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4 , Boletín del Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos

La Historia y las Arqueologías Pos Procesuales*


Thomas C_ Patterson

La modernidad coloca su serio, meditado y de largo plazo, en hincapié en la especificidad de las


confianza en el poder del momento lugar de un encuentro casual u prácticas arqueológicas en la era del
presente como origen pero descubre oportunista, con la teoría social capitalismo tardío (Handsman 1980,
que, al desconectarse del pasado, se marxista. Este ensayo, entonces, es 1981,1982,1987; Miller y Tilley 1984;
ha desconectado también del un esfuerzo por examinar las bases Shanks y Tilley 19B7a, 1987b, 1987c).
presente", Mientras más radical es el filosóficas de las varias arqueologías
rechazo a lo que vino antes, más se pos procesuales, lo que éstas deben 3. Una línea, interesada en
depende del pasado (De Man 1983: significar, y cuales son sus impli- la comunicación y la ideología, que
149-161). caciones en la coyuntura actual de deriva su inspiración de Louis
acercamiento con la historia. Althusser y de teóricos críticos como
Un sinnúmero de 'pos Jürgen Habermas. Sus defensores
marxismos' recientes patentizan la No existe una arqueología arguyen que la arqueología como
verdad de la afirmación de que los pos procesual, sino varias. Aunque ideología es parte del presente y
esfuerzos por 'ir más al/á' del marxismo son conceptualmente distintas, estan revela la especificidad histórica de los
por lo general terminan reinventando relacionadas; poseen áreas impor- reclamos de conocimiento y de la
viejas posiciones pre marxistas (desde tantes de traslape y de divergencia. racionalidad, Arguyen a favor de la
los regresos periódicos a Kant hasta Ésto se debe a que representan evaluación crítica de los reclamos de
las vueltas más recientes a Nietzsche, posiciones teóricas producidas y conocimiento (Leone 1982 a,b; Leone,
pasando por Hume y Hobbes hasta refinadas en un diálogo en curso, Polter y Shackel 1987; Wylie 1985,
I/egar a los pre socráticos) (Jameson sobre un terreno en contíenda (1). Los 1987).
1977: 196). partícipantes mudos en este diálogo
apoyan diversas visiones del mundo, La aparlclon de las
El pos modernismo es una neo hegelianas y/o fenomenológicas. arqueologías pos procesuales a
anti estética recién surgida que se Para mis propósitos, es posible principios de la década de los ochenta
caracteriza por la ausencia de distinguir las siguientes arqueologías representa la apropiación del
cualquier marco de referencia moral, pos procesual es: pensamiento pos estructuralista y de
estético o intelectual (BlackweI/1988). la teoría crítica por parte de los
1. Una rama, de la cual arqueólogos. Las primeras dos
Mis credenciales para Robin Collingwood pretende ser corrientes, influidas por las posiciones
escribir sobre la historia y las progenitor; que alega con aprobación pos estructuralistas, manifiestan
arqueologías pos procesuales los escritos de Roland Barthes, Pierre inquietudes anarquistas con el poder.
