Está en la página 1de 6

SOCIEDAD Y ESTADO, “EL ESTADO MODERNO.

BREVE RECORRIDO
POR SU DESARROLLO TEÓRICO”

UNIDAD 1: SOCIEDAD Y ESTADO: NOCIONES FUNDAMENTALES


1. 0. Introducción
El Estado moderno surge y se desarrolla en Europa, a partir del siglo XIII y hasta finales del
siglo XIX.

A partir del siglo XV, los estados europeos buscan expandirse territorialmente, apelando a la
conformación de ejércitos cada vez más numerosos y poderosos. El sostenimiento
administrativo financiero y económico de estas fuerzas fue convirtiéndolos en unidades
burocráticas codiciosas de recursos. Las ciudades Estados eran unidades independientes
que concentraban sus actividades principalmente en los ámbitos militares, fiscales, en la
protección de sus súbditos y administración de justicia.

Hacia el siglo XV y XVI, los “reinos” poseían grandes territorios pero la relación entre
monarcas y población es indirecta. Existen intermediarios (duques, señores feudales) que
tratan directamente con los súbditos y obtienen a cambio de tributo y hombres, libertad para
administrar su territorio. El estado se ocupaba de lo administrativo, dejando lo social
(educación, salud, bienestar social) a las comunidades. Recién a partir del siglo XIX,
producto de las tensiones sociales, estos temas serán obligación del Estado.

Así, los Estados modernos se distinguen de sus antecesores por las siguientes
características:
• Centralización de poder: El Estado pone bajo su control todas las relaciones sociales,
económicas y políticas, no aceptando dentro de su territorio ningún otro poder equivalente
que lo reemplace.
• Concentración de funciones en manos de una burocracia profesional: Surge la gestión
basada en parámetros profesionales e impersonales, sobre criterios de racionalidad en la
administración. Los funcionarios perciben un salario y poseen idoneidad para la tarea que
antes realizaba la comunidad.
• Progresiva secularización: Separación de la política y administración de toda religiosidad
como fuente de la fundamentación.

El Estado moderno se trata de una construcción política, es decir, es fruto del desarrollo
histórico, por lo que está sujeto a cambios.

1. 1. La política moderna en el centro de la escena


Los Estados modernos tienen relación directa con la política.
Para Aristóteles, la política se relaciona con la Polis griega, con la administración de la
ciudad. En la Edad Media la política era un arte vinculada con el deber ser. A partir de fines
del siglo XV, la política se va alejando de lo religioso, y pasa a estar determinada por
acciones de individuos e instituciones. Así, la política pasa a ser una ciencia que predice,
calcula, mide y ejecuta. La política moderna incorpora el concepto “medios-fines”. Es en esta
etapa que comienzan a participar de la política cada vez más los sectores sociales.

1. 2. Definición del concepto de Estado


Una de las características centrales que persiguen los Estados es la “obediencia” de parte
de los individuos e instituciones, que se consigue a través del control ideológico o
convencimiento en la legalidad y legitimidad del sistema. Sólo cuando este recurso da
muestras de agotamiento puede recurrirse a la coacción física. Además podemos encontrar
los atributos que poseen los Estados, que son utilizados para llevar a cabo sus objetivos:
 La soberanía: Reconocimiento de su poder por los otros Estados.
 El monopolio de los medios de coerción: Uso legítimo de la fuerza.
 El desarrollo de una burocracia profesional y autónoma de la sociedad.
 La capacidad de generar sentimiento de pertenencia en los habitantes.
Conformación del Estado
Soberanía: Posee un control exclusivo sobre su territorio y sobre la población que la habita.
No puede ser cuestionada.

Territorio: El Estado controla una porción de tierra, espacio aéreo, ríos interiores, espacio
marítimo y riqueza del subsuelo. Éste está estrictamente delimitado y reconocido por los
demás Estados.

Población: Conjunto de personas que residen en el territorio.

Aparato administrativo burocrático: Instituciones que controlan y gestionan la vida


cotidiana de la población. Es el brazo ejecutor de la política sea en tareas irrenunciables
(Defensa exterior e interior, cobro de impuestos, etc.) como en las sociales (Salud,
educación, seguridad social).

