Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Beato
Juan Pablo II
Un pontificado entre dos milenios
Beato
Juan PaBlo II
Un pontificado entre dos milenios
Tiraje:
Diagramación: Juan Zelada (Cel. 995-295582)
Lima, Perú.
10
11
“Los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres
de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la
vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo.
Nada hay verdaderamente humano que no encuentre eco en su cora-
zón. La comunidad cristiana está integrada por hombres que, reunidos
en Cristo, son guiados por el Espíritu Santo en su peregrinar hacia el
reino del Padre y han recibido la buena nueva de la salvación para co-
municarla a todos. La Iglesia por ello se siente íntima y realmente soli-
daria del genero humano y de su historia”. (Gaudium et spes, proemio).
Siempre me ha cautivado este bello texto del Concilio Vaticano II.
Si tuviese que seleccionar una dedicatoria para agradecer al Señor
por el regalo de nuestro Padre Santo, Juan Pablo II, le ofrecería éste
pero personalizándolo en el Papa. Les invito a leerlo de nuevo desde
esta perspectiva. ¡Qué bien le quedan! ¿verdad?
A medida que el mundo avanza, la historia se acelera. Veamos a
modo de flash los acontecimientos más importantes de nuestro
tiempo y esforcémonos de acariciarlos con una mirada contem-
plativa, realista y trascendente, ¡de rodillas!, desde el corazón
eucarístico, como el Papa nos tiene acostumbrados. Así lo mani-
festaba el secretario vaticano saliente para las Relaciones con los
Estados Monseñor Jean-Louis Tauran: “Creo que en estos años el
Papa se ha convertido en «la referencia» moral del mundo. Basta
ver la lista de personalidades que vienen ha visitarle. Creo que el
secreto de su carisma, de la grandeza de este pontificado, está en
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
5. El Tercer Milenio
2000. Jubileo. X Cumbre Iberoamérica (Panamá, noviembre de
2000): el asunto prioritario de esta cumbre fue los problemas que
afectan a los niños y adolescentes. Durante esta cumbre, Castro
acaparó la atención al denunciar una conspiración para asesinarlo y
por negarse a firmar una condena del terrorismo de ETA.
El Santo Padre concluyó su homilía recordando que “la Iglesia pe-
regrina en la tierra, a través de su liturgia, del anuncio del Evangelio,
de su testimonio, se hace eco cada día de este canto celeste. Quiera
el Señor que, en el nuevo milenio, crezca cada vez más en la santi-
dad, para ser en la historia verdadera “epifanía” del rostro miseri-
cordioso y glorioso de Cristo el Señor. ¡Así sea!”
Pero es también el mundo del retorno a los valores espirituales,
del deseo intenso de Dios en una sociedad ‘postcristiana’ (auge de
las sectas), de una juventud que en conjunto ha descubierto en su
propia carne el envilecimiento...
2001. Año del voluntariado; Premio Nóbel de la ONU. Se descifra
el genoma humano.
26
27
28
29
30
Un magisterio renovador
31
32
33
11 “Las catorce encíclicas del Santo Padre Juan Pablo II” L´Osservatore romano
nº.33, 15 de agosto de 2003, pp.4-5
34
35
36
37
38
39
40
1. la experiencia de Polonia.
Recordemos algunos datos biográficos: Karol Józef Wojtyła nació
en Wadowice, una pequeña ciudad a 50 kms. de Cracovia, el 18 de
mayo de 1920. Era el segundo de los dos hijos de Karol Wojtyła14 y
41
42
43
18 Ibídem, p.84.
44
45
46
20 Juan Pablo II Cruzando el umbral de la esperanza (Plaza & Janés, Barcelona 1994)
Editado por V. Messori. Traducción de Pedro Antonio Urbina. pp.163-165.
21 Manuel Alcalá, “Karol Wojtyla y el Vaticano II” Razón y Fe Nº 1002,
noviembre 1981, pp.454-471; “Karol Wojtyla y el Sínodo Episcopal Romano”
Estudios Eclesiásticos, junio 1982, Madrid.
47
48
49
3. la nueva evangelización
Desde el inicio de su pontificado el Papa Juan Pablo II ha estado
empeñado en llamar y comprometer a todos los bautizados en la
tarea de una nueva evangelización: «nueva en su ardor, en sus mé-
todos, en su expresión». Pero, «si a partir de la Evangelii nuntiandi
se repite la expresión nueva evangelización, eso es solamente en el
sentido de los nuevos retos que el mundo contemporáneo plantea
a la misión de la Iglesia. Hay que estudiar a fondo -dice el Santo
Padre- en qué consiste esta Nueva Evangelización, ver su alcance,
su contenido doctrinal e implicaciones pastorales; determinar los
“métodos” más apropiados para los tiempos en que vivimos; buscar
una “expresión” que la acerque más a la vida y a las necesidades de
los hombres de hoy, sin que por ello pierda nada de su autenticidad
y fidelidad a la doctrina de Jesús y a la tradición de la Iglesia». En
esta tarea el Papa tiene una profunda conciencia de la necesidad
urgente del apostolado de los laicos en la Iglesia, preocupación que
se refleja claramente en su exhortación apostólica Christifideles laici
y en el impulso que ha venido dando al desarrollo de los diversos
50
24 BRU, Manuel María Testigos del Espíritu. Los nuevos líderes católicos
(Movimientos y comunidades), Edibesa, Madrid 1998 (2ª ed.).
