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Núm.

6, nueva época
20 semestre 2003

dossier:
lA (DNTRARREFORMA PENAl
los mass media y la mltura del miedo
(Francesc Barata)

las criminologías anglosajonas


(Marta Monclús Masó)
Sida + cánel== nena de muerte
(Fran del Buey)

VI%ÚS
Núm. 6 , nueva época
20 semestre 2003

w%s
editorial
REDACCIÓN:
Gabriel Ignacio Anitua
Mónica Aranda Ocaña
Marta Monclús Masó
Núm. 6, nueva época Iñaki Rivera Beiras
20 semestre 2003 Gemma Nicolás Lazo
Pedro Oliver Olmo

EDICIÓN A CARGO DE: ¡ Todos los materiales que deseen


VIRUS editorial *— … enviarse a la revista deben ser remitidos
C/Aurora, 23, baixos a las siguientes direcciones:
08001 BARCELONA Apartado de Correos 30070
T./fax: 93 441 38 14 08080 BARCELONA
C/e: virus©pangea.org C/e: panoptico©mixmail.com
http://www.viruseditorial.net
wwwaltediciones.com HAN COLABORADO
CUBIERTA Y MAQUETACIÓN: EN EL PRESENTE NÚMERO:
Virus Editorial Francesc Barata, Marta Monclús,
Federación Andaluza de
LOGOTIPO DE LA REVISTA:
Drogodependencias y Sida-Enlace, Fran
Nono Kadáver
del Buey, Coordinadora de Solidaridad
IMPRESO EN: con las Personas presas, MOLIMO,
Imprenta LUNA ASAPA, Claudia Cesaroni, APDH-
Muelle de la Merced, 3, 2º Andalucía, Alaitz Cruz de Apaolaza,
48003 BILBO José Luis Segovia Bernabé, Jaume
T.: 94 416 7518 Asens, Enrique Martínez Reguera,
Purificación García Mateos, Patricia
ISSN: 1135—9838-010
Faraldo Cabana, Luz María Puente Aba,
Depósito legal: 'BI-ló7-96
Gabriel-Ignacio Anitua, Ignacio
Muñagorri Laguia, José Antonio Ramos
Vázquez, Guillermo Portilla, Centre de
Documentació - G. L. Treviño, Gemma
Nicolás Lazo, Mónica Aranda

¿ 6 Los artículos publicados en la revista expresan el sentir


de los autores o autoras de los mismos, sin que los
mismos reflejen necesariamente la opinión o posición de
quienes hacemos el Panóptico. , ,
. Contenido .
Editorial ............................................. p. 5

ARTÍCULOS DE FONDO .................................. p. 9


Los mass media y la cultura del miedo,
Francesc Barata ....................................... p. 11
Las criminologías anglosajones: realismo
criminológico vs. criminología de la intolerancia,
Marta Monclús Masó ................................... p. 23

MOVIMIENTOS SOCIALES ................................ p. 37


Manifiesto No a la contra-reforma penal,
procesal, penitenciaria ................................... p. 39
España: "vanguardia" europea en la edilicia carcelaria ............ p. 41
Crónica de prensa de las denuncias de Amnistía Internacional ...... p. 42
Sida + cárcel = pena de muerte. ¿También "nunca mais"?…,
Fran del Buey ......................................... p. 43
Denuncia contra las narcoceldas,
Coordinadora de Solidaridad con las Personas Presas .......... p. 61
Acerca del Centro de Reforma y de la huelga de educadores,
MOLIMO ............................................. p. 62
Comunicado de ASAPA ante las ultimas
muertes en la prisión de Zuera ............................. p. 64
El OSPDH de la UB presenta el Informe sobre
las condiciones de encarcelamiento en Cataluña ................ p. 66
Penas ¡legítimas en la Argentina: prisión y reclusión
perpetua por delitos cometidos antes de los
dieciocho años, Claudia Cesaroni ........................... p. 67

DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL ................ p. 69


Manifiesto contra las reformas penales del Gobierno ........... p. 71
Sobre las recientes reformas penales, APDH-Andalucía ........... p. 74
Panorama de la contrarreforma penal del 2003,
Alaitz Cruz de Apaolaza ................................. p. 82
Vuelta a las cavernas penales: del sueño de la
reinserción a la pura retribución, José Luis Segovia Bernabé ....... p. 89
La excusa del "terrorismo" para combatir la disidencia,
Jaume Asens ......................................... p. 100
Los niños como instrumento de vigilancia, control y hostigamiento,
Enrique Martínez Reguera .............................. p. 105
¿X
Régimen abierto y tercer grado: la lenta agonía de una esperanza,
Purificación García Mateos .............................. p. 110
La reforma de los presupuestos de la prisión provisional,
Patricia Faraldo Cabana ................................ p. 116
Novedades en la regulación del comiso según el
Proyecto de Reforma del Código Penal,
Luz María Puente Aba ................................. p. 126
Una reforma penal animal,
Gabriel—Ignacio Anitua ................................. p. 133
La utilización del Derecho Penal: de las garantías del ciudadano
a la represión de la no—persona,
Ignacio Muñagorri Laguia .............................. p. 137
El nuevo Elías: la teoría del "Derecho Penal del enemigo"
de Gúnther1akobs,
José Antonio Ramos Vázquez ............................ p. 147
La configuración del homo sacer como expresión de los
nuevos modelos del Derecho Penal imperial,
Guillermo Portilla ..................................... p. 154

LA LUCHA EN LA CÁRCEL EN LA ESPANA DE LOS ANOS 70 ........ p. 176


¿Qué reformas? Hacinamiento, torturas y aislamiento.
Impresiones sobre la Ley Orgánica General Penitenciaria
de 26 de septiembre de 1979,
Centre de Documentació - G. L. Treviño ..................... p. 179

COMENTARIOSDELIBROS ....... p. 185


A Ios/as compañeros/as "de siempre"
y a los/as eventuales lectores/as que
se sumen a este proyecto de trabajo.

4» LA REDACCIÓN

Con algunos cambios en la estructura de la revista, que serán explicados


más adelante, PANÓPTICO núm. 6 se presenta con un extenso Dossier mo-
nográfico dedicado a lo que ya viene denominándose (contra)reforma pe-
nal, procesal, penitenciaria, judicial.… que se está implementando en los úl-
timos meses. Desde hace algunos números anteriores, PANÓPTICO venía ya
advirtiendo (tanto en previas Editoriales como en artículos de fondo) sobre
los planes para llevar a cabo una política criminal de signo regresivo, invo—
lucionista y claramente autoritario. Ahora se están consumando aquellos
presagios. No es éste el sitio para iniciar una valoración detallada de seme-
jantes reformas; para ello debe acudirse al Dossier monográfico señalado.
Sólo cabe desde aquí indicar que las repercusiones de los acontecimientos
internacionales y la exportación de políticas autoritarias, de excepción e in-
tolerantes, finalmente han dado sus frutos en el Estado español, el cual se
ve ahora adoptando disposiciones regresivas que ya han sido ensayadas en
otros contextos previamente.
Mientras tanto, el sistema penal en su conjunto y la cárcel, en particular,
continúan "creciendo", engordando y, entonces, alejándose cada vez más de
cualquier principio fundante de aquellos que se denominaron de 'mínima in-
tervención', 'última ratio', etc. El modelo de derecho penal máximo ya es una
realidad palpable en el Estado español. Pero, además, con la (contra)reforma
desplegada, es fácilmente imaginable el horizonte punitivo que se dibuja: el
aumento de la clientela carcelaria constituye ya una evidencia que puede
provocar graves trastornos en la vida cotidiana de los/as presos/as y una cada
vez más difícil administración de sus instituciones penitenciarias (¿cuánto
tardarán en llegar los primeros “auxilios" privatizadores?...).
Debido entonces a la trascendencia del momento y del tema analizado,
esta vez hemos querido darle un tratamiento muy destacado —aun a costa
de reducir en parte otras Secciones de la revista— y ofrecer a los/as lecto-
res/as un conjunto de materiales que puedan ser útiles para el conocimien-
to de las nuevas disposiciones, para su reflexión, para su estudio. Y para
ello, hemos pedido en los últimos meses a diversos/as compañeros/as de
todo el Estado que nos remitieran sus trabajos para la confección del aludi-
do Dossier monográfico. Desde aquí queremos agradecer a cuantos/as han
R
*;
PANÓPTICO

colaborado y han trabajado para reunir el material que ahora presentamos.


Como más adelante se explicará, el mismo ha sido elaborado por estudio-
sos, académicos, profesionales del sector de la administración de justicia y
miembros de asociaciones que cotidianamente enfrentan, todos ellos/as,
desde su respectiva área de trabajo, las consecuencias reales que se derivan
de la interpretación y aplicación de las disposiciones legales.
Por cuanto se refiere a la estructura del presente número, debemos expli-
car algunos puntos y algunos cambios. En particular en relación a la sección
de Correspondencia y denuncias, pues hemos decidido que no aparezca
como tal tanto en este sexto número como en los venideros. Como podrán
observar los/as lectores/as, todas aquellas denuncias que vengan dirigidas a
esta redacción, ya sean a título personal o colectivo, serán recogidas en la
"nueva“ segunda sección dedicada a Movimientos sociales. El motivo que
nos ha llevado a tomar esta decisión es la ausencia de cartas, sugerencias y
denuncias que debieran haber llegado a nuestra redacción —que por moti—
vos que desconocemos no se han dirigido a la misma—, verdadero sentido
de una sección especial. Aquella primera sección, por el contrario, se esta-
ba convirtiendo en una especie de dossier informativo de noticias ya apare-
cidas en otros medios de prensa y, como anunciamos, ésta no era su aspi—
ración ni su sentido, sino el de poder dar voz a todos/as aquellos/as que así
lo desearan en cualquier formato. A pesar de ello, seguimos alentando a to-
dos/as aquellos/as que nos siguen para que, si así lo desean, nos transmitan
sus dudas, quejas, etc., a esta redacción, ya que las mismas seguirán te-
niendo reflejo en esta revista.
Entonces, la primera sección es ahora la de Artículos de—fondo, que inclu-
ye en esta ocasión un artículo de Marta Monclús Masó, "Las criminologías
anglosajonas: realismo criminológico vs. criminología de la intolerancia“
(que describe la actualidad en las teorías que serán el fundamento teórico
de las propuestas de intervención penal del liberal-conservadurismo y de la
socialdemocracia); y otro artículo de Francesc Barata Villar, "Los mass media
y la cultura del miedo" (que señala el papel delos medios de comunicación
para crear un clima de alarma social frente al delito).
Por su parte, la segunda sección continúa dedicada a los Movimientos so—
ciales, pero introduce los aportes, denuncias y actividades no sólo de ellos,
sino también de quienes a título individual respondan a nuestro llamado de
hacerse propia esta revista. En el presente número se presenta en primer lu—
gar el manifiesto “No a la contra—reforma penal, procesal y penitenciaria"
(se invita a los lectores de la revista a suscribirlo). También integran la sec-
ción diversas contribuciones enviadas desde Galicia, la Coordinadora de So-
lidaridad con las Personas Presas y ASAPA de Aragón, así como un resumen
de las actividades de Amnistía Internacional. Finalmente, se destaca el re-
ciente Informe sobre las “Condiciones del Encarcelamiento en Catalunya",
presentado por el Observatorio del Sistema Penal y los Derechos Humanos
de la Universidad de Barcelona. Asimismo hemos introducido en esta sec—
ción un informe enviado desde la Argentina por Claudia Cesaroni. La grave-
“F"
Editorial

dad del asunto señalado —Ia invasión de las teorías inocuizadoras incluso
sobre la penalidad de niños— y nuestra necesidad de demostrar una sensi-
bilidad hacia América Latina, justifican la introducción, aunque breve, de
este trabajo.
La tercera sección está monográficamente dedicada al dossier La contra-
rreforma penal, procesal, penitenciaria en el Estado español. Más allá de
cuanto se ha dicho al inicio de esta Editorial sobre este tema, cabe ahora des—
tacar a quienes han contribuido a la confección del Dossier, los/as cuales son:
Jaume Asens (abogado, miembro de la Comisión de Defensa del Colegio de
Abogados de Barcelona), Patricia Faraldo (profesora titular de Derecho Penal
de la Universidad de A Coruña), José A. Ramos Vázquez (becario del Depar—
tamento de Derecho Penal de la Universidad de A Coruña), Luz María Puen-
te (doctora por la Universidad de A Coruña), Ignacio Muñagorri (profesor ti-
tular de Derecho Penal de la Universidad del País Vasco), Guillermo Portilla
(catedrático de Derecho Penal de la Universidad de Jaén), Alaitz Cruz de
Apaolaza (del Instituto Internacional de Sociología Jurídica de Oñati), Purifi-
cación Garcia Mateos (de la Universidad Complutense de Madrid), José Luis
Segovia (de la Asociación Apoyo de Madrid), Enrique Martínez Reguera la
Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía y Gabriel Anitua (miembro
de la Redacción de esta revista); se incluye también dentro del Dossier otro
Manifiesto contrario a tal reforma que ha sido elaborado y firmado por di-
versas asociaciones y grupos sensibles a la peligrosidad revelada por la acti-
vidad del legislador español. Como se ve, el Dossier está elaborado por un
elenco importante, variado y representativo de los/as diversos/as actores/as
que conforman el mundo del sistema penal.
La cuarta sección, como en ocasiones anteriores, continúa abocada al exa-
men de La lucha contra la cárcel en la España de los años 70, que confec-
cionan Ios/as amigos/as del Col-lectiu Arran de Barcelona.
Finalmente, la quinta sección, destinada a Comentarios de libros, incluye
en esta ocasión algunos que consideramos importantes para la tarea de di-
vulgación cultural que también emprendimos desde aquí.
Deseamos anunciar a los/as lectores/as que para el próximo número he-
mos pensado presentar un Dossier monográficamente dedicado al tema
"Funcionariado penitenciario y cárcel". Se trata, creemos, de un importante
tema tan pocas veces abordado y que estimamos decisivo para comprender,
y para aprender, en su conjunto, algo más del universo carcelario, en el cual
interactúan diversos actores.
Para terminar, y como en ocasiones anteriores, queremos enviar desde
aquí un saludo y agradecimiento a cuantos/as han colaborado en este nú-
mero; sin su concurso no hubiese sido posible la confección del presente.
- Número anterior de PANÓPTICO -
Editorial
Cárcel y movimientos sociales. Respuesta
de la Redacción

ARTÍCULOS DE FONDO
La cárcel dentro de la cárcel: el régimen
cerrado, Pedro Cabrera y Julián Ríos
Sobre la prisión de inocentes en España.
A propósito de la prisión provisional y
sus proyectos de ampliación,
Gabriel Ignacio Anitua
Recluso en Holanda, Jolande uit Beijer-
se y René van Swaaningen
Washington, capital-caricatura del Esta-
do penal americano, Loic Wacquant

MOVIMIENTOS SOCIALES
Fundación del Observatorio Europeo so-
bre Condiciones de Encarcelamiento
Informan desde la Organización Mundial
Contra la Tortura. Conclusiones del Comité Contra la Tortura de las Naciones
Unidas sobre España, OMCT
La APDHA anuncia acciones “legales contra un periodista, APDHA
Comunicado de la APDHA ante las nuevas reformas legislativas
Calumnias periodísticas contra ASAPA, ASAPA
Primera sentencia contra la Xunta de Galicia por las pensiones, PreSOS-Galiza
Manifiesto contra las reformas legales del Gobierno, ASAPA '
Otra Garzonada, Cruz Negra Anarquista
España: aumentan los enfermos psíquicos en la cárcel, denuncian los capella-
nes, Zenit
Manifiesto de apoyo a la juez Ruth Alonso, Salhaketa-Bizkaia

DOSSIER MERCADO DE TRABAJO Y CÁRCEL


El trabajo productivo en las cárceles catalanas,
Sara López Blanco y Marc Álvarez ¡ Arias
Inserción laboral de la población reclusa en la Comunidad de Madrid,
Colectivo Ioé
Los posibles escenarios de la penalidad (o cuando la cárcel entra en la "lógica
del mercado"), Iñaki Rivera Beiras
Trabajo y cárcel, SU,RT, Associació de Dones per a la Inserció Laboral
LA LUCHA EN LA CARCEL EN LA ESPANA DE LOS ANOS 70
Trabajos penitenciarios/Talleres penitenciarios de Carabanchel,
Centre de Documentació - Col-Iectiu Arran
COMENTARIOS DE LIBROS

Panóptico, 1er semestre 2003, núm. 5, 9 €


PANÚPTIBII
K
¡K
los mass merlia ¡: la
wltura del miedo
Ó» FRANCESC BARATA*

l delito, la transgresión y lo ac- poderosamente en el sistema judi-


cidental han crecido como va- cial y es aprovechada por el gobier-
lor noticiable en los últimos no y los legisladores con fines políti-
años. Parece oportuno señalar que cos bajo la coartada de una supues-
esta gran visibilidad mediática de los ta demanda social.
ilegalismos emerge en paralelo al au- Las cadenas públicas de televisión
mento de los temores ciudadanos. parecen responder a un mismo pa—
La cultura del miedo que tan bien trón que se repite insistentemente:
administran los gestores del control el gobierno actúa, los desastres hu—
social parece construirse a golpe de manos y naturales nos amenazan y,
informaciones dramáticas y alarmis- a pesar de todo, todavía queda lu-
tas, sobre imágenes impactantes que gar para el espectáculo farandulero
nos recuerdan determinados peli- en sus múltiples formas.
gros sociales mientras se silencian
otros. Es el griterío ante los dramas La vuelta de los
personales y el silencio ante los de- sucesos
sastres estructurales. En los escena-
rios mediáticos del delito siempre La presencia que el mundo del deli-
aparecen los mismos actores: el he- to tiene en los medios de comunica-
cho transgresor, el horror en torno a ción recuerda épocas anteriores al
la víctima, la acción de los vigilantes devenir democrático, cuando el
del orden. Es una narración de es- franquismo decadente utilizaba el
panto donde la voz ciudadana pare- drama delos sucesos con fines polí-
ce reservada sólo para la exclama- ticos. En los inicios de los años se—
ción del horror y la petición de ma- tenta, la búsqueda de El Lute era
yores dosis de represión y control. presentada por la Prensa del Movi-
Pero, además, la visibilidad me- miento como el problema más im-
diática del mundo del delito incide portante de una España donde la re-

* Periodista y doctor en Ciencias de la Comunicación, profesor de periodismo de la


Universidad Ramon Llull, de Barcelona. Ha publicado la tesis doctoral La mirada pe—
riodística sobre el delito y numerosos artículos sobre el tema.

11
R
N¡:.
ARTÍCULOS DE FONDO

presión antifranquista sólo era di- programas de reality show, infotain—


fundida en los canales clandestinos ment, la llamada televisión basura.
de comunicación. El famoso perso- Esta nueva tendencia se expresaría
naje que empezó robando gallinas con su mayor intensidad a inicios de
se convirtió en el peligro público nú— 1993, cuando tres adolescentes des-
mero uno, cuando el Estado era el aparecidas desde hacía 75 días fue—
principal delincuente. Además, con ron encontradas muertas y enterra-
aquella imagen del falso enemigo se das en una zona desolada de una
ofrecía un drama para olvidar las pequeña localidad valenciana. El
penurias de la dictadura y distraer Caso Alcásser supuso la vuelta de la
las ansias de libertad. información de sucesos con una di-
A principios de los ochenta, el tra- mensión antes desconocida en el
tamiento mediático del delito se con— medio televisivo y el resto de la
centró en los llamados grandes casos prensa. El tratamiento de los suce-
criminales y la aparición de la delin- sos se convirtió en una poderosa he-
cuencia juvenil surgida en los barrios rramienta en la lucha por la audien—
periféricos de las grandes ciudades. cia que se produjo en el medio tele—
Entre los acontecimientos delictivos visivo después de que, en agosto de
con más trascendencia mediática to- 1989, el Gobierno adjudicara la emi-
davía recordamos el Asesino de Pe- sión de tres canales privados de tele-
dra/bes, el Crimen de los Urquijo y el visión. Después de los hechos de AI-
Caso Teresa Mestre, el primero ocu— cásser cada uno delos programas de
rrido en 1974, el segundo en agosto televisión contaba con un programa
de 1980 y el tercero en enero de de reporterismo criminológicol.
1984. Con ellos apareció un nuevo En pocos años el mundo del delito
periodismo criminológico que toma- parecía invadir la agenda informati-
ba el relevo al que se había desarro- va y todo ello se producía cuando
llado en la época franquista. El delito los índices objetivos de criminalidad
juvenil que apareció en los media experimentaban una disminución.
también tuvo un reflejo en películas Esta vuelta de los sucesos tuvo una
como Perros callejeros (1976) y Yo el estrecha relación con el ascenso que
Vaqui/Ia (1985), del director José An— habían experimentado los reality
tonio de la Loma, y Deprisa deprisa show en las cadenas televisivas de
(1980), de Carlos Saura. otros países. Hay que recordar que
A principios de los años noventa con la emisión en directo del juicio
un nuevo tipo de programas de tele— contra 0. J. Simpson, en enero de
visión hizo su aparición en España y 1995, muchas televisiones nortea—
con ellos los sucesos, el mundo del mericanas llegaron a batir su récord
delito y las transgresiones volvían -a de audienciaº. Nunca antes un cri—
tener un lugar destacado en los me— men habia merecido un tratamiento
dios de comunicación. Fue en esa tan espectacular por parte de los
época cuando empezó a configurar- media. La vuelta de los sucesos pa—
se una nueva forma de hacer televi- recia un fenómeno universal. Como
sión y con ella aparecía un nuevo tra- señalaba a mediados de los noventa
tamiento del mundo del delito en los el sociólogo francés Pierre Bourdieu,
12
Los mass mediav la cultura del miedo K
y
el drama y el crimen “siempre han La construcción
vendido, y el reino del audímetro los med¡atnca de la
había vuelto a la primera página, a conducta desviada
la apertura de los telenoticias, a pe-
sar de que hasta ahora se trataba de La información y el espectáculo me-
ingredientes excluidos o relegados diático del delito nos amplía la visión
por el afán de responsabilidad im- de una realidad social de la que la
puesto por el modelo de prensa es— mayoría de la sociedad no tiene una
crita. Pero, ahora, los sucesos son experiencia directa. La idea de am-
acontecimientos que entretienen pliación de la desviación ya fue for—
[...] El suceso es una especie de pro- mulada en 1971 por el criminólogo
ducto elemental, rudimentario, dela inglés lock Young en The Role of Po-
información, que es muy importante lice as Amplifiers of Deviancy, Nego-
porque interesa a todos sin tener tiators of Reality and Translators of
consecuencias y porque ocupa tiem- Fantasy. Young demostró cómo la
po, un tiempo que podría ser utiliza- prensa de entonces hizo de la mari-
do para pedir otras cosas". huana un problema social mediante
El auge de estos programas y, so- explicaciones sensacionalistas sobre
bre todo, el impacto social de los re- la vida delos consumidores, que fue-
ality show motivó un gran debate ron presentados como enfermos, su-
sobre los límites de la información. cios y promiscuos.
El tratamiento de la noticia criminal La idea del papel dela prensa en la
como espectáculo tuvo uno de sus construcción social de la desviación
máximos exponentes en el progra- fue también apuntada a principios
ma Esta noche cruzamos el Mississi— de los setenta por Stanley Cohen en
pi, emitido por Tele 5 y presentado su clásico Folk Devils and Moral Pa-
por el periodista Pepe Navarro. El nics. Dicho trabajo fue pionero en
tratamiento que dicho programa establecer de forma consistente un
hizo del juicio del Caso Alcásser, en concepto clave en el estudio de la
la primavera de 1997, produjo un prensa: el pánico mora/. Cohen con-
gran debate en torno a los llamados solidó un campo de investigación
juicios paralelos. fundamental centrado en el estudio
Desde entonces cabe preguntarse de los procesos de etiquetaje social
cómo analizarla poderosa irrupción por parte de los mass media. Quiso
del mundo del delito en los mass demostrar la capacidad de éstos
media. La nueva visibilidad mediáti- para definir determinados actos y
ca de las transgresiones nos trae a grupos de personas como una ame-
la memoría algunas delas ideas que naza social, mediante la utilización
ya a principios de los setenta for- de estigmas y estereotipos. La pren—
mularon algunas voces críticas en el sa había construido el pánico moral
estudio de la cuestión criminal. AI- a través de la publicación de repor-
gunas de estas reflexiones parecen tajes sensacionalistas sobre los mods
del todo oportunas para la situa- y los rockers que fueron presentados
ción actual. como verdaderos demonios popula-
res. Para demostrar tales premisas,

13
X
Y.
ARTÍCULOS DE FONDO

Cohen había estudiado las noticias Dichos autores plantean que los
publicadas por la prensa británica medios de comunicación son una
sobre los encuentros de jóvenes que poderosa herramienta en “la pro-
tuvieron lugar, entre 1964 y 1967, ducción y reproducción de la estruc-
en las ciudades de Brighton y Clac- tura social; constituyen industrias
ton, y los disturbios entre los grupos de la conciencia que modelan el co-
de mods y rockers. Cohen partió de nocimiento y lo ordenan a través de
la idea de que "una dimensión cru- estructuras ideológicas que asegu-
cial para entender la reacción de los ran su cohesión y el mantenimiento
agentes de control social y la opi- del orden social establecido". Es de-
nión pública ante la desviación es la cir, los medios de comunicación re-
naturaleza de las informaciones que producen los discursos dominantes
se recibe sobre el conflicto" (Cohen, que otorgan significado a la reali-
1972) dad mediante la creación de imáge-
Tal vez, como entonces planteó nes públicas.
Cohen, tengamos que hablar de los El interés que los nuevos teóricos
medios de comunicación como los de la desviación otorgaron a los
nuevos empresarios mora/es. Ellos mass media quedó patente en 1973
se encargan de designar la desvia- con la publicación de The Manufac—
ción, ellos aportan importantes con- ture of News. Social problems, de-
tenidos simbólicos sobre los contor- viance and the mass media, bajo la
nos normativos de la sociedad. Nos dirección de Cohen y Young. Dicho
informan sobre lo erróneo y lo acer- trabajo marcó un hito en la com-
tado, sobre los límites sobre los cua— prensión sociológica de los medios
les no hay que aventurarse y sobre de comunicación, fue un intento de
las formas de la maldad. llevar al estudio de los media la tra-
La idea de la construcción mediáti- dición sociológica empeñada en
ca de los pánicos morales fue tam- descubrir los sistemas ideológicos
bién explorada por un conjunto de que operaban en las instituciones
investigadores del Centro de Estu— sociales, en este caso en las indus—
dios Culturales de la Universidad de trias mediáticas. Los numerosos tra-
Birmingham, entre los que cabe des— bajos que conforman el volumen,
tacar Stuart y su equipo. Estos auto- un total de treinta, abordan algunos
res publicaron, en 1978, Policing the de los temas sobre los cuales se edi-
Crisis. Mugging, the State, and Law ficará la teoría de la comunicación
and Order, donde ponían de mani- de los últimos treinta años.
fiesto cómo a finales de los años se- Estos primeros estudios sobre los
tenta la prensa inglesa creo un ima- medios de comunicación y la ¡ma-
ginario del delito relacionado con los gen del delito intentan dar respues-
nuevos grupos de inmigrantes. Los ta a tres preguntas: ¿quién controla
mensajes mediáticos y las reacciones los media y con qué intereses?,
institucionales produjeron la estig- ¿qué imágenes de la desviación
matización de jóvenes negros antilla- construyen las industrias mediáti-
nos que la prensa transformó en la cas? y ¿cuáles son las influencias de
figura del delincuente extranjero. las noticias criminológicas?
14
“<?
Los mass media v la cultura del miedo

En paralelo a esas primeras inves- tar que esa experiencia mediática


tigaciones, aparecieron otras que está alejada de nuestros contextos
indagaron en cómo los medios y los habituales de la vida cotidiana, en
periodistas elaboraban la informa- sus dos grandes dimensiones: la
ción criminal. Aparecía un nuevo temporal yla espacial. La otra carac—
enfoque que dejaba aparte el estu- terística es quela visibilidad mediáti-
dio del discurso mediático y se apar- ca posee una dimensión global.
taba de unos análisis marcadamen- El uso de los medios implica la
te ideológicos. Frente a la idea de aparición de nuevas formas de ac-
una manipulación explícita por par- ción e interacción social en torno al
te de los medios, se pasó a la consi— sistema penal y el mundo del delito.
deración de una distorsión involun- Es necesario preguntamos por esa
taria que era más el producto de las fascinación por el relato transgresor.
rutinas productivas que de las vo- Una demanda que tiene que ver con
luntades ideológicas. Dicho de otro un profundo malestar, con una pro-
modo, la dimensión ideológica ya funda inquietud social, con una cier-
no emanaba de una “teoría conspi— ta anomia ciudadana que se traduce
rativa", sino que era el resultado de en un desafío de los límites. Es la fas—
las lógicas de producción presentes cinación por el desorden en todas sus
en el periodismo. expresiones: el riesgo, el accidente, el
Hemos analizado las característi- crimen, la catástrofe. Una demanda
cas delos principales estudios sobre que es cultivada y fomentada por los
los mass media y el delito. Ahora medios. Pero también un reclamo
cabe preguntarse qué propuestas que tiene que ver con una búsqueda
podemos considerar válidas para el de realidad en un mundo donde las
análisis de la realidad actual. verdades están trastocadas por las
apariencias. Disimulos presentes des—
Algunas constataciones de el actuar político hasta la visión de
y grandes _ los cuerpos perfectos.
preocupaciones Todo ello se produce cuando asis-
timos a una profunda crisis de los
La primera afirmación que podemos grandes relatos que explican la his-
hacer es que existe una mediatiza- toria. Estamos enla era del vacío (Li-
ción de las prácticas y la experiencia povetsky, 1986) que está siendo
en torno al delito. Una mediatiza- ocupada por ”la cultura del yo", la
ción que irrumpió con las industrias vivencia de lo íntimo frente a la ex-
culturales. La experiencia mediática periencia colectiva. Aparece la "so—
no podemos considerarla como algo ciedad de la experiencia mediática"
ajeno a la sociedad, sino que hay frente a la "sociedad de la vivencia
que contemplarla como un elemen- colectiva". La segunda era un viaje
to más del devenir social. Es decir, hacia afuera, donde el individuo en—
las formas mediáticas de la experien- cuentra sus puntos de referencia en
cia forman parte del flujo habitual el hecho colectivo; la primera es un
de nuestras vidas cotidianas. Y en ir hacia adentro, un refugiarse en el
torno a este hecho hay que consta- mundo íntimo e individual que el fi-
15
R
N:.
ARTÍ(ULOS DE FONDO

Iósofo Lluís Duch sintetiza en la pre- simulacro del que nos habla Baudri-
gunta: ¿cómo me encuentro? Este Ilard. Una encuesta realizada en Es-
intento de exploración de las pro— paña por la empresa Eco Consul—
pias intimidades se ha convertido en ting, en junio de 1998, revela que
el criterio sobre el cual se construye las informaciones de sucesos y de—
buena parte de los valores de la lla— portes son las más creíbles para los
mada posmodernidad. Es un yo ciudadanos y las menos fiables las
cambiante que se mueve por los im- relacionadas con la política (El País,
pulsos de la emocionalidad3. 14 dejulio de 1998). A un 78,6% de
Como hemos dicho, la crisis de la los ciudadanos les parece creíble las
modernidad se manifiesta en una informaciones de sucesos, mientras
nueva experiencia del devenir histó- que las del ámbito dela política na-
rico. Asistimos a una prominencia cional sólo merecen la confianza del
del presente y la aceleración impa- 30,8% de los encuestados.
rable del tiempo. El diapasón me— Y esta atracción por el suceso cri—
diático marca cada vez más el ritmo minal tiene lugar cuando contem-
social, repercutiendo en la experien- plamos una sociedad que se mues-
cia ética y en la adopción de valores. tra insegura. En la mayoría de los
El nuevo presente acelerado y efí- países europeos, la seguridad públi-
mero ha pulverizado un pensamien- ca es uno de los tres temas que más
to tradicional que se asentaba en preocupan a los ciudadanos. Es un
una relativa quietud social que per- miedo difuso, un miedo ante lo im—
mitía abordar la realidad exterior, previsible que alimenta el gran ne-
un reloj de arena que daba tiempo a gocio de la seguridad. En países
que el individuo creara lazos de con— como Canadá y Estados Unidos la
fianza con su entorno. gestión de los miedos se ha conver-
Tales sofocos llevan a una profun- tido en una materia muy rentable y
da crisis de credibilidad que hace la seguridad privada gasta el doble
que los ciudadanos se refugien en el quela pública.
viejo y ancestral espacio de la ver- En todo lo expuesto encontramos
dad: los sentimientos. En el desierto una gran paradoja: esta sociedad
de los meta-relatos han aparecido que se siente profundamente inse-
Ios micro-discursos que ofrecen un gura se muestra fascinada por el
sentir ala ciudadanía. Pequeñas ver- consumo de relatos violentos y
dades con una gran carga emotiva, transgresores. Son las dos caras de
como las historias de la nota crimi— la moneda: una espanta y nos hace
nal. Es decir, estamos ante una ver- huir, la otra nos atrae con su oscura
dadera crisis de credibilidad que profundidad y la observamos desde
afecta al orden simbólico: Ios gran- un espacio sin riesgo.
des relatos ya no son tan creíbles y Esa nueva visibilidad mediática
se afianza el interés por lo minúscu- sobre la criminalidad adquiere en el
lo, lo cotidiano, lo íntimo. El suceso momento presente las característi-
criminal, considerado como una de- cas de un verdadero ritual. En los
manda de realidad remite a una nuevos escenarios mediáticos la cri-
búsqueda de autenticidad frente al minalidad parece revivir la antigua
16
'K7º
Los mass media v la cultura del miedo

función del teatro punitivo, con la cionalidad. Este hecho se puso de


paradoja de que ahora el castigo manifiesto en 1993 cuando dos ni-
permanece invisible entre los muros ños de Liverpool, de 10 años, mata—
de las prisiones y la ceguera social. ron a otro de dos años. Fueron cali-
La pena es un mero trámite buro— ficados de seres monstruosos, influi-
crático que nadie quiere contem- dos por la violencia presente en la
plar. Mientras que la detención y el televisión. Analizando el caso con el
juicio oral se han convertido en el distanciamiento necesario, podemos
nuevo espectáculo punitivo. llegar a la conclusión, como sostie—
Una visibilidad que se concentra nen psicólogos y sociólogos, que el
sólo en una parte delas transgresio— mayor drama social no fue que dos
nes sociales: las más violentas, las niños mataran a otro, sino el trata-
susceptibles de producir más horror miento mediático, la imagen de cria-
entre los ciudadanos. Diversos estu- turas asesinas difundida entre la so-
dios realizados en Europa sostienen ciedad y para los cuales se pedía el
que aproximadamente el 40% de la internamiento a perpetuidad.
información criminal hace referen— Este tratamiento dramatizado de
cia a crímenes violentos, cuando las las noticias criminales va acompaña-
estadísticas policiales sitúan este do muchas veces de un sustrato de
tipo de criminalidad en sólo el 6% fantasía y ausencia de moral presen-
delos actos punibles. Es decir, la de- tada sin contexto social. Cuando
lincuencia que presentan los medios fueron detenidas dos menores de la
es exclusivamente una delincuencia ciudad andaluza de Cádiz por la
violenta. Las pequeñas transgresio- muerte de una amiga, los diarios ti-
nes que constituyen la mayor parte tularon "Mataron a la joven de Cá-
de los hechos delictivos apenas sa- diz para ser famosas" (El País, 30 de
len reflejados, por no referirnos a la mayo de 2000). En otra ocasión los
escasez de los llamados delitos de menores fueron calificados como
cue/Io blanco. “los asesinos del rol". Es decir, los
Además, asistimos a una visibili— medios cultivan la irracionalidad y
dad que apela directamente a los no aportan ningún elemento que
sentimientos, con un lenguaje dra— permita a la sociedad entender tales
mático que pretende más impactar transgresiones. Parecen querer ins-
que informar. Las noticias sobre el talar la imaginación yla ficción en el
delito son un discurso con un dra- universo de la verdad informativa.
matismo que crece por el peso emo- En esta ausencia de contexto, la
tivo de las imágenes que acaparan exposición de los hechos se concen-
los primeros minutos de los teleno- tra en la presentación del delito y su
ticias y las portadas de los diarios, resolución. Ninguna reflexión sobre
con escenas que impresionan los las leyes que penalizan y sobre
sentimientos y dejan poco espacio aquellos que las trasgreden. En el
para el razonamiento. mundo de la delincuencia que ofre-
Atrapadas en la lógica del drama y cen los medios de comunicación, los
la seducción, las noticias sobre el de- únicos actores son el agresor, la víc—
lito apenas aportan elementos de ra— tima, los jueces y la Policía, es decir
17
)4
*s.
ARTÍCUI 09 DE FONDO

los directamente implicados y los mientos. Ambos grupos son los más
operadores del control social for— proclives a adoptar los puntos que
mal. Ninguna otra referencia a los sobre la criminalidad le ofrecen los
organismos o entidades que tam— medios. En la mayoría de los casos
bién tienen relación con dicha pro- produce una gran preocupación que
blemática social. La simplificación la respuesta alarmista sólo se centre
lleva a que la información quede re- en la petición de una mayor repre-
ducida a una especie de caricatura sión contra determinados comporta-
entre buenos y malos. mientos. Como dice Eduardo Galea-
Este proceso de visibilidad, como no: "Cada vez que un delincuente
ya puso de manifiesto Mark Fishman cae acribillado, la sociedad siente un
(1978) en su trabajo La fabricación alivio ante la enfermedad que le aco-
de las noticias, puede crear verdade- sa". Es decir, la muerte de cada mal-
ras "olas artificiales de criminali- viviente produce efectos terapéuti-
dad". Es decir, construye una per— cos sobre los bienvivientes. Nos re—
cepción que no existe en la realidad. cuerda que estamos salvados del
Podemos decir que la visibilidad mal que nos acecha.
que ofrecen los medios de comuni-
cación puede calificarse de alarmista, La sociedad de las
sesgada y, aunque efímera, dotada "cabezas de turco"
de una poderosa capacidad para re-
forzar entre la ciudadanía esquemas La visibilidad a la que hacemos refe-
simbólicos sobre el orden y la mora— rencia conlleva lo que, en términos
lidad. Las noticias criminales repre- de teoría de la comunicación, se co-
sentan un tipo de orden que ordena noce como tematización, es decir la
la moralidad; es decir, dicen qué y capacidad que tiene la prensa de
quién es correcto, a la vez que pro- construir la agenda pública, de in-
porcionan un sentido de la justicia. fluir poderosamente en el debate
Y todo ello produce gran preocu- político y social. Esta idea ha sido
pación porque los desacuerdos exis- desarrollada por Thompson (1998)
tentes entre los especialistas sobre la afirmando que el campo de visión
posibilidad de establecer una rela- social está estructurado por las or-
ción directa entre la violencia social ganizaciones mediáticas. En este
y la mediática se convierten en con- sentido, los investigadores Schlesin-
senso cuando se estudia la sensa- ger y Tumber (1993) han puesto de
ción de inseguridad que producen manifiesto como los mass media
las olas informativas. Podemos esta- crean imágenes públicas en torno al
blecer una relación entre estos pro- crimen que después tienen una gran
cesos informativos y determinadas influencia en la toma de decisiones
reacciones de alarmismo social. Una institucionales.
información que afecta de forma En las últimas décadas hemos vis—
particular a los grupos sociales más to como los alarmismos mediáticos
débiles y a aquellos que ideológica- han movilizado a la clase política y
mente se muestran más predispues- judicial. Podemos decir que los ope-
tos a no tolerar dichos comporta- radores del sistema penal están de-
18
"W
Los mass media v la cultura del miedo

masiado pendientes de la prensa. otorgado la sociedad. En el año 2000


Ante el temor a una reacción públi- la muerte de un niño por las morde—
ca desfavorable aplican lo que se duras de un perro y su posterior tra-
podría denominar como "respuesta tamiento alarmista en los medios Ile—
anticipada". No es casual que tanto vó a que las autoridades endurecie—
en España como en otros países del ran la legislación sobre el control de
ámbito europeo los poderes políti- determinadas razas de perros, y todo
cos y judiciales estén reaccionando ello a pesar de que no existiera nin-
de forma restrictiva ante cada ola gún estudio que demostrara un au-
mediática de criminalidad. En 1992, mento de tales agresiones.
después del asesinato de las adoles— Esta hipersensibilidad ante la in-
centes de Alcasser, se endurecieron formación criminal ha empezado
determinadas penas del Código Pe- por los grandes casos criminales y
nal que en aquellos momentos esta- amenaza con contagiar cada una de
ba siendo reformado. Los casos de las actuaciones en materia penal.
pederastia ocurridos en Europa a fi- No deja de ser casual el hecho de
nales delos noventa comportaron el que nunca antes, desde la instaura-
endurecimiento de las penas sobre ción de la democracia, utilizaron
los delitos sexuales. Lo mismo ocu- tanto los jueces españoles el con-
rrió tras un tratamiento informativo cepto de alarma social.
intensivo de los malos tratos a las La utilización que la prensa hace
mujeres, acontecimientos que hasta de la actuación policial y del proceso
hace pocos años tenían una escasa judicial ha introducido una nueva
visibilidad en los medios. patología que parece desbordar el
No vamos a entrar en analizar la actuar de la justicia: la punición anti—
conveniencia de tales cambios jurí— cipada, una sanción que en ocasio-
dicos, simplemente queremos lla- nes es más gravosa que la misma
mar la atención de que dichas ac- pena. Como señala el jurista Luigi Fe-
tuaciones se producen arrastrados rrajoli, ha reaparecido ”la antigua
por una visibilidad abundante, y en función infame del derecho penal
muchos casos sensacionalista, de premoderno, cuando la pena era pú-
determinados acontecimientos de- blica y el proceso secreto. Sólo quela
lictivos. En definitiva, la visibilidad picota ha sido sustituida por la exhi-
pública que muestran los medios de bición pública del acusado en las pri-
comunicación ante los hechos delic- meras páginas de los periódicos o en
tivos incide de forma poderosa en el el televisor; y no como consecuencia
sistema penal. de la condena, sino de la acusación,
Sugerimos la idea de que el efecto cuando todavía es un presunto ino-
alarmista de los medios sería mucho cente" (Ferrajoli, 1997). La prensa ha
menor si las instituciones no actua— trastocado el sentido ilustrado de la
ran al calor de las olas informativas. publicidad del proceso.
Las reacciones de los organismos ofi- Los jueces, dice Ferrajoli, deberían
ciales, muchas veces, conceden a di- resistirse al encanto de la prensa, ya
chas noticias una categoría de verdad que la espectacularidad de los pro-
sociológica que todavía no les ha cesos siempre es negativa. Deberían
19
J
Nr.
ARTÍCULOS DE FOND(L

tener en cuenta “sólo las pruebas y del programa Crimewatch de la


no a la opinión pública ni a la pren- BBC, dichos programas convierten
sa, que siempre son culpabilizado— la búsqueda del presunto culpable
ras" (El País, 2 de mayo de 1997). En en una especie de entretenimiento,
este sentido, la espectacularidad contribuyendo al aumento del mie-
equivale a una humillación pública do y no respetando la presunción de
que abona el etiquetamiento social inocencia. La constante aparición de
y contribuye a lo que Ulrich Beck ha policías en dichas emisiones Ies con-
denominado ”la sociedad de las ca- fiere un carácter oficial que intensi-
bezas de turco”, donde lo que pro— fica en la audiencia la idea de que
voca la intranquilidad general no hay mucho delito y que el trabajo de
son las amenazas, sino quienes las la policía es la única alternativa para
ponen de manifiesto. afrontar los ilegalismos.
Lo anteriormente expuesto lleva a Por todo ello, podemos decir que
que muchas veces, en España, se los mass media son una poderosa
utilice el término “juicios paralelos" maquinaria que produce, especula y
para calificarla actitud dela prensa. moviliza las creencias sobre el mie-
Hace tres años el Consell de l'Audio- do. Un alarmismo que genera en la
visual de Catalunya pidió a los me- sociedad el síndrome de punibíli—
dios de comunicación que durante dad, de que todos pueden ser obje—
el tiempo que duraran los juicios to de un delito presentado como el
orales evitaran sacar en sus progra- paradigma de los temores que nos
mas a personas relacionadas con el acosan. Los medía construyen la ac-
proceso. Dicho organismo solicitó a tualidad como un escenario asedia-
las televisiones que se abstuvieran do por la inseguridad. Sus noticias
de realizar reconstrucciones de los sobre la criminalidad son, en ocasio-
hechos porque podían suponer una nes, una gran algarabía alarmista
clara tergiversación del aconteci- que rellena el silencio que envuelve
miento. Incluso, algunos miembros a otras formas de violencia. En Es-
de la Audiencia Provincial de Barce- paña, las muertes en accidente la—
lona han manifestado que, en algu- bora! son una de las primeras cau—
nos casos, el tratamiento mediático sas de mortalidad yjunto con los ac-
es una verdadera amenaza a la pre- cidentes de tráfico son lo que
sunción de inocencia. produce más daño social, pero sólo
Esta punición anticipada es espe— tienen un tratamiento reducido en
cialmente grave en los programas la agenda mediática.
de reporterismo criminal como el ¿Debemos culpar a los periodistas
programa Alerta 112 que emite An- de todo lo planteado? ¿Obedecen
tena 3 Televisión. Desde hace una tales mecánicas a una actitud plani-
década estos programas convierten ficada con fines ideológicos? Pensa-
la información sobre del crimen en mos que el tema desarrollado tras-
una especie de espectáculo donde ciende las voluntades individuales.
se juega con el temor y el miedo. Todo ello no redime la responsabili-
Además, en muchos casos, como se- dad de cada uno de los operadores
ñala Schlesinger (1993) a propósito que intervienen en el proceso plan-
20
”Wº
Los mass media v la cultura del miedo

teado; ni tampoco hay que obviar común con lo imaginario. Como ha


que dichas informaciones suelen be- dicho Edgar Morin, en E! espíritu del
neficiar a determinados plantea- tiempo, queremos jugar con el ma-
mientos ideológicos4; es más, han tar y el morir como niños. En defini-
sido utilizadas, en algunas ocasio- tiva los sucesos criminales no dejan
nes, con la intención de provocar un de ser acontecimientos contingen—
determinado clima de alarma social. tes que sólo se justifican por su va-
Desde esta perspectiva, resulta lor emocional.
del todo necesaria una reflexión so— Estaríamos hablando de un espa-
bre el sistema informativo, conocer cio vulgar, donde se muestran, en
sus rutinas y perversiones. Hay que claves que nos cuesta reconocer, una
estudiar las lógicas profesionales parte del conflicto social. Muchas
existentes en las informaciones so- crónicas de sucesos pueden englo-
bre el crimen y analizar con detalle barse dentro del género melodramá-
las relaciones que mantienen los pe- tico en el que se da esa porosidad
riodistas y las instituciones penales. entre ficción y realidad que tan bien
Podríamos decir que la mirada poli- ha analizado Bajtin en la fiesta car-
cíaca sobre el delito acaba influyen- navalesca. Un melodrama, que
do en los medios de comunicación como apunta Roman Gubern en sus
porque, muchas veces, estos acep- análisis sobre el cine, interpela muy
tan como buenas las informaciones directamente a las regiones más os-
policiales sin aplicarles las reglas del curas de nuestro psiquismo con el
contraste informativo. Una mirada lenguaje de la emocionalidad. Junto
que está llena de prejuicios, cuando a esa proyección del imaginario po-
no de intereses corporativos, ideoló- pular, la narración informativa del
gicos e institucionales. crimen nos recuerda el rostro de los
Los trabajos de Chibnall señalan la criminales y presenta a los delin-
existencia de "imperativos" que aca- cuentes como “muy cercanos, pre-
ban condicionando la realización de sentes por doquier y por doquier te-
las noticias y entre éstos destaca: la mibles“ (Foucault, 1988: 72).
competencia, la rapidez y la necesi-
dad de presentar cada información A modo de conclusión
como un hecho nuevo y sorpren-
dente. Una lógica productiva que Podríamos decir que los medios de
acaba marcando profundamente el comunicación han construido una
discurso informativo. nueva mirada sobre el delito. No
Hay que reconocer que desde son los causantes del creciente inte-
hace más de un siglo la cultura de rés por los sucesos criminales, pero
masas está imbuida de imaginario explotan dicha demanda porque
social y con la misma fuerza ese funciona en términos de rentabili—
imaginario ha entrado en la infor- dad informativa. A pesar de su ca-
mación criminal. El crimen, el acci- pacidad para moldear los temores
dente, Ia catástrofe rompen los per- que acechan el imaginario colectivo,
files de la normalidad y por eso el el miedo al crimen tiene que ver con
mundo de los sucesos tiene algo de una multiplicidad de factores socia—
21
,& ARTÍ(IILOS DE FONDO

les. En muchos casos la prensa se Abundando en esta idea, pode—


convierte en el medio donde se pro— mos decir que los medios nos retor-
yectan las angustias, los miedos y la nan el mito de la caverna de Platón,
pérdida de sentido social. donde sus habitantes —recluidos y
No por ello dejamos de constatar prisioneros en la gruta oscura— cre-
que los medios tienen una gran ca— en percibir la realidad a través delas
pacidad para hacer visibles y definir sombras proyectadas en la pared.
simbólicamente las categorías de de- No se atreven a ver el mundo exte-
lito y las identidades sociales. Una re— rior por un temor profundo a lo des-
presentación que se hace más influ- conocido. Los medios son las nuevas
yente cuando los ciudadanos tienen cavernas que nos proporcionan ex—
poco contacto con el mundo margi- celentes representaciones del mun—
nal que aparece en las noticias. Para— do de los ilegalismos. Unas sombras
dójicamente, pudiera ser que la gran que interfieren poderosamente en
comunicación mediática sobre el de— la actuación del sistema penal y en
lito nos aislara aún más de él. el imaginario colectivo.

NOTAS:
1. Algunos de los programas fueron 3. Tal y como sugiere Lipovetsky en su
Código Uno, de TVE-1, Al filo de la ley, libro La era del vacío, dicha crisis de va-
de Antena 3 TV, y La máquina de la ver— lores es perceptible en una generalizada
dad, de Tele 5. En 1991, Televisión Espa- desorientación social que en los países
ño|a había puesto en marcha el progra- desarrollados lleva a una creciente de—
ma Quién sabe dónde con un gran éxito manda de los profesionales de la psico-
de audiencia. logía de las profundidades.
2. El actor de televisión y ex futbolista 4. La estrategia de ofrecer seguridad
0. J. Simpson fue detenido el 17 dejunio para conquistar votos ha contagiado a
de 1994 acusado de haber asesinado a buena parte de las formaciones políticas.
cuchilladas a su mujer. Su detención, En Europa ha sido utilizada en la mayo—
tras una persecución policial transmitida ría de los últimos procesos electorales,
en directo por las principales cadenas de entre los que cabe citar los de Gran Bre—
televisión, fue seguida por 95 millones taña, Francia, Bélgica y Grecia.
de norteamericanos.
22
't7º
las criminologia: _
auglpsaipiias: realismo
mmmoloqrro vs.
trimmologia de la
intolerancia 4» MARTA MONCLÚS MAsÓ*

Contexto social, _ Los gobiernos de los diversos paí-


político y económi- ses intentan ganar tiempo, en la
co: los duros años confianza de que se trate de una cri-
setenta y el ascen- sis pasajera. Pero la década de los
so al poder del con- setenta transcurre inexorable, se ¡ni-
servadurismo olí- cian los años ochenta y no hay sig-
tico (y del neo ibe- nos de recuperación económica. Al—
ral¡smo económ¡co) gunas voces evidencian que no esta-
mos ante una crisis coyuntural, sino
La crisis del petróleo de 1973 sacude más bien estructural dela economía
profundamente el capitalismo y la mundial. Se empieza a hablar dela
confianza en el “american way of crisis fiscal del Estado, que afecta a
life“. El modelo de crecimiento eco— la mayoría delos países capitalistas.
nómico constante, de pleno empleo Dos son los planteamientos eco—
y de bienestar que se había instaura- nómicos que sostienen los econo-
do tras la segunda postguerra mun- mistas como solución frente a esta
dial revela sus limitaciones. La eco- crisis. En primer lugar, desde postu-
nomía mundial entra en recesión. Se ras estatalistas, se insiste en la nece-
inicia un ciclo de fuerte inflación y sidad de profundizar las políticas
de aumento de los índices de des- económicas keynesianas que se han
ocupación —que entre los jóvenes venido desarrollando desde los años
negros norteamericanos de 16 a 19 treinta en adelante, ya que sólo a
años alcanza el 40% en 1977—, a la través del pleno empleo y la reacti-
vez que el valor delos salarios delos vación del consumo será posible la
trabajadores declina velozmente. recuperación económica. El segun-

* Investigadora FI del Departament de Dret Penal ¡ Ciéncíes Penals de la Universitat


de Barcelona.
Jl
X
ARTÍ(ULOS DE FONDO

do planteamiento, que surge como nómico que se impondrá en las dic-


alternativa al keynesianismo, consis- taduras latinoamericanas—. El resto
te en las recetas del libre mercado de países no quedan a salvo de los
propugnadas por los economistas influjos del neoliberalismo, y todos
ultraliberales. Estos sostienen que el ellos se verán obligados a recortar
modelo intervencionista estatal difi— gastos como consecuencia de la cri—
culta el control de la inflación y el sis. La austeridad en el gasto desti-
recorte de los costes de la produc- nado a políticas sociales —para mi
ción, lo cual imposibilita el aumento más necesarias que nunca en mo-
de los beneficios, que es el verdade- mentos de trabajo precario y des-
ro motor de crecimiento de la eco- empleo masivo— tendrá efectos de-
nomía capitalista. Su receta consiste vastadores entre la clase trabajado—
en dejar la regulación de la econo- ra, que verá como se pauperizan
mía a la “mano invisible“ del libre velozmente sus condiciones de vida.
mercado de Adam Smith. Es eviden- Todo ello supuso una dura resaca
te que tras estas opciones económi- tras los intensos años sesenta, que
cas hay posiciones ideológicas con- habían generado un clima contra—
trapuestas, que enfrentan un mode- cultural muy prolífico. Las moviliza-
lo social igualitario y solidario a otro ciones yla organización de toda una
individualista y asocia! (HOBS- serie de movimientos sociales con—
BAWM, 1999: 403 y ss.). testatarios había propiciado el sur-
Sin embargo, los gobiernos delos gimiento de la “nueva izquierda"
diferentes Estados no tuvieron mu— (“new left", como lo denominó
chas oportunidades de optar entre Wright Mills), que desafiaba la so-
estas dos "soluciones" frente a la ciedad existente, rechazaba la ética
crisis económica, debido a que tam— del trabajo imperante y la moral de
bién a partir de la década de los se— clase media; en suma, era portado-
tenta se inicia una “mundialización" ra de una "nueva moral".
de la economía: el “mercado mun- Entre mediados de los años seten-
dial" arrebata a los Estados el con- ta e inicios delos ochenta cambia ra—
trol unilateral de su economía. La dicalmente la situación política. En
economía mundial pasará a estar 1979 se produce la primera victoria
controlada por las multinacionales, de Margaret Thatcher en Gran Breta-
de modo que será el modelo empre- ña, y en 1981 Ronald Reagan ascien-
sarial eficientista el que triunfará fi- de al poder en EE.UU.; con ellos se
nalmente, frente al modelo de las inicia el progresivo desmantelamien—
empresas estatales y la administra- to del Estado del Bienestar y la ins—
ción pública. tauración de un capitalismo salvaje
En otras palabras, el modelo eco- en ambos Estados anglosajones.
nómico neoliberal se impone a nivel También en esos años se inicia una
de la economía mundial, a la vez ola de atentados terroristas, que ge-
que es adoptado como modelo en neran unas respuestas estatales limi-
algunos países como la Gran Breta- tadores de derechos fundamentales
ña de Thatcher y los EE.UU. de Rea- básicos, a través de la promulgación
gan —también será el modelo eco- de legislaciones antiterroristas. Asi—
24
N?
Las rriminolooías anolosaionas

mismo, empiezan a filtrarse infor- modo solucionar el problema del


maciones sobre los excesos represi- delito. Sin embargo, los intentos
vos producidos por los gobiernos de teóricos por explicar esa conexión
los países del bloque comunista. La entre pobreza y delincuencia fraca-
derrota electoral, la radicalización saron, como reconocieron varios au-
violenta de algunas posiciones de iz- tores. Pero este fracaso intelectual
quierda y la crisis del “socialismo no fue lo más grave.
real", junto a la constatación del fra- La crisis etiológica, como la deno-
caso de los movimientos sociales de mina YOUNG, se manifestó por la
los sesenta para producir un cambio vertiente empírica, ya que pese a la
revolucionario, sume a la “nueva iz- continua expansión del welfare des-
quierda" en una profunda crisis (LA— de el fin dela Segunda Guerra Mun-
RRAURI, 1991:143). dial, la tasa oficial de delitos conti-
nuó aumentando inexorablemente.
La cri_sis_ del paradigma Señala el mencionado autor que
resocual¡zador: "los salarios reales se tomaron los
nothing works más altos de la historia, las vivien-
das precarias fueron demolidas una
Los años sesenta se caracterizaron, por una, se elevó el nivel educativo,
también en el ámbito dela crimino— los servicios sociales se expandieron
logía, por un intenso y creativo des- […] y, aun así, ¡los índices del delito
arrollo, que incluyó el nacimiento continuaron ascendiendo obstina—
de la criminología crítica. damente!" (1993:7; en el mismo
El eclepticismo y la diversidad de sentido WILSON, 1985:14). Por tan—
enfoques teóricos tuvieron reflejo to, no sólo la criminología socialde—
en el ámbito de las políticas prácti- mócrata no logró explicar las causas
cas que se implementaron, sobre del delito, sino que además la peno-
todo en el campo del castigo. La crí- logía vinculada a la misma fracasó
tica a la institución carcelaria como en controlar el delito y rehabilitar
productora de reincidencia condujo (ibídem).
a una diversificación del castigo, Las explicaciones de esta anoma-
pretendiendo reducir la centralidad lía etiológica vinieron dela mano de
dela institución total. Surgen así las las corrientes alternativas a la crimi-
llamadas correcciones comunitarias, nología oficial. Autores como Albert
la derivación, la semidetención, los Cohen, Richard Cloward y Lloyd Oh-
tratamientos intermedios, los distin- Iin, y David Matza conjugaron dis—
tos tipos de “centros", etc. (COHEN, tintas tradiciones teóricas —en es—
1988:69-71). pecial la teoría del etiquetamiento,
A nivel de formulaciones teóricas, la teoría de las subculturas y la teo-
la criminología positivista del welfa— ría de la desintegración social——
re 0 socialdemócrata creía firme- para explicar este fenómeno. Esta
mente en la existencia de un nexo tradición sociológica americana
entre delito y pobreza, por lo que constituyó la base de la nueva teoría
dedicó grandes esfuerzos a comba- de la desviación en los EE.UU., y su
tir esta última, esperando de este recepción en Gran Bretaña dio ori-
25
R
N¡:
ARTÍ(ULOS DE FONDO

gen a la llamada criminología críti- partir de este artículo, la afirmación


ca. El punto de partida de estas nue- “nothing works" se convirtió en el
vas corrientes fue la crítica al positi- gran argumento del neoretribucio-
vismo y el intento de crear un para- nismo y delas posturas eficientistas.
digma alternativo al etiológico La mencionada crisis etiológica
(YOUNG, op. cit.:6-10). lleva a señalar que todas las políti-
Pero no fue la criminología crítica cas sociales dirigidas a reducir los
la que desplazó al paradigma positi- índices delictivos y de reincidencia
vista, sino que el desafío al positivis- no tuvieron los efectos esperados;
mo surgió de las mismas filas de la por el contrario, los índices delicti—
criminología oficial. Señala YOUNG vos se incrementaron. Esta consta-
que “una revolución silenciosa tuvo tación, que no todos los autores
lugar en la criminología convencio- comparten (ver PLATT/TAKAGI,
nal delos EE.UU. y Gran Bretaña. El 2001:133), lleva a los criminólogos
fallecimiento del positivismo y de las de derechas a excluir la posibilidad
vías socialdemócratas de reforma al de reducir el delito mejorando las
problema del delito ha sido rápido“ condiciones sociales. Por tanto, és-
(1993:12). La crisis etiológica dio tos rechazan las reformas sociales, a
paso dentro de la propia criminolo— la vez que afirman que las políticas
gía del establishment al abandono asistenciales han llevado a una au-
dela búsqueda delas causas del de— sencia de sentido de la responsabili-
lito y a la preocupación por el con- dad en las personas beneficiarias. Es
trol efectivo del delito. decir, según los criminólogos de de-
Ese abandono dela etiología llevó recha, el Estado asistencial, con sus
también a que se criticara duramen- políticas compasivas, ahonda las di-
te el papel desempeñado por la re- ferencias sociales al no premiar el
habilitación en la prisión. Así por esfuerzo individual y el merecimien-
ejemplo, Norval MORRIS en su libro to (así lo describe de forma crítica
El futuro de las prisiones sostiene la PEGORARO, 2001:141-160).
necesidad de reducir al mínimo el En este sentido algunos autores
recurso a la pena privativa de liber- reaccionarios como John DI IULIO
tad, reservándola tan sólo para los acusan al Estado Benefactor de
delincuentes violentos reincidentes “frustrar la formación de la familia",
(1987). Pero en realidad se criticaba a la que consideran el pilar dela so-
todo el sistema penológico y crimi- ciedad. Las políticas asistenciales a
nológico del welfare, del que se las madres solteras fomentan el na-
predicaba que "nada funciona“, cimiento de hijos extramatrimonia-
como concluía el influyente trabajo les, que carecerán del cuidado nece—
de MARTINSON llamado “What sario propio de una “familia decen—
works? Questions and answers te". Estas son sus palabras: "Gracias
about prisons reform". Este autor a la disolución de la familia, nadie
sostenía que, con pocas excepcio- les ha impartido a estos individuos
nes, los esfuerzos rehabilitadores no las normas de una vida civilizada, ni
han tenido efectos apreciables so- siquiera las básicas, de respeto a sus
bre la reincidencia (1974: 24-25). A pares y a las autoridades, de supe-
26
'*<7º
Las rriminolnnias anglosainnas

ración personal, de trabajo duro y cias sustanciales, que van desde po-
otros valores de clase media" (2001: siciones liberales, a enfoques conser—
81). De esta disolución del pilar fun- vadores y hasta planteamientos ul-
damental de la sociedad este autor trarreaccionarios (como es el caso de
extrae la consecuencia que la próxi- Di Iulio).
ma generación de delincuentes ju- Una figura clave en este proceso
veniles será especialmente violenta, de transformación de la criminolo—
predatoria y perversa. Y la solución gía positivista en una criminología
que propone para estos jóvenes de- administrativa o tecnocrática ha
lincuentes, mayoritariamente ne— sido James Q. Wilson, conocido tan-
gros, es el internamiento en "insti- to por su libro Thinking About Cri—
tuciones residenciales, privadas, ba- me, publicado en 1975, como por
sadas en una iglesia, a cargo de ser asesor de la Administración Rea—
hombres y mujeres negros integran- gan. Pero además delos que partici-
tes de la gran población negra ur- pan directamente en el diseño de
bana que paga impuestos, trabaja las políticas penales asesorando a
duro, profesa su culto con fe y cría los gobiernos de turno, los criminó-
buenos niños. Pienso en ellos como logos de derechas han tenido mu—
un 'kibutz negro urbano'", dice este cha influencia en la política legislati-
autor (DI IULIO, 2001: 82-83). va, ya que sus postulados son muy
funcionales para el control penal de
El_as_censo de la las cada vez más excluyentes socie-
_crrmmologra de la dades actuales.
mtolerancua El rasgo común más destacable de
los criminólogos de la intolerancia
En los años setenta aparecen, enton- es su desinterés por las causas del
ces, muchas voces críticas hacia la delito, por considerar que supone
rehabilitación, tanto por su inutili- una pérdida de tiempo sin aplica-
dad en cuanto al cumplimiento de su ción práctica para el control del cri-
objetivo de reinserción, como por ser men. En este sentido, señala WIL-
muy benevolente con el delincuente SON que el hecho de conocer las
y carecer de eficacia preventivo-ge— causas del delito no suministra a los
neral. Las críticas a la pena rehabili- políticos elementos prácticos para
tadora y a la criminología etiológica reducir los índices de criminalidad.
del welfare tendrían consecuencias Para ello hay que partir de una pers-
nefastas. La voz de alarma la dieron pectiva diferente, no hay que pre-
Tony PLATT y Paul TAKAGI en su artí- guntarse por la "causa" del proble-
culo de 1978 “Intelectua/s for Law ma, sino por los instrumentos que
and Order", en el que ya señalan la pueden modificar sus efectos: “se
existencia de una nueva escuela de puede disuadir a un delincuente in-
pensamiento conservador, entre los crementando los costes o reducien-
que mencionan a James Q. Wilson, do Ios beneficios del delito, pero
Ernest van den Haag, Norval Morris, esta estrategia no aborda para nada
entre otros (2001). Sin embargo, en- las 'causas' de la criminalidad“, dice
tre los distintos autores hay diferen- este autor (1985:48).

