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¿Qué son las normas ISO?

Las normas ISO 9000 son normas de "calidad" establecidas por la


Organización Internacional para la Estandarización (ISO) que se componen de
estándares y guías relacionados con sistemas de gestión, aplicables en cualquier
tipo de organización y de herramientas específicas como los métodos de auditoría
(el proceso de verificar que los sistemas de gestión cumplen con el estándar).
Su implantación en las empresas, aunque supone una cierta dedicación, ofrece una
gran cantidad de ventajas. Los principales beneficios son:

 Reducción de rechazos e incidencias en la producción o prestación del


servicio
 Aumento de la productividad
 Mayor compromiso con los requisitos del cliente
 Mejora continua
 Más fácil acceso a grandes clientes y administraciones públicas
 Mayor y mejor acceso a los mercados internacionales

La familia de normas apareció por primera vez en 1987 teniendo como base
una norma estándar británica (BS), y se extendió principalmente a partir de su
versión de 1994, estando actualmente en su versión 2000.
La principal norma de la familia es: ISO 9001-2000 - Sistemas de Gestión de la
Calidad que se obtuvo a partir de la revisión a que fue sometida en el año 2000, la
norma ISO 9000 de 1994, obteniéndose una norma bastante más ágil, adecuada
para organizaciones de todo tipo ( incluso para empresas de servicios u
Administración Pública)

Para verificar que se cumple con los requisitos de la norma, existen unas
entidades de certificación, que están debidamente acreditadas y controladas por
los organismos internacionales correspondientes, que emiten sus propios
certificados y permiten el sello..

La implantación de dichas normas en cualquier organización, si bien no es


complicada, requiere un cierto tiempo, experiencia y dedicación; por eso es muy
conveniente que apoye a la organización una empresa de consultoría, que tenga
buenas referencias, y contar con firme compromiso de la Dirección con la
implantación del Sistema

Las características más importantes y novedosas de esta serie son:


 La orientación hacia el cliente
 La gestión integrada
 El énfasis en el proceso de negocios
 La incorporación de la Mejora Continua
 La medición de la satisfacción del cliente

LA SERIE DE NORMAS ISO


Las normas ISO se constituyen en una serie de Estándares que podemos
agrupar por familias, según los distintos aspectos relacionados con la calidad.
Aunque existen más de 18000 normas publicadas por ISO vamos a resaltar las
más importantes en cuanto a su aplicación y relevancia de los sectores.

Así podemos clasificar las normas según el siguiente criterio:


 Normas relacionadas directamente con la calidad.
 Normas Relacionadas con la calidad en el Medio Ambiente y Sostenibilidad.
 Normas relacionadas con la Gestión de la Seguridad.
 Normas relacionadas con la Calidad en la Investigación y Desarrollo.

Normas de Calidad

Las normas de calidad podemos clasificarlas en:


Medio Ambiente y Sostenibilidad

Seguridad

Innovación y Nuevas Tecnologías

Principios de gestión de la calidad


Los ocho principios de gestión de la calidad que se identifican en la
introducción de la norma ISO-9000 y que son ampliados en diferentes partes de
las otras normas.
Éstos son: enfoque al cliente, liderazgo, participación del personal, enfoque basado
en procesos, enfoque de sistema para la gestión, mejora continua, enfoque basado
en hechos para la toma de decisiones y relaciones mutuamente beneficiosas con el
proveedor.
Con base en estos principios se diseñaron las normas ISO-9001 y 9004. En
la introducción a los principios, la norma señala:
Para conducir y operar una organización en forma exitosa se requiere que ésta se
dirija y controle en forma sistemática y transparente... Se han identificado ocho
principios de gestión de la calidad que puede utilizar la alta dirección con el fin de
conducir a la organización hacia una mejora en el desempeño.

Enfoque al cliente
La norma señala: Las organizaciones dependen de sus clientes y, por lo tanto,
deberían comprender las necesidades actuales y futuras de los clientes, satisfacer
los requisitos de los clientes y esforzarse en exceder las expectativas de los clientes.

El significado de este principio es sumamente claro: las organizaciones se


deben a sus clientes, por lo que son el primer elemento en el que se debe basar su
gestión. No hacerlo así y perder la brújula de sus necesidades conduce casi
seguramente a que éstos se alejen de la empresa y, con ello, su prestigio y viabilidad
se pongan en serios cuestionamientos. Por lo tanto, dado que el cliente define y
juzga la calidad, la organización debe contemplar el control, la mejora y/o el rediseño
de los procesos que contribuyen de manera directa o indirecta a su satisfacción. Esto
implica una orientación al mercado, conocer las necesidades y expectativas de los
clientes, establecer comunicación con ellos y evaluar sus niveles de satisfacción.

