En la Zona Colonial

Ruinas del hospital san Nicolás de Bari

El Hospital San Nicolás de Bari fue el primer hospital de América. Se
construyo en 1503 en Santo Domingo de Guzmán, capital de La Hispaniola,
actual Republica Dominicana. Fue fundado por Nicolás de Ovando, quien
en ese entonces fuera gobernador de la isla. Hoy en día quedan solo ruinas
y está actualmente ubicado en la Ciudad Colonial o Zona Colonial de Santo
Domingo; en la Calle Hostos, esquina Calle Luperón.

Ya en 1522 este edificio estaba en pie, atendiendo a más de 60

personas por día. Sin embargo, el lugar fue abandonado a mediados del
siglo XVIII, aunque todavía hoy se desconocen las razones.
Imagen del Hospital antes y en la actualidad
 Junto con la Catedral de Santa María la Menor, fundada en 1512, y
la Universidad Autónoma de Santo Domingo, fundada en 1538, constituye
una de las tres primicias del Nuevo Mundo en la ciudad Santo Domingo, lo
cual ha hecho que la Zona Colonial Dominicana haya sido declarada
patrimonio de la humanidad por la UNESCO.

Ubicación y localización

Zona Colonial
República Dominicana Calle Hostos, esquina Luperón
Santo Domingo
 Levantamiento de sitio
Entorno de las ruinas

Parte de las ruinas utilizado

Ruinas de San Francisco como estacionamiento

Directo

Indirecto

Casas frente a las ruinas del

Iglesia Nuestra Señora de La
Hospital
Altagracia

En el entorno inmediato de las Ruinas del Hospital San Nicolás de Bari se encuentra lo que es la iglesia de Nuestra Señora
de la Altagracia (al lado), casa (al frente) y una parte que pertenece a las ruinas pero que es utilizada como estacionamiento, la
misma es una de las entradas de las ruinas (la única por la que se puede acceder ya que la otra siempre está cerrada). También
cercana a las ruinas del Hospital, a unas cuadras, se encuentran Las Ruinas de San Francisco.
 Estado actual de las ruinas (problemáticas)
Los espacios naturales que poseen las ruinas están siendo utilizadas de tal manera que no les proveen ningún atractivo
extra a las ruinas.

En el área interior de las ruinas, se encuentran unos espacios que poseen una vegetación muy escasa y simple. Por otro
lado, la vegetación presente consta solo de césped, hierbas y una que otra palma.

Otro problema fue el estado en el que se encuentran las ruinas, la mayoría de sus paredes poseen y siguen creando
grandes paneles de abejas esto hace que la visita a las ruinas a las ruinas sea algo muy peligroso.

imágenes

Mal manejo de los espacios

verdes o naturales de Las
Ruinas.
Vegetación interior pobre, poco
atractiva y mal cuidada.

Mal estado y mantenimiento en

la vegetación actualmente
encontrada en las ruinas.

Poco cuidado, saneamiento y

mantenimiento de las ruinas.
 Solución propuesta
Las posibles soluciones que podrían considerarse para darle un mejor uso o mejor estética a las ruinas son:

1. Brindarles un buen tratamiento y limpieza a las ruinas, para que sea más seguro y atractivo para los visitantes tanto locales
como turistas.
2. Darles tratamiento a las áreas verdes y a todo lo que constituya el entorno inmediato de las ruinas, para hacer un jardín que
resalte el atractivo de las ellas.

Para el diseño del jardín se usará como ejemplo o referencia las características del jardín francés que, con su simetría, uso
de árboles, de fuentes y corrientes de agua, también con el juego de las formas geométricas al momento de colocar los árboles,
darían una sensación de tranquilidad, armonía y belleza a las ruinas y le proporcionarían un valor estético incalculable.

Estilo de jardín
Jardín francés
El paisaje o jardín francés estaba dominado normalmente por grandes
masas de bosque. La agricultura no estaba muy desarrollada y estaba reducida a
los entornos o incluso a los interiores de las ciudades amuralladas (Hortus
conclusus) ya que la estabilidad política era muy frágil. La topografía no es un
elemento del paisaje francés ya que casi todo es plano y si no, esta se intenta
disimular.

Elementos del jardín francés

La perspectiva, asociada al gran eje visual, fue l amanera de mostrar el

poder absoluto. La escala también es fundamental en los jardines franceses. La
Notre supo encontrar la escala idónea ya que aun siendo jardines enormes nunca
llegas a perder la escala humana.
El parterre es otro elemento para rellenar el gran vaciado. La topiaria se utiliza de una forma exagerada. El vegetal acaba
siendo utilizado como un mueble muy geométrico. La articulación de los cuatro elementos principales, el chateau, la perspectiva, el
agua y los espacios cortesanos no es forzada, sino que lo que ocurre es que cada uno obtiene la intensidad que necesita
relacionándolos con los requerimientos territoriales.

Características de los jardines franceses

El estilo del jardín francés se puede decir que se basan en un principio

geométrico y acotado, con un orden decorativo muy marcado en el que las flores y los
setos toman un gran protagonismo. Además, los parterres son muy recargados y en
ocasiones parecen auténticos tapizados.

En el jardín francés también es muy recurrida la topiaria sobre todo en sus

formas geométricas. La topiaria es una técnica que permite ornamentar los jardines
dando formas diversas a una o varias plantas. Algunas de las especies más apropiadas
para realizar esta técnica son el cedro, la azalea y el ficus benjamina, entre otras.

Los ornamentos no naturales también tienen un papel estelar en este tipo de Ficus benjamina
jardines, utilizando sobre todo fuentes y esculturas entre otros, aunque en espacios
amplio también se puede recurrir a la instalación de estanques o pérgolas. Sin
embargo, el césped queda relegado a un segundo plano, cuyo uso se limita como base
para los ornamentos y arreglos florales.

Asimismo, los senderos aparecen muy bien definidos, con trazos muy lineales,
que en sus bordes están acompañados por coníferas u otros árboles con copa
recortable.
 Este estilo de jardin se elegio debido a que su simetria y juego de formas
geometricas aportan a un paisaje lo que es una gran armonía, movimiento y un gran
atractivo, orientado a lo clásico y elegante que pueda llegar a transmitir un jardín. Azalea