CARRIQUIRY LECOUR, Guzmán Los laicos y la Nueva Evangelización
VE, Lima, 1996
CEAS-CEP Asociaciones y movimientos eclesiales Criterios de orientación,
Lima 1996, 126 pp
CORDES, Paul Josef Signos de esperanza (retrato de siete movimientos
eclesiales), San Pablo; Madrid 1998
DOIG, Germán Juan Pablo II y los Movimientos Eclesiales VE, Lima, 1998
GONZÁLEZ FERNÁNDEZ, Fidel Los movimientos en la historia de la
Iglesia Encuentro, Madrid 1999
GONZALEZ MUÑANA, Manuel Nuevos Movimientos Eclesiales, San
Pablo, Madrid 2001
JIMÉNEZ, Lydia Un movimiento, unas obras, una misión. El P. Morales
fundador Encuentro, Madrid, 2000
RONDONI, Davide Comunión y Liberación: Un Movimiento en la Iglesia
Encuentro, Madrid, 1999
51
25 Juan Pablo II, a los Obispos del CELAM, Port-auPrince, Haití, 9 de marzo de
1983, en “La Traccia” 3 (1983), p. 269.
26 Juan Pablo II, Homilía en Salto, Uruguay, 9 de mayo de 1988, en “La Traccia”
5 (1988), p. 523-525.
27 “Christifideles laici” 34.
28 Juan Pablo II a los obispos de Estados Unidos, 17 de marzo de 1998, en “La
Traccia” 3 (1998), p. 257.
29 Christifideles laici 34.
52
53
54
55
56
57
58
59
35 Cit. en VELASCO, Miguel Ángel Juan Pablo II. Del temor a la esperanza 3 t,
Madrid, 1993 p.111.
36 «S.S. Juan Pablo II: Profeta del sufrimiento Mons. Cipriano Calderón Polo
60
61
62
63
64
65
66
67
68
69
70
7. la preocupación social
La encíclica Centessimus annus, que conmemora el centésimo año
desde el inicio formal del Magisterio Social Pontificio con la publi-
cación de encíclica Rerum novarum de S.S. León XIII, se ha consti-
tuido en el último gran aporte de S.S. Juan Pablo II en lo que toca
a dicho Magisterio. En ella escribía: «... deseo ante todo satisfacer
la deuda de gratitud que la Iglesia entera ha contraído con el gran
Papa (León XIII) y con su “inmortal Documento”. Es también mi
deseo mostrar cómo la rica savia, que sube desde aquella raíz, no se
ha agotado con el paso de los años, sino que, por el contrario, se
ha hecho más fecunda». Indudablemente enriquecido por su propia
experiencia como obrero, y en su particular cercanía con sus com-
pañeros de labores, la gran preocupación social del actual Pontífice
ya había encontrado otras dos ocasiones para manifestarse al mundo
entero en lo que toca al magisterio: la encíclica Laborem exercens, so-
bre el trabajo humano, y la encíclica Sollicitudo rei socialis, sobre los
problemas actuales del desarrollo de los hombres y de los pueblos.
71
72
73
74
75
76
44 Rafael Mª SANZ “La solicitud por la cuestión social´ de Juan Pablo II”
RAZÓN Y FE (Abril, 1988, Madrid).
77
78
79
80
81
82
83
84
85
86
87
48 Niceto Blázquez Los pecados de la Iglesia. Sin ajuste de cuentas San Pablo,
Madrid, 2002 pp.8-9
88
89
90
91
11. Hispanoamérica 49
Particular interés ha demostrado por América Latina desde aquel
discurso inaugural de Puebla (1979) donde recabó la verdad sobre
el hombre, sobre Cristo, sobre la Iglesia, hasta sus orientaciones
luminosas sobre la Teología de la Liberación, bien a través de los
decretos de la Congregación para la Doctrina de la Fe o sus via-
jes. Como subraya J.I. Saranyana “La Conferencia de Puebla se
adhirió abiertamente desde el principio a Évangelii nuntiandi´,
considerando que reflejaba lúcidamente la realidad latinoameri-
cana, y situó la polémica entre evangelizar y sacramentalizar, que
rodaba desde Medellín, su justo punto” 50 El magisterio acerca de
Hispanoamérica o América Latina es muy abundante. . La primera
evangelización se encontró con «dificultades tan enormes como
inéditas». Se vio entonces el despliegue de una inmensa capacidad
creadora en la presencia de una vasta legión de misioneros y cons-
tructores de cultura. Superando obstáculos se forjó una síntesis
cultural mestiza, aún inacabada, que encontró en la fe estímulo e
impulso fecundo. Así pues, como señalan los Obispos en Puebla,
«acicateada por las contradicciones y desgarramientos de aquellos
tiempos fundadores y en medio de un gigantesco proceso de do-
49 Pontificia Comisión para América Latina Documentos del Santo Padre Juan
Pablo II (1988-1999) Ciudad del Vaticano 1999
50 J.I. Saranyana Teología en América Latina III, Iberoamericana 2002,
Madrid, p.140
92
93
94
95
96
55 Cfr. Juan de Dios Vial Correa: “El Magisterio de Juan Pablo sobre la
vida” y Pedro Morandé: “Matrimonio y familia, clave de un pontificado”
HUMANITAS, nº 31, año VIII, de la Pontificia Universidad Católica de
Chile, “En los 25 años del pontificado de Juan Pablo II” pp.452-471.
