Después de haber descrito la estructura del Sistema Nervioso y con la
finalidad de mantener la coherencia el anterior trabajo, a continuación describiré las funciones del Sistema Nervioso respetando el mismo esquema u orden con el que se realizó el citado trabajo. Funciones del Sistema Nervioso De manera general, el Sistema Nervioso controla y regula la actividad de todos los órganos; permitiendo al organismo relacionarse con el medio ambiente que lo rodea y reaccionar con rapidez ante nuevas condiciones, esto es esencial para la supervivencia del ser humano, además nos permite el desarrollo de funciones complejas como el pensamiento y la consciencia. A.- Funciones del Sistema Nervioso Central El Sistema Nervioso Central tiene tres funciones básicas: Función Sensitiva.- La cual se caracteriza por la percepción de estímulos del mundo interno y externo por medio de los órganos receptores, los cuales llegan al encéfalo por las vías aferentes; estos estímulos incluyen una amplia gama de factores físicos como la luz, presión o concentración de sustancias químicas disueltas. Función Integradora.- Analiza y procesa la información sensorial y toma las decisiones apropiadas. Se activa o modifica por la información que está almacenada y se recupera de la memoria. Función Motora.- Provoca respuestas de músculos o glándulas lo cual se efectúa a través de las vías eferentes. El sistema nervioso puede estimular músculos y glándulas para que actúen o inhibirlos. Funciones del Encéfalo.- De manera general, el Encéfalo controla la actividad del organismo y recibe información del exterior e interior, enviando y recibiendo señales a través de los pares craneales y de la medula espinal. La información se trasmite entre las distintas partes del Encéfalo y entre este y la Medula Espinal a lo largo de una red de neuronas interconectadas. Así, el Encéfalo recibe, analiza y transmite toda la información necesaria para el desarrollo de sus funciones. Ahora veamos detalladamente las funciones de cada una de las partes del Encéfalo: Funciones del Cerebro.- Para describir las funciones del cerebro, se utilizan las denominadas Áreas de Brodmann, las cuales deben su nombre al científico que descubrió que las diferentes partes del Neocórtex, cumplen funciones distintas a nivel físico y mental. Además de esto, las áreas suelen organizarse en grupos que comparten una característica similar, o que afectan a un ámbito del funcionamiento cerebral concreto. A continuación, describiremos las 47 Áreas de Brodmann: Área 1.- La primera área descrita por Brodmann está ubicada al lado de la cisura de Rolando, también conocida como surco central. Se ubica dentro de la corteza somatosensorial primaria, y como tal cumple un papel en la recepción y procesamiento de la información táctil y proprioceptiva proveniente de distintas partes del cuerpo. Área 2.- Al igual que el área 1, esta también está incluida dentro de la corteza somatosensorial primaria. Sus funciones son muy similares a las de la anterior; de hecho, todavía no se ha podido determinar con precisión dónde están los límites de cada una de ellas. Área 3.- Se trata de la última zona descrita por Brodmann en ubicarse dentro de la corteza somatosensorial primaria. De nuevo, recibe y trabaja con la información que le envían los órganos encargados de detectar estímulos táctiles o del estado interno del cuerpo. Área 4.- La cuarta área descrita por Brodmann está relacionada principalmente con el área motora primaria del cerebro. Esta zona es fundamental para el movimiento, ya que se encarga de enviar a los músculos las órdenes que hacen que se contraigan o se dilaten. Área 5.- Esta área del cerebro está incluida dentro del área somatosensorial secundaria. Así, cumple un papel periférico dentro del procesamiento de la información enviada por los órganos táctiles y propioceptores. Área 6.- En la zona 6 está localizada la función premotora. Se encarga de permitirnos planear los movimientos que vamos a realizar antes de enviar las instrucciones al área primaria; y dentro de ella se almacenan nuestros patrones de movimiento por defecto. Área 7.- El área 7 también está incluida dentro de la corteza somatosensorial secundaria. De este modo, ayuda con la integración y el procesamiento de la información que luego será enviada a la primaria. Además, también tiene una función importante dentro del reconocimiento de estímulos sensoriales. Área 8.