27
R
*;
ARTÍ(ULOS DE FOND(L

A pesar del general desinterés por su orientación clasista y racista, has-


las causas del delito, también desta- ta el punto de que fueron prohibi-
can algunas tendencias "neopositi- dos por el Tribunal Supremo de los
vistas", que hacen hincapié en cier— Estados Unidos, como reconocen
tas disfunciones biológicas o psico- los mismos autores del libro.
lógicas del sujeto, a la vez que Por otro lado, hay que señalar que
resaltan su libre albedrío. Las postu- este neopositivismo se queda en
ras que más han proliferado son las una causalidad del delito totalmen—
que destacan el deficiente coeficien- te superficial, que deja fuera del
te intelectual de los delincuentes, análisis la consideración de la es-
que explicaría la falta de voluntad y tructura social. Es decir, se respon—
la debilidad moral de los que caen sabiliza al sujeto individual de sus
en el delito. Entre éstas, ha genera— actos por muchas “carencias" que
do especial polémica por sus afir- tenga, eximiendo por completo de
maciones racistas y fascistas el libro responsabilidad en el delito al orden
publicado en 1994 por Charles MU- social (LEA/YOUNG, 2001:7—8).
RRAY y Richard HERRNSTEIN, The Otro rasgo característico de los
Bell Curve: Intelligence and Class criminólogos de la intolerancia es
Structure in American Life, que se- que centran casi exclusivamente el
ñala que las causas del delito no hay problema del delito en el crimen ca-
que buscarlas en condicionantes so— llejero (street crime), alegando que
ciales, sino en el bajo coeficiente in- son éstos los que preocupan a la
telectual de los delincuentes. Es de- ciudadanía y destruyen la conviven-
cir, estos autores sostienen que los cia social. En este sentido señala
delincuentes tienen un coeficiente WILSON que "el delito rapaz no pro-
intelectual inferior al dela media de duce simplemente víctimas indivi-
la sociedad, y que esta relación en- duales, sino que además impide la
tre coeficiente intelectual y crimina- formación y el mantenimiento de la
lidad se acentúa en el caso de delin- comunidad. Al interrumpir los deli-
cuentes reincidentes (1994:235- cados lazos, tanto formales como
251). Asimismo, afirman que existe informales, que nos vinculan con
una diferencia entre el coeficiente nuestros vecinos, el crimen atomiza
intelectual de la población blanca y la sociedad y convierte a sus miem-
la negra, diferencia que podría ex- bros en individuos calculadores que
plicar el surgimiento de la under- sólo miran por su propio beneficio"
class, ya que estos autores atribu- (1985:26).
yen todos los problemas sociales al Por ello, estos criminólogos seña-
bajo coeficiente intelectual y nunca lan que es necesario concentrar los
a la estructura social de las socieda- esfuerzos en reducir el crimen calle-
des contemporáneas (op. cit.:269- jero. Una propuesta en este sentido
340). De más está decir que este Ii- es el conocido artículo de WILSON y
bro no tiene ningún rigor científico, KELLING titulado “Ventanas rotas",
debido a que los tests de inteligen— en el que sostienen la necesidad de
cia hace ya muchos años que han perseguir las más pequeñas incivili-
sido desacreditados al comprobarse dades callejeras, debido a que éstas
28
N?
Las rriminolonías an9losainnas

son el punto de partida de un mayor res que los causados por el delito
deterioro en los barrios. Ello lo callejero. Además, este último no
ejemplifican con la metáfora de las puede "ser puesto aparte del proce-
"ventanas rotas": "si una ventana so histórico que marginaliza millo-
de un edificio está rota y se deja sin nes de individuos lanzándolos al
reparar, el resto de las ventanas se— desempleo o al callejón sin salida de
rán rotas pronto [...] porque una los 'sin trabajo'“ (op. cit.:132).
ventana sin reparar es señal de que Como se ha mencionado más arri—
a nadie le preocupa, por lo tanto ba, también es común entre los cri-
romper más ventanas no tiene costo minólogos de derecha el abandono
alguno" (2001:69). Para evitar ese del objetivo rehabilitador, ya que
deterioro, sostienen, un buen recur- sólo sirve para excusar el crimen y di-
so consiste en sacar a la policía fue- luir el sentido de la responsabilidad,
ra de sus patrulleros y hacer que pa- que se traslada del criminal a la so-
trullen los barrios a pie, ya que de ciedad. Andrew VON HIRSCH es par-
este modo se eleva el nivel de orden tidario de limitar la indeterminación
público en esos barrios. Esta policía de las sentencias como consecuencia
no tendría tanto la finalidad de per- del objetivo rehabilitador; para este
seguir delitos, sino que más bien le autor neoretribucionista, si la pena
correspondería combatir las con- sejustifica, es por su merecimiento y
ductas desordenadas o antisociales ya no por la idea de utilidad (1998).
como el vagabundeo, la mendici- Por su parte, LOGAN señala que las
dad, Ia prostitución, etc. (op. instituciones que apuntan a la reha-
cit.:67-79; KELLING, 2001:87—89). bilitación suelen transmitir un men-
De esta teoría de las "ventanas ro- saje confuso, en el sentido de que
tas" se deriva la técnica de policía "los delitos son el resultado de defi-
intensiva conocida como "tolerancia ciencias sociales y personales (de
cero", que se implantó en Nueva oportunidad, conocimiento, habili-
York durante el gobierno de Rudolf dades, hábitos, temperamentos,
Giuliani —su impulsor fue William etc.), y de que la sociedad tiene la
Bratton, jefe de la policía munici- responsabilidad de corregir esas de-
pal— y que se ha propagado a tra- ficiencias". Para este autor hay que
vés del planeta a una velocidad ful- dejar claro que el encarcelamiento es
minante (WACQUANT, 2000:24-40). un castigo por un acto humano vo—
Así pues, es en la calle donde los luntario (2001 :110-112).
criminólogos de derecha pretenden Los criminólogos dela intolerancia
dar la batalla contra el delito, olvi- sustituyen el objetivo rehabilitador
dando que también los poderosos por una búsqueda de eficacia en el
cometen delitos. Como señalan control del delito (FEELEY y SIMON,
PLATT y TAKAGI, pese a que es cier- 1995: 33-39); es decir, pretenden
to que el crimen convencional des- hacer más dificultosa la comisión de
valoriza la calidad de vida de la cla- determinados delitos —especial-
se trabajadora, también los "delitos mente los que atentan contra la pro-
de cuello blanco" causan elevadísi- piedad— e incrementar el riesgo de
mos daños, que pueden ser mayo- ser capturado y castigado. Empiezan
29
J
N:.
ARTÍ(ULOS DE FONDO

a tomarse en consideración los lla- También para lograr el objetivo


mados “factores situacionales" o la eficientista en el control del delito,
denominada “prevención situacio- un elemento clave será el incremen-
nal", que consiste en poner trabas a to dela efectividad policial. La insti-
la comisión de delitos. Y la tecnolo- tución policial asumirá un nuevo rol
gia se pondrá al servicio de esta más activo, que incluye la atribución
“prevención situacional". de funciones de regulación dela co-
También se recurrirá a la estadísti- munidad, en estrecha colaboración
ca y a las técnicas actuariales de ges— con ésta (WILSON, 1985:61-114). Es
tión de riesgos, con la finalidad de decir, se apela a la comunidad para
cuantificar el riesgo criminal y poder preservar la seguridad ciudadana,
asegurarle. Es decir, el riesgo se como ponen de manifiesto las expe-
transforma en dinero y se convierte riencias de Neighborhood Watch —
en el preciado objeto delas asegura- especialmente difundidas en Esta—
doras (DE GIORGI, 2000:36-48). Se dos Unidos y Gran Bretaña—, que
abre de este modo un suculento consisten en implicar al vecindario
mercado de la seguridad, que inclu— en la actividad de vigilancia, reali-
ye desde Ia producción de dispositi- zando rondas ciudadanas y denun-
vos de control domésticos (alarmas, ciando a la policía toda persona o
sistemas de videovigilancia, disposi- comportamiento sospechoso (DE
tivos de “autodefensa", etc.) hasta la GIORGI, 2000:47).
creación de empresas dedicadas a la A nivel de políticas penológicas
construcción y gestión de prisiones. concretas, esta criminología de la
La creación de cárceles privadas es intolerancia se ha manifestado en la
defendida por muchos autores, ya reintroducción de la pena de muer—
que esta opción conjuga su afán de te en 40 Estados norteamericanos
castigar con sus planteamientos —un acérrimo defensor de la misma
económicos neoliberales. En este lo encontramos en DI IULIO (2001:
sentido, LOGAN sostiene que "una 97—98)—, en las políticas de incapa-
creciente cantidad de investigacio- citación o neutralización (como la
nes demuestran que estas prisiones conocida ley Three strikes and you
privadas ahorran dinero, mejoran la are out), así como en el estableci-
calidad y protegen los derechos de miento de un modelo de orden pú-
los internos, y que no producen pro- blico que persigue cualquier intento
blemas distintos a los que enfrentan de ruptura del mismo.
las operadas por el gobierno" Los defensores de la incapacita-
(2001:10—112). Debe ser cierto que ción señalan que la mayoría de los
las cárceles privadas ahorran dinero delitos son cometidos por unos
—o más bien lo generan—, porque cuantos criminales reincidentes, de
este mercado ha alcanzado tal ex- manera quelo que hay que hacer es
pansión que las empresas dedicadas sacarlos de circulación encerrándo-
al mismo cotizan sus acciones en la los en la cárcel durante largos perio-
bolsa. Se va conformando de este dos de tiempo. En este sentido, sos-
modo una próspera "industria del tiene por ejemplo LEVITT que poner
control del delito" (CHRISTIE, 1993). otros “100.000 delincuentes más
30
“<?
Las criminoloofas anolosaionas

tras las rejas muy probablemente re- un nuevo delito de robo de arma de
duciría la tasa de delitos violentos fuego (2001: 95-96). La propuesta de
en un 10%" (2001:107-108). controlar la tenencia ilícita de armas
A estos experimentos de neutrali— es compartida por la mayoría de cri-
zación colectiva (se encierra a am— minólogos de derecha, quienes por
plias categorías de personas) o se- otra parte muestran un rotundo re—
lectiva (se intenta determinar me- chazo al establecimiento de límites a
diante estudios predictivos quiénes la tenencia de armas por parte de la
serán los individuos con alto riesgo gente "obediente a la ley", ya que
de reincidencia) se les critica la im- consideran que las mismas son fun-
posibilidad de predecir quién come— damentales para la autodefensa fren-
terá delitos en el futuro. Tal imposi- te al delito (WILSON, 2001: 89-91;
bilidad plantea dos problemas: el KOPEL, 2001: 92-94).
llamado falso negativo, es decir, no Hay una desconfianza en torno a
condenar a sujetos con alto riesgo la capacidad del Estado de defender
de reincidencia; y el problema del del delito a sus ciudadanos. Por ello
falso positivo, consistente en conde- muchos autores abogan porla auto-
nar a sujetos con bajo riesgo de defensa y por la tenencia legítima de
reincidencia. En la práctica, señala armas. Quizá el máximo exponente
MATHIESEN que para dar eficacia a de esta postura sea SNYDER. Sus pa-
tales políticas, se incurre en el falso labras producen escalofríos: ”La no-
positivo, de modo que se encarcela ción de que los ciudadanos deben
a un gran número de individuos que dejar que el crimen sea manejado
no habrían cometido nunca otros por el Estado, y no deben resistir
delitos (1996:113-134). personalmente, es una monstruosa
La regla Three strikes and you're colaboración a la conducta inmoral
out ordena la prisión perpetua para [...]. Decir que las víctimas deberían
las personas que sean condenadas cooperar porque ninguna billetera o
por tercera vez por un delito grave, automóvil vale una vida, es raciona-
sin excepciones, y constituye una lizar la cobardía moral [...]. Su bille-
plasmación de estas políticas de inca- tera o su automóvil a lo mejor no va-
pacitación. Esta regla se instituyó por len su vida, es verdad, pero su liber-
primera vez en el Estado de Washing- tad y su dignidad sí [...]. El crimen
ton a través de una iniciativa popular. violento florece, en buena medida,
Sin embargo, su surgimiento no fue porque cada uno de nosotros se re-
tan espontáneo entre los residentes husa a condenar al criminal violento
de Washington, sino que tras esta ¡ni- con nuestras acciones en el preciso
ciativa podemos ver la sombra de los momento en que esa condena se re-
criminólogos de la intolerancia como quiere [...]. Los criminales manten-
John CARLSON. Este autor también drán el control hasta que aprenda-
es el instigador de otro proyecto le- mos y enseñemos que combatir el
gislativo denominado "tiempos du- delito es responsabilidad de todos“
ros para el delito armado", que persi- (2001:116-117).
gue Ia obtención y el uso de armas Las consecuencias inmediatas de
ilegalmente, mediante la creación de la implementación de todas estas
31
¡
Nrº.
ARTÍCULOS DE FONDO

políticas diseñadas por los criminó— Señala YOUNG quela nueva teoría
logos de la intolerancia son un ex- de la desviación de los años sesenta
ponencial crecimiento de los índices centró su atención fundamental—
de encarcelamiento. En los Estados mente en la desviación expresiva y
Unidos, en 1975, la población reclu- en los "delitos sin víctimas" (uso de
sa era de 380.000 personas, diez marihuana, prostitución), y por ello
años más tarde el número de presos abogó por la no intervención, ya
había llegado a 740.000, para supe- que en estos casos el control del de-
rar el millón y medio en 1995 y ro- lito no era más que una interferen-
zar los dos millones a fines de 1998 cia innecesaria en la libertad indivi—
(que supone un índice de encarcela- dual (1977:98). Pero la nueva teoría
mientos de 650 por cada 100.000 de la desviación tampoco tenía nin—
habitantes), con un crecimiento guna propuesta práctica alternativa
anual promedio de casi el ocho por frente a otro tipo de delitos, como
ciento durante la década de los no- los delitos contra las personas y
venta. Si a ello se le añaden las ci- contra la propiedad. Por ello señala
fras de las personas condenadas a YOUNG que los teóricos de los se-
prisión en suspenso (probatíon) y senta no se tomaron en serio el pro-
las puestas en libertad condicional blema del delito, que en muchos ca-
(parole), se concluye que alrededor sos si tiene víctimas que sufren sus
de 5,7 millones de personas se en- efectos. Además, indica este autor,
cuentran bajo control penal (WAC- la imagen idealizada del delincuente
QUANT, 2000:88—93). propia de estos teóricos no se ade—
cua a la realidad, ya que a menudo
La formulación de éste actúa contra los intereses de
un modelo político clase: "es un hecho que la mayor
alternativo: el parte de los delitos de la clase tra-
realismo radical bajadora se comete dentro dela cla-
(a de Izquierdas) se y no entre clases" (op. cit.:111).
Frente a esta constatación, YOUNG
En contraposición teórica con ese se propone desarrollar una crimino-
modelo criminológico de derechas, logía de la clase obrera que se tome
surge también en el área anglosajo- en serio el problema del delito. Si es
na una perspectiva criminológica y cierto que el crimen callejero provo-
de política criminal heredera de los ca sufrimiento humano y desastre
postulados izquierdistas de los se— personal, hay que abogar por algún
senta. Se suele hablar de realismo tipo de control social; pero ese con-
radical 0 de izquierdas a partir dela trol del crimen callejero sólo puede
publicación, en 1975, del artículo de lograrse con efectividad por la pro—
lock YOUNG “Criminología dela cla- pia comunidad inmediatamente in-
se obrera". En éste YOUNG inicia volucrada, sin necesidad de organis-
una modificación de las posturas mos policíacos externos ni de nuevas
que había sostenido durante los cárceles (op. cit.:124).
años sesenta, calificándolas de “ro- En el artículo mencionado se pue—
mánticas" e "idealistas". den ya entrever algunos presupues-
32
“<?
Las criminolom'as amlosaionas

tos de la criminología realista de iz- mo de izquierdas consiste en "rela-


quierdas. Pero es a partir de la publi- cionar correctamente el delito, el
cación en 1984 del libro de Jock sistema de justicia criminal y la so-
YOUNG y John LEA ¿Qué hacer conla ciedad, ser realista en oposición al
Ieyy el orden?, que el realismo de iz— idealismo de izquierda, ser radical
quierdas se consolida. Estos autores en oposición a la criminología tradi—
señalan quela ausencia de un discur- cional" (2001 :8). Por ello estudian el
so radical dela izquierda sobre el de— delito con realismo y lo descompo-
lito y sobre cómo controlarlo deja el ne en los cuatro elementos funda—
camino libre a la proliferación de los mentales que lo integran (y que re-
discursos de "ley y orden" conserva- ciben el nombre de “el cuadrado del
dores y al triunfo de una criminología delito“): víctima, delincuente, con-
de derechas abiertamente represiva. trol formal y control informal. El
Para hacerle frente es necesario ela- cuadrado del delito implica la inter-
borar una criminología realista de iz- acción entre la policía y otros orga-
quierdas (2001). nismos de control social, la socie-
Este realismo que proponen es de dad, el delincuente y la víctima. De
izquierdas o "radical en la evalua— las relaciones entre estos distintos
ción que hace del delito y de sus elementos dependen los índices de
causas [...], el delito es visto como criminalidad (ídem:9).
un producto endémico dela natura— El realismo de izquierdas también
leza patriarcal y de clases de las so— se detendrá a analizar las causas del
ciedades industriales avanzadas“ delito, en oposición a la criminolo-
(LEA/YOUNG:ZOO1:5); por tanto, el gía de derechas, que hemos visto
delito no es producto de una pato- que muestra desinterés por las mis-
logía individual que pueda ser trata- mas. LEA y YOUNG se distancian de
da y de este modo eliminada del la criminología positivista socialde-
cuerpo social, sino que el delito es mócrata al considerar que la priva-
producto del funcionamiento nor- ción absoluta, el determinismo total
mal de la propia sociedad. Por otro yla causalidad mecanicista son con-
lado, es realista porque se toma en ceptos erróneos para estudiar las
serio el problema del delito, recono- causas del delito. La crisis etiológica
ce que es un problema real para un puso de manifiesto la imposibilidad
sector importante de la población, de demostrar que la privación abso—
precisamente el más vulnerable: luta (falta de empleo, de vivienda
mujeres, clase trabajadora, minorías digna, de educación formal, etc.)
étnicas (ibídem). Estos temas son conduzca automáticamente a la co-
tratados especificamente en el libro misión de delitos. En cambio, estos
editado por Roger MATTHEWS y autores señalan —siguiendo a Ro-
lock YOUNG, Confrontíng Crime bert Merton— a la "privación relati-
(1986). va", en ciertas situaciones, como la
LEA y YOUNG señalan que frente a principal causa del delito, enten-
la desconexión entre “delito" y "so- diendo por privación relativa una in—
ciedad" realizada por la criminolo— justa distribución de recursos expe-
gía de derechas, la tarea del realis- rimentada por la persona, que da
33
R
Y.
ARTÍ(UI os DE FONDO

lugar a una “solución" individualis- dades sociales (ya que tal desigual-
ta, que se concreta en el delito. La dad es lo que genera la privación re-
ventaja del concepto de privación lativa, principal causa del delito, se-
relativa es que sirve para explicar los gún ellos). Pero señalan que tam-
delitos de las sociedades opulentas bién es necesario diseñar políticas
y, por otro lado, tal explicación del que reduzcan el impacto del delito a
delito lo sitúa en todas las capas so- corto plazo, para de este modo po-
ciales, alejándose dela idea según la der competir con las campañas de
cual el delito es monopolio de las "ley y orden" lideradas por la dere-
clases bajas. De este modo también cha (2001:14-19).
se opone a la criminología de dere- Además, los realistas de izquierda
chas, que se ocupa en exclusiva del son conscientes de que los delitos
"delito callejero". En cambio, el rea- afectan en mayor medida a las cla—
lismo radical se ocupa tanto de los ses trabajadoras, que son las más
delitos de la calle como de los deli- vulnerables al mismo. Es decir, cons-
tos de los poderosos (2001 :1 1—14). tatan que el delito se produce ma—
Por otra parte, el realismo de iz- yoritariamente dentro de la misma
quierdas pretende combatir el im- clase social, son intra-clase y intra—
posibilismo del "nada funciona", raza, y no inter—clases como sugería
sostenido tanto por las posiciones el idealismo de los años sesenta.
idealistas de izquierdas delos seten- Para ellos, hay que abandonar la vi—
ta como por la criminología de de- sión del delincuente como un mo-
rechas. Señala MATTHEWS que re- derno "Robin Hood", el delincuente
chazar la posibilidad de la reforma no roba a los ricos para dárselo a los
penal no supone adoptar una posi- pobres, no desafía las relaciones de
ción de neutralidad, sino más bien propiedad, sino que sus actos son
dar apoyo —aunque sea por omi- expresión de los mismos valores de
sión— a la ascendente criminología la sociedad capitalista. Esta imagen
dela intolerancia (1987:85-91). Para no implica olvidarse de los delitos
LEA y YOUNG es necesario observar de los poderosos, que también afec-
qué es lo que funciona y qué no en tan fundamentalmente a la clase
el sistema de justicia criminal. Y a trabajadora. Más bien el realismo de
partir de ello diseñar una estrategia izquierdas subraya que la clase tra-
de intervención en el control del de- bajadora es víctima de los delitos
lito que tenga en cuenta todos los provenientes de todas las direccio-
niveles: las causas del delito, el con— nes (YOUNG, 1993:28-39). Por ello
trol social ejercido porla comunidad hay que tomarse en serio el proble—
y por las instituciones y la situación ma del delito y diseñar políticas con—
de la víctima. Estos autores puntua— cretas para reducir su impacto en la
lizan que el sistema de justicia cri- clase trabajadora, que esla que más
minal no puede ser la forma princi- sufre sus efectos. Pero reconoce
pal de control del delito, sino quela YOUNG que "ser realistas respecto
prevención debe venir fundamental- del delito como problema no es una
mente de la aplicación de políticas tarea fácil“ (1993:28).
sociales que reduzcan las desigual— Según sus propios ideólogos prin-
34
v
Las criminolonías anglosaionas

cipales, el realismo radical se sitúa de competir en términos de políticas


entre el polo del idealismo de ¡2— prácticas con la criminología de de-
quierdas y el polo dela criminología rechas. Hay que buscar soluciones al
de derechas: no debe sucumbir a la problema del delito partiendo de
histeria dela inseguridad y el miedo una política socialista, que tenga en
alentadas por las campañas de "ley cuenta la naturaleza política del deli—
y orden", pero tampoco subestimar to y su vinculación estructural con el
el problema del delito. En este sen- orden social (1993z5-39).
tido, también plantean el debate El realismo de izquierdas se invo-
con los abolicionistas. El realismo de lucra de esta manera en el diseño de
izquierdas, en suma, “debe ser in- políticas criminales. Ello le ha valido
tensamente escéptico respecto a las multitud de críticas, sobre todo en
estadísticas e instituciones de con— sus inicios. Sus compañeros de viaje
trol oficiales, sin tomar la postura de la criminología crítica considera-
de rechazo general a todas las cifras ron casi una traición que abandona-
o a la posibilidad misma de refor- sen el terreno de la crítica sociológi—
ma" (YOUNG, 1993:30). ca y pasaran a un nivel propositivo.
Por tanto, lo que se propone el Sin embargo, aunque no se compar-
realismo radical es diseñar un pro— tan sus postulados, hay que recono-
grama de izquierdas sobre el control cer a los realistas de izquierda que
del delito. Para tal fin, es necesario esa opción política concreta —que
trabajar a nivel teórico, a nivel de in- siempre somete sus resultados a las
vestigaciones empíricas y a nivel de posibilidades del error y del fracaso,
políticas concretas. En el nivel acadé- como ellos mismos reconocen (MAT-
mico, hay que desarrollar trabajos THEWS, 1987:85-86)— y las pro-
empíricos que estén bien fundamen- puestas que formulan se han adop-
tados a nivel teórico, para romper la tado desde un sólido compromiso
tendencia actual de un empiricismo con la izquierda y con el objetivo de
a-teórico. Y en términos de políticas hacer frente a las nefastas propues-
prácticas, dice YOUNG, debemos tas político-criminales de la crimino-
combatir el imposibilismo: es tiempo logía de la intolerancia.

BIBILOGRAFÍA: control de! delito. ¿La nueva forma de


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35
N
x:.
ARTÍCULOS DE FONDO

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36
235 muúmco
“<?!
Manifiesto
No a la (outra—reforma
penal, nrocesal.
Denitenziaria
I clima de alarma social que se no han sido juzgadas, se instauran
viene potenciando desde hace los juicios rápidos que hacen prácti-
tiempo no favorece en absolu— camente imposible la preparación
to que podamos reflexionar con se— de la defensa, se aumentan las con-
renidad sobre la “inseguridad ciuda- denas para las pequeñas infraccio-
dana" y mucho menos buscar sus nes y para los reincidentes, y se difi—
raíces, para poder abordarla de la culta la utilización de formas de
mejor manera posible. Todo lo con- cumplimiento de pena que implican
trario, el Gobierno reduce práctica- salidas de prisión, como puede ser
mente Ia cuestión de la seguridad el cumplimiento en centro de trata—
delos ciudadanos al problema dela miento de drogodependencias o la
pequeña delincuencia, y por ello salida en tercer grado para trabajar.
pone en marcha medidas como el El denominador común de todas
"Plan de Lucha contra la Delin- estas reformas es la vuelta a la
cuencia", desde el que se propone pena de prisión como única solu-
un derecho penal y penitenciario ción para los conflictos sociales y,
basado en el castigo a la persona por tanto, la confianza absoluta en
que ha cometido el delito, sin que la contundencia del castigo, por en-
esto sirva para prevenir futuros cima de la finalidad de reeducación
delitos, facilitar la incorporación y reinserción social que deben tener
social de la persona, ni tampoco las penas privativas de libertad se-
para reparar el daño realizado a la gún establece la Constitución Espa-
víctima. ñola, olvidando asimismo otros de—
Este Plan modifica entre otros tex- rechos fundamentales, como el de-
tos Iegales, el Código Penal, la Ley recho a una defensa con garantías
Orgánica General Penitenciaria, la y/o a la presunción de inocencia.
Ley de Enjuiciamiento Criminal y la El perfil del pequeño delincuente
Ley Orgánica del Poder Judicial. Con es el de una persona con graves di-
dichas reformas se generaliza el uso ficultades sociales, familiares y per-
dela prisión para personas que aún sonales, que enla mayoría delos ca-
39
)! MOVIMIENTOS SO(TAI EG
*s
sos comete un delito motivada por porar socialmente a quienes se han
su adicción. Estas personas son las podido beneficiar de ellas.
que, en un ochenta por ciento, lle- Estamos convencidos que una
nan las prisiones en España. verdadera justicia, que prevenga la
Creemos que, si lo que realmente exclusión social y el delito y que ga-
se pretende es proteger la seguri- rantice la seguridad de todos los
dad ciudadana, esto no se consigue ciudadanos, sólo es posible invir-
con una mayor aplicación de la pri- tiendo para que en nuestros barrios
sión, sino todo lo contrario, y así lo y pueblos se desarrollen políticas
afirma el propio Ministerio del In- sociales, educativas y laborales ade—
terior en un informe del año 2001 cuadas, utilizando alternativas a la
(Estudios e investigaciones de la prisión de tipo terapéutico, extendien-
Central Penitenciaría de Observa- do medidas sociosanitarias que ya se
ción, Ministerio del Interior, 2001), han mostrado útiles en la prevención
en el que señala que a mayor dure- del delito (por ejemplo el programa
za y duración de la pena de prisión, de metadona) y, en general, otras me-
más reincidencia: "todas las medi— didas dirigidas a terminar con la ex—
das que influyen en condiciones clusión social y la pobreza que, en la
más suaves de cumplimiento como mayoría de los casos, son la causa de
reducciones de condena, participa- la delincuencia.
ción en actividades y programas de Curiosamente, el Estado español
tratamiento, clasificación en tercer está a la cabeza de los países que
grado, permisos de salida, etc., re- menos gastan en protección social
sultan ser causa de una menor rein- según el último informe de Euros—
cidencia". Por ello, en este mismo tat, coincidiendo con que en los paí—
informe, la Central Penitenciaria de ses donde el gasto social es mayor,
Observación aconseja que "si real- el nivel de delitos disminuye. Las
mente queremos defendernos de personas y entidades que se adhie-
nuevos delitos, el camino no parece ren a este Manifiesto muestran su
ser el endurecimiento delas penas y disconformidad por el carácter re-
de las condiciones de cumplimien- presivo de las reformas legislativas
to". De hecho, no se ha realizado que se están poniendo en marcha, y
una exí5luación dela aplicación de apuestan por la justicia social como
las medidas alternativas a la pri- el mejor camino para la seguridad.
sión contempladas en el Código Pe-
nal de 1995 y en el Reglamento Pe- Remitir: nombre de la persona o
nitenciario que permita concluir asociación, DNI/CIF, domicilio de la
que éstas no han servido para evi- asociación, y firma o sello a:
tar la reincidencia y que es necesa-
rio un endurecimiento general del Federación Andaluza de Drogode-
Código Penal. Sin embargo, en las pendencias y Sida - ENLACE
escasas ocasiones en las que se han C/ Marqués de Pickman, 49,
aplicado, son muchas las personas y Planta 2“, 41005 Sevilla
asociaciones que dan testimonio e-mail: f—enlace©f-enlace.org
real de que han servido para incor- Fax: 95 457 55 36
40
R?
Acompañando a la contra-reforma...

España: yqqguardia europea


en la edrlma carcelaria
gencias/La Haine. 29/07/03.— parte destinada a la construcción,
El ministro del Interior, Án— unos 50.000.
gel Acebes, anunció ayer la
inversión de 252 millones de euros Vanguardia europea
para la construcción de cuatro nue-
vas prisiones en Puerto de Santa Acebes remarcó que en siete años se
María (Cádiz), Morón de la Frontera “ha dado un vuelco" a la política de
(Sevilla), Albocasser (Castellón) y Es- infraestructuras penitenciarias con
tremera (Madrid), que en 2005 con- la inauguración desde 1996 de 13
tarán con 4.032 celdas, en total. nuevos centros penitenciarios y la
Acebes anunció, además, que es- apertura de 10.027 plazas netas pe-
tos nuevos proyectos se comple- nitenciarias, y ha subrayado que en
mentarán en los próximos dos años la actualidad más de la mitad de la
con un incremento de funcionarios población reclusa dependiente de
de prisiones. En la actualidad, son Instituciones Penitenciarias está alo-
18.000 los funcionarios y 2.000 jada en cárceles construidas en los
miembros pertenecientes a personal últimos diez años.
laboral. Esta situación coloca a España, se—
Estas cuatro cárceles tendrán gún el ministro, "en una línea de
avanzados sistemas de seguridad — vanguardia europea", con una po-
perimetral e interior— y dispon- blación reclusa de 53.385 personas,
drán, cada una, de 1.008 plazas so- según las últimas cifras disponibles
bre una superficie construida de para 2003.
90.000 metros cuadrados. Acebes firma convenio para refor-
Además, según explicó el minis- zar colaboración entre Policía Nacio—
tro, quien compareció junto a la nal y Local en Jaén.
subsecretaria de Interior, María Do- Mucho trabajo tiene el ministro de
lores de Cospedal, y el director de Interior, Ángel Acebes, quien por
Instituciones Penitenciarias, Ángel otro lado firmará hoy con el alcalde
Yuste, las cuatro nuevas prisiones de Jaén, Miguel Sánchez de Alcázar,
contarán con 4.032 nuevas plazas un convenio marco que tiene como
carcelarias, a las que hay que añadir objetivo el desarrollo y aplicación de
otras 288 para ingresos, salidas y medidas para "reforzar la colabora-
tránsitos. Además dispondrán de ción y coordinación entre el Cuerpo
256 camas de enfermería (64 cada Nacional de Policía yla Policía Local".
una) y de 144 plazas de aislamiento.
En cada una delas prisiones se in-
vertirán 63.192 millones, la mayor
41
R
Y.
MOVIMIENTOS SOCIAL ES

(rónira_de prensa _de_ las


denuncias de Ammstra
Internacional
Amnistía Internacional ha publicado Amnistía Internacional denuncia que la
su informe sobre el año 2002 guerra antiterrorista ha creado un mun—
do más peligroso
La parte correspondiente a España po- Asegura que desde el 11-S se ha restrin-
déis verla en la página del CDDT: gido el ejercicio de derechos humanos y
http://www.nodoSO.org/informes/am- socavado el imperio del derecho interna-
nistía/InformeEspanaAl-2003.html cional
http://lavanguardia.es
Las noticias publicadas hasta ahora en la
prensa: El Periódico de Cataluña, 28 de mayo
de 2003
Yahoo Noticias, 28 de mayo de 2003 Amnistía Internacional denuncia los
Amnistía expresa un año más su preocu- atentados mortales cometidos por ETA
pación por las denuncias de malos tratos en el 2002
por motivos racistas en España http://www.elperiodico.com/default.asp
http://es.news.yahoo.com/030528/4/2r5 ?idpublicacio_PK=6&idioma=€A$&id-
22.html noticia_PK=48809&idseccio_PK=174&h
=030528
Gara, 28 de mayo de 2003
Al recoge en su informe anual la existen— El Mundo, 28 de mayo de 2003
cia de <<numerosas denuncias de tortu- Informe anual de la organización
ras» en régimen de incomunicación AI ha documentado 322 casos de tortu-
httpz//www.gara.net/azkenak/orriak/art6 ras en España desde 1995
4277.php Denuncia la utilización del terrorismo
como excusa para recortar los derechos
La Mal/a, 28 de mayo de 2003 fundamentales
Presentat |'Informe Anual 2003 http://www.elmundo.es/elmundo-
Amnistia Internacional denuncia tortures /2003/05/28/50lidaridad/1054123552.htm|
en Catalunya
http://www.lamalla.netjcanal/drets_hu- Crónica Amnistía (2)
mans/noticies/article.asp?id=132731 Al denuncia que para millones de per-
sonas la verdadera inseguridad viene del
La Vanguardia, 28 de mayo de 2003 sistema policial (En/aweb: internacional)
Entrevista: Esteban Beltrán director de
Amnistía Internacional España Amnistia Internacional denuncia los
"En España también hay tortura" atentados mortales cometidos por ETA
http:/Iwww.periodistadigital.com/ob- en 2002 (El Diario Montañés: España)
ject.php?o=12925
http://www.lavanguardia.es Amnistia Internacional denuncia los
atentados mortales cometidos por ETA
La Vanguardia, 28 de mayo de 2003 en 2002 (El Diario Vasco: España)
42
N?
(INFORMAN DESDE GALICIA)

Sida +gá'rcel :o… ¡le muerte


lámb¡en numa mas!…
Fran del Buey* es raro que la amnesia, la dejadez y
(Comisión Sida—Cárcel de la CSSP, la persistente voracidad humana,
Asociación Pre-SOS) nos sitúe mágicamente de nuevo en
la posición de partida. ¿Acaso no
guarda similitud la reciente reunión
Breve repaso sobre de líderes políticos en las Azores
la situacrón del para hablar de guerra con la cumbre
sida en la cárcel de Yalta??? ¿Acaso no rememora la
luego de 20 años situación actual de Corea del Norte
la crisis delos misiles de Cuba cuan—
Se podrían resumir estos veinte do Kennedy...??? ¿Gotas de agua?,
años en la cárcel conviviendo con el ¿procesos similares?, ¿ciclos vita-
"Bicho" como el mayor fracaso dela Ies???
actuación sanitaria del Estado espa- La problemática del vih-sida y sus
ñol desde la Guerra Civil, siendo so- efectos perniciosos en la cárcel siguió
lamente equiparable a la desgracia igual trayectoria... Pese a que se co-
provocada por el Síndrome Tóxico nocía su peligroso potencial, la Ad—
del Aceite de Colza en los años 80... ministración se limitó a mirar a otro
Se trata, sin duda, de un episodio de lado, a esperar una solución provisio—
película de terror, un viaje a los peo- nal, a aprender de sus errores y a
res años de la dictadura, compara- mancillar el encargo y cometido que
ble a los perniciosos efectos produ- algunos ciudadanos le habían otor-
cidos por las pestes que recorrieron gado… Y ello es así porque la histo-
Europa en la Edad Media, en fin, ria, al igual que Yalta, Cuba o Azores,
muerte y olvido.... algunas veces no se puede ocultar....
Como siempre que ocurren estas Por ello, os pedimos que os aproxi-
cosas, el paso del tiempo nos aclara méis, que acerquéis vuestra atenta
la bruma, nos muestra los errores y mirada a la prisión, que alguien
nos los explica... se nos concede la (¿?¿?…) os presente, uno a una, a los
rara oportunidad de conocer el pa- más de 50.000 presos y presas que
sado para cambiar el futuro, mas no permanecen en las cárceles de este
es raro que fracasemos... (¡¡!!) No Estado, 05 pedimos que conozcáis de

* Conferencia elaborada para las Jornadas sobre Drogas y VIH, “Cuestionando la


prisión: Una nueva sensibilidad hacia la clientela del sistema penal“ (Zaragoza, 25
marzo de 2003, ASAPA 2003), y Conferencia II Encuentro de Prisiones, "Promoción
dela salud en infección del VIH en el medio penitenciario" (Valencia, 27, 28 y 29 de
marzo de 2003, AVACOS 2003).

43
JN:.
MOVIMIENTOS SOCIAI FS

primera mano las problemáticas que ción penitenciaria es un grupo de


hemos vivido, que entendáis que nos alto riesgo por lo que se refiere al
mantuvieron pobres, que nos recon- consumo de drogas. El porcentaje
taron y excluyeron, que nos clasifica- de presos dentro de la UE que afir-
ron y maniataron, que nos engan- ma haber consumido alguna vez
charon y nos desintoxicaron, que nos una droga ilegal varía entre el 29%
¡nocularon y enterraron... Que sepáis y el 86% [en el Estado español la
que más de 20.000 personas presas pinza está entre el 31% al 70% de-
han fallecido en un país sin pena de pendiendo del centro], por ello la
muerte... Que sepáis que el Estado es encarce/ación no implica el cese del
responsable. consumo de drogas. Entre un 16% y
Os lo contamos, para que si voso— un 54% de los presos afirman con-
tras queréis, con vuestras concien- sumir drogas dentro de las prisio-
cias, impidáis que este gran error, nes". La iniciación en el consumo de
no ocurra nunca mais. drogas y el consumo por vía paren-
teral también tiene lugar en prisión.
Las_caysas: prohi- Según varios estudios, entre un 3%
b|c|omsmo y un 26% de los consumidores de
encarcelam¡ento drogas afirman haber consumido
de la miseria drogas por primera vez en prisiónº;
todo ello ocasiona que un alto índi-
Entendemos PRIMERAMENTE que se ce de consumidores por vía parente-
debe revisar toda la política prohibi- ral compartan jeringuillas. Dentro
cion¡sta y terapéutica para que las de la prisión el consumo de drogas
cárceles no se abarroten de drogo- por vía parenteral está asociado a la
dependientes, cuyo único delito ha práctica de compartir el material de
sido consumir aquellas drogas con- inyección, en algunos casos afirman
sideradas en este momento históri- que el 100% ha realizado dicha
co como ilegales. Se debe tener con- práctica... Un estudio llevado a cabo
ciencia de que estos delitos se en- en Luxemburgo (NR 2001) señala
globan en los cometidos bajo la que en un 70% de los casos las je-
influencia de drogas ¡legales, por ringas se limpian únicamente con
motivos económicos para financiar agua y que en un 22% no se lim—
los altos precios provocados por la pian. "Generalmente, los reclusos
prohibición en el mercado negro. sorprendidos en posesión de drogas
Así, en el conjunto de la UE las de- son sancionados y castigados de
tenciones por delitos relacionados conformidad con el reglamento pe—
con las drogas han aumentado de nitenciario. Entre las sanciones más
forma constante, según se refleja in— habituales encontramos la restric—
equívocamente en el Informe anual ción de derechos (visitas, llamadas),
del Observatorio Europeo de Drogas supresión de permisos de salida de
y Toxicología1. prisión. La posesión puede afectar a
"[En cuanto ala prevalencia delos la ejecución de la pena, así como
consumidores de droga en prisión] posibles enjuiciamientos por delitos
Podemos considerar que la pobla- relacionados con la salud publica".
44
“ <?
Sida+rárrel=a nena de muerte

Vías de transmi- man plenamente por el Defensor del


sión, medidas pro- Pueblo en su informe de 19965, don-
filácticas, trata- de de forma sistemática se nos ex-
mientos plican las razones por las que las en—
toxicológicos fermedades infectocontagiosas son
muy superiores entre la población
1.- MEDIDAS PROFILÁCTICAS (PU). A reclusa:
nadie en este Estado se le escapa - La deteriorada situación sociosa-
que una de las vías de transmisión nitaria.
que más ha primado en la realidad - Las condiciones de hacinamiento.
del vih/sida y que más ha contribui— - La falta de coordinación entre la
do a generar una autentica pande- Administración penitenciaria y la
mia ha sido la constante y continua red sanitaria pública.
reutilización de jeringuillas por par- - Los ingresos y salidas constantes.
te de los internos usuarios de dro-
gas por vía parenteral (ADVP), sien- Continúa el Defensor del Pueblo
do el perfil3 mayoritario de estos en su informe de 1996 manifestan-
usuarios: hombre de 33 años, de ni- do que “No es extraño, por tanto,
vel económico bajo, sin estudios que el SIDA hal/e allí el foco de in—
(95% sin estudios primarios), alta feccíón y de transmisión de Ia enfer—
tasa de paro previo al ingreso en la medad más importante. Evidente-
prisión (65%), policonsumo de tóxi- mente hablar de una cuarta parte
cos (100% tabaco, 95% cannabis, de enfermos de SIDA entre las per—
90% heroína, 85% cocaína), vía de sonas presas ¡mp/ica enormes ries-
consumo de heroína (90% vía intra- gos de transmisión en un medio ce-
venosa ADVP, 10% fumada), vía de rrado y superpoblado”º.
consumo de cocaína (50% intrave- Así recoge de primera mano Ju—
nosa, 20% esnifada, 15% fumada). lián Ríos la casuística de los efectos
En datos totales la cifra oscila: el de compartir jeringuillas en prisión:
40% tiene problemas con la heroí- “he contraído el SIDA por inyectar-
na, el 95% de ellos por vía intrave- me con una jeringuilla usada por
nosa, presentando un 27% de sero- unos 50 presos y aún así no quieren
logía positiva al vih, el 11% del total dar jeringuillas nuevas" […] "en
de los internos el 80% serología po- tiempos cuando alguna vez me pin—
sitiva a la hepatitis C y B. ché llegué a pagar dos mil pesetas
Otros datos, obtenidos en el es- por una jeringuilla“.
pléndido trabajo de campo elabora— La Administración penitenciaria,
do por la Universidad Pontificia de por su parte, ha reconocido luego
Comillas4, reflejan que el 59% de de años de silencio, cifras cercanas
los/as presos/as dicen tener enfer- al 21%... De todos modos, sea cual
medades serias; y el 98% de las per— sea el corte estadístico, lo que sí es
sonas encuestadas creen firmemen- inocultable es que estos datos son
te que existe riesgo serio de contraer inconsentibles, que denotan preva-
alguna enfermedad contagiosa. Es- lencias próximas a la incidencia del
tos sorprendentes datos se confir— VIH en Áfricaº, y que mantienen una
45
¡ MOVIMIENTOS SOCIALFQ
“."—
Iínea de transmisión espacio-tempo- na…), con el fin de preservar la vida
ral constante, desoyendo impruden- y la salud de los/as presos/as...
te y dolosamente las directivas in- Tras esta importante medida se
ternacionales que aconsejaban la in- decide el inicio del plan piloto de in—
mediata implantación de programas tercambio de jeringuillas (en ade-
de reducción de daños e intercam- lante PIJ) en la prisión de Pamplona,
bio de jeringuillas, tanto por parte al que se le unió el de la cárcel de
de la ONU9 como del Consejo de Eu- Basauri, Martutene y Pereiro de
ropa…, el CDC de Atlanta, la Propia Aguiar, entre otras. La versión oficial
Administración Penitenciaria11 y el de la DGIP nos dice que16 "el pro-
Plan Nacional de Drogas”. El Go- grama de intercambio de jeringui—
bierno ha ignorado las movilizacio- llas es un programa implantado am-
nes c¡udadanasl3, las denuncias pliamente en todo el país, y consi—
contra las autoridades penitencia- derado de gran ineficacia para
rias y sanitarias14 yla cruda realidad reducir el riesgo de infección por ví—
penitenciaria; el resultado ha sido rus de transmisión sanguínea (VIH,
que las cifras se mantienen... los VHC)". También el Gobierno insiste
muertos siguen y la prisión perma- en hablar de cumplimiento objetivo
nece tan inamovible como lejos está de la implantación del PIJ en los
dela realidad... CP“: “Los únicos centros donde no
La doctrina del deber de atención se han implantado el PIJ, son los
preventiva en las cárceles españolas centros de inserción social, psiquiá-
se inicia por providencia15 emitida tricos, y centros de alta seguridad
por la Audiencia Provincial de Pam- de Puerto I, el resto esta instaurado
plona en 1996, definiendo el criterio pero en diferente fase de implanta-
de preservar la atención sanitaria ción". Sin embargo, esta afirmación
frente a la actuación sancionadora es falsa y la implantación a siete
de la prisión, que consideraba la je- años vista ha sido un fracaso: los PIJ
ringuilla no como un medio profi- no se han implantado en la totali-
láctico sino como un objeto prohibi- dad del Estado, se han cambiado las
do, provocador de una inmediata premisas originales y hoy se confi-
falta continuada del art. 109 del RP guran como un nuevo método de
1201/81 de 8 de mayo. La Audiencia control. Así, destacar casos como
Provincial Pamplonica consideró los de Catalunya, lugar donde el pa—
esta práctica sancionadora una nor- sado año se celebró el Congreso ln-
ma en blanco, vulneradora del dere— ternacional del SIDA y, sin embargo,
cho a la salud delos internos, por lo en los Centros Penitenciarios Catala-
que ordenaba a la DGIP que "inicie nes seguían sin implantarse los PIJ,
un programa masivo de reparto de dada la oposición por parte de los
Jerínguillas en las cárceles Navarras" sindicatos de funcionarios, reunidos
(¿?), e instaba a la Administración a al amparo de un paradigmático Co—
la creación de talleres educativos, mité de Seguridad e Higiene.
seguimientos médicos y programas Esta arbitrariedad y negligente ac-
de tratamiento voluntario de drogo- tuación supondrá que sigan exis-
dependencias (metadona, naltrexo- tiendo presos/as que en el año 2003
46
Sida+rárrel=a nena de muerte K
:(
se inoculen con el virus de la inmu- 2.— TRATAMIENTOS TOXICOLÓGICOS.
nodeficiencia humana VIH, simple- En la actualidad y luego de que el
mente por estar ingresados en un Estado haya implantado paulatina-
Centro Penitenciario donde no se mente programas de mantenimien-
implanten por motivos de seguridad to de metadona en las cárceles, la
o laborales el PIJ, reflejando con situación no ha mejorado en modo
ello, como resultado, una auténtica alguno... Es más, en algunos casos
situación de grupo de riesgo. esta adición sustentada por el Esta-
La batalla de los PIJ está ganada, do ha servido para agravar más aún
eso es indudable; pero el Estado se la problemática del toxicómano.
niega a darse por vencido, la im— Así, se conocen y se denunciaron en
plantación de este tipo de progra- su día casos de interrupción en el
mas se hará cuando, como y donde suministro de metadona por crite-
ellos quieran. rios de carácter económico u orga—
También es importante denunciar nizativo; se han descrito casos de
la diferencia conceptual del progra- negativa al inicio del tratamiento,
ma implantado, por ejemplo, en por no haber realizado terapia para
Pamplona 0 en Basauri, donde el in— tal fin en el periodo de libertad. Se
tercambio se realiza siguiendo los denuncia asimismo el incumpli—
parámetros de prevención utilizados miento delas previsiones legales es-
por las unidades de atención y los tablecidas en el Reglamento Peni-
movimientos antisida (confidenciali- tenciario de 1996 que acompañó la
dad, eliminación de sentimientos de reforma del Código Penal de 1995,
culpa, educación en prácticas sanas, donde se establecían mecanismos
educación de prácticas de consumo, de atención extrapenitenciaria para
etc.); por el contrario, los últimos Ios/as presos/as toxicómanos. Así, el
centros incorporados al programa art. 11718 contempla la posible sali—
piloto desoyen la práctica pedagógi- da en régimen abierto de aquellos
ca inicial, convirtiéndose para el presos/as que precisen asistir a tera-
usuario en algo prohibido y peligro- pias en los centros de drogodepen—
so, que en palabras de la propia ad- dencias extrapenitenciarios: "Los in-
ministración penitenciaria se realiza ternos clasificados en segundo gra-
con el esfuerzo voluntario y personal do de tratamiento que presenten un
de algunos funcionarios. perfil de baja peligrosidad social y
Reiteramos que los PIJ son medi- no ofrezcan riesgos de quebranta-
das de salud pública, cuya misión miento, podrá acudir regularmente
está encomendada a los profesiona- a una institución exterior para la re-
les sanitarios designados por el Esta- alización de un programa concreto
do; que su implantación debe ser ab— [… ] que sea necesario para su trata-
soluta en el territorio estatal, y que la miento y reinserción social“. Esta
misma se debe guiar por parámetros importante medida, destinada a nor-
de reducción del daño, prácticas sa— malizar el tratamiento toxicológico
nas, con agentes de mediación en la de las personas presas, ha entrado
promoción de la salud frente a crite- casi instantáneamente en vía muer-
rios de seguridad y control. ta, siendo aplicada por la Adminis-
47
¿X MOVIMIENTOS SO(IAI F9

tración únicamente como un privile- 3.- VÍAS DE TRANSMISIÓN. Citar la


gio destinado a una pequeña parte existencia, obviamente, de más vías
de la población reclusa. de transmisión del VIH en la pobla-
La versión terapéutica intrapeniten- ción penitenciaria, procedentes de
ciaria se base en la escasa implanta- las relaciones sexuales no seguras;
ción de las unidades de día o unida— provocada por la represión sexual
des libres de drogas, que reflejan un en el medio penitenciario, que po-
sistema deficitario e insuficiente para tencia la existencia de mafias de
paliar las elevadas cifras que anterior- prostitución intrapenitenciaria, vio-
mente aportábamos, pese a las previ- laciones y falta de información.
siones de nuevo de un Reglamento También se producen inoculaciones
basado en el papel mojado”: "1. procedentes de tatuajes no seguros,
Todo interno con dependencia de sus— INTERCAMBIO DE MAQUINILLAS DE
tancias psicoactivas que lo desee, AFEITAR etc.
debe tener a su alcance la posibilidad Pese a que la prevalecida no al-
de seguir programas de tratamiento y canza los niveles de los ADVP, se si-
deshabituación. 2. Dentro del marco guen produciendo casos sin que se
establecido en el Plan Nacional sobre atajen las soluciones.
Drogas, la Administración Penitencia-
ria, en coordinación con otras Admi— Imposibilidad de
nistraciones Públicas o con otros or— acceso _a los
ganismos e instituciones debidamen- tratamientos
te acreditadas, realizará en los
Centros penitenciarios los programas En el seno de gran cantidad de cen—
de atención especializada en drogo- tros penitenciarios del Estado se im-
dependencias que precisen los inter— pide a los presos/as enfermos/as ac-
nos que voluntariamente lo soliciten. ceder al tratamiento médico que es—
3. Para la realización de programas timen más adecuado para su salud.
permanentes relativos a drogodepen- No existe el criterio de cuestionar lo
dencias, el Centro Directivo podrá dis- prescrito, ni la eficacia de lo enco-
poner de departamentos específicos mendado, en algunos casos incluso
ubicados en diferentes áreas geográ- se le han limitado al preso yla pre-
ficas para evitar en lo posible, el des- sa el acceso a tratamientos de últi—
arraigo social de los internos que si— ma generación, cambiándoselos por
gan un programa en ellos”. tratamientos más antiguos y cadu—
La versión oficial del gobiernoºº, a cos; los avances dela técnica no pa-
preguntas del Grupo Mixto, ha sido san porla prisión.
publicitar la implantación delos pro— En esta dicotomía, surge con los
gramas de reducción de daños, en nuevos tratamientos un nuevo epi-
30 establecimientos penitenciarios, sodio de desidia por parte dela Ad-
lo que supone un 45% del total, que ministración; por motivos de muy
según el gobierno “supera" los obje- diversa índole se están produciendo
tivos establecidos en la Estrategia casos de interrupción de la medica—
Nacional sobre Drogas de 1999. ción del tipo TARGA21_ Como es
bien sabido por todos, la interrup-
48
'<7C
Sida+cárrel=a nena de muerte

ción violenta de la adhesión al tra- las actitudes coercitivas sobre las ¡n—
tamiento ocasiona un daño de difí- tervenciones clínicas, como lo de-
cil reparación, con efectos terribles muestran los casos de esposamien-
sobre futuros tratamientos para el to a la cama de personas convale-
paciente, generando cepas de VIH cientes con la connivencia de los
resistentes a la acción de los cócte- profesionales sanitarios, según se
les inhibidores. Sin embargo, las ci- ha puesto de manifiesto por la Co-
fras facilitadas por la Administra— ordinadora Estatal de Solidaridad
ción penitenciaria denotan otra rea- con las Personas Presas ante el Co-
lidad; ellos hablan de una adhesión mité Contra la Tortura dela ONU22.
elevada, con altos índices de cola- En este sentido, reproducimos el
boración..., como siempre, la lucha informe elaborado por la Sociedad
de cifras genera confusión. Española de Sanidad Penitenciaria,
En este sentido, mencionar como dirigido al Parlamento Español, con
elemento descriptivo la situación re- el objeto de denunciar la grave si-
cientemente denuncia en el CP de tuación del sistema sanitario peni—
Pereio A (Ourense), donde la Admi- tenciario:
nistración penitenciaria acordó su- ”…en el momento actual el siste-
primir la administración de medica- ma sanitario penitenciario es invia-
mentos de ultima generación, del ble, anticuado y no puede garan-
tipo COMBIVIR, para substituirlos tizar una atención sanitaria a los
por formatos ya caducos y casi reti- reclusos similar a la del resto de
rados del mercado por la industria los ciudadanos, […] Creemos que
farmacéutica, del tipo EPIVIR y RE- usted debe saber que: 1.- La dispen—
TROVIR. Esta circunstancia fue reco- sación de medicamentos en la in-
nocida por el gobierno español, en mensa mayoría de los Centros Peni—
respuesta a la pregunta parlamenta- tenciarios sé está realizando de for—
ria realizada por el diputado del Gru- ma ¡lega/, dado que se realiza a
po Mixto C. Aymerich; el gobierno través de botiquines cuya gestión,
respondió en el sentido de justificar compra de medicamentos y conser—
la medida de recorte farmacológico, vación corre a cargo del personal
sobre la base del cumplimiento por penitenciario del centro (médicos,
parte de la Administración del prin- ATS-DUES y auxiliares de clínica) y no
cipio de economía y eficacia... de farmacéuticos como exige la Ley
del Medicamento y las leyes autonó—
Negligen_te manejo micas sobre este tema. [… ]. 2.— Dada
y tratamiento la absoluta carencia de equipos es—
clm¡co pecializados, los médicos de prisio-
nes se ven obligados a realizar fun-
Un área de amplio efecto sobre la ciones asistencia/es especializadas,
calidad de vida del preso/a enfer- como puede ser: la atención a en-
mo/a consiste en el cumplimiento fermos infectados de SIDA, que de-
de las adecuadas medidas de mane- bido a la falta de directrices organi—
jo y control médico del/a enfermo/a. zativas —puesta de manifiesto por
En los centros penitenciarios priman Sociedades como GES/DA— están
49
Á
*;
MOVIMIENTOS SOCIALES

impidiendo en muchos centros peni— tado ante los medios de comunica-


tenciarios un correcto tratamiento ción, porla Subdirección General de
de estos enfermos. A esto se junta la Sanidad Penitenciaria, donde se se-
actual prohibición de prescribir de- ñala que Interior no puede mante—
terminados fármacos para el trata- ner un sistema sanitario integral, "ya
miento del SIDA (aprobados por el que se necesita contar con una gran
Ministerio de Sanidad) en contra de capacidad organizativa y financiera
todos los informes técnicos y con el para asumir las innovaciones, y una
cínico criterio de ahorro en presu- fuerte especialización en primaria y
puestos, lo que conlleva una mayor especializada. [… ] <<De ahí —se dice
dificultad para mejorar la adheren- en el texto— que la sanidad peni—
cia a/ tratamiento de estos enfermos tenciaria presente limitaciones, tan-
ya difícil por si misma. […] A todas to en atención como en eficiencia y
estas irregularidades hay que sumar eficacia, en relación con el que se
el que trabajamos en unas condicio- ofrece a la población general, más
nes profesionales poco dignas: aún teniendo en cuenta la alta inci—
Con una ínfima dotación material dencia de enfermedades que se dan
(centros sin aparataje de ningún en la población reclusa". Interior
tipo, algunos sin agua caliente, y apoya también su pretensión en la
prácticamente todos con las consul- falta de efectivos sanitarios para
tas sin las mínimas condiciones hi- atender ala población reclusa y en el
giénicas ni de seguridad que garan- aislamiento de estos profesionales
ticen una praxis correcta), la sani— respecto al resto de compañeros del
dad penitenciara se ha convertido SNS, "lo que crea dificultades de co-
en un ghetto al margen del resto del ordinación con otros servicios asis—
sistema sanitario, económica y orga- tenciales, asi como una limitación de
nizativamente inviable, e incapaz de la carrera profesional que puede
garantizar a los reclusos la igualdad acarrear a medio y largo plazo una
de derechos en materia sanitaria forma de selección por defecto".
con el resto de ciudadanos, como
marca la Constitución. Unidades de cu_stodia,
Por todo esto, nos vemos obliga- revusnones medicas
dos a solicitarle su inmediata inter-
vención, instando al Gobierno a ga- La prisión ha sido incapaz de gene-
rantizar los derechos sanitarios de rar recursos sanitarios adecuados.
los reclusos, y que, respetando la Según estudios realizados con carác-
voluntad que expresó el Parlamento ter vinculante por parte de IIPP y la
Español en las proposiciones no de Fiscalía General del Estado, se ha lle-
ley aprobadas por unanimidad del gado a la rotunda conclusión de que
Parlamento Español, se proceda a la la sanidad penitenciaria como orga-
inmediata integración de la sanidad nismo vinculado al Ministerio del In—
penitenciaria en el sistema público terior debe desaparecer, y que el ser—
de salud". vicio debe depender directamente
Esta circunstancia se ratifica en el del Sistema Nacional de Salud, basa-
ultimo informe elaborado y presen- da en el acceso no restringido a los
50
"Wi
Sida+rárrel=a nena de muerte

servicios sanitarios universales, con Entre otros problemas, se debe te-


todos los derechos inherentes a los ner presente la escasez presupuesta-
ciudadanos.. ria, consistente en una asignación
Una vez cerrado el hospital peni- de 2,5 euros/preso-día23. La respues—
tenciario (monumento al horror y a ta de la Administración ante esta si-
la negligencia de la Administración tuación se basa en crear economa-
penitenciaria), la Administración ha tos penitenciarios, gestionados por
obstaculizado el flujo de internos a grandes empresas del ramo, que se
los servicios públicos externos (hos— encargan de recoger las ganancias
pitales, clínicas, etc.) y, además, ha provocadas por las deficientes con-
buscado fórmulas de atención peri- diciones a|imentarias. Siendo tan
férica que Iesionan el derecho al tra- patente el caso de algún economato
to igualitario y a la dignidad (análi— que tiene a la venta incluso patatas
sis por correo, visitas clínicas en el y aceite. ¿Por qué se venden alimen-
horario de cierre, etc.). tos de consumo básico? ¡Para qué
Dentro de este despiste histórico darlo si se puede vender!24
de pretender guardar, reeducar y sa- Ante esta situación se han sucedi-
nar, todo a un tiempo, la Adminis- do huelgas de patio y hambre en
tración penitenciaria ha optado por demanda de suplementos. Básica—
crear unidades de custodia hospita- mente, el aporte alimenticio que se
laria que son, en síntesis, prisiones ha mantenido en algunos casos
pintadas de blanco, ya que estos contados (no todos) consistía en
servicios no reúnen los requisitos proporcionar al preso y a la presa
mínimos exigidos en cuanto al tra— enferma un cartón de leche y unas
tamiento digno de los/as enfer- naranjas, en un entorno donde ya es
mos/as, basado en el respecto a la muy general la perdida del sentido
condición de enfermo; las unidades del gusto, motivado por la comida
de atención penitenciaria han pri— monótona, mal condimentada y con
mado Ios criterios de seguridad abundancia de congelados y preco-
frente a los de atención y segui- cinados, excesivamente rica en gra-
miento en la atención primaria. sas y pobre en proteína525.
Esta situación absurda no encaja
Nutrición con las modernas teorías de nutri-
ción (dieta equilibrada, alimentos ri-
En la cárcel existen medidas de nutri- cos en sustancias naturales, equili—
ción inadecuadas e incompatibles brio en las dietas, etc.), dado que no
con la condición de enfermo; la co- se puede pretender suplir los portes
mida ya de por sí en la prisión es es- dietéticos con un simple cartón de
casa y mal cocinada. Esta cuestión ha leche o una fruta del campo.
sido objeto de innumerables quejas
ante la autoridad penitenciaria. La
cuestión se extiende a la falta de or-
ganización, a las carencias de infraes-
tructuras, a la falta de cumplimiento
de objetivos mínimos de nutrición.
51
)
x¡.
MOVIMIENTOS SOCIAI FS

yes; así el art. 12 del RD 357/91 dice:


LAS CONSECUENCIAS
"a los efectos de lo establecido en el
Derechos y presta- art. anterior [11] se consideran ren-
ciones soc¡ales. tas o ingresos computables los bie-
Situación de sus- nes y derechos de los que disponga
pensión de la pnc anualmente el beneficiario derivados
por ingreso del tanto del trabajo como del capital”.
enfermo_en_ centro Es obvio que en la situación de reclu—
penitencuano sión es incompatible e impensable
asimilar renta con trabajo (ya que no
La Administración Central y la Auto- se trabaja dentro del Régimen Gene—
nómica han establecido por medio ral de la Seguridad Social) o capital
de acuerdos de carácter interno, en- acumulado (sin comentarios).
tre otros por convenio de fecha 20 de La verdadera situación es que los
Junio de 1991 (BOE 17-9-91), los si- centros penitenciarios son lugares
guientes criteriosºº: ”se procederá a donde los presos y presas no perci—
la delegación de las solicitudes de ben nada, más bien todo lo contra-
PNC fundamentando que el solicitan- rio, su situación es una estancia in-
te [...] no se encuentra en situación útil en una institución dependiente
de necesidad protegible dado que del Estado, donde reciben alimenta—
sus necesidades básicas se encuen- ción pésima y escasa, cuya infraes-
tran cubiertas por un organismo pú- tructura, incluso Ios nuevos macro—
blico en aplicación del art. 12.2 del Centros, es siempre infrautilizada
RD 357/91 de 15 de Marzo”. Este (patios de dimensiones mínimas, ta—
Convenio de carácter ¡legal muestra lleres cerrados, etc;). Se encuentran
la verdadera intención del gobierno allí con el único fin de cumplir ala»
ante el ingreso de un enfermo bene— pena impuesta; <<nunca» "será ese
ficiario de una pensión en un centro Centro donde la persona se reinser—
penitenciario, suspendiendo su único te, <<nunca» será un Centro de tra—
ingreso económico por "ENCON- bajo donde se cubran las necesida—
TRARSE CON LAS NECESIDADES BÁSI- des básicas, nunca se cumple el fin
CAS CUBIERTAS". Esta interpretación previsto en la Ley.
ilegal y contraria a lo establecido en Según la LGSS, se entenderá como
las leyes, a los efectos de acreditar la carencia de ingresos la falta o insufi-
situación económica del beneficiario, ciencia de los mismos, estimándose
ha supuesto la suspensión de multi— como acreditación suficiente la com—
tud de prestaciones no contributivas probación de los datos de carácter
(en adelante PNC), estimándose en tributario. Reiterar que obviamente
un 95% de los/as presos/as, lo que ha el rancho y el catre facilitados por la
ocasionado un daño irreparable a prisión no pueden ser considerados
una población ya de por si mermada especias, ya que no son propiedad
y azotada porla marginación y la fal- del preso, él no puede disponer de
ta de medios económicos. ellos libremente, no los puede ven—
Esta violación de derechos contra- der, arrendar o ceder a terceros
dice lo dispuesto en sus propias le- (como así prevé el Código Civil).
52
“<?
Sida+rárrel=a nena de muerte

