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Los Mecanismos de Defensa

Mecanismos de defensa

Proceso psicológico automático que protege al individuo de la ansiedad y de la conciencia


de amenazas o peligros externos o internos. Los mecanismos de defensa mediatizan la
reacción del individuo ante los conflictos emocionales y ante las amenazas externas.
Algunos mecanismos de defensa (p. ej., proyección, dicotomización, y "acting out") son
casi siempre desadaptativos. Otros, como la supresión y la negación, pueden ser
desadaptativos o adaptativos en función de su gravedad, inflexibilidad y el contexto en el
que ocurran.

Hablar de los mecanismos de defensa en psicoanálisis implica conocer un tanto de la


teoría que Freud dio a conocer en el año 1890. Los mecanismos de defensa en
psicoanálisis implican un concepto fundamental para esta teoría. Pero antes de referirnos
a ellos, repasemos algo de la historia del psicoanálisis y luego si especifiquemos el
concepto de mecanismo de defensa en esta controvertida teoría.

El psicoanálisis fue, y es aún, considerado de carácter revolucionario. La teoría


psicoanalítica, penetra en diferentes áreas de la cultura, el arte, la filosofía, la
epistemología, la ética etc. Pero sobre todo, impacta principalmente a las diferentes
maneras de abordar y pensar al hombre y lo humano.
El psicoanálisis se hizo de un cuerpo de conocimiento: la ciencia, la filosofía, la poética, la
mitología, entre otras expresiones y disciplinas artísticas, humanísticas y sociales. Se trata
de apuestas diferentes sobre lo que es entender la problemática humana.

El psicoanálisis es una forma de psicoterapia, que opera mediante el descubrimiento de


las raíces inconcientes de las emociones y los actos de la persona. Para ello, el analista
invita al paciente a decir cuanto le venga a la mente haciendo a un lado cualquier juicio
sobre el valor o la pertinencia de sus propias ideas.
Así se vuelven evidentes ciertos patrones repetitivos, característicos de cada paciente, en
sus comunicaciones al analista, quien puede entonces, por medio de sus interpretaciones,
llevar al paciente a descubrir por sí mismo el origen de sus dificultades al volver a
experimentarlas en la situación analítica.
Los mecanismos de defensa en psicoanálisis: el término “defensa”.

El término "defensa" es el más antiguo representante del punto de vista dinámico en la


teoría psicoanalítica. Aparece por vez primera en el ano 1894, en el estudio de Freud
sobre Las neurosis de defensa y lo emplea trabajos ulteriores para describir las luchas del
yo contra ideas y afectos dolorosos e insoportables.
Más tarde el término es abandonado y en lo sucesivo sustituido por el de "represión". No
obstante, la relación entre ambas nociones permanecía indeterminada. Sólo en un
apéndice complementario a Inhibición, síntoma y angustia Freud retorna al viejo
concepto de defensa.

Gracias a los mecanismos de defensa, el yo se defiende tanto de la excesiva presión del


ello, cuando éste reclama la realización de los apetitos, como del desmesurado control del
superyo; merced a ellos, el yo también se protege de la presencia de experiencias pasadas
de tipo traumático.

Los mecanismos de defensa son modos incorrectos de resolver un conflicto psicológico y


pueden dar lugar a trastornos en la mente, la conducta, y en los casos más extremos a la
somatización del conflicto psicológico y las disfunciones físicas que lo expresan.

Los mecanismos de defensa en psicoanálisis son:

Proyección

Proyección, mecanismo de defensa que consiste en atribuir a otros, y en general al mundo


exterior, motivaciones que se rechazan o no se reconocen en uno mismo.

Al comparar pensamientos, intenciones, afectos o conflictos internos con los demás,


justificamos nuestros propios deseos. Considerar que los demás presentan un nivel ético
deficiente nos lleva a aceptar nuestra propia conducta inmoral: el egoísta, el avaro o el
mentiroso se escudan pensando que todos los demás son egoístas, avariciosos o que
mienten.

La proyección como mecanismo de defensa, común en todos los individuos, es causa de


errores de juicio que se corrigen mediante una sana autocrítica, aunque como patología
mental está presente en los delirios alucinatorios y en las paranoias. Los métodos
proyectivos para analizar la personalidad son muy utilizados. Uno de los más conocidos es
el test de las manchas de tinta de Hermann Rorschach.

