Respuesta dinámica de los trabajos de pilares inducidos por la

recuperación repentina de pilares

Resumen

Cuando los pilares residuales se extraen en poco tiempo en la minería de habitaciones y pilares, la
carga transferida desde el pilar eliminado actúa de manera dinámica sobre el funcionamiento de
los pilares vecinos. Este estudio tiene como objetivo investigar la inestabilidad de grandes áreas
minadas desencadenadas por la perturbación dinámica resultante de la recuperación del pilar
residual. Primero se estableció un modelo mecánico que combina el método basado en la teoría
del arco de presión (PAT) y la dinámica estructural para evaluar el estado de tensión y la
deformación de un pilar sometido a efectos combinados de cargas estáticas y dinámicas. El
proceso de recuperación de pilares residuales y la inestabilidad potencial inducida de los trabajos
de pilares vecinos en un sistema de cinco pilares se simuló numéricamente en modos estáticos y
dinámicos, y se investigó la respuesta de pilares adyacentes. Se descubrió que la perturbación
inducida a un pilar puede caracterizarse por el coeficiente de amplificación dinámica R, la relación
entre la carga vertical incrementada del pilar y la carga transferida. Rmax puede exceder 1.5 o
incluso acercarse a 2 en la recuperación práctica de pilares usando el método de voladura. Los
resultados de la modelización mostraron que, si bien el funcionamiento de los pilares adyacentes a
un pilar eliminado permanece estable en el análisis estático, se pueden desencadenar colapsos de
pilares violentos y a gran escala en caso de recuperación rápida de pilares del método de voladura.
Los resultados indicaron que cuando no se considera el efecto dinámico de la recuperación del
pilar, la carga asumida por el trabajo de los pilares adyacentes se subestimaría en gran medida.
Para garantizar la seguridad de la minería, el efecto dinámico inducido debe tenerse en cuenta en
el diseño del método de recuperación de pilares.

1. Introducción

Por lo general, se extrae un yacimiento plano por el método de la habitación y el pilar. Se extrae
una cuadrícula de habitaciones en un plano horizontal, dejando grandes áreas minadas en el
subsuelo profundo. Según datos estadísticos, a finales de 2015 quedaron un total de 1,28 mil
millones de metros cuadrados de áreas minadas en minas metálicas y no metálicas en China. En
estas áreas, el trabajo de los pilares actúa como estructuras de soporte para soportar una gran
sobrecarga. (Zhou et al. 2018b). En aras de aumentar la vida útil de la mina y el retorno total de la
inversión, se extraen partes de los pilares residuales después de la extracción de la sala, y las
cargas verticales se redistribuyen y se aplican en los trabajos pilotos adyacentes. Bajo niveles de
estrés más altos, puede desencadenar la inestabilidad del trabajo de los pilares vecinos, o incluso
dar lugar a colapsos de pilares progresivos catastróficos en grandes áreas minadas.

El cálculo de la carga vertical del pilar antes y después de la extracción y la evaluación de la

estabilidad de las áreas minadas atraen esfuerzos de investigación intensivos (Chen et al.2017;
Xiao et al.2017; Zhang et al.2017). El método del área tributaria se ha utilizado ampliamente para
estimar los estados de tensión axial promedio en los pilares de carbón (Brady y Brown 2013). La
suposición fundamental de este método es que cada pilar lleva la carga completa de los estratos
suprayacentes, y la mitad de la de las carreteras circundantes. Abel (1988) usó el arco de
transferencia de carga parabólica para estimar las cargas emprendidas por pilares de barrera y
rendimiento en roca blanda. El método basado en la teoría del arco de presión (PAT) propuesto
por Poulsen (2010) podría explicar tanto la geometría del pilar como la posición espacial dentro
del panel, y se aplicó con éxito para la evaluación del riesgo de una mina clausurada en Australia
(Poulsen y Shen 2013). Cuando los pilares tienen formas aproximadamente regulares y se pueden
tratar como medios linealmente elásticos, se puede obtener una estimación confiable de las
tensiones de los pilares verticales en una simulación numérica tridimensional (Brady y Brown
2013). Lunder y Pakalnis (1997) propusieron un método de estimación para la resistencia del pilar
de roca dura mediante la integración del método del área tributaria y el análisis del elemento
límite, a fin de conciliar las expresiones empíricas de la tensión del pilar con un análisis más
riguroso.

Como los pilares generalmente se extraen en muy poco tiempo, la carga transferida actuaría sobre
los pilares vecinos de manera dinámica, introduciendo una excitación distinta en los pilares
adyacentes y los estratos circundantes. Sin embargo, el trabajo de investigación anterior solo tuvo
en cuenta la carga transferida final en función del cambio en la relación de extracción después de
la recuperación piloto, y se realizó un pequeño esfuerzo para investigar el proceso de
transferencia de carga dinámica y la perturbación inducida que lo acompaña. La evaluación del
riesgo de las áreas minadas se basa en la estimación de las cargas de los pilares y la transferencia
de carga después de la extracción, por lo que la estabilidad de la gavilla puede sobreestimarse. En
este sentido, la recuperación dinámica del pilar indujo perturbaciones y posiblemente provocó la
inestabilidad de las áreas minadas.

En realidad, la perturbación dinámica resultante de la espeleología, la voladura y la extracción,

etc., es bastante común en el subsuelo profundo (Kaiser et al. 1996; Kaiser y Cai 2012; Cao et
al.2018; Li et al.2018; Zhao et al.2018). Se informó que la recuperación del pilar de carbón
subterráneo acompañado de cavidades de los estratos suprayacentes podría causar una carga
dinámica sobre los pilares vecinos (Singh et al. 2011a, b). La perturbación dinámica puede ser
notable cuando los pilotes subterráneos de carbón se encuentran bajo estratos de techo fuertes y
masivos. Estudios anteriores también revelaron que la respuesta dinámica de la roca circundante
puede ser inducida por la descarga de excavación de aberturas subterráneas (Lu et al. 2012; Li et
al. 2014). La velocidad máxima de partículas inducida (PPV) en la roca circundante aumenta con el
aumento de las tasas de descarga (Cao et al.2016).