Recientes y numerosas sentencias CE, en cuyo único caso podría com-


nos han dado la razón de forma es— putarse siempre que los ingresos
candalosa, entre otras, cronológica— sean los suficientes de acuerdo con
mente Ia de la Sala de lo Social del las previsiones legales. Ya el alto tri-
Tribunal Superior de Justicia de Cas- bunal, en sentencia de la Sala IV de
tilla, Stc. del 6 de Febrero de 1995, 14 de diciembre de 1999, estimó el
que manifiesta rotundamente: “No recurso de casación para la unifica-
puede llegarse a la conclusión de ción de doctrina; la respuesta en
que los servicios que obligatoria- este caso de la Sala IV fue contun-
mente presta el Estado a los rec/u- dente: "no parece acorde con el
sos que cumplen penas privativas mandato constitucional una inter-
de libertad en Centros Penitencia- pretación de la legalidad que ¡es pri—
rios, tengan naturaleza prestacional ve de los beneficios de la Seguridad
para ser computados a los efectos Social". En esta sentencia se fija el
del art. 137 de la LGSS”. Por fin pa- criterio de que el suministro forzoso
rece zanjarse el asunto, con la sen— de alojamiento no es una renta de
tencia de la Sala IV del Tribunal Su- capital ni de trabajo ni una presta-
premo de 20 de diciembre de 2000 ción reconocida por ningún régimen
(sentencia para unificación de doc- de previsión social. En este sentido
trina) que nos la comenta José Luis con fecha 30 de Marzo de 2001, por
Cabeza Esteban”: "Como dice el la Secretaría General de Asuntos So-
alto tribunal la cuestión planteada ciales Instituto de Migraciones se
es, si el ingreso en prisión puede emite Oficio, por el que se trata el
suspender o reducir, y en qué condi— asunto de “Acreditación del requisi—
ciones, el derecho a percibir una to de carencias de rentas por solici—
pensión no contributiva durante el tantes benefíciaríos de PNC que se
tiempo de internamiento peniten- encuentren privados de libertad en
ciario, en el fundamento tercero de CP", a fin de “Adecuar la actuación
la sentencia sienta el criterio (a administrativa a la doctrina jurispru-
nuestro juicio desacertado) de que dencia/, modificando el criterio emi—
la manutención de los pensionistas tido el 24/3/1993, en el sentido de
que ingresan en centros penitencia- que las personas que lo soliciten y
rios tiene naturaleza prestacional se encuentre privadas de libertad,
[… ] aunque requiere la valoración y acreditarán el requisito de carencias
acreditación previa". La sentencia de rentas si los ingresos computa-
muestra un voto particular, centrán- bles no superan el importe anual de
dose en refutar que el suministro la pensión". A estos efectos, el Ofi-
forzoso de alojamiento y comida cio ordena cambiar de criterio, resti-
sea una renta de capital o una renta tuir las PNC y deducir las rentas del
de trabajo: "A su juicio es un deber trabajo derivadas del cumplimiento
que pesa sobre la administración". de la pena, o sea, aplicar el baremo
Haciendo hincapié en que no consta establecido por resolución de
que al interno sele suministrara tra- 29/6/9923, referente a consignacio-
bajo suficiente retribuido y compen— nes económicas para la alimenta-
sado, como exige el art. 25. 2 de la ción, fijadas en una media com-
53
¿¡ MOVIMIENTOS SOCTAI FS

prendida entre 2,5 y 3,5 €. Por lo cado el artículo 196.2 del Reglamen-
tanto, la Administración no ha pro— to Penitenciario por padecer infec-
cedido a pagar con carácter retroac— ción por VIH en estadio avanzado.
tivo las prestaciones congeladas de Dado que siguen muriendo perso-
forma ilegal desde 1991, no ha pro- nas no condenadas a muerte, la ex-
cedido a restablecerlas de oficio, se carcelación por enfermedad no debe
ha limitado a dictar un Oficio en el estar condicionada a la buena con-
sentido de establecer el pago de la ducta (art. 104 RP), no debe practi-
PNC para aquellas personas que lo carse únicamente en situaciones pre-
soliciten. Además, en una interpre- agónicas y no debe ser considerada
tación restrictiva de la sentencia, una progresión "especial" de grado
proceden a deducir del pago total penitenciario; no es un premio ni un
los gastos de alimentación antes ci— elemento reeducador ni reinsertador.
tados, por lo que el pago final de la Esta medida, establecida en el art.
prestación se reduce al 40% total de 196 del RP y en el art. 80.4 del Códi—
la cantidad asignada. En este senti- go Penal, es SIN DUDA una protec-
do es importante hablar dela vía de ción de carácter humanitario, que
impugnación realizada por las com— preserva el cumplimiento efectivo del
pañeras del CAXPOU29 de Ourense, derecho a la vida incardinado en el
que han conseguido una nueva sen- art. 15 de la Constitución Española,
tencia del TSJG, por la que se le tratándose por tanto de la aplicación
asigna al preso/a el 100% dela pres— y protección de un derecho de rango
tación, sin deducciones procedentes fundamental, de eficacia directa, al
de los gastos de manutención”. que están sujetos lo poderes públicos
y el ordenamiento jurídico“, y cuyo
Excarcelación y reiterado incumplimiento e inaplica-
suspensión de la pena ción supone la comisión de'un grave
ilícito penal por parte de los respon—
Durante el año 2000 fallecieron por sables políticos de la prisión.
SIDA 23 internos, a los que se suma- Reproducimos a continuación la
rán Ios/as presos/as que fallecieron valoración y análisis realizados por
en libertad condicional, un total de Joaquín Sánchez Covisa Villa, fiscal
65 personas a las que se había apli- de la Audiencia Provincial de Ma-

l" o ' ;

MMIWWWQWEWGKM&Á… (€£$; ' " *º..¡ “ … gy L


Causa natural no VIH 48 (32,9%) 41 (25,3%) 57 (46,3%)
Infección VIH/SIDA 50 (34,2%) 50 (30,9%) 23 (18,7%)
Suicidio 10 (6,8%) 29 (17,9%) 21 (17,1%)
Envenenamiento accidental por drogas 34 (23,3%) 33 (20,4%) 19 (15,4%)
Muertes violentas 2 (1 ,4%) 6 (3,7%) 3 (2,4%)
Muertes accidentales 2 (1,4%) 2 (1,2%) 0
Desconocido (Negativa judicial) 0 (0,0%) 1 (0,6%) 0
TOTAL: 146 162 123

54
"<?
Sida+rárrel=a nena de muerte

drid, que, por clarificador, ha sido competencia exclusiva de los fa-


punta de lanza de los colectivos so- cultativos que han tratado al enfer-
ciales a la hora de reclamar: mo-preso; al juez sólo le correspon-
de valorar la procedencia de la apli—
<<Constituye una constante histó- cación adelantada de la libertad
rica en la aplicación de cualquier condicional sopesando las razones
rama del Ordenamiento Jurídico la de humanidad concurrentes.
existencia de una cierta incompren- Esta afirmación no es baladí pues
sión entre médicos y jueces a la hora 'afecta directamente al contenido
de valorar no sólo los presupuestos mismo y no a la conclusión del pre-
sino también las consecuencias de ceptivo informe médico. Si acepta-
las normas que introducen aspectos mos esta premisa, en los supuestos
concernientes a su especialidad. […] que aquí nos preocupan, el criterio
Como es notoriamente sabido, el unánime que se pueda lograr entre
art. 190 del Reglamento Penitencia— los especialistas médicos sobre las
rio, aun cuando haya provocado caracteristicas de los diferentes es-
desde su origen contestaciones doc- tadios de la enfermedad, e, incluso,
trinales, es lo cierto que ha sido aco- sobre los diferentes efectos en la ca—
gido comúnmente con grandes sim- lidad de vida del paciente, siempre
patías, no habiendo presentado será positivo no sólo por favorecer
graves problemas de aplicación has— la aplicabilidad del artículo 796 del
ta que, precisamente, se generaliza R.R en el sentido más arriba indica-
y hace patente en las cárceles y en do (coherencia cientifica), sino tam—
la sociedad española los gravísimas bién porque sirve para delimitar los
fenómenos conocidos por la infec- supuestos extremos.
ción por el virus de la inmunodefi- En efecto, es evidente que el artí—
ciencia humana (VIH) y el SIDA, […] culo 196 del Reglamento Penitencia-
Frente a esta nueva enfermedad, la rio está pensando esencialmente en
ciencia médica carece de respuestas los enfermos terminales. Así lo ha
incontrovertidas sobre aspectos de puesto de relieve la Consulta 4/1990
relevancia jurídica que necesaria- de la Fiscalía General del Estado, la
mente deben ser tomados en consi- práctica de los Juzgados de Vigilancia
deración a la hora de determinar el Penitenciaria, y la única Resolución,
excarcelamiento adelantado de un que tengamos noticia, del Tribunal
afectado. El problema, en este su- Supremo. Sin embargo, el concepto
puesto, se agranda extraordinaria- de enfermos terminales no debe ser
mente, toda vez que, al contrario interpretado tan restrictivamente
que en otras esferas de la actividad que pueda llegar a confundirse con
judicial, tanto en el espíritu como en enfermo agónico o cercano a la
la letra de los artículos 196 del Re— muerte. Ni la letra, ni el espíritu, ni la
glamento Penitenciario y 92 del finalidad, ni la sistemática de los artí-
Nuevo Código Penal, la responsabi- culos 196 RP y 92 del nuevo Código
lidad de la calificación de la enfer— Penal autorizan esa interpretación.
medad como muy grave con padeci- Como afirma el Auto de la Sala V
mientos incurables, es, prima facie, del Tribunal Supremo de 19 de
55
R
N:
MOVIMIENTOS SO(TAI FS

agosto de 1988, el citado precepto contrario, lo más adecuado al es-


contempla los supuestos en que los píritu de esta disposición el que
reclusos ”bien a causa de su edad pudieran permanecer en libertad
avanzada, bien a causa de un pade- alguna temporada anterior al mo-
cimiento grave de pronóstico fatal, mento del fallecimiento”.
se encuentran ya en el período El período terminal de la vida, de-
terminal de su vida", de tal mane- rivado de la naturaleza irreversible
ra que interpreta, como no podia de la enfermedad que alcanzará un
ser de otro modo a los efectos de la desenlace fatal, es por tanto un
norma, ambas situaciones como si— concepto indeterminado en cuan-
milares. Siendo evidente que una to a su duración que puede ser
persona septuagenaria no se en- más o menos largo. Su acreditación
cuentra en peligro inminente de es un presupuesto necesario de la
muerte, no hay por qué exigir/e esa aplicación adelantada de la libertad
condición al enfermo muy grave con condicional y a ello contribuirá deci—
padecimientos incurables, pues su sivamente el dictamen facultativo.
fundamentación es la misma: que la Mas, desde una perspectiva estric—
privación de libertad no aumente tamente jurídica, al aplicador del
sus efectos aflictivos en el período derecho, constante la valoración
—más o menos largo— pero incon— médica sobre la gravedad e irrever—
testablemente terminal de su vida. sibilidad del padecimiento, le co-
En este sentido la sentencia de 12 rresponde valorar las circunstan-
de septiembre de 1997 de la Sala cias que concurran en cada casa,
Segunda del Tribunal Supremo de- entre las que destacan no sólo las
clara: "pero, en todo caso, la postu- referentes a las estimaciones del
ra que adoptó el magistrado juez de tiempo de supervivencia, sino tam-
Vigilancia Penitenciaria parece con— bién, cualquiera que sea'éste, las
forme con el tenor literal del pre- condiciones de su existencia, signifi—
cepto (el SIDA ya desarrollado con cadamente las referidas a su mayor
pronóstico de fallecimiento a cor— o menor grado de minusvalía física
to 0 medio plazo cumple, sin o psíquica que acrediten una situa-
duda, los dos requisitos exigidos, ción de notoria deficiencia e inso-
pues se trata de una enfermedad portable inferioridad respecto del
que es, al tiempo muy grave e in- resto de los reclusos de tal mane-
curable) y también parece acorde ra que carezca de sentido, con ca-
con la finalidad humanitaria de tal rácter definitivo, la programación
forma que permitiría adelantar la de un tratamiento rehabilitador o
excarcelación a algún momento resocializador, respondiendo su
anterior al de la muerte inminen- permanencia en prisión a consi—
te, pues quizá debiera entenderse deraciones exclusivamente aflicti-
que no es el propósito de este ar— vas, ylo retributivas.
tículo del Reglamento el que pue- Alcance de los demás requisitos
dan sacarse de la prisión a los en- concurrentes: artículo 98 del Có-
fermos sólo para que mueran fue- digo Penal y el artículo 92 del
ra de la cárcel, pareciendo, por el nuevo Código Penal. La constata-
56
"<?
Sida+cárcel=a nena de muerte

ción de una enfermedad de la natu- fermedad grave con padecimientos


raleza descrita provocará ineludible- incurables, en el sentido arriba índi—
mente el reconocimiento del benefi- cado, vacía de sentido las previsio-
cio de excarcelación anticipada nes legales referentes a alguno de
cuando el condenado ya se encuen- sus aspectos, tales como el historial
tre clasificado en tercer grado de delictivo del interno, o la duración
tratamiento, toda vez que, como de la pena impuesta. El fundamento
afirma Heriberto ASENSIO CANTI— del adelantamiento de la libertad
SÁN, la libertad condicional no es condicional para los enfermos incu-
sino una continuación de aquella rables, ciertamente, debe prescindir
clasificación y régimen, habiéndose de estos elementos valorativos no
ya realizado un análisis de la perso- sólo por no guardar relación alguna
nalidad del condenado que demues- con la finalidad perseguida por el
tra que tiene capacidad para cum- beneficio, sino también porque pue—
plir la pena "en un régimen próximo de introducir elementos encubiertos
a la libertad. de discriminación intolerables, tales
Los problemas, por el contrario, como la exclusión de su aplicación
se van a producir cuando esta cir- en caso de condenados por determi—
cunstancia no concurra previamen- nados delitos (¿ terrorismo?, ¿contra
te, en cuyo caso el efecto más trans- la libertad sexual?, ¿ delitos contra la
cendente del principio de humani- salud pública?, etc.).
dad que inspira el precepto —como Segundo, en lo que respecta a su
ya adelantamos— consiste en que tramitación. Ello es así, porque la ne-
se proyecta sobre todos los presu- cesidad de conceder la libertad con-
puestos comunes a la libertad con- dicional adelantada por razón de la
dicional legalmente establecidos, enfermedad grave con padecimien-
llegando a afirmar Borja MAPELLI tos ¡ncurables puede provocar que
CAFFARENA que prácticamente des- judicialmente se imponga imperati—
aparecen todos los requisitos que se vamente dicha clasificación, no sólo
exigen para aquélla. —evidentemente— mediante la re-
Suprimido en el nuevo Código Pe- solución del correspondiente recur-
nal el requisito de que el condenado so del interno contra su clasificación
lo esté a pena privativa de libertad de grado, sino directamente por exi—
superior a un año, aquél se materia- gencias precisamente de la urgencia
liza de diferente manera respecto en adoptar los beneficios previstos
de cada uno de ellos: en el artículo 60 del RP (en su caso
del artículo 92 del nuevo CP).
A).- Clasificación en tercer grado del De la misma manera que ——cons—
penado. Sus efectos se manifiestan tante una clasificación en tercer gra—
en un doble sentido. do— es posible el otorgamiento de
Primero, en lo que concierne a la la libertad condicional por el juez de
valoración de las circunstancias con- Vigilancia sin la existencia de previo
currentes determinantes de la indivi— expediente administrativo, la necesi—
dualizacíón del tratamiento. La cons— dad de la previa clasificación en ter-
tatación de la existencia de una en- cer grado puede ser provocada, a los
57
F
Y.
MOVIMIENTOS SO(TAI FS

mismos efectos por la autoridad ju- Por ello ni siquiera la configuración


dicial. Hasta tal punto eso es asique, del requisito de manera negativa —
la VIII Reunión de Jueces de Vigilan- ausencia de mala conducta, reflejada
cia Penitenciaria, aprueba el criterio en su expediente disciplinario— pue-
(63) de que "en los supuestos de de ser siempre satisfactorio, tal como
aplicación urgente de la libertad se desprende incluso de la Sentencia
condicional por razón de enferme- —ya citada— del Tribunal Supremo
dad grave e incurable, no hallándose de 19 de septiembre de 1991.
el interno clasificado en tercer gra-
do, el juez de Vigilancia Penitenciaria C).- Garantías de hacer vida honrada
podrá acordar dicha progresión de en libertad. El nuevo Código Penal
grado sin propuesta previa del esta— sustituye esta exigencia, como no po—
blecimiento, en el mismo auto en día ser de otro modo, porla constan-
que se conceda a aquél el beneficio cia de un pronóstico individualizado
de la libertad condicional". y favorable de reinserción social, emi—
tido por los expertos que el juez de
B).- Buena conducta. Vigilancia estimare convenientes.
El segundo de los requisitos a los En el caso que nos preocupa, esto
que se refiere el art. 90 del nuevo CP es, cuando por razones de humani—
(simplemente buena conducta) se ve dad se hace preciso el adelanta—
directamente afectado por los prin- miento dela excarcelación mediante
cipios inspiradores de la norma que la concesión de la libertad condicio-
comentamos. Si, con carácter gene- nal y resultan, consiguientemente,
ral deben ser flexiblemente interpre- superfluos los pronósticos favora-
tados, con mayor motivo cuando se bles de reinserción, los intereses que
trata de condenados afectados por entran en juego y deben ser sopesa-
una enfermedad grave e incurable, dos en cada caso concreto son de
toda vez que no se les puede aplicar doble naturaleza.
criterios generales de valoración de Primero: la exigencia de que que-
naturaleza positiva (predisposición den suficientemente cubiertas las
al trabajo, colaboración en distintos necesidades sanitarias y asistencia-
tipos de actividades laborales o edu- les del recluso. A este fin deben ir
cativas, disfrutes de permisos, etc.) encaminados los respectivos infor-
pues se encuentran impedidos para mes que reciba el juez de Vigilancia
ello. Además, si sólo excepcional— que tendrán que explicar conve-
mente fuese admisible establecer nientemente las condiciones de vida
una relación entre el comportamien- en libertad del beneficiario, en con-
to en prisión con su futura vida en li— creto de la atención médica que va
bertad en cualquier caso, con más a recibir y del apoyo familiar o de
motivo cuando la grave situación otro tipo (ya cívico, ya institucional)
personal del preso es condicionante que le va a amparar.
del adelantamiento de la excarcela- Segundo: la constancia de una re-
ción, independientemente de los lativa garantia de que la liberación
rasgos condicionantes de su perso- del mismo no supone un riesgo in-
nalidad. tolerable contra la paz ciudadana, al
58
“<?
Sida+cárcel=a nena de muerte

quedar controlada su presunta peli- LAS_ s_ow_c¡onges


grosidad. (reuvmd¡cacuones)
La valoración sobre la incidencia
en la seguridad ciudadana del ade-
lantamiento de la excarcelación del - Excarcelación inmediata y sus—
condenado-enfermo es una exigen— pensión de la pena de todas aque—
cia que deriva dela propia naturale- llas personas aquejadas de SIDA,
za político—criminal de la medida cuyo pronóstico sea grave, sin suje-
contemplada en el art. 196 del RP y ción a requisitos conductuales ni pe-
92 del nuevo Código Penal y no del nales; modificación en este sentido
carácter preferente o fundamental delo dispuesto en el art. 104 del RP
de la <<paz pública» frente a los de- y 196 del mismo texto.
rechos del individuo. En efecto, la - Implantación íntegra del PIJ en
<<misión política —de la pena y su todas las cárceles del Estado espa-
ejecución— de regulación activa de ñol, por organizaciones indepen-
la vida social que asegure su funcio- dientes, con criterios educativos, sa-
namiento satisfactorio, mediante la nitarios y no culpabilizadores. Im-
protección de los bienes de los ciu- plantación de narcosalas, con
dadanos», impone la obligación de dispensación gratuita de heroína
valorar, en cada caso, los riesgos por parte del Estado para casos de
que para la seguridad pública pue- heroinopatía de larga evolución.
de ocasionar la peligrosidad —cons- - Disolución de la Sanidad Peni—
tatada según los diferentes infor- tenciaría, integración en el Sistema
mes— del enfermo-condenado para Nacional de Salud (SNS), acompaña-
el caso de ser liberado anticipada- da de la transferencia de competen-
mente. Acreditada una peligrosidad cias penitenciarías a las naciones y
cierta —según el mayor o menor comunidades.
grado y los factores de apoyo exter- - Equiparación del disfrute de los
no— debe provocar desde una ne- derechos sociales de las personas
gación del beneficio hasta su conce- presas y del resto de la sociedad,
sión condicionada al cumplimiento reintegro de las cantidades adeuda-
de determinadas conductas, tal y das por motivo de la suspensión ile-
como las que prevé el artículo 105 gal de las pensiones no contributi-
del nuevo Código Penal. » vas, homologación de la condición
de minusválido/a con arreglo al RD
En definitiva, reclamamos se reco— 1971/99 en grado superior al 65%.
nozca que el principio de humani- - Auditoria de los presupuestos
dad es prevalente en la interpreta- económicos dela prisión destinados
ción de los artículos 196 del R.P. y a la manutención e infraestructuras.
92 del (ya antiguo) Código Penal y Aplicación de programas nutricio-
que los motivos de seguridad o con- nales, erradicación de los economa—
trol no pueden hacer incompatible tos, alimentos gratis a cargo de los
el ejercicio del derecho a la vida en presupuestos generales del Estado.
un Estado que se autodenomina so- - Implantación delos protocolos de
cial y democrático de derecho. prescripción de medicamentos anti-
59
1
x
MOVIMIENTOS SOFIA! FS

vih y profilácticos en igualdad con los miento, como responsables de reite—


tratamientos implantados en el SNS. rados (4.682 casos) delitos de lesio—
- Implantación de cuidados palia- nes imprudentes.
tivos e integrales. - Aplicación de la responsabilidad
- Depuración de las responsabili— objetiva de oficio, indemnización
dades penales de los/as responsa- por responsabilidad patrimonial a
bles políticos y técnicos que han todas las personas y familiares per-
desoído el mandato legal de articu- judicados porla actuación negligen—
lar medidas de prevención y trata- te de la Administración.

NOTAS: 17. Respuesta del Gobierno de 22 de


1. Informe anual, pág. 54. Enero de 2003 a la pregunta de C. Ay-
2. NR 2001, WIAD-ORS 1998. merich sobre implantación de PIJ.
3. Programa de Intercambio de Jerin- 18. RP 190/1996 de 9 de febrero.
guillas (PIJ) en el CP de Pamplona. 19. Art. 116 RD 190/96.
4. Idem. 20. Ídem. nota 10.
5. Informes y estudios: "Situación pe— 21. TARGA: Tratamiento Antirretrovi-
nitenciaria y depositos municipales ral de Gran Alcance.
1988—1996". 22. Informe presentado ante el Comi-
6. Citado en J. Ríos, J. Cabrera: Mil Vo- té contra la Tortura de la ONU, 29 perio-
ces Presas, pág. 169. do de sesiones, 11 de Noviembre, Gine—
7. Idem. nota 4. bra.
8. En Nigeria la prevalencia en pobla- 23. BOE 1999/1892 DGIP actualiza las
ción es del 18%. La OMS refleja que des— consignaciones económicas para la ali-
de 1989 hasta 1998 se han notificado mentación de los internos.
4.243 casos de SIDA, el 8,5% del total de 24. Recientemente se han creado ex-
España. pendurías de tabaco en cada CP, ven—
9. La conferencia Internacional (Berlín diendo al precio de venta al publico, re—
1993, OMS) difunde la directiva y políti— teniendo la ganancia para la prisión o
cas carcelarias sobre el tratamiento del para el mercader (¿?).
VIH-SIDA en prisión. 25. Mil Voces Presas.
10. Consejo de Europa, Recomenda- 26. Ver criterio del Ministerio de Tra—
ción 1080 (1980), entre otras. bajo y Asuntos Sociales de fecha
11. Instrucción 5/7/6/01 DGIP. 24/5/93.
12. Estrategia Nacional sobre Drogas, 27. Magistrado del Juzgado de lo So—
RD 1911/99. cial n.º 3 de León, Revista española de
13. De gran importancia entre otras Derecho del Trabajo, Pensiones no con-
en Andalucía, por parte de APDHA y F. tributivas y prisión.
Enlace. 28. BOE 16/7/99 que modifica la orden
14. Querella interpuesta por multitud de 1 de noviembre de 1990 RCL
de colectivos catalanes sensibilizados 1990/2305.
con la problemática del SIDA en la cárcel 29. Comisión de Asesoramiento Xuri-
contra los responsables políticos de la dico Penitenciario de Ourense.
sanidad penitenciarias, como autores de 30. Sentencia 20/1/2003, TSXG, Sala
un delito de discriminación y lesiones de lo Social, recurso suplicación
imprudentes. 1642/00.
15. 247 de 14 de octubre de 1996. 31. Art. 9 CE.
16. Ídem. nota 6.
60
K
Y
(Informan desde Cataluña)

Denuncia rontra las narcoceldas


Coordinadora de Solidaridad un no rotundo, a pesar de que el
con las Personas Presas Parlament aprobó por unanimidad
una proposición de ley en la que se
n Cataluña entran en servicio instaba a llevar adelante el progra-
las “narcoceldas" con denuncia ma. Tres días después de la reunión
a Fiscalía incluida. Los sindica- de funcionarios, los sindicatos ne-
tos piden que se paralice el progra- gociaron con la Generalitat el PIX e
ma de intercambio de jeringuillas. introdujeron una serie de modifica-
Después de que entrara en funcio- ciones, como que las jeringuillas no
namiento el programa de intercam— salieran del interior de unas celdas
bio dejeringuillas enla prisión de Ia- predeterminas, donde estarían con—
rragona, los sindicatos han presen- troladas por los funcionarios, y que
tado una denuncia ante la Fiscalía. no las repartiera el personal médico.
Piden, como medida cautelar, la pa- Los funcionarios acusan al direc-
ralización "inmediata" del programa tor de la prisión de obligarles a la
y que se persiga al director para exi- entrega de contenedores con jerin-
girle la responsabilidad penal por guillas en su interior, "siendo por el
obligar a los funcionarios a la no contrario funciones de esos mismos
persecución de delito, por posible trabajadores la persecución de la te-
prevaricación y por una posible vul— nencia de drogas. Con la menciona-
neración de los derechos de los tra- da orden, el director del centro nos
bajadores. La dirección del Centro obliga a cometer un delito delos ti-
presentó un escrito donde se recuer- pificados en el Código Penal". La de—
da que lo único que hizo fue cumplir nuncia añade que "la mencionada
con un mandato del Parlament y un orden obliga a unos trabajadores
acuerdo firmado con los sindicatos. que no tienen ninguna formación
Al principio ha habido en servicio higiénico-sanitaria, ni de transmi-
cuatro narcoceldas y se preveía que sión de enfermedades contagiosas
poco a poco estén en funciona- ni de manipulación dejeringuillas ni
miento ya las 16 previstas. Como de sus contenedores, ni delas medi-
hay tres internos por celda, hasta das a adoptar enla manipulación de
ahora sólo se han podido sumar al restos orgánicos, a asumir unos ries-
programa un total de 12, sin que gos evidentes para la salud, integri-
haya trascendido el número exacto. dad e incluso su vida".
Se sabe que en dichas celdas hay in— El escrito de los sindicatos de pri—
ternos no drogadictos para disper— siones va dirigido a la Fiscalía, aun-
sar sospechas. que fue presentado en el Juzgado de
Desde un principio, los funciona- Guardia. En éste, ayer por la tarde la
rios se han opuesto al programa de dirección del centro penitenciario
intercambio de jeringuillas (PIX). En presentó un documento para rebatir
una asamblea el 21 de abril dieron las acusaciones que han lanzado los
61
R
N:.
MOVIMIENTOS SOCIAI FS

funcionarios. Se recuerda, en primer como al PIX. En el mismo se indica


lugar, que la orden dada por dicha que se autoriza el uso del material de
dirección trata de ser ajustada a de- venopunción exclusivamente en el
recho porque respeta el mandato del interior delas celdas y es sancionable
Parlament de Catalunya, se ajusta a cualquier jeringuilla incautada fuera.
la instrucción del secretario de Ser- Programas parecidos se llevan a cabo
veis Penitenciaris, Rehabilitació ¡ Jus- en un total de 36 cárceles españolas
tícia Juvenil de la Generalitat así que dependen del Gobierno central.

(INFORMAN DESDE ARAGÓN)

Azerca del (entro de Reforma y


de la huelga de edumdores
MOLIMO res de la empresa Arquitempo Servi-
cios, que gestiona el personal edu-
OLIMO, asociación arago- cativo del centro, nos parece el mo-
nesa para la promoción y mento idóneo para hacer las si-
defensa delos derechos de guientes manifestaciones:
la infancia y la adolescencia, tiene 1. Resulta incomprensible que la
entre sus objetivos detectar y anali- responsabilidad educativa que tiene
zar todas aquellas situaciones que el IASS respecto a la ejecución delas
menoscaban los derechos de la in- medidas de internamiento sea dele—
fancia y adolescencia para hacerlos gada en una empresa de trabajo
públicos y demandar políticas globa- temporal, como es Arquitempo, in-
les que aporten soluciones efectivas cumpliendo el artículo 45.3 de la
en su prevención y tratamiento. propia Ley 5/2000, donde se recoge
Desde que entró en marcha la que "las comunidades autónomas
nueva ley de responsabilidad penal podrán establecer los convenios o
de los menores, venimos dedicando acuerdos de colaboración necesa-
tiempo y esfuerzo al seguimiento de rios con otras entidades, bien sean
las medidas que se contemplan en públicas, de la Administración del
ella; a los recursos destinados; y Estado, Local o de otras Comunida-
fundamentalmente al efecto que des Autónomas, o privadas sin áni—
tienen en la vida de aquellos chava— mo de lucro, para la ejecución de
les sobre los que se aplica. Este se- las medidas de su competencia...".
guimiento se ha hecho más intenso 2. El conflicto expresado por el
este último año, al estar en contac- personal educativo no es nuevo.
to regularmente con algunos chava— Desde hace años se viene arrastran-
les que están internados en el cen- do una incapacidad manifiesta para
tro de reforma San Jorge. elaborar un proyecto educativo es-
A raíz de la huelga de trabajado- table en el tiempo; personalizado en
62
N?
Acerca del Centro de Reforma

sus procedimientos; y que ofrezca te, inc/uidos los castigos corporales,


verdaderas alternativas de futuro a la reclusión en celda oscura y las
chavales cuya trayectoria vital está penas de aislamiento o de celda
impregnada de fracasos. Frente a solitaria, así como cualquier otra
esto únicamente se ha apostado por sanción que pueda poner en peligro
"mejorar" las formas, apostando la salud física o mental del menor. "
por la construcción de un macro-
centro en Juslibol. Unas mejoras, En el centro existe como sanción
que a nuestro entender, únicamente la reclusión en aislamiento. Tenemos
apuestan por un mayor control y se- conocimiento que incluso se han
guridad (mayor distancia y aisla- hecho reformas para habilitar un
miento de los entornos de vida nor- pabellón en el que pueden pasar
malizados), pero que no aportan hasta 15 días sin más contacto con
opciones educativas ni a los chava- el exterior que media hora de patio,
les, ni a los que trabajan con ellos. únicamente acompañados por al-
3. Todas las denuncias (nota de guien de seguridad. Además, duran-
prensa de los educadores) realiza— te ese periodo no les es permitido
das por el personal educativo son ningún tipo de lectura ni de distrac-
conocidas por la Dirección Provin- ción, y Ia comida es proporcionada
cial. Lo cual convierte en cómplice a través de una reja dela puerta. AI-
de los abusos a quien tiene la res- gunos chavales nos comentaban
ponsabilidad de garantizar un tra— que no se merecen ser “tratados
bajo de calidad con estos chavales. como perros".
No es de recibo que estemos pidien- Pero también hemos detectado
do responsabilidad a unos menores con asombro el gran número de
de edad, mientras algunos adultos chavales que en el centro toman
miran hacia otro lado sin hacer fren- medicación psiquiátrica. Tal y como
te a las suyas. Y no hablamos de recoge el artículo 55: “Solo se admi—
unos adultos cualquiera. nistrará medicamentos para un tra-
4. Además, en el funcionamiento tamiento necesario o por razones
cotidiano del centro San Jorge se es— médicas y, cuando se pueda, des—
tán violando sistemáticamente algu- pués de obtener el consentimiento
nas de las Reglas que la Oficina del del menor debidamente informado.
Alto Comisionado para los Derechos En particular, no se deben adminis—
Humanos de Naciones Unidas adop- trar para obtener información o
tó en su Asamblea General para la confesión, ni como sanción o me-
protección de los menores privados dio de reprimir al menor…“.
de libertad, con fecha 14 de diciem- No dudamos que algún chaval
bre de 1990: pueda en un momento puntual nece-
Entre algunos de los que no son sitar apoyo farmacológico, pero tam—
respetados destacamos el artículo bién es cierto que cuando se genera-
67 que afirma que "estarán estricta- liza su administración se convierte in—
mente prohibidas todas las medidas evitablemente en un instrumento de
disciplinarias que constituyan un control. Además nos han contado
trato cruel, inhumano o degradan- que, si se niegan a tomársela, se in—
53
¿x MOVIMIENTOS SOCIAI FS

forma negativamente al juzgado del San Jorge: la creación de una red


proceso personal de ese menor. amplia, diversificada y especializada
Por último, el artículo 30 de di- de pisos y recursos a pequeña esca—
chas reglas dice: “Los centros de de- la para los menores con medidas de
tención para menores deberán estar internamiento, que sirva realmente
descentralizados y tener un tamaño para llevar a cabo los objetivos de
que facilite el acceso de las familias resocialización del menor recogidos
de los menores y su contacto con en la Ley 5/2000 de responsabilidad
ellas. Convendrá establecer peque- penal del menor. Algo que está en el
ños centros de detención e integrar— polo opuesto a la creación de un
los en el entorno social, económico macrocentro (79 plazas) en las afue-
y cultural de la comunidad". Algo ras de la ciudad, tal y como preten-
que conecta plenamente con la pro- de el IASS.
puesta que MOLIMO viene realizan—
do desde hace tiempo respecto al 17 de septiembre de 2003

(pmunicado de ASAPA ante» las


ultimas muertes en la prision
de Zuera
ara la Asociación de Segui- conflictividad entre internos y en
miento y Ayuda a los Presos/as una notable dificultad para cumplir
de Aragón (ASAPA) la última los programas de tratamiento y de
muerte en Zuera no es una muerte intervención. Refleja también este
más, ni debemos considerarla como informe que incluso las cortas con-
un hecho aislado, sino que es el re- denas carecen en general de cual-
sultado previsible debido al actual quier efecto resocializador.
estado de los Centros Penitenciarios Desde ASAPA nos planteamos:
de nuestra Comunidad Autónoma. ¿dónde queda el derecho a la rein-
Esta penosa situación también ha serción y tratamiento de los perso-
sido recogida en el último informe nas presas?, ¿cómo van a realizarse
del Defensor del Pueblo, en el cual tratamientos individualizados y
hace incidencia ((en el preocupante efectivos con esta masificación en
incremento de la población peniten— los Centros?
ciaria que se deriva en el hacina— Constatamos que las cárceles pa-
miento que sufren algunos centros» decen una mala salud crónica: en la
(tal como sucede en las cárceles de última década han fallecido 2.121
nuestra comunidad, tanto en Daro- reclusos en prisión; el 10% de estas
ca como en Zuera). Esta saturación muertes por sobredosis entre rejas;
redunda en un incremento de la todos los años se suicidan más de
64
“<?
Comunicado de ASAPA

20 internos; en el año 2000 seis pre— sanitario en los centros penitencia—


sos murieron por metadona no rios y que se asuman Ias responsabi-
prescrita. lidades, puesto que el resultado de
En Zaragoza desde la apertura de toda esta gestión incoherente e iló-
la macrocárcel han fallecido seis gica esta provocando como desen—
personas (tres por suicidio, y las lace la muerte de personas. Algo de-
otras tres todavía están sin esclare- masiado serio para que sólo se con—
cer), y una persona falleció en el CP tabilice como una muerte más, sin
de Teruel por sobredosis de metado— que se investigue.
na y pastillas. Desde ASAPA denunciamos las ac-
Este es un problema de la Admi- tuaciones cínicas e irresponsables
nistración que no quiere admitir el por parte de la Admón. Penitencia-
incremento de consumo de drogas ria y exigimos que se tomen las me-
que <<circulan» por prisión, con lo didas que correspondan.
que cabe destacar la incoherencia de Proponemos a la comisión de De—
Instituciones Penitenciarias al aplicar rechos Humanos de las Cortes de
en prisión programas sanitarios con- Aragón la creación de una mesa de
tradictorios, puesto que no admite seguimiento ——constituida por re-
que las drogas <<circulan», y defiende presentantes de los distintos colecti-
tratamientos de metadona cuando vos que intervienen en la problemá-
es evidente que el objetivo real no es tica penitenciaria así como de los
tratar a las personas sino reducir la distintos grupos parlamentarios—
conflictividad en las cárceles. que investigue y controle el efectivo
Además, parcelas fundamentales cumplimiento de los derechos fun-
de la salud como la atención psi- damentales y constitucionales delas
quiátrica están absolutamente des- personas presas en la Comunidad
atendidas, reduciéndose los trata- de Aragón.
mientos a la mera prescripción far- La impunidad no puede rodear la
macológica. El abuso de los muerte de las personas, y mucho
fármacos en combinación con la menos en una institución que se su-
metadona puede tener resultados pone garante y responsable de las
letales. personas que custodia.
Ante esta grave situación, desde
ASAPA exigimos un mayor control ¡No más muertes en Prisión!

55
X

MOVIMIENTOS SOCTAI FS

(|NFORMAN DESDE CA'I'ALUÚA)

El 059011 de la UB presenta el
informe sopra las condicioqu de
encarcelamrento en Cataluna
El pasado día 15 de octubre fue nombres y apellidos de los presos-
presentado en rueda de prensa víctimas de los mismos, indicación
el informe "Análisis de las con- de núm. de diligencias judiciales y
diciones de| encarcelamiento en Ca- de los Juzgados de Instrucción don-
talunya", elaborado por un equipo de se tramitan).
de investigación del Observatori del 10) Déficit de puestos de trabajo
Sistema Penal ¡ els Drets Humans de para los presos.
la Universitat de Barcelona. En dicha 11) Situación de indefensión jurí-
presentación se explicaron las líneas dica (Catalunya cumple a finales de
generales de la investigación que se 2003 los 20 años de transferencias
traducen en la existencia de 175 si- penitenciarias y aún no se han crea-
tuaciones problemáticas, las cuales, do los Servicios de Orientación Jurí-
a su vez, han sido reconducidas a un dico-Penitenciaria que existen en
total del 14 problemáticas eje, en el otras Comunidades Autónomas del
sentido de que las mismas atraviesan Estado español).
toda la problemática carcelaria anali- 12) Orientación ideológica de un
zada. Estas problemáticas eje son: sector del funcionariado penitencia-
1) Aumento dela cantidad de pre- rio, de filiación ultraderechista y
sos/as y masificación de los centros. que aboga por soluciones mera—
2) Falta de profesionales en las mente "regimentales", de orden y
cárceles. disciplina.
3) Predominio de la disciplina por 13) Aplicación restrictiva de la le-
encima de la rehabilitación. gislación penitenciaria.
4) Fracaso de los objetivos reso- 14) Política de opacidad delos res—
cializadores. ponsables políticos penitenciarios
5) Existencia de condiciones de (en alusión a que la Secretaría de
vida degradadas. Ejecución Penal prohibió la entrada
6) Grave deterioro de la salud y en la totalidad de las cárceles a los
mortalidad. investigadores del Observatorio).
7) Sufrimiento psicológico y fami-
liar. Al dia siguiente, la prensa escrita,
8) Graves discriminaciones por ra— radiofónica y televisiva se hizo eco
zones de género, etnia y nacionali- del Informe aludido de modo am—
dad. plio. Ante esa divulgación periodísti-
9) Constatación de casos de tortu- ca, el titular de la Secretaría de Eje—
ra y malos tratos (señalados con los cución Penal del Departament de
66
El OSPDH de la UB K
¡K
Justicia del gobierno catalán, Ramón El Informe completo puede ser
Parés, descalificó el informe, tachó consultado en la Web del Observa-
de “radicales" a los autores y señaló torio: www.ub.es/ospdh (dentro de
que ha encargado otro informe al su apartado de investigaciones).
Institut Catalá de Drets Humans.

(Informan desde Argentina)

Pe_n_a_s ¡legitima_s_ en la Argentina:


nrrs_ron ¡: reelgs¡on perpetua por
delitos cometidos antes de los
dieriocho años
Claudia Cesaroni trascendencia, porque el Tribunal Oral
de Menores Nº 1 aplicó las penas
ucas Matías Mendoza y Clau- más graves que prevé el Código Penal
dio David Núñez fueron con- argentino a personas que, al momen-
denados por el Tribunal Oral de to de cometer los delitos que se les
Menores Nº 1 de la Capital Federal, imputaron, eran niños, según la Con-
el 12 de abril de 1999, a la pena de vención Internacional de Derechos del
prisión perpetua y reclusión perpetua Niño. Este instrumento de derechos
respectivamente, por hechos cometi- humanos tiene jerarquía constitu-
dos cuando tenían dieciséis y dieci- cional desde 1994, y su aplicación
siete años. La condena fue confirma- es obligatoria para todos los jueces
da por la Sala II Cámara Nacional de y tribunales nacionales.
Casación Penal, y los recursos presen- Con estas decisiones judiciales,
tados ante la Corte Suprema de Justi- que luego se repitieron en siete ca-
cia de la Nación fueron rechazados. sos más, la Argentina se coloca en
César Alberto Mendoza (sin rela— una situación gravísima en cuanto
ción de parentesco con Lucas), fue al respeto a los derechos de los jó-
condenado por el Tribunal Oral de venes y adolescentes: es el único
Menores N.º 1 de la Capital Federal país en América Latina que impo-
el 28 de octubre de 1999 a la pena ne estas penas. Cabe destacar,
de prisión perpetua, acusado de de- sólo a título de ejemplo, que Bra-
litos cometidos a los diecisiete años sil aplica para estos casos un má-
de edad. La condena quedó firme al ximo de tres años de prisión, al
rechazarse los sucesivos recursos in- igual que Perú, Guatemala y Boli-
terpuestos ante la Sala II de la Cá- via, 3 y 5 años, según la franja
mara Nacional de Casación Penal. etárea. Ecuador, 4 años. Venezue-
Estas condenas tienen una especial la, 3 y 7 años, según la franja etá-
67
X
x
MOVIMIENTOS SOFIAI Fº.

rea. La legislación española fija máxima seguridad, esperan junto a


como el máximo de la pena de sus familias que su pedido sea escu-
prisión para casos similares cinco chado. No piden la libertad inme-
años de detención efectiva. diata, que les correspondería si la
En junio de 2002, la Defensora Ofi- Argentina contara con una ley penal
cial ante la Corte Suprema de Justicia juvenil similar a las de los demás
de la Nación, Dra. Stella Maris Martí— países latinoamericanos, respetuosa
nez, efectuó una presentación ante la de los lineamientos que la comuni-
Comisión Interamericana de Dere— dad internacional ha establecido
chos Humanos denunciando estas para estos casos: quela pena de pri-
condenas, que pueden acarrearle a la sión se aplique como última opción,
Argentina la imposición de sanciones y por el menor plazo posible. Piden,
en el ámbito internacional. El Procu- solamente, que las penas de prisión
rador Penitenciario (cuya función es perpetua que les impusieron, a to—
la protección de los derechos huma- das luces ilegítimas, se reduzcan ra-
nos de las personas privadas de liber- zonablemente, adecuándolas a mí—
tad en el ámbito federal) se presentó nimos estándares internacionales.
en carácter de Am¡cus Curiae ante la Entendemos que la continuidad
CIDH, acompañando las presentacio- de esta situación ubica a la Argenti—
nes de la Defensora Oficial, junto con na en un lugar deshonroso, cual es
un dictamen emitido por el Observa- el de una Nación que viola los dere-
torio del Sistema Penal y los Derechos chos humanos que se compromete
Humanos de la Facultad de Derecho a respetar, por lo que un conjunto
de la Universidad de Barcelona. de organismos defensores de los de-
Pero ¡ndependientemente dela de- rechos de la infancia y adolescencia,
nuncia efectuada ante aquel organis- instituciones y personas convenci-
mo internacional, es responsabilidad das de la necesidad de terminar con
del Estado argentino reparar esta si— esta vergúenza, trabajan en conjun-
tuación. Es por ello que, en el marco to para evitarlo. Para ello contamos
de una huelga de hambre que lleva- con la siempre necesaria solidaridad
ron a cabo, en el mes de junio de internacional, como la expresada en
2003, las familias de los tres jóvenes los pronunciamientos firmados por
fueron recibidas por autoridades del los profesores de derecho penal de
gobierno nacional del Área de Dere- la Universidad de Barcelona, Rober—
chos Humanos y de Justicia. Ante el to Bergalli e Iñaki Rivera Beiras; y
secretario de Justicia y Asuntos Peni— por Mónica Aranda Ocaña, secreta-
tenciarios se presentó un pedido de ria de la Asociación contra la Cultu-
conmutación de penas, consideran- ra Punitiva y la Exclusión Social.
do que éste es el modo más adecua- Que la Argentina deje de lado dé-
do para que el Poder Ejecutivo Na— cadas de impunidad y de violación
cional resuelva la cuestión. de los derechos individuales y colec-
Este trámite está en pleno des- tivos de su pueblo, también depen-
arrollo, y Claudio Núñez, César de de que se reparen situaciones
Mendoza y Lucas Mendoza, que lle- como la denunciada, con la premu-
van siete años presos en cárceles de ra que estos casos exige.
68
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… pnuúrnco
K
y
Manifiesto contra las
reformas penales del
Gobierno
as asociaciones y colectivos conflictividad y la violación de dere-
abajo firmantes queremos ma— chos fundamentales en las cárceles.
nifestar nuestra radical oposi- La delincuencia es expresión de
ción a la práctica totalidad delas re— conflictos sociales, al menos en par-
formas penales propuestas por el te, por lo que la solución debe ser
Gobierno del Partido Popular. social. Por el contrario, las reformas
Consideramos que los aspectos suponen una profundización en el
esenciales de la reforma son contra— conocido fenómeno de la "crimina-
rios a los derechos humanos, a los lización de la pobreza". Las refor-
textos internacionales y a la Consti- mas basadas en la tolerancia cero
tución. Así, la inhumanidad de las con el pequeño delincuente produ-
penas de prisión de hasta 40 años; la cen el aumento de la represión fren—
exclusión del acceso al tercer grado te a los sectores sociales más desfa-
yla libertad condicional en unos pla- vorecidos, que precisamente por
zos que hacen ilusorias las finalida- ello se ven inmersos en este tipo de
des constitucionales de la pena; la actividad ¡legal. La reforma tiene
generalización dela prisión provisio- una orientación xenófoba, clasista y
nal; el incremento de las penas para socialmente excluyente.
muchos delitos; la extraordinaria pe- Las reformas se basan en la difu-
nalización dela reincidencia; el trato sión de datos inexactos, cuando no
dado a los extranjeros, etc. manifiestamente falsos, sobre creci—
El conjunto de las reformas con- miento dela criminalidad, con el fin
duce a un mayor hacinamiento en de señalar a los sectores sociales
unas prisiones ya masificadas por más desfavorecidos como culpables
efecto del Código Penal de 1995. Te- de todos los peligros existentes, so—
niendo en cuenta las condiciones en bre todo a los inmigrantes.
las que se encuentran las cárceles Una mayor seguridad, para que
que no son capaces de proteger los tod©s disfrutemos pacíficamente
derechos fundamentales a la vida, a de nuestros derechos y de nuestra
un trato digno, a la salud, ni en las libertad, no se consigue con la más
antiguas cárceles, ni en las nuevas dura represión, con el palo y tente
construidas en las dos últimas déca- tieso a los sectores sociales más des-
das o las siete previstas, se incre- favorecidos, sino con la inclusión de
mentará peligrosamente el nivel de la política criminal en la política so-
71
R
N:.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

cial, educativa, laboral, etc., desde garantía de resolución eficaz del


una óptica preventiva. conflicto social a que apunta todo
Como posibles y reales víctimas delito.
de delitos no podemos tolerar que 5) Reconsiderar la cuantía de
se nos utilice como coartada para pena asociada a determinados deli-
restringir derechos y libertades, no tos patrimoniales y contra la salud
queremos que se prive de libertad pública a todas luces desproporcio-
para protegernos, no en nuestro nada por excesiva en el Código Pe-
nombre. nal vigente.
Por todo ello, PROPONEMOS, 6) El respeto a la dignidad de la
conforme a los Planteamientos de persona humana, el modelo de or-
política penal y penitenciaria que en ganización social consensuado en el
su momento suscribieron un signifi- Estado Social y Democrático de De-
cativo conjunto asociaciones de recho y la proscripción de las penas
todo el Estado, y con el fin de ga- inhumanas y degradantes deben su-
rantizar la convivencia y resolver los poner la desaparición efectiva de
conflictos sociales mediante méto- la cadena perpetua. En particular,
dos más humanos, más eficaces y se procurará que, en ningún caso, el
realistas: tiempo efectivo de prisión sea su-
1) Trabajar más y mejor en políti- perior a los 15 años, habida cuen-
cas sociales, laborales, educativas, ta de los irreversibles efectos que
etc., a fin de que no haya que la- una pena superior a ese tiempo pro-
mentar lo que se podía haber preve- voca en la persona presa, pudiendo
nido. frustrar de modo definitivo toda
2) Establecer mecanismos que eli- vuelta a la sociedad y abortar el mi-
minen cualquier duda sobre el res- nimo atisbo de reinserción social.
peto a los derechos de las perso- 7) Se debe proceder a la excarcela-
nas detenidas reconocidos en la le— ción y acogimiento extrapeniten-
gislación procesal, desde el ciarios de todas las personas con
momento de la detención, durante enfermedades graves mediante la
su traslado a dependencias policia— libertad condicional anticipada.
les y durante la detención policial. 8) Debe favorecerse una política
3) Propiciar alternativas a la pri- penitenciaria tendente a que haya
sión, porque la prisión supone una el menor número de presos posi-
respuesta cara, generadora de su- ble, por el menor tiempo y en las
frimiento e ineficaz para evitar la mejores condiciones posibles. Se fa-
reincidencia y garantizar la seguri— vorecerá que el régimen ordinario
dad ciudadana. sea el de tercer grado.
4) Incorporar al discurso social so- 9) Entendemos que el tiempo en
bre el delito y el sistema penal a la prisión no puede renunciar a la for-
víctima. Sólo la efectiva integración mación y capacitación educativa y
social del infractor y la salida de la laboral y, al mismo tiempo, no debe
situación de asimetría social en que implicar la renuncia al derecho al
pueda encontrarse (por carencias, trabajo con todas las garantías y a
drogodependencia, etc.) es la mejor un sueldo digno que les permita
72
NY€
Manifiesto contra las reformas

subvenir sus necesidades y las de los GI, ASAPA (Asociación de Seguimien—


familiares a su cargo. to y Apoyo a presos en Aragón), As-
10) Se deben incluir en la política kagintza, Asociación Apoyo, Asocia-
penitenciaria perspectivas de gé- ción Casa Encantada, Asociación
nero, de manera que no se perpe- Pre$.0.$. Galiza, Asociación Susterra,
túe la secular discriminación de la Beltza, Bidesari, Bilbo Etxezabal, Bizi-
mujer dentro de los muros de las tegi, Comisión Anti-SIDA de Bizkaia,
prisiones. Comisión Ciudadana AntiSida de
11) Se deben buscar soluciones a Álava, Comisión Sida-Cárcel da Coor-
la situación de las personas extran- dinadora de Solidaridad con las Per-
jeras en prisión, 12) de manera que sonas Presas (CSPP), Etorkintza,
se favorezca su integración social. Federación Provincial de Drogode—
Se deben garantizar unas infraes- pendencias Liberación, Fundación
tructuras dignas, una diversidad de Gizakia (Proyecto Hombre Bizkaia),
centros penitenciarios, una adecua- IRSE (Instituto de Reintegración So-
ción de las instalaciones y un perso- cial de Euskadi), Coordinadora Con-
nal penitenciario adecuado y con tra la Marginación de Cornellá, La—
unas condiciones laborales dignas, gun Artean, Observatori del Sistema
todo ello orientado a la consecución Penal ¡ els Drets Humans de la Uni-
de los fines de reeducación y rein— versitat de Barcelona, Pastoral Peni-
serción social. tenciaria de Bilbao, Pastoral Peniten-
ciaria de Vitoria, Salhaketa-Araba,
Asociaciones y colectivos firmantes: Salhaketa—Bizkaia, Salhaketa-Iruña,
Adsis Bestalde, Alderdi Feminista — Zubia, Zubietxe
Partido Feminista de Euskadi, ACAS—

73
)! DO€€IER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

Sobre las recientes


reformas penales
LA ASOCIACIÓN PRO DERECHOS procedimiento abreviado y ha crea—
HUMANOS DE ANDALUCÍA do el procedimiento de enjuicia-
quiere poner de manifiesto su miento rápido de determinados de-
postura de rechazo ante las reformas litos y el juicio de faltas inmediato.
legales que se están llevando a cabo La Ley de Enjuiciamiento Criminal
desde el Gobierno, con la anuencia que regula los procesos penales es
dela oposición al agravar y perpetuar de 1882, ley que ha sufrido nume-
la exclusión social de los más desfa- rosas reformas parciales, pero nun-
vorecidos criminalizando la pobreza. ca se ha acometido una reforma en
El Pacto de Estado para la Justicia profundidad y de manera completa.
también conocido como Libro Blanco Con el pretexto de acabar con la in-
para la Justicia, suscrito en mayo de seguridad ciudadana combatiendo la
2001 por el Gobierno del PP y por el delincuencia se ha creado un proce—
PSOE, ha tenido como criterios recto- dimiento para el enjuiciamiento rápi-
res la tolerancia cero para la clase do de determinados delitos. Paradóji-
más desfavorecida —Ios excluidos so- camente se quiere solucionar un pro-
ciales— y vista gorda para los privile— blema social con una ley procesal.
giados, el castigo inmediato a los de— Se enjuician por este procedimien—
lincuentes —sobre todo a los que to delitos que se inician pór atestado
menos capacidad de defensa tie— policial —se está dando un protago-
nen— y una apuesta porla seguridad nismo excesivo a las fuerzas y cuer-
en detrimento de las libertades —pú- pos de seguridad del Estado—; con
blicas y privadas— y de las garantías. presencia del acusado; la pena a im-
Fruto de esta política es la reforma de poner debe ser hasta 5 años de pri—
la legislación penal, procesal y peni— vación de libertad —a todas luces
tenciaria que está en marcha y que excesivo, debería al menos ponerse
analizamos a continuación. el tope en 3 años que es el límite
para los delitos menos graves—;
Ley de Enjuicia- debe tratarse de delitos flagrantes y
m¡_en_to Criminal: en concreto ciertos delitos específi-
erm_uc¡amiento cos: lesiones, coacciones, malos tra-
rapido de determi- tos, hurto, robo, robo de uso y deli-
nados delitos tos contra la seguridad del tráfico, o
cuando una instrucción sea presumi-
Se ha regulado en la ley 30/02 y en blemente sencilla.
la LO 8/02 que entró en vigor el 23 La novedad de este procedimien-
de abril de 2003. Ha modificado el to radica en que la instrucción —in-
74
*?
¿obre las recientes reformas

vestigación de los hechos— y las Se establece, para las penas de du—


pruebas se realizan durante la guar— ración superior a 5 años un "período
dia del juzgado, pudiendo llegar el de seguridad", dela mitad de la con-
acusado a una conformidad en el dena impuesta, en las que no se po-
mismo juzgado de guardia o cele- drá acceder al tercer grado. Esta me-
brarse el juicio en 15 días. dida va a resultar muy gravosa para
Esta regulación del procedimiento las personas condenadas a penas de
de enjuiciamiento rápido plantea el larga duración, que van a pasar mu—
conflicto entre el derecho del ciuda- chos años sin poder progresar de
dano a una respuesta judicial en pla- grado, a pesar de su comportamien-
zo razonable —Ia víctima en su re- to y su evolución, y van a disfrutar
paración y el acusado en la incerti- de menos permisos, dificultando el
dumbre que padece durante el trabajo resocializador con ellas.
proceso— frente al derecho del acu— Se aumenta el límite máximo de
sado a un proceso con todas las ga- las penas hasta los 40 años. Esta me—
rantías y al derecho de defensa (dis- dida niega la posibilidad de la rein-
poner de todos los medios y tiempo serción social para Ios/as autores/as
necesarios para preparar la defensa). de determinado tipo de delitos, con-
Ante este conflicto de derechos se tradiciendo el art. 25.2 de la Consti-
debería haber optado por un proce- tución. Además es discutible que no
so más garantista y respetuoso con se trate de una pena inhumana o
los derechos del acusado, al ser el degradante, pues se trata de una ca-
derecho de defensa un derecho fun— dena perpetua encubierta y que
damental que debe ser especialmen— afecta a la dignidad de la persona,
te protegido. Por tanto, esta reforma contraviniendo los art. 10.1 y 15 CE.
supone una vulneración del derecho La posibilidad de referir los benefi-
a la tutela judicial efectiva, derecho cios penitenciarios y el cómputo de
fundamental y condición imprescin- tiempo para la libertad condicional a
dible del Estado de Derecho. la totalidad de las penas impuestas,
si la condena a cumplir resultase in-
Cum limiento ínte- ferior a la mitad de aquélla, se con-
gro e las penas y vierte en preceptiva en los supuestos
reformas en los que el código permite sobre-
penitenciarias pasarlos 20 años de condena. El re-
sultado práctico es que las personas
La Ley Orgánica 7/2003, de 30 deju- con condenas muy elevadas tendrán
nio, de Medidas de Reforma para el casi imposible el acceso a estos be-
Cumplimiento Íntegro y Efectivo de neficios, negándoles la posibilidad
las Penas, introduce una serie de de una preparación para la vida en
modificaciones en ciertas normas libertad, característica esencial de
penitenciarias recogidas en el Códi- los sistemas penitenciarios progresi-
go Penal, la Ley Orgánica del Poder vos, y afectándose de nuevo la
Judicial, la Ley Orgánica General Pe- orientación resocializadora que de-
nitenciaria y la Ley de Enjuiciamien— ben tener todas las penas.
to Criminal: Se modifica el régimen de la liber-
75
J
“R
DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

tad condicional, exigiendo que el El adelantamiento de la libertad


pronóstico de reinserción social sea condicional a las dos terceras partes
emitido en el informe final del cen— de la condena se excluye, con la
tro penitenciario, dejando en manos nueva redacción, para los delitos de
delos centros penitenciarios la posi- terrorismo o cometidos en el seno
bilidad de impedir el acceso a este de organizaciones criminales.
cuarto grado de cumplimiento, con En el caso de revocación de la li-
la indefensión yla falta de garantías bertad concedida, para condenados
de imparcialidad que esto supone. por terrorismo, el penado cumplirá el
Para acceder a la libertad condi- tiempo que reste de cumplimiento de
cional y al tercer grado, se introdu— la condena con pérdida del tiempo
ce el requisito de la satisfacción de pasado en libertad condicional. Nue—
la responsabilidad civil derivada del vamente se olvida el legislador de
delito, para cualquier tipo de delitos nuestro sistema progresivo, en el que
y, en principio, en cualquier circuns— la libertad condicional es un grado
tancia, requisito que se convierte en más de cumplimiento (art. 72 LOGP),
una agravación de la condena por por lo que el tiempo pasado en esta
cuestiones económicas, una autén— situación tiene que computarse
tica pena a la pobreza y que, para como pena cumplida, suponiendo en
los casos con responsabilidades civi- caso contrario un alargamiento de la
les muy elevadas, va a suponer la ex- condena impuesta en la sentencia.
clusión total de estos beneficios. Se establece el efecto suspensivo
Además, se permite a los tribunales del recurso contra resoluciones en
encomendar a la Agencia Estatal de materia de clasificación de penados
Administración Tributaria la investi- o concesión de libertad provisional,
gación de las rentas presentes y fu— desconociendo la doctrina del TC
turas, mientras no se satisfaga esta que reconoce la eficaciainmediata
responsabilidad civil, hecho que de las resoluciones que acuerdan la
para algunos delitos se va a conver- libertad provisional.
tir en un control del patrimonio de La Ley Orgánica 6/2003, también
la persona durante toda su vida, de 30 de junio, de modificación de
afectando fundamentalmente a su la LOGP restringe la intervención de
derecho a la intimidad. las universidades públicas en la cár—
Para los casos de terrorismo, se in- cel a las que firmen un previo con-
troduce un extenso párrafo que ex— venio con la Administración peni-
plica cuándo se entiende en estos tenciaria e indica que éstos se sus-
casos que hay pronóstico de reinser- cribirán preferentemente con la
ción social, sobrepasándose lo que UNED. Una vez más estamos ante
considera la doctrina que debe ser una reforma por motivos políticos,
la reinserción en un sistema demo- pues lo que se pretende es evitar
crático. En efecto, en un Estado de que l©s pres©s vasc©s estudien en
Derecho no es lícito exigir cambios la Universidad del País Vasco.
en la personalidad o la ideología de Hay que resaltar también en rela—
las personas, sino simplemente la ción a estas dos leyes aprobadas el
no comisión de delitos. 30 de junio el hecho de que entren
76
N?!
Sobre las recientes reformas

en vigor al día siguiente de su publi- la reincidencia cualificada que con-


cación en el BOE, no previendo una siste en que cuando se condena por
vacatio Iegis razonable para dar 3 delitos de la misma naturaleza se
tiempo a conocer la normativa. impondrá la pena superior en gra-
El endurecimiento de las condicio— do. Esto supone un aumento de la
nes de vida carcelarias, que suponen respuesta punitiva.
estas reformas, va a afectar muy ne- - Medidas alternativas para extran-
gativamente a la recuperación de al- jeros. Se impone al juez la obligación
gunas personas recluidas, fomentan- de adoptar la medida de expulsión
do Ia violencia y la reincidencia en el para los extranjeros no residentes le-
delito que supuestamente se quiere galmente en España cuando sean
frenar. Es preocupante, además, la condenados a penas privativas de li-
creciente especialización de la legis- bertad inferior a 6 años. Por lo que se
lación aplicable a determinado tipo da la paradoja de que se puede ex—
de delitos, que configura un auténti- pulsar a una persona por cometer
co derecho penal del enemigo, ca- una falta, expulsión que se convierte
rente de garantías y desproporciona- en la única medida que obligatoria-
do. Más peligroso si se utilizan con- mente debe imponer el juez. Así se
ceptos que no están muy claramente recoge expresamente que no se le
definidos como "terrorismo" u “or- puede suspender ni sustituir la con-
ganizaciones criminales", en el que dena a los extranjeros no residentes
pueden entrar multitud de conduc- legalmente en España. Esto supone
tas, algunas de las cuales no debie- claramente un trato discriminatorio y
ran ni siquiera ser tratadas por el de- una vulneración del derecho funda-
recho penal. mental a la igualdad.
— Se crea una nueva figura que es
Código Penal y Ley la de la reiteración de faltas, que
sobre Derechos y convierte la conducta en delito.
Libertades de los Cuando una persona cometa en el
Extra_n¡eros en plazo de un año tres faltas de lesio-
Espana nes o de hurto, la cuarta se convierte
en delito. Se está favoreciendo el fin
Se ha regulado en la Ley 11/03, de de prevención general de la pena
29 de septiembre de 2003 que ha con el objetivo de fortalecer la res-
entrado en vigor el 30 de septiem- puesta punitiva. Asimismo se está
bre de 2003. instaurando un derecho penal de au-
Se ha modificado parcialmente el tor —centrado en la conducta de la
Código Penal en relación a: persona y no en el hecho cometido.
— Reglas para la determinación de - En cuanto a la violencia domésti—
la pena por parte del juez. En gene- ca se produce un endurecimiento de
ral, cuando concurren atenuantes se las penas a imponer, bien creando fi-
produce una rebaja menor de la guras específicas como el considerar
pena a imponer y cuando concurren delito de lesiones una conducta que
agravantes se endurece mucho la por su levedad es una falta de lesio-
pena a imponer. Se crea la figura de nes pero que al cometerse en el seno
77
R
“¡
DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

de la familia se considera —en cuan- vos contaba con reformar la institu—


to a la pena a imponer— como si de ción de la prisión provisional para
un delito se tratase; bien consideran- que estuviera acorde con la jurispru-
do agravantes circunstancias tales dencia del Tribunal Constitucional y
como realizar los actos en presencia fuese respetuosa con los derechos
de menores o en el domicilio común. constitucionales a la libertad y a la
- Se he modificado parcialmente la presunción de inocencia.
Ley 4/00 sobre Derechos y Libertades El proyecto que está en marcha,
de los Extranjeros en España en rela- sin embargo, no ha conseguido el
ción a que, cuando se decrete expul— objetivo propuesto y así hay que
sión, llevará aparejada la extinción destacar los siguientes aspectos:
de cualquier autorización adminis- En la exposición de motivos se re-
trativa para permanecer en España. cogen los fines que debe inspirar el
Es muy alarmante la regulación de instituto de la prisión provisional
la medida cautelar de la expulsión en son su carácter excepcional: la regla
el marco de un procedimiento san— general debe ser la libertad del im-
cionador administrativo: “residencia putado y ha de ser una medida pro-
ilegal". Así, iniciado un procedimien- porcional, al ser restrictiva de dere-
to sancionador, se le puede obligar a chos fundamentales como la liber-
la persona a presentación periódica, tad y la presunción de inocencia
a residir obligatoriamente en deter- Sin embargo, dichos fines no se
minado lugar, a la retirada del pasa- respetan en la regulación de la pri-
porte, a la detención cautelar por un sión provisional que es definida
máximo de 72 horas o al interna- como la medida cautelar consistente
miento preventivo. Es decir, se pue- en la privación de libertad del impu—
de, por estar incurso en un procedi- tado por un tiempo máximo estable—
miento administrativo sancionador, cido en la ley y que tiende a asegurar
privar a una persona de libertad. Esto el desarrollo normal del proceso, a
supone una vulneración flagrante de asegurar la ejecución del fallo y a evi-
derechos fundamentales a la igual- tar el riesgo de reiteración delictiva.
dad, al derecho a no discriminación La medida cautelar es decretada
por razón de nacionalidad, a la digni- por el juez, pero debe ser interesada
dad de la persona, a la libertad... por el Ministerio Fiscal 0 la acusación
particular en el plazo de 72 horas en
Reforma de la Ley una audiencia en que se pueden pro-
de_ Enjuiciamiento poner pruebas y debe resolverse por
Criminal y del Auto motivado. Para ser acorde con
Código Penal los principios que la inspiran debería
celebrarse en un plazo más razona—
1.— Proyecto de Modificación de la ble, como sería en 24 horas
Ley de Enjuiciamiento Criminal: la En cuanto a los supuestos en los
prision provisional que será decretada la prisión provi—
sional, debe tratarse de hechos que
El Pacto de Estado para la Refor- presenten caracteres de delito, que
ma de la Justicia entre otros objeti- aparezcan motivos bastantes para
78
Sobre las recientes reformas K
¡K
creerlo responsable de los hechos al ración delictiva, nos enfrentamos a
imputado. Ha de servir para asegu- una medida de seguridad predelicti—
rar Ia ejecución del fallo. va centrada en la personalidad cri-
Finalidades que persigue la pri— minal de una persona no condena-
sión provisional: da, vulnerando claramente el princi-
- Se decretaría prisión provisional pio de presunción de inocencia.
cuando exista riesgo de fuga del im- En relación a la detención o prisión
putado. Para ello el juez debe valo- incomunicadas, como regla general
rar Ia naturaleza del hecho y la si— se establece que durará el tiempo es—
tuación familiar, laboral, familiar del trictamente necesario para practicar
imputado. con urgencia diligencias tendentes a
- Para asegurar el desarrollo nor- evitar riesgo de fuga, alteración de
mal del proceso: se decretaría prisión pruebas y reiteración delictiva. Sin
provisional cuando pueda destruir embargo, podrá ser prorrogada 5
pruebas, influir en peritos, testigos. días más con los mismos fines. Y para
- Evitar riesgos de reiteración de- el caso de investigación que afecten a
Iictiva. actividades propias de la delincuen-
cia organizada se puede prorrogar 5
"Será decretada" la obligatorie- días más, y cuando la causa ofreciere
dad de la aplicación de esta media méritos para ello se puede prorrogar
por el juez, limitando el margen que 3 días más. Esta ampliación de los
pudiera derivarse de las circunstan- plazos ha desvirtuado claramente la
cias concretas del caso. regla general —duración del tiempo
En cuanto a que presente caracte- imprescindible—, chocando frontal-
res de delito en la exposición de mo- mente con las conclusiones y reco-
tivos, se recoge que la gravedad de mendaciones realizadas por el Comi-
la pena por sí sola no podrá justificar té Contra la Tortura respecto a Espa-
la adopción de la medida preventiva ña, en las que se afirma que la
y, por tanto, respetar el principio de incomunicación facilita la comisión
proporcionalidad; y en la regulación, de actos de tortura y malos tratos. En
en clara contradicción, se impone el la misma línea, el TC recogió que tri-
límite penológico para decretar pri- plicar el plazo máximo de 72 horas
sión provisional en penas iguales o resulta excesivo. Por ello y para que
superiores a dos años. Antes estaba nuestra legislación fuese respetuosa
fijado en tres años. Y en penas infe- con la Constitución, se debería redu—
riores a dos años cuando el imputa— cir al máximo la detención incomuni-
do es reincidente (incompatible con cada y el régimen de incomunicación.
el Derecho Penal de hechos y no de Asimismo y durante el periodo de in-
autor). Todo ello supone ampliación comunicación el imputado debe con—
del marco punitivo y una generaliza- tar con asistencia letrada, asistencia
ción dela prisión preventiva que mal médica de su elección y se deberían
casa con el fin marcado en la exposi- grabar todos los interrogatorios, ve—
ción de motivos de excepcionalidad. lando con ello por el cumplimiento
En cuanto a decretar prisión pro- de las garantías de seguridad e iden-
visional para evitar riesgos de reite— tidad de las personas presentes.
79
)!
xs.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

