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UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES

Seminario: Análisis de discursos sociales, políticos y mediáticos.

Problemas teóricos y metodológicos

Presentado por: Liliana Pardo Montenegro (CONICET-UBA-IEALC)

Correo: lilianapardomontenegro@gmail.com

GAITÁN: LA VOZ DE UN PUEBLO

Contenido:

Preludio

El círculo de Bajtín

La voz de un pueblo: Gaitán

El discurso de la masacre de las bananeras

La construcción del movimiento Gaitanista

Conclusiones
GAITÁN: LA VOZ DE UN PUEBLO

“[…] la voz de Gaitán era la voz del pueblo. Así lo sentía el pueblo, pero, más
notable, así lo sentía Gaitán: no se dirigía al pueblo, sino que hablaba en su
nombre y con su voz”

Antonio Caballero CITATION CAS84 \p 30 \l 11274

Preludio

Algunos de los conceptos centrales de las teorías enunciativas, argumentativas y


narrativas del siglo XX, son tomados en este análisis del discurso político de Jorge
Eliécer Gaitán en su primer debate legislativo, enunciado al segundo día de su
posición en la Cámara de Representantes, el 21 de julio de 1929, y llevado a cabo
en las sesiones de los días 3, 4, 5 y 6 de septiembre del mismo año.

La polifonía, la intertextualidad y el concepto de dialoguismo de Bajtín (1999) son


parte de la revisión de este corpus de análisis por el uso que hace Gaitán de notas
de prensa, denuncias de testigos, edictos del ejército y otros recursos que hacen
evidente que el “uso de las palabras en la comunicación discursiva siempre
depende de un contexto particular” CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , en el cual el discurso
político está enmarcado y la significación del discurso social que esta puesto en el
podio de un representante político hace alusión a una problemática de conjunto,
en este caso un hecho histórico de los inicios del siglo XX en Colombia, la
masacre de los trabajadores de la zona bananera del Urabá, perpetrados por el
ejército, obedeciendo órdenes de la multinacional United Fruit
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Company .

La noción de signos ideológicos de Volóshinov (2014) es el tópico a ser tenido en


cuenta, en relación a la carga ideológica que el discurso de Gaitán posee, en
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 
CABALLERO, Antonio (1997) “Gaitán, el hombre que inventó un pueblo”. El Tiempo. 21
de diciembre.
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Esto mismo que puede leerse en la Estética de la creación verbal: “enunciados concretos
(escritos y orales) relacionados con diferentes esferas de la actividad humana y de la comunicación; estos
enunciados pueden ser crónicas, contratos, textos legislativos, oficios burocráticos, diversos géneros
literarios, científicos o periodísticos, cartas particulares y oficiales, réplicas de un diálogo cotidiano (en sus
múltiples manifestaciones), etc., y de allí los investigadores obtienen los hechos lingüísticos necesarios”
(BAJTÍN, 1999, pág. 249)
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Esta multinacional de Estados Unidos pasa a denominarse luego “Chiquita Brands
International”, según Matías Longoni (2014) “fue fundada en 1871 por el empresario de ferrocarriles
estadounidense Henry Meiggs. Se llamaba entonces United Fruit Company y tenía su cuartel central en
Charlotte, en Carolina del Norte”. Tomado de: LONGONI, Matías (2014) “Una empresa ícono del
colonialismo de EE.UU. pasa a manos de Brasil”. Diario Clarín, 28 de Octubre. Disponible en:
http://www.ieco.clarin.com/economia/Chiquita_brands-bananas-frutas-brasil_0_1238276457.html

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sentido de indagar las nociones constantes que solidificaran su carrera política,
pronunciadas en este primer discurso. La carga simbólica del lema “La
restauración moral de la República”, estandarte de la campaña presidencial de los
años de 1945 y 1946, es analizado a partir de la siguiente definición “[t]odo signo
ideológico, incluyendo el verbal, al plasmarse en el proceso de la comunicación
social está determinado por el horizonte social de una época dada y de un grupo
social dado” [ CITATION VOL14 \p 47 \l 11274 ] . Este horizonte social, es precisamente
el objeto del presente análisis, intentando ver en este acto comunicativo, tanto la
defensa a un grupo social determinado, como la acusación a los responsables
destinatarios de este discurso, en este caso, al Congreso de la República y al
gobierno de turno.

Los cargos que lanza Gaitán en este discurso apelan a: 1) el desfalco al tesoro
público, 2) las relaciones del ejército con la United Fruit; 3) los hechos de la noche
del fusilamiento a los obreros del 6 de diciembre de 1929; 4) la derogación de un
estado de sitio en contra del derecho al desarrollo de la huelga de los obreros; 5)
las condiciones económicas de los colombianos, frente a la codicia corruptora de
la United Fruit; y 6) las actuaciones del gobierno. El análisis de este corpus
discursivo, se concentra en disgregar el enunciado Gaitanista de “Yo no soy un
hombre, soy un pueblo”, haciéndolo explícito en su discurso, el discurso de Gaitán,
es el discurso de un pueblo masacrado, el de los obreros, el de sus familiares, es
el discurso del pueblo colombiano.

A propósito Volóshinov (2014), en su estudio sobre la filosofía del lenguaje, se


dedica precisamente a revisar la ideología desde los signos sociales, es por esto
que el análisis que hacemos tiene como punto de partida esta premisa: “La
realidad ideológica es una superestructura inmediata que surge sobre la base
económica. La conciencia individual no es el arquitecto de la superestructura
ideológica, sino tan sólo un inquilino alojado en el edificio social de los signos
ideológicos” [ CITATION VOL14 \p 34 \l 11274 ] . Entendiendo este postulado, el discurso
de Gaitán se traduce en una comunicación semiótica que busca por medio de la
oratoria la conquista del poder para el pueblo, esto es, justicia ante el fusilamiento
perpetrado por las fuerzas militares al movimiento obrero.

El propósito de este análisis, lo conforman e integran un conjunto de elementos en


la redacción de los apartados, primero está el corpus del discurso en el Congreso
de la República sobre la masacre a los obreros de la zona bananera, teniendo la
transcripción de las intervenciones de los cuatro días consecutivos en que sesionó
el debate legislativo; luego son tomadas fuentes teóricas de la lingüística del
circulo de Bajtín; la Filosofía del lenguaje de Volóshinov; y el Materialismo
Histórico de Bujarin, que defienden la lectura desde las definiciones conceptuales
de los signos ideológicos. Además, se tienen en cuenta fuentes de segunda mano,

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libros, tesis, artículos de expertos académicos sobre el periodo estudiado, sobre la
vida y obra de Gaitán y sobre la masacre de las bananeras. Con estos elementos,
hilamos la escritura, en sentido de comprender más allá del discurso estudiado, la
trascendencia de la construcción ideológica del movimiento Gaitanista.

Sobre la situación social, económica y política de los años veinte

En la misma lógica que Volóshinov (2014) entiende los discursos como hechos
sociales, como hechos históricos; comprendemos la trascendencia de los hechos
que hacen el discurso, la relevancia histórica que se le presta, y el peso de los
signos ideológicos que contiene; siendo estos referencia de construcción de un
movimiento que abarca un espectro más amplio. El caso estudiado aporta causas
al surgimiento de una ideología anti-imperialista, sustentada en el rechazó a los
atroces acontecimientos del 5 y 6 de diciembre de 1928, con fundamento en el
accionar represivo de las inversiones extranjeras directas en el territorio
colombiano, el cual devela los intereses económicos del capitalismo imperialista
de Estados Unidos desde comienzos del siglo XX, a la vez, que en el discurso de
Gaitán, el hecho social del discurso político de la masacre de las bananeras es un
hecho histórico que demanda justicia social para todo el movimiento obrero.

En los comienzos del siglo XX, en el continente se impone la “ideología del


desarrollismo” CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , la cual se sustentará en un proyecto político-
económico que entra en puja entre dos bloques hegemónicos, la saliente
“regeneración conservadora” que se mantuvo en el poder del Estado desde 1886
hasta 1930, y la denominada “hegemonía liberal” que tomaría el poder en 1930 a
raíz de la inconformidad del pueblo frente a las crisis que genero el ingreso del
proyecto de modernización desarrollista hasta las elecciones de 1946, en las
cuales se hizo evidente que las divisiones de las fracciones del Partido Liberal
desembocarían en dos bloques hegemónicos distintos en el mismo partido, uno en
la candidatura de Jorge Eliécer Gaitán quien se había tomado la dirección política
con el apoyo mayoritario de las bases populares, y por otro, la candidatura
oficialista de Gabriel Turbay. En los resultados, la división del Partido, dio paso a
la elección de la candidatura del Partido Conservador, entregándole la presidencia
a Mariano Ospina Pérez.
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
En los comienzos de su investigación Miriam Limoeiro Cardoso (1975) define la
ideología dominante, como la ideología de las clases dominantes, ligadas a un modelo económico, en este
sentido define así la ´ideología del desarrollismo´: “La ideología del desarrollo, que imbuye a buena parte de
los países subdesarrollados en el período en que se acentúan estas nuevas tendencias en la producción
capitalista internacional, se forma básicamente con los elementos de la expansión económica acelerada, que
se traduce en desarrollismo, y de la defensa ´ideológica´ del mundo occidental, con el anticomunismo”
[ CITATION LIM75 \p 14 \l 11274 ].

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Las bases económicas en los comienzos del siglo XX en Colombia, fueron las
conductoras de la superestructura ideológica, en tanto la creciente movilización
por mejoras salariales determinó la formación de la conciencia de clase del
naciente movimiento obrero. Los años veinte son marcados por una proliferación
de protestas originadas por los movimientos obreros y sindicatos que comenzaron
a conformarse con el incipiente modelo de modernización que pretendió pasar del
trabajo artesanal y manual, al propiciado por maquinas a gran escala, aglutinando
en fábricas y enclaves económicos a un significativo número de trabajadores. En
el sector agrario, los enclaves de monocultivos con inversión extranjera de
multinacionales, utilizaron esta mano de obra en las siembras y tiempos de
cosechas; en las fabricas de textiles, la confección contrajo una creciente
demanda de mano de obra de mujeres, al igual en los jornales de los cultivos de
café y en las trilladoras cafeteras; los proyectos ferroviarios fueron trabajadores
provenientes del campo, como en los sectores de construcción de las obras
públicas. En cada sector, fueron unificando las luchas de la clase obrera que por
fuerza del proyecto de modernización quedaron dependientes del trabajo
asalariado.

La modernización modificó la vocación agrícola, según datos de la CEPAL, en


1925, Colombia dedicaba el 68.6% de su población económicamente activa al
sector agropecuario; lo cual fue cambiando por la fuerza del uso y la propiedad de
los suelos (Vega Cantor, 2002). El desplazamiento forzado del campo a la ciudad,
violentó la movilidad social de la mano de obra del pueblo. Tal proyecto, fue
condicionado por el imperialismo norteamericano, tras la guerra de los mil días
que terminó con la perdida de Panamá en 1903, y la posterior indemnización que
acreditará el gobierno de Estados Unidos a Colombia en 1914, todo esto forjó a la
par que una creciente instalación de enclaves agrícolas con capitales extranjeros,
un fuerte sentimiento popular anti-imperialista.

Sin desconocer que el modelo económico a comienzos del siglo XX en Colombia,


cambio al compás de los tiempos de las guerras mundiales. Tanto el sistema
colonial de las haciendas y modelos de patronazgo, como la abolición del sistema
de esclavitud que mantuvo las explotaciones de minerías de oro, plata y cobre
hasta mediados de siglo XIX, fueron transformados en los comienzos del siglo XX.
Las transformaciones se dieron con un gran protagonismo del movimiento obrero,
a partir de sus demandas de mejoras de condiciones de vida, en movilizaciones
contra los propietarios de los enclaves, de las industrias y de una burguesía
terrateniente, orientados con los signos ideológicos de la desigualdad socio-
económica, la clase obrera enfrento la toma de decisiones de los jefes de Estado,
en contra del modelo desarrollista primario-exportador.

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El círculo de Bajtín

De Mijaíl Bajtín (1895-1975)

El análisis de discurso que nos proponemos realizar de la intervención de Jorge


Eliécer Gaitán en el congreso de la República de Colombia, lo hacemos desde la
investigación del enunciado, la comunidad discursiva es el eje de la investigación
en lingüística que realiza el círculo de Bajtín, en el capítulo “géneros discursivos”,
de su obra Estética de la creación verbal, una de las preocupaciones en el
pensamiento de este autor, es la filosofía moral, de lo cual tomamos nota al
apreciar la crítica de los valores existenciales, con el propósito de relacionarlos en
el análisis de la “restauración moral de la República”, lema de campaña en la
candidatura presidencial de Gaitán en 1946.

Bajtín (1999) utiliza los enunciados donde se reflejan las condiciones específicas y
el objeto de cada una de las esferas, nos dice “no sólo por su contenido (temático)
y por su estilo verbal, o sea por la selección de los recursos léxicos, fraseológicos
y gramaticales de la lengua, sino, ante todo, por su composición o estructuración.
Los tres momentos mencionados -el contenido temático, el estilo y la composición-
están vinculados indisolublemente en la totalidad del enunciado y se determinan,
de un modo semejante, por la especificidad de una esfera dada de comunicación”
[ CITATION BAJ99 \p 248 \l 11274 ] .

Según lo cual, investigar los discursos primarios (simples) y secundarios


(complejos), es realizar un análisis de contenido, donde más allá de la revisión
incisiva de la estructura del texto, según la revisión de unos recursos léxicos o de
una tipología textual, es en la naturaleza del enunciado en lo que nos fijaremos al
buscar en la oratoria del discurso de la masacre de las bananeras, el contexto
social y político y los signos ideológicos que permiten crear una respuesta tardía a
los oyentes de este discurso, el cual sigue repercutiendo en la historia social y
política de Colombia.

En este caso nos referimos a un discurso secundario, una composición compleja,


en la forma, es un discurso del orden de la organización científica desde la
jurisprudencia penal, carrera de la cual Gaitán había obtenido honores por su tesis
doctoral, y a la vez es un discurso político, el de un parlamentario en ejercicio de
su curul de Representante en la Cámara del Congreso de la República. En el
contenido, es un discurso social crítico, en el sentido de la identificación con el
movimiento obrero, es la realización de una obra compuesta en las escalas de la
organización social e interdisciplinaria por los campos teóricos a los cuales acude.

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El análisis que presentamos, es a la vez una respuesta a la obra de Gaitán,
tomando los enunciados de su oratoria y priorizando el contendido de los signos
ideológicos que forjan el carácter de la lucha del movimiento obrero por la mejora
de sus condiciones salariales en la zona de los enclaves bananeros de la
multinacional Unit Fruit Company.

