Índice
Introducción ..........................................................................................................................3
PARTE I
Las historias de Irene Iturra después de su asesinato en Calama de 1969.
La reinscripción ............................................................................................................................ 17
PARTE II
Botitas Negras en la ciudad minera de Calama.
La resignificación ........................................................................................................................151
Bibliografía .....................................................................................................................................311
Glosario ...........................................................................................................................................332
7
Agradecimientos
Primero, no hay nada que pueda decir sin antes agradecer por estos cinco
años de investigación, a Botitas Negras, porque durante ese tiempo pude
dedicarme con gran satisfacción a conocer la importancia que tiene su figura
en la ciudad minera de Calama. Segundo, agradecer a mujeres y hombres
calameños, chuquicamatinos, sureños y extranjeros que me posibilitaron un
mejor entendimiento de la relación entre Botitas Negras y la vida cotidiana de
esta singular ciudad, guiándome en el reconocimiento de las transformaciones
y los nuevos grupos de personas que han transitado por esta ciudad por más de
cincuenta años. En especial, agradezco a Guido o “el pobre Guido”, locutor de
radio, por su confianza, disposición y la amistad que me brindó cuando necesité
entender o conocer alguien para continuar con mi trabajo; a “Polanka”, músico,
por darse el tiempo de sostener largas charlas sobre los locales, músicos,
hombres y mujeres de la vida bohemia en la ciudad en distintas décadas; a
“Johnny” Casanova, peluquero y transformista, por abrirnos su casa e intimidad
para relatarnos sus aventuras de Chuqui y Calama, especialmente la vida y
glamour de los locales desde la época de “los gringos” hasta la dictadura militar;
y a Doña Fresia, esposa del Timbilique, dueño del local donde pudo haber
trabajado Irene Iturra o Botitas Negras, quien aunque nunca quiso aceptar
una entrevista formal, me hizo experimentar de cerca las alegrías y tristezas
de las mujeres que sobreviven en Calama. A Carlos Pinto, archivero popular
de documentos e historias, quien no sabemos si aún esta vivo, pero que con
su entusiasmo y solidaridad nos relató la importancia de la relación entre las
personas y las instituciones en el momento de definir el status de las primeras;
a doña Marta, modista, quien también con sus constantes gestos de ayuda nos
acercó a quienes trabajan o deambulan en la noche calameña; a Katy Mollo,
copetinera, por su simpatía y su amable acogida que me permitieron acercarme
a su vida intima y laboral; a Herminda, bailarina y copetinera, por su generosa y
8
Hubo muchas personas más que aportaron para que este trabajo pudiera llegar
hasta este libro, a quienes agradezco enormemente su hospitalidad y amistad,
así como también el haber tenido la oportunidad conocer y experimentar con
tantas personas diferentes alegrías y penas de una ciudad tan llena de historias
y encantos como Calama.
Gracias.
2
3
Introducción
Allá en los años sesenta algo muy triste ocurrió Murió la Botitas Negras,
Ahora se encuentra con dios
Una mujer muy sencilla y de singular belleza
Se vino de Limarí alegre firme y dispuesta
A la ciudad de Calama llegó la Botitas Negras
Su cuerpo fue destrozado por criminales y fieras.
Desde Limarí a la ciudad de Calama llegó la Botitas Negras
Su cuerpo fue destrozado por criminales y fieras
Lloran sus padres y hermanos aquella mujer tan buena
Crimen que no se aclaró y no reveló sospecha.
Ahora se encuentra en el cielo
Irene, Botitas Negras
Cerró los ojos al mudo lleno de maldad y miseria
Amigo tomate un trago en esta noche de pena
Porque jamás volverá Irene, Botitas Negras1.
En una de las salas de cerveza que más han perdurado en el tiempo, entre las calles
Grecia, Hurtado de Mendoza y Tocopilla, se escucha la canción sobre la Botitas
Negras, de “Los Cardenales de Loa”, junto a otros corridos mexicanos que son
solicitados al “pobre Guido” en su programa de la radio Carnaval. Al fondo del local,
en una mesa, dos “señoras amigas” atienden a un ex minero de Chuquicamata y
se afligen al recordar el asesinato de Irene Iturra en los años sesenta, aunque
enseguida mejoran su ánimo al referirse a lo milagrosa que se ha vuelto Botitas
Negras en Calama2. Esta escena en que se recuerda la muerte de Botitas Negras
puede entenderse como una metonimia -parte del todo o todo de la parte- de la
relación entre la ciudad de Calama y el campamento minero de Chuquicamata.
1
Transcripción d e l a canción “La Botitas Negras” de los Cardenales del Loa, Calama.