Gobierno: Se constituye para la toma de decisiones trascendentales y es quien determina el


rumbo específico. El gobierno representa al Estado y actúa en su nombre.

1. 3. Sistema político, régimen político y sociedad civil


La sociedad civil es el cuadro de clivajes sociales que pueden dar lugar a un primer nivel
asociativo a partir de la solidaridad de intereses. Incluye a todos los actores económicos y
sociales (Medios de comunicación, Iglesia), instituciones privadas, civiles y públicas
(Burocracia civil, fuerzas de seguridad y armadas).

El sistema político abarca la suma del Estado y sus instituciones con la sociedad civil y todas
las fuerzas vivas que la componen, es decir que, incluye al Estado, la sociedad civil y el
régimen político. La dinámica social, económica y política da a la frontera entre los
conceptos un carácter móvil. La historia produce corrimientos (Como por ejemplo, la
reducción del aparato estatal y el aumento de la sociedad civil).

El régimen político está compuesto por la forma de gobierno, el sistema electoral y el


sistema de partidos, entre otros. Las formas de gobierno se orientan a distinguir cuál es a
mejor organización política institucional para cada país (Presidencialista, parlamentaria,
etc.). En Argentina, primero con la Ley Sáenz Peña y la asunción de Yrigoyen (No se cambia
la forma de gobierno), luego con la sucesión de golpes militares, más tarde con la vuelta a la
democracia y finalmente con la reforma constitucional de 1994, vemos la constante
modificación del régimen político.

1. 4. Principales corrientes de pensamiento en torno al Estado


Max Weber (1894-1920)
Los factores que toma en cuenta para analizar al Estado moderno son la religión, el
protestantismo, el avance del comercio (Fuente de riqueza) y del capitalismo (Forma
dominante de producción económico-social). Weber define al capitalismo como un
“fenómeno moderno”, dado que la racionalidad es lo que caracteriza a sus instituciones.
La titularidad de la autoridad se manifiesta en la dominación y el Estado la ejerce a través
del “monopolio legítimo de la fuerza”, y requiere de una administración continua. El poder del
Estado es superior al de los individuos e instituciones dentro de un territorio. Para Weber la
política es el enfrentamiento entre distintos sectores sociales, políticos y económicos por
obtener el poder. Esta lucha se resuelve por la movilización de los recursos y a través de la
fuerza.
El objetivo final del Estado moderno como organización política institucional es el
mantenimiento de la dominación. La otra gran cuestión de Weber es la legitimidad. Ésta es
fundamental para la dominación política, es efectiva sólo si quien obedece está convencido
de su acción como su deseo interno y no experimenta la dominación como un acto ajeno a
su voluntad.
Weber plantea 3 tipos de dominación política legítima:
Tradicional: Creencia en la santidad de los ordenamientos y los poderes señoriales
existentes desde siempre. Rol importante el conocimiento personal entre el “señor” y los
“súbditos”.

Carismática: Hay un contacto personal entre el líder y los seguidores. Ésta se da por las
dotes extraordinarias de mando del caudillo y en la creencia de sus seguidores de que
posee virtudes sobrenaturales.

Racional-legal: Basada en que la ley es impersonal y racional. En la sociedad capitalista


(sociedad de masas), la dominación es cada vez más burocrática: el Estado moderno
administra, gestiona y controla a través de funcionarios asalariados, expedientes y criterios
racionales que garanticen la efectividad. Esto se sostiene por el cobro de impuestos.
En la sociedad capitalista (Sociedad de masas), la dominación es cada vez más burocrática:
el Estado moderno administra, gestiona y controla a través de funcionarios asalariados,
expedientes y criterios racionales que garanticen la efectividad. Esto se sostiene por el cobro
de impuestos.