La crítica a este modelo de agronegocios con la inversión de capitales extranjeros,


comprende la ubicación de una ideología anti-imperialista en el discurso de
Gaitán, el cual apela en el discurso, convocando al pueblo a levantarse por medio
de la denuncia pública en un debate legislativo de lo que está aconteciendo en las
periferias de los puertos. En razón a la clasificación que hace Bajtín (1999) en
referencia a los “modelos de enunciados valorativos”, Gaitán utiliza los de
reprobación e injuria, en repudio a los hechos cometidos, esto se puede leer en el
siguiente enunciado:

“Hay un contraste profundo entre los hombres de la política y la gran masa


ciudadana. No penséis que vosotros representáis aquí los ideales de los partidos
de Colombia. Esos partidos están por encima de los cananeos que fingen
dirigirlos. Hay una juventud conservadora, hay una juventud liberal, hay una
juventud socialista que mira con asco y con desprecio el triquiñuelismo actual. En
realidad una unión sagrada aglutina a las masas de uno y otro partido en un gran
deseo de reacción contra lo presente” [ CITATION GAI29 \p 56 \l 11274 ]

La referencia de los “cananeos” hace relación a las intervenciones de los oradores


de la dirigencia, de una forma burlesca, en propósito de referir precisamente lo
que estos le causan “asco y desprecio” en relación a los juegos de las élites por
mantenerse en el poder, en la tendencia de las fuerzas armadas del Estado
colombiano a obedecer el interés de los capitalistas, matando y reprimiendo al
pueblo, razón de su existencia. En lugar de usar la fuerza de sus instituciones en
defender la vida de quienes luchan por mejorar las condiciones de vida en sus
territorios.

Gaitán, enuncia al comenzar su intervención como se impuso el modelo de


modernización, de “acumulación por desposesión” (Harvey, 2009), con los
siguientes detalles: “los presos eran llevados a la cárcel porque se habían negado
a vender sus pequeñas propiedades a los mercenarios de la United Fruit
Company. […] los hombres eran sacados de sus viviendas y cogidos a palo,
robados y esquilmados” (GAITÁN, 1929, pág. 25). Esta es la forma en que la
ocupación de ‘lotes’, de ‘baldíos’, de los ‘campos’ de Colombia, se realiza a
comienzos del siglo XX y es precisamente la denuncia que se presenta, apelando
a los hechos y enunciándolos en el recinto del Congreso, escenario donde debían
tomarse las medidas de no repetición de estos acontecimientos.

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Respecto al enunciado citado arriba, es que entendemos su naturaleza, ese
“complejo problema de la relación mutua entre el lenguaje y la ideología o visión
del mundo” (Bajtín, 1999) es lo que está puesto en la importancia de su vocería.
Estudiar la naturaleza de cada uno de los enunciados del discurso, es
precisamente analizar el carácter histórico de la investigación que presenta, sin
detenernos en revisar cada una de las “unidades de la lengua (como sistema)”
esto es en el sentido de ‘la palabra’ y ‘la oración’, trabajo que requeriría un detalle
infinito al saber la extensión de la obra que realiza en sus años de vida.

Respecto a la definición de los roles en la comunicación discursiva que propone


Bajtín (1999), en relación al clásico de la lingüística general, Saussure, su lectura
encuentra un completo acierto, al ver en la naturaleza del enunciado por el
hablante un discurso vivo, que siempre tendrá una respuesta en el oyente, aún en
el mismo silencio, porque la respuesta tardía también es parte de un diálogo en la
línea del tiempo de los discursos complejos CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . Respecto a la
comprensión real y total del discurso enunciado, en el corpus del análisis
referenciado, la respuesta tardía sigue teniendo oyentes, la “comunicación cultural
compleja” equivale a la transcripción de discursos científicos o políticos, que son a
la vez respuesta de otros enunciados, donde el palimpsesto de la secuencia de
discursos como fuentes de investigación son respuestas de oyentes
investigadores que durante el análisis de larga duración de los movimientos
orgánicos de la historia pueden re-significar y seguir creando nuevos enunciados,
en forma de contestación, refutación o complemento al enunciado del autor del
discurso analizado.

En el discurso de la masacre a las bananeras, es posible hallar algunos “ecos y


reflejos de otros enunciados” CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 de la comunidad discursiva
donde ocurrieron los hechos, en los enclaves extranjeros de monocultivos en los
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Esto se define en los géneros de lo que Bajtín denomina “compleja comunicación
cultural”, a lo cual el discurso científico de investigación, puede ser uno de los ejemplos de esta definición, al
respecto cabe citar la aclaración del acto de escucha del oyente o comunidad discursiva a quien se dirige el
hablante: “Claro, no siempre tiene lugar una respuesta inmediata en voz alta; la comprensión activa del
oyente puede traducirse en una acción inmediata (en el caso de una orden, podría tratarse del
cumplimiento), puede asimismo quedar por un tiempo como una comprensión silenciosa (algunos de los
géneros discursivos están orientados precisamente hacia este tipo de comprensión, por ejemplo los géneros
líricos), pero ésta, por decirlo así, es una comprensión de respuesta de acción retardada: tarde o temprano
lo escuchado y lo comprendido activamente resurgirá en los discursos posteriores o en la conducta del
oyente” [ CITATION BAJ99 \p 51 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
La forma de asumir las palabras que se leen o escuchan en otros discursos, constituye
una comunicación estratégica en momentos en que los ecos o los reflejos pueden distorsionar o llenar de
confusión el mensaje, vale tener en cuenta que los “enunciados ajenos pueden ser introducidos
directamente al contexto de un enunciado, o pueden introducirse sólo palabras y oraciones aisladas que en
este caso representan los enunciados enteros, y tanto enunciados enteros como palabras aisladas pueden
conservar su expresividad ajena, pero también pueden sufrir un cambio de acento (ironía, indignación,
veneración, etc.)” [ CITATION BAJ99 \p 257 \l 11274 ]

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años veinte en Colombia. Esto que podría denominarse estilo del enunciado en el
estudio de los géneros discursivos, el estilo del orador, tiene una de las tantas
causalidades del origen y tiempo de los autores que estudian el análisis del
discurso en la época del círculo de Bajtín, misma época en la cual se encuentra
Gaitán estudiando en Europa, sin tener precisión que sus maestros fuesen sólo
italianos o forjará relación con algún círculo soviético en aquellos años. Decir
bolchevique, es evocar a un Gaitán que intenta crear una revolución política a
comienzos del siglo XX en Colombia, participando en las elecciones, tomándose la
dirección del partido, haciéndose carrera política con el apoyo de las bases,
confrontando con las ideas consolidadas del mismo liberalismo.

A la luz de la referencia de Alexander Matveïevitch Peshkovski (1930), quien


según Bajtín (1999) crea un “experimento estilístico” inventando variantes en el
análisis del discurso literario, hace posible ver no sólo su dedicación a la creación
del propio círculo, sino a su asistencia a grupos de estudio como el de la
“Sociedad Literaria” Nikitinskaya, donde hemos de suponer conoció a
Peschkovski. La clasificación de los estilos, según la función: científica, técnica,
periodística, oficial, cotidiana; es, no obstante, una tendencia de la escuela
estructuralista, en la inclinación a clasificar o dividir por tipologías. En el caso del
estilo del discurso de Gaitán, unificaría varias sino casi todas las funciones
señaladas CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 .

De Valentín Nikoláievich Volóshinov (1895-1979)

Sintetizar los aportes que brinda el estudio del análisis del discurso en la obra: El
marxismo y la filosofía del lenguaje, en este breve estudio, es priorizar las
referencias a la categoría de “signo ideológico” y su método de investigación en
relación a la “ideología en el discurso”, como vector del análisis del discurso de la
masacre de las bananeras. La construcción de una ideología anti-imperialista, que
forja Gaitán en este discurso, parte de demandar a las clases dominantes
presentes en el recinto, primeros oyentes del discurso; y al mismo tiempo dirige el
discurso al pueblo que no se encuentra en el recinto, sino que le escuchará luego
en la resonancia del alcance de su voz. En el discurso, reivindica al pueblo, al
movimiento obrero, a las clases de los trabajadores que puedan identificarse con
los acontecimientos padecidos en otras regiones en las mismas fechas, entre
otros, los hechos de Barrancabermeja donde el levantamiento de 8.000
trabajadores contra la Tropical Oil Company y la Andian National Corporation
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
La condición que brinda en relación al estilo es la siguiente: “el estilo tiene que ser con
determinados tipos de estructuración de una totalidad, con los tipos de su conclusión, con los tipos de la
relación que se establece entre el hablante y otros participantes de la comunicación discursiva (los oyentes o
lectores, los compañeros, el discurso ajeno, etc.)” [ CITATION BAJ99 \p 255 \l 11274 ]

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terminaron con el fallecimiento de 15 obreros, en 1927 (MEDINA, 1984; PÉCAUT,
1987).

En una entrevista que le hiciera Moreno Torralbo a Gaitán (1943), este se describe
a sí mismo, y en uno de los apartados, declara que en los comienzos de su
militancia política, acompaña a Carlos Arango Vélez, joven que había estudiado en
Europa, en una intervención donde se revela como partidario de Lenin, a quien
considera el “más grande de los revolucionarios modernos” [ CITATION GAI43 \p 9 \t \l
11274 ]. La ideología anti-imperialista, forjada desde los inicios de su trayectoria
académica y política, esta también descrita en esta entrevista, en su primera
intervención, al comienzo de su carrera, se debatía la firma de un Tratado con
Estados Unidos en el Congreso de la República, y luego de la intervención de
José Vicente Concha, quien ya se había opuesto a la firma de un anterior tratado
en 1902 siendo embajador de Colombia en EE.UU., y quien fuera presidente en
Colombia entre 1914-1918, encargado de declarar a la República neutral en la
Primera Guerra Mundial, al final de su vida, siendo embajador en Italia durante el
gobierno de Mussollini, había viajado ‘expresamente’ a atacar el nuevo tratado que
se firmaría luego del debate en el Congreso de la República, al cierre de la
intervención de Concha, Gaitán siendo parlamentario gritaría: “¡Viva la soberbia
Nacional!”.

Con esta soberbia, forjó una ideología anti-imperialista, la cual aporta a la


investigación de la totalidad del intervencionismo de las multinacionales en el
sistema de enclaves extranjeros en los países del continente suramericano, en
este caso, en Colombia. Los enclaves con inversiones extrajeras siempre
contrajeron intereses económicos que fueron defendidos por la fuerza pública,
cuando no con fuerzas privadas, donde el uso de las armas se utilizó para
asesinar al pueblo en los territorios donde prometían progreso y desarrollo con la
llegada de la modernización.

Las riquezas no fueron distribuidas entre los habitantes dueños del suelo por
derecho propio, por habitarlo, por nacer en el lugar, por defender su
biodiversidad CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . Los enclaves e insipidos proyectos de
industrialización beneficiaron a los extranjeros imperialistas, luego de la firma de
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Lamentablemente esto sigue pasando, casos como el del proyecto “La Colosa” en el
municipio de Cajamarca, Tolima de minería a cielo abierto de lixiviación con cianuro que la multinacional
sudafricana AngloGold Achanti (AGA), la venta a la canadiense Bellhaven Copper & Gold Inc, de la concesión
minera La Garrucha, ubicada en el municipio de Fredonia, Antioquia; son el telón de fondo de los intereses
de la política económica de confianza inversionista que ha tenido continuidad desde el año 2002 hasta el
presente año 2016, en los gobiernos del expresidente Álvaro Uribe Vélez (2002-2006; 2006-2010) y del
actual presidente Juan Manuel Santos (2010-2014; 2014-2018). Respecto a estos temas ver: GARCÍA PARRA,
Renzo Alexander (2012) “La Colosa, primer proyecto de minería a cielo abierto de lixiviación con cianuro en
el centro de Colombia. Una lectura alternativa desde el movimiento social y ambiental” [ CITATION
TOR121 \l 11274 ]

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los acuerdos de libre comercio desde comienzos del siglo XX, estos siguieron
reproduciendo un modelo económico primario-exportador, consistente en la venta
de las riquezas en contra de los intereses del pueblo; por esto, la defensa de los
intereses de las mayorías, se consolidaba en el proyecto de Gaitán: “la conquista
del poder para el pueblo” [ CITATION VAL12 \p 9 \t \l 11274 ].

Entendiendo el proyecto político de Gaitán, el análisis de su oratoria, parte de


hallar los “signos ideológicos” que dan cuenta de una ideología anti-imperialista.
El signo entendido como ese “territorio material, sociológico y significante”
[ CITATION VOL14 \p 65 \l 11274 ] , es tomado desde su significante, a partir de la
máxima de Saussure, de su imagen acústica. Lo cual implica leer o escuchar el
territorio (el discurso). En los materiales de las investigaciones, en los significados
(los conceptos), se definen los contenidos temáticos que aborda una investigación,
en este caso, es el territorio de los “signos ideológicos” del discurso de Gaitán.

Leemos con Volóshinov (2014) que “todo lenguaje es ideológico, todo lo que
significa hace signo en la ideología. En una ponencia titulada: Palimpsestos de
ideas: Papel de la ideología y el discurso en la forma de organización de la
sociedad CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , fijamos el estudio de los conceptos de ciencia e
ideología partiendo de una pregunta “¿Puede hablarse del discurso de la ciencia
como ideología?”, con el propósito de revisar cuáles son los discursos ideológicos
dominantes que han permanecido en el mantenimiento del poder del Estado
colombiano, la indagación hecha de los diferentes tratados que se han escrito
sobre los significados de la ideología, implicó volver a los estudios de la filosofía
del lenguaje, cuestionando “¿cómo se crea el pensamiento? ¿Se observan cosas
que proporcionan ideas o se tienen ideas que luego se representan?”, tenemos
“signos ideológicos” que son significantes de los significados que el enunciado se
propone comunicar.

La filosofía del lenguaje de Volóshinov (2014), se debate en el doble sentido que


Marx precisa de la ideología como “enmascaramientos”, a la vez como
“instrumento de lucha”. El punto de referencia es la Ideología Alemana en la cual
se propone un estudio de lo general a lo particular, de la crítica a la filosofía
hegeliana, del estudio por las formas de propiedad y de la división del trabajo, en
lo que apunta “la división del trabajo sólo se convierte en verdadera división a
partir del momento en que se separan el trabajo físico y el intelectual” [ CITATION
MAR85 \p 32 \l 11274 ].

CITATION CAS84 \p 30 \l 11274


Ver: Pardo Montenegro, Liliana (2011) Palimpsestos de ideas: Papel de la ideología y el
discurso en la forma de organización de la sociedad. VI Jornadas de Jóvenes Investigadores. Instituto de
Investigaciones Gino Germani, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires.