La perturbación dinámica inducida por la excavación tiene un efecto perjudicial sobre la

estabilidad de las aberturas y estructuras subterráneas (Kaiser et al. 1996; Tao et al. 2013; Yang et
al. 2013). Por ejemplo, la excavación instantánea de túneles en estados de alta tensión inicial
puede conducir a la concentración de tensión dinámica alrededor de los túneles adyacentes, e
incluso daños y fallas en el lado incidente del túnel (Li et al. 2016). La perturbación dinámica de la
carga de la explosión, como las cargas reológicas y el agua, puede causar el deterioro de las
propiedades mecánicas de las masas rocosas y, por lo tanto, reducir la estabilidad de la gavilla
(Chao et al. 2015; Zhou et al. 2018a). Para las áreas minadas dejadas por el método de sala y pilar,
la perturbación dinámica inducida también es una causa importante de su inestabilidad. Es
necesario comprender el mecanismo y las consecuencias asociadas de la perturbación dinámica
para prevenir estos peligros. El Canadian Rockburst Support Handbook (Kaiser et al. 1996) resumió
una serie de estudios de caso de estallidos de rocas inducidos sísmicamente, y sugirió que el
soporte de rocas en terreno propenso a estallidos debe resistir cargas dinámicas y dilatación de
rocas grandes debido a la falla violenta de las rocas. Wang y col. (2013) simularon la evolución
dinámica del estado mecánico de un pilar de carbón durante la extracción de muros largos
utilizando FLAC3D, y descubrieron que el esfuerzo del pilar vertical podría usarse como un
precursor de los golpes de carbón. Wang y col. (2016) simularon la respuesta dinámica de un pilar
de carbón bajo una perturbación sísmica causada por la caída del techo, y encontraron que la
relación ancho-alto (W / H) del pilar es un factor importante que influye en la respuesta. El
comportamiento dinámico de los pilares en respuesta a la perturbación es insignificante en
grandes proporciones de W / H (mayores que 4), pero puede ser bastante evidente en los
pequeños (menores de 2).

Esta investigación se centra en la perturbación dinámica resultante de la recuperación de los

pilares y la inestabilidad inducida del funcionamiento de los pilares adyacentes. En la secta. 2, la
respuesta dinámica del funcionamiento de los pilares a la recuperación de pilares se simplifica a un
problema de carga unidimensional en un pilar pretensado. En la secta. 3, se desarrolla un modelo
mecanicista para evaluar el estado de tensión y la deformación del trabajo de los pilares
adyacentes a un pilar retirado, en el que la carga máxima del pilar vertical se calcula en función de
la teoría del arco de presión y la dinámica estructural. En la secta. 4, la simulación numérica
utilizando el código de elemento discreto PFC2D se lleva a cabo para modelar la respuesta de un
sistema de cinco pilares sometido a la recuperación del pilar central tanto en modo estático como
dinámico. La influencia del tiempo de recuperación de los pilares en la estabilidad del trabajo de
los pilares se discute más a fondo.

2. Dynamic Stress Disturbance Induced by Pillar Recovery

En los yacimientos inclinados, algunos pilares de tipo habitación y pilar están diseñados para
orientarse perpendicularmente a la pared del pie y a la pared colgante, y por lo tanto están sujetos
a tensiones de compresión y corte (Suorineni et al. 2011, 2014). La inclinación de tensión principal
mayor del campo lejano de 15 ° o más en relación con los cuerpos de mineral es significativa para
causar debilitamiento en el trabajo de los pilares. En este trabajo, solo se consideran los trabajos
de pilares diseñados verticalmente dominados por la tensión de compresión, a fin de minimizar los
impactos de la carga de corte en el comportamiento de los pilares.

Es ampliamente aceptado que los trabajos de pilares adyacentes a un pilar retirado son propensos
a dañarse o incluso aplastarse por la carga transferida desde el pilar retirado. Sin embargo, en la
perspectiva de la dinámica, la respuesta de los pilares vecinos es causada por la perturbación de
descarga que emana del pilar removido. Específicamente, las cargas que actúan en la parte
superior e inferior de un pilar excavado pueden reemplazarse por tensiones estáticamente
equivalentes. La recuperación instantánea del pilar significa la descarga repentina de las tensiones
equivalentes, iniciando una onda de descarga dinámica que se aleja del pilar retirado. Todas las
partículas de roca sometidas a esta onda tienden a moverse hacia la dirección opuesta de
propagación de la onda. Cuando la ola alcanza el funcionamiento de los pilares adyacentes, la
fuerza ejercida actúa tanto en la parte superior como en la parte inferior de los pilares en la
dirección de carga. El funcionamiento de los pilares adyacentes, por lo tanto, está sujeto a los
efectos combinados de la tensión vertical inicial (Fig. 1a) y la perturbación dinámica de las masas
rocosas (Fig. 1b). El esfuerzo dinámico que actúa sobre los pilares adyacentes oscila en poco
tiempo, y finalmente converge a un valor fijo igual a la sobrecarga redistribuida.

Con un gran espacio entre pilares, el efecto de la curvatura de la onda incidente es marginal, y la
onda puede tratarse aproximadamente como una onda plana elástica para pilares adyacentes (Pao
y Mow 1973). A este respecto, la respuesta dinámica de los trabajos de pilares inducidos por la
recuperación de pilares se puede simplificar a un problema de carga unidimensional en un pilar
pretensado. El comportamiento dinámico de los trabajos de pilares adyacentes está
estrechamente relacionado con el nivel de tensión, el espacio entre pilares y el tiempo de
extracción, etc.

Fig. 1 Esquema de la recuperación instantánea de los pilares y la respuesta dinámica inducida del
funcionamiento de los pilares adyacentes: a antes de la recuperación de los pilares yb después de
la recuperación de los pilares

3. Concentración dinámica de estrés inducida e inestabilidad del trabajo de pilares

Como se introdujo en la secta. 2, la respuesta dinámica inducida de los pilares verticales se asocia
principalmente con la tensión vertical inicial, la carga transferida y la resistencia a la compresión
de los pilares. En esta sección, se supone que los pilares son linealmente elásticos antes del fallo y
de forma regular. Las cargas de los pilares verticales iniciales y transferidas se calcularán primero,
sobre la base de las cuales se evaluarán el comportamiento dinámico del pilar y el colapso del pilar
en respuesta a la recuperación del pilar vecino.