2
Entrevista a un ex minero de Turi, 08 de septiembre del año 2010, Calama.
3
Entre de las principales empresas que utilizan los servicios entregados por la ciudad de Calama se encuentra la empresa estatal CODELCO
(Corporación Nacional del Cobre), y las privadas BHP Billiton y Antofagasta Minerals.
4
En septiembre del año 1969, en los faldeos del cerro Montecristo, a medio camino
entre Calama y Chuquicamata, es encontrado el cadáver de una mujer brutalmente
asesinada. Este hecho produjo una amplia cobertura mediática y una investigación
policial que duraría al menos tres años y que se centró en la identificación de la
mujer y la de sus asesinos, proceso que contó con una activa participación de la
4
En las inmediaciones de las estaciones de Chuquicamata se instalaron conocidos poblados como La Placilla, Banco Drumond y Punta De Rieles, famosos
por los bacanales y salones de diversión de dueños de minas y su minerada y entre las autoridades policiales y los mineros, y luego entre la compañía
norteamericana y sus propietarios. Ver Gustavo Tapia, Chuquicamata: historia con nostalgia. Antofagasta. Ediciones Parina, 2001; Eulogio Gutiérrez,
Chuquicamata Tierras Rojas. Santiago. Editorial Nascimento, 1926; Héctor Pumarino Soto, El Loa ayer y hoy. Santiago. Editorial Universitaria, 1978;
Cárdenas, C., Cereceda, N., Jeria, C., “Donde el Sol Quema y el Metal Brilla” Aspectos sobre la Vida del Minero de Chuquicamata 1925-1930. Tesis para optar
al título de profesor de historia de la Universidad de Playa Ancha, Valparaíso, 2007.
5
Vergara, Ángela. Conflicto y modernización en la Gran Minería del Cobre (1950-1970). Historia (Santiago) N 37 Vol. II. Julio –diciembre 2004,
pp. 419-436.
6
Barrera, Manuel. El conflicto obrero en el enclave cuprífero. Instituto de Economía y Planificación. Serie Investigaciones. Universidad de Chile. Santiago,
Chile, 1973; Ángela Vergara. Conflicto y modernización.
5
población que exigía que se hiciera justicia. Durante la investigación policial hubo
un amplio debate de la policía, la iglesia, el juez y los medios de comunicación que,
por un lado, expresaban sus proclamas en contra la prostitución y la delincuencia,
y los pobladores que manifestaban sus criticas en contra de la impunidad de los
asesinos y la desigualdad social con su apoyo en una cruzada de solidaridad a favor
de Irene.
Finalmente el crimen de Irene Iturra quedó sin resolver, pero las visitas a su
tumba en el Cementerio Municipal de Calama con el fin de dejarle flores y velas
para que “descanse en paz” no cesaron; al igual que los rumores acerca de los
milagros que tempranamente se asociaban ahora a la Botitas Negras. Su tumba
pronto se transformó en altar donde se concentraron variados relatos acerca de
los imaginarios sobre su cadáver ocultado y encontrado y los motivos de su cruel
asesinato. Allí, visitantes y devotos actualmente se refieren a su historia y a las
personas que beneficia con sus milagros.
En la propuesta de contar una “otra” historia había que escoger entre narrar una
continuidad o mostrar diferentes escenas que marcaron los diferentes discursos
y grupos de personas. Esta última opción se acerca más a la idea de polifonía de
relatos, por eso escogí dos momentos de registro que me parecieron importantes
para entender la relación entre las transformaciones en la ciudad minera y
las configuraciones acerca de Botitas Negras. Uno de esos momento es la re-
inscripción en que queda sujeta Irene Iturra luego de ocurrido su asesinato, como
nuevo proceso de clasificación; y, otro momento es la resignificación en cuanto a
los significados y sentidos actuales que posicionan a Botitas Negras como figura de
culto en la ciudad de Calama.
“para devolver a la historia una experiencia que yace enterrada en una grieta
oculta de nuestro pasado. En una “lucha” en que se libera una competencia
entre “dos clases de política”. Cada una de ellas se propone abordar el suceso
7
D´Azevedo Warren. Uses of the past in Gola Discourse. Journal of African History III, I, 1969, pp.11- 34.
8
Sahlins, Marshall. Islas de historias. La muerte del capitán Cook. Metáfora, antropología e historia. Barcelona, Gedisa, 1997.
9
Guha Ranajit, [1995]. La muerte de Chandra. En La (re)vuelta de los estudios subalternos. Una cartografía a (des)tiempo. Raúl Rodríguez (comp.). San
Pedro, Qillqa, IIAM, Universidad Católica del Norte, 2011, pp. 94-126.
7
10
Guha, La muerte de Chandra.. . , p .101.