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Esta división del trabajo no existía en Gaitán, el toma las palabras de Henri
Bergson (1859-1941), “obra como pensador y piensa como hombre activo”
[ CITATION GAI43 \p 6 \t \l 11274 ] , frase del denominado “filósofo de la intuición” y del
estudio de los “fenómenos de la conciencia”. En esto, la interpretación de
formación de la conciencia del pueblo para su emancipación, tiene una doble
contradicción. La teoría del reflejo, que Volóshinov (2014) le asigna a Lenin en
Materialismo y Empirio-Criticismo, es tomada de Marx, la claridad de su
radicalidad al sostener que la raíz de los problemas es el hombre mismo, está
presentada en el siguiente enunciado:

“Es decir, no se parte de lo que los hombres dicen, se representan o se imaginan,


ni tampoco del hombre predicado, pensado, representado o imaginado, para
llegar, arrancando de aquí, al hombre de carne y hueso, se parte del hombre que
realmente actúa y, arrancando de su proceso de vida real, se expone también el
desarrollo de los reflejos ideológicos y de los ecos de este proceso de vida […] No
es la conciencia la que determina la vida, sino la vida la que determina la
conciencia” [ CITATION MAR85 \p 26 \l 11274 ]

Marx parte del primer hecho histórico, la producción de la propia vida material,
aunque suela ser redundante mencionarlo a algunos compañeros militantes,
literalmente escribe: “para vivir hace falta comer, beber, alojarse bajo un techo,
vestirse y algunas cosas más” [ CITATION MAR85 \p 25 \l 11274 ] , antes de ampliar su
aterrizaje donde aclara que no llegamos del cielo a la tierra, dice “se asciende de
la tierra al cielo”, donde además encontramos el punto de credibilidad del orador
mismo del discurso, la defensa al movimiento obrero de Jorge Eliécer Gaitán, sólo
es posible desde su misma condición social, la veracidad de la fuerza de su voz
contiene en sí mismo su procedencia desde el pueblo, proveniente del barrio Las
Cruces de Bogotá, hijo de Eliécer Gaitán, uno de los “sensibles libertarios” que
estuvieron atentos ante el estallido de la guerra de los mil días del 18 de octubre
de 1899, dedicado a la actividad tipográfica y al comercio de libros usados; y de
Manuela, su madre, maestra y directora de una escuela CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . Esta
procedencia humilde de Gaitán, serán una fortaleza en la veracidad que destila la
entonación de sus discursos.

Los aportes que Volóshinov (2014) brinda al análisis del discurso en la oratoria de
Jorge Eliécer Gaitán, parten de entender que “nuestras ideologías de clase;
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Sobre su infancia puede leerse con detalle el estudio de José Antonio Osorio Lizarazo
(1998) Gaitán. Vida, Muerte y permanente presencia: “Como todos los niños de una clase social sin respaldo
económico y sin definición precisa, Jorge Eliécer conoció la desesperada ansiedad por un juguete imposible,
la desoladora realidad de un mundo hostil, el desasosiego de una nutrición insuficiente. Su inteligencia se
abría, absorta, al conocimiento, en medio de niños pálidos y desnudos. A la escuela pública que dirigía su
madre acudían hijos de obreros, gente del pueblo hostilizada por el espíritu de jerarquía, una infancia
aplastada por el egoísmo y por la sordidez de una sociedad que de vez en cuando fundaba un asilo para
librarse de la presencia de los miserables. En su propia carnadura, Jorge experimentaba la desolación de la
injusticia, cuya pesadumbre se trocaba en inconformidad y en rebeldía” [ CITATION OSO98 \p 21 \l 11274 ]

12
nuestra percepción de la realidad no es directa, sino mediada por la superficie
refractante de los signos ideológicos” [ CITATION VOL14 \p 11 \l 11274 ] . Hallar ¿cuál
es esta superficie? en el desarrollo de un discurso político, con elementos
jurídicos, el cual además trae prestadas las voces de testimonios de aquellos que
sobrevivieron de la masacre, familiares y conocidos de los caídos, vecinos que
vieron y en su momento no pudieron pronunciarse y tras el trabajo de campo que
realiza Gaitán en el territorio, comienzan a enviarle información en cartas y
denuncias, con detalle de los sucesos, con demanda a los responsables.

Esta “superficie refractante”, puede hacer alusión a la misma conciencia de clase,


qué en relación a saber del signo mayor, la imagen acústica del fusilamiento a los
obreros, brinda voz a la base social en primera instancia, en su primera
intervención en el recinto del Congreso. Es este signo de denuncia a los culpables,
de demanda en sus escalas a la fuerza pública el que ordenó y perpetró la
masacre, a los generales responsables de dar las órdenes y a los soldados que
las cumplieron, demanda al poder ejecutivo, responsable de permitir el estado de
sitio (estado de excepción) CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , el cual es declarado en los
Decretos del 5 y 6 de diciembre de 1928, dictados por el general Cortés Vargas,

CITATION CAS84 \p 30 \l 11274


En Colombia, el “Estado de sitio” ha sido una discusión en la materia de derecho
constitucional desde la Constitución de 1821. Las significaciones que se han dado en decretos de
“conmoción interior” o “régimen de excepción” han sido los más recientes esperpentos jurídicos utilizados
por la posiciones de extrema derecha. Así puede leerse una breve radiografía del accionar jurídico-represivo:
“mientras en las ciudades se restringían los derechos ciudadanos con el fin de contrarrestar las
manifestaciones políticas, en las zonas rurales se mataba para reprimir a la subversión” [ CITATION GAR08 \l
11274 ]. En referencia a los “Estados de excepción en la Constitución”, en un estudio ante la reforma
constitucional de 1991, Díaz-Callejas (1991), refiere lo siguiente: “[e]n el actual ordenamiento constitucional
la cuestión del Estado de sitio aparece como una de las facultades del Presidente de la República dentro del
Título XI de la Constitución. Dada la dimensión que para Colombia y para su prestigio y respeto
internacionales ha asumido el hecho de llevar medio siglo bajo ese régimen de excepción, y su incidencia
negativa en el respeto a los derechos humanos y a los civiles y políticos, resulta aconsejable elevar su
jerarquía en la estructura del texto constitucional, asignándole un título propio a la materia y a su
reglamentación general” [ CITATION DÍA91 \l 11274 ]. Las referencias teóricas en la filosofía y ciencia política
al respecto son la mención de Benjamín (2010) en la Tesis VIII de su obra Tesis sobre la Historia: “La tradición
de los oprimidos nos enseña que el ‘estado de excepción’ en que ahora vivimos es en verdad la regla”
[ CITATION BEN10 \p 24 \l 11274 ]. Referencia que lee Agamben (2014) y que al momento de definir “El
Estado de Excepción como Paradigma de Gobierno”, plantea la dificultad que surge al momento de su
definición puesto que: en el “estado excepción está ciertamente la estrecha relación que este mantiene con
la guerra civil, la insurrección y la resistencia. En la medida que la guerra civil es lo opuesto del estado
normal, ella se sitúa en una zona de indecidibilidad respecto del estado de excepción, que es la respuesta
inmediata del poder estatal a los conflictos internos más extremos” [ CITATION AGA14 \p 26-27 \l 11274 ],
en siguiente referencia adjudica “[e]l origen de la institución del estado de sitio […] al decreto del 8 de julio
de 1971 de la Asamblea Constituyente francesa, que distinguía entre état de paix, la autoridad militar y la
autoridad civil actuaban cada una en su propia esfera, état de guerre, en el cual la autoridad civil debía
actuar en acuerdo concertado con la autoridad militar, y état de siége, en el cual “todas las funciones de las
cuales la autoridad civil está investida para el mantenimiento del orden y de la policía interna pasan al
comandante militar, que la ejercita bajo su exclusiva responsabilidad” [ CITATION AGA14 \p 31 \l 11274 ]

13
en contra de la huelga de los trabajadores de la Provincia de Santa Marta, en el
Decreto Número 1, puede leerse lo siguiente:

“Art. 1° De conformidad con el Decreto Legislativo número 1 de 5 de diciembre de


1928, ordeno perentoriamente la inmediata disolución de toda reunión mayor de
tres individuos; Art. 2° Ordenase a la fuerza pública que, con las prevenciones
legales, dé estricto cumplimiento a este Decreto, disparando sobre la multitud si
fuere el caso; Art. 3° Ninguna persona podrá transitar después del toque de
retreta” [ CITATION SÁN09 \p 83-84 \l 11274 ] (Tomado del Anexo 1)

Estas medidas ocasionaron hechos atroces, “un crimen de lesa


humanidad” CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . Gaitán en su discurso solamente puede
demandar al Congreso y al cuerpo de sus legisladores, por conocer u omitir el
conocimiento de los hechos, y llama al pueblo a conocer de manera amplia lo que
está aconteciendo, desde la tribuna de legislador.

Reaparecer estos hechos, desde la mirada del materialismo histórico, es volver a


Benjamín en su Tesis VII (2010), pesando en lo que significan, atravesando el
duelo una vez más, bien sabia el dolor que causa leer a las “clases dominantes”,
es Benjamín el autor que escribe sobre la tristeza de la historia, sobre la apatía a
“adueñarse de la imagen histórica auténtica”, develada al preguntarse “con quién
empatiza el historiador historicista” y su fatal respuesta “con el vencedor”, es tan
certero que la toma de distancia es un imposible aunque los hechos envuelvan de
melancolía y depresión la resurrección de los acontecimientos, es muy claro lo que
plantea “[t]odos aquellos que se hicieron de la victoria hasta nuestros días
marchan en el cortejo triunfal de los dominadores de hoy, que avanza por encima
de aquellos que hoy yacen en el suelo” [ CITATION BEN10 \p 23 \l 11274 ] .

El debate académico en las ciencias sociales acerca de la ciencia de las


ideologías, lleva grandes obras en la historia del pensamiento de la
humanidad CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , el debate de la división del trabajo manual del
trabajo intelectual, lo dejamos enunciado y de cierto modo aclarado con la misma
mención que hizo Gaitán describiéndose a sí mismo. La formación de la
conciencia de la clase obrera que aporta Gaitán con este discurso político sigue

CITATION CAS84 \p 30 \l 11274


Ricardo Sánchez Ángel (2009) lo define de la siguiente manera: “En la ofensiva desatada
contra la clase trabajadora del banano, del ferrocarril, de labranza, y contra los artesanos, comerciantes,
mujeres, niños, la familia proletaria, se consumó una masacre, un crimen de lesa humanidad por parte del
gobierno conservador, presidido por el profesor de derecho constitucional de la Facultad Nacional de
Derecho Miguel Abadía Méndez, con su Ministro de Guerra, Ignacio Rengifo y con la ejecución de Cortés
Vargas. Todo bajo las exigencias y tutelaje de las autoridades de la compañía bananera norteamericana, el
verdadero poder en la zona de enclave colonial, representado por su gerente Thomas Bradshaw” [ CITATION
SÁN09 \p 56 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Por mencionar algunas: La ideología dominante [ CITATION LIM75 \l 11274 ]; Ciencia e
ideología [ CITATION HAB09 \l 11274 ]; La división del trabajo manual e intelectual [ CITATION MAI77 \l
11274 ]; y Ciencias Sociales, ideología y conocimiento [ CITATION MIL71 \l 11274 ].

14
siendo fundamental en la reconstrucción de la memoria histórica de los oprimidos,
el signo de la “masacre a las bananeras” seguirá teniendo respuestas tardías por
todos los académicos que se aproximen a este estudio, los más entendidos,
seguirán escuchándolo en el centro del reclamo: ¿por qué la fuerza pública
deviene en siervos de los intereses de las multinacionales?, ¿por qué ante la
demanda de los trabajadores por mejoras en sus condiciones de vida la respuesta
fue el fusilamiento?, ¿por qué estos hechos de represión de la protesta social a
comienzos del siglo XX, siguen siendo el modo de accionar del aparato represivo
del Estado?

La conciencia de clases, no sólo está por saber quiénes son los que están en el
suelo, los que derramaron su sangre defendiendo la tierra, en el dolor de saber
que fueron vencidos. La actualidad de volver al “signo ideológico” del fusilamiento
de los obreros en la huelga de la zona de las bananeras, va más allá de un
revisionismo histórico o de un historicismo clásico, la vigencia de los hechos está
en la historia presente, en “la permanencia de la memoria”, como en los hechos de
cada día que atraviesan las mismas condiciones en el territorio colombiano.

El dictamen marxista: “[l]a conciencia no puede ser nunca otra cosa que el ser
consciente, y el ser de los hombres es su proceso de vida real” [ CITATION MAR85 \p
26 \l 11274 ], es parte del análisis del discurso, en la vida y obra de Gaitán, como
en la conciencia de quienes responden a su discurso, en el largo devenir de la
resonancia a la imagen acústica de su voz. Ser consciente, en el mismo propósito
de mantener la conciencia de ser pueblo y como pueblo identificarse con las
luchas de los que viven las duras condiciones de ser explotados por el sistema de
modernización capitalista que empezaba a implantarse a comienzos del siglo XX.

El “edificio social de los signos ideológicos” [ CITATION VOL14 \p 34 \l 11274 ] donde se


encuentran la estructura (base social y económica) y la superestructura (ideología
política, científica, cultural), permite alojar a los trabajadores en su doble
dimensión de trabajo material y trabajo intelectual, permite pensar la construcción
de las ideologías dominantes que han permanecido en el mantenimiento del poder
del Estado. El estudio de este edificio, va más allá de los ventanales que puedan
ser las fuentes que revisamos en la tarea de revisión del pensamiento de Gaitán,
una puerta que permita abrirse ante las contradicciones que cada piso brinda en
las interpretaciones de su vida y obra.

De Nicolai Bujarin (1888-1938):

Estudiar el concepto de “clases sociales”, de “ideología” y “conciencia de clase”,


con las definiciones que aporta Bujarin (1974) en su obra Teoría del Materialismo

15
Histórico, es debatir el señalamiento que hace entre castas y campesinado, en
términos de la identificación de la lucha de clases pos proyecto de modernización;
distinto a la coexistencia de modos de vida agraria con relación a la descripción
que hace Tomas Moro en Utopía, donde la vida en comunidad de los pequeños
propietarios del siglo XIX en Inglaterra, es modificada por la imposición de la
condición de propiedad; la propiedad y el uso de la tierra, son determinantes en la
construcción de un análisis socio-histórico, en tanto análisis de los movimientos
orgánicos y de coyuntura, como de entender la historia en términos de lucha de
clases.