- El área 8 está incluida dentro de la corteza motora secundaria. En concreto, tiene una función especialmente relevante dentro del movimiento de los músculos oculares. Área 9.- La novena área descrita por Brodmann se encuentra dentro del lóbulo prefrontal dorsolateral. Como todas las estructuras ubicadas en esta zona del cerebro, tiene que ver con funciones mentales superiores, como la autoconciencia, la memoria, la empatía, la gestión emocional y el procesamiento de la información. Además, también juega un cierto papel a nivel motor, sobre todo ayudando a conseguir una buena fluencia verbal. Área 10.- El área 10 también forma parte de la corteza prefrontal. Debido a ello, juega un papel importante en aspectos como la memoria, la división de la atención, la planificación y la introspección. Área 11.- El área 11 descrita por Brodmann también forma parte de la corteza prefrontal, aunque se trata en este caso de una zona de asociación terciaria. Tiene relación con funciones cognitivas superiores, como por ejemplo la gestión de las interacciones sociales y la regulación de la conducta y las emociones. Área 12.- Al igual que la 11, el área 12 forma parte del lóbulo orbitofrontal, estando por tanto relacionada de la misma manera con funciones cognitivas superiores. Área 13.- Esta zona está escondida a simple vista dentro de la ínsula, concretamente en la parte anterior de la misma. Tiene funciones relacionadas con el lenguaje, como por ejemplo la coordinación de los movimientos del sistema fonador. También juega un papel fundamental conectando el sistema límbico con el córtex prefrontal. Área 14.- Al igual que la zona anterior, la 14 también tiene que ver con determinadas funciones emocionales y sexuales; y además, está relacionada con el procesamiento de la información visceral y la proveniente del olfato. Área 15.- Tiene que ver con la regulación de la presión arterial. Fue una de las pocas que Brodmann no consiguió localizar en el cerebro humano, aunque sí lo hizo en el de determinados simios; y más tarde, otros investigadores fueron capaces de localizarla en las personas. Área 16.- Al igual que la zona 14, esta también forma parte de la ínsula. En este caso, se relaciona con ámbitos tan importantes como la regulación de la temperatura corporal, el dolor, o la capacidad para tragar. Área 17.- Se trata del área visual primaria. Como tal, cumple funciones muy importantes a la hora de descifrar la información proveniente de los ojos, como por ejemplo aquella relacionada con el movimiento, la orientación o el color. También posee un mapeado del ojo, algo fundamental para este sentido. Área 18.-El área 18 forma parte de la corteza visual secundaria. Ayuda a la 17, regula la visión tridimensional, y juega un papel muy importante a la hora de detectar la intensidad de la luz. Área 19.- Al igual que la anterior, también es una de las cortezas visuales secundarias. Sirve para reconocer los estímulos visuales, al relacionarlos con la información almacenada en la memoria. Área 20.-. Está relacionada con la vía visual ventral. Nos permite reconocer qué estamos viendo, al reconocer sobre todo formas y colores. Está localizada en la zona de la circunvolución temporal inferior. Área 21.- Se trata de un área de asociación auditiva, que forma parte de la conocida área de Wernicke. Como tal, juega un papel muy importante en la comprensión del lenguaje oral. Área 22.- A pesar de que la zona 21 también está relacionada con ella, la 22 es la que compone la mayor parte del área de Wernicke. Su función es comprender el lenguaje, mediante la interpretación de los estímulos sonoros y la relación de los mismos con su significado. Área 23.- Está incluida dentro de la zona de la corteza cerebral que tiene que ver con la memoria y los sentimientos. Guarda cierta relación con el sistema límbico. Área 24.- Tiene que ver con la percepción de las emociones y el procesamiento de las mismas. También guarda cierto vínculo con el comportamiento, al conectar el sistema límbico con la corteza orbitofrontal. Área 25.- Está ubicada en el área subgenual, relativamente cercana al cíngulo. Tiene que ver con diferentes aspectos del funcionamiento del cuerpo, con el sueño, con el hambre, y con la regulación del estado de ánimo. Área 26.