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ESTIMACIÓN DE LAS FLECHAS EN LOS FORJADOS RETICULARES

[De la Publicación Los forjados reticulares: diseño, análisis, construcción y patología, de


Dr. Ing. Florentino Regalado Tesoro. Biblioteca Técnica CYPE Ingenieros, S.A. (Avda.
Eusebio Sempere, 5; 03003 ALICANTE; España). ISBN 84-930696-5-5. 1ª Edición, 2003.
Apartado 10.9, págs. 402-409]

Las flechas que normalmente resultan relativamente sencillas de evaluar, dentro


de lo posible, en las estructuras de hormigón armado, son las flechas instantáneas para
niveles bajos de carga, dado que son situaciones donde los niveles de fisuración son
relativamente moderados y el comportamiento general de la estructura se encuentra en
un nivel elástico suficientemente generalizado.

A medida que intervienen fenómenos como la retracción y la fluencia, y se


incrementan los niveles de fisuración, la exactitud en la evaluación de las flechas
diferidas resulta ya bastante problemática, y debemos conformarnos con una estimación
suficiente de la misma que nos permita situar las piezas que proyectamos y construimos
en unos niveles de deformación tolerables, aceptando incluso errores de cierta entidad
en dicha evaluación, que algunos autores estiman entre un 25 y un 50%.

Nuestra experiencia personal en la estimación de flechas en los forjados de


edificación, que luego contrastamos en pruebas de carga, nos permite decir que los
criterios de estimación simplificados usados habitualmente poseen un carácter
conservador. Las flechas medidas durante las pruebas de carga resultan ser bastante
menores que las estimadas en los cálculos, dado que se prescinden de muchos factores
imposibles de parametrizar. En nuestros ensayos de placas reticulares pudimos constatar
que construir un forjado reticular con bloques perdidos de hormigón frente a otro
construido con bloques aligerantes de poliestireno conduce a unas flechas instantáneas
del orden de 1,25 veces inferiores, pese a que ambos forjados presentaban idénticas
secciones estructurales.

• El método manual que nos permite obtener una estimación de las flechas en los
forjados reticulares se debe a Scanlon y Murray, y se encuentra amparado por ACI,
desde que lo hicieron público sus autores en 1982.

El método consiste en partir de los esquemas que se establecen en el método de


los pórticos virtuales, siguiendo la figura 10.10; y, considerando las bandas de dicho
método, obtener unas cargas ficticias q1 y q2 que hipotéticamente corresponderían a las
distintas bandas en función de los momentos asignados a las mismas, partiendo de los
momentos proporcionados por el cálculo general de los pórticos, o en su defecto de la
estimación de dichos momentos por el MÉTODO DEL CÁLCULO DIRECTO.

Forjados reticulares 1
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
Fig. 10.10. Esquema de bandas de Scanlon y
Murray para el cálculo de las flechas.

Para el cálculo de flechas, recomendamos considerar como banda de soportes el


ancho correspondiente y exclusivo de los ábacos. Los momentos globales del pórtico
virtual que podemos considerar como referencia, figuran en el esquema adjunto.

Fig. 10.11. Momentos directos de referencia que pueden tenerse


presentes en los cálculos de las flechas manualmente.

Flecha instantánea

Si queremos obtener la flecha instantánea en el punto 5, para una carga


uniformemente distribuida P1/m2, obtenemos primero la fracción de carga ficticia (qly)
que se asigna a la banda de soporte de la dirección –Y, por ejemplo; y la fracción (q2y)
que le corresponde a la banda central también en dicha dirección; haciendo a
continuación lo mismo en la dirección –X.