Las diferencias que plantea en relación a los procesos de unificación de luchas


entre los trabajadores, deja un debate, en relación al análisis del discurso de las
bananeras, la cuestión de la clase trabajadora que se alza en protestas por las
mejoras a sus condiciones de trabajo, son una clase obrera de trabajadores
rurales de haciendas de los enclaves extranjeros, son a la vez campesinos que
han sido desplazados de sus tierras de manera forzada, cuando no llevados
presos por negarse a vender sus tierras o a dejar de habitarlas; en este sentido, la
posición de Bujarin (1974) queda refutada cuando afirma que “[e]l campesino no
está muy predispuesto a sentir solidaridad con el trabajador” [ CITATION BUJ74 \p
355 \l 11274 ].

Otro aspecto a tener en cuenta, son los roles en los procesos de producción, en la
posesión de los medios de producción y en las relaciones de distribución de los
cargos de los trabajadores y de las mercancías CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . Esto tiene un
componente esencial en la confirmación de la tesis respecto a la historia
construida en el enfrentamiento entre clases. Las clases sociales que
protagonizan el ‘signo ideológico’ de la masacre, pueden diferenciarse en distintos
planos: en la producción, los trabajadores asalariados de las haciendas bananeras
sometidos a un régimen de esclavitud, mandados por capataces (mandos
medios), que obedecían a los inversionistas extranjeros propietarios del capital
que proveía las siembras, el pago de las cosechas, y de los barcos que
garantizaban el siguiente plano, la distribución, en los puertos de Colombia y
Estados Unidos, en este lugar encontramos otro tipo de trabajadores, igualmente
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Bujarin (1974) plantea lo siguiente: “El papel de los hombres en la producción y el de la
posesión de los medios de producción, es decir, la "distribución de las personas'', y la distribución de los
medios de producción", son elementos estables dentro de los límites del modo de producción existente.
Desde el momento en que hablamos del capitalismo, tenemos, por una parte, una categoría de hombres
que "dirigen" el proceso de producción y que simultáneamente «controlan" toda clase de medios de
producción, y también una categoría de hombres que trabajan bajo la dirección de los primeros,
subordinando su fuerza de trabajo a ellos y produciendo valores mercantiles. Precisamente, a esto se debe
que prevalezca una ley determinada en la distribución de los productos de trabajo, es decir, en el reparto de
los ingresos. (La parte del león para el capitalista). En otras palabras, arribamos a la siguiente comprobación:
los aspectos más importantes" de la producción – “distribución de las personas y distribución de las cosas"-
constituye por igual la base de las relaciones entre las clases [ CITATION BUJ74 \p 356 \l 11274 ]

16
sometidos a las órdenes de otros (mandos medios) en el trabajo de cargar y
descargar con sus cuerpos los conteiners de la mercancía (en este caso bananos)
que salían desde los puertos de Santa Marta hasta las costas norteamericanas; a
su vez, en la distribución se encuentran los trabajadores del comercio de este
producto, los choferes de los camiones que distribuyen a distintas ciudades, en
cada ciudad los conductores de los micros que han de llevar a cada
establecimiento que posea venta de frutas, hasta ser adquirido por el consumidor
final CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 .

La división de clases sociales en los demás planos que define Bujarin (1974) “el
plano político, psicológico, ideológico” atraviesa esta cadena de producción y
distribución, si bien, la lucha que emprendieron los trabajadores de los enclaves,
no tiene la misma repercusión en los demás estamentos (transportistas,
comerciantes, vendedores, trabajadores de los puertos), esto tiene atravesado un
plano político que corresponde a la misma raíz de la concesión de las tierras que
propiciaron la instalación de este enclave en la costa atlántica de
Colombia CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 .

La política del presidente conservador Rafael Reyes Prieto (1904-1909), hizo parte
junto a José Manuel Marroquín (1900-1904) de los gobiernos de la “regeneración
conservadora” que rigieron desde la reforma constituyente de 1886 hasta 1930,
propiciaron la venta del país, negociaron la separación de Panamá terminada la
guerra de los mil días. Mencionar el papel de Miguel Abadía Méndez, en la
responsabilidad de la masacre, es constatar que la toma de decisiones en el poder
del Estado, conlleva a tener la posibilidad de decidir sobre las condiciones de vida
de los pueblos que gobiernan y por estas mismas razones el juicio político tiene
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Respecto a “La economía en los años veintes y las primeras normas regulatorias de la
lucha reivindicativa”, Víctor Manuel Moncayo (2009) elabora respecto al contexto de la masacre de las
bananeras una aproximación a la estructura económica que de nomina “economía mercantil simple” en la
cual, el papel de Colombia, en la “división internacional del trabajo” cumplía el papel de “abastecedora de
materias primas”, atribuye los comienzos del trabajo asalariado a las plantas fabriles, dice “[así, aparecen
algunos reglones dinámicos de la producción fabril como los textiles, la cerveza y los cigarrillos, que se
suman a lo existente gracias al desarrollo presentado en sectores como el transporte y el embarque de
productos, que a su turno incentivaban la infraestructura de comunicaciones orientada hacia los puertos”
[ CITATION MON09 \p 93 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Osorio Lizarazo (1998) describe así lo que era este territorio “[l]a zona bananera era una
vasta concesión territorial de más de doscientas mil hectáreas, junto al mar Caribe, en torno a Santa Marta
[…] había sido entregada por el presidente Reyes en 1905 a la United Fruit Company, sin pago, compromiso,
ni compensación, llevado de su inmensa amistad hacia los piratas que en aquel tiempo acababan de humillar
la soberanía nacional con la mutilación de Panamá. Comprendía aldeas y poblados, ríos y planicies, y aún
cuando teóricamente rigiese en ella la ley colombiana, en realidad era una colonia extranjera, una propiedad
privada de la United incrustada en el corazón de la República como una afrenta perenne. La empresa
concesionaria cargaba de bananos dos veces por semana sus grandes barcos en la bahía de Santa Marta y se
llevaba al fragante producto tropical de aquel pequeño dominio, en donde veinticinco mil colombianos
padecían de un régimen de oprobio y de esclavitud, al mando de capataces gringos que aplicaban
reglamentos vejatorios y cuyo arbitrio suplantaba la ley” [ CITATION OSO98 \p 110-111 \l 11274 ].

17
que tener los nombre de los que intervinieron en la emisión del estado de sitio, que
por medio de un decreto, ordenaron el fusilamiento al movimiento obrero. La
política de entrega de territorios a los intereses norteamericanos, a las
concesiones que no generaron pagos de alquiler de tierras ni compra al Estado,
sino que fueron entregados a merced del beneplácito de los gobiernos de turno.
Su carrera de político, comerciante y militar, combinaría las facetas que
posibilitaron a la casta conservadora, entregar el territorio a un nuevo sistema
colonial, independizados de la corona de España, llevaron a Colombia a la
completa dependencia de los capitalistas norteamericanos.

Los planos psicológicos e ideológicos de las clases sociales, pueden estar más
relacionados en esta secuencia a la misma aclaración que realiza Bujarin (1974)
“Una persona puede pertenecer a una clase baja, pero a una casta elevada. Tal el
caso, por ejemplo, de un noble arruinado convertido en conserje o portero. O el
caso contrario: una persona puede pertenecer a una casta baja y a una clase
elevada (un siervo puede convertirse ·en un opulento comerciante)” [ CITATION
BUJ74 \p 358 \l 11274 ]. La condicionante económica que marca la ubicación de las
clases sociales, están determinados por ser o no ser propietarios de los medios de
producción, en tiempos de guerra y de paz, estas condiciones pueden variar y dar
variados ejemplos de la acumulación de capitales en reducidas cúpulas que hacen
de la propiedad de la tierra o se posicionan en los cargos políticos que les
permitirán controlar los procesos de distribución de los cargos y de las
mercancías.

El orden económico específico de la regeneración conservadora, puede verse


como una etapa precapitalista, “[l]a clase dominante era la aristocracia
terrateniente, clase casi hereditaria” [ CITATION BUJ74 \p 358 \l 11274 ] . Establecer el
régimen feudal al campesinado como clase y casta, da a entender que en el
sistema capitalista el campesinado pasa a conformar por un lado una burguesía
rural, y asimismo, una clase proletaria. Esto, en la zona de las bananeras no
corresponde, el proyecto de modernización capitalista no dio pie al surgimiento de
una burguesía rural, las tierras fueron entregadas a los capitales extranjeros,
excluyendo de los derechos de propiedad y uso de la tierra, como violando el
derecho de libre autodeterminación de los pueblos. Los campesinos de la zona
bananera fueron convertidos en trabajadores asalariados sin condiciones de vida
digna y ante la organización de la protesta social, fueron masacrados por la fuerza
pública. Es por esto que el plano político, es definitorio en estos acontecimientos,
la apelación de Gaitán en su discurso legislativo tiene completa validez, al hacer al
jefe de Estado completo responsable de estos hechos.

El problema del Estado, en cuanto ‘superestructura’ que es determinada por la


‘base económica’, refiere a una realidad ideológica, desde la cúpula de los

18
inquilinos intelectuales que están alojados en la estructura social del movimiento
obrero, si este esqueleto es visto desde la lucha de clases, entendemos que en la
lucha de clases sociales es el subproletariado el que se encuentra en los frentes
de batalla en cada fábrica, en cada una de las cadenas de producción que
alimentan al sistema. En la cabeza del Estado, habita una ‘unidad de intereses’
que hace que este cuerpo sea compuesto por distintas fracciones de clase.

La ‘superestructura’ unifica la conciencia de la toma del poder político por parte del
pueblo, en la voz de Jorge Eliécer Gaitán, la conformación de un nuevo partido
con ideas socialistas no fue suficiente, el ingreso de los comunistas y socialistas
organizados al Partido Comunista Colombiano fundado el 17 de julio de 1930, deja
igual abierto el camino a la conformación de la Unión de Izquierda Revolucionaria
(UNIR) en 1933. La nueva estructura burocrática del partido liberal, copto gran
parte los cuadros formados en los años veinte en las estructuras del movimiento
obrero, en la realidad de cubrir las condiciones reales de existencia. La decisión
de Gaitán, fue tomarse la dirección del liberalismo y desde allí lanzar su
candidatura a la presidencia de Colombia.

Otro argumento, sería el planteado por Varila Cajamarca (2009) en las diferencias
que además Gaitán pudo tener con el “Mahechismo” del Partido Socialista
Revolucionario (PSR), los cuales por lo regular no estaban afiliados a los
sindicatos y “eran considerados saboteadores” [ CITATION VAR09 \p 130 \l 11274 ], en
acuerdo con este autor, si bien el lenguaje que usaran los socialistas, fue mucho
más cercano a los obreros, Gaitán pensaba en la toma del poder, no terminaba de
afiliarse al Partido Comunista, no porque no compartiera el discurso teórico y
abstracto, sino porque en su análisis político la correlación de fuerzas lo inclinó
hacia el Partido Liberal donde hizo carrera de político
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
profesional .

La ausencia en las referencias en el discurso y en los estudios de la masacre de


las bananeras esta en el internacionalismo. Estas luchas de reivindicación de
mejores condiciones laborales, lejos están de ser un ‘nacionalismo’, el pliego de
peticiones CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 que formularon podía haber sido tomado por todos
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Entre las tantas conformaciones de los movimientos obreros de los años veinte, vale
rescatar la creación “[e]l 12 de febrero de 1923 [de la] ‘Unión Obrera’ de Barrancabermeja, el centro
petrolero del país. Este sindicato se convirtió en el más combativo hasta nuestros días realizando las batallas
por la nacionalización del petróleo, en defensa de la soberanía nacional y los intereses de los trabajadores”
[ CITATION SAN82 \p 54 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Los nueve puntos que componían el pliego de peticiones son los siguientes: “El primer
punto pedía el establecimiento del seguro colectivo obligatorio; en el segundo punto los huelguistas
solicitaban reparaciones por accidentes de trabajo; en el tercero demandaban habitaciones higiénicas y
descanso dominical remunerado. Las peticiones hasta este momento estaban avaladas por la ley colombiana
de aquel entonces. En el cuarto punto se pedía un aumento del 50% de los jornales; el quinto punto del
pliego reclamaba la desaparición de los comisariatos; en el punto sexto se realizaba la solicitud para la cesar

19
los trabajadores donde existieran enclaves extranjeros, la relatividad de los
estudios de casos concretos, esta puesta en un ejemplo que puede resultar
controversial. Durante la primera guerra mundial (1914-18), dice Bujarin: “en la
mayoría de los grandes países capitalistas avanzados, los obreros, contrariando
sus intereses internacionales y generales de clase, se lanzaron a defender sus
"patrias". Sus "patrias" no eran otra cosa que las organizaciones estatales de la
burguesía, es decir, organizaciones de clase del capital” [ CITATION BUJ74 \p 371 \l
11274 ]. El debate de la masacre a las bananeras, tiene en su demanda la
‘restauración moral de la república’, esto puede tomarse como un asunto
nacionalista, sin embargo, la defensa de la soberanía del movimiento obrero a
defender sus condiciones de vida y alzarse en huelga general, aciertan a que las
reivindicaciones de los obreros son únicamente posibles en el internacionalismo,
donde la frase estandarte “proletariados de todos los países,
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
uníos” , resuena desde estos acontecimientos en la memoria
del pueblo colombiano.

La referencia que hace Bujarin (1974) para cerrar su definición de clases sociales
es volver a la fuente de las definiciones, de nuevo Marx en El Capital,
conceptualiza de la siguiente manera las clases sociales determinadas por las
relaciones de propiedad: “Los propietarios de simple fuerza de trabajo, los
propietarios de capital y los propietarios de la tierra, cuyas respectivas fuentes de
ingresos son el salario, la ganancia y la renta del suelo, es decir, los obreros
asalariados, los capitalistas y los terratenientes, forman las tres grandes clases de
la sociedad moderna, basada en el régimen capitalista de producción” [ CITATION
BUJ74 \p 360 \l 11274 ].

Con esto, afirmamos que el trabajo intelectual de los analistas del discurso, en el
círculo de Bajtín, y en los aportes del materialismo histórico de Bujarin, permiten ir
más allá de la materialidad de los hechos de las huelgas generales, brindan las
bases que permiten decantar la historia de la lucha de clases en términos de
estudio de las clases sociales, donde no sólo el problema de clase y casta está
arraigado en la sociedad colombiana desde los comienzos del siglo XX, el
problema es de mayor complejidad, no se cierra en el conformismo de las clases
dominantes de ubicarse en un lugar tercermundista donde la “división internacional
del trabajo” los ubique, las clases dominantes de Colombia, los sobrepasan, donde
los préstamos por medio de vales y se demandaba la libertad del trabajador para adquirir los artículos de
consumo. El punto séptimo reclamaba la implantación del pago por semanas vencida y no con vales cada
quince días; el octavo exigía la abolición de los contratos individuales y creación de uno colectivo, con
derecho a figurar cada obrero en la nómina mensual. El pliego finalizaba solicitando la edificación de
hospitales provistos de drogas e instrumental quirúrgico; a razón de un hospital por cada 400 trabajadores y
un médico por cada fracción de 200 jornaleros” [ CITATION VAR09 \p 140 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Frase que de por sí sigue siendo el slogan del Partido Comunista Colombiano, ver:
http://www.pacocol.org/

20
la legalidad no ha funcionado, han creado otras legitimidades, por lo cual la lucha
y las alianzas de clases en nuestros territorios son tan confusas, van y vienen
entre el peso de las plumas y la pesadez de los conflictos.