2.- Proyecto de reforma del Código podrá acordar como sustitución de


Penal penas privativas de libertad hasta
dos años y, al desaparecer la pena
El Gobierno nuevamente fundamen- de arresto de fin de semana, se po-
ta la necesidad de reformar la legis- drá imponer como pena principal.
lación, en este caso el Código Penal, - En cuanto a la determinación de
para abordar el problema de la cri- las penas, se va a producir un incre-
minalidad y combatirla e incremen- mento dela penalidad en el supues-
tar la seguridad de los ciudadanos. to de delito continuado. Se produce
Para ello quiere reformar parcial— un endurecimiento de la pena a im—
mente el Código Penal, lo que mo— poner pudiendo llegar hasta la pena
dificaría 170 artículos. superior en grado en su mitad infe-
Las modificaciones serían las si- rior (antes de la reforma la agrava—
guientes: ción era hasta la pena en su mitad
- En cuanto a las penas: se produ- superior), vulnerando el principio de
ce un fortalecimiento dela pena por proporcionalidad de la pena.
excelencia de nuestra legislación pe— — En cuanto a las alternativas a la
nal: la privativa de libertad. Se quie- prisión y la suspensión de la conde-
re rebajar la pena mínima de prisión na, no se van a tener en cuenta los
de 6 a 3 meses. Esto va a suponer días de responsabilidad personal
que conductas que no tienen un subsidiaria por impago de la multa
desvalor importante se sancionen para el cómputo de los dos años de
con pena privativa de libertad, privación de libertad.
cuando esta pena debería ser una - En cuanto a la suspensión de
medida excepcional al suponer pér— condena para drogodependientes
dida del trabajo, desarraigo familiar, se amplia su concesión hasta 5
contagio criminal, estigmatización años. Lo que en un principio parece
personal y familiar. Vulnerando el una ampliación de los supuestos, se
principio de intervención mínima puede quedar sin contenido por la
del Derecho Penal, que determina aplicación de las reglas de determi-
que sólo se debe intervenir en los nación de la pena, pues al endure-
ataques más graves a los bienes ju- cerse enormemente las penas a im-
rídicos protegidos. poner puede sobrepasarse el límite
— Desaparece la pena de arresto de establecido para que se pueda con-
fin de semana por las dificultades ceder tal beneficio.
que suponía su cumplimiento. - En cuanto a la parte especial del
— Se crea una nueva pena, la de lo— Código Penal, se modifican tipos pe-
calización permanente, que consiste nales como los delitos contra la sa—
en seguimiento con control telemá- lud pública (por un lado, se produce
tico del condenado. Esto puede ser una ampliación de las agravantes
el inicio de la puesta a disposición que determinarán la imposición de
de las nuevas tecnologías al servicio penas más duras y, por otro lado, un
de la represión. trato de favor a drogodependientes
- Se potencia la pena de trabajo en programa de desintoxicación que
en beneficio de la comunidad. Se puede rebajar la pena), pornografía
80
"<?
Sobre las recientes reformas

infantil y delitos contra la propiedad por el Ministerio del Interior respec-


intelectual. to al fuerte incremento de las perso-
Asimismo se crean nuevos tipos nas que se encuentran presas (en-
delictivos: se tipifican nuevas con— torno al 25% más de personas pre-
ductas como delitos entre ellas el sas en los últimos años), estando a
maltrato de animales domésticos, la cabeza de los países de Europa
figuras relacionadas con servicios de con mayor tasa de encarcelamiento.
radiodifusión y nuevas tecnologías, Las razones de la delincuencia de-
alteraciones del orden con ocasión berían buscarse en causas más pro-
de la celebración de espectáculos... fundas como son los fracasos de los
En general, se produce un aumen— sistemas actuales que no potencian
to de las penas que se van a impo- medidas sociales que favorezcan po-
ner tanto porque así se recoge en líticas de igualdad de oportunidades,
los tipos básicos como en las reglas con un reparto más igualitario de la
para la determinación de la pena, riqueza y tendentes hacia una socie-
por lo que se vulnera el principio de dad más justa. Es decir, la tendencia
proporcionalidad de la pena a im- debería ser la contraria de la que se
poner. La ampliación de las conduc- está llevando a cabo —debilitamien-
tas que entran dentro del ámbito to del Estado social a favor del Esta-
del Derecho Penal vulnera el princi- do policial y un sistema represivo—,
pio de intervención mínima. e ir en dirección hacia un fortaleci-
miento del Estado social y una políti—
Conclusión ca criminal más humanitaria.
Las reformas penales que están en
El Gobierno ha justificado las refor— marcha pretenden brindar seguri-
mas Iegales puestas en marcha en la dad ciudadana con un modelo puni-
necesidad de reforzar la lucha contra tivo y excluyente. Están suponiendo
la delincuencia y así tener más segu- un debilitamiento de derechos so-
ridad ciudadana. Apunta que el in- ciales, un recorte importante de las
cremento de la delincuencia se debe libertades en general, y una vulnera-
a la suavidad de las penas impuestas ción sistemática de derechos funda—
por la Administración de Justicia y a mentales y de los principios de un
la facilidades que se otorgan por la Derecho Penal democrático, funda-
Administración Penitenciaria en el mento de un Estado social y demo-
cumplimiento de las penas. crático de derecho, modelo del que
Sin embargo, la realidad es bien estamos muy alejados. En concreto
distinta: se ha producido un endu— se está vulnerando los derechos a la
recimiento real de las penas sobre libertad, a la presunción de inocen—
todo en relación con los delitos que cia, a la igualdad, a la tutela judicial
más pueden afectar a la seguridad efectiva, a la resocialización, así
ciudadana como son los robos y trá- como los principios de intervención
fico de drogas. Se puede comprobar mínima, de prohibición de penas in-
que no se está realizando una políti- humanas y degradantes, de seguri—
ca criminal suave, cuando lo con- dad jurídica, de proporcionalidad de
trastamos con los datos facilitados las penas y de justicia social.
81
R
No
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA£ENAL

Panorama de la
contrarreforma penal
del 2003 4» ALAITZ CRUZ DE APALOAZA

<<La sociedad se arroga el derecho de infligir al individuo


terribles castigos, pero también posee el vicio supremo de la
ligereza, y no llega a comprender la verdad de lo que hace.»
0. Wilde

lo largo de este año, el Go- sin ningún tipo de complejo, alega


bierno del Partido Popular en la Exposición de Motivos dela Ley
ha llevado a cabo una serie Orgánica 7/2003 de 30 de junio de
de reformas en la legislación penal, Medidas de Reforma para el Cumpli-
procesal y penitenciaria que tendrán miento Íntegro y Efectivo de las Pe-
consecuencias drásticas dentro de nas que el ciudadano tiene derecho
las prisiones. En este artículo se des- a saber cuánto tiempo va a pasar un
arrollará la Ley de Cumplimiento Ín- delincuente en la cárcel. Con ello,
tegro y Efectivo de las Penas, inten- dice el PP, se quiere tanto “lograr
tando analizar qué significará para una lucha más efectiva contra la cri—
las personas que viven o vivirán den- minalidad" como evitar que los be—
tro de una cárcel española. neficios penitenciarios sean “instru-
En estos últimos años se ha bifur- mentos al servicio delos terroristas y
cado el camino de dos procesos que los más graves delincuentes". Esto
teóricamente deberían discurrir jun- sólo sería cierto si el Gobierno consi—
tos, como son el aumento de la de- derase “graves delincuentes" a los
lincuencia y el miedo y la sensación Veras, Barrionuevos o Condes de Es-
de inseguridad que ésta produce. El paña. El Gobierno ha llevado a cabo
miedo a la delincuencia en la pobla— una serie de reformas en la Ley Or-
ción española no se justifica por el gánica 10/1995, del Código Penal,
aumento real de la misma. Los da- en la Ley Orgánica 6/1985 del Poder
tos son manipulados por el Gobier— Judicial, en la Ley Orgánica General
no y Ios medios de comunicación se Penitenciaria y en la Ley de Enjuicia—
hacen eco de ellos, llegando a for- miento Criminal, que afectarán a la
mar la realidad, no a informar sobre vida de miles de personas. Pasemos
ella, y lo hacen a través de una se— pues a explicar|as.
lección de datos, de lenguaje, de
imágenes y acontecimientos. Reformas en el Código Penal
Es por todo esto que el Gobierno, Art. 36 CP: se introduce el deno-
82
N?
Panorama de la contrarreforma

minado “periodo de seguridad", lida, tercer grado y libertad condi-


para los condenados a más de 5 cional) se hará sobre la totalidad de
años de prisión, según el cual el las penas impuestas en las senten-
condenado no podrá ser clasificado cias, y no sobre el máximo de cum-
en tercer grado hasta haber cumpli— plimiento efectivo.
do la mitad de la pena impuesta. El En los casos de delitos de terroris-
juez de vigilancia podrá acordar mo o cometidos en el seno de orga-
(previo pronóstico individualizado y nizaciones criminales (término para
favorable de reinserción social y va- el que no existe definición), el juez
lorando, en su caso, las circunstan- de vigilancia penitenciaria podrá
cias personales del preso y la evolu- acordar la concesión de un tercer
ción del tratamiento reeducador) la grado cuando quede por cumplir
aplicación del régimen general de una quinta parte del límite máximo
cumplimiento siempre que no se de cumplimiento de la condena im-
trate de delitos de terrorismo 0 co- puesta, y podrá acordar la conce-
metidos en el seno de organizacio- sión de la libertad condicional cuan-
nes criminales. do quede por cumplir una octava
Art. 76 CP: se eleva el límite máxi- parte del mencionado límite.
mo de cumplimiento de 30 a 40 Arts. 90 y 91 CP: relativos a la li-
años en dos supuestos: bertad condicional, para la cual,
- dos o más delitos de terrorismo además de las exigencias del CP de
(de la Sección 2.8 del Capítulo V del 1995 (tener cumplidas las tres cuar-
Título XXII del Libro II), estando cas- tas partes de la condena, encontrar-
tigado alguno de ellos con pena de se en tercer grado de tratamiento y
prisión superior a 20 años; o tener un pronóstico individualizado
- dos o más delitos y que al menos y favorable de reinserción social)
dos de ellos estén castigados por la será necesario satisfacer las respon-
ley con pena de prisión de más de sabilidades civiles derivadas de su/s
20 años. delito/s.
(Los que están ya en prisión debe- En el caso de delitos de terrorismo
rían ser informados de que esta re- 0 delitos cometidos en el seno de
forma sólo se aplicará a aquellos organizaciones criminales, se enten-
que cometan este tipo de delitos a derá que hay pronóstico de reinser-
partir de la entrada en vigor de la ción social cuando el preso muestre
ley, es decir, a partir del 1 dejulio de signos inequívocos de haber aban—
2003.) donado los fines y los medios de la
Art. 78 CP: si a consecuencia de actividad terrorista y además haya
las limitaciones establecidas en el colaborado activamente con las au—
apartado 1 del art. 76 (donde se es- toridades.
tablecen los límites máximos de …: este artículo pasa a ser
cumplimiento) la pena a cumplir re- apartado 1, al que se adicionan
sultase inferior a la mitad de la otros dos. El segundo apartado esti-
suma total delas impuestas, el cóm- pula que cuando se trate de delitos
puto para la obtención de benefi- de terrorismo, si se incumple alguna
cios penitenciarios (permisos de sa- de las condiciones y reglas de con-
83
Á
*c.
DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

ducta que permitieron acceder a la Reforma dela Ley de Enjuiciamiento


libertad condicional, el juez revoca- Criminal
rá la libertad concedida. El tercer Art. 989: por el que jueces y tribu-
apartado dice que el penado cum- nales podrán encomendar actuacio—
plirá el tiempo que le reste de cum- nes de investigación patrimonial so-
plimiento de condena con pérdida bre el condenado (tanto presentes
del tiempo pasado en libertad con- como futuras) hasta que no haya sa—
dicional. tisfecho la responsabilidad civil.

Reforma de la Ley Orgánica del Po- Disposición transitoria única:


der Judicial “Lo dispuesto, conforme a esta ley,
Disposición adicional guinta: se le en los art. 90 y 93.2 del CP, respecto
añade un nuevo apartado que afec- a las circunstancias para acceder a la
ta a los condenados por "delitos concesión de la libertad condicional,
graves", ya que cuando la resolución y en el art. 72.5 y 6 dela Ley Orgá—
objeto del recurso de apelación se nica General Penitenciaria respecto a
refiera a la clasificación o concesión la clasificación 0 progresión al tercer
de libertad condicional y pueda dar grado de tratamiento penitenciario,
lugar a la excarcelación, el recurso será aplicable a las decisiones que se
tendrá efecto suspensivo que impe— adopten sobre dichas materias des-
dirá la puesta en libertad del conde- de su entrada en vigor, con indepen-
nado hasta la resolución del recurso dencia del momento de comisión de
o hasta quela Audiencia Provincial o los hechos delictivos o de la fecha de
la Audiencia Nacional se haya pro- resolución en virtud de la cual se
nunciado sobre la suspensión. esté cumpliendo la pena."

Reforma de la LOGP Conclusiones


Art. 72: se introducen dos nuevos
apartados según los cuáles, para la Una vez vistas las reformas, veamos
clasificación 0 progresión al tercer ahora cuáles van a ser las consecuen—
grado, además de los requisitos pre- cias de estas en la vida de las perso—
vistos en el CP de 1995, se exigirá nas presas, como la reforma del art.
que el penado haya satisfecho la 36 del CP, creadora del ”periodo de
responsabilidad civil derivada del seguridad", que hará que las perso-
delito. En el caso de personas con— nas con más de 5 años de condena,
denadas por terrorismo o en el seno es decir, también los que tengan 40
de organizaciones criminales se exi— años, tengan que pasar por lo menos
girá, además, que muestre signos la mitad de ese tiempo en prisión (2,5
inequívocos de haber abandonado y 20 años respectivamente) sin im—
la actividad terrorista, colaborando portar el comportamiento ni las acti—
activamente con las autoridades en vidades que desarrolle durante su es-
la lucha contra el terrorismo (obten— tancia en la misma. Se olvida desde
ción de pruebas o identificación de un principio del tratamiento indivi-
otros terroristas). dualizado para la progresión de gra-
do que ha de regir la vida de una per-
84
“<?
Panorama de la contrarreforma

sona en prisión. Causará tal sensa- tradas en la cama, vuelven a ser pe-
ción de impotencia entre los presos ligrosas y hay que encerrarlas hasta
que es seguro el aumento de conflic- que vuelvan a debilitarse o hasta la
tividad en las prisiones. muerte.
En cuanto la reforma de los arts. El aumento del límite de cumpli-
90 y 91 del CP, referentes a la liber- miento efectivo a 40 años (art. 76
tad condicional, con la exigencia de CP) puede considerarse trato inhu—
cubrir la responsabilidad civil, el mano y degradante, y atenta ade-
“Gobierno Popular" da un paso más más contra el principio de resociali-
para castigar la pobreza y para fa- zación que señala el art. 25 de la
vorecer a los adinerados. Tal como Constitución. El CGPJ basó la consti-
señaló el Consejo General del Poder tucionalidad de la reforma en que
Judicial, la exigencia de satisfacción con el sistema de ejecución de pe-
de la responsabilidad civil para el nas español se puede reeducar y
acceso a la libertad condicional y al reinsertar a los presos y, además, el
tercer grado debe referirse a las po- preso puede conservar la esperanza
sibilidades de reparación de acuer- de ser liberado.
do con la situación económica del Esto es mentira. Este aumento del
penado en el momento en que haya límite de cumplimiento efectivo,
de adoptarse la resolución sobre su junto al endurecimiento de los re—
progresión de grado. No puede cas- quisitos para obtener beneficios pe—
tigarse la insolvencia. nitenciarios, va a suponer una au—
El requisito de colaboración activa téntica "cadena perpetua/pena de
contra la organización terrorista es muerte" para muchas personas que
como poco inútil, por lo menos para sufren enfermedades físicas y men-
los fines que sele pretenden, ya que tales graves y que no son excarcela-
no tiene sentido que a una persona das. Con esta medida, el gobierno
que ha pasado 40 años en prisión y dice querer prevenir, asustar a los
que fue detenida bajo la Ley Antite- futuros delincuentes/terroristas. Lo
rrorista (interrogatorios, incomuni- que no se dice es que ya en la im—
cación, tortura sistemática) se le exi— posición de la pena se tuvo en cuen—
ja que dé datos nuevos y "útiles" a ta la gravedad del delito, por lo que
las autoridades. esta nueva diferenciación de trato
La reforma del art. 93 del CP (re— entre unos presos y otros atenta
vocación de la libertad si cambia al— contra el derecho a la igualdad y
guna de las circunstancias que faci- castiga doblemente a un sector muy
litó su concesión) nos recuerda a la concreto (que no es únicamente el
regresión a segundo grado, es decir, delos condenados por delitos de te-
al re-encarcelamiento de las perso- rrorismo) dentro de las prisiones.
nas que son excarceladas por pade- La gran mayoría de la población
cer una enfermedad grave e incura- española no sólo no sabe lo que
ble y que, una vez en la calle, mejo- ocurre dentro de las cárceles que
ran su estado de salud. Entiende la ellos pagan, sino que se cree el dis-
institución que esas personas, al no curso del gobierno y de los medios
tener ya que estar todo el día pos- de comunicación al respecto. Los
85
J
N:.
DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

"buenos ciudadanos“ apoyan o, por de sus derechos por unas carencias


lo menos, consienten las reformas que es la Administración penitencia-
llevadas a cabo por el gobierno, sin ria la responsable de solucionar, a lo
preguntarse por las consecuencias que hay que añadir las tensiones
de otro tipo de reformas, como las preso-funcionario (tensión en ambas
laborales, directamente responsa- direcciones) que el hacinamiento yla
bles de que 8 millones de españoles falta de atenciones produce.
vivan por debajo del umbral de la La entrada en prisión supone una
pobreza o de que el 60% de las fa— ruptura con la vida anterior. La cár-
milias españolas tengan dificultades cel reglamenta todos los aspectos
o no puedan llegar a fin de mes. He- de la vida cotidiana. Esto obliga a
mos de tener claro que esta obse- que la persona que ingresa tenga
sión por la "seguridad" es, además que construirse un caparazón pro—
de un seguro para la reproducción tector para soportar las experiencias
de una institución como la carcela- que tendrá que vivir en propia piel o
ria, una maniobra de distracción verá vivir a otros compañeros. Estos
para desviar la atención de aquellos cambios adaptativos, incomprensi-
temas que influyen mucho más en la bles muchas veces para los que no
vida de una persona que la seguri— han pasado por esa experiencia, pa-
dad, como el trabajo, la educación, sarán a formar parte de su persona-
la salud o la libertad de expresión. lidad si la situación se alarga, y per-
Si hay algo que caracterice a la sistirán una vez sea liberado, con lo
cárcel en España es su oscuridad, su que se les condena también a que
secretismo. Casi nadie sabe cómo en el futuro no puedan adaptarse a
vive realmente una persona en la la sociedad libre en igualdad de
cárcel, y esa ignorancia les lleva a condiciones.
pedir que miles de personas (que A pesar de quela ley estipula que
mañana podrían ser sus hijos o her— se intentará que el preso cumpla la
manos) vivan el mayor tiempo posi- condena en su lugar de origen, a
ble encerrados en un lugar que de- efectos prácticos resulta ser otro en—
bería estar prohibido por atentar gaño, ya que aunque hubiese una
contra los derechos fundamentales. voluntad real de hacerlo (que no la
En el Estado español, desde las hay) no existen las infraestructuras
amnistías para presos por delitos po- suficientes para llevarlo a cabo. El
líticos de los años 76 y 77, la pobla- alejamiento provoca que las relacio-
ción penitenciaria ha aumentado en nes con el exterior vayan disminu-
un 500%. El nuevo modelo arquitec- yendo hasta el punto de desapare-
tónico de prisión, la macrocárcel no cer, sobre todo en condenas largas.
ha dado solución al aumento impa— Esto es asi porque se combinan dos
rable y cada vez más rápido de pre- realidades: la primera es que mu-
sos. Tampoco los funcionarios y per- chas familias de personas presas
sonal penitenciario son suficientes proceden de los ámbitos más desfa-
para las necesidades que hay que cu- vorecidos de la sociedad y no pue—
brir, por lo que las personas privadas den sufragarse los viajes. La segunda
de libertad ven restringidos muchos realidad es que en prisión el tiempo
86
“<?
Panorama de la contrarreforma

se para y en el exterior la vida sigue, éste, existe otro régimen de aisla-


lo que hace difícil compaginar las vi— miento, no reconocido como tal, el
das delos que están dentro y los que FIES, que impone limitaciones y con-
están fuera. La pérdida de relaciones troles sin que se precise autoriza-
conlleva la pérdida de referencias ción ni seguimiento por el órgano
del mundo exterior, lo que supone judicial.
un segundo encierro, ya que todas a La vida en prisión supone un con-
las personas las que se ve, todas las tinuo ataque a la intimidad, más
personas con las que se habla están allá delas humillaciones consustan-
de una u otra manera relacionadas ciales al encierro obligado. Los ca-
con la Institución. La intervención cheos con desnudo integral, practi—
del correo y del teléfono constitu- cados de forma habitual, especial-
yen, junto al aislamiento y a los tras- mente en personas que viven en
lados, uno de los modos más efecti- régimen de aislamiento, no respe—
vos para que la persona pierda las tan las reglas mínimas establecidas
relaciones con el mundo libre. por el reglamento penitenciario. Los
La cárcel exagera hasta lo inimagi- registros de celda son el medio utili-
nable los perjuicios existentes en la zado por la institución para hacer
sociedad, así las mujeres son ence- desaparecer aquellos objetos no pe-
rradas en módulos específicos de ligrosos, como fotos o cartas, que
prisiones construidas para hombres, permiten a estas personas mantener
negándoseles en muchas ocasiones su identidad más allá de su condi-
el acceso a dependencias comunes ción de presos. La cárcel es una
como gimnasios o talleres; y cuando suma de encierros, el primero es el
ese acceso es posible, todas las acti- físico, el que aísla del mundo exte-
vidades para ellas tienen un carácter rior. Casi al mismo tiempo comienza
claramente sexista. Especialmente el encierro que supone la vida insti—
dolorosa esla situación delos niños, tucional: normas, sanciones, convi—
presitos que viven bajo el régimen vencia obligada, etc. En muchas
penitenciario de la madre presen- ocasiones le sigue el encierro que
ciando las humillaciones y cacheos supone el final delas relaciones con
que ésta sufre. También la situación el mundo exterior, a lo que en no
delas personas transgénero (transe— pocas ocasiones se une el otro en-
xuales) resulta cruel, ya que se les cierro, el del aislamiento. Desgracia-
obliga a vivir con personas del otro damente, en muchos casos hay que
sexo en un ambiente de privación sumar alguna enfermedad física y/o
sexual, lo que les hace objetivo de mental, ya que la atención sanitaria
ataques y discriminación, y hace es deplorable, siendo ésta la causa
que se produzcan un alto número del índice de prevalencia de enfer-
de intentos de automutilación y sui- medades casi erradicadas en el exte-
cidio. El primer grado penitenciario, rior de las prisiones (la tuberculosis,
en el que viven al menos un millar por ejemplo, tiene una incidencia 14
de personas, supone un aislamiento veces mayor en prisión que en el ex-
casi total y bajo castigos que ningu- terior). El hecho de que la sanidad
na sentencia recoge. Además de penitenciaria no hay pasado a la sa-
37
R
N;
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

nidad pública, que no se haya im- único que se conseguirá es más de-
plantado en todas las prisiones el lincuencia, más cárceles y más pre-
Programa de Intercambio de Jerin- sos. El Estado español está siguien-
guillas, y que se hayan "habilitado" do el ejemplo de prisión de Estados
unidades hospitalarias en el exterior Unidos (legislativa, social y arquitec-
de las prisiones que no respetan los tónicamente), el país con el índice
mínimos derechos de cualquier per— más alto de personas encarceladas
sona enferma, aunque esté presa, de todo el mundo. Sabemos, por
deja claro el poco interés de la ad- tanto, que un mayor castigo no re-
ministración por la salud de estas duce la delincuencia, lo que sí hace
personas. es aumentar el número de personas
La cárcel no respeta la dignidad encarceladas, aquellas que quedan
delas personas que la habitan, por- marginadas en el reparto cada vez
que la cárcel es antinatural y sólo más desigual de la riqueza o aque-
sirve para castigar. Una cárcel, se le llas que ponen en duda la legitimi—
hagan las mejoras que se le hagan, dad del Estado. Hay que apartar a
será siempre una cárcel; y todo lo esos miles de personas del escapa-
que se les pueda ayudar a los presos rate público del "España va bien".
nunca podrá llegar a neutralizar el Estas reformas no son un hecho ais-
daño quela prisión les ha hecho. La lado, son un eslabón más en la ca-
solución de la delincuencia no está dena que nos acabará amarrando al
en el castigo; y mientras éste sea la Estado controlador que ya tenemos
única respuesta a los crecientes pro- y al Estado totalitario que ya se
blemas de desigualdad social, lo anunda.

88
K
Y
Vuelta a las ravemas
penales: de) suma de
la remserrmn & la pura
retribución (“ josé LUIS SEGOVIA BERNA BE
(EQUIPO ] URÍDICO DE LA
ASOCIACIÓN Apoyo, MADRID)

"Pan y tentetieso" existencia de una previa inserción


social. Pero, a fin de cuentas, no es-
E n la "pecera" del control de acceso taba mal quela Constitución yla Ley
al locutorio de jueces de Caraban- Orgánica General Penitenciaria deja-
chel alguien había garabateado: ran un hueco para el discurso hu-
"palo al chorizo al momento es el manitario penal, aunque sonara un
mejor tratamiento“. No podía sos- poco a falsete. En definitiva, las Ie-
pechar aquel oscuro funcionario que yes tenían una cierta función peda-
su pésimo pareado1 llegase, años gógica, señalando horizontes de
después, a las páginas del Boletín obligado cumplimiento y mante-
Oficial del Estado. En efecto, la cata- niendo un punto de tensión para
rata de reformas legales aprobadas confrontar la siempre dura realidad
por el Gobierno en aplicación del Ila- y posibilitar, de este modo, la exi-
mado Plan de Lucha contra la Delin- gencia de los derechos correspon-
cuencia, aprobado significativamen- dientes.
te el 12-S del año 2002 son una ba— Como quien no quiere la cosa, sin
tería de medidas que responde a esa modificar un ápice esas proclamas,
misma filosofía sin disimulo alguno. se han aprobado normas que no
De "barrer las calles" se trata. sólo no llenan de contenido tan
Todos sabemos que la reeduca- pomposos principios, sino que, sen-
ción y Ia reinserción social han sido cillamente, los hacen formal y mate-
siempre una quimera, una vacua ilu- rialmente imposibles. Sin demasia-
sión legal que no ha conocido reali- das protestas, hemos pasado del
zaciones prácticas significativas. modelo de “la reinserción" al de la
Tampoco nos gustaba demasiado la “retribución" pura y dura. No es aje—
insistencia en el "re". A algunos la no a ello en nuestro entorno otra
re-educación le recordaba demasia- significativa mutación: del "Estado
do los centros con este nombre en social" hemos migrado al "Estado
la China comunista, yla re-inserción mínimo“. Y con él se nos ha condu—
hacía dudar a otros acerca de la cido a la carrera, en muy pocos me-
89
R
N;
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

ses, a lo que Wacquant llama “Esta— digo Penal nada menos que en tres
do penitenciario"? Minimizada la de las reformas, con una tramita-
función de nivelar asimetrías socia- ción parlamentaria cronológica des-
les, procurar la justicia yla igualdad acompasada y con serios desajustes
en las relaciones sociales, el nuevo de sistemática y aun alguna contra-
Estado se caracteriza por reducir su dicción entre ellas. No es éste el lu-
protagonismo a labores de blindaje gar de hacer un desarrollo técnico
de fronteras, defensa de intereses de las mismas. Con todo, no dejare—
geoestratégicos (propios y nortea— mos de mencionar qué principios
mericanos, o en el orden inverso, si consagrados en el Derecho Penal
se prefiere) y al mantenimiento del después de siglos son pisoteados
orden público interno. groseramente. Así acontece con la
En este contexto, resulta singular— presunción de inocencia, la irretro-
mente grave, especialmente por la actividad de las normas restrictivas
pasividad con que asiste complacida de derechos, el derecho penal de
la ciudadanía, el proceso de quiebra mínima intervención, el principio de
de pactos básicos de convivencia so- humanidad, el abandono de las teo-
cial. Me refiero al contrato social, rías absolutas respecto a la legitima-
asentado en el valor de la coopera— ción de la pena, la independencia
ción y la solidaridad, merced al cual judicial. Los avances del humanita-
en el Estado Social y Democrático3 rismo penal en el alero y, en no po-
los trabajadores sostienen a los que cos casos, como intentaremos mos-
no trabajan, los sanos a los enfer- trar, despeñados al abismo de un
mos, los jóvenes a los viejos... Ello derecho penal retributivo impropio
está dando paso a un modelo de de nuestro tiempo (o, tristemente,
corte ultraliberal e individualista quizá no tanto).
que incentiva que cada uno se bus- El factor legitimador Que ha per-
que la vida con su plan privado de mitido cambios tan sustanciales ha
pensiones, su seguro privado médi- sido la "inseguridad ciudadana".
co... ¡quien pueda pagárselo, natu- No, naturalmente, la que provoca la
ralmente! La cobertura de necesida— precarización del empleo, ni la ele-
des básicas se va transfiriendo a ma- vada cifra de los delitos contra los
nos de particulares, con evidente trabajadores, ni la criminalidad que
afán de lucro, obviando el interés facilita la vulnerabilidad en que
general que se supone a lo público. sume a los ciudadanos la Ley de Ex-
En el ámbito penal, las herramien- tranjería —al privar a los inmigran-
tas concretas que han posibilitado tes sin papeles de derechos huma-
este espectacular viraje, que nos re- nos fundamentales—, 0 el problema
trotrae a siglos atrás, es todo el ro- ecológico, o las crecientes amena—
sario de medidas legales ya en vigor zas a la vida yla salud por parte de
y pendientes de aprobación, cuyo formas de crecimiento desbocado y
listado ocuparía bastantes líneas de no sostenible, 0 el hecho de que, se-
esta colaboración. La falta de siste— gún Europol, el crimen organizado
mática se evidencia, por otra parte, mueve en España un pellizco impor-
en que se abordan reformas del Có- tante equivalente al presupuesto de
90
N?
Vuelta a las cavernas penales

varias Comunidades Autónomas. dientes disciplinarios, en las que el


¿Será por eso por lo que se han ele- juez se juega ”el pan de los hijos";
vado los mínimos exentos en delitos finalmente, la vía de hecho de diri-
de cuello blanco, o se ha procedido gir populistamente a los medios de
a desmantelar las fiscalías ocupadas comunicación contra los jueces en
de su persecución y a dificultar pro- la medida en que resuelven a con—
cesalmente la acción de la justicia? trapelo de los intereses del poder de
Es el principio de la tolerancia cero turno.
con la pequeña delincuencia, la de-
lincuencia por impotencia, y la infi— y r.i.p. a la
nita tolerancia con la delincuencia separación de mo-
por prepotencia. n_1entos del
Es tan numeroso el listado de bar- sustema penal
baridades penales que hemos opta-
do por señalar solamente algunas Tan grave como esta amenaza a la
que nos han resultado significativas, clásica división de poderes es la de-
en la certeza de que el lector encon— vastación de esa triple división de
trará muchas más que se desarrolla- momentos no sólo cronológicos sino
rán en otras colaboraciones de este funcionales que señala Roxin: el mo-
número. mento legislativo, con el legislador,
expresión de la voluntad popular or-
Réquiem or la denando a los ciudadanos se abs-
div¡sión e poderes tengan de ciertas conductas y las
consecuencias de su inobservancia;
En este tránsito de modelos, no po- el segundo momento, judicial, facul-
demos dejar de mencionar un preo- tando al juez para que concrete en
cupante factor de fuerte peligrosi- cada caso las consecuencias del ilíci-
dad para la salud democrática de to en atención a la gravedad del he—
todos. Me refiero a la creciente cho y a la culpabilidad del autor
quiebra del principio de división de (añade la necesidad dela pena, en lo
poderes. A la progresiva hipertrofia que llama función de “prevención
del ejecutivo, que reduce al legislati- de la integración“)4; finalmente, el
vo a simple legitimador formal de momento ejecutivo, con la institu-
sus decisiones (amén del abuso de ción penitenciaria como protagonis-
generar normas por decreto-ley) y ta, para que individualice la forma
con una inconfesada, pero real, uti- concreta de ejecutar la pena, pri-
lización del poder judicial, al que se mando Ia prevención especial y el
pretende intimidar en la medida en horizonte de la reinserción, procu-
que no se doblegue a los intereses rando que la persona se reintegre a
de quien ostente en cada momento la sociedad cuanto antes y en las
el poder. Esto se hace por varias mejores condiciones posibles. Todo
vías. Una, la legislativa, hurtando al pretende ser fagocitado por el mo-
juez ámbito competencial; otra, la mento primero. Se pretende que el
disciplinaria, a través de la apertura titulo de condena efectivamente eje-
de diligencias informativas y expe- cutado sea literalmente el que el le—
91
R
Y.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

gislador señala en abstracto, no faci- "sentencian" cuando sus estadísticas


litando que el juez, con sosiego y no llegan a calificar de asesinato su-
en ”justicia exprés“, personalice y puestos en los que no ha existido ni
valore circunstancias (aplique en de- siquiera la más mínima Iesión5. Pero,
finitiva el art. 2 de La Ley de Enjui- alarma, que algo queda.
ciamiento Criminal), ni que los técni-
cos de la Institución Penitenciaria Cumplimiento íntegro
modulen, en función dela evolución de las penas
y pronóstico del penado, el régimen
de la concreta forma de ejecución. Aquí ha sucedido lo de siempre: las
legislaciones de excepción acaban
Justicia policial rompiendo sus propios límites y, al fi-
nal, se aplican a situaciones muy di—
En una famosa y brutal película de versas de aquellas para las que sur-
Bronson, Yo soy la Justicia, se decía gieron. Así ha sucedido en los EEUU,
que los jueces eran el mayor obstá- donde el Congreso ha tenido que re—
culo para la tranquilidad en las ca- conocer que la Patriot Act, que limi-
lles. Sólo una policía sin esa pesada taba muy seriamente los derechos de
compañía podría actuar a favor del los acusados por terrorismo, se está
orden sin cortapisas. A quienes siem- aplicando a delitos que nada tienen
pre han planteado el binomio “Ley y que ver con la lucha armada.
Orden", Ies acaba viniendo grande la Las condenas de hasta 40 años yla
primera. Desde luego, en nuestro introducción del llamado período de
país, las últimas leyes parecen ir en seguridad han borrado de un pluma-
esa dirección: la completa policía/¡za— zo lo que se venía manteniendo
ción incluso de la mismísima activi- como bandera de nuestro ejemplar
dad judicial. Con la Ley 38/2002, que sistema penitenciario español. Ya sa-
permite enjuiciar delitos de hasta 9 bíamos que la realidad era muy otra
años y somete a una “justicia exprés" (10 minutos en 10 años de condena
de escasas garantías5 para el justicia- de haber visto al psicólogo no era un
ble. Las fuerzas y cuerpos de seguri- alarde de intervención psicosocial)
dad han empezado por "quitar la pero al menos la ley formulaba pia-
agenda" a los jueces. Han seguido dosos deseos. Con ellos se van al tras-
apoderándose de la calificación ini- te dos principios fundamentales del
cial, continuando con la posibilidad sistema penitenciario. Merced a estos
de predeterminar el juez más cerca— principios, se impedirá, entre otros
no a sus planteamientos. Finalmen— supuestos, que personas condenadas
te, continúan con la práctica de de- a más de cinco años y ya socialmente
terminadas pruebas y mucho me rehabilitadas (p. ej., porque cometie—
temo que, en breve, acaben por dic- ron trapicheos con droga dura), pue—
tar sentencia en la comisaria o cuar- dan ser incluidas inicialmente en un
telillo dela Guardia Civil, al modo de tercer grado y régimen abierto para
aquel juez que decía, al empezar la minimizar la innecesaria y contrapro-
vista, "a ver, que pase el condena- ducente estigmatización penal. Aho—
do". De alguna forma los policías ya ra sólo queda la incierta vía del indul—
92
Vuelta a las cavernas nenales K
y
to, ajena por completo al orden juris- Vuelta al derecho
diccional, ejercida por poder extraño penal de autor
al judicial y no sometida a sus garan-
tías y principios de motivación. Retornamos a un derecho penal de
Con todo ello, se han quebrado autor (centrado en las característi—
los grandes principios del sistema cas morales de la persona, al modo
penitenciario español y el humanita— de la Ley de Vagos y Maleantes) y
rismo penal. Y ello sin modificar ni nos separamos del vigente derecho
un ápice las exposiciones de motivos penal del hecho (centrado exclusiva-
de la Ley y el Reglamento Peniten— mente en la valoración jurídica de
ciario que mantienen la “superada" las circunstancias del delito que se
filosofía humanizadora. Entre legali— enjuicie). Prueba de la mala con—
dad y realidad media siempre una ciencia (excusatio non petita, accu—
distancia no pequeña, pero ahora es satio manifesta) es la exposición de
el propio horizonte axiológico de la motivos dela reforma, donde se ale-
norma el que baja los listones. Se re— ga que este nuevo sistema es com-
nuncia nada menos que al régimen patible con la responsabilidad por el
de progresividad de grados y, singu— hecho (¡Faltaba más! El problema es
larmente, al principio de que nadie que lo es también con el de respon-
debe estar en un grado inferior al sabilidad de autor).
que sus circunstancias reclamen y, Habrá que estar muy atentos a
muy unido al anterior, y al principio que efectivamente se acredite en la
de individuación científica, que pre- causa de modo fehaciente la firme-
dica que deber ser el perfil y las cir— za de la sentencia que se invoque
cunstancias de la persona concreta como agravante, pues no se puede
del condenado, su pronostico evolu— olvidar que ésta ha de ser tan pro—
tivo, etc., los que determinen el régi- bada como los hechos mismos.
men de cumplimiento y sus necesi-
dades tratamentales; y no elemen- A río revuelto...
tos diferentes, como son el quantum
de condena, el delito cometido, etc., Expresión clara de la falta de rigor y
que ya fueron valorados donde co- sistemática jurídica es la LO 11/03,
rrespondía: en sede judicial. de medidas concretas en materia de
Quede aquí sólo indicada la ame- seguridad ciudadana, violencia do—
nazadora pretensión, esperemos que mestica e integración social de los
hasta aquí no llegue el dislate, de extranjeros. Un montón de cosas se—
aplicar retroactivamente normas que rias, que requerían un abordaje más
afectan a lo penitenciario7, en mate- sistemático, más serio, monográfico
ria de clasificación y exigencia de mí- y efectivo, mezcladas en batiburrillo
nimos temporales y abono de res- de "todo revuelto”.
ponsabilidad civil, lo que significaría Con esta reforma —que se super-
la quiebra del principio de irretroac- pone a las que se están haciendo por
tividad consagrado en la Constitu- otros registros al Código Penal de
ción y en todos los convenios inter— 1995— no sólo no se cuestiona la le-
nacionales. gitimación de la agravante de reinci-
93
dencia (en cuanto supone penar a la de eventual retorno: nunca antes de
misma persona por haber sido con— 10 años (antes "hasta un máximo de
denada a una pena que ya cumplió 10 años“) y el plazo se computa ín-
en legal forma con todas sus conse- tegro desde que lo detienen la últi-
cuencias), sino que se posibilita la ma vez... Lo mismo se diga, si se les
aplicación de la pena superior en ha aplicado medidas de seguridad
grado (con dos o más agravantes (art. 108 CP). El Estado se quita la
para delitos dolosos —art. 66.4 CP— máscara, y a las personas extranjeras
). Por si no fuera poco, se prevé una sin papeles no les son de aplicación
forma cualificada de reincidencia en las alternativas a la prisión: ni la sus-
el art. 66.5a: tres condenas firmes pensión ni la sustitución de conde-
por delito de la misma naturaleza y na. Se establece de este modo un
título del Código Penal facultan a los singular endurecimiento de la res-
jueces, que “podrán aplicar" pena puesta penal para cierto tipo de per—
superior en grado en atención a las sonas de segunda, en razón dela re—
condenas precedentes y gravedad sidencia legal, lo cual constituye un
del delito cometido. Por si el "Códi- motivo de discriminación en y ante
go de la Democracia" no había in- la ley de más que dudosa constitu-
crementado las penas suficiente- cionalidad y, desde luego, un envite
mente, ahora viene esta reforma y lo frontal a los principios igualitaristas
endurece todavía más. El no va más de la Declaración de los Derechos
es el art. 234 CP, referido al delito de Humanos de 1948.
hurto: cuatro hurtos de menos de Si este severo régimen se combina
50.000 pts. en un año, siempre que con el art. 57.4 de la LO 4/2000 mo—
el montante acumulado sea superior dificado, por LO“ 11/2003 (¡Jesús,
a 50.000 pts., se convierten automá- qué lío de normas!), basta con que
ticamente en delito. El resultado, se acredite no ya la comisión de un
una vez más, será más penados, por delito por sentencia firme, sino que,
más tiempo y, desde luego, en peo- simplemente, se haya abierto un
res condiciones. procedimiento por delito de pena in-
A besar del antetítulo de la ley ferior a 6 años para poder pedir al
(suena a broma llamarla ”de la inte- juez autorización de expulsión “en el
gración social delos extranjeros"), el plazo más breve posible“, ”salvo que
trato a los extranjeros no es menos de norma motivada aprecie circuns-
expeditivo. El art. 89.1 establece la tancias excepcionales que justifi-
expulsión como criterio general (per- quen su denegación". Naturalmente
mite excepciones motivadas) de los se supone que lo pedirán diligente—
penados a menos de 6 años (“serán mente Ia policía o el fiscal (que abdi-
sustituidas" las penas por expulsión) ca, para su verguenza, de su triple
y prácticamente también a los de función de Custos Libertatís, Defen-
más de 6 años ("acordarán“, frente sor Legis et Protector Pauperumº).
a la anterior redacción que dejaba Todo en la dirección de esa máxima
más margen al juez: “podrán ser tan en vigor que fuerza a los escasos
sustituidas“ y ”podrán ser acorda- jueces que se aventuran a cumplir la
das"). También se endurece el plazo ley, motivando infinitamente más la
94
W?
Vuelta a las cavernas nenales

concesión de un permiso o una li- eventuales riesgos de un retorno al


bertad que su denegación. país de origen, todo aquello que
El art. 318 CP se apunta a la tesis pueda conducir al ánimo del juez a
gubernamental de que el endureci- no autorizar la expulsión por ser cir-
miento de las leyes es para proteger cunstancias excepcionales, median-
a los "pobrecitos inmigrantes" de te informes incluso de los propios
las mafias, por más que las leyes colectivos sociales solidarios.
precisamente les abandonen a sus Una referencia solamente a la re-
garras, merced a la extremada vul- forma de la violencia de género (la
nerabilidad legal en que los dejan ley no la llama así, naturalmente).
sumidos. El caso es quela excusa se Me refiero al art. 147 CP: si en un
aprovecha para incriminar a los que año se producen 4 faltas de lesiones
“indirectamente" favorezcan o faci- del art. 617 CP, se convierten auto-
liten la inmigración clandestina (si máticamente en delito. Creo que se
hay ánimo de lucro, pena superior, confunde la evidente ausencia de
si no existe tal, sino tan sólo “bene- eficacia de las medidas adoptadas
volencia", se impondrán de 4 a 8 (o en los más de los casos sencilla-
años de cárcel). Piadosamente, en mente "no adoptadas") en los tres
atención a la gravedad del hecho, procedimientos anteriores, con la
las circunstancias, las condiciones necesidad de un recrudecimiento de
del culpable y la finalidad persegui— la acción penal sin más. Habrá que
da por éste, se podrá imponer la volver a recordar con Becaria que no
pena inferior en un grado a la seña- son las penas duras, sino las muy
lada (de 2 a 4 años). Ya no se con- cercanas en el tiempo y las acordes
tentan con las multas administrati— con la naturaleza delos hechos (po-
vas que venían imponiendo a perso- demos añadir sin violencia) las que
nas solidarias y gentes de Iglesia pueden alcanzar cierta eficacia pre—
que acogían a quienes llegaban ate- ventiva sobre el infractor. Mientras
ridos de frío y muertos de hambre. pretendamos solventar los conflic-
Ahora sanción penal. Toda una invi- tos sociales a base de más dialéctica
tación para una respuesta cívica de y menos día/ógíca entre víctima e in-
autoinculpaciones colectivas en fractor no iremos a ninguna parte.
cuanto se levante la veda. Lo decía Todavía más discutible nos parece el
muy gráficamente un responsable art. 153 CP, al plantear el criterio de
de Cáritas: “hay que obedecer a habitualidad como agravación, se-
Dios antes que a los hombres". ñalando que ésta se considerará “al
Los escasos portillos que la ley margen de que los actos violentos
abre hablan siempre de excepciona- hayan sido o no objeto de enjuicia-
lidad. Por ello, habrá que estar en mientos anteriores". Creo que una
contacto urgente y continuo con los cosa es proteger a la víctima (y en
abogados defensores y procurar do- eso no pueden jugar en contra las
cumentar las situaciones que acredi- presunciones penales pro reo), y
ten la excepcionalidad. Por ejemplo, otra muy distinta condenar o agra-
con los años de arraigo en España, var la pena (art.173.3 CP) no sólo
la existencia de familia aquí, los contra la presunción de inocencia
95
R
N:
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

sino contra la garantía jurisdiccio- dad. Aunque ya lo tenía inventado...


nal. En breve asistiremos a la defun- el Código de Justicia Penal Militar.
ción de la una y de la otra. Los me-
dios de comunicación con un popu— Preservándonos de las
lismo efectista de baja cota ya han cavernas: rele endo_ el
levantado acta de su fallecimiento, art. 25.2 CE, e portillo
ahora sólo falta que el legislador del Tribunal Supremo
modifique la ley. Al tiempo.
En este contexto tan extremada-
La mitad del Código mente duro, es muy probable que
Penal a la papelera hoy el artículo 25.2 de la Constitu-
ción no hubiera alcanzado la redac-
No tenemos espacio para comentar- ción que alcanzó en el pacto consti—
lo, pero, sin haber dado tiempo a ve- tucional. De hecho, ya se ha ido
rificar las críticas (y le hicimos unas ocupando el Tribunal Constitucional
cuantas) ya nos lo están cambiando de reducir bastante su contenido
y no precisamente en lo que no nos esencial, apuntando en la dirección
gustaba. También está en tramite la de su interpretación más light,
reforma de la prisión provisional; como “principio orientador genéri—
pero, contrariamente a lo que venía co", negando cualquier considera-
manteniendo el Tribunal Constitu- ción de entenderlo como algo más
cional, se amplía su margen de ac- concreto generador de derechos
tuación, muy regladamente, eso si. subjetivos. Desde luego, nos vamos
Se requiere delito con pena igual o aproximando a Carrara9 y a su terri-
superior a dos años, o menos con ble afirmación retribucionista: "La
antecedentes por delito doloso; que justicia penal no debe deponer su
se persiga fin constitucional (asegu- espada frente al delincu'ente corre—
rar, presencia del imputado y evitar gido. La pena debe ser pena".
la destrucción de la prueba). Se aña— Pareciera confirmarse la hipótesis
de evitar el riesgo de que cometa de Rivera10 de que los derechos de
otros hechos delictivos (sólo para los reclusos, y de los pobres en gene-
delito doloso de más de dos años de ral, siempre han sido considerados
cárcel, salvo que por los anteceden- como derechos de segunda catego—
tes o datos que aporte la policía ju- ría, al no lograr la fijeza y efectiva
dicial se pueda inferir que el imputa— protección que demanda todo dere-
do viene actuando concertadamente cho. Se trataría más de proclamas te-
con otros o es delincuente habitual). óricas que de instrumentos garantis-
Ya habrá advertido el avisado lector: tas de los mismos. Esto se hace sin-
a) Como, por vía de excepción, "nos gularmente grosera realidad, cuando
las meten dobladas"; b) La policía ya no sólo es que se establezcan in-
predetermina el auto de prisión. terpretaciones que vacíen de conte—
Sólo algo positivo, para no decaer el nido los derechos subjetivos, sino
ánimo: el art. 508 acepta la prisión cuando por ley sencillamente se eli-
domiciliaria cautelar, incluso salien- minan o se ignoran (los ámbitos de
do de casa por razones de enferme- la extranjería y del mundo peniten-
96
"<?
Vuelta a las cavernas nenales

ciario son especialmente significati- dios previstos en el ordenamiento


vos a este respecto). jurídico para llenar de contenido la
Dentro de este panorama de in- orientación reinsertadora de las pe—
terpretación restrictiva tan desola- nas privativas de libertad y las medi-
dor, no dejaremos de felicitamos das de seguridad (tratamiento indi—
porque el Tribunal Supremo vaya un vidualizado, progresión de grados,
poco más lejos que las interpreta- individuación científica, permisos,
ciones siempre alicortas del Tribunal etc.).
Constitucional en esta materia“, c) Consiguientemente, se deriva el
desmarcándose de esa interpreta- correspondiente derecho, normati—
ción limitativa de derechos como la vamente reglado, a tratamiento,
única posible. permisos, progresión etc., cuyo or-
En una poco conocida sentencia, dinario otorgamiento debe ser la
(STS 20.04.1999, Pte. Martínez norma, y su restricción, siempre mo-
Arrieta) se explicita la posibilidad de tivada, la excepción.
una interpretación más amplia: ”La
orientación de las penas a la reinser- Este deber de la Administración
ción y reeducación ya entendida penitenciaria es correlativo al im-
como principio inspirador de la polí- puesto genéricamente a todos los
tica penitenciaria, ya como derecho poderes públicos por el art. 9.2 dela
que actúa en la fase de ejecución de Constitución, que les obliga a pro—
la pena [la cursiva es nuestra], supo- mover las condiciones y a remover
ne que el ordenamiento jurídico los obstáculos para que la libertad y
debe prever unas instituciones que la igualdad de las personas y los
tengan en cuenta que el interno grupos en que se integran sean rea-
debe reinsertarse a la sociedad, por les y efectivas.
lo que debe ser 'preparado' para ella
(grados de cumplimiento, permisos, No es lo mismo (¿o
etc.) y que debe atender a las defi- sí?…) la víctima:
ciencias educacionales que, precisa- ¿de objeto del ro-
mente, inciden en su actuar delicti- c_eso_a o_b¡eto e la
vo, lo que satisfaría la reinserción". vmd¡cacuon?
De esta sentencia, a nuestro jui-
cio, se derivan tres importantes con- Si el paradigma de la reinserción ha
secuencias: fracasado, en no pequeña medida
a) Si bien el Tribunal Supremo no ha sido porque se ha colgado de un
se pronuncia por uno u otro posi- modelo equivocado. Primero, se
cionamiento doctrinal, apoya explí- acentuó el paradigma de la reinser—
citamente la solidez argumental de ción, pero descontextualizándolo de
quienes consideran que existe un la sociedad en que vive el infractor y
derecho subjetivo a la reinserción en de la necesidad de políticas sociales
fase de ejecución. de acompañamiento, como si fuera
b) Que existe un deber prestacio- tarea única de la cárcel; después, se
nal por parte de la Administración ha apostado por ir incorporando a la
penitenciaria para asegurar los me- víctima. ¡Falta hacíal, desde luego.
97
R
Nr.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

Pero mucho nos tememos que esta virgencita que me quede como esta—
incorporación no consiga dignificar— ba"), el cuestionamiento de la pres-
Ia sino volverla a objetivar. Me expli— cripción, de los techos máximos de
co. Ahora se pretende incorporar a cumplimiento, la drogodependen-
la víctima (incluso a ciertos avatares cia como agravante en vez de cómo
de la ejecución, o como parte en el atenuante, etc., etc. Todo parece ce-
procedimiento de menores), pero der en favor de un derecho penal de
propiamente se hace no como suje- corte más duro, más mecanicista y
to de reparación del daño, sino objetivista, ajeno al ideal humaniza-
como agente vindicativo. De seguir dor de nuestros mejores y más hu-
por esta vía, la víctima se persona no manistas penalistas, y con poco
como quien ha sufrido un injusto margen hermenéutico para el juez.
agravio y merece ser atendida, aco- En definitiva, el endurecimiento del
gida, escuchada, reparada, protegi— sistema penal, el incremento de la
da, sino como instrumento al servi- crispación social y la intolerancia, la
cio de la vindicación formal. Antes disminución del Estado en lo social,
era un mero elemento probatorio en el aumento de violencia general y la
el proceso penal, hoy se la quiere presión mediática amenaza con des-
tomar en mera herramienta vindica- peñarnos a un peligroso abismo del
tiva. Ambas posiciones creo que la que tristemente empezaremos a sa-
cosifican e instrumentalizan, bien lir cuando los ciudadanos medios
sea en aras de impulsar el procedi— experimenten en su carne lo errático
miento penal, bien en aras de satis- de esta dirección.
facer cierta catarsis colectiva y mal Con esas alforjas poco se camina
disimulada sed de venganza privada por el sendero de la reinserción so-
(precisamente para evitar lo cual cial, y mucho se precipita uno a las
surge el Derecho Penal). Desde lue- cavernas del pasado del'que tanto
go creo que este camino, más dia- costó salir y a las que tan precipita-
léctico que dialógico, no es el más da como inadvertidamente nos en—
respetuoso con la víctima. caminamos. Por eso, una vez más,
habrá que recordar la máxima con
Conduyendo que Gandhi prevenía a los muy da-
dos a acudir a las vias expeditivas:
La cosa no ha hecho más que empe- "Cuando el fuego se combate con el
zar. Ahora vendrá la reforma de la fuego, todo acaba en cenizas".
Ley Penal del Menor ("virgencita, Amén.

98
Vuelta a las cavernas nenales K
:K
NOTAS: troactividad a libre disposición de todos.
1. No es el único. Otro ejemplo: "cho- Se facilita enviando un “emilio“ pidién-
rizo chapao, funcionario descansao". dolo a: jsb456©wanadoo.es
2. L. WACQUANT, Las cárceles de la 8. Las funciones pretorianas se refie-
miseria, Alianza Editorial, Madrid, 2000, ren a la salvaguarda de las libertades, la
pp. 79 ss.; y prólogo y postfacio a El en— defensa del interés general expresado en
carcelamiento de América, Virus edito- las leyes y la protección de los vulnera-
rial, Barcelona, 2002 bles (niños, incapaces, pobres...).
3. Así no es de extrañar que una ley tan 9. F. CARRARA, Programa de Curso de
"social" como la que regula el voluntaria— Derecho criminal, Buenos Aires, 1944,
do en España hable del Estado como ”de vol. II, pp.400 ss., citado por L. FERNÁN—
Derecho", cayéndose escandalosamente DEZ AREVALO y B. MAPELLI, Práctica fo—
de la definición del modelo de organiza- rense penitenciaria, Civitas, Madrid,
ción política, lo de “Social y de Derecho", 1995,11.
por más que aparezca consagrada nada 10. |. RIVERA BEIRAS, La devaluación
menos que en el art. 1 dela Constitución. de los derechos fundamentales de los re-
Nada extraño, cuando líneas más adelan— clusos, Bosch, Barcelona, 1997.
te, en la exposición de motivos, se nos 11. Cfr. Auto TC 15/1984 de 11 de ene-
dice quela responsabilidad sobre la cues- ro que señala quela reeducación ola rein-
tión social ya no es del Estado, sino serción social del penado no constituye
"compartida" con las ONGs, en una peli— un derecho fundamental, sino ”un man-
grosa confusión entre responsabilidad dato del constituyente al legislador para
(que compete al Estado merced al art. 9.2 orientar la política penal y penitenciaria,
CE) e intervención, de la que deben ser mandato del que no se derivan derechos
protagonistas todos los actores sociales. subjetivos"; ola STC 2/1987 de 21 de ene-
4. C. ROXIN, Política Criminal y sistema ro que señala que "el art. 25.2 confiere
de Derecho Penal, Bosch, Barcelona, como tal un derecho amparable“. Más
1972. contundente aún la STC 19/1988 de 16 de
5. Ya ha tenido que pronunciarse el febrero que señala que de la redacción del
Tribunal Supremo en STS 03.07.03 (po- art. 25.2 dela Constitución "no se sigue ni
nente A. Martínez Arrieta) recordando el que tales fines reeducadores y resociali-
que "el objeto del proceso es el enjuicia- zadores sean los únicos objetivos admisi-
miento de la conducta objeto de la acu- bles de la privación penal de la libertad
sación, pero a quien se condena es a una […] El mandato presente en el enunciado
persona"; y que "las especificidades de inicial de este art. 25.2 tiene como desti—
los llamados juicios rápidos, particular- natarios primeros al legislador penitencia-
mente referidos a la celeridad en el en- rio y a la Administración por él creada [...]
juiciamiento, no pueden alterar el régi- no cabe, pues en su virtud, descartar sin
men de garantías del justiciable y deben más, como inconstitucionales todas cuan-
propiciar una especial sensibilidad del tas medidas privativas de libertad —ten-
órgano jurisdiccional para procurar que gan o no el carácter de 'pena'— puedan
la persona y su conducta puedan hacer parecer inadecuadas por su relativamente
valer todos los instrumentos de defensa corta duración, para cumplir los fines allí
que sean pertinentes y necesarios para la impuestos a la Ley y a la Administración
realización de la justicia" penitenciarias". Lo mismo se diga, como
6. Cfr. D. WAGMAN, Estadística, delito desarrolla I. RIVERA BEIRAS, o. c., pp. 324
e inmigración, Madrid, 2002. Pone de ss., de la noción de "aplicación progresi-
manifiesto la falta de adecuación de las va" susceptible de ser exigida “únicamen—
cifras policiales a la realidad. Algunos ca- te si la Administración tiene medios para
sos de grosera evidencia. ello y no cuando realmente exista la im-
7. Julián c. RÍOS MARTÍN tiene un es- posibilidad material de satisfacerlo" (Auto
tudio monográfico cuestionando la re— TC 302/1988 de 14 de marzo).

