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ambiental y realizar un análisis de los riesgos que se podrían presentar en caso de ejecutarse.
Para esto tratare de no ahondar en aspectos técnicos muy complicados de entender y voy a
centrarme en los siguientes puntos:
Es importante tener una localización precisa del proyecto para poder determinar su área de
influencia, las siguientes imágenes consisten en la delimitación del área de influencia biótica y
socioeconómica determinado por los estudio de Minesa (Reflexión sobre dichos estudios cada
una de las cosas mencionadas en los resultados de los estudios se asume como cierta para el
análisis pero es normal que nazcan conjeturas y dudas sobre los resultados presentados por
Minesa).
sobre esta imagen nace cierta inconformidad con la información, la delimitación del área del
paramo de San turban realizada en el 2014 por medio la resolución 2090 recibió quejas de
haberse hecho de manera apresurada durante el gobierno de Santos vulnerando el derecho a
la participación de la comunidad que habita el paramo y sus zonas aledañas. Con esto quiero
decir que la delimitación definitiva del paramo no se ha realizado (reflexión) … en ese orden de
ideas el análisis de riesgo que realizo se hace asumiendo que la delimitación del paramo es
correcta,
4) Abandono y cierre, con una duración de 12 años para asegurar la recuperación ambiental de
la zona.
El proyecto Soto Norte tendrá un área para el manejo de materiales sobrantes del proceso de
beneficio (que se conocen como relaves) y de la construcción de la mina (conocidos como
material estéril), denominada DRS
El depósito de relaves secos (DRS) se ubicará en el sector de Caneyes (Suratá), y tendrá un área
total de 64,47 hectáreas (ha) de intervención, ocupando un 41% de la subcuenca de la
quebrada Caneyes, la cual tiene un total de 156,1 ha. Esta instalación tendrá la capacidad de
almacenar 34 Mt de relaves y roca sobrante. Reconociendo la importancia de la quebrada
Caneyes, MINESA ha incluido unos criterios de diseño para reducir el impacto y garantizar que
el flujo de agua no se interrumpa. Para prevenir una posible contaminación del suelo y de las
aguas, el diseño contempla la instalación de recubrimientos en el fondo del depósito,
compuesto por materiales impermeables que garanticen el correcto confinamiento de los
depósitos sobrantes y opcionalmente geomembrana de alta densidad para los taludes de más
inclinación; así mismo, consideró otros aspectos relevantes como las zanjas de canalización de
agua lluvia alrededor del sitio, y los subdrenajes debajo del depósito para permitir el flujo libre
del agua en el área ocupada de la quebrada.
Para trabajos de construcción de obras en los primeros 4 años y para consumo doméstico, el
proyecto requerirá el uso de hasta 27,5 litros por segundo (L/s) de agua del río Suratá, 10 L/s
de la quebrada La Baja y 2 L/s de la quebrada San Juan. Así mismo, el proyecto usará para la
operación de mina y planta de beneficio, 27,5 L/s de agua subterránea de un máximo estimado
de 294,4 L/s que se infiltraría a la mina y los túneles. En el escenario de máxima operación, se
estima que el proyecto usará hasta 37,5 L/s de agua superficial y subterránea para las labores
de minado, beneficio mineral, riego de vías y consumo doméstico. En su totalidad, el agua
captada por el proyecto, tanto superficial como subterránea, será tratada siguiendo los
estándares ambientales regulados en el país, para mantener el balance entre el recurso hídrico
que entra y que sale del proyecto, de forma que no se afecte la cantidad ni la calidad de agua
que suple a los habitantes del área de influencia del proyecto. En consecuencia, no se afectará
la cantidad ni la calidad de agua que suple a los habitantes de otras regiones fuera del área de
influencia, incluida la ciudad de Bucaramanga. Para el tratamiento de agua residual no-
doméstica (“ARnD”) se usarán procesos con lodo de alta densidad (“HDS”) e intercambio
iónico (“IEX”), los cuales permiten la remoción de los elementos químicos potencialmente
riesgosos que ocurren de forma natural en las rocas (por ejemplo, selenio, plomo, cadmio,
arsénico, etc.). Adicionalmente, el proyecto contará con sistemas de contactores biológicos
rotatorios (“CBR”) para el tratamiento de concentraciones anómalas de nitrógeno, nitritos y
nitratos que se puedan generar por causa de los residuos de las voladuras. Los lodos de alta
densidad, y los de baja densidad (salmuera) resultantes de los procesos de tratamiento de
agua, serán manejados por un tercero certificado por las autoridades competentes, que
garantice su cadena de custodia y disposición final. A través de la minería moderna, de un
proceso de beneficio eficiente y de los programas ambientales robustos del proyecto “Soto
Norte”, Minesa honrará el voto de confianza dado por las comunidades y por las autoridades,
con el compromiso de ejecutar la totalidad de los programas propuestos en el EIA para
garantizar el manejo adecuado de los recursos, entre ellos el agua, y la convivencia
responsable, transparente y armónica con los habitantes del área de influencia del proyecto
Soto Norte.