Sublimación

Una nueva forma de satisfacer un instinto se halla en la sublimación (sublimar = elevar). La


psicología entiende por ello una transmutación y una elevación del instinto en cuestión a
un plano puramente intelectual. Freud opinaba que todos los resultados obtenidos en la
esfera intelectual se debían a una sublimación del instinto sexual. Sin duda alguna, es muy
posible que toda la energía psíquica que no puede desplegarse en el campo erótico, sea
capaz de transformarse en fuerza creadora de índole espiritual. Sin embargo, es con toda
seguridad una posición demasiado parcial el querer explicar por esta vía todo lo espiritual
o intelectual. Debemos suponer que junto a los instintos elementales, también existirán,
de un modo natural, instintos más elevados. Ambos tipos de instintos coexisten y
solamente se satisfacen en distintos planos de la vida.

De hecho, la sublimación no es más que una forma de compensación o de satisfacción de


una necesidad a través de un substitutivo. Pero en este caso, el instinto elemental se
convierte en una necesidad espiritual, o para decirlo de otro modo, el instinto inferior se
transforma en otro más elevado. El individuo renuncia voluntaria y forzosamente a la
satisfacción de tipo elemental y se compensa con una nueva forma de tipo espiritual. Este
fenómeno se comprenderá también fácilmente si para su explicación recordamos el
principio del placer. En ambos casos se trata de alcanzar el mayor grado posible de
satisfacción interior, o dicho de otro modo, de placer. Los caminos, niveles y planos
espirituales en que esto se consiga, carecen de importancia. Lo esencial es evitar el
descontento y alcanzar la sensación de satisfacción.

Represión

Represión, proceso psíquico que consiste en renunciar a la satisfacción de un deseo, de


forma consciente y voluntaria. La ‘represión inconsciente’ es un mecanismo de defensa
del yo que el individuo utiliza cuando no quiere reconocer la existencia de una situación
de frustración. Conocer las represiones inconscientes es clave a la hora de comprender las
neurosis.

Sigmund Freud utilizó con frecuencia este concepto en el psicoanálisis. Según Freud, la
represión es un mecanismo inconsciente que hace inaccesible a la mente consciente el
recuerdo de hechos dolorosos o traumáticos, y postula que reprimir una respuesta no
suprime el motivo que la inspiró. Las ideas o deseos reprimidos seguirán influyendo en la
conducta del individuo y se manifestarán de una forma u otra a través de los sueños,
lapsus o determinados síntomas. Uno de los objetivos del psicoanálisis es reducir este
proceso y llevar a la consciencia las tendencias reprimidas.
Racionalización

Como mecanismo de defensa, "es la utilización del pensamiento abstracto o de razones


lógicas y admisibles a los valores culturales y sociales del momento para justificar
sentimientos, pensamientos o conductas que serían inaceptables para la imagen de sí.

Término introducido por Jones, que se refiere al procedimiento por el cual el sujeto da
una explicación lógicamente coherente o aceptable desde el punto de vista moral sobre
una actitud, idea o sentimiento cuyos motivos verdaderos desconoce.

Intelectualización

Mecanismo defensivo descrito por Anna Freud en la adolescencia, consistente en una


exageración de un mecanismo normal mediante el cual el yo intenta controlar las
pulsiones asociándolas a ideas que puede manejar concientemente. Intelectualizar es
presentar los problemas en términos más generales y racionales, que personales y
emocionales.
No debe confundirse con la racionalización: ésta última no implica una evitación
sistemática de los afectos aunque los racionaliza justificándolos de alguna forma. La
intelectualización, en cambio, evita lo afectivo dándole forma discursiva.

Regresión.

Mecanismo de defensa que consiste en regresar a períodos anteriores del desarrollo o a


comportamientos antiguos, que eran más satisfactorios.

Aislamiento

Mecanismo de defensa, típico de la neurosis obsesiva. Un hecho, una idea, una impresión,
intolerado por el sujeto, es sacado de su contexto. Durante esa pausa, en esa tierra de
nadie, “ya nada tiene derecho a producirse, nada se percibe, ninguna acción se realiza”.
Freud compara este mecanismo con el proceso normal de concentración, en que el sujeto
se esfuerza en que su pensamiento no se desvíe.

