicación: “El hecho es
que la cogestión no es en modo alguno un instrumento de la
socialización... las tareas de la cogestión conciernen a la
humanización de la empresa, en compartir responsabilidades y la
creación de una sociedad democrática”.
El sistema funciona no sin fricciones. La cogestión no suprime
ni las clases ni los intereses de clase. Hay huelgas, y a veces hay
“huelgas salvajes” como la metalurgia. Y hay conflictos en el
mismo sistema: en realidad sólo en 500 empresas la cogestión es
paritaria.
¿Cómo se comporta el representante de los obreros de las
empresas y el del sindicato? El estudioso que hemos citado
(Gerard Zandoz, “Las Izquierdas Alemanas”) dice que: “los
hombres propuestos por las organizaciones sindicales para
defender los intereses de los trabajadores en la dirección de la
empresas se han integrado a ellas tan perfectamente que han

CCCLVIII
adquirido a menudo, una mentalidad paternalista, sino patronal”.
Una capa de dirigentes sindicales burocratizados, sin espíritu
de solidaridad alguna para con sus representados, de pronto se
sientan en los cómodos sillones de los directorios. (...).-
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 12 - 13.-

81.- QUIEN ES QUIEN EN EL SINDICALISMO

Desde hace un tiempo los obreros petroquímicos leemos en


“El Petroquímico” o escuchamos a nuestros dirigentes hablar de
la CGT o de las 62 Organizaciones como los burócratas o traidores
del Movimiento Obrero Argentino. Claro, nuestros dirigentes
responden a una línea, a la de la Intersindical que lidera Agustín
Tosco, que ataca a la CGT. Yo supongo que mejor que atacar
desde afuera o mejor sería integrarla y desde ese lugar, si es que
la CGT no responde al sentir de los obreros, tratar de mejorarla.
Pero eso no le conviene a Tosco. Para muestra de lo que digo,
vean algo de lo que dicen los compañeros de SMATA en una
solicitada aparecida en el diario La Razón el día 26-6-73, “SMATA
resuelve: hacer pública nuestra advertencia a quienes pretenden
dividirnos con una campaña de bajos procedimientos, repartiendo
volantes en las fábricas con el apoyo de armas de fuego. Por otra
parte, SMATA señala a otro enemigo del pueblo: A. Tosco,
individuo perturbador de la clase obrera, que aliados con sus
agentes marxistas y sus secuaces gorilas...”.
SMATA sigue fiel al Justicialismo, que es la esencia vital de una
tercera posición frente a culpables del pueblo oprimido y
sojuzgado, capitalismo explotador y socialismo esclavizante.-
Un Operador

Nota:
Respecto a este artículo la C.D. quiere dejar aclarado:
1.- Que diferenciamos perfectamente entre lo que es la CGT,
como organismo que nuclea, a través de los sindicatos, a todos
los trabajadores, y los dirigentes de los últimos años que han
entregado o esquivado cualquier lucha obrera.
2.- Que el SOEPU en ningún momento estuvo adherida a la
Intersindical Nacional de Tosco.
3.- Que posiblemente el compañero confunda que (por

CCCLIX
decisión de asamblea) hemos pertenecido a la Intersindical de
San Lorenzo, que nada tiene que ver con la Intersindical Nacional
(salvo el nombre).
4.- Que el SOEPU, junto a los gremios que formaban la
Intersindical de San Lorenzo han participado siempre en los
plenarios de la CGT, y junto a algunos otros gremios de Rosario,
llevaron siempre posiciones de lucha.
5.- Que nunca hemos sido divisionistas, y pensamos que no
se trata de mejorar la CGT, sino de cambiar los dirigentes que
traicionan, cosa que solamente podrá ser realizada por los
obreros.
6.- Que reconocemos al compañero Tosco (al margen de sus
ideas políticas) como a uno de los dirigentes obreros que se jugó
contra la burocracia sindical, estando siempre en defensa de los
intereses de los trabajadores.-
Comisión Directiva
Boletín Nº 24 - Julio 1973; págs. 13 - 14.-

82.- Editorial

Compañeros:
Cuarenta días después del ascenso de H. Cámpora y S. Lima
al gobierno, poniendo fin a tantos años de dictadura, el país
se conmueve ante sus renuncias.
Los hechos de julio posibilitarán el ascenso del Gral. Perón a la
primera magistratura, como hubiera sucedido el 25 de mayo de
no haber mediado la caprichosa proscripción a la que fuera
sometido. Ascenderá por voluntad mayoritaria del pueblo, en un
momento de extrema gravedad económica del país.
La mayoría de los trabajadores votarán por Perón, con votos
de confianza, algunos, y exigencia, otros, de que su gobierno
produzca los cambios necesarios para que los obreros puedan
mejorar su situación de sometimiento y miseria.
Y en la búsqueda de una Sociedad que le permita
desarrollarse como hombres libres de toda atadura económica y

CCCLX
social, se organizarán tarde o temprano con la pretensión de ser
gestores de su propia liberación.-
Boletín Nº 25 - Julio 1971; pág. 1.-

83.- COMPAÑERAS DE EQUIPO DE LIMPIEZA EN LUCHA

“Quienes nos dirigimos en esta edición, somos las 32 chicas


que formamos el plantel del Personal de Limpieza de PASA. El
motivo de nuestra presente nota es para dar público
conocimiento de las condiciones de nuestro trabajo y la forma en
que se nos trata.
Nuestro patrón, que es el tiene el contrato de la limpieza
desde hace cuatro años es el Sr. Rubén L. Barabino: trabajamos
dos horas y media por día de lunes a viernes y se nos paga $ 350
la hora desde hace muy poco tiempo. Nos hace descuentos
jubilatorios y aún no sabemos el Nº de Caja de Aporte. Nos
descuenta por Obra Social que jamás hemos recibido asistencia
médica (...) Donde trabajamos, se nos recarga de trabajo, pues
donde tiene que haber dos chicas, hay sólo una, cuando falta una
compañera, tenemos que hacer nosotras el trabajo (...).
El Sr. Barabino cobra por quincena, pero a nosotras nos paga
por mes y siempre después del día 9. En la mayoría de las veces
carecemos de implementos de limpieza (...) Jamás se nos ha
entregado una muda de ropa, no cobramos salarios familiares,
casamiento, etc.; además tiene la costumbre de hacernos firmar
recibos en blanco o escritos en lápiz.
Queremos dejar en claro que estas son algunas de las muchas
anormalidades en nuestro trabajo, y esperamos que se tomen
medidas para que esto siga su cause”.-
Personal de Limpieza
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 2 - 3.-

Otras compañeras de la limpieza, denuncian los atropellos de


este contratista de la misma forma que la nota anterior, y llaman
a la Unidad y la Lucha en los siguientes párrafos:
“Compañeras:
“Hemos emprendido una lucha hace muy poco, que no es una
lucha de alguna en particular, ni de las delegadas, ni de los

CCCLXI
dirigentes petroquímicos en forma aislada, sino de todos juntos,
especialmente en nuestra lucha, que somos las afectadas. Contra
quién luchamos? Principalmente contra nuestro patrón, contra
Barabino, que es un explotador y un oportunista que se
aprovecha de los padeceres humanos, de la falta de trabajo y de
la miseria de las personas.
“Ahora más que nunca unidas y fuerte contra el patrón.
Vivimos un momento crucial e importantísimo en nuestro trabajo.
No podemos permitir que ninguna afloje! Ganamos o Morimos:
Ganar es derrotar a Barabino, o al contratista, y pertenecer a la
empresa en forma directa, o sea derrotar al explotador que se
lleva toda la ganancia de nuestro trabajo. Morir es perder la lucha
y que nos despidan a todas. Necesitamos la ayuda del sindicato
Petroquímico pero nosotras debemos también dar todo nuestro
apoyo a ellos. Ellos y nosotras podemos llegar algún día a trabajar
juntos en todo sentido. Adelante Compañeras!”.-
Compañeras del Equipo de Limpieza
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 2 - 3.-

EL SOEPU JUNTO A ELLAS

Creemos que las notas transcriptas hacen innecesario


abundar en detalle acerca de la sumisión a que se ven
sometidas estas trabajadoras. El SOEPU ha realizado una
denuncia en el Departamento de Trabajo, pidiendo que estas
compañeras sean reconocidas como Personal en Convenios
Petroquímicos, y sean tomadas directamente por PASA.
Este es un caso más de los miles que existen en el país de
empresas contratistas: la empresa se llama Barabino, un
intermediario que gana dinero sin trabajar colocando mano de
obra a PASA quien gustosa la contrata porque le sale más barato.
Todo lo cual no es mas que una especulación con la
desocupación que existe en la zona y con las diversas maneras
que hay para engañar a las autoridades laborales, (lo del recibo
en blanco, es muy conocido por el obrero argentino). (...)
Los obreros petroquímicos estaremos dispuestas a luchar,
hasta lograr la efectivización por parte de PASA de todas las
compañeras.-
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 2 - 3.-

CCCLXII
84.- A UN AÑO DE TRELEW

El 22 de agosto se cumple el primer aniversario de brutal


asesinato ocurrido en la base de Trelew. Las víctimas del hecho
fueron quince combatientes pertenecientes a grupos armados de
distintas organizaciones, que dieron su vida heroicamente por una
causa que creyeron noble y justa.
María Antonia Berger, una de las tres sobrevivientes de la
masacre, escribió la experiencia que vivió, debiendo pasar
muchos meses para que el pueblo la conociera. Nuestro
homenaje a las dieciséis víctimas de aquella jornada imborrable
consiste en reproducir párrafos del escrito de María Antonia:
“Buenos Aires, 5-9-72. Queridos compañeros: Recuerdo que
en una ocasión en que habíamos estado haciendo toda clase de
movimientos ordenados por nuestro carcelero, el teniente de
corbeta Bravo colocó su pistola calibre 45, montado y sin seguro,
en la cabeza de nuestra compañera Clarisa Lea Place al mismo
tiempo que la amenazaba con matarla (...) una noche asistimos a
un simulacro de fusilamiento, era aproximadamente la
medianoche cuando nos despiertan a todos y nos obligan a
tirarnos al suelo (...) a las cero 30 horas del 22 de agosto, me
despierto por los gritos que profiere el teniente Bravo y otros,
todos ellos profieren insultos contra nosotros y contra nuestros
abogados defensores y asegura que esa noche íbamos ha
declarar, quisiéramos o no, y que además íbamos a ver lo que
pasaba por meternos con la Marina (...) nos ordenan salir de las
celdas caminando sin levantar los ojos del piso, una vez en el
pasillo que separa las dos hileras de celdas nos ordenan formar
fila de a uno y de cara al extremo del pasillo. También observo
que es la primera vez que nos sacan a todos juntos. De pronto,
imprevistamente, sin una sola voz que lo ordenara, como si ya
estuviera todo previsto, el cabo obeso comienza a disparar su
ametralladora sobre nosotros. Al instante en la idea se cubrió de
gritos, balas y humo, porque todos oficiales y suboficiales
comenzaron a accionar sus armas. Yo recibo cuatro impactos, dos
superficiales en el brazo izquierdo, otro en los glúteos con orificio
de entrada y salida y otro en el estómago. Alcanzo a introducirme
en mi celda, arrojándome al piso. María Angélica Sabelli hace lo
mismo, al tiempo que dice sentirse herida en un brazo, pero
momentos después escuchó que su respiración se hace dificultosa

CCCLXIII
y ya no se mueve. En la puerta de la celda, en el mismo lugar
donde le ordenaron pararse, está caída Ana María Santucho
totalmente inmóvil. Reconozco las voces de Menna y Suárez
dando gritos de dolor. Escucho además la voz del teniente Bravo
que se dirigiera a Alberto Camps y a Cacho Delfino gritándoles
que declaren, ambos tendidos y esto motiva disparos de armas
cortas. Luego no volví ni a escuchar ni Alberto ni a Cacho. Lo que
escuché son más voces de dolor que van siendo silenciadas a
medida que se suceden nuevos disparos de armas cortas. Se van
aproximando los disparos, lo cual pone de evidencia que aquel
que se halla a la tarea de rematar a los heridos está cada vez más
cerca de mi celda. Trato de fingir que estoy muerta y
entrecerrando los ojos puedo ver a uno de los asesinos parado en
la puerta de mi celda. Es alto, 1,80 m aproximadamente, tiene
cabello castaño, es delgado y lleva insignia de oficial de Marina.
Apunta a la cabeza de María Sabelli y dispara. Repite la
operación conmigo y dispara. El proyectil penetra por mi barbilla,
me destrozó el maxilar derecho y se aloja tras la oreja del mismo
lado. Luego se aleja sin verificar el resultado del disparo, dando
por sentado que estoy muerta, continuaron disparos de armas
cortas hasta que se hace el silencio sólo quebrado por la ida y
venida de mucha gente. Ellos llegan, nos miran, tal vez para
cerciorarse si estamos muertos, cuando descubren algún herido
se tranquilizan entre ellos diciendo que al desangrarse se
morirán. Yo trato de no dar señales de vida. A la hora llega un
enfermero quien constatara el número de heridos y de muertos,
también llega una persona importante, puede ser juez, un oficial,
a quien le cuentan una historia inventada.
María Antonia Berger”.-

Nota:
Y a pensar que el día 23-9-72, el extinto contralmirante
Hermes Quijada, en una alocución pública a todo el país,
transmitida por radio y televisión dijo: “El gobierno lamenta
profundamente el hecho, pero se trataba de una fuga masiva del
penal por parte de los sediciosos”.-
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 3 - 5.-

CCCLXIV
85.- EVITA

En el peronismo, si Perón es el político y conductor que ha


sabido llevar el proceso con tacto y astucia, Evita seguirá siendo
la líder del sector humilde, empeñada en rescatar al movimiento
de sus riesgos burocráticos. Y por eso, aunque hayan pasado 21
años de su muerte, considero que fue Evita, imprescindible para
entender y valorar al peronismo. Porque su línea representa una
manera de entender y sentir el peronismo, una actitud
radicalizada y combativa que no ha muerto con ella. Representa
por otro lado una manera de vivir la lealtad a Perón y
fundamentalmente al peronismo, que no consiste en el servilismo
pasivo, sino en la fidelidad a las primeras motivaciones y la sana
impaciencia revolucionaria. Un modo agresivo de asumir la
militancia, y una manera insobornable de encabezar la lucha del
proletariado.
La muerte de Eva Perón, marcó una etapa en la lucha popular
Argentina. El pueblo, en su sector más castigado, como en los
grupos más combativos, sintió su desaparición como una pérdida
irreparable. Con ella desaparecía no sólo una militante enérgica y
temida, sino el reaseguro más valioso que había tenido la
revolución peronista hasta ese momento. Supo distinguir a sus
enemigos que eran bien reales y concretos. Supo que los ataques
contra su persona eran los ataques contra una clase en la que
aquélla estaba identificada: “Yo sé que cuando ellos me critican a
mí en el movimiento, lo que les duele es la revolución. Mi
sectarismo es además un desagravio y una reparación. Durante
un siglo los privilegiados fueron los explotadores de la clase
obrera. Hace falta que eso sea equilibrado con otro siglo en que
los privilegiados sean los trabajadores”.
Su voz fue y es la más claramente clasista que se ha
levantado en el país. Prueba de que la lucha de clases no existe
en los libros sino en el seno viviente de la sociedad capitalista. Y
para entenderla y asumirla no es preciso aprender las categorías
exactas de los teóricos, sino en el combate cotidiano junto al
pueblo. En ese sentido, los primeros capítulos de “La Razón de mi
Vida” constituyen una lección magistral, en lenguaje sencillo, de
las motivaciones para una lucha social que no se detiene en
meras reivindicaciones (...).
Su fidelidad al peronismo no nacía de una actitud pasiva o
sometida, fue fiel porque siempre interpretó las consignas de

CCCLXV
Perón en su sentido más combativo y más radical, fue fiel porque
entre varias alternativas de participación eligió siempre la más
comprometida, la más avanzada. Fue la encarnación misma de la
lealtad peronista, porque soñó un peronismo sin componendas y
porque nunca redujo a Perón a un rol de conciliador mediocre.
(...). Una mujer como Evita no podía descansar en las primeras
victorias. (...) Por todo esto es que la figura de Evita adquiera vital
importancia para juzgar y entender al peronismo. (...)
Cuando las niñas más avanzadas del movimiento apelan al
nombre de Eva Perón para identificarse, no se equivocan: ella fue
la primer peronista, si no en su profundidad teórica, seguramente
sí en el valor de su certidumbre y en la capacidad de dar la vida
por ellas. O la muchachada, la juventud ardorosa y los grupos
más combativos, levantan su bandera. Y eso constituye hoy el
significado de Evita. Más que un recuerdo nostálgico, un
sentimiento y una actitud dentro del peronismo. El sentimiento de
que la lucha debe radicalizarse y debe darse al servicio de la
clase trabajadora. La actitud de una lealtad no se cifra en la
aceptación pasiva de cualquier consigna, sino en la búsqueda de
la trinchera más exigente y más metida en el corazón del
enemigo.-
Colaboración de Petronio
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 6 - 8.-

86.- LOS OBREROS QUÍMICOS CONTRA DUPERIAL

Los obreros químicos de Duperial acaban de ganar


parcialmente un conflicto contra su empresa cuando ésta
suspendió a un compañero por negarse a realizar tareas que no
correspondían a su oficio: se trataba del manejo de un camión de
arrastre de una grúa de 45 td. que ponía en riesgo -el compañero
no es chofer- la integridad física del mismo y del instrumento de
producción. En la primer quincena de junio, por manejar grúas sin
personal especializado y en número suficiente (choferes y
grueros), se produjo una colisión de dos grúas, con la
consecuencia del vuelco de una de ellas, que casi aplasta en su
caída al gruero que se desempeñaba como chofer.
Ante la suspensión aplicada, los trabajadores en Asamblea
resolvieron paralizar sus tareas sin abandono de fábrica vigilando