- Se cree que el área 26 tiene que ver principalmente con la creación y almacenamiento de la memoria autobiográfica. Área 27.- De la misma manera que el área 26, la 27 tiene que ver también con la memoria, en parte debido a su situación cercana al hipocampo. También juega un papel importante en el reconocimiento de olores, estando en su interior parte de la corteza olfativa primaria. Área 28.- Al igual que las dos anteriores, la zona 28 participa tanto en ciertos procesos relacionados con el sentido del olfato como en otros que permiten la memoria. Sirve también como puente entre el hipocampo y el resto del cerebro. Área 29.- Esta área tiene que ver con el recuerdo de vivencias y experiencias personales, formando también parte del grupo de áreas de Brodmann que tienen que ver con la memoria. Se encuentra en la zona retroesplenial del cíngulo. Área 30.- Al igual que la 29, la zona 30 tiene que ver con la memoria; pero su relación con ella es un poco distinta, estando implicada en funciones como el aprendizaje y los procesos de condicionamiento operante y clásico. Área 31.- Se ubica en la circunvolución del cíngulo. Es una de las zonas que relacionan la memoria con los sentimientos, siendo la principal encargada de producir la sensación de familiaridad que experimentamos al estar frente a algo conocido. Área 32.- El área 32 se ubica entre el lóbulo frontal y el parietal. Tiene que ver con procesos mentales superiores como la inhibición de las respuestas automáticas y la capacidad para tomar decisiones. Área 33.- El área 33 también tiene que ver con la toma de decisiones, pero además cumple papeles en otras funciones como la percepción del dolor, la planificación del comportamiento físico, y la capacidad para interpretar nuestros propios sentimientos. Área 34.-Dentro del área 34 encontramos el uncus, lo que significa que está relacionada principalmente con el sentido del olfato. En concreto, tiene que ver con la memoria relacionada con los olores, y con la percepción de elementos desagradables de nuestro entorno. Área 35.-El área 35 tiene que ver con diversas funciones, como la memoria de recuerdos no conscientes, el reconocimiento de patrones visuales, y ciertos componentes de la memoria olfativa. Área 36.- El área 36 de Brodmann se encuentra dentro del grupo de las que cumplen funciones relacionadas con la memoria autobiográfica. También tiene cierta importancia en el procesamiento de los datos relacionados con la ubicación espacial del cuerpo. En su interior encontramos la corteza parahipocampal. Área 37.- En su interior se ubica el giro fusiforme. Se encarga del procesamiento de información proveniente de diferentes sentidos al mismo tiempo. Además, ayuda a realizar tareas complejas, como interpretar el lenguaje de signos, reconocer caras, o entender metáforas. Área 38.- Tiene que ver con el procesamiento de la información en base a la semántica. También sirve como vía de conexión entre las áreas que se encargan de la memoria y aquellas más relacionadas con las emociones. Área 39.-El área 39 de Brodmann guarda relación con la comprensión del lenguaje, sin importar si lo recibimos por vía escrita u oral. En su interior está el giro angular. Área 40.- Dentro del área 40 está el giro supramarginal. Esto quiere decir que juega un papel importante en la vinculación de fonemas y grafemas, por lo que es una de las más importantes para permitir dominar la lectura y la escritura. También es importante para el reconocimiento motor y táctil. Área 41.- Se corresponde con la corteza auditiva primaria, la primera parte del cerebro que recibe la información proveniente de los oídos. Su principal función es percibir cambios de frecuencia, además de permitir localizar el origen de los sonidos. Área 42.- Al formar parte de la corteza auditiva secundaria, sirve de apoyo al área 41 a la hora de procesar los estímulos provenientes de los oídos. Es complementaria al área de Wernicke. Área 43.- El área 43 juega un papel muy importante en el procesamiento de la información que proviene del sentido del gusto. Como tal, nos permite identificar los diferentes tipos de sabores de aquello que ingerimos. Área 44.- El área 44 es la primera que forma parte del área de Broca, una de las más importantes dentro de la producción del lenguaje. Tiene que ver sobre todo con la gesticulación, con la entonación del lenguaje, y con los movimientos del sistema fonador. Área 45.