Anulación o reparación

Consiste en la realización de un acto determinado con el fin de anular o reparar el


significado de uno anterior.

Formación reactiva
Lleva al yo a efectuar aquello que es totalmente opuesto a las tendencias del ello que se
quiere rechazar. La persona que elabora formaciones reactivas modifica la estructura de
su yo como si el peligro estuviera siempre presente, de este modo origina rasgos
caracterológicos que no son completamente efectivos para el sujeto.

Negación

Mecanismo de defensa por el que se rechazan aquellos aspectos de la realidad que se


consideran desagradables. El individuo se enfrenta a conflictos emocionales y amenazas
de origen interno o extemo negándose a reconocer algunos aspectos dolorosos de la
realidad externa o de las experiencias subjetivas que son manifiestos para los demás. El
término negación psicótica se emplea cuando hay una total afectación de la capacidad
para captar la realidad.

Identificación.

Mecanismo psíquico inconsciente que induce a un sujeto a comportarse, pensar y sentir


como otro que actúa como su modelo.

Identificacion introyectiva

Según M. Klein.- "El resultado de la introyección del objeto en el yo, el cual se identifica
entonces con algunas de sus características, o con todas".

Identificacion proyectiva

Según M. Klein.- "El resultado de la proyección de partes del Yo en un objeto. Puede tener
como consecuencia que se perciba al objeto como habiendo adquirido las características
de la parte proyectada del Yo, pero también puede resultar en que el Yo llegue a
identificarse con el objeto de su proyección" La identificación proyectiva patológica
"resulta de la desintegración diminuta del Yo o de partes del Yo, que luego se proyectan
en el objeto y se desintegran; tiene como consecuencia la creación de 'objetos extraños'".

Según M. Klein.- "Mecanismo que se traduce por fantasías donde el sujeto introduce su
propia persona, en su totalidad o en parte, en el interior del objeto para dañarlo, poseerlo
y controlarlo".

Conversión

Transformación de un conflicto inconsciente en manifestaciones somáticas, sensoriales o


motoras. Fenómeno típico de la histeria o neurosis de conversión.
Idealizacion

Según M. Klein.- "Mecanismo esquizoide vinculado con la escisión y la negación. Se niegan


las características indeseables del objeto, y el bebé proyecta en él su propia libido. Aunque
pertenece primordialmente a la posición esquizo-paranoide, la idealización puede formar
parte de las defensas maníacas contra ansiedades depresivas".

Según M. Klein.- "El mecanismo de idealización está inevitablemente unido al mecanismo


de disociación e inicialmente defiende de ansiedades persecutorias. La creciente
idealización del objeto bueno tiene por finalidad alejarlo del persecutorio y hacerlo
invulnerable. Dicho mecanismo se vincula con la negación mágica omnipotente: las
características indeseables del objeto son negadas, mientras simultáneamente es
recubierto de 'bondad' (amor, invulnerabilidad, poderes mágicos, poder omnipotente de
protección, etc.). El monto de idealización está en relación directa con el monto de
persecución frente al objeto, y es una defensa resultante de ansiedades persecutorias
(temor a ser atacado y destruído por el objeto)".
"El mecanismo de idealización forma parte también de las defensas maníacas en la
situación depresiva (mitigando en tal caso la ansiedad depresiva), adjudicando, por otra
parte, al objeto una gran riqueza de contenido y una gran capacidad reparatoria.
Entonces, si el objeto es perfecto y lo posee todo, no está destruído, no puede atacar
retaliativamente al yo (ansiedad persecutoria), ni el yo tiene que penar por él ni
preocuparse por repararlo (ansiedad depresiva)".
"Los mecanismos de idealización tienden a negar la fantasía de destrucción del objeto,
otorgándole invulnerabilidad, riqueza de contenidos, belleza. Un objeto así, no dañado ni
moribundo, evita tanto el temor a la persecución como el sufrimiento psíquico (duelo)".
"Dentro de la teoría kleiniana, la idealización es precursora de buenas relaciones de objeto
(en tanto el objeto idealizado es el precursor del objeto bueno). Una idealización extrema,
sin embargo, traba la relación con el objeto real, puesto que no existen objetos ideales
sino idealizados. Un cierto monto de idealización se mantiene a lo largo de la vida adulta
(enamoramiento, ideales de vida, etc.)".

Fuentes de consulta:
Editum.com
Psicología online.

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