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Manual de Redacción
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COMO ESCRIJ?IR BIEN CÓMO ESCRIBIR BIEN
ENESPANOL EN ESPAÑOL
ltlanualdeRedacción
Graciela Reyes
ARCO!LIBROS ,S.L.
ARCO/LIBROS, S.L.
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l.J edición, l 998. ,. A Lorena, Fl<mmcia, Afariano, Glüria y Emanuel
2.a edición, 1999. '
3.a edición, 2001.
4,ª edición, 2003.
5.a edición, 2006.
6." edición. 2008.
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© by Arco Libros, S. L., 2008 ·~..
Juan Bautista de Toledo, 28. 28002 Madrid 1 '.
ISBN: 978"14-7635-327-1
Depósito legal: M. 16.258-2008
Printed in Spaín - Impreso por Lave!, S. A (Madrid)
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ÍNDICE GENERAL
PARTE l
EL L&'l\IGUAJE ESCRITO:
GÉNEROS. REGISTROS, GRAMÁTICA
CAPh:uLO 1: GÉNEROS, EXPECTATIVASYCONTEXTOS (CÓMO ES LA
COMUNICACIÓN ESCR!TA) ....................................................... . 17
Los géneros textuales ......................................................... .. 17
Texto y comunidad discursiva ............................................. . 20
El papel de las expectativas en la comunicación verbal ............ . 22
Género y conf<!xto ............................................................... . 25
Género e intertextualidad ................................................... .. 29
Estructura discursiva y fun<Wn ........................................... . 32
La amtextualiz.aciün .......................................................... . 34
Conclusiones ..................................................................... . 37
-Ejercicios ........................................................................ . 38
Bibliografía ................................................................~ ....... . 46
CAPÍTIJLO 2: REGISI'.ROS, ESTILOS YT!POS DE TEXTOS (CUÁLES SON
LAS VARIEDADES DE LA LENCJ:J.HiSCRII'A) .................................. . 47
El registro ........................................................................ .. 47
Variacinnes de registro: ejempws .......................................... .. 50
Variantes dialectak. y de fomu:didad .................................... . 53
Las dimensiones textuaks .................................................. .. 58
La dimemión informativa .................................................. . 63
-Ejercicios ........................................................................ . 69
Bibliografía ......................................................................... .. 80
CAPÍTUW 3: LA CORRECG'!ÓN GRAMATICAL (l'OR QVÉ EVITAR LOS
liiRRORES Y CÓMO HACERLO) ................................................... . 80
Cromática prescriptiva, gramática descriptiva, y norma ......... .. 80
8 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPÁ'\JOL ÍNDICE GENERAL 9
segundo lugar, nos ocupamos del proceso de escribir: cómo se expresivos del lenguaje, que quedan exhibidos y celebrados.
incorporan los contenidos nuevos a los contenidos ya presentes Esto es verdad, y debemos leer literaturn para nuestro placer,
para los lectores, cómo se utilizan los recursos sintácticos y léxi- para aumentar nuestro conocimiento del mundo y de nosotros
cos del español, cómo se distribuye la información en la frase, mismos, y para observar el lenguaje en todo su esplendor. Pero
qué papel tiene el vocabulario, cómo se planifica el escrito. En no es necesario emplear esos textos como modelos, si lo qne
la última parte se enseña a escribir los textos imprescindibles para queremos escribir es más modest.o y más práctico, quizá nna
la vida universitaria y profesional. solicitud de empleo o una monografía sobre un tema de histo-
En cada capítulo, después de una «charla* sobre qué es lo que ria. El hábito de imitar textos literarios lleva a muchos jóvenes
hay que saber sobre el español escrito para escribir mejor, o bien estudiantes a cultivar un estilo inadecuado, demasiado subjeti-
sobre cómo redactar una tesis o una carta, propongo una serie vo, a veces florido y hasta pretencioso, en escritos que requieren
de actividades con las que intento ayudar a los lectores a desa- solamente sencillez y claridad.
rrollar sus destrezas y también su interés por la escritura. la claridad es lo más dificil de lograr. El lenguaje es ambiguo
Todas las sugerencias, instrucciones y guías parten del aná- por naturaleza, y el buen escritor debe sujetarlo, afilarlo, al escri-
lisis de las propiedades de los textos. No nos comunicamos con bir su obra. Hacen falta muchos borradores para lograr dos fra-
oraciones, sino con textos, es decir, con estructuras lingüísticas ses felices, que cligan, con elegancia y energía. lo que queremos
significativas, informadas por la intención del hablante, que decir con ellas. Trataremos de aprender cómo hay que mani-
funcionan como contribuciones al gran diálogo con los demás pular el lenguaje para hacerlo rendir al máximo, y crecer noso-
en que consiste una parte fundameutal de nuestra vida. Casi tros, enriquecernos cognoscitivamente, durante el proceso.
todos los temas relacionados con la textualidad se están estu- Para escribir bien hay que sentir el deseo de comunicar algo
diando con mucho entusiasmo hoy en día, en disciplinas como y el placer de trabajar con la lengua española, aunque este tra-
el análisis del discurso, la pragmática lingüística y las teorías bajo sea difícil y exigente. Como se verá, recomiendo saber
sobre la enseñanza de la composición. Trato estos asuntos teó- apreciar tanto las novedades lingüísticas que enriquecen nues-
ricos de modo accesible, no técnico, y siempre con vistas a su uti- tra expresión cuanto la diversidad de nuestra lengua, hablada
lidad. Los lectores que se sientan tentados a seguir leyendo y escrita por tantas comunidades en el mundo. Pero aconsejo res-
encontrarán sugerencias al final de cada capítulo y en la petar las convenciones que hacen más aceptables unas formas
Biblíografia general. que otras, pues escribir bien es escribir en el buen español de
No utilizo, casi, textos literarios como ejemplos, ya qne este todos.
manual no trata de la escritura literaria. Todo texto -no solo Al final del libro, como charla de sobremesa, he incluido
el literario- es el producto de un trabajo creativo compl"jo, veinte sugerencias prácticas para escribir mejor. También se
salvo, quizá, algunos escritos burocráticos, donde meramente se encontrará al final un breve diccionario de términos útiles para
repiten fórmulas. El trabajo de creación de un cuento literario el escritor o escritora (donde se explica por qué son útiles). La
es, básicamente, el mismo que el trabajo de creación de cualquier Bibliografia fmal incluye las obras teóricas mencionadas en cada
relato no literario, pero la literatura tiene convenciones pro- capítulo y además los diccionarios más recomendables.
pias, y poner estas convenciones como modelos puede resultar A lo largo del cuerpo del libro el lector encontrará no sola-
confoso. mente los habituales titulillos que van separando los temas, sino
Una razón habitual para enseñar la escritura con modelos frases intercaladas en negrita, a derecha e izquierda, que resu-
literarios es que en estos se llevan más lejos todos los recursos men, cada dos o tres párrafos, lo que se va tratando. Estas fra-
14 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
implicar una serie de cosas negativas, corno que el estudiante no existen siempre, son parte de las rutinas gradas a las cuales
es inteligente, no es brillante, no es excepcional ... Estos últi- realizamos tantas interacciones lingüísticas por día sin mayo-
mos son adjetivos bastante frecuentes en el género «carta de res esfuerzos o malentendidos. Pero al escribir podemos
recomendación», de modo que si no están, y en su lugar apa- perderlas de vista. si ·no .nos 'hemos ¡>!anteado ~JI.e
recen otros más humildes como «aplicado,,, el que lee la carta el prohlema,<ilel género al que pertenece nues- glinero
puede deducir que el estudiante en cuestión tiene pocos méri- tro escrito.
tos. La definición habitual de género es la siguiente: género
Los géneros, que son productos culturales, han codificado es una agrupación de textos que cumplen funciones socia!es
las maneras en que se expresan ciertos significados, y por eso similares y tienen ciertas características formales en comun.
provocan expectativas que automáticamente deben cumplirse Cuando decimos que un texto cumple una función, en reali-
para lograr la construcción del signifkado intentado. En una dad queremos decir que el autor o autores del texto cumplen
carla de recomendación se ensalza, convencionalmente, lo una función, ya que son las personas, y no los textos, los que
bueno del recomendado, incluso se exageran un poquito sus cua- realizan actos sociales. Esta distinción parece trivial, pero no
lidades. Cuando la convención no se cumple, pueden producirse lo es. Nos conviene aclararla, puesto que que-
significados extras, por l"jemplo que el recomendante tiene remos asumir con éxito el papel de autores rexto e~
reservas sobre el recomendado. de textos.
Como sucede con las demás creaciones culturales, las con- Un texto es, simplemente, un conjunto de símbolos lin·
venciones genérícas no son ftjas, sino variables: en ciertos gru- güísticos utilizados por una persona para construir un signifi-
pos se usan cartas de recomendación más laudatorias que en cado. La finalidad de quien ha construido tal significado es
otros grupos. Al que compone una carta de este tipo le intere- comunicar algo a alguien, en el sentido más amplío de «comu-
sa tanto expresarse con corrección, claridad y poder persuasi- nicar», que incluye no solo transmitir información fáctica, sino
vo cuanto dominar perfectamente las convenciones que regu- también expresar sentimientos, emociones, o simplement~
lan el significado de su escrito. Por supuesto, hay también hacerse presente frente a otro. De modo que el texto comum-
variaciones personales, e incluso la posibilidad ca porque tal es la intención de su autor, y eLautor debe valer-
de innovaciones en las normas genéricas, pero se de todos los recursos lingüísticos necesarios para que esa
convenciones si el cambio es demasiado drástico, si compro- comunicación se realice felizmente.
genéricas en la En un texto escrito hay dos ausencias: la del espacio y la del
mete la interpretación del escrito, este no cum-
lengua ural tiempo compartido. La comunicación escrita no se hace cara a
plirá eficientemente su función.
En todas las transacciones lingüísticas, no solamente en cara, y a veces hay, o es pasible que haya, gran distancia temporal
las escritas, la interpretación depende no solo del significa- entre los interlocutores. Para compensar esas carencias, la socie-
do de las palabras sino también de las convenciones gené- dad ha creado una serie de normas, más elaboradas que las
ricas. Si una chica le pregunta a su novio cómo le queda su normas que rigen los textos orales. La escritura nació para satis-
vestido nuevo y él contesta cortésmente «bien», es proba- facer la necesidad de preservar información importante (quizá,
ble que la chica se desilusione, deprima u ofenda (según en sus comienzos, transacciones comerciales); desde sns oríge-
sus tendencias o relación con el novio), puesto que ella espe· nes, los principios y reglas de la escritura tienden a asegurar
raba un adverbio mucho más vehemente, en consonancia que el contenido del texto y la intención con que fue com-
con el género de los elogios y cumplidos. Esas expectativas puesto sé mantengan y transmitan sin equívocos.
20 CÓMO ESCRIBIR BIE1' F.N ESPAÑOL GÉfilROS, EXPECTATIVAS Y COl'HEXTOS 21
TEXTO Y COMUNIDAD DISCURSNA fines propuestos por una comunidad discursiva, y que tienen cier-
tos rasgos lingüísticos obligatorios. Los autores, para ':".mumcai:se
Todo texto se compone con la intención de que cumpla a través del texto deben conocer los ra>gos de la acnvidad social
~guna funci.ón dentro de una comunidad de personas que uti- en la que van a intervenir, la estructura de la comunidad dis-
lizan la escntura para comunicarse. La comunicación inintt~ cursiva en que se insertará su texto, y las convenciones de com-
rrumpida entre personas que tienen algo en común (grupos posición que exige el género. correlación
de médicos, de filatelistas, de profesores de español, de aficio- Los rasgos lingüísticos del texto deben tener entre rasgos del
nados al cine, etc.) asegura la cohesión de cada grupo y también relación con los atributos de la actividad social escritv y
el grado de poder relativo que tiene cada persona dentro del realizada por el gn1po. Supongamos que la acti- actiirúltul del
grupo. Es el discurso común, codificado a través de un género vidad social consiste en transmitir información grapo
comunidades (eventualme~te de más de un género), el que dentro de la comunidad académica, mediante
discutTivas forma, ma'.'nene, al grupo. un artículo publicado en una revista especializada. El autor de~
A esos conJun tos de personas que tienen activi- artículo debe conocer cómo se realiza esa actividad, según que
dades sociales y textos en común se los llama «comunidades regulaciones sociales. ¿Es socialmente aceptable, por ejemplo, qn<_'
discursivas». U na comunidad discursiva se caracteriza por tener el autor indique que sabe más de ese tema que otros autores:'
unos objetivos acordados entre los miembros, objetivos que son Supongamos que sí, que es aceptable (suele serlo). Pero enton-
públicos. Los profesores de español, por ejemplo, tienen revis- ces hay que obedecer las regulaciones sociales sobre cómo ates-
tas especializadas donde intercambian información relaciona- tiguar esa superioridad. Es aceptable decir, por ejemplo, que
da con su trabajo, celebran reuniones cada tantos meses o años, tulO es el autor de un experimento nunca hecho antes, que prue-
etc., con fines bien daros, generalmente expresados por escri- ba de manera con elusiva alguna cosa que nadie sabía. No es
to en los reglamentos de sus asociaciones. aceptable, en cambio, anunciar a los lectores que .todos los que
Además, una comunidad discursiva debe asegurar ciertos han investigado ese tema antes son tontos. Lo primero es veri-
mecanismos de intercomunicación entre sus miembros (que ficable, lo segundo no, pues lo segundo es una opini?n· Y un
puede ser, por ejemplo, la comunicación por medio del correo artículo científico tiene que dar datos que se puedan verificar: ese
electrónico, por medio de revistas especializadas, etc.), y uno o rasgo es obligatorio, ya que la función de tal género de textos es
varios géneros textuales en los que predominan ciertos temas, dar información correcta y contrastable.
cierto vocabulario y ciertas fórmulas. Los escritos de los grupos Los rasgos lingüísticos adecuados para transmitir autoridad
que intercambian información sobre medicina natural o «alter- sobre un tema están regulados por las leyes discursivas propias
nativa,, son diferentes, en todos los rasgos mencionados, de los del género. En un texto de tipo expositivo hay que.respet~
escritos de las personas que comunican sus experiencias sobre cierta estructura: hay que delimitar el territorio propio, aludtr
la Antártida. ~eden encontrarse ejemplos de grupos seme- a investigaciones anteriores, establecer un lema, o problema,
jantes. y much1s1mos otros, en Internet; la electrónica nos ha pro- o pregunta, y finalmente ofrecer información nueva, que ine-
visto de un nuevo medio, poderoso y de gran alcance, para la vitablemente será evaluada por el autor del texto, con mayor o
comunicación escrita. menor timidez, como superior a la ofrecida hasta el momento
En suma; un género es una clase de hechos comunicativos. por otros. Y para eso se utilizará. un registro adecuado. a la_ cm.nu-
que suceden en un contexto social, de acuerdo con ciertas nor: nícación entre especialistas: formal, con vocabulario tecmco,
mas y convenciones, que se adecuan específicamente a ciertos sin información superflua, etc.
22 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPfü>i¡oL <;fi.NEROS, EXPEGTATN"-5 Y CONTEXTOS 23
Como un género es una codificación social que sirve para '"' mentir, por ejemplo, en realidad es que quiere decirnos otra
facilitar la comunicación, estableciendo convenciones, fórmu- ('osa distinta de la que dice.
las y estilos que se vuelven rutinas, el género crea Yasí es. Por lo general, si infringimos una norma y contra-
expectativas fuertes en el lector. Cuando abrimos d!'cirnos claramente una expectativa, es porque
un periódico y :leernos que murió un per!lOnaje r¡u<'remos que el interlocutor saque algunas infe-
público o que aumentó la gasolina, creemos esas r<'IH"ias e interprete un significado extra, que
informaciones porque ni se nos ocurriría esperar que el perió- <kjamos implícito. Hemos dicho arriba que, al
dico estuviera de bromas. Cuando un adolescente le dice a su leer una carta de recomendación, uno espera
profesor que no ha podido entregar el trabajo a tiempo por- <'logios calurosos, no tibios. Y espera, además, información sufi-
que su impresora no funci.ona, pero que lo tiene «terminado» ci<'llte, veraz y clara. Supongamos que una carta de recomen-
en el ordenador, el profesor puede, en cambio, no tomar al pie dación, escrita para que al recomendado le den un puesto de
de la letra tal afirmación, porque no esperamos que todas las profesor de español, no dice ni una palabra sobre las aptitudes
excusas sean ciertas. La noción de expectativa es muy impor- 1k ese señor para ser profesor de español, sino que menciona
tante, y nos lleva a considerar cómo se establece la comunicación "''lamente otras cualidades, como la de que es, por ejemplo,
lingüística, en términos generales. un escritor muy meritorio.
En un caso así, podemos pensar dos cosas diferentes: pri-
mero, que el autor de la carta no sabe escribir recomendacio-
EL PAPEL DE LAS EXPECTATCVAS E:>i LA COMUNICACIÓN VERBAL nt's; segundo, que el autor de la carta (como en el caso similar
que vimos arriba) quiere que se entienda algo más. En el primer
qué esperamtJS En cada comunicación hecha por medios lin- caso, podemos pensar, en efecto, que quien escribió la carta no
de nuestros güísticos, entendemos lo que nos dicen porque conocía las convenciones del género y compuso su escrito trans-
interlacuún-es tenemos ciertas expectativas previas sobre lo ¡¡;rediendo las expectativas habituales. En la teoría del uso de la
que nos van a decir. Según los filósofos y lin- kngua, se dice que tales personas no colaboran en la comuni-
güistas que han estudiado el uso del lenguaje, si no tuviéramos cación. Pero (para dicha de tocios) en la vida coti-
estas expectativas sería imposible comunicarnos. Esperamos, diana la comunicación es bastante exitosa o, al falta de
por ejemplo, que, si preguntamos qué hora es o cómo se hace menos, fluida porque todos cumplimos con las coopemci6ri
un trámite, la persona que nos contesta nos diga la verdad. normas de la comunicación,
También esperamos que nos dé la información suficiente, que La segunda interpretación de la carta de recomendación de
diga algo pertinente, y que nos hable con toda la claridad posi- nuestro ejemplo (el del candidato a profesor de español) es que
ble. Por supuesto, a veces estas expectativas se frustran: nos el recomendante no menciona los méritos espe-
mienten desvergonzadamente, nos dan información insufi- cíficos del recomendado porque quiere suge- modo habitual
ciente, nos contestan algo que no viene al caso, o nos hablan de rir que el recomendado no tiene tales méritos. de cooperar
un modo incomprensible. Pero estas desgracias no invalidan la Y esta interpretación es la más plausible. Es difi-
tesis principal, porque los hablantes, cuando les parece que cil de creer que alguien se moleste en escribir una carla para
alguien no cumple con esas expectativas tan acendradas en no poner la información necesaria, sino otra, de menor impor-
nuestra cultura, intentan entender algo más, ya que, en su férrea tancia. El lector de la carta va a pensar automáticamente que el
esperanza de buena comunicación, piensan que, si alguien pare- autor ha escrito así porque en realidad quiere decir. con su silen-
24 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL ( ;~:NRROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 25
do sobre lo esencial, que el «recomendado» no tiene las cuali- adopta una figura didáctica y pretende transmitir información
dades que requiere el puesto. Mentir sin disimularlo, o decir hiera de su comunidad discursiva, a otros grupos de personas.
algo poco pertinente o confuso de modo que se note que se El estatus que se atribuye el autor puede ser de igual a ignal
hace a propósito, suele provocar que el destinatario saque una o de superioridad. Los textos científicos y académicos son con-
serie de inferencias y descubra el verdadero significado de tales v1•rsaciones entre iguales (aunque algunos de Jos participantes
infracciones. Y eso es así porque nuestras expectativas generales del diálogo se crean, para sus adentros, superiores a los otros).
sobre la comunicación son muy fuertes, no podemos aceptar l'«ro un texto con instrucciones (por ejemplo un memorándum
fácilmente que algnien las ignore, y además por- d.-1 gerente de una empresa a sus empleados) contendrá rasgos
que nuestras expectativas sobre el cumplimiento <líS<:ursivos propios de una situación de desigualdad, pues, para
de las normas del género son muy fuertes tam- ciar órdenes, hay que asumir un estatus superior.
bién, y todos descontamos que el otro sabe ya Cada texto construye un diálogo; los personajes de ese diá-
que nosotros sabemos cuáles son esas expectativas, y por lo tanto logo son el autor y el lector. Pero, según sea la función del texto,
contamos con que, cada vez que transgredimos una expectativa, variarán las intenciones del amor, y es necesario tomar con-
el destinatario haga una inferencia e interprete lo que nosotros dt·ncia de cómo expresar por escrito intenciones y estatus. Cada
tenemos intención de que interprete. ¡¡(·nero impone sus convenciones para indicar ambas propie-
Todo texto escrito que quiera ser comunicativo debe seguir dades. Cada género es la cristalización, más o menos estable,
una serie de principios que están relacionados con los aufüutos tic una selie de normas sociales que regulan la comunicación.
generales de la comunicación y con las con-
principios venciones genéricas.
comunicativos ( ;f:NERO Y CONTEXTO
gmeraln
PRINCIPIOS C0MUNICA11VOS
Los dos primeros principios del esquema comunicativo pre-
l. dar información pertinente, veraz, suficiente v clara sentado arriba se refieren, como queda visto, a las expectativas de
(o transgredir estas regulaciones de modo que tales tr~nsgre I<'" hablantes. Los dos últimos principios (3, ofrecer evaluación de
siones puedan ser interpretadas por el destinatario) la información, y 4, prever qué conocimientos posee el lector) nos
2. respetar las convenciones genéricas para transmitir el llevan a considerar un fenómeno más específico: el contexto.
estatus y la intención del autor
Un texto escrito no existe en el vacío, sino que tiene que
3. ofrecer una evaluación de la información
vi•r con la situación en que el texto se produce y se interpreta,
4. prever qué marcos de conocimiento posee el lector. y presupone una se1ie de conocimientos y creencias en común,
Ya hemos dicho bastante sobre el punto 1. En relación con el 1·s decir, un contexto. Por situación suele entenderse el entor-
punto 2, estatus e intención del autor, cada género impone la 110 físico, el lugar, tiempo y circunstancias de la
creación de las figuras de autor y lector: si se <'llllllciación. El contexto es el conjunto de cono-
estatus del emplea lenguaje técnico, por ejemplo, este rasgo rirnientos y creencias compartidos por los interlo-
auror lingüístico ayudará a constituir Ja fignra de un clltores, algunos pre>ios al texto, otros surgidos a medida que
autor especializado en un tema que se dirige a un S<' produce la interpretación. A veces la noción de contexto es
l«clOr igualmente especializado en ese tema. Si se evita el len- mfk~ extensa, e incluye también la de situación, es decir, el entor-
gu'!je técnico (como hago yo en este manual) es porque el autor 110 extralingüístico de un texto.
26 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 'if:Nrnos, EXPECü\.TIVAS y CONTEXTOS 27
La nc;ción .de contexto es de primera importancia si quere- En este caso el contexto incluye una serie de conocí-
mos escnb1r bien, pues nadie escribe en el aire, fuera del tiem- mit•ntos sobre el mundo: si una oficina, por ejemplo, tiene la
po y del espado, sin tener ningún interlocutor en mente (aun- puerta cerrada y vamos allí para hacer un trámite, golpea-
que sea desconocido y lejano), y sin dar por descontada una n·mos la puerta antes de entrar, pues las nor- creencias
¡;ran can.tidad de supuestos sobre el mundo y sobre el lengua- 1m•' sociales exigen pedir permiso para pasar. oomparlidas
je. No existe una escritura sin lugar, sin tiempo y sin seres huma- Es esa norma de cortesía la que presupone sobre el mwufo
nos. ·
rl car te 1, eximiéndonos de tenerla en cuen-
Veamos algunos ejemplos. Supongamos que nos encontra- 1a en esta ocasión. El cartel adquiere sentido dentro de ese
mos con un cartel que dice lo siguiente: nmocimiento compartido, esé contexto. Si el cartel dijera
l'ASE SIN CANTAR sería muchísimo más dificil de descifrar,
PROHIBIDO PASAR
pues deberíamos poseer, en nuestro contexto de supuestos
sobre el mundo, algún supuesto referente a cantar al ir a ofi-
Si el cartel está tirado en el suelo, no tendrá ningún senti- cinas.
d~, porque no tendrá ningún entorno que le dé seutido: él'rohi- Los contextos de cualquier enunciado incluyen series a veces
bi?o pasar adónde? Si está, en cambio, pegado a una puerta, que- muy amplias de conocimientos y de creencias sobre el mundo,
rra decrr algo perfectamente interpretable: lo interpretaremos sobre los interlocutores, sobre conversaciones anteriores, sobre
e?~º una p_:ohibición, y no pasaremos. Si el cartel lo pone un t·l lenguaje mismo, conocimientos y creencias compartidos, real
mno pequeno, con sus letras desiguales, para que no entremos o presuntamente, por los interlocutores.
e~ su habitación, dudo de que lo tomemos por una prohibi- Si alguien nos dice «ese día no la vi», para tener una idea
cmn verdadera. El significado lingüístico o semántico del cartel aceptable del significado de ese enunciado debemos saber de
es siempre el mismo, pero cada contexto le da el significado qué día se trata y a quién se refiere el pronombre «la». De otro
significad;, y que rea.lm~nte nos imf>?rta, que es el significado modo, la expresión es incomprensible, ya que contiene un
crmtexro comumcauvo, el que tiene que ver con la fun- demostrativo y un pronombre que exigen información con-
ción de ese texto en el mundo social. textual.
Imaginemos otro cartel, esta vez adosado a una puerta: Quien escribe no solamente refleja el con- cálculo
texto en el cual escribe, sino que tiene que cal- de información
PASE SIN UAMAR
cular el contexto del interlocutor. l:no de los crm/extud.l
problemas más graves y más evidentes en las
Este enunciado, tomado al pie de la letra, es una ordeu, la composiciones escolares es el de cómo calcular el contexto:
orden de pasar sin llamar. Pero esta orden es válida siempre y cómo calcular lo que uno va a decir, y no dejar de decir algo
cuando usted quiera entrar. es una orden dada solamente a las per- que era necesario v cómo evitar dar demasiada información,
sonas que quieren entrar en ese sitio, no a cualquiera que pase que distrae o confu~de. Todos los alumnos conocen profesores
por allí de casualidad. La interpretación literal es tan absurda que dan clase como si sus alumnos supieran más de lo que saben:
que la idea de que alguien, solo porque pasa por allí y lee eÍ usan términos difíciles, no explican ciertos temas, hacen digre-
cartel, obedezca y abra la puerta, produce efecto cómico (y hay, siones o generalizaciones, en fin, suponen un contexto que des-
en efecto, muchos chistes a base de interpretaciones literales, 0 graciadamente no existe, y los alumnos se quedan en ayunas,
sea, descontextualízadas). salvo que tengan el buen criterio de intervenir y tratar de solu-
28 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESP&'iOL Ul:NtJ(í >S, l•:XPECTATIVAS Y CONTEXTOS
donar el problema. Otros profesores explican cada cosa tam- IUll• ion <¡ueda así clasificada, ordenada, con todas las cone-
bién lo que los alumnos saben perfectamente y como donse- Mhnu» indicadas, en beneficio del lector, que está aprendien-
c~encia, sus clases son aburridas y los alumnos no prestan aten- 1lu 1111(< 1. ] .os cuadros y esquemas tienen la misma función eV'a-
c1on. huuiva. El texto didáctico admite esas continuas referencias a
En la conversación, solemos colaborar en la contextualiza- •í 111i•111<>, que lo hacen más digerible: el autor va indicando al
ción, y decir cosas como '~ya lo sé», o «eso ya me lo has co11ta~ lrt tor rómo leer el texto. Esto sería inadmi-
do», o, si lo que falta es información, solemos pedirla. En el •lhlr "" otros géneros, aunque en todo escri-
in~dad
texto escrito el lector no puede parar al autor para hacerle pre- I•• h;ty ~tutorreferencias.
guntas. S1 quiere que su comunicación sea efectiva, el autor Por d solo hecho de pertenecer a una cul-
debe saber prever cuáles son los conocimientos y creencias com- llll'll.<'stamos familiarizados hasta cierto punto con los géneros
partidos que forman el contexto de la comunicación. El lector ma• i111portantes, aunque no los podamos describir.
debe ser capaz de conectar lo conocido con lo nuevo. l(1•n 111ocemos un texto como una cítación del juez o como un
De lo dich"'. en este apartado se desprende que el significa- •uh lo mensual del banco o como un artículo periodístico, y este
do hteral, estncto, de una expresión lingüística es solo una l<'<"<>ll<>CÍmiento es casi automático. Una de las razones para
pequeña parte del significado de esa expresión. 1¡11r así sea es que un texto siempre aparece imitando o repro-
El resto del significado lo adquiere en el uso, 1h1.-i.. 11do caracteristicas de otros textos que pertenecen al mismo
es decir, insertándose eu un contexto. Los géne- 111'1 wro, de modo que cada vez que nos enfrentamos con un
ros. grandes sistemas de codificación de la comu- 1rx10, tenemos ya experiencia de otros semejantes que hemos
nicación escrita, nos ofrecen señales inmediatas que apuntan al vi•to antes. El fenómeno es conocido, en lingüística, con el
contexto. nombre de •intertextualidad».
Una carta que comienza «Estimada colega» no es, eviden-
temente, una carta personal, de modo que, desde las primeras
1 ;(t,Nl·'.RO E INTERTEXTUALIDAD
palabras, nos situará en determinado sector de relaciones socia-
les y no en otros, ayudándonos así a interpretarla. Las fórmulas
de encabezamiento de las cartas están reguladas por los códigos Obsérvese el texto siguiente, cuyas oraciones están nume-
genéricos, y debernos conocerlas. nulas para facilitar los comentarios que haremos después:
La evaluación de la información es otro recurso impor-
tante de un texto escrito, y también se encua- Sef1ora XX
evallUléÚÍn de dra en los códigos genéricos. Un artículo pro- Calle XX, etc.
fa información fesional debe indicar qué es lo que ofrece de (1) ¡¡jEnhorabuena!!: (2) Laei..-ploración del pasado día 23 es
, novedoso o importante o útil, ya que esa es completamente normal. (3) El examen bacteriológico no
s11 razo11 de ser: ofrecer alguna información nueva, i1ecesaria demuestra la existencia de ninguna infección. (4) Por medio
o simplemente útil. En otros casos, por ejemplo en el género de la presente te requiero expresamente, para que, en cum-
expositivo de tipo didáctico (como este manual) el autor debe plímiento de lo preceptuado en estos casos, te presentes a una
evaluar.la información que da: debe decir, por ejemplo, «esto nueva revisión en el plazo de seis meses. (5) Mientras tanto,
es muy importante», o "ªcontinuación resumiré lo dicho hasta pásatelo bien, y no seas tan aprensiva. (6) Recibe un fuerte
aquí>), eº «este tema se asocia con este otro tema•>. La infor* abrazo, x.
30 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GÉNEROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 31
Aunque no creo que sea fácil de leer, esta cartita tiene sen- disponibles de muchos géneros: todas las circulares que anun-
1ido: se trata del anuncio del resultado de un examen bacte- cian premios, todos los informes, todos los requerimientos judi-
riológico. Los ginecólogos suelen enviar textos de este tipo a ciales, tienen rasgos discursivos más o menos semejantes. Estos
sus pacientes. Por supuesto, ningún ginecólogo mandaría un rasgos se repiten continuamente, de modo que una carta fami-
texto como este a nadie. Esta carta imaginaria es un monstruo liar repite esquemas compositivos de miles de cartas familiares
de la escritura, que solo puede provocar desconcierto, indig- anteriores, y también el registro correspondiente (tema que
nación o risa, por mucho que tenga sentido. veremos en el próximo capítulo), la selección de mcabulario,
He mezclado a propósito, en la redacción del ejemplo, recur- los saludos íntimos del final, etc., y lo mismo sucede con las
sos genéricos de distintos tipos de cartas. La oración ( 1), con noticias periodísticas, con los artículos cientí-
t•sa felidt:kión exuberante, es propia de las cartas en las que ficos, con la reseña de una película, etc. en cada texro
nos anuncian que hemos sacado un premio en una rifa. Hasta ese Cuando hablamos de intertextualidad que- resuenan
punto la lectora puede creer que se trata, en efecto, de un pre- remos decir que cada texto se inserta inme- mw:hO!J lmdos
mio o algo semejante, dado que el comienzo de la carta, con diatamente en una historia de textos, perte-
11ombre y dirección completos pero ausencia de encabezamiento, nece a una serie, comparte con los miembros de esa serie, y de
puede parecerse al de algunas circulares. Las oraciones (2) y otras series con las que se puede cruzar, ciertas características.
(a) realizan un brusco cambio de convención genérica: se trata Los textos repiten en parte patrones compositivos, vocabula-
del informe de un médico, con el registro propio de este tipo de rio, fórmulas, o contenidos, de otros textos anteriores, imagi-
t'scrito: formal, técnico, conciso. Pero en ( 4) se produce otra nados, o posibles. A veces aludimos directamente a otros textos,
incongruencia: el estilo es burocrático (semejante al de ciertos poniéndolos entre comillas. A veces aludimos indirectamente,
ll"legramas de requerimiento que mandan los abogados) pero el dejando que en un texto resuene otro. A veces las relaciones
lralamiento es informal, con tuteo. La oración (4) usa un regis- con otros textos son más tenues. Pero no hay textos «envasa-
lrn que discrepa con todas las convenciones del género informe dos al vacío»: un texto es a la vez muchos tex-
ginecológico, y además transgrede la función de la carta: el médi- tos, sean reconocibles o no. ~iilad
co solamente puede recomendar, sugerir, o proponer, que la Las nociones de género y de intertextuali- en literatura
paciente se haga otra revisión, pero jamás puede requerirlo en dad suelen estudiarse en las clases de literatu-
•·sos términos. En las dos últimas oraciones, (5) y (6), se pasa ra. Los alumnos de la escuela secundaria saben que en literatura
hrnscamente al género «carta personal», con bromas y abrazos. hay un género narrativo, uno dramático y uno lírico: al prime-
I·~~ta carta no solo tiene sentido, sino que está escrita con ro pertenecen los cuentos y novelas, al segundo las obras que se
lolal corrección gramatical. Pero no podemos tomarla en serio, representan en el escenario, y al tercero la poesía. Y saben tam-
porque no respeta las convenciones del género. De nada vale la bién que cada género tiene sus convenciones, y que puede divi-
gramática ni (si esta carta fuera auténtica) de dirse en subclases. En el género narrativo hay cuentos, «nove-
tenemos nada valdría la buena intención de la secretaría llas» o cuento& largos, y novelas. La poesía admite muchas
tnodeio. subdivisiones, y no son iguales las convenciones del soneto que
autora de esta monstruosidad.
disfxmibks de
Es imposible, sin embargo, que alguien ignore las de los romances tradicionales. Aparte de admitir muchas
muchos géneros
hasta tal punto las convenciones genéricas. La subdivisiones, las fronteras entre los géneros literarios no son
rapidez con que podemos decidir que cada fragmento de carta siempre claras. Pero no podemos prescindir de ciertos esquemas
¡wrlcncce a tal o cual género se debe a que tenemos modelos genéricos al estudiar la literatura.
32 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 1Ol'.NEROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 33
la literaluro La literatura misma es un género frente a todos gún resultado. ¿A que tú también quieres librarte del vello de
como género los otros que clasifican y ordenan los escritos una vez por todas? ¡Tengo la solución! Sigue mi consejo: usa
de una cultura. La literatura admite hacer refe- Hirsutín. ¡Hazme caso! Chao, que disfrutes mucho de tu nueva
rencias fictivas, por ejemplo, es decir, nombrar entidades que no libertad,
existen en la realidad, nombrarlas como si existieran ( creán- María Superbella [la modelo de moda]
dolas por ese mismo acto de palabra). No podemos hacer lo
mismo en un.a noticia periodística o en un chisme contado de Agréguese a este texto la imagen de una radiante modelo en
sobremesa. Pero sí podemos hacerlo en un problema de mate- 1raje de baño, y la de un pomo del producto anunciado, y se ten-
máticas: «El granjero Luis tiene dos vacas y cinco corderos ... » Si drá un típico anuncio publicitario. Es un anuncio, sin duda,
el niño no nos pregunta quién es el granjero Luis, esto se debe pno los rasgos lingüísticos son los de una carta personal, ínti-
a que conoce el género de los problemas de matemáticas, donde 111a (salvo quizá en que la carta está firmada con nombre y ape-
aparecen personas inexistentes sometidas a grandes perpleji- llido).
dades. Aprendemos a distinguir los géneros como parte del La efectividad de un anuncio como este consiste en repro-
proceso de socialización. ducir el tipo de conversación que tienen las mujeres entre ellas.
Nuestra vida de hablantes está totalmente regulada por las El lector encontrará muchos anuncios que están compuestos
imposiciones de los géneros. Ninguna persona que quiera redac- <'orno cartas, con encabezamientos, firmas, expresiones colo-
lar bien un escrito puede ignorar esas imposiciones. Esto no 1111iales, y que contienen información de tipo personal. Pero,
significa de ninguna manera que todos los géne- <'laro, no confundimos estos anuncios con cartas, aunque ten-
los géneros no
ros estén congelados, y que sea imposible la inno- ~an forma de cartas.
son esquemas
congelados vación. La innovación es posible, y, salvo en la Lo que hace la publicidad es tomar en préstamo rasgos com-
cuenta de la compañía de electricidad, balan- positivos de otros géneros para intentar vender un producto, La
r!'s de tarjetas de crédito y otros textos de ese tipo, que son imper- l'arta sobre Hirsutín parece personal, pero es una carta pública,
sonales, en los textos que escribimos y firmamos, por muy con- dirigida a muchísimas mujeres (la publicidad intenta alcanzar
vt·ncionales que sean, mostramos siempre nuestra subjetividad. al público más amplio posible) que pertenecen al grupo de las
Y ahora debemos dar un paso más en nuestro análisis del que quieren quitarse el vello. De modo que lo que es decisivo
g-i·nero: a veces dos textos comparten rasgos lingüísticos similares, para definir a un género es la función: la forma, en algunos
pcr<l realizan funciones distintas, es decir, pertenecen a distin- casos, y sobre todo en la publicidad, está sujeta a cambios y a
tos géneros. superposiciones entre géneros.
funciunes y
Como parte de nuestra competencia comuni-
rasgos
cativa, todos tenemos establecidas asociaciones discursivos
ESTRUCTURA D!SCURSNA Y FUNCIÓN
entre funciones y rasgos discursivos, y así podemos
decir que la carta sobre Hirsutín se parece a una carta privada,
Obsérvese el texto siguiente, que es una adaptación de uno pero es un anuncio publicitario que imita una carta privada.
aparecido en una revista: Hay muchos elementos que determinan cuál es la función del
texto: el hecho de aparecer en una revista femenina, por ejem-
Querida amiga: Aunque no lo creas, yo también h" s11frido plo, con ciertas fotos o imágenes que jamás tendría una carta ver-
durante años el problema del vello. He probado todo. sin nin- dadera. El contexto nos obliga a una identificación inmediata.
34 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPMOL GÉNEROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 35
Si el texto publicitario tuviera rasgos prestados de otros dones en el intercambio, la actitud de quien escribe la carta, y
géneros y fuera confusa su caracterización para el lector, como la función de la carta. Lo mismo sucede con la elección de cier-
sucede con ciertas informaciones turísticas o recomendaciones to vocabulario, de ciertas metáforas, de ciertos giros.
sanitarias, que en realidad son anuncios, pero no lo parecen, los La administración de la información (qué cantidad y
que publican la revista pondrían un discreto aviso en algún digo, cuánto digo, en qué orden lo digo, a qué distribución de
ángulo: PUBL!CIDAD. Los textos escritos deben estar siempre le doy más importancia) es uno de los aspectos la infarmaéi.ón
debidamente contextualizados, deben contener, por fuera y más importantes de la contextualización.
por dentro, señales que orienten al lector sobre cómo leerlos. Compárense los siguientes fragmentos de texto:
~:!fragmento (3) contiene menos información, y además la no todo puede hacerse explícito, porque, en ese caso, no nos
1la de manera menos solemne, pues el título de la obra no está alcanzarla la vida para decir las cosas, debernos aprender a con-
nnnpleto. Sin embargo, es difícil imaginar una situación en la textualizar adecuadamente nuestros escritos.
rnal la frase apósita •el inmortal autor del Quijote» fuera real-
lll<'llte necesaria, ya que, si el lector no sabe quién es Cervantes,
CONCLCSIONES
'""' esa frase tanlpüCO se Je da suficiente información. Y si el lec-
tor ya lo sabe, que es lo más probable, puesto que está leyendo
1111 texto escrito en español, entonces la frase sobra, es un rnero Hemos quedado en que los géneros son colecciones de tipos
1dkno. de textos que tienen una función común, y que püseen pro-
El fragmento (4), finalmente, presupone en el lector un piedades lingüísticas similares. Hemos dicho también que puede
1·onodmiento del mundo que contiene el conocimiento de haber considerable variación entre textos que pertenecen al
< :.. rvantes, lo que da todo su sentido a la afirmación que sigue mismo género, y que hay géneros miméticos, como el de la
sohre la escritura. publicidad, que imitan las propiedades típicas de otros géne-
Conscientemente o no, cada vez que usamos el lenguaje ros.
damos pistas de contextualización, ayudando así a nuestro audi- Mefliante una recontextualización, un texto de un tipo puede
h 1rio a evocar ciertos conocimientos o creencias comunes a ambas pasar a cumplir funciones diferentes: si copio una receta de coci-
partes, y que consideramos necesarias o deseables para el buen na para ponerla corno ejemplo en este libro, la receta de cocina
«·xítn de la comunicación. Cuando escribimos, esa seleoción de cla- ya no estará en el contexto de un libro de cocina, sino en el de
ws de contextualización pasa a ser más consciente. Como ya he un libro sobre la escritura, y por lo tanto perderá su función ori-
dicho (y tendré <¡ue repetir alguna vez más) la escritura nos obli- ginal y adoptará la función de <jemplo de escritura. Esto signifi-
¡.:a a tomar conciencia de una serie de procesos que otras veces se ca que quien leyera la receta en este libro la usarla para observar
•·111nplen sin mayor esfuerzo de nuestra parte, ya que participamos ciertos fenómenos lingüísticos, y no para ir a la cocina y preparar
ni ellos automática o intuitivamente, el plato (annqne, por supuesto, también puede hacerlo).
El que escribe debe prever las reacciones del lec- Lo mismo sucede si se copia un poema y se destina a otra
"1 texto escrito
1Mie prever y
tor, debe calcular qué sabe y qué no sabe, qué hay persona: un poema de amor, por ejemplo, que se destina a un
f'fflfu/ar
que recordarle, qué inferencias hay que ayu- amante con la intención de decirle algo personal a través de esas
darle a sacar. En las conversaciones cara a cara, palabras ajenas. En ese caso, el poema cumpliría una función
los participantes van tanteando el terreno, cola- distinta, nueva, a la cual no estaba destinado originalmente,
horando en la fijación de ciertos significados, asegurándose de sin perder del todo su función original, si se reconoce corno
c¡uc los contenidos deseados se transmiten adecuadamente. Es poema escrito por otro. No es necesario copiar un poema:
1111 trabajo hecho por las dos partes. Hasta un silencio-cuando movido por el amor, uno mismo puede escribirlo y dárselo al
c11la11 todos los participantes en tm diálogo, pür unos segundos- novio o novia, con la intención de conmoverlo, seducirlo, etc.
1·.s un silencio hecho en colaboración, y puede resultar sígnifi- Si después uno publica ese poema como tal, dirigido a un públi-
rn1ivo, suplir muchas palabras. co mucho más grande, en cada uno de sus dos destinos el
Al escribir, tenemos que lograr que el texto, por sí solo, sin poema tendrá una función diferente, pues los contextos son
la ayuda visible e inmediata del interlocutor, dig-a lo que tiene diferentes.
<¡11<' decir, y lo diga bien, eficazmente, convincentemente. Como Recordemos también que todos participamos en varías esfe-
38 CÓMO ESCRlBIR BIEN EN ESPA'iOL GÉNEROS, EXPECIATNAS Y CONTEXTOS 39
ras de actividad social a la vez: podemos ser, simultáneamente, a) Estimado cliente: Lamentamos informarle que no ha sabi-
maestros y alumnos, amas de casa y médicas, madres y contri- do ejercer usted ningún autocontrol en su consumo de
buyentes, esquiadoras y socias de una biblioteca. Ningún géne- energía eléctrica, pese al servicio exclusivo que usted tenía
ro textual está limitado a un grupo, pues no hay grupos total- a su disposición, gracias a los adelantos que traen los tiem-
mente homogéneos: un artículo del periódico que trate, por pos y a la política de beneficio al cliente seguida por Unión
ejemplo, de un descubrimiento en medicina, puede interesar a Eléctrica. ¡Con lo racil que es ahorrar energía! Si se hubie-
la vez a las madres, las maestras, las médicas, las contribuyentes ra asociado al plan «Felices kilowatios hora», no tendría
usted ahora que pagar la cantidad exorbitante que verá
y las amas de casa, por elegir solamente entre los grupos que aca-
impresa en la página siguiente. Pero todavía está a tiem-
bamos de citar.
po. Llámenos. Le atenderemos todas las veces que quiera,
La variedad de géneros es enorme y las fronteras bastante
24 horas, 365 días al año. Felices kílowatíos.
cambiantes, pero reconocemos intuitivamente los diferentes
tipos de texto en cada acto de producción e interpretación ver- b) El propósito de este trabajo es demostrar la falsedad de la
bal, y debemos adquirir el entrenamiento necesario para escri- teoría, corrienternente aceptada, sobre la comunicación
bir textos que cumplan con los requisitos de su género, si no que- humana, para lo cual se aducirán nuevos experimentos lle-
remos arriesgarnos a que nuestro mensaje sea difícil de vados a cabo con estudiantes universitarios.
interpretar, o incluso incomprensíble. Seg_ún la teoría de la comunicación que prevalece hoy en
Los géneros no son corsés, sino moldes (garantizadores de lingüística, los seres humanos profierer1 ciertos signos en voz
funcionalidad) que encuadran y potencian la creatividad de alta, con la in tendón de que sus oyentes les presten aten-
quien escribe. ción, ofreciendo a cambio la seguridad de que lo que dicen
con esos signos va a interesar a los oyentes (Sperber y
Wilson, 1986; Blakemore, 1993). Una vez atraídos por el
E]ERC/CfOS cebo del interés, Jos oyentes realizan dos procesos: l) de ..
codificación de los signos lingüísticos, y 2) inferencias múl-
Ejercicio 1
tiples. Pongamos un ejemplo. Según esta teoría, si A le dice
a B, «Tengo frio>, pretende que 1) B entienda y descodifi-
Géneros. Una parodia es una imitación burlesca de algo. que los signos lingúísticos, 2) B haga una serie de inferen-
Cuando se parodia un género textual, se imitan en broma algu- cias, la más importante, contestar a la pregunta «¿por qué
nos rasgos propios de ese género, exagerándolos o deformán- me dirá A que tiene frío?». Como sí esto fuera poco, se
dolos. Los siguientes son ejemplos de parodias. Léalos, y diga espera que B reaccione y se levante y cierre la ventana, o,
a qué género parecen pertenecer por su tema, su estructura, su quizá, le ofrezca su chaqueta a A, con lo cual puede pro-
propósito manifiesto y sus rasgos discursivos. Luego explique por vocar, a su vez, la reacción de A, que no quiere que se cie-
rre la ventana, y menos quiere la chaqueta de B, a quien, por
qué, pese a que respetan ciertas convenciones genéricas, usted
ejemplo, detesta. Como han señalado ya varios investiga-
no puede tornar en serio ninguno de los dos textos. Este pro-
dores (Chomsky, 1998; Hollody, 1997; entre otros) esta tecr
ceso de análisis le hará verificar que usted posee un conoci- ría es altamente contraintuítiva.
miento sobre los géneros y una serie de expectativas sobre qué La propuesta que quiero defender puede enunciarse así:
esperar en cada caso. jamás escucharíamos a nuestros. semejantes si no nos obli-
40 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL ¡;f:NEROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 41
gara la policía, y si las multas por desatención no fueran tan a veces, exilio. Ningún intento de justificar una teoría por
elevadas. Sperber y Wilson insisten en que la existencia de el estudio del cerebro humano y por el descubrimiento
Ja institución policial es meramente coyuntural, y que, del ansia de conocimiento del horno sapiens podrá des-
siendo su teoría puramente cognoscitiva, no es necesario mentir la realidad social de la comunicación, que es, des-
tener en cuenta datos sociales para corroborarla, Sin la graciadamente, menos desinteresada y altruista de lo que
policía, sostienen, el horno sapiens tiende a atender a sus sugieren ciertos investigadores. La búsqueda de la verdad
semejantes y a maximizar la informadón que le dan, La nos exige demoler ciertos mitos, por muy seductores que
policía solo garantiza que todas las transacciones se cum- estos seaiL
plan segím las convenciones socialmente aceptadas, que son
ajenas al hecho mismo de comunicarse.
Una serie de experimentos recientes pone en cuestión estos Fjercicio 2
asertos. El Departamento de Lingüística Hispánica de la
Universidad de Illinois en Chicago ha organizado una serie
Géneros. Escriba una parodia de uno o dos de los siguientes
de experimentos para evaluar el papel que cumple la poli- tipos de textos (vea la descripción de parodia hecha en el ejer-
cía social en la comunicación pretendidamente espontá- dcio l):
nea~ Los experimentos se fueron escalonando en días dis-
a) U na carta de amor.
tintos, rotando las clases. El primer día, se eliminó a la
b) La publicidad de un nuevo disco de rock o de una nueva
policía de tres clases durante 15 minutos, y se pidió a los pro-
película.
fesores que hicieran un detallado reportaje de lo sucedi-
e) El comentario de un parúdo de fútbol en un periódico.
do en esos 15 minutos. Este reportaje fue comparado con
d) Una noticia de policía.
uno similar hecho por profesores que no expulsaron a la
e) La reseña de un concierto.
policía durante esos mismos 15 minutos. Los resultados
revelan que en las clases sin policía la comunicación alcan-
zó un nivel cercarlo a cero, en contraste con la comunica- r:jercicio 3
ción con policía~ que se mantuvo en sus promedios habi-
tuales de 1.5 de comunicabilidad sobre un total posible de Géneros. Lea los siguientes textos, y luego trate de contestar
1O (véase Tabla 1). El segundo día se dijo a los estudiantes las preguntas que se le proponen.
que ninguno de los temas vistos en clase pasaría a formar
parte de] examen, por lo cual, aun con fuerte presencía a) Perfume tierno y fogoso, Fraicheur afirma su moderni-
policial, la comunicabilidad en esas clases bajó otra vez a dad por la belleza de su composición floral, afrutada,
cero (véase tabla 11) en contraste con las clases en las cua- verde, realzada por la espontaneidad del brote de grose-
les se dijo a los estudiantes que todo lo dicho en clase seria lla negra, Las notas de corazón elegantes, sostenidas por
preguntado ese mismo día en un examen. circunstancia un fondo amaderado, le confieren su carácter audaz y
en la cual se llegó ca~i a 2 en comunicabilidad. femenino y revelan con toda finura su personalidad joven
Pese a lo exiguo de las pruebas (que UIC se propone con-
y risueña.
tinuar y refinar) parece evidente que nadie escucha a nadie
porque crea en el interés de lo que puedan decirle, sino b) Crianza Vlno elaborado en nuestra Bodega de Fuenmayor
porque la desatención está castigada con multas, cárcel y, con "'"" de variedad TEMPRANILLO y MAZUELO de la Rioja
42 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL w::NEROS, EXPECTATIVAS Y CONTEXTOS 43
Alta. Tras un año de CRIANZA en barrica bordelesa de roble, n·ncias. Cuando tenga una versión final de cada texto, escriba
ha completado su maduración con otro año de perma- una lista de esas diferencias.
nencia en botella. Vino de color rojo rubí, aromático con
desarrollo de los aromas por la crianza, vivo al paladar y
persistente. Vino recomendado por su finura para cual- l•:jercicio 5
quier tipo de comida.