CCCLXVI
la integridad de la misma, puesto que era operada por personal
jerárquico en bajísimos niveles de seguridad.
El Departamento de Trabajo, intervino llamando a la
conciliación obligatoria, y, a través de un Dictamen el día 2 de
agosto, expresa que la “medida adoptada por la empresa al
suspender al obrero Castelli resulta apresurada y fuera de
lugar...” y aconseja pasar las actuaciones a la oficina de Asuntos
Legales. Acerca del pago de los jornales caídos, la autoridad
laboral no se expidió todavía, estando los obreros químicos
dispuestos a defender su pago hasta las últimas consecuencias.
Una de las consecuencias más positivas de la lucha emprendida
fueron la realización por parte de los empleados, sin efectuar
tareas productivas, y la afiliación de trece de ellos al sindicato,
quienes donaron un “cheque lanudo” a un fondo de huelga.
Además los obreros dependientes de empresas contratistas,
también acataron la medida de fuerza.
Simultáneamente con el desarrollo del conflicto, aparecieron
en algunos diarios locales artículos que expresaban la
preocupación de Duperial acerca de la reducción de un 40 % en la
provisión de unos cortes de nafta por parte de YPF. Sugestivas son
estas publicaciones al aparecer en un momento de
enfrentamiento con su personal, lo que podría suponer que fuese
una forma de presión al gobierno, para que le sea restituida la
cuota de materia prima habitual. Se manifiestan en las notas las
graves consecuencias que tendrían paradas temporarias de
producción, por posibles suspensiones de personal y por
problemas que ocasionaría tal situación a 200 industrias
dependientes de los productos de Duperial.
La deficiencia en el suministro de nafta estaría fundamentada
en la escasez de hidrocarburos que se observa en todos los
niveles, obligando a YPF reducir la provisión para atender las
necesidades de consumo como combustible. Pero aquí habría una
contradicción: la nafta requerida por Duperial, no es precisamente
la apropiada para el uso como combustible por su menor grado de
refinamiento.
Estas controversias, permitirían hacer otras suspensiones: YPF
presionaría a Duperial para revisar y actualizar los precios
promocionales con que entrega la nafta, que están congelados
desde hace varios años como consecuencia de los regímenes de
promoción industrial que rige el país.
Todas son hipótesis, pero muy a tener en cuenta para que los

CCCLXVII
trabajadores químicos no sean sorprendidos, ya que (recordemos
año 67 en PASA) siempre pretende hacer pagar los platos rotos a
los obreros.-
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 6 - 7.-

87.- CONTAMINACIÓN AMBIENTAL

En la edición de marzo de 1973 de una revista especializada


en petróleo y petroquímica leemos en un artículo dedicado a una
nueva refinería instalada en la localidad de Ponce en Puerto Rico,
que los medios instalados en este complejo para disminuir los
efectos de la producción de contaminantes del medio ambiente,
son de extraordinaria eficacia.
El programa para evitar la contaminación del aire, agua y
suelos, consta de dos fases. La primera está instalada en las
unidades de proceso, que están equipadas con detectores de
contaminantes. La contaminación del aire se elimina virtualmente
mediante depuradores, colectores de polvo, filtros de carbón
activado e incineradores situados estratégicamente.
Los líquidos pesados y residuos difíciles de quemar se cargan
a incineradores que usan vapor de agua y gas combustible para
obtener combustión sin humo. Las cenizas resultantes y los no
combustibles se usan para rellenar terrenos.
Las aguas contaminadas se tratan en instalaciones muy
modernas y luego de una increíble cantidad de procesos vuelve a
la bahía con la pureza, el pH y la temperatura exacta de acuerdo
con las normas estrictas impartidas por el gobierno.
En la misma fecha PASA o Industria Dow (en menor escala),
ignorando olímpicamente la ley Nº 20.284 que legisla las normas
a las que deben ajustar las empresas que se dedican a quemar
todo tipo de desechos industriales. El humo de dichas quemas es
bien conocido por los vecinos de la zona pues además de
respirarlo se ven afectadas por el hollín que cae sobre quintas,
casa y ropas tendidas al sol. Es hora que las autoridades tomen
en sus manos este grave problema.-
Un Instrumentista
Boletín Nº 25 - Julio 1971; págs. 7 - 8.-

CCCLXVIII
88.- Editorial

Compañeros:
Cuando ya ha pasado más de un mes de la muerte del Gral.
Perón, los trabajadores argentinos seguimos sintiendo la
desaparición física como la de un compañero cuyos ideales no
fueron otros que la liberación de su patria y la justicia social
dentro de ella.
La extraordinaria movilización popular durante su velatorio y
su sepelio fueron un marco que dicen a las claras de ese
sentimiento. Sentimos que no era sólo porque si moría era un
presidente de la nación o porque el hecho de que su figura
política hoy estuviera agigantada por 18 años de exilio, sino
fundamentalmente porque su vida, al igual que la de Evita,
siempre estuvo ligada a la de su pueblo, y especialmente a la
nuestra, la de los trabajadores, nuestras luchas y sufrimientos.
Pero por más cruda que sea la realidad, por más que su figura
aparezca irremplazable, hoy más que nunca nos cabe la de los
trabajadores argentinos a asumir plenamente la responsabilidad
de recoger las banderas que él proclamara y llevarlas hasta la
victoria.
Esta responsabilidad, que siempre debimos asumir, porque es
el deber de todo compañero que sufre las injusticias de un
sistema que unos países dominan a otros y unos pocos hombres
se aprovechan de las mayorías populares, hoy se hace mucho
más urgente y necesaria.
Muchos caímos en posiciones un poco cómodas, los peronistas
y los no peronistas, al hacer recaer esta responsabilidad en un
solo hombre, que más allá de su gran liderazgo, era eso, un
hombre, que podía desaparecer en cualquier momento, y sin
embargo muy pocos nos preguntamos qué pasaría luego de su
desaparición. (...) olvidamos muchas veces que el ejemplo
magnífico que nos dejó el General Perón, más de aciertos y
errores, es el de haber sido un hombre que dedicó su vida tras un
ideal de justicia y liberación. Dice en la primera enseñanza que
debemos recoger de él, tomar como nuestros los problemas que
afligen a toda la sociedad, luchar cuando la injusticia la vivimos
en carne propia, pero también cuando la sufren otros
trabajadores, sean de nuestro gremio o de otro, opinar y
participar de la política general del país, apoyar al gobierno
elegido por él pueblo en todos sus aciertos, pero también saber

CCCLXIX
criticar los errores, tal como decía el general Perón. Eso es ser un
hombre político, un hombre que se preocupó por los destinos de
su patria que es solidario con su compañero. (...)
Luego de la dictadura militar, luego de muchos mártires y
torturas, en nuestro país fue elegido un gobierno legítimo. De esa
manera se inició una nueva etapa política, un gobierno popular
volvía al gobierno después de 18 años. Pero vemos que en todos
los países donde se dan procesos parecidos, empiezan a
inquietarse muchos que ven peligrar sus intereses.
El imperialismo, la oligarquía, los altos mandos militares que
niegan las banderas sanmartinianas, no dejaron de acechar.
Desde sus lujosas mansiones, desde el boicot económico con el
desabastecimiento de productos hasta el rumor por medio de la
prensa gorila, desde la crítica maliciosa hasta infiltrarse en el
propio gobierno y en las propias estructuras sindicales para
recuperar el terreno político que perdieron en las urnas.
Por eso no fue casual el histórico 12 de junio, en donde el
general Perón los denunciaba claramente. Eso fue un claro
llamado de atención para que sepamos que el enemigo no
descansa y no se resignan más a perder sus intereses.
Todo esto venía ocurriendo, pero, quedando el movimiento
político argentino más masivo sin su líder, quedando el gobierno
sin su tremenda capacidad política, hoy se está acelerando. Estos
viejos enemigos del pueblo que hoy enfrentan a los “terroristas”
más fieles a los intereses populares, están aprovechando para
controlar con los burócratas de espíritu oligárquico a los
sindicatos y ponerlos al servicio de intereses imperialistas. (...)
Por eso decimos, que la responsabilidad del movimiento
obrero de Argentina que hoy mayor que nunca, aún sin un líder
como el Gral. Perón, somos los únicos que podemos garantizar
la unidad nacional, poniéndonos a la cabeza de este proceso.
Como lo hicimos en nuestro conflicto, como los compañeros de
Smata, Gráficos, Propulsora, etc..
Junto a todos los sectores populares debemos seguir la tarea
de liberar nuestra patria y toda forma de explotación, no debemos
bajar la cabeza. Debemos defender lo que masivamente votamos
en 11 de marzo de 1973. Para todo esto debemos valernos de las
armas más importantes que tenemos los obreros: la unidad en la
lucha y la organización. Como el Gral. Perón nos decía “... El
tiempo vence a los hombres, pero la organización de los hombres
vence al tiempo.”.-

CCCLXX
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; págs. 2 - 4.-

89.- COMUNICADO DE PRENSA DE LA C.D.:


FALLECIMIENTO DEL GRAL. PERÓN

Ante el fallecimiento del presidente de la República, Teniente


General Juan Domingo Perón, los trabajadores petroquímicos y
todos los trabajadores y el pueblo, por encima de banderías,
sentimos con profundo pesar esta irreparable pérdida para el país
todo.
El mundo ha sido sacudido por la infausta noticia. El País llora
a este ilustre muerto, en particular los trabajadores, sus
descamisados, para quienes Perón no ha muerto. Él estará vivo
en cada corazón humilde, en cada fábrica, en cada rancho, en
cada lucha por la justicia.
Los petroquímicos manifestamos nuestro homenaje
concurriendo a manifestarle nuestro reconocimiento junto a
millones de hombres y mujeres que desfilarán ante su figura
inmortal.
Ante esta tremenda pérdida del líder, debemos seguir el
camino recorrido desde 1945 y sin claudicar en esa lucha.-
San Lorenzo, 1º de julio de 1974.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974, pág. 5.-

90.- 26 DE JULIO:
NUESTRO HOMENAJE A LA COMPAÑERA EVITA

“...ha terminado la era de los privilegiados y de las minorías


selectas, porque ha despertado la conciencia del pueblo...”
“...En el pecho de cada descamisado, en el abrazo de cada
uno de los trabajadores de nuestra Patria, está la garantía de la
revolución, que no podrá ser traicionada, porque sobre la ceniza
de los traidores construiremos la Argentina de los humildes...”.
“...La victoria será nuestra. Tendremos que alcanzarla tarde o
temprano, cueste lo que cueste y caiga quien caiga...”.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; pág. 6.-

CCCLXXI
91.- EL ANIVERSARIO DE LA MUERTE DE EVITA

Desde el 26 de julio de 1952, año tras año, los obreros y


trabajadores de la Patria al aproximarse esta fecha, nos sentimos
hermanados y unidos en el dolor ante esta pérdida irreparable.
Pero todos los 26 de julio, año tras año, los que estamos en su
lucha, que es la lucha de los obreros y el pueblo en el camino
de la liberación nacional y social, mantenemos a través de los
ejemplos que diera en su trayectoria de militante revolucionaria,
la llama viva de su pensamiento.
La lucha que emprendiera Evita permanece totalmente
vigente. Dos tareas fundamentales que nos marcara en su
vida, permanecen aún sin resolver. Una, que debíamos
organizarnos. Y la otra terminar con los traidores de adentro y de
afuera.
El imperialismo, la oligarquía, y los patrones que pretenden
disfrazarse de más peronistas que el propio pueblo, la burocracia
que entrega nuestras luchas y los renegados de nuestra clase que
son nuestros enemigos que aún permanecen de pie.
Y nuestra organización, pese a que somos número y fuerza,
no está todavía organizada como para lograr el triunfo definitivo y
ser así artífices de nuestro propio destino. Es por todo esto,
porque todavía sus trabajadores, sus descamisados, no hemos
logrado los objetivos que ella nos propusiera, que prometemos
como mejor homenaje en su memoria, redoblar nuestra lucha
para hacer realidad lo que nos dijera: “...Caiga quien caiga,
cueste lo que cueste, con sangre o sin sangre, la raza de los
oligarcas y explotadores no pasarán de este siglo...”.-
E. Sosa - J. L. Poles
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; pág. 7.-

92.- ASAMBLEAS QUE MARCAN UN CAMINO

Asamblea en el Sindicato del 11 de Junio

Los últimos acontecimientos de estos meses en nuestro país


fueron vividos en su total magnitud por los trabajadores
petroquímicos, que llevamos al seno de nuestras asambleas cada
uno de los problemas gremiales y políticos de los que

CCCLXXII
necesitábamos tomar decisiones.
Viejas inquietudes del gremio, comenzaron a ser analizadas
en reuniones de secciones como las realizadas por los
compañeros de Instrumentos, de trabajo de turno, administrativo,
brigadas de incendio, etc.. Además de los problemas concretos y
cada uno había un punto que era el eje central de las
discusiones: el salarial. Ante esta realidad interna y viendo que
externamente se estaban dando luchas por aumento de sueldo, la
conducción del gremio decidió convocar a una asamblea para que
el gremio en su conjunto decidiera la posición a tomar ante la
patronal. Esta propuesta fue tratada en esta asamblea numerosas
que después de considerar las distintas reivindicaciones
propuestas, incluida la salarial, decide elevar un petitorio a PASA
con un plazo de cinco días para que el mismo sea satisfecho en su
totalidad, de lo contrarió una nueva asamblea de fábrica decidiría
las medidas a adoptar. Una asamblea extraordinaria, por la gran
participación de compañeros en el debate y donde se puso de
manifiesto a través en alto grado de conciencia del gremio y su
espíritu de lucha en el transcurso de la misma se recibió
información de fábrica de que la patronal había realizado una
denuncia policial contra un compañero al que se nos indicaba de
un atentado perpetrado contra un jefe de PASA. Analizado este
problema y considerando la total inocencia del mismo, se decidió
brindarle la solidaridad unánime de todo el gremio. La misma se
manifestó en caravanas de colectivos, autos y todo medio de
movilidad que fue hasta el complejo para exigirle a la patronal
que retirara la denuncia y para brindarle seguridad al compañero.
Fue una extraordinaria prueba de solidaridad de la que somos
capaces los petroquímicos cuando vemos pisoteados nuestros
derechos o nuestra dignidad.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; pág. 8.-

Asamblea de Fábrica: 12 de Junio

Con posterioridad al discurso del General Perón, la


Confederación General del Trabajo realizó una movilización
popular a Plaza de Mayo en apoyo al Presidente de la Nación. Una
vez conocida la noticia, se convocó inmediatamente a una
asamblea de fábrica para analizar la medida y fijar posiciones al
respecto. En el transcurso de la asamblea se dieron varias

CCCLXXIII
mociones que sintetizaban el pensamiento de los compañeros.
Una de ellas fue apoyada por una inmensa mayoría, que planteó
acatar el paro decretado por la CGT, en apoyo del gobierno
elegido por el pueblo y mantener el petitorio presentado a la
patronal para ser considerado en la fecha prevista y allí se decida
al respecto. La otra posición planteaba el no, porque significaba
avalar el pacto social y en consecuencia no se podía emprender la
lucha por salario y que éste lo impedía. Esta posición sometida a
votación representó sólo una minoría de compañeros. A través de
una decisión totalmente democrática el gremio petroquímico
adhirió a la medida de fuerza.-

Asamblea de Fábrica: 18 de Junio

En esta fecha expiraba el plazo que tenía la patronal para


responder satisfactoriamente al petitorio presentado por el
gremio, en el que estaban incluidas mejoras salariales. Como era
de suponer, nuestra bien amada patronal imperialista yanki, se
escudó en el pacto social y en algunas frases del discurso
presidencial, para decirnos que NO y otras excusas que ya no nos
sirven.
Analizado el problema en la asamblea que hicimos en el taller
de mantenimiento y después de ver exhaustivamente la situación
política externa (la totalidad de los gremios que se encontraban
en conflicto por salarios habían levantado las medidas ante el
llamado de Perón) la asamblea decidió:
a) suspender el pedido de aumento de salarios
b) mantener en pie las demás reivindicaciones
c) formar una comisión para control de precios en la zona y
para controlar la producción y precios de los productos
fabricados en PASA.
En el desarrollo de la asamblea se produce un enfrentamiento
político de distintas tendencias partidarias llegándose en un
momento a una discusión nerviosa y agresiva y de la que no
estuvieron ajenos algunos compañeros de esta comisión directiva.
En algunos instantes cedió la sensación de tumulto, pero
afortunadamente no se llegó a fisurar la unidad de los
petroquímicos, que permanece intachable y sigue adelante contra
las injusticias y toda forma de opresión.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; págs. 10 - 11.-