La voz de un pueblo: Gaitán

Causalmente el periodo de comienzos del siglo XX, es un periodo de revoluciones.


En las décadas que preceden al fusilamiento del movimiento obrero del 5 y 6 de
diciembre de 1928, año previo a la gran depresión mundial, Gaitán había
estudiado su doctorado en Jurisprudencia en la Real Universidad de Roma (1926-
1927) del cual obtiene su tesis El criterio positivo de la premeditación, por la cual
le otorgaron el premio Ferri, del cual ordenó donar el monto total del dinero a la
“creación del premio República de Colombia” a los mejores trabajos sobre
“Legislación Penal Colombiana”.

La época en que Gaitán viaja a realizar sus estudios a Europa, está enmarcada
por el periodo de la primera guerra mundial, de la revolución rusa en 1917 y del
periodo entre guerras (1918-1939). En este análisis, se toma como referencia el
círculo de Bajtín, el cual se dedico a los estudios semióticos desde el materialismo
dialéctico y a la fijación por los estudios del signo ideológico de Volóshinov desde
el materialismo histórico.

El cuestionamiento que surge a partir de la lectura de esta escuela de


pensamiento de los estudios del discurso y el corpus discursivo seleccionado, es
la relación existente entre la oratoria de Gaitán y la organización de la red nacional
de soviets o gobierno Sovnarkom del partido bolchevique. Según Cordell Robinson
(1976: 54) en la prensa de la época El Tiempo y El Nuevo Tiempo, a Gaitán se le
había denominado el “bolchevique radical” por sus intervenciones como Diputado
de la Asamblea Departamental de Cundinamarca.

En Colombia, en la misma época de los años veinte, es posible extraer algunas de


estas discusiones en las conversaciones del Café Windsor de Bogotá, a raíz de la
influencia de Savisnky, ruso soviético instalado en la capital colombiana que puso
a circular el pensamiento de la Revolución Rusa en los curiosos intelectuales que
frecuentaban él lugar, además, fue uno de los ideólogos fundacionales del
comunismo en Colombia.

Desde la teoría del enunciado que propone Bajtín y Volóshinov, las posiciones
resaltadas en el discurso de la masacre de las bananeras, conciernen a un
ejercicio metalingüístico, en el que la fijación en el movimiento obrero y su máxima
de campaña “yo no soy un hombre, soy un pueblo”, parecen estar más inspiradas

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en la organización de los soviets de la Revolución Rusa que en los retratos
pictóricos que describiera de Francia, Alemania e Italia. La enunciación gira en
torno a la defensa de la legítima protesta de los obreros por aumentos salariales,
en la que describe como se ordena desde las clases dominantes su ejecución,
acusando al Congreso y al gobierno de turno de ser cómplices de los intereses de
los capitales extranjeros de la multinacional United Fruit Company, antes que la
defensa del propio pueblo.

La filosofía del lenguaje de Volóshinov (2014), CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 proveniente de


las ondulaciones del círculo de Bajtín, pone en primer plano el estudio de los
signos ideológicos, desde la visión del materialismo histórico en línea de la obra
de Bujarin (1974), quien define la lucha de clases sociales en términos de “la clase
dirigente y detentadora de los medios de producción y la clase ejecutante, privada
de los medios de producción y que trabaja para la primera” [ CITATION BUJ74 \p 360 \l
11274 ].

En la distinción de la conciencia de clases, Bujarin concluye que una vez definida


la conciencia para sí de una clase social resultan posibles las formas de “relativa
solidaridad de intereses de clase”, las clases obreras habían logrado despertar
durante los años veinte, realizando huelgas y levantamientos en los enclaves
imperialistas CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 , a su vez, los intereses de las clases dominantes
se hacían cada vez más evidentes en los grupos económicos que surgían del
proyecto de modernización, lo cual fue evidente en los años cuarenta, cuando las
reformas sociales y de distribución de la riqueza que se propusiera la Revolución
en Marcha de comienzos de los años treinta, no tuvieron el mismo respaldo,
teniendo que designar la presidencia de López Pumarejo (1934-1938 / 1942-1945)
en Carlos Lozano y Lozano (1942-1943) y en Darío Echandía Olaya (1945-1946).

Si bien, durante la imposición del proyecto de modernización, el levantamiento del


movimiento obrero es contenido en la elección del Partido Liberal, tras casi medio
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
A propósito, son varios los rumores de la autoría de la obra de Volóshinov (2014), dado
que su estudio fue adjudicado en algunas publicaciones a Mijaíl Bajtín, en una nota reciente el tema vuelve a
ser polémica, sin olvidar la develación del fraude frente a la autoría, es valorable traer de esta nota la
síntesis que realiza sobre el circulo de Bajtín: “Este círculo, como otros de la época, fue un grupo de
lingüistas y críticos literarios creado a principios de 1920 e integrado por personalidades como el propio
Mijaíl Bajtín y Pável Medvédev, entre otros. Sus trabajos giraron en torno al enunciado, los géneros
discursivos, la estilística, la traducción y principalmente las relaciones socio-ideológicas entre el discurso
(habla, texto, etc.) y el contexto histórico del sujeto discursivo” [ CITATION CAN16 \l 11274 ]
CITATION CAS84 \p 30 \l 11274
Previo a la masacre de las bananeras son múltiples los casos de represión al
campesinado y trabajadores asalariados, vale citar el caso que referencia Medófilo Medina (1984) “el
movimiento reivindicativo que declararon, el 14 de enero de 1927, 8.000 trabajadores de la Tropical Oil
Company y de la Andian National Corporation, en Barrancabermeja, fue calificado como movimiento
subversivo, y sobre él se descargó el peso de la represión del Estado, que cobró 15 víctimas obreras, decretó
la prisión del comité de huelga y autorizó el despido de muchos trabajadores” [ CITATION MED84 \p 36 \l
11274 ]

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siglo sin detentar el poder, asume el surgimiento de las nuevas condiciones
económicas y políticas que avizora este periodo, la alianza corporativa entre el
movimiento obrero con el Partido Liberal, ve la limitación de la alianza de clases
dominantes y grupos de intereses económicos que pactan las clases propietarias
del liberalismo y conservadurismo para lograr el mantenimiento en el poder del
Estado.

La lucha de clases del movimiento obrero, asume una conciencia de clase para sí
subterránea, una conciencia dialéctica que se mantiene en el constante
movimiento de los oprimidos, de los que no son propietarios de sus medios de
producción. La clase proletaria desplazada de los campos en los procesos de
modernización, se vio obligada a habitar los suburbios, a vender su mano de obra
para alquilar donde vivir y comprar lo que habrían de comer. Esta condición
Bujarin (1974) la dilucidará en los términos de diferencias, las clases sociales
“difieren entre sí por su rol en la producción, el cual es expresado en las relaciones
de propiedad” [ CITATION BUJ74 \p 363 \l 11274 ] , estas relaciones de propiedad son
las causantes de la desigualdad social que produce la represión a los oprimidos y
la acumulación de capitales a los represores.

Al decir que la voz de Gaitán se convierte en la voz del pueblo colombiano,


tenemos en cuenta los aportes del circulo de Bajtín que hemos referenciado, a la
vez, que tomamos las definiciones de Bujarin (1974) para la definición de las
clases sociales y como estas se hacen presentes en el caso de la masacre de las
bananeras, primer discurso analizado, con el soporte de biografías, desde sus
mismas palabras hasta estudios dedicados a reflexionar respecto a su vida y obra,
a la tarea gigantesca que emprendió desde los comienzos de su infancia con
relación al empeño puesto en superarse con sus estudios, los títulos que logró con
su tesis de grado y doctorado, son antecedente a la investigación que realizaría,
recién llegado de Europa, se dirigió a la Provincia de Santa Marta, lugar de los
acontecimientos, donde logró recolectar toda la información que más pudo, para
enaltecer el nombre de los caídos, enfrentándose a la clase política.

Decir ‘clase dirigente’ y ‘clase ejecutante’, es como lo detalla Bujarin (1974), decir
opresores y oprimidos, matices que derivan en una cadena de subclases, que
quedan implicados en una cadena de producción en la cual por participar en
alguno de los eslabones los hace partidarios de alguno de los dos lados de la
historia de la humanidad. La figura de la justicia, como una balanza, no puede
tener mejor imagen acústica, en su significante, el peso de responsabilidad en los
hechos cometidos el 5 y 6 de diciembre, recae completamente en la ‘clase
dirigente’, noción que en Colombia cuesta por sí hacerla visible, coincidimos con
otros autores que hemos tenido desde el proceso de independencia ‘clases
dominantes’ sin ‘clase dirigente’, esto es, el abanico de la burguesía industrial,

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comercial, financiera o terrateniente, ha gobernado sin dirigir un rumbo ni planificar
un proyecto político, han gobernado a merced de una formula de ‘comunidad de
intereses’ donde solo han respondido a los vaivenes de las crisis mundiales en
cuidado de no perder sus privilegios, sin pensar en el desarrollo pleno de un
Estado y de su constituyente primario: el pueblo.

El discurso de la masacre de las bananeras

El Discurso de la masacre de las bananeras, lo empezó Gaitán el 3 de septiembre


de 1929, dirigido al Congreso de la República, al presidente, a su gabinete y a los
altos cargos del gobierno. A quiénes acusa de los delitos de criminal complicidad
entre la United Fruit y a los militares que actuaron en el fusilamiento de los obreros
de la zona de las bananeras el 5 y 6 de diciembre de 1928. Los cargos que les
inculpa son: a) robos (desfalco) al tesoro público; b) conocimiento y permisión de
las relaciones del ejército con la United Fruit; c) inclemencia en la noche del
abaleo del 6 de diciembre; d) represión a la huelga de los trabajadores; e) los
responsabiliza de las pésimas condiciones económicas de los colombianos frente
a la codicia corruptora de la United Fruit; y por último, f) hace una detallada
mención de cuáles fueron las actuaciones del gobierno que permitieron que estos
hechos ocurrieran.

Su objetivo, en varios de los puntos planteados es el saneamiento moral de la


República, acude a la restauración de los valores morales, respeto de la ley y al
subconsciente de los responsables en estos delitos, su oratoria se encarna en los
elementos morales y psíquicos, Gaitán resalta que “los hombres que dirigen el
Estado tienen como primordial deber el conocimiento de las multitudes” [ CITATION
GAI29 \p 22 \l 11274 ] , con lo cual no sólo es culpable el ejército, de operar en el
fusilamiento, sino son culpables las clases dominantes que se encuentran en el
poder político que da las órdenes a las fuerzas militares y que teniendo
conocimiento previo de las condiciones de opresión que estaban viviendo los
obreros de las zonas bananeras no tomaron otras medidas de intervención desde
otros aparatos del Estado, vía jurídica o por medio de las autoridades locales,
gobernaciones o administraciones municipales, en relación a llegar a un acuerdo
ante el pliego de condiciones del movimiento obrero, con tal de detener los hechos
que retumban aún hoy de respuestas tardías, aún más, son culpables por omisión
en los hechos, por permitir que la instalación de los intereses de multinacionales
en el territorio contraiga la anulación de derechos a los habitantes de estas tierras,
dejando en poder de la United Fruit Company la decisión sobre el porvenir de los
trabajadores.

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En la euforia de su voz, va ha hacer que denomine analfabetos a aquellos que
“imaginan que las grandes fuerzas morales y sociales pueden contenerse con la
boquilla de las ametralladoras homicidas” [ CITATION GAI29 \p 22 \l 11274 ] . Respecto
a la gravedad de las acusaciones que expondrá y al estamento al cual acusará de
los hechos, hace una salvedad, usa de antemano una defensa propia al culpar a la
institución militar del Estado y al gobierno de los hechos cometidos en la masacre
de los trabajadores de la zona de las bananeras en complicidad con la
multinacional United Fruit Company:

“No quiero tampoco hacerle un cargo global al ejercito. Cuando aquí hable de
ejército debe entenderse solamente el grupo de hombres despiadados e
inmisericordes que actuaron en la zona bananera. Yo tengo un gran respeto por el
ejército de mi patria, y por eso pienso que su oficialidad pulcra, sus hombres
incontaminados serán los primeros en protestar contra la inicua barbarie, contra
los delitos de lesa patria que aquí se comprobarán” [ CITATION GAI29 \p 23 \l 11274 ]

Su capacidad extraordinaria de acusar y salvarse, de denunciar y a la vez


protegerse, el salvo conducto que esta mención le brinda ante los altos mandos
militares y ante la institución en su totalidad, lo resguardan, no va en contra del
honor de servir a la patria, sino acusa solamente a los que perpetraron el acto, los
culpables ‘despiadados’, este uso repercute en el mismo estilo del movimiento
Gaitanista, que se mantendrá siempre en los marcos de la legitimidad del Estado,
aun conociendo lo podridos que estos puedan estar.

La convicción de la toma del poder de ese mismo Estado, lo mantendrá siempre


del lado de las filas de la legalidad, su profesión de jurista y penalista, no le
permiten salirse de estos parámetros. Sólo su muerte provocará en Colombia, la
toma de las armas en las Guerrillas Liberales y Uniristas, que luego pasaron a ser
orientadas por el Partido Comunista de Colombia y por el foquismo Guevarista.

La enunciación del desarrollo de la tragedia, entonará en toda la extensión el


respeto por la moral humana, este principio fundacional será el baluarte, el respeto
por la vida, por el derecho a la existencia, por respetar las condiciones de una vida
digna al pueblo, donde una clase dirigente realmente existente hubiese actuado a
favor de sus compatriotas, de los propios y no de los intereses de los capitalistas.

La valentía y coraje del movimiento obrero que se levanta en la huelga general


tiene múltiples pruebas en los primeros argumentos que Gaitán señala, dice de
esta manera: “los presos eran llevados a la cárcel porque se habían negado a
vender sus pequeñas propiedades a los mercenarios de la United Fruit Company.
[…] los hombres eran sacados de sus viviendas y cogidos a palo, robados y
esquilmados” [ CITATION GAI29 \p 25 \l 11274 ].