Géneros, expectativas, contextos. Aplicando todo lo aprendido
sobre géneros textuales, expectativas y contextos, identifique, en
Preguntas rl texto que se transcribe a continuación, los rasgos siguientes:
l) ¿Le parece que a) y h) son textos publicitarios? ¿Por a) De qué género se trata,
qué? b) a qué público está dirigido el escrito,
e) qué ideas, creencias y valores presupone en los lectores,
2) Si no lo son, o no lo son enteramente, ¿qué pistas dan
d) cuáles son los propósitos de este escrito,
para ubicarlos en algún género?
e) qué pensaría un joven de la edad y características de los
2) ¿Qué relación hay entre los rasgos discursivos de esos mencionados en él, si leyera este texto,
textos y su función? f) qué función cumplen las citas entrecomilladas, o las pala-
bras subrayada,, que reproducen el lenguaje de los jóve-
3) Recuerde la noción de comunidad discursiva, y aplí-
nes,
quela a estos textos; ¿a quiénes se dirigen? g) qué función cumple la metáfora del •mar interior», tanto
4) Recuerde la noción de intertextualidad, y aplíquela a desde el punto de 'ista ideológico como desde el punto de
estos textos: ¿encuentra usted en estos fragmentos rasgos típi- vista de los recursos lingüísticos.
cos de otros géneros? ¿Cuáles?
5) Intente escribir una parodia de cualquiera de los dos Conocer el mar
textos, y luego analice su parodia.
Sólo querían <•dar una vuelta y se liaron». ~t\nte todo, querían
ver por primera vez el mar. Es la cándida explicación que die-
Ejercicio 4 ron las dos niñas de Carabanchel para explicar su fuga con
dos jóvenes de malireputación y ciertos hábitos delictivos. Su
Relación autm·-1.ectvr. Escriba un texto sobre uno de estos dos desaparición la pasada semana generó angustia y páníco en
temas: a) los riesgos del Ui'O del tabaco, b) los riesgos del uso sus casas y preocupación en una opinión pública que aún tiene
del alcohol. Dirija el texto primero a adolescentes proclives a muy presente la trágica búsqueda de las tres niñas de Alcasscr
fumar o a beber, y luego a una comunidad imaginaria de per- y el terrible desenlace de la misma.
sonas, procedente de otra cultura (y quizá de otro planeta... ) Los padres de las niñas no podían creer que sus hijas habían
que ni siquiera sepan qué es el alcohol o qué es el tabaco. huido voluntariamente. Temían un secuestro. Pero todo era
Mantenga en los dos textos el mismo estatus como autor, cual- más simple. Era una aventura de común acuerdo en la que
quiera que elija, y la misma intención. Al cambiar de destina- recorrieron 1.500 kilómetros en cinco coches robados. La
tarios en cada redacción, sus textos van a mostrar grandes dif'e- aventura tendrá consecuencias, al menos para el mayor de los
44 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GÉNEROS, EXPECTATIY..<\S Y CONTEXTOS 45
chicos. Aunque no sean lo graves que podían haber sido, es de educada en los códigos del pudor. El tuteo marcaba un antes
esperar que disuadan a posibles emuladores. y un después de toda relación. Nadie tuteaba por tutear.
,,_Ahora sabemos lo que es ta vida». Est.:1. tierna tontería de uno
de los fugados revela la curiosidad y el aran de transgresión b) Historias, historietas e historia
propios de su edad. Agravados en su caso, como en tantos r:n nuestro país de nuevos ricos, nuevos 1ibres y nuevos euro-
otros, por la carencia de un entorno familiar sano y protec· peos, orgulloso del papel de cancerbero del Club de los Cresas
tor en la edad en que más se necesita. Las niñas sí tienen fami- v henchido de desdén a los vecinos del sur que le evocan imá-
lias. Y, sin embargo, éstas no parecían ser conscientes de las genes de st1 pasado, esta europeización sociológica -deslucida
inquietudes y amistades de sus hijas. En todo ca.so, no las creían
y maltrecha por la corrupción y encanallamiento de la vida
capaces de algo que, como se ha demostrado, han hecho con
política- oculta un inquietante proceso de balcanización inte-
ganas y mucha naturalidad.
rior, obra de nacionalismos de calidad, cuya búsqueda ansiosa
Y es que en muchos hogares se sabe muy poco de los propios
de señas de identidad y esencias exclusivas se remonta hasta
hijos, especialmente durante su adolescencia. Si las familias
pasados remotos, borra siglos de historia y llena las páginas
hablaran más con sus hijos de las ganas de «conocer el mar»,
en blanco con leyendas ennoblecedoras y genealogías mirifi-
ese mar propio e íntimo, lejano y atrayente, es probable que
cas.
pudieran a}'LJ.dar a los adolescentes a evitar liarse en aventuras
que tantas veces acabao en tragedias. (El País, Madrid, 12 de c) Marcio, Valdés, Coriolano, Pacheco
agosto de 1997.)
Marcio. -Pues los mozos son idos a comer y nos han dejado
solos, antes que venga alguno que nos estorbe~ tornemos a
1-:jrrtício 6 hablar en lo que comencé a deciros esta mañana.
Identificación de géneros. Los siguientes son párrafos ínicia- Valdés. -!\i o me a<:uerdo de qué cosas queréis decir.
i<'s de textos, con sus títulos. Pruebe a identificar los géne- Marcio. -¿Cómo no? ¿No os acordáis que os dije cómo de
ros a los cuales pertenecen, y justifique, en cada caso, su elec- aquello, en que habíamos platicado, me era venida a la memo-
ciún. ria una honesta curiosidad, en la cual muchos días ha desseo
platicar con vos?
a) Y usted, ¿por qué me tutea? Valdés. -Ya me acuerdo; no tenía cosa más olvidada.
Marcio. -Pues nosotros> por obedeceros y serviros, habemos
El dramaturgo Aurelio Ferretí agonizaba aquella tarde de hablado esra mañana eu lo que vos habéis querido, y muy cum-
marzo de 1963. Junto a su lecho, el actor y director Onofre plida.mente os habemos respondido a todo lo que nos habéis
Lovero asistía al desenlace. Pese a la diferencia de edad -los preguntado, cosa justa es que, siendo vos tan cortés y bien
separaban casi veinte años- se había creado entre arnbos una criado con todo el mundo como todos dicen que sois, lo seáis
re!adón entrañable. Permanecieron en silencio un largo rato, también con nosotrOS, holgando que hablemos esta tarde en
hasta que el dramaturgo habló. lo que más nos contentará. respondiéndonos y satisfaciéndo-
-¿Puedo pedirle un favor, Lovero? nos a las pregunta.' que os proponemos, como nosotros habe·
-Sí, cómo no. mos hecho a las que vos nos habéis propuesto.
-¿Me permite tutearlo? Valdés. -Si no adornárades esta vuestra demanda con tanta
Ferreti había nacido en 1907. Pertenecía a una generación retórica, liberalmente n1e ofreciera a obedeceros: ahora, vien-
46 CÓMO ESCRIBIR BIF.N EN ESPAÑOL
CAPÍTUL02
BIBLIOGRAFÍA REGISTROS, ESTILOS YTIPOS DE TEXTOS
TONY BEX, Variety in Written English. Texts in Society: Societi,es in Texts. (Cuáles son las variedades de la lengua escrita)
Londres, Routledge, 1996.
DoUG!AS BIBER, Variation across Speech mui Writing. Cambridge, C'.ambridge EL REGISTRO
University Press, 1988.
El lenguaje es una música con muy variadas melodías. No me
refiero a las entonaciones ni a los acentos, puesto que no esta-
mos estudiando la lengua hablada, ni tampoco a las variacio-
nes genéricas. ya vistas en el capítulo anterior, sino a las varia-
ciones que se producen por decisiones estilísticas del autor,
guiadas, casi siempre, por una aspiración a expresarse lo mejor
posible y a sintonizar con los interlocutores y con el contexto.
Una de las variaciones más importantes es la que corres-
ponde al registro de un texto, es decir, al conjunto de diferencias
provocadas por la relación entre el texto y el cont.extosituadonaL
Los diccionarios y otras obras de consulta distinguen (sin inten-
tar definir los términos) registros formales e informales, registros
escritos y hablados, registros científicos, periodísticos, didácti-
cos, etc. Los registros se presentan como «maneras de hablar»,
coloraciones, tonos, de los textos, tonos que se relacionan con
elementos de la situación en que se producen los textos (espe-
ciahnente quiénes hablan, de qué hablan, por qué medio
hablan). Corno son resultado de selecciones hechas por el hablan-
te o escritor, los registros son aspectos del estílo de un texto.
Para evitar confüsiones, digamos de entrada cuáles son las
diferencias entre géneros, registros y estilos, que luego vere-
mos con más detalle. Un género, como hemos visto ya, es un con-
junto de recursos lingüísticos asociados a funciones sociales del
texto (ejemplos de géneros: noticias periodísticas, recetas de
cocina, artículos eruditos, cartas de recomendación ... ); un esti-
lo es resultado de una selección entre posibilidades lingüísti-
48 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL REGISTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS 49
cas (hablamos, por ejemplo, de estilo florido, estilo conciso, Por lo general, se considera que el con- elrontext<>
estilo didáctico ... ); finalmente, un registro es también resultado texto situacional en el cual sucede una inte- situacirmal
de una selección, pero esta selección está determinada por la racción lingüística tiene los tres rasgos ya indi-
situación de comunicación (distinguimos entre registro formal, cados: el tema de la comunicación, la relación entre los
didáctico, coloquial, etc.). participantes y el papel del lenguaje en esa interacción. El regis-
-
el estiro Empecemos por la noción de estilo. Se llama estilo al tro surge de la correlación entre los rasgos lin-
conjunto de elecciones que ha hecho el autor entre las giiísticos y esos tres rasgos del contexto. Se suele campo, m,,,Jo y
formas de expresión que tenía disponibles. Estas elecciones expre- llamar campo al tipo de acción social realizada,
sivas dependen siempre del tipo de texto y su función social. por ten<Jr a las relaciones entre los participantes y
lo cual podernos considerar que el estilo de un texto es un aspec- modo al papel que desempeña el lenguaje en ese acto comuni-
to del género al que pertenece ese texto. Por ejemplo: el género cativo. Resumiendo:
de las noticias pedodísticas exige cierto tipo de elecciones estilís-
ticas y no otras. lA noticia debe ser objeth'<t y concisa, no podrá con- campo: de qué se trata. qué pasa
tener figuras poéticas, no admitirá un vocabulario familiar, etc. tenor: quiénes participan
Veamos ahora por qué el registro es un aspecto o dimen- modo: qué papel desempeña el lenguaje
sión del estilo. Tanto el estilo como el registro resultan de una
opción entre disponibilidades: elegimos un estilo y elegimos Hay una correspondencia directa entre estos tres rasgos del
un registro. Pero en las elecciones del registro inter- contexto y ciertos sistemas lingüístícos, ya sea el vocabulario, el
difenmcia modo verbal, los deícticos (palabras que aluden a elementos
enlTe estilo
vienen códigos lingüísticos que hacen el registro
menos personal que el estilo. Las opciones del esti- de la situación: tú, aquí. este, etc.). Por ejemplo, el sistema de los
y registro
lo son más amplias; las del registro dependen estric- pronombres personales del español, que prevé dos formas dis-
tamente de la situación o contexto situacionat quiénes hablan, de tintas de tratamiento, TÚ (informal) y USTED (formal), mani-
qué hablan, cuál es el canal de comunicación usado. Veremos fiesta un aspecto de la correlación entre el tenor del contexto
estas variantes enseguida. y el texto, y esa correlación forma parte del registro de ese texto.
La relación entre género, estilo y registro puede esquema- Si usarnos TÚ, el tenor será más informal que si usamos USTED.
tizarse como en el cuadro I, donde el género es la categoría •Informal,, significa, por oposición a «formal»,
registro:
más abarcadora, porque los géneros son clases funcionales de que hay poca distancia entre los participantes. asociación entn
textos que determinan en parte las elecciones estilísticas; den- Cuando se asocia cada uno de los tres ras- rasgos
tro de ellas, las del registro son las más específicas, por conec- gos contextuales citados (campo, tenor, modo) ~y
tarse directamente con la situación. con los rasgos lingüísticos correspondientes sistemas
de un texto, se habrá descrito el registro de lingüísticos
,---,---------------·---···
género ese texto. Las relaciones básicas entre contex- ~tes
estílo to y sistemas lingüísticos puede esquematizar-
L ._ _ _ _ _ re_cg_is_cr_o__ ..•-.--- l \ se como sigue:
Campo -'> se corresponde con -'>vocabulario, figuras, alusio-
'---------------------·---··~
Cuadro/
nes culturales, lenguaje especializado, etc.
J
50
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 1tt:<aSTROS, ESTllOS Y TIPOS DE TEXTOS 51
Te?or ...._, se corresponde con -t formas de tratan1iento, ape-
En esta conversación pasan dos cosas a la acciones
lanvos, uso de expresioues dialectales, can1bios de código.
etc. V<'I.,bien reflejadas por los sistemas lingüísticos: simultáneas
por una parte, las hablantes piden y dan_ inS.-. .
Modo-* se corresponde con~ referencias a la situación, uso
1rucciones y se refieren al entorno extralmgu1sttco, y por otra
de lenguaje oral, jergas, uso de expresiones dialectales, etc.
parte comentan algo que sucedió ~ntes, sobre .1~ cual una hace
preguntas a la otra. Debido al caracter pragmattco de ?arle de
.Hay re~stros más o menos especializados. según el campo, la conversación. hav muchos verbos, son verbos de accton (dar,
registros mas o menos formales, según el tenor, y regislros más d()b!ar, frenar, perderse) y se usan para pedir y para dar ins-
o menos col~q':'iales, según el modo. tJna carta enviada por lrucciones sobre lo que hay que hacer en ese momento. Abundan
cor~eo electron1co por un amigo a otro, para contarle que ha los pronombres (se, lo, la, ellos), cuyo: referentes, es decir, las
nacido su segundo hijo, tendrá un registro coloquial e infor- <'nti dades del mundo a que se refieren, ignoramos. El vocabulano
mal, y s~ vocabulario especializado se limitará al necesario para es !imitado, y se repite, como suele suceder en el coloquio. Las
descnbir el parto, en el caso improbable de que se hablara de frases son fragmentarias, pues la~ hablantes comparten una can-
eso. Veamos ahora dos ejemplos de textos auténticos, uno oral tidad de información que no necesitan hacer tenor coloquial
y uno escrito.
explícita. El registro es coloquial con clave muy .
informal, como revelan, entre otras cosas, los comentanos sobre
VARIACIONES DE REGISTRO: EJEMPLOS el chocolate. Sí las hablantes tuvieran una relación menos cer-
cana, una ofrecería chocolate a la otra, esta lo agradecería, etc.,
siguiendo pautas de comportamiento más formales.
El siguie:ite texto es la transcripción de parte de una char- Un aspecto saliente de este texto, relacionado con el modo,
la que mannenen dos amigas mientras van en coche: es su aparente falta de ilación..Las hablantes faUn tk ilación
-¿Se lo diste?
alternan entre lo que sucede mientras van en
el coche, buscando el camino hacia alguna parte, y el terna ~e
--Sí, bueno, la llamé ...
-¿Y? la pregunta inicial («¿Se lo diste?,,). Esta pregunta queda ''i:'
respuesta, pero sobreentendemos que la respuesta es afirmati-
-¿Doblo a la izquierda en la luz?
va, y que «ellos» no van a hacer nada. La aparente falta de cohe-
-A ver, sí: creo que sí. ¿Salía hu1no de ese coche?
rencia se debe, pues, a dos factores: a que las aparente falto.
-~·o vi nada. Por aquí es por donde están las vía.'I del tren. hablantes cambian de lema y luego retornan a de coherencia
-¿Decías que sí se lo diste?
ese tema del mismo modo abrupto, y a que
-No tienen tietnpo. Es ... Dame un cachito de chorolal(•, te lo dejan mucha información implícita, incluso la respuesta a un~
estás co1niendo todo, a ver si te crees que no me cloy <"1H'll- pregunta concreta. Pero ellas, en cada momento, saben de que
~ .
están hablando (de si se Jo dio, de las calles, del chocolate), su
-Creí que estabas a régimen, ja. Aquí mejor... Cuid;ulo. l"rrna conversación forma parte de otras actividades que está~ cum-
que hay baches. Será mejor que dobles, esa es ... Nos va11ios
pliendo simultáneamente y de conocimient?s comparttdos, y
a perder. Aquí, a la derecha, no, aquí aq11í, anl<:s d•·i ptH·n- no necesitan aclaraciones. Así es la conversac1on, especralmente
te.
cuando los hablantes comparten el contexto situadonal, y cuan-
-Creo que de todos modos ellos no van a hacer""' b.
do tienen una relación estrecha.
52 CÓMO ESC~IR BIEN EN ESPAÑOL REGISTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS 53
El registro de este texto revela, pues, .en los caracteres lin- dificil, procedente de distintos campos. La sintaxis es densa:
giiísticos (deícticos, frases fragmentarias) y textuales (aparente comprime todo ese vocabulario especializado en frases qu: !ar-
é la el incoherencia, cambios de tema) qué es lo que man una larga oración (nótese, especialment~, la extens10'.1 y
qu reve,¡,,este
regútro está pasan d o, de que, trata 1a ·mteracc10n,
" y tam- estructura del complemento directo, que comienza en •el Sim-
,_ bién cuál es la relación entre las hablantes, y plismo ... » y termina en • .. .indiciaria•).
qué papel cumple el lenguaje entre ellas: sirve Lo más llamativo de este texto, para un profano, es su voca-
para reforzar la camaradería mediante los implícitos, para hacer bulario. Pero, si lo intentáramos, podriamos cambiar ese voca-
cosas (encontrar el camino), etc. bulario por otro más asequible, sin alterar en lo esencial e~ sig-
Los textos escritos dependen mucho menos de la situación nificado del texto. Esta posibilidad nos demuesu-a que el reg1su·o
~de de producción. Salvo las cartas personales, con- es parte de una decisión estilística del autor, no algo comple-
textvs escritos tienen pocas referencias al contexto situacio- tamente determinado por la situación.
nal. No pueden ser, sobre todo, tan •incohe- Cada autor juega a su modo con los datos adecuadán tk
rentes» como la conversación transcrita, no pueden presentar del contexto, dentro de ciertos límites, claro los regútros
tan pocas señales de cohesión en su superficie, ni contener tan- está. Si las hablantes del primer texto conver-
tos implícitos. saran en el coche con un vocabulario como el del artículo eru-
Compfu"ese el fragmento de conversación citado con el frag- dito o construveran las frases con la sintaxis densa de ese arti-
mento s1gmente, tomado de un artículo crítko sobre una nove- cul~, los requisltos mínimos del registro se verian tan alterados,
la, publicado en una revista especializada: que tendríamos que interpretar que, por ejemplo, las hablantes,
en broma, imitan otras textos. Todo eco de registro escnto, for-
La esquizoidía del barroquismo léxico y el furor neológico mal v académico en la conversación resulta siempre más o menos
ocultan el simplismo de una trama construida como una fábu- córn'ico. Si preguntamos qué tal está el día y nos contes,tan «hay
la didascálica más que como el desarrollo de una diégesis precipitaciones pluviales• (en lugar de •llueve•) lo mas proba-
meramente indiciaria. (J. Ca!víño. •La ideología de la forma ble es que tomemos tal expresión como una grada, dada su
en 1zranc Banderas».)
falta de adecuación al registro exigido por la situación.
Si el texto erudito, a su vez, tuviera un registro semejante
registro de un Este fragmento pertenece al género llamado al de la conversación en el coche y saltara de un terna a otro
tmd-0 acadhnioo •discurso académico». El campo es aquí la con ese tono descuidado y fragmentario, no sería erudito, ni
transmisión de información sobre un asunto apropiado. Como en todos los aspectos de la escritura, hay
literario, y así lo señala la abrumadora cantidad de construc- unos limites impuestos por la función del texto Y. por el .con-
ciones nominales: hay un solo verbo, y unos catorce nombres, texto, y, dentro de esos límites, unas cuantas opoones dispo-
en su mayoría abstractos. Los nombres tienen a su cargo, en nibles.
todo texto, transmitir información. Encontramos frases desu-
sadas: «furor neológico., «diégesis meramente indiciaria». En
este texto no hay referencias directas al interlocutor, ni tam- VARlfu'ITES DIALECTALES YDE FORMALIDAD
poco hay señales subjetivas del autor. Su tenor es formal, y el
modo se refleja en la elaborada selección léxica. Esta sdccc,i(m El poeta y filólogo Dámaso Alonso comenta lo siguiente en
presupone en el lector el conocimiento de nna terminología una nota a su trabajo «Límites de la estilística»:
54 CÓMO ESCRIBIR lllEN EN ESPAÑOL REGISTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS
55
El ílustre hispanista extra~jero que, sintiéndose •castizo• y El español general es el que compartimos
para demostrar su dominio del español, comenzó su discurso todos los hispanohablantes, cualquiera que sea español general
en un congreso internacional con estas palabras: <<yo inclino nuestra procedencia. Sus límites son a veces
mi cholla ante esas banderas ... », ¿qué clase de error cometía? borrosos, pero creo que estaremos de acuerdo, en este caso, en
Es confusionismo pensar que ese error es esencialmente dis- que la palabra niño es la más general del gru~, _la q\le puede
tinto del que habria hecho diciendo, por ejemplo, «una casa usarse en cualquier comunidad hispana y en mas s1tuac1ones. Es,
blanco•. [... ) No era «facultativo•; tenía que haber dicho cal» también la más neutra desde el punto de vista de las connota-
za. ciones afectivas. Connotación (tema que veremos en el capítulo
5) es el significado asociado de una palabra, que muchas veces
Aunque los términos cabeza y ch.olla tengan el mismo signi- depende del contexto, y otras veces de motiv::Ciones ?"rsonales.
ficado denotativo (ambos se refieren a la mis1na parte del cuer- Oiurumbely gurí son palabras usadas en oertos dialectos del
po humano), por supuesto no son intercambiables, y es un español, Un dialecto es una variedad de una dialectos
error usar una palabra por olTa en un discurso público, ya que lengua. Puede ser una variedad geográfjca -en . . , .
cholla solo es adecuada en el ámbito familiar. La diferencia qué comunidad se habla- o social, s~gun la pos1cion soc~oeco
entre ambos términos se suele llamar «estilística», pero la elec- nómica y el nivel cultural o educacional del hablante. Iodos
ción del hablante está muy limitada por la situación. No siem- hablamos en algún dialecto de nuestra lengua, que es un con-
pre se es libre cuando se elige una palabra u otra, pues hay junto de dialectos. A veces utilizamos más de un dialecto, pero
palabras adecuadas y palabras inadecuadas. El hispanista iluor siempre se nos atribuye uno predominante, el qu~ correspon-
!Te del que habla Dámaso Alonso habrá hecho morir de risa a de a nuestra procedencia geográfica y a nuestro mvel cultural
su auditorio. v socioeconómico. En lo que sigue, solamente me referiré a
A propósito de este tipo de elecciones, vamos a introducir dialectos geográficos. . .
ahora el problema de las expresiones dialectales. Compárense Churumbel, según el diccionario, es palabra ''.de ongen gita-
las palabras siguientes, todas ellas de significado equivalente: no». Para gurí, el diccionario de la Real Academia nos dice que
es un uso rural en ciertos países •udamericanos, y también nos
niño crío peque churumbel gurí dice que en Uruguay significa «muchachito indio~ mes~izo», en
lenguaje familiar. Otros diccionarios dan referencias mas vag_as,
La diferencia entre estas palabras tiene que ver con dos pero más cautelosas, y atribuyen la palabra a zonas del «espa~ol
variables: meridional-, sin comprometerse más. Se suele llamar •espanol
meridional» al que se habla en el sur de España, español
l. la situación en las Islas Canarias y en toda América hispa- meridional y
2. el dialecto nohablante, por oposición al español hablado espa;wl
en Castilla, que se llama •español peninsular» peninsular
Utilizando nuestro conocimiento intuitivo, separemos pri- o «español de Castilla». El español •meridio- ,
mero lo dialectal, que es, quizá. lo más fácil de distingnir. La naho (también llamado «atlántico») es el de la rnayona de los
palabra niño pertenece al «español general», y las palabras chu- hablantes de español, y tiene unas cuantas variedades. El «penin-
rumbel y g;urí pertenecen a dialectos del español. Luego vere- sular• es el de una minoría muy pequeña, pero conserva su
mos qué hacemos con las restantes denominaciones. prestigio histórico.
11 56
CÓMO ESCRIBIR B!E;.( E!'i ESPAÑOL REC.JSTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS 57
1
. El uso de la palabra guri queda restringido a ciertas comu- 4. deseo de influir en el interlocutor, ya sea para acer-
nidades y al coloquio. Una persona que habitualmente use gurí carlo, ya sea alejarlo.
/1
' un en la conversación no podrá emplear este voca-
dú!kctalímw blo e_n un escrito dirigido a un público más Los dos últimos aspectos están asociados con lo que se llama,
coWquíal amf'.ho qu~ ~l d~ su comunidad. Y, aunque el en lingüística, ((cortesía verbal», constituida por ~ía verbal
1
• . escnto .este ~ngitdo a su comunidad, tampoco el conjunto de recursos para que tanto el emi-
la usara s1 el texto reqmere cierto registro adecuado a un tenor sor como el receptor mantengan o refuercen su mejor imagen
11 formal, y ciertos rasgos retóricos como neutralidad, generali- pública (véase el Glosario, s.v. cortesía).
dad, etc., ya q~e gurí es más apto para el coloquio. Un dialec- Volvamos a nuestro conjunto de sinónimos para niño. Crío y
tahsmo coloqmal crea un ámbito de comunicación más ínti peque son dos palabras de uso coloquial en el español de Castilla
Y por 1o tan • . mo
· to mas .~estr111:g_id?. Obsérvese, sin embargo, que y probablemente de otras regiones. Crío es la más usada, es decir,
nos ofrece una ope1on estilística de gran importancia, porque la que calza en más contextos, a veces como equivalente muy cer-
muchas veces queremos crear esa intimidad. cana de nirlü. Compárense los ejemplos siguientes:
Ll_t ade~~ación es la relación apropiada entre una expresión
y la. s1tuac1on en que se usa, que comprende los elementos tiene dos crios
md1cados arriba: campo, tenor, modo. Lo que es adecuado a tiene dos niños
la adecuaci6n un contexto puede no ser adecuado a otro,
por mucho que sea perfectamente correcto La diferencia entre niños v críos, dentro del dialecto de
desd~ el punto de vista gramatical. La adecuación depende de Castilla, y en el género coloquiaÍ (conversación oral cara a cara),
eleccwnes a veces muy sutiles y difíciles de hacer. Si una per- es mínima. La opción peque, que pertenece al mismo dialecto,
sona que habla el dialect~ donde se usa gurí emplea esa pala- produciría un cambio de registro, pues es palabra adecuada a
bra a~ con~ersar con algmen de otro dialecto, es, quizá, para contextos más restringidos. Dentro de ese dialecto, no existe
mclmr al mterlocutor en su intimidad, compartiendo una la posibilidad de utilizar los otros vocablos, salvo que se esté
expresión dialectal. Pero este gesto puede producir un efec- adoptando el dialecto ajeno por alguna razón.
to contrap_roducen:e, y hacer apartar al interlocutor, que Podemos tomar muchos grupos de sinónimos y tratar de
puede. sentirse exclmdo. Para no dejar fuera al interlocutor de determinar a qué contextos se adecuan. Los
otro dialecto, a veces desechamos nuestras propias expresio- <efes de
ejes de variación más evidentes son la diferen- variación más
nes y adaptarnos las ajenas. Siempre podemos decir «niño» sin cia dialectal y la diferencia en grado de for- evidentes
más, si no hablamos con alguien de nue~tro malidad. Tomemos otro grupo pequeño:
quépropóritru dialecto.
guían las
elecciones Las motivaciones fundamentales de toda elec- brisa vientecillo céfiro
ción estilística son las siguientes:
La palabra más marcada del grupo es céfiro, que no vacilamos
l. deseo de facilitar la comunicación en poner aparte, porque es un vocablo poético. Brisa es un tér-
2. deseo de expresarse, ' mino de uso general, y vientecillo, por ser diminutivo, plantea un
3. deseo de presentar una imagen favorable de uno problema interesante: es una manera ya ftjada por nuestra len-
rr1ismo,
gua para indicar cierta actitud del hablante, tiene contenido
'I
1'
I' 58 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL REGISTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS 59
i
1 I
afectivo. Los diminutivos, por lo general, se usan más en el colo- siones más conocidas son la narración y la exposición. Vamos
quio oral que por escrito. a Lratar primero estas dos dimensiones, y luego agregaremos
Cabe aquí hacer una aclaración. Cuando decimos que una «)lfaS.
expresión es propia del coloquio, no debemos entender que El lector recordará que en la clase de español se enseña a
solamente aparece en el coloquio, es decir, en la conversación l'Scribir narraciones, exposiciones, y a veces narrocióny
oral cara a cara (o telefónica). Cualquier expresión coloquial también descripciones, considerados los tipos exposición
puede usarse por escrito, todo depende del género del escri- básicos de textos. No se trata de géneros, pues
to. En las cartas personales se usa un registro coloquial, con sería dificil asignarles una función social predominante: una
alus10nes al contexto inmediato y al interlocutor, vocabulario narración puede tener por función entretener, informar, ense-
familiar, etc. Y en una conferencia se pueden utilizar expresio- tiar... y aparecer en un artículo científico sobre psicología, en u'.'
nes científicas o técnicas que no se usan, por lo general, en Ja libro de historia, en un tratado de moral, o en un libro de coo-
lengua hablada. Pero parte de nuestra capaci- na, entre otras muchas posibilidades. Las exposiciones, a su vez,
adecuaciún y d d
1 1
e;ocpresiunes a para usar una lengua consiste en saber qué se encuentran prácticamente en todos los géneros, cada vez
típicas de expresiones son más típicas de una clase de c¡ue hay que dar datos, explicar, argumentar. . .,
clases de interacción verbal que de otra. Cuando deci- Los textos expositivos se caracterizan por dar mformac1on
interacción mos que algo nos «suena» coloquial o nos (datos, ideas) y a veces argumentar para convencer de algo a los
«Suena)) informal estamos ejercitando nuestra lectores. El lenguaje debe ser preciso y convincente, y se tendrá
capacidad para usar la lengua, que se manifiesta en este caso especial cuidado en la selección de los sust~ntivos y adj~tivos
como capacidad para decidir la adecuación de un término a (que serán numerosos, puesto que transmiten mucha mf~r
ciertos contextos y no a otros. Esta capacidad se desarrolla con mación). En estos escritos se debe estructurar el texto segun
la lectur~ y la escritura, y se va incrementando a lo largo de las necesidades de la información, partiendo, por lo general,
nue~tra vi~a. La p:rsona con buen oído o con oído ejercitado de lo conocido, para ir añadiendo datos nuevos.
hara elecciones mas afortunadas, y sus escritos serán más apro- En los textos narrativos se cuentan episodios en un orden
piados y eficaces. lineal cronológico, o empezando por el final o por el medio
Hasta aquí, y a partir del caso de la cholla del hispanista de la historia. En las narraciones tiene primacía la acción ( expre-
torpe, hemos hablado de la relación entre el contexto y el uso sada mediante verbos), la identificación de los agentes, y las
de una expresión u otra. Pero las variaciones textuales se extien- estrategias para hacer que el argumento de la historia sea inte-
den también a otros niveles, al nivel de la sintaxis o construcción resante, y para obligar al lector a esperar el desenlace.
de la oración y al nivel de la estructura del discurso. Es Jo normal, y no lo excepcional, interca- ""'"da de
lar narraciones en escritos de tipo expositivo, o narroción y
LAS DIMENSIONES TEXTUALES dar informaciones en los narrativos; la pro- exposición
porción y el diseño dependen del propósito
del texto, de las convenciones de escritura según los géneros y
Para estudiar estas variaciones que afectan no solo al voca- registros, y de la personalidad del auto_r. Por ejemplo: es ha~i
b~lario: sino a la oración y al texto, debemos distinguir las tual incorporar relatos para apoyar tesis en los textos expos1t1-
d1me~s.10nes textuale~. Se llaman así las estructuras lingüísti- vos, e interrumpir las narraciones para dar informaciones gene-
cas basteas que constituyen los textos comunes. Las dimen- rales o específicas que vengan a cuento.
60
CÓMO ESCRIBIR BIEN E:-! ESPAÑOL 1rnrn~"J'ROS, ESTILOS YTlPOS DE TEXTOS 61
telativa Se ha dicho que los escritos expositivos tratan 4_ estilo objetivo vs. estilo expresivo
faa1úlad de w. de cómo funciona el mundo, y los narrativos, en
1-tos cambio, de qué nos parece el mundo. Los Cada dimensión refleja no una oposición nítida, sino un
narrativos narrativos suelen presentar mayor grado de rontinuum, una gradación: un texto puede
. ,, . giros expresivos, es decir, de construcciones m·r más o menos narrativo, más o menos inte- la.• dimensúme<
smtacticas Yvocabulario reveladores de la subjetividad del autor. no forman
rartivo, rnás o menos abstracto, más o menos
Por e~ están más cerca del lenguaje coloquial que los textos oposici,_.
ohjctivo. Por lo general, habrá una dimensión nítülas
e~pus1ttvos, y por eso resultan indicados, como práctica, para los predominante, y por lo tanto unos recursos
nmos de la escuela primaria, que tienen que pasar de la orali- lingüísticos predominantes. Pero las dimensiones se combinan.
1l,1 dad a la escritura.
t In texto escrito puede ser, por ejemplo, narrativu, interactivo,
~
I'
L"'.s te~tos narrativos más !lidies son los que se refieren a 'ilUacional y expresivo, como en el ejemplo siguiente, tomado
1 expenenc1as personales, pues la organización es más simple ele una carta personal de mi archivo:
~' (basta c~n seg".Jr el orden cronológico) y el conocimiento del
t
'
tema es mm~dta~ne_nte disponible. Pero en ningún caso, ni
en el de. la htstona mas sencílla y mejor conocida, hay un con-
ducto d'.rect? entre nuestra mente y el escrito en que relata-
Aquí estoy otra vez en el Gijón. Está medio
vacío, porque es temprano. Me acuerdo
mucho de la última vez que nos encontra-
texto con
preponderancia
tk la dimensión
mos la htston.a. Todo escrito requiere trabajo, elaboración, ensa- .
mos aqt1í. .. Nos sentamos en la misma mesa narrativa
yos y correcciones. en que estoy ahora ... Acaba de entrar un tipo con cara de his-
Los textos expositivos suelen exigir del escritor más destre- panista recién salido de la Biblioteca Nacional, y creo que
zas Yhabilidades; son más «difíciles,, que los narrativos. Exponer viene con Irene, sí, es Irene, no me ha visto. Ella le coquetea
un tema (en una carta, en un memorándum, en un informe en (qué raro, ¿no?), y él tiene cara de gil. No te lo vas a creer,
un artículo peri?dístic;o, en un libro académico) exige qu~ el qué casualidad, es que acabo de ver a Luis Panizza, tengo que
~utor resuelva stmult.aneamente una serie de problemas dis- ir a saludarlo. Después sigo.
nntos, que llenen que ver por un lado con el tema o contenido
de la exposición y por otro con los procedimientos para expo- En este texto suceden cosas que son narradas, pero no en
ner ese tema usando estructuras discursivas adecuadas pasado (como en las narraciones típicas) sino mediante formas
Vamo~ a ampliar ahora esta distinción entre lo na;ratívo y verbales que indican cercanía con el presente (presente y pre-
lo ex~os.!~tvo, que es correcta pero algo limitada para explicar térito perfecto), ya que el hablante refiere lo que está pasando
l~ vanac1on entre escritos, y vamos a distinguir cuatro dimen- en forma simultánea con su escrí tura. Abundan las alusiones a
siones textuales, organizadas como oposiciones. Son las siguien- la interlocutora, según es habitual en las cartas, y por eso deci-
tes:
mos que el texto es interactivo. Se usan, además, expresiones
como «gil», propias de la conversación oral e informal. También
DIMENSIONES TEXTUALES
hay referencias al contexto situ.acional («aquí•, •en esta misma
l. narración vs. no narración mesa») que no son frecuentes en otros escritos. Este texto logra
2. interacción vs. infonnación incorporar al lector a los sucesos que narra, convertir lo en par-
3. información abstracta/lógica vs. información sítua- ticipante, alguien que mira a los personajes del café junto con
cional
el autor de la carta. En el relato en tiempo pasado tal partici-
62 63
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESP~'iOL KEC!STROS, ESTILOS YT!POS DE TEXTOS
pacíón está mucho más limitada, pues todo lo narrado ha suce- parece incluir al narrador y al lector. Sín. embargo, no obse~._
dido y terminado ya en el momento en que se empieza el rela- v;;mos ninguna interacción con el lector, m tampoco refer~ncta
to. alguna a la situación de producción del texto (como habta en
El texto siguiente, que es la apertura de una los relatos anteriores). El estilo es objetivo y no expresivo, es
tiiXto narrativo
literario novela, es también narrativo, y también pre- ckcir, no transmite información sobre el narrador, al menos en
senta referencias situacionales: rorrna explícita. Los datos precisos, con fechas incluidas, de la
c'<!ición de Pope que se menciona, le dan a este fragmento el
Hoy, en esta isla, ha ocurrido un milagro. El verano se ade- 10110 informativo y objetivo de un ensayo académico. La segun-
,·,: lantó. Puse la cama cerca de la pileta de natación y estuve da parte del texto es la descripció~ ~e un personaje .. Como tod~
bañándome, hasta muy tarde. Era imposible dormir... A la descripción, presenta un predomtmo de construcciones nom1-
madrugada me despertó un fonógrafo ... Hui por las barrancas. 11ales, con abundancia de adjetivos. La estructura del pasaje
Estoy en I~s bajos del sur, entre plantas acuáticas, indignado pur ¡11 tegro nos es muy familiar. ya que las narraciones suelen i~ te-
los mosquitos .. ., viendo que anticipé absurdamente mi huida. rrumpirse con descripciones, a veces detalladas, de personajes,
(Adolfo Bíoy (',asares, La invención de Mm•L) lugares o tiempos relacionados con la historia que se cuenta.
Estos ejemplos muestran que las dimensiones textuales pue-
,, Este texto se parece al anterior en que está narrado en pri-
mera persona, los hechos son recientes o simultáneos, contie-
den manifestarse en mayor o menor medida en un texto, o no
manifestarse en absoluto. Por lo general, pode- gradaci6n de
ne referencias abundantes al entorno, y manifiesta la subjetivi- mos identíficar una dimensión que predomi- las dimensiones
dad del autor. Pero no es un texto interactivo como la carta va na sobre las otras. En los tres ejemplos que textuales
', acabamos de ver, la dimensión preponderan-
que es una memoria escrita por el protagonis-
ta de la novela a un auditorio indeterminado. te es la narrativa.
El texto que transcribo a continuación es tam-
bién el comienzo de un relato literario:
LA DIMENSIÓN INFORMATIVA
En Londres, a principios del mes de junio de 1929, el anti-
cuario José Cartaphilus, de Esmirna, ofreció a la princesa de En los ejemplos que siguen, la dimensión preponde~~te e.s'
Lucinge los seis volúmenes en cuarto menor (1715-1720) de en cambio, la informativa., aunque, otra vez, vamos a d1stmgmr
la Ilíada de Pope. La princesa los adquirió; al recibirlos, cam- otras dimensiones combinadas. Los escritos informativos son los
bió unas palabras con él. Era, nos dice, un hombre consumi- que más nos interesan, ya que tendremos que - de
do y terroso, de ojos grises y barba gris, de rasgos singular- componerlos con frecuencia. Las breves obser- dimensión pre.
mente vagos. Se manejaba con fluidez e ignorancia en diversas vaciones que siguen deben leerse como pre- pomJerantemente
lenguas. (Jorge Luis Borges, ·El inmortal».) paratorias para el estudio de los textos acadé- ~
micos que se ofrece en los capítulos 7 y 8.
, .La primera parte de este texto de Borges presenta los rasgos El siguiente pasaje pertenece a un libro de lingüística:
t!ptcos del relato: verbos en tercera persona, ordenados en
,, Una de las muchas paradojas que proporciona la investiga-
secuencias temporales. Sus sujetos están en tercera persona.
' No hay rastros del hablante, salvo en el inciso «nos dice•, que ción gramatical radica en la reconocida dificultad que con-
1¡i
11·1
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65
64 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL Mf,l:ISTROS, ESTILOS YTIPOS DE TEXTOS
11'1
prepond.era en el texto. Otro rasgo que ya conocemos es la trncciones contuviera datos personales del autor o vivas ape-
referencia al lenguaje usado: el autor reformula sus propias laciones de amistad y confianza al lector, es decir, que tuviera
palabras, para hacerla!; _más claras: «o. dicho menos equívo- rasgos discnrsivos que hicieran explícita y operativa la interac-
C:~ente ... • Hay, tamb1en, referencias al texto mismo «estas ción misma. Y también seria contraproducente que la apela-
pagmas•. Lo diferente, aquí, respecto de los textos vistos antes ción al votante fuera demasiado objetiva o demasiado infor-
es que el autor incluye preguntas e incisos. Las preguntas n~ mativa, pues perdería interés y por lo tanto no instaría a la
son «ve_rdaderas» porque el interlocutor está mudo y no con- acción.
testa. S1 contesta el autor mismo, y contesta en primera per- Si se quiere escribir bien, se deben observar todas estas
sona, y con u_n atenuador «me parece que no», en lugar de variaciones textnales, separando, en el análisis, los hilos que
«no». Estas formulas que suavizan las afirmaciones son fre- forman el entramado del texto v lo hacen eficaz. Un buen
cue.ntes en los textos académicos, que se presentan como dis- tejedor sabe distinguir colores, c~nsistencias, texturas. Por lo
cusmnes entre pares. Los incisos adensan aún más Ja prosa, demás, la intuición es buena guía: todos notamos las diso-
pu:s penmten acumular información interrumpiendo la sin- nancias estilísticás, las faltas de adecuación, los
taxis de la frase. La información así presentada queda, por infortunios. anámaW.
un lado, al margen: pero, por otro, se destaca, abre más pers- Hay muchos tipos de anomalías producidos
frresencia del pect1vas: el lector debe seguir varios pensa- por la falta de dominio de registros y correcta gradación de
autor m1entos a la vez. Este texto es el más interacti- dimensiones textuales. Un alumno extranjero me escribió una
. .vo de todos los expositivos que hemos visto, ya uota que decía:
q~_e mtenta abiertamente crear un diálogo con el lector. En este
dialogo, el aut~r se presenta en primera persona y opinando, Querida profesora: Querría declararte que no puedo venir al
con verbo~ «pnva~os» (pensar, creer, etc.), de modo que el examen el jueves porque tengo que ir a Ja corte. ¿Me podrías
emlo es~~ expresivo (menos objetivo) que el de los otros tex- dar el examen el viernes? ()jalá que no sea tan dificil como el
tos exposlti:'<.;'· Se trata de gradaciones, como vemos, y todas examen anterior. Gracias.
ellas se ma~iltestan como elecciones estilísticas y por medio de
recursos d1stmtos, desde el vocabulario hasta la estructura del Hay varias anomalías en este texto, que lo hacen poco
texto.
feliz (anomalías que tendemos a perdonar en un extranjero).
. Cada texto presentará alguna comhinación de manifesta- La primera es la mezcla del tratamiento formal •profesora»
c~ones de los cuatro índices indicados. Un manual de instruc- con el tuteo. Tampoco el verbo «declarar» es el más ade-
~10nes para usar un aparato, por ejemplo, es un texto no narra- cuado, ni el uso de «querría», que intenta ser cortés pero es
tivo, mas o menos interactivo, qne contiene mucha información algo confuso. Como en las peticiones se practica la humil-
Y utiliza un estilo objetivo. Un texto para convencemos de que dad, la referencia al examen anterior dificil es más bien
v~temos al diputado X. que aparezca como escrito por e) mismo impertinente: un fallo contra la cortesía, pues atenta contra
d1J;>ntado X (aunque lo haya escrito otra persona), será mucho la libertad del profesor de proponer los exámenes que le
m'.1'~ mte.ractivo y s~bjetivo, y contendrá, a su vez, otra propor- parezcan mejores, sobre todo si debe preparar uno especial
c10~ de mformac1on abstracta y situacional, y probablemente para un alumno, fuera de la fecha establecida. En este texto
algun fragmento narrativo (reseñando los logros del diputa- se ve la diferencia entre «inteligible» y «torpe»: el texto es per-
do, por ejemplo). Seria contraproducente que el manual de ins- fectamente inteligible, pero no se destaca por sus elecdo-
69
68 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL REGISTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS
nes estilísticas ni por el modo de mantener el registro ade- vincente) y ha metido la cabeza bajo el ala ella también, pues.ni
cuado. en este fragmento ni en los que siguen explica cuáles son las difi-
Hay casos más graves, y suelen aparecer en las composi- cultades de la expresión escrita. . .
ciones en que se espera que el estudiante construya un texto A modo de coda, podemos decir que un escntor connen-
informativo. La norma de un texto informativo es que esté zudo sabe dominar los matices de la variación escrita, sabe
restringida la dimensión narrativa, y que tenga pocos ele- que debe encontrar un regisu·o adecuado, un tono p~opicio al
mentos interactivos, subjetivos y situacionales, objetivo de su trabajo, una sintaxis correcta y ademas clara Y
errores más fluida, y sabe, además, que debe entretejer en su texto, jUnto
tal como sucede en los ejemplos que hemos
frecuentes en a la dimensión preponderante exigida por el tema y la oca-
los textos visto. Por lo general, el fallo de los estudiantes
en estas composiciones consiste en la tendencia sión las demás dimensiones necesarias, siempre que el con-
expositivos
a superponer el vocabulario especializado de junt~ sea armonioso, grato y convincente. Para quien se tome
esco"lares
los textos informativos con demasiados ele- el trabajo de tener todo esto en cuenta, la re~?mpensa es m~y
mentos interactivos, subjetivos y expresivos: en lugar de infor- grande: un buen escrito, un acto de creaoon que nos deje
mar, de la manera más clara y objetiva posible, se opina, se satisfechos.
trata de persuadir, y se subjetiviza más de lo necesario. Véase
este fragmento, tomado de una composición cuyo tema es
EJERCICIOS
«Dificultades de la expresión escrita»:
Ejercicio 1
Mis mayores dificultades son el vocabulario y los acentos. En
la escuela secundaria no se presta atención a este aspecto tan Registros. En la lista de Ja izquierda ~ay u~a serie ~e .expre-
fundamental e importante en la formación de una persona siones, y en la lista de la derecha una sene de tipos ge':'enco~ de
como es la expresión escrita, y luego, en la vida real. el alum- texto. Conecte cada expresión con uno (o dos, o vanos) gene-
no no sabe escribir, escribe con inseguridad, con miedo. Mi ras, e indique qué rasgos le han permitido atribuir cada frag-
primer maestro de composición solamente nos corregía la mento a uno o varios tipos de texto. Marque con un astensco las
gramática, y entonces yo recuerdo que escribía con frases expresiones dialectales, e indique, si puede, a qué dialecto per-
muy cortas para no equivocarme. ¡Qué absurdo! Es como el
tenecen.
avestruz cuando mete la cabeza bajo el ala, para no asustarse
de lo que ve, y así yo me asustaba del verdadero español. EXPRESIONES G/!rJEROS
Todos estarán de acuerdo en que escribir cortito no es escri- conferencia académica
vejestorio destartalado
bir bonito. No critico al maestro, pero a buen entendedor coloquio
la supuesta asesina
pocas palabras. instrucciones de uso
qué tipo yeta
dijo, digo: yo no la conozco carta personal
Los rasgos más acusados de este trabajo son Ja ausencia de estoy mosqueada artículo académico
información y el exceso de subjetividad. Las proporciones correc- una inusitada advertencia noticia periodística
tas de la dimensión informativa y de las ou·as que pueden coe- tema visto arriba conversación en
consultorio médico
xistir con ellas han sido alteradas, la autora se ha sentido con la más peor
libertad de ser algo graciosa (probablemente para ser más con- transcurrió un cuarto de hora literatura
70
CÓMO ESCRIBIR B!F.N EN ESl'4.~0L
IU:GISTROS, ESTILOS YTl!'OS DE TEXTOS 71
explosionó un artefacto
es que no me gusta a) Querida Graciela: Recibí tu hermosa tarjeta y esa trágica
0 ~ ~iré en qué consiste un reflejo Maünche que yo encuentro tan patética y formidable y que
dihcultades para orinar siempre me acerca a Marta. Insisto en lo de patética porque
n1e invadió una ínusitada es Jo que estoy "iviendo con M., que cada vez se acerca más
pesadumbre al fin de su cuerda tensa.
es un lince
cállate de una buena vez b) Querida Graciela: Espero que estas líneas te alcancen en
quiero pis Madrid. Hemos pasado un verano muy feliz. He podido
reintentar el procedimiento dedicarme al jardín, a leer a gusto, a hacer largas camina-
1u amiga que te quiere tas. Mi nieta Dalia paBÓ con nosotros varios fines de sema-
t'f vientre inflamado na. Está bella y sanita.
siJitiéndose agraviada
i><Tmí tan me ustedes que les diga e ) "''
"<-ue- pasa...
»> Por que• tanto s1·1enaol«
. --"· LIegaron 1os infurmes.>
s.:'nsación de rnareo v náusea Tu querido amigo C. el listo no apareció todavía, y yo en
anda con la mona , veremos, con la casa patas arriba, en el mayor despelote
de mi vida. \'1-ny me?
t•ra una alegre mañana de mayo
lc>s sufridos vecinos de San juan
dos de estos y uno de los de allá, sin Ejercicio J
crema
~j(1stese hasta oír un clic Registros. El siguiente texto pertenece a la composición de un
es más malo que pegarle a la madre estudiante de español cuya lengua materna es el inglés. El estu-
altos dignatarios diante trabajó con empeño, y usó el diccionario a menudo,
<1ué mal se senúa ahora. Dios según se ad\ierte enseguida. Explique las razones por las cuales
d<z~d que a voces diga el. bien que pierdo este texto, pese a las buenas intenciones de su autor, es un fra-
P('f'lodo de incubación caso. Intente una nueva versión, más inteligible.
dama volvió a su automóvil, y un lechuguino le dijo que se to de Cádiz, dos meses y medio callado y triste en la jauli-
recogiese ya. La jovenzuela había desaparecido en la densa ta, hasta que su grito de júbilo resonó, de proa a popa, y des-
maraña de ojos. pertó a todo el mundo.
-¡Milagro! ¡Milagro!
