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Distonía
Distonía
Los investigadores opinan que las distonías resultan de una anormalidad en un área
del cerebro llamada ganglio basal, donde se procesan algunos de los mensajes que inician las
contracciones musculares. Los científicos sospechan un defecto en la capacidad del cuerpo de
procesar un grupo de sustancias químicas llamadas neurotransmisores que ayudan a las células del
cerebro a comunicarse entre sí.
Existen varios tipos de distonías: Las distonías generalizadas, las segmentarias y la distonía focal,
que son las más comunes.
¿QUE ES LA DISTONIA?
El Dr. David Marsden ofrece los siguientes sabios consejos: "Tu actitud
ante esta enfermedad será uno de los más importantes factores que
deciden cómo te afecta. La distonía no te matará pero si permites que te
derrumbre, puede estropear tu vida. Es completamente natural, cuando
comprendes la naturaleza de tu enfermedad que pases por estados de
ansiedad, desesperación y depresión, y después aceptación. Esta
evolución lleva tiempo, pero tú debes trabajar positivamente para llegar al
estado final de aceptación, tan lejos como sea posible del hecho de tu
enfermedad y viendo lo que hay a tu alrededor. Habla con tu familia y con
tu médico acerca de estos problemas".
La distonía es un trastorno del movimiento que causa contracciones involuntarias de los
músculos. Estas contracciones resultan en torsiones y movimientos repetitivos. Algunas veces
son dolorosas.
La distonía puede afectar solamente un músculo, un grupo de músculos o todos los músculos.
Los síntomas pueden incluir temblores, problemas en la voz o hasta arrastrar un pie. Los
síntomas suelen comenzar en la infancia. También pueden comenzar al final de la
adolescencia o en la edad adulta temprana. Algunos casos empeoran con el tiempo. Otros son
leves.
Algunas personas heredan la distonía. Otras, la tienen como consecuencia de otra enfermedad.
De cualquier modo, los investigadores consideran que la distonía proviene de un problema en
la parte del cerebro que controla los mensajes relacionados con las contracciones musculares.
No existe una cura. No obstante, los médicos usan medicinas, cirugía, terapia física y otros
tratamientos para reducir o eliminar los espasmos musculares y el dolor.
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Puede que sienta debilidad en los músculos donde le inyectaron, sensibilidad muscular que
puede afectar su cuerpo entero, dificultad al tragar o una erupción cutánea ("rash") roja en la
piel que dura varios días después de las inyecciones. Todos los efectos secundarios
desaparecen rápidamente.
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Fuente
Revisado/Actualizado: 12/09
Creado: 01/06
Distonías
Tabla de Contenido
Las distonías son trastornos del movimiento en los cuales contracciones sostenidas del
músculo causan torceduras y movimientos repetitivos o posturas anormales. Estos
movimientos, que son involuntarios y a veces dolorosos, pueden afectar a un solo músculo; a
un grupo de músculos tales como los de los brazos, las piernas o el cuello; o al cuerpo entero.
Una disminución en la inteligencia y el desequilibrio emocional no son generalmente
característicos de las distonías.
Los síntomas iniciales pueden incluir un deterioro de la escritura después de escribir varias
líneas, calambres del pie y una tendencia a levantar o arrastrar un pie después de correr o de
caminar una cierta distancia. El cuello puede girar o moverse involuntariamente, especialmente
cuando el individuo está cansado. Otros síntomas posibles son los temblores y dificultades en
la voz o en el habla. Es posible que los síntomas iniciales sean muy leves y se perciban
solamente después de un esfuerzo prolongado, tensión o fatiga. Con el tiempo, los síntomas
pueden llegar a ser más notorios y extensos y pueden llegar a ser continuos. Sin embargo, hay
casos en los que existe poca o ninguna progresión.
Una forma de clasificar las distonías es según las partes del cuerpo que afectan:
La tortícolis espasmódica o tortícolis, es la más común de las distonías focales. En los casos de
tortícolis, los músculos del cuello que controlan la posición de la cabeza se ven afectados,
haciendo que la cabeza se doble hacia un lado. Además, la cabeza se va hacia delante o hacia
atrás. La tortícolis puede ocurrir a cualquier edad, aunque la mayoría de los pacientes padecen
los síntomas iniciales en la edad mediana. Comienza a menudo lentamente y generalmente se
vuelve estacionaria. Cerca del 10 al 20 por ciento de los pacientes con tortícolis sufren una
remisión espontánea (disminución de la gravedad de los síntomas), pero desafortunadamente
la remisión puede que no sea duradera.
