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Alumno.

ALEXYS MOTA
II de Derecho Canónico.

RESUMEN DE ITINERARIO DERECHO ADMINISTRATIVO.

EL PRINCIPIO DE COLABORACION: la imperiosa necesidad, que el Obispo promueva la


participación de todos los miembros del pueblo cristiano, tanto en el aspecto singular,
como asociado y que reconozca y respete el pluralismo de responsabilidad y libertad
de las personas y de las asociaciones. Esto con la finalidad de poder darle participación
a los fieles y no hacerlo totalmente de forma individual.
El EJERCICIO DE LA FUNCION LEGISLATIVA: comporta que el Obispo oiga al consejo y
busque la colaboración de los órganos y de los Consejos diocesanos, antes de tomar
decisiones precipitadas y emanar normas o directivas generales para la diócesis. Y
además de eso debe estar sujeto al Derecho y a la suprema autoridad de la Iglesia y de
las normas del Derecho Canónico.
CUIDADO EN LA REDACCION DE LAS LEYES: el Obispo debe cuidar la redacción, la
precisión y lo técnico jurídico, que estén bien escritas y se puedan comprender
fácilmente, evitando las contradicciones, repeticiones y sobre todo la multiplicación de
las disposiciones, las normas no pueden ser excesivas, solo necesarias para el ámbito
pastoral.
MOTIVAR: el Obispo debe siempre motivar las decisiones de gobierno, como también
dar oportunidad de defensa, en el caso que afecte por la imposición de penas, como
también en el ámbito administrativo. En esa misma dirección debe delimitar las
competencias de los distintos órganos de gobierno, donde cada uno cumple una
función específica.
FORMAR COLABORADORES: en lo que respecta a este aspecto, se debiera tener en
cuenta la inversión, para formar al personal o los colaboradores que trabajan al
servicio de la Diócesis, en especial los de la Curia Diocesana, a los que se les debe
facilitar formación para que ellos desempeñen su función diligentemente.
EQUIDAD Y PRUDENCIA: el Obispo a la hora de seleccionar candidatos para oficios,
debe ser muy objetivo, para dar a cada persona adecuado los oficios que
desempeñarán.

EL RESPETO A LA COLEGIALIDAD EN EL GOBIERNO.


El Obispo debe respetar la colegialidad, promoverla y defenderla en la toma de
decisiones, para que, de acuerdo a cada caso, se complementen y ayuden en la
actividad de Gobierno de los oficios capitales. Esto permite que, en el momento de la
consulta, se estudie y se vea con mas amplitud los problemas, realizando las oportunas
consultas a las personas competentes a las que debe escuchar.
En ese mismo sentido, se debe tener presente la organización de las reuniones,
las cuales deben estar muy bien preparadas, con un tiempo de duración específico, con
objetivos concretos y con un clima de relación mutua y que siempre termine con
propuestas. Que también los consejeros expresen libremente sus opiniones.
Tampoco se puede dejar deja de un lado, el tenga la disposición de oír a los
fieles y buscar su consejo y colaboración. No deje de escuchar a los colegios
diocesanos antes de dictar normas o publicar directivas diocesanas. Y deberá atenerse
al principio de justicia y legalidad, sin cometer arbitrariedades.

LOS FIELES LAICOS: el Obispo debe tener la iniciativa de despertar en los laicos el
sentido de su vocación y de su pertenencia a la Iglesia, hacerles ver los consciente de
su misión eclesial y animarlos a cumplirla diligentemente. Así mismo los laicos deben
prestar una colaboración a los pastores y que estos puedan ejercer funciones en el
ámbito de la vida litúrgica, en las estructuras diocesanas y en las actividades pastorales
y también en la actividad catequética diocesana y parroquial, ya que su colaboración
es indispensable.

MUNUS REGENDI DEL OBISPO DIOCESANO.


a) Coordinación del apostolado el plan pastoral diocesano: para esto debe haber
un estricto orden y coordinación de todos los apostolados, así como también el
Obispo debe organizar adecuadamente todo el apostolado de la diócesis, con la
elaboración de un plan tomando en cuenta toda la vida de la diócesis.
b) La Curia Diocesana: son los organismos que debe colaborar con el Obispo en el
gobierno de toda la diócesis, esencialmente en la actividad pastoral, la
administración y la potestad judicial.
c) Coordinación de los diferentes oficios: el obispo debe cuidar diligentemente
todos los asuntos, que se refieren a la administración de la diócesis, coordinar
todo lo referente a lo pastoral en conjunto con los Vicarios, general y episcopales.
También puede establecer el oficio del Moderador, que tiene como función
coordinar todo lo relativo a lo administrativo y encargarse de vigilar que el
personal de la Curia cumpla cada uno cumpla sus funciones y en conjunto.
d) Los consejos diocesanos: el Presbiteral, facilita el diálogo necesario entre el
Obispo y el presbiterio, son colaboradores, es como un senado que representa al
presbiterio y ayuda al Obispo. Al que se le consultan las cuestiones de mayor
importancia en la vida de la diócesis.
e) Colegio de Consultores: lo que se busca es la asistencia del Obispo y dando su
consenso y su parecer en cosas de gran trascendencia para la diócesis.
f) Consejo Pastoral: esta compuesto por fieles, miembros de instituto de vida
consagrada y por laicos, a los cuales les corresponde bajo la autoridad del Obispo,
estudiar y valorar todo lo referente a las actividades pastorales diocesanas.

LA FORMACIÓN DE LOS FIELES EN ASPECTOS CANÓNICOS DEL GOBIERNO


DIOCESANO.

 Trabajo administrativo de Curia: la importancia de que consten por escrito los


acuerdos internos, la comunicación entre los gestores, registrar todo por
escrito, de tal forma que haya uniformidad, realizar acta de las reuniones,
orden del día, puntualidad y orden en el trabajo de cada oficina, deben repasar
todas las tareas pendientes y que el trabajo común sea compartido. Se debe
tener presente que hay cosas que se deben ser en secreto y con mucha
prudencia.
 El moderador o secretario de la Curia, debe estar atento y resolver las
situaciones cuanto antes y debe seguir todas las normas y formalidades que
establece el Derecho Canónico y llevar todo al día.
 Se deben estudiar y analizar las posibles consecuencias que se puedan tener en
el ámbito civil.
 Debe haber una formación permanente del personal de Curia, se les debe
actualizar con cursos, con prácticas y al mismo tiempo incentivarlos, motivarlos
económicamente.
 La importancia de la formación espiritual de los miembros de la Curia,
mediante clases, ejercicios espirituales organizados, de tal forma que el
personal también reciba la dimensión espiritual.
 Y se debe pedir siempre las cosas a las personas a las que se les han
encomendado tareas, para saber con precisión como van orientándose cada
tarea y sus plazos de cumplimientos.
 Me gustaría resaltar la importancia que tiene el poder formar en cultura
jurídica al clero joven, de tal manera que puedan saber como se ejercitan las
cosas donde debe aplicarse el Derecho Canónico.

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