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01 - COMENTARIOS A LA LEY 29227 - Christian Hernández Alarcón PDF
01 - COMENTARIOS A LA LEY 29227 - Christian Hernández Alarcón PDF
Así, nuestro sistema normativo ha regulado el proceso divorcio como respuesta legal a
la crisis matrimonial desde dos perspectivas: una sancionadora, donde el divorcio se
otorga previa acreditación judicial en un proceso de conocimiento de situaciones
fácticas que implican la culpabilidad de alguno de los cónyuges, con los consecuentes
efectos desfavorables en su contra y de otro lado desde una perspectiva de remedio,
donde éste se produce por la constatación judicial en un proceso sumarísimo del quiebre
de la convivencia conyugal, sin tomarse en cuenta la culpabilidad o responsabilidad de
los cónyuges. A esta última perspectiva pertenece la Separación Convencional.
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2. ¿Representa la asignación de la Competencia Notarial y Municipal en los casos
de Separación Convencional y Divorcio Ulterior mayores facilidades para el
Divorcio?
Cabe preguntarnos si con el denominado “Divorcio Rápido”, las cosas van a ser más
simplificadas o si por el contrario; la desjudicialización sólo implicará la
administrativización del procedimiento en sede Municipal o Notarial. En las siguientes
líneas abordaremos las novedades de esta norma tratando de responder esta interrogante.
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como competentes para el trámite de separación convencional, por aplicación supletoria
de la competencia territorial regulada en la norma glosada del Código Procesal Civil, en
virtud del artículo 3 de la Ley Nª 26662, Ley de Competencia Notarial en asuntos no
contenciosos.
2.2. La Negociación Previa, como requisito ineludible que deben cumplir los
cónyuges que pretenden separarse convencionalmente
El procedimiento rápido que comentamos no simplifica esta negociación, sino que por
el contrario, a diferencia del trámite judicial donde todo se plasma en la propuesta de
convenio la cual incluso puede ser complementada, aclarada y modificada en la
audiencia, exige -para que pueda iniciarse el trámite- una declaración de no tener bienes
sujetos al régimen de la sociedad de gananciales o la inscripción en los Registros
Públicos de la Escritura Pública de separación de patrimonios, sustitución o liquidación
del régimen patrimonial. Así como la existencia de títulos de ejecución (sentencia firme
o acta de conciliación) que regulen la patria potestad, tenencia, régimen de visitas y
alimentos, o en su defecto declaración jurada de no tener hijos menores o mayores
incapaces.
En el caso de los cónyuges que no tengan ya resuelto de modo previo estos aspectos, la
obtención de estos requisitos, significará la asunción de un costo adicional de tiempo y
dinero. Considérese por ejemplo la elaboración de una sustitución del régimen
patrimonial por Escritura Pública y sus respectivos costos de inscripción en los
Registros Públicos. Asimismo, en cuanto al régimen de patria potestad, tenencia,
régimen de visitas y alimentos, debe tomarse en cuenta el tiempo que implicará la
obtención de un acuerdo a nivel de Centros de Conciliación especializados en familia,
Demunas o Fiscalía de Familia. Por ello, creemos que los principales beneficiados con
esta norma, no van a ser precisamente las personas más pobres y humildes de la
sociedad; sino principalmente las personas con recursos económicos suficientes para
asumir estos trámites previos y que encontrarán en este procedimiento un mecanismo
eficiente para privatizar o mantener en reserva la tramitación de su divorcio. Más aún, si
como señala la Disposición Complementaria de la norma bajo comentario, se incluirán
las respectivas modificaciones de los TUPAS de las Municipalidades para el cobro de
las tasas respectivas, esto sumado a los costos propios de los trámites notariales,
creemos que estamos ante un divorcio a la carta, cuyo costo dependerá de las leyes de la
oferta y la demanda, así como del estrato socio económico donde esté el municipio en
que se realizará el procedimiento.
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2.3 El Trámite Notarial y Municipal de Separación Convencional
El trámite notarial y municipal conforme a la norma bajo comentario, presenta los
siguientes momentos:
Periodo de Calificación: Que son los 15 días que las Municipalidades y Notarias
tienen para la calificación de los requisitos legales, la cual incluye en el caso de las
municipalidades, el visto bueno del área legal o del abogado de la municipalidad, y
la convocatoria a una audiencia única.
Al respecto, aunque debemos reconocer que el periodo de calificación señalado en
la norma es mucho más real que las 48 horas que la Ley Orgánica establece en su
artículo 153°, esperamos que este plazo legal, no se convierta también en un plazo
más que no se cumple.
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divorcio ulterior, y que para mayor concordancia han sido ratificados mediante la
modificación introducida por la norma bajo comentario de los artículos 354 del
Código Civil y 580 del Código Procesal Civil. Teniendo el Alcalde o Notario 15
días para resolver la solicitud de disolución del vínculo matrimonial.
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6. Comentario Final
Creemos que la norma bajo comentario, expresa la opción legislativa de
desjudicialización de los procesos de separación convencional y representa el último
esfuerzo por la simplificación del proceso de divorcio.
No obstante, creemos que en su configuración dadas las facilidades preexistentes en el
proceso judicial, no aportará una diferencia notable en términos de celeridad y
prontitud, pues a diferencia de la vía judicial donde se propone una propuesta de
convenio sujeta al control y calificación de un tercero imparcial (Juez) con la
participación del guardián de la legalidad (Ministerio Público), supone el arribo previo
de acuerdos finales dejando únicamente pendiente de resolver la declaración de
separación y divorcio ulterior, decisiones que implican tiempo y costo económico.
Por otro lado, el hecho de que se haga silencio sobre la competencia de las notarias y
municipios de la jurisdicción del último domicilio de los solicitantes pone en sería duda
la disminución de costos de tramitación, pues muchas veces los solicitantes no estarán
viviendo en el lugar de celebración del matrimonio ni en el del último domicilio
conyugal.
Asimismo, es preocupante que el procedimiento encierre serias divergencias con el
tratamiento legal de la separación convencional a nivel judicial, como si respondiera a
un sistema de divorcio del que no forma parte.
Por último, la existencia de libertades para el establecimiento de tarifas en las tasas
entre las municipalidades y notarias, y el establecimiento de requisitos que avizoramos
no van a poder ser cumplidos por todos los municipios del país, nos colocan frente a un
divorcio a la carta, a la medida del bolsillo de los solicitantes, que no resolverá el
problema de las personas que encontrándose separadas de hecho y con la voluntad de
disolver su vínculo matrimonial no lo pueden hacer por falta de recursos económicos.