3.1. Cálculo de cargas iniciales de pilares verticales

La determinación de la tensión vertical que actúa sobre un pilar antes y después de la
recuperación del pilar adyacente es importante para propósitos prácticos de diseño del pilar.
Dada una geometría de panel específica y un factor de seguridad requerido, el conocimiento
de la carga vertical del pilar es propicio para la determinación de los diseños del pilar y la
optimización de la extracción.

Los métodos prácticos en la estimación de cargas de pilares verticales han sido un foco de
investigación durante muchos años. El método del área tributaria se puede utilizar para
estimar la carga promedio de pilares para un patrón de pilares razonablemente uniforme al
suponer que cada pilar tiene una parte proporcional de la carga de sobrecarga total (Brady y
Brown 2013). Después de la explotación minera, la carga vertical σv en cualquier pilar
remanente está relacionada con la carga de sobrecarga inicial ρgH y la relación de extracción
de campo cercano e. Pero, este método no tiene en cuenta las interacciones entre los pilares
adyacentes y entre los pilares y los estratos circundantes, posiblemente conduciendo a una
sobreestimación significativa de las cargas de los pilares verticales (Roberts et al. 2002). El
modelado numérico puede ser una herramienta para evaluar la estabilidad de los pilares
irregulares con variaciones locales de la relación de extracción. Sobre la base de resultados
numéricos que utilizan un código de diferencia finita, se aplicó una función de ajuste
cuadrático de la relación de extracción relativa para estimar la carga vertical promedio del
pilar (Hauquin et al. 2016). Sin embargo, dado que la función cuadrática se deriva simulando
una variedad de diseños de paneles aleatorios, puede no ser aplicable al analizar una
geometría de pilar específica. Poulsen (2010) desarrolló un método basado en PAT para
calcular el esfuerzo vertical promedio que actúa sobre pilares de geometrías irregulares.
Teniendo en cuenta que los pilares interactúan con los pilares adyacentes y los estratos
circundantes dentro de una zona de influencia lateral, en el cálculo se utilizan las relaciones de
extracción promediadas en varios pilares en lugar de la relación de extracción local para un
solo pilar. En este trabajo, se utilizó el método basado en PAT para estimar las cargas iniciales
de los pilares verticales y las cargas transferidas después de la recuperación de los pilares.

La distancia de transferencia de carga (LTD) introducida por primera vez en el trabajo de Abel
(1988) representa la distancia máxima a la que se puede transferir la carga. Basado en
mediciones in situ de 55 pilares dentro de depósitos sedimentarios, la función cuadrática de
ajuste entre la profundidad del pilar H y el LTD se escribe como:
LTD = −1 × 10−4H2 + 0.2701H

En el método basado en PAT, la zona de influencia (ZI) puede ser considerado como un área
circular centrada en el pilar con radio r, como se ilustra en la Fig. 2. Tanto r como ZI están
asociados con el LTD, y se puede calcular, respectivamente, por (Poulsen 2010):
r = 2LTD+we∕ 2

ZI = n(2LTD+we∕ 2)2

donde tenemos el ancho efectivo para pilares no cuadrados, que es 4 veces la proporción del
área del pilar a la circunferencia del pilar.
La carga vertical del pilar v se puede escribir como (Poulsen y Shen 2013):

donde e es la relación de extracción en el ZI del pilar, y viene dada por:

Fig. 2 Geometría del pilar y la zona de influencia utilizada en el PAT- método basado

donde EA denota el área excavada en el ZI, como se ilustra en la figura 2.

3.2. Cálculo de cargas de pilares verticales transferidas

Después de la recuperación del pilar, la carga previamente transportada por el pilar retirado
será redistribuida y actuará sobre los pilares vecinos o la roca circundante. Para cualquier pilar
que permanezca intacto, la ecuación. (4) puede usarse para estimar las tensiones del pilar
vertical a0 y a1 antes y después de la recuperación del pilar adyacente.

Si el pilar eliminado se ubica dentro del ZI de cualquier pilar, la carga vertical en ese pilar
aumentaría con el aumento de su EA después de la recuperación del pilar. El incremento en la
carga del pilar vertical, denominado carga transferida, puede estar dado por:
Para que cualquier pilar soporte la carga transferida, depende en el porcentaje del área
del pilar eliminado a ese de la ZI. Sin embargo, la carga transferida actúa en adyacentes pilares
de forma dinámica, y por lo tanto pueden ser mucho más grandes en actividades mineras
prácticas. En este sentido, es pertinente calcular la carga vertical máxima inducida y evaluar la
estabilidad del pilar en un punto de vista dinámico, que será descrito en las Sectas. 3.3 y 3.4
respectivamente.

3.3. Cálculo del estrés dinámico inducido

La Figura 3 ilustra la respuesta dinámica de un pre-esfuerzo pilar sometido a una carga

aplicada repentinamente. El pilar es inicialmente bajo estrés compresivo . Cuando una

carga transferida se aplica, se altera el equilibrio de tensiones y el pilar la compresión sufre

una etapa de aceleración hasta que la vertical la carga alcanza . En ese momento, la tensión
del pilar vertical

Fig. 3 Respuesta dinámica de un pilar pretensado sometido a una repentina carga aplicada

es igual a la carga externa, lo que indica que sería la posición de equilibrio para el pilar. Luego,
la velocidad de compresión del pilar disminuye hasta alcanzar la posición de compresión
máxima. El pilar oscilaría y finalmente convergería a la posición de equilibrio.