CCCLXXIV
93.- EL GENERAL PERÓN Y SU TESTAMENTO POLÍTICO

En sus dos últimos discursos del día 12 de junio de 1974 el


General Perón denunció a “los que están promoviendo la
contrarrevolución”. Aludió a la campaña de acción psicológica de
los diarios oligarcas y otros elementos anti nacionales “aliados a
la acción foránea empeñada en anular el despegue argentino”. Se
refirió al “sabotaje de pigmeos”, reafirmó la política internacional
“que nos está llenando de prestigios y ventajas en el mundo
exterior”. Manifestó que vino para “lanzar un proceso de
liberación nacional y no para consolidar la dependencia” y “aún
nacionalizado los resortes básicos de la economía, seguiremos en
esa tarea, sin fobia, pero hasta no dejar ningún engranaje
decisivo en manos extranjeras”. Reiteró su llamado a la unidad
nacional, habló de la oposición que debe apoyarlo. En cambio
criticó a ciertos peronistas que creen que defender el proceso es
seguir gritando “Viva Perón”.
En definitiva, palabras con las que estamos de acuerdo y que
cobran especial significado porque estuvieron alejadas del caduco
favoritismo del comité, vida de la vieja política argentina, fueron
las últimas palabras que pronunciara el General junto a su pueblo,
antes de proyectarse definitivamente hacia la historia.
A propósito de las mismas, y por tener plena vigencia en la
actualidad, queremos recordar que el desabastecimiento, el
mercado negro, el sabotaje, son parte de los planes de los
monopolios y la oligarquía para forzar al pueblo al desconcierto,
restándole bases de apoyo al gobierno elegido por el pueblo,
truncar el proceso, y finalmente un nuevo golpe. El asesinato, las
bombas, etcétera, se inscriben en estos planes de desconfianza,
abundando los recelos y sectarismos y debilitando por lo tanto la
Unión del pueblo en sus luchas por la liberación.
Es indudable que los discursos de Perón tendrán especial
significación en las decisiones posteriores que tomamos los
petroquímicos y que tomarán el resto de los trabajadores y el
pueblo.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; pág. 7.-

94.- CRÓNICA OBRERA

CCCLXXV
SULFACID: Los compañeros de esta fábrica del grupo Bunge y
Born realizaron un paro con concentración en el mes de junio. La
medida se originó como consecuencia de la pérdida del brazo
derecho parte del hombro por parte de un compañero al ser
atrapado por un engranaje sin fin de una máquina en la sección
de fusión de zinc. Este problema viene a sumarse a una serie de
situaciones similares que se venían produciendo desde hacía años
y donde los trabajadores han venido reclamando constantemente
sin obtener respuesta de parte de la patronal. Los trabajadores
de Sulfacid siguieron la lucha hasta arrancar a la patronal esas
importantes reivindicaciones siempre postergada y que cuestan
salud y sangre a muchos compañeros.
JABONEROS: Se realizaron elecciones de renovación de la
comisión directiva con la participación de tres listas,
imponiéndose la Lista VERDE cuyo programa se basó en un
contenido clasista, antipatronal y de defensa de la democracia
que compartimos. La flamante comisión directiva se vio envuelta
en un conflicto con la patronal de SAIPE por el no pago del doble
aguinaldo y otras reivindicaciones, hace muy pocos días. La lucha
de los compañeros jaboneros fue jalonada con un importante
triunfo, que alegra a todos los compañeros de la zona industrial.
ROSARIO: PARAN MÉDICOS RESIDENTES: Doscientos médicos del
Hospital Centenario y del Policlínico Eva Perón dispusieron un
paro total de actividades manteniendo sólo una guardia de
emergencia porque el movimiento no va dirigido contra los
pacientes. Reclaman por el mejoramiento de la asistencia que
están brindando los hospitales y por el escalafonamiento y
equiparación que les posibilite cobrar los sueldos mínimos para el
personal universitario, la obra social y otros beneficios que les
corresponde.
CÓRDOBA: SMATA SIGUE RESISTIENDO: El sindicato cordobés
sigue su lucha con el apoyo masivo de las bases, coexistiendo la
expulsión de sus dirigentes decretada arbitrariamente por la
conducción nacional. Hace pocos días en un acto de protesta que
realizaron los obreros ante el allanamiento del local sindical,
resultaron heridos por la policía cuatro compañeros, uno de ellos
de suma gravedad.
BUENOS AIRES: LOS GRÁFICOS NO AFLOJAN: La Federación
Gráfica Bonaerense a raíz de la arbitraria medida del Ministerio de
Trabajo por la cual se suspende su personería gremial, ha

CCCLXXVI
comenzado la lucha. En un plenario de delegados resolvió realizar
paros de dos horas por turno en todos los talleres y trabajar a
convenio.
LA PLATA: CIERRAN PROPULSORA SIDERÚRGICA: Ante el conflicto
que se originara por el despido de doce obreros, la empresa optó
el lunes pasado por cerrar sus instalaciones hasta que el
Ministerio de Trabajo se expida. Dada la negativa de la dirección
de la UOM Regional de La Plata de asumir la defensa de los
cesantes, el día 27 los obreros encabezados por su Comisión
Interna realizaron una manifestación frente a la sede de la UOM
para exigir que tome cartas en el problema. Ante la nueva
situación creada por el cierre los compañeros estaban evaluando
otras medidas a tomar. Estos y tantos otros conflictos como los de
Matarazo, Panam, Pajarito, etcétera, muestran la lucha que
estamos desarrollando los trabajadores a lo largo y ancho del país
ante los atropellos de las patronales y la complicidad de muchos
dirigentes sindicales que parecen empecinados en echar por
tierra el proceso iniciado el 11 de marzo de 1973.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; págs. 11 - 12.-

95.- EL FLACO MOGLIA:


ANIVERSARIO DE SU FALLECIMIENTO

Ya se cumplió un año de la muerte del Flaco Moglia y su


esposa Betty. Lo recordamos en fábrica y lo recordamos ante su
tumba, volviendo a nuestra memoria su recia personalidad, su
simpatía, su don de gentes, sus luchas al servicio de los
trabajadores. Y lo volvimos a llorar, como cuando ocurriera aquel
luctuoso hecho. Esa pérdida irreparable, tratamos de llenarla con
el esfuerzo de todos. Pero realmente es difícil poder llenar un
vacío tremendo como el que nos dejara nuestro querido “Flaco”.
Es indudable que Moglia sigue estando presente entre cada
uno de los trabajadores petroquímicos por todo lo que él
representó para nosotros.
Muchos compañeros se preguntan: ¿Qué haría Moglia si
viviera en estos momentos? Y creemos que hay una sola
respuesta: estaría en la lucha.
En humilde, pero gran homenaje que le tributamos ante su
tumba en este primer aniversario de su desaparición física un
compañero con emocionadas palabras dijo: “Flaco, todavía no se

CCCLXXVII
han cumplido tus ideales, el día que se cumplan será el día del
triunfo de la clase obrera, y ese día junto a otros tantos mártires y
luchadores se te rendirá el homenaje que mereces como uno de
los gestores de ese triunfo. Hasta la victoria, Flaco”.
A él le prometimos hace ya un año que íbamos a seguir en su
camino, que íbamos a seguir en sus luchas por una sociedad
mejor, que íbamos a seguir con la unidad del gremio y que
íbamos a seguir impulsando la democracia. Hoy continuamos en
ese camino y seguiremos firmes sin prisa, pero sin pausa.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974; págs. 13 - 14.-

96.- OPERADORES VOLANTES

El trabajo en turno rotativo continuó siendo un grave


problema por las consecuencias físicas y psíquicas que acarrea el
hecho de trabajar en forma anormal, los días, las tardes, las
noches, los días de fiesta. Si a ello le sumamos el hecho de que el
trabajador debe permanecer en su lugar hasta que sea relevado
por el compañero de turno entrante y cuando éste falta, debe
continuar trabajando un turno. Hace algunos años el sindicato
logró arrancarle a la patronal el cuerpo de operadores volante,
que a razón de tres compañeros por turno, pasarían a cubrir las
ausencias de los compañeros. Esta cifra se resolvió teniendo en
cuenta el índice de ausentismo de aquella oportunidad. Como en
el último año las ausencias han sido cada vez mayores, se planteó
reiteradamente a la empresa, la necesidad de aumentar estas
cifras para evitar las jornadas a las que se veían sometidos
muchos compañeros porque la cantidad de volantes no
alcanzaba. Nuestros reiterados reclamos registrados en la
comisión de reclamos, finalmente dieron sus frutos, lográndose en
el mes de junio la incorporación de un compañero más por turno,
lo que pasa a conformar una dotación de dieciséis compañeros en
su totalidad, para cubrir las distintas ausencias de planta. Esta
pasa a ser una nueva e importante conquista del gremio.-
Boletín Nº 31 - Septiembre 1974.-

97.- Editorial
del Secretario General del SOEPU: E. Sosa

CCCLXXVIII
En el último número de El Petroquímico se trataba la
tremenda significación que tenía la muerte del Gral. Perón en la
política argentina. (...) De todos modos era de suponer que la
oligarquía tampoco podía tener la desfachatez de mostrarse a
cara descubierta como en la época de la dictadura militar y
buscarían otras formas para no perder sus privilegios. Esos
métodos ya son bien conocidos: boicotear económicamente,
mentir a través de los diarios y revistas que le respondan,
amenazar con el golpe de Estado, realizar atentados contra el
pueblo, etc..
Pero lo más peligroso, lo que más debe preocuparnos y
mantenernos alerta es cuando se meten en nuestras filas. Como
decía Evita “peor que la misma oligarquía es el espíritu
oligárquico infiltrado en nuestras filas”. En las filas del pueblo, del
gobierno, de las estructuras sindicales y políticas.
Por eso es que ante situaciones como éstas, que se producen
en todos los procesos populares, cabe a quienes están en el
gobierno elegir entre dos caminos: el más fácil, y aflojar ante
estas presiones para poder mantenerse o el más dificultoso que
es seguir enfrentando desde el gobierno a esos grandes intereses
económicos, asumiendo el riesgo que ello significa junto a su
pueblo, que es la única fuerza capaz de hacer frente al enemigo
más poderoso y vencerlo.
Todo indica que este último es el camino que indicaba el
General Perón en el histórico 12 de junio, cuando luego de
marcar a fuego a los monopolios, los oligarcas, los especuladores
y ciertos dirigentes sindicales, llamó desde los balcones al pueblo
a estar alertas en la tarea de nacionalizar los resortes básicos de
la economía y redistribuir los ingresos en beneficio de los
trabajadores.
Ahora, habría que ver si esto se ha ido cumpliendo luego de
su desa-parición. Con una característica que no se daba desde la
caída de Perón en el ‘55, como es la movilización popular, se
sucedieron varios avisos presidenciales: la nueva Ley de Contrato
de Trabajo, el llamado a la gran paritaria nacional, la
argentinización de las empresas Ítalo Argentina de Electricidad,
Siemmens y Standard Electric, la nacionalización de las bocas de
expendio de combustibles entre otras. Todas estas medidas en
general fueron bien recibidas por el pueblo. La Ley de Contrato de
Trabajo habla de varios beneficios para los trabajadores (aún

CCCLXXIX
cuando no tiene alcance para los empleados estatales y para los
trabajadores rurales) sobre insalubridad, indemnizaciones,
vacaciones, derechos indispensables para la mujer, etc..
La caída del salario real también hacía indispensable la
convocatoria a la gran paritaria nacional. El empresariado no
había respetado en absoluto el pacto social mientras a los
trabajadores los trataban de subversivos si exigían aumentos
salariales.
Las argentinizaciones representan una cierta participación del
Estado en empresas históricamente monopolizadas por capitales
extranjeros, aunque la tecnología, la organización de la empresa,
la provisión de los bienes de capital, los créditos internacionales,
sigan en sus manos. En fin, todas estas medidas fueron
respaldadas por el pueblo porque eran justas y necesarias. No se
podían postergar.
Pero seríamos injustos si dijéramos sólo esta parte de la
realidad. Porque junto con esto no podemos olvidar que así como
miles de compañeros trabajadores que se congregaban en Plaza
de Mayo a aplaudir estas medidas, también miles de obreros se
movilizaban ante arbitrarias intervenciones a sus direcciones
sindicales y ante reivindicaciones que no se cumplían. Los
azucareros de Tucumán, los gráficos de Buenos Aires, los
mecánicos cordobeses, nosotros, que haciendo lo imposible
mediante el control de la planta para no bajar la producción, no
recibíamos sin embargo ninguna respuesta del Ministerio de
Trabajo ante las exigencias de lo más elementales que negaba la
patronal.
Tampoco se explican las intervenciones a muchos de los
gobiernos provinciales que habían sido legítimamente elegidos, ni
la detención de militantes y personas que como nuestro asesor
letrado, fueron detenidos sin acusación alguna. Vimos clausurar
diarios y revistas, como Noticias, sólo por decir la verdad en
conflictos como el nuestro o por denunciar negociado de
empresas extranjeras demasiado “comprometedores”.
Se implanta el estado de sitio, tratando de esta manera de
detener la ola de violencia sin antes tratar de analizar a fondo sus
causas. Tampoco vimos, lamentablemente, la iniciativa del
gobierno para que los restos de Evita estuvieran con nosotros
mucho antes. Y cuando fueron repatriados sólo pudimos
enterarnos un día antes, como si se tuviera miedo que fuéramos
los trabajadores a recibirla masivamente.

CCCLXXX
Todo esto debe llevarnos a la reflexión. Debemos saber que
las argentinizaciones pueden llegar a ser un frasco de tinta en el
océano cuando de las 100 empresas que más venden apenas
treinta son argentinas, cuyas ventas no superan el 25 % del total.
Un gobierno elegido por el pueblo no puede dejar de
nacionalizar los grandes monopolios extranjeros como: Fiat, Ford,
General Motors, IKA, Mercedes Benz, Chrysler, Safrar, Philips,
Squibb, Lepetit Pfizer, Gillette, Olivetti, Duperial, PASA, Compañía
Química, Atanor, Good Year, Pirelli, Firestone, etc., porque estos
monstruos son los que dominan la economía argentina. Si no se
empiezan a tocar estos intereses y las tierras se dejan en manos
de los terratenientes, no hay aumentos salariales que valgan,
porque mientras los sueldos están subiendo por la escalera, los
precios lo están haciendo por el ascensor. Un ejemplo de esto
puede ser en estos momentos los combustibles.
Por todas esta cosas es que ante este nuevo año que
comienza sugerimos la reflexión del gobierno y también la de los
compañeros del gremio, para que luego de la alegría de las
fiestas, estemos atentos y seamos responsables, para retomar el
camino de la liberación y no el de la dependencia, para recuperar
las banderas de la democracia sindical y no permitir la digitación
y la burocracia sindical para que la redistribución de los ingresos
favorezcan al trabajador y no al monopolio, para que se
comprenda definitivamente que la violencia se detendrá con
justicia social y no con represión indiscriminada. Y veremos que
por más poderoso que sea el enemigo, por más amenazas que
haga, por más presiones económicas que intente, aunque sea el
camino más difícil, podemos enfrentarlo con la fuerza del pueblo,
porque como decía el General Perón: “Cuando los pueblos agotan
su paciencia y se lanzan a la lucha, suelen ser invencibles”.-
Ernesto Sosa
Boletín Nº 32 - Enero 1975;
págs. 1 - 2.-

98.- ¿QUÉ PASA CON NUESTRO GREMIO?

La Ley de Asociaciones Profesionales fue promulgada en los


últimos meses del año 73. Mucho tiempo antes trascendieron las
consideraciones más importantes de la misma y desde entonces

CCCLXXXI
nosotros la denunciamos como el compendio legal que permitiría
la consolidación de una estructura gremial absolutamente
verticalizada, con grandes poderes concentrados en sus cúspides,
para permitir un perfecto control de todas las luchas fabriles y con
poder de intervención de las organizaciones gremiales menores
(comisiones internas, sindicatos, delegados, etc.) cuando éstas no
acatasen las imposiciones de las organizaciones de grado
superior.
Desde entonces, se comenzó a hablar insistentemente de la
desaparición de los “sindicatitos” o sindicatos de empresas, y de
la necesidad de tener en cada región una sola organización
gremial por rama de la producción.
En general, esta concepción es justa, ya que históricamente el
sindicato de empresa (salvo honrosas excepciones) fue casi
siempre manejado e impulsado por la patronal, por otro lado, es
gusto que los obreros de una misma rama productiva tiendan a
unirse y no a dispersarse. El asunto está en “cómo” y “para qué”
se concreta esa Unidad: una cosa es unificarse a través de un
procedimiento democrático y por voluntad de las bases, para el
logro de una Organización Sindical que tenga más poder de lucha
por las reivindicaciones económicas de los obreros, y otra cosa es
someter contra la voluntad de los trabajadores para formar un
organismo burocrático que olvide la lucha contra las patronales.
La FATIQYP (Federación de Industrias Químicas y
Petroquímicas) ha cursado con fecha 8-10-74 una nota al
Ministerio de Trabajo para que se nos quite la Personería Gremial,
aduciendo el Art. 24 de la Ley de Asociaciones Profesionales. Este
artículo en absoluto corresponde ser aplicado a nuestro caso, ya
que se refiere al otorgamiento de una personería a un sindicato
en una determinada zona geográfica, cuando en la misma existe
ya un sindicato de la misma rama de la producción, en tal caso,
no corresponde acceder al pedido.
Nosotros ya tenemos personería otorgada, y en realidad de lo
que se debería tratar es de un caso de encuadramiento sindical.
En la nota presentada por FATIQYP, se nos considera
incorrectamente sindicato de empresa: somos el Sindicato
Petroquímico (o sea que representa a los trabajadores de esa
actividad en los departamentos San Lorenzo y Rosario) y no el
sindicato de los obreros de PASA.
Se nos acusa indirectamente de oponernos a la unidad del
movimiento obrero y de ser divisionistas. Olvidan sus dirigentes la