La distonía craneal es un término usado para describir la distonía que afecta a los músculos de
la cabeza, la cara y el cuello. La distonía oromandibular afecta a los músculos de la mandíbula,
los labios y la lengua. La mandíbula puede abrirse o cerrarse completamente, dificultando la
acción de tragar y el habla. La disfonía espasmódica afecta a los músculos de la garganta que
controlan el habla. También llamada disfonía espástica o distonía de la laringe, causa
quebraduras en la voz y dificultades en el habla, tales como un habla forzosa y entrecortada
con la respiración. El síndrome de Meige es la combinación del blefaroespasmo y la distonía
oromandibular y a veces la disfonía espasmódica. La tortícolis espasmódica se puede clasificar
como un tipo de distonía craneal.
El calambre del escritor es una distonía que afecta a los músculos de la mano y a veces del
antebrazo y ocurre solamente durante la escritura. Ciertas distonías focales similares también
han sido denominadas calambre del mecanógrafo, calambre del pianista y calambre del
músico.
Los investigadores opinan que las distonías resultan de una anormalidad en un área del
cerebro llamada ganglio basal, donde se procesan algunos de los mensajes que inician las
contracciones musculares. Los científicos sospechan un defecto en la capacidad del cuerpo de
procesar un grupo de sustancias químicas llamadas neurotransmisores que ayudan a las
células del cerebro a comunicarse entre sí. Algunos de estos neurotransmisores incluyen:
La distonía adquirida, también llamada distonía secundaria, resulta de daños por factores
ambientales o por enfermedades que afectan al ganglio basal. Las lesiones neonatales
(especialmente las relacionadas a la falta de oxígeno), ciertas infecciones, reacciones a ciertas
drogas, el envenenamiento producido por metales pesados o monóxido de carbono, traumas o
derrames cerebrales pueden causar síntomas de distonías. Las distonías también pueden ser
síntomas de otras enfermedades, algunas de las cuales pueden ser hereditarias.
Alrededor de la mitad de los casos de distonías no tiene conexión con enfermedades o lesiones
y se llaman distonías primarias o idiopáticas. De las distonías primarias, muchos casos parecen
ser heredados de una manera dominante; es decir, solamente es necesario que uno de los
padres portadores transmita el gen de la distonía para que la enfermedad ocurra. Cada hijo
tiene 50 por ciento de posibilidades de ser portador. Sin embargo, en el caso de la distonía,
puede ser que un portador no la desarrolle y que los síntomas puedan variar significativamente
entre los miembros de una misma familia. El resultado de un gen defectuoso parece ser
suficiente para causar desequilibrios químicos que pueden conducir a la distonía, pero también
existe la posibilidad de que otro gen o genes y factores ambientales desempeñen un papel
importante en su incidencia.
Algunos casos de distonía primaria pueden tener diversos tipos de patrones hereditarios.
Conocer el patrón hereditario puede ayudar a las familias a entender su riesgo de transmitir la
distonía a las generaciones futuras.
En algunos individuos, los síntomas de la distonía aparecen en la niñez, entre las edades de 5
y 16 años, generalmente en el pie o la mano. En la distonía generalizada, los movimientos
distónicos involuntarios pueden progresar rápidamente hasta involucrar a todas las
extremidades y el torso, pero generalmente el índice de progresión de la enfermedad se hace
bastante más lento después de la adolescencia.
Para otros individuos, los síntomas surgen al final de la adolescencia o en edad adulta
temprana. En estos casos, la distonía comienza a menudo en las partes superiores del cuerpo,
con un progreso lento de los síntomas. Una distonía que comienza en edad adulta es más
probable que permanezca como distonía focal o segmentaria.
A menudo, las distonías progresan en varias etapas. Inicialmente, los movimientos distónicos
son intermitentes y aparecen solamente durante movimientos o tensiones voluntarias. Más
adelante, los individuos pueden presentar posturas y movimientos distónicos al caminar y en
última instancia, mientras están relajados. Los movimientos distónicos pueden causar
deformidades físicas permanentes al acortar los tendones.