La perturbación inducida a un pilar puede caracterizarse por el coeficiente de amplificación

dinámica R, definido como la relación del dinámico aumento de la carga vertical del pilar a la
final transferida carga. El coeficiente de amplificación dinámico máximo Rmax es logrado en la

posición de máxima compresión. El máximo carga vertical del pilar puede expresarse
en términos de Rmax:

Cuando se extrae un pilar utilizando el método de voladura, el soporte para el techo goaf se
libera en muy poco tiempo, y la carga de sobrecarga se transfiere a los pilares adyacentes. Es
asumido que la duración de la transferencia de carga es t0. Para cualquier vecino pilar, se
considera la carga transferida dependiente del tiempo para actuar como una carga de rampa
única seguida de carga constante, como se ilustra en la Fig. 4. El historial de carga puede ser
matemáticamente expresado como:

La respuesta del pilar a las cargas dinámicas se puede analizar mediante medios de dinámica
estructural. Considere un impulso dinámico σ (τ) que actúa sobre un sistema estático
linealmente elástico no amortiguado sobre intervalo de tiempo dτ en el tiempo τ, la respuesta
del pilar resultante al impulso en el tiempo t es:

en el que my T son el período de masa y vibración natural del pilar, respectivamente. La masa
y el período de vibración natural pueden correlacionarse con la rigidez elástica K del pilar:

Fig. 4 Historial de carga de una carga de pilar transferida

La ecuación (9) es aproximada para la duración del impulso finito, y se vuelve precisa cuando
la duración se aproxima a cero. Se puede considerar que todo el historial de carga σ (t)
consiste en una sucesión de impulsos tan cortos, cada uno de los cuales genera su propia
respuesta diferencial. Para el sistema linealmente elástico, la respuesta total se puede obtener
integrando todas las diferenciales respuestas durante el tiempo de carga, que se conoce como
La ecuación integral de Duhamel (Clough y Penzien 2003):
La deformación del pilar en respuesta al tiempo dependiente la carga se puede obtener
combinando las ecuaciones. (8, 10) y (11):

Se puede observar a partir de la ecuación. (14) eso, dado lo natural período de vibración T,
Rmax depende de la recuperación del pilar tiempo t0. Para investigar el impacto del tiempo de
recuperación del pilar en respuesta dinámica de pilares adyacentes, el tiempo variable
coeficientes de amplificación dinámica para t0 = 0, 0.01T, 0.5T, 1.0T y 2.0T respectivamente se
presentan en la Fig. 5. t0 = 0 significa recuperación instantánea del pilar, que produce un Rmax
como tanto como 2. Se puede ver que cuando t0 es más corto que 0.01T, Rmax se aproxima a
eso en el caso de t0 = 0. Cuando el tiempo de extracción es mayor que T, Rmax se convierte en
1, lo que sugiere No hay evidencia de efecto dinámico. Cuando t0 varía de 0.01T a T, Rmax cae
en el rango entre 1 y 2.

Basado en mediciones microsísmicas in situ, el natural El período de vibración de las masas

rocosas es generalmente de magnitud de 10−1 s (Pan et al. 2007). Usando el método de
voladura, la fragmentación de masas de roca acompañada con el lanzamiento del estrés in situ
tiene lugar en varios a diez milisegundos (10− 3 a 10− 2 s) (Lu et al. 2012). Por lo tanto, el
inducido coeficiente de amplificación dinámica para un pilar vecino puede exceder 1.5 o
incluso acercarse a 2.

3.4. Criterio de inestabilidad dinámica para trabajos de pilares

Los criterios convencionales para fallas materiales pueden clasificarse en tres tipos: criterios
de falla de tensión / deformación, tipo de energía criterios de falla y criterios de falla de daño
(Li 2001). Estas los criterios son generalmente aplicables a fallas estables o controladas
Fenómenos, en los cuales los procesos de falla ocurren gradualmente y puede ser controlado
regulando los estados de estrés.

Sin embargo, en ciertas circunstancias, falla incontrolada fenómenos tales como

desprendimientos de rocas, derrumbes de pilares y caída de techos ocurrir repentinamente
incluso sin deterioro previo de la roca masa. Estas instancias pueden generalizarse como el
problema de inestabilidad (Salamon 1970), y los criterios de falla pueden ser diferente.
Salamon (1970) aplicó la tensión-tensión completa curva de pruebas de roca uniaxiales a la
explicación del pilar fenómenos de colapso, y sugirió que los pilares serán estables

Fig. 5 Coeficientes de amplificación dinámica de un pilar para diferentes tiempos de extracción

(n = t0 / T)

si la suma de la matriz de rigidez de los trabajos mineros y la matriz de pendiente de la curva

de fuerza-desplazamiento de los pilares es positivo definitivo. A este respecto, las condiciones
de estabilidad de los pilares dependen de su mecánica y deformación características.

Es común que estos fenómenos involucren tanto críticas estados de estrés de estructuras
mineras y dinámica externa excitación. Entonces, la perturbación externa debe ser tomada en
cuenta al evaluar la inestabilidad de las estructuras mineras.

Petukhov y Linkov (1979) formularon un criterio de estabilidad basado en la comprensión de

las características posteriores a la falla, que considera que la inestabilidad ocurre cuando el
incremento de entrada de energía externa excede el incremento de energía intrínseca.

Zubelewicz y Mroz (1983) generalizaron la inestabilidad condición como el aumento

monotónico de la energía cinética del sistema bajo excitaciones externas. Este criterio fue
examinado más a fondo modelando dos rupturas de roca dinámicas fenómenos inducidos por
la excavación instantánea de pilares y una incidencia de onda plana a una cara de excavación,
respectivamente.

Li y col. (2005) y Zuo et al. (2005) utilizó una catástrofe modelo para caracterizar el proceso de
falla del rock sometido a cargas estáticas y dinámicas acopladas, y encontrado que la falla
inestable está asociada tanto con la magnitud y frecuencia de cargas dinámicas.
 En este estudio, se considera que el macizo rocoso se convierte en inestable cuando la energía
liberada excede la energía consumida en el proceso de falla (Dou et al. 2015). El criterio puede
ser dado por:

donde U es la energía total liberada en la extracción, Us es la energía de deformación

almacenada en la masa de roca a extraer, Ud es la energía externa de la perturbación
dinámica, y Uf es la energía necesaria para ser consumida en la fractura de la roca masa. Este
criterio es aplicable para masas de roca bajo ambos estados de tensión bidimensionales y
tridimensionales.

Para trabajos de pilares bajo tensión de compresión uniaxial estado, la energía total liberada
es:

4. Simulación Numérica de Recuperación de Pilar Perturbación inducida

La formulación teórica introducida en la sección. 3 indicaron el impacto significativo de la

perturbación inducida por la recuperación de los pilares en la estabilidad del funcionamiento de
los pilares vecinos. Sin embargo, asumió que la perturbación es una carga de onda plana en un
pilar pretensado, sin considerar la propagación de la onda del pilar retirado al funcionamiento del
pilar remanente. Además, la amortiguación no se tuvo en cuenta en la formulación teórica.