99
R DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

la excusa del termero


nara combatir la
disidencia 4» jaume Asens
(Col-Iectíu Layrety miembro de la
Comisión de Dgfensa del Colegio de
Abogados de Barcelona)

I contexto bélico de la nueva ción armada. Así actos de la llamada


E era de la "guerra permanente" "violencia urbana”, que hasta ahora
utiliza el llamado "terrorismo encontraban su encaje penal en figu-
internacional" como una de una de ras delictivas como la de daños o in—
las excusas para contrarrestar el cre— cendio, ahora son calificados directa-
cimiento delos actuales movimientos mente como de "acciones terroris-
sociales, en un claro resurgir de la tas", y a los detenidos se les aplica la
teología expansiva del "derecho pe- legislación antiterrorista.
nal de la emergencia". El Estado Es- Así en Valencia, el 14 de octubre
pañol lejos de permanecer ajeno a del 2002, se desáloja el Centro So-
esa dinámica involucionista, en Euro- cial Malas Pulgas y el juez Francisco
pa ha sido, junto a Italia, el principal Jorge de Mesas (apodado el "pe-
impulsor con una serie de medidas queño Garzón") posteriormente or-
aprobadas despues del 11 de sep— dena la detención y posterior pri-
tiembre, cuando la Unión Europea sión de cuatro okupas, considera-
decidió quela lucha antiterorista fue— dos como un "grupo en tránsito
ra el "objetivo prioritario de la U.E.". insurreccional violento" (el grupo
En los últimos meses ha habido va— “Malas Pulgas" le llaman) y acusa-
rios casos prácticos, donde se ha po- dos de asociación ilícita y de terro-
dido comprobar esta deriva autorita— rismo por unas acciones contra in-
ria. En España, mientras las operacio— mobiliarias. Finalmente se decreta
nes policiales antiterroristas contra su libertad bajo fianzas millonarias
miembros del movimiento alternati- en marzo. Posteriormente el juez
vo o autónomo buscaban el pretexto Garzón dela Audiencia Nacional ini-
de una colaboración 0 integración en cia, con el apoyo del Grupo VI de la
organizaciones armadas como el Brigada de Información de la Policía
GRAPO 0 ETA, ahora ni tan siquiera Nacional (heredera dela Brigada Po-
se toman la molestia de usar esa ex- litico-Social del franquismo y espe-
cusa y pasan a considerar que ellos cializada en la persecución contra
mismos constituyen una organiza- los movimientos sociales alternati—
100
“<?
La excusa del terrorismo

vos) otra operación antiterrorista; vados, el señor Garzón se erige en un


esta vez contra anarquistas y oku- “juez combatiente" que asume un
pas del Baix Llobregat de Barcelona. papel activo y beligerante en función
En total son siete personas imputa- de sus ambiciones personales, que le
das de "pertenencia a banda arma- llevan a invadir competencias de
da" por su supuesta participación otros órganos jurisdiccionales; así en
en actos de sabotaje contra cajeros las últimas operaciones la imputa-
automáticos, y dos ingresan en pri- ción absurda de terrorismo a los de-
sión provisional (después serán tenidos le permiten sustraerle al juez
puestos en libertad bajo fianzas mi- ordinario y reclamarlo para su com-
llonarias). Finalmente, este mes el petencia.
mismo juez Garzón dirige otra ope- Pero está claro que el señor Gar-
ración contra tres independentistas zón no es la única explicación del
y antifascistas de la localidad de despropósito; la agresiva posición
Torá, a los que envía a prisión, per- ideológica antiterrorista de los
maneciendo todavía a la espera de EEUU hace emerger una cultura jurí-
que se resuelvan los recursos inter- dica de la emergencia y la excepcio—
puestos contra la misma. Los cargos nalidad que llega tanto a España
penales son los mismos: "pertenen— como a Italia, y que permite a Aznar
cia a banda armada" por hechos si- anunciar una “ofensiva legal por la
milares, ataques a cajeros automáti- seguridad, contra el terrorismo y la
cos. Uno de los detenidos, después delincuencia ” —e/ ”we are at war"
de los interrogatorios policiales, ter- español— con un doble objetivo:
minará en el hospital psiquiátrico, satisfacer los "deseos emotivos de
víctima de un ataque de ansiedad, y pena" de algunos sectores sociales
sus familiares interpondrán una permeables a la actual "ideología
querella criminal por torturas. securitaria hegemónica“, a la vez
Son muchas las explicaciones que que desviar la atención mediática y
se pueden encontrar a estos despro- el creciente descontento ciudadano
pósitos consecutivos. En primer lu— por disparates políticos (decretazo,
gar, es una muestra del afán inconte- el Prestige, el apoyo del Gobierno a
nible y megalómano del juez Garzón la guerra ..... )
por ampliar su ámbito jurisdiccional. En estas operaciones se impone la
De forma sistemática, su actuación “doctrina preventiva" de Bush y su
se caracteriza por una extralimita- "guerra global permanente", pero
ción de las funciones propias de un esta vez dirigiéndose al "enemigo
juez instructor, que lo ha convertido interno", otorgando mayores facul-
en el protagonista de una cruzada tades discrecionales a la policía y
personal contra el "mal", en todas consolidando un mayor grado de
sus manifestaciones. Pervirtiendo la autonomía de la autoridad ejecuti-
reforma procesal del año 1995, que va. Esta nueva “guerra contra la
reorientaba la función del juez a un subversión" de carácter preventivo
trabajo de control de garantías, y re- empezó ya en Génova con los mili-
servaba el impulso acusatorio al Mi- tares en la calle, la utilización de ar-
nisterio Fiscal 0 a los acusadores pri- mas, carros blindados y gas prohibi—
101
F
Y.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

do por las Convenciones de Gine- conseguirla única prueba que se pre—


bra. Esa guerra después será la senta contra los escogidos: su propia
“guerra global permanente" actual, confesión después de largos interro—
donde la "lógica preventiva“ triun- gatorios en comisaria. En estos casos
fará en todos los campos represivos. la policía no inicia una investigación,
Así por ejemplo, por citar uno, las recogiendo las correspondientes
detenciones masivas de carácter pruebas, sino que la estrategia poli-
preventivo no sólo se practican en cial consiste en presentar y cualificar-
EEUU —como en las movilizaciones los como terroristas, para así poder
contra la guerra de Iraq—, sino tam- aplicar la legislación terrorista, que
bién en Barcelona, cuando en el úl- facilita la práctica de la tortura (como
timo 12 de octubre del 2002 la poli— hace unas semanas denunció el pro-
cía organiza "filtros" previos a la pio relator especial del Comité Contra
manifestación y detiene de forma la Tortura de la ONU) y posterior con—
preventiva a unas 30 personas. fesión. Para ese torticero cometido el
Esta "lógica preventiva" permite a mejor destinatario es el señor Gar—
la Audiencia Nacional mantener en zón, especialmente inactivo ante las
prisión provisional durante un largo denuncias por torturas u otros abu—
periodo de tiempo a ciertos deteni- sos policiales en la obtención de
dos (como a los 16 magrebíes dete— pruebas (ahora precisamente Estras-
nidos en Girona acusados de perte- burgo ha admitido la querella de los
necer a Al Qaeda, el llamado "Co— detenidos de 1992 en una razia de
mando Dixan"), sin disponer de Garzón).
ninguna prueba o indicio incrimina- Aznar, cuando el cierre de Egun-
torio, consolidándose una nueva karia, dijo que “terroristas no sólo
cultura penal preventiva que facilita son los comandos que matan", ins-
una praxis judicial cada vez más rea- pirándose quizá en el dictador Vide—
cia a la libertad provisional. la, cuando en el 1978 afirmaba que
En el caso de las ultimas operacio- "terrorista no es sólo quien pone
nes dirigidas por Garzón nos encon— bombas, sino quien opera con ideas
tramos con una situación parecida, contra nuestra civilización occiden—
cuando la policía, desacomplejada y tal y cristiana“. Estos casos son una
aprovechando el nuevo contexto in- muestra más de que, en el contexto
ternacional, entra en una actividad liberticida actual, el terrorismo será
febril para reabrir casos no resueltos. cada vez más la excusa, por lo que
Con una lista de sospechosos y una los movimientos alternativos no
lista de actos de sabotaje de hace sólo deberán enfrentarse a la lógica
tiempo, utiliza los instrumentos puni- de la guerra, sino también deberán
tivos que permite la legislación terro- proteger su derecho a protestar.
rista, básicamente la tortura, para

102
"<7€
La excusa del terrorismo

Detenciones en Torá
A primeros de abril, un espectacular operativo policial de mossos d 'esqua-
dra y dela guardia civil, respaldado por numerosos agentes de paisano, tras
tomar el pequeño pueblo de montaña de Torá (Lleida) detenía a tres jóve—
nes. La orden de detención que les imputaba delitos de terrorismo y orde—
naba su incomunicación provenía del juzgado n.º 5 de la Audiencia Nacio-
nal, del cual es titular el juez Baltasar Garzón. Fuentes policiales atribuyeron
a los detenidos diversas acciones contra oficinas bancarias y contra un re—
petidor de telecomunicaciones. Sin embargo, cuando escasos días más tar-
de el juez dicta una orden de ingreso en prisión delos detenidos, los hechos
en los que se basa la imputación se reducen a tan sólo dos acciones de los
años 2000 y 2001. En los registros efectuados en viviendas y un local de los
detenidos, y durante los cuales la policía se llevó material, no se han en-
contrado ni armas ni explosivos ni nada que permitiera atribuirles ninguna
vinculación a un grupo o banda armada. Las únicas pruebas son las decla-
raciones autoinculpatorias obtenidas por la policía. Al respecto hay que re—
saltar que uno delos detenidos tuvo que ser hospitalizado con una crisis de
ansiedad tras pasar por dependencias policiales, y desde el centro médico
fue llevado a la cárcel. Por ello su familia y allegados han denunciado pú-
blicamente que el detenido fue torturado. Las declaraciones de este joven
son la base de la acusación contra los otros dos detenidos.
Además, durante su incomunicación, para no ahorrarle ningún dolor
añadido a las familias, la policía dio información falsa acerca de dónde se
encontraban los jóvenes, lo que ocasionó a sus allegados viajes inútiles a
Madrid, Barcelona y Lleida. Asimismo, grupos de apoyo a los detenidos
denunciaron también el estado de sitio que vivió y sigue viviendo Torá,
con un desproporcionado despliegue policial y la situación de alarma so- ,
cial que ha provocado.
Aún hoy los tres jóvenes se encuentran encarcelados en prisiones ma- “
drileñas (J. V. en Soto del Real, y los otros dos, J. T. y A. C. en Alcalá Meco),
a la espera de que el tribunal decida sobre los recursos contra las deten-
ciones presentados por sus defensas.

Muestras de apoyo
A mediados de abril, en Barcelona 6 presos de la 63 galería de la Modelo
llevaron a cabo una huelga de hambre en solidaridad con los presos de
Torá y reivindicando los 4 puntos de lucha delos presos. En Torá han sido
numerosas, diarias en algunos casos, las concentraciones de repulsa en la
calle. El 12 de abil, unas 1.200 personas se manifestaron en un emotivo
acto por el centro de Lleida en solidaridad con los encarcelados.
Para más información, hay una pagina web de la Coordinadora Anti-
rrepresiva de Ponent: http://www.sindominio.net/suportponent/

103
……ARREEQRMA£ENAL
Por otro lado, los cinco detenidos relacionados con ateneos libertarios
y grupos anarquistas a mediados de febrero en Barcelona y Almería (ver
Molotov de abril), y acusados igualmente de delitos de terrorismo por su-
puestos sabotajes (también incomunicados en aplicación de la legislación
antiterrorista y que denunciaron torturas y malos tratos), están todos en
libertad bajo fianza. El último de ellos en quedar en libertad bajo una
cuantiosa fianza fue el joven detenido en Almería, que permaneció in-
gresado en el hospital de la cárcel de El Acebuche, tras su paso por de-
pendencias policiales. Fue el último en prestar declaración ante el juez. La
Audiencia Nacional no se ha pronunciado todavía sobre las peticiones de
inhibición de este tribunal especial presentadas por los abogados defen-
sores para que el caso pase a un juzgado ordinario de Barcelona.

Apdo. 5 28091 G
Cnspmt©)'ahoo.e

104
%?
Los niños como
ns;runrenio de
varianza, control ¡:
hostigamiento (Ml ENRIQUE MARTÍNEZ REGUERA

l amparo de la Jurisdicción les arrebata los pocos motivos de es-


especial de Menores la Ad- forzarse y vivir que les quedan.
ministración ha ido creando Como resultado dela mencionada
una categoría especial de niños, los Ley, hoy en España, en la práctica,
"niños en situación de riesgo"; con- nacen dos categorías de niños: ni-
cepto que luego hizo extensivo a ños sin riesgo y niños de riesgo. “Ni-
"grupos de riesgo“, sean niños o no. ños sin riesgo“, con familia adecua-
Esto ha sido posible porque la Ley da o no, pero con recursos como
de Protección del Menor otorga la para impedir que el Estado se los
facultad de expropiar los hijos a sus quite; y “niños de riesgo“, con fami-
padres, incluso con carácter preven- lia adecuada o no, pero sin recursos
tivo, cuando estén "en situación de para defenderles.
riesgo". Es decir, la Ley de Protec- Antes dela caída del Muro de Ber-
ción prejuzga que si hijo y padre, lín había dos enfoques ideológicos
ambos están en situación de riesgo, respecto al derecho de propiedad
la culpa siempre es del padre; por sobre los hijos: nuestro área cultural
eso, en vez de ayudarle, le castigan entendía que los hijos por principio
privándole de su descendencia e in- pertenecen a sus padres; mientras
explicablemente también castigan que en los países del Este los hijos
al hijo privándole de sus raíces. pertenecían al Estado por conside-
Excuso decir que todo ese sector rarles un bien de interés público, un
de padres e hijos, culpabilizados por bien común. De esas dos ideologías
“padecer riesgos" y amenazados surgió el clásico debate entre la es-
con semejante expropiación, jamás cuela pública yla privada.
se van a sentir protegidos por mu- La política de menores actual,
cha ley de "Protección" que se titule, fundiendo y confundiendo los inte-
sino que se van a sentir, y con razón, reses privados con los intereses del
hostigados, aterrorizados por un Es- Estado, ha decidido que los dos en-
tado que en vez de serles subsidiario foques, el privatizador y el estatalis-
105
R
N¡¡
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

ta, y que tenían razón, hasta dar a telar, por eso yo lo denomino "Mo—
cada uno lo suyo: los niños cuyos nopolio".
padres tiene recursos, son propie- Aparato en principio conectado
dad privada de la familia; mientras mediante un "convenio". Y aquí es
que los niños a la intemperie, son en donde mi presunción de las bue—
propiedad de todos, un bien co- nas intenciones del legislador em-
mún, de interés público y pública pieza a desvanecerse, porque el
utilidad o aprovechamiento. "convenio" no es tal, sino todo lo
Yo me esfuerzo en suponer que en contrario: una contrata a la baja, de
principio las intenciones del legisla- prestación de servicios subvenciona—
dor no fueron malas: como a los dos; y ¿quién decide los intereses a
“hijos de familia bien" sus abundan- proteger?, ¿el subvencionante o el
tes recursos Ies permitían presagiar subvencionado?: de nuevo el Estado
un futuro satisfecho, a los “hijos sin confundiendo los intereses públicos
suficientes recursos", con todos los con los privados o, por ser más
riesgos que eso conlleva, el Estado exacto, los intereses que están a la
también tenía que garantizarles intemperie con los intereses instala-
algo: que en el futuro serán útiles y dos en el Poder.
rentables, aprovechables. Máxime cuando en esta contrata
Para eso, todos los hijos a cuyos de prestación de servicios subven-
padres se retira la tutela, o aquellos cionados, la parte contratante, por
a quienes se les puede retirar (todos ley y de modo explícito, se reserva
los niños "en riesgo" son expropia- todos los derechos, so pretexto de
bles), fueron encomendados en ré- que lo hace por el bien del menor; y
gimen de monopolio a una institu- atribuye a la parte contraria todos
ción pública, gestora de su vigilan- los deberes, bajo riesgo de que si no
cia, custodia o corrección, ora con achanta se queda sin subvención.
carácter inmediato ora cautelar o Dándose la esperpéntica situación
anticipatorio. de que por sistema sean el político y
Pero como ese Monopolio no pue- el administrativo de turno quienes
de ejercer ta| vigilancia y control dictan al perito lo que se ha de ha-
mediante una simple Comisión, so- cer, al profesional, al veterano en ha—
bre miles de niños y sobre miles de cerlo, educador, psicólogo... puesto
adultos que se relacionan a diario que el Monopolio, por el bien del
con esos niños, entonces se vio obli— menor, se reservó todos los derechos
gado a organizar todo un gigantes- y a los del Aparato sólo les quedó la
co aparato y sistema de vigilancia, obligación de atenerse a lo que les
custodia y corrección, integrado por manden o quedarse sin subvención
miles de funcionarios y ONGs y em- o ser despedidos.
presas y fundaciones y profesionales Y yo me pregunto: ¿cómo podrán
y mano de obra y voluntarios y ciu- garantizar los derechos del “cliente"
dadanos asustados que reclaman quienes no pueden defender ni los
más control. Aparato que está co- propios? Si un especialista no puede
nectado en su totalidad y con abso- ni discrepar sobre lo que mejor con-
luta dependencia a la Comisión Tu— viene, si un educador ni siquiera con-
vc
Los niños como instrumento

serva la capacidad para defender los pasar algo al chaval con el que tie-
derechos que corresponden a sus de— nes relación académica o del que
beres, ¿cómo podría defender los eres monitor de tiempo libre o en-
derechos del educando? No, un suje- trenador deportivo? Algo, aun po—
to así se convierte en mera fuerza niendo el mayor empeño: torcerse
coercitiva, en mero vigilante de los un pie o caerse de una tapia. Pues
deberes que le han dictado para el bien, todo ese riesgo también entra
educando. bajo el área de vigilancia del Mono-
Conocí a unos veteranos educa- polio cautelar, todo eso nos convier-
dores que se quejaban igual que su te en sujetos de sospecha preventi—
ONG de verse obligados por sistema va y de adopción de precauciones.
a determinadas intervenciones que Por eso, cada vez más, las relaciones
consideraban gravemente inmora- familiares, las clínicas, las académi-
les, deseducativas, atentatorias con- cas, cualquier relación con un niño,
tra su propia dignidad y la de sus está teniendo que ser reglamentada
"clientes" menores. Los educadores y hay que dedicar la mayor parte del
tenían dos opciones: o denunciar y tiempo no al niño, sino a elaborar
perder el puesto de trabajo, o ha— ¡nagotables partes e informes que
cerse cómplices de aquella infamia; resguardarán nuestra propia espal-
y su ONG: 0 perderla subvención, o da frente a cualquier azar. Todos vi-
someter o expulsar a aquellos edu- gilantes para eludir entrar en área
cadores. En unas Jornadas sobre Tu- vigilada.
tela y Reforma acabo de conocer a En las escuelas los profesores
otra docena de monitores que me cada vez dedican más tiempo a ela-
confiesan ser "vomitivo" (sic) lo que borar informes que luego estarán en
están viendo y teniendo que hacer manos de miles de vigilantes: comi-
con sus muchachos en sus centros; sión de escolarización, comisión de
tienen dos opciones: o endurecer su seguimiento familiar, comisión de
conciencia y hasta su consciencia absentismo, comisión delo que sea;
para soportarlo, o emigrar, o cam- los médicos que antes hacían el ju-
biar de profesión (conozco decenas ramento hipocrático, ahora para
que por decencia lo están hacien- proteger sus espaldas parecen jura—
do), porque en el Monopolio Estatal mentados con la Institución Tutelar
no volverán a encontrar un puesto y están conectados a esas redes y
de trabajo. comisiones; las trabajadoras socia-
Por otra parte, como el concepto les que antes buscaban recursos di-
de "riesgo" es tan indeterminable rectos para ofrecerles a sus "clien-
que hasta incluye la noción de tes", ahora dedican su tiempo a re-
"azar", y al azar todos estamos so- cabar información como policías de
metidos, el alcance de esa facultad paisano; hasta el policía que antes
"inmediata" de vigilancia y control se limitaba a gestionar el obligato-
se vuelve universal, atemporal, om- rio carnet de identidad para un ado-
nímoda: ¿quién no ha visto alguna lescente, ahora te lo niega si no le
vez posibilidades de riesgo en su re— consta quién eres tú respecto a ese
lación con un niño?, ¿no le puede adolescente: conozco a una abueli-
107
R
xr.
DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

lla que ha criado a su nieto desde especialistas, ONGs, empresas, fun-


que nació hasta los dieciséis años, y daciones y mano de obra en general,
cuando abuela y nieto quisieron que subscriben como posesos seguros
empezara a trabajar y solicitaron de responsabilidad civil, insuficien-
para ello el carnet de identidad del tes para quitarse del cuerpo el mie-
muchacho se lo negaron en la comi- do que mediante el azar y el riesgo
saría, porque a la abuela no le cons— les han metido. Lo que por azar pu-
ta si tiene la "guarda y custodia" — diera acaecer en el futuro, opera ya
¡después de criarlo en su casa dieci- como miedo actual a que nos lo
séis años!—; y la institución tutelar puedan achacar si llega a ocurrir.
y la fiscal no saben, no contestan, Como en un campo de concentra-
desde hace casi un año. ción, se trata de un miedo omnipre—
Y es que una regulación así, fisca- sente, total, pero rígidamente verti—
lizadora y exhaustiva, es al mismo cal: cada cual controla a los que es-
tiempo un inagotable manantial de tán debajo por miedo a los que
arbitrariedades, no sólo contra los están encima vigilándole. Y lo peor
niños que en cuatro días serán el fu- de todo esto es que precisamente
turo, sino además contra su actual eso propicia una constante deriva-
entorno adulto. Conozco una mamá ción o enajenación de las propias
a quien el ayuntamiento le acaba de responsabilidades personales, fami-
imponer una multa de medio millón liares, educativas, sociales, hacia ins-
de pesetas, porque según los inter— tancias estructurales: yo ya no tengo
mediarios sociales, que encima son nada que decir, el propio sistema lo
anónimos, opinan, creen, es proba- dice todo por mi, mi responsabilidad
ble, que no haya hecho "todo el es- se reduce a la obediencia debida, a
fuerzo posible" para someter a su someterme para no salir perjudica-
hija y reducir su absentismo escolar. do, para que pase lo qué les pase a
Prefiero suponer que al final no va a los demás yo esté a cubierto.
pagar esa multa, pero del acoso y Con lo cual, lo que antes era malo
hostigamiento de que está siendo para todos, por ejemplo el acciden—
objeto ya nadie la libra. te de un niño, ahora sigue siéndolo,
Como la población en riesgo es in- pero los afectados quedan divididos
definida pero presumiblemente in- y enfrentados: el que le puede sacar
mensa, también presumiblemente una indemnización y el que ha de
precisa de un descomunal aparato pagarla. Esto es, insisto, como en un
de vigilancia y control en cuyo en- campo de concentración, todos
granaje, sin percibirlo, ya hemos en— contra todos, o la hago pagar o la
trado todos: o denuncias cualquier pago. La desdicha deje de ser algo
sospecha de riesgo o te haces cóm- compartido para convertirse en
plice y responsable de lo que pueda campo de litigio. Antes dos familia-
ocurrir. Fruto de este diseño autori- res o dos vecinos reñían por sus ni—
tario de inseguridad y miedo gene— ños y se resolvía, bien o mal, en el
ralizados, hoy todo adulto que ten— ámbito familiar o vecinal; hoy, bien
ga relación con niños: padres, edu- o mal, lo están derivando a la Fisca-
cadores, funcionarios, profesionales, lía o al Juzgado de Menores. Antes
108
'<7º
Los niños como instrumento

maestros 0 alumnos tenían diferen- no les debe preocupar. Tal vez toda-
cias y reclamaban ante sus propias vía no sea la ley del más fuerte, pura
instancias académicas; hoy las rela- y dura, porque todavía no estamos
ciones académicas toman forma de acostumbrados a infligir daños sin
comparecencia, parte, expediente, sentirnos afectados, pero es su in-
sanción, para que vayan aprendien- exorable y sofisticado anticipo: la ley
do el cambio de sistema. del que disfruta de más abogados,
A ciertos monitores de los que ya de más recursos jurídicos, de más se-
os hablé les dijeron tal cual, que el guros de responsabilidad civil...
seguro de responsabilidad civil que frente al que se halla a la intemperie.
subscribían era para protegerles de ¡Qué quieren que les diga!, que
la responsabilidad de los posibles otro mundo es posible y que para
“daños que pudieran infligir" a sus éste conmigo que no cuenten.
encomendados. Ya está previsto:
"infligir daños" a los encomendados Madrid, 24-11-2003

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103 0808
A p do . 24

109
……

Régimen abierto y
terce_r grado: la lenta
¡ranura de una
GSDQÍ8I128 (Mi PURIFICACION GARCÍA MATEOS

Introducción 1. La ilusión de los


ochenta
La potenciación del régimen abierto
y por ende la clasificación de los re- El dictamen de la Comisión del Sena—
clusos en tercer grado, viene siendo do al proyecto de Ley Penitenciaria ya
un desideratum desde los primeros recogía que: “En supuestos de impo-
pasos de la legislación penitenciaria sición de penas privativas de libertad,
post-constitucional. Los probados y éstas deben cumplirse normalmente
eficaces beneficios del contacto con en el llamado régimen abierto...“ En
la comunidad social libre y la posibi— el mismo sentido, la Exposición de
lidad de que el preso cumpla la Motivos de la Ley General'Penitencia-
pena alejado de la cárcel, conven- ria plasmaba la intención de "poten-
cionalmente entendida, han tenido ciación del régimen abierto y reduc—
como consecuencia el desarrollo de ción del cerrado a supuestos extraor—
las más variadas alternativas para dinarios"; es más, la propia Ley
potenciar la ejecución penal en el General Penitenciaria, al introducir el
medio social abierto. Sin embargo, y "principio de individualización cientí—
pese a todo, las sucesivas modifica— fica separado en grados", declaraba
ciones Iegislativas yla política crimi- que cualquier preso podía ser clasifi-
nal, casi siempre al servicio de inte- cado directa e inicialmente en tercer
reses políticos partidistas, han ido grado —es decir, acceder al régimen
frustrando aquellas expectativas abierto— sin tener que pasar por el
hasta dejarlas reducidas hoy en día, ordinario, por la cárcel convencional.
con las últimas reformas habidas en Se reconocía de esta forma lo que al-
junio de 2003, a meras ilusiones im- gunos venían denunciando: que el
posibles. Veámoslo. encierro continuado destruye, que
deshumaniza, que produce alteracio-
nes físicas, psíquicas, motoras y sen—
soriales graves, que el contacto direc-
110
N?
Régimen abierto v tercer grado

to con la comunidad exterior evita es- tas —departamentos dentro de las


tos sufrimientos y favorece la inte- prisiones ordinarias— en Barcelona,
gración; en definitiva, que cumplir Valencia y Alcalá de Henares, exis—
una condena sin necesidad de estar tiendo todavía algunos destacamen—
24 horas rodeado de rejas y funcio- tos penales —barracones al aire libre,
narios no sólo es posible, sino que es habilitados para la construcción de
beneficioso para el recluso y, por carreteras, puertos y embalses— re—
ende, también para la comunidad a presentativos del régimen abierto en
la que habrá de incorporarse cuando la época franquista. Al mismo tiem-
le llegue la libertad. Se abrían, pues, po, en 1987 se inaugura la primera
tras varias décadas de oscurantismo, Unidad Dependiente —un piso situa-
muchas y amplias posibilidades para do en la comunidad libre, desvincula-
convertir el régimen abierto —en de- do arquitectónicamente del formato
finitiva, el tercer grado—, en una al- carcelario, pero vinculado adminis—
ternativa seria a la cárcel tradicional o trativamente a la Administración pe—
incluso, por qué no, en un tránsito nitenciaria— para madres con hijos
hacia su supresión. menores, gestionada por la Generali—
Muchos, invadidos por el optimis- tat Valenciana; y en 1988 se crea otra
mo post-constitucionalista de finales Unidad Dependiente para el mismo
de los años setenta, se atrevieron in- colectivo, pero en Madrid.
cluso a hablar de cifras de posibles
beneficiarios de esta nueva alternati— 2. La decepción de los
va. García Valdés se refirió a un 45% noventa
de presos susceptibles de clasifica-
ción en tercer grado, Garrido Guz- Y así se llega a los años noventa, con
mán a un 40%, y la propia Adminis- la esperanza de que las nuevas inver-
tración Penitenciaria a cuotas de has— siones mejoren Ios establecimientos
ta aproximadamente un 50% de los a los que estaban adscritos los clasi—
presos. Y así fue. Si con anterioridad ficados en tercer grado. Sin embar-
a la Ley Orgánica General Penitencia- go, las inversiones no llegaron, mejor
ria el porcentaje de presos clasifica- dicho, se destinaron principalmente
dos en tercer grado oscilaba en tor— a la construcción de macrocárceles; y
no al 16,17º/o, en los años ochenta la a pesar de la insistencia de la legisla-
cifra aumenta hasta casi el 42%. ción por crear nuevos centros de
Pero pronto empezaron a surgir los cumplimiento para los presos clasifi-
problemas. A pesar de puntuales ex- cados en tercer grado, alejados del
periencias como "Liria" —estableci- tradicional formato de la cárcel —
miento para jóvenes en tercer grado, como, por ejemplo, los Centros de
basado en la preparación y cualifica- Inserción Social—, lo cierto es que al
ción profesional como medio de rein- final se emplearon las antiguas cár-
serción—, la falta de centros adecua— celes para que, antes de ser cerradas
dos donde albergar a los presos en definitivamente, pasaran a desempe-
régimen de semilibertad era más que ñar esta nueva finalidad. De este
evidente. En 1980, apenas empiezan modo, es cierto que las decisiones
a funcionar algunas secciones abier- administrativas que consistían en
111
aprovechar las antiguas y devastadas nes No Gubernamentales. Es decir,
prisiones como “centros abiertos" cambiar el efecto intimidatorio de
estaban justificadas por el criterio de los barrotes, por la confianza en el
temporalidad, pero la verdad es que preso y su propia responsabilidad.
muchos de estos centros, ubicados Todo parecía perfecto, pero de nuevo
en viejas prisiones, siguieron y han llegaron otra vez los problemas. El
seguido funcionando hasta nuestros Estado, lejos de tomarla iniciativa de
días en las mismas condiciones. tan novedosa e importante propues-
Y entonces entra en vigor el Código ta y aprovechando esa colaboración
Penal de 1995, y con él otra vuelta de que manifestaba como imprescindi-
tuerca: mayores obstáculos para ac- ble Ia legislación, dejó la misma prác-
ceder al tercer grado. AI eliminarse la ticamente en manos de estas asocia-
figura de la redención como benefi- ciones, en clara connivencia con
cio penitenciario, se tarda más tiem- ellas, por lo que se supeditaba la rea-
po en alcanzar la cuarta parte de la lidad de las Unidades Dependientes
condena, requisito imprescindible a la existencia y disponibilidad de
para acceder al primer permiso y, por instituciones dedicadas a la resociali-
tanto, a los sucesivos. El disfrute pre— zación de presos. Muchas de estas
vio de permisos, aunque la ley no lo instituciones, mientras tanto, nave-
establezca, es un requisito que en la gaban entre las subvenciones que les
práctica la Administración Peniten- permitían sobrevivir —con importan-
ciaria emplea como previo a la con— tes carencias como falta de personal,
cesión del tercer grado. De este falta de profesionales especializados,
modo el procedimiento se ralentiza. empleo de voluntarios en detrimento
Curiosamente, la cifra de clasificados de profesionales “contratados, bajos
en tercer grado en esta década des- salarios, etc.— y la pleitesía que ha-
ciende bruscamente respecto a la dé— bían de rendir a la Administración
cada anterior y se cifra en torno al Penitenciaria si querían hacerlo. Con
12%. Un panorama desolador. un peligro añadido, sin el control ne-
Pero de nuevo surge una esperan- cesario, algunas de estas "organiza-
za, Ia verdadera alternativa a la cár- ciones sin ánimo de lucro" podían
cel tradicional: Ia posibilidad de estar convertirse en “organizaciones sinó-
preso, clasificado en tercer grado, nimo de lucro", en verdaderos "hol-
pero sin la necesidad de estar en la 'dings empresariales" que pudieran
cárcel: “la Unidad Dependiente". llegar a ser —como ya ocurrió en Es—
Esta nueva figura, que ya había co- tados Unidos con la experiencia de
menzado su andadura en la década intervención y gestión de asociacio-
anterior, aportó sin duda una pers- nes sin ánimo de lucro, en los cen—
pectiva revolucionaria a la ejecución tros juveniles— la vía de entrada de
penitenciaria; la idea de cambiar la la privatización a la ejecución penal.
cárcel por residencias situadas fuera
de los recintos penitenciarios, pero
incorporadas funcionalmente a la
Administración Penitenciaria, gracias
a la colaboración de las Organizacio-
112
'<X
Régimen abierto v ferrer prado

3. La frustración delincuencia e instaurar la tan famo-


Ile a en el 2003. sa "política de tolerancia cero". Un
La ey Or ámca planteamiento cuanto menos, poco
sobre el, umpl¡- práctico, principalmente por dos ra—
miento Inte ro y zones: primero, porque precisamen-
Efectivo de as te Ia flexibilidad que establece el
P_enas: el presa- principio de individualización cientí-
g|o de un pano- fica permite el tratamiento especial
rama desolador de los delincuentes más violentos,
como se venía haciendo hasta aho-
ra, sin recurrir a una regulación Ie—
Y en esas estábamos, cuando en el gislativa específica; y segundo, por-
año 2003 llegó la gran reforma, la que las más destacadas teorías cri-
Ley Orgánica 7/2003 de 30 de junio minológicas ya nos explican que la
sobre el Cumplimiento Íntegro y erradicación total del delito es impo-
Efectivo de las Penas. Dicha ley — sible, que hemos de conformarnos
técnicamente floja, pues ya en la Ex- con mantenerlo dentro de unas ta—
posición de Motivos confunde la li— sas socialmente aceptables.
bertad provisional con la libertad Pero es que, además de todo esto,
condicional—, a los efectos que nos también cabe hacerse otra pregun-
interesan, tiene su razón de ser en ta: ¿qué consecuencias puede tener
que la posibilidad de clasificar a un tal medida? Pues seguramente ten-
penado en tercer grado queda limi- drá dos consecuencias inmediatas:
tada al cumplimiento de la mitad de — La primera ya se puso de mani-
la pena cuando ésta supere los cinco fiesto en algunas de las enmiendas
años. Se elimina, pues, la posibilidad que presentaron los grupos parla-
que hasta ahora existía de clasificar mentarios en el Congreso, cuando
a un preso en tercer grado, indepen— se estaba fraguando la Ley. Por
dientemente de la cuantía de su ejemplo, la enmienda número 59,
condena, incluso sin haber cumplido redactada por el Grupo Parlamenta—
la cuarta parte dela misma. rio Catalán, ya advertía que:
A la vista de lo cual, cabe pregun- ”En la medida que la Ley contiene
tarse: ¿y cuál es la razón de ser de una institución novedosa en nuestro
esta medida, si hasta ahora los clasi- derecho penal y penitenciario, debe
ficados en tercer grado sin tener considerarse la cautela suficiente a
cumplida la cuarta parte de la con— fin de que, de su aplicación, no se
dena eran un porcentaje mínimo produzcan efectos no deseados, […]
(por ejemplo, en 2001 un 1,6% del la realidad penitenciaria nos mues-
total de los 30.390 penados)? Pues, tra que los condenados a más de
a lo que parece, la excusa es castigar cinco años de reclusión, son una
severamente a aquellos que come— mayoría de los penados, y, en mu-
tieron los delitos más violentos, en- chas ocasiones, no se utiliza la vio-
durecer las penas y su régimen de lencia en la comisión del delito".
cumplimiento, para intentar acabar Porque, al establecerse principios
de soslayo con los altos índices de excepcionales a las reglas generales,
113
—<“¿ DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

la respuesta generalmente es des- que el Estado español se sitúe a la


proporcionada para la mayoría, cabeza de las tasas de encarcela-
aunque resulte beneficiosa para una miento en Europa occidental. De
minoría. Luego el legislador, al seña- prosperar la propuesta del Gobier-
lar el límite en cinco años, parece no, la custodia e inocuación de re—
instrumentar una medida que tiene clusos se erigirán en los objetivos
un efecto colateral claro, y es que va principales de unas prisiones, inde-
a afectar masivamente a todos los fectiblemente hacinadas, en las que
penados y no sólo a aquellos que agoniza, falto de recursos y organi—
han cometido delitos especialmente zación adecuada, un tratamiento
violentos. Así, tendrá también una rea/mente individualizado. ”
consecuencia evidente, la restric— Todo esto no debe extrañamos.
ción del acceso al tercer grado a una Sólo el apelativo de la ley parece de-
gran mayoría de los presos. mostrar que es precisa una "ley para
— La segunda consecuencia es, si el cumplimiento íntegro y efectivo de
cabe, todavía más importante, por- las penas“, como si hasta ahora las
que la obligación de permanecer penas no se cumplieran efectivamen-
”mitades de condena" en un régi- te, como si el régimen abierto y el
men y en un grado previamente es- tercer grado no supusieran cumplir
tablecido, no sólo recuerda épocas la pena. Lo que ocurre es que el ci—
pretéritas —que ya parecían supera- nismo con que se justifica la medida
das—, donde el llamado "progresis- resulta un insulto a la inteligencia de
mo objetivista" exigía que el pena- todo punto intolerable. Veámoslo.
do estuviera un tiempo determina- La pretendida reforma parece ha-
do en cada fase de cumplimiento; llarjustificación doctrinal en el apar-
sino que con este proceder se corre tado II de la Exposición de Motivos
el riesgo de que, por causa de estas de la Ley 7/2003:
rigideces, se deje sin sentido el sis- ”Como ha señalado autorizada
tema de individualización científica doctrina penal, el mayor freno de
separado en grados que, como vi- los delitos no esla dureza de las pe-
mos, instaura la Ley General Peni- nas, sino su infalibi/idad, de modo
tenciaria. Así lo expresó también la que la certeza de un castigo, aun—
enmienda número 7, presentada al que éste sea moderado, surtirá más
respecto del tema en el Congreso efecto que el temor de otro más se-
por el Grupo Mixto: vero unido a la esperanza de su im-
”La introducción de un nuevo punidad o de su incumplimiento. ”
apartado 2 en el artículo 36 del Có- Pero es que la cita, inconfundible
digo Penal, ¡nstituyendo un periodo la pluma del Marqués de Beccaria,
de seguridad, constituiría un paso no es exacta y ni mucho menos tie-
definitivo en el proceso de liquida- ne este sentido, sino que textual-
ción del modelo instituido por la Ley mente dice:
General Penitenciaría, una de las Ie- "No es la crueldad de las penas
yes penitenciarias más humanas del uno de los más grandes frenos de los
mundo pero que ha sido sometida a delitos, sino la infalibi/idad de ellas, y
un acoso constante, hasta conseguir por consiguiente la vigilancia de los
114
"Wº
Régimen abierto v tercer prado

magistrados, y aquella severidad in- recurso, no ante la Audiencia Provin-


exorable del juez, que para ser virtud cial como en el resto de supuestos,
útil, debe estar acompañada de una sino ante el tribunal sentenciador.
legislación suave. La certidumbre del En resumen, si un preso recurre la
castigo aunque moderado, hará denegación de clasificación en ter—
siempre mayor impresión que el te- cer grado ante el juez de Vigilancia
mor de otro más terrible, unido con Penitenciaria y éste también la. de-
la esperanza de la impunidad. ” niega, la competencia para conocer
De modo que sobre la base de una de tal asunto la tiene ahora el tribu-
cita, que originariamente se refiere a nal sentenciador. Este proceder pre-
la infalibilidad de la imposición de la senta serias complicaciones:
condena y a la necesidad de una le— 1.º El más que posible alejamien—
gislación suave, se quiere asentar una to de la provincia donde se localiza
reforma, que como vengo diciendo, el centro de cumplimiento y la de
no sólo endurece la cuantía delas pe— ubicación del tribunal sentenciador.
nas, sino que además, y lo que a mi 2.º El tribunal sentenciador desco—
juicio es más grave, el régimen de su noce los pormenores del tratamien-
cumplimiento. Sin palabras. to, puesto que no ha sido quien ha
Pero aún hay más. La Ley 7/2003 establecido un seguimiento directo
alude además a otra reforma, la que del preso.
tuvo lugar a través del acuerdo del 3.º La dificultad que supone, dada
Tribunal Supremo de 28 de junio de la situación económica de la mayo-
2002, que interpreta la disposición ría de los presos, encontrar aboga-
adicional 53 de la Ley Orgánica del dos que se hagan cargo de tan cos-
Poder Judicial. La inminente aplica- tosos procedimientos.
ción de tal resolución implica una Y estas complicaciones no harán
consecuencia inmediata en la clasifi- sino ralentizar aún más, por lo me-
cación, que claramente concernirá nos en un plazo medio, el acceso de
también al tercer grado. Así, en todo los reclusos a la clasificación en ter-
lo que sea tratamiento, pero que no cer grado.
afecte a la clasificación, el recurso El presente pinta oscuro, pero el
respecto dela decisión del juez de Vi- futuro, desesperanzador. No sólo no
gilancia ha de interponerse ante la se invierte en el régimen abierto, a
Audiencia Provincial del lugar donde pesar de sus éxitos y beneficios, sino
se encuentre la prisión; sin embargo, que, además, se retrasa y dificulta la
en la clasificación propiamente dicha clasificación en tercer grado. ¿Será
decide el juez de Vigilancia Peniten- que así se justifica la construcción
ciaria y su decisión es susceptible de de más cárceles?

115
……LQNIRARBEHIRMA£ENAL

la reforma de los
ºrg;ynuestqs_de la
Dus¡on nrowsronal
(Ml PATRICIA FERALDO CABANA
(Profesora titular de Derecho Penal,
Universidad de A Coruña)

|. Determinaciones se señala en la Exposición de Moti-


prevnas vos. En las siguientes páginas me
centraré en la cuestión de los presu-
Mi propósito es comentar un aspec- puestos de imposición de esta medi-
to del Proyecto de Ley Orgánica de da cautelar privativa de libertad.
Reforma de la Ley de Enjuiciamiento La importancia del tema no nece-
Criminal en materia de prisión provi- sita ser destacada. Que en Italia y
sional, publicado en el Boletín Oficial España casi la cuarta parte delos in—
de las Cortes Generales el 28 de fe— ternos en establecimientos peniten-
brero de 2003, y cuyo Anteproyecto ciarios se encuentre en espera de
fue presentado por el Gobierno espa- una sentencia definitiva es cierta-
ñol a finales de 2002. El Proyecto mo- mente demostrativo de 'que la pri-
difica sustancialmente la regulación sión provisional es una medida cau—
actual de la prisión provisional en lo telar excepcional en el plano teóri-
que se refiere a los presupuestos, co, pero absolutamente ordinaria
efectos, procedimiento de adopción en la práctica cotidiana de la ins—
y duración de esta medida cautelar trucción penal. Para evitar esta si-
privativa de libertad, en teoría como tuación a todas luces disfuncional
respuesta a la evolución de la juris- es necesario reducir la discrecionali—
prudencia del Tribunal Constitucio- dad del intérprete, optando por la
nal, que había venido imponiendo re— introducción de criterios más rígi-
quisitos cada vez más detallados para dos que los actuales, adoptar una
quela institución que nos ocupa fue— regulación más estricta de los pre-
ra respetuosa con el contenido esen- supuestos de aplicación de la pri-
cial del derecho a la libertad, según sión provisional y una previsión me-

* Este artículo recoge algunas de las consideraciones expuestas en otro que, con
el título “El proyecto de reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal en materia de
prisión provisional", fue publicado en Actualidad Penal, núm. 25, semana del 16 al
22 de junio de 2003.
116
'l?º
La reforma de los nresunuestos

nos generosa delos plazos máximos se trata de debatir, en primer lugar,


de duración dela prisión provisional si es correcto utilizar la prisión pro—
y de los delitos que la permiten. Es visional con este fin y, en segundo
mi intención analizar si el Proyecto lugar, si la reforma es eficaz para lo—
va en esta dirección o toma un ca- grar los objetivos pretendidos, tan-
mino distinto, más represivo. Ade— to los que se explicitan en la Exposi-
Ianto ya que en lo que respecta a la ción de Motivos como el que subya-
fijación de criterios más concretos a ce a la regulación.
la hora de determinar la existencia
de los presupuestos de aplicación y ||. Presupuestos de
en lo relativo a la duración dela pri- ap_lr_cacuon de _Ia
sión provisional se han producido pns¡on provnsuonal
significativos avances, si bien en lo
relativo a los motivos que pueden Para aplicar la prisión provisional
justificar la imposición de esta me— han de concurrir el fumus bon¡ iuris
dida la opción represiva es predomi— y el perículum ¡n mora, pero aquí el
nante, lo que tiene más que ver con Proyecto ha introducido importan-
la sensación de inseguridad de los tes modificaciones:
ciudadanos que con reales necesi— — El fumus boni iuris es la fundada
dades de protección de intereses sospecha de que el inculpado ha to—
dignos de tutela a costa de la liber- mado parte en el hecho delictivo
tad personal de los imputados. Para que se investiga. El art. 5.1.c) del
el Estado, responder a golpe de pro- Convenio Europeo de Derechos Hu-
mulgación de normas penales y pro- manos (en adelante CEDH) exige
cesales se convierte en una posibili— que <<existan razones plausibles para
dad barata, con mucha repercusión sospechar que ha cometido una in-
y que tiene la extraña virtud de cal- fracción». De acuerdo con el Proyec-
mar las expectativas de la población to, no basta con la existencia de un
en lo que se refiere a la lucha contra <<indicio racional de criminalidad»,
la inseguridad ciudadana. Falta por sino que se requiere aque conste en
ver si un empleo más frecuente dela la causa la existencia de uno o varios
prisión provisional va a producir un hechos que presenten caracteres de
efecto reductor de las tasas de de- delito» (nuevo art. 503.1 .1 .º LE—
lincuencia y, en particular, de los ín- Crim), siendo criticable que se hable
dices de reiteración delictiva en la de hechos en un momento procesal
criminalidad patrimonial de poca en el que el juicio que puede hacer—
entidad (tirones, hurtos, robos), se no es de certeza, sino de mera
pero causante de una gran alarma probabilidad. Tanto en la regulación
social por la sensación subjetiva de actual como en el Proyecto se exige
inseguridad que genera. La lucha ((que aparezcan en la causa motivos
contra este tipo de criminalidad es bastantes para creer responsable
en mi opinión el objetivo último e criminalmente del delito a la perso-
inconfesado del Proyecto. Teniendo na contra quien se haya de dictar el
presente que éste es el objetivo en auto de prisión» (actual art. 503.3.º
verdad perseguido por la reforma, LECrim, art. 503.1.2.º en la redac-
117
ción del Proyecto). Debido a que los como también hace el Informe del
niveles de sospecha son difícilmente Consejo, que el límite de dos años
formalizables, en la actualidad el ór— coincide con el previsto como regla
gano judicial goza de gran libertad general para aplicar la suspensión
a la hora de apreciar la existencia de de la ejecución de la pena privativa
la sospecha fundada, por lo que es de libertad y la sustitución de la
necesario que la ley emplee una for- pena de prisión, lo que permite al
mulación más precisa que pueda ser Consejo justificar la rebaja operada
controlable por órganos superiores, por la reforma con el argumento de
lo que no se hace en el Proyecto. que por debajo de este límite la co-
— En lo que se refiere al perícu/um munidad está dispuesta a renunciar
¡n mora, o daño jurídico derivado incluso a la ejecución dela pena im-
del retardo del procedimiento, viene puesta en sentencia firme, por lo
determinado en el Proyecto por el que no tiene sentido tratar de ase—
peligro de fuga, de ocultación, alte— gurar anticipadamente su efectivi—
ración o destrucción de los medios dad mediante una medida cautelar
de prueba y de reiteración delictiva. grave. En primer lugar, dos años no
Con carácter previo, puntualiza el es el límite generalmente estableci-
Proyecto que el delito imputado ha do en los sustitutivos penales, ya
de estar “sancionado con pena cuyo que sólo es el contemplado como
máximo sea igual o superior a dos excepcional para la sustitución de la
años de prisión...» (art. 503.1 .1 .º de pena de prisión, mientras que en la
acuerdo con la nueva redacción). El suspensión es el límite general, pero
límite, por tanto, se fija como regla existe otro de tres años para delin-
general en que el delito esté sancio- cuentes toxicómános, a lo que se
nado en abstracto con pena igual o añade que tanto en la suspensión
superior a dos años de prisión. Al como en la sustitución el límite de
respecto ha de señalarse que el lími- dos años se cuenta con respecto a la
te de dos años coincide con el que pena efectivamente impuesta y no a
delimita la posibilidad de celebrar el la pena abstracta prevista para el
juicio en ausencia del acusado (art. delito de que se trate en el Código
786.1 LECrim). Ello permite alegar, Penal, de forma que es posible sus-
como hace el Informe del Consejo pender o sustituir la pena prevista
General del Poder Judicial al Ante- para un delito grave cuando la efec—
proyecto de Ley Orgánica de Refor- tivamente impuesta no supere los
ma de la Ley de Enjuiciamiento Cri- dos años, lo que puede ocurrir, por
minal en materia de prisión provi- ej., si concurren una eximente in-
sional, que ((en los casos que deba completa, dos o más atenuantes,
garantizarse la presencia del impu- una sola muy cualificada o un error
tado en el juicio oral —prisión de vencible sobre la prohibición, entre
dos o más años— debe ser posible otros casos. Aunque el legislador es
la prisión provisional cuando no plenamente libre a la hora de deci-
exista otro recurso menos gravoso dir el límite concreto de pena con
para garantizar la celebración del que ha de sancionarse un delito por
juicio». Pero no es correcto afirmar, debajo del cual en principio no pue—
118
"<?
La reforma de los nresunuestm

de ordenarse la prisión provisional, con el Derecho Penal de la culpabili-


hubiera sido preferible —a mi jui- dad, aproximándonos al tan denos-
cio— optar por los tres años, que tado Derecho Penal de autor; y se-
marcan la diferencia entre los deli— gundo, porque implica una presun—
tos graves y los menos graves, con ción que no admite prueba en
las importantes consecuencias de contrario de que siempre que se pro-
tipo procesal que supone esta dis— duce la reincidencia existe una ma-
tinción, aunque no cabe duda de yor peligrosidad, lo que no necesa-
que el hacer coincidir el límite con el riamente es asi. En mi opinión esta
previsto para poder juzgar en rebel- excepción al límite de dos años debe
día tampoco carece de razones. desaparecer en el texto definitivo de
Excepcionalmente se puede orde- la reforma, pues no es más que un
nar |a prisión provisional cuando el castigo anticipado para los reinci-
delito esté sancionado con pena pri- dentes en la comisión de pequeñas
vativa de libertad de duración infe- infracciones patrimoniales, a los cua-
rior a dos años, si el imputado tuvie- les, si la reforma del Código Penal si-
re antecedentes penales no cancela- gue adelante, no sólo se les podrá
dos ni susceptibles de cancelación, aplicar enla condena la circunstancia
derivados de condena por delito do- agravante de reincidencia o en su
Ioso (nuevo art. 503.1 .1 .º). No se tra- caso la de multirreincidencia, con
ta de reincidencia en el sentido en gravísimas consecuencias a la hora
que se emplea este concepto en el de proceder a la determinación de la
Código Penal de 1995, el cual exclu— pena, sino que antes de la condena,
ye Ia reincidencia génerica, que exige aunque sólo hayan cometido faltas 0
únicamente la comisión previa de delitos menos graves contra el patri-
cualquier delito, y opta por la reinci- monio (por ej., robo o hurto de vehí-
dencia específica. Para la prisión pro- culos de motor), puede ordenarse su
visional se trata precisamente de la ingreso en prisión provisional. La ex-
reincidencia genérica, apuntando la cepción debe desaparecer si se man-
tendencia a perseguir fines de pre- tiene como fin perseguido porla pri-
vención especial que caracteriza sión provisional evitar la reiteración
toda la reforma. El fundamento de delictiva, porque en este caso ya se
esta excepción al límite de dos años ha de tomar en cuenta como un dato
radica en que se supone una mayor más para determinar la peligrosidad
peligrosidad criminal en el reinciden— criminal del imputado la existencia
te. Si la peligrosidad criminal es la de antecedentes penales. En cual-
probabilidad de delinquir, manifesta- quier caso, si se mantiene, téngase
da en la previa comisión de un hecho presente que el imputado ha de te-
delictivo, en el reincidente esa pro- ner antecedentes penales no cance-
babilidad se ha traducido en tal gra- lados o que debieran serlo, lo que
do de sospecha que ya está imputa- significa que debe haber recaído sen-
do porla comisión de un nuevo deli- tencia condenatoria firme y no haber
to. Pero este fundamento no se transcurrido los plazos o cumplido
quiere admitir por dos razones: pri- los requisitos previstos en el art. 136
mero, porque supone una ruptura CP para la cancelación de los antece-
119
dentes penales. por tanto, qué debe entenderse por
El límite consistente en que el má- habitualidad, en particular porque
ximo de la pena prevista para el de- el imputado no tiene antecedentes
lito sea igual o superior a dos años penales, ya que si los tuviera se apli-
de prisión ano será aplicable cuando caría la excepción relativa a reinci-
de los antecedentes del imputado y dentes y no ésta. Con esta previsión
demás datos y circunstancias que se pretende hacer frente a la peque—
aporte la Policía Judicial 0 resulten ña delincuencia patrimonial de suje-
de las actuaciones, pueda racional- tos que son bien conocidos por las
mente inferirse que el imputado vie- fuerzas del orden, pero que come—
ne actuando concertadamente con ten raterías de escasa entidad que
otra u otras personas de forma or- no consienten en la actualidad su
ganizada para la comisión de he— ingreso en prisión provisional, con
chos delictivos o realiza sus activida- el consiguiente escándalo de la víc-
des delictivas con habitualidad» tima y de la comunidad, que lo ven
(art. 503.2 b) LECrim en la nueva re- entrar y salir de los Juzgados en el
dacción dada por el Proyecto). La mismo día. Cierto que durante la es—
alusión carece de precisión, en par- tancia en la prisión como preso pre-
ticular si tenemos presente que bas- ventivo quedará inocuizado y no co—
ta con sospechas e indicios de que meterá delitos, pero en mi opinión
el imputado actúa de forma coordi- son más eficaces otras medidas, sea
nada con otros sujetos para la comi- de tipo procesal —como los juicios
sión de hechos delictivos, lo que no rápidos (que evitarán que sea dete—
sólo abarca casos de delincuencia nido varias veces por diversos he-
organizada, sino también, si se chos sin que consten antecedentes
mantiene el tenor literal, supuestos penales porque todavía no ha dado
de mera codelincuencia. En lo que tiempo a condenarle por ninguno
respecta a la habitualidad, este con— de ellos debido a la lentitud de la
cepto no puede entenderse en el Justicia)— o de tipo penal —como
sentido con que se utiliza en el art. la pérdida de la posibilidad de sus—
94 CP, que considera <<reos habitua- pensión o de sustitución de la pena
les los que hubieren cometido tres o (con lo que se consigue que deba
más delitos de los comprendidos en cumplir efectivamente las penas
un mismo capítulo, en un plazo no cortas de privación de libertad a que
superior a cinco años, y hayan sido sea condenado, sin poder benefi-
condenados por ello», pues obsér- ciarse de las medidas alternativas
vese que en la regulación procesal previstas fundamentalmente para
basta con presunciones e indicios delincuentes primarios)—.
racionales de conducta delictiva ha- Es digno de mención que el límite
bitual para que pueda acudirse a consistente en que el máximo de la
esta excepción, mientras que para pena prevista para el delito sea igual
hablar de habitualidad penal deben o superior a dos años de prisión deja
haber recaído al menos tres senten- de aplicarse tanto en caso de que el
cias condenatorias por delito (que imputado ya haya sido condenado
no por falta). Queda indeterminado, por delito doloso como en caso de
La reforma de los nresunuestns K
7
que simplemente haya indicios o sos- realizado por cualquier Juzgado 0
pechas de habitualidad, lo que indi- Tribunal en la misma o en otra cau-
ca que el legislador concibe la prisión sa penal por delito, o hubiere sido
provisional no tanto como medida declarado rebelde en un procedi-
cautelar que asegura la efectividad miento penal» (art. 503.1.3.º a) se-
de la eventual condena cuanto como gundo párrafo en la redacción dada
medida de seguridad predelictual por el Proyecto). Se parte aquí de
que se impone antes de la condena, una presunción que no admite
carácter en el que insiste cuando in- prueba en contrario de la existencia
troduce otras modificaciones que se— de peligro de fuga, lo que permite
rán analizadas más adelante. ordenar la prisión provisional inclu-
Los fines de la prisión provisional so tratándose de un delincuente pri-
son evitar los peligros de fuga, de mario (por ej., porque la anterior
ocultación, destrucción o alteración imputación no llegó a resultar en
de los medios de prueba y de reite— condena) que comete un delito pa-
ración delictiva. trimonial de escasa gravedad. A mi
En lo que se refiere al peligro de juicio es preferible que por debajo
fuga, apunta el proyectado art. del límite de los dos años la ley im-
503.1 .3.º a) que ((para valorar la exis- pida dar relevancia al peligro de
tencia de este peligro se atenderá fuga, pero si se opta por mantener
conjuntamente a la naturaleza del esta excepción ha de establecerse
hecho, a la gravedad de la pena que algún registro centralizado de in—
pudiera imponerse al imputado, a la comparecencias al llamamiento en
situación familiar, laboral y económi- calidad de imputado, al igual que ya
ca de éste, así como a la inminencia existe uno de rebeldes, pues si no la
de la celebración del juicio oral, en previsión contenida en el Proyecto
particular en aquellos supuestos en carecerá de aplicación práctica. En
los que procede incoar el procedi- cualquier caso, es lamentable que
miento para el enjuiciamiento rápido no se prevean otras medidas alter-
regulado en el Título III del Libro IV nativas a la privación de libertad
de esta Ley». Contra la existencia de que puedan conjurar el peligro de
peligro de fuga hablan las relaciones fuga sin afectar a la libertad ambu—
familiares y laborales en el lugar de Iatoria del imputado, como puede
residencia, la edad avanzada, un mal ser una mayor vigilancia, sobre todo
estado de salud, la larga permanen— en los días inmediatamente anterio—
cia en el lugar a pesar de conocer la res a la sentencia.
existencia del procedimiento, etc. La actual ley procesal penal espa-
No es preciso respetar el límite de ñola no menciona expresamente
que el delito esté sancionado con como motivo para ordenar la prisión
pena cuyo máximo sea igual o supe- provisional el peligro de destrucción
rior a dos años de prisión, ((cuando por el imputado de los elementos
el sujeto no hubiere comparecido en que integran el cuerpo del delito ni el
los dos años inmediatamente ante- peligro de reiteración. AI establecer
riores, sin motivo justificado, al lla— la Constitución el principio de reser-
mamiento en calidad de imputado va de ley para la imposición de lími-
121
tes al ejercicio de los derechos fun- bienes jurídicos de la víctima, espe-
damentales, no habiéndose previsto cialmente cuando ésta sea alguna de
expresamente estos motivos deben las personas a las que se refiere el ar—
excluirse. La práctica, no obstante, es tículo 153 del Código Penal».
permisiva en este punto, y el Tribunal En lo que se refiere a los datos
Constitucional la ha amparado en al- que se han de tener en cuenta para
gunas resoluciones. El Proyecto con- valorar el peligro para la prueba me
templa expresamente evitar el peli- parece criticable que se introduzcan
gro para la prueba como fin perse- consideraciones basadas en la pre-
guido por la prisión provisional en el vención especial, esto es, en el peli-
art. 503.1 .3.º b) LECrim. La sospecha gro de reiteración delictiva contra la
fundada debe basarse en hechos misma víctima, que no tienen razón
concretos relativos al comportamien- de ser en esta sede, en la que de lo
to del imputado, a sus circunstancias que se trata es de garantizar la ad-
vitales, etc., pues la mera posibilidad quisición y genuidad de los medios
de que pueda alterar la prueba no de prueba. Piénsese que ya se alude
justifica todavía la existencia de una en el inciso anterior a la posibilidad
sospecha fundada. Ha de tratarse de que la víctima testigo pueda ser
pues de un peligro concreto, funda- amenazada o atacada con el fin de
mentado en circunstancias de hecho que cambie su declaración o no de-
que se deberían indicar expresamen— clare. Reiterar la alusión al peligro
te en el auto, bajo pena de nulidad. de que sufra nuevos ataques en su
Corresponde al Ministerio Fiscal 0 a persona o bienes es inútil en lo que
la acusación particular demostrar respecta ala prueba, ya que a lo que
que existen en concreto situaciones se refiere es al peligro de reiteración
de peligro actual, sea para la adqui— delictiva contra la misma_víctima. La
sición de la prueba (peligro de ocul- referencia al delito de malos tratos
tamiento o de destrucción) sea para habituales en el ámbito familiar res—
su genuidad (peligro de alteración). ponde a que en él la víctima convive
Por supuesto, el silencio, la mera fal- con el autor, lo que sin duda supone
ta de admisión de los hechos por una situación de mayor vulnerabili—
parte del imputado o su falta de co— dad, pero también a la indignación
laboración en el curso de la investi— de la sociedad por la desprotección
gación no pueden integrar el peligro en que se encuentran las víctimas de
para la prueba, como bien apunta el la violencia doméstica, en particular
art. 503.1 .3.º b) segundo párrafo en en vista de que no es posible garan-
la redacción dada por el Proyecto, tizar su seguridad cuando los auto-
señalando el tercer párrafo que res incumplen Ias órdenes de aleja—
((para valorar la existencia de este pe- miento. Esta toma en cuenta de los
ligro se atenderá a la capacidad del intereses de la víctima responde a
imputado para acceder por sí o a tra— los modernos planteamientos victi-
vés de terceros a las fuentes de prue— mológicos que se han extendido en
ba o para influir sobre otros imputa- Europa y Estados Unidos, y que en
dos, testigos o peritos o quienes pu- buena parte están siendo asumidos
dieran serlo, o para actuar contra por el Código Penal español y por la
N5'º
iareforma de los nresunuestos

legislación procesal. Una de las doloso; b) que el máximo dela pena


aportaciones fundamentales de la prevista para el delito sea igual o su-
victimología ha consistido en una perior a dos años de prisión (art.
llamada de atención sobre el hecho 503.2 en la nueva redacción). He de
de que la víctima del delito ha sido ser muy crítica con este fin de la im-
la gran olvidada en el Derecho Penal posición de la prisión provisional,
y procesal penal moderno, lo que pues introduce consideraciones pro-
conduce a exigir que la satisfacción pias del fin de prevención general de
de sus intereses recupere el papel la pena en una fase anterior a su im-
esencial que le corresponde, incluso posición, desvirtuando el significado
a costa de los derechos de su pre- y la finalidad de las medidas caute-
sunto agresor. En cualquier caso, lares personales en el proceso penal.
tanto en las recientes reformas de la En efecto, con la prisión provisional
legislación penal como de la proce- se ha de asegurar la ejecución de la
sal penal se observa una mayor con- sanción que en su día se pueda im-
sideración a los intereses de la vícti- poner. Esto no tiene nada que ver
ma, en particular en lo que se refie— con el peligro de reiteración delicti-
re al resarcimiento de los perjuicios va, con el cual se alude a una espe-
causados por el delito, a su inter- cie de juicio de peligrosidad similar
vención en diversas fases del proce- al que se ha de realizar para deter-
so y dela ejecución dela pena, pero minar |a necesidad o no de aplica-
también, y muy particularmente, al ción de las medidas de seguridad,
establecimiento de medidas que que en nuestro Ordenamiento son
permitan garantizar su seguridad postdelictuales. Este es un juicio de
ante posibles nuevos ataques de su futuro que se centra en la probabili-
victimario, como las prohibiciones dad de que el sujeto que ya ha co—
de aproximación o de comunicación metido un hecho previsto como de-
con la víctima o aquellos de sus fa- lito vuelva a delinquir; pero, ojo, en
miliares o terceros que determine el el caso dela prisión provisional se ha
juez o tribunal, o de acudir al lugar de realizar cuando ni siquiera se ha
en que residan tales personas. En probado que el imputado ya ha de-
esta línea se enmarca el precepto linquido una vez.
que estamos comentando. El juicio de peligrosidad, en tanto
De acuerdo con el Proyecto, puede que basado en un pronóstico de fu-
acordarse la prisión provisional, turo, es más difícil de formular que
siempre que existan indicios raciona- el juicio de culpabilidad, que hace
les de criminalidad, <<para evitar el referencia a hechos ya realizados, lo
riesgo de que el imputado cometa que puede conducir a fórmulas que
otros hechos delictivos», señalándo- se limiten a presumir la peligrosidad
se que <<para valorar la existencia de por el mero dato de que un sujeto
este riesgo se atenderá a las circuns- haya cometido un delito con ante-
tancias del hecho, así como a la gra- rioridad y haya sido condenado por
vedad de los delitos que se pudieran ello o existan indicios de que lo ha
cometer», y estableciendo dos requi— cometido, sin que todavía se haya
sitos: a) que el hecho imputado sea desvirtuado la presunción de ¡no-
123
cencia. Por ello, el peligro de reite— prematuramente, es decir, antes de
ración como presupuesto de impo- la sentencia pasada en autoridad de
sición de la prisión provisional ha cosa juzgada, por medio de la pri-
sido objeto de numerosas críticas en sión preventiva, no respeta el princi-
los ordenamientos que también lo pio de presunción de inocencia, le
contemplan, como el alemán o el quita valor al procedimiento princi—
italiano, pues se entiende que en pal y lesiona a una persona sin fun-
realidad no se trata de una medida damento jurídico».
de aseguramiento del proceso, sino El peligro de reiteración contradi-
de una medida de seguridad pre- ce abiertamente Ia presunción de
ventiva, esto es, predelictual, en el inocencia del imputado, que es con-
sentido de que todavía no existe siderado peligroso antes del juicio,
una condena ni se ha probado por reduciendo a la acusación pública a
tanto la culpabilidad, habiendo úni- funciones de defensa social y de po-
camente una mera sospecha no pro- licía de orden público, transforman-
bada. Como señala HASSEMER, ((la do el auto de prisión en una suerte
persecución de fines de prevención de medida de prevención contra pe—
general o especial presupone que se Iigrosos y sospechosos. A mi juicio,
encuentre firme el presupuesto de mantener el peligro de reiteración
ese derecho penal material: la cul— como presupuesto dela prisión pro—
pabilidad del afectado. La evitación visional puede ser inconstitucional,
de un peligro de reiteración, la inti- como ya fueron declaradas inconsti-
midación, o la integración normati— tucionales las medidas de seguridad
va de la generalidad o los esfuerzos predelictuales. Y en cualquier caso,
de resocialización sólo pueden ser si se decide mantener el peligro de
ejecutados sobre una persona con reiteración sería preferible una re-
respecto a la cual el derecho penal gulación semejante a la alemana,
se ha asegurado de su culpabilidad que especifica los delitos en los que
en forma conforme al ordenamien- el peligro de reiteración permite or-
to. Fines de la prisión preventiva denar la prisión provisional. Con
sólo pueden ser fines de asegura- esta regulación se gana en seguri-
miento del procedimiento y de la dad jurídica, pues aunque se pueda
ejecución, porque la legitimación de discutir la validez del criterio en si,
la prisión preventiva se deriva exclu- en la práctica su aplicación nunca
sivamente de tales intereses de ase- resulta arbitraria.
guramiento: prosibilitar un procedi-
miento en presencia del imputado lll. Conclusiones
con oportunidad de averiguar la
verdad y la imposición de las conse- La valoración final que en mi opi-
cuencias penales. Esto justifica los nión merece la reforma debe ser ma—
fundamentos de la detención basa- tizada, pues si respecto a la duración
dos en la fuga, el peligro de fuga y se han conseguido avances notables
el peligro de obstrucción de la ave- en lo que se refiere a la deseable re—
riguación de la verdad, y sólo éstos. ducción de los plazos máximos ab-
Quien lucha contra la criminalidad solutos, no puede decirse lo mismo
124
“<7<
La reforma de los nresunuestm

en lo relativo a los presupuestos de se teme fundadamente que el impu-


la prisión provisional. Nada se ha de tado se fugue. También es legítima
objetar a la previsión expresa de los la previsión de la prisión provisional
fines perseguidos por la medida cuando se teme fundadamente que
cautelar que nos ocupa, como la evi- el sujeto pueda entorpecer las inves-
tación del peligro para los medios de tigaciones, alterando, ocultando o
prueba, en particular si sólo permite destruyendo pruebas o presionando
una privación de libertad de corta a testigos o coimputados, como se
duración, pero sí es criticable que se establece en Alemania e Italia. Más
persigan fines propios de la pena, criticable es que se presuma el peli-
como sucede cuando lo que se pre— gro de fuga cuando el imputado
tende es evitar la reiteración delicti- dejó de comparecer alguna vez en
va. Y también es de desear que des- los dos años anteriores o cuando la
aparezcan en la redacción definitiva pena que podría serle impuesta al-
buena parte de las excepciones al lí- cance determinada entidad, aunque
mite de los dos años de pena con esta presunción admita prueba en
que ha de estar castigado el delito contrario. Y es inadmisible que entre
que se sospecha ha cometido el im— los objetivos de la medida cautelar
putado, en particular las basadas en privativa de libertad se encuentre
la existencia de antecedentes pena- evitar la reiteración en el delito, pues
les 0 en meras sospechas o indicios la prevención especial no es cometi—
de habitualidad o de actuación or- do de la prisión provisional, que es
ganizada, ya que parten de una in- una medida cautelar, sino de la
admisible presunción de peligrosi- pena. La persecución de la preven—
dad. Supone una perversión del ins- ción especial a través de la prisión
tituto objeto de análisis la mutación provisional antes de la existencia de
que sufre desde su consideración condena firme distorsiona su natu-
como instrumento exclusivamente raleza de medida cautelar, pues in—
procesal dirigido a estrictas necesi- troduce elementos extraños, cues-
dades instructorias, a su previsión tionables tanto desde el punto de
como instrumento de prevención y vista constitucional cuanto desde la
de defensa social, motivado por la perspectiva político-criminal. En este
necesidad de impedir al imputado la aspecto, es lamentable que el legis-
comisión de otros delitos. Para res- lador español no haya resistido la
petar el principio de presunción de tentación de adelantar la búsqueda
inocencia la prisión provisional no de los fines de la pena al momento
puede perseguir fines propios de la de ordenar la prisión provisional, in-
pena, sino únicamente fines relacio- troduciendo consideraciones y moti-
nados con el proceso. Desde este vos espúreos en la regulación de
punto de vista es legítima la previ- esta medida cautelar.
sión de la prisión provisional cuando