En contraste con lo anterior, hay organizaciones en las que no se escucha ni


conoce la opinión y las necesidades del cliente. En estos casos, éste se convierte en
víctima de la mala calidad y, al interior de la compañía, no hay acciones sistemáticas
que reviertan la situación. Para no caer en esto, una primera recomendación para la
dirección de una organización es que “sea una vez su propio cliente”; es decir, es
necesario ponerse en el lugar del cliente y recopilar información sobre su satisfacción
con el fin de darse cuenta de la calidad de su producto o servicio.
Las cuatro condiciones para un buen servicio son:
 Interés en el contacto con el cliente.
 Espontaneidad y capacidad resolutiva en el contacto.
 Flexibilidad, es decir, ir un paso más allá.
 Arreglo cuando las cosas salen mal.

Si lo anterior se aplica al funcionamiento interno de la empresa, entonces sería


equivalente al principio de “Establecer relaciones cliente-proveedor” a lo largo y
ancho de la empresa. De esta forma, el proveedor recopila información sobre la
satisfacción del cliente interno, se establece la comunicación y se empieza a trabajar
de manera conjunta en los problemas que obstaculizan la satisfacción de éste.

Liderazgo
Respecto a este segundo principio la norma señala:
Los líderes establecen la unidad de propósito y la orientación de la organización.
Ellos deben crear y mantener un ambiente interno en el cual el personal pueda llegar
a involucrarse totalmente en el logro de los objetivos de la organización.

Se entiende el liderazgo en una organización como la capacidad de conseguir


resultados sostenibles a lo largo del tiempo, entonces los líderes deben definir la
unidad de propósito y la orientación (rumbo) de la empresa de forma tal que
posibilite su éxito, lo que cada día es más difícil en un entorno que cambia
constantemente.

De aquí que el primer paso para un liderazgo efectivo sea crear el rumbo
estratégico (la visión, la unidad de propósito) que posibilite desarrollar ventajas
competitivas. Es necesario que esa unidad de propósito sea resultado de una
reflexión estratégica en la que se promueva el desarrollo de una comprensión del
entorno de la organización y de los recursos con los que opera. Además, es necesario
que el líder se involucre en asegurar que los procesos y la actuación del personal
estén alineados a los objetivos.

Los líderes de una organización deben promover un liderazgo efectivo y una


administración eficiente y eficaz. Sobre esto, (Stephen R. Covey, 2005) enfatiza el
papel complementario del liderazgo y la administración, de tal forma que ambos
deben estar presentes para que las cosas correctas sucedan en una empresa.

En relación con esto, concluye que las cuatro cualidades del liderazgo personal
 visión,
 disciplina,
 pasión
 conciencia

Se traducen en una organización en los siguientes cuatro roles del liderazgo:


1. Encontrar caminos (visión): determinar conjuntamente el rumbo.
2. Alinear (disciplina): construir y administrar sistemas para no desviarse del
rumbo.
3. Facultar (pasión): concentrar el talento en los resultados, no en los métodos,
y retirarse y proporcionar ayuda cuando se lo soliciten.
4. Modelar (conciencia): dar buen ejemplo.
(Humberto Gutierrez Pulido, 2010)

Participación del personal


En este principio la norma es clara al señalar:
El personal, a todos los niveles, es la esencia de una organización, y su total
compromiso posibilita que sus habilidades se usen para el beneficio de la
organización.

De aquí se deriva que, además de hacer un planteamiento filosófico en el


sentido de que la organización, antes que todo, está formado por seres humanos,
este principio reconoce la importancia de buscar que las personas se comprometan
con los proyectos de la empresa.

Es evidente que esto será posible en la medida en la que la gente, desde el ámbito
de su responsabilidad, se involucre y se comprometa con el reto de mejorar la
organización. De aquí que la compañía deba generar el ambiente propicio para que
el personal entregue su talento en la mejora de sistemas y procesos, al mismo
tiempo que se desarrolle, crezca y se realice. Además, como se menciona en los
principios de Deming, se requiere proporcionar capacitación y automejora en las
personas.

Enfoque basado en procesos


La norma ISO-9000 señala:
Un resultado deseado se alcanza más eficientemente cuando las actividades y los
recursos relacionados se gestionan como un proceso.