En esta sección, se modeló numéricamente todo el proceso, incluida la descarga de la emanación

de ondas de la recuperación de los pilares, la propagación de las olas en las masas rocosas y la
carga en el trabajo de los pilares remanentes. Para limitar esta investigación a un alcance
controlable, se asumió un diseño de minería bidimensional con cinco pilares de geometrías
regulares. El código basado en el método de elementos discretos (DEM) PFC2D, se empleó para
modelar explícitamente la falla de roca dinámica.

4.1. Configuración del modelo y calibración de partículas Parámetros

Las propiedades macroscópicas de las masas rocosas se determinan mediante propiedades de

modelado calibradas de partículas y contactos (Itasca 2008). El modelo de enlace paralelo es
adecuado para modelar materiales de roca quebradizos en el sentido de que el enlace paralelo
establece una interacción elástica entre las partículas, transmitiendo tanto la fuerza como el
momento. Este modelo presenta dos conjuntos de parámetros, uno para controlar el
comportamiento de deformación macroscópica y el otro para tener en cuenta las características
de resistencia macroscópica.

Se necesita la calibración del modelo numérico para obtener propiedades de modelado

apropiadas de partículas y contactos correspondientes a propiedades macroscópicas al hacer
coincidir los resultados de modelado numérico con los experimentales (Potyondy y Cundall 2004).

En este trabajo, se utilizó un pilar de roca dura de 5 m × 5 m en la mina de fosfato de Kaiyang en

una prueba numérica de compresión uniaxial para calibrar el comportamiento de la roca
macroscópica frente al empírico. Según los informes de estudios geológicos de ingeniería y las
pruebas mecánicas de roca de laboratorio (Yao et al. 2012), la resistencia a la compresión empírica
del pilar es de aproximadamente 56 MPa y el módulo elástico es de aproximadamente 10 GPa. Los
parámetros de modelado calibrados obtenidos de partículas y contactos se presentan en la Tabla
1.

Se construyó un modelo de estrato con dimensiones de 101 m × 35 m (ancho × alto) para

representar un área de minería de roca dura en la mina de fosfato de Kaiyang (Fig. 6a).

El método de repulsión explosiva (Itasca 2008) se adoptó para generar el ensamblaje compactado
con un modelo de contacto lineal. Las partículas con menos de tres contactos se eliminaron
usando un esquema de eliminación flotante incorporado a través de una función FISH, y luego el
modelo de contacto lineal se reemplazó por el modelo de enlace paralelo.

Para modelar los colapsos sucesivos del funcionamiento de los pilares inducidos por la
recuperación repentina del pilar, el modelo construido debe tener un pilar que se debe eliminar,
un pilar inmediatamente
 Fig. 6 Geometría del modelo y configuración de medición: una geometría del modelo goaf con
cinco pilares, yb configuración de círculos de medición de estrés y puntos de monitoreo de
velocidad en la mitad derecha del modelo

Tabla 1 Parámetros calibrados de partículas y contactos parámetros utilizados en el PFC2D modelo

adyacente y otro no inmediatamente adyacente al pilar que se eliminará. A diferencia del marco
del modelado numérico basado en el continuo, la respuesta geomecánica de las masas de roca
(comportamiento de esfuerzo, desplazamiento y falla) de un modelo simétrico, obtenida del
enfoque numérico basado en elementos discretos, no es necesariamente simétrica, por lo que
sería necesario modelar El comportamiento de los pilares adyacentes a cada lado del pilar que se
eliminará. En vista

De la eficiencia computacional lograda, se encontró que un modelo que consta de cinco pilares, un
pilar central que se eliminará y dos pilares adyacentes en cada lado, era adecuado para demostrar
el proceso dinámico inducido por la recuperación repentina del pilar sin una pérdida de
generalidad. Con este fin, se extrajeron seis salas de 6 m × 5 m (ancho × altura) con una separación
de 5 m, dejando cinco pilares para soportar la carga de sobrecarga.
El área minera estaba subyacente y superpuesta por dos capas de roca dura de 15 m de altura,
respectivamente. Teniendo en cuenta que los estados de tensión a una distancia de 3 veces el
tamaño de las excavaciones lejos del área extraída no se ven afectados por la excavación, el
modelo es lo suficientemente grande como para minimizar los efectos de límites de campo lejano.

Sobre la base de dos mediciones in situ en la mina, el esfuerzo vertical y el esfuerzo principal
horizontal máximo a 400 m de profundidad son σV = 15 MPa y ¬Hmax = 14 MPa, respectivamente
(Li et al. 2010; Yao et al. 2012 ) Para representar las condiciones más vulnerables del trabajo de los
pilares, la tensión principal horizontal vertical y máxima (σV y Hmax) se utilizaron como tensiones
de límite normales verticales y horizontales (σy y σx), mientras que no se aplicó ninguna tensión
de corte en los límites del modelo. La aplicación de tensiones de límites se describirá en la Secta.
4.2.

Para monitorear la respuesta geomecánica a la recuperación del pilar, se establecieron un total de

cuatro círculos de medición de esfuerzo en el trabajo de los pilares remanentes y la roca
circundante, y cuatro puntos de monitoreo de velocidad en el techo de la habitación, como se
muestra en la figura 6b. En vista de la simetría axial del modelo y el pilar central a extraer, los
círculos y puntos de medición solo se organizaron en la mitad derecha del modelo. El pilar más
cercano al pilar central en el lado derecho se llama pilar # 1, y el segundo más cercano se llama
pilar # 2. La carga vertical promedio inicial del pilar en el modelo fue de 33 MPa, con un factor de
seguridad de 1.70. El período de vibración natural de los pilares en el modelo fue de alrededor de
60 ms, medido a partir de la vibración libre de pilares sometidos a excitación dinámica
instantánea.

4.2. Procedimiento de modelado

Se llevaron a cabo análisis estáticos y dinámicos de recuperación de pilares, respectivamente,

dependiendo de si se consideró el proceso dinámico. Como el primer paso para investigar la
concentración de estrés en los pilares remanentes en las proximidades de la región de
recuperación de pilares, el análisis estático del modelo de goaf es razonable.