125
………ML

waa&g&srarkr _
regulacion del €0B'll$0
segun el Provertp de
Reforma del (odrgo
Penal Ó» Luz MARÍA PUENTE ABA
(Doctora en Derecho,
Universidad de A Coruña)

| comiso constituye una res— nes se efectúan para “evitar que la


puesta ante la comisión de un comisión del delito pueda producir
delito que, por su peculiar na— el más mínimo enriquecimiento para
turaleza, no es ni una pena ni una sus autores y partícipes, así como
medida de seguridad, sino una mejorar la represión de los delitos,
“consecuencia accesoria“. Aparece en especial de narcotráfico y blan-
regulado con carácter genérico en el queo de dinero". En este trabajo se
artículo 127 del Código Penal, y se- intentará analizar brevemente los
gún este precepto consiste en la pér- aspectos objeto de modificación, re-
dida de los instrumentos con que se saltando los cambios más acertados
haya ejecutado un delito o falta do- y los que deben ser objeto de crítica.
losos, de los efectos que provengan
de dicho delito o falta y también de La consecuencia
las ganancias que se han obtenido al accesoria del comi-
cometer tal infracción. El Proyecto 50 con carácter % -
de Ley Orgánica de reforma del Có- neral (artículo 1 7
digo Penal, de 5 mayo de 2003, mo- del Código Penal)
difica ciertos aspectos relevantes de
esta consecuencia accesoria de co- Como ya se ha dicho, el comiso es
miso, y además también introduce una medida que se adopta tras la
importantes novedades en relación comisión de un delito o una falta do—
con el comiso de los instrumentos, losos, y puede revestir dos modali-
efectos y ganancias en los delitos de dades según los elementos sobre los
tráfico de drogas, que se regula en que recae: por una parte, el comiso
el artículo 374 del Código Penal. Se- de los efectos e instrumentos que
gún la Exposición de Motivos de la proceden de un delito o falta, y por
Ley de Reforma, tales modificacio- otra parte, el comiso de las ganan-
126
&?
Novedades en la regulación

cias que se obtienen tras cometer la una interpretación correcta de esta


infracción penal. Como puede pare- nueva redacción, debe entenderse
cer obvio, la adopción de esta medi- que, si se aprueba el nuevo texto Ie—
da se debe a motivos distintos según gal, podrán confiscarse los efectos,
el objeto al que se refiere: el comiso instrumentos y ganancias del delito
de los efectos e instrumentos del de- aunque, por cualquier razón, no Ile-
lito o falta sejustifica en la peligrosi- gue a imponerse pena a ningún su-
dad objetiva de tales bienes, y se in- jeto como responsable dela concre-
tenta impedir así que sean emplea— ta actuación delictiva.
dos en el futuro para cometer otras Una vez tratada la cuestión relativa
nuevas infracciones; por el contra— a la necesidad de imposición de una
rio, el comiso delas ganancias busca pena para decretar la consecuencia
principalmente evitar un enriqueci- accesoria de comiso (y que la Ley de
miento injusto, eliminando los bene- reforma resuelve en el sentido de po-
ficios logrados exclusivamente con sibilitar la aplicación del comiso aun
la comisión de un delito o falta. cuando no se imponga pena algu-
Uno de los primeros problemas na), cabe hacer otra pregunta, parti-
que planteaba la regulación del co- cularmente en relación con el comiso
miso en el artículo 127 del Código de los efectos e instrumentos del de-
Penal era la exigencia de la imposi- lito: en todos los casos en que se
ción de una pena a un sujeto para proceda efectivamente a la imposi—
decretar el comiso de los efectos, ción de una pena, ¿es absolutamen-
instrumentos o ganancias del delito te obligatorio decomisar los citados
o falta. Esto provocaba que si por efectos o instrumentos?
cualquier motivo no llegaba a impo— El Código Penal de 1995, en su re-
nerse una pena, —por ejemplo, por dacción actual, da a entender que el
quedar el sujeto exento de pena de— comiso es una consecuencia acceso-
bido a enajenación mental o por ha- ria aparejada obligatoriamente a la
berse producido el fallecimiento del pena (“toda pena [...] llevará consi—
reo—, no se podían confiscar los go la pérdida de los efectos...“), y
efectos, instrumentos ni las ganan- esta misma previsión es mantenida
cias del delito. Tal situación resulta— sin alteraciones en el Proyecto de re-
ba criticable, ya que el carácter peli— forma. Volvemos a encontrar aquí la
groso de los efectos e instrumentos contradicción antes señalada: este
dela infracción y el enriquecimiento ligamen comiso—pena parece olvidar
ilícito derivado de la comisión del cuál es el fundamento que justifica
delito nada tienen que ver con las la existencia de la figura de comiso:
concretas circunstancias, general- la peligrosidad de los efectos e ins-
mente de carácter personal, que im- trumentos del delito. Por ello, esta
pedirán la imposición de la pena en aparente imperatividad de la aplica—
un supuesto de hecho e5pecífico. ción del comiso debería resolverse
Pues bien, este problema se sol- atendiendo a los principios que se
venta con la nueva redacción que se acaban de señalar: sólo deberán de-
otorga al artículo 127 en el Proyec- comisarse los efectos e instrumen-
to de Reforma del Código Penal. De tos de un delito cuando sean objeti-
127
vamente peligrosos y exista riesgo otros bienes de los responsables cri-
de que se empleen en el futuro para minales que posean el mismo valor.
la comisión de nuevos actos delicti- Se pretende de este modo que no
vos, y asimismo tras constatar que resulten beneficiados aquellos suje-
constituyen un elemento esencial en tos que logran destruir o esconder
la ejecución del delito. Esta cuestión los citados bienes ya que, de no ha-
ha sido reiteradamente debatida en llarse éstos, se podrá confiscar el
la jurisprudencia en relación con el patrimonio del autor del delito has-
comiso de los vehiculos de motor ta el importe que alcanzaban los au-
empleados en la comisión de un de- ténticos efectos, instrumentos o ga-
lito de tráfico de drogas, exigiendo nancias del delito.
los propios tribunales que, para pro— La previsión de esta nueva medida
ceder a la confiscación de estos ve— merece dos juicios distintos en aten-
hículos, debe probarse que son es- ción a los bienes sobre los que va a
pecíficamente empleados para co- recaer ya que, si recordamos, exis-
meter la infracción penal, evitando ten dos categorías de comiso que
decomisar aquellos vehículos que se responden a fundamentos bien di-
emplean para otros fines y, ocasio- ferentes.
nalmente, son utilizados en el des- En primer lugar, el comiso por va-
arrollo de la ejecución del delito. lor equivalente no es una disposi—
Además, un apoyo de la solución ción apropiada en relación con la
ofrecida se encuentra en el artículo confiscación de los efectos e instru-
128 del Código Penal, que establece mentos de un delito. Como se ha di-
la regla de proporcionalidad como cho, el sentido de decomisar tales
principio inspirador del comiso. Se— objetos consiste en el deseo de eli-
gún este precepto, el juez puede no minar ciertos objetos objetivamente
decretar el comiso, o decretarlo par- peligrosos, que pueden ser emplea—
cialmente, en el caso de que los efec- dos en la futura comisión de actos
tos o instrumentos sean de lícito co- delictivos; por lo tanto, lo que se
mercio y su valor no guarde propor- busca es confiscar precisamente ta-
ción con la naturaleza o gravedad de les objetos y no otros bienes “susti-
la infracción penal o ya se hayan sa- tutos“ que no representan ningún
tisfecho las responsabilidades civiles. peligro; puede imaginarse, por
Una novedad importante que in- ejemplo, que se confisque dinero del
troduce el Proyecto de reforma del autor del delito si éste ha hecho des-
Código Penal es la previsión del de- aparecer los instrumentos emplea-
nominado "comiso por valor equi- dos: es obvio que la peligrosidad re—
valente", figura que cuenta ya con side en estos últimos, y no en otros
tradición en otros ordenamientos bienes o dinero que posea el autor.
de nuestro entorno, como por ejem— A la vista de esta regulación, pa—
plo en Derecho alemán. Así, según rece que se pretende configurar una
el nuevo texto legal, si no fuera po- especie de sanción para el sujeto
sible decomisar los propios efectos, que hace desaparecer los efectos e
instrumentos o ganancias del delito, instrumentos de la infracción penal.
el juez podrá ordenar el comiso de Sin embargo, articular tal castigo en
128
X?
Novedades en la regulación

la forma del "comiso por equivalen- de los delitos relativos al tráfico de


te“ no es en absoluto recomenda- drogas y, además (y en esto se dife-
ble, ya que el precepto está impo- rencia de la figura genérica de co-
niendo tal medida sin atender al miso), por el propio objeto material
motivo por el que ha fracasado el de estas infracciones, esto es, las
comiso de los auténticos efectos e drogas tóxicas, estupefacientes o
instrumentos del delito. En todo sustancias psicotrópicas.
caso, el "comiso por valor equiva- Como primera novedad, el texto
lente" debería imponerse sólo a de reforma del artículo 374 del Có-
aquellos sujetos que han frustrado digo Penal establece la obligación
intencionadamente la confiscación de las Autoridades de destruir las
de los citados bienes. drogas tóxicas, estupefacientes y
Por el contrario, el “comiso por sustancias psicotrópicas que sean
valor equivalente" si resulta una decomisadas. Si bien tal mención es
previsión adecuada con respecto a nueva en este precepto del Código
la confiscación de las ganancias de- Penal, en realidad esto ya era posi—
rivadas del delito. En este caso se ble tomando como base el artículo
trata de evitar un enriquecimiento 338 dela Ley de Enjuiciamiento Cri—
injusto por parte del autor del acto minal, según el cual el juez instruc-
delictivo; por lo tanto, si no se pue- tor ha de ordenar la destrucción de
den localizar Ios concretos bienes o tales sustancias, dejando siempre
el dinero procedentes directamente muestras suficientes para permitir la
de la infracción cometida, procede investigación criminal.
confiscar el patrimonio del sujeto en La gran novedad en la regulación
la misma cantidad en que se ha vis- del comiso en materia de tráfico de
to incrementado al integrar en él los drogas reside en que, según el Pro-
frutos de la acción delictiva. yecto de ley, será posible enajenar
los bienes decomisados sin esperar
El camisa en los a que la sentencia sea firme, siem-
delitos relativos al pre que se dé alguno delos siguien—
tráfico de dro as tes supuestos:
(artículo 374 el — Cuando el propietario de los
Código Penal) bienes los abandone expresamente.
— Cuando la conservación de los
El artículo 374 del Código Penal re- bienes pueda resultar peligrosa para
gula específicamente la aplicación la salud o seguridad públicas, o dar
de la consecuencia accesoria de co- lugar a una disminución importante
miso en los delitos relacionados con de su valor, o afectar gravemente a
el tráfico de drogas. Si bien existen su uso y funcionamiento habituales.
algunas diferencias entre la redac-
ción actual y el texto previsto en la La redacción actual del Código, y
Ley de reforma, en realidad el obje- así se mantiene en el Proyecto de re-
to de esta figura especifica de comi- forma, permite decretar el depósito
so está y estará constituido por los o embargo de tales bienes como
efectos, instrumentos y ganancias medida cautelar mientras dura el
129
proceso, impidiendo así que los au- tencias firmes, según se deduce del
tores del delito tengan el tiempo su— artículo 3 del Código Penal y del ar-
ficiente para hacerlos desaparecer. tículo 988 de la Ley de Enjuicia-
Si bien esta medida resulta sin duda miento Criminal. Efectivamente, el
admisible y en muchos casos nece— comiso, al ser una consecuencia ac-
seria, no puede decirse lo mismo de cesoria derivada de la comisión de
la nueva opción recogida en el Pro- un delito, sólo podrá imponerse en
yecto de ley: la posibilidad de enaje— una sentencia; por lo tanto, con
nar Ios efectos, instrumentos o ga- esta reforma se permite actuar so-
nancias del delito ya mientras se bre unos bienes que sólo pueden ser
desarrolla el proceso, es decir, antes depositados o embargados caute—
de que se dicte una sentencia firme. larmente, ya que su carácter delicti—
Esta medida es rechazable desde vo y el consiguiente comiso sólo se
dos puntos de vista. En primer lugar, establecerán cuando se dicte la sen-
vulnera el principio de presunción de tencia que ponga fin al proceso.
inocencia, sobre todo en relación con Además, ni siquiera resultan muy
el comiso de las ganancias derivadas acertados los dos supuestos en los
de un hecho delictivo: se está permi— que, según la reforma, se puede
tiendo Ia enajenación de bienes per— proceder a enajenar anticipadamen-
tenecientes a una persona cuya parti- te los efectos, instrumentos o ga-
cipación en el delito de tráfico de nancias del delito.
drogas todavía no ha sido probada, y En primer lugar, se permite la en-
cuya presunción de inocencia, por lo ajenación de los bienes cuando su
tanto, aún no ha sido desvirtuada. De propietario los abandone expresa—
hecho, ya ha sido objeto de críticas la mente. Empieza entonces la dificul-
previsión contenida en el actual artí- tad de determinar cuándo debe
culo 374 del Código Penal, que se apreciarse que un sujeto ha aban—
mantiene en igual forma en el Pro- donado "expresamente" sus bienes.
yecto de ley, según la cual es posible Por una parte, si éstos han sido de-
la utilización provisional de los bien- positados o embargados por las Au-
es decomisables mientras dura el toridades, obviamente no puede de-
procedimiento. Se está produciendo cirse que hay un “expreso abando-
una condena anticipada de un sujeto no“ por parte de su titular, y en tales
que aún goza de la presunción de casos no debería admitirse, atenién—
inocencia, y no resulta muy satisfac— donos a la literalidad de la norma,
torio que el Proyecto de ley establez- su enajenación anticipada. En rigor,
ca, como único medio de compensar sólo debería aceptarse que hay un
posibles errores, que el importe de la abandono expreso de los bienes
enajenación quede depositado a la cuando su propietario exterioriza la
espera del resultado del correspon- renuncia de sus bienes a favor de la
diente procedimiento legal. Autoridad, y en estos casos real-
Por otra parte, en segundo lugar, mente no habría problema para en-
esta posibilidad de enajenación an- ajenarlos, puesto que se trataría ya
ticipada contradice el principio de de objetos pertenecientes a las pro—
que sólo pueden ejecutarse las sen- pias autoridades.
130
'32
Novedades en la reoulación

En cuanto al segundo supuesto en los efectos, instrumentos o ganan-


que es posible la enajenación antici- cias de la infracción, mediante su
pada, es susceptible de crítica desde venta a otra persona o por cualquier
dos perspectivas. Por una parte, se otra modificación de la titularidad
admite esta posibilidad cuando la de los bienes, intentando así que,
conservación de los bienes pueda cuando se dicte sentencia, no exista
disminuir su valor o afectar a su uso ningún bien que confiscar; por ello,
y funcionamiento habituales. Está se permite a los Tribunales declarar
patente aquí el deseo del legislador nulas las ventas, donaciones o cua-
de que los bienes no se devalúen du- lesquiera otros negocios que tengan
rante el largo período de tiempo que por objeto los bienes citados.
suele durar un proceso penal; no Como se acaba de decir, estamos
obstante, este no es un motivo que ante otra medida más que pretende
pueda justificar la previsión de una impedir que el autor del delito eluda
medida tan excepcional como la en- la confiscación de determinados
ajenación delos bienes decomisados bienes, tanto los efectos e instrumen-
antes de que se dicte una sentencia. tos del acto delictivo como las ga-
Por otra parte, también se permite nancias que se han obtenido con este
enajenar los bienes cuando su con- comportamiento. No obstante, más
servación pueda resultar peligrosa que medidas como ésta de carácter
para la salud o seguridad públicas. formal, resultan más adecuadas otras
De un lado, nuevamente nos encon- formas de aseguramiento como las
tramos con el problema de delimitar ya mencionadas de depósito o em-
un concepto valorativo: qué se en- bargo de los bienes que pueden ser
tiende por peligroso para la salud o decomisados en el futuro: así se po-
seguridad públicas; de otro lado, y nen bajo la custodia de las autorida-
aunque llegaran a fijarse los límites des y se evita cualquier tipo de ocul-
de este concepto, es sorprendente tación o transferencia de dominio.
que el legislador prevea la posibili- Por último, el comiso en materia
dad de enajenar anticipadamente un de tráfico de drogas presenta una
bien peligroso para la salud o segu— peculiaridad en relación con la me-
ridad públicas: parece que, ante tal dida genérica de comiso. Según el
peligro, lo más lógico hubiera sido régimen habitual de esta medida,
decretar su destrucción. contenido en el artículo 127 del Có-
Otra novedad prevista en el texto digo Penal, con el producto de la
de reforma del artículo 374 del Có- venta de los bienes decomisados se
digo Penal esla siguiente: los jueces satisfarán las responsabilidades civi—
y Tribunales podrán declarar la nuli- les del autor del delito. En cambio,
dad de los actos o negocios jurídi- el artículo 374 del Código establece,
cos por los cuales se transmitan, para el comiso decretado en el ám-
graven o modifiquen la titularidad o bito de los delitos de tráfico de dro-
los derechos relativos a los bienes gas, que todo lo decomisado se ad-
que pueden ser objeto de comiso. judicará al Estado (concretamente
Es decir, se pretende evitar que el se destina al Fondo de bienes deco-
autor del delito haga "desaparecer" misados por tráfico ilícito de drogas
131
…LLALQNIBABREECBMA£ENAL
y otros delitos relacionados, regula- los acreedores de la responsabilidad
do en la reciente Ley 17/2003, de 29 civil), puesto que por su propia esen-
de mayo) y no podrá aplicarse a la cia Ios delitos de tráfico de drogas no
satisfacción de la responsabilidad generan concretas responsabilidades
civil derivada de la infracción penal. civiles: en todo caso, cabe hablar de
Puede sorprender en principio esta "víctimas sociales" que, además, re-
tajante ruptura con el régimen gene— sultan beneficiadas por esta previsión
ral de la medida, y de hecho esta dis- del artículo 374 del Código, ya que el
posición había sido criticada en su citado Fondo de bienes decomisados
momento. Sin embargo debe darse debe emplearse en la prevención de
la razón a quienes consideran que tal toxicomanías, atención de drogode—
medida no es realmente dañosa para pendientes y persecución de los deli-
los perjudicados por el delito (esto es, tos de tráfico de drogas.

El presente informe tiene como objetivo


analizar el papel que desempeñan los
jueces de instrucción, los abogados,
especialmente del Turno de Oficio de
Extranjería, y los funcionarios de la
Dirección General de Policía en los pro-
cedimientos administrativos de deten-
ción, internamiento y expulsión de
extranjeros en la ciudad de Barcelona.
' ¿ …'……smne '
NTERNAM' _ .
:… uTMN_||—:Rós un PRIMER INFORME
SOBRE LOS PROCEDIMIENTOS
ADMINISTRATIVOS DE
DETENCIÓN, INTERNAMIENTO Y
EXPULSION DE EXTRANJEROS
EN CATALUNA
Observatori del Sistema Penal i els Drets
Humans
Virus editorial/OSPDH
80 págs., 3 €

132
K
?

Una reforma penal


animal 4» GABRIEL-IGNACIO ANITUA

encionaré brevemente un conservadoras, sino que han sido


aspecto de la reforma pe- los movimientos críticos hacia el an—
nal del año 2003. No creo tropocentrismo de nuestra socie-
que sea un tema menor, ni tampoco dad, y sensibles hacia el sufrimiento
que deba ser tomado a broma que, de los seres vivos, los que han exigi-
según el Anteproyecto de Ley de Re— do una nueva figura penal, pensan-
forma del Código Penal, finalizado el do que de esa forma se provee ma—
día 11 de septiembre, el maltrato yor protección a los animales. Los
grave a los animales pasará a ser con- reclamos sociales en pro dela confi-
siderado delito por el Código Penal. guración de este nuevo delito se hi-
Lo que quiero dejar en claro desde cieron más importantes tras el im-
ahora es que está bien lejos de mi in- pacto mediático de unos hechos
tención tomarme a broma los plan- crueles acaecidos en Tarragona. Su-
teos de los movimientos defensores pongo presentes en los lectores las
delos animales no humanos. Incluso imágenes de los perritos mutilados,
los de aquellos que realizan tal de- y por lo tanto no necesario será re-
fensa desde la utilización del discur- cordarles esos hechos.
so de los "derechos", predicados Aprovechándose de estas deman-
para los animales. Lo que sí, en cam- das en dos sentidos —rentabilizán-
bio, creo necesario destacar es la dolo políticamente y aumentando el
contradicción que supone la utiliza— nivel represivo—, el Partido Popular
ción del derecho penal por movi- propone finalmente que el artículo
mientos sociales críticos, puesto que 337 del Código Penal quede redac-
de esa forma se legitima únicamen- tado como sigue: "Los que maltra-
te el propio instrumental represivo. taren con ensañamiento e injustifi-
Si es posible afirmar que la “solu- cadamente a animales domésticos,
ción" justicia penal no es ajena a los causándoles la muerte o provocán-
movimientos conservadores, tam- doles lesiones que produzcan un
bién cabe indicar que los movimien- grave menoscabo físico, serán casti—
tos críticos (progresistas, libertarios gados con la pena de prisión de tres
y antiinstitucionales) deberían con meses a un año e inhabilitación es-
la misma lógica desconfiar de aque— pecial de uno a tres años para el
lla "solución" y proponer otras al- ejercicio de profesión, oficio 0 co-
ternativas. mercio que tenga relación con los
Y es que, en efecto, la propuesta animales".
de criminalización que menciono no Ello ha sido saludado como un
ha sido una iniciativa de las filas éxito por las entidades protectoras
133
R
xc. DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

de animales y por los diversos acto— tende proteger mediante la crimina-


res sociales, políticos y jurídicos. El lización. Y es que la reforma incor-
informe que sobre ello ha redactado pora este nuevo delito dentro de
el Consejo General del Poder Judicial aquellos que protegen a la flora y a
considera, además, que debe san- la fauna. Ellos constituyen el capítu-
cionarse el abandono de animales, lo IV dentro del Título XVI que pro-
por ser una práctica frecuente que tege al medio ambiente, una nove—
constituye en si misma un acto más dad del Código Penal de 1995.
de crueldad gratuita hacia el animal En la oportunidad de incorporar
y entraña además un evidente ries- los delitos medioambientales se dis-
go concreto para la población de cutió sobre la conveniencia de darle
transmisión de enfermedades. Ade- cobertura penal a los llamados bie—
más, entiende que al mencionarse nes jurídicos colectivos. Las discusio—
solamente al "animal doméstico" el nes no eran sólo de técnica legislati-
proyecto se ha quedado corto. En va sino que también se señalaron,
este sentido, recuerda que el Códi— desde la sociología jurídico-penal, los
go Penal francés sanciona con las problemas que podría ocasionar una
mismas penas previstas para el mal- legislación penal dictada para apli-
trato a animales (hasta dos años de carse en pocos casos y dificultosa—
prisión y multa de 30.000 euros y mente (el llamado derecho penal
posible interdicción de la posesión simbólico podría tener una conse—
de un animal) el abandono de un cuencia negativa, se indicaba); y asi—
animal doméstico, domesticado o mismo, desde la filosofía penal, se
mantenido en cautividad. avisó del efecto perverso que podría
Pero, más allá de estos comenta— tener el aumento de los bienes jurídi-
rios, ¿qué novedad significa la nue- cos tutelados penalmente sobre la
va criminalización? No significa la función limitadora del derecho penal.
incorporación de una conducta al A esto último quiero hacer referen-
reproche penal. De hecho, actual- cia, además de señalar que la nueva
mente, el Código Penal castiga — figura penal parece dar un paso más
como falta y no como delito— el allá que la regulación de “bienes ju-
“maltrato cruel» a los animales (artí- rídicos colectivos", pues ya no se tu—
culo 632), pero sólo cuando se lleve tela un bien jurídico que en definiti-
a cabo en espectáculos no autoriza- va remite al animal humano (aunque
dos legalmente. Además, en Catalu— sean varios e indeterminados), sino
ña existe una normativa sanciona- que protege al animal no humano
dora local, la Llei 22/2003 de 4 de identificándolo como “individuo" o
Julio de Protección de los Animales. sujeto de derechos. Para proteger a
Sin embargo en el primero de los estos animales será necesario enca-
casos la falta se halla bajo el epígra— rar diversas actuaciones de tipo so-
fe "Contra los intereses generales", cial, y quizás el derecho también
y la ley catalana pretende favorecer puede contribuir a evitar los actos
“una conducta més cívica". Allí ob- crueles. Pero creo que esto no se lo—
servo, entonces, una novedad: la re- gra mediante la “magia" de poner
lativa al "bien jurídico“ que se pre— una nueva figura en el Código Penal.
134
"<?
Una reforma nena] animal

La noción de "bien jurídico" per— del poder punitivo por tomarla ne-
mite identificar el objeto lesionado cesaria. Esto se hace mediante la
como algo valorable por el derecho. identificación de la intervención pe—
Hasta allí ningún inconveniente. El nal con una efectiva “tutela“ 0 “pro-
problema radica en la necesidad de tección" del bien jurídico. Algo que
señalar un delito —y por tanto una de ninguna manera puede compro-
pena— cuando se quiere poner de barse, pues la sociología más bien
manifiesto la existencia de una le- nos demuestra lo contrario.
sión a algo valioso. Así, los bienes jurídicos pasan de
No me parece mal reconocer que ser un principio limitador de la cri-
existen vulneraciones o lesiones no minalización, a ser algo que cuando
deseadas, más bien todo lo contra— resulta lesionado es tutelado me-
río. El problema, no obstante, radi- diante la aplicación de una pena, y
ca en confundir esa lesión (llamé- de allí a que todo bien jurídico debe
mosle "bien jurídico vulnerado") ser tutelado mediante la criminali-
con la imposición legal o efectiva de zación. Una curiosa serie de pasajes
una pena (lo que es presumido por que debilita el real sentido de límite
el concepto "bien jurídico tutelado fortaleciendo un único bien jurídico:
penalmente"). la voluntad punitiva del Estado.
El concepto de "bien jurídico" es Queda una última utilización dela
central dentro del derecho penal. Un idea de bien jurídico tutelado. Si
derecho penal liberal solamente bien se puede comprobar que no se
puede reprimir lesiones a bienes jurí- protege el bien jurídico castigando
dicos, con lo que se excluye la pena— a quien lo vulnera, de todas formas
lización de conductas que no afec— algunos grupos de presión insisten
ten a terceras personas (insisto con en la importancia de darle significa-
lo de “personas" puesto que, tradi— ción penal al bien jurídico. Realizan
cionalmente, se ha entendido que ello pues entienden que la función
sólo los animales humanos podían simbólica de señalar penas legal-
ser titulares de bienes jurídicos). mente no es desdeñable. Lo sostie-
Pero, con posterioridad, el con- nen, desde posiciones conservado-
cepto de "bien jurídico" se trastoca ras, quienes siguen abogando porla
para conformar la trampa mediante penalización del aborto (aunque se
la cual el poder penal se justifica y practiquen casi medio millón de
se amplía, utilizando la ampliación abortos y se persiga efectivamente
de los “bienes jurídicos". un número contable con los dedos
La trampa consiste en que el de la mano) para señalar que es
"bien jurídico" deja de ser un límite algo "malo". También lo hacen, des—
para el legislador, para pasar a ser de posiciones progresistas, las femi-
una justificación de su actuar. Es de nistas que piden el aumento de pe-
esta forma que se sostiene que to- nas para autores de violencia do-
dos los bienes jurídicos deben ser méstica o de otros delitos que se
"tutelados" por la ley penal. Dicha castigan en pocos casos, pues de-
supuesta protección al bien jurídico fienden el sentido que esa penaliza-
es lo que legitima la intervención ción transmite.
135
M
N:. DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

Ya se ha señalado por muchos pe- timos la tentación de comparar ese


nalistas el carácter negativo de la le- exquisito cuidado hacia la tortura
gislación penal simbólica (por la fal- sobre animales domésticos, con la
sa impresión de hacer algo, por la despreocupación hacia la misma en
contradicción con lo que efectiva- el cuerpo de aquellos sometidos a
mente hace, etc.). Y aquí se ha se— leyes que amplían el período de in-
ñalado ya la contradicción de esa comunicación (ya señalado por Am-
utilización por los movimientos críti- nistía Internacional, y con el plazo
cos, pues al asumir esa función del actual, como una “permisión tácita"
derecho penal, se asumen asimismo de la tortura policial) o el trato
las otras funciones que son funda- como ”no personas" a los ciudada-
mentalmente represivas. nos extranjeros. En fin, aunque no
De cualquier forma, lo que se fuera más que simbólicamente, mu-
quiere señalar —tanto instrumental chos de estos "objetos" de la políti—
como simbólicamente— desde el ca criminal de las amplias reformas
Estado al identificar un bien jurídico del año 2003 bien podrian decir:
es una manifiesta preocupación por “Señor Acebes, por favor, tráteme
el mismo. En este sentido, no resis— como a un perro".

Este libro no será pasado por alto, pues se


º ...—.…“ “'
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trata de una de las contribuciones más


importantes de los últimos años. Christie
sigue siendo el mismo de Limits to pain,
pero aquí no se dedica a plantear la posible
abolición del sistema penal, sino a señalar
Nils Christie

su curso, a anlizar un fenómeno real y con-


.

creto, como es la preocupante evolución


del sistema penal estadounidense.

La industria del control del delito


¿la nueva forma del holocausto?
Nils Chris!íe
l552l

Editores del Puerto


200 págs., 15 €

136
K
7

la utilizaríón del
Derech_p Penal: de las
garantias del
audadgno & la
remesm de la
…º… Ó»I nacio Muña orril.aguía
(%]níversídad el País Vasco/
Euskal Herriko Unibersítatea)

n la bibliografía al uso para la so contemplado por la propia norma


formación de los juristas, el penal como un no-sujeto, como un
conjunto de normas penales es mero objeto, un objeto descarnado,
presentado como el ámbito jurídico al que se utiliza como instrumento
más garantistamente formalizado. para finalidades alejadas o que nada
Sin embargo, pienso que puede inter- tienen que ver con sus garantías, con
pretarse que tal atribución de firme la defensa de sus derechos y liberta-
formalización garantista se enuncia y des, entonces la formalización garan-
reproduce miméticamente como un tista pierde su razón práctica, su ra-
mero recurso propio de autoconfir— zón de ser, se resquebraja y cede ante
mación y de autoconformación. esas utilizaciones. Podrán seguir sien—
Ello sucede porque dicha formali- do enunciadas y miméticamente re-
zación garantista debería, en su caso, producidas las garantías, pero su
girar alrededor de la centralidad del sentido será otro.
sujeto, del ciudadano, como sujeto li- Si es posible comprobar que tal
bre e igual de derechos y libertades, atribución garantista al sistema pe—
al servicio de él. Pero, si puede com- nal, a partir de lo que enuncia y a
probarse —como se puede—— la des- partir delo que excluye, contiene una
igualdad material entre los sujetos y contradicción manifiesta y cada vez
la mutilación de su autonomía, y si más burda entre lo que tiene de mera
también puede comprobarse —como declaración y entre lo que oculta y so-
también se comprueba— que ese su- cialmente sucede, se verifica que es-
jeto es, cada vez mas, usado e inclu- tamos ante una gran simulación, un
137
enorme engaño sobre los usos del previsión de este precepto establece
sistema penal. Intentaré mostrar esto que en determinados casos de con-
a continuación a partir de las últimas currencia delictiva "los beneficios pe—
propuestas de reforma penal. nitenciarios y el cómputo del tiempo
El Proyecto de reforma del Código para la libertad condicional se refie-
Penal denominado “para el cumpli- ran a la totalidad de las penas im-
miento íntegro y efectivo de las pe- puestas", sin perjuicio de lo que a la
nas“, de febrero de este año 2003, vista del tratamiento pueda resultar
contempla la elevación del límite procedente —esto es, que el compu-
máximo de cumplimiento de la pena to se establezca sobre el máximo de
de prisión desde los 30 años del Có- cumplimiento, estableciéndose estos
digo en vigor (art. 76 CP) a los 40 criterios para todo tipo de conde-
años. Estos 40 años podrán alcan- nas—, el propuesto art. 78 CP del
zarse en dos supuestos diferencia- Proyecto de reforma establece lo si-
dos. El primero para el condenado guiente: por una parte, el cómputo
por dos o más delitos y que al me- de tiempo desde la totalidad de la
nos dos de ellos estén castigados condena se propone que afecte no
con pena de prisión superior a 20 sólo a los beneficios penitenciarios y
años; y el segundo supuesto para el a la libertad condicional, sino tam—
condenado por dos o más delitos de bién a los permisos de salida y a la
terrorismo y que al menos uno de clasificación en tercer grado. Ade-
ellos —uno solo, no dos como en el más de ello, la posibilidad de aplica-
caso anterior— esté castigado con ción del régimen general es excluida
pena de prisión superior a 20 años. para los supuestos de terrorismo o
Se propone introducir también el los cometidos enlel seno de organi—
llamado "periodo de seguridad“, de zaciones criminales, supuestos que
manera que para las penas de pri- por tanto tendrán vedada la posibili-
sión superiores a 5 años el condena- dad de que el computo se establezca
do no podrá ser clasificado en tercer en base al máximo de cumplimiento.
grado hasta haber cumplido la mi- En relación a la libertad condicio-
tad de la pena, si bien se introduce nal, la propuesta de reforma del artí-
la previsión de que cumplida la culo 90 CP mantiene los requisitos ac—
cuarta parte dela pena el juez de Vi- tuales y añade otros. Mantiene la exi—
gilancia Penitenciaria podrá acordar gencia de que se hayan cumplido las
bien el mantenimiento de ese perio- tres cuartas partes dela condena, que
do de cumplimiento o bien el régi- el condenado se encuentre en tercer
men general, posibilidad esta última grado penitenciario, y que haya ob-
de la que se excluye a los delitos de servado buena conducta y exista un
terrorismo o cometidos en el seno pronóstico favorable de reinserción.
de organizaciones criminales. Se propone añadir otros requisitos. El
Junto a la elevación y este cumpli- primero, con carácter general, que el
miento obligado, se propone tam- penado haya satisfecho o garantice
bién la reforma del tan criticado artí- satisfacer la responsabilidad civil deri—
culo 78 CP actual en una clara exas- vada del delito, satisfacción de la res-
peración punitiva. Si la actual ponsabilidad civil que también se exi-
138
"ti
La utilización del Derecho Penal

ge para la progresión al tercer grado. prevé introducir que "cuando la reso-


El segundo requisito que se propone lución objeto del recurso de apelación
añadir es sólo de aplicación a las per- se refiera a materia de clasificación de
sonas condenadas por delitos de te- penados o concesión de la libertad
rrorismo o por delitos cometidos en el condicional y pueda dar lugar a la ex—
seno de organizaciones criminales. carcelación del interno, el recurso
Consiste en la exigencia de que tendrá efecto suspensivo que impedi—
“muestren signos inequívocos de ha— rá la libertad del condenado hasta la
ber abandonado los fines y los me- resolución del recurso o, en su caso,
dios terroristas y además hayan cola- hasta que la Audiencia Provincial o la
borado activamente con las autorida- Audiencia Nacional se haya pronun-
des, bien para impedir la producción ciado sobre la suspensión"; es decir,
de otros delitos por parte de banda paralización de la puesta en libertad
armada, organización o grupo terro- que ha sido decidida por los corres—
rista, bien para atenuar los efectos de pondientes órganos penitenciarios y
su delito, bien para la identificación, el Juzgado de Vigilancia cbmo un
captura y procesamiento de respon- efecto automático a la presentación
sables de delitos terroristas, para ob- del recurso a tal decisión, desautori—
tener pruebas o para impedir la ac— zando a tales instancias y priorizando
tuación o desarrollo de las organiza- la no libertad sobre la libertad.
ciones o asociaciones a las que hayan En relación a la LO General Peni-
pertenecido o con las que haya cola- tenciaria las modificaciones propues-
borado". tas son paralelas, en gran parte, a las
Respecto al especial supuesto de li- del Código Penal ya vistas en materia
bertad condicional, artículo 91 CP, de progresión al tercer grado peni-
que la posibilita una vez cumplidas tenciario, por lo que omitiré su refe-
las dos terceras partes de la pena, en rencia. (Se recoge la exigencia de
vez de las tres cuartas partes, siem- que se haya satisfecho la responsabi-
pre que se dé el tercer grado, el pro- lidad civil y cuando tal progresión al
nostico de reinserción y además el tercer grado se refiera a personas
penado haya desarrollado de mane- condenadas por delitos de terroris-
ra continuada actividades laborales, mo o cometidos en el seno de orga-
culturales u ocupacionales, el Pro- nizaciones criminales se añade la de-
yecto propone dos modificaciones mostración inequívoca del abandono
adicionales: una, exigir también la de medios y fines, además de la co-
satisfacción de la responsabilidad ci- laboración activa con las autorida-
vil y, la segunda, excluir de esta posi- des). Por último, también el Proyecto
bilidad especial los supuestos de te- recoge una propuesta de modifica-
rrorismo o los cometidos en el seno ción de la Ley de Enjuiciamiento Cri-
de organizaciones criminales aunque minal en relación con la responsabili—
concurran todos los requisitos. dad civil en concordancia a las pro-
El Proyecto de reforma también re- puestas de satisfacción de la
coge sendas modificaciones a la LO responsabilidad civil ya expuestas.
del Poder Judicial y a la LO General Pe- Este Proyecto de reforma coexiste
nitenciaria. Respecto a la primera, con otro Proyecto de diciembre pasa-
139
do de reforma de la LO del Poder Ju- arresto de fin de semana, se incorpo-
dicial, la LO General Penitenciaria y la ra una nueva pena privativa de liber-
Ley de Demarcación y Planta Judicial tad denominada “localización per—
que propone la creación de uno o va- manente“, que obliga a permanecer
rios Juzgados Centrales de Vigilancia en el domicilio o en otro lugar seña-
Penitenciaria en Madrid con jurisdic- lado por el juez durante un tiempo
ción en todo el territorio, modifica el no superior a 12 días, pudiéndose
régimen de recursos de apelación y cumplir de forma no continuada y
queja, y prevé que para las visitas a que será aplicable sólo a las faltas; se
los establecimientos penitenciarios el eleva la cuantía de la cuota diaria de
juez central de Vigilancia Penitencia- multa, se incrementa también la
ria podrá solicitar el auxilio judicial de pena del delito continuado pasando
los jueces de Vigilancia Penitenciaria de la infracción más grave en su mi-
del lugar del establecimiento peni- tad superior a la superior en grado en
tenciario que se ha de visitar. su mitad inferior. Asimismo, la reinci—
Entiendo que no es casual que la dencia se propone como una agra-
amplísima reforma penal que se ave- vante cualificada a partir de tres deli-
cina comience por este extraordinario tos, sancionándose con la pena supe—
incremento de la pena de prisión y de rior en grado, pena superior que
la disciplina carcelaria que, como han también se alcanza por la concurren-
podido ver, no se articula en base a cia de más de dos circunstancias
criterios de proporcionalidad ni de agravantes. La comisión en el plazo
derechos de las personas, sino —por de un año de cuatro faltas de hurto,
utilizar una expresión descriptiva— de hurto de uso de vehículos o de le—
en base al uso de la calculadora una sión pasarán a ser sancionadas como
vez prefijada la larga condena y el cál- delito, asimilación punitiya a delito
culo aritmético para que se cumpla. de lo que normativamente se define
Otra batería de medidas, una se— como no delito. En relación con los
gunda oleada represiva, se recoge en emigrantes, la previsión del artículo
el titulado Proyecto sobre Medidas 89 CP respecto al régimen de sustitu—
Concretas en Materia de Seguridad ción de las penas de prisión, actual-
Ciudadana, Violencia Doméstica e In- mente de manera potestativa, se es—
tegración de los Extranjeros, y una tablece de modo imperativo. Así,
tercera en el Anteproyecto de Modifi- para los emigrantes en situación ad—
cación del Código Penal, aprobado ministrativa irregular condenados a
en enero pasado, que propone la penas privativas de libertad inferiores
modificación de alrededor de ciento a seis años en vez de “se podrá susti—
setenta artículos del Código Penal ac— tuir“ esas penas por la expulsión, se
tual. Para no extenderme en exceso establece que "serán sustituidas",
haré una breve relación de las pro— manteniéndose la prohibición de vol-
puestas de modificación contenidas ver durante diez años. Estas últimas
en ambos textos que pueden afectar medidas tienen que ser contempla-
al sistema de penas. La duración mí- das en relación a la LO 4/2000 de 11
nima de la pena de prisión se rebaja de enero, restrictiva de los derechos
de 6 a 3 meses; se suprime la pena de de las personas inmigradas no comu—
140
“<?
La utilización del Derecho Penal

nitarias, a quienes no se reconocen del momento de comisión de los he-


los derechos de reunión, manifesta— chos delictivos o de la fecha de la re-
ción, sindicación o huelga. solución judicial en virtud de la cual
Rechazadas las enmiendas a la to- se está cumpliendo la pena. La con—
talidad del Proyecto sobre el cumpli- trariedad constitucional de tal previ-
miento íntegro de las penas (presen- sión al otorgar a nuevos requisitos
tadas por Bloque Nacionalista Galle— efectos retroactivos entiendo que no
go, Iniciativa per Catalunya—Verds, es salvable por el intento de justifica—
Eusko Alkartasuna, Esquerra Republi- ción esgrimido de que tal medida “no
cana de Catalunya, Grupo Parlamen— es desfavorable al ser una pura inter-
tario Federal de Izquierda Unida y pretación y objetivación de la reinser-
Grupo Parlamentario Vasco, Partido ción“, declaración manifiestamente
Nacionalista Vasco), los dos partidos falsa. Dicha retroactividad afectaría
mayoritarios han consensuado diver- también a las modificaciones del ac-
sas enmiendas parciales a este Pro- tual artículo 78 CP, sobre el que los
yecto de L0, especialmente en rela- enmendantes proponen que el acce—
ción a los problemas de constitucio- so al tercer grado para los delitos de
nalidad que se presentan ante el terrorismo pueda alcanzarse una vez
tratamiento excepcional que se da a cumplidos 32 años de condena y el
los delitos de terrorismo y la orienta— acceso a la libertad condicional cum-
ción reinsertora contenida en el artí- plidos 35. Respecto a la libertad con-
culo 25.2 CE. Así, en relación a la li- dicional, cuando se incumplan las
bertad condicional de las personas condiciones que permitieron obtener-
condenadas por terrorismo, se recoge la en supuestos de terrorismo, se pro-
que la exigencia de signos inequívo- pone que el penado cumpla el resto
cos de haber abandonado los fines y de condena con pérdida del tiempo
los medios, además de la colabora- pasado en libertad. AI redactar estas
ción activa con las autoridades, se líneas se anuncia la previsión de alar-
propone que podrá acreditarse a tra- gar durante trece días el periodo de
vés de una declaración expresa, esto incomunicación en los supuestos de
es pública, de repudio de sus activi— terrorismo, con el consiguiente vacia-
dades y de abandono de la violencia, miento durante ese periodo de dere-
y una petición expresa de perdón a las chos constitucionales.
víctimas, junto con los informes técni- Como han podido conocer, estas
cos que confirmen la desvinculación y reformas se han descrito desde re-
la colaboración con las autoridades. presentantes del Estado con las imá-
También el texto pactado recoge una genes de “barrer las calles" o "que
previsión de aplicación que afecta es- se pudran en las cárceles", pero
pecialmente a quienes en este mo— también son explicadas en la Exposi-
mento están cumpliendo prisión por ción de Motivos del Proyecto citado
estos delitos. Prevé que las condicio- en base a “los principios de legali—
nes para acceder a la libertad condi- dad y tipicidad", a "la exigencia ne-
cional y al tercer grado penitenciario cesaria del principio de seguridad ju-
se apliquen desde la entrada en vigor rídica", al “derecho del ciudadano a
de la nueva ley, con independencia conocer con certeza cuál es la forma
141
en que se van a aplicar las penas", En comentarios que no hace mu-
así como a "lograr una lucha más cho tiempo hice a la presencia de la
efectiva contra la criminalidad" por- pena de prisión en el Código Penal de
que "la sociedad demanda una pro- 1995 (Muñagorri, I., 1998) y a la in-
tección más eficaz frente a las for— terpretación del artículo 25.2 CE en
mas de delincuencia más graves“, relación a la legalidad del cumpli-
"protección que el Estado de Dere- miento de la prisión (Muñagorri, |.,
cho no sólo puede sino que tiene la 2000), señalaba que con el actual ar-
obligación de proporcionar", expre- tículo 78 CP, con la previsión de cum-
siones enormemente simples, apa- plimiento efectivo de 30 años de pri-
rentemente tranquilizadoras con las sión en relación con una población
que la política pretende afianzar su penitenciaria selectivamente definida
prestigio aunque manipule las ame- como delincuente, y con la penetra-
nazas, y tras las cuales las respuestas ción en la legislación penal de los
más represivas son presentadas mecanismos de ejecución penitencia-
como beneficio o como gratificación ria, se cedía o abandonaban los lími-
para hacer impensable su rechazo. tes de garantías; se perdía en certeza;
Para interpretar estas reformas ha- se seguía perdiendo en la considera-
brá que intentar rehacer el texto, ción y el empeño del Derecho Penal
aproximarse al autor y a los contex- mínimo al desbordarse la pena carce—
tos del texto, así como a sus desti- laria; perdía la cultura jurídica garan—
natarios reales, a través de vías de tista al articularse instrumentos jurí-
acceso que muchas veces la propia dico-penales enormemente violen—
articulación jurídica tiende a cerrar. tos; y perdía también la cultura social
Puede adelantarse que las referen- ante significados procedentes del de—
cias a las garantías de legalidad que recho penal eminentemente autorita-
se recogen en la motivación del Pro- rios, no ya sólo respecto al delito y la
yecto serían, en su caso, un mínimo pena, sino también a la autoridad, el
obvio e ineludible que remite a las poder, la normalidad o los conflictos
técnicas o procedimientos de elabo- sociales (Sumner, C., 1994; Muñago-
ración de las normas pero que, aun rri, I., 1998). Las reformas propuestas
siendo así, el propio texto de la refor- no sólo reafirman aquellas críticas,
ma desmiente. Las referidas a la cer- sino que ofrecen aún más argumen-
teza y seguridad jurídica no sólo no tos. También comentaba que el man—
son un mera consecuencia automáti- dato del constituyente al legislador
ca de la legalidad, como parece que contenido en el articulo 25.2 CE ofre—
se presentan, sino que incluso son ce un criterio de articulación de la
negadas por las propias reformas pena privativa de libertad que, sien—
propuestas al integrar su aplicación do insuficiente para justificar el re—
retroactiva, aunque no sólo por ello curso a la prisión (Eusebi, L., 1994),
como se irá viendo. El recurso a la deberá estar centrado en el sujeto de
"demanda social" y al interés general necesidades para quien se articulará
o común no deja de ser más que una no tanto el menor daño de sus dere—
instrumentalización engañosa y au- chos esenciales cuanto el ejercicio de
toritaria en el uso de la norma penal. tales derechos, lo que exige poner en
142
'l7º
La utilización del Derecho Penal

práctica la articulación institucional que —dado que la libertad es el pre-


para el ofrecimiento de los recursos supuesto para el ejercicio de otros
necesarios (Baratta, A., 1994). Tam- derechos— constituye también una
bién entendía, y sigo entendiendo, injerencia tendencialmente global
que el artículo 25.2 CE se distancia de respecto a todos los derechos per-
una concepción premoderna y ances- sonales y alcanza al cuerpo (Eusebi,
tral de la pena de prisión como ex- L., 1994; Muñagorri, |., 1998), la
piación (Moccia, S., 1997). elevación a cuarenta años de la
Pues bien, a mi entender, la refor- pena de prisión, las dificultades y
ma penal propuesta ahonda aún más exigencias para acceder al tercer
en una concepción arcaica, vindicati- grado y, en su caso, a la libertad
va y expiatoria de la pena de prisión. condicional, sólo pueden ser enten-
Profundiza en el desbordamiento de dibles como vindicativa disciplina
los límites garantistas. Es manifiesta- expiatoria. Para ello se acude al ar-
mente Iiberticida y clasista, y por cla- caico ritual de la autoconfesión pú—
sista, xenófoba. Introduce elementos blica, al deber de colaboración acti—
de privatización en la gestión puniti— va con la autoridad y a la delación
va de la no libertad y ofrece un Dere— que se exige como penitencia, como
cho Penal que si por una parte inte- precio del perdón. Podemos recor-
gra una imagen del ser humano ce— dar como la Inquisición publicaba
rrado a la socialidad, bloqueado en la todos los años, en Cuaresma, los
condición de criminal peligroso y ne- “Edictos de las delaciones“, que es-
gado a perspectivas existenciales (Eu- tablecían la obligación de delatar,
sebi, L., 1994; Muñagorri, |., 1998); sin exceptuar a los familiares más
por otra, ante su comprobada inade- cercanos, amenazando a quien no
cuación para evitar la delincuencia y lo hiciese e instruyendo para su ejer—
aún menos para resolver los proble— cicio (Martínez Fresneda, G., 1984).
mas generales de la sociedad, se usa Con la autoculpabilización y la de-
como vía de comunicación con los nuncia del otro, como expiación, el
ciudadanos fieles para reforzar la acusado se convierte en acusador
confianza institucional, sustituyendo de si mismo, en protagonista de su
su naturaleza democrática por su ins- propia acusación y, como prueba de
trumentalización como técnica publi- arrepentimiento, como penitencia,
citaria entre los políticos y su público en delator. Así, el derecho funda-
(Baratta, A., 1991; Pavarini, M., mental a no declarar contra si mis-
1994), como un instrumento que de- mo, a no declararse culpable, se
forma su sentido y con el que el Esta- transforma en un obstáculo para la
do busca lealtades, silencios, por las libertad. Además, si prosperan las
dificultades y problemas de goberna- enmiendas comentadas, la petición
bilidad, tanto ante específicos pro- de perdón a las víctimas, como otro
blemas concretos, más o menos co— momento expiatorio añadido, en-
yunturales, como ante profundos tiendo que lleva a consecuencias
desajustes estructurales. perversas también para la propia
Si la pena de prisión constituye no víctima. Por una parte, al hacerla
sólo la privación de la libertad, sino participe de una pena de prisión en-
143
u/

tendida como venganza y como ex- dad, pequeños desordenes, de los


piación. Por otra, al introducir ele— que no interesan tanto los hechos
mentos de privatización en la ejecu— como sus autores, fácilmente obser-
ción de la pena de prisión. La priva— vables en la medida en que las calles
tización de la ejecución penal se vayan transformando en comisa-
también se manifiesta en las nuevas rías volantes. Los pobres no son pro-
exigencias sobre la responsabilidad ductivos, no son consumidores, no
civil para la calificación en tercer son necesarios para la rentabilidad
grado penitenciario y para, en su delas empresas que son las que des—
caso, la libertad condicional. truyen trabajo, ni para el incremento
AI centrarse este primer momento de la acumulación. Se contemplan
de la reforma en la pena de prisión, como deshechos sociales muy pre-
en el momento más desformalizado sentes en las calles porque no tienen
y con mayor vigencia de una norma— otro lugar para sobrevivir. Así que se
tividad de ínfimo rango y también de propone barrer, limpiar las calles de
una normatividad fáctica, se multi- la basura, de lo inútil. A rentabilidad
plica el laberinto del oculto observa- cero, tolerancia cero; y para ello más
torio penitenciario, se incrementa así policía, más cárcel, más Derecho Pe-
la incertidumbre, la inseguridad, se nal, más Estado penal y menos polí-
incrementan los múltiples caminos ticas sociales (Sáez, R., 2002). Como
de un espacio especialmente someti- han podido conocer, la primera ope-
do, de especial supremacía de la Ad— ración de relevancia del llamado
ministración (Rivera, |., 2000; Muña- “Plan de lucha contra la delincuen-
gorri, l., 2000). Los llamados “perio- cia“, el "Plan Focus", consiguió en
dos de seguridad" y sus excepciones, noviembre pasado incrementar un
sus retornos, a la vez que incremen- 25%, como media, las detenciones
tan la cárcel segura y asegurada,'in- en las ocho ciudades en due se apli-
crementan también los procedimien- có; pero tal incremento se debió
tos selectivos, definen al irredimible principalmente a la detención de ex-
a quien ofrecerán el purgatorio de su tranjeros indocumentados, siendo
salvación. así el motivo de las detenciones no
Entiendo que las otras medidas tanto la delincuencia como la emi-
propuestas, como la cualificación de gración irregular, y el detonante, los
las agravantes —especialmente la de rasgos raciales (El País, 8, marzo,
reincidencia—, la transformación de 2003). Sin embargo, la confusión
las faltas en delitos yla expulsión de está dada. La identificación, no com—
los emigrantes, permiten ser com- probada e incluso desmentida por
prendidas alrededor de una inter— un reciente informe de la UE, entre
pretación común como es la de la emigración y delincuencia se crea
criminalización de la pobreza. Solo desde las prácticas institucionales; y
hay que ver quiénes son los defini- para exorcizar los miedos creados se
dos como autores de las continua- recurre a la expulsión, tanto admi—
das faltas contra el patrimonio o de nistrativa como penal. Por otra par-
hurto de uso o de lesiones, repeti- te, la agravación de las penas por la
ciones de ilícitos de mínima grave— concurrencia de las agravantes, por
144
'W
La utilización del Derecho Penal

la reincidencia y por la transforma- igualdad, la discrecionalidad y la in-


ción de las faltas en delitos llevará a certidumbre; Ia'prueba se sustituye
más prisión provisional, más pena por la mera denuncia policial que —
adelantada, más condenas, más cár— elevada, sin mayor fundamentación,
cel, más segregación selectiva. Los a la categoría de “razonamiento jurí-
niveles de encarcelamiento se con- dico"— se convierte en el presupues-
vierten así en una consecuencia di- to de un uso generalizado delas me-
recta de decisiones políticas. didas cautelares que como condenas
Si he recurrido a términos como anticipadas van vaciando derechos
"avanzadilla", "batería", "segunda y fundamentales como el de la liber-
tercera oleada" que remiten a esce- tad, el asociacionismo político, el de-
narios bélicos, ello responde a la recho de reunión y manifestación o,
consideración de que se está cons- muy recientemente, la libertad de
truyendo, ya desde hace tiempo, un expresión y el derecho a comunicar y
Derecho Penal que conforma la no— recibir información. Esta anticipación
persona, el enemigo a eliminar. Cual- de la condena en sede procesal corre
quier escenario de guerra en el que paralela con la transformación de la
se define al enemigo lleva a justificar lesividad en peligrosidad, dela lesión
la ruptura de las reglas de juego, de en riesgo, aunque sea remoto y con
los límites. La continuada penetra- la exigencia de cumplimiento de de-
ción, especialmente desde los años beres cuya omisión se castiga. Se in-
ochenta en nuestro derecho, de la vierten las normas penales y procesa-
excepcionalidad en el Código y en la les penales en un permanentemente
legislación procesal penal, expande creciente horizonte penal impredeci—
la noción del enemigo, y al irle pri- ble, cada vez más habitado por las
vando de garantías, lo va definiendo sombras yla incertidumbre, como in-
como no-persona. Y la no-persona, cierto es el mantenimiento del traba—
más allá de la construcción normati— jo, la protección por desempleo, la
va, es no-sujeto, no-individuo. La ex— cobertura pública de la salud y las
pansión alcanza no sólo a las organi- pensiones 0 la supervivencia garanti-
zaciones terroristas, sino también al zada de amplios sectores de pobla-
terrorista individual que no pertene- ción, problemas ante los que el Esta—
ce a ninguna organización y también do parece que poco puede hacer
a la criminalidad organizada; afecta porque, si por una parte gestiona
no sólo a los medios sino también a con la llamada flexibilidad yla reduc—
los fines; la presunción de inocencia ción del gasto social las tasas de be-
se violenta no sólo con la pena ade- neficio del capital, por otra recurre
lantada, sino con la aplicación de las sistemática e incrementadamente a
consecuencias accesorias a la pena la represión penal y al derecho san-
que se imponen en fase procesal; se cionador en general.
atiende no ya al hecho sino al autor, Me permito añadir que ante la uti-
con la utilización extensiva del incon— lización política que se está haciendo
creto criterio de la peligrosidad y con del Derecho Penal, su utilización sim-
la penalización dela esfera privada, y bólica está alcanzando la supersti-
el consiguiente incremento dela des- ción, Ia transmisión de creencias en
145
……RREEQBMLEENAL

demonios malignos y en hados salva— las garantías formales, y su utiliza-


dores, y de tales creencias habrá que ción como presentes en la historia y
emanciparse. Habrá que liberarse en su historia y, por tanto, finitas,
también de una contemplación de fragmentarias, abiertas a la compleji-
nuestras sociedades semejante a los dad, a sus asimetrías y antagonismos
patios carcelarios de aislamiento, en (Horkheimer, M., 2002) y, en todo
los que los recluidos caminan en si- caso, desarrollables y profundizables.
lencio y sin sentido. Habrá que des— Frente a la avasalladora maquinaria
velar también esa especie de fe reli— del poder económico, que se encuen-
giosa que estigmatiza como impro— tra en la base de la exclusión, resistir
ductivos a quienes no tienen acceso a en la negación; y respecto a las for—
los centros de poder o a quienes no mas jurídicas, reintroducir el derecho
participan de manera encarnizada en en el interior de las relaciones socia-
alcanzarlos. Denunciar la superstición les ofreciendo también la función
como falsa objetividad, romper las si- normativa como objeto, conflictivo y
metrías formales que encubren la ló- contradictorio, de reapropiación so—
gica del dominio, analizar también cial (Barcellona, P., 1976).