Karl Marx (1818-1883) y Friedrich Engels (1820-1895)


Son contemporáneos a la Revolución Industrial y al desarrollo del liberalismo, al cual critican.
Sus ideas centrales respecto al Estado son:
1. El Estado es clasista, es un instrumento de la clase dominante. En el Estado moderno
sería instrumento de dominación de la burguesía para la explotación de la clase obrera.
2. La política burguesa oculta la explotación del proletariado y es ineficaz para su
emancipación.
3. El cambio social sólo provendrá de la organización independiente del proletariado como
sujeto histórico y de la toma del Estado por medio de la fuerza para, luego de un período
de organización (Dictadura del proletariado), destruirlo definitivamente.
Para ellos, la sociedad se divide en clases; en la época moderna se va simplificando
hasta reducirse a dos: la burguesía, propietaria de los medios de producción y el
proletariado, poseedor de su fuerza de trabajo. Ambas clases son antagónicas y sus
posiciones, irreconciliables. La existencia de una sola clase se dará en la medida que ésta
tome conciencia de su situación de explotada y actúe en consecuencia.
La burguesía, luego de establecer la gran industria y el mercado mundial, conquista el
poder político del Estado. Así, mientras la filosofía de la historia de los autores
precedentes busca perfeccionar el Estado, Marx procede hacia la extinción de mismo.
Marx describe 2 esferas: la de la estructura económica (o producción), es decir, la de la
sociedad civil y la de la superestructura jurídico-política, o sea, el Estado. La función de
esta última esfera es la reproducción del sistema capitalista. La supuesta igualdad jurídica
no resuelve la verdadera inequidad que se da en la otra esfera, donde el obrero es
explotado en tanto su salario no cubre todo el valor que genera su fuerza de trabajo. Si
bien las instituciones burguesas aparecen como “neutras”, Marx señala que se trata de
una extensión de la dominación burguesa sobre los sectores oprimidos.

Eduard Bernstein (1850-1932)


La crisis del capitalismo de 1873, no hizo más que fortalecerlo. El Estado burgués comenzó
una reformulación de sus funciones incorporando algunas de las demandas del movimiento
obrero (Legalización de sindicatos, apertura democrática), lo que hizo que Bernstein
propusiera el revisionismo: un intento de superación de las ideas catastrofistas que
promueven la teoría revolucionaria de Marx, ya que el capitalismo está fortaleciéndose y las
condiciones obreras son mejores. Entonces, propone obtener cambios en el interior del
sistema capitalista. De esta conclusión se desprende la nueva concepción del Estado: deja
de ser clasista y pasa a ser un instrumento neutral ante las clases. Bernstein propone la idea
de un Estado Popular que va a ser incorporado por la Socialdemocracia que trata de
incorporar reformas en el Estado a través del sufragio.

Vladimir Illich Ulianov (Lenin) (1870-1924)


La posición bernsteniana generará una división en el marxismo: el revisionismo (Bernstein),
la corriente ortodoxa (Kautzky) y la “generación de 1905” (Trotsky, Lenin). Ésta última
retoma la idea de la toma del Estado mediante la acción revolucionaria, para su posterior
destrucción. Lenin distingue entre 2 elementos que componen el Estado: el elemento
político, la función represiva (Integrada por fuerzas de seguridad y la burocracia clasista),
que debe ser destruido, y el elemento técnico, o neutral que debe ser ocupado por el
proletariado y ser puesto en acción para la transformación socialista.

Antonio Gramsci (1891-1937)


Sostiene que la revolución rusa de 1917 tenía características excepcionales que no podían
repetirse en Occidente, ya que el Estado capitalista tenía el control y la dominación política
que iba más allá de lo represivo.

Hacia 1870, el sistema social y productivo se complejiza y el Estado se readapta


relacionándose con la sociedad civil a través de instituciones mediadoras como los partidos
o sindicatos. Así, no alcanza con la toma del Estado, se hace necesario dominar toda una
serie de instituciones para que la estrategia revolucionara sea eficaz. Propone para ello dar
batalla en la sociedad civil antes de la toma del poder liderando a los sectores afines y luego
dominando a toda la sociedad.