0,75 ⋅ (MI y + MD y ) q 1y ⋅ L2y


+ 0,6 ⋅ M vy =
2 8
0,25 ⋅ (MI y + MD y ) q 2y ⋅ L2y
+ 0,4 ⋅ M vy =
2 8

siendo, q1y: Carga de la banda de soporte –y


Ly: Luz libre según –y
q2y: Carga de la banda central –y
Ly: Luz libre según –y

Forjados reticulares 2
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
Una vez obtenidas las cargas, procedemos a calcular las flechas de cada banda
en el punto medio, como si de unas vigas ordinarias se tratara, primero en la dirección -
y luego en la dirección -x, operando con las inercias equivalentes de Branson (según la
EHE).
5 ⋅ q 1y ⋅ L4y 0,75 ⋅ (MI y + MD y ) ⋅ L2y
f 1y = -
384 ⋅ E C ⋅ I eys 16 ⋅ E C ⋅ I eys
5 ⋅ q 2y ⋅ L y
4
0,25 ⋅ (MI y + MD y ) ⋅ L2y
f 5y = -
384 ⋅ E C ⋅ I eyc 16 ⋅ E C ⋅ I eyc

Si las geometrías y modulación de los pórticos son regulares podemos


considerar que, la flecha obtenida en 1 según -y, es idéntica a la que podríamos obtener
en 2 también según -y; y si fueran paneles cuadrados, también serían sensiblemente
iguales a la flecha en el punto 4 y punto 3.

Si ello no fuera así, no queda más remedio que establecer los pórticos virtuales y
operar de la forma indicada, obteniendo dichas flechas en ambas direcciones.

La flecha instantánea en el punto 5 vendría dada por:

f1y + f 2y ⎫
f 51 = + f 5x ⎪⎪ f 51 + f 52
2 ⎬ f 5 (final) =
f 3x + f 4x 2
f =
5
2
+ f 5y ⎪⎪
2 ⎭

Los momentos de inercia que debemos introducir en las fórmulas para calcular
las flechas, son los momentos de inercia equivalente dados por Branson.

Las secciones que deberemos considerar en cada una de las bandas analizadas
son diferentes entre sí, a la hora de obtener los momentos de inercia equivalente.

En los extremos de las bandas de soporte tendremos que considerar las secciones
rectangulares de los ábacos; y en los vanos centrales de dichas bandas, un conjunto de
nervios T con las armaduras en la parte inferior de las almas.

En los cálculos de las flechas de las bandas centrales se consideran nervios en T,


pero hay que tener presente que en los extremos las armaduras se encuentran en la parte
superior, mientras que en los vanos están en su parte inferior.

Fig. 10.12. Situación de las armaduras a la hora de


calcular las inercias fisuradas en las bandas fuera de los
ábacos.

Forjados reticulares 3
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
⎛ Mf ⎞ ⎡ ⎛ M ⎞3 ⎤
I e = ⎜⎜ ⎟⎟ ⋅ I b + ⎢1 - ⎜⎜ f ⎟⎟ ⎥
M
⎝ a⎠ ⎢⎣ ⎝ M a ⎠ ⎥⎦ ⋅ I
f
f ct,flex ⋅ I b
Mf =
y1
siendo, Ie: Momento de inercia equivalente en cada sección de las bandas
establecidas. Si Mf > Ma se tomará Ie = Ib.
Mf: Momento de fisuración de la sección.
fct,flex: Resistencia del hormigón en flexotracción.
y1: Distancia del C.D.G. de la sección a la fibra de tracción más alejada.
Ma: Máximo momento flector aplicado en la vida de la pieza, hasta el
instante en que se calcula la flecha, en las secciones correspondientes,
Ib: Inercia bruta de la sección, en la que puede hacer intervenir las
armaduras, en base al factor de equivalencia de acero en hormigón:
E
n = S (n = 8 en los casos normales)
EC
Ec: Módulo de deformación del hormigón para cargas instantáneas a la edad
que se evalúen las flechas (Véase tabla 10.4)
If: Momento de inercia de la sección fisurada y homogeneizada a valores de
hormigón, respecto del eje que pasa por su C.D.G.

Una vez calculados los momentos de inercia equivalente en extremos, y en el


punto medio del vano donde exista el momento máximo de flexión positiva, con el
objeto de operar con una inercia única para cada tramo, Branson propone operar con
una inercia media generalizada, que para los tramos continuos de las estructuras de
edificación viene dada por:

Ie~media = 0,50·Ie~vano + 0,25·(Ie~ext.izq + Ie~ext.dch)

y para voladizos, conservadoramente:

Ie~media = Ie~sección de arranque del voladizo

Flecha diferida

Una vez obtenida la flecha instantánea para un estado de carga fijado P1/m2, la
flecha diferida adicional que puede tener lugar en el tramo que se esté analizando debida
a dicho estado de cargas, puede estimarse por el método de los coeficientes globales que
establece la EHE.

