Está en la página 1de 4

Cada día un nuevo comienzo, gracias a dios.

No había encontrado las palabras para poder expresar todo lo que siento, y hoy
que he pasado esta mañana completamente solo, me he dado la oportunidad de
pensar en todas las cosas que han sido y que me han traído aquí a escribir.

No creo conocer la felicidad completa, me gustaría poder serlo plenamente, quiero


ser feliz por mi propia cuenta, porque el amor propio es el único que dura para
toda la vida, no darme por vencido siempre ha sido mi más grande objetivo. Ya no
quiero estar bien con los demás, prefiero estar bien conmigo mismo y lograr hacer
las paces. me alegra que por fin me empiece a comprender completamente.

Tomar decisiones es una responsabilidad que ejercemos diariamente, y hoy quiero


que sea dios quien guie mis actos y sea yo su medio para hacer el bien mayor.

Dios dame sabiduría y valor para ser paciente y poder encontrar el amor algún día,
permite me la oportunidad de agotarme solo con aquello que me apasiona. Deja
que sonría a diario, ya que tengo la oportunidad de cumplir mis sueños día a día,
sé que siempre habrá problemas, pero espero afrontarlos como siempre lo he
hecho, o al menos desde ahora con coraje y convicción, estoy maravillado de lo
afortunado que soy al haberme dado cuenta de que soy diferente y debo ahora,
ser valiente al intentar desde hoy ser solo mi versión, un molde solo para mí, una
persona única, sin presiones ni complejos. Lo que sea que venga déjalo venir; lo
que se quede, déjalo estar, lo que se va déjalo, recuerda que el pasado ya se ha
ido, a menos que lo sigamos arrastrando de nuevo. Tu eres el único que se
lastima al mantener viva una herida vieja, como dijo el buda, eso es como beber
veneno con la intención de matar a otra persona.

De mis amigos aprendí que un día vale la pena si al final alguien sin esfuerzo logra
sacarme una sonrisa, por favor dios dame la oportunidad de ser fuerte y ya no
buscar el placer instantáneo y pasajero, déjame y orienta cada una de mis
acciones para que practique la buena vida, sonría mucho y encuentre mi camino
en viajes y situaciones.
Acepto que no se puede con todo, acepto que no tengo todo en orden y tan
organizado, pero eso no es sinónimo de ser un mal hijo, un mal hermano, o un mal
amigo. Hoy me invito a liberarme de esta cárcel enorme formada de recuerdos
negativos, eres suficientemente bueno, te amo Christian, amo que por fin puedas
verte al espejo y te encuentres atractivo, no eres malo, eres dulce, no pierdas tú
esencia. Es mi momento, de confiar en dios y en mí, yo no quiero ser olvidado en
un mundo donde con poco estoy a gusto y en donde la mayoría no sabe qué
hacer.

Debo centrarme en las cosas positivas que he vivido en mi día. Las cosas
negativas normalmente son en lo primero que me fijo, le doy más importancia y
dejo pasar las cosas positivas que me han ocurrido, esas que son las que me
llenan de la mejor vibra. La cosa es: si estás en un bucle de negatividad, sólo
estás invitando a más negatividad. Es como estar sintonizado con una emisora de
radio con música que no soportas - a menos que cambies el canal, no oyes
música diferente.

Gracias vida, por todo lo que tengo, por todo lo que soy, por todo lo que doy. Por
todo aquello que debe terminar, suelto con absoluta claridad lo que no me
pertenece más y recibo con infinito agradecimiento lo que tienes asignado par a
mí.

Tus planes son perfectos, tus obras las más bellas creaciones y yo tu más seguro
servidor. Que tus decisiones sean parte de mis anhelos y que nada llegue a mi si
no es para dejarme el más grande aprendizaje. ¿Si me encanta nadar, me
apasiona la bici y me gusta correr, porque no hacerlo todo junto?

Practica la buena vida, sonríe mucho, viaja, y haz lo que más te guste aprende de
las personas y aprende a equivocarte y a levantarte. Descubre, crea, quiere,
enamórate, sueña… y hazlo ahora no mañana, recuerda que estas aquí para ser
feliz. Recuerda que quien le teme al fracaso también le teme al éxito, tú vida es
infinitamente valiosa y tan importante como la de los demás, más allá de lo que los
demás piensen o digan, más allá de lo que hagas o de quien seas, sin necesitar
que alguien te lo reconozca o exprese. Saber aceptar con humor y alegría tus
propios defectos, errores y limitaciones sin llegar a menospreciarte o sentirte
lastimado, valorando el don de la vida por sobre todas las cosas. No estés
ocupado todo el día y distraído. medita, ora, contempla, escucha tu alma, baila,
camina, calma tu mente para que entre Dios.

Por lo tanto, si has comenzado un camino síguelo bajo cualquier circunstancia;


únicamente puedes ganar; no corres peligro alguno; quizá, al final, te vengas
abajo, pero si después del primer paso te hubieses vuelto y hubieses bajado la
escalera, inmediatamente y ya desde el principio te habrías venido abajo, y no
quizá sino con toda seguridad. Por lo tanto, si nada encuentras en los corredores
abre las puertas; si detrás de esas puertas no encuentras nada, hay todavía otros
pisos; si arriba tampoco encuentras nada esto no es nada grave: esfuérzate y
sube escaleras arriba. Mientras no dejes de subir no se terminan los escalones:
crecen bajo tus pies que suben

Disfruta del pánico que provoca tener la vida por delante. Vívela intensamente, sin
mediocridades. Piensa que en ti está el futuro, y asume la tarea con orgullo y sin
miedo. Aprende de quienes pueden enseñarte. No permitas que la vida te pase a
ti, sin que tú la vivas.

Desecha todo temor. Nada puede dañarte aquí. Sólo tú mismo. Haz aquello que
temes y aprecia con orgullo esas victorias. Concentra tu energía. Estar en todas
partes es tanto como no estar en ninguna. Sé celoso de tu tiempo, porque es tu
mayor tesoro. Ama a tu familia y ten muy presente la ventura. Piensa con cuánto
afán la buscarías si no la poseyeras. Haz a un lado tus sueños imposibles y lleva a
cabo la tarea que tienes a tu alcance, por desagradable que sea. Todos los
grandes éxitos resultan de trabajar y saber esperar. Sé paciente. Los retrasos de
Dios no son negativas. Espera. Mantente firme. Ten presente que tu tesoro
siempre está cerca. Lo que siembres, bueno o malo, eso será lo que coseches.
Nunca culpes a los demás por tu situación. Eres lo que eres por decisión tuya eso
es todo.

Trabaja cada día como si fuera el primero, pero trata con ternura las vidas que
tocas, como si todas debieran acabarse a medianoche. Ama a todos, incluso a los
que te repudian, el odio es un lujo que no puedes permitirte. Aférrate a Dios con
sencillez y recorre en silencio tu sendero hacia la eternidad, con caridad y con una
sonrisa. Cuando partas, todos dirán que tu legado fue dejar un mundo mejor...

También podría gustarte