El concepto de Estado ampliado está compuesto por Estado y sociedad civil, cuya relación
genera la hegemonía política, lo que implica dirección política y cultural, por lo que su
función es el sostenimiento de la dominación sin el recurso de la violencia (Esta potestad es
como si no existiera), lo que la hace muy efectiva. No sólo el Estado ejerce dominación sino
que el complejo institucional privado también aporta a la misma y a la producción ideológica.
En el Estado y en la sociedad civil se hallan los especialistas e intelectuales encargados de
ejercer la dominación y dirección hegemónica. En el Estado se encuentra esta doble función
de coerción y de consenso; ésta última, compartida con la sociedad civil y su entramado de
instituciones privadas. Así, la sociedad civil será denominada el nuevo partido político de
masas.

Fascismo
Surge a principios de siglo XX en Italia, bajo la dirección de Mussolini (1883-1945), fundador
del Partido Fascista. Se desarrolla en un contexto de auge de la sociedad de masas y de
crecimiento del movimiento obrero. El fascismo se opone a la democracia, al socialismo y al
comunismo, presentando la faceta autoritaria del Estado capitalista, dotado de política
expansionista y buscando legitimidad en la tradición y en el pasado glorioso.
Durante la entreguerra, Europa se aleja de la democracia liberal y la división de poderes,
como España (Franco) y la Alemania nazi, cuya legitimidad se basaba en las teorías de
superioridad racial y biológica que darán lugar al exterminio.

El fascismo es un sistema de dominación autoritario caracterizado por un monopolio de la


representación política por parte de un partido único y de masas organizado
jerárquicamente, una ideología fundamentada en el culto al jefe, una exaltación de la
colectividad nacional y en el desprecio de los valores del individualismo liberal y también una
confrontación ante el socialismo y el comunismo. Además, exalta al Estado como fin último.

Charles Maurras (1868-1952)


Reivindicó posiciones extremas, relacionadas con la violencia política, el exterminio y el
terror. Fue un defensor de la tradición monárquica, el catolicismo y de las libertades
pactadas, y un opositor de la democracia liberal, que causa desorden social y flexibilidad de
las normas.
El orden político debe estar sujeto a un interés nacional como colectivo general. Los
habitantes basarán su acción en los principios de patria y tradición. El Estado debe fijar el
rumbo de la Nación a través de un líder fuerte, y debe impedir la integración del “diferente”
(de raza, política, religión) y se debe privilegiar el interés de la nación.

Promueve un orden basado en la tradición monárquica y en los valores católicos, aunque


también la no integración y el restablecimiento de la autoridad nacional. El Estado para
Maurras debe ser mínimo, guiado por la autoridad monárquica y organizada en base a
corporaciones religiosas, militares y profesionales. Lucha por un poder “descendente”, aquel
que proviene de las diferencias derivadas de la desigualdad en el acceso a los recursos.

1. 5. Tipos de Estado
Estado absolutista
Se desarrolla en Europa entre los siglos XVI y XVIII. Se refiere a la forma de ejercer el poder
absoluto por parte de los monarcas. Es un régimen político constitucional (Sometido a
limitaciones y normas) no arbitrario (La voluntad del monarca no es ilimitada), de tipo
secular. En este tipo de Estado comienza a delinearse el Estado moderno.

Una característica es la concentración de poder, respecto a los reinos menores y la


capacidad de imponer decisiones en el territorio de éstos. El carácter secular refiere a la
separación de lo religioso y lo político y a que la organización administrativa comienza a ser
racional y eficiente.

Las políticas expansionistas (España y Portugal) también fueron llevadas a cabo por
Estados absolutistas. La teoría económica de la época era el mercantilismo, que afirmaba
que la riqueza de una Nación se basaba en la acumulación de riqueza (oro y plata), para lo
que requería un Estado soberano.

Estado liberal
El liberalismo es influido por John Locke y Adam Smith. Éste surge en Inglaterra, a mediados
del siglo XVII y su auge es en el XVIII, teniendo como causa la “Gloriosa Revolución” de
1688, donde se abandonaron los postulados del Estado absolutista y se comienza con los
lineamientos de una monarquía constitucional. Los postulados básicos de este Estado son:
 Defensa del individuo en oposición a una sociedad estamental y corporativa (feudal).
 Defensa de la libertad económica, política, religiosa y cultural.
 Defensa de la propiedad privada, base de desarrollo económico y político.
 División de poderes, para evitar poderes absolutos.
 Centralidad de la ley y de la constitución para evitar la arbitrariedad.
 Ideología racional del individuo y secularización social.
 Idea de construcción política a través del contrato voluntario.
 La economía se basa en un orden natural en el cual no se debe intervenir.