Ejercicio 4 El tiempo alcanzó justo para desviar el navío. El grillo esta-
ba celebrando la cercanía de la tierra. Gradas a su alarma,
Dimensiones textuales. Analice cuidadosamente los siguientes los navegantes no se han hecho pedazos contra las peñas de
pasajes, y explique cuál es la dimensión predominante, y cuáles la costa del Brasil.
las otras dimensiones presentes, en orden de importancia. Cabeza de Vaca, jefe de esta expedición al rfo de la Plata, es
Indique qué recursos lingüísticos le han permitido identificar muy sabido de estas cosas. Lo llaman Álvar el milagrero
las dimensiones. desde que atravesó América de costa a costa resucitando
muertos en las aldeas indígenas. (Eduardo Galeano, Memoria
a) La profundidad mínima de la piscina es l.80 m. Los bañis- 4"1juegv.)
tas deben saber nadar en evitación de accidentes.
e) Zacatecas es un sueño. Sin exagerar, sin incurrir en ala-
banza fácil, podríamos matizar diciendo que es el resulta-
b) Albahaca ( Ocinum basilicum). Uso terapéutico: Las hojas y
do de diversos, complejos y casi desconocidos sueños. Ese
las sumidades en flor están indicadas en el tratamiento de
minúsculo punto en el espacio del norte mexicano, histó-
la debílídad nerviosa, en los dolores de cabeza debidos a
ricamente, fue zona de tránsito desde una antigüedad que
indigestión, en la debilidad cerebral, contra el hipo, en la
puede antojarse milenaria pues, situado entre las dos sierras,
somnolencia después de las comidas por digestión labo-
era el punto menos abrupto para pasar hacia el Altiplano
riosa, en los espasmos del píloro y en el cansancio por exce-
central para internarse en las rutas prehispánicas que con-
so de trabajo. Infusión: poner 5 gramos en infusión en 200
ducían hacia el norte ... En 1531 Nuño de Guzmán envió al
gramos de agua hirviendo y dejar reposar, bien tapado, capitán Pedro Almíndez Chirinos en pos de las Amazonas
colando a continuación. (E. G. Vaga, Plantas aromáticas y y llegó hasta Zacatecas, donde «tomó posesión casi hacien-
medícinal~s en la cocina).
do burla de esta tierra., corno dice la Crónica miscelá111ta de
fray Antonio Tello, por el lÍ"dGISO de su búsqueda y la pobre-
c) ¿Qué es un poema extenso? El diccionario dice que exten- za que a sus ojos encontró. Pocos años después, a mediados
der es hacer que una cosa aumente su superficie y ocupe así del siglo, el sonido de la plata atraía la atención del mundo
más espacio. Extender también significa esparcir, desen- novohispano ... Sin duda al¡,"llna, la plata fue uno de los
volver, desplegar y ocupar cierta extensión de terreno. En grandes impulsos que empujaron la expansión espai10la
su sentido original y primario extender es un concepto hacia el norte de la Nueva España, a pesar de encontrarse
espacial. Así, un poema extenso es un poema largo ... ¿Pero en el centro mismo de la Gran Chichimeca, el hábitat natu-
qué tan largo tiene que soc un poema para ser considera- ral de los zacatecos, guachichiles, pames, tepehuanes, los
do como un poema extenso? ¿Cuántas líneas? mejores flecheros del mundo segün el decir de algunos
cronistas. (G. Tovar de Teresa, •Cantera de sueños».)
d) 1541. Cabo Frío. Al amanecer, el grillo cantó.
Había estado mudo desde que lo embarcaron en el puer-
1
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74 CÓMO ESCRJBIR BIEN EN ESPAÑOL Rl•:<aSTROS, ESTILOS Y TIPOS DE TEXTOS
75
11ú rápidamente la discusión para lanzarse sobre un sitio que metafórica y Ja suya no metafórica. ¿Qué ha variado en el
hahía quedado libre. registro? ¿Por qué?
llos horas más tarde volví a verlo delante de la estación de
Saint l.azare, conversando con un amigo que le aconsejaba b) Observe la transmutación que ha sufrido la realidad cuan-
•lis111i11uir el escote del abrigo haciéndose subir el botón supe- do la vemos •médicamente•. ¿De los tres aspectos del regis-
1·ior por algún sastre competente. troque hemos estudiado (campo, modo, tenor), ¿cuál es
el más afectado?
~) M<·tafóricamente
F.11 .-1 centro del día, tirado en el montón de sardinas viajeras e) «Traduzca» a formas equivalentes algunas de las expresiones
d<" 1111 coleóptero de abdomen blancuzco, 11n pollo de largo •médicas•, por ejemplo: «Sesión de helioterapia., •allí
• 11.-llo desplumado arengó de pronto a una, tranquila, de entre diagnostico•, «curiosa elongación traqueal•. .
.-11,", y su lenguaje se desplegó por los aires, húmedo de pro-
l!"sta. Después, atraído por un vacío, el pajarito se precipitó d) Explique en qué reside la comicidad de algunas expresio-
.'iohr<' él.
nes, por ejemplo •reumatismo deformante del cordón del
E11 un triste desierto t1rbano, volví a verlo el mismo día, mien~ sombrero», ·forúnculo que deslucía sus temporales•.
t '"' se dejaba poner las peras a cuarto a causa de un botón
e) ¿En qué reside la comicidad del texto 3)?
cl1alquiera,
Lo que nos permite llegar a construir una gramática mental sobre las zonas borrosas en que no se cumplen las reglas, sobre
de la lengua o lenguas que oímos en la infancia es una facultad los límites de estas variaciones, y en general sobre las posíbili-
gramática exclusiva de la especie humana, la facultad del dades e><presivas que tenemos a nuestra dis-
univmaJ lenguaje. Se llama «gramática universal» a la posición si querernos explotar a fondo nues-
.. .ªPti~~ innata para aplicar principios gramati- tros recursos lingüísticos. Podremos alcanzar
cales y u_11hzar s1stemat1camente los datos lingüísticos disponi- un nivel más alto de elabor.lCión lingüística, refinando nuestra
bles, ~ ":" llegar a construir, en los primeros diez años de vida, una capacidad para expresar nuestras e><periencias de la realidad,
gramat1ca mental de la lengua materna. Este conocimiento es puesto que sabremos más sobre la herramienta que usamos
mconSC1ente, e inaccesible a la introspección; no podemos, aun- para expresarnos.
que queramos, recuperar las reglas que se encuentran en las Los términos técnicos de la gramática-palabras como «Sus-
profundidades de nuestra mente, siempre disponibles para for- tantivo», ~~pretérito», «subordinación», «rnodo)), etc.- tienen la
mar oraciones. Las ponemos en práctica, sin más. función importantísima de habilitarnos para
. Pero al_ comenzar la instrucción formal empezamos a estu- ventnjas de
pensar sobre el lenguaje y para hablar sobre conocer los
~1ar gramat1ca, la descnpt1va y la prescriptiva. Precisamente el lenguaje. Pongamos un ejemplo. Es muy t.érminos
JUnto con el con?cinúento de la escritura, que nos permite común oír decir y decir frases como hubieron gramaticales
.
escrrtura y
Visualizar
. d la lengua, comienza el análisis cons- fiestas, que no ounple con la norma del espa-
romienxo del cien te e las estructuras lingüísticas. En las cla- ñol estándar. La frase tiene sentido y además la usa mucha
anáJim ses de lengua de la escuela primaria se combi- gente, pero no es aceptable en el español general culto, que
consciente de la na~ .1~ prácticas de la lectura, la escritura y el exige decir, en cambio, hubo fiestas, con el verbo en singular.
1mgua anahs1s de las partes de la oración. Este análisis Quien, buscando alcaw.ar un nivel óptimo de corrección en el
. . se intensifica en la escuela secundaria, y el estu- uso de la lengua, quiera entender por qué una frase es acepta-
diante adqmere el hábito de segmentar las cadenas Úngüístí- ble y la otra lo es menos, tiene que manejar conceptos grama-
cas, apr;nde la terminología gramatical, y recibe por lo común ticales, en este caso las nociones de verbo impersonal y de con-
una sene de instrucciones sobre el uso correcto o normativo cordancia (que veremos más abajo). Los términos técnicos son
de su lengua.
imprescindibles, finalmente, para poder usar
Algunos.estudiantes piensan que si aprenden gramática van con provecho las gramáticas y diccionarios
a hablar mejor y": ;scribir mejor. Posiblemente sí, pero la rela- donde está a nuestro alcance toda la informa-
ta rnlación c~on ~ntre el estudio de la gramática y la efi- ción que necesitamos.
aenc1a en el empleo de la lengua no es una Veamos otro ejemplo de construcción dudosa, que pongo en
=:mienro relación directa, de causa-efecto. El estudio de algunas de sus variantes:
de la gramática la gramática nos enseña a observar la lengua
y habilidad que hablamos de tal manera que notamos el a) Es por eso que le escribo.
·paro escribir sistema de regularidades que subyace a todas las b) Le escribo por eso.
oo es directa ~raciones que podemos construir, que son teó- c) Es por eso por lo que le escribo.
. . ncamente infinita~. El adiestramiento grama-
~1cal nos r_erm1te v;!' la estructura de regularidades que mane- Estos ejemplos proceden de la composición de una estu-
jamos casi automat1camente, meditar sobre sus variaciones, diante. Se trataba de una carta a un profesor, en la que su auto-
j
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88 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA!;¡OL LA CDRl!ECCIÓN GRAMATICAL
3. Tema: Concordancia
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA.'10L 1 lA CORRECCIÓN GRAMATICAL
el_pronomb~e l-0, o su femenino y sus respectivos plurales: ¡,, rioridad inmediata con el verbo, y no debe usarse para expre-
miro, lo estudio, lo espero, la quienJ, la llamé, los miro, las espero. Es sar posterioridad, como en el ejemplo. Está bien decir:
un caso ac'.'ptable de leísmo, sin embargo, usar fe (masculino,
singular) s1 se trata de un objeto directo personal y masculi- Desdi! la ventana veía a los niños jugando en la plaza. (Las accio-
no:
nes suceden simultáneamente.)
lo (/.e) recuerdo (a él)
lo (l.e) quíe:ro (a il)
1 Yéndose a toda carrera, tropeui con el jefe. (Las acciones pueden
interpret:arSe como símultár1eas. o una, la de irse. como inme~
díatarnente anterior a la otra, pues queda interrumpida.)
pero no
12. Tema: Uso del gerundio (función) .
/.e recuerdo (a ella) (mal) .Error: Es una figura representando un dios.
/.e qui.ero (a ella) (mal) Forma correcta: Es una figura que representa un dios.
Regla: El gerundio desempeña la función general de adver-
La Academia de la Lengua (véase su Esbozo de una gramática bio de modo, y no de adjetivo. Por ejemplo:
de la lengua española) aconseja el uso de lo para el objeto direc-
to, sea pe~sona o cosa, pero considera igualmente correcta Ja Pasó e.arriendo.
forma le, s1 se trata de un objeto directo de persona. Me miraba riéndose. (El gerundio expresa el modo en que el
En el primer ejemplo, «el coche• es una cosa y no debería sujeto miraba, y se refiere al verbo.)
ser suplantado por 1.e, aunque sea masculino.
Si no hay verbo, el gerundio puede servir como un partici-
10. Tema: El laísmo pio activo, pero solamente en ciertos casos, como en los pies
de las fotografías o dibujos:
Error: A su hija la dieron un premio.
Forma correcta: A su hija Je dieron un premio. El rey inaugurando las ínstalacúmes.
Regla: El objeto indirecto, sea femenino o ma'iCulino se &fugúu!.os esperando sowrros.
expresa siempre con la forma /.e (o se), nunca la; '
13. Tema: Oraciones interrogativas indirectas
la digo la verdad (mal); debe decirse /.e digo la verdad (a ella) Error: No saben que hacer.
las pregunt.é (mal); debe decirse /,es pregunté (a ellas). Forma correcta: No saben qué hacer.
Regla: Las oraciones interrogativas indirectas son preguntas
11. Tema; Uso del gerundio (tiempo). formuladas en estilo indirecto. La construcción consiste en un
verbo principal de comunicación (saber, entender, decir, pregun-
Error; El agresor huyó, siendo detenido horas después. tar) y una oración subordinada, que contiene la pregunta. No
Forma correcta: El agresor huyó, y fue detenido horas des- se conservan, en la lengua escrita, los signos de interrogación,
pués.
pero el interrogativo mantiene el acento, reflejando así la ento-
Regla: El gerundio expresa coincidencia temporal 0 ame- nación. Compárense los siguientes casos:
95
94 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 1.11 { ~)RRECCIÓN GRAMATKAL
-
97
!A CORRECCIÓN GRAMATICAL
96 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
Ou·as consu·ucciones parecidas, que se confunden con estas, TALLER DE BUEN ESPAÑOL
son las llam~das consu·ucciones pasivas reflejas, o pasivas con se, En esta última parte del capítulo, invito a los lectores a que
como por ejemplo las siguientes: trabajemos juntos. He seleccionado unos textos donde aparecen
errores gramaticales de distinto tipo. Primero, les sugiero que
Se venden pisos. reescriban los pasajes siguientes, corrigiendo todos los errores
Se anunciaron las notidas. de gramática y mejorando también las elecciones estilísticas del
Se alquila computadom.
99
98 CÓMO ESCRIBIR BIE1' FN ESPANOL l A CORRECCIÓN GRA."1ATICAL
Para escribir con propiedad y dominio del idioma, por ele- Tres días después, el taXi.fletero fue encontrad~ aún co? vida,
mental que sea el texto que nos disponemos a redactar es indu- .endo trasladado e internado en sala de terapia mtenSiva del
dable que tengamos al alcance de la mano y al auxilio del inte- ~ospital Español, falleciendo a las 13 del día 24.
lecto, una obra de las características como la que ofrecemos al
público en general 6. Texto periodísúco:
2. El siguiente es un fragmento de correspondencia inter- Casi al unísono los distintos ediles, al fundamentar su postura,
na de w1 ministerio: señalaban que {•es necesario pagarle a los empleados», aun·
que no se ponían de acuerdo en cuanto a los métodos de hacer
'
Se agradecerá aclarar si el último párrafo que indica que la coor- efectivo ello.
dinación y preparación de los stands en que participen orga-
nismos dependientes de la Secretaría de Cultura y de la Secretaría "
,l 7. Carta de lector a un periódico:
de Educación se hallan bajo la supervisión de ALENTAR, implica
también que dichos organismos se harán cargo del costo matL~ Falta considerar el perverso sistema estatal que ~omplica aun
ria! del stand, que asciende a la cantidad de $US 5.200. lo más sencillo; se dictó el decreto reglamentan~ c~nte~ien
do perplejidades entre distintos organismos e msut~cion~s
3. Fragmento de una novela traducida al español y publi- que h an h ec h o que a más de dos. años de entrada en vigencia
cada por una prestigiosa editorial: de la ley y acumulados más de ochenta millones de pesos en la
cuenta especial, no se haya invertido un solo centavo en la
Era a través de la memoria de sus sacerdotes que las ciudades
atención de los díscapacilados.
conocían su pasado [... ] La memoria de los sacerdotes era lo
único que los habitantes confiaban.
8. De un texto publicitario:
4. Fragmento de una carta enviada por la gerencia de un Aceites del Sur, S.A., tiene sus raíces en el año 1840_ ~n lo que
parking: fue «Aceites v jabones Luca de Tena", empresa fu.miliar, cuyas
My Sr. nuestro: instalacione~ estaban en el Prado de San Seba:'tiáo de Sevilla.
[ ... ] El accionariado, sigue siendo 100% espanol, mantenien-
Con fecha l 2 del corriente mes a través de lino de nuestros
clientes y luego confirmado por nuestra entidad bancaria, nos do su tradicional estructura familiar.
101
100 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL !A CORRECCIÓN GRAMATICAL
9. Del mismo texto publicitario: plemen to directo. Se ve mejor si reducimos la expresión: tengo,
una obra. (Por cierto, y aunque esto no tiene que ver con la gra-
Aceites del Sur, es la unión y esfuerzo de unos hombres y muje- mática, la expresión «al auxilio del intelecto» es muy poco afor-
res, cuyo fin es crear la satisfacción del cliente que compra tunada; en todo caso, bastaba con decir «al alcance de la mano»).
nuestro producto, al cual debemos nuestra existencia. Finalmente, la oración relativa que empieza en como no debe lle-
var ese nexo, pues no tiene ningún antecedente que indique
1 O. Fragmento de una carta interna de una institución cul- manera (compárese con lo hice así, como me indicaron). O bien
tural: sobra características, y el redactor quiso decir una obra como la
De acuerdo con lo hablado en la reunión de 3 de Octubre te que, o bien hay que cambiar la construcción: una obra de las
adjunto copia de la Normativa [ ... ] Yo espero que para fin~les características de la que (de las características que tiene la obra que) ...
de m~s, podan_ios tener implantado el sistema y las corres- Una versión aceptable de este párrafo sería como sigue:
pondientes tarjetas [ ... ] Creo que sería conveniente, que el
personal de tu Dirección lo conociera y que por parte de tus Para escribir con propiedad y dominio del idioma, por ele-
mental que sea el texto que nos disponemos a redactar, es
Jefes de Departamento, en primera instancia, se exigiera su
indudable que debemos tener al alcance de la mano una
cumplimiento.
obra como la que ofrecemos al público en general.
. 11. Fragmento de una crónica de fútbol (en revista depor-
2. Se agradecerá aclarar si el último párrafo que indica que /,a
tiva):
coordinación y preparación de los stands en que participen orga-
Pérez fue, ayer, en la cancha, qué duda cabe, el alma máter nismos dependientes de la Secretaría de Cultura y de la Secretaría
del equipo, cuyo talento le aseguran un puesto de honor en este di! Educación se hallan bajo /,a supervisión de ALENTAR, implica
campeonato y un lugar destacado en la historia del club. también que dichos organismos se harán cargo del costo
material del stand, que asciende a la cantidad de $US 5.200 .
. A continuación, voy repitiendo los textos, con sus números No hay aquí ningún error, pero la sintaxis de este párrafo
?ngmal~s, subrayando los fragmentos que tienen errores 0 es engorrosa. Además, se han mezclado en la misma oración
mfortumos expresivos, y añadiendo a cada texto un comentario. dos actos lingüísticos que convendría separar, por razones de
claridad. Veamos. Dependiente del verbo principal pasivo se agra-
1. Para escribir con propiedad y dominio del idioma, por ele-
decerá hay una interrogativa indirecta, encabezada por si: «se
r_nental que sea el texto que nos disponemos a redactar es
agradecerá aclarar esto». Dentro de la interrogativa indirecta se
'.ndudable que tengamos al alcance de la mano y al auxilio del
abre una interminable oración de relativo, cuyo antecedente es
intelecto, una obra de las caracte1irticas conw ]a que ofrecemos
•párrafo». La persona o institución que pregunta quiere saber
al público en general.
si el párrafo en cuestión, que indica tal cosa, implica también otra.
Falta la coma después de redactar. El subjuntivo tengamos Se pregunta por lo que el párrafo implica, no por lo que indica.
debe reemplazarse por un indicativo, ya que la expresión es La parte más larga de la subordinada consiste en repetir lo que
mdudable lleva siempre indicativo. el párrafo indica, y sólo luego viene la pregunta, pero para enton-
La coma es incorrecta después de «intelecto», ya que no ces el lector, especialmente si no es burócrata y no está acos-
debe separarse con coma el verbo principal «tener" y su com- tumbrado a esta sintaxis, ya no sabe de qué se le está hablando.
102
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 1A CORRECCIÓN GRAMATICAL 103
Para aliviar la lectura, convendria poner donde al comienzo el mismo día le remitimos una carta donde pretendíamos escla-
de la p¿~eta ;iáusula de relativo, y así evitaríamos repetir dos recer dicho error. Esta urgencia provocó que nmvamente vol-
que:· el ultimo párrafo, ámul.e S1J indica que... Pero sin duda, lo mejor viéra·mos a equivocarnos.
sen.a no meter la afirmación dentro de la pregunta, para que se
entienda y destaque la pregunta. Para eso basta con decir todo En el primer párrafo de esta curiosa carta (cuyas erratas he
más simplemente, dividiéndolo en dos oraciones: •En el último corregido al copiarla) hay un anacoluto o falta de coherencia
párrafo se índica que ... Se agradecería que nos aclararan si tal sintáctica (véase el Glosario). Lo que los firmantes quieren decir
párrafo implica... • es que han advertido los errores de facturación gradas a un
cliente y que luego lo confirmaron en el banco. Toda esta informa-
3. Era a través de la 11111miYria de sus sacerdotes que las ciudades ción se ha acumulado (no felizmente) delante del verbo prin-
conocían su pasado [... ] La memoria de los sacerdotes era cipal de la oración, que tampoco es una selección feliz, porque
lo único que los habitantes confiaban. en realidad Ja gerencia del parking advirtió o notó los errores
por la intervención de alguien, alguien ks hizo dar cuenta. No se
¿A través de la memoria? Ese es el primer obstáculo para el dice me di cuenta a través de ti de que cometí errores, sino me di cuen-
lector de este fragmento, ya que no se entiende esa expresión, ta gracias a ti... tú me has hecho notar. ..
salvo s~pomendo que quiera decir algo así como •gracias a la De modo que una versión mejor de esta oración podría ser
~emona», ~~~r la memoria». Sea lo que fnere, habría que repe- así: advertimos que habíamos cometido varios errores, y luego nos lo
ur la prepos1c10n corre~!xmdien:e delante del relativo que, ya que confirmó el banco (mucho mejor banco que entidad bancaria, expre-
estamos ante una orac1on ecuac1onal, como las que hemos visto sión pretenciosa y rimbombante).
~nas páginas más arriba (véase la regla 15).1.a oración no enfa- El segundo párrafo de esta carta de errores contiene un ple-
tizada correspondiente sería «Las ciudades conocían su pasado onasmo o redundancia (véase el Glosario). Bastaba con decir esta
por la memoria de sus sacerdotes», de modo que la versión urgenda provoro que volviéramos a equivocamos, o bien esta urger1r
c~rrecta de la oración ecuadonal quedaria así: Era por la mtJm<r cia provocó que nos equivocáramos nuevamente.
na de sus sacerdotes por lo que las duda.des ...
E':' la segunda oración también falta la preposición corres- 5. Tres días después, el taxi-fletero fue encontrado aún con
pondiente delante de que. El redactor o redactora de este desa- vida, siendo trasladado e internado en sala de terapia inten-
fortunado párrafo ha tratado el verbo confiar como si fuera tran- siva del Hospital Español, falleciendo a las 13 del día 24.
sitivo, es decir, como si dijéramos en español «Confiar Ja memoria»
cuando queremos decir •confiar en la memoria•. Debería haber- Este fragmento no respeta lo que ya hemos explicado a pro-
se escrito La memoria de los Sa<2rdot.es era lo único en que... pósito del gerundio (véase la regla 11 ). En este texto hay tres
acciones o procesos, expresados por los verbos encontrar, tras-
4. My Sr. nuestro: ladar y fallecer. Entre la primera y la segunda acción pasan tres
Con fecha 12 del corriente mes a través de uno de nuestros clien- días, por Jo cual el gerundio, que expresa simultaneidad o ante-
tes J luegr¡ confrrmado por nuestra entidad bancaria, nos dimos rioridad inmediata, es inadecuado. El segundo gerundio tam-
cuenta de que en la facturación de diciembre cometimos varios poco respeta Ja sintaxis, pues se entiende que las acciones de tras-
errores.
ladar y de fallecer no son simultáneas. Debería haberse escrito
En nuestro intento de solucionar el problema lo antes posible, fue trasladado... falleció•..
104 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
105
1.A CORRECCIÓN GRAMATICAL
6. Casi al unísono los distintos ediles, al fundamentar su pos- des 0 los organismos los que ha~ hecho que... ? Es un e:ror .fre-
tura, señalaban que •es necesario pagar/;¡ a los empkaOOS», cuente sobreentender referencias que el lector no nene. ~~
aunque no se ponían de acuerdo en cuanto a los métodos este caso, el lector no sabe cuál es el sujeto ~el verbo. Qmza
de hacer efectivo ello. quiera decirse que las contradicciones entre los distintos organismos
han hecho que...
Es frecuentísimo (y sucede en las mejores fantilias) usar el
dativo leen singular cuando deberla estar en plum!, como en el 8. Aceites del Sur, S.A., tiene sus mícesenel año 1840 en wque fue
ejemplo, en que le se refiere al plural los empleados. Debería ·Aceites y jabones Luca de Tena», empresa familiar, cuyas
haberse escrito pagarles a /,os empleados. instalaciones estaban en el Prado de San Sebastián de Sevilla.
Otro error habitual (que aquí no aparece) es poner erró- [... ] El accionariado, sigue siendo 100% español, mante-
neamente el objeto directo en plural, en casos como se los conté niendo su tradicional estructura familiar.
(el chiste, a ellos). Nótese que la forma del dativo se no admite
plural, por lo cual los hablantes, necesitados de un plural, se Nunca se debe separar con coma el sujeto y el predica~o
lo endosan al objeto directo, que no tiene por qué ir en plu- (salvo que el sujeto sea muy largo y complejo). En este annnc10
ral. La forma correcta es se wcanté. Podria conjeturarse que en se ha caído en ese error dos veces: Aceites del Sur, S. A., tiene... Y
casos como pagarle a /,os empleados el singular le parece suficicn- el accionariado, sigue siendo. Parecerla que el reda~tor o redac-
ternente informativo así como está, en singular, y, en cambio, la tora de este texto considera que al separar el sujeto con nna
construcción se /,o conté parece poco informativa, sin ningún coma le da más relieve, como si hiciera una pausa solemne al
plural, cuando el referente del objeto indirecto es plural. habla~. Pero Ja coma no se pone entre sujeto y verbo, por con-
Cualquiera que sea su razón de ser, son dos errores que hay vención de la lengua escrita, y por mucho que hagamos pau-
que evitar en la escritura. sas en ese lugar cuando hablamos. _ . .
El uso de ello es desconcertante. Debió decirse, claro, los No se pueden tener raíces en un ano, smo en un. lugar, Pº'.
métodos para (mejor que de) haccrw efectivo. lo cual sería mucho mejor decir que esta empresa turne sus rat-
ees en lo que fue «Aceites y jabones....,, fund.a_da en 1840 (supo-
7. Falta considerar el perverso sistema estatal que complica aun niendo que el año 1840 sea el de la fnndac1on). Otra vez pode-
lo más sencillo; se dictó el decreto reglamentario conte- mos suponer la causa del infortunio, en este. caso la
nieruW perphjidades entre distintos organis'flws e ínstituciMUJS que incoherencia de en 1840 en wque fue ...: el redactor qn_1er~ con-
han heclw que a más de dos años de entrada en vigencia de ceder importancia al año, y lo pone primero, cons1gmendo
la ley y acumulados más de ochenta millones de pesos en la
crear un anacoluto. Los anacolutos responden, e~ la lengua
cnenta especial, no se haya invertido un solo centavo en la
hablada, a necesidades expresivas (véase el Glosano, s.;. ana-
atención de los discapacitados.
coluto), pero en la lengua escrita hay q~e usar otros metodos
si se quiere dar realce a ciertas infor~ac1ones. Un~ de ellos es
El uso de perverso aplicado a un sistema o institución es obje- crear nna nueva frase, indicando el ano de fundaoon, en lugar
ta ble, pero va ganando terreno en el uso. Conteniendo no debe- destacado.
ría usarse como adjetivo: la sintaxis correcta es el decreto que con-
tiene. Lo que viene a continuación es incomprensible. ¿El decreto 9. Aceites del Sur, es la unión y esfuerzo de unos hombres y
contiene perplejidades entre organismos? ¿Son las perplejida- mujeres, cuyo fin es crear la satisfacción del cliente que
106 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL lA CORRECCIÓ1' GRAMATICAL 107
compra nuestro producto, al cual debemos nuestra exis- Los meses no llevan mayúsculas. La coma que sigue a «mes»
tencia,
no debería estar allí, puesto qne se rompe la construcción yo
espero... que podamos, es decir, se separa con una coma, indebi-
Es incorrecta la coma, otra vez, entre sujeto y verbo (véase damente, el verbo y su complemento directo (ya hemos visto
el texto anterior). ¿Cuál es el antecedente de cuyo? ;»Unos otros casos). Aunque implantado se refie,-e a el sistema y las corres-
hombres y mujeres»º (Por el sentido, podría ser •Aceites del pondientes tarjetas, está concordando solamente con sistema, en
Sur», «unión y esfuerzo»,u) Para referirnos claramente a «unos masculino singular. Debería usarse el plural, implantados. El
hombres y mujeres», tendríamos que evitar ese cuyo precedido autor de la carta no lo ha hecho porque, evidentemente, no
de coma y ."sar el m~desto y servicial relativo que: que tienen por decimos tarjetas implantadas. Ha preferido dejar las correspan-
fin .. '. que tienen el objetivo de ... Las comas entre cuyo y producto dientes tarjetas fuera de la construcción, como algo que se agre-
convierten esta oración en una relativa explicativa, lo que es ga a último momento, siguiendo el pensamiento y no las ataduras
desafortunado, y más si después de la coma final se añade toda- de la sintaxis. Este anacoluto es menos grave en una carta que
vía otra relativa que depende de la anterior. Obsérvese una en un texto publicitario, ya que en la carta chocan menos los ras-
v~rsión reducida: La empresa es la unión de hombres y mujeres, ruyo gos de espontaneidad o de descuido. Debemos evitar los ana-
fzn es satisfacer al cliente, al mal debemos nuestra existencia colutos, de todas maneras, en cualquier escrito.
Después de «conveniente», hay otra coma incorrecta que
C:Ompárese ahora con una versión mejor escrita, también redu:
separa el verbo de su objeto directo. El pronombre ÚJ está de5"
cida: La empma es la u~ión de hombres y mujeres que tienen par fin
conectado, le fhlta antecedente. ¿Se refiere a sistema?
sat_isfacer al cliente, a qmen debemos nuestra existencia. O, para eli-
Por fin, el segmento final tiene un orden de palabras equi-
mrnar de una vez esa segunda relativ-a: La empresa es la unión de
vocado. Debería decir: que ÚJs jefes de departamento exigieron, en pri-
hombres y mujeres que se proponen satisfacer al cliente, pues al clien- mera instancia, su cumplimiento, eliminando, además, la expre-
te debemos nuestra existencia.
sión por parte de... y la oración pasiva, más rebuscada que su
En la versión original de este anuncio, el último pronombre versión activa.
relativo, al cua~ es el más desafortunado, ya que no se sabe si la
empresa debe su existencia al cliente o, como la sintaxis de este 11. Pérez fue, ayer, en la cancha, qué duda cabe, el alma llUÍM7'del
texto nos lleva a pensar, al producto. Esto se subsana elími- equipo, cuyo talento le aseguran un puesto de honor en este
na,ndo la relativa «que compra nuestro producto», que, ade- campeonato y un lugar destacado en la historia del club.
mas de producir esta indeseable confusión, es redundante y
recarga la prosa. La expresión alma mát.er significa 'madre nutricia', y se usa
para referirse a la universidad, de modo que aquí se ha emple-
10. De acuerdo con lo hablado en la reunión de 3 de Octubre ado de manera impropia, como un ponderativo aplicado a un
te adjunto copia de la Normativa [... ) Yo espero que par:: deportista, ~o es un error aislado, como no lo es ninguno de los
finales de mes, podamos tener implantado el sistema v las que venimos viendo. El antecedente de cuyo tiene que ser, por
correspondientes tarjetru; [... ] Creo que seria conveni~nte, el sentido, Pérez, pero Pérez está muy lejos ... En estos casos,
que el personal de U! Dírección lo conociera y qne porpart.e hay que iniciar otra oración, y mencionar simplemente •el talen-
de l:usJefes de Departamento, en primera instancia, se exi.gíem su atm· to de Pérez». Aseguran tiene por sujeto a cuyo talento, por lo cual
plimiento. debería ir en singular.
108 CÓMO ESCRJBIR BIEN EN ESPAÑOL !A CORRECCIÓN GRAMATICAL 109
Recomiendo al lector que, de tanto en tanto, tome el perió- 14. Busque el edificio que la puerta principal tiene uu cartel que
dico o las cartas publicitarias que recibe todos Jos días y se pro- dice ·Carbon Company»
ponga encontrar errores de gramática, como quien espera que 15. Es por esa razón que los estudiantes se qu~jaron.
salten conejos ... Cuantos más conejos cace, mejor cazador será. 16. Fue el lunes que entregó el trabajo, por fin.
17. El ballet Olimpo estará actuando en el teatro Goethe de
Nueva York desde el día 14 de octubre hasta el 28 de dicho
E]ERCTCIOS
mes.
18. Los libros que habían sobre la mesa eran suyos.
Al final del capítulo encontrará usted las soluciones correc- 19. Con quien charlo siempre es con su hermana.
tas de los ejercicios 1, 2 y 3. No recurra a las soluciones hasta no 20. Todos los campos eran de nosotros.
haber intentado resolver usted mismo los ejercicios. 21. Los recién llegados se pusieron detrás nuestro.
22. La mujer cuya dirección me pides ya no vive en San Juan.
23. Quizá, si podria, le convcndria rehacer parte de su trabajo.
Ejercido 1
24. En quien confío es Paco.
tJ;
. ldentíficai:Wn errores. Teniendo en cuenta las regla~ estu- 25. Lo pusieron adentro de la gaveta.
diada~ en este capitulo, y otras similares que puede buscar usted 26. Le dijimos que, si quiere comprar ahora. que compre.
en gramáticas y libros de consulta, identifique los errores que 27. No dijeron que no había entradas.
haya en las secuencias que siguen, y proporcione las corres- 28. No dijeron que no hubiera entradas.
pondientes versiones corregidas. (Atención: en algunas secuen- 29. Lo lamento, su carta ha llegado tarde.
cias no hay ningún error.) 30. Lamento que su carta ha llegado tarde.
31. Si pudiera, la ayudaría, pero ahora no puedo.
l. Nunca digas «de esa agua no voy a beber». 32. Si pudiera, la ayudaba, pero ahora no puedo.
2. Lo hizo con toda el ansia del mundo. 33. Si podía, la ayudaba, pero ahora no puedo.
3. Este chico tiene mucho hambre. 34. Se los advertí, que es una sustancia volátil.
4. El agria expresión de su rostro me detuvo. 35. Los diputados le preguntaron, por fin, a sus colegas, si esta-
5. Mi mujer yyo tuvimos sus más y sus menos. ban de acuerdo con la medida.
6. En la calle se vende monedas, ;evistas viejas y toda clase de
porquerías.
Ejercicio 2
7. La carne viene en cajas de carión conteniendo cuatro piezas.
8. El Instituto Cervantes estará patrocinando una conferencia Errores, /armas extendidas y f<YfflWS preferibles. En este ejercido
impartida por el Dr. Juan Lorrolo. vamos a distinguir cuál es la forma más recomendable de decir
9. La que no invitó fue a Morton, su mejor colaboradora. algo, en los casos en los cuales hay otras formas alternativas en
10. Le regalaron un teléfono móvil, pero no le usa nunca. uso, ya muy extendidas y aceptadas. La forma p~efenble nos
11. A ella le preocupaba el silencio de los conjurados. interesa porque es la más adecuada para la escritura. En las
12. Señor, permita que nuestros expertos le ayuden a comprar siguientes secuencias, distinga los errores (o sea, las formas
Sll Casa. totalmente inaceptables), las formas aceptables (ya muy exten-
13. El mes que le anunciaron el premio estaba de viaje. didas, aunque no sean normativas) y las formas preferibles, que
110 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL 1 lA CORRECCIÓN GRAMATICll.L 111
son las normativas y las aptas para la escritura. Cuidado: en 13. Lo conocí en el añtJ 1989.
algunos casos :as
dos for~a.s indicadas son igualmente acepta-
bles en la escntura, o s1gmfican cosas distintas.
Lo conocí el año 1989.
4. Se vende una serie completa de novelas de Henry James. 18. Esperamos a que lleguen.
Se venden una serie completa de novelas de Henry James. Esperamos que lleguen.
5. Sólo se tardan unos veinte minutos. 19. Desde ya le advierto que no debe hacerlo.
Sólo se tarda unos veinte minutos. Desde ahora le advierto que no debe hacerlo.
6. Lo que sucedió, gmsso modo, fue lo siguiente. 20. Puede mandar el rax ya mismo.
Lo que sucedió, a gmssa modo, fue lo siguiente. Puede mandar el fax ahora mismo.
7. Fueron a una misa de cuerpo presente. 21. Viven aquí desde hace mucho tiempo.
Fueron a una misa corpore insepulto. Viven acá desde hace mucho tiempo.
8. No dijeron más nada. 22. Me molesta el hecho de que nadie nos da instrucciones.
No dijeron nada más. Me molesta el hecho de que nadie nos dé instrucciones.
Ejercicio 4 Ejercicio 5
Signos de puntuación, Los siguientes textos necesitan todos
. Signos de puntuación. Si tiene dudas sobre el uso de algunos los signos de puntuación (comas, puntos, punto y comas, dos
s~gnos de puntuación, consulte, por ejemplo, el Manual de espar puntos comillas, raya.~. paréntesis, signos de interrogación Y
nol correr,tode L. Gómez Torrego (vea la Bibliografía General). admiración), y también las mayúsculas. Intente agregarlos. En
Una vez he~~o esto, lea los textos siguientes, y corrija Jos signos el texto b) debe también subrayar las palabras que son objeto
de puntuanon, que, en muchos casos, esl.án mal usados y en
de comentario.
muchos casos falcan. ' ,
a) Hizo una comida sencilla pero copiosa utilizando los ingre-
a) Compré todo lo que necesitaba, papel, lápices líquido dientes disponibles sopa de cebollas dulces a la que agregó
corrector tinta para la impresora y me quedé sin dinero por trozos de pan un guiso de trocitos de carne papas arvejas
lo cual, no pude ir al mercado. '
115
LA CORRECCIÓN GRAMATICAL
114 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA,'10L
EL PROCESO DE REDACCIÓN
CAPÍTUL04
CONTEXTUALIZACIÓN Y COHERENCIA
(Cómo distrilmir y reakar la información: lo implícito,
wexplícito, los conectores, el orden de palabras)
TEXTO Y CONTEXTO
....t
127
CONTEXTIJALIZACIÓN Y COHERENCIA
126 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
sonaje del anuncio el que dice algo (la mujer que muerde el cho-
Lfaa quiz,á ~ompare esas cualidades con otras anunciadas en Ja colate, por ejemplo, es quien dice «exquisito»), y el anuncio
m~ma. pagma po~ otras personas, y añadirá su conocimiento trata de que el lector se identifique con el personaje y con su
(s1 l? lle.ne) <;!el genero •anuncios de servicios de relax». Hay
aqm vanos .~iveles de supuestos, y tienen que funcionar en la expresión. .
Fuera de la publicidad, en los textos comunes, no se mten-
mterpretacmn d.el a~u.ndo, pues, de lo contrario, si pasamos ta reflejar como un espejo al lector, pero siempre debemos
por alto todo lo 1mphc1to, el texto no dice casi nada. ponernos imaginativamente en lugar del lector para hacer un
La interpretación d':' este anuncio descansa en supuestos buen cálculo sobre el contexto, es decir, para calcular qué con-
sobre a) el tipo de trabajo que hace Lina; b) el género «anun- junto de supuestos sobre el mundo, sobre el lenguaje, sobre la
CIOS de servicios .s:xuales»; y c) todo lo que sabemos y creemos
situación, poseen los lectores ya, y qué conexiones podemos
acerca. ':1e las actmdades sexuales, donde caben subclases para hacer entre esos conocimientos previos y lo que nosotros que-
la noc:on de placer en general, para los ideales de atractivo remos agregar a ellos, o modificar en ellos, con nuestro texto.
femenmo, para el concepto de perversión o de pecado, etc.
~lementos tomados de estos tres niveles de conocimientos cons-
tituyen el contexto de interpretación de este anuncio. LA COHERENCIA DEL TEXTO
Las dos palabras evaluadoras del anuncio están sobrecar-
gadas de significados implícitos (véase sobre estos significados Cuando decimos que un texto es coherente, queremos decir
el coole.tto el capítulo 5). Dentro del género •anuncios de que está organizado lógicamente y que podemos interpretar-
genérico da servici~s sexuales», «jovencita» se opone a lo. La coherencia es una propiedad básica del texto. Un texto
..,,.túlo al texto «madurita~, (que ap~ece en otros anuncios), y
esta opos!Clon se asocia con una serie de supues- es coherente si
tos sobre las ventajas de una u otra condición, y con el precio del 1. su estructura significativa tiene organi-
servicio ..La segunda palabra de este anuncio, «inexperta», se zación lógica y tiene armonía sintáctica, semán-
opone, s1em~re dentro. ~el género, a otras descripciones que tica y pragmática entre sus partes, y
ponen de reheve la pericia del anunciante. De modo que este
t~xto, ~n el contexto genérico de los anuncios, es innovador, 2. su significado es interpretable porque ayuda al lector a
s~n sahrse de lo esperado, pues la palabra «inexperta• tiene,
hacer las inferencias necesarias.
siempre dentro de este contexto -nótese que es el contexto el
que d.a sentido definitivo a las palabras-el significado connota- El aspecto 1 se refiere a las conexiones internas del texto:
tivo «mocente», cualidad que se supone atractiva. cómo se realizan las relaciones lógicas entre las afirmaciones
Uno de los rasgos más notables de los anuncios de todo tipo (causa, condición, comparación, etc.) y cómo se manifiesta la
es que los anunctantes adoptan el punto de vista de los clientes conexión que deben tener entre sí las diversas partes del texto,
perspectiva del presuponiendo sus expectativas, creencias, dese'. en sus niveles sintácticos, semánticos y pragmáticos.
lector os. El lector no solamente agrega presupues- El aspecto 2, la cualidad de interpretable, se refiere a la cone-
. tos, smo que parece hablar, como autor, en el xión externa del texto con el contexto, a la posibilidad que debe
te~to, decir lo que alli se dice. La palabra «exquisito», unida a
tener el lector de enganchar lo que lee con experiencias ante-
la imagen tentad~ra de un trozo de chocolate, refleja nuestro riores, que le dan marcos de referencia para la interpretación,
deseo y parece salir de nosotros mismos. Otras veces es un per-
129
128 CÓMO ESCRlllIR BIEN EN F.SPAÑOL <:t )1'TEXTUA.UZAClÓN Y COHERENCIA
y de poner en relación el texto con la situación de producción fallo es frecuente en estndiantes de español como segunda len-
o de recepción, donde sea necesario. De modo que la coheren- ¡;ua, si su primera lengna solo ti~ne u:ia forma de pa~do, y no
1
cia resulta de un sistema complejo de conexiones: aciertan a emplear bien, todavia, el unperfecto espanol. Una
vez corregidos los tiempos verbales, el texto recobra la cohe-
rencía:
t:n señor joven, que llevaba en la cabeza un soi:ibrero Ytenía
un largo cuello, se quejó a sn vecino del antobus,
DEL ROJO AL NEGRO de una serie de conocimientos sobre el mundo, sobre el modo
de contar cosas, tenernos ciertas expectativas. Si en una librería
Se trata de la noticia de que el presupuesto de la nación, un amigo elige un libro, duda, y luego nos pregunta «¿llevas
que tenía un déficit (estaba «en números rojos») ha pasado a dinero?•>, entendemos, aunque no lo diga, que tiene la intención
tener un superávit (está «en números de pedimos dinero. En los textos escritos hay que suplir el con-
caso:; en que negros»). La estructura del texto puede ser texto necesario, porque los malentendidos no se corrigen sobre
suplimo:; la marcha.
perfecta, pero la carencia de datos contex-
automáticamenre La coherencia es, por lo tanto, el resultado del trabajo con-
la roherencia
tuales afecta su coherencia. Al reponer los
datos, esta se restituye. junto del texto y de su lector. Ya hemos visto que ningún texto
que falta
Hay textos que, mirados con atención, son «dice• todo: por lo general, un texto es como un iceberg, que
incoherentes, pero los leemos sin dificultades porque repone- muestra solo una parte minúscula de su volumen. En el proce-
mos automáticamente la coherencia que falta. Véase, por ejem- so de interpretación, el texto guía al lector, de modo que este
plo, el fragmento siguiente: saque sentido de lo que lec, y que este sentido se parezca al ~~e
quiso transmitir el autor. La coherencia surge de la mteracc1on
Juan conoció a la novia de Pedro en casa de Pedro, cuando entre la estructura de dicho texto y la interpreta-
todavía Pedro y él estaban en la facultad, y se casaron pocos ción del lector, que ha de contar con datos con-
meses después. textuales.
Para facilitar la creación de coherencia, un
Aquí entendemos que los que se casaron son Juan y la novia texto debe cumplir con algunas condiciones básicas:
de Pedro, aunque, dada la redacción torpe de la secuencia, no
CoNDJCTONES DE COHERENCL4
está claro si fueron Juan y ella, o Pedro y ella (que son novios),
o incluso Juan y Pedro. Combinando nuestro conocimiento del a) el texto debe ser «relevante•
mundo con nuestras expectativas sobre cómo se cuentan las b) el texto debe presuponer correctamente la infor-
cosas, entendemos que si alguien nos dice que A «conoció• a B mación conocida
es porque va a contarnos la evolución de ese acontecimiento, y c) el texto debe tener un terna central
no otra cosa. Este fenómeno pragmático, que impone una segun- d) el texto debe argumentar de manera adecuada
da lógica sobre la lógica del discurso, no debe justificar la redac- e) el texto debe emplear los mecanismos de cohesión
ción descuidada. Pero nos facilita la comunicación, sin duda, y necesarios.
nos salva de muchos malentendidos.
Interpretar un texto es un proceso doble (véase Glosario, s.
v. interpretación). Por un lado, descodificamos los signos lin- a) Relevancia
interpretación güísticos, atribuyéndoles significados. En el
caso del ejemplo anterior entendemos, por Entendernos por relevancia (usando esta palabra en el sen-
ejemplo, qué significa conocer a alguien, casarse, etc. Por otro tido especial que tiene en pragmática; véase el Glosario, s. v.
lado, inferimos todo lo que no está dicho. En este caso, inferi- pragmática y s. v. relevancia) la propiedad por la cual el texto
mos que los que se casan son Juan y la nm1a de Pedro, no por- se conecta con información conocida y aporta significados al
que lo diga explícitamente el texto, sino porque disponemos oyente o lector. Un texto desconectado de todo conocimiento
132
CÓMO ESCRIBIR BlEN EN ESPANOL (XJNTEXTUALIZACIÓN Y COHERENCIA 133
del lector es irrelevante, en este sentido, ya que el lector no Las nubes se dispersan al anochecer porque, al enfriarse la
podrá integrarlo en sus sistemas de conocimientos y creencias atmó&fera, el aire húmedo no se eleva.
y por lo tanto no podrá extraer de ese texto ninguna infor'.
mación.
Este texto presupone, entre otras, tres informaciones:
Recibo por correo mucha información sobre versiones nue-
vas de programas de computadoras. Como no conozco esos - que la falla de sol enfría la atmósfera
programas, ni me interesan, las explicaciones que me dan sobre -que durante el día el aire se había elevado
las ventajas de esas novedades son, para mí, irrelevantes, porque - que la elevación del aire húmedo se debe al calor del sol,
no puedo conectarlas con nada conocido. En casos así, no bus- que aligera el aire y lo hace elevarse a zonas más frias, donde
camos la coherencia del texto, sino que dejamos de leer, porque se condensa.
ahorramos esfuerzo inútil.
En otros casos, los más, intentamos interpretar el texto que El primer dato lo conocemos bien, porque :cnemos exp~
parece irrelevante, haciendo un enorme esfuerzo rienda del mundo. Tan bien sabemos que la atmosfera se cnfna
bús~ de para encontrarle coherencia, En esto seguimos al desaparecer el sol, que probablemente sería red."n~ante
relevancia una tendencia general del ser humano, que busca explicarlo. Podemos contar con que el lector va a anad!f esa
siempre aumentar su conocimiento, y da por sen- información para interpretar el texto. Los otros dos puntos, en
tado que un texto comunica algo relevante, es decir, conectable cambio, plantean más dificultades. Veamos.
con experiencia anterior y significativo. Si fracasamos, será por-
que carecemos del marco de conocimientos necesarios para
t El segundo punto depende de un razonamiento: si había
t nubes al anochecer, y se nos dice que el aire ya no se eleva a
crear un contexto, y porque el texto no nos ayuda a crearlos. Un esas horas, es porque esas nubes se formaron en una eleva-
bue~ ejemplo es el titular de arriba, «DEL ROJO AL NEGRO», que ción anterior del aire, producida durante el día. Este razona-
despierta en nosotros el deseo de resolver su misterio, incor- miento, pese a ser sencillo, requiere cierto esfuerzo por parte
porándolo en algún marco de conocimientos, y por lo tanto del lector, especialmente si en su enciclopedia mental hay
nos incita a seguir leyendo.
pocas entradas para el tema de las elevaciones y condensa-
ciones del aire. En cuanto al tercer punto, exige del lector
cierto conocimiento de la relación entre la temperatura del aire
b) Cálculo di! informacion conocida y su movimiento y condensación. Si el texto é'stá dirigido a un
público general, no especialista, no se puede dar este punto por
presupuesto. . .
El ejemplo que sigue es similar al que ~irnos en el capítulo Este pasaje añade, sobre todos esos conocimientos que se pre-
l, a propósito de cómo calcular la información que el lector ya suponen compartidos, la información nueva de que el aire más
posee, para añadir la información que queremos darle. Pero frío impide la elevación del aire, por lo cual _las nube~ van desa·
ahora podemos considerar este problema desde la perspectiva pareciendo. Un lector incapaz de hacer las mferenc1as necesa-
de la noción de coherencia.
rias va a encontrar esta explicación incoherente. Por supuesto,
Supóngase que tenemos que explícar un fenómeno como el siempre es posible tratar de encontrar sentido al texto y averi-
siguiente: que las nubes se dispersan al caer Ja noche. Podríamos guar todo lo que falta, haciendo las preguntas adecuadas: «¿por
hacerlo así:
qué dice que el aire no se eleva? ¿por qué se elevaba antes?», etc.
134
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL t:< >NTEXTl'AUZACIÓN Y COHERENCIA 135
El lector aplicado puede llegar por su cuenta a una interpreta- d) Argumentación adecuada
ción correcta, pero le estamos exigiendo un gran esfuerzo.
Compárese el texto que acabamos de ver con este fragmento Si Ja trabazón lógica de las partes de un texto no funciona,
de una composición escolar:
el texto es incoherente:
No fuimos al parque de diversiones, porque mi hermana menor Co1no escribir es dificil, ayer fue lunes.
tenía miedo, y sin embargo fuimos al cine a ver «Títanic».
Aquí el hecho de que escribir sea dificil se presenta conto
El lector de este texto tiene que tener conocimientos de los
parques de diversiones que le permitan comprender por qué causa de que el día anterior haya sido lunes, fo cual paree~ dis-
alguien les tiene miedo, y también tener conocimientos de la paratado (podría existir un contexto en q.ue este enunciado
película «Titanio>, para entender por qué el autor del texto fuera comprensible, pero es difícil de irnagmar). Por supuesto
considera que hay una contradicción entre no haber ido al par· no producirnos textos así, pero produci~~s, más veces d~ .las
que de diversiones y haber ido al cine. El texto más simple se con- q ue quisiéramos textos en los cuales la log1ca no es tan soltda
vierte en un misterio si no tenemos cómo conectarlo eón el como debería ser,' y que pueden desorientar al lector. 1>or CJem-
4
resto de nuestros supuestos sobre el mundo. De ahí que no plo (tomado de una composición):
entendamos algunos chistes que nos cuentan, ni sepamos de
qué se ríe la gente, a veces: no •caemos» porque no podemos El pueblo estaba harto de injusticias y por eso triunfó Napo·
inferir los implícitos del texto, que están asociados a conoci- león.
mientos y creencias que no poseemos o no recordamos. Un
buen escritor debe evitar poner a sus lectores en aprietos, y Aquí la conexión entre la causa y el efecto es. muy co.n:~sa,
debe evitar, sobre todo, perder a sus lectores por el camino. aunque, quizá, sea más clara en la mente de qmen escnb10 el
texto.
e) Tema central Otras veces fallan las relaciones entre condición y conse-
cuencia (más ejemplos de composiciones):
El autor de un texto debe ser capaz de escribir una oración, Era muy inteligente, como son todas las personas que han
o un párrafo, que resuma perfectamente cuál es el tema del pasado hambre. (?) . . .,
texto. A veces esa oración se pone al principio del escrito: «En Si es cierto que la función pública reqmere la ded1ca~;on c,m~
este trabajo se explica la formación de las nubes». O bien: «En pleta del presidente, su vida privada debe ser tamb1en pubh-
este trabajo se demuestra la relación entre la temperatura del aire ca. (?)
y su condensación». 1bdo el texto, por muy largo y detallado que
sea, va a consistir en el desarrollo de ese tema. Las informacio-
En muchos casos se establecen oposiciones inválidas, como
nes accesorias deberán integrarse naturalmente en las princi-
en esta frase pronunciada (no escrita) por un gobernador:
pales, o eliminarse, de modo que cada parte del texto tendrá sen-
tido en relación con esa estructura básica de significado. (Véase, Esta política ni nos beneficia ni nos perjudica, sino todo lo
sobre este punto, el capítulo 7 de este libro.)
contrarío. (?)