Proceso
Se entiende aquí como un conjunto de actividades mutuamente relacionadas o que
interactúan, las cuales transforman elementos de entrada en resultados. Por lo
general, en una organización interactúan muchos procesos para al final producir o
entregar un producto o servicio, de tal forma que los elementos de entrada para un
proceso son generalmente resultado de otros procesos. Por ello es importante
enfocarse en las actividades que producen los resultados, en lugar de limitarse a los
resultados finales.

Esto implica identificar los diferentes procesos que interactúan para lograr un
resultado y hacer que el trabajo y las interfaces entre los diferentes procesos fluyan
en forma ágil y con la calidad adecuada. En suma, gestionar un sistema con un
enfoque basado en procesos significa identificar y gestionar sistemáticamente los
procesos empleados en la empresa y, en particular, las interacciones entre tales
procesos.

Cuando se quiera corregir un problema de calidad


o productividad, más que limitarse a esperar el resultado,
la tarea está en centrarse en los procesos que originan tal
resultado, analizando las actividades que realmente
agregan valor al producto: los materiales, los métodos,
los criterios y flujos de trabajo, la actitud de trabajo, las máquinas, etcétera.

Se muestra un ejemplo de diferentes procesos que forman un ciclo de negocio típico


en una fábrica. Se aprecia cómo cada proceso va creando valor para el cliente. Sin
embargo, dado que los procedimientos están entrelazados unos con otros, una falla,
el incumplimiento, la desviación o la variación de uno afecta al siguiente,

Ejemplo 1
(Humberto Gutierrez Pulido, 2010)
A lo largo del ciclo del negocio, los procesos acumulan desviaciones, variaciones
e incumplimientos que se reflejan en insatisfacción para los clientes.
Enfoque de sistema para la gestión
La norma señala: Identificar, entender y gestionar los procesos
interrelacionados como un sistema contribuye a la eficacia y eficiencia de una
organización en egro de sus objetivos. En otras palabras, la gestión en las
organizaciones se debe hacer entendiendo que una empresa es un sistema,
es decir, un conjunto de elementos mutuamente relacionados que interactúan.
Esto implica aprender a ver el conjunto y sus interacciones, y corregir la
fragmentación. En una organización las relaciones de causa-efecto no son
obvias ni lineales, y por lo general están distantes en el tiempo y el espacio.
Esto genera una complejidad que dificulta la comprensión del comportamiento
de una organización, lo cual se complica porque en una compañía predominan
las interacciones sociales creadas por las relaciones humanas, los equipos de
trabajo, las comunidades internas y la cultura organizacional con los sistemas
de trabajo.
Así, el enfoque de sistema para la gestión implica entender la organización como un
ente dinámico que continuamente recibe retroalimentación del interior y del exterior,
creándose ciclos de reforzamiento positivos y negativos que afectan su desempeño
y su comportamiento.

Mejora continua
La norma señala:
La mejora continua del desempeño global de la organización debería ser un
objetivo permanente de ésta. Esto da a entender que para mejorar el desempeño
de una organización se debe buscar permanentemente mejorar la forma en la que
se hacen las diferentes tareas y actividades, incluyendo la aplicación de los cinco
principios que se han descrito antes.

La mejora continua es consecuencia de una forma ordenada de administrar y


mejorar los procesos, identificando causas o restricciones, estableciendo nuevas
ideas y proyectos de mejora, llevando a cabo planes, estudiando y aprendiendo de
los resultados obtenidos y estandarizando los efectos positivos para proyectar y
controlar el nuevo nivel de desempeño.

Enfoque basado en hechos para la


toma de decisiones
La norma establece:
Las decisiones eficaces se basan en
el análisis de los datos y la información.
En otras palabras, para que la mejora
continua y la aplicación de los otros
principios sean efectivos se debe buscar que
las decisiones tengan objetividad y estén apoyadas en los datos y el análisis
adecuados. Esto orientará la operación y mejora de los procesos. Son precisamente
las herramientas básicas que se exponen en este libro las que cubren en buena parte
las técnicas principales de análisis de datos.

Relaciones mutuamente beneficiosas con el proveedor


En este último principio la norma establece:
Una organización y sus proveedores son interdependientes, y una relación
mutuamente beneficiosa aumenta la capacidad de ambos para crear valor.
Lo anterior se refiere a que los proveedores son la primera etapa de los procesos de
la organización, por lo que si en ellos no hay calidad, se presentan retrasos o no
existe mejora, y esto afecta el potencial de mejora de la empresa. Por ello se deben
establecer relaciones de mutuo beneficio en las que se fomente una amplia
comunicación que, por un lado, permita al proveedor actuar sobre sus aspectos de
no calidad y, por el otro, que posibilite a la compañía utilizar de mejor manera el
producto o servicio que entrega el proveedor.