Dicho método consiste en calcular el factor λ en la sección central del vano que
se esté analizando, o en la sección de arranque, si de un voladizo se tratara.
ξ
λ=
1 + 50 ⋅ ρ ′
siendo, ρ': Cuantía geométrica de las armaduras de compresión en la sección útil de
referencia.

Forjados reticulares 4
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
J. Calavera precisa el valor de ρ y propone que se calcule con un valor medio
dado por:
ρ'm = 0,70·ρ' + 0,15·(ρ'ext.izq+ ρ'ext.dch)
para ser coherentes con las formulaciones de Branson.

ξ es el coeficiente que depende de la duración de la carga y que tiene en cuenta


los fenómenos de retracción y fluencia que se producen en las piezas. Toma los valores
que se indican a continuación:
5 o más años: 2
1 año: 1,4
6 meses: 1,2
3 meses: 1
1 mes: 0,7
2 semanas: 0,5

Obtenido el valor de λ, la flecha diferida se calcula multiplicando la flecha


instantánea por dicho valor.

Flecha total

La estimación de la flecha total que puede esperar a un tiempo dado en la pieza


analizada será la suma de la flecha instantánea y la flecha diferida.

Flecha activa

La evaluación de la flecha activa, es decir aquella flecha que se produce a partir


de un instante dado y que puede afectar a los elementos (normalmente tabiquerías)
construidos a partir de dicho instante, solamente puede ser realizada si se establece un
programa constructivo, aunque sea de forma simplificada y estimativa; que obviamente
puede fallar, como de hecho sucede en infinidad de ocasiones.

También debe establecerse qué se construye primero, si los solados o las


tabiquerías. A pesar de que lo normal es construir primero las tabiquerías, no siempre se
realiza así, especialmente cuando se opta por prever que los usuarios puedan cambiar de
lugar las mismas, cosa que sucede con relativa frecuencia.

Por consiguiente, en el caso general, debemos establecer cuatro fracciones de la


carga:

• Carga debida al peso de la estructura.


• Carga debida a las tabiquerías.
• Carga debida a las pavimentaciones (solados).
• Carga debida a la sobrecarga de uso.

Forjados reticulares 5
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
Deseamos llamar la atención sobre el hecho de que, en los cálculos de los
momentos de inercia, debemos actuar en cada instante con el momento flector máximo
aplicado en cada sección hasta dicho instante, puesto que dichos momentos van ligados
íntimamente a las reducciones de inercia que se producen por fisuración en las
secciones.

Los momentos flectores máximos es muy posible que se produzcan durante el


proceso constructivo debido a los procesos de cimbrado de plantas sucesivas, como
tendremos ocasión de ver en el Capítulo 12 dedicado a la construcción de las
estructuras.

Lo anterior supone que los momentos máximos serán los debidos casi con
seguridad al proceso constructivo, y como orden de magnitud, a 1,9 veces los pesos
propios de los forjados. Los valores que proporciona el profesor Calavera de 2,25 para
dos plantas cimbradas, 2,36 para tres y 2,43 para cuatro, como factores multiplicadores
de los pesos propios del forjado, en nuestra opinión y como explicaremos en el Capítulo
12, creemos que son excesivos.

Por consiguiente, a efectos prácticos, en las estructuras de edificios y con el


objeto de no complicar el problema innecesariamente, bastará calcular las inercias de
Branson entrando con los momentos Ma que proporcione el cálculo habitual, puesto que
en general se cumple que:

1,9 · Peso propio ≈ peso propio + sobrecarga permanente + sobrecarga de uso

Si ambos valores no son sensiblemente parecidos, debemos operar con el mayor;


pero ¡atención!, con los momentos resultantes en situación de servicio, es decir, sin
mayorar por el factor γf.

Si puede simplificarse el problema de la forma indicada, pueden sumarse las


sucesivas flechas que se vayan produciendo, puesto que operamos con una Ie constante
y conservadora, resultando todos los cálculos absolutamente lineales.