CCCLXXXII
trayectoria del SOEPU que siempre ha bregado por todos las
formas de unidad, inclusive aquélla de los obreros de fábricas o
sindicatos de distintas ramas de la producción. Olvidan la
solidaridad permanente de los petroquímicos con cualquier lucha
de los trabajadores de la zona, incluso específicamente con los de
Duperial cuando fuera despedido el secretario general del
Sindicato Químico San Lorenzo.
Comentan que nuestra personería fue otorgada en la época
de la dictadura (¿quizás porque hayamos estado con ella?), pero
no dicen que una de las últimas resoluciones que firmó el Ministro
de Trabajo, San Sebastián del gobierno de Lanusse, fue la de
extender la representatividad de la Federación Química hasta ese
entonces, a Química y Petroquímica, sin habernos pedido opinión,
como legalmente hubiera correspondido.
La C.D. del SOEPU, en propuesta que será realizada a la
Asamblea del Gremio, está por la formación de un Sindicato
Único, Químico y Petroquímico, que represente a los trabajadores
de Rosario y San Lorenzo, o sea por una forma de fusión de los
actuales Sindicatos Químicos de las dos zonas y el SOEPU. Lo
único que pedimos, dado que se trata del ingreso de 750
trabajadores de la fábrica más importante de la zona industrial y
es el derecho a tener representantes en esa nueva Organización,
y no a través de una negociación que signifique incorporar
algunos de los que actualmente somos dirigentes del SOEPU, sino
a través de nuevas elecciones democráticas donde cualquier
petroquímico pueda integrar una lista junto a obreros de Sulfacid,
Duperial, Aga o cualquier otra fábrica de la zona, y que sean los
propios trabajadores los que elijan sus dirigentes y voten el
programa de la lista que les interese.
Para finalizar, estamos por la UNIDAD, pero también por la
DEMOCRACIA, banderas que siempre hemos levantado y arma de
los trabajadores para decidir su propio destino.-
Boletín Nº 32 - Enero 1975;
págs. 2 - 3.-

99.- LA REPATRIACIÓN DE LOS RESTOS DE EVITA

“Aunque deje en el camino jirones de mi vida, sé que ustedes


lo recogerán y lo llevarán como bandera a la victoria”. El 17 de
noviembre se produjo la repatriación de los restos de la

CCCLXXXIII
compañera Evita. En esta fecha y casi por sorpresa se anunció el
acontecimiento, decretando a su vez la CGT un paro general de
actividades. En nuestro gremio, inmediatamente conocida la
noticia se realizó una asamblea de fábrica donde se decidió
acatar de inmediato la medida.
La repatriación de los restos de la abanderada de los humildes
se produce luego de 19 años de destierro. Desaparecida
físicamente el 26 de julio de 1952 quedó celosamente guardada
en la sede de la CGT hasta que en el año 1955 en un lamentable
episodio protagonizado por las huestes triunfantes de la mal
llamada “Revolución Libertadora” se profanó su cuerpo y se lo
trasladó secretamente a un lugar de Europa. A partir de esos
instantes se iniciaron toda clase de conjeturas en torno al
paradero de esa figura que ya tenía ribetes de inmoral y de
mitológico. En el año 1971 la dictadura de Lanusse ante la presión
constante de la clase obrera y el pueblo accede a devolver los
restos de Evita en un vano intento de frenar las luchas populares
y de querer capitalizar el peronismo. A partir de esa fecha sus
restos comenzaron a descansar en Puerta de Hiero, en Madrid, el
lugar donde el Gral. Perón tuviera su base de operaciones durante
su exilio. Hoy, Evita, está de vuelta entre sus compatriotas, entre
sus queridos descamisados, entre los “grasitas” de su pueblo, que
la continúan proclamando la eterna vigía de la revolución. Este
regreso significa un nuevo triunfo de los trabajadores y el pueblo
argentino ante sus eternos enemigos de adentro y de afuera.
VOLVERÉ Y SERÉ MILLONES -nos decía-. Y efectivamente después de
tantos años volvió junto a nosotros y millones de corazones
humildes proclamaron su nombre o dejaron caer alguna lágrima
ante la sensación de impotencia que sacudía a nuestro pueblo al
no poder movilizarse debido al estado de sitio, y darle el
recibimiento triunfal que ella se merecía. Y aún así miles de
hombres y mujeres, ancianos y niños concurrieron ante su camino
para vitorear su nombre, Evita, la abanderada de los humildes, a
un en este caso, no necesito de los protocolos y de las honras, no
necesito de la propaganda para anunciar su llegada, porque para
nosotros los trabajadores, Evita seguirá siendo nuestra
abanderada, seguirá siendo la compañera Evita, seguirá siendo
uno de los nuestros, seguirá siendo “un gorrión más de una
inmensa bandada de gorriones”, seguirá siendo la eterna
revolucionaria. Evita, desde nuestro lugar de trabajo, desde
nuestra asamblea de fábrica, nuestro humilde y sincero

CCCLXXXIV
homenaje. ¡Presentes Compañera!.-
J. L. Poles
Boletín Nº 32 - Enero 1975; págs. 3 - 4.-

100.- LA VIOLENCIA, EL ESTADO DE SITIO


Y LA DETENCIÓN DE HORACIO ZAMBONI

La opinión pública se ve sacudida casi a diario por distintas


formas de violencia que azotan indiscriminadamente a nuestra
patria. Asesinatos, secuestros, presos políticos, miedo, parecen
ser el signo que caracteriza este momento difícil que vive el país
y que asistimos con asombro e impotencia millares de hombres
y mujeres libres. Nuevamente, el estado de sitio se aplica en
nuestra Patria siendo implementado en muchos casos contra
quienes luchan por los intereses de los trabajadores. Así, es como
ha sido detenido arbitrariamente por el Poder Ejecutivo Nacional,
el Dr. Horacio Zamboni, abogado rosarino, asesor letrado del
SOEPU, del Sindicato de Obreros Ceramistas (Filial 4) y del
Sindicato de Obreros de la Alimentación de Firmat, no ha
cometido delito alguno, ningún cargo pesa sobre él, no hay
proceso abierto, la Justicia dispuso su libertad pero recién a más
de sesenta días de su detención a disposición del Poder Ejecutivo
se dispone su extradición. ¿Cuál es la causa de la prolongada
privación de su libertad? ¿Acaso que haya estado
permanentemente al lado de las luchas de la clase obrera?
No concebimos que so pretexto de la existencia del Estado de
Sitio se prive de la libertad a honestos ciudadanos por el solo
hecho de pensar distinto que los funcionarios de gobierno.
Sabemos que en muchos casos similares a los aquí planteados
que se vienen presentando, lo que debería llamar a la reflexión a
las autoridades de manera que reconsidere las medidas que se
tomen en este sentido para no caer en los errores de una época
tristemente recordada y a la que el pueblo no desea volver,
épocas en la que cientos de presos políticos inundaron las
cárceles y la que los argentinos repudiamos mayoritariamente el
pasado 11 de marzo de 1973.
Los petroquímicos suscribimos esta declaración solicitando la
inmediata libertad de todo detenido político que se encuentre
injustamente privado de la misma y la plena garantía de las

CCCLXXXV
libertades democráticas de los ciudadanos.-
La Comisión Directiva del SOEPU
Boletín Nº 32 - Enero 1975; págs. 7 - 8.-

101.- DESPUÉS DE DOS MESES DE SU DETENCIÓN

El compañero Horacio, el abogado que declinó una tranquila


vida profesional para aliarse a la lucha de los trabajadores, ha
caído preso.
Causa: Sus ideas políticas, su accionar junto al proletariado
en la marcha por su emancipación de la opresión del capital y la
construcción de la sociedad sin explotadores ni explotados.
Cargo: ningún escrito. La justicia, intérprete de la
Constitución y de las leyes vigentes, decretó su libertad. No hay
lugar a proceso.
Medio para privarle su libertad: El Estado de Sitio implantado
dos días antes para combatir el terrorismo y que ha servido
además para detener a 1.200 personas por sus ideas políticas.
La estructura jurídica para luchar contra los grupos guerrilleros,
ya existía antes del estado de sitio: el Código Penal, su reforma,
etcétera, actualmente vigente.
Por lo tanto su aplicación tiene otros destinatarios, por
ejemplo Zamboni, un ciudadano que ha expresado a cara
descubierta sus ideas políticas, un hombre de actividad pública
que inclusive ha discrepado con la guerrilla.
Y así es que dirigentes sindicales, trabajadores, estudiantes,
abogados, obreros, hoy están detenidos a disposición del Poder
Ejecutivo.
El compañero Zamboni ha optado por salir del país, derecho
que le asiste constitucionalmente. Es probable que esa decisión la
haya tomado ante la falta de perspectivas de lucha del pueblo a
favor de la defensa de las libertades democráticas. En su nuevo
destino, Horacio, deberá reiniciar su vida lejos de su tierra natal,
condenado por su accionar junto a los explotados.

ANTE SU LIBERTAD

Al momento de entrar en redacción este Boletín, nos


enteramos que el Poder Ejecutivo Nacional accedió en poner en

CCCLXXXVI
libertad a un número de 84 presos políticos, entre los que se
encuentra nuestro compañero Horacio Zamboni. De este grupo,
diez de ellos tomaron el camino hacia el exilio, en distintos países
de América. Horacio decidió su rumbo hacia Perú.
Lástima grande para el SOEPU que pierde, de hecho, a uno de
sus más preclaros colaboradores, en la función de Asesor Letrado
a través de muchos años de labor. ¡Suerte Horacio en el nuevo
camino de tu vida! Te lo deseamos en favor de otros compañeros
en esta otra parte del mundo.-
Boletín Nº 32 - Enero 1975; págs. 8 - 9.-

102.- NUEVOS COMPAÑEROS EFECTIVOS

En los últimos días, han ingresado como efectivos más de 120


compañeros. Esta incorporación es producto de la necesidad de
mano de obra en Planta (sobre todo en tareas de mantenimiento)
que desde mucho tiempo reclamó el sindicato.
El incremento del trabajo será cubierto por nuevos
compañeros que hasta ayer estaban desocupados, y es el fruto de
la actitud de los obreros petroquímicos de no realizar horas extras
desde los primeros meses del año 73.
Esta posición es doblemente ejemplar: por un lado es defensa
del concepto de la jornada mínima diaria, por el otro, es
solidaridad de clase no quitándole la posibilidad de trabajo a
compañeros sin ocupación fija. Aquí están los resultados que a
veces no se ven en la dimensión que tienen. La no realización
de horas extras ha sido ratificada en varias asambleas. Y esa
sería la posición que, por lo menos, la comisión directiva siempre
defenderá, por ser de estricta justicia.-
Boletín Nº 32 - Enero 1975; pág. 15.-

103.- CRÓNICA OBRERA

TRIUNFO EN VILLA CONSTITUCIÓN: Hace muy pocos días termina


una nueva etapa del proceso iniciado hace meses atrás en las
fábricas Acindar, Metcon, Marathon, que recordamos por el duro
golpe que le asestara a la burocracia. Está no escatimó esfuerzos
en tratar de desmantelar por todos los medios a su alcance al

CCCLXXXVII
importante movimiento surgido desde las bases obreras de Villa.
Pero los trabajadores no se engañan, por más solicitadas
millonarias que se paguen, o por las amenazas que se reciban.
Cuando se garantiza el libre ejercicio de la democracia los
resultados son archievidentes. En las elecciones realizadas para la
normalización de la Unión Obrera Metalúrgica de Villa
Constitución, el triunfo de la lista antiburocrática ha sido
aplastante. Los trabajadores, una vez más, votaron por los
propios trabajadores. La Comisión Directiva del SOEPU saluda este
importante triunfo y augura a las autoridades electas y a los
trabajadores metalúrgicos importantes conquistas por el gremio y
la clase obrera.
INDO: En esta fábrica aceitera de Puerto San Martín, se
realizaron recientemente renovación de autoridades. El
sindicato hace años que estaba en manos de la burocracia y
jamás respondió a las necesidades y exigencia de los
trabajadores. La oposición estuvo siempre proscripta y hoy ante la
presión de los trabajadores se vieron en la obligación de
otorgar elecciones. El triunfo de la lista antiburocrática es otro de
los importantes triunfos de los trabajadores de la zona. Sabemos
de la honestidad de los compañeros electos, pero esperamos que
esa confianza que se les depósito sea realmente encaminada a
enfrentar los atropellos de la patronal y a desterrar
definitivamente los vestigios del “rosalismo”.-
PARO DE ACTIVIDADES EN CERÁMICA RÍO PARANÁ: Ante el despido
arbitrario de un obrero de esta fábrica de Puerto San Martín, los
trabajadores realizaron un inmediato cese de actividades.
Tomaron actuación en el problema las autoridades del Ministerio
de Trabajo, ante la requisitoria del Sindicato Ceramista,
lográndose la reincorporación del compañero. La unidad y de
lucha que llevaron a cabo en forma inmediata jalonó este
importante triunfo de los compañeros ceramistas.-
SULFACID: AMENAZA DE MUERTE: En sus intentos de
desmantelar definitivamente la lucha del movimiento obrero, no
cesan las amenazas, atentados y asesinatos contra sus
principales dirigentes y activistas. La ya conocida y triste
organización de mercenarios AAA, amenazó de muerte a los
integrantes de la Comisión Interna, si persistían en su “acción
disociadora”. En la nota aludida se hacía referencia a la Comisión
Directiva del SOEPU y nuestro Asesor Letrado (H. Zamboni). Las
bases de Sulfacid reaccionaron en forma inmediata y una

CCCLXXXVIII
asamblea convocada a tal efecto repudió en forma unánime esta
nueva provocación, brindando la seguridad y solidaridad
necesaria a los compañeros de la comisión interna. En la primera
quincena de enero se realizaron elecciones de comisión interna,
imponiéndose la lista antipatronal y antiburocrática que continúa
la trayectoria de sus últimos dirigentes, demostrando una vez
más, el alto grado de consciencia de los obreros químicos de
Sulfacid.-
Boletín Nº 32 - Enero 1975, págs. 18 - 19.-

104.- CASO ZAMBONI

Para nadie es novedad, que en nuestras notas anteriores


hemos polemizado, más implícita que explícitamente, con las
posiciones sustentadas por el Dr. Zamboni. Esta polémica, la
hemos llevado con altura, franqueza y lealtad.
Pero hoy, Zamboni está preso, y no porque esté (ni se le haya
comprobado) con las pamplinas de los pone - bombas a ultranza.
Está preso, porque en nuestra tierra ha vuelto a desatarse la
cacería del pensamiento. Y no debemos tolerar, sin mengua de
nuestra propia honra, que so pretexto de combatir la “guerrilla”
se detenga a personas por tenencia de libros. El delito de
opinión es algo esencialmente antiargentino, y tiene vigencia con
los conservadores, antes de la asunción del radicalismo en 1916.
Y después de su caída, cuando nació la era del atropello (1930), la
era de la verdad de la subversión hasta en el sentido gramatical
de la palabra, se reinstala la persecución del pensamiento con
fuerte olor a petróleo y a estancias (imperialismo - oligarquía).
Pautas programáticas prometían otra cosa de lo que está
sucediendo últimamente. Y sucede, porque las fuerzas
desplazadas, en 1973, del poder, están copando el gobierno
(con otros nombres desde luego). Así, bajo el embate cavernario y
antiargentino, hemos visto caer a los que se mantenían fieles
al programa prometido. El ministro Righi, cuando advertía a la
policía que había concluido la era de la persecución y la tortura,
otros ministros, gobernadores, etc., y hasta el distinguido doctor
Taiana, médico de cabecera de Perón, ya ha caído. Y ahora,
cuando los intérpretes más fieles del triunfo popular de marzo de
1973 siguen cayendo uno a uno al compás del merequetengue de
la derechización (mal llamada peronización para engañar al

CCCLXXXIX
pueblo) se vuelve a penar al pensar (Prohibido Pensar, sueño
dorado de la oligarquía).
Pero nosotros somos argentinos, y como tales gritamos con el
himno: OID MORTALES EL MITO SAGRADO: LIBERTAD, LIBERTAD,
LIBERTAD.-
Paco Pico
Boletín Nº 32 - Enero 1975; págs. 23 - 24.-

105.- HOMENAJE A MILITARES

Hace algunos meses atrás, el pueblo pudo ver una serie de


actos en el país un tanto inusuales, o por lo menos yo no los había
visto nunca. Para ser más preciso el día 12 de noviembre, los
representantes sindicales, nucleados en la CGT a nivel nacional
realizaron un “Cálido Homenaje al Ejército” a los miembros del
Ejército Argentino caídos en la lucha contra la subversión.
Evidentemente ese acto contó con un marcado tinte político,
dado que los caídos en cumplimiento del deber son numerosos
(lamentablemente) y se debería hacer tantos homenajes como
nucleamientos representan los caídos. Pero en cuanto al matiz,
considero que la mentalidad o el espíritu del ejército no ha
cambiado para nada desde la época de la dictadura militar.
Dijo en esa oportunidad el Secretario General de la CGT,
Segundo Palma: “Este es el Ejército que cumple fielmente con los
postulados de la Constitución, que no rehúsa sus obligaciones ni
pide preferencias y tiene, calladamente, que enterrar a sus hijos,
porque pueblo y ejército están unidos”.
Esto me trae a la memoria un escrito de aquel dirigente
peronista de auténtica valía, hace años fallecido, don John
Williams Cooke, en su libro “Peronismo y Revolución”: “Los que
plantean, para congraciarse con los factores del poder interno y
con los imperialistas, que el peronismo es la alternativa contra la
revolución comunista, no sólo practican la ignominia sino también
la estupidez...”, y “los burócratas que hacen mérito con los
militares sumándose a las patrañas del occidentalismo cristiano
no están atacando a los comunistas, están atacando, en
definitiva, al peronismo como posibilidad y como misión
revolucionaria”.-
David