<~)NTEXTUALIZAGIÓ!li Y GOHF.RFNClA
137
136 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
En todos estos ejemplos los fallos de lógica son locales, entre es, claramente, al mismo libro. De modo que podemos asignar
dos proposiciones contiguas. Téngase en cuenta que el texto fácilmente coherencia a a), gracias al auxilio de los signos de
es una estructura jerarquizada de proposiciones, con relacio- t'ohesión superficiales, Como regla general, para hacer referen-
nes complejas entre ellas, y que la coherencia se extiende a das por medio de pronombres personales el objeto o persona
dominios muy amplios. Puede suceder, incluso, que un grupo referidos deben aparecer antes en el texto, y suficientemente
de oraciones que parezcau incoherentes adquieran coheren- cerca, como para que se pueda recuperar fácilmente el significado.
cia si están todas subordinadas lógicamente a un tema común. La incoherencia de Lo leyó y compró el libro se advierte inme-
Obsérvese el siguiente texto: diatamente, y no es un caso frecuente de incorrección. En cam-
bio el fallo de cohesión del ejemplo que sigue nos puede ocu-
Use utensilios de madera, nilón o plá<tico, ya que el metal rrir a todos al escribir:
ennegrece las superficies. No use paños mojados parn coger las
tapaderas calientes. Evite el microondas. Las manos de las mujeres, que temblaban ...
Se llama cohesión textual a la unión entre las partes del Hemos visto unos cuautos ejemplos del uso ambiguo de los
texto realizada por medio de mecanismos lingüísticos. La cohe- pronombres relativos en el capítulo 3. .
sión es un fenómeno superficial, es decir, que se verifica en la La cohesión de un texto se asegura mediante una sene de
superficie lingüística, por medio de pronombres, subordinan- dispositivos lingüísticos. Los más importantes son:
tes, conectores, repeticiones, etc. La cohesión es un modo de ase-
I) Los conectores textuales. Disponemos de una serie de expre-
gurar la coherencia. Obsérvense los siguientes pasajes:
siones que sirven para ligar unas expresiones con otras. Entre
a) Compró el libro y lo leyó. los conectores figuran las conjunciones y locuciones conjun-
b) Lo leyó y compró el libro. tivas que aprendimos al e.studiar, en las clases de gramática,
la oraciones coordinadas y subordinadas: y, pero, porque, como,
En el segundo caso, b), la referencia del pronombre ÚJ es aunque, cuando, etc. Estas conjunciones y locuciones conjuntivas,
incierta, pues no se refiere al mismo libro comprado, sino a además de subordinar cláusulas dentro de una oración com-
otra cosa. Como no podemos reponer ese significado, es decir, pleja, pueden unir oraciones y párrafos.
como no hay cohesión entre las dos partes de la secuencia, falla Existe además otro tipo de conectores, por lo general adver-
la coherencia del texto. El fragmento anterior a), en cambio, es bios o expresiones nominales, a los que vamos a llamar orga-
cohesivo, porque se menciona un libro y la segunda referencia nizadores textuales. Estos sirven para unir oraciones o párra-
138 1i !NTEXT!JAUZACIÓN Y COHERENCIA
139
(-,ÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPANOL
fos, poniendo en relación los contenidos del texto entre sí, o luan llamó a su hermano y pidió a su hermano que prestara a
reforzando las relaciones entre autor, lector y texto, o ambas :1uan el coche, porque no sabía que su hermano ya había ven-
cosas a la vez. Algunas de estas expresiones organizadoras son dido el coche.
las siguientes : además, es decir, entances, en suma, par ejemplo, par
lo demás, en otras palabras, por una parte, por otra parte, para empe- Este texto es estilísticamente inadecuado, pero nótese tam-
zar, par fin, etc. etc. Analizaremos el uso de algunos conectores hii•n que la repetición de las entidades, en lugar de producir
en el apartado siguiente. mayor claridad, hace un efecto ~ontraproducente: el ~gundo
Juan mencionado parece ser distinto del pnmero, precisamente
11) Los deícticos y anafóricos. Los deícticos son las categorías ·porque allí esperamos un pronombre, si la referencia no ha
que sirven para hacer referencias al hablante, su interlocutor cambiado. La misma confusión puede producirse con •SU her-
u otras personas, y al lugar y al tiempo de la enunciación, mano•. El texto ha perdido cohesión, y es muy dificil proce-
medidos desde el aquí y el ahora del que habla o escribe. Los sarlo, al haberse eliminado la correferencia.
anafóricos hacen referencias intratextuales, es decir, conec- Los deícticos aquí, allí, eite, ahora, etc. que en la lengua oral
tan dos expresiones que son correferenciales (tienen la misma orientan en el contexto sítuacional, en la escrita se refieren
referencia, apuntan al mismo objeto o entidad). Son deícti- también a lugares del texto (espacio metafórico compartido
cos y a veces también anafóricos los pronombres personales y por los interlocutores), o al tiempo del encuentro dd autor y
los demostrativos, y deícticos los marcadores de tiempo ver- el lector, como cuando decimos ahora vamos a analizar. .. Los
bal, algunos adverbios, etc. El pronombre sujeto yo se refiere tiempos verbales realizan deíxis intratextual, es decir, organi-
siempre a la persona que habla o escribe, tú, usted, vosotros. zan el tiempo de la lectura, señalando un antes y un después en
ustedes a los interlocutores, organizando así la comunicación y Ja relación autor-lector: como decíamos al principio de este capítu-
la significación del texto. Los pronombres personales, demos- lo...
trativos, relativos, sirven para hacer referencias a entidades
que se han nombrado antes, o, en ciertos casos, que se van a III) Repeticiones: sinónimos, elipsis... Toda forma de reenvío
nombrar después. Véase·un ejemplo del uso de los pronombres in tratextual mediante una palabra similar, una palabra opues-
como elementos anafóricos: ta, o un silencio, permite ir hilvanando el texto y mantenién-
dolo coherente. Por ejemplo:
Juan llamó a su hermano y le pidió que le prestara el coche, por-
que no sabía que su hermano ya lo había vendido. En Hispanoamérica escasean las autobiografías, y este hecho
se ha explicado como producto del pudor hispánico. Pero tal
En esta secuencia, los pronombres realizan las siguientes escasd no puede auibuirse a la contención nacional, sino a que
correferencias: el género exige una ficdonalización del sujeto ajena a las nece-
sidades y proyectos de muchos de nuestros escritores. En el
le= a su hermano caso de Sarmiento, la ensoñacióu de la memoria se une a la
le~ a juan
intención política...
lo~ el coche
Si estas referencias se realizaran median te repeticiones, nos Los elementos correferenciales del texto pueden esquema-
9uedaria algo como: tizarse como sigue (pongo entre corchetes los elementos elíp-
C'.ONTEXfUALIZACIÓN Y COHERENCIA
141
140 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
ticos, es decir, referencias no explícitas, pero necesarias para ir Uso DE ALGUNOS COXECTORES
hilando la argumentación):
En los diccionarios y gramáticas recomendados en este libro
escasean las autobiografías= este hecho= tal escasez se encontrará una lista completa de las conjunciones españolas,
pudor hispánico= contención nacional que encabezan las cláusulas coordinadas y subordinadas, y que
autobiografías = género también pueden usarse para ligar oraciones. Me voy a limitar
Flispanoamérica [escritores hispanoamericanos :: J n11estros aquí a algunas conjunciones y locuciones conjuntivas cuyo uso
escritores en la lengua escrita puede provocar dudas. También vamos a ver
nuestros escritores= [uno de nuestros escritores ] Sarmien- en este apartado algunas de las expresiones que llamamos orga-
to nizativas, y que sirven para organizar el texto, enlazar párrafos
ficcionalización del sujeto = ensoñación de la me1noria y guiar al Íector en la lectura. Solamente tendré en cuenta algu-
;,as expresiones de enlace que se usan en escritos de tipo expo-
No se trata aquí, estrictamente, de sinónimos, sino de sitivo o en textos comunes. Dejamos a un lado los textos orales,
expresiones que remiten a las mismas entidades o ideas, como, los textos literarios, y las expresiones más cercanas a la lengua
por ejemplo, ensoñación y ficcionalización. Tales asociaciones oral que usamos en cartas personales, ya que «.pero», «sino»,
son posibles dentro del ámbito del tema de la. autobiografía, no conviene mezclar los géneros, como sabe- •mas» dentro
ya que es el tema central el que da unidad al texto. De otro
modo, no podríamos unir fácilmente ficcionalizací6n del sujeto
con ensrtñaci6n de la memoria. Siempre dentro de ese sentido uni-
t
f
mos, cuando se estudian fenómenos textuales. a,, ¡,, aración
Pero, sino y mas (sin acento) se utilizan para
unir expresiones coordinadas, añadiendo un significado de
oposición o contradicción. Es este significado el que, a veces,
tario impuesto por el tema, los silencios obligan al lector a
tender un puente para recuperar el significado: contando con resulta incongruente en algunos escritos. Compárense los ejem-
ese puente se puede mencionar a Sarmiento sin aclarar que plos siguientes:
es un escritor hispanoamericano, autor de una autobiogra- a. Es una novela extensa y muy entretenida.
fía. b. Es una novela extensa pero muy entretenida.
En el siguiente cuadro se resumen los elementos de cohesión
que hemos visto. Desde el punto de vista semántico, el significado de a. y b.
es el mismo, pero en b. el autor ha añadido un punto de vista:
ELEMENIVS DE COHESIÓN que hay una oposición entre «extensa» y «entretenida». Este
punto de vista añadido es, muchas veces, imprescindible para la
Conjunciones ~ coherencia del texto. Otras veces resulta arbitrario. Estúdiese la
lista de expresiones que siguen:
Conectores
Organizadores textuales es más bien bajo y/pero muy guapo
i------------------L----- . tiene dinero y!P'"º es muy generosa
t---D-eí_c_ú_co_s__________________ ~ es una ciudad grande y/pero se •ive muy bien allí
Sinónimos, antónimos, elipsis ~.., es una obra posmoderna y/pero es muy valiosa
tiene un acento gracioso y/pero habla muy bien español
142
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPANI >I IX 1N'l'F.XTUALl2'ACIÓN Y COHERENCIA 143
A veces vale la pena intentar una conmutación entre la con- Juan volvió a casa porque estaba cansado.
junción adversativa pero y la copulativa y, para verificar dos cosa<: si '¡ uan volvió a casa, porque están las luces encendidas.
la adversación es necesaria, y, en caso de serlo, sobre qué supues-
tos d?scansa, J:' si estamos dispuestos a defender esos supuestos. l•:n el primer caso, la causa de volver Juan a casa es que esta-
Por ejemplo: s1 se usa pero en el primer caso se presupone que hay ha <'ansado. En el segundo caso, porqu.e se refiere al hecho
una opoSJaon entre ser bajo y ser guapo; en el segundo ejemplo,
entre tener dinero y ser generoso, etc. mi.<1110 de decir que Juan volvió a casa: «digo ronjunciune>
q1w volvió a casa porque .. ,», Este tipo de porque rousales
En algunos casos,_aunquee~uivale a pero: es interesante, aunque va precedido de coma en la escritura, como en
algri pesado. Sino se ut:Ihza despues de una negación: no quiero Gf!;U.a, rl ejemplo anterior y en el siguiente:
sino vino, y mas casi ha dejado de usarse, y daría a nuestros escri-
<')'», «pero1>, etos un sabor anticuado o pomposo. Había llovido, porque el césped estaba húmedo.
«sin embargv» ualquiera de estas conjunciones, salvo sino,
para unir puede conectar dos oraciones o dos párrafos. Ya que, pu.esto que se refieren, por lo general, a causas evi-
párrafos En el caso de y, cuando encabeza párrafo puede dentes o que atribuimos al lector o a todo el mundo:
ser coordinante, pero también enfática es decir
no unir dos proposiciones sino añadir énfasis: ' '
Ya que estamos estudiando las conjunciones, vamos a ver tam-
Y pensar que la quise tanto. bién algunos enlaces extraoracionales.
Y no debe creerse por esto ...
Como, cuando es conjunción causal, solamente puede usar-
Sin embargo puede usarse al comienzo, en el medio o al final se al comienzo de la cláusula:
de la oración, cuando se emplea para marcar una oposición
entre una oración y otra. Si no existe tal oposición 0 contra- Como llegaron tarde, no encontraron asientos.
dic_ción, ~ si.ºº se la quiere marcar con fuerza, y solamente se
qmere anadir una información o un punto de vista distinto No siempre las conjunciones causales son intercambiables.
sobre el mismo asun.to, deben usarse expresiones del tipo de
Obsérvense los siguientes pasajes. Los signos de interrogación
por otra parte, ahora bien.. Veamos algunos eji.mplos:
indican oraciones anómalas:
La última película de Godard es mala y tediosa, y todo el
mundo estuvo de acuerdo en esto. Ahora büm, si la comparamos Como no teníamos dinero, no compramos el diccionario.
con las demás películas presentadas en el festival, admitire- ? Ya que no teníamos dinero, no compramos el diccionario.
mos que por lo menos la película de Godard no puede defrau- No compramos el diccionario parque no teníamos dinero.
dar a sus admiradores, que lo siguen por nostalgia. ?Parque no teníamos dinero no compramos el diccionario.
Ahora bien llama la atención sobre lo que va a decir el hablan-
La partícula pu.es significa en español muchas cosas, con
te, q.ue contrasta con lo anterior, ofreciendo una nueva pers-
pecl!va. ligeras variantes entre los dialectos. Tiene también un uso cau-
sal, equivalente a porque:
Porque expresa causa, ya sea la causa del hecho mencionado
ya sea la causa de mencionar ese hecho. Compárese: '
Se retiraron, pues era tarde.
14.'>
IX !Nl'EXTUAUZACIÓN Y COHERENCIA
144 CÓMO ESCRIBIR BJE,'I EN F.~PAÑOL
en segundo lugar
Pasemos ahora a las expresiones adverbiales o nominales en todo caso
a continuación
que sirven para organi7,ar tanto el contenido como la interacción igualmente
por añadidura enseguida
que propone el texto con su lector. Presento a continuación luego
aun así
una lista de las expresiones más frecuentes, y sugiero al lector finalmente
en parte
un paseo por su memoria lingüística y por el en resumen
ahora bien
diccionario, para comprobar el uso de estas por el contrario en fin
fórmulas, tan necesarias para componer un no obstante a propósito
texto" coherente en el sentido en que aquí entendemos esa pro- con todo por cierto
piedad: coherente es el texto que puede interpretarse porque más bien es que
el lector tiene, o se le dan, los medios para hacer inferencias ade- en cambio es decir
cuadas; coherente es el texto unitario, organizado en torno a un en otraS palabras
pues bien
tema central, con una intención comunicativa clara, una lógica de hecho brevemente
argumentativa, y cohesión lineal entre sus partes" En el proce- en realidad etc.
so de lograr coherencia al escribir, el papel de los conectores (de
todo tipo) es importantísimo. Para ilustrar lo que digo, dos En todo texto se puede distinguir lo dich? o en un ciado Xla
ejemplos del mismo texto, uno sin conector y otro con conec- . . , m·1sma el proceso de transm1ur la mformac1on.
enunc1ac1on · ' ¡ ·
tor. Este proceso va dejando su huella en el ;exto, y e esc~~r es
consciente en todo momento de que esta creando un ' ogo
a. El monto de las becas no les alcanza para vivir. Los estu· 'debe facilitarlo y mantenerlo. Muchos de!º'. ~nla~es orgam-
diantes se quejan" En enero aumentarán las matrículas. } " I' tados arriba se refieren a la enunoac1on misma. Para
zauvos IS .- d' quiero
b. El monto de las becas no les alcanza para vivir, y por eso los b lo basta con añadir la expres10n " igo» 0 "
compro ar • . · · d. 0 en resu-
estudiantes se quejan. Además, en enero aumentarán las decir»: «digo, por fin», «digo, en pr1nc1p10))~ <-< tg ~
matricula.~. men», «quiero decir, a propósito». h .• solamente
Ya hora una advertencia final: la co es1on es . .
• · se ha visto arn-
En Jos dos pasajes se dice lo mismo, pero el primero es difí- uno de los factores que crean coherencia, com'.' . rfl .
cil de interpretar, por la falta de cohesión argumentativa. La n texto puede cumplir con ciertos reqms1to~ supe icia-
~r' b a. U . h t s1 no se cum-
ausencia de conectores influye en otro aspecto: el autor parece les de cohesión, y ser, sin embargo, meo eren e, ", "
ausente, y por lo tanto no reconoce (ni estimula) su diálogo 1 n las condiciones de relevancia y estructu;ac~on de la
con el lector.
Pinformación
e que hemos indicad o. v·ease e I caso Sigmente··
Los árboles frutales necesitan ciertas condiciones climátic~::
ALGUNOS ORGANIZADORES TEXTUAIES
Estas son dificíles de conseguir, por lo que no falta a;ud\es.
además en principio tal para el campesino, y como consecuencia este Ja so tClta
aún más ante todo cada año, lo que explica que se consuma cada vez menos fruta
encima antes que nada
en este país.
por tanto para comenzar
por eso de un lado, de otro lado Este texto es cohesivo, pero incoherente.
de todas maneras en primer lugar
147
<tlNTEXTUALl7AOÓN Y COHERENCIA
146 CÓMO ESCRJB!R BIEN EN ESPA.'iOL
Reescriba, haciendo los cambios que le parezcan adecuados. . con e 1cuello ba,.tante
personaje
actualidad el 84) observe a un d fi Jtro rodeado de un cordón
a) Hay trabajos que requieren tiempo y devoción. largo que llC\l'aba ~ so~1:·e~te ~~~~viduo interpeló, de golpe y
CATAUNA FuENTFS RODRÍGUEZ L . t . Cada acto de comunicación verbal nos exige convertir un
cionales. Madrid, i\rco/Lihr~s, ~ ~;,~s de los relaci.onantes supraora~ pensamiento más o menos vago y más o menos complejo en
SALVADOR ÜUTI!':RREZ ÜRDÓN-EZ "' lenguaje claro y comprensible para otros. El proceso es com-
Madrid, Arco/Libros, 1997. , , emas' mmas' fiocru• '"" · .
-ricos Y comentanos. plicado, más todavía cuando escribimos, y también es, como
RAFAEL NúNEZ Y ENRIQUE DEL TESO ,,_,
Prod . •
. •.
' v.man11ro' pragmatiro dd texto am •
hemos dicho varias veces, fa,cinante y enriquecedor: mientras
ucaon y comentario de textcs. l>fadrid, Cátedra, 1996. l<ln. vamos dando forma lingüística a nuestros pensamientos vamos
descubriendo más pensamientos, haciendo más asociaciones,
recuperando más recuerdos que quizá ni sabíamos que teníamos
guardados, vamos produciendo nuevas ideas ... Pero para llegar
a disfrutar de esa multiplicación del conocimiento que es el
gran regalo de la escritura, debemos pasar de la intención de
decir algo al acto de decirlo por medio de un escrito.
Todas las etapas de la composición de un texto son difíciles:
generar ideas para escribir, planear el diseño del escrito, aco-
modarlo a un género, manejar los registros, formar párrafos y
oraciones, cuidar la gramática ... Pero uno de
los escollos más formidables es encontrar las
•' palabras justas para decir lo que uno quiere
decir. En esa búsqueda de palabras, debemos, por un lado, ser
fieles a nuestro pensamiento: debemos emplear los vocablos
que transmitan lo más exactamente posible lo
-
adecuari6n al
que queremos decir. Por otro lado, el género y gl!nero y al
la finalidad del escrito imponen cierto tipo de
vocabulario: si hablamos de botánica, que sea
con el vocabulario técnico, específico y unívoco de la botáni-
ca, y lo mismo si hablamos de psicología, de astrología o de
160
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑ< >I. 11.1. VOCABULARIO 161
cualquier otra materia. No es lo mismo escribir en un texto 1lr leer buenos textos (textos bien construidos, cuidados, de
dirigido a g~nte que sabe cocinar, «prepare un ~lmíbar esp<:'· ll-xico rico y apropiado, sean literarios o no} aprenderá sin
so• que .dec1r «prepare un almíbar de punto hilo fuerte», ya darse cuenta centenares de palabras.
que el ~do f~erte es uno de los puntos del almíbar •espeso», y Al leer construimos significados, combinando informaciones
estas d1stmc1ones pertenecen al vocabulario especializado d« 1·1mocidas y nuevas por medio de operaciones intelectuales y
la repostetia.
:ifrctivas, que movilizan todos nuestros conocimientos lingñís-
Por?trap~rte, ~l registro desempeña un papel decisivo en IÍ!'os. A medida que leemos, los nuevos términos van entrando
la elecc1on lex1ca. S1 le contamos por carta a una amiga nuestros "" nuestro inconsciente lingúístico, y nos dejan, a veces, apenas
logros y aspiraciones para el futuro, lo hare- mm huella de sus significados. Quedan latentes, es decir, ocul-
el registro
mos con las palabras familiares que usamos al ios. pero no son inaccesibles. Ba.~ta con proponerse utilizar
hablar; so pena de parecer afectados o ridícu- algún día ese residuo precioso que acumulamos gracias a la lec-
los. Pero si tratamos esos mismos temas en una solicitud for- 1ma (o la audición) de buenos textos, y empezaremos a usar
mal de empleo, debemos usar un vocabulario diferente, ajeno más palabras y, por lo tanto, a ser capaces de decir más cosas y
a falsas modestias y familiaridades.
11" decirlas mucho mejor. Cuando acude una de esas palabras
La propiedad es la cualidad que tiene una palabra de ser ;1cnmulada.~ en la penumbra de la memoria y no estamos segu-
fiel a nuestro pensamiento y de adecuarse a la situación y al fin ros de su ortografía, significado o uso, basta con recurrir al dic-
la ,,..,,,.,__, _ _, del escrito. Vale más una palabraJ·usta que mil cionario. Por supuesto, también es recomendable preguntar a
r- •r•"""" frases tartamudeantes, repetitivas, ineficientes. los que saben. Es muy rara la persona que no se interese por las
. . Pero no es cierto que haya que llamar «al pan palabras. Pregunte y verá qué interés despierta su pregunta, y,
pan, Y ª.l vmo.vtno». Eso será así cuando se pueda, o nuestra muchas veces, qué buenas respuestas le dan sus amigos, parien-
vida social sena una catástrofe.
tes y maestros.
L~s mejores palabras son las más precisas, las más eficaces, Un vocabulario abundante es imprescindible para escribir,
las mas elegantes y sonoras, y, también, las que fuvorezcan nues- pero eso no significa que debamos afanarnos por aprender
tra i~agen_ y la de nuestro interlocutor, según !odas las palabras posibles. Hay zonas del vocabulario que usa-
lo~ pnn?1p1os generales de la cortesía, que nos mos raramente. Saber al dedíllo todas las partes de que consta
exige evttar ofensas y mantener la distancia más un barco, con sus nombres precisos, a mí, por
r~spetuosa y a la vez amistosa con el interlocutor (sobre corte- ejemplo, no me serviría de nada, ya que nunca
s1a, puede verse nuestro Glosario}.
escribo sobre barcos, ni trabajo con barcos, ni
Desgraciadamente, no tenemos todas las palabras justas y veo, siquiera, muchos barcos. Pero sí quiero
corteses en la cabeza. Ni siquiera conocemos todo el vocabula- tener todo el vocabulario posible a mi disposición para hablar
la mejor rio de nuestra propia lengua. Cuando les pre- con propiedad de las cosas que me importan o que me son
manera tk ~nto a mis alumnos de composición, al prin- necesarias, para describir con precisión un objeto o una per-
aáquírir c1p10 del curso, por qué les cuesta escribir, el sona, para explicar algo abstracto, para expresar mis propias
vocabulario problema que ninguno de ellos deja de men- opiniones.
cionar es •porque me falta vocabulario••. Si se compara el texto 1} y el texto 2) (versiones sucesivas de
Di~amos desd~ el principio cuál es la mt:jor manera de una composición) se observará una diferencia en el dominio del
adqumr vocabulano: leer. Toda persona que posea el hábito vocabulario:
162
CóMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOi.
V.I. VOCABULARIO 163
1. Las personas drogadictas van perdiendo el poder de hacer
cosas, no pueden trabajar bien ni son buenos padres de dt• arriba, suele tener por origen el choque entre el d~seo de que-
familia ni tampoco tienen el poder de ser modelos para n·r transmitir algo y la pobreza de medios pa~a dec1rfo. A falt:
sus hijos. En realidad, las personas drogadic!a.'i no tienen ,¡,. palabras, se procede al tuntún, como qmen camma en l
poder, porque las drogas les quitan la voluntad y enton- oscuridad. Eso es frecuente (y excusable, por lo general} .en la
ces pierden el control de sí mismos y pierden todo su l<'ngua oral, ya que mientras hablamos pensamos y corregimos.
poder.
Véase el siguiente ejemplo de habla coloqmal:
2. Los drogadictos pierden la capacidacl de tra~jo y la anto. Es una mujer... cómo decirte, es inteligente p~ro ... n~ trabaja
estima. Su adicción les impide atender a su familia y cons- bien, es decir, sí trabaja y se esfuerza, lo que q~1ero decrr es que
tituirse en modelos de conducta para sus hijos. Carecen, no,.. trabaja pero no ... no se concentra en lo IfilfJ<?r~nte, pare-
también, de la posibilidad de dominarse a sí mismos, y se ce que div"gara, no, parece q~'.: ella m.isma ºº.supiera lo que
convierten en personas desvalidas. quiere, y por eso da la imprcswn ... la impresion de que ... n?
es muy inteligente. Pero no. Tiene talento. Solo que se dedi-
ca a muchas cosas a la vez y no hace nada bien del todo, se
El texto 2) dice, poco más o menos, lo mismo que el texto
dispersa, eso es, se dispersa.
1). pero lo dice de manera más precisa, clara y elegante. El
texto 2) es más breve que el anterior, pero tiene
concisión y El hablante ha dado varias vueltas buscando d mod~ de
vocabulario
mucho más vocabulario. Precisamente, cuan-
do se usa todo el vocabulario necesario se puede describir una conducta o manera de ser, y ha repett~o ~~ dlV~r
escribir con mayor brevedad, pues no se habla sas maneras una o dos ideas que formula con hes1tac10n, Sin
con rodeos. En el texto 1) se repite la palabra «poder», usada lograr verbalizarlas bien. En la lengua escrita, esos «?orrado-
muy laxamente, por otra parte. La repetición se debe al hecho res» expuestos en la lengua oral desapar~cen, o debena~ desa-
de que esa era la única palabra disponible para el estudiante, que parecer. Mientras escribimos tenemos tiempo ~e pensar. Y ~o
no intentó buscar otra más adecuada ni tampoco alternarla con ideal es llegar al papel o a la pan talla con una formula lo mas
sinónimos. C,omo vemos en 2), el estudiante, al revisar su trabajo exacta y condensada posible. En el caso del text~ oral transcri-
y escribir una nueva versión, solucionó ese problema bastante to, por ejemplo, una versión escrita aceptable sena, entre otras.
bien. la siguiente:
La carencia de vocabulario suele producir textos vagos y
repetitivos. La vaguedad surge cuando, a falta de términos apro- 1 Es una mujer inteligente, que trabaja m~cho, pero tiene el
~ defecto de no saber concentrarse en lo mas importante. Ypor
vaguedad y piados, se usan expresiones aproximadas. No es
eso parece que no tuviera talento.
repetición Jo mísmo decir «tiene temperatura}• que «tiene
fiebre». Se entienden las dos expresiones, pero
en un escrito hay que expresarse con la mayor Otra versión más corta y equivalente sería esta:
precisión posible, y «temperatura• no es la palabra adecuada, ya
que todo ser vivo tiene alguna temperatura, y llamamos •fie- Es una mujer inteligente, pero no se concentra en su trabajo.
bre• a la temperatura que supera cierto grado.
En cuanto al estilo repetitivo, tan evidente en el ejemplo 1) Para llegar a versiones concisas, claras, y e legan tes, tal:s
como nos exige la escritura, debemos tener las palabras mas
165
164 CÓMO ESCRJBIR BIEN EN ESPANOI
gust? _en habla'_'.tes de otros dialectos del español, Lo que eu ~,. complementan. Quienes dominen una segunda lengua y
un sitio es car1noso en otro es ofensivo, lo que para algunas "''ªn capaces de escribir con fluidez en ella, frecuentarán mucho
personas es normal para otras es afectado, lo que les suena cursi menos el diccionario bilingüe.
a unos les suena finísimo a otros. Los nuevos diccionarios del En cualquier caso, y si se trata de escribir textos, todo dic-
español se p_roponen,. precisamente, registrar usos y no sola- •·ionario bilingüe debe ser complementado por un diccionario
mente defimc1ones e _mformación gramatical. Pero para que monolingüe. Pero no cualquier diccionario monolingüe. Hay dos
se pueda hacer un análisis completo y autorizado de todos Jos grandes clases: los grandes y los pequeños. Los diccionarios
usos de todas las palabras y ex¡:i_re_siones del español, tenemos que pequeños, abreviados, de bolsillo, etc., son muy poco ú~les p~a
contar con estudios d1alectolog1cos y sociolingüísticos comple- un escritor. Sirven para salir de un apuro, no para trabajar sena-
tos, que abarquen a todas las comunidades de habla hispana y 111ente, por lo cual no les vamos a prestar atención aquí.
sus diferentes variedades. Sólo nos interesan los grandes diccionarios, grandes de tama-
_ Pese a es~ inevitables deficiencias, los diccionarios del espa- tfo, es decir, llenos de información, y grandes por su calidad
nol son muy neos en mformaciones lingüísticas, aparte de dar- lexicográfica. Entre estos figuran el Di~cionario _de la los grandes
nos defirnc1ones de cada unidad léxica. En las páginas siguien- lengua española de la Real Academia Espanola diccionarios
tes vamos a analizar los diferentes tipos de información que (última edición de 1992), y el Diccionario de uso del
nos ofrecen los diccionarios. español de María Moliner (última edición de 1998), dos. clásicos.
Con ese fin, debemos distinguir primero entre diccionarios Tenemos también los diccionarios de la serie VOX, especialmente
monolingües y d~ccionarios bilingües. Los estudiantes de espa- el Diccionario grmeral ilustrado de la lengua española. Y acaban de salir
diccionarios no! como segunda lengua utilizan mucho, y a Ja venta nuevos diccionarios de uso: Clave. Diccianario de uso del
monolingües y c_on razón, los diccionarios bilingües, que con- español actual (S.M.); Gran diccianario de la lengua esfi!1'ñola <t.a;ousse
bilingües tienen las equivalencias entre los términos de Planeta); y Diccionario Salamanca de la lengua espanola (Sanullana,
. su lengua y los españoles. De esta manera, si Universidad de Salamanca) (véase la Bibliografía General).
qmeren expresar en español algo que les viene a la mente solo Como complemento de estos diccionarios, son muy útiles los
en su lengua, les bastará con buscar la traducción de esa pala- ideológicos, que contienen las palabras españolas diccúmarios
b_ra. Claro que e~te es terreno resbaladizo, porque las traduc- ordenadas por ideas, tal como suponemos que ideológicos
Clones son aproximadas, y, aun en el caso de que fueran preci- están asociadas en la mente de los hablantes. Estos
sas, sucede ~ue hay una serie de matices que adquieren las diccionarios sirven para buscar palabras de significado con-
palabras segun los contextos, y que, como vimos, no figuran en ceptualmente próximo. Supóngase que sabemos, pero ?º rec~r
el diccionario. damos, un término, o que sospechamos que existe cierto ter-
Los diccionarios bilingües suelen dar información sobre el } mino, que no conocemos. Pongamos un ejemplo: sabemos que
uso de las palabras, pero esta información no es tan abundan- hay una palabra para designar el recipiente en el que se lleva
necesidad de te como la de los grandes diccionarios mono- agua en una excursión, y no podemos recordarla. Busc~mos
usar el lingües. Muchas veces es necesario consultar en un diccionario ideológico a partir de una palabra del mismo
mmwlinm•e
;.,,- e 1diccionario bilingüe y después pasar al mono- grupo conceptual, en este caso botella, y allí, entre botellín, bibe-
despues del ¡· ·· · rón, termo, frasco y muchas otras, aparecerá cantimplora, la pala-
. . .. mgue, que nos va a dar más mformación sobre
1
b••ngue d d 1 , ·
. ca a uno e os termmos españoles. Ambas bra buscada. Basta con aprender el sistema de clasificación de
perspecuvas, la del hablante extranjero y la del hablante nativo, ideas usado en el diccionario. Si necesitamos confirmar el sig-
169
168 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOi. V.I. VOCABULARIO
nificado, recurrimos a la parte alfabética del mismo dicciona- vl'd)Q Esta preferencia se debe a que, sobre todo en el ca~o
rio. Véase, entre otros, el Diccionario úkológico de la úmgua espri- · h d " la lista de frases sena
111' verbos como e.<tar; acer, tener, e¡ar.. ., . .
iiola de la serie vox (datos completos en la Bibliografia gene- interminable, y llevaría mucho tie~po y paciencia enco~i;rar la
ral). !'rase que uno busca. Es más senc1Ho buscar la expres•?n me
Ahora pasemos a analizar los tipos de información de un t¡uedé fría bajo el adjetivo frío que bajo el verbo qu.:w· E~~e :s
diccionario de la lengua española. <-1 criterio seguido por el Diccionario de uso del espanol de ana
Moliner. . d" · .J
El diccionario de María Moliner nene dos e 1c10nes, ~
CÓMO USAR EL DICCIONARIO
segunda acaba de salir en 1998, nmert.a ya su autora. La pri-
mera edición, que tuvimos a nuestra d1spost· . . .
Un buen diccionario compila (o trata de compilar) el voca- dón por más de treinta años, se caractenzaba el d"""°"""º
bulario de una lengua, y da información de diferente tipo sobre porque las entradas no seguían un orden ~:ana
cada unidad del vocabulario o unidad léxica (o ítem léxico, o estrictamente alfabético, sino que se agrupa· 1li """'
lexema). Las informaciones del diccionario son las siguientes: ban or familias etimológicas dentro de cada . .
categoría gramatical, etimología, significado, distribución geo- let..!, siguiendo lo que la auto~a llamaba el orden log1co d~ {~~
gráfica, uso. conceptos. En la nueva edicíon, las palabras se ord~n~r: a a
Primero veamos qué unidades aparecen encabezando los b éticamente
· '
como en los demás diccionarios, para fac1htar la
·
artículos del diccionario. No son siempre palabras, sino que consulta. La segunda edición contiene, ad emas,
· ~ uchas pala•
pueden ser también partes de palabras, por bras y acepciones nuevas, especialmente neologismos y ame-
ejemplo morfemas ligados (véase el Glosario) ricanismos. . ed' ., 1
como los prefijos o sufijos que hemos visto En la ordenación etimológica de la pnmera ic'.on _no 60 a-
antes, cuando hablamos de yuyal y otras pala- mente se agrupan las palabras que tienen la m~ rarz, smo :iue,
bras. También se encuentran en los diccionarios abreviaturas, al tratar de ellas, se mencionan todas las que con~en:n_ la misma
por ejemplo e¡: o cfr., abreviatura de confer, 'comparar' (que se raíz en otra parte del vocablo que no sea el prrnopm; P?r lo
lee «compárese»), o v., abreviatura de véase o véanse, con signi- que su descripción se encuentra en otros _lugares del d1;cmna-
ficado similar al de cf.. También aparecen siglas, como Otan u rio. También se citan las palabras que nenen otra ra1z per~
OTAN, sigla del nombre Organización del Tratado del Atlántico están emparentadas por el significado, 0 sea q1;1e en ~~da arti-
Norte, traducción española de NorthAtlantic 11eaty Organízatitm culo se abre una red de conceptos que pueden ir s1gu1?ndose a
(NATO). lo largo del diccionario. La autora explica~a en e'. prologo de
En cuanto a las expresiones formadas por varias palabras, 1967 que el orden alfabético no le parecta el mas adecuado
como estirar la pata, por ejemplo, nunca aparecen encabezan- para su propósito, que era sobre todo ofrecer aHe'.,'tor esas redes
do artículos. Estirar la pata se encontrará dentro del artículo conceptuales y un verdadero diccionario de sinommos super·
correspondiente a pata, donde, después de las definiciones de puesto al de definiciones. . ., . . , d'
pata, se listan todas las frases y locuciones en que aparece tal La versión en CD-rom de la primera ed•c1on eh~una las ifi·
palabra. No se encontrará, en cambio, tal expresión en el artí- cultades de encontrar los términos, pues permite busca:los
culo dedicado a e.itirar. Y esto es así porque, por regla general, se , rándolos de sus familias, y permite, además, encontrar el ~nfi·
se prefiere elegir el nombre como palabra ordenatriz, y no el nfuvo de un verbo a partir de una forma conjugada cualqmera
170
CÓMO ESCRJB!R BIEN EN ESPAÑOi. IU. VOCABUIARIO 171
de es~ verb~, o recuperar una serie de palabras que tienen en uplica a cosas, no a personas. Además, cosa va precedida de
comun algun rasgo morfológico. La segunda edición del una tlechita: esto es señal de que la cosa en cuestión (comida,
Moliner, por su parte, pese a descartar la ordenación etimoló- rlogios. saludos ... ) es el objeto directo del verbo. Al principio
gica, mantiene los catálogos de sinónimos o ideas afines actua- rkl artículo se ha indicado, mediante la abreviatura «Ir.», que
lizándolos. '
rl verbo es transitivo (es decir, que lleva objeto directo). La
Veamos un par de artículos típicos de este diccionario, tal inlórmación es necesarla, pues para usar el verbo debemos
<efemplos de como aparecen en la versión en papel. "ltber cómo combinarlo con sus complementos, y también por-
articulos del Escojamos dos palabras: un verbo, escatimar y <¡llC en algunos casos, el significado del mismo verbo cambia
diccúmario un adjetivo, escéptico. Copio el primero de los S{'gún se use transitiva o intransitivamente: cornpárense aver-
artículos: ~mnzar (tr.) y avergonzarse (intr.), sorprender (tr.) y sorprenderse
(intr.), v también casos más sutiles, por ejemplo enseñar, cuan-
do se u'sa como intransitivo, para designar una actividad de
escatimar 1 tr. Dar de una 'cosa lo menos posible: 'Les tipo habitual o permanente, como en enseño desde hace veinte
escatuna la comida a los criados. No escatima los elogios.
Escatima hasta el saludo'. :::;, Cicatear, •economil'.ilr, en- fl.ños, me gano !.a vida enseñando, y enseñar, usado como verbo
guerar~ es~asear, regarear, retacear. ,. _ Cicatero, escatimo- transitivo, como en la profesora enseñó ese tema, que designa un
so, mezquino, roíloso1 •ta.cano. ,. _ Cicatería, mezquindad
rolla, tacailería. ,,_ No doler PRENDAS. Z Dar mal se111ida d acto.
los 'dichos o escritos. "' •Tergiversar, torcer. 3 (ant) Volviendo a escatimar, vemos que lleva objeto directo, y que
•Reco1S0Cer. •rasrrear o •escudriiiar .._algo. d objeto directo debe ser una cosa. Los ejemplos lo demueslran
muy bien. Leída esta definición y sus ejemplos, podemos usar
con bastante seguridad la palabra, aunque sea nueva para noso-
El artículo consta, como vemos, de tres definiciones, indi- tros. Recuérdese que, si lo que queremos es escribir, nos interesa
cadas por números impresos en negrita. Cada una indica una acep- que nos digan no solamente qué significa una palabra, sino
dón del significado ?e la palabra; h~y vocablos con muchas acep- cómo se la puede usar.
c10nes, a veces relacionadas enlre s1, otras veces no tanto. Una de Pero hay más. La primera acepción de escatimar contiene
las tareas más delicadas de quien utiliza el diccionario es buscar nn catálogo de palabras separadas en grupos por una estrella
la acepción que le interesa más, y eso depende del conte:xto en de tres puntas. En cada grupo hay palabras en letras redondas,
que esté usada o vaya a usarse la palabra. y otras en letras cursivas. Todas estas palabras nos interesan,
Par~ la pdmera acepción de escatimar que, como sabemos, pero mucho más las que van en redondas, porque son las más
es la mas cornem'.' (pero no siempre la primera acepción que usadas. Las otras son menos frecuentes. ¿Por qué nos intere-
aparece en el dicc1onano es la más corriente) la autora nos da san? Porque son afines, pertenecen a la misma familia eti-
una definición, tres _ejemplos y un repertorio o catálogo de mológica o semántica, o ambas cosas; algunas nos sonarán
palabras afines. Los ejemplos van entre comitas. La convención mucho, otras menos. Las que van precedidas de un asterisco
general, fuera de los diccionarios, es indicar con comitas Jos se encontrarán en otro catálogo de palabras del mismo dic-
signifi~ado~ ~~ismos, como hemos dicho, pero aquí se sigue cionario: así se forman las redes de que hablábamos antes:
otra d1spos1c1on. La definición, como vemos, no lleva comi- un asterisco lleva a o!ros, que llevan a otros... *economizar, por
llas de ningún tipo. La palabra cosa de la definición es más ejemplo, y precedido de asterisco, se encuentra, en el lugar
importante de lo que parece, porque indica que este verbo se alfabético correspondiente, con su propio catálogo de sinó-
173
172 CÓMO ESCRJBIR BIEN EN ESP~'iül F.!. voC/\BULARIO
e~o
empobreciendo el repertorio disponible. Además, los giros h s hablado de los significados visibles ,de
tomados de otras lenguas, aunque siempre se adaptan en algün Hasta ahora orlos diccionarios Y las grama ti-
las palabras: los registrados P . d . una leng;,a tienen sig-
grado a los moldes sintácticos y semánticos de la lengua pro- 1 al bras v expresiones e
cas. Pero que
nificados as p noa siempre
. . , en e1 diccionario (algunos no
estan
183
182 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL !(!.VOCABULARIO
podrían estar nunca en un diccionario, ya veremos por qué). tivas casi siempre, y en cambio agua, os~~ suelen pro?ucir con-
Estos significados no registrados, a veces no previsibles, son notaciones positivas. El aqjetivo negro uene una sene de _con-
tan importantes, sin embargo, como los que cuidadosamente notaciones negativas, pues pertenece al campo de la o_scundad,
describe el diccionario, y a veces más importantes. Los llama- lo temido o desconocido: suerte negra, mano negra._Sm embar-
remos significados invisibles para distinguirlos de los signifi- go, estas connotaciones desaparecen si decimos «OJOS negros))
cados referenciales, denotativos, que hemos estado viendo o ,,falda negra». . ,
hasta ahora. En una ley que intentaba castigar a cualqmer pa1s que man-
La referencia es la actividad lingüística que consiste en rela- mviera relaciones comerciales con Cuba, se usaba la expre-
cionar tma expresión con una entidad. Digo «quiero probar- síóri «traficar con Cuba)>~ en lugar de «comerciar con Cuba:)·
la referencia me esos zapatos rojos» y la ~xpresiqn esos zapa- .La palabra traficar connota algo avieso (trae a la me mona
tos TOJOS selecciona unos objetos de la realidad, «tráfico de drogas,,, «tráfico de e~lavos•,. etc.), y por lo ~nto'.
a los cuales me estoy refiriendo con tal expresión. A ese signi- resulta (¿intencionalmente?) mas negauva que cor:ierc1ar, y
ficado referencial suele llamárselo significado denotativo, y tam- degrada, connotativamente, las operaciones comerciales con-
signifiroá-0 bién significado literal, aunque este último tér- denadas. .
literal mmo, litera~ se usa más para distinguir lo que El buen escritor suscita las connotaciones que le mteresan,
la palabra quiere decir fuera de contexto de y trata de evitar las demás. El buen esc:it~r es un usuario cons-
los significados figurados que puede adquirir en determinados ciente de la lengua, medita sobre los significados, no solamen-
contextos. te sobre los que están en el diccionario, y es un buen observa-
Los significados invisibles son todos los significados posi- dor de cómo se habla y cómo se escribe. . . ..
bles de una palabra, con la excepción de los denotativos (o lite- Veamos, por último, el segund? tipo de sigmf!cado mv1s1-
signifiro.tlos rales). Son invisibles porque se llega a ellos por ble: las implicaciones que infenmos gracias al contexto.
invisibles inferencias: no están a la vista, sino implicados. Recuerdo al lector que el contexto incluye todos significados
Hay vados tipos de significados invisibles. Jos datos relevantes sobre el mundo, sobre la par- contextuales
Nosotros vamos a considerar solamente los siguientes: ticular situación de habla y comunicación pre- .
sente, sobre el género, sobre el lenguaje. El texto suscita, de
l. significados connotativos ese enorme sistema de conocimientos y creencias, los elemen-
2. significados contextuales tos necesarios para la interpretación; a partir de es"'.s .datos, el
lector infiere lo que el comunicante quiere transmitir con su
Los significados connotativos son significados asociados a mensaje, pero no dice explícitamente. . .. ,
los significados denotativos de las palabras o expresiones. Estas En los autobuses de Chicago había un cartehto bilmgue
significad.os asociaciones se producen por razones a veces que decía «El conductor no tiene cambio~. Por supue~.to, es~
declaración es en realidad una advertencia, que podna exph·
connotativos personales, afectivas, pero muchas veces se
deben a los contextos habituales en que apa- citarse de la siguiente manera: •pasajeros, al toma~ este auto-
recen determinadas palabras, que se asocian, así, a determina- bús les conviene pagar la cantidad justa, porque si pagan de
dos contenidos. Algunas connotaciones son previsibles, otras más, el conductor no les va a devolver lo que sobre». La decla-
no tanto, y muchas dependen de contextos particulares o usua- ración también quiere decir otras cosas, por ejemplo q~e el
conductor no lleva dinero, información que sirve para disua-
rios particulares. El nombre /nátresugiere connotaciones nega-
185
11, VOCASt:LAR!O
184 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA.'101 . sobre un juego con significados
plu-mfo quiere decir descansa . . usada a menudo en ciertos
dir de sus propósitos a los ladrones. Estos significados no invisibles. Esta es una estr~'.:~~n sobre un fenómeno se h~ce
dichos son, en este caso, más importantes que la información """ayos, en Jos cu~les.1'.1 me b~e el lenguaje, en especial sobre os
literal de que el conductor no tiene cambio. Son significa- - ¡iartir de la med1tac1on so . ' del lenguaje que usamos para
dos invisibles, pero esenciales para entender el cartel y actuar . lí 'tos y connotaU\OS
K•¡wctoS imp Cl ,
en consecuencia~ si uno es pasajero, o aspirante a ladrón. Imbiar de esos fenomenos. tros, es reconocer el papel. esen·
SÉ MUJER, decía un anuncio de ropa femenina. Decirle «sé Lo que importa, parafinosdo invisibles de las e;<:pres1~nes.
n1ujer» a una mujer seria un sinsentido si to1náramos la expre- . los s1gm tea os , el d1ccio-
dal que tienen . os dicho ya, no estan en
sión literalmente. Pero «mujer» tiene muchos significados impli- Muchos de ellos, como hem . plo salvo que sean muy fre-
cados, y el texto, más las fotos de la modelo con la ropa en . notaciones. por CJem ' .
mino. Las con . tradas Las metáforas imporllmCUI de
venta, suscitan esos significados, un estilo de vida, unas cualidades edan reg1s · ¡ ,
n1cntes, no c¡u . re re .stradas, y nunca o los significados
(atractivo, belleza, gracia) que se presentan deseables y adqui- t;ttnpoco estan s1emp d gi uestra libertad de invisibles
ribles con dinero. , e parte en
«~taran. porqu , ~ ras Los poetas son
En el primer párrafo de un libro de ensayos cuyo tema son hablantes es crear meta o . 'b'lidades metafóricas: esa es
los sentimientos humanos, el autor escribe lo siguiente: los ue despliegan todas las post 1 . .
q d u libertad. . . d y una d1sc1-
1111a parte e s . d i nificados tmphca os, . , -
Nos morimos de amor, nos morimos de pena, nos morimos Hay muchos upos e s g . da a explicar por que los usa
de ganas, nos morimos de miedo, nos morimos de aburri- lina lingüística floreciente dedicaa sto: la pragmática. En ~ste
miento, y, a pesar de la eficacia letal de los afectos, la aneste· ;:,os, comprendemo~ y explotam~:co~ar al aprendiz de escntor
sia afectiva nos da pavor. (A. Marina, El laberinto sentimenta~ 'tulo solamente importaba , 1 chata· todas tienen
cap1 nidimens1ona , · .
Barcelona, Anagrama, 1996.) que ninguna palabra es u .d d de evocar significados impre-
relieves, sombras, auras, capaC!., af cas están cargadas de sígnifi"
. 'bles Las e;<:presiones lmguIS l 'bles v esta riqueza no
;1SI • d · · ficados post •/ h
La primera parte de este texto contiene una serie de metá- cados anteriores y . e s1gm n diccionario. porque ~º. ay
foras ya fosilizadas en el lenguaje común: morirse de amor, de uede quedar consignad~ en u lidamente la creauv1dad
P d ·egistrar cum P
pena, de ganas. En esas expresiones, el verbo morir no tiene diccionario capaz e •
significado literal. El autor aquí nos obliga a restituir ese signi- lingüística. Por suerte.
ficado literal, es decir, resucita la metáfora para hacernos notar
que, en el lenguaje corriente, hablamos de morirnos de senti-
mientos, lo que parecería querer decir que los sentimientos E]ERCJCJOS
son malos para la vida. El autor nos invita a tomamos literal-
mente esas metáforas, y por eso dice que los sentimientos tienen Ejercicio 1
•eficacia letal·>: son tan eficaces que matan. Pero -y aquí entra
su argumentación- nos da más miedo (pavor) la anestesia afec- . · ). para
rdaderamente llamauvos
tiv-<1. Esta es una metáfora del autor, una nueva metáfora impues- Proponga cinco nomb1~s (ve da caso qué denotac1ones
ta sobre las otras. Anestesia quiere decir supresión del sentir. . de rock. E;¡:phque en ca
un conjunto hav en cada nombre.
Tal supresión nos garantizaría la vida, pero nos da más miedo y connotaciones .
que perder la vida (perderla figuradamente). Todo lo que este
i
i'
187
¡
186 CÓMO ESCR!BIR BIEN EN ESPAÑOi. J.t. voc->JllJLARIO
1
Ejercicio 2 10 He reo'b'do
1
tu email del 2 de enero.
.•
11·. Su supuesto cómplice lo denuncio.
12. El coche derrapó en la curvha. onocído, del gerente.
Suponga que debe elegir un nombre para una revista liter.uia . más bien d1c o, un e
y para un perfume. Le proponen los siguientes, y entre ellos 13. Era un arm~o, d n christmas precioso.
14 Todos los anos man an u
usted elige los tres o cuatro que, en cada caso, le gustan más y 15~ Celebraron un amical encuentro.
los tres o cuatro que, en cada caso, le han parecido más ina-
propiados. Justifique su selección, explicando qué clase de sig- 16 · Venta al detalle. d · personas.
l 7. Tenemos un staff. e cien • escándalo.
nificados ha tenido en cuenta al elegir los buenos nombres y 18. El affaire del pre51dente causo un .
desechar los malos. 19. Nuevo raid en Ira~.
20. Tiene un buen manager. nidad A
a) Revista literaria: Mundo, El cocodrilo, Abrapalabra, Gnosis,
El núcleo imperfecto, Antígona, Gramática íntima, La llave, 21. Unidad no lista leyen~o uublícitarla agresiva Y les fue muy
22. Híoeron una campana p
La selva, Nuestros hijos, Mirar llover, El mirador, Los de
abajo, Poesía, La encruc~jada, Nocturnas aves, Camaleón,
bien. . me porque queda cerca.