Así, el cálculo de la flecha diferida, aceptando que las tabiquerías se construyen


antes de pavimentar, se haría de la siguiente forma:

• cálculo de la flecha instantánea del peso propio: fipp


• cálculo de la flecha instantánea debida a las tabiquerías: fit
• cálculo de la flecha instantánea debida al solado: fis
• cálculo de la flecha instantánea debida a la sobrecarga de uso: fisu
• cálculo de la flecha diferida del peso propio del forjado a partir
de la flecha de construcción de las tabiquerías: fdpp
ξ(∞) - ξ(t ct )
λ=
1 + 50 ⋅ ρ′m
f dpp = λ ⋅ f ipp
• cálculo de la flecha diferida debida a las cargas de tabiquería: fdt
ξ(∞) - ξ(t ct )
λ1 =
1 + 50 ⋅ ρ′m
f dt = λ 1 ⋅ f it

Forjados reticulares 6
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
• flecha diferida debida a la carga del solado a partir de la
construcción del mismo: fds
ξ(∞) - ξ(t cs )
λ2 =
1 + 50 ⋅ ρ′m
f ds = λ 2 ⋅ f ds
• flecha diferida de la fracción de la sobrecarga de uso (personas y
muebles) a partir de la fecha que entre en servicio el edificio que
se estime va a actuar de forma permanente (estimar en la
edificación 500 N/m2 podría ser un valor a tener presente): fdsu
ξ(∞) - ξ(t su )
λ3 =
1 + 50 ⋅ ρ ′m
f dsu = λ 3 ⋅ f isu

Flecha activa: fit + fis + fisu + fdpp + fdt + fds + fdsu

Resulta lógico y prudente, en cierto modo, contar con las flechas instantáneas
que produzcan las tabiquerías, especialmente con los procesos constructivos seguidos en
España al construirlas de manera ascendente. En aquellos casos que las mismas se
construyan de forma descendente, puede prescindirse de la flecha instantánea que
produzcan en el cómputo de la flecha diferida.

Para estimaciones rápidas y para percibir si la flecha activa se encuentra lejos,


cerca o supera los límites recomendados en la EHE (L/400 ó 1 cm), puede sernos de
gran utilidad el método que propone el profesor José L. de Miguel, extraído de su
trabajo relacionado con el análisis de las flechas.

Partiendo del cálculo de la flecha instantánea total, es decir, que: fi = fipp + fit +
fis + fisu es posible realizar una estimación de la flecha activa, sin más que multiplicar fi
por el factor φact extraído de la tabla 10.5.
factiva = φact · fi

Flecha respecto a la instantánea de carga total (kc = 1,05)


Solado antes que tabiquería Tabiquería antes que solado
Ritmo de obra Lento Normal Rápido Lento Normal Rápido
tpro/tsol/ttab/tuso (meses) 1/4/9/18 1/3/6/12 1/2/3/6 1/4/9/18 1/3/6/12 1/2/3/6
Flecha activa
qtct pro+sol+tab+uso (kp/m2) Coeficiente φact *
580 200+080+100+200 0,76 0,84 0,94 1,01 1,05 1,15
650 250+100+100+200 0,75 0,83 0,93 1,01 1,05 1,16
700 280+120+100+200 0,74 0,82 0,93 1,02 1,07 1,17
720 300+120+100+200 0,73 0,82 0,93 1,02 1,06 1,18
800 300+150+050+300 0,77 0,84 0,94 1,05 1,09 1,19
900 300+150+050+400 0,72 0,86 0,94 1,04 1,08 1,17
950 300+150+100+300 0,77 0,84 0,94 1,02 1,06 1,16
1000 300+150+100+450 0,80 0,86 0,95 1,03 1,07 1,15
1100 400+150+100+450 0,78 0,85 0,95 1,02 1,05 1,14
Flecha acumulada detectable Coeficiente φacm
(salvo instantánea de peso propio) 1,20 1,40 1,50 1,20 1,40 1,50
* Columna recomendada por F. Regalado.