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146
"i?
El nuevo Elias: la
teoria del "Deregho
gnal del enemigo" de
unther lalith 4» jose' Antonio Ramos Vázquez
(Becario de FPU, Área de Derecho
Penal, Universidade Da Coruña)

”Elias se acercó a todo el pueblo y dijo: '¿ Hasta cuándo vais


a cojear con los dos pies? Si Yahveh es Dios, seguid/e, si
Baal, seguid a éste'. Pero el pueblo no le respondió nada
[…] Cayó el fuego de Yahveh que devoró el holocausto y la
leña y lamió el agua de las zanjas. Todo el pueblo lo vio y
cayeron sobre su rostro y dijeron: '¡Yahveh es Dios! ¡ Yahveh
es Dios!'. Y Elías les dijo: "echad mano a los profetas de
Baal, que no escape ninguno'. Les echaron la mano y Elías
les hizo bajar al torrente de Quisón, y los degolló allí. ”
1R 18, 20yss.

n los últimos tiempos, y creo nos como la globalización económi-


que es éste un sentir compar— ca, los manidos sucesos del 11 de
tido por la mayoría de quie- septiembre o la omnipresencia casi
nes nos dedicamos a la reflexión te- asfixiante de unos mass media abso-
órica acerca del Derecho Penal, el lutamente controlados por el Poder.
poder punitívo del Estado está vi- Respecto a esto último, como se-
viendo una serie de profundas ñaló hace tiempo el recientemente
transformaciones que afectan a su fallecido E. Said: “artículos de con-
sentido y a la función que debe sumo tales como 'las noticias' —un
cumplir dentro de una sociedad ver- eufemismo para nombrar las imáge-
daderamente democrática. nes ideológicas del mundo que de-
No es éste, por supuesto, el lugar terminan la realidad política para
para hacer un repaso a todos los una amplia mayoría de la población
factores que coadyuvaron a produ- mundial— se mantienen intocadas
cir Ia actual situación por la que por las mentalidades secular y críti-
atraviesa el Derecho Penal; baste in- ca“. Efectivamente, los medios de
dicar aquí la incidencia de fenóme- comunicación están sirviendo de
147
auténticos catalizadores de las polí- leza del bien jurídico lesionado, la
ticas autoritarias que están sumien— reincidencia con que los cometen
do al conjunto del sistema penal en sus autores, así como por el hecho
una involución de imprevisibles con— de que puedan llevarse a cabo por
secuencias. Los objetivos de la pre- bandas organizadas con el único fin
sión mediática (inmigrantes, terro— de subvertir el orden constitucional,
ristas, menores infractores o pedófi— alterar gravemente la paz pública o
los, por poner cuatro casos de atemorizar con estos fines a los ha-
actualidad) distan mucho de ser ele— bitantes de una población o a los
gidos al azar, y las razones que mo- miembros de un colectivo social,
tivan su salida a escena penal —por político o profesional exigen una
expresarlo con una metáfora tea- respuesta más contundente del or—
tral— permanecen ocultas a la ciu- denamiento jurídico penal" (desta—
dadanía, la cual se limita a esperar cado mío).
en el corral la llegada del Deus ex He aquí un ejemplo claro del pro-
machina del Estado con una de sus ceder del legislador español: en la
armas predilectas: el Derecho Penal. norma se afirma que el sistema de-
Que el Estado ha iniciado una lu- mocrático se encuentra en peligro y
cha a gran escala, sin ambages y con que, por eso mismo, principios
las excusas de siempre frente a toda constitucionales básicos como el de
una serie de fenómenos es un hecho reinserción pueden quedar vacíos
que, por obvio, debe ser reiterado, de contenido. Salus rei pub/¡cae, su-
por cuanto lo obvio es ahora, en es- prema lex esto: así razona el legisla-
tos tiempos en que resaltar el aspec- dor español, obviando que si se eli—
to garantista del Derecho Penal es mina el fin dela réinserción, la pena
tachado de ideológicamente desvia— gravita sobre el vacío y el sistema
do, más necesario que nunca. entero se torna irracionalf
Una muestra: en la Exposición de Actuaciones como las que se es-
Motivos de la LO 7/2003 de 30 de tán llevando a cabo en los últimos
Junio, de Medidas de Reforma para tiempos en España, al rebufo de las
el Cumplimiento Íntegro y Efectivo autoritarias legislaciones post—11—S
de las Penas, se señala lo siguiente: de EEUU y otros Estados de nuestro
”La reforma supone ampliar el lími— entorno, colocan al Derecho Penal
te máximo de cumplimiento de pe— más allá de lo legítimo en un Estado
nas a cuarenta años, desde el respe— que se dice democrático. Si el legis-
to escrupuloso al principio de que el lador, tan aparentemente celoso en
cumplimiento de todas las penas co- su defensa de la democracia, es
rrespondientes a todos los delitos consciente o no de ello es una cues-
cometidos por el mismo autor po— tión plagada de puntos oscuros. En
dría privar en algunos supuestos de todo caso, las paradojas de la eter-
efectos a los principios constitucio— na lógica dela excepción, dela “de-
nales de cumplimiento de las penas. fensa de la democracia mediante su
Sin embargo, también es cierto que negación" no logran enmascarar la
existen determinados delitos que problemática del mimetismo de una
por su especial gravedad, la natura- legislación penal española que (y no
148
'<7€
El nuevo Elías

sólo en lo que respecta al fenómeno la seguridad de todos, razón por la


del terrorismo) se recrea observán- que se le debe gratitud.
dose en el espejo de las más reac- Y si la figura del enemigo es la
cionarias legislaciones del civilizado coartada de los recortes de los dere-
mundo occidental. chos y garantías de los ciudadanos,
Esto es palpable, por supuesto, a la coartada de la coartada viene re—
muy distintos niveles. No obstante, presentada por aquellas construc-
aquí se pretenderá tan sólo verter ciones doctrinales, como la que aquí
alguna breve reflexión sobre una se examinará, que otorgan prestan-
tendencia existente en la dogmática cia teórica a todo ello. Se trata dela
jurídico—penal de nuestros días que teoría del Derecho Penal del enemi-
contribuye de un modo decisivo a la go desarrollada por el penalista ale-
auténtica transfiguración del Dere- mán Gúnther Jakobs en un trabajo
cho Penal como medio de control titulado La ciencia del Derecho Pe-
social que estamos viviendo. nal ante las exigencias del presente.
En este sentido, parece que la an- “Un individuo que, no sólo de ma-
tigua historia de Elías que encabeza nera incidental, en su comporta-
estas páginas cobra vida de nuevo: miento (delincuencia sexual) o en su
el Estado sabe que nos encontramos ocupación profesional (delincuencia
en un momento propicio para ga- económica, delincuencia organiza-
rantizarse la lealtad de la ciudada- da y también, especialmente, tráfico
nía y preguntar claramente de qué de drogas) o, principalmente, a tra—
lado se posiciona cada uno de sus vés de su vinculación a una organi—
miembros. Pero los súbditos no con- zación (terrorismo, delincuencia or-
testarán nada por sí mismos: será ganizada, nuevamente la delincuen-
preciso que se realice una prueba de cia de drogas, o el ya antiguo
poder para que, efectivamente, se 'complot de asesinato'), es decir, en
reafirme la cohesión social y se eli- cualquier caso de manera presunta—
mine a quien, de un modo u otro, mente duradera, ha abandonado el
amenaza tal homogeneidad. Derecho, por consiguiente ya no ga—
La antigua historia tiene ahora, rantiza el mínimo de seguridad cog-
por tanto, nuevos personajes, pero nitiva del comportamiento personal
hay detrás de ellos un mecanismo y lo manifiesta a través de su con-
casi tan viejo como aquélla. La pre- ducta": he aquí el enemigo del que
sencia de un enemigo real o ficticio el penalista alemán Gúnther Jakobs
(Baal o el terrorismo internacional nos viene alertando en los últimos
post-11-S, p. ej.) es la coartada per- tiempos, eje de su fundamental dis-
fecta para, con el pretexto de com— tinción entre el Derecho Penal de los
batirlo, realizar modificaciones le- ciudadanos (Búrgerstrafrecht) y el
gislativas que redundan en una se- Derecho Penal del enemigo (Feinds-
vera limitación de los derechos de trafrecht).
los ciudadanos; pero que, a un Como puede observarse, el ene-
tiempo y paradójicamente, provo- migo se caracteriza por su falta de
can una generalizada sensación de “seguridad cognitiva“, la cual re-
que alguien muy poderoso vela por dunda, como consecuentemente ex-
149
R
N; DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

pone Jakobs, en la negación a aquél el edificio entero del Derecho Penal


dela condición de persona. En efec- —y de las ciencias sociales en gene—
to, prosigue este autor diciendo que ral— se viene abajo.
"a falta de seguridad cognitiva, una Los delincuentes sexuales, terroris-
sociedad consciente del riesgo no tas, etc., razona este autor, ponen
puede dejar de lado esta problemá- en riesgo a la sociedad y, además, al
tica; pero tampoco puede solucio- haber demostrado que están dis-
narla sólo a base de medidas poli- puestos a establecer su identidad al
ciales. Por ello, hoy en día no existe margen de lo que el Derecho impo-
ninguna alternativa visible [...]. En ne, no ofrecen la seguridad cogniti-
otras palabras [...] se trata del resta- va necesaria para poder ser conside-
blecimiento de unas condiciones del rados miembros de la comunidad y,
entorno aceptables, por medio dela por tanto, deben ser excluidos y
—sit venia verbo— neutralización “neutralizados” con toda la fuerza al
de aquellos que no ofrecen una ga- alcance del aparato estatal. Así, se-
rantía mínima cognitiva, la cual es ñala este autor, las características de
necesaria para que a efectos prácti- un Derecho Penal del enemigo son,
cos puedan ser tratados actualmen- entre otras, la anticipación de la ba-
te como personas". rrera punitiva, la ausencia de una re—
Tales afirmaciones cristalizan en el ducción de pena correspondiente a
corolario siguiente: “Todo aquel que tal anticipación, el paso de una le-
niegue su racionalidad de forma de- gislación jurídico—penal a una legis-
masiado evidente o establezca su lación de lucha contra la delincuen—
propia identidad de forma excesiva- cia y el socavamiento general de las
mente independiente de las condi— garantías procesales. "Con este len-
ciones de una comunidad jurídica ya guaje" —señala Jakobs—,"el Estado
no puede ser tratado razonablemen- no habla con sus ciudadanos, sino
te como una persona en Derecho". que amenaza a sus enemigos“.
Es ciertamente complicado reali- Así planteada la teoría del Dere-
zar una réplica a la argumentación cho Penal del enemigo, observamos
de Jakobs, dado el calibre de sus que se trata de razonar en torno a la
afirmaciones. Como puede obser- exclusión y neutralización de una
varse, este penalista argumenta en serie de personas (más bien, desde
torno a la negación de la condición esta perspectiva, de unas no-perso-
de persona a determinados sujetos nas) sobre la base de una supuesta
y, con ese postulado, poco puede falta de seguridad cognitiva.
razonarse al respecto. En efecto, Pero no es muy difícil descubrir
desde casi cualquier punto de vista, que, más allá de ese vocabulario, se
la consideración de determinados esconden otras cuestiones más pro-
sujetos como no personas, máxime saicas y el propio Jakobs se encarga
si se tiene en cuenta que estamos de allanarnos el camino, al expresar,
hablando de la intervención en la a continuación de los párrafos antes
esfera de libertad del ciudadano, transcritos, lo siguiente: "Una socie—
entra dentro de lo intolerable, de lo dad que ha perdido el respaldo tan—
que no puede mantenerse, porque to de una religión conforme al Esta-
150
El nuevo Elías K
¡
do como de la familia, y enla cual la las mayores que se puedan verter;
nacionalidad es entendida como pero, a mi juicio, nos hallamos en
una característica incidental, le con- un momento en el que es preciso
cede al individuo un gran número de desenmascarar cuánto hay de dog-
posibilidades de construir su identi- mática penal, cuánto de filosofía
dad al margen del Derecho […] a (mejor o peor entendida, más o me-
esto se añade el poder detonante de nos adulterada) y cuánto de mero
la llamada pluralidad cultural. Un posicionamiento ideológico-político
completo absurdo: o las diferentes conservador, reaccionario y con cier-
culturas son meros añadidos a una tos visos totalitarios disfrazado de
comunidad jurídica base, y entonces teoría penal. Y ello porque, en mi
se trata de multifolklore de una cul— opinión, la labor de quien dedica
tura; o bien —y ésta es la variante sus esfuerzos teóricos al estudio del
peligrosa— las diferencias forjan la Derecho Penal (0, por lo menos la
identidad de sus miembros, pero en— de quien se tome su labor Io sufi-
tonces la basejurídica común queda cientemente en serio o de un modo
degradada a mero instrumento para honesto) no se agota en la mera ela—
poder vivir los unos junto a los otros boración dogmática, sino que se ex-
y, como cualquier otro instrumento, tiende de un modo absolutamente
es abandonado cuando ya no se ne- necesario (y, por supuesto, legítima-
cesita más". mente) a la crítica de los postulados
Completada así la argumentación ideológicos que subyacen a muchas
de Jakobs, estamos ya en condicio- de las contrucciones que han surgi-
nes de hacer un balance y una críti— do en los últimos tiempos, las cuales
ca de la teoría del Derecho Penal del en muchas ocasiones se hayan pre-
enemigo. determinadas por aquéllos.
Como puede fácilmente observar- En el caso del Derecho Penal del
se tras este último fragmento, Ja— enemigo, las raíces pudren, por así
kobs parte de una visión del mundo decirlo, todo el arbolado teórico: a
(de una ideología) que predetermi- tenor de lo transcrito, los enemigos
na sus conclusiones de un modo cla- son no-personas, y ello, hablando
ro. Da la impresión que el discurso claramente, no por mostrar un "dé—
de Jakobs no es más que un intento ficit de seguridad cognitiva", sino
de elaborar una cobertura teórica porque, como paladinamente nos
para algo que no tiene justificación indica Jakobs, la decadencia del Es—
alguna, puesto que nada puede jus- tado nacional y la superación en
tificar ni actuaciones legislativas gran medida de los conceptos "fa-
como muchas de las que en estos milia" y "religión" como aglutinado-
tiempos se vienen produciendo, ni res sociales así lo permiten.
concepciones penales que niegan la Es decir: el discurso de Jakobs no
condición de persona a algunos ciu- es más que un desarrollo (que pre—
dadanos, ni recortes de garantías tende ser dogmático-penal) de una
como los que estamos viviendo. serie de postulados provenientes de
La descalificación que se acaba de una ideología marcadamente reac-
realizar es, qué duda cabe, una de cionaria, en la quela lógica dela 50-
151
ciedad globalizada no tiene cabida. mostrarse meridiano cuando trata
En efecto, lo que nos dice este pe— esta problemática —al contrario de
nalista alemán es que, al haber en- lo que le sucede en el resto de ma-
trado en una profunda crisis anti- terias penales, en las que se ha ca-
guos elementos clave de la sociedad racterizado siempre por un marcado
como “Familia", “Nación" 0 "Reli- cripticismo— insinúa esto mismo al
gión“, la homogeneidad se ha que— señalar que: “si las apariencias no
brado, la cohesión social está en pe- engañan, el número de enemigos
ligro y la convivencia amenazada. no va a descender tan pronto, sino
Esto es, que el mantenimiento del que posiblemente aumentará- toda—
statu quo de una sociedad ya am- vía más [...] Así pues, la sociedad se—
pliamente superada es el nuevo fin guirá teniendo enemigos —visibles
primordial del Derecho Penal, y o con piel de cordero— deambulan-
quien no lo acepte, el enemigo. do por ella“.
Aquí, la teoría del Derecho Penal La única conclusión posible de
del enemigo se nos aparece como el este paseo por la exposición de la
nuevo Elías que se encargará de des- teoría del Derecho Penal del enemi—
enmascarar y eliminar a los nuevos go de Jakobs es, por tanto, la si-
sacerdotes de Baal, representados, en guiente: esta construcción teórica
principio, por los delincuentes sexua- tan sólo es un reflejo de una direc-
les, los "terroristas", la delincuencia ción metodológica marcadamente
organizada, etc.; pero pronto, si mi reaccionaria que intenta otorgar
visión de la teoría no es errada, cual- apariencia de cientificidad a la cara
quier disidente político o ideológico, más descarnada del poder punitivo
esto es, cualquier persona (y el térmi- del Estado. Se tráta aquí únicamen-
no “persona” merece ser subrayado te, pues, de una persecución teórica
más que nunca) que muestre externa— de determinados sujetos que, por
mente una posición crítica frente al otra parte, ya están sometidos a una
sistema es susceptible de ser encua— persecución legal.
drada en el flexible concepto de ene- Lo que acontece ahora es que, en
migo. El Poder no va a desparovechar, vez de denunciar las violaciones cla-
ciertamente, la oportunidad que la rísimas de los derechos y libertades
actual situación le ofrece para dar un básicos de esos ciudadanos (viola—
paso más en la permanente socializa- ciones que, además, y por el típico
ción ideológica y mediática de los in- "efecto rebote" que producen'siem-
dividuos que componen la comuni- pre Ios recrudecimientos de la legis-
dad social. De este modo, la teoría del lación penal, redundan en un recor-
Derecho Penal del enemigo se nos te de las libertades de todos los ciu-
muestra no sólo como una teoría so- dadanos), parte de la doctrina se
bre el presente sino también hacia el está ocupando de ejercer de profeta
futuro, en el sentido de que queda del Estado, y —como si de un nuevo
abierto su concepto de enemigo a fu— Elías se tratase— se dedica a locali-
turas incorporaciones. zar y señalizar quién es el "enemi-
El propio Jakobs, quien, como ve— go" (quién es persona y quién no) y
mos, no tiene el menor reparo en a señalar de un modo pretendida-
152
“Wº
El nuevo Elías

mente aséptico que deben ser “neu- nal que maneja conceptos como "no-
tralizados". persona", son de una magnitud tal
En una lectura conjunta del traba- que, de producirse la misma, podría
jo de Jakobs antes citado, no veo desaparecer definitivamente el Dere-
más justificación al Derecho Penal cho Penal como racionalizador del ¡us
del enemigo que un intento por par- puniendi del Estado.
te de este autor de introducir dentro Todo lo que de sólido había en la
de un concepto unitario a individuos ciencia del Derecho Penal parece
de muy diferentes características ahora desvanecerse en el aire. Inclu—
como son el delincuente sexual, el so aquellas conquistas que, hace ya
terrorista, el disidente político o el más de dos siglos, permitieron aca—
extranjero. El intento teórico de eli- bar con el reino del terror y del arbi-
minar Ias garantías penales para es- trio y ver nacer lo que hoy se llama
tos presuntos enemigos de la socie- derecho penal; es decir, incluso
dad, a la que, supuestamente, ponen aquellos principios que constituyen
en peligro, ya es de por sí intolerable; todo un símbolo de nuestra civiliza-
pero el hecho de intentar criminali- ción y que ahora amenazan con de-
zar con una fórmula tan extraordina- rrumbarse. Poco puede hacer, cier-
riamente vaga a todo aquel que de- tamente, el teórico del Derecho Pe-
cida posicionarse en contra del siste- nal frente a todos los abusos del
ma muestra a las claras el estado Poder. Tan sólo le cabe mostrar
involutivo en el que se encuentra el cómo sobran voces ansiosas por po-
sistema penal en la actualidad. nerse del lado del más poderoso,
Por todo ello, creo que es el mo- vulnerando el auténtico sentido del
mento de denunciar no sólo los ex- Derecho Penal en cuanto que Mag-
cesos del Poder en sus diversas ma- na Charta del delincuente.
nifestaciones, sino también los in- La vieja historia, en efecto, nos
tentos de justificación de todo ello dice que Elías jamás murió y que fue
por parte de cierta doctrina penal. arrebatado a los cielos en un carro
Hablando claro y para concluir: el flamígero tirado por caballos de
sistema ha entrado en una dinámica fuego. De idéntico modo, la capaci—
de exclusión de todo aquel que dad de muchos teóricos de conten-
muestre su rechazo a convertirse en tarse con ser profetas del poderoso
un súbdito fiel del mismo. El Derecho jamás desfallece, al igual que tam-
Penal se ha convertido, en manos del poco Io hace la capacidad de repre-
nuevo Leviatán de la sociedad globa— sión del sistema, que tan sólo busca
lizada, en un torrente de Quisón al el momento propicio para mostrar-
que conducir a los nuevos sacerdotes se en toda su gloria.
de Baal, al nuevo enemigo. Malos tiempos para el Derecho
Y construcciones como la Jakobs Penal son, sin duda, aquéllos como
sirven al sistema como referente teó- éste en los que la vuelta de Elías
rico para todo ello. Las consecuencias profetiza la llegada del fuego de
de la implantación de un Derecho Pe- Yahveh sobre su único enemigo real:
nal del enemigo, de un Derecho Pe- la Libertad.

153
R
Nr. DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

la configuración del
horno ¿arar ¿omo
exnresron de los
nuevos modelos del
Derecho Penal
imperial 4… Guillermo Portilla
(Catedrático de Derecho Penal dela
Universidad dejaén)

| símbolo actual de la posmo- Nos encontramos ante flamantes


dernidad es la exclusión gene- espacios biopolíticos en los que el
ralizada y permanente de la poder administra la libertad exclu-
multitudl, de las fuerzas en movi- yéndola, al igual que en aquellos
miento, de los sectores de riesgo. tiempos en los que el poder politi-
Bien es cierto que, posiblemente, zaba la vida suprimiéndola. La es—
como advierte Giorgio Agamben, la tructura de la excepción es el sím-
excepcionalidad siempre fue la regla bolo de la política occidental real;
de la modernidad2, que el paradig- una estructura —áreas en las que
ma democrático nunca fue otro que desaparece el Derecho— en la que
el “campo de concentración". La no es la excepción la que se sustrae
creación de espacios cerrados en los a la regla sino la regla la que, sus-
que se produce el abandono del de- pendiéndose, da lugar a la excep-
recho no es ahora una excepción ción5. Si el referente de la soberanía
sino la forma habitual de establecer política hasta ahora ha sido el judío
las relaciones jurídicas. La diferencia en el campo de concentraciónº, en
es que en la posmodernidad la figu- estos momentos es el inmigrante
ra del “Muselmann"3, delos muertos ilegal el que ocupa su lugar.
en vida, del horno sacer4, es decir, la Sólo desde esta concepción de la
nuda vida insacrificable pero al que inclusión/exclusión7 es comprensi—
cualquiera puede dar la muerte, no ble el análisis del arsenal de medi-
recae sólo en los recluidos en aque- das represivas que el neoliberalismo
llos centros sino en todos los que se ha ido adoptando contra la multi-
subordinan al poder soberano. tud y que se multiplican con la ex-
154
La confinuración del horno sarpr K
7
cusa del incidente del 11 de sep- Pero, quizás, para comprender
tiembre de 20013. Indudablemente, esta situación nuevamente hay que
el atentado ha servido de pretexto recuperar a Foucault. Si asumimos
para aumentar la represión contra su observación sobre la travesía de
las fuerzas de resistencia de la iz- la sociedad disciplinaria del siglo
quierda en el mundo en nombre de XIX a la sociedad de control del XX,
la lucha contra el terrorismoº. Una podemos comprobar que el actual
muestra de ello es la proliferación modelo penal no se corresponde
de una extensa normativa de distin- exactamente con ninguno de aque-
ta índole y alcance que cercena las llos sistemas, sino que probable-
libertades cívicas, y que, bajo aquel mente se retrotraiga al arquetipo
pretexto, pretende combatir con dominante de la sociedad estricta-
toda seguridad a los movimientos mente penal de inicios del XVIII. Me—
progresistas y de liberación…. didas como las que hoy se propo-
Una legislación que responde a la nen basadas en la expulsión, la ex-
idea de traducir lo excepcional en clusión ola humillación del infractor
normal yla <<seguridad del Estado»11 se corresponden más con aquel ré-
en <<seguridad de los ciudadanos». gimen que con el dela sociedad dis—
Ahora, la situación asociada al aten- ciplinaria. Estamos, pues, asistiendo
tado ha generado el arquetipo delas a un retorno al modelo penal fun—
vigentes políticas de seguridad con— dado en los criterios de utilidad,
tra los “enemigos" de siempre (te- daño social, en la concepción de la
rroristas, inmigrantes y otros secto— ruptura del contrato social y en la
res no productivos) y una extensión reconstrucción del <<enemigo»l3.
del concepto no—persona/no-ciuda- En Beccaria o Bentham se refleja
dano a todos los que disienten polí— continuamente la idea de que la san-
ticamente del actual sistema econó- ción perfecta no era la prisión sino la
mico. La "idea“ de un Derecho Penal expulsión, el exilio, el destierro“.
y procesal-penal para enemigos es, Junto a estos métodos planteaban la
desde hace años, una realidad”. necesidad de una especie de exclu-
Tras ella se oculta su notorio carácter sión, que Foucault define no como la
ilegítimo al suprimir las garantías del deportación material, la transferen-
procedimiento en función de las ca- cia fuera del espacio social, sino el
racterísticas del autor, y subordinar aislamiento dentro del espacio mo-
los derechos individuales a exigen— ral, psicológico, público, constituido
cias de la irracionalidad funcional por la opinión15.
del Estado. En definitiva, el produc- Las reformas que nos amenazan,
to del Derecho Penal y procesal del entre ellas la española, a las que alu-
enemigo: el homo sacer, aparece ya diré más adelante, responden sólo
claramente dibujado porla situación de manera parcial a la necesidad de
delos "presos" talibanes en Guantá- "reforma psicológica y moral de las
namo, un ejemplo que manifiesta la actitudes y el comportamiento de
traslación a la realidad de la ficción los individuos“º, de disciplina de la
jurídica de las no—personas, es decir, fuerza de trabajo, para situarse, por
de los enemigos sin derechos. el contrario, en el plano de la con-
155
R
N¡:. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

tención de los sectores no producti- ta18. Este modelo —en mi opinión—


vos y su expulsión—exclusión del es- es el que se corresponde con la idea
pacio social y moral. Entiendo que del sistema disciplinario, de la cár-
este reciente formato de expul- cel—fábrica que obtiene el máximo
sión/exclusión no se corresponde plusvalor mediante el condiciona-
esencialmente con la función de la miento físico y psíquico del encerra-
institución de vínculos permanentes do-trabajador.
entre el individuo y los aparatos de Sin embargo, si hasta ahora el Es-
producción que generan un efecto tado funcionó como un Estado Provi-
de inclusión/normalización, dirigido dencia, omnipresente, la crisis del
y controlado en cada momento por modelo fordista impide que se pueda
los productores. La secuela es una continuar hablando del monopolio
tendencia al abandono de la prisión del sistema tradicional disciplinario.
como centro de normalización y la Ya Foucault advertía que en el cur-
búsqueda de la expulsión/exclusión so de los próximos años se podían
como paradigma de la desaparición presentar dos posibilidades”: "la
de los infractores del contrato social. fascista, strictu sensu, que era —de-
Esa permuta puede explicarse ya cía— lo que sucede en un país en
que durante gran parte del siglo XIX que el aparato de Estado no puede
predominó un régimen de acumula- ya asegurar el cumplimiento de sus
ción extensivo caracterizado por el funciones más que a condición a
trabajo artesanal, tendente a mante— dotarse a sí mismo de un partido
ner las técnicas productivas existen- potente, omnipresente, por encima
tes y no a su transformación“. En de las leyes y fuera del derecho, y
este régimen de acumulación exten- que hace reinar el terror al lado del
siva el plusvalor absoluto se logra Estado, en sus mallas y en el propio
mediante la explotación de la jorna— aparato del Estado“. La otra posibi-
da Iaboral. Es más, el sistema disci- lidad era la estrategia hacia la cual
plinario continuó durante el siglo nos orientamos: "una solución más
XX, pese al cambio tecnológico, la sofisticada en la que el Estado no
lucha de clases, la pérdida de control puede ya permitirse ni económica ni
del proceso de trabajo por los traba- socialmente, el lujo de ejercer un
jadores y la aparición de un nuevo poder omnipresente, puntilloso y
modo de regulación monopolista costoso. Está obligado a economi-
que facilitó el consumo de masas y zar su propio ejercicio de poder. Y
constituyó la base de un nuevo esta economía va a traducirse, jus-
modo de desarrollo llamado “fordis- tamente, en ese cambio del estilo y
ta“, el cual posibilitó la acumulación de la forma del orden interior"ºº.
intensiva (aquí, el crecimiento tiene Las nuevas formas de control que se
lugar a partir de las inversiones en corresponden con la crisis capitalis-
capital fijo, que incorporan avances ta exige, según este autor, la locali-
técnicos que contribuye al incremen- zación de un cierto número de zo-
to del consumo de masas y de la nas que podemos llamar "zonas
productividad) y un desarrollo sin vulnerables", en las que el Estado
precedentes del sistema capitalis- no quiere que suceda absolutamen-
156
"32
La configuración del homo sarpr

te nada”; en segundo lugar, dice ponen áreas sin derecho y, en se-


Foucault —interrelacionado con lo gundo lugar, no es cierto que exista
anterior— es una especie de tole— una cierta tolerancia en los contro-
rancia, en el sentido de que los con- les, puesto que, en realidad, se ha
troles cotidianos van a relajarse producido un fenómeno inverso al
puesto que, estos márgenes de tole- incrementarse el control en todas
rancia adquieren asi un carácter re— las zonas vulnerables, de todos los
gulador. Al mismo tiempo, el citado sujetos de riesgo, de todos los espa—
autor resalta que el tercer aspecto cios peligrosos“.
de este nuevo orden interior —y que La crisis estructural del modo for-
es la condición para que puedan dista de desarrollo que sufrimos hoy
funcionar esas zonas vulnerables de —de un modo de producción cen-
forma precisa e intensa, y pudiendo trado sobre los trabajadores de la
controlar desde lejos dichos márge- fábrica a otro modo de producción
nes— es un sistema de informa- que, como dice Negri, vive del dis-
ción general. Es necesario “un siste— frute social de la fuerza—trabajo—
ma de información que no tenga quizás pueda explicar el paso de
fundamentalmente como objetivo una cultura de la disciplina (el siste-
la vigilancia de cada individuo, sino, ma fordista) a un nuevo modelo de
más bien la posibilidad de inter- control (la cultura postfordista)25, al
venir en cualquier momento jus- que le resulta imposible vigilar a las
tamente allí donde haya creación fuerzas en movimiento, controlar la
o constitución de un peligro, allí movilidad territorial escurridiza26_ El
donde aparezca algo absoluta- posfordismo no es otra cosa que la
mente intolerable para el po- mutación de la economía fordista
der"”. Finalmente, el cuarto aspec- con la desaparición del sistema tay-
to para que funcione este nuevo or— lorista, la supresión de las estrate—
den interior es, en su opinión, la gias keynesianas sobre la interven-
constitución de un consenso que ción del Estado en la economía. En
pasa por toda esa serie de controles, esta nueva fase, el Estado es inca-
coerciones e incitaciones que se rea- paz de controlar la lucha de clases,
lizan a través de los mass media, la existencia de grupos emergentes
que van a hacer que el orden social de una gran capacidad de moviliza-
se autoengendre, se perpetúe y se ción en la disputa por los derechos.
autocontrole a través de sus propios Un ejemplo del camino emprendido
agentes”. del fordismo al postfordismo, de la
Como puede comprobarse los sociedad disciplinar a la del control,
nuevos modelos político-criminales aparece representado por el actual
apenas difieren de la descripción de movimiento migratorio. Se trata de
Foucault sobre el nuevo orden inte- excedentes de fuerza de trabajo al
rior, aunque puedan discutirse algu- que el Estado tiende a excluir: ex-
nas de sus previsiones. En primer lu— pulsar de los confines del marco
gar, asistimos a la implantación de productivo.
gobiernos de la derecha radical que La actual región del capital global,
cuentan con mayoría absoluta e im- dice De GIORGI, es el Imperio”, un
157
R
N¡:. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

espacio donde circulan, sujetos a un Sin duda, la afirmación de Melossi


régimen de control muy diferentes, es correcta: aún conviven ambos mo-
flujos de dinero y fuerza de trabajo. delos. Ahora bien, lo cierto es que la
Se pasa de un régimen de plena ocu— prisión cede paso, quizás no como
pación a una situación en la que la institución formal pero si como fun-
desocupación representa un hecho ción real, a la exclusión del sujeto.
estructural; el trasvase de una econo- Por ese motivo, entiendo acertada la
mía orientada a la producción a una descripción de Negri/Hardt, cuando
economía de la información; el paso afirman que el paso a la sociedad de
de la centralidad de la clase trabaja- control no significa el fin de la disci—
dora a la constitución de una fuerza plina. En realidad, como dicen estos
de trabajo global (que como veremos autores, "el ejercicio inmanente de la
asume el carácter de multitud)”. disciplina, esto es, la autodisciplina
El pasado sistema disciplinario no de los sujetos —el susurro incesante
es capaz ya de someter y normalizar de la lógica disciplinaria en el seno
a la nueva subjetividad creada por el delas subjetividades mismas— se ex—
Estado: los pobres, desocupados, tiende de manera aún más general
mendigos, emigrantes, etc.; todos en la sociedad de control"”.
ellos dan sentido al nuevo rol de la Como derivación del proceso pos—
peligrosidad”, sin que puedan em- fordista, se producen dos conse-
plearse los sistemas tradicionales de cuencias: por un lado, se generaliza
represión. Por ese motivo, se modifi— la excepcionalidad de espacios en
can Ias estrategias regresando al pa- los que se suspenden las garantías
sado de las sociedades estrictamen— penales y procesales de los enemi-
te penales que suponen la neutrali- gos que Iesionanb perturban el pac-
zación mediante Ia exclusión y to social34 y, por otro, se reprime a
expulsión3º. Así, como dice Negri, el la microcriminalidad bajo el pretexto
Estado, no sólo impide el acceso de de las políticas de seguridad35_ El
los ciudadanos a la producción, sino formato clásico de este nuevo siste—
que genera los espacios de su exclu— ma represivo, aunque lo conforma la
sión3l. Sin embargo, de otra opinión prisión, ésta, sin embargo, no apare—
es Melossi, quien matiza que en el ce en su modalidad de perfecciona-
seno de las nuevas formas de con- miento de cuerpos y almas, sino que
trol aún conviven tendencias de tipo su configuración responde mejor al
meramente neutralizantes y tenden- perfil de los centros de detención/es-
cias de tipo autoritario-resocializan— pera de inmigrantes ilegales antes
te. Siendo las segundas las más de ser expulsados. En definitiva, son
apropiadas respecto a la superación estos modernos acampos de con-
de la fase más neta de reestructura- centración» los que se convierten en
ción de la economía, en los años se- el paradigma de un sistema penal
tenta-ochenta, y de relanzamiento repleto de “musulmanes“, cuyos de—
en el período sucesivo, en el que el rechos se encuentran suspendidos y
tema de la remisión de nueva fuerza que sólo se incorporan al Derecho
de trabajo se ha impuesto en el inte- mediante la infracción del orden.
rior de esta fase de desarrollo”. Ahora bien, como acentúa Dal Lago,
158
'$7£
La configuración del homo sarpr

la suspensión de los derechos en los consecuencia, no le corresponden


espacios globales, obedece, más que las garantías jurídicas que sólo per-
a la pérdida de control de los Esta- tenecen al ciudadano que, en su re—
dos nacionales a la multiplicación de lación social, respeta el contrato. Es
esferas en las que, en lugar de las este periodo de transición entre for-
tradicionales competencias de los dismo y postfordismo el que motiva
Estados, emerge el rol de organiza- la aparición delas políticas de segu-
ciones e instancias transnacionales ridad con la retórica moralista de la
dispuestas al control y a la represión defensa dela seguridad ciudadana y
de prófugos, emigrantes, militantes el orden público”.
de los derechos civiles y de los movi- Un ejemplo de la ampliación de
mientos globales35. las nuevas técnicas de lucha contra
Lo que pretendo explicar es que los “flamantes enemigos" aparece
en este modelo postfordista se está simbolizado en las leyes más recien—
abandonando la función de la pri- tes de España, Italia, Francia, Reino
sión tradicional, consistente en la Unido y Estados Unidos.
"normalización" de seres humanos, En España hay prevista una gran
para pasar esencialmente a almace- reforma que representa una revolu-
nar a los desechos del contrato so- ción reaccionaria dela que ya se han
cial; por consiguiente, la expulsión y publicado dos leyes orgánicas: la LO
los centros de detención en espera de 30 dejulio, 7/2003 sobre las me—
de expulsión se configuran como el didas de reformas para el cumpli-
prototipo del lugar del no—derecho. miento íntegro y efectivo de las pe-
Proceso que ha sido descrito por nas; y la LO 11/2003, de 29 de sep-
Zygmunt Baumann al mostrar que tiembre, sobre las medidas en
la “guetificación es parte integral materia de seguridad ciudadana,
del mecanismo de tratamiento de violencia doméstica e integración
residuos que a veces se pone en social de los extranjeros.
marcha cuando los pobres ya no Sin embargo, no ha sido necesario
son útiles como un 'ejercito de pro— ampliar los poderes de intervención
ductores en la reserva' y se han con- policial —una constante, como ve—
vertido en consumidores fallidos y remos, en otros países—, ya que la
por tanto inútiles"37. discrecionalidad policial es absoluta
Las recientes reformas penales en desde la aprobación de la Ley sobre
Europa y Estados Unidos responden protección de la seguridad ciudada-
realmente a la quiebra del pacto so- na 1/1992 y la 4/1997, sobre las
cial fordista-keynesiano, la desapari- competencias de las Fuerzas y Cuer—
ción del Estado asistencial y la flexi- pos de seguridad del Estado en ma—
bilización del mercado laboral”. teria del uso de video-vigilancia en
Son el producto más elaborado de lugares públicos4º.
la legislación del horno sacer, del su- La citada reforma representa el
jeto que, como dice el estructural- mejor ejemplo de una legislación
funcionalismo radical, ha sido ex- que pretende la neutralización de
cluido de la organización formal o los ”enemigos" políticos y la expul-
ha optado por la autoexclusión; en sión de los sectores no productivos
159
N
x¡ DOSSIER SOBRE LA CONTRARREFORMA PENAL

del sistema. No obstante, es preciso tucional del agravante de reinciden—


reconocer que la mayoría de las me— cia, cuando el imputado haya sido
didas adoptadas van dirigidas a la condenado por tres delitos. Ade—
neutralización de la pobreza, debi— más, se aplica la reincidencia a la co-
do, sin duda, a que ya existe una le— misión de faltas, cuando ya hubiere
gislación penal y procesal penal de— sido condenado por tres faltas de
dicada a los enemigos del sistema. hurto, sustracción de vehículo de
De este modo, para los que se auto— motor o lesiones. Se procede, asi-
excluyen del pacto, se ha pensado, mismo, a la reconversión de faltas
por un lado, en un sistema despro- en delitos, cuando las lesiones, el
porcionado de sanciones, llegando a hurto, la sustracción de vehículos
exigirse un cumplimiento íntegro de sean reiterados —cuatro conductas
la condena. Por otro, se amplían los constitutivas de falta en el plazo de
plazos, ya de por si excepcionales y un año—, y cuando en caso de hur-
de difícil justificación —que pueden to 0 sustracción se supere el mínimo
llegar a amparar la práctica dela tor— exigido (cuatrocientos euros). Igual—
tura— sobre incomunicación, al mente, para este sector se incluyen
conceder al juez o tribunal la posibi- entre otras medidas: la agravación
lidad de acordar la detención o pri— del delito continuado, la supresión
sión incomunicadas hasta diez días. del arresto de fin de semana y su
Por su parte, para los excluidos sustitución por trabajos para la co-
porla propia organización formal se munidad, las multas o localizacio-
ha establecido quela duración mini- nes permanentes en faltas, la limita—
ma de la pena de prisión pase de ción de la libertad condicional, etc.
seis a tres meses, con la intención Viendo estas reformas, es difícil
de otorgar una función de preven— continuar hablando ya de las pre-
ción general a las sanciones que co— tensiones rehabilitadoras del Esta-
rresponden a los delitos de menor do; por el contrario, parece eviden-
gravedad. De la misma manera, te que el objetivo no es corregir, no
para los expulsados del sistema eco- es salvar almas, sino almacenarlas y,
nómico se establece la ampliación en todo caso, castigar ejemplarmen—
de la excepcional medida de la pri— te al infractor.
sión preventiva de un año o dos Finalmente, aparece la sanción
hasta dos años y seis meses —pena modelo del actual sistema de repre-
superior a dos años de prisión o in- sión postfordista: la expulsión. Re—
ferior si tuviese antecedentes pena— presenta el paso del sistema de con—
les por delito doloso—, cuando sea trol a la sociedad estrictamente pe-
para evitar el riesgo de que el impu- nal basada en la desaparición de
tado cometa otros hechos delictivos aquellos que no son útiles. La medi—
yla pena sea igual o superior a dos da propuesta requiere que sea soli-
años, salvo que tenga antecedentes citada por la autoridad gubernativa
de participar en bandas organizadas —consultado el juez, previa audien-
o de modo habitual. cia del Ministerio Fiscal— en un pe-
Para este sector también se prevé riodo de tres días, respecto a aque-
la aplicación automática e inconsti— llos extranjeros que se sospeche han
160
N)!
La confiourarión del homo sarer

cometido un delito o falta, castiga— ciaciones terroristas. Se interpreta


dos con una sanción inferior a seis por colaboración las conductas de
años, imposibilitando su regreso en refugiar, favorecer, ofrecer hospitali-
diez años“. dad, medios de transporte, instru-
La consecuencia de tales medidas mentos de comunicación, etc., a al-
es la adopción de la prisión como gunas de las personas que partici-
instrumento que contribuye exclusi- pan en las asociaciones indicadas en
vamente a la <<desaparición» de los los arts. 270 y 270 bis CP italiano“.
ya invisibles, de los que no partici— No obstante, en este marco ex-
pan en los procesos de producción. pansivo del concepto de terrorismo,
Este aumento progresivo e impara- cabe destacar que de la redacción
ble de la población carcelaria, delos inicial del Decreto de 18 de octubre
excluidos sociales y de los ilegales ha desaparecido, afortunadamente,
expulsados engendrará conflictos la figura de las asociaciones que,
insuperables para el Imperio. En ese con finalidad terrorista, se propon-
sentido, la resistencia de la multi- gan indirectamente causar un daño
tud, una multitud generada por el o realizar actos de violencia sobre
propio sistema en su interior será el personas o cosas. También se ha su-
inicio de su degradación. primido el artículo segundo que in—
En Italia, la Ley de 15 de diciem- troducía la agravante de terrorismo
bre de 2001, n.º 438, es consecuen- internacional.
cia, con algunas modificaciones, del Otra característica de la ley italia-
Decreto-ley de 18 de octubre de na es la creación de un espacio de
2001, n.º 37442. Engloba un con- impunidad policial que recuerda las
junto de disposiciones urgentes des— claves del Derecho Penal y procesal
tinadas a contrarrestar el terrorismo del enemigo. Parece que el principio
internacional, en las que se extiende que inspira esta reforma es el crite-
el concepto de terrorismo y se con— rio funcionalista de la seguridad del
ceden nuevas competencias ilegíti- Estado a costa de las garantías de
mas a la policía. las no-personas. Esto explica que se
En efecto, la nueva Ley ha dilata- excuse de responsabilidad a los fun-
do el concepto de terrorismo“. cionarios que, por sí o por persona
Ahora se sanciona al que promueva, interpuesta, y con la finalidad de
constituya, organice, dirija o finan- obtener pruebas en delitos terroris-
cie asociaciones que se propongan tas, reciben, sustituyen u ocultan di-
la realización de actos violentos con nero, armas, documentos, drogas, o
finalidad de terrorismo internacio- bien objetos, productos o medios
nal o de subversión del orden. En el para la comisión del delito45_ Asi—
ámbito de esta legislación, la finali- mismo, se faculta a los agentes de
dad terrorista concurre aunque los policía a utilizar documentos e iden—
actos de violencia se realicen contra tidad falsos, o entrar en contacto
un Estado extranjero o contra una con sujetos de modo discrecional,
institución o un organismo interna- informando al Ministerio Público en
cional. Asimismo, se sanciona cual- las 48 horas siguientes al inicio dela
quier acto de colaboración con aso- actividad. Además, junto a tales me—
161
M DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL
*s
didas, se permite la interceptación y cesibles al público, pudiendo llegar a
control de las comunicaciones con inmovilizar el vehículo por un tiem-
fines preventivos“. po no superior a treinta minutos”.
En Francia, la ley n.º 2001-1062 de En ese mismo capítulo se modifica el
15 de noviembre 2001, sobre seguri- código aduanero, sancionando con
dad cotidiana, no sólo ha incremen- prisión de hasta diez años la impor-
tado el poder policial de intervención tación o exportación de material pe-
en la esfera dela libertad personal de ligroso para la salud, la moralidad o
los ciudadanos“, también ha exten— la seguridad pública550. Asimismo,
dido la competencia estatal en el se concede a los oficiales y agentes
control de las comunicaciones entre de la policía judicial el acceso a tra—
presuntos terroristas“. vés de un sistema informático im-
Se trata, por lo tanto, de medidas plantado en los lugares donde se
cautelares de dudosa constitucio- desarrolla la investigación, a los do-
nalidad, pues infringen los princi— cumentos que se encuentren en otro
pios de inviolabilidad personal y de sistema informático“. Además, és-
confidencialidad de las comunica— tos pueden intervenir por vía tele-
ciones, así como el fundamental mática 0 informática los organismos
principio de presunción de inocen- públicos o personas jurídicas de ca—
cia, al apoyar tanto la restricción de rácter privad052. Por otra parte, en
la libertad como la interferencia de el Capítulo quinto sobre el trata-
la privacidad en exclusivas razones miento automatizado de informa-
de sospecha. ción, se otorga a los servicios de po—
Junto a esta reforma en materia licía nacional que puedan disponer
de orden público, también se ha pu- de ficheros de información automa-
blicado en Francia una normativa tizados y nominativos sobre cual-
sobre seguridad interior. Se trata de quier persona que pueda llegar a
la ley n.º 66 de 19 de marzo de afectar la seguridad o la tranquili-
2003, en la que se adoptan una se- dad públicas; información que pue—
rie de medidas que afectan a la le- de alcanzar a los menores —al care—
gislación penal y a la procesal-pe- cer de un límite de edad—, siempre
nal. En el titulo primero dela misma que existan indicios graves de su
se define la seguridad interior como participación en hechos delictivos53_
un derecho fundamental y una de Tales datos pueden ser transmitidos
las condiciones del ejercicio de las li- a otros organismos de cooperación
bertades individuales y colectivas. internacional en materia de policía
En el Capítulo cuarto, relativo a la judicial o bien a otros servicios de
investigación judicial, otorga a los policía extranjeros que presenten
agentes de la policía judicial la posi— garantías equivalentes a las del de—
bilidad de establecer controles de recho interno francés“.
identidad, con o sin el consenti- En el capítulo sexto que contiene
miento del titular del derecho, del disposiciones referentes a los medios
conductor de cualquier vehículo que policiales, técnicos y científicos, se
se encuentre circulando o estaciona- faculta a los oficiales de la policía ju-
do en la vía pública o en lugares ac- dicial para exigir un examen médico
162
La confiouración del homo sanºr K
r
y una toma de sangre a cualquier Las mismas penas recaen en quien
persona sobre la que existan indicios solicite, acepte u obtenga a cambio
graves de haber cometido una viola— de una remuneración o promesa de
ción, una agresión sexual o un aten- remuneración, las relaciones sexua—
tado sexual, al fin de comprobar si les de parte de una persona que se
podía transmitir una enfermedad se- dedique a la prostitución, también
xual55. Junto a estas medidas se ad— cuando presente una particular vul-
junta la creación de un fichero nacio- nerabilidad o una deficiencia física o
nal de huellas genéticas sobre perso- psíquica57.
nas condenadas por los delitos de En ese mismo capítulo se sancio-
naturaleza sexual, contra la humani- na ala pena de seis meses de prisión
dad, atentados a la vida, violencias y 3.750 euros la ocupación de terre-
voluntarias, barbaries, amenazas de nos que pertenezcan a una comuni-
atentados a las personas, contra la li- dad u a otro propietario sin justifi-
bertad, trata de seres humanos, pro- carla autorización del titular del de-
xenetismo, explotación de la mendi— recho”.
cidad, extorsiones, atentados contra Finalmente, se sanciona el ejerci-
bienes, actos de terrorismo, depósi- cio dela mendicidad con la pena de
tos de armas o munición de guerra, seis meses de prisión y 3.750 euros
etc., siempre bajo control de un ma- de multa, cuando en reunión y de
gistrado. A la par, este fichero tam- modo agresivo, o bajo la amenaza
bién alcanza a aquellas personas so- de un animal peligroso, se solicite,
bre las que recaigan indicios graves en la vía pública, fondos, valores o
de haber cometido determinados de- bienes”.
litos, e incluso, los oficiales de la Po- En el Reino Unido, la Anti-terro-
Iicía Judicial pueden igualmente pro- rism, Crime and Security Bill, de di-
ceder sobre cualquiera respecto al ciembre de 2001, ha “perfecciona-
que existan razones plausibles para do" la Ley antiterrorista de 200050.
sospechar que ha cometido un deli— Contiene disposiciones para comba—
to. El supuesto del rechazo del no tir la financiación terrorista“, medi-
condenado a someterse a las prue— das para el control de las comunica—
bas biológicas se castiga con la pena cione552, y concede competencias
de un año de prisión más una multa para expulsar a sospechosos de te—
de 15.000 euros; si se trata de un rrorismo en el Reino Unido, para de-
condenado, entonces la sanción es tener a los que están pendientes de
de dos años y 30.000 eur0556. la deportación y para denegar el de-
Por otro lado, entre las disposicio- recho de asilo53. Además, habilita la
nes relativas a la tranquilidad y se- revisión de los procesos de extradi-
guridad públicas, se sanciona el ción y se prevé el aumento delas pe-
ejercicio de la prostitución, al con- nas para aquellos que lleven a cabo
denarse el hecho de proceder públi- comportamientos jocosos en rela-
camente a incitar a las relaciones se- ción con las amenazas terroristas.
xuales a cambio de remuneración o Al igual que sucede con la italiana
de promesa de remuneración con y francesa, la legislación británica
dos meses de prisión y 3.750 euros. en esta materia gravita en torno a
163
R
Y. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

un concepto de terrorismo interna— ción Europea de Derechos del Hom-


cional ampliado y la concesión de bre aduciendo razones de excepcio—
poderes desorbitados a la policía; nalidad7º.
junto a ello, utiliza especialmente el En Estados Unidos, el 26 de octu-
concepto de terrorismo centrado en bre de 2001 se firma la Patriot Act
el inmigrante ilegal. Al amparo de (HR. 3162) que regula una serie de
este vasto contexto, se permite la medidas antiterroristas cuya vigen-
detención de todo el que, según el cia se prevé durante cuatro años.
Secretario de Estado, sea un peligro Sin duda, constituye el mejor ejem-
para la seguridad nacional y sospe- plo de un Derecho para enemigos.
choso de ser un terrorista interna- La ley consagra un poder absoluto
cional“. Se considera terrorista in- del Estado en su lucha contra la in-
ternacional al que, como miembro migración y la disidencia política,
de un grupo terrorista internacio- sin respetar las garantías penales y
nal, ha participado en la comisión, procesales“. Como respuesta fiel a
preparación o instigación de actos este modelo, postula un concepto
de terrorismo internacional, o bien de terrorismo72 que comprende
tiene vinculación con una persona igualmente el terrorismo "domésti—
perteneciente a dicho grupo“. co", asignándose al Fiscal General y
Respecto a los inmigrantes sospe- a la Secretaría del Estado la compe—
chosos, la ley indica que pueden ser tencia para denunciar tanto a gru-
detenidos hasta que finalice el pro- pos políticos —domésticos— como
ceso, la súplica y la expulsión“. In- a organizaciones terroristas, así
cluso, por si eso fuera poco, el sos— como para deportar a cualquier no-
pechoso puede ser detenido indefi- ciudadano que pertenezca a ellas.
nidamente57_ Del mismo modo, se habilita la prác—
El asilo del sospechoso también tica de detenciones indefinidas de
depende del secretario de Estado“. no—ciudadanos-no-terroristas que
Si bien existe el derecho de apela- carecen de visado, si no pueden ser
ción, el acusado y su abogado no deportados —porque son apátri—
podrán ver el contenido total de la das— a su país de origen”.
causa ni regirá el principio de pre- En relación con los sospechosos
sunción de inocencia. Además, se de terrorismo, es lícita la detención
prevé la retención durante diez años de un extranjero durante siete días,
de las huellas digitales tomadas en sin necesidad de presentar cargos
determinados casos de asilo y de in- contra él, siempre que exista una
migración para prevenir casos de mínima sospecha de su vinculación
uso de identidades múltiples en terrorista“. El Fiscal General podrá
quien perpetre actos de terrorismo decretar tal detención en el procedi-
u otros crímenes gravesºº. Por otro miento de expulsión o en casos de
lado, se excluyen las demandas de delitos cometidos por extranjeros75.
asilo cuando la Secretaría de Estado En consecuencia, la protección de
considere que puede favorecer el in- la seguridad del Estado quela nueva
terés público. Finalmente, el art. 30 ley pretende garantizar acaba defini-
ha derogado el art. 5 de la Conven— tivamente con los derechos de los
164
“<%
La configuración del homo sarr=r

inmigrantes, puesto que, en algunos ye la realización de cualquier acto


casos, se permite la detención inde- violento, va a permitir considerar
finida de los no-ciudadanos con el como terroristas a los miembros de
pretexto de un incierto riesgo para la asociaciones antiglobalización y a
seguridad del país76. Por otro lado, todos los que proporcionan ayuda a
no pasa desapercibida la inclusión esos grupos78.
del denominado ”terrorismo domés- A la legislación comentada, se ha
tico"77 porque ha relajado el círculo unido recientemente, a través de
de los enemigos. En otras palabras, una orden del presidente de EEUU
el objetivo de esta ley ya no es ex— de 13 de noviembre de 2001, la ins—
clusivamente el inmigrante, sino tauración de tribunales militares se—
cualquier ciudadano que actúe polí- cretos79. Estos tribunales se ocupan
ticamente -—se manifieste como su- de juzgar a no—ciudadanos acusados
jeto político. Piénsese que el terroris- de terrorismo“, pudiendo despla-
mo doméstico se define como cual— zarse al lugar del no-nacional para
quier actividad que suponga un juzgarl081. No sólo la citada orden
peligro para la vida, constitutiva de es contraria a la quinta y sexta en-
una infracción de la ley penal de mienda, que requieren la existencia
EEUU, dirigida a intimidar o coaccio- de un tribunal civil y un juicio rápi-
nar a la población civil, a influir en la do y público dirigido por un tribunal
política del Gobierno con intimida- imparcial32; también ha sido apro-
ción o coerción, o esté relacionada bada sin observar la imprescindible
con conductas o actos de destruc- autorización del Congreso y la de-
ción masiva, asesinatos o secuestros. claración formal de guerra“, ni
Sin duda, la existencia de tan vaga adaptarse a los principios interna-
definición de terrorismo, que inclu- cionales“.

165
H DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL
Xr.
NOTAS: términos militares, en el sentido de mos-
trar Ia defensa de la seguridad nacional
1. Empleo el término "multitud" en la desvinculada del control de cualquier ins-
acepción de Negri/Hardt; se trata de una titución. Cfr. Polizia globale. Verona,
categoría posmoderna que alude a las 2003, pp. 81-85. En sintonía con esta crí-
nuevas fuerzas del movimiento migrato- tica, Rolf Góssner sostiene que desde el
rio, los grupos antiglobalización o los atentado se ha producido en Alemania
nuevos sectores no productivos, etc. En un debate histórico sobre la seguridad,
opinión de estos autores se trata de las elaborándose dos paquetes de medidas
subjetividades productivas y creativas de antiterroristas y el desarrollo de diferen-
la globalización que aprendieron a nave— tes órganos de seguridad. Indica Góssner
gar en estos gigantescos mares. Cfr. Im— que ya en los años noventa se adoptaron
perio, Barcelona, 2002, p. 70. los controles en los espacios públicos
2. Giorgio Agamben: Homo sacer. El (observación a través de vídeos) asi como
poder soberano yla nuda vida, Valencia, las medidas internas para "limpiar" con
1998, pp. 211 y ss. medios preventivos y represivos a pertur-
3. Relata Primo Levi que con ese térmi- badores y marginados. En definitiva, si
no los veteranos del campo de concentra— antes eran los comunistas, la extrema iz-
ción designaban a los débiles, los ineptos, quierda y los terroristas las amenazas del
los destinados a la selección. Cfr. Si esto es sistema, ahora, con el proceso de moder-
un hombre, Barcelona, 2001, p. 151. nización, las nuevas amenazas potencia-
4. Giorgio Agamben, op. cit., p. 18. les son las organizaciones criminales y los
5. Ibídem, p. 31. extranjeros así como la criminalidad juve—
6. Cfr. Hannah Arendt, Los orígenes nil, lo que conlleva medidas legales de
del totalitarismo. Imperialismo, Madrid, carácter radical y de un poder legal abso-
2002, pp. 402-438. luto. Cfr. "'Innere Sicherheit' im perma-
7. En la Modernidad tardía se ha ge— nenten Ausnahmezustand". en Kriminali—
nerado, sugiere Young, tanto una inse- tát und Sicherheit, Berlín, 2002, p. 27.
guridad económica como antológica, 9. Cfr. R. Herrera, "El mundo después
cuanto una discontinuidad de las vidas de Manhattan”, en El Viejo Topo, n.º 159,
personales y sociales, a la vez que una pp. 41 —42. El 11 de septiembre como coa-
tendencia excluyente respecto del des- rtada para la represión es también el ar-
viado. Interpreta acertadamente Young gumento de Anne Lútkes, al considerar
que en la sociedad fordista "se ha cons- que, tras el atentado, el concepto de se—
truido un binario de inclusión/exclusión, guridad interior se ha convertido en una
en el cual el excluido vive dentro de un simple coyuntura y la política de seguri-
área especialmente segregada como dad ha reclamado su propio significado
moral y socialmente inconfundible. La interno, en el que la seguridad interior es
inclusión y la exclusión se producen si— históricamente un concepto legal de lu—
multáneamente; esto significa que se cha y, sin embargo, una salida política del
trata de una sociedad bulimica, en la Estado de Derecho. Cfr. "Zur Einleitung:
cual la masiva inclusión cultural está Sicherheit — (K) ein Thema fúr die Kom—
acompañada por una exclusión sistemá- munalpolitik fúr ein Konzept der Inneren
ticamente estructural" (p. XXXI). Cfr. Sicherheit mit Augenma3", en Kriminali—
lock Young, La sociedad excluyente. Ex— tát und Sicherheit, Gerald Munier (Coor-
clusión social, delito y diferencia en la dinador), Berlín, 2002, p. 11
Modernidad tardía, Madrid, 2003. 10. En opinión de |. Monal, se aplicará
8. Como ha indicado Dal Lago, el 11 de indistintamente al terrorismo y a los mo-
septiembre ha reorientado la filosofía de vimientos antiimperialistas. Cfr. "El mun-
la seguridad global que plantea un con— do después de Manhattan", en El Viejo
flicto generalizado sobre la seguridad en Topo, n.º 159, p. 43.