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El método de su discurso está cargado de argumentos sostenidos por las cartas
que le han enviado testigos de los hechos a quienes ha solicitado le respondan
con detalle lo que ha acontecido en el territorio. La secuencia describe el accionar
de los militares en la zona bananera, por abuso de autoridad con la población y de
complicidad de la United Fruit Company al demostrar el conocimiento de los
delitos y la financiación de la compañía de supuestas reparaciones.

Compila los nombres de cada uno de los funcionarios que estaban en ejercicio de
su cargo, en cada uno de los municipios de la zona, entre estos toma los apuntes
de Nicolás R. Márquez, tesorero de Aracataca, toma los recibos de impuestos
cobrados a los habitantes, y lee el decreto del “estado de sitio”. Las pruebas que
presenta son de relatos de asesinatos, agresiones físicas, escándalos públicos por
parte de los militares, quema de hogares, saqueo de propiedades, violaciones.
Todos estos hechos son documentados, su profesión no le permite enunciar sin
tener las pruebas de todas las acusaciones que está haciendo en su primera
intervención parlamentaria.

Respecto a la alocución presidencial sobre los hechos, la posición de Gaitán es en


defensa del movimiento obrero, dirigiéndose a los congresistas los interpela de
esta manera:

“Habéis oído como allí se dice hablando de los obreros, que ellos perpetraron
´verdaderos delitos de traición y felonía, porque a trueque de herir al adversario
político, no vacilan en atravesar con su puñal envenenado el corazón amante de la
patria´. Decidle, señores al taciturno Presidente de la República que aplique estas
palabras no a los obreros, que fueron las víctimas, sino que las aplique a los
militares, a los cuales él les ha hecho el más inconcebible elogio” [ CITATION
GAI29 \p 28 \l 11274 ]

Una vez más, su posicionamiento de clase es la toma del poder para el pueblo,
desde el recinto de Representante el estamento legislativo, su voz es a favor de
los trabajadores, en contravía del poder de la clase dominante, la estrategia,
utilizar los mismos elementos que brinda la institucionalidad “legitima” para
proveer de defensa al movimiento obrero, al pueblo trabajador, a las mayorías
desamparadas en el desierto de la avaricia y concentración del capital burgués,
que en lugar de defender la soberanía de su pueblo, dispara en su contra.

Las pruebas presentadas por Gaitán desmienten las declaraciones de testigos que
fueron amenazados a declarar a favor de los militares, encubriendo los hechos,
llegando a citar nuevamente declaraciones juradas de estos testigos que vuelven
a relatar los hechos vistos de robo al tesoro público, servilismo de los militares a
los funcionarios de la United Fruit, asesinato a los pobladores de la región y
quema de sus viviendas.

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En el segundo día del discurso, comienza con la enunciación desde la primera
persona, en relación a posicionar lo que sería su motivo mayor y lema de
campaña presidencial la “Restauración moral de la República”. La evocación que
hace al auditorio al proponerles ponerse en el lugar de los hechos y en el
sentimiento de angustia de los trabajadores, en un criterio retórico en el “acto de
significación” [ CITATION STE98 \l 11274 ]. El uso de las figuras retóricas de la
desolación, la inmisericordia, hacen que su denuncia a los hechos cometidos por
las fuerzas militares tenga repercusión en el sentir humano de los destinatarios:

“Ya os dije ayer que los hechos no valen por su entidad objetiva, por su cantidad
material, sino que representan apenas un índice para medir la moralidad o
inmoralidad de los hombres. Repetid el caso de evocación mental que os pedí
ayer, trasladándoos con la imaginación a la zona bananera en aquellos momentos
de angustia. Desolación en los hogares, desolación en el comercio, muerte y
hambre por todas partes. Los hombres no podían trabajar porque la persecución
inmisericorde los obligaba a huir hacia los montes, y en las poblaciones las
mujeres tenían que entregarse a los afanes diarios para sustentar sus familias.
Todo ello no fue óbice para que los militares, violando todas las normas de
equidad y las normas constitucionales y legales, establecieran un verdadero
saqueo sobre los ciudadanos. Ya os he leído la Constitución conforme a la cual en
el estado de sitio las leyes no se derogan sino que simplemente se suspenden
aquellas que son indispensables para tranquilizar la perturbación social” [ CITATION
GAI29 \p 39 \l 11274 ] (Subrayado en negro fuerte, nuestro)

Tras estas declaraciones, en el segundo día del debate, el recinto del Congreso es
abandonado por la mayoría de los legisladores; sin embargo, Gaitán continua
durante cuatro días consecutivos desde el atril de su vocería como Representante
a la Cámara, enfrentando con su discurso, con la única arma que tiene, la palabra,
es su voz, la voz del pueblo, la que pone en la denuncia de los acontecimientos
perpetrados.

Su evocación es a la juventud, a ponerse de pie, a indignarse y despreciar los


hechos cometidos por una clase política detestable, deprimente, el llamamiento a
reaccionar ante los hechos, a darlos a conocer con el mayor detalle posible y con
la mayor veracidad que puede lograr la investigación dedicada a una causa que
clama justicia por los caídos, justicia no sólo al juzgar a los represores, sino a
modificar el orden establecido, a cambiar de raíz la forma y el modo de gobernar
de una clase dominante decadente.

La reiteración del objetivo de su intervención es constante, se repite una y otra


vez, por la depuración moral de la República, por la restauración de los valores,
por el derecho a estar vivos, con el requerimiento de la justicia penal en Colombia.
El hecho denunciado, el fusilamiento, la masacre, es el “signo ideológico” del que
se apodera en todo su discurso. El hecho en sí, lo logra desmenuzar en su

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totalidad, fueron los “Consejos de guerra” los que tomaron la decisión de apuntar
sus armas letales contra el movimiento obrero.

Estos ‘Consejos’ obedecen a su vez, a las órdenes que el poder ejecutivo haya
dictado, enviando un telegrama que autorizaba la instauración de un “Estado de
sitio” y la orden de abrir fuego ante la protesta. El ejecutivo obedece a su vez, a
los intereses de la multinacional United Fruit Company, el gobierno mata a su
pueblo por defender al capitalismo norteamericano. Es tan agudo el discurso de
Gaitán, que la secuencia de su denuncia es la tragedia que padece Colombia
desde comienzos del siglo XX.

El objetivo de su discurso vuelve a ser defendido en cada comienzo de las


intervenciones, al decir que el ejército se encuentra al servicio de los empleados
de la multinacional, esta una vez más, denunciando su sentir anti-imperialista ante
estos hechos, se propone demostrar que tanto la tropa como los oficiales estaban
comandados por los empleados de la United Fruit. La gloria de su perspectiva es
preciso fortalecerla en las tardías respuestas que demos a su pensamiento, a la
mirada que pone en su denuncia, al esfuerzo por sacar a los dirigentes y a su
pueblo de la sombra de la falsedad con que son engañados, por la tiranía de un
poder supremo que solo gobierna para mantener los derechos de la burguesía.

El fusilamiento es perpetrado por múltiples órdenes, y los que finalmente disparan


son el último escalón de una cadena de toma de decisiones, que funcionan con la
fórmula política que ha predominado en Colombia, y en otros países de América
Latina, sin profundizar en la teoría política moderna en las definiciones de Michels
(1973), Mosca (1984), Schumpeter (1965), que desde las posiciones más
conservadoras o socialdemócratas han definido la clase política según la “unidad
de intereses” que los concentren en el mantenimiento del status quo. Desde el
círculo de Bajtín y desde el materialismo histórico de Bujarin (1974) la declaratoria
del Estado de Sitio, resulta ser un enunciado desde la superestructura de las
clases dominantes que se han aliado a los intereses de la multinacional,
defendiendo las inversiones extranjeras en el territorio colombiano con las armas
que debieran brindar soberanía al pueblo de Colombia.

Las pruebas las encuentra Gaitán en una carta dirigida por Cortes Vargas a la
presidencia, en la cual afirma ser agente de la United Fruit Company en el
ferrocarril de Santa Marta: “mi actuación en la zona no me la perdonaron los
comunistas”, en esta frase acusa a los pobladores de la Ciénaga de estar
organizados con el Partido Comunista, y haciéndolo responsable de la denuncia
pública de la represión del ejercito contra la población.

Con esto, sin mencionarlo en su discurso, devela además los elementos con los
cuales está construyendo una “ideología anti-imperialista”, fundamento en la
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creación de la Unión Nacional de Izquierda Revolucionaria (UNIR), la cual
realmente no trasciende, sino que se arraigará en el movimiento Gaitanista,
además hace guiño y cofradía con el comunismo que se estaba consolidando en
Partido Político.

El estilo de su discurso, esta caracterizado por enunciarse en primera persona, el


“yo he ido al lugar de los hechos”, “yo conocí a los familiares”, “yo les solicité
enviar las pruebas”, “yo busque los documentos”, la afirmación de ser el mismo el
investigador jurídico y político que hace de su voz, la voz del pueblo masacrado, la
indignación que estos hechos le causan no son la de un enviado por sueldo a
tomar notas de lo que está aconteciendo, la convicción de su oratoria radica en la
identificación que siente con los oprimidos, en el desprecio que siente hacia la
burguesía dominante y en su vocación de político comprometido con la realidad
social y política de su país.

A Gaitán, ya le habían llamado el “bolchevique radical” en la prensa por sus


intervenciones en la asamblea de Cundinamarca; al analizar su discurso, las
formas de argumentación que utiliza para suavizar las acusaciones y persuadir al
auditorio son estas: la constante referencia a su persona, a sus logros, a la
sapiencia que le dan sus títulos en derecho penal, esto sostendrá en cada
momento de su intervención el debate frente al recinto que es oyente imputado de
sus acusaciones.

“Yo he aprendido en la ciencia de la investigación criminal que si es verdad que los


rumores públicos no pueden ser admitidos como factor de condena, sin embargo
ellos como elementos de investigación, ofrecen segura base. Y así fue como yo
escuché en Ciénaga que en el playón vecino al ferrocarril se había enterrado
a varias personas. Yo tome mis medidas de investigación. Tenía varios datos
para encarrilarme. […] Sabía yo también tanto por el mismo informe del señor
Cortés Vargas, que nos cuenta de que a las manifestaciones asistía gran cantidad
de mujeres y niños, como por las declaraciones múltiples que Vargas declaró que
Acosta García se le había arrodillado, llorándole para implorarle su perdón y para
que no lo castigara. El doctor Acosta García le desmintió retándolo a que mostrará
la carta en la cual le pedía perdón. ¡Cuánta estupidez! Porque tal declaración le
hace daño no a Acosta García, sino al señor Cortés Vargas. Eso demostraría el
cuadro moral que presidió el juzgamiento de los hombres en aquel lugar, ya
que un hombre para librarse de la cárcel por un concepto médico tenía que
arrodillarse ante su verdugo. Eso apenas demostraría que el juzgador era un
monstruo” [ CITATION GAI29 \p 66-67 \l 11274 ] (subrayado en negro, nuestro)

Las figuras estilísticas que utiliza en este enunciado son de afirmación, reiteración,
acusación, ironía, lenguaje despectivo y descortés, al decir ‘cuánta estupidez’ esta
increpando a los oyentes, les está diciendo estúpidos por tener el poder y no
detener estos hechos, esta además sepultando en vida al general en jefe de este
operativo, lo está llamando ‘monstruo juzgador’, ‘verdugo’, no sólo es culpable, es

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merecedor de insultos, es un tipo despreciable que no merece perdón, y Gaitán lo
sabe, por eso no duda en decirlo, no en los pasillos de las misceláneas de
contrataciones y prebendas, o en las fiestas donde se distribuyen las coimas de la
burocracia de los gabinetes, lo está afirmando en su primer debate legislativo, está
encarando y enfrentándose a los jefes de la ‘regeneración conservadora’ que
venían gobernando desde la reforma de la constitución de 1886, y que sin
adelantarnos a las conclusiones, en parte estos hechos, muy posible aún más que
los hechos en sí, la denuncia que realizará Gaitán por reclamar justicia y negarse
a la impotencia de la impunidad, son parte de los motivos que acaban con este
lamentable periodo de los gobiernos de Colombia, dando paso en las elecciones a
un nuevo gobierno liberal en 1930.

El último día de su intervención, en la sesión del 6 de septiembre de 1929, termina


de elaborar todos sus argumentos en el señalamiento de la responsabilidad del
gobierno:

“Para una huelga pacífica, como yo voy a demostrarlo, se creó toda la crueldad
inútil y el crimen sin nombre. Desde que el señor Rengifo dejo de ser ministro, se
terminó el comunismo; porque su empresario había muerto. No es que yo niegue
que una grande agitación de justicia social recorre de uno a otro extremo del
país para todos los espíritus. Ella existe, pero no como fruto del comunismo, sino
como razón vital de un pueblo que quiere defenderse contra la casta de los
políticos inescrupulosos. Y en esta reacción estaremos todos. Ella se está
cuajando y yo auguro que llegará muy pronto para salvación nuestra” [ CITATION
GAI29 \p 77 \l 11274 ] (subrayado negro, nuestro)

En este enunciado el ‘signo ideológico’ es la ‘justicia social’, su invocación es un


grito de auxilio, que se entiende en términos de saber en lo que se está metiendo,
por conocer a los monstruos a los que se está enfrentado, el joven Gaitán esta
exponiéndose a la clase dominante más reacia y cruel del continente. Solicita la
‘justicia social’, consigna que desde entonces todos los movimientos sociales y
políticos, partidos y organizaciones de la izquierda en Colombia han abanderado
como una constante ante la represión del bipartidismo, ante ese mercenarismo de
los detentadores del poder, vuelve a desgranar esta fórmula política de alianza de
intereses de las clases dominantes por el mantenimiento del poder del Estado,
variando de funcionarios y otorgando en cada periodo una renovación de la
burocracia del esqueleto corporativo en el mismo conservadurismo.

Sigue la secuencia de la exposición de sus argumentos, en donde se entera que


con motivo de informarse de la situación de la huelga, Ignacio Rengifo, desde el
gobierno, dirige un telegrama al gerente de la United Fruit, en el cual solicita le
puedan responder con detalle lo que ocurre en la huelga. Con la respuesta que
encuentra, encontrará de nuevo argumento para endurecer el sentimiento anti-

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imperialista, condenando el accionar del gobierno bajo las órdenes de la
multinacional norteamericana, expresándose de la siguiente manera:

“Así proceden las autoridades colombianas cuando se trata en este país de la


lucha entre la ambición desmedida de los extranjeros y de la equidad de los
reclamos de los colombianos. El gobierno colombiano cierra los oídos ante los
hijos de su tierra; pero pide respetuosamente los informes de los americanos. Esto
se llama respetar la dignidad del país” [ CITATION GAI29 \p 79 \l 11274 ]

Este enunciado, desempeña la diferencia que tanto Bajtín (1929) como Volóshinov
(2014) marcan, en tanto el sentido de la oración no alcanza a dar la totalidad del
mensaje que el emisor quiere presentar, una apreciación más sintáctica en el
análisis de contenido, en la primera oración utiliza la comparación del trato de las
“autoridades” respecto a los reclamos que hacen los oprimidos en contraste con
las decisiones que dictan los opresores.

