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¿QUÉ ES LA GUERRA?

PERSPECTIVAS TEÓRICAS Y SOCIALES DE


CLAUSEWITZ
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA
PARADOJAS DE LA GUERRA
Gabriel Enrique Vargas1
cc 1015476321
Laura Saraí Maldonado2
cc 1193222493
Alvin Sanabria Garzón3
cc 1032466074

La guerra, definida bajo la teoría de Clausewitz es “​un duelo en escala más amplia​”, la
continuación de la política por otros medios, así que podría representarse de una
manera más compleja bajo la idea de lucha entre dos o más personas, o como un “​acto
de violencia para imponer nuestra voluntad al adversario​”. Bajo esta filosofía es posible
delimitar un objetivo específico: ​desarma al enemigo o serás desarmado. ​Las
guerras, en principio, carecen de leyes, los límites de esta los determina el uso de la
fuerza del enemigo. Concretamente lo que establece esos límites son, el sentimiento
hostil y la intención hostil.

Aunque la guerra de “pueblos civilizados” se ve mediada por la inteligencia, esto no le


quita su carácter pasional, es fácil ver esto en el carácter violento intrínseco de la
guerra, la guerra es como es debido a la intención hostil que la define. Hasta cierto
punto la guerra tiene cualidades recíprocas, esto quiere decir que, cada acción violenta
o de uso de fuerza de parte del oponente es una imposición de los propios términos del
mismo. En este caso, como lo que se busca es el desarme del oponente, cada
luchador regula su esfuerzo en relación con la fuerza de resistencia del contrario.
Entonces, lo que hace cada lado es determinar o mejor dicho tratar de determinar la
fuerza del oponente y no se determina exactamente porque para hacer esto se tienen
que tener en cuenta dos variables, los medios a disposición y la fuerza de voluntad,
siendo esta última imposible de medir.

La guerra, a pesar de estar “mediada” por la razón está totalmente relacionada con la
emoción, donde a pesar de no ser provocada por las emociones,estas sí ejercen una
reacción sobre ella. Para el autor, “En asuntos peligrosos como la guerra las ideas
falsas inspiradas en sentimentalismo son precisamente las peores”...”esto no implica
que el uso de la fuerza física no coopere con la inteligencia”, véase, que el hecho de
que no siempre se tienda a las mismas prácticas brutales, no implica que se escatime
en el uso de la fuerza, sólo se buscan los métodos más efectivos. ​Aún así hubo guerras
en la historia de la humanidad que fueron provocadas por decisiones pasionales de
algún gobernante obsesivo con sus ideas, llevando la pasionalidad y la voluntad del
hombre a ser el motor de la guerra, todo esto para aumentar la capacidad de
resistencia en un entorno bélico.

Bajo este prisma podría decirse que la lógica que atribuye el autor a la guerra es un
equilibrio entre las finalidades prácticas de la guerra, entiéndase, las finalidades de
cada uno de los lados y como la naturaleza humana atraviesa y da forma al conflicto
mismo, no lo hace ni más ni menos violento, sólo responde a sus intereses y
naturaleza.

1
Estudiante de Psicología, quinto semestre. gvargasb@unal.edu.co
2
Estudiante de Antropología, quinto semestre. lmaldonado@unal.edu.co
3
​ lsanabriaga@unal.edu.co
Estudiante de Antropología, quinto semestre. a
El valor de hacer un análisis subjetivo de la guerra parte de que las cosas no son
importantes en sí mismas sino que cobran valor en función de las relaciones que
mantienen con los sujetos. Refiriéndonos puntualmente sobre el caso de la guerra, al
ser una de las actividades humanas por excelencia, no se puede hablar de ella desde
la lejanía; por activa o por pasiva estamos implicados en ella, así como en política, arte
y otras cualidades propias de la condición humana. Es válido y necesario hablar de la
guerra desde la subjetividad porque ofrece perspectivas más sólidas que las que podría
ofrecer una revisión objetiva, véase, los aspectos de los que se puede hablar de la
guerra desde la objetividad son ampliamente limitados, al abordar el fenómeno desde
una perspectiva subjetiva se pueden explorar aspectos que directamente no son
concebibles desde la objetividad simplemente porque al aproximarse a verdades
objetivas no es posible hacer las preguntas correctas. Esto último, en parte, porque hay
demasiados actores en la guerra, en este caso todos los seres humanos, luego, las
perspectivas, variables y acontecimientos son diversos y no se repiten exactamente
igual, un buen ejemplo de esto es la variable de “fuerza de voluntad” que incluye el
autor y aprovecha para explicar que no es una variable del todo predictible.

Lo anterior lo pudo otro autor analizar y categorizar desde diversos puntos de vista pero
en este caso particular sirve para argumentar su propia lógica. Clausewitz orienta la
subjetividad del estudio de la guerra, dejar de lado los encasillamientos sistémicos y
estructurales de la academia para abordar desde una perspectiva más amplia, aún así
no tiene una visión holística de la situación de guerra y puede caer en teorías
anticuadas de las ciencias humanas, como el hecho de nombrar a aquellos que utilizan
la inteligencia para la guerra como “pueblos civilizados”, cuando la guerra y la
capacidad de matar y moler carne no determina las capacidades sociales de un pueblo
otro o caer en el error de las ausencias de conocimiento donde se deja de lado un caso
de estudio particular por no ser del interés personal del autor o por carecer de las
herramientas intelectuales para poder analizarlo. Pero deja el campo para ver la guerra
desde un todo y como una expresión del humano, un tipo de interacción que se da por
ciertos factores pero no tiene que verse como ninguna carga de juicio moral.

Así pues, es posible decir que el autor planteó el texto para legitimar no sólo la
racionalidad que parece ser la única involucrada en la guerra, sino que intentaba
demostrar cómo los lentes que usa cada persona plantean una emocionalidad y
motivaciones distintas para el desarrollo de las acciones bélicas y de lucha; donde a
pesar de intentar llegar a los extremos lógicos es difícil imponer una (auto) regulación
personal, es un escenario donde no se pueden saber los resultados en las psiquis
humanas, ni lo que realmente pensaban los combatientes

REFERENCIAS

● Von Clausewitz, K. (1972). ¿Qué es la guerra? En: De la guerra. Caracas.


UMBV, pp. 26-54.

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