Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Comparación
Eres duro como el acero
La calle estaba oscura como la boca del lobo
Tus ojos son como dos esmeraldas
Hoy he dormido como un bebé
Sus mejillas, rugosas como la corteza de una vieja encina (Pío Baroja)
El árbol es como una casa para los pájaros
Es manso como un corderillo
Tus dientes blancos como perlas
Sus ojos azules como el cielo
Tus labios son rojos como rubíes
Hipérbole
¡Eres más lento que una tortuga!
Llueve a cántaros
Tengo tanto sueño que podría quedarme dormido aquí de pie
Te llamaré un millón de veces
Te mando infinitas gracias
Te bajaré las luna y las estrellas a tus pies
¡Lo sabe todo el mundo!
¡Tienes un corazón tan grande que, no te cabe en el pecho!
Por doler me duele hasta el aliento. Miguel Hernández
Por tu amor me duele el aire, el corazón y el sombrero. Federico García Lorca
Metáfora
El tiempo (R) es oro (I) → se asemejan porque ambos son muy valiosos
Tus dientes (R) son perlas (I) → se asemejan por su color blanco
Tus ojos (R) son dos luceros (I) → se asemejan por su brillo
Tus labios (R) son rubíes (I) → se asemejan por su color rojo
Los jóvenes (R) son el futuro (I)
Su nombre es Dulcinea... sus cabellos son oro, su frente campos elíseos, sus cejas arcos de cielo,
sus ojos soles, sus mejillas rosas, sus labios corales, perlas sus dientes, alabastro su cuello,
mármol su pecho, marfil sus manos... Miguel de Cervantes, Don Quijote
Paradoja
¿Ah, hijo mío, en amor, como las que enseñan son las mujeres, cuanto más te enseñan,
más suspenso te dejan!
Prohibido prohibir
Así es mi vida. Cuando al fin tengo lo que quería, sale algo mejor
Yo te amo para comenzar a amarte, para recomenzar el infinito y para no dejar de amarte nunca:
por eso no te amo todavía" (Pablo Neruda)
No mi amigo. He leído muchísimos libros, andado por muchos lugares, y visitado muchas
escuelas. Pero no soy sabio. Soy si acaso, un ignorante muy cultivado, pero no un sabio.
Tengo todo: El auto más caro, la ropa del mejor diseñador, paseo con la mujer más hermosa… sin
embargo mi vida es vacía: tengo que trabajar en algo que no me gusta, escuchar a una mujer
borracha de vanidad, rodeado de gente que sólo me rodea para ver qué provecho saca de mi;
ahogándome en un disfraz que no me puedo quitar en todo el día. Tengo todo y no tengo nada.
Señor gerente, la empresa está trabajando perfectamente bien, tanto, que tengo la impresión de
que algo está mal.
Prosopopeya
Su nombre es Dulcinea; [...] su hermosura, sobrehumana, [...] sus cabellos son oro, su frente
campos elíseos, sus cejas arcos del cielo, sus ojos soles, sus mejillas rosas, sus labios corales,
perlas sus dientes, alabastro su cuello, mármol su pecho, marfil sus manos, su blancura
nieve... Miguel de Cervantes "El Quijote"
Aun ahora, con su elevada estatura, barba rizosa y bien cortada, los ojos animados y brillantes
y el cutis sin arrugas, sería aceptado por muchas mujeres. Armando Palacio Valdés "Los
puritanos"
Riendo, con su doble fila de dientes blancos, con su cara atezada y sobria, su cabeza pelada y
su mechoncillo en la frente... [...] Llegaba en mangas de camisa, sin corbata ni cuello, casi
mojado aún de su chapuzón en la corriente. Miguel Hernández
Los ojos verdes, rasgados; las pestañas luengas; las cejas delgadas y alçadas; la nariz
mediana; la boca pequeña; los dientes menudos y blancos; los labios, colorados y
grosezuelos; el pecho alto; la redondeza y forma de las pequeñas tetas, ¿quién te la podría
figurar?, que se despereza el hombre cuando las mira... Fernando de Rojas "La Celestina"
El aspecto externo de Momo era un poco extraño [...] Era pequeña y bastante flaca, [...] el
pelo muy ensortijado, negro como la pez, y parecía no haberse enfrentado nunca a un peine o
unas tijeras. Tenía unos ojos muy grandes... Michael Ende "Momo"
Otli tenía el pelo corto y erizado, rojo como una zanahoria, y las orejas gachas de soplillo. Era
delgado y alto con la piel llena de pecas. Pero no los graciosos puntillos que caen tan bien en
las narices respingonas de las chicas.
Su cara casi perfectamente redonda, una cara parecida a la de una muñeca china tallada en
madera: tenía la nariz ancha y chata; sus ojos eran rasgados e inclinados, semejantes a las
hojas del bambú…
Era don Cayetano un viejecillo de setenta y seis años, vivaracho, alegre, flaco [...] era miope
y corregía el defecto con gafas de oro montadas en nariz larga y corva. Detrás de los cristales
brillaban unos ojuelos inquietos, muy negros y redondos... Leopoldo Alas "Clarín": La
Regenta
Este que véis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de
alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada, las barbas de plata, que no ha
veinte años que fueron de oro; los bigotes grandes... Cervantes "Novelas ejemplares"
Epíteto
Existe un lugar aún en el que,
los inviernos son blancos,
"las aguas azules y el bosque verde" (P. Del Castillo)
El frío hielo lastimó la piel del joven. Antonio vio como sus recuerdos más preciados ardían en
medio del fuego caliente.
Alas ligeras.
Roja sangre.
Cálido sol.
Hielo helado.