En seguida, juzga la sordez del gobierno ante las demandas del pueblo, le asigna
un carácter paternalista represor, es tirano con sus hijos y entregado a los
“norteamericanos”. Por último cierra, con ironía, luego de presentar los
argumentos, hace parecer la dignidad un mero sinónimo de decoro, lo que no dice
es lo que realmente escuchamos, está apelando a la dignidad del pueblo, esta
burlándose de la despiadada manera de manejar los asuntos del Estado por una
gavilla de genocidas.

La burla no será precisamente la manera más allegada de entablar relación con


los represores, los oyentes le van a guardar cada una de sus palabras por un
tiempo definido, los conservadores saben que están a portas de perder el poder,
no pueden responder a menos, con lo que Gaitán les está enunciando con tantas
pruebas. No le van a perdonar la claridad política que tuvo, la lucidez de su
investigación en un momento crucial de la historia social y política de Colombia.

El análisis de este discurso político, no puede quedarse sólo en las figuraciones,


es por esto que el método de investigación del círculo de Bajtín y de Volóshinov,
se inscribe en el materialismo histórico, en su tiempo y en sus contemporáneos, es
Bujarin quien está redactando precisamente esta teoría, donde las definiciones de
las clases sociales son un determinante, no se puede entender un discurso sólo
en el uso de las figuras estilísticas, está claro, estas aportan en el desarrollo de
una filosofía de la lingüística, no obstante se quedan cortas, sí lo que estamos
proponiendo es avanzar en los análisis socio-históricos y en el análisis político del
discurso de la masacre de las bananeras que pronuncia Jorge Eliécer Gaitán en
1929.

Retomando los fragmentos, la construcción del ‘signo lingüístico’ del fusilamiento,


de esta imagen acústica, representa en la memoria una resonante denuncia del

31
intervencionismo norteamericano en el territorio colombiano finalizando la década
de los años veinte, es una potencia simbólica en la construcción de la “ideología
anti-imperialista”. Volvemos a sus palabras:

“La compañía quería seguir explotando a los obreros, a quienes tiene en la


miseria. No quería entrar en transacciones y por eso pedía el estado de sitio, lo
mismo que el señor Cortés Vargas, para solucionar por la bala un problema
económico, y defender su miserable codicia. Naturalmente no hay que pensar que
el gobierno ejerció ninguna presión para que se reconociera la justicia de los
obreros. Estos eran colombianos y la compañía americana y dolorosamente lo
sabemos que en este país el gobierno tiene para los colombianos la metralla
homicida y una temblorosa rodilla en tierra ante el oro americano” [ CITATION
GAI29 \p 84 \l 11274 ]

La posición anti-imperialista de Gaitán es explicita durante todo el debate


legislativo, el uso de afirmaciones de los cuerpos militares en defensa de los
intereses de la multinacional norteamericana a comienzos del siglo XX en
Colombia, marcan la pauta de su discurso. Al comienzo ya había citado las notas
de prensa que señalan a un general del ejército de la República solicitando el
bombardeo de los puertos de Colombia por la marina norteamericana, en el diario
“El debate”, lee Gaitán el siguiente fragmento: “el capital norteamericano no es en
este caso el más timorato para abandonar lo que legislativamente ha adquirido.
Los Estados Unidos tienen como defender sus intereses” [ CITATION GAI29 \p 27 \l
11274 ].

Los intereses económicos puestos en las políticas del proyecto de modernización


imperialista resultan tener este modo de operación desde comienzos del siglo XX,
las marcas discursivas que utiliza Gaitán, serán las de forjar una conciencia de
clase ante la opresión del intervencionismo norteamericano, una ideología anti-
imperialista, que lamentablemente no logra ni en la UNIR, ni en la JEGA, ni en el
movimiento Gaitanista, la importancia que merece. La condena ante la ausencia
del internacionalismo lo deja en el rincón nacionalista de un populismo frustrado,
del cual nunca fue partidario, simplemente estuvo en los mismos años en que
Perón y Vargas, hacían su parte en Argentina y Brasil.

Finalizando el discurso del debate político sobre la masacre de las bananeras,


Gaitán cierra con la siguiente exposición:

“Ya os he dicho que nada voy a pediros. Hablo en nombre de 32.000 víctimas. Mi
labor está cumplida. El fuego de mi juventud esta puesto al servicio de la justicia.
Este crimen no quedo en la sombra, y yo estoy tranquilo. Yo no creo en la justicia,
mientras exista un régimen como este que nos avergüenza” [ CITATION GAI29 \p
94 \l 11274 ]

32
La justicia será injusticia desde entonces, el régimen de un bipartidismo donde las
clases dominantes son las responsables de la represión que las multinacionales
han financiado y propiciado, con el fin de implantar en la “división internacional del
trabajo” el lugar de un modelo primario-exportador, que desde el saqueo de los
bienes comunes, eligieron un proyecto de modernización capitalista que contrario
a la promesa de mejores condiciones de vida a los pobladores del territorio, han
explotado sus vidas, sus riquezas, los han humillado y matado. La compra de las
manos que disparan es el último eslabón, puede seguir siendo el más terrorífico,
darle armas a unos pobres diablos para que repriman a sus hermanos. Sin
embargo, es en el cuello blanco, en las esferas de los tacones con mayor peso, y
en las altas clases sociales donde se toman las decisiones que provocan toda esta
podredumbre, ese complot intereses económicos puestos en las inversiones
extrajeras directas en los territorios de América Latina, es lo que ha permanecido
en el trasfondo de los conflictos internos y dictaduras que hemos padecido durante
el siglo XX y siglo XXI.

La salvación, hoy, ayer y siempre, la juventud, Gaitán lo sabía, por eso apela
desde el comienzo de su oratoria a los jóvenes liberales, conservadores y
socialistas, convoca a los comunistas, sabiendo que el fondo de la represión es la
instalación de una doctrina represiva anti-comunista, y que las acusaciones a los
levantamientos del movimiento obrero son precisamente por eso, por estar
comandados por el comunismo internacional, que ha ganado en Rusia la
revolución de octubre rojo de 1917. Es en el miedo que tienen a los
revolucionarios que los reaccionarios actúan, en contra de sí mismos, porque en la
miseria pierden todos, tanto propietarios como no propietarios, el pueblo obligado
a verse de nuevo ante los espejos, comprando los novedosos sistemas
neocolonialistas, pierden algo más que la vergüenza, pierden la posibilidad de una
segunda y definitiva independencia, pierden la soberanía.

“Los jóvenes, quienes aún no hemos sido contaminados por la corrupción


ambiente; para nuestras vidas que no navegan sobre el mar de pústula por donde
corren las senectas vidas de los hombres que traicionan la dignidad de Colombia,
iremos un día, ebrios de santo fervor, ávidos de una justicia reparadora, hombro a
hombro, conservadores honrados y jóvenes liberales y socialistas, de uno a otro
extremo, del suelo nuestro como una tea purificadora, en nombre de la verdad y
contra el dominio de los pequeños hombres que hoy dominan. Quiero terminar
parodiando la frase de San Víctor que la aplica a César Borgia. Si la historia
tuviera un infierno, estos hombres encontrarían allí un sitio especial y preciso”
[ CITATION GAI29 \p 95 \l 11274 ]

Las metáforas con las cuales cierra su discurso pueden llegar a tener tanta
vigencia y actualidad como si la reiteración de las crisis cíclicas del capitalismo
contrajera en los palimpsestos de las teorías, una secuencia de referentes. Los
barcos, esos lugares que conectan los océanos, en los cuales se encuentran los

33
tripulantes con sus direcciones, en el reconocimiento de las treguas y las
confrontaciones, se dan la mano, no solo en la traición a la dignidad de Colombia,
en la ebriedad de sus designios, en la persecución con la que tendrán que vivir, no
precisamente descansando en los infiernos, sino afrontando la responsabilidad de
condenar a los genocidas que desde comienzos del siglo XX, han querido que
este continente les sirva de patio trasero.

La construcción del movimiento Gaitanista

Luego de aproximarnos a un análisis del discurso de la masacre a las bananeras


de Jorge Eliécer Gaitán, es posible trazar algunos apuntes respecto a la
construcción del ‘signo ideológico’ en que se convierte la imagen acústica del acto
del ‘fusilamiento al movimiento obrero’, podemos llegar a tomar las líneas de la
elaboración de una “ideología anti-imperialista” y de la trascendencia del
movimiento Gaitanista, para lo cual tomamos de referencia la obra de Cordell
Robinson (1976) El movimiento Gaitanista en Colombia. Traer los fragmentos de
los aprietos en los cuales nos ha puesto Gaitán a quienes nos dedicamos a
analizar su vida y obra, en tanto personaje que inmortalizo la voz de un pueblo,
logrando crear una manera de gobernar sin gobiernos, tras pasando las fronteras
y aportando a la visión de un movimiento continental y con muchas miradas a nivel
internacional, desde donde surgen múltiples estudios en relación a los
acontecimientos que empujaron a su asesinato el 9 de abril de 1948.

Los elementos de un anti-imperialismo que se vienen a traducir en procesos de


investigación que documentan como el intervencionismo de los capitales
extranjeros, en el territorio colombiano, ha tenido un rol represivo y de despojo de
la propiedad de los territorios a las comunidades, sometiendo al pueblo a un
proyecto de modernización que contrario a mejorar las condiciones de vida de los
trabajadores y de los campesinos, ha llevado a la consolidación de un bloque
hegemónico que se ha mantenido en el poder con una fórmula política de
liberalismo económico y conservadurismo político, donde los intereses
económicos han pasado por encima de la consolidación de un proyecto de
Estado-nación, además, de desfigurar un proyecto de República independiente y
soberana.

Así que luego de presentar los aportes que brinda el circulo de Bajtín y la obra de
Volóshinov en relación a las definiciones que desde el materialismo histórico y el
materialismo dialecto realizan a la filosofía del lenguaje y en específico a dar
elementos a la conformación de una “ideología” definiendo que es un ‘signo
ideológico’ y como este se mantiene en todo un discurso donde múltiples
enunciados dan forma a develar la naturaleza de un discurso complejo compuesto
34
de una investigación científica y jurídica que va a fijar en los oyentes una
semblanza de sus capacidades, y a la vez, va a provocar una respuesta tardía en
las innumerables investigaciones que sobre su pensamiento y acción, es decir, en
relación a su praxis política, será la síntesis de la formación de un ser con la
posibilidad de tener en su cabeza al ser científico y al ser político, que lograrán
tener una identidad política propia y un movimiento que responde más allá de sus
inmediaciones, al grito de: ¡a la carga!.

Sí algo va a definir al movimiento Gaitanista en su existencia, es la vocación y


voluntad de poder, la claridad de toma del poder en los marcos de la legalidad,
jugando con las normas y reglas del sistema establecido. Esta será la gran
diferencia con las guerrillas liberales y uniristas, con la comandancia comunista y
con el guevarismo, el movimiento Gaitanista, será desde su nacimiento un
movimiento que piensa en elecciones, en la toma del poder para el pueblo, desde
adentro, con los mecanismos propios del sistema al cual combate, poniendo a sus
mejores cuadros en los mandos medios de las instituciones, sin que sean
protagonistas significativos de la coyuntura, aglutinará a un número significativo de
simpatizantes de su rebeldía y definida beligerancia, sin la necesidad del uso de
las armas no legales. Sí ha de usarse a las fuerzas armadas, Gaitán será el
primero en hacerse amigo de la comandancia de los militares, lo cual pudo
costarle la vida, caracteriza esta particular controversia al movimiento Gaitanista,
la conservación del honor militar a la patria y la obediencia y sometimiento del
cuerpo militar a la dirigencia política CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 .

Esto lo saben quienes lo investigan, es por esto que puede causar amores y odios,
leerlo es un desciframiento a su oratoria, más allá de sus tesis académicas, la
producción de un pensamiento propio de teoría política, no fue su prioridad, la
concentración en su vida fue hablar en las tribunas, tomar el micrófono, hacer
política, visitar cada lugar donde podía encontrar oyentes de sus discursos. En
relación a su legitimidad política, puede leerse el siguiente enunciado:

“En su relación con el orden establecido de Colombia, el Gaitanismo ejemplizará el


caso clásico de un movimiento que operaba fuera de los confines de lo entonces
aceptable, y que por lo tanto suscitaba sentimientos intensos de desconfianza y
hostilidad. Gaitán y el Gaitanismo fácilmente pudieron haberse tornado violentos y
revolucionarios. Tenían objetivos de tan largo alcance y estaban tan

CITATION CAS84 \p 30 \l 11274


En la entrevista que le hizo Arturo Alape a Fidel Castro, acerca de los días que paso en
Bogotá antes del magnicidio, Fidel narra con el entusiasmo de un estudiante de derecho, la defensa que
Gaitán hiciera al teniente Cortés, respecto al homicidio que hubiera causado al periodista Eudoro Galarza, la
defensa culminó el 9 de abril en la madrugada, absolviendo al teniente. Al respecto: “Yo diría que en el
ejercito se escuchaban con simpatía los alegatos de Gaitán, en las estaciones de policía, en los cuarteles, y
que tanto la opinión pública como la opinión de los militares era favorable al teniente Cortés. Es decir,
coincidían en ese momento todos esos criterios con las posiciones que sostenía Gaitán” [ CITATION CAS84 \p
24 \l 11274 ]

35
estrechamente ligados a las normas básicas y a los valores sociales de la
sociedad, que no habrían podido ser realizados dentro del marco existente. Pero
Gaitán eligió no romper completamente con el sistema, prefiriendo defender la
legitimidad de sus instituciones y procedimientos al tiempo que rechazaba las
condiciones socioeconómicas y de elitismo político que lo mantenían” [ CITATION
COR76 \p 20-21 \l 11274 ]

El movimiento sociopolítico que forjaba el Gaitanismo, tiene estas particularidades,


de una voz beligerante pero que se mantiene en los marcos del sistema. El talante
de la oratoria y la relevancia que tuvo Gaitán en Colombia, deja un movimiento,
como todas denominaciones surgidas con los apellidos de la personalidad que
encarnó el ímpetu de la creación de una obra teórica o de un accionar político, la
ausencia del internacionalismo en el movimiento Gaitanista lo ha condenado a su
ocultismo, no sólo por su deslinde de los partidos socialistas o comunistas, sino
por su capacidad de identificación con el pueblo. Hemos mencionado
precisamente porque el siglo XX se parte en dos antes y después del asesinato
del caudillo. Los periodos de guerras civiles previos no habían contado con un
símbolo que los identificará tanto como logró hacerlo Jorge Eliécer Gaitán en cada
plaza, en cada tarima y en cada lugar en el que pudo tomar un micrófono o
entonar su voz con el propósito de ser escuchado. Este movimiento al que
podemos dar la crítica del personalismo de un líder político, tiene en sus raíces
una potencia de resurgimiento, en el proceso de entendimiento de las condiciones
que han provocado y mantenido el conflicto interno social y armado que ha vivido
Colombia, desde el momento en que lo asesinaron.