consisten en que no soy ni historiador, Bourdieu, Clifford Geertz, Anthony Ellas desaflan las pretensiones de
ni arqueólogo pos procesual. Ésto no Giddens y Paul Ricoeur; y que ve el ambas: la autoridad y la objetividad
debe descalificarme automática- registro arqueológico como un texto completa en un mundo que se
mente como comentarista, dado que que hay que decodificar. Esta posición caracterizaba por la existencia de
ofrece una "perspectiva' ventajosa. En podría reivindicar al individuo, diversas perspectivas teóricas que
años recientes he dedicado una colocando las destrezas criptográficas frecuentemente son contrarias. Están
buena cantidad de tiempo y energía a y la elocuencia del arqueólogo como más desarrolladas en Inglaterra,
examinar lo que los arqueólogos intérprete en un lugar de privilegio donde muchos académicos, especial-
dicen que piensan y hacen y cómo (Hodder 1985, 1986, 1987a, 1987b), mente los más jóvenes, expresan
sus afirmaciones se relacionan con simultáneamente sentimientos de
corrientes sociales e intelectuales 2, Una corriente, cimentada privilegio, marginalidad, inseguridad y
mas amplias (Patterson 1986a, en los escritos de Michel Foucault, falta de poder ante el ataque del
1986b, 19B7, 198Ba, 1988b). Soy un que combate a los de Marx, Ésta gobierno de Margaret Thatcher desde
arqueólogo adiestrado antes del enfoca las relaciones de poder y de 1979 y las condiciones de las reformas
advenimiento, a fines de los sesenta, dominación en los contextos y universitarias y transformaciones
de la nueva arqueología procesual. prácticas que intervienen en la sociales que están ocurriendo. La
Defiendo, además, un compromiso producción de conocimiento. Hace tercera rama se encuentra más
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desarrollada en los Estados Unidos y, LA CONFRONTACiÓN CON LA AR- Los nuevos arqueólogos ylos
a fin de cuentas, se vincula con la QUEOLOGíA PROCESUAL evolucionistas culturales, oponién·
Escuela de Francfort a través de la dose a lo que veían como el "viejo'
influencia de Herber! Marcuse sobre Al poner en tela de juicio empirismo de la arqueología
los movimientos estudiantiles y anti suposiciones fundamentales, los tradicional, compartían una teoría de
bélicos de fines de la década de los arqueólogos pos procesuales la ciencia y de la explicación
sesenta (Bimbaum 19B6). parecen amenazar la base misma de cime~tada en el positivismo lógico,
la nueva arqueología; desafían su sin caer en cuenta que el positivismo
cientificismo, su marco conceptual lógico es una teoria empirista del
La apropiación, por parte da -en gran medida implícito-; la conocimiento (Wylie 1982a). De
los arqueólogos, del pos estruc· separación de la teoría de la práctica; manera que las críticas del
turalismo y de la teoria critica, posee la obsesión con la técnica y los evolucionismo cultural que apare·
cuatro dimensiones. Primero, marca reclamos de objetividad, Este cieron a fines de los cincuenta,
la confrontación y la critica conti- aparente anti fJndamentalismo también son aplicables a la nueva
nuada a las teorías da base ·en gran cuestiona la visión hegemónica arqueologia; sin embargo, ha habido
medida implícitas, empiristas, -sostenida tanto por los nuevos pocas respuestas teóricas siste·
behavioristas, funcionalistas y arqueólogos como por sus enemigos máticas a los asuntos planteados. Los
positivistas-, que han sido carica· designados, les historiadores criticas cuestionaban las asocia-
turizadas por algunos de los culturales· de que las sociedades clones de formas económicas dadas
defensores más ruidosos de la pasadas constituyen totalidades con formas particulares de ideas y
arqueología procesual. Segundo, cerradas y que los arqueólogos organización social; exigían una
significa que los arqueólogos pos intervienen en el registro o narración mayor especificación de las rela-
procesuales ·dada la relación da sus de lo que sucedió en el pasado (Patrik ciones entre las dimensiones
puntos de vista con la fenomenología, 1985). Sugieren, en su lugar, que los económicas y políticas de los tipos
el anarquismo y el marxismo· han arqueólogos construyen represen· culturales descritos por los evo·
rechazado, odebían haber rechazado, taciones de realidades pasadas que lucionistas culturales; y fijaban su
tanto el estructuralismo como la interpenetran el presente, moldeando atención en la dicotomía sincronia·
antropología simbólica (Harland y restringiendo las posibilidades de diacronla, cuestionando tanto la uti-
1987; Merquior 1986). Tercero, abre acción futura (Eagleton 1986), Así se lidad como la validez de separar el
el debate de la historia misma; ¿la desplaza la atención de las técnicas y estudio de la historia del estudio de la
narración o el discurso histórico en de la recolección de datos hacia estructura y el proceso (Adams 1956,
verdad dan los "hechos" del cuestiones de epistemologia, lógica 1960; Rowe 1962a,b).