23. :El mercado X es muY. conven1e '
América, Subterfugios, Ciudad de niebla, Ícaro, Soledades.
b) Perfume: .A..tavismo, Pulcrís.imo 1 Noche, Pesca submarina, fjercicio 4 . . _ ara cada una de las siguien-
r1eur de passion, Ocaso, Appalling, Seducción, Amazona, . Intente escribir una defi".iCion.fip do las que le parezcan
Éter, Inocencia, Epanuissement, Corvo. Olvido, Arco iris, · es identI ican
tes palabras y expres1on. , spuestaS recurriendo a un
Suburbiana, Clara Inés, Hierbas de Provenza, Peristilo, extranjeras. De~pués venfique sus re
Conflagración, Mujer. buen diccionano.
estresado
Ejercicio 3 mostrenco barbarismo
inaudito frustre
En los siguientes pasajes, identifique todos los anglicismos y lMdo (estar) colgado
otros extranjerismos (catalanismos, galicismos... ). Donde pueda, esotérico sofisticado
ponga una construcción o palabra española equivalente. aplicación nimio
stop enervar
1. Los boxeadores subieron al ring. ígneo abusar
2. Tardó muchísimo~ pero eventualmente lo terrrlinó. contestatario
3. Debe enfocarse mejor en su trabajo.
4. Soy miembro del Instituto Cervantes.
5. El lector imaginario y el lector actual de una obra no siem- Ejercicio 5 . brayados en las secuen-
xpres10nes su ·
pre coincíden. Observe Jos pares d e e . d ada par son aceptab1es,
, ~· d expresiones e e .-
6. Por desgracia, es una persona muy maniable. das siguientes.":""" os tra Identifique la mejor expresion,
7. Hay que humidificar el ambiente. pero una es mejor que la o . . . ·es más frecuente en el
• 1 parece mejor. < . ¡· ;;
8. Trabajaba full time. y explique por que e ? • parece calcada del mg es.
;; ·es más simple que la otra , -:no
u So.,(
9. Lo mejor eran las hors d' oeuvres.
188 189
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOi. t:I. VOCABUlARIO
'
11
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1/
í
1
CAPÍTUL06
LA PRECOMPOSICIÓN
llltllposki(m seriamente, como un paso hacia el dominio de la
11k'rhl11'a.
Apr«nder nn tema no consiste solamente en dominar cier-
lülll f<UHlt:imientos sobre ese tema, sino que consiste, también,
lh rh-sarrollar las destrezas mentales de razona-
aspectos del
tnlrnln, especulación, imaginación, investigación.
aprendizaje
1 (Cómo Planificar un escrito) Como nuestra vida intelectual y nuestra vida afec-
llvu 110 están separadas por ninguna barrera, el proceso de
EL APRENDIZ,\IE DE LA COMPOSICIÓN Mprrndi7.aje incluye el desarrollo de una serie de actitudes, entre
t'llas el interés, la disciplina y la paciencia que se requieren para
¿?uáles son los pasos ue r . lhwir a conocer algo. El aprendizaje exige usar nuestros talen-
trabajo escrito? Vamos q p eceden a la redacción de un
· a suponer en lo . tc'" naturales, desarrollarlos, y tener conciencia de nuestras fuer-
JO es una composición de clase, en que sigue que el traba- 1.as. El aprendizaje también exige la adopción de un código de
todos conocemos (y hemos hech:arte porque es una tarea que mnducta: el rigor y la honestidad intelectnal son tan necesa-
parte porque eso nos permitirá e , ? tenemos que hacer) y en l"ios como la inteligencia, y las ¡ranas de hacer las cosas bien son
gu'!)e y aprendizaje. Algunos d lons1derar la relación entre len- imprescindibles.
tulo serán retomados en el capí~u~s ~em.as tratados e~ este capí- A lo largo de la escolarización, y de modo más evidente en
caremos a la preparación de traba. gu1e1_ne, pero alb nos dedi- los niveles secundario y terciario, vamos creando nn cuerpo de
que;na composición. ~os mas largos y complejos nmocimientos junto con nna serie de habilidades, destrezas y
na tarea de clase es un e. . . actitudes ante el conocimiento. El ejercicio de
namiento similar a los entren;er~1c10, u11a pr~ctica_, un entre- clase es una práctica entre tantas para lograr el
el módulo
les los jugadores realizan una m1entos deportivos, en los cua- rogrroscitivo
desarrollo de ese complejo de conocimientos,
con el objer.o de perfeccio sene de acfüidades repetidas habilidades y sentimientos que algunos autores llaman «mÓdtic
de e Jase tienen
· por ob. nar sus jugadas
. . L as composiciones
~eto perfecc10nar al t d" lo cognoscitivo».
.fi.auión de las dominio de las estructuras di es u rnnte en el Ese módulo puede representarse así:
rotnplJ<icimieg sos lingüísticos que se . scurs1vas y recur-
neces1tan en la .d 1
, para escribir textos Lo \1 a rea MÓDULO COGNOSCITIVO
tendran funciones espec 'fi ·. s textos de la vida real
der. d I Jeas, por e•emplo
en era alguien pe~. d" . 1 ". presentar un caso destrezas mentales (razona-
tíg· . , ' Ir iscu pas lllform b '
ac1on, ganar el títul d d , ar so re una inves- miento, capacidad de especu-
. o
p or ser <':Jercicios o práctic e octor. Las com . .
. pos1c1ones de clase cuell'o de co11ocirnientos lación e investjgación)
les, no cuentan como da;ads,no nenen todavía funciones socia'
<•ver eros» ese .t -
S<U:ar nna nota y pasar nn curso L . n os, excepto quizá para actitudes
d1ante que se esta' , preparand 0 .par o importante
¡ es que el estu
, -
tenga conciencia de para né ,ª iac~r una composición La composición es nn ejercicio fundamental en la escuela
texto como el que le han ~anda~dna sen1r en la vida real nn porque la existencia misma de este módulo cognoscitivo depen-
o componer, y se tome cada
de del dominio del lenguaje que tengan los alumnos. Sin el
1
195
194 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA,'-< ¡¡
buscar lectares Nótese que estoy enumerando artimañas para atención •.. rsonal y útil de los cambios de la ado-
reales crear lectores, y las recomiendo calurosamen- - ofrecer un anáhSJS pe . . , datos v opiniones
. buena 1nforn1ac1on, ' 1
te, ya que estoy convencida de que no a todos
los alumnos les basta escribir solamente para el profesor. - lescencrn,
hacer una con
propuesta sob re com•
0
se puede
- ayudar a los
adolescentes en sus procesos de cambio
También debemos pensar qué tenemos que decir nosotros
sobre ese tema. ¿Tenemos algo que decir? ¿Nos importa decir -etc.
algo? ¿Queremos que alguien nos lea? Cuando meditamos
. . • n objetivo excluye del todo a los otros,
sobre la función de algo que vamos a escribir, meditamos ine- Nótese que casi m~gu b' 1 s algunos se superponen, ya
vitablemente sobre el papel social que nos atribuimos a noso- - nstancias ha itua e • ..
y que, en c1rcu le ido como ejemplo es exposmvo,
tros mismos. Escribir (y hacer que alguien nos lea) nos da que el tem~ que hemo;.: gla expresión de sentimientos. Lo
podery riesgr> poder; el poder de decir algo, de expresar nues- pero permite la narra~ o ia función ue más nos interesa dar
importante es saber cual es . lar ¡~ dimensiones textuales
de escribir f
tras ideas, quizá de defender una posición ante " t Y luego mampu . .
algo. Y escribir nos expone: el que nos lee nos a nu~stro tex o, , No se uede escribir sin objetivos ca-
observa y nos juzga, nos tiene simpatía o antipatía, o no sien- estud1adas en el cap~tulo - ' s· p bemos qué función cum-
2 1
te nada.
ros, definidos prevtamente. _1 ;<>. ::mos la pelota en un parti-
ple nuestro escrito, es como s1 tra
200 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPMOL LA PRECOMPOSICIÓN
201
do sin saber por qné tiramos, ni para dónde debemos tirar. concentrarnos en una descripción de ese público. ¿Quiénes
La segunda pregunta -¿cnál es el tema del trabajo?- está son? ·Cuánto saben del tema que voy a tratar? ¿Por qué les va a
íntimamente relacionada con la figura de nosotros mismos "
interesar ., y su m
mi escrito? ¿Cómo atraer su atenc10n ' teres
'?
que queremos transmitir, ya que algunas personas tienen más ¿Qué esperar> de mi? .
autmidad autoridad que otras para hablar de ciertos Aquí debemos detenernos sobr; :in tema m~y importante,
temas. El que hemos elegido -la adolescen- 1 del que ya hemos hablado a propos1to de los generas textua-
cia- está relacionado con una experiencia por la que hemos les: el diálogo con el lector.
pasado todos, y tenemos alguna autoridad para tratarlo, aun-
que no todos podamos hacerlo bien. En otros casos, cuando
EL DIÁLOCO CON EL LECTOR
el asunto por tratar nos resulta más desconocido, o nos inte-
resa poco, la regla es hacer las cosas lo mejor posible, buscar
información, investigar, decidir qué podemos decir de ese Cualquier escrito es un diálogo, aunque no tenga forma
tema que sea correcto, aceptable, e interesante. Una condi- de diálogo. Quien escribe tiene una «VOZ» real. Llamamos voz
ción sine qua non para lograr un buen trabajo es investigar el del texto al modo de hablar y al modo de ver el mundo reve-
tema sobre d que vamos a escribir hasta creer de buena fe lados por el texto. A la voz oída en el texto solemos atribuir
que sabemos lo suficiente. Nada más penoso que leer un escri- también, en la lectura, una personalidad y a veces hasta un ros-
to carente de la información adecuada. En el capítulo siguien- tro. En los estudios literarios, a esa figura ima- voz del texta
te trataremos con más espacio el conjunto de tareas de inves- gínada del autor se la llama •autor implícito»:
tigación requeridas para escribir un trabajo expositivo de cierta es una presencia, un ser creado por el texto, que suponemos
envergadura. muy parecido al autor o autora de carne y hueso. A su~ez'. esa
Por último, debemos cerciorarnos de cuál es, exactamen- figura creada en el texto se comunica con otra, tamb1~n .ima-
te, el tema que nos han asignado, sí se trata de una composición ginada: la de un lector. Al escribir, sobre ~odo s1 escnb1mos
escolar. A veces, por la prisa de la que hablé antes, los alumnos con interés y con pasión (no vale la pena escnbir de otro modo).
escriben sobre algo distinto de lo que el profesor les pide. al escribir queremos decirle algo a alguien, y por lo tanto ima-
Comí.ene aclarar bien este punto antes de iniciar cualquier plan ginamos un destinatario. En todo texto, literario o no, hay u~
de precomposición, sobre todo si lv que tenemos es una sola autor 0 autora implícitos, a veces más percepuble, a veces casi
adaroción del
frase desprm~sta de contexto y explicaciones. invisible, y ese autor se dirige a un lector tam- auror _,y
•Los cambios en la adolescencia», por ejem- bién creado en el texto. Llamaremos «autor lecror textual
plo, puede dar lugar a un tratado sobre fenó- textual» y «lector textual» a las figuras del autor
menos psicológicos, a un tratado sobre fenómenos fisiológicos, de carne y hueso y del lector de carne y hueso proyectadas en
a un relato personal, a un escrito de tipo correctivo o morali- el texto.
zante, a rma reflexión sobre las drogas, sobre el rock, sobre el El esquema de comrmicación entre el autor y el lector de cual-
acné, sobre el lenguaje de los jóvenes, etc. Si no sabemos qué se quier texto escrito puede esquematizarse como sigue:
espera que escribamos, mal podremos escribirlo. COMC.NIC.4CIÓN TEX11JA/,
Pasemos a la tercera pregunta: ¿A quién está dirigido mi
escrito? Ya hemos decidido, al dar a nuestro escrito alguna fun- AUTOR DE -> AUTOR _. 1 LECTORml -> LECTOR DE
ción, que será leído por cierto público. Pero ahora debemos CARNE Y HUESO +-- TEXTUAL +-- TEXTUAL +-- CARNE Y HUJ!SO
1
1
202 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL LA PRECOMPOSICIÓN 203 1
El autor textual es la imagen que da uno de sí mismo en un y para satisface•, sus expectativas. Esa es una desventaja de los ejer-
texto escrito (también damos imágenes de nosotros mismos en cicios de composición, ya que deberíamos tener siempre un
los textos orales}. El autor textual puede ser inteligente, com- público más an1plio que una sola persona, es decir, deberíamos
imagm del p;ensivo, ingenioso, sabio, desfachatado, iró- sentir que penetramos en el ámbito de una comunidad discur-
autor textual meo, etc. A su vez, el lector textual, creado en siva, corno sucede en la vida real.
el texto mismo y con el cual, si todo va bien, El lector textual se crea sobre una imagen lo más precisa
conver.ge, totalmente o en parte, el lector real, puede ser un posible de los lectores reales, de por qué nos van a leer, cuán-
lector mtehgente, capaz de entender lo que se le dice, infor- do, cómo. Es útil, por ejemplo, en el caso de la
mado, con senúdo del humor, cómplice del autor textual o no, composición, concentrarnos en un grupo de
etc. compañeros de clase, y hacerlos destinatarios
Creo que todos hemos pasado por la experiencia de leer del escrito. Si de verdad nos leen y nos comentan nuestro tra-
un escrito que no nos presuponía como lectores. Algunos artí- bajo, habremos logrado crear una situación de escritura pare-
culos de revistas femeninas, por ejemplo, construyen una lectora cida a las reales, y mucho más provechosa para el aprendiza-
idrmtificación textual cuy~ interés mayor es, l;'ongamos por je.
con la lectora caso, seducir a los hombres. Si no se quiere
textual adoptar ese papel, no se puede parúcipar fácil-
ETAPA DE DESCUBRIMIENTO
mente en la comunicación. Para leer bien y dis-
frutar de lo leído debemos ingresar en el texto, aceptar la figu-
rad~ lectora textual esbozada por el artículo. Por supuesto, el Los estudios recientes sobre la composición distinguen
escnto puede «obligarnos» a ser el lector ideal, como sucede, dos modos básicos de encarar la tarea de escribfr: contar lo
muchas veces, con los textos publicitarios, que intentan forzar- que uno sabe, o transformar, mediante la escritura misma, lo
nos a ser de determinada manera. Esta obligación se nos impo- que uno sabe. El ejemplo típico de «contar lo que uno sabe»
ne, por lo general, presuponiendo que todos tenemos ciertos es la composición infantil sobre el verano o contnro
deseos, por ejemplo poseer un cuerpo hermoso o una casa gran- un tema por el estilo: el niño vuelca inmedia- lralliformar el
de; ese deseo se da por descontado, como si fuera legítimo, tamente su conocimiento, con poca planifica- conocimiento
bueno y universal, y se intenta vendernos algo (un aparato de ción previa.
gimnasia, dinero a interés, Jo que sea} para que podamos cum- En cambio «transformar lo que uno sabe» es escribir tra-
plirlo. tando de aprender mediante la escritura, es pensar en el tema
~ ~den;mcación con un lector textual no implica ninguna y en el modo de tratarlo, hacer varios ensayos, corregir, rees-
summon. Un buen lector no lee sumisamente, creyendo todo trllcturar, encontrar nuevas cor1exiones entre
aprender
el buen lector l? que le dicen. El buen lector es siempre cri- las ideas, mejores ejemplos, argumentos más mediante la
no es sumiso uco, es un lector activo. Pero se es crítico desde eficaces para convencer, etc. Esta escritura es
dentro, es decir, se asume el papel de lector tex- mucho más enriquecedora, y también más clifi-
tual como parte de la tarea de interpretar el texto, y luego se cri- cil. Lleva tiempo y ret1exión, y exige un periodo previo de tra-
tica el texto, si vale la pena hacerlo. bajo preparatorio. La etapa de «descubrimiento» consiste en
¿Có'.'1?. se crea el lector textual? En nuestro ejemplo de la explorar el tema y la situación de comunicación. Toda persona
composicmn, vamos a tender a escribir pensando en el profesor que tenga cierta experiencia con la escritura puede corrobo-
J
205
!A l'RECOMPOS!ClÓN
204 CÓMO ESCRIBIR BIEN E:-1 ESPA,'\rOL
J
208 CÓMO ESCRllliR BIEN EN ESPAÑOL LA PRECOMPOSICIÓN
5. ¿Cómo debo distribuir la informadón? grafía perfecta y sintaxis impecable. No es así, por lo general, y
6. ¿Qué registro debo usar? siempre hay muchos problemas gramaticales que ir resolviendo.
Pero, salvo que nos impidan seguir adelante, lugar de la
Cuánta información debo dar depende de quién me lea y de debemos dejarlos para después, para la etapa de gramática
la función de mi escrito. En el capítulo dedicado a la contextua- revisión del escrito. Y esto es así porque la redac-
lización hemos considerado problemas relacionados con la dis- ción es una tarea absorbente y compleja, que requiere mucha
tribución de información del escrito. concentración. Si la interrumpimos para núrar en el dicciona-
De registros y estilos hemos hablado 711. Así como debe haber rio la ortografía de una palabra o para llamar por teléfono a
coherencia temática en un escrito (no podemos referirnos a alguien y preguntarle con qué preposición se usa tal verbo, per-
algo nunca mencionado como sí ya lo hubiéramos mencionado, deremos tiempo y perderemos ímpetu.
por ejemplo), también debe existir coheren- Más complejo es el problema del vocabulario. Probablemente
cia o armonía estilística. Para lograrla, lo mejor las mejores palabras se nos ocurran en las últimas revisiones.
es comenzar con una idea clara del tono, voca- Sin embargo, es bueno comenzar a escribir con
bulario, humor, y otras opciones lingüísticas que vamos a per- ciertos conceptos bien claros y adecuadamente el vOlltlbulario
seguir durante la escritura. Pero cualquier disonancia se irá nombrados. Por eso es conveniente jugar con
corrigiendo en las etapas de revisión del escrito. el vocabulario antes de empezar a escribir, pero dejando siem-
La retórica de un escrito es el conjunto de procedimientos pre la puerta abierta para la expresión más feliz que pueda apa-
de comunicación utilizados en un texto, es decir, los procedi- recer en cualquier etapa del trabajo.
mientos asociados a la relación autor-lector analizada arriba. Tampoco es imprescindible tener el título al comenzar el
la retórica Se suele hablar de •estrategias• retóricas porque escrito, aunque recomiendo poner un título provisional, sim-
cada acto de comunicación requiere ciertas plemente para tener conrrol sobre lo que hace-
el fit.ulo
estratagemas para llegar a buen fin. Un acto de comunicación mos, ya que el título se refiere al tema central
afortunado es aquel en el que el emisor es interpretado corno del trabajo. El titulo es también el señuelo para
quería ser interpretado. Si el profesor escribe el lector. Por lo general, el mejor titulo se nos oairre al fmal del
ados de escrito, cuando el largo proceso de escritura nos ha hecho
una nota al margen de una composición, acon-
comunicación
s<:>jando algo (por ejemplo, más práctica de la aprender mucho sobre Jo mismo que escribimos, y cu~d~ ya
escritura) y el alumno interpreta el consejo hemos establecido una relación imaginaria con el aud1tono, y
como consejo, y no como amenaza de suspender el curso, la estamos cómodos, nos sentimos compañeros y casi cómplices.
comunicación habrá sido afortunada. Es también afortunado el
acto lingüístico en el cual el emisor ha logrado alterar en algo ESCRIBIR PARA TRAJ'<lSFORMAR EL CONOCIMIENTO
el paisaje mental del receptor, o, más atrevidamente, incitarlo
a la acción. Todo texto modifica la realidad de alguien, ya sea
confirmándole unos datos o creencias, ya sea sugiriéndole otros Como muchos otros tipos de actividad, la de componer un
nuevos, o proporcionándole información, o deseos, o inspi- escrito está orientada hada la resolución de problemas. Se trata
rándole nuevas conductas. de ir resolviendo problemas de distinta natura- la restlku:Wn
¿Y la gramática? Sería ideal que no tuviéramos ningún pro- leza: qué decir, cómo decirlo, por qué decirlo, de problemas
blema de gramática, y que escribiéramos de entrada con orto· '' qué voz adoptar, cuál es la gramática correcta,
210 CÓMO ESCRIBIR lllEN EN ESPAÑOL lA PRECOMPOSICIÓN
211
cuál es el léxico más adecuado, etc. Muchas veces la resolución posición de un texto son provechosos y merecen el esfuerzo Y
de un problema provocará otro distinto. el tiempo que cuesta resolverlos. . . •.
Al redactar nuestro trabajo sobre la adolescencia pode- El proceso de composición consta de dos dimensiones basi-
mos plantearnos, por ejemplo, que la exclusión sistemática de cas: el conocimiento del contenido y el conocimiento del dis-
los femeninos en fuvor de los masculinos gené- curso. Entre una y otra dimensión hay una rela- conociniiento
cómo un ción continua en ambas direcciones, tanto del del contenido y
ricos (como al decir el hombre para referirse,
problema lleva
genéricamente, a hombres y mujeres) es una conocimiento del contenido hacia el conocí- conocimienro
a otro
convención aceptable pero injusta, y decidir miento del discurso como en la dirección con- del discu;rso
usar masculino y femenino, diciendo, por ejemplo, el adoles- traria, del discurso al contenido, ya que, como
amf,e o la adolescente en lugar de el adolescente. El problema pare- hemos dicho, unos problemas generan otros, y unas solucio-
ce solucionado, pero entonces surge otro, de distinta índole, nes aplicadas a una dimensión pueden provocar nuevas cues-
y es una cuestión de estilo: decir continuamente el adolescen- tiones reladonadas con la otra dimensión. En nuestro ejemplo
li! o la adolescente puede hacer muy pesado y machacón el párra- del masculino genérico, el problema pertenecía a la dimensión
fo. Si, como hacen algunos escritores, se dice a veces la ado- del conocimiento, pero su solución dio lugar a un problema
lescente y a veces el adolescente, es probable que el texto sea lingiiístico, el cual, a su vez, nos devolvió a consideraciones
desconcertante o confuso, por ser el femenino un término sobre el contenido.
marcado, que resulta dificil usar genéricamente (esto, por Esta continua interacción da lugar al proceso fascinante
cierto, puede variar en el futuro). Además, el chico adoles- mencionado al comienzo de este capítulo: el proceso de trans-
cente y la chica adolescente pueden experimentar cambios dis- formación del conocimiento. Cuanto más escribimos sobre un
tintos, y si nos referimos a esas diferencias debe quedar claro tema, más sabemos sobre ese tema, y, de paso, sobre el lengua-
donde sea necesario que no estamos usando esa palabra gené- je, lo que nos permitirá usarlo cada vez con escribir no l!S
ricamente. mayor facilidad, tino y eficacia. wi proceso
De modo que si solucionamos un problema ideológico como Espero que, por lo dicho hasta aquí, haya limal
el de 1 masculino y femenino nos puede saltar uno estilístico, y quedado claro que que pocas actividades son
de allí tenemos que volver al aspecto ideológico y replantearnos menos lineales que redactar un escrito. Hay, sí, tres etapas que,
todo, por ejemplo, en este caso, por qué y cuándo no podemos enumeradas, parecen describir un proceso lineal:
usar de manera intercambiable la palabra adolescente en mas-
culino y femenino, y cuándo podemos, y por qué. 1. pensar, buscar información, tomar notas
los buenos Los buenos problemas de la composición son 2. hacer un borrador,
problemas aquellos que nos obligan a pensar y a transfor- 3. revisar el borrador.
mar nuestras propias ideas. Los problemas no
tan buenos, e incluso los detalles irritantes que debemos tener Pero en cada etapa hay muchas idas y venidas, y reelabo-
en cuenta al redactar, también son útiles, pues nos hacen refle- raciones, y recomienzos. Además, un buen escrito ha teni-
procesar, xionar sobre el lenguaje que nos sirve para pro- do más d~ un borrador. Si escribimos en una computadora
ardiivar y cesar el conocimiento, para archivarlo, y para no dejaremos rastros de las revisiones del escrito. Si escribi-
romunicar el comunicarlo. No creo exagerar mucho si digo mos en papel, podremos reconstruir la historia de la re_dac-
conocimiento que todos los problemas que plantea la com- ción. En cualquier caso, esa historia es agitada: párrafos mte-
213
212 CÓMO F.SCR!BIR BIEN EN FSPANOL !A PRECOMPOSICIÓN
disparidad de sueldos
problemas emocionales
ventajas
independencia económica
sueños cumplidos
dificultades para ascender satisfacción intelectual
Ejercicro 2
desatención de los hijos mayor estatus
relaciones difíciles igualdad con el marido
Narración de experiencias personales. Cuente algo que le ha
pasado, como si lo contara en una carta. Cuéntelo dos veces, en con colegas varones
incomprensión social mejor equipada para
dos textos distintos. En el primer texto, dirija su relato a un
educar a sus hijos
a~igo suyo. En el segundo texto, dirija su relato al profesor de
mayor autoestima
f'ís!ca (para exphcarle, por ejemplo, por qué faltó a clase una
214
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA'iOL
JA PRECOMPOSIClÓN 215
lo'jercici.o 4
mación totalmente desconectada, que exigiría un gran esfuer-
Mapade·d El .. zo de procesamiento, quizá en buena parte inútil. Un ter~
• 1 eas: !lª uno de los siguientes temas v elabores cer tipü de información es nueva pero conectada con la que
propio mapa de ideas R d , · u
. . . ecuer e que no es imprescind.bl E ya tenemos: la conexión provoca más jnformacíón nueva .
.1~a:_ oposiciones entre las ideas: basta con lograr una 'ore º'.'~ Esta información es la más relevante, pues produce un efec-
zacion adecuada, que le permita luego una exposición m~;:. to de multiplicación, con menos coste de procesarníen to.
a) Por qué me gusta la música. d) ¡Sonríe: Con Cellular One.2.3 vas pagando únicamente pür
b) Los adolescentes y Ja música. lo que vas usando. Sin contratos. Sin pagos mensuales. Sin líos.
e) El correo electrónico.
e) Qué bueno es cuando el doctor habla en la misma lengua
/ejercicio 5
que uno. Cuando a la tensión, al malestar y al miedo no se
El lectur textual Le p 0 . . añade la angustia de la mala comunicación.
cada d · . r ?º~go que •magme el lector textual de
1
d , uno . e o~ textos siguientes, siguiendo fas pistas que le f) Todavía no hemos logrado la paridad de salarios, ni menos
~n 1os textos mismos. Para fucilitar la tarea. le doy al . que la sociedad nos perdone intentar conjugar una carrera
piedades posibles del lector textual· el1iia . gunas_pro-
. " entre esta, o anada con el cuidado de los hijos. Pero hay un abismo entre la
otras, y construya una figura posible de lector para ~ada fra generación de nuestras madres y la nuestra.
mento. g-
Prüpiedades •~t·ua'-• de ¡a misma
del lector g~ · ., d 1
generac10n g) El gobierno nos pide sacrificios, que estaríamos dispues-
de la nusma profesión o actividad que el auto• de P . ~- autor,
•
tos a hacer, en bien del país, si viéramos que hay una ver-
nóm · d h . .., os1c1on eco-
lid d1ca¡· esa ogada, mu1er, adolescente, de la misma naciona- dadera voluntad de mejorar la situación económica, por
a , e tente, votante, amigo~ etc. encima de los oportunisrnos y los intereses particiístas.
a) El rostro de Ernesto Che Guevara h' . h) Jorge Herrera propone representar el cuerpo humano
. ' eroe proscnto de nues-
tra juventud, aparece ahora en un sello d 1 e como una metáfora de la fracturada nacíonalidad hispárti-
Ar ti . e orreo
gen no, gracias a la • filosofia de la concordia» . ca. Sus construcciones tridimensionales no alcanza11, sin
nuestro país, "lgente en embargo, el empaque de las de Monk, expuestas el año
pasado en la misma galería, y püf cierto difunden un angus-
b) y.~s que en muchos hogares se sabe muv poco de los pro íos tiado patetismo.
h~os, especialmente dur.mte su adoles~encia Si las f; p¡¡·
hablara • . · · am ias i) Contra las mentiras de siempre, la cara nueva de la verdad:
n mas con sus hÍjos de las ganas de «conocer el
ese ~1ar propio e íntimo, lejano y atrayente, es probabt:"~: usted, ahora, está creando el futuro de sus hijos. Acepte su
pudieran ayudar a los adolescentes a evitar liarse en ave~tu responsabilidad. Únase al proyecto de Lucía Rodríguez.
ras que a veces acaban en tragedias. Únase a Ja verdad.
e) En nuestro e~tomo cognoscitivo hay información inmedia- j) En un país donde todas las ovejas eran negras y los cuervos
tamente accesible, que no necesita ser procesada y ha " e era11 b.lancos y las vacas eran de color verdemar. vivía una
' } lll.tOf-
seüora que se llamaba la Yuta Yllta.
216 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
Ejerddo 6
BIBLIOGRAFíA
No es frecuente, ni aun en los textos científicos más espe- metamorfosis en cuanto eligen el tema: pasan de la desolación
cializados, que el investigador que escribe desaparezca por com- a la expectativa, y, a medida que se ponen a leer sobre el tema
pre.encía del pleto: su tono impersonal no ocultará su exis- y a tramar su obra, muestran un entusiasmo experiencias de
autor tencia, y habrá en el texto valoraciones, recursos creciente. Tienen, sin duda, sus altib~jos, espe- los estudiantes
argumentativos, y otras señales de la intención cialmente a la hora de ponerse a escribir (¿por
de comunicar y persuadir a los lectores, En una monografia o qué será tan difícil encontrar la forma de decir por escrito lo que
una tesis, la desaparición completa del autor no es recomen- uno ya sabe?), pero en conjunto, la experiencia es siempre posi-
dable, pues nos deja enfrentados a un texto seco y remoto, no tiva . y no conozco estudiante que no sienta algún orgullo por lo
vivificado por las experiencias de su autor. que ha hecho y no espere una evaluación concienzuda del pro-
fesor.
Como en cualquier escrito, pero de manera más marcada,
QUÉ ES UN TRABAJO DE INVF$l'IGACIÓN en un trabajo de investigación hay una interacción continua
entre los dos ámbitos que hemos visto en el capítulo anterior, «La
Para planificar algunos de nuestros escritos solo necesitamos precomposición»: el ámbito del conocimiento y el ámbito del dis-
rebuscar en nuestra mem<;>ria y reflexionar sobre nuestras expe- curso. Dijimos que esta interacción nos permi-
nenctas. Pero en los trabajos que realizamos en la universidad y te transformar el conocimiento del terna y el
más tarde, en nuestra vida profesional, si nos dedicamos a la conocimiento del lenguaje, en un proceso de
investigación, necesitarnos información que no poseemos. Para aprendizaje creciente. Cn trabajo de investiga-
escribir rnonografias, tesis, informes, artículos o libros, debe- ción no tiene por meta buscar y sintetizar una serie de opinio-
roraderístiros mos consultar fuentes de información sobre nes ajenas sobre un asunto, sino que tiene por meta llegar, con
y fimciones algún tema específico, seleccionar lo que nos la ayuda de las fuentes y de los procesos de asi- ganancias de
parece pertinente, unirlo a nuestras propias milación y reflexión crítica, a la comprensión un trnbajo bien
experiencias, ideas e hipótesis, y presentar el resultado en un personal de un tema. hedw
texto claro, convincente, autorizado, y agradable de leer. La fun- En el siguiente cuadro se listan algunas de
ción de este texto es informar, y, a veces, argumentar para per- las «ganancias• que nos da un trabajo de investigación bien
suadir a los lectores de algo. El proceso íntegro, desde la bús- hecho, en los dos ámbitos involucrados:
queda de füentes de información hasta la redacción definitiva del Discurso
escrito, constituye lo que llamamos trabajo de inves1igación. Conocimiento
Ya sea que dure una semana o muchos años, que se trate aumento de:
de un trabajito de clase o del gran libro soñado, cualquier tra- - corroboración - capacidad de manejar
bajo de investigación realizado con interés y buena fe requiere - nuevo diseño otros textos
mucho esfuerzo, es un desafio a nuestra constancia, energía e - enriquecimiento - claridad de exposición
imaginación, y suele generar más conocimiento, nuevos inte- mayor autoridad para opinar - habilidad parn persuadir
reses intelectuales y nuevos puntos de vista sobre algún aspec- - comprensión más profunda - capacidad de síntesis
to de la realidad. · - nuevos intereses - nuevo vocabulario
Mis alumnos, que al principio parecen desolados ante la intelectuales
obligación de escribir una monografia, empiezan a sufrir una - cambios de creencias
225
CÓMO ESCRIBIR UJ\ TEXTO EXPOSITIVO, 1
224 CÓMO ESCRJBJR BIL'I EN ESPA.<;¡OL
ideologías políticas y a nuevas visiones del mundo en general y aunque sea brevísima, de preguntas propias sobre el te~a.
del académico en particular. Lo ínterdisciplinar, por ejemplo, Todo lo que vamos a hacer, hasta el día de entregar el escnto
tiene actualmente mucho prestigio, y algunos estudios tradi- 0 de verlo publicado, es contestar a esas pre- las pregunt.a•
cionales de filología o de gramática, o los trabajos limitados a un guntas y a otras que vayamos for.mulando a iniciales
autor, no gozan ya de tanto prestigio, por muy injusto que esto medida que avancemos en el trabajo. Esas pre- .
sea. Las teorías feministas han puesto en la vanguardia temas de guntas son impürtantísimas. nos guiarán. a lo largo del trabajo,
interés académico que no existían hace apenas veinte años, y las retomaremos en las conclusiones. S1 no tenemos esas pre-
como los relacionados con la experiencia femenina del cuer- guntas antes de empezar, es P;>rque no te?emos, en reahd:d'.
po, y en lingüística se estudia la conversación real. con sus repe- tema. «Quiero estudiar la rnetafora», P?r ejemplo, debe .e~tu.'.
ticiones, errores, anacolutos e incoherencias, con el mismo cui- derse como «Tengo ciertas preguntas mteresantes} qmza 011-
dado y minuciosidad con que antes se estudiaba un texto clásico. ginales sobre la metáfora, y me quiero arnesgar a conte~tar
Son temas nuevos, y modos nuevos de concebir el papel social las». El tema de una tesis o de un libro es como un obJet;>
de los investigadores. amoroso: cuando uno se enamora el objeto de amor es fasc'.-
Debemos recordar que el objetivo último de una tesis es nante, v nos provoca muchas preguntas. Tenemos la segun-
obtener un título, y con el título incorporarse al mundo aca- dad, además (quizá ingenua, pero válida) de que vemo~ a ese
démico. Para ello conviene saber qué temas van a interesar y objeto como no lo ven los demás. Si ~lcanzamos tal ceru~um
qué temas no. U na tesis de doctorado es el último ejercicio bre respecto de nuestro tema de trabajo. y el deseo nos gma, es
escolar, con el cual tenemos que ganar nuestro ingreso en la hora de poner manos a la obra.
comunidad académica. Para eso es necesario respetar las normas
del juego, mostrar que estamos capacitados para ser miembros CÓMO BCSCAR BlBLIOGRAfÍA Y TOMAR N<n:'\S
del grupo.
Antes de empezar a leer bíbliogralia debemos escribir el
tema de la manera más específica posible. Por ejemplo, si vamos Las etapas que siguen son las que ocupan, ge;:ieralmente,
a estudiar las funciones de la metáfora en la más tiempo: buscar bib!iografia, leer'. tomar not".5, ir esbozando
conversación, en lugar de enunciar el tema el tema, fijarlo, ponerle límit~s, escnbir.una gma. . .
como «la metáfora en la conversación» o algo Le conviene dedicar un dia o dos a mvest1gar la biblioteca
semejante, debemos enunciarlo, para nosotros de la universidad y sus recursos: ganará mucho tiempo. S1 los fon-
mismos, así: «la metáfora como procedimiento dos de la biblioteca están compu".'1izados, apro- cómo Junt:iona
comunicativo empleado en la conversación, desde una pers- veche al máximo la informac10n que puede /a bibl'ioteca
pectiva pragmática y aplicando las teorías cognoscitivas recien- obtener de la computadora: por autor, por tí tu- .
tes». O bien, en lugar de «el tratamiento del alcoholismo con los, por temas, por palabras clave. En un rato puede org~1zar
drogas», escribir «el alcoholismo considerado como una enfer- una bibliografía completa, localizar sus f;1entes Y. tomai:las d!fec-
medad y la necesidad de tratarlo por medio de drogas seme- tamente del estante, o pedirlas por prestamo mterb1b:1~teca
jantes a las usadas para la depresión, es decir, drogas que afec- rio. Puede, también. localizar y fotocopiar artículos ad h1:'1tum,
ten a los neurotransmisores del cerebro y modifiquen el si su biblioteca está bien provista, o, si faltan algunos aruc.ul?s,
comportamiento del paciente». pedirlos a otras bibliotecas. Una parte imP?rtante de la b1bho-
Debajo del tema, así especificado, debemos anotar una lista, grafía, sin embargo, la irá formando a medida que lea, pues un
229
228 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, 1
libro lleva a otro, y nuevas ideas a nuevas ideas: de su biblio- sivas en el capítulo 1, al tratar los géneros textuales). Las c~mu
grafia en ciernes irá surgiendo, poco a poco, la bibliografia que nidades regulan sus discursos mediante controles de calidad
utilizará finalmente en su trabajo. semejantes a los de cualquier otro producto. . .
Le recomiendo que, además de compilar una bibliografia Una vez que haya decidido qué leer, haga una bi.bhografia
especializada, hojee las revistas dedicadas a temas afines al suyo: completa y cuidadosa. Siga las conven~i?nes de cita biblio-
. . . .. lea los resúmenes que suelen encabezar los gráfica que le indique su profesor. fa util poner el nombre
familwnzacum
. ar t'iculos, espie
• que• d"icen 1as resenas
_ y anuncios
. completo del autor, también el de pila, para /,a bibliografía
ron revistas d e l"b
t ros rec1"b"d
i os, en suma, paséese y lea por facilitar la búsqueda futura de otros trabajos .
placer, dejándose atraer por una cosa y por otra, como un pica- del mismo autor. Si su bibliografía es muy nutnda, hay pro-
flor. Le quedarán en la cabeza algunas palabras o frases, que, gramas especiales para ponerla en or~en a~f~bétic~. Revis~
quizá, cristalicen con el tiempo en ideas, cuando se combinen dos veces los detalles: apellidos raros, anos, pagmas. Si se eqm-
con otras frases, con otras lecturas. Nuestra mente trabaja a voca al meter los datos en la computadora, el error se pe~pe
escondidas de nosotros: a veces una frase leída al pasar vuelve tuará. Nunca cite un libro o artículo que usted no ha VIsto,
a la conciencia para apresar una intuición que, sin esa frase, salvo que sea inaccesible; en ese caso, i?dique de dónde p~o
nunca se hubiera manifestado. Ya hemos dicho que hay una viene su cita. Tenga la misma escrupulosidad para estos trabajos
interacción continua entre el contenido y el discurso: las ideas mecánicos que para tratar sus datos y argumentar. Hay gemos
nos llevan a las palabras, y viceversa, las palabras a las ideas. El que son algo descuidados en los detalles, pero usted no pre-
trabajo •distraído» y placentero de dos o tres tardes le puede tende pasar por genio. .
dejar algún fruto interesante. Sea curioso. Me desconciertan Tomar notas requiere tanta atención y capacidad cr~ativa
los estudiantes que, si se les manda leer el capítulo 3 de un como escribir un trabajo. Al tomar notas, estamos haciendo
libro, ni siquiera echan una mirada al índice y a los dos capítulos varias cosas simultáneamente, dos de ellas muy cómo tomar
precedentes. importantes: un resumen de lo que leemos notas
Cuando junte sobre una mesa varios libros y una resma de (hablaremos del resumen enseguida), y una aso- .
fotocopias, tendrá que preguntarse si vale la pena leer todo eso. ciación entre lo que leemos y nuestros conocimientos anterio-
Mire todo, pero lea sólo lo bueno. No todo lo res. Esta asociación, no siempre consciente, es lo que nos hace
selección de
que aparece en letras de molde es bueno. Para prestar más atención a unas cosas que a otras. .~
lecturas: qué es
que un trabajo, incluido el suyo, sea bueno, El proceso de leer es un proceso de const~uccion de con~
un buen trabajo
tiene que ser el resultado de una investigación cimiento. Usted no construye sobre la nada, smo sobre conoci-
exhaustiva, en la que se han tenido en cuenta todos los datos per- miento que ya posee. En la primera le~tu~a, al /,a primera
tinentes y, cuando corresponda, datos desconocidos hasta ese conocimiento que tiene le agrega conocmuento lectura
momento; esta investigación debe haber sido hecha con una nuevo susceptible de asociación. Ese conocimiento .
metodología adecuada, y expuesta con una lógica sin fallos, en nuevo corrobora, modifica 0 altera completamente el conoci-
buen español (o inglés, o francés), respetando todas las con- miento previo. En la primera lectura, usted suele pasar por alto
venciones de cita de fuentes bibliográficas, gramática, presen- algunas ideas del texto leído, porque no las puede contextuali-
tación. Existen recopilaciones de reseñas que le darán una idea zar: Je faltan datos, contexto (recuerde lo que tratamos en el
de qué libros han sido bien recibidos dentro de la comunidad capítulo 4). Sin embargo, al terminar la primera lectura'. su cono-
discursiva correspondiente (hablamos de comunidades discur- cimiento se ha enriquecido: aunque solo haya descubierto que
231
¡ :ÓMO ESCRJBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, !
230 CÓMO ESCRJBIR BIEN EN ESPA-ÑOL
En nuestra actividad lingüística cotidiana manipulamos tex- ezar otro libro, esta vez sobre la historia
Dice Hebe que va a emp
tos continuamente, para construir textos nuevos sobre los tex- de la ciudad, pero que, como de eostumbre, es escéptica.
tos conocidos. Generalmente, resumimos el contenido de los tex-
tos que nos sirven de referencia o punto de partida. Un resumen . d reformulación, tan natural en la
Precisamente _este tipo de d tomamos notas para un
estricto mantiene exactamente la información básica, annque conversación, es inadecua a cuan o
no con las mismas palabras: para nuestros trabajos de investi-
gación es imprescindible hacer resúmenes que respeten rigu- trabajo. . . d b mos aprender a hacer algo dificil: a
rosamente los contenidos del original, resúmenes en los cua- Para resurmr bien, e e .nmiscuirnos en lo que resu-
hablar con nuestra voz, pero a no I , ..
les no se mezcle el texto resumido con nuestras ideas o . De todos modos, siempre habra terg1ver- hablar con
reacciones, que debemos apuntar aparte. mimos. bl r algunas
. . s v por eso es aconseja e toma . nuestra voz,
sactone ' , entre comt- ,, sin
Los resúmenes que hacemos diariamente son mucho más "tasliterales,oretenerene1resumen, . ':ero. .
laxos, y a veces son interpretaciones más o menos libres del c1 los termmos
11 - . .. del texto·' estas citas
e1a.e . nos " •nmucuimos
el resumen en texto aludido. Pero estas in terpretacíones no as,. , 1cuando nos sea necesano re1e- .
la conversación servmm de contro · . Debemos ser transmisores
pueden dejar de retener los contenidos esen- rirnos a ese texto en nuestro ~abaJOc. ríticos Un buen hábito, al
ciales, o al menos algunos contenidos esencia- u] 'no comentanstas o . 1 .
les, del texto que se resume. Pongamos un ejemplo. Mi amiga escrnp osos,} . "as entre corchetes, en e pn-
Hebe me escribe por carta lo siguiente: resumir, es poner las ideas plropl' que dice el texto con lo que
b dor para no mezc ar o , .
mer orra J • deas interesantes o ut1 es,
,
decimos nosotros. As1 rescataremos I. ob· .. 1
Empezaré, o, mejor, debo empezar, un librito sobre «La historia . las por el texto sin poner en peligro la !Je- 11111itir,
sugenc • contknsar,
de la ciudad». Que lo tengo muy cocinado, pero bueno, es
tMdad del resumen. ·, breviada eneralizar
preciso ammrlo, pero siento que las ganas huyen, y me hacen Un resumen es la representac1on a . g
de la información básica de un texto. Al resumir,
235
234 CÓMO FliCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, 1
dencia de este universo de imágenes nada tiene que ver con esa
se elimina. tod~ la información accesoria, ejemplos, notas al
noción de «gusto» que aún domina a muchos artistas en ntte&-
margen, d1gres1ones o d;-talles que contenga un texto, para
tro med}(). («Una conversación con Marcia Schvart1->}, Página
retener solo la mformac10n esencial. Pero resumir no consiste
en •<tachar» unas oraciones del texto y dejar otras, es decir, no /12, 2 de diciembre de 1997.)
p~d~mos resumir directamente sobre el texto: tenemos que
escnb_ir. otro texto. En este nuevo texto, que será el resumen Una de las ideas básicas del texto es que la pintura objeto del
del o~gtnal, aparecerán expresiones que condensen información comentario va en contra de ciertas preferencias más tradicio-
esenctal. ~gunos de los datos eliminados se perderán, pero nales, que pertenecen al «mundo artístico• y a su «gusto,,. Pero
no está dicho de esta manera y de una sola vez, sino en momen-
otros pasara'.' a _formar parte de la información implícita que se
puede mfenr facilmente. Si el original decía: tos separados, y dejando mucho implícito, quizá por ser inne-
cesario, en la situación de producción de este texto, hacer más
Consiguió los materiales conSliltó a sus profesores, conversó
1
aclaraciones. El resumen, al descontextualizar el texto, debe
sobre el tema con sus amigos, se puso a trabajar, se entusiasmó recuperar estos significados, si son importantes.
corrigió su tesis inicial, redactó la monografía y la presentó: Junto a esta idea de conflicto, hay otra idea básica: que esta
pintura es expresionista y poiisémica, plural. Un resumen ten-
dría que tomar ambas ideas, omitiendo lo accesorio o lo que se
un ;esumen que solo dijera «hizo un trab'!jo de investigación•
puede inferir enseguida, como, por <':íemplo, que, si la pintura
se~1a un buen equivalente de ese fragmento, al menos para
es inquietante, opera una transfiguración de la realidad (lo que
qUienes tengan un marco de referencia adecuado y conozcan las
sin duda podría decirse de toda pintura, incluso de la más sere-
etapas de un trab'!jo de investigación.
, En es~ reescritu~a que llamamos resumen el texto original na).
Aparte del error (ya mencionado) de añadir al resumen
aparecera mucho mas breve, en nuestras propias palabras, sin
opiniones o ideas propias, otro error, bastante frecuente, es res-
n:uchos de los datos originales, y condensado con generaliza-
petar el orden del texto, cuando esto afecta la no añadir
cmnes que traten de retener todo lo que, originalmente, estaba
brevedad y articulación del resumen, El resu- opiniones y no
d'.cho con pormenores, o de modo redundante. Para mostrar
men debe retener las articulaciones del pensa- respetarla
como se hacen estas operaciones, tomemos un texto proceden-
miento original, pero no es necesario que man- estructura
te de un artículo periodístico sobre una exposición de pintura: original
tenga la estructura del texto original, ya que es
Desde hace muchos años, la pintura de Marcia Schvartz viene otro escrito distinto, aunque escrupulosamente
fiel al contenido básico -solo al contenido básico- del texto
detonando con brillo propio en e! firmamento del arte argen-
tino. En sus obras, el entorno -referente constantemente trang..
resumido. Cn resumen aceptable de este texto podría ser como
figurad~ ap,.arece corr10 un espt::jo inquietante; por momen- el siguiente:
tosi su~ 1magenes nos alejan del «mundo artístico.- y,
promoviendo rechazos o adhesiones, jamás dejan al espectad~r La pintura de M. S. es expresionista, y presenta una ambi~
índíferen te. güedad entre la ironía y la tragedia, La estridencia de las imá-
Su indudable filiación expresionista implica, no obstante, otra genes contradice la noción de «gusto» del «Inundo artístico»
vuelta de tuerca: una ambigüedad entre la ironía v la trage- argenti110~ y provoca tanto adhesiones corno rechazos. pero
dia que recorre sus cuadros como un potente sopl¿. La estri- no indiferencia.
237
CÓMO ESCRIBIR lJN TEXTO EXPOSITIVO, 1
236 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESP~i:,¡OL
zarlo de varías maneras. Un tipo de organización habitual es la del inglés, manteniendo las letras en negrita y las cursivas, tal
siguiente: romo aparecen en el original:
l. l. INTRODlICCJÓN
A. l. l Antecedentes
l. 1.1.1 Antropologia lingüística
a. 1.1. 2 Gramática fancional
( l) 1.1.3 Teoría de la conversación
(a) 1.%. Convergencias
(h) l.3. Diferencias producidas pnr los datos
(2) 1.3.1 Temporalidad
h. 1.3.2 Implicaciíin en la actividad
2. 1.3.3 Relación con el cuerpo
B. 1.4 Sobre la teoría
ll. 1.5 Una nota sobre formalismo
1.6 Extender lo familiar, anticipar lo desconocido
l.7 Los trabajos de este h'bro
Y así sucesivamente. Observe que ningún miembro puede J. 7.1 La gra1nática organiza la interacción sot.ial
qu~dar suelto, cada uno debe tener un complemento (si hay J. 7. 2 La interacción social organiza la gramática
a. tiene que haber b., etc.). J, 7.3 La gra1nátú:a es un tttodo de ínteratdón social
No es necesario que mantenga tantas subdivisiones, pero sí (E. Ochs, E. Schegloff, S. Thompson, Interactíon and grarnmar,
que mantenga la lógica de la exposición y separe unos puntos Camhridge, 1996.)
esquema e de otros. r:I bosquejo original dejará su estruc-
ínilice tura en el índice del libro o monografia, de
modo que el índice puede leerse primero, El número 1 se mantiene a Jo largo de todo el esquema de ti~u
como un boceto, de principio a fin. Eso hará mucho má' fü.cil lillos porque es el número del capítulo (esta es un~ convencton
e interesante la lectura: si el autor sabía perfectamente, antes de muy usada actualmente). Hay dos m~eles de u tuhlli:s: .lo~ qu~
ponerse a escribir, hasta dónde quería llegar, el lector también van en negrita& diseñan el problema teo;1c~ y me~odolog1co. cua-
debe saberlo, o al menos tener una idea, antes de ponerse a les son los antecedentes del nuevo anáhs1s, que convergencias
leer. A modo de ejemplo, copio los titulillos numerados de un presentan, qué novedades trae considerar otros ?aws (en est~
trabajo de lingüística reciente, que sirve de introducción a un caso, Jos de la conversación, en Jugar de fra.""s escntas mv~ntadas
libro. El libro trata de la gramática de la lengua hablada, es por \os investigadores), precisiones so?re la_ nueva teona, u~a
decir, la relación entre regularidades gramaticales v conversación aparente digresión sobre formalismo, mas teona, y~~ I'.resentac1on
espontánea, tema nuevo y polémico; la introdlic¿ión cuvos titu- de los trabajos. Los titulillos en cursiva son subd1VIs1ones de lo,s
lillos voy a reproducir presenta el asunto, lo conecta ~on tra- temas anteriores. En el tema J, como hay antecedentes de tres on-
bajos anteriores de otr.>S disciplinas, lo explica, destacando su genes, figuran tres apartados, l. J. l-l.1.3. En el tema 3, hay r.r;s
importancia, y finalmente anticipa los contenidos de los capítulos tipos de diferencias producidas por los nuevos datos, Ytamb1en
están desglosadas (I.3.l-1.3.3). Los trabajos que se introducen
del hbro, de una manera muy sugerente, como se verá Traduzco
240
CÓMO f..'>CRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, J 241
se dividen, otra vez en tres (
sean triadas ' grupos no es casualidad que todas A diferencia del ejemplo anterior, en este índice hay sola-
' puesto que tendernos en bo t - d'
tnar las simetrías). Estas tres úl . . ' . e.e. os e In ices, a acen- mente fra.•es nominales, como es corriente. Me pongo como
ciones en ter . !lrnas subd1vis1ones presentan ora- ejemplo para poder añadir que este índice no
. as, con una relación lógica entre ellas· la segu da relación d<!l
e l reverso de la primera, ¡ · . n es coincide con el boceto original de mi trabajo,
E Y ª tercera es la consecuencia que era mucho más complicado y contenía más
irul.ioo con el
ste esquema está inspirado por una estrate ia mu. . esquema
que es la más aconsejable en todo traba' . g. . y sunple, subdivisiones. En el proceso de escritura, el boce- original
primero el estado de la cuestión ( . ~o ubemvers1tano: analizar to fue modificándose y las partes separadas aca-
·que se sa sobre un tema los baron por convergir. Otras fueron expulsadas, porque su pre·
viejas ant.ecedentes), extraer de allí los puntos ~ue
senda no era indispensable. Me costó mucho expulsar temas del
}Jreguntm y hay que CO~pletar o revisar, y proponer un
mm.u nuevo trab":)o. En este caso la no,·edad d boceto: se trataba de uno de mis primeros libros, y me parecía
Pr<guntu.s - ad. escansa que no podía «desperdiciar» tantas horas de trabajo emplear
en an ir problemas que surgen del a :¡- .
de datos qu h b' , na 1s15 das en temas que además me parecían interesantísimos.