CCCXC
Boletín Nº 32 - Enero 1975; pág. 24.-

106.- Editorial

Compañeros:
Hace poco más de dos años, los trabajadores y el pueblo
elegimos un gobierno con la gran esperanza de que fuera el
comienzo de las soluciones que anhelábamos, después de tantos
atropellos, de tantas frustraciones. Pero esa esperanza se fue
desmoronando poco a poco, para convertirse en una frustración
más, en una nueva traición al mandato popular.
Hoy, ya no creemos en este gobierno, por más que quieran
convencernos mediante cuantiosos solicitadas, u horribles
discursos de cuanto nuevo ministro asuma, porque son palabras
huecas, porque son carentes de verdad, porque la verdad está en
la calle, en la escuela, en el almacén, en la farmacia, en el
sanatorio. Por qué hay salarios de miseria, hay hambre,
desocupación, analfabetismo, represión, asesinato, cárceles,
miedo, terror.
Porque los insultos y la bronca de los compañeros, que se
expresa día a día, contra la patronal, contra el gobierno, nos dicen
a la claras el sentir del hombre de trabajo, del hombre del pueblo,
sin entrar en falsas especulaciones intelectuales.
¿Qué más resta decir? La situación es verdaderamente difícil,
pero no debemos escaparle a esa realidad, aunque a veces la
tentación de evadirnos de ella sea grande. A esa realidad
debemos enfrentarla, pero enfrentándola para modificarla,
estrechando filas, uniéndonos, hoy más que nunca, conversando,
luchando, buscando el camino que corresponda para cada
situación, dándonos sobre la marcha la organización que nos hace
falta y nos lleve a construir, definitivamente, nuestro destino
como hombres libres, felices y fraternos.
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; pág. 1.-

107.- LA CRISIS

La contradicción de intereses entre, las empresas


imperialistas y la oligarquía terrateniente por un lado, y los

CCCXCI
intereses de las mayorías nacionales por el otro, ha llegado a un
grado de exasperación que sólo puede resolverse de dos maneras
posibles: o la clase obrera y otros sectores nacionales avanzan
unitariamente por el camino de la liberación nacional terminando
con la dependencia y el latifundio y sentando las bases de una
gran democracia nacional y popular, o el imperialismo y los
terratenientes mantienen y ensanchan sus privilegios mediante
un régimen sanguinario y fascista.
Para entender esta cuestión es necesario mirar
retrospectivamente las políticas económicas que se
implementaron desde el 11 de marzo de 1973.
La gestión Gelbard ha sido una de las más discutidas y acaso
contradictorias a un cierto nivel. Por un lado estaba signada por el
Pacto Social que según se lo interpretara embretaba a la clase
obrera en cuanto a sus reivindicaciones inmediatas. Pero también
tenía un aspecto positivo desde el punto de vista de los intereses
nacionales considerados globalmente. En este aspecto la política
Perón - Gelbard se caracterizó por:
1.- El intento de un mayor control de las empresas líderes
(150) que controlan el mercado y materias primas (en su
mayoría son empresas de capitales extranjeros). Este control se
operaba en los costos y fijación de precios, en el porcentaje de
ganancia que el capital extranjero podía mandar al exterior. En
una palabra: las empresas extranjeras ya no podían hacer lo que
querían. Los monopolios, nada tienen de ingenuos saben lo
que esto significa para ellos, por eso respondieron con el
desabastecimiento, el mercado negro y el contrabando.
2.- La cuestión agraria se caracterizó por un enfrentamiento
más abierto con la oligarquía terrateniente. El proyecto de Ley
Agraria (aún duerme) fue resistido por la Sociedad Rural que lo
acusó de “colectivista”.
3.- En las relaciones internacionales se busco nuevos
mercados, la ampliación efectiva de las importaciones, y la firma
de acuerdos muy beneficiosos para el país.
Resumiendo: El equipo económico del General Perón con
Gelbard a la cabeza, se orientaba hacia la recuperación del
poder de decisión por parte de la Nación.
No se puede decir lo mismo de los que le siguieron. A la
aplicación del estado de sitio, en el ojo de la democracia, el
control de la educación y medios de comunicación por parte de
grupos fascistizantes, y el brutal incremento de los crímenes

CCCXCII
políticos, acompañó una orientación adversa a los intereses
nacionales. Después de Gelbard, hemos tenido cuatro ministros
de economía, de los cuales tres viajaron a los EE.UU., reincidiendo
en actitudes que anteriormente no habían solucionado el sub-
desarrollo sino que terminaron encadenando aún más al país a la
dependencia. Invocando una supuesta crisis mundial, que
técnicamente no es más que la crisis del sistema capitalista
mundial, el ministro Rodrigo provocó un desmesurado aumento
de los precios, e invocando irónicamente los intereses
nacionales, quiso implementar una política salarial de hambre e
infraconsumo. Son conocidas las consecuencias que tuvo esta
política. La clase obrera a la cabeza, junto a otros sectores
nacionales, consiguieron el desplazamiento de Rodrigo y de casi
todo el grupo Lopezreguista, o sea, de los grupos más
fascistizantes y pro imperialistas. Sin embargo, si bien se logró un
desplazamiento de personas y la firma del convenio salarial más
acorde con las necesidades, no se ha logrado que variara
fundamentalmente la política económica. A una situación de
zozobra e improvisación, el nombramiento de Caffiero pareció
señalar el inicio de una nueva etapa. Pero, el nuevo equipo
económico no ha presentado todavía a la Nación un plan global
que contemple esencialmente los intereses nacionales.
Mientras tanto, en los sectores que sustentaron el plan
Rodrigo (el imperialismo y la oligarquía terrateniente), han
recuperado el poder de decisión y el espacio que parecieron
perder durante la gestión Perón - Gelbard. Imponen sus precios y
condiciones. Permanentemente se devalúa la moneda y se
contrae el mercado interno, ahogando a la pequeña y mediana
empresa la cual tiene que prescindir de mano de obra, con lo que
se incrementa la desocupación. Caffiero ha conseguido créditos
sólo para cumplir con las obligaciones internacionales hasta fin de
año. Mientras tanto, la situación de crisis, inflación, desocupación
y carestía no se resuelven. Se continúa con el estado de sitio, y
en las cárceles hay miles de ciudadanos sin causa. Los
asesinatos del fascismo eligen sus víctimas entre obreros,
estudiantes, políticos progresistas, etc., o sea entre los mejores
representantes de la clase obrera y el pueblo. El insensato
accionar de la guerrilla parece haber servido de luz verde para
reprimir, encarcelar y asesinar al movimiento obrero y popular.
Significativamente, los encargados por mandato de las mayorías
de asegurar la tranquilidad interior y la vigencia de las leyes y las

CCCXCIII
instituciones democráticas, parecen olvidarse de los sádicos
asesinatos de la ultraderecha. ¡No hay en las cárceles un solo
subversivo fascista! Sin embargo, los obreros y dirigentes
asesinados por el fascismo durante sólo doce meses, superan la
escalofriante cifra de 500 personas. Los encargados de mantener
la paz y la seguridad interior de acuerdo a la Constitución y las
leyes, tampoco parecen darse cuenta de la fragilidad de una
situación donde convergen el sádico y planificado accionar de las
bandas fascistas, con su secuela de angustia, intimidaciones e
intranquilidad pública, y las durísimas condiciones económicas
que imponen los privilegios imperialista.
En este peligroso momento de la vida nacional, el que calla
otorga. Y si aquellos que tienen el deber y la obligación de velar
por los ciudadanos, por su integridad y seguridad, ignoran a las
bandas fascistas que asuelan el país, es porque éstas tienen
instigadores y protectores muy poderosos. Tanto que no vacilan
en imponer sus privilegios aún a costa de la sangre y el hambre
del pueblo. Tan poderosos que no vacilan en pisotear la
Constitución e imponer un régimen de arbitrariedad y terror para
mantenerte e incrementar sus ya fabulosas ganancias.
El cambio de hombres a nivel institucional, no ha traído
aparejado hasta el momento un cambio real de política. Los
enemigos de la República también cabalgan sobre el desastre que
esta situación sufren dirigentes y políticos, acaso bien
intencionados, pero que hasta el momento no han atacado con
decisión las causas de la dependencia y la crisis. La preservación
de las instituciones y la tradición democrática pasa por terminar
con los factores de irritación y desequilibrio. ¿Cuáles son esos
factores? Una mirada parcial podría decir: la guerrilla. Sin
embargo, además de la guerrilla, condenable desde todo punto
de vista, lo actores de perturbación son más profundo a una
mirada simplista. Y hacen a la contradicción entre los intereses
del imperialismo: subdesarrollo, desocupación, inflación, carestía.
Queda claro que los partidos, personalidades, sindicatos, e
instituciones en general que se pronuncian a favor de las
instituciones democráticas, no pueden quedarse en las simples
palabras, sino que deben proceder con hechos económicos,
políticos y sociales, a garantizar efectivamente las instituciones y
la seguridad del pueblo, en sus más variados aspectos. El tiempo
urge. La conspiración imperialista está funcionando a todo vapor.
Quedarse en las palabras, en las promesas en este momento, es

CCCXCIV
traicionar a la República y facilitarles el camino a los que están
proyectando para la Argentina un baño de sangre y un régimen
de terror tremendo y de superexplotación. El terrorismo impune
así lo está presagiando.-
Colaboración: Paco Pico
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; págs. 2 - 4.-

108.- CONTRA LA ESCALADA DEL TERROR Y EL


MATONAJE

La escalada terrorista que invade el país, y que


invariablemente ha quedado impune (jamás se encontró un
asesino a sueldo del imperialismo). Los asesinatos, cárceles,
invención de falsos complots, secuestros, amenazas a auténticos
exponentes del arte popular, a políticos, etc.. Las amenazas a
nuestro asesor letrado y a uno de nuestros dirigentes, las
amenazas a un dirigente de los obreros de Sulfacid y su familia, la
inmolación del joven compañero José Polenta, en fin, todo ese
poder reaccionario, muy parecido a los momentos previos de la
toma del poder por Hitler en Alemania, nos mueve a hacer estas
consideraciones.
No podríamos comprender la existencia del terrorismo y el
matonaje impune, sin entender el poder que lo nutre. Aquéllos
son sólo partes de un conjunto. Hay que conocer este conjunto a
fondo para descubrir la maniobra. No se trata de fanáticos que en
su delirio torturan y matan. Se trata del poder que se ha ido
montando para mantenerse cualesquiera sean los personajes
nominales de los gobiernos. Este es el continuismo.
El aparato estructurado larga y pacientemente en la Argentina
por la oligarquía terrateniente y los monopolios imperialistas,
concebido como el poder permanente y efectivo a espaldas de
cualquier gobierno público. Por eso la dictadura militar pasada,
decía que el gobierno surgido del 11 de marzo de 1973 iba a ser
de transición, en buen romance: controlado por ese poder. Y
como ese gobierno, junto a muchos elementos ligados a ese
poder, llegaron también fieles intérpretes del sentir popular y
democrático del pueblo, comenzó el proceso de aniquilamiento y
desarticulación de los sectores fieles al compromiso electoral
contraído, no escatimando medios. Mackartismo, bombas,

CCCXCV
asesinatos masivos como el 20 de junio en Ezeiza, voladura de
locales del Peronismo Auténtico, del Partido Comunista, de la UCR
o del PST, etcétera. Cuando Righi, el primero de los ministros del
inte-rior del gobierno surgido de 11 de marzo de 1973 reunió a los
altos bonetes de la policía federal para señalarle que la
persecución por ideas políticas, la tortura y la represión
antipopular, junto con los prontuarios y listas negras habían
concluido, su destino estaba sellado. A los pocos días caía.
Es claro que el avance reaccionario pudo haberse enfrentado
y derrotado con las masas, pero la incomprensión de las distintas
variantes pequeño burguesas de la ultra izquierda y de los
propios participantes del gobierno lo impidieron. Pero esto es ya
tema de otra reflexión que quizás en alguna oportunidad
abordemos.
Desde 1930, y especialmente con los gobiernos de turno o a
pesar de ellos, se ha ido forjando un poder político - militar y
policial cuyo objetivo fundamental es impedir, trabar o deformar
el proceso democrático y revolucionario.
Y ese poder ha ido elaborando su propia ideología, y nada de
lo que ocurre en el plano político y jurídico se entiende sin el
conocimiento cabal de esa fuerza proyectada, además al plano
latinoamericano (la película Estado de Sitio es suficientemente
elocuente como para que abundemos en detalles).
Tras la quiebra de la democracia formal en 1930, se va
conformando un estado represivo fascistizado y crecientemente
militarizado, no porque militares estén o no en el gobierno, la
militarización es de contenido, de estrategia y táctica, de fines y
medios.
Es muy importante la caída del clan Lastiri - López Rega,
porque fue un duro golpe a ese aparato. Pero ellos eran meros
engranajes del mismo. La lucha debe continuar hasta destruir ese
poder, y para ello hay que crear la fuerza unitaria capaz de
hacerlo. Es notorio como ese poder oculto ha barrido gobiernos
elegidos y no elegidos. Nos enfrentamos a ese COMPLEJO decidido
a mantenerse a cualquier precio. Y ese poder sólo puede atacarse
y derrocarse a través de una fuerza unitaria resuelta a emprender
un cambio de fondo. No es una simple cuestión táctica. Sólo
creando esa fuerza (llámese como se llame) podrá superarse la
situación reaccionaria existente. Fuerza unitaria con la clase
obrera al frente. Lo demás, llámense zorros, tarzanes, o palabras
estridentes de la pequeña burguesía enfurecida, no será más que

CCCXCVI
enfurecimiento ineficaz. Y en el camino de la destrucción
definitiva de ese poder oculto, debemos imponerle su retroceso
en cada batalla a través de las movilizaciones contra sus
desbordes.-
Colaboración: Paco Pico
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; págs. 5 - 6.-

109.- QUIÉN DEBE PAGAR ESTA CRISIS?

Leyes económicas que se cumplen inexorablemente, hacen


que hoy vivamos en una de las más profundas crisis de la historia.
Cada uno de los sectores que conforman nuestra sociedad,
de acuerdo a los intereses que representa, opinan acerca de
cuáles fueron las causas y cuáles deben ser las medidas a tomar
para su solución. Falta una voz, es la voz de la clase obrera,
porque los obreros por ahora no hablamos: hacemos. Hay muchos
que dicen ser nuestros representantes y pactan por arriba con los
patrones y el estado: pacto social, economía concertada, etc.
Las gloriosas jornadas de julio muestran lo poderosos que
somos cuando nos decidimos a luchar por nuestros intereses.
La producción del país, en esos días, bajo considerablemente
cuando al gobierno se le ocurrió sacarnos lo que habíamos
conseguido en la lucha, salimos a la calle y como un solo hombre
expresamos nuestra bronca gritando consignas contra nuestros
circunstanciales enemigos: López Rega - Rodrigo, etc..
Patrones, burócratas, milicos y gobierno temblaron, marchas y
contramarchas, comunicados, reuniones, trataron de parar esta
incontenible demostración de fuerza y combatividad. No lo
consiguieron. Triunfo parcial de la clase obrera. Fue parcial
porque el enemigo está asustado, pero en pie.
Ya están reacomodándose: licencia presidencial, cambios de
ministros, arreglos entre partidos, discursos, palabras y más
palabras, con un solo objetivo: Que la crisis la paguen los
obreros.
Hace tiempo venimos escuchando que tenemos que producir
más, como si fuéramos vagos, como si todo lo que nos rodea
fuese hecho por arte de magia. Nosotros estuvimos y estamos
produciendo. Los patrones estuvieron y están haciendo sus
negocios y manejando la economía para su provecho. Para ello
diversos fueron las fórmulas que emplearon. Las dos más

CCCXCVII
recientes: 1) Control estricto de precios y salarios a niveles que
permitan el aumento del margen de las ganancias (Gelbard); 2)
Aumento de precio y congelamiento de salario (Rodrigo).
Las dos fracasaron y es por eso que hoy se debaten en una
gran polémica entre sectores que les conviene una u otra política,
sin perder de vista su objetivo principal: mayor explotación de la
clase obrera. En otras palabras están buscando la vuelta para ver
como política y militarmente nos hunden en la miseria para poder
salvar sus capitales.
Ante todo esto debemos estar alertas y firmes en la defensa
de nuestras conquistas y la lucha por nuestras reivindicaciones.
Para no caer en las trampas que nos tienden los patrones, no
debemos cometer el error de pretender conseguir cosas por la
individual o por sectores.
Fuertemente unidos, junto al resto de la clase obrera,
discutiendo y decidiendo en asambleas democráticas, sin delegar
en otros lo que nosotros mismos debemos resolver, nos
fortalecemos cada vez más para responderle a la patronal ante
cada atropello y a las bandas armadas ante cada amenaza.
Los petroquímicos hemos demostrado de lo que somos
capaces de hacer: recordemos la presencia masiva en el
Ministerio de Trabajo, la recorrida de las fábricas, las
manifestaciones en Rosario. Por ese camino iremos marchando,
hasta derrotar a nuestro enemigo, haciendo pagar la crisis a los
verdaderos culpables: LOS PATRONES.-
Colaboración: AA
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; págs. 7 - 8.-

110.- LA VIOLENCIA

Si revisamos un poco la historia de las luchas obreras, vemos


que todos los tiempos de crisis del capitalismo, cuando los
trabajadores luchan en resistencia a la inevitable mayor
explotación del capital sobre el trabajo como forma de salir de
dicha crisis, surgen y se desarrollan al máximo los grupos
armados parapoliciales y paramilitares con las más variadas de
las funciones: desde la represión directa de las movilizaciones,
amenazas, persecuciones, secuestros, torturas y asesinatos
salvajes a los obreros más destacados en las luchas diarias.