Esta comunicación se debe apoyar en los siete principios anteriores; por


ejemplo, que las discrepancias en cuanto a la no calidad se sustenten en un análisis
objetivo de los datos de la calidad.

Enfoque de sistemas de gestión de la calidad


Este enfoque precisa algunas de las etapas que es necesario desarrollar para
establecer un nuevo Sistema de Gestión de la Calidad o para mantener y mejorar
uno ya existente. Tales etapas son:
1. Determinar las necesidades y expectativas de los clientes y de otras partes
interesadas.
2. Establecer la política y los objetivos de la calidad de la organización.
3. Determinar los procesos y las responsabilidades necesarias para el logro de
los objetivos de la calidad.
4. Determinar y proporcionar los recursos necesarios para el logro de los
objetivos de la calidad.
5. Establecer los métodos para medir la eficacia y la eficiencia de cada proceso.
6. Aplicar estas medidas para determinar la eficacia y la eficiencia de cada
proceso.
7. Determinar los medios para prevenir inconformidades y eliminar sus causas.
Establecer y aplicar un proceso para la mejora continua del sistema de
gestión de la calidad.

Enfoque basado en procesos


El Sistema de Gestión de la Calidad basado en procesos, en el que queda claro que
los clientes o las partes interesadas proporcionan los elementos de entrada a la
organización, y a la salida es necesario evaluar si se cumplió con las necesidades y
expectativas de clientes o partes interesadas, lo cual, junto con los demás análisis
del producto y de los procesos, son la base para mejorar el SGC. La idea es mostrar
algunos de los posibles procesos y cómo la salida de unos es la entrada de otros.

Modelo de un sistema de gestión de la calidad basado en procesos


Política y objetivos de la calidad
Dos de los elementos más distintivos de cada SGC de una organización son su
política y sus objetivos de la calidad, sobre los cuales la norma establece:
La política de la calidad y los objetivos de la calidad se establecen para proporcionar
un punto de referencia para dirigir la organización. Ambos determinan los resultados
deseados y ayudan a la organización a aplicar sus recursos para alcanzar dichos
resultados. La política de la calidad proporciona un marco de referencia para
establecer y revisar los objetivos de la calidad.

Los objetivos de la calidad tienen que ser coherentes con la política de la


calidad y el compromiso de mejora continua, y su logro debe poder medirse. El logro
de los objetivos de la calidad puede tener un impacto positivo sobre la calidad del
producto, la eficacia operativa y el desempeño financiero y, en consecuencia, sobre
la satisfacción y la confianza de las partes interesadas.

Papel de la alta dirección dentro del sistema de gestión de la calidad


En la sección anterior, cuando se estudiaron los principios de la gestión de la calidad,
se mencionó que el SGC debía ser dirigido mediante un liderazgo efectivo y ejemplar
que buscara la efectividad, así como un ambiente propicio para que el personal se
involucrara completamente.

De manera adicional, la norma señala el papel o responsabilidad de la alta


dirección, que consiste en:
 Establecer y mantener la política de la calidad y los objetivos de la calidad de
la organización.
 Promover la política de la calidad y los objetivos de la calidad a través de la
organización para aumentar la toma de
conciencia, la motivación y la participación.
 Asegurarse del enfoque hacia los requisitos
del cliente en toda la organización.
 Asegurarse de que se implementen los procesos apropiados para cumplir con
los requisitos de los clientes y de otras partes interesadas y para alcanzar los
objetivos de la calidad.
 Asegurarse de que se ha establecido o, implementado y mantenido un
sistema de gestión de la calidad eficaz y eficiente para alcanzar los objetivos
de la calidad.
 Asegurarse de la disponibilidad de los recursos necesarios.
 Revisar periódicamente el sistema de gestión de la calidad.
 Decidir sobre las acciones en relación con la política y con los objetivos de la
calidad.
 Decidir sobre las acciones para la mejora del sistema de gestión de la calidad.

Documentación
La importancia de la documentación de un Sistema de Gestión de la Calidad es
comunicar por escrito los objetivos y propósitos de la organización sobre la calidad
y demostrar si las acciones fueron consistentes con éstos.