'verdadero pasado", o meramente y metafísica, concentrando la alen·
afirman que la historia que narran es ción en la especificidad e historicidad Los arqueólogos proce·
real? Ésto ha sido llamado "la c~s de de la práctica arqueológica. sueles y los evolucionistas culturales
la historicidad" (Jameson 1977: 198); de los cincuenta conciban la historia
se reafirma la importancia de la Dado su marco metaffsico im- de la misma manera. La ven como
intencionalidad humana en la plicfto yen gran medida no reconccido, una sucesión de eventos únicos que
constitución del conocimiento y se los arqueólogos procesuales descerten fluyen unidireccionalmente a través de
reconoce el papel de las fuentes no este enti fundamentalismo como un re· un envase llamado tiempo, La historia
objetivas -tales como el medio, el greso al relati\ismo, escepticismo, pero es una narración de esos eventos, una
público y el poder· en esos procesos tlcularismo o idealismo (Binford 1987; perspectiva controvertible que incluso
constitutivos (Dirlik 1987; Topolski Earley PreuceI1987). Rechazan el reto encuentra apoyo entre algunos de los
1976: 225·238). Cuarto, marca un alegando que se trata de un pavoneo, y historiadores de las instituciones
compromiso con el pos modernismo, al confrontarlo con consignas ambiguas elijistas (2). los nuevos arqueólogos,
concepto correlativo de lo que ha sido en vez da un debate significativo, los sin embargo, conciben la cultura de
llamada la sociedad capitalista tardía arqueólogos procesuales disfrazan las modo mucho más estrecho que los
o pos industrial (Lyotard 1984). De debilidades de su propia posición y pier· evolucionistas cuHurales; la ven o en
modo que los arqueólogos pos den la oportunidad de trabar un comba· términos utilitarios como adaptación
procesuales deben reconocer los te constructivo que clarificaría áreas de -el medio por el cual las personas se
problemas que surgen de la acuerdo y desacuerdo y adalantaría el ajustan a su ambiente natural-, o la
separación de la ciencia del resto de discurso arqueológico. Si son anli funden con la ideología, la que se
la cuUura y de la racionalización de la fundamentalistas los arqueólogos pos interpreta vagamente como una falsa
politica (Callinicos 1985; Foster procesuales es una cuestión abierta que conciencia o como un sistema de
1983). no exploraré aquí (Sim 1986). creencias. En su opinión, la historia y
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la cultura son conceptualmente distin- a la fenomenología y al nihilismo de concibe la historia como ordenada y
tas y separadas, lanto en la teoría Friedrich Nietzsche; el politizado mo- determinada cultural mente, de modo
como en la práctica. vimiento estudiantil de los sesenta la distinto en sociedades diferentes; a la
revivió, conservando la desconfianza vez, la cultura está también
En contraste, los arqueó- hacia el formalismo ahistórico y apolí- históricamente ordenada, ya que los
logos pos procesual es manejan tico, comunes a la tradición significados se reinterpretan al llevarlos
concepciones más amplias tanto de estructuralista y a la fenomenología a la práctica. Sahlins se concentra en
la historia como de la cultura, lo que (Nagele 1986: 92-93). Esto implica que lo que sucede cuando sociedades
les permite plantear interrogantes los cimientos teóricos de las diversas primitivas y modernas, en el sentido de
acerca de sus interrelaciones. No ven arqueologías pos procesuales se opo- Lévi-Strauss, entran en contacto; por
la cultura como una cosa que se nen a los del estructuralismo, y deben ejemplo, la llegada del Capitán Cook a
puede reducir a algo fuera de si ser anta-gónicos a los reclamos de la Hawai en 1789. Él encaja las relaciones
misma: la relacionan, por el contrario, antropología simbólica, véase por sociales que surgieron dentro de
con las realidades diarias de socie- ejemploClifford Geertz (1973, 1984)_ formas simbólicas; los elementos de la
dades históricamente específicas y sociedad y de la historia europea se
concretas, lo que nos recuerda a Karel Por una parte Claude Lévi- refunden en términos de la mitopraxis
Kosik (1976: 42-46). Para Kosik, lo Strauss (1969: 39), uno de los de la elite hawaiana.