CCCXCVIII
En Argentina, esta acción de los “custodios del orden de la
forma occidental y cristiana de vida”, contra los cuadros más
salientes del movimiento obrero, aparece encubierta, confundida
con una lucha de organizaciones clandestinas, “la extrema
derecha contra la extrema izquierda” a decir de todos los
sectores de la burguesía y todos los factores de poder: gobierno,
ejército, políticos, etcétera.
El Estado y las fuentes de información controladas por la clase
capitalista, se cuida de distinguir las víctimas del terrorismo, ya
sea un guerrillero muerto en un enfrentamiento o un delegado o
activista obrero secuestrado o asesinado. La opinión pública
asombrada y aterrada por la aparición diaria de cadáveres
mutilados, generalmente sólo identificados por el nombre de las
víctimas, termina concluyendo de la misma forma que el Estado
en la valoración de esa violencia. “La violencia guerrillera, con los
secuestros o ejecución de empresarios o militares y con los
atentados terroristas, provoca la reacción contraria, la de las 3 A,
la de los grupos encapuchados”, y terminan diciendo: “La
violencia engendra la violencia. Condenamos la violencia”. Y así
llega la confusión. Parece que es lo mismo, por un lado, la
violencia producto de los enfrentamientos de las organizaciones
guerrilleras con las fuerzas de represión legales y no legales, en
un enfrentamiento en el cual la clase obrera toma una actitud de
espectadora.
Por otro lado, la violencia a la que tiene derecho natural no
aceptado por las leyes la clase obrera y los sectores oprimidos,
para defenderse de los ataques, o para encarar la resistencia a la
explotación del capital, violencia institucionalizada en la sociedad
capitalista, reflejada en los muchos que tienen poco, en los pocos
que tienen mucho, en los desocupados, en las villas de
emergencia, en el hambre, en la enajenación de los hombres
productivos, en definitiva, en la explotación del hombre por el
hombre.
Desde este punto de vista los trabajadores siempre se han
pronunciado en contra de los atentados terroristas. No se trata de
eliminar a un burócrata traidor, o a un militar represivo.
El sistema tiene hombres de recambio que presionarán de la
misma forma, o que reprimirán con mayor saña. Son las
estructuras las que hay que cambiar, la forma como los hombres
deben organizarse para la construcción de una sociedad justa. El
arma que tienen los trabajadores es la participación directa y la

CCCXCIX
democracia permanente. Cuando la clase se organiza y marcha,
no hay burócratas que la frenen, pasan a ser hombres
insignificantes y despreciables. No es necesario eliminarlos
porque se eliminan solos.
Contra la represión directa de la policía, del ejército o de las
bandas paralelas, los trabajadores tenemos el elemental derecho
a la defensa por los métodos que decidimos más convenientes. La
historia con mayúsculas la marca la lucha proletaria. Es nuestra
clase la gestora de los cambios sociales y ninguna agrupación
puede suplantarla ni atribuirse su representación. La voluntad de
los trabajadores decidirá su sumisión a la opresión del capital, o la
culminación de la lucha iniciada hace más de 200 años con su
emancipación definitiva, las condiciones irán madurando producto
de la agudización cada vez más grande de la crisis. Dicha
emancipación traerá la paz, también con mayúscula, para los
oprimidos y la sociedad toda, con el recuerdo de los hermanos de
clase y compañeros caídos.-
Colaboración: Roque
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; pág. 9.-

111.- COORDINADORA DE GREMIOS EN LUCHA

Los trabajadores petroquímicos ante la noticia de que no se


homologarían las convenciones colectivas de trabajo y se daría un
aumento por decreto del 50 %, ganamos la calle para defender
con nuestra lucha lo que la clase dominante pretendía quitarnos
con la lapicera. En esas jornadas nos encontramos en la calle
con miles de trabajadores de distintas ramas de la
producción, y codo a codo luchamos hasta abortar la política
económica, arrancando de los resortes del poder a los
ministros del hambre popular. Pero los salarios conseguidos en
las paritarias van perdiendo día a día su poder adquisitivo ante el
incesante alza del costo de la vida, que se refleja en el aumento
de tarifas e impuestos, gas, electricidad, materiales de
construcción, ropa, útiles escolares, y todos los artículos de la
canasta familiar, etc.. Se nota también en la quiebra de los
pequeños productores, en la paralización de los planes de
vivienda, en el estado calamitoso de los hospitales,
desabastecimiento, en la inflación que ha alcanzado porcentajes

CD
que van desde el 200 % al 450 %; en la gran cantidad de
desocupados, que genera una mayor oferta de mano de obra y
por consiguiente una constante desvalorización de la misma; en
la supresión de las libertades democráticas; manteniendo el
Estado de Sitio, que hace que compañeros como Piccinini,
Ongaro, Zamboni, etc., deban permanecer presos o irse del país
sin haber cometido otro delito que defender los intereses de la
clase trabajadora. En la intervención a sindicatos democráticos,
Luz y Fuerza, Smata (Cba.), UOM -Villa Constitución, Cetera
(Nacional), etc.. Se aprecia que nuestra victoria fue parcial en
nuestros compañeros más representativos y honestos que han
regado con su sangre el camino de nuestra emancipación
definitiva, mudos testigos de la represión y la barbarie a la que
nos somete la clase dominante. Todo lo expuesto deja
meridianamente claro que la crisis social política y económica día
a día se agudiza. Por ello se hace necesario que los
trabajadores coordinemos nuestras luchas, que nos unamos,
a los efectos de que, unidos y organizados demos por tierra
con todos los intentos del gobierno, burocracia sindical,
milicos y explotadores, de sumergirnos en la miseria física y
social que han programado para nuestra clase, y que se viene
cumpliendo tal cual lo detallamos sintéticamente en los párrafos
anteriores. Con ese pensamiento y esa necesidad y como
consecuencia de las luchas de julio, la C.D. del sindicato
petroquímico junto al frente gremial docente, compañeros de John
Deere, Hanomag, Construcción, UPCN, Judiciales, Municipales,
Bancarios, Mercantiles, Metalúrgicos, Sanidad, Duperial,
Ceramista, Vilver (V. Constitución y Rosario), Sulfacid, etc.,
constituyendo la Mesa Provisoria de la “Coordinadora de Gremios
en Lucha” y sigue trabajando para la conformación definitiva de la
misma.
“SI LOS PATRONES COORDINAN PARA EXPLOTAR, LOS
TRABAJADORES COORDINAMOS PARA ERRADICAR LA
EXPLOTACIÓN”.-
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; págs. 10 - 11.-

112.- MAMÁ, PAPÁ, MAÑANA NO HAY CLASE

Cuántas veces escuchamos estas palabras en lo que va del


año? A nuestras preocupaciones se suma la alegría de los chicos
que pueden jugar todo el día, hacer sus travesuras, olvidarse del

CDI
guardapolvo blanco.
Por qué las medidas de fuerza de los maestros? Nadie hace
nada para solucionar el problema existente?
A nadie le importa la educación de nuestros hijos? Qué pasa
en realidad? Hasta no hace mucho, ser maestro significaba tener
cierto estatus, cierta jerarquía, pero el tiempo de fue quitando
esas “falsas” diferencias para quedar ubicados definitivamente en
el lugar de trabajadores de la educación, pero Trabajadores, con
todos sus padecimientos y miserias.
Las sucesivas crisis que viene atravesando el país y la cadena
de atropellos muy especialmente, los ha llevado a la lucha por
sus más preclaros derechos y reivindicaciones. Sueldos de miseria
(maestro: $ 1.890, más 100 % sobre sueldos de mayo), sistema
escalafonario obsoleto, pagos con inconcebibles retrasos,
descuento compulsivos para UDA, no reconocimiento de la de la
organización gremial CTERA (Confederación de Trabajadores de la
Educación de la República Argentina) de incuestionable
representatividad.
Los trabajadores de la educación no sólo luchan por mejores
salarios, luchan para que la educación esté al servicio del pueblo
en el proceso de liberación por eso exigen, además:
*.- Un presupuesto educativo que satisfaga las necesidades de
infraestructura escolar: edificios con las mínimas condiciones de
higiene y salubridad, aprovisionamiento de muebles y útiles
indispensables bancos, material didáctico, tizas, libretas, registro,
etc..
*.- Una ley de educación elaborada con la participación de los
trabajadores de la educación y demás sectores populares.
*.- Una distribución equitativa y justa del presupuesto
educativo y de eliminación de asesorías y comisiones que
absorben gran parte del mismo y sólo tienden a justificar su
existencia sobrecargando de tareas administrativas burocráticas
a los inspectores y directores, que se ven obligados así a
descuidar las tareas específicas docentes.
Los trabajadores petroquímicos decíamos que nuestros hijos
tengan la educación que les corresponde. Pero también estamos
junto a la justa lucha de los maestros, como estuvimos con ellos
en otras tantas jornadas heroicas. Hoy los compañeros maestros
no sólo enseñan en el aula, enseñan en el paro, en la
movilización, en la barricada, en el ejemplo. Enseñan con su
unidad, con su organización, con su lucha.

CDII
¡Adelante, compañeros de la educación!.-
Boletín Nº 33 - Octubre 1975; pág. 12.-

113.- HORAS EXTRAS

En PASA, de acuerdo a nuestro convenio y a las modalidades


de trabajo de esta industria, existen dos posibilidades distintas de
prolongación de la jornada de trabajo normal: en las voluntarias,
que puede realizar el personal de mantenimiento por simple
exceso de trabajo para completar trabajos atrasados prolongados.
Las que puede realizar el personal de operaciones y laboratorio
en forma voluntaria, por ejemplo quedándose en la ausencia de
un supervisor, o también por exceso eventual de trabajos (en
paradas, etc.).
Las involuntarias o por falta de relevos, que afecta solamente
al personal de Operaciones y Laboratorio, que de acuerdo al
artículo 18 del convenio, existe una obligación de cubrir las
ausencias producidas por falta de relevo, cuando no hay pooles
libres.
Hecha esta aclaración, pasemos a analizar la historia de las
horas extras en PASA. En marzo de 1973, fue aplicada esta
medida como una forma de lucha por reivindicaciones y con el
correr de los meses fueron logradas o desvirtuadas. Las horas
extras involuntaria o por falta de relevo se continuaron
realizando siempre. Varias asambleas posteriores a la del año 73,
ratificaron la posición de no hacer horas extras voluntarias,
cambiándose poco a poco la idea de que era una forma de lucha,
por la de que era una cuestión de principio (principio de defensa
de la jornada mínima de 8 horas, principio de solidaridad de clase
al no desplazar en la posibilidad de trabajar a otro compañero
desocupado). La no comprensión de esto último, y la necesidad
de aumentar los ingresos mensuales insuficientes por el
incremento permanente del costo de la vida, lleva a muchos
compañeros de mantenimiento a impulsar una asamblea para
levantar la no realización de horas extras, y para que todos los
petroquímicos tengamos la posibilidad “de hacernos unos
pesitos” más a fin de mes.
Y en este sentido se hacen diferenciaciones entre Operaciones
y Laboratorio, que hacen extras por falta de relevos, la gente de
Cimolai y Vega, y la supervisión que las hace sin límites, con el
personal en convenio de mantenimiento. La última asamblea

CDIII
volvió a tratar este tema, y la decisión mayoritaria fue la de
mantener la quita de horas extras voluntarias aclarando que no
se trata de una forma de lucha, sino de una determinación de
principios. Para disminuir al máximo la posibilidad de tener que
quedarse por faltas de relevo, incrementar la dotación del cuerpo
de volantes tres o cuatro que hay actualmente a seis por turno.
Invitar a través de panfletos a los compañeros empresas
contratistas y dirigir al sindicato que los agrupa una nota pidiendo
que hagan suya la posición tomada por los petroquímicos.
Por otro lado era y sigue siendo necesario una propaganda
más amplia de esta postura que es ejemplar dentro del
movimiento obrero. Por último, aclara también que la mayoría de
los compañeros de operaciones y laboratorio sobre todo los que
tenemos varios años de trabajos en turno, estamos cansados de
nunca saber con certeza si a las 0 horas nos vendrá o no el
relevo. Nada se puede planificar con seguridad, cualquier
programa se puede frustrar.
Por todo esto, los seis pooles por turno se transformaron en
una necesidad por la cual habrá que luchar ante la negativa de la
patronal. Es necesario discutir esto en asambleas por turnos para
decidir las medidas a adoptar y así ganar el derecho de la jornada
máxima de 8 horas.
Respecto de la forma de como fin de mes llevar un sueldo que
nos alcance para satisfacer nuestras necesidades, existe una
fórmula justa y necesaria: la lucha salarial, que pronto, por no
decir ya, tendríamos que haber encarado.-
Boletín Nº 33 - Octubre 1975;
pág. 13.-

114.- Editorial

Compañeros:
En la culminación del año, ya no hace falta repetir slogans, ni
echarle la culpa a los agentes del caos y del desorden para
justificar los males que todos padecemos.
Quienes nos gobiernan ya han probado todo. Y no han
solucionado nada. Por lo menos para el pueblo. Ya que para sus
bolsillos pareciera que sí. Y cada día que pasa el país se sigue
empobrecido más, endeudado, desorientado, desesperanzando.
Y la crisis que nos carcome a todos los niveles, con los magros

CDIV
salarios, con el desabastecimiento, con la desocupación, con la
inflación, que nos coloca a los trabajadores en situaciones
angustiosas en la que las necesidades más elementales no
alcanzan a ser satisfechas.
Observamos atónitos, además, casi impotentes diríamos, todo
la violencia en la cual hoy estamos todos inmersos. Numerosos
hijos del pueblo se encuentran detenidos, o torturados, o
salvajemente asesinados o emigrados a otros países.
La más mínima protesta es brutalmente reprimida. La libertad
que tanto se declama, ya no existe entre nosotros. Los militares
en las calles, en nuestros hogares, en las fábricas decoran este
triste paisaje.
Y frente a todo esto los trabajadores no pudimos callar,
aunque muchos tuvimos que apretados dientes y morder la
bronca el silencio frente a las balas, el terror y la represión. Y aún
así se hicieron jornadas heroicas como las de Villa Constitución, o
con las movilizaciones de julio de las cuales fuimos protagonistas,
o como la lucha de Sierra Grande en el Sur, o como los cientos de
conflictos que se sucedieron en reclamo de mayor justicia. Éstas
fueron las respuestas rebeldes que dio la clase obrera en este
1975.
Y junto a nosotros sufriendo similares consecuencias
estuvieron los trabajadores rurales, los campesinos, los pequeños
comerciantes, los profesionales, los intelectuales, los estudiantes.
Pretender enumerar los continuos desaciertos producidos, la falta
de autoría política, el deterioro moral, etc., requeriría cientos de
páginas. Pero sólo en esta nota editorial pretendemos sintetizar
los principales descalabros que todos conocemos porque los
vivimos juntos día por día.
No queremos desear felicidad a los compañeros en este año
nuevo que se inicia. Porque la felicidad es imposible mientras
exista este sistema injusto. Pero si queremos transmitir aliento,
coraje en estos momentos tan difíciles, para todos los
compañeros petroquímicos, para los compañeros presos que
pagan en las celdas el delito de ser leales a su clase, a los
exiliados, a los desocupados, a los despedidos, a todos los
trabajadores y todos aquellos que sin serlo están en el campo del
pueblo y en contra del opresor y en favor de la liberación de los
oprimidos.
Aliento para librar nuevas luchas y sin miedo, en ese largo
camino para construir todos juntos nuestra propia felicidad, la de

CDV
nuestras familias, la de nuestros hijos. Para este 1976. Para 1980.
O para el futuro no muy lejano.-
La Comisión Directiva
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; págs. 1 - 2.-

115.- CONTAMINACIÓN

Mucho se habla de la contaminación, la contaminación de


mares y de ríos, de las distintas capas inferiores de la atmósfera,
de su peligro para la vida humana. Pero en este tema, como en
otros, la ciencia demuestra su vinculación inmediata con los
distintos intereses que se ponen en juego en virtud de la
economía.
En primer lugar, se oculta un problema fundamental: son los
países altamente desarrollados quienes, a pesar de su capacidad
tecnológica han polucionado sin miramiento mares y océanos,
lagos interiores y atmósfera de sus propios países, rompiendo en
muchos casos el equilibrio ecológico. Pero si ellos arruinaron de
esa manera sus propios países, imagínense, compañeros, lo que
habrán hecho en los países donde radican sus industrias, en los
países del tercer mundo. No hace falta imaginación:
Hace un tiempo recuerdo el espectáculo de un barrio entero,
en Puerto San Martín, que se levantó contra el método asesino de
radicar industrias sin tener en cuenta los habitantes de la zona,
cuando un niñito cayó en un arroyo infectado de petróleo y
derivados y dada su consistencia se ahogó.
Otro tanto ocurre con el aire, al que se arrojan sin
miramientos de ninguna especie miles de partículas que van a
parar, inexorablemente a nuestros pulmones. La nafta, al entrar
en combustión lanza gases que también son tremendos y actual
peligro para nuestros pulmones. Es decir, a pesar de que también
hace mucho que se conoce el tema de la polución, en nuestra
zona, por ejemplo, no se tomaron los requisitos mínimos para
evitar el lento envenenamiento de los habitantes.
En una palabra, un sistema de explotación de la riqueza que
tiene como meta el lucro, termina por producir, en los hombres y
en la naturaleza, efectos devastadores. Lo que le importa al
inversor son sus dividendos, lo que le importa al ejecutivo es el
aumento de la producción y la conquista de los mercados, lo que

