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PRIMER CICLO:
OBJETIVOS:
- Sonorizar cuentos con pictogramas, sustituyendo los mismos por
la imitación de sus sonidos a través de la voz o el gesto.
- Sonorización sencilla de poemas adecuados al Ciclo, usando
instrumentos escolares de pequeña percusión.
EL FLAUTISTA MÁGICO
plaga de , y le ofrecieron un si lo
CUENTO DE NAVIDAD
Falta muy poco para que sea Navidad y todos los niños sueñan
han tenido que ponerle un para que esté más fresquito.
le dio en toda la cabeza con su escoba, una y otra vez, hasta que el
POEMA
DESFILE DE NUMERITOS
Marchan airosos
los numeritos,
marchan que marchan
sin descansar. Pandero 8 negras
Sobre la calle
del Pizarrón,
todos de blanco,
los numeritos
van en legión Pandero y plato 8 negras
SEGUNDO CICLO:
OBJETIVO:
- Sonorización de cuentos o poemas usando instrumentos escolares
de pequeña percusión.
CUENTO TIPO:
EL TORITO FERNÁNDEZ
En una dehesa salmantina, hubo una vez un torito bravo muy
retozón al que todos llamaban “Torito Fernández”…(1) Era como
los demás, pero no igual que los demás, pues mientras a los otros
de su edad les gustaba retozar juntos por los prados…(2), a él le
gustaba corretear solo…(1) y pararse de repente para contemplar
una flor…(3), un mariposa…(4), una lagartija…(5), algún
pajarillo…(6) o quedarse por las noches a las orillas de los
charcos para escuchar los cantos de las ranas…(7).
INSTRUMENTACIÓN
TERCER CICLO:
OBJETIVOS:
- Construcción de instrumentos con materiales de desecho,
valorando así la importancia del reciclaje y aprendiendo a la vez,
que la música está latente incluso en aquello que creemos
inservible (“Todo suena”).
- Sonorizar cuentos usando los instrumentos de fabricación propia
elaborados en sesiones anteriores.
CUENTOS TIPO:
UNA DE PIRATAS
Esta historia, rigurosamente cierta, es la de unos piratas, los mejores navegantes de los
siete mares, los más atrevidos, los más incansables buscadores de tesoros.
Habían hecho durante años lo que todos los piratas: hundir barcos enemigos, beber ron,
luchar contra las tempestades, tatuarse el cuerpo, perder un ojo, ponerse una pata de
palo, pero, sobre todo, BUSCAR TESOROS.
En todo habían tenido un resonante éxito. En todo… menos en lo de encontrar tesoros.
Pero su vida cambió el día que cayó en sus manos un extraño pergamino con una aún
más extraña inscripción medio borrada en la que se leía: “ MAR ADENTRO, EL
MAYOR TESORO” y un símbolo parecido a un caracol.
Sin pensarlo dos veces partieron, mar adentro, rumbo a la isla Caracol. Y en la isla
Caracol… no encontraron ningún tesoro.
Fue el pirata más viejo de la tripulación quien dijo: “Eso no es un caracol, es una
serpiente enroscada”. E inmediatamente pusieron rumbo, mar adentro, hacia la isla
Serpiente. Y en la isla Serpiente… no encontraron ningún tesoro.
Entonces alguien se atrevió a decir: “Eso no es una serpiente enroscada, es un sombrero
chino.
Y partieron hacia el mar de la China. Pero naturalmente allí… no encontraron ningún
tesoro.
Agotados, enfermos y a punto de naufragar los descubrió un pescador de perlas.
Tras reanimarlos con una bebida tonificante sin alcohol, les preguntó qué buscaban.
Ellos le enseñaron el mapa y ante su asombro el pescador de perlas descifró
inmediatamente el enigma.
“Aquí no pone MAR ADENTRO sino MÁS ADENTRO y este símbolo no es un
caracol, ni una serpiente, ni un sombrero chino, es una espiral que enseña el camino
hacia el interior. ¡Seguidme!”
Y sin más, bajó a la bodega, levantó unas tablas y ante los ojos atónitos de los piratas
apareció el mayor tesoro, guardado allí desde la construcción del barco.
Hoy el pescador de perlas tiene nombre de mujer y se llama…… (en este caso Alicia,
mi nombre) y estoy aquí con vosotros-as (un poco piratas ¿no me negaréis?) para
ayudaros a descubrir el tesoro que todos y todas sin excepción lleváis dentro, así como
el gran tesoro de aventura y sabiduría que os proporcionará leer cuentos.
Pues sí, el viejo marinero de barba blanca, impermeable amarillo y gorra azul,
canturreaba mientras recogía los aparejos, una canción de su tierra que decía algo así
como:
“Na veira, na veira, na veira do mar,
hay una barquiña pra ir a navegar”
Marina escuchaba en un rincón. Cuando el viejo marinero,........, terminó su canción, sin
mediar palabra, Marina comenzó a cantar algo que oyó alguna vez a unos marineros
ingleses:
“A sailor went to see
to see what he could see
and all that he could see
was the bottom of the deep blue sea”
- ¿Te gustaría ver el fondo del mar?, le dijo cuando terminó de cantar.
- Me encantaría, respondió el viejo marinero.....
Y Marina se lo llevó al fondo a descubrir algas, corales, pólipos, anémonas, esponjas,
caballitos de mar... El pez de colores que escapó de la red les acompañaba.
(Verles levantar la gasa del mar y tocar con asombro las algas, corales o perlas, con
diferentes texturas, es un poema).
El siguiente cuento se lo contamos hace un par de cursos a todos los niños, con sus
familiares acompañantes, reunidos en el patio, el primer día de colegio. Los comienzos,
al igual que los finales, en una actividad educativa (y en muchas otras cosas) son muy
importantes y merecen ser cuidados especialmente.
La irrupción de un personaje fantástico, protagonista de una historia, en medio de la
clase puede dar pie a un sinfín de actividades artísticas.