cotidiano representa la organización fundadores de la antropologia
de las vidas de las personas en ritmos estructuralista, argüía que todas las
regulares y replicables de trabajo, sociedades tienen historia, "pero De modo que cada sociedad
aoción y vida. La historia se crea en lo mientras que las llamadas sociedades posee no sólo su propia cultura sino
cotidiano pero está en conflicto con primitivas están rodeadas por la además su propia versión de la
él; ambos están entrelazados; se sustancia de la historia y tratan de historia. El estructuralismo, entonces,
penetran uno al otro. Sin embargo, lo permanecer impermeables a ella, las encarna el tipo de relativismo extremo
cotidiano ocasionalmente es vencido sociedades modernas interiorizan la que infunde pánico en los corazones
en la colisión con la historia, de modo historia, por así decir, y la convierten de los arqueólogos procesual es,
que los ritmos asociados con una en el motor de su desarrollo". Rosen especialmente para los que profesan
cotidianeidad también se inte- (1974: 407-408) ha resumido la visión intereses comparativos (3). Los
rrumpen, pero sin que se establezcan de Lévi-Strauss de la historia de la arqueólogos pos procesuales deben
otros mecánicamente en su lugar. siguiente forma: rechazar también el estructuralismo,
Esta colisión revela el carácter de lo pero por razones muy distintas. El
cotidiano y de la historia, así como su .... las historias particulares estructuralismo niega la intencio-
relación. son tan sólo interpretaciones utilitarias nalidad y la capacidad de reflexión a
de escritores posteriores... La historia los seres humanos, que se convierten
no es un flujo continuo de en portadores pasivos de los códigos
EL RECHAZO DEL ESTRUCTU- acontecimientos sino una selección culturales, en lugar de actores. El
RALlSMO y DE LA ANTROPO- discontinua que hace el hombre de los estructuralismo también implica que
LOGíA SIMBÓLICA incidentes y procesos que caben en un un ser humano es idéntico a todos los
orden lógico de la mente humana. __ La otros seres humanos en esa sociedad
Los pos estructuralistas en cronología es importante, por ende, no y que la cultura de una sociedad es
Francia edificaron sobre una tradición como afirmación de una continuidad o homogénea, uniforme de arriba para
fenomenológica opuesla al estruc- desarrollo real, sino como una abajo, en vez de manifestar diferen-
turalismo (Diamond 1974; Rosen indicación de cómo la mente agrupa, cias que reflejan relaciones de auto-
1974; Schmidt 1985; Silverman codifica e impone significado a un ridad, dominio o poder.
1987). En los Estados Unidos, la conjunto de unidades constituyentes
aceptación tanto del estructuralismo derivadas de la secuencia inte- Por otra parte, los antropó-
como del pos estructuralismo estuvo rrumpida de eventos. logos simbólicos, como Geertz, edi-
mediada, en gran parte, por criticas fican sobre un estrecho concepto
literarios de la academia, a quienes Más recientemente, algunos parsoniano de la cultura que se arraiga
no les preocupaban las implicaciones estructuralistas como Marshall Sahlins en procesos bio sociales evolutivos
políticas de ninguna de las dos (1981, 1985) intentan responder a la subyacentes, pero cambiantes, yen los
perspectivas. La teoría crítica se de- crítica de que el estructuralismo no símbolos (Geertz 1973: 55-83;
sarrolló como parte de un movímíento puede lidiar adecuadamente con la his- Rabinow 1983). Desde esta
político en Alemania después de la Pri- tona (Friedman 1987; Haldon 1981; perspectiva la cultura es un orden
mera Guerra Mundial, como reacción Hobsbawm 1972). Sahlins (1985: vii) totalizante,
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... w¡::a/JÓll de signifieados lJis.. significado para nosotros. pero que acciones y pensamientos pasados, en
tóricamente transmitkios, encamado en pueden no haber sido signifi-cativas general europeos; sin embargo, des-
símbolos, un sistema de concep-c;ones para los partícipes, actores o portado- de el 1500, en la historia que 105 euro-
heredadas expresadas en formas sim- res de estos puntos de vista. Sin em- peas han construido para sí mismos,
bólicas por medio de las cuales los bargo, al adoptar este enfoque, niegan han participado cada vez más los pue-
hombres comunican, pelpfltúan y de- la particularidad da los pueblos pasa- blos que viven en otras partes del mun-
sarrolJan conoci-mientos sobre la vida dos que, ellos alegan, eran distintos. do (4). A105 antropólogos les quedó el
yaetdudes hacia ella... Un símbolo es estudio de los otros; los que estaban
cualquier objeto, acto, evento, calidad El ataque de Binford (1987: espacialmente separados de Europa,
o relación que sirva como vehículo 398) al culturalismo da Geertz en el y que eran vistos como poseedores de
para una concepción (Geertz 1973: 89- sentido que es subjetivo y relativista historias estáticas o desprovistos de
91). -que busca ... corrorenderentérminos historia (Asad 1987; Wolf 1982).