Es importante señalar que la documentación no es un fin, sino una actividad que


aporta valor a la operación y efectividad al SGC. La norma ISO-9000 precisa que la
utilización de la documentación contribuye a:
 Lograr la conformidad con los requisitos del cliente y la mejora de la calidad.
 Proveer la formación apropiada.
 La repetibilidad y la trazabilidad.
 Proporcionar evidencia objetiva.
 Evaluar la eficacia y la adecuación continua del SGC.

La norma señala que cada organización determina la extensión de la


documentación requerida y los medios a utilizar, lo cual se hace en función del tipo
y tamaño de la organización, la complejidad e interacción de los procesos, la
complejidad de los productos, los requisitos de los clientes, los requisitos
reglamentarios que sean aplicables, la competencia demostrada del personal y el
grado en el que sea necesario demostrar el cumplimiento de los requisitos del SGC.

Los siguientes tipos de documentos se utilizan en los sistemas de gestión de la


calidad: manuales de la calidad, planes de la calidad, especificaciones, directrices,
procedimientos y registros. A continuación se presenta la definición de cada uno de
estos documentos:
 Manuales de la calidad: documentos que proporcionan información coherente,
interna y externamente, acerca del SGC de la organización.
 Planes de la calidad: documentos que describen cómo se aplica el SGC a un
producto, proyecto o contrato específico.
 Especificaciones: documentos que establecen requisitos.
 Directrices: documentos que establecen recomendaciones o sugerencias.
 Procedimientos: documentos que proporcionan información sobre cómo efectuar
las actividades y los procesos de manera coherente.
 Registros: documentos que proporcionan evidencia objetiva de las actividades
realizadas o de los resultados obtenidos.

¿Qué se necesita para iniciar un proceso de Aseguramiento de la Calidad


s/Normas ISO serie 9001-2000?

¸ Compromiso real y participación de los directivos


¸ Involucramiento de todos los empleados
¸ Comunicación
¸ Capacitación de todas las áreas de la organización
¸ Disponibilidad de recursos dedicados a la implementación del SGC (responsables,
tiempos, dinero, espacios físicos para reuniones, etc.)
¸ Definición clara de responsabilidades
¸ Realización de un diagnóstico de calidad
¸ Comprensión de los requerimientos de los clientes
¸ Fijación de políticas y objetivos de calidad
¸ Establecimiento de un plan de calidad
¸ Ordenamiento de la documentación existente
¸ Creación de la documentación del SGC s/ norma ISO (Manual de Calidad,
procedimientos, instrucciones de trabajo)
¸ Puesta a punto o calibración de máquinas, equipos, etc.
¸ Diseño e implementación de mecanismos de mejora continua
¸ Definición, planificación e implementación de actividades de medición y
seguimiento necesarias para asegurar el cumplimiento de las exigencias de la
norma.

LA FAMILIA ISO
Las series de normas ISO relacionadas con la calidad constituyen lo que se
denomina familia de normas, las que abarcan distintos aspectos relacionados con
la calidad:

ISO 9000: Sistemas de Gestión de Calidad


Fundamentos, vocabulario, requisitos, elementos del sistema de calidad, calidad en
diseño, fabricación, inspección, instalación, venta, servicio post venta, directrices
para la mejora del desempeño. La norma ISO 9001:2015 se publicó el 23 de
septiembre de 2015.

ISO 10000: Guías para implementar Sistemas de Gestión de Calidad/ Reportes


Técnicos
Guía para planes de calidad, para la gestión de proyectos, para la documentación
de los SGC, para la gestión de efectos económicos de la calidad, para aplicación de
técnicas estadísticas en las Normas ISO 9000. Requisitos de aseguramiento de la
calidad para equipamiento de medición, aseguramiento de la medición.

ISO 14000: Sistemas de Gestión Ambiental de las Organizaciones.


Principios ambientales, etiquetado ambiental, ciclo de vida del producto,
programas de revisión ambiental, auditorías.

ISO 19011: Directrices para la Auditoría de los SGC y/o Ambiental

ISO 31000 señala una familia de normas sobre Gestión del riesgo en normas
codificadas por la organización International Organization for Standardization. El
propósito de la norma ISO 31000:2009 es proporcionar principios y directrices para
la gestión de riesgos y el proceso implementado en el nivel estratégico y operativo.
NUEVA ISO 9001:2015
La nueva versión de la norma ISO 9001:2015, la norma más reconocida y establecida
a nivel mundial de gestión de la calidad ha sido publicada. Esta es la primera revisión
importante de la norma desde el año 2000 y, ha sido desarrollada basándose en los
retos empresariales a los que se enfrentan las empresas de cualquier tamaño y
sector hoy en día. Los cambios en la norma permiten que ésta sea lo suficientemente
flexible como para ofrecer a las organizaciones no sólo una herramienta para la
gestión de la calidad, sino también un marco significativo para la mejora empresarial
gracias a la eficacia y la mejora de la satisfacción del cliente.