- Al igual que el área 44, la 45 también forma parte del área de Broca. Está relacionada sobre todo con el procesamiento semántico, además de cumplir papeles auxiliares en la entonación, la producción de expresiones faciales, y la gesticulación. Área 46.- Está ubicada dentro del lóbulo prefrontal dorsolateral. Como tal, guarda relación con capacidades como la memoria de trabajo y la atención. Área 47.- La última área descrita por Brodmann forma también parte del área de Broca. Su papel es ayudar a entender y producir la sintaxis en el lenguaje y en la música. Estas áreas de Brodmann conforman regiones o áreas de mayor amplitud, que están constituidas por 2 o más áreas de Brodmann que poseen funciones muy similares con sutiles diferencias, entre las más importantes, se puede mencionar el caso de la llamada Área de Broca, el Área de Wernicke y el Área de Asociación Límbica entre otras. Funciones del Cerebelo.- Las principales funciones del cerebelo son, el mantenimiento del movimiento, el equilibrio y la postura. Su nombre proviene del latín “cerebellum” que significa “cerebro pequeño”. Se divide en dos partes o hemisferios y tiene una capa que recubre la superficie de los hemisferios. Funciones del Tronco Encefálico.- También conocido como Tallo cerebral, tiene como función principal, la de servir como puente de comunicación entre el Encéfalo y la Médula Espinal conjuntamente con los nervios periféricos. Igualmente, este sistema formado por materia gris y blanca y es capaz de controlar diversas tareas como la respiración y el ritmo cardíaco. Ahora veamos sus funciones de forma más específica en cada una de sus partes: Bulbo Raquídeo.- Esta sección del cerebro es vital, ya que controla la respiración, el ritmo cardíaco y la presión sanguínea. El bulbo raquídeo comprende: el bulbo, el puente de Varolio, el tectum, la formación reticular y el tegmento. Pedúnculos Cerebrales.- Los pedúnculos cerebrales son fundamentalmente como vías o autopistas de información de impulsos nerviosos que viajan por el encéfalo. Como están hechos de sustancia blanca, esta información los atraviesa con rapidez, ya que la mielina que cubre los axones (y que da esa tonalidad blanca a estas estructuras) hace que estas señales eléctricas vayan a gran velocidad.
La principal función de los pedúnculos cerebrales, pues, es la
de comunicar dos zonas del encéfalo: el mesencéfalo (situado en la parte superior del tronco del encéfalo) y la corteza cerebral. De hecho, estos conductos de fibras nerviosas llegan hasta la división que se crea entre los dos hemisferios cerebrales. Asi, los pedúnculos contienen varias vías. Una de ellas es la corticoespinal, que tal y como su nombre lo indica, comunica la corteza con la médula espinal, y la otra es el tracto corticopontino, que une la corteza con el puente de Varolio. Como el tronco del encéfalo se encarga de ejecutar acciones automáticas y estereotípicas útiles o necesaria para nuestra supervivencia, el rol de los pedúnculos cerebrales también tiene que ver con esta tarea. De esa manera, las principales funciones de estos fajos de fibras nerviosas son la regulación de los impulsos motores y la transmisión de actos reflejos, dos mecanismos muy útiles para mantenernos vivos, ya que nos permiten reaccionar de forma rápida ante eventos significativos, especialmente si son peligrosos o dañinos. Específicamente, los pedúnculos tienen un importante papel en los movimientos reflejos de los ojos, necesarios para que funcionen bien, y en la coordinación de estos actos con otros movimientos de la cabeza y el cuello.
Concretamente, estas estructuras intervienen en el control
reflejo de los movimientos reflejos. Normalmente esto se da cuando las órdenes de la corteza motora llegan a los pedúnculos cerebrales, y de estos van a varios núcleos de una estructura conocida como tálamo, situado en las profundidades del encéfalo, en una zona conocida como diencéfalo. Tálamo.- El Tálamo funciona integrando información sensorial y motora. El tálamo recibe información sensorial y la reenvía a la corteza cerebral. La corteza cerebral también manda información al tálamo que luego transmite a otras secciones del cerebro y de la espina dorsal.