CDVI
le preocupa al ministro de economía es el producto bruto
mentirosamente per capita. Los que tienen la manija de la
sociedad planifican en virtud de esos intereses, olvidándose que,
como en la antigua fábula, matan la gallina de los huevos de oro.
Para terminar con la polución hay que recurrir a un nuevo tipo
de economía, centralmente planificada, que tenga en cuenta en
forma íntegra al hombre.
En los marcos de una economía de saqueo de los recursos
naturales del tercer mundo, y de despilfarro de las fuerzas de la
naturaleza, impuesta por la etapa de la sociedad capitalista de la
sociedad de consumo es imposible siquiera corregir el problema
de la polución ambiental y terminaremos destruyéndolo todo.
Esta es la verdad del problema de la polución del mesoclima
industrial. Para este tipo de contaminación, que es la más
publicitada a nivel de los medios de comunicación de ninguna
manera es la más importante teniendo en cuenta la peligrosidad
que reviste. En efecto, la contaminación de los microclimas
industriales, causados por el polvillo, las emanaciones, los
vapores y radiaciones calóricas y de todo tipo, y tienen lugar
dentro de los establecimientos fabriles son un problema mucho
más agudo e importante y sin embargo silenciado, brutalmente
ignorado. En efecto, la ley que trata de implementar los medios
para su erradicación no tiene ninguna aplicación.
Los problemas genéticos, biológicos, las miles de
enfermedades que lo tienen por causa, continúan haciendo presa
de los trabajadores ante la casi indiferencia de los encargados de
evitarla.
Es necesario asumir una actitud clara y responsable ante el
problema de la contaminación:
Exigir la aplicación de la ley
Exigir se tomen las medidas adecuadas para asegurara la vida
de los trabajadores en nuestras insalubres fábricas
Dar adecuada publicidad al problema dentro de los medios
con que contamos
Promover entre los trabajadores una adecuada conciencia del
problema para convertirlo en una reivindicación sentida, capaz de
movilizarnos por uno de los bienes más precarios que “tenemos”
(o perdemos): nuestra salud.
Es necesario que los sindicatos, las comisiones internas, las
municipalidades, el gobierno, se hagan cargo del terreno, porque
es mucho más peligroso de lo que todos imaginamos. No es

CDVII
posible trabajar “comiendo” radiaciones, ruido, polvillo, aerosoles
en suspensión, emanaciones, vapores, a la corta o a la larga.
Una vez más debemos encarar esta lucha dentro del marco de
la lucha global para el cambio dentro de la sociedad, porque esta
situación inhumana tiene su origen en el sistema injusto que nos
rige y que no le importa con tal de aumentar sus fabulosas
ganancias si nos morimos de hambre o asfixiados por el humo
dentro y fuera de las fábricas. Por ello debemos coordinar tareas
entre los compañeros de las fábricas y barrios más castigados por
el problema y extender la iniciativa a sectores más importantes
de trabajadores, profesionales, etcétera, intentando comprometer
en su acción a los sindicatos, al gobierno, etc..-
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; págs. 3 - 4.-

116.- AQUÍ, AYER, HOY. ¿MAÑANA?

- Un grupo atacó una guarnición militar en el norte.


- ...Me sacan a empujones como diez hombres armados.
Afuera hay otros tantos...
- Fue incendiado un importante órgano de prensa de esta
capital.
- ...Me golpean la cabeza en varias oportunidades...
- Ante sentencia de muerte abandonan el país un grupo de
artistas.
- ...Tengo miedo. Por primera vez siento de cerca la muerte.
- Poderosa bomba estalló en la casa de un dirigente sindical.
- ...Me vendan los ojos. Me atan las manos tras la espalda. Ya
el auto está en marcha.
- A un costado de la autopista se halló el cuerpo de un joven
acribillado a balazos.
- ... Tengo una herida en la cabeza de la cual brota
abundante sangre. El viaje ya me resulta interminable...
- Atentaron contra una docente y se realiza un paro de
repudio.
- ...Tengo algunos vómitos de bilis. Estoy temblando. Me
vuelven a golpear...
- Fueron allanados los domicilios de dos sacerdotes los que
posteriormente fueron detenidos...
- El auto se para. Me bajan a empujones. Creo que mi final
está cerca...

CDVIII
- Fuerzas Armadas iniciaron una etapa en su lucha contra la
subversión en todo el país.
- ...Siento el aire fresco del campo. Siento el ladrido de
algunos perros. Me golpean para que avance. Me patean. Me
gritan comunista...
- Más de trescientos obreros de una fábrica fueron detenidos,
acusados de incitar a la rebelión.
- ...Mana sangre de mi boca. De los ojos cerrados salen
gruesos lagrimones. Espero el golpe de gracia. Siento que me
punzan los testículos. Me desgarro de dolor...
- Un abogado de nuestro medio fue secuestrado la noche
anterior...
- Mátenme. Mátenme, hijos de ...! Hijos de ...! Hijos de ...!
- El Poder Ejecutivo con el gabinete nacional y autoridades
civiles y militares concurrirán hoy a la misa que se oficiará por la
pacificación del país.
- ...Me retuerzo de dolor. Siento sangre sobre mi cuerpo. Me
golpean el corazón. Me estremezco. Se apartan de mí. Se siente
el ruido de las armas que se cargan. Me paro. Los escupo a
cualquier parte en un gesto de desafío...
- Fue encontrado ultimado a balazos un honesto dirigente
obrero.
- Numerosas fábricas han sido tomadas por sus trabajadores.
- Movilizaciones callejeras.
- Tropas reprimen a manifestaciones.
- Recrudece la violencia.
- El pueblo está en la calle.

La colaboración anterior de un compañero petroquímico


titulada “Aquí, ayer, hoy, ¿mañana?, es por demás elocuente. Muy
cruda, tremendamente realista, dolorosa, amarga.
No hay nombres. Pensamos que no hacía falta poner nombres.
Porque se trata del pueblo que es reprimido. Mucho sangre
derramada. Muchas esperanzas tras las rejas de las cárceles.
Muchos exiliados. Muchos hogares destruidos. Pero una clase
obrera y un pueblo que todavía está de pie, y que va tomando las
banderas de todos aquellos que son perseguidos, torturados y
masacrados por su sed de justicia. Y falta menos tiempo. Porque
el pueblo volverá alzarse para terminar con esta podredumbre y
marcar un nuevo camino.
Porque así ocurrió antes. Y porque así volverá a ocurrir.

CDIX
¿Mañana quizás?
Vaya nuestro humilde homenaje desde esta página a todos los
compañeros presos políticos, gremiales, estudiantiles, a los
torturados, a los salvajemente mutilados y asesinados, a los
exiliados en otros países, a los perseguidos. Todos por haber
cometido el grave delito de ser leales a su clase, de ser leales a
su pueblo oprimido.
Para todos ellos nuestro homenaje.-
Comisión Directiva
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; pág. 6.-

117.- F. ITURRASPE:
HISTORIA REPETIDA DE UN PAÍS “LIBRE”

Al escribir este artículo recordamos su figura de muchacho


simple, de novel profesional. Había elegido un camino, el camino
que muy pocos profesionales eligen. El de estar junto a los
pobres, junto a los obreros, junto a los explotados. Y desde que
nuestro recordado asesor letrado Horacio Zamboni fuera detenido
y posteriormente exiliado en otro país, el doctor Francisco
Iturraspe (Panchito) se hizo cargo de la asesoría legal del
sindicato. Y estuvo junto a nosotros asesorándonos en todos los
aspectos legales y luchando también a nuestro lado como
ocurriera en las movilizaciones de julio. Ese fue su único delito
(abrazar la causa de los trabajadores). Por eso quisieron
secuestrarlo y matarlo veinte personas armadas. Pero el destino
quiso que Panchito se salvara milagrosamente, los petroquímicos,
los jaboneros y los trabajadores en general repudiamos de una u
otra forma este atentado que fue un insulto más a la clase obrera.
Ese es uno de los precios que tienen que pagar quienes
permanentemente dan la cara, de día y de noche. Hoy nuestro
compañero se ha ido del país. No sabemos hasta cuándo. Pero
decíamos desde estas páginas que junto a su esposa y a su futuro
hijo puedan regresar en alguna fecha no muy lejana y proseguir
juntos la lucha por un mundo mejor.-
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; pág. 8.-

118.- UN ENFOQUE EQUIVOCADO

CDX
Compañeros:
Muchos dicen “que el sindicato se dedica mucho a la política y
a lo de afuera y no le presta atención a nuestros problemas”.
El sindicato es la organización legal de los trabajadores por
rama de la producción. Como tal tiene derechos otorgados por la
ley, los más importantes logrados a través de la lucha obrera, y
tiene todas las limitaciones que la misma ley les impone.
Cuando el Estado a través de sus organismos
correspondientes: El Ministerio de Trabajo, toma determinaciones
políticas como ser la anulación de los convenios de trabajo, la
prohibición de las huelgas por aumentos salariales, la declaración
de ilegal a un movimiento de fuerzas por cualquier reivindicación,
o cuando el Estado a través del ejército o la policía reprimen
manifestaciones obreras, desaloja fábricas ocupadas, detiene a
dirigentes y activistas (como en Villa Constitución). En fin, al
regularse toda la actividad sindical a través de leyes y decretos
creados por los distintos gobiernos, es ingenuo pensar que la
actividad política puede estar al margen del sindicato. Por más
que se hiciera un esfuerzo por tener un sindicato apolítico, sus
dirigentes y los trabajadores que nuclea, son hombres que actúan
ante cada hecho, de acuerdo a una concepción política, siendo
imposible dividir al hombre obrero del hombre político, porque el
hombre es uno solo en todo momento.
No sólo que es imposible no discutir cuestiones políticas, sino
que es justísimo que los trabajadores tomen postura políticas ante
cada hecho que los conmueva. Lo que debe tratar de evitarse, es
que el sindicato, por determinación de sus dirigentes, sea la
sucursal o el adherente de un partido político, o adopte posiciones
partidistas. O sea debe existir una lucha constante contra todo lo
que sea verticalidad (obedecer porque así nos lo mandan, sin
tener derecho a decidir nosotros). Y esto se consigue como
nosotros lo hacemos, con Democracia Sindical.
Ante la fortaleza de nuestros enemigos y ante la debilidad del
movimiento obrero cuando se encuentra escindido, encasillado en
las luchas particulares de los ceramistas contra Verbano o
Cerámica San Lorenzo, de los Químicos contra Duperial, o
Sulfacid, o de los Petroquímicos contra PASA es necesario hacer
todos los esfuerzos posibles para lograr cada vez más una
creciente unidad de los trabajadores sin distinción. Lo que en este
sentido hayan hecho los compañeros de la CD, delegados o

CDXI
activistas de fábrica, debe merecer el apoyo y la participación de
todos. La solidaridad, la coordinación de las luchas, etcétera, son
cuestiones inseparables, imprescindibles del accionar obrero.
Si hay una crítica que hacer ha la comisión directiva en este
aspecto, es la falta de difusión de los hechos más importantes
sucedidos en otras fábricas de la zona, como uno de los medios
necesarios para despertar mayor conciencia de unidad. Como
vemos una crítica de lo poco y desconocido que se hizo, y no de lo
mucho. Donde los compañeros tienen razón, con algunas
aclaraciones para hacer, es en la desatención de los problemas de
fábrica, criticas realizadas casi por unanimidad, y reconocida por
el compañero Sosa.
Pero he aquí una aclaración, no se trata de reclamar a tal o
cual compañero de comisión directiva que venga a la fábrica para
que nos resuelva nuestro problema particular en uso de sus
“conocimientos o capacidad sindical”, o por el que ellos “están en
eso”, sino de exigirles a dichos compañeros, que como hombres
activos y esclarecidos estén junto al resto de los petroquímicos en
cada una de las protestas, por las categorías, por el trabajo
inseguro, por el trabajo de turno, etc.. Y no aislados de esa
realidad cotidiana, atendiendo en el local sindical cientos de
trámites administrativos, o en el ministerio de trabajo
persiguiendo expedientes que nunca se resuelven o que es inútil
iniciarlos, todo como verdaderos empleados de un club o mutual
llamado SOEPU.
Reclamemos de los compañeros que vuelvan a la fábrica, no
por comodidad nuestra, así no nos tenemos que molestar a ir al
local de Avenida San Martín, sino para contarlos junto a nosotros
en cada enfrentamiento con la patronal y para encarar, con ellos,
las muchas cosas que van siendo postergadas o directamente que
se han olvidado.-
Roque
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; pág. 10.-

119.- A LA MUERTE INÚTIL DE UN OBRERO

A José Polenta
¡Qué elegía pretendes que te cante
domingo de septiembre!

CDXII
Cuando un obrero cae entre su sangre
abierto en cuatro luces para siempre.

Por no obedecer la voz de ¡alto!


de un centinela que apostado al frente,
mojaba sus manos con estrellas rotas
y hundía sus labios con sabor a muerte.
Caricatura de otro tiempo más dichoso,
donde el hombre era motivo de su gente,
valioso arsenal de sueños blancos,
fiel engranaje de una máquina celeste.

Si pierdo un amigo y pierdo un hombre,


petroquímico albañil de mano y mente,
¡Que elegía pretendes que te cante
domingo de septiembre!
Septiembre 1975 - Reynaldo Moretti
Boletín Nº 34 - Diciembre 1975; pág. 10.-

120.- Solicitada
UNA NUEVA VÍCTIMA DE LA REPRESIÓN:
JOSÉ ALBERTO POLENTA

En horas de la madrugada del 21 de septiembre, dos parejas


jóvenes regresaban a sus hogares después de haber participado
de una reunión familiar. Al pasar por la Ruta 11, frente a la
Fábrica Militar de Fray Luis Beltrán, fuerzas del Ejército balearon
el automóvil en que viajaban terminando con la vida del
compañero petroquímico JOSÉ ALBERTO POLENTA.
José, con sus 24 años, deja detrás de si una limpia trayectoria
de trabajador honesto, un montón de vida por andar, una señora
embarazada de ocho meses, un inmenso dolor entre sus
familiares y una tremenda bronca entre sus compañeros que
vemos como con impotencia cómo se asesina impunemente al
pueblo.
José se movilizó junto a miles de trabajadores en las jornadas
de julio luchando en defensa del salario que significaba el
bienestar de su familia. Le pudo haber tocado entonces. Le pudo
haber tocado a algún dirigente. Pero le tocó a él, ayer y pasado.

CDXIII
¿QUÉ SE DIRÁ DE ESTE ASESINATO?
¿Qué dirán los asesinos?
“Fue un lamentable accidente. No acato la voz de alto. Estas o
parecidas, serán las expresiones de la fuerzas represivas.
¿Qué dirá la Empresa donde José trabajaba?
¿Acaso callará con su silencio...? El silencio de otras veces?

¿Qué decimos nosotros?


Los trabajadores petroquímicos decimos que José ha sido
muerto producto de la violencia del sistema que se manifiesta
esta vez en la prepotencia y alevosía de quienes dan órdenes de
tirar a matar para después preguntar, estos son los “custodios del
orden y la paz”.
En la brutalidad perpetrada contra este compañero
repudiamos la violencia absurda y la represión desatada a lo largo
y a lo ancho del país, estén sus autores uniformados como en
este caso, encapuchados como los que secuestraron y asesinaron
recientemente a tres vecinalistas, con caras descubiertas como
los que intentaron amedrentar a un compañero de Sulfacid y su
familia o emboscados en las sombras como los que volaron la
Casa del Maestro en Rosario.
Ante todos estos hechos decidimos paralizar nuestras
actividades desde las 18 hs. del día 21 hasta las 24 hs. del 22 de
corriente y movilizarnos convocando a los trabajadores, a las
organizaciones gremiales hermanas y a la CGT, a los partidos y
organizaciones políticas y al pueblo en general a sumarse a
nuestro repudio y a oponerse firmemente a esta barbarie
generalizada contra la clase obrera y el pueblo.-
Asamblea de Fábrica de Trabajadores
Petroquímicos
22 de Septiembre de 1975
Boletín Nº 33 - Octubre 1975;
Tapa.-

CITAS

CDXIV
CAPÍTULO I

(1) Castagna, Alicia - Navarro, Ana. "Estructura Industrial Manufacturera


del Sistema Metropolitano Gran Rosario”. Informe de Investigación Nº 3;
Facultad de Ciencias Económicas y Estadística - Universidad Nacional de
Rosario; Rosario, 1984.-
(2) Castagna, Alicia - Navarro, Ana. Op. cit..-
(3) Castagna, Alicia - Navarro, Ana. Op. cit..-
(4) Portantiero, Juan Carlos. “Economía y Política en la Crisis Argentina:
1958 - 1973”. En: “Estado y Sociedad en el Pensamiento Argentino”; en
Revista Mexicana de Sociología - 1985.-
(5) La Capital - 24 de Agosto de 1962; pág. 10.-
(6) Panorama Nº 148 - 24 de Febrero / 2 de Marzo; pág. 15.-

CAPÍTULO II

(1) Catarelo, María C. - Fernández, Fabián. “Las ocupaciones masivas de


fábricas. Argentina 1964”. En: Antognazzi, Irma - Ferrer, Rosa.
“Argentina, raíces históricas del presente”. Escuela de Historia, Facultad
de Humanidades y Artes - Universidad Nacional de Rosario; Rosario,
1996.-
(2) Clarín - 7 de Diciembre de 1970.-
(3) Catarelo, María C. - Fernández, Fabián. Op. cit..
(4) Catarelo, María C. - Fernández, Fabián. Op. cit..
(5) En: Abós, Álvaro. “Las Organizaciones Sindicales y el Poder Militar.
1976 - 1983”. Biblioteca Política Argentina Nº 60 - CEAL, Buenos Aires,
1984.-
(6) Declaración de la CGT Rosario. Crónica - 28 de Abril de 1968.-
(7) James, Daniel. Resistencia e Integración. El Peronismo y la Clase
Trabajadora Argentina, 1955 - 1976. Editorial Sudamericana, Buenos
Aires, 1990.-

(8) Iturraspe, Francisco - Poles, José Luis.