de otros- está mal dirigido, pues Geertz
Asad (1983: 239) señala que simultáneamente argumenta a favor Un problema es qué forma
no existe un concepto sobre la y niega la particularidad de las culturas asumirá el acercamiento. Hasta ahora,
relación de la cultura con la vida que interpreta. Binford tiene razón al la historia se ha mantenido mayor-
misma o con las condiciones ma- rechazar la antropología simbólica. no mente como el estudio de aconte-
teriales y las actividades para por el relativismo y subjetividad que le cimientos y sociedades pasadas,
mantenerla y cambiarla, y un símbolo ímputa, sino por su universalidad, por mientras que se percibe la teoría
puede ser un aspecto de la realidad o su negación de la especificidad de como propiedad de las ciencias
una representación de ella_ Procede las sociedades y culturas pasadas. sociales. Lo prOblemático de esta
a damostrar cómo Geertz usa estas Ésta es una de las razones por las visión generalizada es su carácter
concepciones de la cultura y del cuales tanto las ramas pos acrítíco y ateórico. Jones (t 976: 295)
símbolo para formular una definición estructuralistas y de teoria crítica de planteó dos preguntas: ¿Está la his-
universal y ahistórica de la religión_ la arqueologia pos procesual también toria realmente vacía de teoria? Las
Desda sus primeros escritos, Geertz deben rechazar la antropología concepciones teóricas que posee-
ha empleado una cantidad de otras simbólica. mos sobre la causalidad histórica y
categorías igualmente universales social ¿son adecuadas para satisfacer
y ahist6ricas, como economía las demandas de la práctica histórica?
(Pallerson 19B7). ACERCAMIENTO A LA HISTORIA ,Iones arguyó que están relacionadas
DURANTE UNA CRISIS DE HISTO- yque su falta de resolución ha llevado
Al emplear categorías ahis- RICIDAD a los historiadores abuscar un remadio
tóricas y universales para describir fácil en las ciencias sociales. Desde
una sociedad concreta, Geertz puede En la década de 1970 este punto de vista, el problema
simultáneamente preservar sus ca- comenzó un acercamiento entre la consiste en escapar de los esquemas
racterísticas distintivas y negarlas, historia y las ciencias sociales (eohn de dasarrollo empíricamente sin fun-
reduciéndolas, en el proceso de 1980.1981; Hobsbawm 1971; Jones demento de los evolucionistas, por una
interpretación o traducción, a las 1976; Medick 1987). Tanto la antropo- parte; y el empirismo sín sentido de
categorías que se encuentran en todas logía como la arcueología participan los que creen que la historia es una
las culturas y que se fundan en la en él. Dicho movimiento implica forjar narración de sucesos únicos, por la
condición humana (Rabinow 1983: nuevas alianzas y disolver las viejas. otra.
63-65). Cualquier interpretación de Los nuevos arqueólogos y los
una cultura se evalúa en términos de historiadores culturales ahora se dicen El proyecto de acercamiento
su elocuencia y apreciación estética unos a otros que tienen mucho en es complicado, porque ocurre en un
del patrón (Nonini, comunicación común -por ejemplo el empirismo y momento en el que la objetividad de la
personal). Esto explica el atractivo de el posftívismo- y q,¡e deberían recelar teoría y la práctica histórica misma han
su trabajo para los historiadores, de un hincapié muy grande en la teoría sido puestas en tela de Juicio. ¿Ofrece
quienes escriben sobre las menta- (Flannery 1982). la historia una descripción o narración
lidades de las culturas pasadas; les verdadera sobre el pasado real?
permite suponer que todas las capas Este acercam iento explora ¿Asevera meramente que la
de una sociedad históricamente las relaciones entre las distintas formas descripcióno.!a historia son reales?