Hipotálamo.- El hipotálamo ajusta la temperatura, las
emociones, el hambre, la sed y los ritmos circadianos del cuerpo. Este órgano del tamaño de un garbanzo controla la temperatura corporal. Actúa como termostato percibiendo cambios de temperatura y enviando señales para ajustarla. Hipófisis.- La hipófisis o glándula pituitaria es una glándula endocrina que produce distintas hormonas, entre ellas la hormona del crecimiento. Está ubicada en la “silla turca”, justo debajo del cerebro, en la base del cráneo, desde donde conecta con el hipotálamo a través del tallo hipofisario.
Se le conoce también como «glándula maestra», ya que regula
muchas de las actividades de otras glándulas endocrinas (tiroides, paratiroides, testículos, ovarios, suprarrenales) con el fin de lograr el funcionamiento correcto del organismo. Amígdala.- A pesar de su tamaño, la amígdala tiene un funcionamiento complejo y participa en una gran variedad de funciones, aunque destaca por su papel en el procesamiento emocional, principalmente el miedo. Sin embargo, participa también en la memoria y en la toma de decisiones. La amígdala cerebral forma parte del sistema límbico, un conjunto de estructuras cerebrales interconectadas que cumplen varias funciones básicas relacionadas con los instintos y la supervivencia de la especie como el hambre, la sed, el sexo, la memoria y las emociones más primarias. Hipocampo.- La principal función del hipocampo es la de mediar en la generación y la recuperación de recuerdos en conjunto con muchas áreas repartidas por la corteza y con otras áreas del sistema límbico. Por tanto, tiene un papel muy importante en la consolidación de los aprendizajes realizados, ya que por un lado permite que ciertas informaciones pasen a la memoria a largo plazo y por el otro vincula este tipo de contenidos con ciertos valores positivos o negativos, dependiendo de si estos recuerdos han estado asociados a experiencias placenteras o dolorosas (fisiológica o psicológicamente). Son los procesos mentales ligados a la emoción los que determinan si el valor de una experiencia almacenada como recuerdo es positivo o negativo. Lo que experimentamos como emociones tiene una parte funcional que tiene que ver con el modo en el que aprendemos a comportarnos siguiendo unas reglas aprendidas que jueguen a nuestro favor: evitar repetir errores y volver a experimentar sensaciones agradables.
Funciones de la Médula Espinal.- La médula espinal tiene la
fundamental misión de transportar los impulsos nerviosos desde el Encéfalo hasta los 31 pares de nervios del Sistema Nervioso Periférico. Existen dos vías principales por las cuales transcurre la información: Vía Aferente.- En la que la información circula desde el Tronco Encefálico, el cuello y las cuatro extremidades hasta el Cerebro. Vía Eferente: En la que las señales viajan del Cerebro al resto del cuerpo. Asimismo, algunos de sus otros cometidos implican el mando de los movimientos vegetativos e inmediatos. B.- Funciones del Sistema Nervioso Periférico.- De manera general, el Sistema Nervioso Periférico es el responsable de transmitir las señales mediante los nervios espinales y raquídeos, los cuales se encuentran fuera del Sistema Nervioso Central pero tienen el fin de conectarlo con el resto de estructuras y sistemas. Ahora de manera específica veamos las funciones del Sistema Nervioso Voluntario y del Sistema Nervioso Involuntario: Funciones del Sistema Nervioso Voluntario o Somático.- Es el encargado de relacionar el organismo con el medio ambiente externo. Recibe, por un lado, impulsos eléctricos con órdenes para realizar movimientos voluntarios de los músculos esqueléticos. Por otro lado, transmite información sensitiva desde el resto del cuerpo al Sistema Nervioso Central. Este sistema lo forman: 1.- Los Nervios.- Estos son de dos tipos; los pares craneales y los pares raquídeos: a.- Los pares de nervios craneales. Estos están sujetos al cerebro y tienen funciones específicas. Cada nervio craneal parte del cerebro por una salida en la base del cráneo. Estos nervios y sus funciones son: Olfativo – para el olfato Óptico - vista Oculomotor - movimiento de los ojos, las lentes, y las pupilas Troclear – movimiento del músculo superior oblicuo del ojo. Trigémino – Suministra los ojos, las mejillas, y la mandíbula controlando así la masticación. Abducens - mueve el ojo hacia fuera Facial - Controla los músculos de la cara, el cuero cabelludo, las orejas y las glándulas salivales. Recibe sensaciones de sabores por las dos terceras partes anteriores de la lengua. Acústico – Oído y mantenimiento del equilibrio Glosofaríngeo – Sensación de gusto o sabor desde la parte posterior de la lengua y de la garganta. Vago – Encona el pecho y los órganos abdominales Espinal accesorio - movimiento de la cabeza y de los hombros Hipogloso - Controla músculos de la lengua.