Tabla 10.5. Coeficientes para estimar la flecha activa partiendo de la instantánea (J. L. de Miguel)

Forjados reticulares 7
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
Así, por ejemplo, si la flecha instantánea calculada es de 5 mm y el ritmo de la
obra es normal, construyéndose las tabiquerías antes del solado, y para una carga total
de 8 kN/m2, cabría esperar una flecha activa del orden de:

factiva = 1,09·5 = 5,45 mm

Dado que dicha flecha se encuentra muy lejos de los 10 mm tolerados, por
mucho que sea el error cometido, no sería necesario seguir efectuando cálculos
suplementarios.

Sin embargo, si la flecha activa obtenida hubiese estado muy próxima a los 10
mm, tanto por arriba como por debajo, sería deseable realizar los cálculos establecidos
para su evaluación, con el objeto de poderla contrastar.

El método propuesto por J. Luis de Miguel, a pesar de que los valores que
proporciona para φact son algo bajos, resulta especialmente interesante en la estimación
de las flechas que pueden obtenerse por el programa de cálculo CYPECAD (versión
2000.1). Una vez calculada la estructura, es posible conocer por dicho programa los
desplazamientos verticales en cualquier punto de la placa, para cada una de las hipótesis
que se analicen.

Fig. 10.13. Dibujo esquemático para evaluar las flechas por el modelo
empleado en el programa CYPECAD (versión 2000.1).

Fijado el recuadro donde va a calcularse la flecha mediante un zoom, se solicita


al programa que nos muestre en pantalla el mallado de cálculo empleado y se elige el
punto deseado (C.R.), que normalmente se encontrará en el punto medio de una
alineación diagonal entre pilares, por ejemplo de AB; a continuación se le pide que
muestre todos los desplazamientos que ha experimentado dicho punto. Sumando todos
los desplazamientos verticales, se obtiene el desplazamiento bruto que ha sufrido el
punto considerado (C.R.).
δCR = δpp + δsp + δsu
pp: Peso propio; sp: Sobrecarga permanente; su: Sobrecarga de uso

Realizamos lo mismo con un punto representativo de los pilares obtenemos δA y


δB.

La estimación de la flecha elástica instantánea suficientemente "precisa", para el


punto C.R., vendría dada por:
Forjados reticulares 8
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
δA + δB
δ = δ CR -
2
f iCR = β i ⋅ δ 1,15 ≤ β i ≤ 1,60
βi: Factor amplificador que depende del tipo de placa analizado y el grado de fisuración
que se produzca en el proceso constructivo.

Aplicando la tabla 10.5 se puede obtener una evaluación aproximada de la flecha


activa.
fact en CR = φact·fiCR

Sin embargo, recordamos una vez más que la discretizacián y rigideces


consideradas en el modelo de cálculo que emplea CYPECAD, pensado y diseñado
fundamentalmente para obtener esfuerzos y armados precisos lo más constructivos
posibles en los forjados, proporcionan con su análisis elástico y lineal desplazamientos
verticales en los mismos que requieren una cierta interpretación y manipulación para
que puedan ser útiles y fiables: nos estamos refiriendo a los valores δCR.

Si los forjados son losas macizas, los desplazamientos que proporciona el


programa, teniendo presente la particularidad recogida en la Fig. 10.13, permiten
rapidísimamente pasarlos a flechas con notable precisión, tal y como pudimos
demostrar en el Capítulo 6 constrastando resultados.

No hemos de olvidar que los desplazamientos de los nudos en un análisis


espacial se encuentran íntimamente relacionados entre sí, y las flechas representan
desplazamientos diferenciales relativos a los pilares y éstos a su vez, dependiendo del
número de plantas que posean, también experimentan acortamientos de menor o mayor
entidad, aunque para los casos ordinarios de viviendas pueden despreciarse.

Las flechas elásticas que se obtienen pues de CYPECAD en las losas macizas
son correctas y bastaría multiplicarlas por un pequeño factor del orden de un βi = 1,15 a
un βi = 1,25 para considerarlas como flechas instantáneas suficientemente precisas,
teniendo presente las pérdidas de rigidez que pueden producirse durante su proceso
constructivo. Después de multiplicarlas por dicho factor, bastaría tener presente lo
expuesto anteriormente sobre la flecha diferida, siguiendo el método de los coeficientes
globales de la EHE o el proceso simplificado de la Tabla 10.5 de J. L. de Miguel para
estimar la flecha activa de proyecto en los forjados de losas macizas.

