Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En los tiempos que vivimos cada vez nos damos cuenta del gran problema entre
padres e hijos.
Este problema afecta la vida del hogar, pero también la sociedad. Criar hijos no
es fácil, se necesita sabiduría del Señor, criar hijos no es sólo mandarlos a
estudiar.
La mayoría de los hijos jóvenes ya no quieren oír a sus padres porque los
consideran del siglo pasado y que no los comprende.
Proverbios enseña a los padres y a los hijos a vivir bajo el temor del Señor.
TAMBIEN VEREMOS LA CORRECION A LOS HIJOS
3. La conducta de los hijos afecta a los padres, para bien o para mal:
Proverbios 10:1
1 Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre, Pero el hijo necio es
tristeza de su madre.
La conducta del hijo tiene un efecto directo en la salud emocional de sus padres.
• Proverbios 15: 20 El hijo sabio alegra al padre; Mas el hombre necio
menosprecia a su madre.
En la época en que vivimos las leyes han ayudado a que el niño no sea corregido
en casa.
E incluso hay un número telefónico al cual llamar en caso de disciplina fisica.
La palabra del señor esta encontra del abuso infantil, maltrato infantil,
pero no de una corrección adecuada y basada en amor y con propósito.
Colosenses 3: 21 Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se
desalienten.
Provocando ira – disciplina con ira.
1. Los padres que aman a sus hijos los disciplinan:
Proverbios 13: 24 El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; Mas el que lo
ama, desde temprano lo corrige.
Padres blandos
Padres pasivos – permisivos.
Realmente no ama a su hijo –
Cuando de pequeñitos faltan el respeto, hasta una cachetada – no es motivo de
celebracion.
Berrinches, egoistas, - no amas a tu hijo.
Proverbios 3: 12 Porque Jehová al que ama castiga, Como el padre al hijo a
quien quiere.
6 Porque el Señor al que ama, disciplina, Y azota a todo el que recibe por hijo.
7 Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel
a quien el padre no disciplina?
10 Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les
parecía, pero éste para lo que nos es provechoso, para que participemos de su
santidad.
11 Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino
de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido
ejercitados.
Proverbios 26: 3 El látigo para el caballo, el cabestro para el asno, Y la vara para
la espalda del necio.