b.- Los pares de nervios raquídeos.- Los nervios
espinales o nervios raquídeos, son 31 pares de nervios que se responsabilizan de transmitir señales sensoriales, como por ejemplo el tacto o el dolor, desde el tronco y las cuatros extremidades al Sistema Nervioso Central. Además, median en la información de la postura, de la musculatura y de las articulaciones, llevando entonces la información desde el SCN hacia el resto del cuerpo. Nervios espinales. Estos 31 pares de nervios son: - 8 pares de nervios raquídeos cervicales (C1, C2, C3, C4, C5, C6, C7y C8) - 12 pares de nervios raquídeos torácicos (T1, T2, T3, T4, T5, T6, T7, T8, T9, T10, T11 y T12) - 5 pares de nervios raquídeos lumbares (L1, L2, L3, L4 y L5) - 5 pares de nervios raquídeos sacros (S1, S2, S3, S4 y S5) y - 1 par de nervios raquídeos coccígeos
2.- Los Ganglios.- Los ganglios nerviosos son agrupaciones de
somas (cuerpos) de neuronas asociadas a los nervios del sistema nervioso periférico y comúnmente constituyen un abultamiento en una zona del nervio. Los ganglios vinculados con fibras de nervios aferentes contienen los cuerpos de las neuronas sensoriales como en el caso de los ganglios de la raíz dorsal o ganglios espinales de la médula espinal. Los ganglios asociados con fibras nerviosas eferentes, mayoritariamente contienen células del sistema nervioso autónomo. Funciones del Sistema Nervioso Involuntario o Autónomo.- El Sistema Nervioso Autónomo es un entramado de axones, ganglios y órganos que se encarga de regular las funciones que nos mantienen con vida, como la digestión, la respiración involuntaria o los latidos del corazón. Es por eso que estas funciones no pueden ser controladas voluntariamente; son demasiado importantes, y están totalmente automatizadas. Esta red de neuronas interactúa especialmente con la partes del cerebro que son más bajas (las del tronco del encéfalo) , y se divide en sistema simpático, sistema parasimpático. A través de estas vías de comunicación, se controla partes del cuerpo que al estar en la base de la supervivencia de los tejidos y células que forman el cuerpo no pueden depender de decisiones voluntarias ni de la gestión de la atención, lo cual significa que además de ser procesos automatizados, aunque una persona quiera no se puede intervenir sobre ellos o hacer que se detengan, dado que esto podría llevar a una muerte inmediata. El Sistema Nervioso Autónomo se divide en dos, el Sistema Simpático y el Sistema Parasimpático. Estos dos sistemas tienen efectos opuestos en el mismo conjunto de órganos: El Sistema Simpático es importante en caso de una situación de escape, stress, ejercicio o emergencia. La energía se desvía, se observa la dilatación de las pupilas, se produce aumento del ritmo cardíaco, aumento de la transpiración y de la salivación, aumento en el ritmo aeróbico etc. Entra en juego cuando se requiere activación. Su función es descargar energía, para satisfacer objetivos vitales. Por ejemplo, dilata la pupila, inhibe la salivación, acelera el pulso, relaja la vejiga. El Sistema Parasimpático está asociado a un estado de relajación. Las pupilas se contraen, la energía se dirige a la digestión de la comida y vemos una disminución del ritmo cardíaco etc. Entra en juego cuando se requiere relajación. Interviene en procesos de recuperación Por ejemplo, contrae la pupila, estimula la salivación, disminuye el pulso, contrae la vejiga, etc.