Este l'b e no se a ian considerado antes Si duda entre eliminar o no algún tema, haga dos bocetos,
1 ro propone preguntas que ant , ,.
mostrar la continuidad de la investí ac?: no se hac1an'. quiere
nuevas maneras de e 'd
r
g ion, y su evoluc1on hacia
o varios: algunos más abarcadores que otros. Simplemente abra
ons1 erar el tema que ¡ l' varios archivos en la computadora. No es bueno trabajar con un
maneras de hacer lingüística. T mb' ~ , mp ican nuevas solo borrador, especialmente en esta etapa preparatoria, en la
gación deben ser revisio~es d ~ . ien sus trabajos de investi- 1 que no se pueden tomar decisiones definitivas.
to de nuevas pregunia, La: _e viejas preguntas Yplanteamien- Finalmente, elija un boceto y pode todo lo que no se relaciona
sido bien contestada.,:~n ::;r:~~~;~~n':;;obre.todo si han de manera directa con la tesis expresada al principio, No se
Hay esquemas más sim les . P segmr adelante. empeñe en mantener temas que le gustan o le
libros evolucionan hasta 1t aun. Los que suelo usar en mis parecen novedosos o atractivos, si no cumplen
•poda» tkl
esquema
cada capítulo sin subdi .. ega~ a una.numeración corrida en con el requisito de ser indispensables para su
• visiones. Por ejemplo:
argumentación. En los ejercicios que hay al final de este capítulo
Introducción. El mundo entre comillas encontrará algunos bocetos sin podar, para que pruebe la mano.
l. Perplejidades Cualquiera que sea el esquema que elija, recuerde que la
2. Licencias decisión de incluir o no ciertos temas depende de cálculos sobre
3. Ficciones el conjunto de creencias de sus lectores: ya desde el boceto
4. El mundo entre comillas usted comienza el delicado trabajo de contextualización. Las
Capítulo l. La citación reflexiones sobre contextnalízación y sobre coherencia que
l. 1ntertextualidad hemos hecho en el capítulo 4 le serán útiles desde el momen-
2. La cita corno perversión to en que empiece a organizar el boceto.
3. Representación y simulacro Todo el esquema inicial debe resonar con la intención que
4. Uso Ymención de la lengua motiva el trabajo, y el foco de mayor interés es el final, donde,
5. Los estilos directos e indirectos si usted propone una tesis, aparecerán sus con- las rond .
etc. clusiones. Si no propone una tesis, sus conclu- u.sumes
( G. Reyes, Polifania te:xtua/, Madrid, 1984.) siones serán los párrafos finales en los cuales retome y rcfor·
mule nítidamente las ideas que ha ido exponiendo, y que dejarán
243
. O «('nrnIR UN TLXTO EXPOSITIVO, ¡
242 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPANOL coM = ·"'"'
ebe ser elaborado hasta su desenlace
digno de su nombre d urna. Solo teniendo el desen-
cerrado -transitoriamente cerrado- el tema de su trabajo. antes de intentar nada co? la p~demos dar a una histona su
Muchos autores separan esos párrafos del cuerpo del texto y lace continuamente en vista p . de causalidad, haciendo
los presentan como reflexiones finales. aire indispensable de con".'c;:;::~::·el tono de cada part.e del
No siempre tenemos las conclusiones en la mente, claras y que los incidentes, y especia la . tención del autor. (Edgar
distintas, antes de ponernos a escribir, pese a lo que aconsejan . . n desarrollando m . )
trabajo.'"'}ª h'l ph'' ofComposition•.
algunos manuales. En realidad, lo que tenemos o debemos Afian Poe, • The p i oso '
tener son, como se ha dicho, buenas preguntas. A medida que . d e b e resonar con. su
escribimos, y por el proceso de descubrimiento del que ya habla- b ·o escrito ,
La idea de que todo tra ªJ 'd a clave para el escntor.
mos muchas veces, vamos iluminando más di1nensio11es de nues- . líneas es una' e d .,
tro tema, rectificando, proponiendo nuevas preguntas, contes- f•ma1 desde las primeras11 ará a esta reson
anda en la re acnon
b
Claro que solamente eg ribíendo aprenderá, y no "'. ~a e
tándolas. Las conclusiones constituyen el momento más
final del escrito, por~ue ~~mos a llegar a una concluston, _Y
gratificador del trabajo: son la respuesta a esas preguntas, y esa
todo antes de escribir. S . se librará de una de las .mas
respuesta se incorpora a un conjunto de conocimientos, adquie-
sabemos cuál es, nuestro escn~ ·o~ escolares: la falta de d1rec-
re generalidad, despierta nuevas posibilidades de investigación.
frecuentes desgradas de los tra u":;reada, con párrafos que en
Las conclusiones son también aperturas. Recuerde que una . ón que produce una prosa . hacia el desenlace o las
conclusión no es un resumen aburrido de lo que ha dicho, sino C' ' . rído am1omoso .d U
lugar de seguir su recor v casi carentes de sen U o. n
una respuesta, una generalización, y un planteamiento, explí-
conclusiones, qued~n s)u~lt~~r~cción sin un foco que alurr~bre
cito o implícito, de nuevas preguntas.
texto (de cualquier tipo slil . . ocd eficaz. Ninguna bel eza
Para llegar a las conclusiones con felicidad, usted debe un camino, es un texto debil y P !ir la falta de vigor de la
saber hacia adónde va en cada momento de su trabajo. Un estilística ni orname.nto puede sup
texto expositivo no es una excursión en territorio completa~ estructura de contemdos.
mente desconocido. La orientación de su texto tiene que estar
presente desde el principio, y le dará sentido a todo lo que )'ECfO DE ¡N\fESTlGAC!ÓN
usted vaya diciendo. (<Orientació11~, significa, simplen1ente, CÓMO ESCRIBIR UN PRO
«qué preguntas quiero contestai·,,. Otras veces, ya sabe bastante
. . . n es un escrito que se exige en
bien qué va a decir al final, porque ha pensado el asunto mucho Un provecto de ínvesugacio 'micas Tiene, por lo gene-
mientras tomaba notas, hacía esquemas, y esquemas de esque- , d becas o ayudas econo .
mas ... las solicitudes e bl · 'do de pá<Tinas, y cier- estructura del
, ro preesta eci ,,- l
En un curioso tratadi to, titulado ·Philosophy of Com- ral, un nume. , fi' d Los proyectos sue en proyecro
ta organizacion pre 'Jª a.
position,,, Edgar Allan Poe explica minuciosainente el proceso
constar de tres partes: .
la resonancia de escritura de su famoso poema "Thc Raven» r .te de palabras)
del.final (•El cuervo»). Lo primero que dice es que no a. título (a vece~ con m~ás de 100 palabras)
se puede comenzar a escribir un relato (o un b. resumen (casi nunca
poema narrativo, en su caso) sin saber su desenlace con antici- e desarrollo ,
. . como este de todos los demas
pación: 1 o que diferencia a un escnto <lactarlo antes de saber
. . ue hay que re
escritos académteos es q
Nada está más claro que el hecho de que cada argumento
J
l
245
CÓMO ESCR!BlR UN TEXTO EXPOSITIVO, 1
244 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
tectónico de la ciudad de París, por ejemplo, puede ser juzga-
todo lo que habría que saber para reda . do por personas procedentes de historia, lenguas clásicas, lite-
to, de describir con cierta P .. , etario. Se !Tata, en efec-
se ha hecho, para que otros rec1~~n un trabajo que todavía no ratura, filología. .. Tenemos que hacer creer a esas personas que
ceder Ja ayuda. cons1 eren si vale la pena o no con- nuestro proyecto es valioso, aunque no salte a la vista, espe-
cialmente a Ja vista de los profanos. Usaremos procedimientos
Las preguntas que hay que hacerse . . más o menos directos, pero nunca autoelogios, que quitan auto-
yecto son la' siguientes: para escnb1r un buen pro-
ridad al autor de un proyecto. El encarecimiento del propio
proyecto debe hacerse lo antes posible, y de la manera más con-
1· ¿E~ qué consiste el trabajo ue ro ; ,
2. ¿Como lo voy a realizar' (M'l dp pongo. (Nucleo) vincente posible. Veamos.
Supongamos que lo que proponemos es un estudio sobre la
3 ·C • · eto os)
4. < on qu_e otros trabajos se conecta? historia de Guinea Ecuatorial. Podemos comenzar con un resu-
5. ¿Por qué creo que e~:Ct~~b~ par~ hacer este trabajo?
· cPor que me creo ca · d men de la evolución de Guinea: su etapa colonial, su situación
,o es importante? presente, Ja degradación de su economía y su cultura. Al hacer
este resumen, iremos destacando los elementos que nos inte-
. El proyecto de investigación re . ..
ugación previa, y una pla ífi .. qme~ reflex1on, cierta inves- resen para lo que vamos a proponer después, por ejemplo cómo
n icanon cuidadosa Tod . . funcionaba Ja economía de la colonia, qué cambios se produ-
mJcleo del dor, si ha pensado en un te~ o ldnvestiga- jeron después de la independencia. En el segundo párrafo,
proyecto pregu tas · a, pue e hacer
. n mteresautes sobre ese tema: hay que
podemos decir algo así:
parur de esas preguntas D 1 .
preguntas dependerá en an : e a calidad de las En los estudios sobre Guinea Ecuatorial, suele decirse que
eso no es suficiente· deb gr pafrte la cahdad del trabajo. Pero este estado es una .. cambodia sin ideología• y se ha prestado
. emos o recer respu ta
a e~s preguntas, en forma de hi - .
..
es s provmonales mucha atención a la psicopatología de su presidente, Francisco
explicar cómo se ''ªn a pr b
·
pot~s1s. Luego, es necesario
o ar esas h · · . Mací35 Nguema. Mi trabajo se opone a ese enfoque, que es
s1ones se quiere llegar. 1potes1s, y a que conclu- demasiado ingenuo. Parte de la explicación del retroceso de
Ahora bien, p ara que ese proyecto así d . Guinea debe buscarse en la estructura de la economía colo-
un grupo de personas d . . .' . escnto, convenza a
e que tiene mentas suficientes ha nial.
tXJneXión ron conectar
· el tema del trabªJº . con otros y que
, temas
otros
~• temas
• y conocidos,
· · . hacer notar eua·¡ es su mteres . . su A esta introducción debe seguir una buena explicación de
"""ª"" 0 1
ngma 1dad , 0 'me
·
hay que relacionarlo .
l uso, su necesidad
.
T b'.
'
. am ien
la tesis del trabajo, siempre contrastada, implícitamente, con
trabajos del mismo investigador e , s~ ~s posible, con otros
los estudios «ingenuos• a Jos que se aludió al principio. También
se hará notar toda novedad metodológica. En el ejemplo de
bajos hechos en su labor.u . q': solicita la beca, o con tta-
c6mo r . or'.o o umvers1dad, pues de esa maue- Guinea, lo nuevo podría ser que el autor de Ja propuesta se
enazn:cer la . a se pondra de relieve que esa es la propone realizar entrevistas personales en dicho país, con el
importancia ideal y ese ~sel lugar ideal para llevar a tu:~~: objeto de recoger testimonios sobre los acontecimientos que
del trabajo mmo ese tipo de investigación. e- tuVieron lugar en los últimos veinte años, y que están poco docu-
. Las personas que ev 1.
siempre expertas en la mat . . . a uan propuestas no son mentados.
ena,muenenp · 1 Una vez desarrollado el proyecto, deben indicarse 135 con·
e as humanidades u or que ser o. Dentro
d 1 ' n proyecto de estudio del d'1seno - arqm-.
247
246 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, 1
'd u interlocutor. Una impli-
hablante considera ya conoci a por s . l' . nte de lo
clusiones provisionales en un contexto lo más amplio posible. . lgo que se sigue ogicame
cación es, en cam.,b 10 • ª " AJosefina
En el ejemplo que estamos esbozando, podría explicarse que el p · mplo en 1a orac1on <~
dicho en una oracion. or eje ' . de
trabajo sobre Guinea permitirá conocer el papel de las ideolo- el marido le regaló dos anillos>> se presuponen una s~r1e .
gías tradicionales en el África actual, contribuirá a los estudios . l existencia de una persona llamada Josefina, a ex1s-
sobre la dependencia económica de África, echará nueva luz cosa~. ; su marido etc Las implicaciones, que pertenecen a
tenc1a e ' . ue el marido regaló algo, que
sobre la ruptura de relaciones neocoloniales entre un nuevo la oración, son en este caso q l' d s) etc El hablante
estado y su antigua metrópolis, etc. Importa tanto el trabajo e aló un anillo (puesto que rega o o , ...
concreto que va a realizarse como sus proyecciones y su interés r g . ado en cuanto a las presupos1c1ones, pero
puede estar equ1voc .
para una o varias disciplinas. no en cuanto a las implicaciones lógicas, precisamente por-
Finalmente, cuide el vocabulario: trate de ser preciso sin que son lógicas.
usar expresiones técnicas que puedan resultar incomprensi-
bles a un profano. Recuerde que su trabajo será b) Son los hablantes los que hacen presuposi~iones, no las or;,;
el estilo
leído por personas cultas e inteligentes, pero no, . Un hablante puede presuponererroneamen.te.~ueE.
c1ones. · opinion n
necesariamente, por expertos en su campo. En cuanto a las interlocutor posee un conocimient~, cree~~pªii~aciones Íógi-
demás características de la redacción, vea lo que decimos en el mbio son las oraciones las que tienen I . . <
Ejercicio 1
La lectura. Haga una prueba, que puede ser divertida. Lea Ejercicio 2
el texto (a) sin leer el texto (b), y tome notas sobre (a). Luego . los sim1ientes esquemas van
El esquema prdiminar. lmagme que o- , . d ble
lea (b) y reconsidere cómo leyó (a) y si sus notas reflejan lo que a servir para preparar monografias de unas 25 pagmas a" ~de-
usted entiende ahora que ha leído (b). Ambos son fragmen- . . l . das Lea los esquemas atentamente y P
espacio, notas inc u1 . arezca esencial. Para eliminar
tos del mismo artículo, donde aparecen en el mismo orden
los», quitando todo lo que no le P 1 . así sabrá cuál
que aquí, con una diferencia de pocos párrafos. Leyendo este . rimero las conc us1ones, y
correctamente, mire p - . t Luego observe si los
texto completo, usted se hubiera encontrado con las ideas es la dirección del texto y su propos1 o. " . nas ar-
expuestas de esta manera y hubiera tenido, quizá, que revisar . demasiadas ramificaciones, y tambien s1 algu P
sus notas, si las iba tomando a medida que leía. Moraleja: siem- ~:::~:~~=ema no son demasiado larg.as'. en relació·n1con l:;
pre lea todo el texto antes de tomar notas, y, dentro de lo posi- e al ehmmar matena pue
otras partes. Tenga en cuenta qu ue ha varias
ble, léalo dos veces. reor anizar completamente estos esquemas, y q y
a) En relación con los significados efectivamente comunicados por reor~anizaciones posibles y aceptables, ~obre t~do ~7;;~~ ;;~~
mos jugando con unos temas que no emos mve
un discurso, podemos distinguir entre presuposiciones e impli-
caciones. Se llama presuposición a la información que el mente.
248
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAr\;< JI ( X°>MO ESL1UBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, l 249
ESQUEMA 1
Tema del trabajo: La enseñanza bil' ., 3. Los factores
Estados Unidos mgue (espaiiol-inglésí en ¡01 3.1 La herencia
1 3.2 La alimentación
_· Qué es la enseñanza bilingüe
2 La enserianza bilingu· e es necesaria 3.3 El estrés
2-1 Ca~o de los niños hispanos 3.4 Tratamientos exitosos del estrés
2 3.5 Nuevas recetas de cocina
2 .32 NE mos ck Otras partes del mundo
· valuaciones hech . 3.6 Incidencia en la industria alimentaria
2.4 Evaluaciones h ·has por a~tondades educativas 3. 7 Los controles gubernamentales sobre los alimentos
3. Ataques a la e . ec as en paises europeos 3.8 El tabaco
nsenan2a bilingüe
3.1 Razones didácticas 3.9 Actitud de las grandes empresas tabaqueras
4. El tratamicuto
3.1.! !ncapacl'.tación de los alumnos para apren- 4.1 Educación pública
er ing es
3.1.2 4.2 Dieta equilibrada
Deficiencias de los maestros
3.1.2.1 Evah · · 4.3 Ejercicio tísico
E 1ac1on de los maestros de California 4.4 Alcoholismo
3.1.2.2 ncuesta de 1992
3.1.2.3 Suge · 4.5 Evaluación de la psicoterapia
tr . re¡ ncras para preparar mejor a los maes- 5. Conclusión: Los tratamientos actuales son deficientes por
os. e caso sueco 1
3-1.2.4 El caso de Méiico y la - falta de información.
. d'1genas
in , ensenanza de lenguas
3.2 Razones políticas Ejenicio 3
3.2.1 Xenofobia
El resumen. Haga un resumen del siguiente texto. Suponga
3.3.2 Costos
que está tomando notas para un trabajo sobre los diminutivos en
3.3 Resumen de los ataques
3.4 Respuesta a los ataques español, y que quiere tener un resumen del trabajo clásico de
4. Conclusiones: necesidad de un . - Amado Alonso, para utilizarlo después. Transcribo solamente un
ñan7.a bilingüe. nuevo diseno de la ense- fragmento, del cual he eliminado algunas líneas, en los lug.u-es indi-
cados con puntos suspensivos entre corchetes, Su resumen debe
ESQUEMA 2
tener una extensión de diez o doce lineas de te.xi.O mecanografiado.
Tema del t.rabaio· r. --,..,;;, .. .
" · ues,,,,,aon Y eualuaa • de tos
ks a los PacientR.s con wksterol on tratamientos actua,. El diminutivo destaca su objeto en el plano primero de la con-
l. El fenómeno·· que• es el colesterol ciencia. Y esto se consigue, no con la mera referencia lógica al
2· Los datos
o~jeto o a su valor, sino con la representación afectivo-imagi-
2 · 1 Indice de mortalidad
naria del objeto. Hay preponderancia de las representaciones
2.2 Comparación tr • de la fantasía. Y como la fantasía sólo acude agudizadamente
2.3 La dieta d' en :~ paises ricos y pobres
me iterranea conjurada por la emoción, por el afecto y por la valoración
2.4 El vino tinto
del objeto, aquí convergen la interpretación del diminutivo
2.5 El procesamiento de Ios alimentos originario como una individualización interesada del objeto y
la que ve en él el signo de un afecto.
l
250 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CDMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, l 251
He Ueg~do a la convicción de que a través de todas sus espe· diminutivo conlleve la idea de aumento o de grado alto; pero
aahzac1ones conocidas, nuestros sufijos han conservado siem~ ha de verse si esa variante conceptual está significada por nues-
pre este pap.el destacador del objeto, su fünción de pensarlo tro sufijo o por otro procedimiento: andaba d.espacííiito, p~ede
representac1onalmente refiriéndose a su agudizada valora- significar 'muy despacio', pero lo hace con el alargam1ento
ción. [... ] de la vocal acentuada, no con el suftjo. Lo mismo da andaba des·
Como contenido conceptual se señala para el diminutivo !a páaacio. Quizá haya algunos ejemplos que me hagan ~ambi~
significaci?n de empequeñecimientot la de referencia a obje- de opinión, pero los presentados hasta ahora han sido, sm
tos pequen os como clase, y, por fin, la contraria de aumento. excepción, mal interpretados. (Ante todo, es inútil estudiar
Respecto a la significación disminuidora, sólo he de añadir el valor estilístico de un diminutivo aislado de toda !iltuadón
que, a pesar de haber dado lugar a la denominación de düm~ real, como generalmente nos los presentan.) Enrre usted des·
nutiuo, es con mucho la función menos frecuente~ tanto en la pacita, uaya deprisita no suponen más lentítu~ ní más celerida_d
lengua escrita como en la oral; cnalquier recuento convence- que despacio y de prisa-, son simplemente mas corteses o mas
rá al lector de que el uso más abundante del díminutivo es el recomendativos. Son diminutivos dirigidos hacia el prójimo y
de las funcio11es emocional, representacional y activa de que no tienen nada que ver con d.espaci.a o de prisa. Es como decir:
luego hablaremos. Cuando el sentido central es realmente el de 'de prisa, ¡por fuvorl, bittel, picase!'. Ningún español va a inter-
disminución, se suele insistir en la idea de pequeñez con otros pretar me gusta to. sopa calentita como 'muy caliente'; el dimi-
recursos (una wefita pequeiio., una cosita de ¡uufa, etc.). Es raro, aun- nutivo insiste afecüva y representacionalrnente en el ca)or Y
que perfectamente idiomático, encomendar exclusivamente en el gusto. [ ... ) La función de estos sufijos, lo mentado en
al diminutivo la idea de tamaño reducido. ellos, no es nada referente al aumento de lo nombrado, sino
No he conseguido ver un ejemplo español en el que esta clase a lo que nos afecta: visión agudamente subjetiva, (Amado
de sufijos tenga un indudable oficio aumentativo, como se lee Alonso, «Noción, emoción, acción y fantasía en los diminuti-
~cada paso, o de superlativo [... ]:despacito, dlpri.sita, cerquita, vos», en Estudios lingüísticos. Temas españole.<. Madrid, 1954.)
1urmtos, blanquito, callarulüo, etc., como 'muy despacio', 'muv de
prisa', etc. García de Diego, comentando a Spitzer, ya obs~rva
Ejercicio 4
que se trata (a veces, tenemos que limitar) de ponder<ltivos. «En
el grupo de deverbatívos es donde se ve daramen te que la Expansión di! un resumen. En los siguientes textos'.. se ba omi-
ponderación de las acciones violentas da por resultado un tido todo lo que no es esencial y todo lo que puede anadirse gra·
aumen:ativo: ~ón, reventón~ vomitona, lntentQ1la, a trompicones, cias a nuestro conocimiento del mundo y nuestros marcos de
a roiJm1ones, mientras que la ponderación de las cualidades 0 referencia sobre actividades, procesos, situaciones. Trate de
acciones de recogimiento producen un diminutivo: madosito expandir el resumen, añadiendo lo que imagina que form~b~
callandito, a sentadillas, a juntillas» ( RFE, IX, 76). ' parte del texto original, y que en este caso usted. debe ad1v1-
La i?ea ~e ponderación es a veces cierta, en tendiendo por tal nar (en sus trabajos de investigación, el resumen, idealmente,
un enfas1s del afecto y un realce de la representación. Pero tiene que refrescarle la memoria y hacerle recordar lo que
no veo que contenga u11 'muy' como variante conceptual en leyó, aunque nunca recordará todo el texto).
correspondencia con una modificación objetiva. La idea de
aumento o la de superlativo, ya abiertamente referida al con- a) Prepare la espinaca y cuézala. Haga una salsa blanca. Mezcle,
cepto, ya a variaciones del objeto, me parece poco sostenible condimente a gusto, y luego vaya cogiendo la preparación
para el español. No niego la posibilidad de que una palabra en con una cuchara y fría con abundante aceite.
252 CÓMO ESCRIBIR BIE'l EN ESPAÑOi.
b) Lita dice que sus clases de inglés van de mal en peor, por
culpa del profesor.
e) Paras~ t:sis, eligió un tema atractivo y asequible, compiló
una bibhograña completa y leyó casi todo, antes de hacer
el esquema preliminar.
l CAPÍTULOS
CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, Il
l\jrrcicio 5
(Redacción, estrategias, revisiones)
fil res.umen. Póngase de acuerdo con uno o más compañe-
o
n'.~ amigos, lear_i todos e_l mismo texto, y haga cada persona su
EL PRIMER PÁRRAFO
'' snmen. Despues comparen los y discutan los méritos y defec-
t<1s de cada resumen. ' Redactar un texto académico es un proceso en que rees-
trucmramos, transmitimos y renovamos los conocimientos adqui-
ii¡rttcicio 6 ridos durante la etapa preliminar de investigación. Empezamos
. /1'/ esquema pr-~limiriar. Póngase de acuerdo con uno o más i a escribir teniendo ya un esquema del trabajo, más o menos
detallado, y una idea muy clara de su tema, su tesis si corres-
111teresados, y eh¡an entre todos un tema qne les guste 0 sobre ponde, sus conclusiones provisionales, el grupo de lectores a
d cua'. ya ~be'.' algo o quisieran saber algo. Sin hacer ninguna qnienes nos dirigimos, y lo que qneremos lograr con el escrito.
mv~stlga~ton, i~tenten i.;n boci;to. preliminar para un trabajo «No sé cómo empezar», dicen los alumnos. Si no se le ocu-
posib.le, impome'.'dose ciertos limites bien claros (qué tipo de rre nada, copie el resumen que encabeza su esquema del trabajo.
ll abajo, que finalidad, cuántas páginas, etc.). Luego comparen Ya habrá empezado. Pero hay muchas maneras de iniciar un
y discutan sllS esquemas. texto bien planeado. Usted puede comenzar por cualquier parte
del trabajo, siempre que mantenga una idea del conjunto. El
nmuoGRAFíA orden en que se escribe una monografía es un asunto perso-
MÍRIAM AL~AREZ, Tipa> de escrito, Il. Exposición y argumentaculn. Madrid. nal. Hay quienes escriben al principio lo que conocen mejor y
Arco/Libros, 1995. les es más fácil, y dejan para el final los puntos que requieren más
lJ\iBl:'.R:? EL'O, ~óm,{i se ~ace una tesis. 1iicnica.s y procedúnientos de investi- esfuerzo. Otros atacan primero lo difícil. Otros hacen un borra-
g~cton: estu~d:o y escntura. Trad. esp. de l~ucía Baranda y Alberto dor de todo el trabajo, dejando lagunas aquí y allá, para sentir
Claveria lbanez, Barcelona, Gedisa, 1977. que tienen el conjunto bajo control. Probablemente lo último
JOSEPH GIMLDI, A1LA Flandbookfiar Writers º'&sea-'- na,.... 4' ed N , que todos redactamos sea lo que el lector va a ver primero: la
y, k M " """, ""'"' . ., ue-.a
. or , odem l_.anguage Association, 1995. introducción, ya que, para presentar bien el trabajo, es mejor
WUJ.IAM_ GRABE Y. RoBERT B. KAPLAN, Theory muí Proctice of Writing, An
.4pplied !~nguHtü: Pmpeaive. Londres, Longman, 1996. tenerlo terminado.
En este apartado vamos a leer y comparar algnnos comien-
RAFAE.L N(~ y ENRJQUE DEL TESO, Semántica y pragmática del texf-0 Mmún.
Producaon y comentario de texf.ru. Madrid, Cátedra, 1996. zos de escritos expositivos, aunque sepamos que no fueron escri-
MARÍA TERESA S~~INI, Có,mo redactar un tema. Didáctica de la escritura. tos necesariamente antes que el resto del trabajo. Son párrafos
Barcelona, Pa1dós, 1989. importantísimos, que presentan todo lo que viene y establecen
la primera imagen del autor ante los ojos del lector.
254 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CÓMO ESCRIBIR U1' TEXTO LXPOSIT!VO, ll 255
Así comienzan las «Advertencias preliminares• de un libro o escritor de sí mismo, creando un correlato en su invisible
clásico, la Historia de la kngua española de Rafael Lapesa: interlocutor. El autor de este párrafo presenta su obra no como
un logro sino como el resultado de un deseo. Más la curtesía
La presente obra ha sido escrita con el deseo de ofrecer, en abajo se refiere a su trabajo como «mi intento•. La
forma co1npendiada, una visión histórica de la constitución y humildad queda realzada por el hecho de que no existía obra
desarrollo de la lengua espaiiola como reflejo de nuestra evo- semejante en español, y el hecho de que fue escrita en años
lución cultural. Dirijo mi intento a todos cuantos se interesan muy difíciles para la investigación. Este conocimiento puede o
por_ las cuestiones relativas al idioma, incluso a los no espe- no tenerlo el lector: si lo tiene, las palabras citadas adquirirán
cializados. Por eso me he esforzado en satisfacer las exigen- mayor significado. En prólogos posteriores, el profesor Lapesa
cias del rigor científico sin abandonar el tono de una obra de relata las circunstancias en que se escribió la edición original de
divulgación. (R. Lapesa, Historia de la leng;ua española, prólogo este libro, y su evolución de obra de divulgación a importante
de la primera ed., Madrid, Gredos, 1942.)
empresa filológica.
Veamos otro encabezamiento. Así empieza el primer capítulo
Este encabezamiento presenta los siguientes temas: de un libro sobre el castellano en España y en América:
- indicación del tema del trabajo Ha dicho Bernard Shaw que Inglaterra y los Estados Unidos
- evaluación de ese tema están separados por la lengua común, Yo no sé si puede afir-
- especificación del lector textual marse lo mismo de Espaiia e Hispanoamérica Pero de todos
- alusión a rasgos de factura o estilísticos modos sí es evidente que el uso de la lengua común no está
-cortesía exento de conflictos, equívocos y hasta incomprensión, no
solo entre Espaiia e Hispanoamérica, sino entre los mismos
En cuanto al tema, aquí se presenta como «una visión his- países hispanoamerícanos. (A. Rosenblat, Nuestra leng;ua en
tórica de la constitución y desarrollo de la lengua española». ambos mundos, Estella, Salvat, 197L)
temas del No se nos dice <(una historia•>, que sería más
encabezamiento ambicioso~ sino «Una visión» histórica, aunque Se ofrece aquí también, como en el caso anterior, una expo-
el. título del libro, que debe ser más breve y sición del tema, y una evaluación. El comienzo con cita humo-
contundente, utilice la expresión «bistoría de la lengua,,, La rística es muy apropiado para atraer al lector, y de
el humor
lengua se presenta «Como reflejo de nuestra evolución cultu- paso encuadra el problema de las comunidades
ral», lo que evalúa la importancia del tema, al asociar íntima- unidas y a la vez separadas por la misma lengua La mención de
mente lengua y cultura. Esto queda dicho con notable senci- conflicto es también un modo de incorporar al lector al terna y
llez y concisión. de realzar su importancia.
Se nombra, como en muchas piezas preliminares, el tipo No hay aquí referencia al auditorio, ni explicaciones sobre
~e lector al que está, dirigida la obra.. y se explican las caracte- el tono o características de la obra, como en el caso anterior. La
nsl:lcas de esta (aqm, su tono) en relación con ese auditorio. cortesía se manifiesta con una actitud de sonriente incerti-
Se afirma, al pasar, la posibilidad de escribir una obra de divul- dumbre: «yo no sé si ... », incertidumbre que es un modo de
gación con rigor científico. ponerse a la par con los lectores, para empezar juntos a explo-
La cortesía es, como dijimos, la imagen que da el hablante rarun cerna.
257
¡~">MO ESCIUB!R UN TEXTO EX.POSITIVO, 11
256 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOi
.1
261
260 C'.ÓMO ESGRJl!IR BIEN EN ESPAÑOL CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITJVO, 11
¿en prúm1ra institucional: véase el capítulo siguiente), y, sobre ducción y las conclusiones. De ahí que en la introducción apa-
J-'Sona, en todo, es muy frecuente: ambos son méritos, ya rezcan tanto futuros como pasados:
tercera que estamos buscando la mejor vestidura para la
J-'Sona ... r voz que habla cuando escribimos, y queremos - •en este trabajo se ha intentado presentar...»
que sea autorizada por el uso, y capaz de esta- - «en este trabajo intentaré presentar... »
blecer una buena relación con el tú que lee.
Algunos sienten que la primera persona es demasiado osten. Por supuesto, debe mantenerse Ja cohesión entre las for-
tosa, y otros, en cambio, nos sentimos más cómodos expre- mas verbales; elija entre futuro, pasado o incluso presente, Y
sándonos por medio de un yo, como en la lengua hablada. no cambie. Ese tiempo es ficticio, de todos modos, po~que 17'ted
T~bi~n hay escritores que tratan de evitar ambas formas, y retocará muchas veces sus primeros párrafos, y retocara al nusmo
de hm1tarse ª.una recatada tercera persona impersonal, que tiempo otras partes del trabajo. Por lo general, nos debemos
les parece mas modesta y propia: «en este libro se trata ... •, proponer que en nuestro escrito expositivo no queden huellas
«como se verá... » Pero es difícil mantener esa impersonalidad temporales del proceso de escritura, ya que _ese aspecto moles-
a lo largo de todo un escrito, por lo que, generalmente, las taría al lector, que va a leerlo en su propio uempo.
formas con se se encontrarán en alternancia con la forma noso- Más importante que empezar por un sitio o por otro es tene~
tros. todo en vista al escribir v, a la vez. escribir cada parte como si
Algunos estudiantes creen que si se comienza a hablar en fuera la única: con atenciÓn y calma, sin prisa por seguir con otra
primera. persona singular, no se puede pasar al plural o a las cosa. la ansiedad, nos dicen los psicólogos, es el miedo a per-
formas impersonales. No es así. Si un escrito presenta a su der algo que todavía no se ha perdido: al escribir, nos par~ce q:1e
autor o autora con un yo, las formas de nosotros que aparez- no vamos a terminar a tiempo, que no debemos desperdiciar mn-
can tendrán el efecto de incluir al lector en lo que se dice: guna idea ni postergar nada, nos sentimos en situación de peli-
(<como he dicho arriba>), pero -<<varnos a ver ahora», es decir gro. Pero es más provechoso y eco~ómico co~centrarse en una
.
' vamos a ver Juntos, usted y yo'. Se trata de un plural inclusi-' cosa a la vez, aunque podamos depr para mas tarde los refina-
vo, muy común en la exposición escrita y oral. como la de con- mientos estilísticos. En las sugerencias generales que se enc~e'.'
ferencias y clases. La ocasional aparición de la tercera perso- tran al final de este libro, comparo este proceso de escnb1r
na no hará más que dar variedad al texto, si es necesario. parte por parte con el proceso de armar una bicicleta.
Mantener la tercera persona exclusivamente puede dar por
resultado un texto distanciado, seco, por la aparente ausencia Pregunta 3. ¿Cómo se hacen y para qué se hacen las citas literales?
de diálogo con el lector.
es necesario. El único error es poner en las notas lo que debería v., vid.: véase.
estar en el texto, y. por supuesto, poner en el texto lo que debe- vol., voh.: volumen, volúmenes.
ría estar en las notas, o, simplemente, fuera de nuestro trabajo.
Si citamos nuestras fuentes de manera condensada, en el Pregunta 6. ¿Cuál es w mejar manera de hacer referencias bibliográ-
texto mismo, podemos evitarnos las notas al pie de tipo biblio- ficas en el cuerpo del texto?
gráfico, que, como veremos enseguida, no son cómodas para el
lector. La mejor manera es citar por el apellído del autor y el año
Lo que vengo llamando «notas al pie» podría ser llamado de publicación del libro, o bien por el apellido del .ªu'.or sola-
también «notas de fin de capítulo» o «de fin de libro», ya que no mente. En la bibliografía final se ofreceran las referenc~as c?;n-
siempre las notas van al pie. La decisión suele ser de la editorial pletas, con titulo del libro o artículo, duda~ de pubhcac1?n,
o de la redacción de la revista. Cuando podamos elegir, tengamos editorial, número de edición, número de volumenes, etc. S1 se
cita en not.'l. al pie, poniendo todos los datos cada vez, el lector
en cuenta que las notas al pie son más cómodas porque están a
la vista junto con el texto, pero que, por eso mismo, interrum- tendrá que recorrer varias notas para encontrar ¿cómo se
pen la lectura. Cuando están al final, suelen leerse después, por (o no encontrar) la cita que busca. Cuando se hacen
comodidad, y eso las hace más prescindibles, también. cita en nota al pie varias veces la misma fuente, referencúl.s
se pone, por lo general, el apellido del autor bibliogrtifiaJS?
En las notas se usan en abundancia una serie de abreviatu-
ras convencionales. A continuación hago una lista de las más fre- seguido de la expresión ob. cit. (obra dtada1, lo , .
que significa que los datos completos estan mas arriba. Esto
cuentes.
también es incómodo para el lector.
A veces, el año de publicación de un libro ~a lug.ar a confu-
siones, porque la edíción original es mucho mas ann~ que la
ABREVIATURAS M.4S FRF.CUENTFS E.N l.OS TEXTOS EXPOSfflVOS
art.cit.: artículo citado. edición por la que citamos, o bien citamos por la vers1on e.spa-
ca.: circa (alrededor de, hacia). ñola de una obra publicada años antes en otra lengu.a Si los
cf, cfr.: lat. amfer, compárese. años interesan para la argumentación, h~y '.lue cons.1gnarlos
ed.: edición o editor, editora. todos: el de la edición original, y el de la edic10n que utthzamos.
et al.: lat. et alii, y otros (se entiende, otros colaboradores).
ibíd.: ibídem, en el mismo lugar.
Pregunta 7. ¿Cómo se subdivide el texto?
íd.: ídem, el mismo (se entiende. el mismo autor).
l!JC. cit.: lat. loco citato, en el lugar citado.
N. del E., N. del T.: nota del editor, uota del traductor. Cuanto mejor subdivida el texto, más co~pren~ible y con-
ob.cit., op.cit.; obra citada. vincente será su trabajo, pues se verán las artlculac1ones de su
pág.• págs., p., pp.: página, páginas. pensamiento. y el lector se sentirá guiado por ¿romo se
pá•s.: pássim, eu varios sitios, en distintos lugares (de un texto). usted durante la lectura. Por lo general, el texto subdivide un
sig., sigs., s., SSw: siguiente, siguientes. de una monografía se divide en apartados con texro?
s.a., s.d.: sin año, sin datos (de edición). números y titulillos, que, como hemos visto, refle-
s.v.: sub voce, en el artículo de diccionario correspondiente a jan en parte o del todo el boceto original sobre el cual usted tra-
la palabra tal baja.
266 CÓMO ESCRIBIR l,;N TEXTO EXPOSITIVO, JI 267
CÓMO ESCRIBIR BIE1' E1' ESPAÑOL
Toda subdivisión es una jerarquización de los ternas, y por tor ve el esfuerzo del autor por ser claro y por no perder al
lo tan~o muestra la lógica que ha guiado la redacción, que puede interlocutor por el camino, es probable que se sienta más invo-
s._:r _la impues.ta por la cronología (sí usted escribe un trabajo hís- lucrado en el texto. Nada de esto sirve, sin embargo, si el texto
tonco, por ejemplo) o por las causas o efectos de unos hechos es embrollado, enrevesado, ilegible.
sobre otros', o por la inducción o deducción de significados. Si Un lenguaje biensonante, un estilo atractivo, simple, \igo-
su trabajo sigue una lógica inductiva, presentará ideas 0 datos roso, sin repeticiones, sin palabras de má•, ilumina y hace inte-
Ysa~ará de allí conclusiones generales. La deducción procede resante cualquier tema. Evite el vocabulario rebuscado, los
a_ la m;ersa, p~rtlendo de una ley general, y mostrando instan- abominables clichés, y otros males del estilo que recojo en
cias. C n trabajo mal argumentado no sirve, aunque la idea cen- mis sugerencias finales (Apéndice [). Para escribir bien y para
tral sea correcta, (Vea el apartado «La argumentación» en el ser leído bien hay que usar buen español, vivaz, flexible, varia-
capítulo anterior.) ' do, sin errores ni lapsos que distraigan la atención o confun-
dan.
Pregunta 8. ¿Cómo roitar ser dificil de ker; o aburrido? Tenga mucho cuidado con las erratas y con los descuidos
tipográficos (mayúsculas, comillas, signos convencionales). Toda
señal de dejadez en el texto tiene un efecto ponwñoso sobre los
Si un texto parece dificil o aburrido, es porque el tema es lectores, que no se sentirán estimulados a leer algo que su autor
muy abstruso, o quizá porque al lector no le interesa ese tema (o el editor) no se molestó en presentar esmeradamente.
¿cómo evitar Y no tiene energía para caneen trarse. O bien Una última observación. Si quiere evitar la prosa pesada,
ser difícil o porque el texto está mal escrito. El escritor debe no escriba nunca párrafos de una página, y, si quiere evitar la
abunid-0? hacer lo posible por hacer comprensible lo difí- prosa cortada, no escriba párrafos de una sola oración. Trate de
cil y por facilitar la lectura. que todos los párrafos se parezcan en el tamaño, de que no
Para evitar escribir un texto inaccesible, hay que ser claro y sobrepasen las quince líneas, y de que no comiencen por la
ordena?º· hay que saber bien de qué se habla, hay que hacer un misma palabra o giro. E intente que cada párrafo invite a leer
buen cálculo de los conocimientos previos del lector, y hay que el siguiente: que cada párrafo cierre una idea pero deje abier-
mostrar gu~to por lo que se escribe. Quien parezca aburrido to el interés por algo más.
de lo que dice no va a entusiasmar a ningún lector.
Hay varias estrategias para captar y mantener la atención
Ei~tre ellas figura la de hacer explícito, en alguna medida, ei Pregunta 9. ¿Está bien usar metáforas~
dialogo que estamos man teniendo. Las referencias al texto
compartido por ambas partes, son muy útiles: «como hemo~ Sí, está muy bien, siempre que las metáforas sirvan para
visto en ~a p_ág. _56',, «Como veremos enseguida»; y también las hacer más claros y comprensibles los conceptos dificiles, o para
referencias lndJrectas al lector: «algún lector se preguntará ... ,, que su idea quede expuesta de manera visual,
Hay otros m?dos más sutiles de mantener vivo el diálogo. Se concreta, asequible. Observe los siguientes ejem- ¿debenws usar
puede, por ejemplo, guiar al lector en la lectura haciendo reca- lenguaje
plos: figurado?
pilulaciones, expresando evaluaciones sobre el tema («esto
puede ser algo confuso todavía. .. ») o sobre la propia capacidad - Un texto debe ser un edificio sólido, bien construido, segu-
para expresarlo («O, dicho de manera más simple ... »). Si el lec- ro .
•
CÓMO ESCRIBIR UN TEXTO EXPOSITIVO, Il
269
258 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
- Un texto mal razonado hace agua por todas partes. subrayado de títulos y palabras extranjeras, mayúsculas,
- C n texto mal puntuado es un texto que respira mal, que se comillas, citas, referencias bibliográficas... ,
asfixia. 4. que excedían el número de páginas permitido,
- Un texto debe fluir con serenidad y gracia. 5. mal puntuados,
- La idea central de un texto es un ancla que organiza todas sus 6. redundantes y floridos,
argumentacio11es y las mantiene en su lugar. 7. que tenían ;errores de gramática y ortografia!,
8. desorganizados, confusos,
Estas rnetáforas, con mayor o menor fortunat transmiten 9. llenos de imprecisiones,
una imagen decidida de lo que se quiere decir. Más impor- 1O. escritos en lenguaje infiltrado.
tante: para expresar lo mismo de otra manera, harían falta
'1:1?chas palabras~ a.lgunos rodeos engorrosos. La prosa expo- Expresada esta queja, me voy a concentrar en el último
~1t1v~ ,no debe ser ~nda, impersonal y descolorida. Utilice a dis-
problema, que es uno de los más graves de todo tipo de com-
crec1oi: el ~enguaje figur~do. Sea más cauteloso, sin embargo, posición: el «lenguaje infiltrado», El lenguaje infil- •/mguafe
~on la 1roma, que es la mas peligrosa de las figuras, puesto que trado es un lenguaje que pro~ede,de la bu~ocra- úrjiltrodo•
impone un doble sentido que puede pasarse por alto, o malin- da, de los medios de comumcac1on y de ciertos
terpretarse. Si usted dice, por ejemplo, «según la erudita opi- libros de texto y escritos académicos, y que se infiltra más y
nión del profesor Tromposo» y luego demuestra que el profe- más en la prosa de todo el mundo, empobreciéndola c~n sus
sor Tromposo está completamente equivocado, su autoridad, frases hechas v sus rimbombancias. No vale la pena dedicarse
la necesaria gmvitas de su texto, se verán un poco tambalean- a su etiología'. Limitémonos a identificarlo y, si es posible, a
tes. expulsarlo de casa. Obsérvense las columnas de la izq~ierda,
En todo caso: evite la solemnidad. El don de la sencillez es escritas en lenguaje infiltrado, y las de Ja derecha, escntas en
el don de la inteligencia. Cuando dude, lea en voz alta: si Je lenguaje común.
suena pretencioso, reescriba con un tenor más semejante al de
la lengua hablada. LENGUAfE INFILTRADO
VERSIÓN NORMAL
2. La-~-
17. Los siglos se indican con nlimeros ron1anos.
"""d de una person ¡ .
con letras y no con ci~ os espacios de tiempo se indican
IS. Las siglas se escriben con mayúsculas, en letras redondas,
3. Se pueden usar indistinta n1ente las denominaciones Persia sin puntos entre las letras.
e Irán.
19. En los escritos expositivos, cada párrafo debe comenzar
4. Los años llevan puntos' eorno 1os demás números: l.997, con una sangría.
l.492.
20. Nunca se separan palabras al fin del renglón.
5. Se escribe Pekín, no Beijing.
Ejercicio 2
6. Todas las palabras extranjeras deben ap arecer e11 cursivas.
.
Encabezamiento. Los siguientes textos, a) yb), son fragmen-
7. las.
En los títulos, todas las palabras debe . con mayuscu-
, tos del primer párrafo de sendos trabajos, uno de ellos acadé-
· n ir
mico, el otro no. Compárelos con los ejemplos vistos: ¿cómo se
presenta el trabajo?, ¿qué imagen da de sí el autor o autora?, ¿esta
8. No se pone tilde a las mayúsculas. presentación invita a seguir leyendo, y por qué sí o no?
9. Debe dejarse un espacio entre párrafo y párrafo. a) Sobre este tema escribí en la RFH, JI (1940), 105 ss. A lo
largo de casi veinte años de intervalo, be reunido otras
JO. Los títulos de libros deben ir en letras cursivas.
º
. . observaciones y reflexiones. en parte sugeridas por la reac-
ción crítica a aquella interpretación y por las nuevas inter-
11. Los ~ítulos de ~rtículos deben ir en letras redo d
comillas. " n as Yentre pretaciones que han aparecido desde entonc""s. Las expon-
go aquí, por más que al hacerlo me vea a veces en la
dolorosa precisión de expresar mi desacuerdo con don
Ramón Menéndez Pida! y con don Américo Castro, pro-
l
276
CÓMO ESCRIBIR B!EN EN ESPAÑOL
texto las cumple. Puede ser más interesante hacer este traba-
277
se funda en el deseo de ya anu~ta~ me honro. M1 deci,ión jo con otra persona, o con un grupo, para contrastar puntos
sión del Libroyen mi· e ':º~'.:° uir a la mejor compren- de vista.
onvicc1on sobre I d .
tergables de la búsqueda d l d os erechos unpos-
Malkiel, «Nuevas notas e 1ª ver ad. (M. R. Lída de ¿Hay que decir que sí a las drogas?
E t d" para e Li/Tro de Buen Amo
l
,s ,u .ios de literatura españ0 l r» • en
1966.) ' ªY comparada, Buenos Aíres, El alcoholismo es uno de los males más graves de nuestra
sociedad, y es un mal e11 aumento, que requiere soluciones
b) Este libro es el resultado de las · · in1nediatas. L'na de las soluciones es penalizar al alcohólico
e:
La muier . enamorada suele desesperarse porque le pare-
no tene: nunca delante en su integridad al hombre
<J. e ama. Siempre le encuentra un poco distra(do .
no saber gramática. Piensan, además, aunque esta creencia es
muy discutible, que si supieran gramática dominarian mejor el
arte de escribir. De hechoi muchas personas inter1tan apren~
der a escribir estudiando gramática, en lugar de practicar el
ª.
s1 al acud'ir la .c•ta . se hubiese dejado dispersas ' por comoel
código escrito e intentar, sencillamente, decir algo por escri-
mundo provmc1as de su alma. Qosé Ortega y Gasset
to a alguien. Las mismas personas que se quejan de sus difi-
«:Amor en Stendhah;, en Estudios sobre el amor. Madrid'
cultades para escribir hablan perfectamente su lengua mater-
Austral, 1984.) ' '
1
284
CÓMO ESCR!Bffi Bl&'I EN ESPAÑOL
";'ntacíón. Teniendo en cuenta que toda clasificación es apro- En una carta así se escribe el pedido, se confirman de paso
ximad.a, pasemos a ver cuáles son los principios generales para los precios que nos fueron indicados por teléfono, la forma de
escnbir buenas cartas en el ámbito privado. el profesional v el pago, etc. La palabra «confirmación»~ •wnfirmar» («queremos
comercial. ' confirmar... ») debe aparecer al prmc1p10.
Si la función de la carta es agradecer algo, lo más corriente
CÓMO SE ESCRIBE UNA CARTA es que el acto de habla que se está cumpliendo aparezca men-
cionado al principio:
Tengo una receta muy fácil: las cartas se escriben siguien- Te agradezco mucho que me hayas enviado tu nuevo libro ...
do la• prescripciones de los ocho capítulos precedentes, más las
tres reglas indicadas arriba. Se mezcla todo cuidadosamente ... En las cartas privadas, que son las que admiten más libertad
Yse condimenta con una nota personal: expresiones de afecto en la disposición de sus partes, no es necesario poner la fun-
o cortesía, buen papel, buena letra ... Por supuesto, no todas las ción de la carta en la primera línea:
rec?mendaciones de los ocho capítulos precedentes pueden
aplicarse a las cartas, pero sí casi todas las esenciales. El cuer- Estaba pensando mucho en ti estos días, y hoy he ~enid? la
po de la carta es como los demás escritos, un poco más tieso e sorpresa de recibir tu Historia de la esmtura. No te 1magmas
impersonal en las canas comerciales, pero básicamente el qué oportuna has sido: ¡estoy escribiend_o un _marrnal ,"','bre
mismo, porque todos deben estar bien redactados en buen escritura! Te voy a leer pronto y con todo m teres. Muchmmas
español, según las mismas normas. Cambian, sí, las conven- gracias.
ciones que rodean al mensaje, que veremos después. Ahora
vayamos revisando todo lo que sabemos, y aplicándolo a las Aunque no se den en la primera línea, las gracias de ben
cartas. Veamos. estar allí, expresadas, o la carta no será leída como carta de
agradecimiento. , . .
a) Género, expectativas, amtextos La convención de indicar lo que uno esta haciendo al escri-
bir la carta es de mucha importancia en la correspondencia
En c~anto al género y las expectativas que crea la carta, ya comercial, pues la carta es, como hemos dicho, 14 carta romo
hemos dicho que estos son escritos fuertemente codificados comunicación v también registro. A veces la fór- aeá6nsocial
propósito y por función. Antes de escribir, tenemos que mula incluye~ verbo performativo, es decir un
expectati'"" pensar para qué es la cana, cuál es el acto que verbo que, usado en presente y en primera persona si_ngular,
queremos c.umplir con ella. Si queremos con- realiza, al emplearse, la misma acción que descnbe. Por ejemplo:
firmar un pedido que hemos hecho por teléfono, debemos
comenzar diciendo algo así: Por la presente [carta] au/frJV..oa D. Miguel Luárez a conducir
mi automóvil, patente N' R20078.
Como confirmación del pedido que hemos hecho por teléfO-
no, nos es grato reiterarle que queremos lo siguiente: Por la presente me dirijo a la señora Directora de RE_VE.SA y le
200 cartuchos de tinta para impresora Epson InkJet 800 mega que reconsidere su decisión de dar por termmado m1
etc ... contrato ...