166
'Wº
La confinurarión del horno sarpr

11. Con acierto advierte Kunz que la ria", en New Left Review, n.º 21, julio—
política criminal de la segunda moderni- agosto 2003, pp. 5 y ss.
dad post-industrial se define como polí— 18. Cfr. NLR, n.º 21, pp. 14 y ss.
tica de la seguridad interior, como una 19. Cfr. M. Foucault, Saber y verdad.
nueva lógica de seguridad, ya que se tra— Nuevo orden interior y control social,
taría de una estrategia de exclusión de Madrid, 1991, p.164.
aquellas personas consideradas peligro- 20. Cfr. Foucault, op. cit., p.165.
sas. Cfr. Karl-Ludwig Kunz, Búrgerfrei— 21. Se trata de espacios en los que el
heit und Sicherheit. Perspektiven von Derecho se ausenta ya que el Estado pre-
Strafrechtstheorie und Krimina/po/itik, tende lograr un control absoluto dela si-
Berna, 2000, p. 9. tuación. Supuestos como la inmigración
12. Cfr. Guillermo Portilla, ”La legisla- ilegal, el terrorismo, el tráfico de drogas,
ción de lucha contra las no-personas: re- etc., serían ejemplos adecuados a esta
presión legal del 'enemigo' tras el aten- realidad.
tado del 11 de septiembre de 2001", 22. Cfr. Foucault, op. cit., p. 166. La
Mientras tanto, n.º 83, 2002. negrita empleada en el texto es mía. Este
13. Como expone Foucault, esta idea sistema de información general que hoy
aparece expresada con mucha claridad aparece representado, entre otros, por el
en todos estos teóricos y también en sistema de videovigilancia implantado
Rousseau, quien afirma que el criminal en la mayoría de los países de Europa.
es considerado como un enemigo inter- Un control exclusivo de la microdelin—
no. Asimismo, considera Foucault que la cuencia, ya que generalmente las gran-
idea del criminal como enemigo interno, des defraudaciones o las estafas inmobi—
como aquel individuo que rompe el pac- liarias no se efectúan en las calles.
to que teóricamente había establecido 23. Cfr. Ibídem, p. 166.
con la sociedad, es una definición nueva 24. Un planteamiento similar sustenta
y capital en la historia de la teoría del cri- Loic Wacquant al considerar que la idea
men y la penalidad. Si el crimen es un de Foucault de ramificación y descentra-
daño social y el criminal un enemigo de lización del control social ha quedado
la sociedad, si el crimen es una pertur- desfasada frente a una revolución que ha
bación para la sociedad y nada tiene que sacudido la penalidad en todos sus as-
ver con la ley divina, natural, religiosa, pectos, regresando la cárcel a un papel
etc., es claro quela ley no puede prescri- del que parecía que se alejaba, redise-
bir una venganza, la redención de un pe- ñando la geografía urbana y, en particu-
cado. Cfr. M. Foucault, La verdad y las lar, aquellas zonas de contención en la
formas jurídicas, Barcelona, 1980, p. 93. que se acumulan las fracciones peligro—
14. Al defender una concepción con- sas del subproletariado postindustrial (p.
tractual de la vida social, Beccaria consi— 7). Piensa este autor que la extensión de
deraba que aquellos que no respetaban la vigilancia electrónica en los espacios
las condiciones impuestas por el contrato públicos, la represión creciente de la pe-
debían ser excluidos de la sociedad: des— queña delincuencia de calle, de conduc—
terrados. Cfr. M. Foucault, De los delitos y tas pre-criminales o de incivilidad urba—
delas penas, Barcelona, 1983, p. 96. na, la difusión global de la tolerancia
15. Esla idea delos castigos al nivel de cero en estilo neoyorquino (ya sea retóri-
escándalo, la verguenza, la humillación ca o práctica) que determina el incre-
de quien cometió la infracción. Cfr. M. mento constante dela población carcela-
Foucault, La verdad y las formas jurídi— ria, supone realmente el tratamiento pu-
cas, p. 94 nitivo reservado a los usufructuarios de
16. Cfr. Foucault, op. cit., p.97. la asistencia social: en todos los países
17. Robert Brenner y Mark Glick, "La capitalistas dominantes, los gobiernos
Escuela de la regulación: teoría e histo- han estado regulando los desórdenes ge-

167
R
Y. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

nerados porla desregulación económica, gar, los drogodependientes, la criminali-


por la extensión del trabajo asalariado dad organizada, los mendigos, los ex—
precario y la correspondiente reducción tranjeros, los asilados, los refugiados y
de los mecanismos de protección social cualquier otro sector de población que
contra los riesgos de la existencia. Cfr. tenga la consideración de enemigo.
Simbiosis mortal. Neoliberalismo y políti— Piensa este autor que la moderna socie—
ca pena/, Verona, 2002, p. 8 dad del riesgo ha marcado el camino de
25. Del mismo modo, concluye Melos- la disciplina represiva —para el control
si, que esto es cierto si consideramos, de social preventivo— de una sociedad en
un lado, que es exceso de fuerza de tra- permanente estado de excepcionalidad,
bajo respecto a los estratos sociales ex- en la que existe un control ideal del ser-
pulsados de la producción, es al tiempo vicio secreto, control preventivo y vigi-
un exceso de fuerza productiva respecto lancia, al que se encuentran sometidos
al tipo de fuerza de trabajo que siempre todos los ciudadanos. Los nuevos instru—
es tenida por central al proceso produc- mentos de control social-represión-pre-
tivo en una época en la que parece haber vención no residen en la prisión sino en
encontrado la profecía, de una fuerza de los sistemas de videovigilancia, en la ex-
trabajo que va a desarrollar la función de pulsión y en la prohibición de perma-
general intel/ect del Capital. Cfr. Discus- nencia, ya que se actúa especialmente
sione a mo di prefazione: carcere, post— contra las drogas y la mendicidad. Para
fordísmo e ciclo di produzione del/a "ca- este autor la lucha policial es el síntoma
naglia", en ¡! governo del/'eccedenza, de una miseria estatal. Cfr. "'lnnere Si—
Verona, 2002, p. 14. cherheit' im permanenten Ausnahme-
26. Se trata, ni más ni menos, como zustand“, en Kriminalitát und Sicherheit,
advierte Negri, de la organización del Berlín, 2002, pp. 32-39.
sistema penal y carcelario, o bien de su 30. De Giorgi habla de un segundo
nueva configuración, basada en una ver- gran internamiento: de un internamiento
dad elemental: el Estado no debe reedu- urbano que tiene la forma de gueto, de
car, ni corregir, ni tanto menos salvar al- un internamiento penal que tiene la for-
mas, sino sólo castigar ejemplarmente o, ma dela cárcel y de un internamiento glo-
mejor, típicamente (el tipo es estadística- bal que asume la forma de innumerables
mente identificable) toda infracción del zonas de espera en el que están disemina-
orden. Es probable que el Estado deba dos los confines internos del Imperio. Cfr.
crear alarma social para transformarlo ll governo… p. 30. Interpreta este autor
en consenso respecto a las instituciones que el nuevo internamiento se configura
y prevenir un'eventual disenso politico. como una tentativa de definir un espacio
Cfr. Prólogo de Toni Negri del libro de De de contención, de trazar un perímetro
Giorgi, Zero Tolleranza. Strategie e prati— material o inmaterial en torno a poblacio-
che del/a societá di control/o, Roma, nes que resultan excedentes, sea a nivel
2000, p. 9. global o metropolitano, en confrontación
27. De Giorgi ha realizado una pro— con el sistema de producción vigente con
puesta muy interesante sobre las nuevas la finalidad de separar las clases peligro-
formas de control, con la que coincido sas de la clase trabajadora, p. 31.
parcialmente, empleando los conceptos 31. Cfr. Toni Negri, en De Giorgi, Zero
claves del nuevo modelo imperial mane- Tolleranza. Strategie e pratiche del/a so-
jados por Negri/Hardt: imperio, multi- cietá di control/o, Roma, 2000, pp. 9 y ss.
tud, resi'stencias, entre otros. Cfr. Il go- 32. Cfr. Melossi, Discussione..., p. 19.
verno del/'eccedenza, Verona, 2002. 33. Cfr. Negri/Hardt, Imperio, p. 302.
28. Cfr. De Giorgi, op. cit., pp. 74-75. El cambio, según ellos, consiste en que,
29. Considera Góssner que los nuevos junto con el derrumbe de las institucio-
enemigos se presentan como los sin ho- nes, Ios dispositivos disciplinarios han

168
"$?
La configuración del homo sanºr

llegado a ser menos limitados y acota- guridad, en el que se pierde la confianza


dos espacialmente en el campo social. en la seguridad del derecho. El terror eli-
Las disciplinas carcelaria, de la escuela, mina al Estado y delimita el derecho de li-
de la fábrica, etc., se entretejen en una bertad ya que las nuevas medidas antite-
producción híbrida de subjetividad. Así, rroristas pugnan contra el principio cons-
piensan que el paso a la sociedad de titucional de la proporcionalidad. Citando
control implica la producción de una a la liberal Burkhard Hirsch, Góssner se
subjetividad que no fija una identidad, pregunta si ante la visión de estas refor-
sino que es híbrida y maleable que pue- mas nos encontramos en un Estado de
de no presuponer la identidad de un pre- derecho democrático, puesto que está
so o de un paciente mental o de un obre- ausente el respeto de la dignidad y priva-
ro, pero puede estar constituida simultá— cidad de los ciudadanos y aparece como
neamente por todas las lógicas de tales un fantasma totalitario. Cfr. “'Innere Si—
identidades. Ese individuo puede serlo cherheit' im permanenten Ausnahmezus—
todo al mismo tiempo. No le correspon— tand", p. 31. Sobre el avance de la crimi-
de ninguna identidad y le corresponden nología de la in-tolerancia y las políticas
todas. Al igual quela soberanía imperial de tolerancia cero, véase el trabajo de
las subjetividades de la sociedad de con- Iñaki Rivera Beiras, "Los posibles escena-
trol tienen constituciones mixtas. Cfr. Im- rios dela penalidad", en Panóptíco, nº 5,
perio, p. 304. 2003, pp. 150-156.
34. Como denuncia Ulrich Bósebeck, 36. A estos nuevos "lugares“ Dal Lago
la prohibición en Alemania de los vaga— los denomina “las zonas de sombra del
bundos, los mendigos o los alcohólicos Estado de derecho", que tienden a mul-
atenta contra los principios constitucio- tiplicarse en la fase de globalización. En
nales de personalidad (art. 2, I de la efecto, los centros de detención para
Gg.), igualdad (art. 3, I), legalidad (art. clandestinos o irregulares hacen que los
20, III), así como el de determinación derechos individuales de los extranjeros
(art. 103, II). Ya en la reforma del Dere- se suspendan hasta que se logra la ex-
cho Penal de 1974 se encontraba la pe- pulsión. Cfr. Polizia globe/e..., pp. 77-78.
nalización del vagabundo y de los sin te- Según este autor, se provocan dos ma—
cho. Cfr. parágrafos 361 n.º 3 y 361 nº croscópicos efectos, por un lado, la mul—
8. Se trata, según este autor, de disposi- tiplicidad de las situaciones en las que
ciones "comunitarias" que destruyen no existen garantías jurídicas para los in-
principios básicos del derecho, convir- dividuos y, por otro, el poder extraordi-
tiéndose en una política simbólica con- nario de organizaciones privadas de legi—
tra las minorías para conseguir conven- timidad democrática. Cfr. ¡bid., p. 79.
cer a los ciudadanos de que disponen de 37. Cfr. Comunidad. En busca de se-
seguridad subjetiva. “Stadtluft macht guridad en un mundo hostil, Madrid,
frei —und unsicher", en Kriminalitát und 2003, p. 142. Considera Z. Baumann que
Sicherheit, Berlín, 2002, pp. 128-132. la guetificación es paralela a y comple-
35. Parece, dice Rolf Góssner, que nos menta la criminalización de la pobreza
encontramos en un estado excepcional ya que existe un continuo intercambio
en el que las competencias de los órga- de población entre los guetos y las cár-
nos de seguridad actúan en la línea fron- celes. Afirma este autor que las cárceles
teriza entre la policía y los servicios secre- son guetos con muros y los guetos son
tos, mientras cambian los grupos de ries— cárceles sin muros, pero que en ambos
go, todos los aspectos de la vida casos se les inmoviliza, se les cortan las
aparecen como ilegales y la presunción vías de escape y se les mantiene firme-
de inocencia se observa como algo inac- mente en su lugar (p. 143).
cesible. Estos, según este autor, son los 38. L. Wacquant describe cómo en las
elementos de un Estado autoritario de se- tres últimas décadas en los Estados Uni-

169
¿
xr. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

dos se ha producido un acontecimiento das las personas; políticas dirigidas a la


socio-histórico único: la sustitución de la atención de los débiles y excluidos; políti-
regulación de la pobreza desde el bien- cas locales participativas; la política crimi-
estar social por su tratamiento a través nal como elemento subsidiario de política
del aparato de justicia penal. Ahora el integral de seguridad de los derechos, po—
sistema penal está destinado a los inde— lítica pública de seguridad; derecho penal
seables, los inútiles, los abandonados y mínimo, etc. (p. 27). Sobre la aplicación
todos aquellos que se niegan a someter- de los procedimientos de tolerancia cero
se al nuevo orden económico y étnico de EEUU en Alemania, cfr. Hubery Wim-
construido sobre las ruinas del difunto ber, "Ein Weg entsteht dadurch, das man
pacto fordista—keyseniano. Cfr. Prólogo ¡hn geht", en Krimina/itát und Sicherheit,
del libro El Encarcelamiento de América, Berlín, 2002, pp. 81-94. Por otra parte,
Barcelona, 2002, p. 9. Oliver Brúchert und Heinz Steinert se plan—
39. Como dice A. Baratta, la seguridad tean la cuestión de si este modelo ameri-
es una necesidad humana y una función cano puede trasladarse a otros países de
general del sistema jurídico; pero en am- Europa, llegando a la conclusión de quela
bos casos no tiene un contenido propio; recepción de la tolerancia cero es técnica-
respecto al sistema de necesidades es una mente inviable pues exigiría una reforma
necesidad secundaria; respecto al sistema absoluta de la estructura policial europea
de derechos es un derecho secundario ("Aufráumen wie in New York"— Das
respecto a otras necesidades básicas rea- Ende einer illusion", en Kriminalitát und
les que podemos llamar primarias. Cfr. Sicherheit, Berlín, 2002, pp. 95 y ss.
"Diritto alla sicurezza o sicurezza dei dirit— 40. Ley que pretende justificarse desde
to", en “La Bilancia e la Misura”, Demo- la necesidad de prevención de actos de—
cracia e diritto, n.º 5, 2001, p. 19. Dice lictivos, la protección de las personas y la
este autor que es falso que exista un de- conservación y custodia de bienes que se
recho fundamental a la seguridad, sino encuentren en situación de peligro, y es-
que es más correcto hablar de seguridad pecíalmente cuando las actuaciones per—
de los derechos que de derecho a los de— seguidas suceden en espacios abiertos al
rechos. Los mecanismos discriminatorios público. Según la exposición de motivos
en la administración de los derechos fun- de la propia ley, las instalaciones fijas de
damentales a favor delos ciudadanos res- videocámaras, el uso de videocámaras
petables a costa de los excluidos (emi- móviles necesita la autorización del órga—
grantes, de raza diferente, sin trabajo, sin no designado al efecto, salvo en situacio-
escuelas, toxicodependientes, jóvenes nes de urgencia o en las que sea imposi-
marginados) condicionan una reducción ble obtener a tiempo la autorización en
de la seguridad jurídica que, al mismo las cuales se procederá a comunicar su
tiempo, alimenta el sentimiento de inse— uso ala autoridad policial y a la Comisión.
guridad de la opinión pública y se retroa- Por otra parte, las imágenes y sonidos ob-
limenta (p. 21). Lo contrario, el derecho a tenidos por cualquiera de las maneras
la seguridad, genera la sociedad del con- previstas serán destruidos en el plazo de
trol y el derecho de exclusión condiciona- un mes desde su captación, salvo que se
do por los efectos perversos de la globali- relacionen con infracciones penales o ad—
zación neoliberal de la economía. Piensa ministrativas graves o muy graves en ma-
Baratta que es preciso deconstruir el sen- teria de seguridad pública, con una inves—
timiento de inseguridad y la demanda de tigación policial en curso o con un proce-
sanciones en la opinión pública, y recons- dimiento judicial abierto. En Alemania se
truirlos como comunicación política de ha permitido el uso de las videocámaras
base. Por ello, frente a políticas de exclu- sólo en lugares públicos no en las zonas
sión hay que afrontar la inclusión social, la privadas. A pesar de esa limitación, un
seguridad de todos a los derechos de to- sector de la doctrina alemana critica su

170
La configuración del homo <arpr K
Y
uso por afectar al derecho a la imagen y cuatro años, que se agravará si la asisten-
al derecho a la autodeterminación como cia se presta de modo continuado.
integrante del derecho de personalidad 45. Cfr. el artículo 4.
del art. 2 Abs. I, art. 1 Abs. I dela GG. Cfr. 46. Así, el art. 226 del Código Procesal
Wilhelm Achelphler und Holger Niehaus, Penal italiano permite la interceptación
Videoúberwachung — Das Wachsame de las comunicaciones o de conversacio-
Auge des Gesetzes, p. 135. Los citados nes durante cuarenta días como máxi-
autores discuten si realmente tales me- mo, aunque prorrogables.
dios han tenido efectos preventivos gene- 47. El Capítulo cuarto contiene las dis-
rales ya que no han logrado disminuir la posiciones relativas a la seguridad y a la
delincuencia, llegando a la conclusión de circulación vial. El art. 17 autoriza la in-
que el sistema de videovigilancia en calles movilización, retirada de la circulación,
y lugares públicos sólo cumplen un papel el cacheo, la venta o destrucción de los
simbólico, que no llegará a tener ningún vehículos que se encuentren en las vías
efecto en el ámbito de la prevención pe- abiertas a la circulación pública. Con
nal y, además, es incomprensible desde el arreglo al art. 78.22, los agentes de la
punto de vista de la verdadera función Ii- policía judicial están facultados para
beral delos espacios públicos. Como con- practicar, en los lugares y por el periodo
trapartida, se Iesionará el derecho a la de tiempo que el juez determine, los
personalidad de un gran número de ciu- controles de identidad previstos en el
dadanos y sirve a la exclusión de los gru— art. 78.2, así como el cacheo de perso-
pos marginales en el interior dela ciudad. nas en lugares públicos (art. 23) y el con-
Cfr. op. cit., 138—144. trol de los vehículos que circulan, o que
41. Se permite la expulsión del extran— están estacionados en la vía pública o en
jero no residente legalmente en España lugares de acceso público. Por otro lado,
que haya cometido una falta. La expul— se permite acceder al registro de vehícu-
sión se realizará en tres días y, mientras los sin permiso judicial, incluso existe la
este hecho se produce, se le internará en posibilidad de inspeccionar el vehículo
un centro de detención. sin la presencia del propietario (art. 23).
42. Incorpora al Código Penal italiano Del mismo modo, se autoriza a la policía
una serie de preceptos y modifica otros. y a los servicios privados de seguridad a
Por otra parte, la Ley de 14 de diciembre realizar cacheos en aeropuertos, puer-
de 2001, n.º 432, convierte en Ley el De- tos, recintos deportivos, grandes alma-
creto-Ley de 12 de octubre de 2001, nº cenes y otros lugares públicos (art. 25
370. En la misma se prevén medidas ur- que reforma el artículo 282.8 del Código
gentes para reprimir y contrarrestar la fi- procesal penal).
nanciación del terrorismo internacional. 48. El Capítulo quinto hace referencia
El artículo segundo sanciona los actos de a las disposiciones que refuerzan la Iu-
violación de las disposiciones referentes cha contra el terrorismo. Conforme al
a la exportación de bienes, servicios y ca- mismo, se puede hacer uso delas nuevas
pitales, contenidas en los reglamentos tecnologías de información y de comuni—
adoptados por el Consejo de la Unión cación durante un periodo de tiempo
Europea. que se eleva hasta el 31 de diciembre de
43. Con tal propósito, ha reformado el 2003. En caso de que existan sospechas
artículo 270 bis CP italiano. Los compor- de terrorismo u otros delitos muy gra-
tamientos descritos en este precepto se ves, se concede la facultad a la autoridad
sancionan con penas de siete a quince policial para la conservación delos datos
años de prisión. que poseen los proveedores de Internet
44. El art. 270 castiga cualquier acto de mediante la puesta a disposición de la
ayuda a los integrantes de una asociación autoridad de los códigos necesarios para
terrorista con la pena de prisión de uno a descifrar las comunicaciones (art. 29). A

171
R
N:
DO€€IER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

su vez, el Título quinto prevé la utiliza- 54. Cfr. artículo 24.


ción de medios de telecomunicaciones 55. Cfr. artículo 28 que modifica el ar-
de acuerdo con el procedimiento; en tículo 706-47 del Código Procesal-Penal.
este lugar, el art. 706.71 indica que, 56. Cfr. artículo 29 que modifica los
cuando lo exija la instrucción, el interro- artículos 706-54, 706-55, 706-56 del Có—
gatorio puede realizarse en diversos digo Procesal-Penal.
puntos del territorio de la República por 57. Cfr. artículo 50 que modifica el ar-
cualquier medio de telecomunicación, tículo 225-10—1 del Código Penal.
garantizando la confidencialidad de la 58. Cfr. artículo 53 que modifica el ar—
transmisión. Por otro lado, estas figuras tículo 322-4 del Código Penal.
conviven con la <<Garde á vue», que obe- 59. Cfr. artículo 65 que modifica el ar-
dece a la necesidad policial de realizar tículo 312-12-1, creando una sección 2
las diligencias preparatorias al margen bis.
del control judicial y permite la deten- 60. El Reino Unido ha pactado con
ción de sospechosos de haber participa- EEUU para definir el terrorismo y esta-
do en acciones de narcotráfico, terroris- blecer una autorización europea de de-
mo, etc., durante un periodo de vein- tención. En esta línea, la Propuesta de
ticuatro horas, prorrogable otras Decisión del Consejo sobre el manda-
veinticuatro horas mediante decisión es- miento de detención europeo y los pro-
crita del Procurador de la República, con cedimientos de entrega entre Estados
la finalidad de obtener la suficiente miembros, guiada por el principio de re-
información y sin necesidad de que exis- conocimiento recíproco, ha suprimido la
tan previamente indicios de criminali- validez de los criterios de no entrega del
dad. nacional, dela doble incriminación y del
49. Cfr. artículo 13 que modifica el 78- de especialidad; además, introduce la
2-4 del Código Procesal-Penal. valoración de la reinserción del culpable
50. Cfr. artículo 14 que modifica el (que puede ser la cobertura para no en-
414 del Código de Aduanas. tregar a los nacionales si se demuestra
51. Cfr. artículo 17 que modifica el ar- que el propio país es el idóneo para la re-
tículo 57 del Código Procesal—Penal. habilitación) y concede a -los Estados
52. Cfr. artículo 18 que modifica el ar- miembros la posibilidad de elaborar una
tículo 60 del Código Procesal-Penal. lista negativa en la que se recogen aque-
53. Cfr. artículo 21. Del mismo modo, llas figuras por las que jamás se entrega-
el artículo 22 modifica el artículo 39 de rá al sujeto, al ser contrarias a los princi-
la ley relativa a la informática, ficheros y pios fundamentales de ese Estado.
las libertades, ampliando su aplicación a 61. Las Secciones 1 y 2 dela Parte pri-
los supuestos en los que se altere la se- mera se dedican al control y paralización
guridad del Estado, la defensa o la segu- de las cuentas de los presuntos terroris-
ridad pública. En España, el ministro del tas. La policía puede requerir a las enti-
Interior, Ángel Acebes, ha propuesto la dades financieras la información necesa-
necesidad de potenciar las bases policia— ria, siempre que existan bases razona—
les de tratamiento automatizado de da- bles para la sospecha. Se permite
tos mediante la anotación de individuos congelar las cuentas bancarias y bienes
de riesgo potencial, aunque estén cance- siempre que se sospeche el uso inmedia-
lados sus antecedentes en España o fue- to de las mismas.
ra de ella. Se mantendría pues la infor- 62. La Sección cuarta de la Parte ter—
mación relativa a delitos de naturaleza cera permite el acceso policial a la infor-
sexual o de sospechosos de delitos muy mación delas agencias implicadas en in-
graves, aunque no exista una investiga- vestigaciones y procedimientos penales.
ción en curso. Ver El País, 2 de octubre En definitiva, se permite el control delos
de 2003, p.18. archivos que se encuentren en cualquier

172
La configuración de] homo sarer K
¡
departamento gubernamental. La policía aplicación dela ley. El secretario de Esta-
no necesita una base razonable para do puede revocarlas y prorrogarlas por el
pensar que el archivo de que se trate espacio de un año.
contiene elementos que demuestran el 70. La derogación de este precepto se
delito, sino que basta la simple sospe- realiza en virtud del art. 15 de la citada
cha. Tampoco se requiere autorización Convención, que permite esto en caso
judicial. Asimismo, la Parte undécima de guerra o de otro tipo de amenazas.
posibilita el control de los datos de las 71. Concede al FBI un amplio poder de
comunicaciones. Cfr. Secciones 102-107. acceso a expedientes personales (educa—
63. Junto a estas medidas que serán tivos, médicos, financieros, mentales),
analizadas más adelante, la Parte décima sin control judicial. Cfr. el Título V, Sec-
otorga una serie de competencias a la ción 507. Ha incrementado la competen-
policía que posibilitan, por ejemplo, el cia del gobierno sobre las “investigacio-
ocultamiento de la identidad mediante nes secretas». Cfr. Título IX, Secciones
el uso de disfraces, la obtención de hue— 901-905. Otorga a las Fuerzas de Seguri-
llas dactilares o fotografías de los sospe- dad el control, sin orden judicial, de to-
chosos. Cfr. Secciones 89-95. dos los teléfonos 0 cuentas de Internet
64. Cfr. art. 21.1, Parte cuarta. vinculadas a un supuesto terrorista. Por
65. El grupo terrorista internacional otra parte, se exige a las empresas de In-
ha de estar sometido al control o in- ternet que permitan el acceso a los co-
fluencia de personas fuera del Reino Uni- rreos electrónicos del sospechoso. Con la
do. De los arts. 21-23 se desprenden los nueva ley, un agente puede conseguir el
rasgos del sospechoso de terrorismo in- control de la comunicación electrónica
ternacional. Cfr. art. 21.2, y 21.3, Parte mediante una orden judicial cuando ar-
cuarta. gumente que es relevante para una in-
66. El art. 22 permite la deportación y vestigación criminal. Cfr. sobre la regula-
expulsión de los sospechosos de terroris- ción delos sistemas de control de las co-
mo internacional. municaciones electrónicas referentes a
67. Cfr. art. 23. En supuestos en los los sospechosos de terrorismo, el Título
que el extranjero no pueda ser deporta- II, Secciones 201-225. Finalmente, se ele-
do porque corra el riesgo de ser tortura— van las sanciones por actividades terro-
do 0 asesinado en su país de origen, las ristas —cfr. Título VIII, Sección 810—, y
detenciones pueden llegar a ser indefini- se controla el blanqueo de dinero —cfr.
das. La detención está sujeta a la revisión Título III, Secciones 301-303, Subtítulo
de la Comisión Especial de Apelación de A, Secciones 311-330—. Sobre el secreto
Inmigración. bancario, cfr. Secciones 351-366.
68. El 27 de noviembre de 2001, la Cá- La ACLU (American Civil Liberties
mara de los Lores modificó el texto. A Union) ha criticado acertadamente casi
propósito de la detención indefinida de todos los apartados de la presente ley. Se
estos sospechosos, la Cámara ha defen- ha manifestado contraria a las modifica-
dido la necesidad de Iimitarla a un pe- ciones introducidas en el control telefó-
riodo de tiempo y podría cesar el día 10 nico y en la vigilancia por las autoridades
de noviembre de 2006. También ha criti- de Internet. También ha cuestionado la
cado los excesivos poderes que se otor- desmesurada capacidad del Gobierno
gan a la policía y a los agentes de adua— para llevar a cabo investigaciones secre-
nas, ya que pueden aplicarse tanto en la tas o el acceso del FBI a los expedientes,
lucha antiterrorista como en el control sin tener que demostrar evidencia de un
de la seguridad cotidiana. delito. Por otro lado, si se tiene en cuen-
69. El art. 28 establece que la dura- ta que el FBI ya contaba con una amplia
ción de las Secciones 21-23 expira al fi- competencia para supervisar el teléfono
nal del periodo de 15 meses desde la y comunicaciones de Internet, entonces

173
)
Nr. DOSSIER SOBRE LA (ONTRARREFORMA PENAL

se puede interpretar que la mayoría de 212 a) 3 b se citan las organizaciones ex—


los cambios efectuados no afectan a la tranjeras y domésticas.
vigilancia de presuntos terroristas, sino, 75. Cfr. Sección 236. A. a).
por el contrario, a todos los ciudadanos 76. La Ley Patriótica confiere una nue-
de los Estados Unidos. va competencia de detención al Fiscal
72. Es terrorista aquel que, individual— General del Estado basada en la sospe-
mente o como miembro de una organi- cha de amenazas a la seguridad nacio—
zación, ha cometido o incitado a come- nal. En concreto, regula la detención de
ter, en determinadas circunstancias, un los no—ciudadanos que esperan la depor—
homicidio o lesiones graves. Asimismo, tación, basada, simplemente, en la certi-
se considera terrorista a quien ha prepa- ficación del Fiscal General del Estado de
rado el plan terrorista, proporcionado la que tiene “argumentos razonables para
información o solicitado fondos para la creer que» el no-ciudadano pone en pe-
actividad terrorista, o bien pudo conocer ligro la seguridad nacional. Los no-ciu-
quela solicitud se dirigía a esa actividad. dadanos que no posean el visado po—
También se incluye en ese concepto a drían ser detenidos indefinidamente si
quien ha proporcionado casa, transpor- son apátridas, o si su país de origen re-
te, comunicaciones, fondos, transferen- chaza aceptarlos. Cfr., en sentido crítico,
cias de fondos u otro material, docu- las manifestaciones de la ACLU.
mentación falsa, explosivos, etc., para la 77. Sección 23331, Títqu XVIII.
comisión de tales actividades. Al mismo 78. Además, la Ley Patriótica nortea-
tiempo, se atribuye al secretario de Esta- mericana prevé el pago de recompensas
do la función de inscribir en el Registro —Título V, Sección 502— para el que
Federal a las organizaciones terroristas, proporcione cualquier información so-
que estarán integradas siempre por dos bre sospechosos de terrorismo.
o más individuos que realizan las activi- 79. Orden que ha dado lugar a una
dades descritas; también designará las proposición de Ley de 12 de diciembre
organizaciones terroristas internaciona- de 2001, sobre creáción de tribunales
les que estén insertas en la Sección 219, militares.
así como señalará los grupos políticos, 80. La Sección segunda conceptúa al
sociales o similares que realicen activida— terrorista como “cualquier individuo que
des terroristas contra EEUU (cfr. Sección no sea ciudadano de Estados Unidos
411). siempre que haya razones para creer que
73. La Sección 412 se refiere a los in- sea miembro o haya sido miembro de la
migrantes responsables de un ilícito o de organización Al Qaeda, que haya partici-
una violación de la legislación sobre in- pado o ayudado o conspirado en la co-
migración. Evidentemente en estos ca- misión de actos de terrorismo interna-
sos no existe ningún móvil terrorista. Un cional, 0 en la preparación de los mis-
extranjero que no ha sido expulsado mos, que hayan causado, amenazado
puede ser detenido por un periodo de con causar o que hayan tenido como
seis meses, y el Fiscal General puede re- meta causar, lesionar o afectar negativa-
visar la situación cada seis meses. mente a Estados Unidos, sus ciudada-
74. Finalmente, la última versión de la nos, su seguridad nacional, su política
legislación antiterrorista permite la de- exterior o su economía, o que haya al-
tención y deportación de no-ciudada- bergado a sabiendas a uno o más indivi-
nos, cuando se pruebe que han asistido duos que hayan realizado alguna de esas
a actividades de grupos terroristas y actividades".
siempre que ese grupo esté catalogado La Constitución otorga al Presidente,
como organización terrorista. Así, en las como Comandante en Jefe, las compe-
Secciones 219 y 411, se hace referencia tencias en periodo militar sin la exigen-
a estas organizaciones extranjeras y en la cia de control del Congreso. El art. 106

174
“<?
La configuración del horno sarr=r

del Código Penal militar faculta al Presi- 82. La ACLU manifiesta que la Admi-
dente para intervenir contra cualquier nistración se ha propuesto sustituir la
persona que actúe como espía y sea juz- justicia ordinaria por tribunales milita-
gado por un consejo de guerra general o res. La Orden no sólo limita los derechos
por una comisión militar. Por otro lado, del terrorista sospechoso —Ios tribuna-
el art. 104 autoriza el Consejo de Guerra les se emplearán contra los que sean de-
contra todo el que ayude, o lo intente, al finidos como terroristas por el Fiscal Ge-
enemigo con munición, fuentes, dinero, neral—, sino que los elimina. En suma, la
o de otro modo… Estas disposiciones se ACLU considera que la creación de los
aplicaron en 1942 por el Tribunal Supre- tribunales militares representa la proba—
mo —caso Quirin, 317 U.S.1 1942—, ble abrogación del sistema civil de liber-
cuando el presidente Roosevelt juzgó, a tades, ya que sólo pueden dirigirse con-
través de tribunales militares, a sabotea- tra un grupo de personas definidas y no
dores alemanes que habían llegado en contra los 20 millones de inmigrantes
un submarino a las costas de EEUU. En- (no-ciudadanos, y por ende, sujetos sos-
tre ellos se encontraba —curioso parale- pechosos) que habitan en EEUU.
lismo histórico— un ciudadano de EEUU. 83. Cfr. art. |, 8. La Constitución reco—
81. Como características singulares de noce la creación, en determinadas cir-
estos tribunales podemos contemplar las cunstancias, de los tribunales militares
siguientes. En ellos es el propio Presi- contra enemigos beligerantes en tiempo
dente quien decide quién debe ser juz- de guerra, pero, de ningún modo, puede
gado militarmente; se admite la deten- justificar el concepto de terrorista que
ción indefinida de los no-ciudadanos aparece en la Ley Patriótica.
acusados de terrorismo; éstos no tienen 84. En 1992, Estados Unidos ratificó la
derecho de apelación pero sí pueden dis- Convención internacional de derechos ci—
poner de letrado. Se trata, en definitiva, viles y políticos que protege la seguridad
de un juicio secreto carente del principio personal frente a la detención arbitraria
de presunción de inocencia, en el que los —art.9— y el derecho a un juicio justo —
autos son secretos y del que sólo se in- art.14—. Sin embargo, el inciso f de la
formará del nombre y la condena final Sección primera de la Orden establece
(que puede llegar a ser la de muerte). que las comisiones militares no se regirán
Para la condena basta con el voto de dos por la aplicación de los principios legales
tercios de los miembros del tribunal. Cfr. y del sistema de pruebas del proceso pe-
inciso A de la Sección tercera. nal general de los tribunales federales.

175
Huye, hombre, huye (3& edición)
Xosé Tarrio
El caso de Xosé Tarrío destaca por tratarse de un
preso que no se ha resignado a sufrir y observar
impasible las numerosas injusticias de las que se
nutre la vida de la prisión, lo que le ha costado la
acumulación de numerosas condenas y ser objeto
de una represión constante y obsesiva bajo la eti-
queta de FIES (Ficheros Internos de Especial
Seguimiento). Huye, hombre, Huye es mucho más
que un diario de prisión, es una denúncia descar-
nada, día a día, de los acontecimientos que han
marcado la realidad de la prisión, durante el
gobierno PSOE, destapando el engaño a voces de
la cárcel como institución supuestamente reso-
cializadora.
VIRUS Panóptico,
355 págs., 13 €

EL E'NCARCELAMIENTO DE
AMERICA
Una visión desde el interior de la industria
penitenciaria de EE.UU.
Daniel Burton-Rose, Dan Pens y Paul Wright
Este libro es una selección de artículos publicados en
Prison Legal News, una revista independiente editada
íntegramente por personas presas, en los que se reco-
gen de manera temática investigaciones y denuncias
¿_
Í".
en torno a los cambios en la legislación penal, la
manipulación mediática, la censura, las torturas y
diferentes formas de humillación en las prisiones, la
¿¡¡
º”— Ml.—LM”.qu
explotación laboral, el negocio de las prisiones pri-
vadas, el racismo, los nuevos modelos de aislamien-
to para acabar con actitudes rebeldes y también, '-'"º """ºº" desd…
mdusnio Pºnilen<¡º ¡º'eríoc ¿. ¡º
por supuesto, las formas de resistencia y luchas de "'º de EE.UU,
las personas presas.
VIRUS Crónica,
376 págs., 15 €

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i0qé reformas!
llarguamrgntn. torturas
y aislamiento
Impresiones sobre la Ley Orgánica General Peniten-
ciaria de 26 de septiembre de 1979
Óm Centre de Documentació Arran
G. I.. Treviño

I 13 de febrero de 1978, el Di- nómicas delos delitos contra la pro-


rector General de Institucio- piedad.
nes Penitenciarias (DGIP), Je- 2.- Reforma del concepto de mul-
sús M.a Haddad, dirigía una carta a tirreincidencia.
la Asociación de Familiares y Amigos 3.- Modificación de la Ley de Peli-
de los Presos en Madrid. La carta grosidad Social.
justificaba, entre otras medidas, el 4.— Actualización del sistema de
traslado de más de 200 presos des— clasificación de presos y libertad
de Madrid, Burgos, Valencia y Bar- condicional.
celona al Penal del Dueso en Canta- 5.- Reforma en profundidad del
bria: "los graves acontecimientos Código Penal.
ocurridos en los últimos días en al-
gunos establecimientos penitencia— Mientras la zanahoria llega a la
ri05 de nuestro país, han obligado a AFAPE, Jesús Haddad firma una cir-
adoptar una serie de medidas de ca- cular para todas la prisiones del Es-
rácter transitorio, con el fin […] de tado restringiendo las comunicacio—
obtener la paz [...] créame que soy nes de los presos, del correo, pa-
el primero en lamentar el tener que quetes, y autorizando el uso de la
implantar este tipo de medidas". La fuerza contra presos “rebeldes y no
carta no deja de ser una burda ma— colaboradores". En un mes mueren
niobra que busca la complicidad de dos presos en Zaragoza, Agustín
familiares y sociedad, mientras nie- Rueda cae en Madrid y el mismo fir-
ga la posibilidad de indultos totales mante de la Carta es abatido a tiros
o parciales, invitando a la AFAPE a en una calle de Madrid dentro del
colaborar en la redacción de un bo- coche oficial.
rrador de la nueva Ley General Peni- Esta imagen es la que se vivirá du—
tenciaria, sobre la base de 5 puntos: rante la Transición yla que hemos he-
1.- Reforma de las cuantías eco- redado en cuanto a planificación del
179
J
xr. LA LUCHA EN LA CÁRCEL - ESPANA ANOS 70

Régimen Penitenciario, eso que eufe- condición de mantener su indepen-


místicamente se ha llamado “trata- dencia y con el compromiso de que el
miento individualizado de internos". Ministerio de Justicia respaldaría sus
Presos y carceleros verán recompen- iniciativas". El nuevo director general
sada, de manera desigual, su particu- inicia una febril marcha reformadora:
lar carrera por la reforma de las pri- — Compromiso de continuar .la
siones. El 26 de septiembre de 1979, elaboración dela nueva Ley Peniten—
con la aprobación de la Ley General ciaria.
Penitenciaria en el Congreso de los — Circulares a prisiones desautori—
Diputados, se da el golpe de gracia zando Ia censura de prensa y libros
hacia el establecimiento de un nuevo y una liberalización en la vida inter-
Régimen Penitenciario en todo el Es- na delos centros que en algunos ca-
tado, donde priman la seguridad, el sos desembocará en la cogestión de
cangrejo, las esposas, el aislamiento y las cárceles. Anulación de sanciones
"los medios disuasorios preventivos" derivadas de huelgas y plantes y res—
—léase tortura— frente a la persona tauración de permisos de salida.
—Iéase presos y presas—. — Tímida depuración en la Direc-
Tras la muerte de Haddad, con las ción General de Prisiones y sustitu-
cárceles quemadas o destruidas, vis- ción de las Cruzadas Evangélicas en
to el fracaso de la política represora y las cárceles de mujeres'.
el incremento de fugas, motines y — Visita a los centros conflictivos
protestas, se hace necesario abrir una del Estado como el Penal del Dueso,
válvula de escape en las prisiones. La la cárcel Modelo 0 Carabanchel, y
UCD, presionada desde la calle por pacto con dirigentes de COPEL de un
familiares, asociaciones de vecinos y período de tranquilidad a cambio de
de apoyo a presos, con la prensa ha- una revisión de sus reivindicaciones.
ciéndose eco de motines, torturas y
autolesiones masivas, es urgida por La batería de medidas liberales se
el Congreso a adoptar medidas con- acompaña con una amplia difusión
cretas que permitan sacar a los pre— de su figura visitando cárceles y legi-
sos y sus reivindicaciones de las pri— timando su política de apertura y diá-
meras portadas de revistas y teledia- logo en los medios de comunicación.
rios. Se busca un hombre de Cadena Ser, programa ((Hora 25»,
consenso, que con amplios poderes jueves 29 de marzo de 1978:
guíe a buen puerto el conflicto carce— Pregunta: Señor García Valdés,
lario y prosiga la elaboración de la ¿está usted dispuesto a hacer des-
Ley Penitenciaria. El elegido es Carlos aparecer la tortura en la prisiones
García Valdés, abogado, de 32 años: españolas?
"Inhabilitado para ejercer su profe— Respuesta: Norma/mente, toda
sión de abogado y expulsado de la persona que pasa por un penal, co—
Universidad durante el franquismo, noce las celdas de castigo. Es algo
vinculado editorialmente a Cuader— obligado y casi puede decirse que el
nos para el Diálogo, García Valdés preso es materia/mente conducido a
asumía la Dirección General de Insti- ellas, antes o después 2.
tuciones Penitenciarias con la doble Está claro. Apenas unos días des-
180
¡Qué reformas? - K
3/
pués de su toma de posesión, nada titstas de reforma y mejora de la
ha cambiado. Los presos no iban so— vida en la cárcel, la prensa se hace
los al cadalso, estaba justificado amplio eco de su postura y la DGIP
arrastrarlos y apalearlos si se resis— los utiliza para reivindicar el éxito y
tían y para eso están los funciona— apoyo en la aplicación dela reforma.
rios, que si bien no se hallaban en Dentro de la COPEL no siempre
peligro de extinción, debian ser pro— fue la asamblea de presos por gale-
tegidos. 25 años después, podemos rías o cárceles quien tomó las deci-
preguntarnos: ¿de qué?, cuando los siones. El prestigio personal o la
muertos fueron presos, y presos fuerte cohesión entre un grupo de
fueron los torturados. En tres años presos fue en muchos casos el deto-
de movilizaciones y motines se con- nante en la toma de posturas. La re-
tabiliza una única agresión con le- presión draconiana a que fueron 50-
siones leves a un funcionario... metidos los más de 200 trasladados
García Valdés no consiguió apaci- al penal del Dueso, imposible de re-
guar las cárceles, pero sí dividir a los flejar con todo su horror en estas
presos y evidenciar a la sociedad páginas, crean el caldo dela división
que eran la falta de Ley y Orden y no y la necesidad perentoria de salir de
de los más elementales derechos los una situación insotenible. Las con-
que devolverían la paz. Sus medios, cesiones de García Valdés son vistas
"separar, aislar y dividir", nada que como un éxito y celebradas como
Maquiavelo no hubiera dicho. tales. Nada se había escrito o firma-
Los presos y los miembros COPEL do, sino que todo fue fiado ala bue—
en particular recluidos en el Dueso na voluntad de las partes.
apoyan, tras meses de aislamiento, a La falta de unidad se manifiesta
García Valdés: "En la actualidad, tras inmediatamente: en la cárcel Mode-
la designación del nuevo Director lo de Valencia una asamblea de pre-
General de prisiones y después de sos, según un testimonio personal,
cambiar impresiones con él en su vi- decide aceptar la cogestión de la
sita al Dueso, consideramos necesa— cárcel con los funcionarios. Se esta-
rio darle un voto de confianza a la blece un férreo control en la prisión,
espera de gue cumpla todas las pro- se ayuda a los carceleros y se media
_rr_1esas que nos hizo. va que en orin- en conflictos, dando la sensación de
cipio nos parece un hombre hones- tranquilidad. Al mismo tiempo, se
to. con buena voluntad de hacer inicia en una de las galerías un pro-
profundos cambios en el sistema pe— yecto comunitario de fuga: un túnel
nitenciario del estado, ello no impi- apoyado desde el exterior. Cuando
de que este tiempo de espera lo de- el túnel es descubierto y se frustran
diquemos para reorganizarnos". las expectativas de "autoamnistia",
Igual o parecido comunicado emite deciden amotinarse. El saldo, 8 re-
el comité de COPEL en la Modelo. Al clusos y un policía heridos. La pri-
tiempo que diversas voces desauto- sión es parcialmente quemada. Los
rizan plantes, autolesiones o moti- amotinados denuncian cualquier
nes, algunos miembros de la COPEL pacto con la Dirección General que
establecen unos objetivos inmedia- no sea para pedir la amnstía.
181
J
“G LA LUCHA EN LA CÁRCEL… ESPANA ANOS 70

El nuevo director general es acosa- las celdas de aislamiento.


do por funcionarios de prisiones por En cuatro meses, de marzo a junio
permitir las fugas, propiciar motines de 1978, la credibilidad delas refor-
y la violencia entre los presos. La co- mas se viene abajo entre los presos,
gestión en las prisiones es puesta en aunque nada es lo mismo. En la ca-
la picota y COPEL acusada de contro— lle hay una progresiva desmoviliza—
lar con métodos violentos y mafiosos ción, acuciada por la crisis económi—
las prisiones. Se producen motines ca, el alza de precios y el paro. En lo
instigados por los propios carceleros político se reforma y endurece la ley
y denunciados como desmadre y fal— antiterrorista. La excepción es la nor—
ta de control por la aplicación de la ma. Entre 1975 y 1979 se dan dos
política del nuevo DGIP... Las espadas amnistias parciales y se rebaja las
van a permanecer muy poco tiempo condenas a los presos comunes (in-
en alto, la tímida reforma cae a pe- dulto parcial por el caso Matesa y
dazos, a pesar del informe presenta- aplicación delas cuantías). La amnis-
do en el Senado español, donde se tía quería unir ”las dos Españas", en-
califica la situación de las cárceles de terrar el pasado, pero sólo de algu—
tercermundista y de falta de los más nos, el de los fascistas que durante
elementales derechos humanos... 40 años desfilaron por sus gobier-
García Valdés anula en junio la co— nos, torturaron y asesinaron a miles
gestión en el Penal de Ocaña, niega de detenidos o cerraron las puertas
ante la prensa la posibilidad de cual- de sus cárceles. Los presos comunes
quier indulto y aboga por la reforma no merecieron el perdón nunca.
del Código Penal como vía para solu- En abril de 1979, Carlos Garcia
cionar la situación de los presos. La Valdés sufre un atentado y decide
Modelo se desmarca de la tregua con abandonar la DGIP tras conseguir
la DGIP delclarándose una huelga de los votos que aprueban la nueva Ley
basuras. En la 3.& Galería de Caraban- Penitenciaria, introductora de un
chel la basura acumulada será sacada nuevo modelo de cárcel en España.
a finales de septiembre por excavado- En 1979 se abre la temible prisión
ras, más de 100 metros de largo y 3 de Herrera dela Mancha, donde son
de alto marcan una visión irrepetible recluidos 70 presos para su extermi—
de degradación y dejadez. Por las no— no y resocialización. Los funciona-
ches y dentro de una galeria habitada rios encargados de su custodia son
por unos 800-1.000 hombres, se expertos carceleros acusados, entre
abren bares y salas de fiesta ilumina— otros, de participar en las torturas y
das por neones y hogueras. Las con- asesinato de Agustín Rueda. Herrera
diciones sanitarias son lamentables. de la Mancha fue la máxima expre-
Los funcionarios de prisiones denun- sión delo que en cuanto a prisiones
cian la situación, fuerzas antidistur— se esperaba de la nueva reforma:
bios se hacen cargo de la cárcel. aislamiento y torturas.
En septiembre del 1978 a través La reforma es auspiciada por insig-
de circulares, Carlos García Valdés, nes demócratas de la talla de un Ma—
ordena reestablecer la censura de nuel Fraga en la oposición, Martin Vi—
prensa y correspondencia. Se abren lla en Interior o Landelino Lavilla en
182
"l?!
¡Oué refonmas?

Justicia. Los dos primeros aún Ilega- Fichero de Internos de Especial Segui-
rán a recibir el próximo mes de di- miento. La política de módulos de ais-
ciembre el caluroso aplauso del pue— lamiento, que debia tomarse como
blo en el 25 aniversario de la Consti- una medida excepcional y limitada en
tución. La reforma penitenciaria, si el tiempo, se ha transformado en ma-
formalmente recoge una gran ampli- nos de los diferentes gobiernos en
tud de derechos para los presos (in- arma para justificar políticas de ex—
troduce y formaliza el derecho a per- cepcionalidad y desigualdad en el tra-
misos penintenciarios, el acceso a la tamiento penitenciario de presos y
libertad condiconal o la tutela del presas. Si bien dicho artículo defiende
juez de vigilancia penitenciaria), in- el caracter excepcional, en el tiempo,
troduce puntos de fuga en su aplica- de las medidas de aislamiento, la rea-
ción, que hoy con más de 50.000 pre— lidad ha permitido la permanencia en
sos en las cárceles, rebajan cuando dichos módulos de algunos presos
no anulan cualquier mérito que en su durante más de 10 años.
día se le hubiera querido anotar. En 1979, García Valdés cerraba
El hacinamiento es ley, las muer- toda posibilidad de dar un estatuto
tes en "extrañas“ circunstancias, las especial a los presos políticos por
torturas, la falta de higiene, el SIDA, cuanto una "democracia no los te—
Ias politoxicomanías no tratadas, la nía". Venticinco años despúes se ha
tuberculosis, las hepatitis B o C, las modificado dicho concepto. No hay
enfermedades mentales, las mujeres oficialmente presos políticos, pero sí
presas con su hijos, las políticas de situaciones excepcionales de trata-
dispersión penitenciaria. miento penitenciario aplicadas a de-
La reforma, sin parangón en la Eu- terminados grupos de presos, es de-
ropa de la época —según manifesta— cir, la ley no es igual para todos. La
ron algunos de sus “prestigiosos" clasificación en FIES, las políticas de
hacedores—, consagra una figura en dispersión penitenciaria y la reciente
su Artículo 10 de siniestras conse— creación en la Audiencia Nacional de
cuencias. En este artículo se define el un nuevo juzgado de vigilancia peni—
régimen de aislamiento como de ne- tenciaria para los llamados delitos de
cesario para reinsertar a los presos terrorismo, no hace más que enalte-
más desocializados, exigiendo una cer Ia creación de leyes y situaciones
mayor vigilancia y control, así como especiales para presos especiales.
la limitación de sus actividades en La supuesta igualdad ante la ley
común con los demás internos; "o cae a ojos de cualquier mirada críti-
sea, que para reinsertar la los presos ca. Los grupos de apoyo a presos y
teóricamente más —desocializados presas son perseguidos e ilegaliza-
sólo sele ocurre a la ley la aplicación dos como hace 25 años se persiguió
de medidas de aislamiento social a los grupos de apoyo a COPEL.
que, como és lógico, tienden a po- Ha habido cambios, claro, que
tenciar la desozialización"3. protegen la impunidad de carcele-
Las políticas de aislamiento consa— ros, Ia desidia de los equipos de tra-
gradas en la Ley General Penitenciaria tamiento y la rutina como políticas
han permitido la creación del FIES el de reinserción.
183
J
X:. LA LUCHA EN LA CÁRCEL - ESPANA Años 70
Ha habido cambios, claro, y la amparando la práctica de malos tra—
misma ley penitenciaria aprobada tos y torturas en el 2003.
con las alharacas del consenso sigue

NOTAS: 3. Patricia Moreno Arraras, J. A. Zamo-


1. Panóptico, n.º 2, <<Dossier Mujer y ro Durán: "Las políticas de aislamiento
Cárcel». penitenciario", Barcelona, 1999.
2. Thomas Lower, Los castigos en las
cárceles, ed. Vergi, Barcelona.

La vida en el régimen carcelario FIES es


una continua agresión, todo está concebi-
do para hacerte daño, para recordaí1e que
no eres nada, que tu cuerpo no te pertene-
ce, que les pertenece, que no tienes volun—
tad para hacer nada, te van a castigar
Cárcel y exactamente lo mismo por matar a una
Derechos Humanºs persona que por robar un paquete de sal.
El extracto de este dramático relato fue
hecho en enero de 2000 en Hikaateneo por
Patxi Zamoro, quien poco después moría
tra haber pasado 18 años en la cárcel, 13
años en Régimen de FIES y 3 años en ais—
lamiento.

Mana lose
Carrera"N
Cárcel y Derechos Humanos
Nekane San Mi quel.
Heraduo B
NOM- Rober10 Mº'º“º||¿¿r|.1.
5…u.siºiº'- pedro
Nekane San Miguel. María José Carreras,
Pa¡,._11ar'nOro Mike!
Heraclio Barona, Roberto Moreno, Patxi
Zamora, Mikel Sarasketa, Pedro Ibarra
Gakoa liburuak
80 págs., 9 €

184
h “ —=* = & ¡“Nin—x“
..
/
Una mirada al sistema carcelario mexicano K
:K
Una mir_ada al sistema bre las fuentes primarias y secunda-
carcelario mex¡cano rias de información. Asimismo se ad—
Martín Gabriel Barrón Cruz vierte ello en la humildad con la que
INACIPE, realiza su "mirada" sobre determi-
México DF, 2002, 211 págs. nados aspectos del sistema carcela-
rio. No quiere decir ello que nuestro
El libro en comentario resulta de autor no tenga importantes tesis de
trascendental importancia para el fondo, sino que las mismas no serán
marco geográfico donde fue publi- un impedimento para hacerse pre-
cado. Pero también tiene utilidad, guntas que vayan más allá, o en con-
como modelo, para los futuros estu- tra, de las mismas. Esas preguntas,
dios a realizar en otras latitudes. sencillas pero con una gran carga de
En efecto, es previsible que los profundidad, no serán respondidas
trabajos críticos sobre los sistemas directamente por el autor, sino que
carcelarios continúen realizándose serán el punto de partida para exhi-
con base en la tradición foucaultia- bir una importante cantidad de ma—
na 0 bien en la marxista. Esto no su- teriales con los que el lector podrá
pone ningún inconveniente, aunque sacar sus propias conclusiones.
ese marco teórico necesariamente El libro se divide en dos grandes
ha de completarse con referencias partes: una donde analiza el desarro-
—y, sobre todo, aplicándolo— a la llo de los presidios en la época colo-
concreta materialidad histórico-so- nial, y otra que se centra en el caso
ciológica que se analiza. Ello debe concreto del penal de Belén —en la
hacerse, al estudiar una institución ciudad de México— durante un perí-
como la prisión, teniendo en cuenta odo fundamental de la historia mexi-
el contexto de su origen en el siglo cana. La perspectiva histórica, aun—
XIX. Como ejemplos anteriores, en que no lo diga el autor expresamente,
el marco de estudios españoles, se inscribe dentro de las "genealogí-
puede citarse el excelente trabajo de as" entendidas como "historias del
tesis doctoral del historiador Justo presente". La búsqueda de momen-
Serna Alonso (Presos y pobres en la tos fundacionales, o de ruptura, per-
España del XIX. La determinación miten detenernos con preocupación
social de la marginación, Barcelona, sobre las continuidades que todavía
PPU, 1988) y, asimismo, el gran tra- se destacan. Así, la permanente crisis
bajo de tesis de Pedro Oliver Olmo del supuesto ideal resocializador del
(Cárcel y sociedad represora. La crí— sistema penitenciario es destacada
mínalízacíón del desorden en Nava- con la cita hecha en las primeras pá-
rra —siglos XVI a XIX—, Vitoria, Uni- ginas del libro a Manuel de Lardizábal
versidad del País Vasco, 2001 —co— (el más destacado penalista ilustrado
mentado en Panóptico, n.º 3—). en lengua castellana, nacido en la ciu-
También es historiador de forma- dad mexicana de Tlaxcala): ”la expe-
ción el autor del presente libro, el riencia acredita todos los días que to-
mexicano Martín Gabriel Barrón dos o los más que van a presidios o
Cruz. Esta formación se advierte en arsenales vuelven peores, y algunos
la minuciosidad con que trabaja so- enteramente incorregibles“.
187
)! COMENTARIOS DE UBROS
N¡¡
Que la cárcel no beneficia ni a sus Delito y Modernidad
sacrificados "clientes" ni a la socie- John Lea
dad en su conjunto, y que en todo Traducción A. Piombo
caso es funcional a los grupos que México, Siglo XXI (en prensa)
ejercen el control dentro y fuera dela
prisión —y a la misma idea de con- La obra que se comenta pretende
trol, y a la de poder—, parece una contribuir, como así lo manifiesta su
afirmación obvia. Pero justamente autor, a la creación de un nuevo
por ello es importante ver que esa marco de trabajo para comprender,
funcionalidad existía ya en las insti- desde la criminología, los cambios
tuciones de encierro utilizadas por la que se están produciendo en las for—
Corona española en el México colo- mas claves de delincuencia y otros
nial, ejemplificadas especialmente en aspectos del sistema socio-econó-
el libro con los presidios, arsenales y mico de las sociedades capitalistas
hospitales utilizados por los tribuna— contemporáneas. Para ello recurre
les dela Inquisición, así como por los al análisis histórico del control del
tribunales civiles, en especial los de delito estableciendo siempre en su
la "Acordada" de 1719 (que seguiría discurso una conexión con los pro-
teniendo influencia en el México in- cesos económicos, sociales y políti-
dependiente). cos desde el nacimiento de la mo-
La segunda parte se proyecta sobre dernidad hasta la actual época pos—
un presidio concreto: la cárcel de Be— tmoderna. Pese a tener la obra su
Ién. Esta institución se crea en 1863, anclaje geográfico principalmente
cuando se intenta aplicar un proyec- en el Reino Unido, su análisis es
to político liberal en México, y será igualmente aplicable a todo el mun-
clausurada en 1933. El autor la estu— do occidental, ya que recorre el des-
dia, empero, hasta la fecha de 1910 arrollo evolutivo —en todas sus fa-
cuando la Revolución mexicana de— ses— de la modernidad.
rroca a la dictadura de Porfirio Díaz Alo largo del texto, John Lea ana-
que había aplicado los principios liza las relaciones sociales del control
"científicos" del positivismo a todos del delito, entendidas como el com—
sus actos de gobierno (y también a plejo de relaciones sociales que hace
los represivos). En los intersticios de dela criminalización una posibilidad
los archivos, estadísticas, historias clí- objetiva, cuyos actores se interaccio—
nicas, fotografías, proyectos de refor- nan con la finalidad del manejo y el
ma, disposiciones administrativas y control de la delincuencia. Su análi—
demás fuentes primarias, el autor sis parte de una breve referencia al
descubre la realidad del proyecto pe— control premoderno del delito y a su
nitenciario positivista en México y, consolidación con el nacimiento de
desde el presente, nos permite averi— la modernidad, para finalizar su an—
guar Ios orígenes de los principios danza histórica en el convencimien-
que aún continúan estando vigentes to de que el actual control autorita—
en el penitenciarismo oficial. rio del delito propio de las socieda-
des postmodernas supone, lo que él
Gabriel Ignacio Anitua denomina, un "regreso al futuro".
188
N?
Delito v Modernidad

Con la estabilización de la moder- tiempo se generaliza y deviene coti-


nidad, segunda mitad del siglo XIX diana. El Estado, ante esta situa-
primera del XX, el delito se convier- ción, reduce sus políticas a la de se—
te en algo marginal propio de un es- guridad, que es llevada a cabo por
trato social diferenciado; los secto— una justicia penal represiva, cuyo
res más pobres dela clase obrera. La único fin es el mantenimiento de es-
clase trabajadora, objeto de sociali- tos grupos riesgosos —pobres, ex-
zación, asimila Ias actitudes y defini— cluidos y marginales— a distancia.
ciones compartidas por la clase me- Asimismo, se ensalza el papel de la
dia, proceso que se intensifica con víctima individual y se "privatiza“ el
la llamada por el autor "moderni— control del delito. Serán las propias
dad organizada", que no es otra comunidades —ricos, clases medias
cosa que el Estado asistencialista y clases trabajadoras estab/es—
keynesiano en Europa o el interven- quienes compren en el mercado la
cionismo estadounidense tras el ro— seguridad que el Estado no es capaz
oseveltiano New Deal. de garantizar.
Pese a los relativos logros del Wel- El autor concluye con un esbozo
fare, la modernización sufría una del camino a seguir para devolver a
contradicción estructural. La expan- la sociedad el manejo de las relacio-
sión ¡limitada del capital y la conti- nes entre comunidades y el control
nuación en la defensa de los dere- del delito. Lea aboga, valiente, por
chos sociales garantizados por el Es- un profundo cambio social y políti-
tado asistencialista devienen co que suponga un abatimiento de
incompatibles. El triunfo de la pri- la autonomía y la destructiva acu-
mera requería la demolición de los mulación del capital y una distribu—
segundos y es en este punto en el ción de los recursos económicos y
que Lea se sumerge en lo que yo del asistencialismo hacia las comu-
considero la parte fundamental de nidades, tanto en el interior de los
la obra: su análisis de lo que se co- países desarrollados como a escala
noce por postmodernidad y sus re- global. Se conseguirá, así, una so-
percusiones sobre el control del de- ciedad robusta y capaz de solucio—
lito. La sociedad moderna se desin- nar una gran proporción de sus con-
tegra como consecuencia de la flictos remarginalizando las conduc-
"propia reproducción auto-destruc- tas consideradas delito.
tiva del capital", provocando frag- La virtualidad de esta obra reside
mentación social, desigualdad y po- en el planteamiento estructural-ma-
larización entre ricos y pobres. El Es— terialista que inspira todas sus pági-
tado moderno, ya débil, cumple, nas. Así, en la descripción de la so-
obediente, las exigencias de un ca- ciedad postmoderna actual, su aná-
pital cada vez más poderoso. lisis no se reduce a conceptos como
El control del delito se descompo- el de riesgo, que generalmente ha-
ne y se descentraliza. La delincuen- cen perder la perspectiva crítica res-
cia práctica se hace borrosa y se pecto al sistema económico actual y
confunde con categorías como peli- alas relaciones de poder que de él se
gros abstractos o riesgos y al mismo derivan, sino que recurre al clásico,
189
J
N:. COMENTARIOS DE LIBROS

pero no obsoleto, enfoque marxista. za éste, en su primer capítulo, expli-


John Lea, sin duda, realiza, con esta cando Ios motivos 0 variables que
obra, una importante contribución a han dado lugar a que, desde lo años
la criminología, y al conocimiento en ochenta, el incremento de mujeres
general, dela actualidad, tan necesi- presas sea casi tres veces superior al
tada de espíritu crítico sobre esta re- incremento de la población masculi-
alidad postmoderna y globalizada. na encarcelada, destacando, entre
otras: el precario desarrollo del Es—
Gemma Nicolás Lazo tado de bienestar en España; el au-
mento de los delitos contra la salud
& pública (actualmente, en las prisio-
nes españolas más del 80% de las
Mujeres Encarceladas mujeres encarceladas lo están por
delitos contra la salud pública); el
Elisabeth Almeda reducido número de entidades y
Ed. Ariel, asociaciones de apoyo a mujeres
Barcelona, 2003, 213 págs. presas (probablemente provocado,
señala la autora, por la ausencia de
El lector de este libro va a poder bu- interés que el movimiento feminista
cear entre las aguas de la siempre ha tenido por la situación delas mu-
olvidada historia de vida de las mu- jeres presas), o el incremento de las
jeres encarceladas en las prisiones redes de control formal (sistema po—
españolas, dado que la historiogra- licial, judicial y penitenciario). Finali-
fía penitenciaria pareciera tener me- zando el mismo con uno de los pun-
moria olvidadiza cuando obvia la tos cardinales de lá obra de esta au-
propia y diferente historia que ha tora, cual es las discriminaciones en
tenido la reclusión de mujeres en las prisiones de mujeres en contra-
este país en particular. Resulta clara- punto con las prisiones de hombres.
mente importante el testimonio que El segundo de los capítulos está
nos deja esta obra, dado que, tal y referido al panorama actual de las
como destaca su propia autora, Es- prisiones femeninas, particularmen-
paña tiene el índice de encarcela- te al perfil sociológico, penal y peni—
miento de mujeres más alto de Eu— tenciario de las mujeres encarcela-
ropa y, sin embargo, la falta de es- das en la actualidad, demostrando,
tudios rigurosos en esta materia de a través de diferentes historias de
algún modo pareciera hacer invisi- vida, como el rasgo común a todas
ble esta problemática, esta situa- ellas es la pertenencia a sectores
ción de privación que tiene su pro- marginales, ya sea social o económi-
pia lógica de funcionamiento y or- camente, de entre otras variables
ganización, su particular filosofía y que, sin lugar a dudas, dibujan un
fisonomía. abanico humano de futuro de vida
La estructuración de este libro nada esperanzador.
desde su inicio sitúa perfectamente Finaliza este libro con un capítulo
al lector respecto al contenido y al dedicado a escuchar las voces de
carácter crítico del mismo. Comien- aquellas personas que son sujeto de
190
'<?
Muieres Enrarreladas

estudio del mismo, y debe destacar- La originalidad de esta obra, además


se especialmente esta parte, puesto de presentar un estudio inaudito en
que no resulta lugar común la reali— esta materia, resulta ser que todo
zación de un trabajo de investiga— cuanto en él se señala es apoyado,
ción de este tipo y, aún menos, dan- ilustrado y refrendado por las pro-
do Ia visión de los afectados de la pias mujeres presas, con sus propias
cuestión que, desde un punto de vis- palabras.
ta más teórico, quiera ser estudiada. En síntesis, con esta obra se con—
Si bien es cierto que las cárceles de sigue poner de relieve el talante de
mujeres quedan enmarcadas en el la política penitenciaria para las mu—
contexto más amplio del sistema pe- jeres presas, cual es de claro corte
nitenciario general, no lo es menos proteccionista, paternalista y sexis—
que éstas presentan variables especí- ta, consiguiendo así el predominio
ficas y necesidades particulares que de un enfoque psicoterapéutico y
no se encuentran cubiertas en la ac- correccional por encima de un enfo-
tualidad, provocando, de este modo, que rehabilitador. En definitiva, con
graves discriminaciones ("constan- este testimonio nos encontramos
tes", dirá la autora) y disfuncionali- ante la ya revelada función que de
dades en la efectiva realización y de- facto cumple la actual política peni—
fensa de derechos fundamentales tenciaria en este ámbito: la conse-
básicos, de las que algunas se mani- cución de la domesticidad perdida
fiestan en comparación con las cár— de las mujeres presas.
celes de hombres y otras, posible—
mente las más graves, que son espe- Mónica Aranda
cíficas y particulares de los centros
para mujeres derivadas de la condi- 1 Thomas Lower. "los castigos en las
ción de género delas mujeres presas. cárceles" ed. Vergi, Barcelona

191
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ISSN 1135 9838 010

9
I Panóptico de Bentham es la figura arquitectónica de todos los
mecanismos de poder que, todavía en la actualidad, se disponen
en torno a lo anormal, tanto para marcarlo como para modificar—
lo. Conocido es su principio: en la periferia, una construcción en forma
de anillo; en el centro, una torre, ésta con anchas ventanas que se abren
en la cara interior del anillo. La construcción periférica está dividida en
celdas., cada una de las cuales atraviesa toda la anchura de la construc-
ción. Tienen dos ventanas, una que da al interior, correspondiente a las
ventanas de la torre, y la otra, que da al exterior, permite que la luz atra-
viese la celda de una parte a otra. Basta entonces situar un vigilante en
la torre central y encerrar en cada celda a un loco, un enfermo, un con—
denado, un obrero o un escolar. Por el efecto de la contraluz, se pueden
percibir desde la torre, recortándose perfectamente sobre la luz, las
pequeñas siluetas cautivas en la celda de la periferia. Tantos pequeños
teatros como celdas, en los que cada actor está solo, perfectamente indi-
vidualizado y constantemente visible. El dispositivo panóptico dispone de
unas unidades especiales que permiten ver sin cesar y reconocer al punto.
En suma, se invierte el principio del calabozo; o más bien de sus tres fun-
ciones —encerrar, privar de luz y ocultar— no se conserva más que la pri-
mera y se suprimen las otras dos. La plena luz y la mirada de un vigilan-
te captan mejor que la sombra, que en último término protegía. La visi-
bilidad es una trampa...
Cada cual, en su lugar, está bien encerrado en una celda en la que
es visto de frente por el vigilante; pero los muros laterales le impiden
entrar en contacto con sus compañeros. Es visto pero él no ve; objeto de
una información, jamás sujeto en una comunicación. La disposición de su
aposento, frente a la torre central, le impide una visibilidad axial; pero las
divisiones del anillo, las celdas bien separadas, implican una invisibilidad
lateral. Y ésta es garantía del orden…

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