específica poseen la misma cultura, de construir y comprender a otras O, como alegó hace poco Cuyler Young
y también traducir fácilmente los com- sociedades y culturas. Señala lo obvio. (1988; 8) e implicó James Deetz (1988:
plejos eventos, actos o actitudes de Los historiadores han buscado com- 15), ¿Ofrece tan sólo una repre-
esas culturas en categorías que tienen prender examinando la evidencia de sentación de un pasado creado en el
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presente para explicar el presente? servación directa como única fuente de sucesión de verdades parciales que
Estas preguntas resumen la crisis de conocimiento objetivo, y argüir que sólo representan pasos en el camino hacia
la historicidad. La crisis actual no es podemos observar indirectamente el la objetividad absoluta; esto es, el
única, sino sólo uno de un sinnúmero pasado, de modo que la cognición his- acuerdo total entre las afirmaciones
de episodios similares que han ocurri- tórica es distinta de la cognición direc- sobre las realidades pasadas y las rea-
do intermitentemente desde la Ilustra- ta. En contraste, los arqueólogos pos lidades mismas (Topolski 1976: 331-
ción (Bock 1956: 100 y ss.). Lo quedis- procesual es arguyen que el sujeto 345). Los arqueólogos pos proce-
tingue la crisis actual es que su confi- cognoscente es activo, que combina la suales, junto con los marxistas, creen
guración particular exige que los his- cognición directa con un conocimien- que a). la cognición es un proceso con-
toriadores y los arqueólogos enfrenten to a priori derivado, indirectamente, de tinuo que implica una variedad de fac-
la historicidad de sus sujetos y traten las observaciones directas de otros. tores; b). existe una relación compleja
los asuntos de la naturaleza de los he- Ellos implican que la calidad indirecta entre esos factores y los resultados de
chos históricos, la particularidad del que se le adscribe a la cognición de la investigación y c). los sujetos
conocimiento histórico, la objetividad, eventos y relaciones pasados no es cognoscentes activos tienen un impac-
el relativismo y el presentismo. única ni específica de la historia sino to considerable sobre los resultados de
que, de hecho, también se da en la fí- la cognición.
El concepto de hecho sica y la biología. Esto significa que la
histórico es problemático. Para calidad indirecta que se le atribuye a la Ésto dirige la atención hacia
algunos, los hechos históricos son cognición histórica es caracteristica de los procedimientos para determinar
fragmentos de un pasado que existen la cognición en general. De modo que la verdad de las afirmaciones sobre
independientemente de historiadores el conocimiento histórico se crea de la el pasado. Los procedimientos que
que los reconstruyan en su conciencia; misma manera que otros tipos de defienden los empiristas enfocan las
para otros, no tienen una existencia conocimiento (Topolski 1976: 305-349). afirmaciones mismas o las relaciones
independiente sino que son lo que los entre las afirmaciones y los que las
historiadores reconstruyen. Los Los empiristas creen que los producen. Por lo menos, una rama de
empiristas, como los arqueólogos sujetos activos y conscientes la arqueología pos procesual enfoca
procesuales y los historiadores introducen distorsiones en sus la práctica, la que establece un
culturales, tienden a fundir las dos recuentos de eventos o sociedades contacto directo entre las afirma-
concepciones del hecho histórico. pasadas, porque no son ni obser- ciones y los hechos. Implica la
Los no pos'ltiv'lstas, como los arqueó- vadores pasivos imparciales, ni son verificación de las afirmaciones por
logos pos procesuales, quienes inmunes a las influencias de su confrontación mutua; las afirmaciones
recalcan el papel activo del sujeto en medio. Son sus recuentos del pa- recién formuladas se confrontan con
la construcción del pasado. distin- sado. no las realidades pasadas el conocimiento ya disponible.
guen entre ellas; aceptan la existencia mismas, los que son subjetivos; sus
de una realidad histórica objetiva, afirmaciones están condicionadas
compleja y variada, asi como la cons- por preocupaciones del presente y MODERNISMO VS. POS MODER-
trucción de hechos históricos, por sus valores. Esta idea, junto con NISMO: IMPLICACIONES PARA LA
simplificando las hipótesis como me- la alegación de que la cognición ARQUEOLOGíA
dio para adquirir un conocimiento histórica es distinta de la cognición
simplificado de esa realidad. En esta en las ciencias generales y exactas, Los arqueólogos pos proce-
perspectiva, "".hay una confrontación da origen al relativismo y al es- suales han llamado la atención al
constante entre esas realidades cepticismo; a inquietudes sobre la hecho de que el registro arqueológico,
históricas, el conocimiento de las verdad de las afirmaciones. interpretado como una serie de textos
cuales progresa continuamente, con socialmente construidos, no existe
los hechos históricos construidos por Para los empiristas lógicos, independientemente de las circuns-
el investigador" (Topolski 1976: 221- la verificación o la falsación son los tancias en las cuales se organizan las
222). únicos criterios para establecer la prácticas de su interpretación.