297
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA.'iO!. CARTAS PROfESlONALES, COMERCIALES YPJUVAD,'\S
En los manuales de redacción comercial se dan siempre to impone respeto, y los interlocutores tienden a mantener
modelos de cartas, puesto que basta con saber hacer una para cierta formalidad. El uso de tú en lugar de vos, en la corres-
saber hacer todas las que tienen la misma fun- pondencia de personas vose~tes, es un buen ejemplo de .1~
intertextualidad ción. Esto significa que la intertextualidad, en que digo. Hasta hace pocos anos, muchos voseantes que ~~1h
el género epistolar, es muy evidente siempre: zaban exclusivamente las formas de voseo en su conversacion,
l<"emos el anuncio de un puesto de trabajo y leernos infinitos de tal modo que parecían haber olvidado que existía el tuteo,
auuncios anteriores. Se repiten la estructura, el vocabulario, usaban, sin embargo, el tuteo, al menos ~sporádícai:iente, en
hasla el tono. Hay que evitar en lo posible, sin embargo, la des- sus cartas. Hay varias razones para exphcar esa actitud: des-
fl<"l".><malización del escrito. Un anuncio de puesto de trabajo o prestigio del voseo, inseguridad lingü~stica, y, ~bre todo, falta
1111a cancelación de pago no pueden ser originales. pero pueden de modelos de voseo en la lengua escrita. Esta impone sus con-
H"ll<"r algo personal y atractivo. Basta con evitar, por ejemplo, el venciones, incluso en la intimidad. (Hoy en día las personas
l<"nguaje burocrático y reemplazarlo por palabras sencillas. En voseantes vosean también por carta.)
t'i<"rln< sub-subgéneros, hay sitio para innovaciones. Las cartas Un rasgo propio del tenor de las cartas comerciales es el
"" solicitud de empleo que acompañan a los currículos pue- uso de la primera persona plural en lugar _de la primera per-
den escribirse, como veremos, de varias maneras. sona singular, por la necesidad de dar aumndad o peso empre-
Para terminar con los caracteres genéricos, tengamos en sarial a lo que se escribe: <>hemos decidido• "-nl _,_
'd"d d , lenlJf"¡v..· - ""
nwnta que muchas cartas circulan en comunidades discursivas tiene más gravitas que «he ect ' º"•y a emas las carms
d
romunidades homogénea5: los helenistas, los coleccionistas diluve responsabilidades personales. Otras conwrciales
ducursivtu de medallas, los profesores de español, los lec- vece~, la carta utiliza fórmulas de máxima dis-
tores de ciertas revistas, se corresponden, uti- tancia, ocultando al locutor mediante el uso de la tercera per-
lizando su propio vocabulario y dando por sentadas rnuchas sona:
fosas que resultarían difíciles de reponer para personas ajenas
Se comunica a los señores socios que~ si no han hecho efecti-
al grupo. Esta identificación de intereses determina en gran
vo el pago de su cuota antes del 30 de abril, deben abonada con
parte el registro de las cartas.
un recargo del 12%.
h) Registros, estilos y tipos de textos
En este tipo de carta, tan frecuente, han desap~~ci.do los
Las cartas privadas dirigidas a parientes cercanos y amigos interlocutores: "YO» queda absorbido por la construcaon imper-
íntimos pueden utilizar, si a•í lo prefiere el autor, el tenor más sonal con se, y los destinatarios son •ellos», en lugar de ~ustedes:•·
informal que admite la lengua escrita: el más Si ta carta intentara vender algo, tal impersonalidad sena
'"""' in.furmal parecido al tenor oral. Podemos tratar a nues- contraproducente. En las ofertas _que recibimos por corre;:i, nos
delas cartas tratan de usted, y a veces de «quendo vecmo o vectna», •est.tmado
privadas
tro interlocutor con la mayor confianza, utili-
zar lenguaje familiar. y cometer a gusto unos amigo», etc., y quien firma se hace p~ese.nte_mediant~ un p~o
1"11antos anacolutos (recuérdense los e;jemplos del capítulo 3), nombre de primera persona: el plur.tl mstituc1onal, o bi~n el si~
pues estamos, por así decir, en zapatillas. gular, más íntimo. El uso de tú en lugar de usted no, esta e,xclm-
Pero las cartas privadas intercambiadas entre íntimos no do de la correspondencia comercial, pero esto vana segun los
aprovechan esta libertad con mucha frecuencia. El código escri- países y la edad de los destinatarios de la carta.
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOi. CARTAS PROFFSIOSALES, OOMERCIALES Y PRIVADAS
En cuanto a otros aspectos del registro, como el tipo de enrarecido, póngase máscara antigás, y recuerde que, f'.1era de
vorabulario relacionado con el tema y el modo de la carta, las su lugar de trabajo, todavía existe el lenguaje alegre y vigoroso
carlas difieren mucho entre sL En algunas aparecerán las jer- con que nos expresarnos de verdad.
v;as profesionales, en otras los lugares comunes de las rela-
doncs comerciales. Las cartas privadas son las más espontá- Lugares comunes que debe evitar (salvo fuerza mayor):
neas. Espero que estén bieu de salud al recibo de la presente ...
Sin embargo, las cartas privadas tienen cierta tendencia a Te escribo estas líneas esperando estés bien de salud, noso·
cuidar la expresión e incluso a hacerla algo literaria; sus auto- tros todos bien, gracias a Dios..
res siguen, a veces, Jos modelos de lengua escri- Te escribo estaS líneas con el objeto de hacerte saber...
modelos de ta más influyentes. Algunos de mis corresponsa- Te escribo estas líneas esperando una pronta respuesta...
ll'igua escrita r:n respuesta a su amable consulta, me es muy grato infor-
les utilizan expresiones que provienen de la
t•n tas carlas
prensa, otros usan giros literarios, a otros se les marle ...
tlesli,.an expresiones y fórmulas que usan en otros escritos, por Me dirijo a Ud. para rogarle humildemente ...
ejemplo en escritos académicos. Cuando releo mis propias car- Por la presente nos dirigimos a usted con el objeto de solicitar
las privadas me chocan a veces los fragmentos en que utilizo de su generosidad...
expresiones cultas, latinismos, alusiones a autores, y otros rasgos Tengo el honor de dirigirme a Ud. a fin de poner en su cono-
de estilo profesional, aunque no me refiera necesariamente a cimiento ...
asuntos profesionales. No usaría ese estilo por teléfono, lo cual Le agradeceremos nos informe ...
i11dica que la carta, al menos por momentos, fluctúa entre comu- Se hace del conocimiento de ...
nicación espontánea y escrito cuidado, destinado, incluso, a ser Habiendo tenido conocimiento de las quejas...
apreciado y releído. En esto, siga usted su inspiración y sus pre- De mi consideración más distinguida...
lérencias. Pero, como en todo escrito, trate de evitar la afecta- Tengo el honor de dirigirme al señor Decano con el objeto de
ción. Tenga cuidado, sobre todo, con el lenguaje infiltrado que informarle de ...
vimos en el capítulo anterior. Si no cumplimenta lo antedicho en el plazo de 36 horas a par-
A continuación se compila una lista de expresiones úpicas tir del recibo de esta ...
ele las cartas de negocios y de otras (usted reconocerá los géne- Lamentamos informarle que a causa de la ineficiencia de su
ros), que están cayendo en desuso. Son expre- empresa nos vemos en la obligación de ...
siones vacías, clichés del género epistolar, que Al recibo de la presente ...
conviene eliminar de nuestras cartas. Le advier- Queda atento y seguro servidor.. .
to, sin embargo, que en ciertos casos tendrá que Suyo affmo ... (Suyo afectísimo... )
usarlos, porque así lo exigen las normas internas de ciertas ins- Su muy afecto amigo ...
tituciones. El correo gubernamental interno (el que circula en Su muy afecta amiga y servidora ...
1ninisterios, cancillerías. consulados, direcciones generales, Dándole desde ya las gracias ...
etc.), es, en ciertos países, un festival de clichés y de oraciones Quedamos a la espera de su pronta respuesta...
impersonales, y contiene expresiones como agradecerá.se inf¡yr- Rogándole se sirva respondernos a su más temprana convenien-
mar, informósenos la víspera, tenemos el alto honor de hacmíe saber cia... [lo subrayado es calco de expresión inglesa]
que nos honra con m presencia... Si le toca vivir en ese mundo Suplicándole el favor de una pronta respuesta ...
.l
300 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRIVADAS 301
Que estrecha su mano ... rodeos corteses. En b) la interacción se reduce al mínimo, es una
Se reitera de Ud. su atto. y affmo ... (Se reitera de usted su interacción mencionada («se informa a los señores socios» ... ) y
atento y afectísimo ... ) el locutor no se identifica.
Usted decidirá, según la índole de su carta, si debe ser más
Por otra parte, escribir exactamente como se habla sería o menos interactivo. Decidirá, además, cuándo son adecuadas
desastroso, pues dejaríamos frases sin acabar, repetiríamos las las narraciones, de qué modo dar la información. Para los frag-
cosas, usaríamos transcripciones de sonidos no mentos expositivos de su carta, especialmente de sus cartas pro-
no escriba
articulados (como mmmmh, pfJ!f .. ), y no podri- fesionales, vale todo lo que hemos dicho en los dos capítulos
como habla
amos reproducir los gestos, las posturas del anteriores, excepto que la necesidad de planificar no es tan
cuerpo, los cambios de voz, tan significativos en la conversa- grande cuando se trata de una carta. En la carta profesional
ción. Ningún autor literario ha escrito diálogos idénticos a los reproducida arriba, su autor se expresa con claridad y lógica,
de la realidad: compárese el diálogo de una novela que inten- pero algo esquemáticamente, cuando hace objeciones al pro-
te reproducir el lenguaje oral con la transcripción de una con- yecto de tesis, puesto que esas observaciones son solamente un
versación auténtica, y se verán las diferencias. En las novelas, anticipo de otras. Su exposición es más espontánea que la de un
la lengua oral se estiliza, se transforma, adquiere una econo- texto destinado a la publicación, da por supuestas más cosas,
mía y una fluidez que no son rasgos orales, sino propios de la omite aclaraciones.
escritura. La recomendación «escriba como habla» solo significa, En todo lo que hemos dicho hasta aquí se incluyen tanto
o debería significar, «escriba sin rebuscamientos, con naturali- los temas de los primeros capítulos como las reglas 2 y 3 que
dad, con gracia, con sinceridad y simpatía». enuncié al principio (use su propia voz, adecue
-
¡g.M general
Pasemos a considerar, por fin, las dimensiones textuales: su texto al propósito de la cana). Antes de pasar para escribir
r1arració11~ exposición, interacción, tipo de información. Como a la regla 1, le ofrezco una breve recapitulación
dimensiones queda dicho al describir el estilo epistolar, las de lo que importa recordar sobre género y regis-
textuaks cartas reconstruyen un diálogo, y son, por Jo tro de las cartas, para que le sírva de guía general.
tanto, interactivas, a11n en s11s versiones más
impersonales. Compárese Jos grados de interacción del ejemplo
a) y el ejemplo b): GÉNliRO
Función:
a) Querida Laura: ¿Cómo que no puedes venir el 20? ¿Estás
loca? Yo tengo todo preparado, así que uo te zafas. Confirma. Indique expresamente el propósito de su carta. Esto
Mil besos. es imprescindible en las cartas comerciales, conveniente en
las profesionales y, a veces, también en las privadas.
b) Se informa a los seüores socios que las instalaciones per-
manecerán cerradas el día 20 del corriente. Rogamos discul-
Comunidad discursiva:
par las molestias.
Adecue todos los aspectos del texto a sus destinatarios.
En a) el diálogo está marcado explícitamente, el lenguaje Estos pueden variar profundamente: pueden ser un grupo
informal es muy semejante al de la lengua hablada, y no hay homogéneo (por ejemplo, todos sus colegas especialistas) o un
.l
CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRIVADAS
303
302 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA."<OL
RFGISTRO
1Wodo:
Tenor: En las cartas privadas, en las que usted usa el lenguaje
- Las cartas privadas admiten varios grados de informa- con gran libertad . este puede desempeñar un papel muy impor-
lidad, ~?sde el más informal hasta el formal, dependiendo de tante: demostrar camaradería, solidaridad con el destinatario.
la Jun,c1on de la carta y de su destinatario. Una tarjeta de feli- En estas situaciones, los hablantes utilizan formas dialectales
ntac1on al d1rector de la empresa por cumplir 80 años, una nota y fumiliares; si ambos son bilingües, jugarán con los dos códi-
de agradedmiento a una persona que apenas conocemos y gos que conocen, reforzando así su complicidad. La mejor
que nos hizo un favor, una carta de condolencias a los padres carta familiar o de amistad es la que refuerza la relación entre
de un amigo, serán cartas privadas con tenor formal. los corresponsales.
En las cartas profesionales, el lenguaje muestra tam-
- Las ca~tas profesionales abarcan también varios gra-
bién solidaridad entre los miembros de una comunidad dis-
dos de formalidad. No deben ser tan informales como las pri-
vadas, pero pueden ser informales, dependiendo de la rela- cursiva, y además revela la competencia del autor en el mane-
jo de los recursos lingüísticos adecuados. Una carta profesional
':ión con el destinatario. Por regla general, son, sin embargo,
da una imagen inmediata de su autor. ¡Cuide su imagen!
lormales, y a veces también con tienen fórmulas de cortesía
En las cartas comerciales, desde la calidad del papel
<'stipuladas.
hasta la corrección gramatical delatarán la seriedad de una
Las cartas comerciales deben tener un tenor formal,
empresa. Siga todas las convenciones lingüísticas (que vere-
pero no exagerado. Recuerde que la impersonalidad y las fra-
'"" hechas hacen las cartas menos efectivdS. Puede usar la pri- mos) y nunca descuide los detalles.
mera persona «institucional».
305
CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRIVADAS
304 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
Membrete La decisión sobre los títulos puede ser dificil, ya que estaS con-
venciones varían de comunida.d a comunidad. En qué títulos
En las cartas comerciales, y en alguuas profesionales, las España, por ejemplo, se me dmge a veces la corres- mar
hojas llevan impresos los siguientes datos: nombre de la empre- pondencia de la siguiente manera:
sa o ínstitució11, dirección, teléfonot número de tax, y a veces
correo electrónico y página de Internet. El membrete aparece Profesora Doctora Doña Graciela Reyes
en el ángulo superior izqnierdo o bien en el centro de la pági-
na. Cuando hay membrete, la fecha se pone (a la derecha, como generalmente con abreviaturas:
hemos dicho) más abajo que el membrete, aunque empieza a
imponerse la costumbre, que veremos luego, de poner todos Profa. Dra. Da. Graciela Reyes
los encabezamientos a la izquierda. Como en el membrete figu-
ra el nombre de la ciudad, no es necesario repetirlo en la fecha. Es preferible e\itar la acumulación de tratamientos, Yusar
solo dos (por ejemplo Pr~fa. Da.) o solo uno de los tratamien-
Destinatario tos mencionados, o bien el más general Sra. Da. _ ..
Mis colegas hispanohablantes, e~ F.st~do~ Umdos, se dm-
gen a mí mencionando mí cargo umversitano, generalmente
En las cartas comerciales y profesionales, e incluso en algu- abreviado
nas cartas privadas, se indica el nombre del destinatario en el
margen, después de la fecha. Sí la carta es comercial o profe- Profa. G. R.
sional, allí van consignadas también las señas completas: direc-
ción, ciudad, país. Al poner el nombre del destinatario se usa, Las cartas que recibo de otros países hispanos dicen sim-
si cabe, su titulo, genemlmente en forma abre,iada, o su cargo. plemente
Este texto será idéntico al que se escriba en el sobre de la
carta. Señora (Sra.) G. R.
Pueden utilizarse comas al fin de cada línea. o -como es
más frecuente- d~jar las líneas abiertas. Si se usan comas (lo o bien
que no se hará nunca en el sobre de la carta), la última línea
debe quedar abierta: Doctora (Dra.) G. R.
Sra. Carmen González, En muchos sitios se sobreentiende que el tHulo de doctor es
Directora de Personal, más alto (y por Jo tanto indica mayor deferencia) que el de pro-
Arrendaburu y Solange, S. A, fesor. «Profesor», además de ser un título, es un c~rgo, Y «doc-
Ellauri 843, tor» es un título, no un cargo: a veces uno es mas adecuado
11300 Montevideo, que el otro. Por lo general, se reserva el título de d~ctor, e~ la
Uruguay
lengua corriente, para médicos y odontólogos, y as1 lo reflejan
las cartas.
l
308
CÓMO ESCRIBIR SIL\' EN ESP&'íOt
CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES YPRNADAS 309
En muchas comunidades se utilizan normalmente los títu-
los universitarios, incluso en el lenguaje oral: ingeniero Pérez,
Barcelona, J6de abril de 1999
arquitecta Pérez. abogado Pérez, etc. En esos sitios es menos
com1ín el uso de don, d-0ña, como tratamiento de respeto. El IABELGA,SA
uso de señor, señora, señorita varía de comunidad a comunidad. Fábrica de cerveza
San Loren1.o 5490
En casi toda Hispanoamérica estos títulos coexisten con don, 1878 Quilmes (Buenos Aires)
doña, pero son más frecuentes, y, en muchas comunidades, obli- Teléf. : 253 0000 Fax: 321 0000
gatorios. Por escrito, señora es más frecuente que señorita, cual-
quiera que sea el estado civil de la destinataria.
Casi todos los hispanos usan y tienen en sus documentos dos
apellidos, el de su padre y el de su madre, que
deben emplearse en los encabezamientos de las los apellidos
cartas, si el destinatario usa ambos habitualmente. En la
Argentina se usa solamente el apellído paterno, y el materno Rosado, 16 de abril de 1999
no figura en los documentos. (Algunos argentinos usan dos
Ing.Juan AvHé$
apellidos, también, como los demás hispanos, pero no es lo
común.) Gerente de venw
Bodegas Pinamar
Entre el destinatario y el saludo inicial se puede poner, espe- Austria 6754
cialmente en las cartas: comercíaJes, una {(RefCrencia»t o breve 1425 Buenos Aires
alusión al contenido de la carta. Véanse los siguientes encabe- Ref.: encargo de trappistenbier
zamientos, todos ellos de acuerdo con las variedades que aca-
bamos de indicar:
16 de abril de 1999
~:;,nd~a lla fun_~ión de la persona: Señor Presidente (al presi- En las cartas comerciales y profesionales se usa una ante-
v te e a nac1on)' Señor Ministro, Señor Rector, Señor Decano firma, es decir, se escribe el nombre completo y cargo del
' por supuesto todas las formas femeninas de esas ex , ,
según c · d L , presiones remitente, y por encima este firma, preferiblemente con tinta
b oir~spon ª· as autoridades de la iglesia católica red'. azul.
. en tratam1en_tos que también varían un poco se • n los fu a-
~es: En .Es&vpana a ~~s cardenales y obispos se
minencia erendmma Y Exceknda Reoerendí .
ros trata ~e
,
mente . . . . sim.a, respectiva- Postdata, anexos, iniciales
, y en otros Sitios de Su Eminencia v Su Señorí lt t , .
No d b b . ' a us nsima
e e usar a reviaturas en el saludo: , Cuando se escribía con papel y pluma, la postdata (la pala-
bra significa 'después de la fecha'), también llamada post-
~stímado Prof. J. Rodriguez: (no) scriptum, se agre¡,r¡¡ba cuando se había olvidado decir algo en el
Esumado profesor Rodríguez: (sí) cuerpo de la carta, Si se escribe en un ordenador es más simple
incluir la información en el texto, y evitar la postdata. En algu-
Dirijase a la persona com~ lo haría en voz alta y no olvide nas cartas comerciales, especialmente las que hacen ofertas, la
los d os puntos. ' postdata ha adquirido una función nueva: añadir una infor-
mación más visible, generalmente una oferta especial, la repe-
tición de algún punto importante, etc. Cuando añada una post-
La despedida data, hágalo al margen, dejando un espacio después de la firma,
Debe encabezar el texto con la abreviatura correspondiente:
d ¡Tanto en el eni_:abezamiento como en la despedida el autor P.D. oP.S.
m~ a carta n_tihzara -dentro de lo que las convenciones le er- Los adjuntos o anexos son los documentos que se agregan
tar:- las formulas más adecuadas a su relación con el d~sti a una carta comercial o profesional. Se puede indicar, después
natano, En las cartas familiares y privadas se dan besos b de la firma y al margen, J!.djuntos o la abreviatura Adj., sin más,
~~:;;:ad!~ comunidad hispánica tiene preferencias: las h~;q : o bien especificar cuáles son.
«recu.::.d~shay q: a:razanE, por escrito)' y también «Cariños•>, En cuanto a las iniciales, estas aparecen en cartas profesio-
. »,y« u os», ""º las cartas profesionales comer nales y comerciales pasadas a limpio por una secretaria. Las ini-
Gales las fórmulas más usadas antes de 1 fi 1 y. , - ciales de la persona que firma la carta van en mayúsculas, y las
tes: a rrma son as s1gu1en-
de la secretaria o secretario en minúsculas: GR/rg.
Fecha
Chícago. 11 de abril de 1999 De;tinatario
Referencia
Querido Francisco: &J.\ udo
Destinatario
Referencia
1\.1embrete
Fecha l
Saludo
se expresa el propósito que llevó a escribir la carta, y el tercero
es una propuesta indirecta, que se sigue de lo dicho en el párra-
fo anterior. l,a despedida va, como en todas las cartas, separada _ Cuerpo de la carta --
del resto.
Las cartas comerciales tienen tres «estilos• de diagrarna- Despedida
ción: el estilo sernibloque, que es el más frecuente, el estilo blo- Antefinna
que y el estilo bloque extremo. En el esúlo semibloque, se ponen 1 Firma
Jos componentes de la carta de modo que queden alineados al
.-'\nexos
margen: destinatario, referencia y saludo, y a la derecha: fecha, Iniciales
1
despedida, antefirma y firma, dos alineaciones longitudinales.
El modelo es así:
316 CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRIVADAS 317
CÓMO ESCRll!IR l!IE1' EN ESPANOL
En el estilo Woque extremo, todo queda alineado al margen: únicas y llevarán la marca de nuestra subjetividad. He elegido
los tipos de cartas privadas que tenemos que escribir con más fre-
cuencia, y algunos ejemplos de cartas profesionales y comer-
~iembrete ciales comunes. Cada una va acompañada de un comentario
Fecha
Destinatario
que deja muchas cosas sin decir. Le sugiero que complete mis
Refcren<;ia comentarios, y que no se sienta obligado a estar de acuerdo
Saludo con lo que digo en ellos.
Cartas de agradecimiento
- - Cuerpo de la carta -~
Querido Santiago:
Muchas gradas por las rosa5. Nunca había
Despedida
visto rosas tan, tan hermosas, jni tantas rosasjuntasl Eres un
Antefirma
Fi1ma loco. ¿Qué vas a hacer cuando cumpla 50? Mil gracias.
Un beso,
Anexos
Iniciales 1 L.
Querida Lucía:
Confiesa que ni tf1 te lo crees. ¡Casarte con
Paco! Mira que lo vuestro ha sido una carrera de obstáculos,
más los doce trabajos de Hércules, y no sé qué más. Pero yo
i afecto.
Mi querida Elisa:
No hay nada que yo pueda decirte para con-
solarte por lo que has perdido. Solamente quiero que sepas que
320 CÓMO E.'iCRIBIR BID/ EN ESPA.'iOI. CARTAS PROFESIONALES, COMERCL'\ll'S Y PRIVADAS
321
estoy contigo, pensando en ti, reviviendo un dolor que ya de evitar los clichés, y ha logrado expresarse con sencillez Y
conozco. Me cuesta creer que Pedro se haya ido. ¿Recuerda:-. afecto.
que nos dijo, la última vez que estuvimos los tres juntos, que iba
a desaparecer como quien hace una broma? No ha desapare-
cido, sin embargo, porque su presencia será constante. "fe va Declaración de amar
a acompañar siempre, te va a inspirar en todo lo que hagas, por-
que hay seres que nunca nos d~jan. Mi querida Lucinda:
Quiero decirte que te amo porque me
No me atrevo a llamarte, pero por favor llá·
gusta cómo te ríes, y también me gustan tus ojos y tus manos.
mame tú cuando quieras, a cualquier hora, si tienes ganas de
y 0 quisiera pasear contigo por la calle; y com!'rarte algo, un~
hablar o de llorar. Y dime si te puedo ayudar en algo. Estoy a
flor 0 una sortija. No sé muy bien que te ?ma, po~que no se
tu disposición, y sabes que lo digo en serio, y con todo mi cari-
hablar con Jas mujeres, pero creo que tu hablar1as todo el
ño.
tiempo y, si fuéramos por un parque, yo podría ei<plicarle los
Muchos besos,
árboles, que te gustan tanto. .
L. No creo que esta fantasía sea reahdad
nunca. Si guardas esta carta, te acordarás de mí alguna vez, Y
sonreirás.
Coment.ario: En esta carta, una amiga trata de expresar dos F.S.
cosas contradictorias y difíciles de decir: que comprende y puede
medir cuánto sufre su destinataria, pero, a la vez, que sabe que
no hay pérdida definitiva, y que su destinataria va a encontrar Comentario: Lo más atrayente de esta carta es su tono ingenuo,
. N'
consuelo en la presencia espiritual de quien ha muerto. En este sonriente e irónico. No hay frases rebuscadas o efectistas.. '?te~
ejemplo encontramos también ofrecimientos concretos de com- la cercanía con el lenguaje oral. Quizá debido a su ?ng11'.ah-
pañerismo y deseo de ayudar, muy reconfortantes y bien expre- dad y a la ausencia de clichés, esta carta parece «ltterana»,
sados, de manera natural y cariñosa. corr:o son algunos de nuestros escritos, cuand? somos capaces
de calcular bien los recursos lingillsticos necesanos para provocar
Estimado señor Alonso: imágenes perdurables y para conmover.
Le ruego que acepte mis sinceras
condolencias por la muerte de su esposa. Todos cuantos
la tratamos guardaremos de ella un recuerdo gratísírno. Cartas de reclamación
Reciba usted nuestro respeto y simpatía en estos momen-
tos tan difíciles. Estimados setiores:
1\fectuosamen te 1 Les adjunto dos libros, comprados en su
G.L.
librería que tienen varias páginas en blanco. También adjun-
to el re~ibo de Ja compra. Les ruego que me cambien estos
ejemplares por otros que estén en condiciones de lee.rse, o
Comentario: Esta es una carta formal de condolencias, menos bien que me devuelvan el dinero. Si me devu~lven el dm~ro,
original y menos cálida que las anteriores. El autor ha tratado les agradecería que ingresaran un cheque en m1 cuenta cornen-
CARTAS PROFESIONALES, COMERCIAL!B Y PRIVADAS
323
322 CÓMO ESCR!l!IR l!IEN EN ESPAÑOL
te de Madrid, para evitar transferencias al extranjero. Los datos reclamación hay que evitar, en lo posible, los desahogos de
de mi cuenta son los siguientes: rabia, y plantear claramente qué se exige de la persona que no
ha cumplido con sus obligaciones.
.l
324 CÓMO ESCRIRIR SIEN EN ESPANOL CARTAS PROFESIONALES, COMERC!ALF.S Y PRIVADAS 325
C:Almlmtario: Las cartas de lector presentan mucha variedad. He mandado unos capítulos de
Se d.mgen, formalmente, al director del periódico, pero están mi tesis a la editorial Rigoby, que ha expresado interés en con-
e~cntas par~ un público amplio. Los lectores de ciertos perió- siderar el manuscrito completo. Mi próxima meta es convertir
dicos constituyen comunidades discursivas con ciertos carac- mi.tesis en libro. A largo plazo, pienso·estUdiar variedades de uso
teres propios, pero, de todos modos, estas comunidades dis- del "ubjuntivo en comuriidades bilingües. También he ·pedid<>
cursivas no son homogéneas: para comprobarlo, basta con leer fondos al NE, para un proyecto sobre la expresión de falta de
las c~rtas d~ un solo día, en las que hay distintas ideologías, asertividad en español.
propos1tos, mtereses, y presupuestos generales sobre el mundo. Su universidad, con su excelen-
Por lo ~.to, la carta se pr~po~e presentar un caso y convencer te programa de lingüística hispánica, sería el lugar ideal para
a un J?l.tbhco en gran medida imprevisible y variado. Los auto- llevar adelante mis planes de trabajo. Le ruego que me indique
res uuhzan el humor, la indignación, la seriedad mortal. Todo si necesita más información sobre mí, y si debo enviarle algu-
vale. La carta que antecede es un buen ejemplo: presenta el na monografía.
~de los profesores universitarios, siempre sospechosos de tra- Con mi cordial agradecimiento,
bajar menos de lo que debieran, y lo hace con una retórica reciba mis saludos,
persuasiva. Nótese el uso de la figura «esclavos perfectos» en J. c.
la penúltima oración, y las repeticiones finales, que refue:zan
la argumentación.
Comentario: El autor de esta carta dice sin rodeos para qué
se ofrece. Dice «estoy preparado para enseñar tal cosa». Evita
Cartas profesionales expresiones como «Creo que podría enseñar», «me gustaría
enseñar», y expresiones como <•soy experto en», «me consi~
(Carta que acompaña al currículum vitae.) dero un buen profesor de», etc. Las primeras son indecisas y
Estimada profesora Galíndez: tímidas, las segundas ingenuas o vanidosas. Con sobriedad y fir-
Tengo el agrado de presentar- meza, el postulante transmite confianza en sí mismo y entu-
me al cargo de profesor de español que anuncia su departa- siasmo. Note que la carta es una «lectura dirigida• del currí-
mento. En estos momentos estoy terminando mi tesis doctoral, culo. Estas cartas repiten informaciones del currículo, pero
El S1.1.l/juntivo n.o categr;rial en español, que pienso defender en con el objeto de hacerlas resaltar, y mostrar en qné está entre-
m~yo del año próximo. Como verá usted en el curriculo que nado el candidato a un puesto. También se dan informaciones
adJu~to, he seguido cursos de lingüística general y lingüística que no se incluyen (por lo general) en el currículo; en este
espanola, y me he especializado en semántica. Pero me con- caso, el joven profesor informa de que ya está intentando
sidero bien preparado para enseñar cualquier rama de la lin- encontrar editorial para su futuro libro. Una carta como esta
güística descriptiv.a, con predilección por fonología y sintaxis. tiene por misión atraer la atención del empleador, y conse-
Tamb.ién puedo enseñar pragmática, que me resulta familiar, guir una entrevista. Usted puede preferir otra forma, menos
especialmente la pragmática cognoscitiva. directa, de mostrar sus méritos, pero, en cualquier caso, recuer-
Pese a que me he concentrado de que debe llamar la atención sobre lo que considere impor-
en estudios de lingüística, tanto por mi furmación como por mis tante, añadir lo que quizá no se deduzca inmediatamente de
~1ter~ses y hábitos de lectura me siento capacitado para ense- la lectura de su currículo, y dar una imagen posítíva de sí
nar literatura, al menos en cursos generales o introductorios. mismo .
•
326 CÓMO ESCR!fl!R BIEN EN ESPANOL CAR.TAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRNADAS il27
(Pedido de carta de recomendación) Comentario: Un médico consulta a otro sobre una paciente. La
Querida profesora Schola: carta contiene tres partes; la consulta misma, un comentario
. Recurro nuevamente a usted para general sobre las compntadoras en medicina, y una referencia
pedirle una carta de recomendación. Quiero presentarme a amistosa. La abreviatura EKG significa, en la jerga médica, 'elec-
una beca de mi universidad. Le adjunto el proyecto de inves- trocardiograma'. El autor de la e.arta no está pidiendo un favor
tigación que he preparado. La inspiración de mi trabajo pro- (la paciente pagará, sin duda, la consulta), sino, más bien, admi-
cede ~e los co1nentarios que hicimos en una clase suya, hace tiendo la solvencia de su colega para prestarle ayuda en un caso
dos an~s, sobre los sistemas de transmisión duplicados. Espero dificil. Nótese la ausencia de expresiones justificativas, como por
que m1 proyecto no le parezca demasiado malo.
ejemplo «sé qne está Ud. muy ocupado, pero me permito man-
Siento molestarla otra vez, y quedo darle a la Sra de Tuyssens ... » y la ausencia de agradecimientos.
en gran deuda con usted por su continuo apoyo y por su gene-
rosidad intelectual. Es una carta entre iguales, o así se presenta: no parece haber
Con un cordial saludo, mayor poder en ninguno de los dos médicos. La propuesta de
comer juntos, hecha al pasar, acentúa la camaradería. El terna del
J. c.
poder es importante en las cartas profesionales, pues aunque
Comentario: Carta respetuosa que parece típica de •mejor casi todas estén motivada.~ por auténticos intereses de trabajo,
alumno». Se puede hacer una petición de manera más tímida siempre se pone cuidado por delimitar territorios científicos
por ejemplo preguntando «¿Podría Usted escribir una carta d~ propios y ajenos, y por dejar una imagen de antoridad.
recome:i..dación?•. Aquí se ha omitido ese rodeo, quizá porque
la _relac1on entre los corresponsales lo permite. El agradeci- (Carta en que se acepta un ofrecimiento editorial.)
miento es muy efusivo. La carta es eficaz.
Estimada señorita Ortega:
(Correspondencia entre médicos) Muchas gracias por su carta del día
Estimado doctor Lucero: 12 pasado. Me interesa mucho colaborar en los proyectos edi·
Le envío a mi paden te la Sra. De toriales que usted propone, sobre todo porque tocan campos
Tuyssens para consulta. Vino a verme hace un mes con fati- literarios del mayor interés para mí.
ga, presión inestable, dolores en el cuello. C'..omo usted verá, los No deja de atraerme la posibilidad
dos_úJtímos EKG tienen cambios no específicos, aunque yo de colaborar en el volumen 2, pero, si ya estuviera asignado a
me mdmo a pensar que en el último hay evidencia de infarto. otra persona, tendré mucho gusto en desarrollar el que usted
He visto en California un «artificial neural me propone. Creo que podría enviarle un manuscrito com-
n~Mork• que puede tomar decisiones clínicas mejor que nn pleto a finales de septiembre del próximo año.
medico.de carne y hueso. No tengo nada contra las máquinas, al Le adjunto, como me pide, un
conuano, sí yo creo que los médicos quisiéramos ser máquinas. currículum que tenía a mano. Puede usted comunicarse con·
A ver cuando nos encontramos en el roigo al teléfono ......... durante el día, y por la noche al ...........
Lonchón para compartir un buen cordero. Mi dirección de e-mail es .......... .
Espero su opinión sobre esta señora. Un Reciba usted mis saludos y agrade-
cordial saludo, cimientos por la deferencia de su oferta.
A.J. J.J.
329
CARTAS PROFESIONALES, COMERCIALES Y PRIVADAS
328 CÓMO ESCRlBIR BIEN EN ESPAÑOL
Comentario: Ninguna carta de recomendación puede ser
Comentario: Carta muy cortés, respuesta a otra que no cono- ejemplar, pues cada comunidad académica y cienúfica tiene
c:mos. Su autor acepta una propuesta, expresa sus preferen- rutinas y expectativas distintas en este género de escrito. Esta
cias, da una fecha para la entrega del trabajo, y también sugie- carta presenta un mérito importante: se refiere de manera espe-
re otros modos más rápidos de comunicarse con él a partir de cífica al proyecto del recomendado, dice que es bueno y digno
ahora. de apoyo. Además, el autor no se contenta con escribir que su
alumno es talentoso, sino que lo pone entre los dos o tres mejo-
Carta de recomendadón res alumnos que ha tenido en los últimos años. Las «malas» car-
tas de recomendación no son solamente las cartas que dejan la
Estimados colegas: impresión de que el recomendado es mediocre, sino las cartas
, Me complace recomendar al Sr. Juan llenas de elogios generales, escritas con buena intención pero
Gonzalez para una de las becas de investigación en ciencias sin interés, que dan muy poca información útil a las personas que
q'.:'e concede su universidad. C.-onozco a Juan desde que comen- las reciben.
'? su ca::-rera universitaria. Después de un periodo de perfec-
c1onam1ento en San Diego, volvió a mí universidad y ha esta-
do trabajando conmigo durante estos últimos dos años. Se Cartas crmwciales
trata de un estudiante de extraordinario talento, disciplina-
Reclamaciones de pago
do, seno, dotado de una notable capacidad de trabajo. Es uno
Estimado señor Infante:
de los dos o tres mtjores entre los 30 estudiantes, aproxima- Quiero recordarle que lleva diez días
damente, que se graduaron de mí departamento en los últimos de demora en el pago del alquiler correspondiente a este mes.
cinco años. De acuerdo con las condiciones del contrato que hemos fir-
El tema de investigación de mi alumno es la mado, debe usted pagar el alqniler por meses anticipados den-
capacidad del cerebro humano de aceptar y adoptar com- tro de los primeros cinco días del mes, tal como ha venido
portamientos completamente nuevos. Según su proyecto, a
haciendo hasta ahora.
me~1da que avan.zamos en edad tendemos a repetir compor- Confío en que pueda subsanar esta
tamientos conocidos, no por disminución en el número de situación cuanto antes, y en que me mantenga infor1nada.
neuronas, sino por la fatiga o desconexión de las redes neu- Cordialmente,
ronales. Es~o no es nu"':°, pero Juan González propone un L.G.
modo sofisticado de analizar cuándo se van cerrando las •ven-
tanas de novedad•. Sus hipótesis exigen el análisis de factores
biológicos y neurológicos, en combinación con factores cul- Comentario: Carta firme y clara, como debe ser una reclama-
turales.. Creo que es un estudio muy bien planteado, y, dadas ción. No contiene 11ingún ofrecimiento de ayuda al moroso, o de
las c~hdades del solicitante, no dndo de que la investigación intento de colaborar con él o llegar a un acuerdo: exige el dine-
llegara a_buen término y será una contribución importante a ro debido, nada más. Es, a la vez, una carta cortés, que no exclu-
los estudios sobre envejecimiento. Considero a Juan González ye un diálogo. No conviene, en las reclamaciones, acudir_ de
digno de todo el apoyo que puedan ustedes ofrecerle. entrada a amenazas, ya que hay que mantener la buena relac1on
Cordiabnente, con el destinatario. Una carta débil o contradictoria (por ejem-
Dr. O.P.
330 CÓMO ESCR!BrR BIEN EN ESPAÑOL Ci\Kl)\S PROFESIONALES, COMERCW.ES Y PRIVADAS 331
plo: demasiado dura al principio, pero acabada con un ofreci- Olvide la gramática y el diccionario, y conviva por un tiem~
miento de ayuda) puede ser contraproducente. po con gente que habla inglés. Practique con ell~s verdade_ras
conversaciones, sepa cómo viven, qué comen, como se divier-
Estimada señora Aviva: ten. Los libros, las casetes y los vídeos no podrán reemplazar
Me permito recordarle que no ha saldado nunca la inmersión real en un mundo de habla inglesa. En
Ud. todavía su deuda con nosotros. Quedan por cobrar, como tres meses, con la guía de nuestros expertos profesores~ vivien-
verá usted por el balance que le adjunto, dos coronas y un tra- do con ingleses, usted aprenderá todo lo que hay que apren-
tamiento de conducto, que suman el importe de 1.875 pesos. der para comunicarse en inglés, y no lo olvidará m:>s,_porque
Ambos trabajos fueron completados hace dos años, y Ud. encon- será un aprendizaje vivido día a día, no un aprendmye forza-
tró aceptable nuestro presupuesto, y muysatisfuctorio el trabajo. do y memorístico. .
Comprendemos que no siempre es fácil Consúltenos. Tenemos programas para cada necesidad. Le
mantenerse al día en los pagos, y que hay imprevistos y acci- garantizamos que esta vez aprenderá inglés, para siempre.
dentes. Pero el tiempo transcurrido nos obliga a rogarle que,
por consideración hacia nosotros, que cumplimos puntual- Comentario: El anuncio empieza por ofrecer un hien (saber
mente con nuestras obligaciones hacia usted, tenga la amabi- inglés) mediante una pregunta retórica, es decir, una pr~
lidad de enviarnos nn cheque cuanto antes. gunta que ya trae su respuesta. Lo que se ofrece no es lo habi-
Muy cordialmente, tual, del tipo de •aprenda inglés en seis meses• o •aprenda
inglés sin esfuerzo». Se ofrece el aprendizaje completo Yprag-
Dra. L. G. mático de una lengua, y se lo ofrece «de una vez por todas•-.
El anuncio parte de la suposición de que mucha gente ha
Comentaria: Como la anterior, carta firme, que reclama el intentado aprender inglés, sin éxito. A esa suposic~ón se refie-
dinero debido, sin concesiones. Es cortés y ofrece algunas excu- re •olvide la gramática y el diccionario», y expres10nes ~orno
sas a la paciente morosa, pero no transige. Las cartas de este «Verdaderas conversaciones», que evocan esas conversaciones
tipo han sido precedidas, por lo general, de llamadas telefóni- fingidas del aula de clase, aburridas y :nonótona~. Es un anun-
cas de la secretaria de la clínica al paciente incurnplidor, que, cio bien hecho, que descarta otros metodos posibles y propo-
quizá, aseguró que pagaría inmediatamente. De modo que no ne algo muy atractivo. La frase final es muy c;ontui;-dente. Lo
hay lugar para ofrecimientos de aplazar el pago o de aceptar que el anuncio no dice es cuánto tiempo y cuanto dmero cue&-
el pago en partes, ofrecimientos que (si la situación no varia) ten- ta el proyecto, y no lo dice porque ese es, sin duda, el lado
drán que hacerse en cartas sucesivas.
menos atrayente del proyecto. Pero debería contener esos
Ofertas de productos o servícías datos, al menos en forma general.
Querido amigo o amiga: Esúmada amiga:
¿Quiere aprender inglés de una vez por todas> ¿Te gustaría tener un .paraíso a pocos pasos
¿Quiere aprender de tu casa? ¿Un lugar donde pudieras olvidar por un rato el
• qué se dice en cada situación, estrés de la vida diaria, y dedicarte tiempo a ti misma, en el
• cómo se dice, ambiente calmo y a la vez estimulante de un spa? Estamos a tu
• quién lo dice, alcance, y te prometemos una renovación completa de tu cuer-
• para qué se dice? po y de tu alma.
l
332 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPA,'\!OL CARI'AS PROt'ESIONALES, COMERCL4.LES Y PRIVADAS
333
Tenemos a tu disposición servicio de sauna, Nl1estras asistentes familiares tienen totio en la cabeza, y
piscina, aparatos Nautilus, entrenadores personales, yoga, salón soo la eficiencia personificada: se ocupan de sus cuenla.'!, de sus
de belleza y restaurante. El aparcamiento es gratis. compras, de su coche, organizan sus fiesla.'!, saben cuál es el
Ven a visitarnos cuando quieras, y te pondre~ mejor menú para cada ocasión, van al supermercado, dan
mos al corriente de todos los detalles. órdenes al servicio, y hacen todos los recados que haya que
hacer. Van a stt casa dos, tres, cuatro; cinco, siete veces por
Marta Ilusmano semana, y se ocupan de todo, para que usted viva feliz. .
C,erente Discretas, eficiente~ sie1npre de buen humor, nuestra& aliI.S-
tentes tienen verdadera vocacióu y saben cón10 se lleva una casa
P. D. Si te haces socia antes del 15 de abril, ¡el primer mes es en estos tiempos. Ah, tienen coche propio. Deje todo en manos
gratis! de ellas. Verá cómo duerme mejor y cómo su vida marcha mejor.
Comentatiu. Este anuncio es correcto y quizá eficiente, aunque Comentario: Este anuncio ofrece un servicio poco común, y
no es original, pues hay cientos de anuncios por el estilo. Lo posiblemente muy caro. Lo que dice: es muy_ tentador, pues ~ro
que dice: el tema básico es el cuidado, embellecimiento y reju- mete que alguien será la madre y la esposa ideales, la que pien-
venecimiento del cuerpo, que se ofrece a mujeres presunta- sa en todo, hace todo, nunca se queja de nada. Lo 'fl"1 no.dice: a
mente agotadas por el estrés. Lo importante es lograr que toda qué clientela se dirige, cuánto cuesta, por q~é es nec~s:ir10 este
servicio. Lo que no dice, sin embargo, se mfiere facilmente:
mujer que lea el anuncio se sienta necesitada de tal paraíso,
solamente necesitan «esposas perfectaS» los matrimonios muy
tenga o no tenga estrés. Lo que no dice cuánto cuesta, cuáles son
ocupados y con ambiciones profesionales y sociales, o_ las per-
las condiciones para hacerse soda, si solamente se aceptan muje-
sonas solas, con las mismas ambiciones. El anuncio evita men-
res, por qué.
cionar obligaciones relacionadas con los hijos, como si eso fuera
de incumbencia exclusiva de los padres.
¿QUIERE UNA ESPOSA PERFECTA?
¿En cuántas cosas tiene que pensar usted?
EJERCICIOS
¿En pagar las cuentas mensualmente?
¿En hacer el balance de sus gastos? Ejercicio 1
¿En poner anticongelante al coche?
¿En llevar el perro al veterinario? Escriba una carta a alguien querido: un amigo que vive lejos,
¿En hacer la compra? su novio o novia, una tía que siempre le manda regalos, ~S:uien
¿En ir al correo, en ir al tinte, en ir al zapatero? a quien quiere conocer mejor. Escríbala intentando eqmhbra:
lo espontáneo y lo estudiado, y teniendo en mente por q~e
Le proponemos que dccje pensar y hacer a una de nuestras escribe. No es necesario (ní, quizá, conveniC11te) que plamfi-
esposas perfectas. Sabemos que en su casa hay una, pero le que el texto como si fuera un ensayo. Pero piense ";"tes ~e .escri-
ofrecen1os otra, para que Ja que está en su casa pueda ser real~ bir, porque siempre hay que pensar antes ?~ escr~btr. Cmd~ la
mente una esposa, dedicarse a su hogar y a su carrera sin redacción y todos los detalles de presentacion y d1agramac10n.
at1gustias, y pasar más tie1npo con su familia. Después, mande la carta. Este ejercicio se va a incorporar a su
..
~34 CÓMO ESCRIBIR BIEN .E.'l ESPAÑOL CARTAS PROY.ESIONALES, COMERCIALES Y PRNADAS 335
vida real. Espero que escriba una buena carta y que reciba una Ejercicio 4
respuesta que le dé mucha satisfacción.
Usted compra, para probarlo, un nuevo yogur, una mari;a
diferente de cereal o de pescado congelado, etc. En la CaJa
Fjercícío 2 viene una dirección a la que usted puede dirigir sus comenta-
rlos, reclamaciones o sugerencias. Imagine que el yogur era
Busque el epistolario de alguna persona que usted admire. agrio, el cereal insoportablement(} dulce; _o que el pescado _no
Le sugiero algunos epistolarios: Cartas di! Simón Bolívar ( 1825-27) tenía fecha de vencimiento y no se atrev10 a comerlo. Escnba
(Madrid. América, 1922);Jasé Marti. Epistolario. Antología ('Madrid, a la dirección del sobre, quejándose. Busque un objetivo el.aro
Gredos, 1973); Rubfm Daría. Epistolario inédito ikl poeta con sus para su carta. ¿Solo quiere expresar su ~esconte.~to! ¿Se sien-
amigos español.es (Madrid, Taurus, 1963): Pablo Neruda. Para te estafado y exíge una reparación? ¿Que reparac10?' ~Le pare-
Al/Jertina Rrua. Episto/orio (Santiago, Dolmen, 1992}. ce que el producto es 1111 pelig~o ,par~ la salud publica Y "!ue
Lea unas cuantas cartas, no menos de quince o veinte, si es debe amenazar con una denunciar Lo importante de este ejer-
posible dirigidas a varias personas, para observar los cambios cicio es que usted tenga claro, antes de comenzar la carta, qué
de registro. Puede dividir las cartas en grupos, según los desti- quiere lograr con ella. Sí usted es escéptico y piens~ que van a
natarios. Luego haga un análisis del conjunto y de cada grupo, tirar su carta al canasto, diga que va a mandar copia a la ;;so-
indicando, por ejemplo, lo siguiente: ciación de consumidores, o a algún organismo por el esnlo.
Én todo caso, recuerde que a todo comerciante le tiene que
- ¿por qué ha escrito el autor cada carta o grupo de car- interesar un cliente.
tas? Una vez que hay-a escrito una carta satisfactoria, i~~ente con-
- ¿qué registro (tenor, campo, modo) puede identificar en testarla como si usted fuera el comerciante en cuesnon. Puede
cada carta o grupo de cartas? elegir la',; siguientes respuestas, e"'.tre otras q1:'e sin duda~ le ocu-
¿qué elecciones estilísticas le llaman la atención? rrirán a usted: a} agradecer la «mformac1on» so?_re el produc-
¿son buenas cartas?, ¿por qué sí o no? to y enviar un regalo; b) hacer caer la responsab1hdad er~ ~tros
¿qué agregan estas cartas a la idea de su autor que Ud. (por ejemplo, en el supermercado) y prometer mayor vig1l~n
ya tenía? cía en el futuro; e) decir que tendrán en cuenta sus sugerenoas,
- ¿tomaría esta..> cartas como modelo para escribir las suyas?, y no prometer nada, etc. Imagine este intercambio de cartas
¿por qué sí o no? como un combate en el que usted desempeña los dos papeles,
y trate de decidir quién ha escrito la carta más eficaz.
Ejercicio .3
Ejercicio 5
Escriba tres o cuatro cartas breves: felicitaciones, condo-
lencias, saludo navideño . imitación a una fiesta. Planifique por Escriba una carta presentándose a sí mismo para un tra-
completo lo que va a decir y qué registro va a usar. Cuando haya bajo. Esta carta va acompañada por su -;u~rículo, pero us,ted
terminado, relea cuidadosamente. ¿Lo que ha escrito le suena desea condensar en ella los puntos mas importantes de su
natural y espontáneo, o afectado? ¿Ha utilizado clichés? ¿Qué carrera, y convencer al posible empleador de que le haga una
imagen de usted mismo dan esas cartas? entrevista.
336 CÓMO ESCRIBIR BIEN UJ ESPAÑOL
Ejercicw6
TenVenda algo. E~criba una circular ofreciendo un producto.
ga en cuenta como es el producto que vende (esco'a al
cono~ca bien) Y.~
quiénes se dirige. Piense y planifi~ue ~~~':i CONCLUSIONES
t~xto. orgamzac1on de los contenidos recñstro humo• Se .
s1st1blc. ' o~ ' " a irre-
l. ESCRIBIR ES REFLEXIONAR SOBRE EL LENGUAJE
de un mundo que vamos configurando nosotros mismos. En la Pero en nuestra vida diaria tenemos mucho que escribir, y no
parte escrita de esa conversación, los que hablan y los que escu- podemos dejar de hacerlo por falta de vocación. Por suerte, se
chan casi nunca están frente a frente. Pero esta ausencia no puede aprender a escribir, y este libro muestra fe en esa posi-
nos hace menos reales, y hasta puede hacernos más poderosos, bilidad.
ya que los. textos escritos quedan, se guardan, y hay textos que Para aprender a escribir hay que reflexionar sobre el len·
han c~~iado el curso de la historia humana. Usar el lenguaje gu'!je y sobre la escritura, utilizando todas las fuentes de consulta
es adqmnr poder y responsabilidad social, es constituírse en de que dispongamos, y corrigiendo nuestros errores cuantas
ser hun_iano miembro de una comunidad de seres humanos. veces sea necesario. Como actividad complementaria e impres-
La escritura ocupa, en nuestra civilización, un lugar prepon- cindible, la lectura nos dará conocimiento del lenguaje y de las
derante, Ydebemos recordar que usar la escritura -no solo escri- formas de expresión. Con disciplina y empeño, se puede escri-
bir, sino leer-es un derecho yun riesgo que debemos asumir si bir muy bien.
queremos ser parte del mundo en que vivimos. Pero escribir también es un arte, y eso es lo que no puede
ser enseñado, pues depende de la relación entre una subjetivi-
8. EsCRIBIR ES EXPRESARNOS Y EXHIBIRNOS dad y una materia: la subjetividad del escritor, la materia lin-
güística. Si me tomo el trabajo de explicar con todos los detalles
Al escribir un texto, cualquiera que sea su género, y salvo que cómo se hace un mueble, alguien, siguiendo mis instrucciones,
se trate de :in formulario burocrático, creamos una imagen de hará un mueble exactamente igual al que yo tenía en mente.
nosotros nusmos. Lo que llamamos .voz,, del escritor es un con- Pero por má.• que explique cómo se compone un escrito, el
junto de atributos de esa persona (quizá desconocida) que esta- escritor va a producir una obra única: las palabras, las cone-
mos leyendo: sus ideas explícitas e implícitas, su talante, su esti- xiones de esas palabras con sus vivencias y sus fantaSÍas, y tam-
lo de co~unicación, su sentido del humor, sus preferencias, el bién el sonido, la consistencia ritmica, de las palabras, le impon-
papel sooal que se ~tribuye, su actimd ante lo que dice y ante drán límites o cursos. Habrá dos sillas iguales, pero no dos
los lectores. Al escnb!f nos mostramos va veces nos traicionamos· escritos iguales.
dejamos ver más de lo que queriamo~ dejar ver. La escritura e~ Vale la pena llegar al punto en el que, dominando a fondo
un ejercicio de vanidad y es a la vez un ejercicio de humildad las técnicas de escritura y habiendo meditado sobre las propie-
p:'es. se requier~ humildad para mostrarse ante los ojos de u~ dades de Ja texmalidad, seamos capaces de sentir la euforia de
pubbco. Yla escntura es un ejercicio de aprendizaje: del lenguaje crear un texto bien escrito y escrito a nuestra nianera., con nues-
Y de uno -~1smo. Esto le confiere un valor que va mucho más allá tro estilo. No hace falta que sea un poema inmortal. El resu-
de su ullhdad para sacar buenas notas o diplomas, o para pro- men de un libro, un artículo, una carta, pueden salirnos redon-
gresar ei: el trabajo. De ahí mi insistencia en que la escritura dos, pueden expresarnos y mostrarnos. Quizá porque el lenguaje
merece !lempo, esfuerzo y paciencia, y de ahí mí empeño en evi- es tanto sustancia como vehículo de nuestra subjetividad, pocos
tar recetas y en activar, en cambio, la creatividad. trab~jos son tan creativos como escribir un texto, y pocas haza-
ñas igualan a la de haberlo escrito a gusto de uno mismo.