Diferencia de contenidos entre la nueva norma ISO 9001:2015 y la ISO 9001:2008

ISO 9001:2008 ISO 9001:2015


1. Objeto y campo de aplicación 1. Alcance

2. Normas para la consulta 2. Referencias normativas

3. Términos y definiciones 3. Términos y definiciones

4. Sistema de gestión de la
4. Contexto de la organización
calidad
5. Responsabilidad de la
5. Liderazgo
dirección

6. Gestión de los recursos 6. Planificación

7. Realización del producto 7. Soporte

8. Medición, análisis y mejora 8. Operaciones

9. Evaluación del desempeño

10. Mejora

Certificación
La única norma de la familia ISO 9000 que se puede certificar es la ISO 9001:2015.

Para verificar que se cumplen los requisitos de la norma, existen unas entidades de
certificación que auditan la implantación y aplicación, emitiendo un certificado de
conformidad. Estas entidades están vigiladas por organismos nacionales que regulan
su actividad.
Para la implantación o preparación previa, es muy conveniente que apoye a la
organización una empresa de consultoría, que tenga buenas referencias, y el firme
compromiso de la Dirección de que quiere implantar el Sistema, ya que es necesario
dedicar tiempo del personal de la empresa para implantar el Sistema de gestión de
la calidad.

A la hora de elegir una empresa de asesoramiento, es necesario definir cuál es la


necesidad del proyecto. Es en función de esta necesidad que la empresa debe elegir
entre las variadas ofertas del mercado. Es importante que la empresa que lo asesore
aplique conceptos de calidad integral.

Proceso de Certificación
Con el fin de ser certificado conforme a la norma ISO 9001 (única norma certificable
de la serie), las organizaciones deben elegir el alcance que vaya a certificarse, los
procesos o áreas que desea involucrar en el proyecto, seleccionar un registro,
someterse a la auditoría y, después de terminar con éxito, someterse a una
inspección anual para mantener la certificación.

Los requerimientos de la norma son genéricos, a raíz de que los mismos deben ser
aplicables a cualquier empresa, independientemente de factores tales como:
tamaño, actividad, clientes, planificación, tipo y estilo de liderazgo, etc. Por tanto,
en los requerimientos se establece el "qué", pero no el "cómo". Un proyecto de
implementación involucra que la empresa desarrolle criterios específicos y que los
aplique, a través del SGC, a las actividades propias de la empresa. Al desarrollar
estos criterios coherentes con su actividad, la empresa construye su Sistema de
Gestión de la Calidad.

En el caso de que el auditor encuentre áreas de incumplimiento, la organización


tiene un plazo para adoptar medidas correctivas, sin perder la vigencia de la
certificación o la continuidad en el proceso de certificación (dependiendo de que ya
hubiera o no obtenido la certificación).

Un proyecto de implementación, involucrará, como mínimo:

 Entender y conocer los requerimientos normativos y cómo los mismos


alcanzan a la actividad de la empresa.
 Analizar la situación de la organización, dónde está y a dónde debe llegar.
 Construir desde cada acción puntual un Sistema de Gestión de la Calidad.
 Documentar los procesos que sean requeridos por la norma, así como
aquellas que la actividad propia de la empresa requiera.
 La norma solicita que se documenten procedimientos vinculados a: gestión y
control escrito, registros de la calidad, auditorías internas, producto no
conforme, acciones correctivas y acciones preventivas.
 Detectar las necesidades de capacitación propias de la empresa.
 Durante la ejecución del proyecto será necesario capacitar al personal en lo
referido a la política de calidad, aspectos relativos a la gestión de la calidad
que los asista a comprender el aporte o incidencia de su actividad al producto
o servicio brindado por la empresa (a fin de generar compromiso y
conciencia), proporcionando herramientas de auditoría interna para aquellas
personas que se desempeñen en esa posición.
 Realizar Auditorías Internas.
 Utilizar el Sistema de Calidad (SGC), registrar su uso y mejorarlo durante
varios meses.
 Solicitar la Auditoría de Certificación.

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