“Movimiento Sindical y Auto-
gestión. El caso del control obrero en PASA (Petroquímica Argentina
Sociedad Anónima)”. En: Iturraspe, Francisco. Comp. Participación,
Cogestión y Autogestión en América Latina; Tomos 1 - 2. Editorial Nueva
Sociedad, Costa Rica, 1986.-

CDXV
(9) Dowling, Juan Alfonso. “Petroquímicos. La Intersindical y la
Democracia. Una experiencia de lucha en la Zona Industrial de San
Lorenzo”. En: Autores Varios. Nuevas Tendencias en el Sindicalismo
Argentina - Brasil. Editorial Biblos / Fundación Simón Rodríguez, 1992.-
(10) El Petroquímico Nº 19.-
(11) El Petroquímico Nº 8.-
(12) El Petroquímico Nº 10.-
(13) El Petroquímico Nº 2.-
(14) El Petroquímico Nº 4.-
(15) El Petroquímico Nº 18.-
(16) El Petroquímico Nº 3.-
(17) El Petroquímico Nº 1.-
(18) El Petroquímico Nº 4.-
(19) El Petroquímico Nº 25.-
(20) El Petroquímico Nº 23.-
(21) El Petroquímico Nº 4.-
(21 bis) El Petroquímico Nº 3.-
(22) El Petroquímico Nº 13.-
(23) El Petroquímico Nº 16.-
(24) El Petroquímico Nº 16.-
(25) El Petroquímico Nº 16.-
(26) El Petroquímico Nº 18.-
(27) El Petroquímico Nº 19.-
(28) El Petroquímico Nº 20.-
(29) El Petroquímico Nº 20.-
(30) El Petroquímico Nº 22.-
(31) El Petroquímico Nº 23.-
(32) El Petroquímico Nº 23.-
(33) El Petroquímico Nº 23.-
(34) El Petroquímico Nº 23.-
(35) El Petroquímico Nº 23.-
(36) El Petroquímico Nº 25.-
(37) El Petroquímico Nº 31.-
(38) El Petroquímico Nº 33.-
(39) El Petroquímico Nº 23.-
(40) El Petroquímico Nº 23.-
(41) El Petroquímico Nº 13.-
(42) El Petroquímico Nº 2.-
(43) El Petroquímico Nº 3.-
(44) El Petroquímico Nº 3.-

CDXVI
(45) El Petroquímico Nº 3.-
(46) El Petroquímico Nº 3.-
(47) El Petroquímico Nº 18.-
(48) El Petroquímico Nº 20.-
(49) El Petroquímico Nº 10.-
(50) El Petroquímico Nº 17.-
(51) El Petroquímico Nº 17.-
(52) El Petroquímico Nº 20.-
(53) El Petroquímico Nº 13.-
(54) El Petroquímico Nº 20.-
(55) El Petroquímico Nº 22.-
(56) El Petroquímico Nº 23.-
(57) El Petroquímico Nº 24.-
(58) El Petroquímico Nº 23.-
(59) El Petroquímico Nº 23.-
(60) El Petroquímico Nº 24.-
(61) El Petroquímico Nº 24.-
(62) El Petroquímico Nº 20.-
(63) El Petroquímico Nº 25.-
(64) El Petroquímico Nº 31.-
(65) El Petroquímico Nº 32.-
(66) El Petroquímico Nº 32.-
(67) El Petroquímico Nº 32.-
(68) El Petroquímico Nº 33.-
(69) El Petroquímico Nº 33.-
(70) El Petroquímico Nº 34.-
(71) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(72) El Petroquímico Nº 8.-
(73) Las publicaciones pertenecen a:
La Tribuna - 26 de Julio de 1971; pág. 7.-
La Tribuna - 31 de Julio de 1971; pág. 2.-
Crónica - 28 de Julio de 1971; pág. 3.-
Crónica - 30 de Julio de 1971; pág. 4.-
Crónica - 31 de Julio de 1971; págs. 3 y 6.-
(74) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(75) El Petroquímico Nº 31.-
(76) El Petroquímico Nº 31.-
(77) El Petroquímico Nº 31.-
(78) Unidad Proletaria Nº 1 - Año 1. Órgano de la Dirección del ‘Socialismo
Revolucionario’ - 28 de Noviembre de 1971.-

CDXVII
(79) Unidad Proletaria Nº 2.-
(80) Unidad Proletaria Nº 2.-
(81) Unidad Proletaria Nº 2.-
(82) “Sindicalismo y Clasismo”. Cuadernos de Militancia Nº 33, Año 2.
Buenos Aires, Enero de 1974.-

CAPÍTULO III

(1) Dowling, Juan Alfonso. “Petroquímicos. La Intersindical y la


Democracia. Una experiencia de lucha en la Zona Industrial de San
Lorenzo”. En: Autores Varios. Nuevas Tendencias en el Sindicalismo
Argentina - Brasil. Editorial Biblos / Fundación Simón Rodríguez, 1992.-
(2) El Petroquímico Nº 10.-
(3) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(4) Torre, Juan Carlos. "Los Sindicatos en el Gobierno. 1973 - 1976”. CEAL,
Buenos Aires, 1993.-
(5) El Petroquímico Nº 12.-
(6) La Capital - 21 de Marzo de 1971; pág. 7.-
(7) La Capital - 24 y 25 de Marzo de 1971; págs. 6 / 7.-
(8) Solicitada publicada en Crónica - 4 de Septiembre de 1973 y lunes 17 de
Septiembre de 1973.-
(9) El Petroquímico Nº 24.-
(10) El Petroquímico Nº 22.-
(11) La Tribuna - 26 de Julio de 1971; pág. 7.-
La Tribunal - 31 de Julio de 1971; pág. 2.-
Crónica - 28 de Julio de 1971; pág. 3.-
Crónica - 30 de Julio de 1971; pág. 4.-
Crónica - 31 de Julio de 1971; págs. 3 y 6.-
(12) Clarín - 23 y 24 de Mayo de 1971; pág. 29.-
(13) Duval, Natalia. “Los Sindicatos Clasistas: Sitrac - Sitram. 1970 - 1971”.
Biblioteca Política Argentina Nº 235 - CEAL, Buenos Aires, 1988.-

(14) Perón, Juan Domingo. “La Única Verdad es la Realidad”. Documento


constitutivo del Frente Cívico de Liberación Nacional - FRECILINA; 16 de
Febrero de 1972. En: Obras Completas Juan Domingo Perón. Editorial
Docencia. Volumen XXV - Tomo I; pág. 247.-
(15) La Tribuna - 26 de Julio de 1971; pág. 7.-
La Tribuna - 31 de Julio de 1971; pág. 2.-

CDXVIII
Crónica - 28 de Julio de 1971; pág. 3.-
Crónica - 30 de Julio de 1971; pág. 4.-
Crónica - 31 de Julio de 1971; págs. 3 y 6.-
(16) La Tribuna - 26 de Julio de 1971; pág. 7.-
(17) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(18) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(19) Crónica - 30 de Julio de 1971; pág. 4.-
(20) Crónica - 30 de Junio de 1971; pág. 4.-
(21) El Petroquímico Nº 10 / Nº 12.-
(22) La Capital - 11 de Marzo de 1972; pág. 5.-
(23) La Capital - 20 de Marzo de 1972; pág. 6.-
(24) La Capital - 29 de Marzo de 1972; pág. 5.-
(25) El Petroquímico Nº 16.
(26) Entrevistas a: Juan Dowling, Miguel Mendoza y Samuel Dangelo.-.
(27) La Capital - 06 de Abril de 1972; pág. 5.-
(28) El Petroquímico Nº 16.-
(29) Entrevistas a: Juan Dowling, Miguel Mendoza, Samuel Dangelo y A.
Santoro.
(30) James, Daniel. Resistencia e Integración. El Peronismo y la Clase
Trabajadora Argentina, 1955 - 1976. Editorial Sudamericana, Buenos
Aires, 1990.-

CAPÍTULO IV

(1) El Petroquímico Nº 4.-


(2) Anteproyecto del SOEPU para “La Organización del Trabajo
en el Convenio Colectivo de la Industria Petroquímica”.-
(3) El Petroquímico Nº 4.-
(4) El Petroquímico Nº 4.-
(5) Anteproyecto del SOEPU; op. cit.-
(6) Anteproyecto del SOEPU; op. cit.-
(7) Anteproyecto del SOEPU; op. cit.-

CAPÍTULO V

CDXIX
(1) La Capital - 30 de Julio de 1974; pág. 5.-
(2) La Capital - 02 de Agosto de 1974; pág. 5.-
(3) Dowling, Juan Alfonso. “Petroquímicos. La Intersindical y la
Democracia. Una experiencia de lucha en la Zona Industrial de San
Lorenzo”. En: Autores Varios. Nuevas Tendencias en el Sindicalismo
Argentina - Brasil. Editorial Biblos / Fundación Simón Rodríguez, 1992.-
(4) La Nación - 02 de Agosto de 1974; pág. 5.-
(5) La Capital - 13 de Agosto de 1974; pág. 5.-
(6) La Capital - 13 de Agosto de 1974; pág. 5.-
(7) Crónica - 21 de Agosto de 1974; pág. 3.-
(8) La Capital - 09 de Agosto de 1974; pág. 2.-
(9) La Capital - 24 de Agosto de 1974; pág. 5.-
(10) La Capital - 31 de Agosto de 1974; pág. 7.-
La Nación - 30 de Agosto de 1974; pág. 3.-
(11) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(12) Bourgin, Georges. “La Comuna”. EUDEBA, Buenos Aires, 1962; pág.
73.-

CAPÍTULO VI

(1) Revista “Política Obrera” - Abril 1975.-


(2) El Petroquímico Nº 32.-
(3) La Capital - 17 de Junio de 1975; pág. 6.-
(4) Dowling, Juan Alfonso. “Petroquímicos. La Intersindical y la
Democracia. Una experiencia de lucha en la Zona Industrial de San
Lorenzo”. En: Autores Varios. Nuevas Tendencias en el Sindicalismo
Argentina - Brasil. Editorial Biblos / Fundación Simón Rodríguez, 1992.-
(5) Dowling, Juan Alfonso. Op. cit..-
(6) La Capital - 1º de Julio de 1975; pág. 5.-
(7) El Petroquímico Nº 33.-
(8) El Petroquímico Nº 33.-
(9) El Petroquímico Nº 33.-
(10) Gilly, Adolfo. “Los Consejos de Fábrica: Argentina, Bolivia, Italia”.
En: Coyoacan - Revista Marxista Latinoamericana Año II Nº 5 pág. 51.
Ediciones El Caballito, 1978.-
(11) Gilly, Adolfo. Op cit..-

CDXX
(12) El Petroquímico Nº 33.-

BIBLIOGRAFÍA

1.- ABÓS Álvaro. Las Organizaciones Sindicales y el Poder Militar. 1976


- 1983. Biblioteca Política Argentina Nº 60 - Centro Editor de América
Latina (CEAL), Buenos Aires, 1984.-
2.- ABÓS Álvaro. La Columna Vertebral. Editorial Hyspamérica,
Buenos Aires, 1983.-
3.- ACUÑA Marcelo. De Frondizi a Alfonsín: La Tradición Política del
Radicalismo. Biblioteca Política Argentina Nº 48 - 49, Buenos Aires, 1984.-
4.- ACUÑA ORTEGA Víctor H.. “Fuentes Orales e Historia Obrera: El
caso de los zapateros en Costa Rica”. Secuencia Revista Americana de
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5.- ALMEYRA Guillermo. “La clase obrera en la Argentina actual”. En:
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6.- ALTAMIRANO Carlos. “Memorias del 69”. Revista Estudios Nº 4,
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7.- ALTAMIRANO Carlos. “Montoneros”. Revista Punto de Vista Nº 55,
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8.- AMARAL Samuel - BEN PLOTKIN Mariano. Perón: del Exilio al Poder.
Editorial Cántaro, Buenos Aires, 1993.-
9.- ANDUJAR Andrea. “Combates y Experiencias. Las luchas obreras en
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10.- ANDUJAR Andrea. “El Villazo: la Huelga Metalúrgica de Villa
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11.- ANTOGNAZZI Irma - FERRER Rosa. “Del Rosariazo a la Democracia
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12.- ANZORENA Oscar. Tiempo de Violencia y Utopía. 1966 - 1976.
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13.- ARATO Ana. G. Lukacs; la búsqueda de un sujeto para la revolución.

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14.- ASPIAZU D. y Otros. El Nuevo Poder Económico. Legasa, Buenos
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15.- AUFGANG Lidia. Las Puebladas: Dos Casos de Protesta Social,
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Antognazzi, Irma - Ferrer, Rosa. “Del Rosariazo a la Democracia del
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19.- BALVE Beba. De Protesta a Rebelión: La Subversión. Cuadernos de
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20.- BALVE, Beba. “El ‘69, Huelga Política de Masas, Rosariazo -
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21.- BALVE Beba. Lucha de calles, lucha de clases. La Rosa Blindada,
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22.- BALVE B. - MARCONI E. - LUBLINER E - WILSON M.. Composición
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23.- BASCHETTI Roberto. Documentos de la Resistencia Peronista: 1955 -
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24.- BERROTARÁN Patricia - POZZI Pablo. Estudios Inconformistas sobre
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1994.-
25.- BITRAN Rafael - SCHNEIDER Alejandro. “Dinámica Social y Clase
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Zona Norte del Gran Buenos Aires, en particular de las Fábricas Del Carlo
y Ford Motors”. En: Autores Varios. Nuevas tendencias en el
Sindicalismo: Argentina - Brasil. Editorial Biblos / Fundación. Simón
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26.- BONASO Miguel. El presidente que no fue. Planeta, Buenos Aires,
1977.-
27.- BOTANA Natalio - BRAUN Rafael - FLORIA Carlos. El Régimen
Militar 1966 - 1973. Ediciones La Bastilla, Buenos Aires, 1973.-
28.- BRA Gerardo. “El Gobierno de Onganía. Crónica”. CEAL, Buenos

CDXXII
Aires, 1985.-
29.- BRENAN James P. “El clasismo y los obreros. El contexto fabril del
‘sindicalismo de liberación’ en la industria automotriz cordobesa, 1970 -
1975”. Revista Desarrollo Económico Nº 125, Abril / Junio, 1992.-
30.- BRENAN James P. El Cordobazo, Editorial Sudamericana, Buenos
Aires, 1996.-
31.- BRENAN James P.. El Cordobazo. Las Guerras Obreras en Córdoba
1955 - 1976”. Editorial Sudamericana, Buenos Aires, 1996.-
32.- BRENAN J. P. - GORDILLO M. “Protesta Obrera, Rebelión Política e
Insurrección Urbana en la Argentina: el Cordobazo”. Revista Estudios;
Julio / Diciembre 1994.-
33.- BROCATTO Carlos. La Argentina que quisieron. Editorial
Sudamericana, Buenos Aires, 1985.-
34.- CALELLO Osvaldo - PARCERO D.. De Vandor a Ubaldini. CEAL,
Buenos Aires, 1984.-
35.- CANDIA José Miguel. “Argentina: Proceso Militar y Clase Obrera”.
Cuadernos del Sur Nº 2, Abril / Junio 1985.-
36.- CANGIANO María Cecilia. “El Lenguaje de Clase en los Setenta:
el sentido político de una lucha obrera. La experiencia de los
trabajadores metalúrgicos de Acindar, Villa Constitución. 1966 - 1976”.
Ponencia a las III Jornadas Interescuelas / Departamentos de Historia;
Rosario, 1991.-
37.- CANGIANO Maria Cecilia. “Pensando a los trabajadores: la
Historiografía Obrera Contemporánea. Argentina entre el Dogmatismo y
la Innovación”. Boletín del Instituto de Historia Argentina y
Americana ‘Dr. Emilio Ravignani’ Nº 8, 3ª Serie. Facultad de Filosofía y
Letras, Universidad de Buenos Aires; Buenos Aires, 2º semestre de
1993.-
38.- CAPARRÓS Martín - ANGUITA Eduardo. La Voluntad - Tomos I, II,
III. Editorial Norma, Buenos Aires, 1997.-
39.- CASTAGNA Alicia - NAVARRO Ana. “Estructura Industrial Manu-
facturera del Sistema Metropolitano Gran Rosario”. Informe de
Investigación Nº 3; Facultad de Ciencias Económicas y Estadística -
Universidad Nacional de Rosario; Rosario, 1984.-
40.- CASTILLO Nicolás. “Los años 60 y 70 y la crítica histórica”. Revista
Confines Nº 4, 1977.-
41.- CATARELO María C. - FERNÁNDEZ Fabián. “Las Ocupaciones
Masivas de fábricas. Argentina 1964”. En: Antognazzi, Irma - Ferrer,
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CDXXIII
Facultad de Humanidades y Artes - Universidad Nacional de Rosario;
Rosario, 1996.-
42.- CATTARUZZA Alejandro. “El mundo por hacer. Una propuesta para
el análisis de la cultura juvenil en la Argentina de los años setenta”,
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43.- CAVAROZZI Marcelo. Autoritarismo y Democracia: 1955 - 1983.
CEAL, Buenos Aires, 1985.-
44.- CAVAROZZI Marcelo. “Peronismo, Sindicatos y Política en la
Argentina. 1943 - 1981”. En: González Casanova, Pablo - compilador:
Historia del Movimiento Obrero en América Latina. Siglo XXI, México,
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Impreso en FEBRERO de 2006


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CDXXXI
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del castillo

CDXXXIII
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CDXXXVI
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