9. EsCRIBIR ES UN OFICIO YES UN ARTE
, • No se nace sabiendo escribir, aunque sí se trae la inclina-
c1on y el talento para hacerlo: escribir suele ser una vocación.
APÉNDICES
APÉNDICE!
VEINTE SUGERENCIAS PARA ESCRIBIR MEJOR
que le va mejor. Pero escribir es una ceremonia, y debemos Se va a dormir satisfecho. A la mañana siguiente relee, empie-
cumplirla en cierto escenario y dadas ciertas condiciones. Es za a corregir una comita allí, una palabra allá... Descubre con
verdad que se han escrito grandes obras maestras en la cárcel, una opresión en el pecho que en realidad sería mejor borrar':'¡
en habitaciones heladas a la luz de un cabo de vela, en las trin- apartado 3 por completo, se resiste a hacerlo, vuelve a corr~gir
cheras de la guerra. La inspiración (y la buena obsesión) son los intentando dejar en su sitio el apartado 3, y no, no qued~ bien.
mejores afrodisíacos para escribir. Pero por qué ser heroicos Lo de siempre: tiene que reescribir gran parte del trabaJO que
cuando no hace fulta. Escribir es un oficio como cualquier otro, creía terminado. Hágalo. Gajes del oficio.
Si puede esperar un poco entre reescritura y reescritura,
y requiere ciertos preparativos y comodidades fisicas que indfr.
cen al buen rendimiento. mejor. Deje descansar el trabajo, es decir, su mente. Pero rec';1e~
de que va a llegar un punto en que no va a ~oder reescnbtr
más: hay un momento en que los textos, despues de mucho tra-
2. HÁGASE DUEÑO DE LA PÁGINA bajarlos, se vuelven intratables. Parecería que el autor Y~ ha
perdido el impulso que lo llevó a esc~ibir, y q;ie ignora como
No se esconda detrás de lo que escribe, y no se ponga por mejorar su escrito: lo acepta como s1. I~ hu~1era compuesto
delante de lo que escribe. Ser «dueño• quiere decir, aquí, que otro. Le parece, incluso, que antes escnb1a mejor ~ue ahora. F"'.
usted es el que sabe, usted está tomando la palabra, usted tiene un espejismo común y, probablemente, necesario, porque, SI
una voz que quiere que oigan. Ni murmure ni grite, hable con no, un texto sería por definición interminable.
el volumen necesario, explique lo necesario, aclare lo necesario, Ah, recuerde: escribir es reescribir, pero es importante que
calle sus opiniones donde no hagan falta, y acompañe a sus lec- no se note. Si cambia de ánimo, de día, de temperatura, de
tores en la lectura, guiándolos. Sea calmo, pero no demasiado vocabulario, que todos esos cambios no se vean en cad~ r~i;s
parsimonioso, muestre su entusiasmo (el entusiasmo es conta- tructuración o corrección de su texto. Tiene que crear la 1lus1on
gioso) y afirme solamente lo que sabe y lo que puede probar. Esas de que ha escrito de una vez, serena y definitivamente, con su
son las claves de la autoridad, que se reflejan en el estilo, en el pluma fluida y certera.
registro, en algún rasgo de humor. Horrorícese de la solemni-
dad, gran vicio del mal escritor, y evítela a toda costa.
4. TACHE
3. REESCRIBA
Nulla dies sine linea, ningún día sin escribir una línea y, tam-
bién, ningún día sin tachar una línea. , .
Escribir es reescribir, como le dirán todos los manuales de Cuando su borrador esté ya corregido, o cuando tenga la uln-
composición. No espere que le salga una frase definitiva al pri- ma versión en la computadora, pregúntese cómo podría redu-
mer intento. Por lo general, la frase definitiva requiere varios cir lo que ha escrito. Parecería que no se p~ede c¡uitar una Pª1:'-
intentos. Si durante un día de trabajo lo único que ha hecho es bra sin estropear el texto, pero no es as1: se puede reductr,
borrar y escribir encima, sin llegar a ninguna versión que le siempre, se pueden tachar palabr.is, giros, locuciones que no sig-
guste, dé el día por bien empleado: todos esos intentos eran nifican nada, párrafos enteros. .
necesarios y lo van a conducir a la redacción definitiva. Le doy, al azar y sin inquina, el n?mbre de algunos.candi-
Es probable que alguna noche cierre su ordenador pen- datos a desaparecer: •es importante senalar», •no generalicemos
sando que ya tiene el trabajo hecho y que le quedó muy bien. abusiv.arnente», upersonalmente creemos)>, «pür ello,>, «el mISmo
346 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAi<OL VEThlE SUGERENCIAS PARA ESCRIBIR MEJOR
(la mism~ los n1ísmos)») «supuestamente», <{nosotros creemos», timos ideas que recordamos y no sabemos de dónde salen: todo
~•indudablemente», ..:me gustaría agregar que>), «sin ánimo de eso es normal, es el plagio aceptable. No lo extienda a _rlag10 ale-
ser exhaustivos», «creemos que podemos afirmar», «quizá fuera voso. Sería un acto contra usted mismo, que perdena la opor-
útil recordar», «dicha problemática», «el problema deviene más tunidad de adueñarse del lenguaje para expresarse.
importante si»... También le sugiero que, al revisar el borra-
dor, elimine de la superficie de su texto por lo menos la mitad
6. DEJE L:N POCO DE TINTA EN EL TINTERO
de los adjetivos antepuestos («generosa contribución», «SU
encantadora hija», «interesante observación» ... ). Vea lo que Antes de irse a dormir o de apagar el ordenador o de ce:rar
digo más abajo sobre los adjetivos. el cuaderno, piense si tiene una idea, aun~ue si:ª vaga, de. como
va a seguir el escrito cuando lo retome. No deje el trabajo pre-
5. No COPIE A NADIE cisamente en el momento en que está empantanado, o al menos
no lo deje por mucho tiempo. Dése una vuelta.Juegue con el
Escribir nos enfrenta con una paradoja, la paradoja de la liber- perro, encienda el televisor unos minutos, y luego vuelva a su tra-
tad limitada. El lenguaje es de todos y de nadie en particular, o no bajo e intente dejarlo encaminado.
sería lenguaje: todo el mundo usa más o menos las mismas pala- Si queda un poco de tinta en el tintero, pued~ ser q~e por
bras (al menos en el núcleo de la vida cotidiana) y forma oracio- la mañana 0 cuando se siente de nuevo a trabajar, el tintero
nes de la núsma manera. Pero cada acto de palabra es único. esté lleno, porque la mente ha seguido trabapndo, oscura-
Cualquiera de nosotros ha pronunciado más de una vez, pro- mente, mientras usted dormía o hacía otras cosas.
bablemente, la frase «te quiero», con la intención de expresar cari-
ño hacia alguien. Si lleváramos un registro de todos los usos de
la expresión, explicando qué quisimos decir cada vez, tendríamos 7. EvnE LOS LUGARES COMUNES DESDE EL PRIMER BORRADOR
una lista de siguificados ligeramente distintos, o, incluso, muy dís- Haga el esfuerzo de evitar los lugares comunes desde el
!Íntos. Es probable que en dicha lista no hubiera dos significados primer borrador. Si no le gusta escribir ''.:s m~y importante
idénticos. La frase permanece siempre igual a sí misma, si la abs- señalar... >•, no se permita esa construcc1on ni una vez. Por
traemos de sus usos, pero cada empleo es único y diferente de
supuesto, es dificil librarse de algunas muletillas. A vec~s nos
los otros, ya que fueron únicos los contextos.
ponemos a escribir para explorar el tema, un poco a ciegas,
Sabiendo esto, procure expresarse siempre por sí mismo.
como una mera prolongación de lo que hemos llamado «pre-
Sí otro lo dijo mejor de lo que usted cree que puede decirlo, no
composición•. Si ese es su talante, escri~a como le salga: ya
copie al otro. Intente que cada ocasión de comunicarse le per-
borrará varias veces. Pero si tiene el trabajo pensado, tal como
tenezca, que haya una set'ial suya, su propio ordenamiento de la
frase, sus términos, su humor... Si no puede resistirse a la pala- se recomienda en este manual, no se deje tentar por los luga~
bra ajena, ha{,ú¡ junto con el otro: cite con comillas o pa;dfrasee res comunes. No solamente ahorrará tiempo, sino que notara
mencionando la fuente. Cuando cita, sigue hablando usted, que su estilo se vuelve más ágil, más perfilado, Y que va descu-
aunque su voz sea dual. Cuando copia, se ningunea a sí mismo. briendo nuevos modos de presentar sus temas, modos que
Escriba a fondo,jugándose, mostrándose. No se cancele. Por antes, cuando usaba clichés, no acudían a su mente. Los l':ga-
la índole del lenguaje, siempre nos copiamos un poco, repeti- res comunes embotan la mente, impiden, de hecho, escnbir
mos palabras, fórmulas, estructuras genéricas, y también repe- bien.
349
348 CÓMO ESCRllllR ll!EN EN ESPAÑOL
VEINTE SUGERENCIAS PARA ESCRIBIR MEJOR
tiene la bicicleta en la cabeza antes de empezar, pero debe dedi- te, realmente, es que, al escribir, usted se sienta acompañado por
carse con toda su energía a cada pieza, en el orden que quiera. otra presencia, y no como si le hablara a la pared, o (todavía
sin pensar en las otras, sin saltar de una a otra. Concéntrese y peor) como si hablara consigo mismo. Que su texto tenga la aper-
domine su ansiedad. Cuando haya trabajado bien todas las pie- tura y la fluidez de un diálogo, y también la cordialidad de un
zas o por lo menos algunas de ellas, empiece a poner todo jm1to diálogo. Escriba con claridad, que es la más preciada de las cor-
y a ver cómo funciona la bicicleta. tesías que puede tener un escritor hacia su lector, y, donde haga
falta, repita, resuma, remita: sea guía de su lector denl:Io del teXto.
Y no se vaya por las ramas, no canse al lector.
12. REv!SE PRIMERO LO PRIMERO Y DESPUÉS EL ESTILO Y DESPUÉ:S
LA, PRESENTAC!ÓN DEL ESCRITO
14. REPITA PALABRAS, SI HACE FALTA
Lo primero es la estructura general del trabajo: fíjese si ha
quedado bien claro cuál es la tesis o el tema, si no sobra ni falta No tenga miedo de repetir palabras. No es exactamente lo
nada, si a cada aspecto se le ha dedicado suficiente espacio, si mismo decir «Cervantes» que •el autor del Q};ijotll», ya que
no falla la lógica que organiza el escrito, si el conjunto es cohe- Cervantes escribió otros libros, de modo que, en ciertos con-
rente, la introducción adecuada, si el párrafo final recoge bien textos, •el autor del Q};ijote» puede significar algo ligeramente
sus ideas. En esta revisión quitará y agregará texto; cambiará distinto que «el autor del Persif2s>,, etc. Además, esas expresiones
de sitio palabras, párrafos o capítulos enteros; mejorará la mane- suenan infladas. Si está hablando de Cervantes y necesita nom-
ra de explicar las cosa•; quizá cuestione su vocabulario y eso lo brarlo otra vez, nómbrelo. Es preferible ser algo repetítivo que
lleve a reescribir muchas partes ... Reescriba. ser remilgado, y sí encima corre el riesgo de crear confusión,
Cuando ha dicho lo que quiere decir y de la manera más lógi- tanto peor. Ah, no escriba «el mismo» (en lugar de «registraron
ca y coherente, refme. Quite adjetivos y adverbios, cambie algún el coche y los ocupantes del mismo» queda mejor decir «regis-
sustantivo, borre el recalcitrante cliché que nunca falta, ponga las traron el coche y sus ocupantes»).
comas bien, las diéresis, los acentos, compruebe que ha dejado
sangrías en cada párrafo y un espacio en blanco después de cada 15. No DERROCHE ADJETIVOS
signo de puntuación ... Estas partes más mecánicas del escrito
conviene corregirlas al final, cuando termine de reescribir. A algunos escritores los adjetivos se les derraman por la
prosa, y no los sujetan. A mí me pasa también, y al releer tengo
13. GUÍE AL LEGI'OR t
¡
que usar sin misericordia la teda que dice «Suprimir». Evite
estos derroches. Cuanto más escatime los adjetivos, más signi-
Un escrito es un diálogo, y la lectura es la primera respuesta, ficativos van a ser. Evite, sobre todo, los muy desgastados: boni-
aunque usted no la oiga. Piense en el lector y piense con el lector. to, hermoso, estupendo, maravilloso. Evite también k>s raros o
Guíelo. No es necesario que se dirija directamente a esa figura más demasiado cultos: no diga tantalizador si puede decir tentador,
o menos imaginaria, diciendo «mi qnerido lector>, o «el lector esta- ni ignaro si puede decir ignorante.
rá preguntándose... ». Ni siquiera es necesario dar pistas de lecrura, Evite también el exceso de adjetivos antepuestos, que muchas
del tipo de «como hemos visto arriba», •resumiendo lo anterior,,, veces son meramente ornamentales. Cuando podemos elegir
etc., aunque no está nada mal dar esas pistas. Pero lo importan- un adjetivo antepuesto (a veces no se puede elegir libremente
l
VEl1''TE SUGERENCIAS PARA ESCRIBlR MEJOR 353
352 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL
pe~~ no «literario». Evite, en los textos expositivos, e,;1er en la ten- dos tipos de error. Primero, se presenta como una persona
tac1011 de que sus últimas palabras suenen líricas. No hace falta. pedante: Segundo, parece dar por supuesto que su lector
Todo eco literario fuera de lugar tiene el riesgo de la cursilería. también conoce a los autores que usted nombra, lo que ... Etc.
Tenga en cuenta los siguientes cálcu1os, hechos a ojo de buen
19. MODELE EL TEMPO DEL ESCRITO cubero. La.s oraciones cortas provocan teJ<tos sentenciosos, len-
tos. Los incisos interrumpen 1a respiración (lo que a veces es
Hay escrít~s veloces que no dejan respirar (ni pensar) al bueno, pero no hay que abusar y asfixiarse). Los paréntesis crean
l~ctor, hay escntos enrevesados que requieren volver atrás con- meandros que demoran el fluir de las frases. Las palabras lar-
tmuamente, hay escritos tan lentos que causan abunimiento 0 gas y terminadas en -mente, si se acumulan, embotan la atención
desesperación ... Le estoy hablando de la velocidad que usted del lector. Todas las informadones que no tengan que ver direc-
impone al texto, del modo en que maneja el tiempo de la lec- tamente con la argumentación central de un escrito causan fati-
tura. A veces escribo a la carrera y luego, al leerme, me tengo ga de lector, que es una enfermedad no mortal que nos aflige a
que leer a la carrera, con gran disgusto mío. Entonces deshago muchos y de la que nos curamos cerrando el libro dañino.
las oracio:ies, po'.1go puntos y comas, puntos y puntos y aparte. Cambie de paso rada tanto, para evitar la monotonía. Deslice
A veces anado parrafos entc;ros, si en la carrera dejé algo ape- algo gracioso, llame la atención con alguna palabra inesperada,
nas esbozado, o desperdicie una buena idea en dos palabras. abra un espacio en la información para relatar una anécdota,
Se trata de encontrar una respiración, el texto debe coincidir con machaque con una serie de repeticiones rápidas, dé solaz con
la respiración plácida de un lector interesado. Compare el rirmo una cita breve y oportuna. Por encima de todo: sepa que usted
de los dos fragmentos siguientes: regula el tempo, y que el lenguaje es, también, música, aunque
a) Ritmo veloz. y enrevesada. Nunca cite de memoria ni rnencione no se lea en voz alta.
(parafraseando o dejando inconclusa la cita, como sí fuera
archiconodda) a autores que conoce de segunda o tercera 20. SEA BUEN LEGI'OR DE SÍ MISMO
mano o de los que no conoce más que el nombre, ni crea
que por estar empedrada de nombres y presuponer en el lec- Escribir es también leer. No conozco a nadie que pueda escri-
tor -con cierta cortesía muy discutible, pues no se sabe si es bir sin leer y releer lo que ha escrito, para corregir, tachar, y poder
conesía o desconsideración- lecturas que es difícil que tenga continuar. Aprenda a leerse. Las mujeres nos mirarnos al espejo
o que recuerde. su prosa parecerá más brillante, reflejándo- con atención despiadada, no perdonamos ninguna imperfec-
lo a usted, y su lect<Jr se creerá más inteligente. ción y, si pudiéramos, nos reconstruiríamos la rara después de una
b) Ri.tmo lento y pesado. Nunca haga citas de memoria. Debe ser noche de mal dormir. Los textos son más fü.dles de reconstruir que
escrupuloso en el manejo de las fuentes. Evite también una ca& la cara. Léalos con atención despiadada (y amorosa, también:
tumbre que afea mucho Ja prosa de algunas personas. Me son su imagen) y corrija alegremente todo lo que no le guste.
refiero a la costumbre de dejar caer nombres de autores al Vuelva a leerse, con la misma actitud, y vuelva a corregirse.
pasar, citando de manera laxa, o bien dejando las citas incon- Otras veces, sobre todo cuando han pasado meses o años y
clusas. Generalmente, se deja inconcluso lo que es consabido el texto ya no está en composición, léase por el placer de leer-
por Jos interlocutores. Como este no puede ser siempre el se. Va a descubrir a una persona que quería expresarse y lo
caso, creará usted confusión y hastío en el lector. AJ tratar sus logró como pudo. Es posible que celebre y que perdone, como
fuentes con descuido, o dejar caer nombres, usted comete celebramos y perdonamos los textos de nuestros semejantes.
l
GLOSARIO 357
Esta asociación se produce por razones personales, emocio- la interacción verbal, sus relaciones, el entorno físico, el tema,
nales, que pueden variar. Pero algunas connotaciones son el propósito, y el canal de comunicación. No todos estos ele-
predecibles. Así, buitre suscita connotaciones negativas, y luz mentos son siempre operativos, sino solamente aquellos que, por
connotaciones positivas. Las connotaciones se originan tanto necesidades de la interpretación o por explícitas indicaciones
en la índole misma del significado referencial como en el del texto, son necesarios para que se consume la comunica-
hábito de usar ciertas palabras en ciertos contextos. Aguja se ción. En la lengua escrita no siempre es pertinente conocer el
asocia con costura, pero también (y quizá más) con inyec- entorno de producción o de recepción del texto, que, por otra
ciones, ya que el contexto del hospital es familiar para noso- parte, son dos procesos diferenciados y por lo general distan-
tros, probablemente más que el contexto de las labores de tes en el espacio y en el tiempo, al contrario de lo que sucede
costura. La dimensión personal de las connotaciones es la en la conversación. La noción de registro (véase) surge de la rela-
más difícil de prever. Sortija tiene, para mí, connotaciones ción entre ciertos rasgos del contexto situacional y el texto.
muy agradables, más que su sinónimo anilúr. un anillo es sola- 2) Contexto psicológico. Es el conjunto de supuestos nece-
mente un anillo, pero una sortija me sugiere un objeto más sarios para interpretar un texto. Estos supuestos son datos
raro, quizá mágico, como en los cuentos infantiles donde recogidos por la percepción o la memoria de los participan-
aprendí la palabra, no usada normalmente en mi dialecto. tes de una interacción, y el hablante los considera comparti-
Las marcas comerciales revelan un análisis muy cuidadoso de dos por su interlocutor. Pueden distinguirse dos niveles con-
todas las connotaciones posibles. Las marcas de modelos de textuales. En el nivel más general están las estructuras de
automóviles, por ejemplo, sugieren lujo, poder, seguridad: conocimiento internalizadas por los miembros de una comu-
puede existir un modelo <<cóndor)> o «fiesta>), pero no un nidad, es decir, las creencias, opiniones y valores sobre la rea-
modelo «lago», que haga pensar en accidentes, o un modelo lidad que permiten interpretar los textos. El segundo nivel, más
«ruiseñor», que evoque la fragilidad del pajarillo. específico, está formado por los supuestos que el interlocutor
Por qué nos interesa esta noción: Porque al usar el lenguaje pone- debe evocar para comprender un texto determinado. Estos
mos en acción posibles connotaciones, y debemos hacerlo a supuestos pueden ser de mayor o menor generalidad; algunos
sabiendas: debemos explotar las connotaciones positivas, y habrán sido explícitamente transmitidos en otro punto de la
no dejar deslizar connotaciones negativas, es decir, no ade- misma interacción, otros se habrán dado por presentes o fácil-
cuadas a los fines de lo que queremos transmitir, o, peor aún, mente evocables. El interlocutor infiere estos supuestos, que
contraproducentes. se van modificando a medida que avanza el intercambio, siem-
pre con la ayuda del texto.
CONTEXTO: Es el conjunto de información extratextual que resul- Por qué nos interesa esta noción: Al componer un texto, debe-
ta pertinente para la interpretación de un texto. Este con- mos ser conscientes de cómo lo conectamos con los supues-
junto es, en principio, expandible: desde el material verbal tos necesarios para su interpretación, teniendo en cuenta que
inmediato (a veces llamado «Cotexto») hasta el contexto la interpretación de un escrito queda diferida en el tiempo y
macrosocial gobernado por las condiciones políticas, socia- el espacio. Los errores de contextualización pueden producir
les y culturales de distribución de poder. En este libro hemos la ininteligibilidad del texto.
trabajado sobre todo con dos perspectivas sobre el contexto:
1) el contexto situacional y 2) el contexto psicológico. CORTESÍA VERBAL: Conjunto de procedimientos comunicativos
1) Contexto situacional. Está formado por los participantes de que sirven para lograr mejor el propósito de la comunica-
361
CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GLOSARIO
ción. No se trata de adornos o rebuscamientos, sino de estta- Par qué nos interesa esta noción Porque el uso eficaz de los i;ro-
tegias para lograr presentar una imagen favorable de uno cedimientos que sirven para configurar la imagen de emisor
mismo y para establecer una relación cómoda con el interlo- y receptor es fundamental para asegurar que el texto cu~
cutor, que permita ganar eficacia o influencia. Según una teo- plirá su función. No podemos ofender al lector m acercan-
ría muy difundida, Ja imagen pública de cada interlocutor donos mucho ni alejándonos mucho, y debemos darle nna
tiene un aspecto positivo y otro negativo. El primero consiste en buena imagen de nosotros como autores.
la necesidad de ser aprobado por los demás, de ser apreciado
DENOTACIÓN: Propiedad de las expresiones de referirse a un obje-
e incluido en un grupo. El segundo es el deseo de que nadie
to o entidad. Véase REFERENCIA y CONNCTIACIÓN.
nos imponga nada, de conservar nuestra independencia.
Cuando tuteamos a alguien, por ejemplo, usando el derecho DIALECTO: Variedad geográfica o social de una lengua. o sea,
a hacerlo y propiciando que el otro también nos tutee, esta- variedad que corresponde a cierta comunidad y a cierta clase
mos ejerciendo cortesía positiva, pues con el tuteo se logra socioeconómica y nivel de educación. Hay, por ejemplo, un
la incorporación de alguien a un grupo de iguales, es decir, se dialecto puertorriqueño, con sus peculiaridades fonéticas,
refuerza la solidaridad. El usteo, en cambio, pone cierta dis- léxicas y gramaticales, y, dentro de ese dialecto, variedades
tancia, la cual puede funcionar muy bien para indicar respe- sociales que se reflejan en los mismos ámbitos, el fonético, el
to, deferencia, deseo de no meterse en el terreno del otro. léxico, el gramatical. Todos los hablantes de la comunidad
La serie de recursos lingüísticos para manipular la cortesía puertorriqueña tendrán un acento parecido, y cierto l~xico y
es muy extensa, y va desde la entonación hasta el tipo de construcciones específicas, pero dentro de estas se diferen-
comentario que se hace en determinada situación, pasando ciarán variedades debidas a posiciones sociales y cul tt1rales. A
por el léxico y las construcciones gramaticales. Si una colega su vez, el dialecto puertorriqueño se integra en un grupo de
le dice a otta •qué bonitos zapatos llevas• está reforzando la dialectos, generalmente llamado «Caribeño», que tienen carac-
cortesía positiva, la solidaridad. Sí, en cambio, una colega uti- terísticas comunes. Toda lengua puede ser vista como un con-
liza una fórmula muy elaborada para pedir algo de poca impor- junto de dialectos, entre los cuales sobresale el llamado «e~rán
tancia, por ejemplo •¿si no te importa, me harías el favor de dar», es decir, el más general y culto, que es el que tiene
pasarme tu bolígrafo un momento ... ?» está cuidando la ima- prestigio social y el que se usa en .la escritu~~ (aunque .en la
gen negativa de su interlocutora, exhibiendo deferencia. Cada escritura privada e íntima se uuhzan tamb1en otros dialec-
comunidad tiene correlaciones distintas entre los recursos tos). Todos hablamos un dialecto geográfico del español y lID
lingüísticos y el manejo de la distancia y el poder en la comu- dialecto social, con sus normas y características.
nicación. Los textos escritos también revelan cortesía. Por Por qué nos interesa esta rwciim: Es un error ver la lengua espa-
ejemplo, si el registro tiende a informal, el texto acentuará ñola como monolítica. El español ha alcanzado una unidad
la cortesía positiva, y sí el registro tiende a formal, la negati- admirable, más admirable todavía porque ofrece también una
va. Por supuesto, las elecciones pueden ser desafortunadas. y gran diversidad dialectal, que le confiere tantos recursos expre-
el lector puede interpretat la cortesía positiva como exceso de sivos diferentes. Todo escritor, si da valor al español, debe dar
confianza, y la negativa como intento antipático de poner dis- valor a la riqueza de su diversidad, aunque aspire, como debe
tancias. El vocabulario de un texto es un buen termómetro de ser, a escribir en el español general culto, y evite expresiones
la cortesía intentada por el autor, y también lo son sus cálcu- locales o demasiado minoritarias en su prosa, salvo que el uso
los sobre qué información es nueva para el lector. de estas expresiones cumpla algún propósito.
362 C'.ÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GLOSARIO 363
GÉNERO: Agru~ción de textos que cumplen funciones sociales que escríbir en buen espaúol, y el buen español es el descrito
s1;n1lares y tienen ciertas características formales en común: por las gramáticas, el que goza de prestigio y aceptación gene-
g~~e~o epístofar, género expositivo. Cada género puede sulr ral. A veces el uso no coincide con las prescripciones grama-
d1vid1rse en vanos subgéneros (véase el cap. 1, primera parte). ticales, pero el buen escritor, para tomar decisiones, debe cono-
En muchos tratados sobre textualidad se usan de forma inter- cer las reglas, o, al menos, dónde buscar las reglas y cómo
cambiable las expresiones «género» y •tipo de texto». La única interpretarlas, cuando tiene dudas.
ventaja de la primera es que recoge el rasgo «función social»,
lo que permite incluir fa noción de «Comunidad discursiva• 0 INFERENCIA: Tipo de significado contextua\ (es decir, no lógico)
conjunto d_e p~rsonas que se comunican habitualmente p~r que no se transmite explícitamente, sino que es calculado por
escrito segun aertas pautas, por razones de profesión, activi- los oyentes o lectores según ciertos principios que estudia la
dades, o afinidades de cualquier naturaleza. Otras veces se pragmática. A este proceso deductivo se lo llama también
habla indistintamente de género y registro, lo que es confuso, inferencia, y el verbo que corresponde es inferir. Por ejemplo:
ya qu~ fa noción de registro (véase aquí y en el cap. 2) se apli- la expresión estoy cansada, dicha por una hablante cuando la
ca a ciertos rasgos que relacionan un texto con el tema los invitan a salir, deja inferir que la hablante no acepta la invi-
q'.1e dialogan, y el medio de comunicación, y es por lo tanto 'una tación, o duda en aceptarla, aunque no lo diga. En la comu-
dimensión estilística del texto. Pero estas nociones están inter- nicación, las inferencias son tanto o más importantes, a veces,
conectadas, y es fácil superponerlas. que los significados transmitidos expresamente. Una de las
Por qué nos inúires~ esta noción: Como hemos visto en el cuerpo del tareas ITu'ís dilkiles del escritor es ir decidiendo qué significados
hbro (cap. 1 y ~assim) debemos conocer las convenciones que hará explícitos y qué significados quedarán a cargo del proceso
regulan cada genero, s1 queremos escribir buenos textos. inferencia! de los lectores (véase cap. 4).
Por qué nos inúm!Sa esta. noción: Todas las nociones que se refieren
GRAMÁTICA: Esta expresión se usa con diferentes significados. En a los principios de la comunicación lingüística son útiles para
este manual (cap. 3) hemos considerado tres significados, y tener conciencia de cómo usamos el lenguaje, y para poder,
hem°,s .hablado de gramática desrrifü1a, gramál.iw. presmptiva y consecuentemente, usarlo mejor.
g;ramatua mental. La gramática descriptiva es el estudio de
t~d~s las estr_uc~uras de la lengua: fónicas, morfológicas, sin- INTERPRETACIÓN: Proceso mediante el cual atribuimos sentido a
tacucas, semanucas. Esta gramática estudia todos los sonidos un texto, Tiene dos aspectos principales: la descodificación y
morfos, combinaciones de palabras y unidades de sianificad~ la inferencia. La descodíficadón nos permite recuperar los
que se ~ealizan efectivamente en determinada leng:;,., 0 que significados archivados en el código, por ejemplo los signifi-
son posibles, de acuerdo con las regularidades observadas del cados de los morfemas (masculino, plural, tiempo pasado,
~ste~a (véase SINTAXIS}. La gramática prescriptiva o norma- etc.), el significado de las palabras, de los modismos, etc. La
tiva, s1". descmdar la descripción, atiende especialmente a inferencia es el proceso por el cual el oyente o lector añade
dete;m1.nar fas construcciones, vocablos y maneras de expre- significado no expresado pero sí implicado por el hablante;
~ s1gmficados que se consideran aceptables en una comu- mediante este proceso, que obedece a ciertos principios (véase
nidad. La gramática mental es el conocimiento inconsciente INFERENCIA) podemos comprender un texto.
de la propia lengua. Por qué nos interesa esta noción: Al componer un texto, debe-
Por qué nos ínteresa esta ncción: Porque para escribir bien hay mos hacer las previsiones necesarias para que el lector pueda
364 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GLOSARIO 365
descodificar lo codificado y añadir todas las inferencias nece- METÁFORA.: Figura que consiste en asociar dos ideas distintas, sus-
sarias para recuperar el significado implícito. Con este fin tituyendo una por la otra, como en Pam es un león Pº'. 'Paco
tendremos en cuenta, por ejemplo, el vocabulario que elegi- es valiente, es fuerte, etc.' Es muy frecuente que el termmo
mos según el género y el público lector, y cuidaremos de que metafórico sea más concreto que el término suprimido, como
el contexto provea los medios para que las inferencias surjan en el ejemplo dado, y en otros del_ lenguaje fa~ili~~: e;nhote
naturalmente. llamíento por 'obstrucción de una via de comun1cac1or1 , res~~
ca por 'malestar que se siente al día siguiente ~e haber be~1-
INTERTEXTUALIDAD: Es una de las propiedades básicas de los tex- do mucho alcohol', etc. En estos casos, la metáfora hace mas
tos, por la cual unos textos se conectan con otros textos ante- comprensible el concepto abstracto o poco familiar, y cumple
riores o posibles, y comparten con ellos una serie de rasgos una impartante función cognoscitiva. •
de diferente tipo. Todos los textos que pertenecen al mismo Por qué nos interesa esta noción: La metáfora es la figura mas fre-
género o subgénero tienen rasgos en común. Las cartas fami- cuente (tanto, que a veces pasa inadvertida) y la que m<:JOr nos
liares, por ejemplo, que pueden verse como un subgénero, puede ayudar a expresarnos con claridad, cuando hace falta,
comparten el formato, el registro, la organización, las fórmu- y con originalidad, si cabe.
las. Por lo general cuando se habla de intertextualidad se pien-
sa en el hecho de que en un texto resuenan otros textos ante- METONIMIA: Figura que consiste en designar una cosapor el non;-
riores, que son así evocados, están presentes para el lector. bre de otra que tiene con la primera una relacion de conti-
Por qué nos interesa esta noción: Cuando escribimos evocamos güidad (como en los pi,es de la ca"'.ª• que es el lu,gar de los
otros textos conocidos, cor1sciente o inconscientemente. No pies), o bien otras relaciones, por ejemplo: el connnente por
existen textos desconectados de las redes textuales, y por lo el contenido (tomarse u.na ropa de vino); el autor por la obra (leer
tanto debemos conocer esta propiedad y explotarla para escri- a Platón), etc. Los términos que asocia la metonimia no per-
bir mejor.
tenecen, como en el caso de la metáfora, a dos campos semán·
LEXEMA: véase UNIDAD LÉXICA. ricos distintos (véase METÁFORA).
Por qué nos interesa esta noción: Las figuras retóricas deb~n ser
LÉXICO: véase UNIDAD LÉXICA. conocidas, distinguidas y puestas en uso por los esc~1tores,
evitando en lo pasible, claro está, el riesgo de produnr figu-
NEOLOGISMO: Vocablo, acepción de un vocablo o expresión de ras nuevas, pero desafortunadas.
creación reciente (disco duro, teléfono mávi~ súper). Los neolo-
gismos proceden, ya del latín y el griego (en su tiempo teléf~ MORFEMA: Es la unidad mínima gramatical (por opasición a uni-
no, televisor, láser, fueron neologismos), ya de otras lenguas dad mínima fonológica), es decir, la unidad más peq:'eña,
extranjeras, sobre todo el inglés y el francés. que no puede ser descompuesta en otras, salvo fonologica-
Por qué nos interesa esta nocUin: Debemos reconocer los neolo- mente. Los morfemas son unidades abstractas, que a veces
gismos y saber asignarlos a distintos niveles estilísticos y de no se realizan. Por ejemplo, el morfema de plural en espa-
registro. Como sucede, en general, con las palabras extranjeras ñol puede ser -s, -es, o O (mesa, mesas; ají, ajíes; crisis, crisis). Se
(véase PRÉSTAMO), conviene asegurarse de que no contamos llaman morfemas ligados a los que van unidos a otros.
con una palabra española equivalente, y preferir el neologis- Par qué nos interesa esta noción: Porque tenemos que conocer el
mo si es la más difundida y comprensible. vocabulario básico de la gramática, al menos para compren-
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366 CÓMO ESCRIBIR ll!EN EN ESPk';OL Gl.OSARIO
der lo gue dicen las gramáticas y diccionarios, y poder con- ·Significado coutextual•. porque surge en ~ada situación de
sultarlos cuando tenemos dudas. l.os morfemas son motivo de habla particular y según supuestos compartidos por los mter-
muchas dudas: piénsese en la dificultad de formar ciertos Jocutores (véase C01''TEXTO) •• Significado del hablante•, por-
femeninos, de conjugar verbos irregulares, etc. que deriva de las intenciones con _que se usan las expreSt':'"
nes lingüísticas, intenciones que el mt~rlocutor pue~e '?fenr
NORMA: Es el conjunto de reglas gue rigen los usos lingüísticos en cada caso, con cierta independencia de lo que s1gmfi~ue
considerados •Correctos» en una comunidad de hablantes. literalmente la expresión utilizada (piénsese en las 1romas,
No todos los hablantes cumplen con las reglas, ni siquiera los por ejemplo). La intención del hablante, calculada o acfü~
gue han recibido muy buena instrucción gramatical y cono- nada por el oyente, hace patente lo_ implícito, ~':1e es parte
cen las reglas. Por ejemplo: una cantidad sorprendente de esencial del significado que uno quiere transmtt!f. La prag-
hablantes cultos de distintos sitios del mundo hispáiúco dicen mática estudia los principios que hacen posible el buen enten-
(<tú canta.~tes)) en lugar de «tú cantaste», agregando el sonido dimiento entre los interlocutores.
/ s/ por analogía cou las demás formas verbales de segunda Por qué nos interesa esta noción: La escr'.tura ~os obliga a cons-
persona (cantas, tienes, estabas, hubieras dicho, etc.). Las gra- truir textos sin tener delante al destmatano o mterlocutor.
máticas prescríptivas o normativas, y los diccionarios y obras Debemos hacer, al escribir. una serie de cálculos de los _cuales
de consulta, intentan inculcar en jóvenes y adultos las nor- depende el éxito de la comunicación, y uno de es_o~ calculo~
mas del uso considerado •correcto». Se considera que estas se relaciona con cuánta información hacer exphc1ta, Y que
normas son más importantes en la lengua escrita, que se ve dejar implícito pero inferible. Como la p:agmátka nos reve-
como nn reflejo de la norma social. la los principios según los cuales hacemos mfere~cras, s;1 cono-
Por qué 1ws interesa esta nocúín: Porgue debemos respetar escru- cimiento puede ser muy provechoso. En un ~~udo mas gene-
pulosamente la norma en nuestros escritos, para asegurarles ral, la pragmática nos enseña cuáles las condiciones en. qu~ _se
la máxima aceptabilidad social y eficacia. desarroila Ja comunicación, en nuestro caso la comumcacmn
escrita, y por qué razones puede fracasar.
PRÉSTA.\!O: Vocablo extranjero recibido y adaptado fónica y mor-
foló¡¡icarnente, para funcionar en una nueva lengua como PLEONASMO: Figura que consiste en dar la mis:r'a info:ma~ió?
propio. Algunos préstamos del español: fútbol (del inglésfoot de dos (o más) maneras: yo a ti te digo (se repite el ~bJet~ md1-
ball); gol (del inglés goal); chófer o, mejor, chofer (del francés recto), me robaron mi billetera (me y rrá reiteran la m1_sm~ mfor-
chauffeur), etc. No todos los préstamos están totalmente inte- mación), etc. Hay que distinguir entre redund~c1as mevi?'-
grados fonética y rnorfológicamente en el español (ver cap. 5). bles y otras que deben ~'vitarse. Algunas d~ _las primeras estan
Por qué nos interesa esta nación: No debemos vacilar en usar codificadas por la gramática: en la expres1on la. gata ála~ca el
préstamos si creemos que esa palabra, aunque extranjera, es femenino está expresado, pleonásticamente, por el a~uculo,
la más difundida y la gue van a entender mejor los lectores. Por el sustantivo y por el adjetivo, y así debe ser :n espanol. Las
construcciones pleonásticas gue de_bemos e'1tar son. las no
PRAGMÁTICA: Parte de la lingüística que estudia la relación entre gramaticales, del tipo de periodo de tiempo, atendo de frio, aroa
el lenguaje y su usuario. La pragmática estudia el significado tecimil!nto rea~ aeddente fortmto, obsequw gratuito, pows opuestos,
gue adquiere el lenguaje al ser usado. Este significado se llama repetir otra vez, utopía inalcanzable, etc. En todos estos rnsos, el
«significado contextual» o «significado del hablante». primer miembro de Ja construcción con nene ya el s1gmfica-
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368 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESP&'10L GLOSARIO
do del segundo miembro, que es, por lo tanto, indebidamente confundir la noción más amplia y vaga de estilo con la más
repetitivo. estricta de registro. Aunque el regisU:o su~ge de elec~i~nes
Por qué nos interesa esa noción: Nos interesa sobre todo como entre disponibilidades, el contexto s1tuaoonal condic10~a
fenómeno estilístico, para identificar mejor las redundancias fuertemente esas elecciones, dando menos margen de mam.o-
y evitarlas. bra al hablante. Además, hay subsistemas lingüísticos que sir-
ven, de manera directa, para expresar rasgos del contexto.
i
PROPOSICIÓN: Unidad de contenido, que puede expresarse por Los factores del contexto que determinan el registro son el
medio de una oración. campo (de qué se trata en el intercambio), el tenor (~uiénes
~ 1
participan y qué relaciones tie.nen)J el modo (que papel
Por qué nos interesa esta noción: El contenido de un texto es un
conjunto de proposiciones jerarquizadas, es decir, organizadas desempeña el lenguaje en esa s1tuac1on).
según su importancia en relación con el tema básico del texto. Por qué nos interesa esta noción: Selecc~o~ar acertadamen~e, ~l
El autor debe ser consciente de cómo maneja las unidades registro es parte esencial de la compos1c10n de un texto. Es uul
11 de contenido de su escrito. conocer una teoría del registro (aunque parezca algo abs-
1
trusa) para reflexionar mejor sobre las elecciones estilísticas
REFERENCIA: Relación entre una expresión lingüística y la entidad que hacemos o deberíamos hacer.
del mundo a la que esta expresión se refiere. Por ejemplo, el
referente de la expresión libro es el objeto «libro». Véase CON- RELEVANCIA: Es una propiedad de la información, que no coin-
NOTACIÓN. cide exactamente con lo que en el lenguaje corriente se llama
Por qué nos interesa esta noción: El significado referencial de las pertinencia. Lo pertinente es lo que viene al caso; lo rele-
palabras es el básico, el que suele encontrarse en el diccionario, vante es lo que rinde más con menos esfu.erzo: l~ mform~
y el primero que debemos conocer para usar apropiadamente ción más relevante es la que nos proporoona mas conoo-
un término. Pero también debemos tener en cuenta que no miento exigÍéndonos menos esfuerzo de procesamiento. Para
todo el significado de las expresiones es referencial, que hay lograr una relevancia óptima, la información nueva debe aso-
otros significados superpuestos, y que al escribir debemos pres- ciarse a información ya conocida, que puede estar en la memo-
tar atención a todos, ya que nunca escribimos fuera de un con- ria de los interlocutores o en la situación que comparten. 1':1
texto, y el contexto es el que dota a las expresiones de todos sus interconectarse la información conocida con la nueva, se den-
significados, incluso los que contradicen el referencial. Así, va más conocimiento con menos esfuerzo.
cuando decimos irónicamente «Juan es un genio», la palabra Por qué nos interesa esta noción: Sin tener en cuenta las teorías
«genio» significa allí que Juan es un tonto, o algo semejante, y cognoscitivas que sustentan este concepto, y desde un punto
eso contradice el significado referencial del sustantivo «genio». de vista práctico, tener conciencia del problema de la rele-
vancia nos permitirá enfocar mejor nuestros actos .de co~_u
REGISTRO: Conjunto de rasgos semánticos de un texto que tie- nicación escritos, y transmitir todo lo que tenemos mtenc1on
nen una correlación directa con el contexto de la situación en de transmitir de un modo que sea relativamente fácil de pro-
que se produce dicho texto (véase el cap. 2). El registro resul- cesar para lector.
ta de una serie de elecciones hechas por el hablante, por lo
cual se asocia al concepto de estilo, que también se produce REMA: Uno de los componentes del nivel informativo de la~ ora·
mediante selección de disponibilidades. Pero no debemos dones. El rema (por oposición a TEMA, véase) transmite 12
370 CÓMO ESCRIBIR BIEN EN ESPAÑOL GLOSARIO
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información nueva, o que el hablante o escritor considera tuales y no literales, es decir, dos o tres palabras que tienen la
nueva, es decir, desconocida para sus interlocutores. misma referencia (véase) pueden ser adecuadas a ciertos con-
Por qué nos interesa esta noción: Se la encontrará en muchos tra- textos pero no a otros, por lo cual no son intercambiables
tados dedicados al estudio de la distribución de la información (véanse caps. 2 y 5).
li'',1¡·
y el orden de palabras, que son fenómenos importantísimos Por qué nos interesa esta noción: La elección del vocabulario es
de los textos escritos. uno de los trabajos más dificiles del escritor. Conviene tener
conciencia de las limitaciones de los sinónimos para el uso
RETÓRICA: En el uso que le damos en este manual, que es el más efectivo de la lengua. Antes de adoptar un sinónimo que no
frecuente en teoría de la composición, retórica designa el estamos acostumbrados a usar, nos conviene cerciorarnos de
conjunto de procedimientos que sirven para expresar más todos sus valores contextuales.
efectivamente algo: grados de formalidad, vocabulario, estilo,
estructura general del texto, etc. El escritor debe planificar los SINTAXIS: Parte de la lingüística que estudia la disposición de las
recursos retóricos que utilizará en su trabajo, de acuerdo con palabras en la oración, es decir, las combinaciones posibles
las otras variables (tema, destinatarios, función del texto, etc.). de palabras que constituyen secuencias bien formadas.
(Véase cap. 6). Por qué nos interesa esta noción: Es imposible escribir bien si se
Por qué nos interesa esta noción: Una de las claves del buen escri- ignoran las relaciones entre las palabras: qué preposiciones van
bir es llegar a dominar los recursos de expresión más efecti- con ciertos verbos, por ejemplo, o qué concordancia debe
vos. La retórica, entendida en este sentido, debe ser objeto de existir entre sujeto y verbo. Cuando se habla de «reglas gra-
estudio para el escritor, que encontrará muchas exposiciones maticales» suele pensarse, en realidad, en reglas sintácticas, ya
interesantes, generalmente encabezadas por esta palabra, en que la sintaxis es la parte más estudiada de la gramática (véase
libros dedicados a la escritura. GRA:\1ÁTICA). Ahora bien, todos los hablantes nativos de una
lengua dominan su sintaxis, pues son capaces de construir,
SEMÁNTICA: Estudio de los significados de las palabras y expre-
al hablar, oraciones bien formadas. Pero al escribir surgen
siones lingüísticas. El significado es, en principio, la relación
dudas (especialmente sobre ciertas construcciones más com-
que existe entre las formas lingüísticas y el mundo: la semán-
plejas, o sobre detalles) y es necesario recurrir a gramáticas y
tica estudia cómo se conecta el lenguaje con las entidades del
diccionarios y reflexionar sobre las reglas sintácticas, que nm
mundo. La semántica estudia también la relación entre la
permiten ver cuál es el sistema de regularidades en la cons-
descripción de un estado de cosas y ese estado de cosas: si
hay correspondencia entre el estado de cosas y su descrip- trucción de las oraciones correctas del español, sistema que
ción, esta es verdadera; si no, falsa. debemos conocer y respetar.
Por qué nos interesa esta noción: El lenguaje es el sistema más efi-
ciente, complejo y dúctil que poseemos los seres humanos para TEMA: Usado en oposición a REMA (véase), este término se usa par<
expresar significado; toda reflexión sobre el modo de significar denominar un tipo de información, la que se considera cono
del lenguaje puede ser útil para utilizarlo con mayor provecho. cida por ambos interlocutores. El ámbito al que se aplica h
noción de tema no es el texto, sino la oración.
SINÓNIMO: Palabra que tiene la misma significación que otra, o, Por qué nos interesa esta noción: La distribución de la informaciór
más comúnmente, significación muy semejante, aunque no y el orden de palabras son dos de los fenómenos más impor
idéntica. Las diferencias entre sinónimos son a veces contex- tan tes de la escritura. Las nociones de tema y rema, muy tra
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tadas, ayudarán al escritor a reflexionar mejor sobre fenó- en determinados géneros textuales.
menos gramaticales e informativos. El texto presenta alguna combinación de distintos grados de
las siguientes dimensiones, presentadas aquí como oposicio-
TExro: Estructura verbal que es producto de cada uso efectivo del nes (véase cap. 2):
lenguaje, realizado con el propósito de participar en una inte- narratividad vs. no narratividad
racción lingüística, de la naturaleza que sea. En nuestras con- interacción vs. información
tribuciones a la interacción lingüística, que es un proceso información abstracta/lógica vs. información situacional
ininterrumpido a lo largo de la vida, no podemos producir uni- estilo objetivo vs. estilo subjetivo
dades menores que textos, aunque estén compuestos de una Por qué nos interesa esta noción: Aprender a redactar es apren-
palabra (o de un morfema). El lenguaje se manifiesta, por lo der a componer textos. Son textos los objetos de todos nues-
tanto, mediante textos, y por eso es por lo que, para muchos tros desvelos en este libro.
lingüistas, es en los textos donde deben estudiarse las pro-
piedades del lenguaje, y no en oraciones aisladas, precons- UNIDAD LÉXICA (también llamada ÍTEM LÉXICO o LEXEMA): Una
truidas para el análisis. palabra, parte del vocabulario de una lengua, cuyo significa-
Por lo general, se atribuyen a los textos las siguientes carac- do básico y su función son más o menos invariables, pero cuya
terísticas: forma puede variar por razones gramaticales. La palabra actor,
- Cada texto está conectado con otros textos, que pertene- por ejemplo, presenta las formas actriz, actores, actrices, la pala-
cen a distintas constelaciones: los textos previos pertenecientes bra caber se realiza también como quepo, cupe, etc. En el dic-
al mismo género, al mismo hablante, a la misma situación, a cionario se encontrará siempre la forma masculina singular de
la historia de una serie de interacciones, etc., y, en un sentido la unidad léxica, si es un sustantivo, y el infinitivo, si es un
mucho más general, a los textos que constituyen el contexto verbo. Cuando una palabra tiene casos, es decir, formas dis-
básico o comunitario (véase CO::-ITEXTO). También está conec- tintas para la función sintáctica de complemento directo o
tado, en ocasiones (y sobre todo el texto oral) con la situa- complemento indirecto, como sucede con los pronombres, se
ción de interacción (véase CONTEXTO). encontrarán en el diccionario el caso sujeto y también los
-Tienen un tema básico, o más de uno, e intentan aportar otros (por ejemplo, yo, caso sujeto o nominativo del pro-
algún cambio o efecto en la realidad (en los conocimientos o nombre personal de primera persona, tiene también las for-
conducta del interlocutor, o en el mundo). mas mey mí, como en YO ko, ME miras, dámew a MI, y esas for-
- Presentan cohesión en el nivel de la superficie lingüística, mas se encontrarán como unidades léxicas independientes
y coherencia entre sus partes y con todos los contextos con los en los diccionarios grandes del español).
cuales se conectan (véanse COHESIÓN y COHERENCIA). Por qué nos interesa esta noción: Escribimos palabras, que tene-
-Tienen terminación, aunque sea provisional. Esto significa mos que combinar en oraciones, y las oraciones las ponemos
que, en cierto momento, y dependiendo de sus intenciones en secuencias, para formar textos. Tanto el significado como
comunicativas y de las contingencias de la situación, el hablan- las peculiaridades de la forma interna de las palabras (por
te (o escritor) da por finalizado lo que tiene que decir, se ejemplo, cómo se hace el plural de un sustantivo, o el pasado
calla y cede su turno a otro hablante, que a su vez usará su irregular de un verbo) son datos básicos para la escritura, que
turno y producirá otra estructura significativa con un cierre, obtenemos del diccionario, libro de referencia cuya función
también transitorio. Hay cierres que se marcan explícitamente, es reunir todas las unidades léxicas y describirlas.
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