El problema se complica algo más cuando estamos trabajando con los forjados
reticulares, en los que las rigideces constantes que maneja CYPECAD, para los
mismos, conducen a unas deformaciones verticales elásticas inferiores a las reales y
que, por tanto, deben afectarse por un factor βi algo mayor que el considerado
anteriormente en las losas macizas.

Si sólo tuviéramos en cuenta las cuestiones relativas a las rigideces de los


elementos del forjado discretizado y empleados en el modelo CYPECAD bastaría
considerar un factor amplificador de βi = 1,30 para los valores δ que se obtienen del
programa y los resultados elásticos serían suficientemente buenos y fiables; pero dado
que existen otros aspectos de cierta importancia, tales como las pérdidas de rigidez que
se producen durante el proceso constructivo por las fisuraciones, etc., dicho factor debe
ser algo mayor.
Forjados reticulares 9
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
• Con el objeto de estimar un factor β (en los reticulares) de la forma más precisa
posible, hemos acudido a la tesis doctoral de Luis García Dutari y hemos contrastado
los resultados de su modelo con el nuestro, en una serie de casos.

El modelo de L. G. Dutari está basado en los elementos finitos y tiene en cuenta


la fisuración, fluencia y retracción, así como también el efecto que tiene sobre las
flechas el proceso constructivo, fisurando las secciones con las sobrecargas que se
producen durante el mismo.

Con el mencionado modelo se han calculado tres tipos de edificios de tres vanos
por tres vanos, y luces según –X de 6, 7,50 y 9 metros, y según –Y de 6 metros. Las
alturas de los pilares han sido de 3 metros y se supone que existe empotramiento
perfecto en el extremo opuesto al forjado.

Los mismos edificios con tres plantas han sido calculados por CYPECAD, pero
sin simplificaciones de tipo alguno debidas a las simetrías, y considerando el forjado
intermedio como referencia comparativa.

Los cantos respectivos han sido de 20+5, 25+5 y 30+5.

Datos de los edificios analizados


(H-25 y B-400-S)
P.P.
Luces Canto
kN/m2
6x6 20+5 3,72
6x7,5 25+5 4,44
6x9 30+5 5,23

S.P. Pilares
S.U.
kN/m2 H=3m
2 2 45x45
2 2 45x55
2 2 45x65
Tabla 10.6

Fig. 10.14. Resultados parciales que proporciona de forma


directa CYPECAD para la hipótesis de peso propio en el
modelo de 6 x 7,50 m.
Forjados reticulares 10
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
En la Tabla 10.7 se ofrecen los resultados de los análisis y cálculos realizados
con el programa CYPECAD y los modelos de L. G. Dutari. En general, podemos decir
que el programa CYPECAD ofrece coherencia total en sus resultados, mientras que los
modelos de E. F. y la discretización simplificada empleada por Dutari fallan en cazar las
simetrías de la estructura y presentan algunas incoherencias en algunos de los
resultados.

Valores producidos por el modelo de elementos finitos de J.L. García Dutari.


Ritmo constructivo / rápido y lento
Valores de δ proporcionados
Flecha instantánea Flecha total Flecha activa
por CYPECAD (mm)
(mm) (mm) (mm)
(Véase Fig. 10.14)
Tipo R.E. R.M.X. R.M.Y. R.C. R.E. R.M.X. R.M.Y. R.C. R.E. R.M.X. R.M.Y. R.C. R.E. R.M.X. R.M.Y. R.C.
6,66 6,66 5,83 5,88 17,08 17,00 15,42 14,71 8,33 10,00 9,17 8,53
6x6 4,50 4,00 3,90 3,35
7,08 6,47 6,33 6,47 16,67 16,76 15,67 14,12 8,75 8,53 8,33 7,35
7,90 8,33 7,92 7,06 19,17 20,67 18,33 17,06 10,00 12,00 10 8,24
7,5x6 4,75 4,00 4,40 3,60
7,08 7,06 7,00 5,88 16,67 17,65 17,00 14,71 9,17 9,12 8,67 7,06
12,50 11,00 10,42 8,82 25,00 23,33 21,25 17,65 14,17 13,00 11,25 8,82
9x6 5,40 4,50 5,30 4,30
10,42 10 10 8,24 21,67 20 18,67 16,18 10,42 10 8,67 7,65
Tabla 10.7