El procedimiento de modelado para el análisis estático consta de los siguientes pasos: (1) el pilar
central se extrajo mediante el comando DELETE. (2) Se invocó un algoritmo de carga de
servocontrol implementado mediante una función FISH para aplicar tensiones in situ a cada límite
hasta que el modelo se equilibrara.

A modo de comparación, la distribución de tensiones en los pilares y la roca circundante también

se evaluó bajo tensiones in situ en el modelo goaf sin recuperación de pilares.

Para el análisis dinámico, las secuencias de modelado elaboradas para el análisis estático se
invirtieron, lo que significa que las tensiones in situ se aplicaron primero a los límites del modelo,
seguidas de la extracción del pilar central. Luego, el modelo se ejecutó hasta que el modelo goaf
se estabilizó o se rompió. Para tener en cuenta la influencia del tiempo de recuperación del pilar
en el trabajo de los pilares vecinos y los estratos circundantes, el modelo se ejecutó
repetidamente para el tiempo de recuperación del pilar 0, 10, 30, 50 y 100 ms, respectivamente.

El escenario con el tiempo de recuperación del pilar 0 es equivalente a la recuperación instantánea

del pilar.
Si bien la recuperación instantánea del pilar se realizó mediante la eliminación de todas las
partículas que componen el pilar mediante el comando DELETE, la recuperación dinámica del pilar
en cierta duración se realizó mediante el método de relajación de excavación (Cai 2008).

Para ser específicos, primero se eliminaron las partículas que representan el pilar central, y se
identificaron capas de partículas en el techo y el piso recién formados para aplicar un conjunto de
fuerzas equivalentes a las fuerzas internas de las partículas eliminadas. La descarga de la tensión
del pilar se puede controlar de tal manera que estas fuerzas se redujeron de acuerdo con una ruta
específica. En aras de la comparación con la formulación teórica, se adoptó una ruta de descarga
lineal en esta simulación. En la Fig. 7 se muestra un diagrama de flujo del procedimiento de
modelado para la recuperación de pilares tanto estática como dinámica.

Según el manual de PFC2D (Itasca 2008), el coeficiente de amortiguación α viene dado por:

donde D es la fracción de amortiguamiento crítico. Cuando se realizó el análisis dinámico, se

especificó una amortiguación numérica baja en el modelo para simular niveles realistas de
atenuación en la masa rocosa. En este estudio, el coeficiente de amortiguamiento local se
establece en 5% del amortiguamiento crítico. Además, se asignó una capa de partículas de 1 m de
espesor con alta amortiguación viscosa (α = 0.5) en cada límite, para evitar que las ondas sísmicas
se reflejen en los límites del modelo. El paso de tiempo para el análisis dinámico se determinó
automáticamente en función de la masa de partículas y la suma de las rigideces que actúan sobre
la partícula.

Fig. 7 Diagrama de flujo para simulación numérica de recuperación de pilar

Fig. 8 Cargas verticales para pilares vecinos antes y después del centro recuperación de pilares en
análisis estático

5. Resultados de modelado
5.1. Análisis estático de la estabilidad del funcionamiento de los pilares.

La Figura 8 muestra los estados de tensión vertical para pilares y rocas circundantes antes y
después de la recuperación del pilar central en análisis estático. Se puede observar que los
pilares más cercanos al pilar retirado tienden a llevar más sobrecarga durante el proceso de
redistribución de la carga. Después de la recuperación del pilar central, hay aumentos de
estrés de 6.6 y 1.8 MPa en los pilares # 1 y # 2, respectivamente, pero apenas aumenta el
estrés en las masas de roca dentro de los círculos de medición # 3 y # 4, lo que significa que
solo la concentración de estrés en Los pilares se agravan. El factor de seguridad para el pilar #
1 más estresado se reduce
 Vertical displacement contour after central pillar recovery in static analysis

a 1.12, y la carga vertical en el pilar # 1 puede ser tanto como 2.8 veces mayor que en las
masas de roca dentro del círculo de medición # 4.

Como se ilustra en la Fig. 9, la capacidad de soporte de todos los pilares remanentes no se ve

afectada, con solo unas pocas grietas de tensión que se forman en los dos pilares más
cercanos en los lados cerca del pilar retirado. La Figura 10 presenta el contorno de
desplazamiento vertical después de la recuperación del pilar. Como no se derrumba ningún
pilar después de la recuperación del pilar central, el contorno de desplazamiento es simétrico,
y la elevación del piso inducida y el hundimiento del techo caen principalmente entre los dos
pilares más adyacentes al central. El desplazamiento máximo es de alrededor de 30 mm, lo
que ocurre en el techo y el piso recién formados durante el proceso de recuperación del pilar.
Esto sugiere que las regiones influenciadas de la recuperación del pilar son bastante limitadas
en el análisis estático.

5.2. Análisis dinámico de la estabilidad del funcionamiento de los pilares.

5.2.1. Recuperación instantánea de pilares

Characterised by the shortest extraction time, the instantaneous pillar recovery process
can cause the most remarkable dynamic excitation and most severe destruction in
surrounding rock strata. In this section, only dynamic behaviour of surrounding rock and
pillars in response to instantaneous pillar recovery is presented, and the influence of pillar
recovery time will be shown in Sect. 5.2.2.

Figure 11 illustrates the propagation of stress wave arising from the central pillar. In the
figure, all referred times are elapsed times after the central pillar is extracted. It can be
seen that the stress wave front reaches the nearest two pillars in 5 ms, and reaches the
other two in 10 ms. However, it is noted that the wave front is of low velocity, and that
the nearest pillars would not achieve the maximum velocity until 10 ms. In addition, the
maximum induced vibration velocity attenuates rapidly during propagation. For example,
the maximum recorded velocity at 10 ms reduces to as less as one-fifth that at 1 ms.

The vertical vibrations recorded at different velocity monitoring points are presented in
Fig. 12. Since the point a locates on the newly formed roof, the vibration at the point a
initiates almost at the same time of the instantaneous pillar recovery and peaks at 4.29
m/s. From 0.9 ms after the pillar recovery, vibration arises at points b, c and d
chronologically, with a time lag of around 5 ms. The maximum velocity recorded at these
points are 1.85, 0.79 and 0.26 m/s, respectively, which also indicates the quick attenuation
of stress wave with travelling distance.

