INTRODUCCIÓN

Según dice Raimón Samsó en una columna de psicología en el periódico " El País “la
mayoría de nosotros creemos que podemos cambiar lo que los demás piensan; de
otro modo, no pasaríamos tanto tiempo en la vida dándole vueltas a “qué opinan los
demás de nosotros” y tratando de mejorar su juicio sobre nuestra persona.
Por otro lado cita a Eleanor Roosevelt que dijo: “Nadie puede hacer que te sientas
inferior si tú no lo permites”. Esta afirmación pone el foco de atención hacia
nosotros mismos y no en los demás; por ello, quizá el único pensamiento que precisa
ser cambiado es la creencia de que “los demás deberían pensar diferente”.
"Quien no opina como yo está equivocado". Éste es el convencimiento secreto de
todas las personas que discuten. Y es lógico que así suceda, porque tener una
opinión significa creer que se tiene una opinión acertada; de donde resulta que
quienes no tengan la misma opinión tendrán forzosamente una opinión errónea.

CUERPO DEL ENSAYO

Creer tener la razón en todo y aparentar sentir seguridad no quiere decir que se tiene una
buena autoestima al contrario demuestra la falta de confianza, inseguridad y Baja
autoestima que se tiene y mucho más sabiendo que podemos estar equivocados. Ponernos
a la defensiva sin dejar que otros opinen solo buscando defender nuestra posición lo
único que hará es alejarnos de las personas, porque no se sentirán cómodos al lado de
alguien tan cerrado en sus pensamientos.
Edward de Bono en su libro “Yo tengo razón, tú estás equivocado” presenta un desafío
frontal a la lógica –imperfecta y primitiva– del pensamiento occidental, el cual ha
comprobado su excelencia en asuntos técnicos, tanto como su ineficiencia en los asuntos
humanos. Es la «lógica rupestre» de los absolutos, las rigideces y el argumento con sus
polarizaciones forzadas y su arrogancia tan peligrosa. Se trata de un pensamiento que
carece por completo de energía constructiva y creativa.
Demasiadas mentes brillantes se han visto castradas por los hábitos tradicionales de
pensamiento, y ha llegado el momento de examinarlos y darnos cuenta que son inadecuados
para el momento que estamos viviendo. La resolución de los problemas actuales requiere de
un nuevo pensamiento creativo que se ocupe de las percepciones, los valores y las personas.
No se trata de desechar la "argumentación", sino alertar sobre los peligros de un
razonamiento encastillado y estéril para solucionar los problemas actuales. Tal y como
afirma el autor: "Necesitamos un nuevo renacimiento, y creo que ya ha comenzado.
Apegarnos al pensamiento único y en la imposición de una verdad universal es ir en contra
de la esencia de la humanidad, e incluso del propio ejercicio de la libertad individual. No es
lícito, no es lógico y tampoco es sano. Algo que todos sabemos es que nuestro a día a día es
como un fluir donde se entrecruzan varias y complejas corrientes. Todos vamos en nuestros
propios barcos, bien río arriba o bien río abajo. En lugar de tratar de mantener siempre una
misma dirección, aprendamos a alzar la vista para no chocar los unos con los otros.

Introduction
According to Raimón Samsó in a psychology column in the newspaper "El País" most of
us believe that we can change what others think; otherwise, we wouldn't spend so
much time in life spinning around "what others think of us" and trying to improve
their judgment about our person.
On the other hand, quote Eleanor Roosevelt  who said, "No one can make you feel inferior if
you don't allow it." This statement puts the focus of attention to ourselves and not to
others; therefore, perhaps the only thought that needs to be changed is the belief that "others
should think differently."

"Who doesn't think like I'm wrong." This is the secret conviction of all the people
who argue. And it is logical that this is how it should happen, because having an
opinion means believing that you have a correct opinion;  from where it turns out that
those who do not have the same opinion will necessarily have a misguided view.
 
TEST BODY
Believing to be right in everything and appearing to feel confident does not mean that you
have a good self-esteem on the contrary demonstrates the lack of confidence, insecurity
and low self-esteem that you have and much more knowing that we can be wrong. Get
defensive without letting others think just by seeking to defend our position, all it will do
is get away from people, because they won't feel comfortable next to someone so closed
in their thoughts.
Edward de Bono in his book "I Am I Right, You Are Wrong" presents a frontal challenge
to the logic – imperfect and primitive – of Western thought, which has proven its
excellence in technical matters, as well as its inefficiency in human affairs. It is the "rock
logic" of absolutes, rigidities and argument with its forced polarizations and its dangerous
arrogance. It is a thought that completely lacks constructive and creative energy.
Too many brilliant minds have been scathered by traditional thought habits, and the time
has come to examine them and realize that they are inadequate for the moment we are
living. Solving current problems requires new creative thinking that deals with perceptions,
values, and people. It is not a question of dismissing "argumentation", but alerting about the
dangers of stunand and sterile reasoning to solve the current problems. As the author states:
"We need a new renaissance, and I think it has already begun.
To stick to the unique thought and in the imposition of a universal truth is to go against the
essence of humanity, and even the exercise of individual freedom. It is not lawful, it is not
logical and it is not healthy either. Something that we all know is that our day to day is like
a flow where several and complex currents intersect. We all go in our own boats, either
upstream or downstream. Instead of trying to always keep the same direction, let's learn to
look up so as not to bump into each other.

Conclusion

The first problem arises from the fact of believing, with total certainty, that we are right
and others are wrong, forgetting that we are also often wrong. Our senses deceive us, our
emotions cause us thoughtless reactions and our reason may be in error.
The second problem is caused by trying at all costs to impose our reason with total lack of
assertiveness, which generally leaves the sufferer more or less in pain.
We should often remind ourselves that proving that we are right is not as important as we
usually believe. Too much blood has been spilled for reasons.
Our efforts and dedications should be aimed at the enriching exchange with others, the
purpose of the classic gatherings.