No obstante, la comparación de resultados, operando con valores medios, nos


permite deducir unos valores prácticos operativos del factor β, que multiplicándolos por
los resultados de las deformaciones verticales δ que ofrece el programa CYPECAD
versión 2000.1 para los forjados reticulares, nos posibilita estimar las flechas
instantáneas, totales y activas con una precisión razonablemente buena.

Sin embargo, queremos advertir que es muy probable que los valores de β sean
algo conservadores y, por tanto, las flechas deducidas se encuentren por encima de las
reales, debido a que el método empleado por Dutari fisura los forjados por encima de la
realidad, al sobrecargarlos excesivamente durante el proceso constructivo, por
cuestiones que tienen que ver con los cimbrados sucesivos de las plantas, y los valores
que puedan deducirse de aplicar el criterio simplificado de J.L. de Miguel se encuentren
más ajustados a la realidad.

Resumen operativo:

δ: Desplazamiento vertical de un punto del mallado del forjado reticular calculado por
el programa CYPECAD.

Flecha = β·δ
- Flecha instantánea βi = 1,60
- Flecha máxima a largo plazo βm = 4,00
- Flecha activa βa = 2,20

Un ejemplo puede clarificar el proceso operativo a seguir: Sea un forjado


reticular de 6x6 y canto 20+5, con cargas muertas de 2 kN/m2 y sobrecarga de uso
también de 2 kN/m2, en el que deseamos calcular la flecha en un vano de esquina.

• Calculando el edificio con el programa CYPECAD, nos situamos en el forjado


segundo y miramos los desplazamientos verticales de las dos hipótesis.
Peso propio 3,5026 mm
Sobrecarga 1,0258 mm

Forjados reticulares 11
Estimación de las flechas en los forjados reticulares
Total 4,52284 mm

• Dado que el acortamiento de los pilares en un edificio de tres plantas es


despreciable, nos quedamos con una deformación inicial de δ = 4,5 mm.

• Debido a la discretización realizada y a la posible fisuración del forjado, la


flecha instantánea real que posiblemente se produzca en el recuadro de esquina
será:
Flecha instantánea total = βi · δ = 1,6 · 4,5 = 7,2 mm

• Siguiendo la Tabla 10.5 de J. L. de Miguel, la flecha activa que cabe esperar en


el mencionado recuadro será:
Flecha activa (J. L. de Miguel) = Fi · φact = 7,2 · 1,18 = 8,5 mm

Y si aplicamos directamente el factor b correspondiente:


Flecha activa (Dutari) = βi · δ = 2,20 · 4,5 = 9,9 mm

• Y la flecha máxima a largo plazo


Flecha máxima = βm · δ = 4 · 4,5 = 18 mm

Comentario final

Admitimos y dudamos que lo expuesto para determinar las flechas en los


forjados reticulares conduzca a valores "medianamente exactos", pero para los
proyectos sencillos de edificación y frente a lo que actualmente se viene haciendo, que
es el no realizar estimación alguna de las deformaciones en los mismos, confiándolo
todo a una elección adecuada de los cantos y la experiencia del proyectista, podemos
felicitarnos de contar con dos herramientas que nos permiten realizar una aproximación
al problema, aunque tengan el adjetivo de aproximadas.

Si la flecha se evalúa por el método de los pórticos virtuales, dado el carácter


sumamente conservador de sus resultados, es posible precisarlas multiplicándolas por
0,5 ó 0,6.

Según García Dutari y J. Calavera un cálculo más exacto de las flechas por
elementos finitos, teniendo en cuenta la retracción y la fluencia, conduce a valores de
las mismas entre un 30 y un 60% por debajo de las que pueden obtenerse por el método
de los pórticos virtuales.

Forjados reticulares 12
Estimación de las flechas en los forjados reticulares

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