verdad de estas afirmaciones; sin Parafraseando a Tony Bennett (1987:
El empirismo y cientificismo embargo, dichos procedimientos 70-71), estas cir cunstancias y prácti-
de algunos arqueólogos procesuales, dificultan la investigación de las rela- cas vinculan el registro arqueológico
por ejemplo Binford (1987), los llevó a ciones entre las afirmaciones sobre el como textQ,J a los arqueólogos como
tratar al sujeto cognoscente como re- pasado y el pasado mismo, especial- lectores, en relaciones específicas.
ceptor pasivo de percepciones senso- mente la de los relativistas moderados, Prescriben que los arqueólogos lean
riales que son reflexiones fieles del que aseveran que los arqueólogos, en determinadas maneras y que los
objeto de cognición, a privilegiar la ob- durante su investigación, llegan a una registros arqueológicos como objetos
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sean leídos de determinadas ma- bilidad de mayor comprensión yenri- por ejemplo, los electos formados de
neras. El arqueólogo y el registro ar- quecimiento. las prácticas politicas han tenido so-
queológico están trabados uno con el bre las estructuras y los procesos bajo
otro; las conexiones son variables e Un asunto que está implícito investigación, o los electos en la crea-
históricamente específicas. Los en su agenda debe ser cómo la ción del conocimiento sobre la repro-
arqueólogos son intérpretes que dan arqueología, que se proclama duccíón y transformación de las so-
sentido a esos textos y críticos que in- divorciada de las corrientes sociales ciedades antiguas. Al mismo tiempo,
tervienen en el proceso interpretativo más amplias, se está empleando o algunas corrientes de la arqueología
para mover la interpretación en desplegando en los Estados Unidos pos procesual, han tratado de refor-
distintas direcciones, para ver los para promover imágenes de esta- zar sus fundaciones fenomenológicas
textos a través de lentes diferentes, de bilidad o cambio gradual, en un mo- con apropiaciones acríticas de las
modo que asumen una multiplicidad mento en que el tejido social del país perspectivas del marxismo, estruc-
de significados que se pueden evaluar súbitamente Se ha transformado y turalismo o antropologia simbólica,
a la luz de las circunstancias actuales. cuando su influencia, internacio- que son incompatibles teóricamente
Las actividades interpretativas y nalmente, ha decaído de modo con sus propios puntos de vista o cu-
críticas de los arqueólogos ocurren importante durante los últimos veinte vas relaciones con ellos son proble-
en el contexto de los cálculos años. Parte de la respuesta debe ser máticas y necesitan más exploración
cambiantes y variables de objetivos el relato de cómo la arqueología llegó y clarificación.
sociales o polHicos, en vez de. según a desvincularse de su propia historia
los cálculos inmutables de un y del resto de la cultura, y cómo este
objetivismo científicamente con- proceso se vinculaba con ideas sobre RECONOCIMIENTOS
cabido. la ciencia, la racionalidad y la mo-
dernidad. Sin embargo, el problema Este ensayo fue presentado
Los arqueólogos pos proce- no es nuevo, pues planteado en en una sesión sobre arqueología pos
suales reconocen lo que era ciaro términos distintos durante los últimos procesual organizada por James
para los científicos hacia finales de la años del siglo pasado, cuando los Chiarelli para la reunión anual de la
Segunda Guerra Mundial. Como problemas de la modernidad y la Society lor American Archaeology en
escribió James B. Conant en "The enajenación -la fragmentación de la abril de 1998 en Phoenix, Arizona. He
Role of Science in Our Unique Socie- vida- que acompañó al surgimiento recibido el beneficio de la claridad y
ty", su mensaje presidencial a la del mundo que ahora estamos la agudeza de Talal Asad, Jonathan
American Associatíon for the perdiendo, eran preocupaciones Friedman, Christie Gailey, Potor Gran,
Advancement of Science, "...nuestra cenlrales de los teóricos sociales Russell Handsman, Kristin Kptiuch,
solidaridad como nación depende de -como Marx, Nietzsche y Weber- Keith Nield, Don Nonini, Robert
nuestra aceptación de [determinados] quienes abogaban por el estudio del Paynter, Michel Rowlands, Iraida
ideales y de un esfuerzo concertado Otro para comprender nuestro lugar Vargas Arenas y Alison Wylie. Les
para movemos continuamente hacia en el mundo. agradezco haber compartido sus pen-
las metas sociales implícitas' (citado samientos conmigo. También quiero
por Tumer y Factor 1984: 181 l. Aunque dar la gracias al Centar lor Research
controvertible en su momento, el CONCLUSIONES in the Humanities de la Universidad de
alegato de Conant de que la ciencia no Copenhagen que me ofraeió la opor-
carecería ni debia carecer de valores, Las tres ramas de la arqueo- tunidad de clarilicar mis propios pun-
es muy distinto de la neutralidad de logía pos procesual comprenden las tos de vista sobre este tema durante
valores defendida por algunos afirmaciones empiricistas y positivistas el semestre del otoño de 1987, y a la
arqueólogos procesuales de hoy. Al de los arqueólogos nuevos o decana Lois Cronholm de la Universi-
encajar las prácticas interpretativas y procesuales sobre la estructura, la dad de Temple, quien hizo posible que
críticas de la arqueología como historia historia y el cambio. Todas ellas participara en las actividades del
en discursos sobre los objetivos rechazan la noción que el pasado es Center.