La constitución del movimiento Gaitanista se ha desdibujado de la historia, de


sobremanera porque las investigaciones del asesinato de Gaitán llevaron al
encarcelamiento, amenazas y persecuciones a sus familiares y amigos, y a todos
los que han buscado respuestas de los responsables del magnicidio. Desde este
lugar del miedo y de vidas atemorizadas por realizar investigaciones que logren
resucitar la identidad del liderazgo político con las condiciones de los oprimidos, se
han construido ejemplares periodísticos y compilación de entrevistas y libros que
dan cuenta de la persistencia de una voz que continua resonando en las plumas
que han continuado su legado, buscando en las razones de su praxis política, lo
fundamental de su estrategia, la movilización y conexión con el pueblo.

De los apartes de Cordell Robinson (1976), extraemos que la estrategia del


movimiento Gaitanista fue puramente ideológico hasta el lanzamiento a
elecciones, en el estilo discursivo se mantuvo un tono “tormentoso y
controvertido”, “beligerante y radical”. Otro aspecto y claridad que tuvieron desde
su configuración fue la creación de medios de expresión y comunicación política
del movimiento, la táctica de organización fue sostener reuniones internas y
generar acciones en masa, sabiendo la crítica que la oligarquía tenía contra la

36
agitación de las masas, se organizó con un sistema de células, cierta especie de
disciplina militar y una ideología de izquierda, a los centros se llamo “legiones” y
cada “equipo” o “célula” tenían un capitán elegido por los integrantes. La causa
común que unificaba al movimiento logró consolidarse en un programa de
gobierno con el objetivo de cambiar las estructuras socioeconómicas y políticas de
Colombia.

El propósito de Gaitán proyectado en el movimiento fue transformar al Partido


Liberal en una organización activista de ideología socialista, asunto que generó
múltiples distancias con la dirigencia del Partido, no obstante fue absorbido en su
propósito, siendo “acusado de abrir una brecha entre la superestructura y el
proletariado”, más que abrirla fue develarla, construyendo una ideología anti-
imperialista que permitiera identificar desde su discurso de la masacre a las
bananeras, donde estaban los intereses por los cuales la clase política que
denominaba el “país político” se mantenía de las boronas de los intereses de los
inversionistas extranjeros, dejando al movimiento obrero al “país nacional”, en el
abandono de su suerte, sin armas con las cuales defenderse.

Un libro dedicado a la pregunta que nos sigue convocando: ¿Por qué mataron a
Gaitán?, fue escrito en octubre de 1948, por Abraham Osorio Tapias, denominado
un “auténtico intelectual de nuestro pueblo”, con un clamor sentido de la época, en
un lenguaje sencillo, se dedica a pedir: “castigo para los responsables del
asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, y transformación fundamental de las
costumbres y las formas de regir los destinos de ese pueblo; cambio total de los
sistemas que han venido rigiendo desde las épocas bastante remotas, desde
tiempos ya olvidados, y justicia para los de abajo” [ CITATION OSO48 \p 101 \l 11274 ].
Este sentir, reúne las voces de un pueblo indignado e imbuido en la sed de
justicia, que se tradujera en juicio a los culpables y la realización del proyecto
político del movimiento. La praxis que logro el movimiento puede leerse en la
síntesis que propone Cordell Robinson (1976):

“El Gaitanismo, como movimiento sociopolítico, se originó en 1933 y durante los


quince años siguientes atravesó tres etapas muy distinguibles. En la primera
etapa, el Gaitanismo tomó la forma de un nuevo partido; basado en una ideología
revolucionaria, hacia énfasis sobre la disciplina partidaria y utilizaba la agitación
como su medio principal de expresión política. En la segunda etapa, el Gaitanismo
viró dejando su curso independiente y su ortodoxia ideológica para adoptar un
enfoque más pragmático de la política. Enfocando sus esfuerzos en la elección de
1946, organizó y llevó a cabo una vigorosa campaña bajo el lema ´Por la
restauración moral y democrática´. En la tercera etapa, a partir de su derrota en las
elecciones presidenciales de 1946, el movimiento buscó tomar el control completo
del Partido Liberal como un prerrequisito para recapturar la Presidencia vuelta a
manos de los conservadores” [ CITATION COR76 \p 67 \l 11274 ]

37
Estas etapas, ubican en la línea del tiempo de los movimientos orgánicos, la
organización que tuvo durante la actividad política de Jorge Eliécer Gaitán,
además, condensan los momentos de su fundación en la Unión Nacional de
Izquierda Revolucionaria – UNIR, en 1933 hasta su asesinato el 9 de abril de
1948. La ausencia del internacionalismo, tendrá una mella en la eclosión de la
fecha de su asesinato. Precisamente en la fecha en que se realiza la Conferencia
Panamericana que daría paso a la creación de la Organización de los Estados
Americanos (OEA), Conferencia a la cual le fue negada la participación a Gaitán,
censura del conservadurismo a la voz que con mejor oratoria podía exponer los
argumentos de oposición al intervencionismo imperialista en la autodeterminación
del pueblo colombiano. En las mismas fechas se prepara un “Congreso de
Estudiantes Latinoamericanos”, del cual era precursor Fidel Castro, quién ya había
viajado desde Cuba a Venezuela y Panamá, con motivo de organizar el Congreso
se encontraba en esos días en Bogotá, a unas horas de concretar una nueva cita
con motivo de organizar el cierre masivo donde hablaría Gaitán, no pudo hacer
más que ver la efusividad del estallido del “Bogotazo”, narrado por Arturo Alape,
en la entrevista que le concediera Fidel CITATION CAS84 \p 24 \l 11274 .

El primer momento de conformación de la UNIR, puede asumirse como el inicio de


lo que sería la visión del Estado en medio de una transición del bipartidismo, un
contexto de crisis económica mundial y un país con un proyecto de
“modernización sin modernidad”. En la toma de decisiones de transformación del
modelo económico que asumió Colombia en la del cambio de gobierno en 1930,
asumiendo la crisis económica mundial, afirma Pecault (1987: 182) “La UNIR de
Gaitán confía al Estado la tarea de asegurar la reglamentación de las actividades
económicas”. La decisión del nuevo gobierno liberal, luego de décadas de los
conservadores en el poder, es traer un modelo de Estado intervencionista en
términos de proteccionismo, en sentido parcial, como un paliativo de
institucionalización de la cuestión social, no precisamente se instaura un Estado
socialista como lo abría pensado Gaitán, se asume un intervencionismo relativo y
funcional al liberalismo económico, capaz de mantener el consenso con las clases

CITATION CAS84 \p 24 \l 11274


Son muchas las referencias que pueden hacerse de la descripción que hace Fidel del día
en que mataron a Gaitán, quizás es el más sentido retrato de este día en la voz de quien sería el farol de la
Revolución cubana y de la expansión de las ideas revolucionarias en el continente. De los fragmentos cabe
citar uno a propósito del comienzo de la narración y del problema de la organización dice: “Yo te puedo
asegurar que lo del 9 de abril no lo organizó nadie; pienso plantearte este punto de vista, porque lo
presencié casi desde los primeros momentos, te puedo asegurar que lo del 9 de abril fue una explosión
espontánea completa, que ni lo organizó nadie, ni lo podía organizar nadie. Únicamente los que organizaron
el asesinato de Gaitán podían imaginarse lo que podía ocurrir. Tal vez los que organizaron el asesinato lo
hicieron para eliminar un adversario político. Tal vez podían imaginarse la explosión, tal vez ni siquiera se la
imaginaron. Pero es que a partir del hecho del asesinato de Gaitán, se produce una fabulosa explosión de
forma totalmente espontánea. Nadie puede atribuirse haber organizado lo del 0 de abril, porque
precisamente lo del 9 de abril lo que careció fue de organización” [ CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 ]

38
dominantes en los sectores predominantes de la económica: sector agrario,
comercial, financiero y el naciente sector industrial.

Según Cordell Ronbinson (1976) “A las filas de la UNIR ingresaron estudiantes,


campesinos y miembros de la clase media. Muchos comunistas, de acuerdo con
un autor, también se unieron a la UNIR después de años de haber pasado por ser
liberales para obtener posiciones burocráticas en el gobierno” [ CITATION COR76 \p
70 \l 11274 ] CITATION CAS84 \p 30 \l 11274 . La UNIR sería la concentración de un proyecto
político que Gaitán venía plasmando desde su tesis de grado, la materialización de
las Ideas socialistas en Colombia, el propósito se mantenía en los marcos de la
institucionalidad, guardando la característica beligerante en el discurso. Siguiendo
la referencia, los problemas que Gaitán analizaba que tenían que resolverse eran
el uso y propiedad de la tierra, el problema de los “trabajadores rurales” en
términos de las condiciones de opresión que tenían que padecer por el modelo
agrícola de latifundios concentrados en manos de terrateniente, en lugar de
propiciar una reforma agraria, por la distribución de la propiedad de tierra. La
estrategia a través de la cual podría concretarse este proyecto político, era
teniendo un programa que ganará las elecciones presidenciales, lo sabía desde el
comienzo de su carrera en el Congreso.

Por lo mismo, la Convención Gaitanista, celebrada el 25 de septiembre de 1945,


propuso la nominación de candidatura de Gaitán a la presidencia, el tema central
de su discurso en el momento de asumirse candidato presidencial fue el desprecio
por el sistema político vigente en Colombia y por aquellos que la dominaban. La
candidatura tomaría forma real disolviendo la UNIR y volviendo a las filas del
liberalismo, haciéndose nombrar candidato oficial del partido no por la dirigencia
sino por sus militantes, es la gran masa de afiliados al liberalismo los que
apoyaran la candidatura de Gaitán, contrario a la postulación de Gabriel Turbay,
nombrado por el directorio del liberalismo, diferencias que estaban puestas en los
señalamientos que se les hacían: “Gaitán era considerado un ´socialista´ y Turbay
había coqueteado con el comunismo en su juventud” [ CITATION COR76 \p 93 \l 11274 ]

Los resultados serían un revés al liberalismo y al movimiento Gaitanista, la división


del Partido en dos candidaturas arrojó como resultado el triunfo de los
conservadores, asunto que obligo a dejar el proyecto postergado, sin burocracia

CITATION CAS84 \p 30 \l 11274


Ampliando la referencia a la clave del surgimiento de la UNIR: “Hubo cierta lógica en la
fundación de la UNIR como partido revolucionario en la primera mitad de los 30. Un proletariado siempre
creciente e inquieto en las ciudades, el malestar social en las áreas rurales y la incapacidad gubernamental
para comprender los problemas socio-económicos, pavimentaron el camino hacia el nuevo partido. Como
ha dicho Antonio García, notable intelectual colombiano, la UNIR fue un movimiento de protesta contra el
gobierno de la ´Concentración Nacional´ y la encarnación del descontento campesino con la administración y
sus políticas agrarias. Además, la UNIR fue parte de una ola revolucionaria que se manifestó a todo lo largo
de América Latina en los años 30” (CORDELL ROBINSON, 1976, págs. 78-79)

39
en el Estado y con el crecimiento acelerado de la represión a los campesinos y
líderes del movimiento Gaitanista en los territorios. El activismo político que
iniciaría Gaitán sería de movilización permanente, la fuerza de su convocatoria
estaría precisamente en la identificación con el pueblo que estaba padeciendo los
comienzos del periodo de la violencia. Los conservadores se habían hecho de
ejércitos paraestatales, habían iniciado una oleada represiva que volcaría a las
marchas de antorchas que en cada convocatoria fueron creciendo, los discursos
que pasaron a ser parte de la orientación del movimiento fueron pronunciados en
este tiempo: Memorial de agravios al presidente Ospina Pérez, Bogotá, 11 de abril
de 1947; Oración por la paz, Plaza de Bolívar de Bogotá, 7 de febrero de 1948;
Oración por los humildes, febrero 15 de 1948. Breves manifestaciones de
denuncia de los acontecimientos y de mensajes de lucha y organización al pueblo.

El eclecticismo del movimiento impide mencionar un pensamiento único, existe en


Gaitán la mezcla del socialismo positivista de su maestro italiano Ferri, el
humanismo hacia los oprimidos, su claridad del pensamiento marxista y de la
teoría comunista, que escucho en el círculo de Savinsky, en el café Windsor de
Bogotá. El patriotismo por la defensa de la soberanía nacional y una fuerte
personalidad que complementará, su perfil de estudiante ejemplar, con la
sagacidad del animal político. La construcción del movimiento Gaitanista está en la
perduración de su pensamiento y su accionar, en la rectitud y exigencia de
valores, en la convicción de la necesidad de una restauración moral que permitiera
educar al pueblo en camino hacia un nuevo Estado, todo esto compone la
fortaleza de su vigencia.

Conclusiones

El papel de la ideología en la formación de la conciencia de clase, es el


despertador que permite la organización de la clase obrera, brindando una
dirección intelectual y moral. La premisa de Volóshinov, ha sido disgregada en
tanto el análisis del discurso político de la intervención de Gaitán en el Congreso
de la República, permitió mostrar que su pensamiento en tanto conciencia
individual, aporta a la construcción de un movimiento social y político en la historia
de Colombia, ese “edificio social de los signos ideológicos” de los cuales hemos
de seguir consultando como referencia ineludible en el análisis socio-histórico de
una mirada de larga duración a la comprensión de la historia política del siglo XX
de Colombia y de América Latina.

La dedicación a estudiar el círculo de Bajtín a la luz de un corpus discursivo, da


cuenta de los aportes que el método del materialismo histórico y del materialismo
dialéctico brindan a la filosofía del lenguaje y al análisis del discurso, en el
40
propósito del análisis del contenido de los enunciados puestos en un discurso de
composición compleja. El análisis del discurso de la masacre de las bananeras, es
un aporte al estudio de la construcción del ecléctico movimiento Gaitanista, donde
la voz de su protagonista histórico seguirá siendo la voz de un pueblo, del pueblo
de Colombia.

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