El Estado mínimo tiene la función de garantizar el funcionamiento social a través de paz,


seguridad, administración de justicia y defensa de límites geográficos del Estado. La
generación y distribución de la riqueza queda en manos del mercado y de la sociedad civil.
El protagonista de este período es la burguesía, que se va desarrollando como fruto del
aumento del comercio y de la producción, ganando influencia social y política (Clase
dominante). El creciente comercio internacional y la mayor conexión entre los continentes
(Europa y periferia), estimularon la adopción de estas ideas. Sin embargo, el mismo
desarrollo social, político y económico hizo que el Estado mínimo resultara ineficiente y
tuviera que replantearse otras funciones como la salud, educación, etc. Aun así, no se
abandonaron los principios básicos del liberalismo: defensa de la propiedad privada y la
libertad de empresa.
Estado de bienestar
Aunque algunas acciones comiencen luego de la crisis de 1929, a partir de 1950 es cuando
se asienta, para caducar hacia finales de 1970. En este se da una reconceptualización de
las funciones del Estado, a manos de John Keynes. Se desarrolla en una sociedad
capitalista industrial con amplia base de trabajadores y alta tasa de sindicalización. Su
objetivo era mantener altos niveles de empleo y poder adquisitivo para sostener altos niveles
de productividad y una política redistributiva, además de la satisfacción de las necesidades
básicas de todos los individuos en materia salud, educación, servicio social, empleo, etc.
(Derecho político). El Estado será el árbitro entre los intereses del capital y los del trabajo.
Otra característica es el alto porcentaje de PNB (Producto Nacional Bruto) destinado a
gastos sociales. Los recursos surgen de un sistema fiscal que grava a las empresas y al
sector financiero. Estos niveles de igualación social y justicia redistributiva se basan en una
economía mixta: fuerte manejo estatal de la economía. Las decisiones económicas son
también políticas, consensuadas por los distintos sectores sociales y económicos: el capital,
el trabajo y el Estado.

Estado neoliberal
La crisis del petróleo de 1973 hizo que comenzara a surgir una nueva corriente economicista
que hace a la organización social en vez del Estado de bienestar (Gran déficit fiscal). Existe
una relación entre el surgimiento del neoliberalismo y la globalización, que se fortaleció tras
la caída de muro de Berlín (1989) y fue regulando la capacidad de los Estados nacionales
para regular la política económica. El mercado cada vez se hace más independiente y los
Estados deben competir por la atracción de los capitales. Las características básicas del
neoliberalismo son: se pasa de un paradigma basado en lo estatal y público a uno basado
en lo individual y privado; la centralidad deja de ser el trabajador para ser el consumidor.

El proceso de reforma del Estado estuvo marcado por la necesidad del capital para competir
en el mercado internacional. Éstas fueron:
 Paso de las decisiones económicas a la esfera del mercado. Desarrollo, capacitación,
inversión, distribución y acumulación quedan en manos de las corporaciones económicas
 Desregulación: Eliminación de los controles para ahorrar costos y aliviar el proceso
productivo permitiendo la “libre competencia”.
 Privatización: Para capitalizar a las empresas públicas y que el Estado se desentienda de
su gestión limitándose al control.
 Apertura de la economía: (Libre entrada de bienes, servicios y capital) Capital para la
privatización, préstamos al Estado y especulación financiera.
 Eliminación de controles a la actividad financiera, desgravación fiscal al sector financiero y
a las grandes empresas, para promover la radicación de capital extranjero.
 Achicamiento del gasto público: La meta es el superávit fiscal.
 Flexibilización laboral para minimizar costos al contratar empleados y que radiquen
empresas internacionales.
 Descentralización de las funciones de Estado: Salud y educación pasan a manos de las
provincias.

Reagan en EE.UU. y Thatcher en Inglaterra aplicaron esta política neoliberal, así como
Carlos Menem en Argentina.

También podría gustarte