cambiantes de la sociedad en su directamente accesible -un objeto a
totalidad, los arqueólogos pos ser leido por el profesional educado en
procesuaJes exigen la clarificación de el registro arqueológico. Ellas sostie- ~TAS
esos valores e ideales. Así se vinculan nen a su vez, que la historia se cons-
sus inquietudes con las de otros que truye por la gente antes que por la • Este artículo apareció publicado por pomera
están batallando con los mismos transmisión natural. Elles reconocen la vez en ei Boletín de Antropología Americana
N" 20, 1989, del Instituto Panamericano de
problemas. Este tipo de compromiso importancia de las influencias no obje- Geografía e Historia.
serio casi siempre ofrece la posi- tivas en la construcción de la historia;
10 Boletín del Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos
1. Entre los identificados con la nueva arqueo- Asad, Talal Society and Histo!)', vol. 22, no. 2,
logía, Kent Flannery (1976: 34) hace mucho 1983 Anthropole,gical conceptions of págs. 198·221. Cambridge.
reconoció la naturaleza discursiva de la pro- religion: rellections on Geertz. 1981 Anthropology and history in the
ducción de conocimiento -la interacción dialé-
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ctica entre el presente y el pasado, entre visio-
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narración implica ordenar los hechos históricos history. Editado por DerekAttridge, Geoff University of Minnesota Press.
de un modo descnptivo y cronológico, y los
Bennington y Robert Young, págs. Minneapolis.
enfoca en una sola historia. Arguye que la
historia narrativa en estos momentos está 63-81. Cambridge University Press, Deetz, James
tomando auge. Enc Hobsbawm (1980) pone en Cambridge. 1988 History and arehaeological theo!)':
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procesual usualmente no se reconoce, usa el
391-404. Londres. Oiamond, Stonley
término historidsmo para referirse a ... todas
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rechace todas las lormas de histoncismo debe
critical theor,es 01 culture and society New Brunswick y Londres.
crear necesariamente un dilema para los
arqueólogos procesuales que están de acuerdo in the United States and West Gerrnany. Oirlik, Ari!
o adoptan sus puntos de vista; ésto sugiere Editado porGunter LendyKurtL.SheII, 1987 Culturalism as hegemonic
que sus marcos teóricos contienen elementos págs. 3-55.Westview Press, Boulder. ideology ami liberating practice
contradictorios y mutuamente exclusivos, que Bloekwell, Diana En: Cultural Critique, no. 6, págs.
no se reconocen o no se exploran. 1988 Disorienta1ion express. Rockilg around 13-50. Nueva York
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Fe de Erratas
En el número anterior del Boletín correspondiente al mes de agosto, en la página 8,
perteneciente al artículo titulado: "Homenaje al Dr. John V. Murra", finalizando el
terccr párrafo de la primera columna dice:
"Finalmente, el Rector de la Universidad, en un cálido discurso sintetizó las experien-
cias profesionales del investigador en los cuales destacó sus contribuciones".
Debió decir.
"Finalmente, el Rector de la Universidad, en un cálido discurso sintetizó las experien-
cias profesionales del Investigador en los Andes y destacó sus contribuciones".

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