97
98
Repercusión histórica
99
desequilibrios entre los continentes pobres y los ricos Para el autor son cuatro
las “tensiones” que la Iglesia afronta en los umbrales del Tercer Milenio:1. El
que Roma está centralizando cada vez más el funcionamiento institucional de
la Iglesia, ampliando y universalizando cada vez más su “magisterio” , siendo así
que la cultura del mundo, liberal y democrática, demanda descentralización y
autonomía. 2. La disminución desmesurada, absoluta y relativa, de sacerdotes, de
religiosos y religiosas, unida al rechazo de las soluciones que se presentan. 3. Los
diálogos que la Iglesia católica está sosteniendo, quizá como nunca, con las demás
confesiones cristianas y no cristianas, cuando los integrismos y sectarismos son
más virulentos en el entorno religioso pluralista.4. Una relación creciente con el
mundo moderno cuya secularización es irreversible; y con las culturas africanas,
asiáticas, que parece no tener cabida en el modelo de Iglesia, latino y occidental.
60 Juan Pablo II: Un Pontificado entre dos milenios Lumen, Buenos Aires-
México, 2000, p.31.
100
61 Juan Pablo II Cruzando el umbral de la esperanza (Plaza & Janés, Barcelona 1994)
Editado por V. Messori. Traducción de Pedro Antonio Urbina. Pp.221-222
62 Biografía de Juan Pablo II. Testigo de Esperanza Plaza y Janés, Barcelona 1999
p.1125. p.1129
63 Javier Tourón Porto “George Weigel: Biógrafo de Juan Pablo II”. Nuestro
Tiempo Pamplona, Marzo 2001, nº 561. 46-50
101
102
65 Ernesto Yepes Jorge Basadre. Memoria y destino del Perú. Textos esenciales
(Fondo Editorial del Congreso del Perú, Lima 2003).
66 Cit. en WEIGEL, G., Biografía de Juan Pablo II. Testigo de Esperanza,
Barcelona 1999 p.1149 James Monti The King´s Good Servant But God´s First,
Ignatius Press, San Francisco, 1997, p.15.
67 Llorca-G.Villoslada-Laboa Historia de la Iglesia Católica. V. Edad Contem-
poránea BAC, Madrid, 1999. pp.509-536
68 Ibídem. p.529
103
104
105
106
107
72 Manuel María Bru Sigue con nosotros. Memoria de la quinta visita apostólica
de Juan Pablo II a España (3-4 mayo 2003) EDIBESA, Madrid, 2003: “uno
de los principales frutos de este viaje apostólico de Juan Pablo II a España
seguramente sea el que ahora podamos vernos en el espejo de sus ojos,
pequeños y penetrantes, como el primer día de su pontificado, con los que el
hombre más importante de esta encrucijada de la historia de la humanidad en
este cambio de milenio nos mira y nos entiende” p.20
108
109
73 VELASCO, Miguel Ángel Juan Pablo II. Del temor a la esperanza 3 t, Madrid,
1993
74 Ibídem, p. 159.
75 Ibídem, p.118.
110
111
78 Cit. en M.A. Velasco Juan Pablo II, ese desconocido (Anécdotas humanas de un
Papa fascinante) Planeta-Testimonio, Madrid, 1998.p.178
112
79 Redemptor hominis 1 y 22. En Tomás Morales, S.J. Hora de los laicos, Madrid,
1995, pp.574-575
113
114
115
116
117
118
119
120
121
5. Su Testamento
Testamento del 6 de marzo de 1979 (y añadiduras sucesivas): “Totus
Tuus ego sum” En el nombre de la Santísima Trinidad. Amén.
“Velad, pues, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor” (cf.
Mt 24, 42). Estas palabras me recuerdan la última llamada, que lle-
gará en el momento en el que quiera el Señor. Deseo seguirle y de-
seo que todo lo que forma parte de mi vida terrena me prepare para
ese momento. No sé cuándo llegará, pero al igual que todo, pongo
también ese momento en las manos de la Madre de mi Maestro:
“Totus tuus”. En estas mismas manos maternales lo dejo todo y a
todos aquellos a los que me ha unido mi vida y mi vocación. En es-
tas manos dejo sobre todo a la Iglesia, así como a mi nación y a toda
la humanidad. Doy las gracias a todos. A todos les pido perdón.
122
123
124
125
126
127
128
129
130
131
132
133
134
135
136
137
138
139
140
141
142
143
144
145
146
147
149
150
151
152
153
155
156
157
158