Figure 13 presents the variation of vertical stresses acting on remnant pillars and
surrounding stratum after the central pillar recovery. The stress on the #1 pillar increases
from 33.2 MPa to the pillar strength 56 MPa at around 30 ms, and then gradually
decreases to a residual value (less than 5 MPa), which means it cannot carry much
overburden any more. Except for the dynamic pillar recovery induced disturbance,
transferred vertical loads from the collapsed pillars are detrimental to the stability of
remnant pillars. After the collapse of the #1 pillar, stress applied on the #2 pillar quickly
increases to the pillar strength and crushes the pillar.

This is followed by marked increases in stresses on rock masses in #3 and #4 stress

measurement circles, and the failure of rock masses in the #3 measurement circle. The
final vertical stress on rock masses in the #4 measurement circle reaches about 80 MPa. In
this way, the instantaneous extraction of a single pillar may trigger the domino instability
characterised by a chain reaction of pillar collapses, leading to severe hazards over large
underground stope areas. In addition, triggered pillar collapses can in turn induce
disturbance in surrounding rock masses. For example, vibrations at monitoring points b
and c begin to increase due to rock

falla en alrededor de 60 ms, y la velocidad en el punto de monitoreo b puede alcanzar

hasta 1 m / s a 100 ms, como se observa en la figura 12.

La Figura 14 ilustra la propagación de grietas con el tiempo después de que el pilar central
se retira repentinamente. Tanto las grietas de tracción como las de corte se forman en
pilares adyacentes sometidos a la recuperación instantánea del pilar. Los colapsos
inducidos de los pilares tienen lugar sucesivamente, desde los pilares más cercanos al pilar
central hasta los más lejanos. Para todos los pilares bajo la perturbación dinámica, las
grietas emergen primero en las esquinas entre los pilares y el techo o el piso en lados
cercanos al pilar removido, y luego crecen gradualmente. Cuando el pilar se acerca a su
capacidad de soporte, las grietas se propagan rápidamente y finalmente se unen en una
falla macroscópica de tipo X distinta. Por ejemplo, al principio solo se producen algunas
grietas en los dos pilares más cercanos al pilar central, y el número de grietas aumenta
enormemente después de 25 ms. Después del colapso de todos los pilares, la sobrecarga
previamente llevada por esos pilares se transfiere a la roca circundante y da como
resultado un daño severo. Además, las grietas de corte macroscópicas se inician desde el
techo y el piso recién formados y se propagan en la dirección vertical a 225 ms, lo que
indica la inestabilidad del modelo goaf. Se observa en la figura que la distribución de
grietas no tiene una forma simétrica. Esto se debe a que los gránulos de masas de roca
están representados por discos circulares unidos, y la geometría de empaquetamiento
aleatorio de partículas introduce heterogeneidad intrínseca en el inicio y la propagación
de grietas. Las nuevas grietas tienden a ocurrir y crecen en las proximidades de las
antiguas donde el estrés se concentra, y la localización de grietas se exacerba.

Los contornos de desplazamiento en los pasos de tiempo correspondientes a los de la Fig.

14 se trazan en la Fig. 15. A diferencia de los resultados del software basado en
continuum, los contornos de desplazamiento extraídos de PFC2D no son simétricos. Esto
se debe a que la ruptura de la unión entre dos gránulos de roca causa un desplazamiento
relativamente grande, y la concentración localizada de grietas daría como resultado una
distribución de desplazamiento asimétrica. A los 25 ms, el desplazamiento máximo alcanza
los 30 mm y la zona de influencia es limitada.

entre los dos pilares más cercanos al central, que es bastante similar al análisis estático. La
zona de influencia se expande a medida que los pilares colapsan progresivamente, y
finalmente abarcan toda la región del pilar. El desplazamiento más grande puede alcanzar
hasta 500 mm a 225 ms, más de 16 veces el obtenido del análisis estático.

5.2.2. Influencia del tiempo de extracción en la respuesta dinámica del pilar

La Figura 16 traza el estado mecánico dinámico del pilar # 1 durante el proceso de

recuperación del pilar para diferentes tiempos de extracción. Con un período de vibración
natural de alrededor de 60 ms, las duraciones de extracción corresponden a 0, 0.17T, 0.5T,
0.83T y 1.67T, respectivamente. Se puede observar una perturbación dinámica notable
para escenarios con tiempos de extracción de 0, 10 y 30 ms. En estos tres escenarios, el
pilar n. ° 1 se aplasta después de que la carga vertical excede la resistencia del pilar y se
alcanza un esfuerzo residual mucho más bajo que el esfuerzo vertical inicial, lo que indica
la pérdida de la capacidad de carga. La variación dinámica del esfuerzo previo al pico en el
escenario con un tiempo de extracción de 10 ms es bastante cercana a la de la
recuperación instantánea del pilar. Para duraciones de extracción de 50 y 100 ms, la
respuesta dinámica del pilar a la perturbación es casi insignificante, y la carga del pilar

se estabiliza a aproximadamente 50 MPa después de la recuperación del pilar. Se observa

que las variaciones de estrés en estos dos escenarios se comparan favorablemente con las
variaciones de R en la figura 5.

La Figura 17 presenta la distribución de grietas a 225 ms para diferentes duraciones de

recuperación del pilar central. Para escenarios con duraciones de extracción de 10 y 30
ms, la perturbación causada por la recuperación del pilar central se dispara relativamente
 colapsos violentos de pilares e inestabilidad general del modelo goaf. Es más probable que
se produzcan grietas de tracción, y se podría observar un patrón de falla macroscópica de
tipo X en los pilares colapsados, que es bastante similar al escenario de recuperación
instantánea de pilares. En contraste, no se aplastan pilares vecinos para escenarios con
duraciones de extracción de 50 y 100 ms, y solo se producen algunas grietas en los lados
incidentes de la perturbación dinámica. Los resultados de la variación del estrés y la
distribución de grietas muestran que el tiempo de recuperación del pilar es un factor
significativo que influye en el comportamiento dinámico inducido de los pilares.

6. Discusión

El presente análisis teórico verificó que la carga repentina en un pilar pretensado puede generar
una excitación dinámica notable. Luego se modeló todo el proceso de recuperación dinámica de
pilares, propagación de ondas y carga en pilares vecinos, y los resultados sugirieron que la
perturbación inducida por la recuperación dinámica de pilares tiene una influencia significativa en
la estabilidad de los pilares vecinos.

