“La Protección del Creyente”

TEXTO 1 Pedro 1:5

Introducción

¡Vivimos en un mundo hostil! El creyente tiene tremendo enemigos, cuyo deseo es destruirlo, y
arruinar el plan de Dios para su vida. ¡Como creyentes, somos tan débiles! ¿Qué confianza
podemos tener de no echar a perder la gran salvación que Dios ha obrado por nosotros? Pedro
era un hombre que había fallado al Señor, y era muy conciente de sus debilidades. Por ende, es
una buena persona para escribir acerca de la protección del creyente.

¿En qué consiste la protección del creyente? En este verso, Pedro destaca TRES cosas
importantes:

1. Protegido POR EL PODER DE DIOS (v.5a)

Judas describe al creyente como “guardados en Jesucristo” (Judas 1).

a. De qué es Protegido

Dios no protege al creyente de las dificultades de la vida (enfermedades, sufrimientos, dolor,

etc). Lo protege en cuanto a su vida espiritual. Lo protege de los ataques del maligno, quien
procura hacerlo caer en pecado, para destruir su vida espiritual. Ana exclamó, “Él guarda los
pies de sus santos” (1 Sam 2:9). El creyente puede ‘tropezar’ en algún pecado, pero no caerá
para siempre; para no levantarse jamás (Sal 37:24). Esta es la base de la afirmación de Judas,
en Judas 24-25.

b. Cómo es Protegido

Las tres Personas de la Trinidad obran para cuidar la vida espiritual del creyente:

i. Dios el Padre (Juan 10:28-29; 17:11-12)

ii. Dios el Hijo (Juan 10:28-29; Heb 7:25)
iii. Dios el Espíritu Santo (1 Juna 3:9; Sant 4:5)

Dios es fiel. Cumple lo que promete (2 Tes 3:3; Fil 1:6)

2. Protegido POR MEDIO DE LA FE

Dios obra en nosotros, por medio de la fe, para guardarnos en la salvación. Esta fe tiene dos
aspectos. Tenemos que:

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 a. Creer en Dios – fe en el corazón (confianza en Dios). Esto incluye una vida de
obediencia, basada en la fe que Dios sabe lo que es mejor para nosotros. Por eso Pedro
exhorta a los creyentes: 1 Ped 1:13-16; 2:11-12; 4:1-3.

b. Creer a Dios – fe en la mente (la doctrina de Dios). Esto incluye aceptar las Escrituras,
y las doctrinas fundamentales de la fe. Por medio de esto, Dios nos guarda del error.

3. Protegido PARA SALVACIÓN (v.5c)

a. Una Salvación ya Preparada – desde la eternidad; por medio de la muerte de

Cristo.

b. Una Salvación que Será Manifestada – en los últimos tiempo, con toda la gloria
de Dios (Rom 8:18-23).

Conclusión

El creyente está seguro. Su salvación no se va a echar a perder, y él no echará a perder su

salvación. ¡Dios guarda ambas cosas!