En las distonías secundarias debidas a una lesión o derrame cerebral, a menudo los pacientes
presentan movimientos anormales en un solo lado del cuerpo, que pueden comenzar al ocurrir
la lesión cerebral o un tiempo después. Los síntomas generalmente se estancan y usualmente
no se expanden hacia otras partes del cuerpo.
¿Existen tratamientos?
Con frecuencia, la primera droga administrada pertenece a un grupo que reduce el nivel del
neurotransmisor acetilcolina. Las drogas de este grupo incluyen el trihexifenidil, la benzotropina
y la prociclidina HCl.
Las drogas que regulan el neurotransmisor GABA se pueden utilizar conjuntamente con estas
drogas o por sí solas en pacientes con síntomas leves. Entre las drogas que regulan el GABA
se encuentran los relajantes musculares como el diazepan, lorazepam, clonazepam y baclofen.
Otras drogas actúan sobre la dopamina, un neurotransmisor que ayuda al cerebro a regular los
movimientos musculares. Algunas drogas que aumentan los efectos de la dopamina incluyen la
evodopa/carbidopa y la bromocriptina. La DRD responde particularmente bien a las dosis
pequeñas de tratamientos que aumentan el nivel de dopamina. Por otra parte, los pacientes se
han beneficiado en ocasiones de las drogas que disminuyen la dopamina, tales como la
reserpina o la tetrabenazina, una medicina experimental.
Algunos pacientes con disfonía espasmódica se pueden beneficiar del tratamiento con un
patólogo del habla y del lenguage. La terapia, usar tablillas, el manejo del estrés y la
bioretroalimentación también podrían ayudar a individuos que padecen de ciertas formas de
distonía.
¿Qué investigación se está realizando?
Los últimos retos en la investigación incluyen encontrar las causas de las distonías para
poderlas prevenir y hallar maneras de curar o de tratar con mayor eficacia a los pacientes
actualmente afectados. En el gobierno federal, el Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos
y Accidentes Cerebrovasculares (NINDS por su sigla en inglés) una división de los Institutos
Nacionales de la Salud (NIH por su sigla en inglés), es la agencia cuya responsabilidad
principal es la investigación cerebral y neuromuscular. El NINDS patrocina la investigación
sobre la distonía en sus instalaciones en el NIH y brindando apoyo financiero a diversos
centros médicos a través del país. Los científicos del Instituto Nacional de la Sordera y Otros
Trastornos de la Comunicación (National Institute on Deafness and Other Communication
Disorders - NIDCD), que también forma parte del NIH, están realizando mejoras en los
tratamientos para curar los trastornos del habla y de la voz relacionados con las distonías.
Los científicos en los laboratorios de NINDS han conducido investigaciones detalladas de los
patrones de la actividad muscular en personas con distonías focales. Una de las características
más importantes es la falta de la inhibición recíproca, un proceso normal en el cual los
músculos con acciones opuestas funcionan sin oponerse mutuamente. En la distonía, la
contracción muscular se asocia a un patrón anormal de los músculos, que actúan en oposición.
Otros estudios realizados en el NINDS relacionados con la función espinal refleja encontraron
anormalidades consistentes con anomalías en la inhibición recíproca. Otros estudios realizados
con análisis de EEG y procesamiento de imágenes neurológicas están investigando la actividad
cerebral y su relación con estas observaciones.
La búsqueda del gen o de los genes responsables de algunas formas de distonías dominantes
hereditarias continúa. En 1989, un equipo de investigadores estableció una relación entre un
gen asociado a la distonía de torsión precoz y el cromosoma 9; el gen posteriormente fue
denominado DYT1. En 1997 el equipo secuenció el gen DYT1 y encontró que codifica una
proteína previamente desconocida que ahora se denomina "torsina A." El descubrimiento del
gen DYT1 y de la proteína torsina A permite realizar una prueba prenatal, que los médicos
realicen un diagnóstico específico en algunos casos de distonía y además permite la
investigación de los mecanismos moleculares y celulares que provocan la enfermedad.
Para obtener información adicional sobre los programas investigación del NINDS, contacte a la
Unidad de Recursos Neurológicos y Red de Información del Instituto (BRAIN por su sigla en
inglés) en:
BRAIN
P.O. Box 5801
Bethesda, MD 20824
(800) 352-9424
http://www.ninds.nih.gov
iatrogénico, ca.
(Del gr. ἰατρός, médico, ‒́geno e ‒́ico).
1. adj. Med. Se dice de toda alteración del estado del paciente producida por
el médico.