Si bien solo se producen pequeños desplazamientos en una región limitada en la vecindad del pilar
eliminado en el análisis estático, la inestabilidad del dominó del trabajo de los pilares vecinos
tendrá lugar en respuesta a la recuperación dinámica del pilar.

Los factores que influyen en el comportamiento del funcionamiento de los pilares vecinos se
pueden clasificar en tres categorías: resistencia de los pilares, niveles de estrés estático y niveles
de estrés dinámico. Los niveles de estrés estático dependen principalmente de los estados de
estrés iniciales y los diseños de minería (ancho de pilar, espaciado de pilares y relaciones W / H,
etc.) (Wang et al. 2016). Los niveles de tensión dinámica están asociados con el proceso de
recuperación del pilar caracterizado por la duración de la extracción y la atenuación de la onda
sísmica, que a su vez está relacionada con el espaciado del pilar y las propiedades de la masa de
roca, etc. Vale la pena señalar que el impacto de la distancia desde el pilar retirado es doble. . En
términos de distribución de tensión estática, es preferible una corta distancia entre los pilares
residuales y el extraído en aras de soportar la sobrecarga y aumentar los factores de seguridad.
Por otro lado, se puede causar una fuerte perturbación dinámica en los pilares circundantes
mediante la extracción de un pilar ubicado en las proximidades. Sin embargo, la onda sísmica se
atenúa rápidamente con la distancia recorrida y, por lo tanto, el efecto dinámico inducido podría
ser mínimo cuando el funcionamiento de los pilares residuales está lejos del eliminado, según las
Figs. 11 y 12.

A partir de análisis teóricos y numéricos, se reconoció que si los pilares se extraen de forma
cuasiestática, no se induciría excitación en los estratos circundantes, y un pilar vecino permanece
estable mientras la suma de la carga inicial ¬ 0 v y final la carga transferida Δ¬s es menor que la
resistencia del pilar (Fig. 18a, b). Sin embargo, dada la carga inicial y la resistencia del pilar, el
estado de falla y el estado de tensión de un pilar en respuesta a la recuperación repentina del pilar
dependen de la excitación dinámica incidente. La Figura 18 ilustra las cargas de los pilares
verticales que varían con el tiempo después de la extracción repentina de un pilar vecino para dos
casos, en el primero de los cuales el pilar se colapsa, pero no en el último. Una vez que la carga
vertical total del pilar excede el esfuerzo crítico (Ec. 19), el pilar se aplasta y el esfuerzo vertical cae
a un esfuerzo residual mucho más bajo que el esfuerzo inicial, lo que sugiere que la carga
emprendida por este pilar se agrega principalmente al carga transferida (Fig. 18a); de lo contrario,
el pilar oscila a la frecuencia natural de las masas rocosas, y la carga vertical del pilar finalmente
converge al estado de tensión final, igual al alcanzado en el escenario de extracción cuasiestática
(Fig. 18b). Se observa que el tiempo de colapso del pilar causado por la perturbación dinámica no
es concurrente con eso cuando se alcanza la velocidad máxima de vibración del pilar. Por ejemplo,
se alcanza la velocidad de vibración máxima del pilar n. ° 1

at 10–15 ms (as estimated from Figs. 11, 12), and the pillar is crushed at around 30 ms (as shown
in Fig. 13). This is because the maximum velocity is always achieved at the equilibrium position of
the pillar (with deformation Δs in Fig. 3), while the maximum stress is reached when the pillar is
further compressed (with deformation greater than Δs in Fig. 3). The failure state of pillars is
evaluated based on the vertical pillar load rather than the pillar vibration velocity.

7. Conclusión

La estabilidad del funcionamiento de los pilares es de gran importancia en la explotación minera.

En el presente estudio, se desarrolló un modelo mecanicista para evaluar la carga que actúa sobre
un pilar adyacente a un pilar eliminado dinámicamente sobre la base del método basado en la
teoría del arco de presión (PAT) y la dinámica estructural. En el modelo, se supone que los pilares
son linealmente elásticos antes de que ocurra la falla. Para cualquier pilar en la vecindad del
removido, está bajo los efectos combinados de la carga vertical estática inicial y la tensión
dinámica inducida por la recuperación del pilar. La perturbación inducida a un pilar puede
caracterizarse por el coeficiente de amplificación dinámica R, la relación entre la carga vertical
incrementada del pilar y la carga transferida. Los resultados del cálculo mostraron que Rmax está
asociado con el tiempo de extracción y el período de vibración natural de la masa rocosa. En la
práctica de recuperación de pilares utilizando el método de voladura, el tiempo de extracción es
de uno a dos órdenes de magnitud menor que el período de vibración natural de la masa rocosa, y
Rmax puede exceder 1.5 o incluso aproximarse a 2.

La estabilidad del funcionamiento de los pilares vecinos sometidos a la extracción dinámica del
pilar central en un sistema bidimensional de cinco pilares se simuló en modo estático y dinámico
utilizando PFC2D. También se investigó la influencia del tiempo de recuperación del pilar en la
estabilidad de los pilares adyacentes. La respuesta dinámica de los trabajos de pilares vecinos
obtenidos en la simulación estuvo en buen acuerdo con los calculados usando el modelo
mecanicista, y ambos resultados indicaron que la perturbación del pilar dinámico puede reducirse
aumentando el tiempo de recuperación del pilar. Además, se descubrió que los pilares adyacentes
al pilar eliminado permanecen estables en el análisis estático, mientras que el modelo goaf es
inestable sujeto a la recuperación dinámica del pilar en el análisis dinámico. Estos resultados
indicaron que la carga máxima que soportan los trabajos de pilares se subestimaría en gran
medida si se ignora el efecto dinámico resultante de la recuperación de pilares en el diseño de
trabajos de pilares.

Los trabajos de pilares diseñados para pequeños factores de seguridad pueden considerarse
estables de acuerdo con los métodos convencionales, mientras que, de hecho, la inestabilidad del
pilar de dominó puede desencadenarse en caso de perturbación dinámica. En aras de la seguridad
minera, se recomienda tener en cuenta la perturbación inducida por la recuperación dinámica de
pilares en el diseño del método de recuperación de pilares.